AlejAndro Bullón

cOMPARTIENDO
LA ESPERANZA

¿Sabes cuál es la diferencia entre un arroyo y un pantano? El arroyo es una naciente

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de agua que fluye continuamente, mientras que el pantano es un lago de agua estancada.
Es una ley de la vida, todo lo que recibes y no compartes, te destruye, más tarde o más
temprano. Lo mismo sucede en la vida espiritual. Necesitas compartir el evangelio que te
transformó, para crecer en tu nueva experiencia.

1 ¿Qué hizo la Mujer Samaritana después de encontrarse con Jesús? (Juan 4:28-30)

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2. El primer impulso de un corazón regenerado es contar a otros lo que Jesús hizo en tu

vida. Pero a veces, la tendencia humana es solo disfrutar del evangelio. ¿Qué le dijo
Jesús al Gadareno cuando él quiso acompañarlo? (Marcos 9:18-20)

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3. La testificación empieza por los tuyos. Amigos, parientes, compañeros de trabajo, veci-
nos, en fin. ¿Qué hicieron los amigos del paralítico al verlo sufriendo? (Marcos 2:1-3 )

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4.- ¿Qué orden dio Jesús a sus discípulos antes de regresar a los cielos? (Marcos 16:15)

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5. Predicar el evangelio es traer personas para Cristo. ¿Cuál es la mejor manera de

acercarse de las personas? (Proverbios 17:17)

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6. ¿Cómo se acercaba Jesús de las personas? (Hechos 10:38)

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7. ¿Qué deben hacer sus verdaderos seguidores? (1 Juan 2:6)

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8. ¿Y qué hacer cuando las personas no quieren oír lo que quieres decirles? (2 Timoteo
2: 23 y 24)

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9. ¿Qué promesa te hace Dios si compartes tu fe? (Salmos 126:6)

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Si deseas crecer en la vida espiritual, necesitas orar todos los días, estudiar la Biblia
todos los días y traer una persona para Cristo. Después que traes una, vas a traer otra y
así sucesivamente. No necesitas viajar a lugares distantes para hacer eso, basta mirar a
tu alrededor y aproximarte de tus vecinos, amigos y parientes. Al principio, no hables de
religión, hazte amigo de ellos y ámalos; la doctrina viene de manera natural.

Ahora, ver el video de la lección correspondiente.

MI DEcISIóN:
Por la gracia de Dios, deseo traer personas para cristo y escribo aquí el nom-
bre de cinco (5) personas por las cuales oraré y trabajaré.

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