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El documento resume las conclusiones de varios estudios y sentencias sobre trastornos mentales y su relación con la comisión de delitos. Indica que es importante realizar evaluaciones psiquiátricas inmediatamente después de un delito para determinar el estado mental del acusado. También resalta la importancia de proteger los derechos de los niños en procesos legales y entrevistas forenses relacionadas con delitos en su contra.
El documento resume las conclusiones de varios estudios y sentencias sobre trastornos mentales y su relación con la comisión de delitos. Indica que es importante realizar evaluaciones psiquiátricas inmediatamente después de un delito para determinar el estado mental del acusado. También resalta la importancia de proteger los derechos de los niños en procesos legales y entrevistas forenses relacionadas con delitos en su contra.
El documento resume las conclusiones de varios estudios y sentencias sobre trastornos mentales y su relación con la comisión de delitos. Indica que es importante realizar evaluaciones psiquiátricas inmediatamente después de un delito para determinar el estado mental del acusado. También resalta la importancia de proteger los derechos de los niños en procesos legales y entrevistas forenses relacionadas con delitos en su contra.
HOMICIDIO AGRAVADO Y TENTATIVA DE HOMICIDIO AGRAVADO
Sebastián Camilo Rodríguez Arrubla
Según la ORGANIZACIÓN MUNDIAL DE LA SALUD (2017), Contamos con una
gran variedad de trastornos mentales, y estos se caracterizan en su mayoría por una mezcla de alteraciones del pensamiento, de la percepción, de las emociones, de la conducta y de las relaciones con los demás, es decir, se presentan de manera diferente según la enfermedad que presenta el paciente. Como se sabe, la disminución de las facultades intelectivas y volitivas –es decir, la disminución de la capacidad de comprender la ilicitud del hecho y de actuar conforme a esa comprensión– de los individuos, que padecen una enfermedad mental es diferente, por eso es necesario identificar con la mayor exactitud posible cómo se encontraban estas capacidades del sujeto en el momento de la comisión de los hechos delictivos por la persona. Por tal motivo, las intervenciones periciales psicológicas realizadas en el momento posterior a la comisión del hecho delictivo son de gran interés e importancia para poder conocer su situación psicológica. Esto ayuda a esclarecer si la persona presenta alguna anomalía, alteración o trastorno psíquico y si esa enfermedad puede estar relacionada con el delito cometido. El perito, es el encargado de emitir el informe y auxilia al juez para conocer aquello que le solicite, este emite un juicio valorativo asistiendo al órgano judicial, el cual no es vinculante, solo informativo, ya que la última palabra siempre corresponde al juez. Para el caso concreto de acuerdo con la psiquiatra Olga Albornoz, los delirios son trastornos mentales, Los afectados se ven asaltados por ideas delirantes (sin alucinaciones), "es decir, que se meten, literalmente, en 'películas' o historias que para ellos son reales". Este trastorno está asociado a daños orgánicos o cerebrales (transitorios o de larga duración), a consumo de alcohol y de sustancias psicoactivas e incluso a enfermedades virales. Se hace indispensable que el facultativo que evalúa las capacidades intelectivas y volitivas de la persona que ha cometido el delito, lo haga inmediatamente posterior a la comisión de los hechos para comprobar su estado mental mediante un informe psiquiátrico que permita conocer si sus facultades se encontraban o no anuladas, dado que existen ocasiones en las que esta actuación se realiza días posteriores, semanas e incluso meses, lo que imposibilita su necesario e imprescindible conocimiento. Es igual de importante que aun habiéndose realizado el informe este se presente en la fase de instrucción, así como que el perito que lo realizó acuda al acto del juicio oral para explicarlo, defenderlo y ratificarlo. Sentencia T-117/13 ACCIÓN DE TUTELA CONTRA PROVIDENCIAS JUDICIALES En este caso lo que aborda la Corte, es el análisis del artículo 33 de la Constitución el cual dispone que “nadie podrá ser obligado a declarar contra sí mismo o contra su cónyuge, compañero permanente o parientes dentro del cuarto grado de consanguinidad, segundo de afinidad o primero civil”. De igual manera, el artículo 8 literales a, b y c de la Ley 906 de 2004 consagra dicha garantía en la modalidad de "principios rectores y garantías procesales”. que al momento de recepcionar el testimonio, en ningún momento se obligue, constriña, fuerce, presione u obligue a declarar en contra de las personas señaladas en el artículo, por el contrario, el funcionario judicial debe velar porque el testimonio se realice en forma libre y voluntaria, razón por la cual no resulta trascendente el olvido de ponerle de presente el derecho a no declarar. Para la Corte, la importancia de la entrevista forense en el proceso penal radica en que es un elemento central al inicio de la actividad investigativa debido a que ofrece información que permite a la autoridad judicial formarse una visión de los hechos, de las personas que participaron y las posibles motivaciones, lo que conlleva a formular las primeras hipótesis sobre el caso y a desarrollar las consiguientes diligencias investigativas. La entrevista, interrogatorio o contrainterrogatorio que realizan los psicólogos a los niños, niñas y adolescentes víctimas, debe realizarse en un ambiente relajado, informal en medio del cual se escuche, registre y analice las manifestaciones del afectado en razón a que los datos que resulten de éstas son significativos y demuestran las condiciones clínicas en las que quedó el niño-víctima por causa del delito consumado contra su humanidad, se evalúan sus miedos, temores, angustias, sueños, pesadillas, desafectos y trastornos a nivel sexual, entre múltiples situaciones Dice la Corte que "resulta contraproducente para los fines perseguidos analizar el testimonio del Infante particularmente en la entrevista forense que realiza el Defensor de Familia bajo la óptica formal y material como si se tratara de adultos e introducir al menor en aspectos tan complejos como el postulado del artículo 33 de la Constitución Política que a todas luces resulta contrario por su incipiente madurez psicológica y al ambiente especial en que se debe desarrollar la entrevista.” Para el caso concreto, se concluye que, la autoridad accionada le dio prevalencia absoluta a los derechos del procesado, sin ponderar los intereses de la niña afectada por el supuesto ilícito. Se precisa además que, los conflictos que se presenten en los casos en los cuales se vea comprometido un niño, niña o adolescente, deben resolverse según la regla pro Infans, principio del cual se apartó la autoridad cuestionada.