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ABONOS ORGANICOS

PRESENTADO POR
MARIA CAMILA CELY (1611302)
ANGELICA DAYANA MEJIA (1611314)

DOCENTE
ANTONIO NAVARRO DURAN

AGROECOLOGIA

UNIVERSIDAD FRANCISCO DE PAULA SANTANDER


FACULTAD DE CIENCIAS AGRARIAS Y DEL AMBIENTE
INGENIERIA BIOTECNOLOGICA
SAN JOSE DE CUCUTA
2020
Introducción

En la actualidad los gobiernos a nivel planetario se enfrentan a cambios que suceden


de manera drástica, como: la utilización de productos químicos que dañan la capa de
ozono, la tala de los bosques, la quema de combustibles que producen gases nocivos,
los cuales se acumulan en la atmósfera y producen el efecto invernadero, la extracción
de la materia prima del suelo, el vertimiento de los desechos generados del consumo
diario sobre los mares, ríos, océanos y la tierra, esto los convierte en verdaderos
vertederos los cuales dañan gradualmente la calidad y materia prima del suelo (Goyes et
al., 2018).

La calidad del abono está relacionada con los materiales que la originan y con el proceso de
elaboración, esta variación será tanto en contenido de nutrientes como de microorganismos
en la composta madura, y en base a estas variaciones se modificará el uso potencial de
dicha composta. La microflora nativa de las compostas puede o no tener efecto antagónico
sobre patógenos del suelo, y además esta microflora continuará la degradación de la materia
orgánica y volverá disponibles los nutrientes para la planta. Mientras mayor diversidad
tenga la materia orgánica de la que se forma la pila o cama, mayor cantidad de nutrientes
tendrá la composta (Goyes et al., 2018).

El proceso de agricultura orgánica inicia con prácticas encaminadas a recuperar la fertilidad


y vida del suelo, utilizando al máximo recursos de bajo costo, disponibles en la finca o la
comunidad. El excesivo uso de plaguicidas y fertilizantes químicos, ha dado como
resultado altos costos de producción, deterioro y contaminación de los recursos naturales y
daños en la salud humana (Molina et al., 2020).

Una alternativa a la aplicación de fertilizantes, la constituye el empleo de abonos orgánicos


(compost, biosólidos y bocashi) u órgano-minerales, que presentan parte del N en formas
orgánicas, más o menos estables, que paulatinamente van mineralizándose y pasando a
disposición de las plantas (Ramos et al., 2014). En este mismo sentido, se indica que la
fertilización orgánica sustituye en gran medida el uso de fertilizantes minerales (Soto,
2006).
Objetivos

 Conocer la importancia teórico-practica de los abonos bocashi y tipo bocashi en


campo con el fin de poder proporcionar a la planta los requerimientos nutricionales
necesarios para el buen desarrollo y crecimiento.
 Conocer la importancia teórico-practica de los microorganismos de montaña con el
fin de poder generar de una manera fácil la proliferación de microorganismos como
(Bacterias, hongos y actinomicetos) los cuales reducen la compactación, equilibran
las poblaciones de organismos patógenos y en las plantas, mejoran la productividad,
promueven el desarrollo de nuevos brotes produciendo la floración.
 Adquirir las destrezas y conocimientos necesarios para poder realizar la preparación
de los abonos orgánicos y los microorganismos de montaña.

Materiales y metodología

1) Preparación de los microorganismos de montaña.

HERRAMIENTAS MATERIALES

Palas u hormigoneras Un quintal o 50 kg de salvado de trigo


Barreños y cubos para las mezclas Un saco y medio de microorganismos de
montaña
Palo o artilugio que utilizaremos como Medio galón o dos litros de melaza
apisonador
Bidón o barril con cierre hermético con Un galón o cuatro litros de
capacidad de 100L microorganismos líquidos
5 kg de harina de rocas
Tabla 1. Materiales a utilizar para la preparación de microorganismos de montaña.
1. Elegir un lugar con suelo firme o utilizar una lona como base.
2. Hay que deshacer la hojarasca obtenida de Chinácota. Por medio de unos palos de
madera, la golpearemos contra el suelo hasta dejar la hojarasca bien triturada.
Utilizar una hormigonera con algunas bolas de metal o piedras que no se partan en
su interior.

Figura 1. Hojarasca obtenida de Chinácota.


3. Una vez triturada la hojarasca, añadimos el salvado de trigo. Mezclamos todo bien
por medio de las manos, palas u hormiguera.

Figura 2. Adición del salvado de trigo en la hojarasca.


4. Diluir la melaza en agua pozo.

Figura 3. Dilución de melaza en agua de pozo.


5. Regar ligeramente con las manos la mezcla de microorganismos del bosque y
salvado de trigo.

Figura 4. Mezcla de salvado de trigo con la hojarasca.

6. Añadir una cantidad de microorganismos líquidos. Regamos con la mano toda la


mezcla con los microorganismos de montaña de suelo.
Figura 5. Mezcla de microorganismos líquidos con la hojarasca.

7. Mezclar todo. Nos cercioramos que quede toda la mezcla homogénea y con la
humedad necesaria. Observamos que toda la mezcla cambia de color.

Figura 6. Realizar una mezcla homogénea.


8. Echar la mezcla en el barril de 100 litros. De tal forma que iremos aprisionando con
un palo de madera o artilugio, para comprimir la mezcla y que no nos quede nada de
oxigeno en su interior. Una proporción correcta seria; echar tres paladas de la
mezcla dentro del barril y aprisionar con el palo. Repetir este procedimiento, hasta
quedarnos sin mezcla.
Figura 7. Mezcla y muestra lista.

9. Tapar el bidón con el cierre hermético. Asegurar que quede bien cerrado para que
no entre nada de oxígeno.

10. Dejar reposar el bidón a la sombra en algún lugar fresco por 30 días. Y etiquetar el
producto con la fecha de elaboración.

 Abono orgánico fermentado bocashi

HERRAMIENTAS MATERIALES

Palas u hormigoneras Melaza


Barreños y cubos para las mezclas Suelo
Plástico negro (el tamaño dependerá de Gallinaza
la cantidad de abono a preparar)
Cascarilla de arroz
Pasto seco
Ceniza
Residuos de madera
Salvado de trigo
Agua de pozo
Levadura
Kumis
Hojarasca

Tabla 2. Materiales a utilizar para la preparación del bocashi.


1. Picar los rastrojos verdes y secos en trozos de 2 á 3 centímetros.

Figura 8. Picado de la hojarasca y mezcla con suelo y pasto seco.

2. Se procede a tender los materiales sobre el suelo, y se mezclan sin ningún orden,
hasta lograr una textura homogénea. La altura de la abonera no debe ser superior
a los 50 cm. El proceso de preparación y mezcla de los materiales, se realiza en
forma ágil.
3. Se utiliza abono ya fermentado, u hojarasca de una zona boscosa, con esto se
pretende incorporar las bacterias que se encargarán de realizar el proceso de
fermentación de la abonera.

Figura 9. Adición de abono para la preparación del bocashi.


4. Los materiales se deben mezclar en la siguiente proporción: 60% de materiales
secos y 40% de materiales húmedos.
5. Los ingredientes se colocan ordenadamente en capas tipo pastel.

 Se añade la melaza.

Figura 10. Adición de melaza a la preparación del bocashi.

 Se añade el salvado de trigo.


Figura 11. Adición del salvado de trigo en la preparación del bocashi.

 Se añade la ceniza.

Figura 12. Adición de la ceniza en la preparación del bocashi.

 Se añade la gallinaza.
Figura 13. Adición de gallinaza en la preparación del bocashi.

 Adición del kumis

Figura 14. Adición del kumis en la preparación del bocashi.

 Adición de la cascarilla de arroz y microorganismos líquidos.


Figura 15. Adición de microorganismos líquidos a la preparación del
bocashi.

6. Posteriormente se realiza la mezcla de todos los ingredientes agregados.

Figura 16. Mezcla de ingredientes.

7. La cantidad de agua a utilizar, depende de los materiales usados, cuidando que


ésta no se aplique en exceso, para esto se realiza la prueba del puño (al tomar
una porción de material y apretarla con la mano, no debe escurrir agua), si esto
sucede deben agregarse más materiales secos.
8. Luego de terminada la abonera, se debe realizar el primer volteo, tratando que el
material de encima quede abajo y el de abajo quede encima.

9. Los abonos orgánicos deben prepararse en un local protegido de lluvias, sol y el


viento, ya que interfieren en forma negativa en el proceso de fermentación. Para
esto se guarda en costales que permitan el paso de oxígeno dentro del saco y se
cubre con una polisombra, de modo que se evite la pérdida o acumulación
indeseada de humedad donde se fabrica.

10. La temperatura del abono se debe controlar todos los días con un termómetro, a
partir del segundo día de su fabricación.

 Abono orgánico tipo bocashi

1. Para la preparación del abono tipo bocashi se llevan a cabo todos los materiales
y mezclas adicionados en el abono bocashi con la diferencia de que en este tipo
de abono se le adiciona por último desechos orgánicos.
Figura 17. Adición de desechos orgánicos.

2. Luego de terminada la abonera, se debe realizar el primer volteo, tratando que el


material de encima quede abajo y el de abajo quede encima.

3. Los abonos orgánicos deben prepararse en un local protegido de lluvias, sol y el


viento, ya que interfieren en forma negativa en el proceso de fermentación. Para
esto se guarda en costales que permitan el paso de oxígeno dentro del saco y se
cubre con una polisombra, de modo que se evite la pérdida o acumulación
indeseada de humedad donde se fabrica.

4. La temperatura del abono se debe controlar todos los días con un termómetro, a
partir del segundo día de su fabricación.

Resultados y Discusiones

La fertilidad de los suelos está determinada por las cantidades de materia orgánica y por la
actividad microbiológica que contienen. Por lo tanto, ningún suelo será productivo y
sostenible en cuanto no se maneje o procure que toda esa actividad microbiológica se
desarrolle, en un suelo degradado debido al abuso de agroquímicos, la actividad de los
microorganismos es casi nula, mientras que, en un suelo fértil, la fauna y la
flora microbiana presentes, son las encargadas de regular los procesos de intercambio entre
el suelo y las plantas (Monjarás, 2016).

Actualmente se conocen muchas alternativas viables para mejorar las propiedades físicas y
químicas del suelo de una manera económica, poco extractiva y amigable con el medio
ambiente. Entre estas alternativas encontramos a los Microorganismos de Montaña, que son
una mezcla diversa de microbiología proveniente de ecosistemas poco o nada perturbados,
que inoculados nos ayudan a mejorar nuestros suelos que han sido afectados por un manejo
inapropiado de las técnicas agronómicas.

Los microorganismos de montaña son: hongos, bacterias, micorrizas, levaduras y otros


organismos benéficos. Los cuales viven y se encuentran en el suelo de montañas, bosques,
parras de bambú, lugares sombreados y sitios donde en los últimos 3 años no se han
utilizado agroquímicos. Estos microorganismos habitan y se desarrollan en un ambiente
natural. En el suelo se reconocen fácilmente por la formación de micelios blancos debajo de
la hojarasca como se observa en la figura 18 (Molina, 2020).

Figura 18. Microorganismos de montaña. Recuperado de


https://www.jica.go.jp/project/elsalvador/0603028/pdf/production/vegetable_04.pdf
En la presente practica de laboratorio se logró preparar dos muestras de microorganismos
de montaña recolectados de un bosque seco ubicado en Chinácota, Norte de Santander y de
la Universidad Francisco de Paula Santander. Posteriormente pasadas las dos semanas se
observó un gran crecimiento de microorganismos en la muestra obtenida de la Universidad
como se observa en la figura 19; debido a que esta contenía gran cantidad de hongos
proliferados y desarrollados en las muestras, debido a esto se considera que fue un factor
importante a la hora de desarrollarse considerablemente los microorganismos de montaña.

Figura 19. Microorganismos de montaña desarrollados en muestra de la Universidad.

Por otra parte, la muestra que se utilizó proveniente de Chinácota se observó muy poco
crecimiento en las dos semanas, pero si había desarrollo de microorganismos. Esto ocurrió
debido a que la muestra recolectada fue muy poca para su preparación y con muy poca
proliferación de microorganismos desarrollados.

El Bocashi es un abono orgánico, rico en nutrientes necesario para el desarrollo de los


cultivos; que se obtiene a partir de la fermentación de materiales secos convenientemente
mezclados.

Los nutrientes que se obtienen de la fermentación de los materiales contienen elementos


mayores y menores, los cuales forman un abono completo superior a las fórmulas de
fertilizantes químicos. Su importancia radica en el suministro de los nutrientes necesarios y
adecuados al suelo, donde son absorbidos por las raíces de los cultivos para su normal
desarrollo.

Se debe utilizar la mayor diversidad posible de materiales, para garantizar un mayor


equilibrio nutricional del abono. Además de tener uso como cobertura del suelo, como
fertilizante orgánico, también pueden usarse como aditivos en fertilizantes químicos (Félix
et al., 2008).

Una vez terminada la etapa de la mezcla de todos los ingredientes del abono y controlada la
uniformidad de la humedad, la mezcla se extiende en el piso, de tal forma que la altura del
montón no sobrepasa los 50 cm. Algunos recomiendan cubrir el abono con sacos de fibra o
un plástico durante los tres primeros días con el objetivo de acelerar la fermentación. La
temperatura del abono se debe controlar todos los días con un termómetro, a partir del
segundo día de su fabricación. No es recomendable que la temperatura sobrepase los 50° C,
como se logra observar en la figura 20 la temperatura del abono orgánico se controló todos
los días.

Figura 20. Temperatura del abono orgánico

La fabricación de los abonos se inicia por la acción de una amplia y heterogénea población
microbiana quimioheterotrófica de hábitos mesófilos y a medida que esta respira, la
temperatura del montículo aumenta y los mesófilos van siendo sustituidos por otros
microorganismos, también heterotróficos pero termófilos. Cuanto mayor es la
disponibilidad de los residuos, más rápidamente se eleva la temperatura. Finalmente en la
medida que los sustratos carbonados son metabolizados, la temperatura comienza a
descender y se establece de nuevo una etapa mesofílica y se inicia la conocida maduración
del abono que puede ser más o menos prolongada (Meléndez et al., 2004).

Una medida de la calidad de los abonos son los indicadores de madurez o estabilidad del
producto, la respiración es una respuesta de la actividad microbiana en el producto final.
Como se aprecia en la Figura 20, la misma T° aumenta con los días de fermentación del
abono, oscilando entre 36-50°C, estos valores manifiestan la estabilidad del abono, ya que
se plantea que un Bocashi es estable cuando la tasa de respiración es menor de 2 mg CO2/g
SV t, lo que quiere decir que es un abono bien terminado, no continúa la descomposición,
no produce mal olor y no tiene potencial para fitotoxicidad (Hachicha et al., 2009).

El compostaje o “composting” es el proceso biológico aeróbico, mediante el cual los


microorganismos actúan sobre la materia rápidamente biodegradable (restos de cosecha,
excrementos de animales y residuos urbanos), permitiendo obtener "compost", abono
excelente para la agricultura.

En todo el periodo para la obtención del producto final, se observa la acción


descomponedora de los microorganismos de la levadura, estos son los causantes de
brindarle al abono un valor nutritivo pues al descomponer la materia orgánica,
principalmente el estiércol de bovino, se obtiene los macronutrienes que son muy vitales
para las plantas, tales como: nitrógeno, fósforo, potasio, calcio, magnesio y en pequeñas
porciones, hierro, manganeso, zinc, cobre y boro.

Se pudo experimentar que los microorganismos actúan con unas determinadas


restricciones, al estar muy húmedo el material ellos paran de descomponer la materia
orgánica.

Una de las operación para conocer que el material va encaminado a ser un abono es su
temperatura, porque la labor que realiza las bacterias produce calor, se puede verificar este
proceso introduciendo un machete en el material. Cuando el material se convierte en abono,
la temperatura se reduce bastante porque al no contener matera orgánica las bacterias no
pueden ejercer su trabajo. Para conocer que el abono está listo para ser utilizado se puede
observar la textura de este, si el abono no presenta grumos y esta granulado es porque se
encuentra preparado para su uso.

Conclusiones

 La importante función que tienen los micro y macro organismos en el suelo para
mejorar las características físicas y químicas del suelo y proveer los nutrientes
necesarios para el desarrollo de las plantas, y debido a que estos únicamente se
desarrollan en la materia orgánica presente en los abonos, nos invita a utilizar de
mejor manera y de forma constante cualquier tipo de abono orgánico y así producir
de una manera más saludable
 La fabricación de estos abonos orgánicos posee grandes beneficios para el suelo
indicando mayor fertilidad y estabilidad así retiene la humedad en los diferentes
cultivos en los que son utilizados.
 Aporta más o mejores nutrientes que un abono químico. Además su producción es
muy económica.
 Conocer más a fondo cuales son las diferencias entre los distintos abonos y en qué
momento utilizarlos cada uno de ellos nos permitirá tener mejores resultados en el
campo y así potenciaremos sus ventajas.
 Luego de la utilización indiscriminada de agrotóxicos y fertilizantes sintéticos que
lo único que han hecho es empobrecer nuestros suelos, la responsabilidad de los
nuevos maestros del campo es capacitarse sobre nuevas tecnologías amigables con
el medio ambiente.

Bibliografía

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organicos. Sociedad, Cultura y Desarrollo Sustentable, 4(1), 57-67.
http://www.uaim.edu.mx/webraximhai/Ej-10articulosPDF/Art[1]%204%20Abonos.pdf
Goyes, M., Monserrate, P. (2018). El impacto de los abonos orgánicos en la
agricultura. Importancia para el estudiante de agronomía. Opuntia Brava, 9(2), 104-111.
https://doi.org/https://doi.org/10.35195/ob.v9i2.152

Hachicha, S.,et al (2009). Biological activity during-composting of slude issued from the
OMW evaporation ponds with poultry manure-physico-chemical characterization of the
processed organic. Journal of Hazardous Material, vol. 162, no. 1, p. 402-409.

Meléndez, G. y Soto, G (2004). Como medir la calidad de los abonos orgánicos. Manejo
Integrado de Plagas y Agroecología, no. 72, p. 91-97.

Molina, E., Alcantar, J., Ramos, H., Núñez, M., Palacios, F., Ortiz, A. (2020). Guía técnica
microorganismos. Centro Nacional de Tecnología Agropecuaria y Forestal (CENTA).
Recuperado de
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Bocashi como alternativa nutricional para suelos y plantas. Scielo, 35(4), Recuperado de
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Soto, M. (2006). Renovación de plantaciones bananeras, un negocio sostenible, mediante el


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