Академический Документы
Профессиональный Документы
Культура Документы
ejemplo, no todas las personas en México tienen acceso a internet, algunas ni siquiera tienen
electricidad. Debemos comenzar a reconocer los desafíos que se enfrentan en la sociedad
para un acceso equitativo a la tecnología, en esta ocasión harás un acercamiento a la realidad
de la cobertura tecnológica, más allá de los avances y la innovación.
La tecnología avanza de manera exponencial, pero no llega a todos de la misma manera, por
ejemplo, no todas las personas en México tienen acceso a internet, algunas ni siquiera tienen
electricidad. Debemos comenzar a reconocer los desafíos que se enfrentan en la sociedad
para un acceso equitativo a la tecnología, en esta ocasión harás un acercamiento a la realidad
de la cobertura tecnológica, más allá de los avances y la innovación.
El cáncer es la segunda causa de muerte en Estados Unidos y entre los pacientes con
cáncer el tromboembolismo venoso es la segunda causa más alta de mortalidad. Los
pacientes con la tasa más alta de incidencia de tromboembolismo venoso en un año son
aquellos con cánceres de cerebro, pulmón, útero, vejiga, páncreas, estómago y riñón. Para
estos tipos de tumores el riesgo de trombosis asociada a cáncer aumenta de 4 a 13 veces
en pacientes con metástasis en comparación con aquellos con enfermedad localizada.
La asociación entre estos procesos fue descrita por primera vez por Bouillard en 1823;
Trousseau expuso más sobre la relación, proporcionando la primera descripción más
detallada en 1865. El mayor riesgo de trombosis observado en pacientes con cáncer
puede atribuirse a la capacidad del cáncer de afectar a todos los componentes de la triada
de Virchow. Es decir, la compresión tumoral y el reposo en cama puede provocar estasis
venosa. El cáncer también altera la expresión y la actividad de los componentes
sanguíneos como los factores procoagulantes, incluyendo las proteínas de la cascada de
coagulación, el factor tisular, los trombocitos y los leucocitos, contribuyen a un estado
hipercoagulable y la vascularización tumoral anormal conduce a la disfunción endotelial.
Desde la perspectiva molecular moderna, la genética del cáncer juega un papel clave en el
riesgo de la trombosis asociada al cáncer. Los oncogenes como k-ras, así como las
mutaciones en el gen supresor de tumores p-53, conducen a una mayor expresión del
factor tisular por las células tumorales. La angiogénesis es posteriormente promovida por
los niveles altos del factor tisular, promoviendo el crecimiento tumoral y la metástasis.
Esto se logra aumentando la activación plaquetaria de factor tisular, elevando los niveles
de trombina y escindiendo el fibrinógeno. Además, los mecanismos independientes de la
coagulación como la señalización de receptores activados por proteasas, elevan la
proliferación de células tumorales.
Mas allá del tumor en sí, abundan las causas iatrogénicas de trombosis asociada al cáncer.
La quimioterapia contribuye al riesgo de tromboembolismo venoso a través de múltiples
mecanismos; la quimioterapia causa daño endotelial, activa las vías de coagulación al
disminuir los inhibidores de la coagulación como proteínas C y S, así como también
antitrombina III, dificulta la síntesis de anticoagulantes naturales, provoca la liberación de
DNA libre de células, induce la liberación aberrante de citoquinas y estimula la agregación
plaquetaria. Las quimioterapias de notable riesgo incluyen L-asparagina, talidomida y
lenalidomida. Otras quimioterapias procoagulantes incluyen gemcitabina, terapias a base
de platino, anticuerpos monoclonales y terapias antihormonales.
También se han desarrollado varios puntajes, el puntaje de Viena se usa para predecir el
tromboembolismo venoso en pacientes ambulatorios, es similar al de Khorana, pero
incluye medidas de dímero D y selectina P soluble. Cada puntaje proporciona información
valiosa sobre el riesgo y el manejo de pacientes con cáncer.