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PRESENTACIÓN
CONTENIDO
Coordinador aurora Luis Rafael Velasco, S.J................................................................3
Roberto Jaramillo S.J.
1. ¿Volver a la normalidad? (caricatura)
Olman Bonilla.............................................................................4
Responsabilidad Editorial
Conferencia de Provinciales en 2. No quiero volver a la normalidad
América Latina y El Caribe (CPAL) Paco Muguiro Ibarra S.J.........................................................5
3. Lecciones para una nueva humanidad: hacia
Producción Editorial un nuevo contrato social
abediciones de la Universidad Diego A. Jiménez-Bósquez.....................................................7
Católica Andrés Bello
4. Bioética, pandemia y exclusión social
Caracas-Venezuela Cristian Peralta, S.J...............................................................13
Pues yo, lo siento, pero no quiero volver a legiado” modo de vida. Ni a continuar viendo a los in-
la “normalidad”. No anhelo volver a las caravanas diarias migrantes con miedo, como enemigos a los que hay que
para ir al trabajo, a pasar menos tiempo con mi familia, cerrar el paso con concertinas o muros. No, no quiero
ni a ver la “boina” negra amenazando el cielo de Madrid, volver a la normalidad de la que todo el mundo habla.
a una educación segregadora y con ratios insostenibles, a
No deseo seguir mirando para otro lado y fingir que
la precariedad de la Sanidad, al elitismo de que gane más
no pasa nada, que estamos bien, que todo va a salir bien.
el que más dinero sea capaz de producir menospreciando
No quiero resignarme a aceptar que todo se arregla con
labores tan fundamentales en esta crisis como las de
una vacuna o con una aplicación de geolocalización en
limpiar, reponer o entregar productos, cuidar a los
el móvil que controle todos nuestros pasos. No quiero
mayores… Detestaría regresar a la orgía de consumismo
seguir escuchando excusas para no hablar de lo impor-
compulsivo y sin sentido que nos hacía comprar
tante. No puedo tolerar que haya quienes, por sus pro-
productos innecesarios y de mala calidad, fabricados
pios intereses, mantengan el discurso del negacionismo,
en países pobres por personas pobres en condiciones
pero pretendan mantener las políticas del darwinismo
de semi-esclavitud, para
social que están provocando más pérdidas humanas.
que otros puedan seguir
Siento que no se habla
acumulando sus riquezas,
Volver a esa normalidad en la que se siguen talando ár-
boles y seguimos destruyendo la biodiversidad, en la que 5
sólo por el hecho de que
de lo importante. No seguimos destruyendo el planeta y a gran parte de la
esas prendas son baratas y
se trata de vencer al humanidad con guerras y explotación por fines econó-
de temporada.
coronavirus, ni siquiera micos. No quiero seguir promoviendo la desigualdad y
de cómo voy a sobrevivir Tampoco quiero recu- la injusticia, el abuso al que estamos sometiendo a otras
este mes. Se trata de perar esa proximidad fic- especies animales. Ni pensar que el cambio climático
cuestionar nuestro ticia que nos hacía llamar nos queda muy lejos.
modo de vida para poder de vez en cuando y casi
Estos días vemos en los medios de comunicación al-
seguir viviendo más allá rutinariamente a nuestros
gunas noticias sobre la recuperación de los peces en los
de un mes, de un año familiares más cercanos,
canales de Venecia, los delfines en los puertos de Caglia-
o una década, y de que sin importarnos real-
ri o el regreso de especies en vías de extinción a algunas
nuestros hijos, hijas y mente por sus vidas; ni a
costas. Y parece que todo esto fuera una consecuencia
cruzarme de nuevo con
aquellos que están por anecdótica de lo que nos sucede. Como un “anda, mira,
los vecinos en el ascensor
venir también puedan qué bonito” que nada tiene que ver con nuestra forma de
sin mirarnos a los ojos y
hacerlo. Y, para ello, lo vida, con nuestra propia supervivencia. No quiero volver
sonreírnos, conscientes de
que debería de estar a la normalidad de playas colonizadas por sombrillas,
que la vida nos pasa a to-
encima de la mesa es canales turbios y puertos contaminados. Esto no es una
dos. Ni a seguir viviendo
que no podemos seguir anécdota, es sólo un reflejo de lo que nos pasa. Y lo que
ajeno al resto del mundo,
consumiendo de esta nos sucede es que no sólo podemos perder nuestra for-
encapsulado en mi “privi-
forma
1 Fue hasta hace unos meses Director de Radio Marañón, Jaen, Perú, desde donde ejerció, durante 20 años, el periodismo comu-
nitario y de defensa de los DD.HH. Artículo originalmente publicado en Cultivalú el 30/04/2020. Extraído de https://www.
radiocutivalu.org/padre-paco-muguiro-no-quiero-volver-a-la-normalidad/
ma de vivir, sino que está cies exóticas sólo por el capricho de tener en casa un
Y seguimos sin hablar en riesgo la vida de muchas raro animalito que decora muy bien mi habitación, y
de lo importante: ¿qué personas, tal y como han cuya presencia no hace más que acercarnos (a nosotros
vamos a hacer para NO estado alertando muchos y a nuestros animales) a enfermedades de las que ni
volver a la normalidad?, científicos durante estos úl- habíamos oído hablar y que ahora amenazan con rom-
¿qué vamos a cambiar timos años. per de un plumazo todo lo construido; ni utilizando
para garantizar nuestra cada día transportes que, a causa de quemar combus-
supervivencia y evitar Siento que no se habla
tibles fósiles, lanzan al aire agentes contaminantes que
el sufrimiento de tantas de lo importante. No se
son los perfectos vehículos de propagación de agentes
trata de vencer al corona-
personas? patógenos por todo el mundo; a seguir plastificando
virus, ni siquiera de cómo
el mar y nuestros acuíferos, plásticos que terminan de-
voy a sobrevivir este mes.
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Diego A. Jiménez-Bósquez1 7
Estamos en medio de una atmósfera de angustia, miedo, silencio e incertidumbre; Esta pandemia nos
quizá nunca antes –ni nosotros, ni nuestros padres, ni nuestros abuelos–, hayamos pasado está desnudando
por algo así. Frente a esta realidad no podemos pasar de largo, con indiferencia. Situados como humanidad. Ha
en lo que podría llamarse una lectura equilibrada del escenario, desde la perspectiva del llegado el momento
justo medio, resulta que nos encontramos con una serie de hechos que nos afectan a todos de despojarnos
y en los distintos niveles de nuestra existencia: individual, comunitaria y globalmente. de lo que traemos
Lo que está pasando nos interpela y hace que nuestra existencia se descubra así misma puesto y volver a
perpleja y con esa extraña sensación de saberse en una suerte de “punto cero”. En el marco vernos y sentirnos en
de estos hechos y de la sensibilidad con la cual estamos transitando a través de ellos, y aun nuestra autenticidad,
sabiendo que toda lectura que hagamos hoy, mañana puede resultar estrecha e incomple- lejos de toda esa
ta, conviene no perder la oportunidad de, pensando en caliente, proponer algunas con- superficialidad a
sideraciones y que “después” podrían resultarnos de utilidad. En este sentido, propongo la que estábamos
cuatro consideraciones que, a manera de lecciones para una nueva humanidad2, pueden acostumbrados. Esta
orientarnos en aquello que hoy tenemos que aprender e interiorizar. autenticidad nos abre
a una experiencia
de vértigo única,
con un poder
1 Profesor de la Escuela de Filosofía de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE)
2 La idea original de la expresión “lecciones para una nueva humanidad” no es mía, le pertenece a Fernando Ponce S.J., a quien, además desestabilizador
de una larga amistad, me une una vieja discusión en torno a Rawls y su idea del contrato.
hasta ahora
desconocido
La importancia esencial del cuidado postergable, inaplazable, urgente y de vital importan-
cia, se nos reveló como contingente, innecesario y de
Esta pandemia nos está desnudando como huma-
segundo orden.
nidad. Ha llegado el momento de despojarnos de lo
que traemos puesto y volver a vernos y sentirnos en Y, curiosamente, todo aquello que considerábamos
nuestra autenticidad, lejos de toda esa superficialidad trivial, renunciable, y no tan urgente, durante estos
a la que estábamos acostumbrados. Esta autenticidad días se nos muestra de manera distinta. Sucede que nos
nos abre a una experiencia de vértigo única, con un estamos dando cuenta de que lo único que podemos
poder desestabilizador hasta ahora desconocido. Y hacer para proteger nuestra vida y de la de los demás
aunque la sensación es nueva, solo confirma lo que ya es cuidarnos. ¡Sí! Y resulta irónico, porque es como
el debate moderno, en la genialidad de Kant, en torno que las verdades de Perogrullo están en su momento
a nuestra naturaleza ha declarado: somos insociable so- estelar. “Lo único que podemos hacer es cuidarnos”.
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ciabilidad. Por un lado, nos descubrimos radicalmente Y allí, llegado el momento, nos hemos dado cuenta
egoístas e indiferentes frente a los demás y sus dilemas. que hace mucho habíamos olvidado cómo hacerlo, y
Por el otro, nos vemos con una gran capacidad para la durante estos días se nos regala la oportunidad de vol-
colaboración, la solidaridad y la empatía. No en todos ver a cultivar esta característica tan nuestra, sin la que
las dos tendencias, se muestran por igual; y ciertamen- nada es posible.
te en la mayoría, parece primar más la primera. Así, una primera lección que nos queda es la que
En este espacio, en el cual experimentamos y es- nos recuerda que, sin cuidado, sin dinámicas y lógicas
cuchamos un inusual y apofántico silencio, lo que de convivencia fundadas en el cuidado, en la empatía
dábamos por absoluto se deja ver en su cruda relativi- de los unos por los otros, en la responsabilidad fren-
dad. Veníamos viviendo una vida llena de actividades, te a la existencia propia y a la de los demás, la vida
todas con un halo de absoluta e indiscutible impor- es un proyecto inviable. La vida necesita ser cuidada;
tancia. Cuando alguien nos invitaba a hacer algo no necesitamos ser cuidados y cuidar. En el contexto que
programado, nos complacíamos en responder que no estamos viviendo, la vuelta al cuidado es nuestra única
8 podíamos, que estábamos ocupados. Al común de no- posibilidad; nos hemos visto obligados a volver a casa.
sotros nos llenaba de orgu-
llo, la vanidosa experiencia Nos guste o no, somos vulnerables
Todos los aprendizajes de sentirnos importantes
individuales, que como porque nuestras agendas es- Junto a esa experiencia de autenticidad existencial
personas concretas taban llenas. Nos habíamos en la que nuestra genética reacción está siendo recu-
podamos sacar son convencido a nosotros mis- perar el cuidado como cualidad, como ethos funda-
mos, que nuestra dignidad mental, está otra, igual de arquimédica en nuestra
cruciales. Es momento
estaba en aquello que hacía- condición, la de nuestra constitutiva vulnerabilidad
de entender que los
mos, en aquello para lo cual y fragilidad. Aquella descripción de Hesíodo, en la
gestos sencillos, los actos
resultábamos útiles. Y en que se refiere a la felicidad humana como la flor que
pequeños, como lavarse
medio de esa colorida y pin- resplandece en su belleza, en medio de un inhóspito
las manos, pueden ser los
toresca danza de egos, unos mundo y expuesta a la inclemencia de la fortuna, hoy
actos más importantes
más crecidos y ocupados dice muy bien de la forma en la que estamos sintien-
de los que seamos do nuestra existencia. Aunque no nos guste para nada,
capaces. La pandemia que otros, llegó el pequeño
e imperceptible COVID-19. durante estos días tenemos el sabor de la vulnerabili-
nos está enseñando que dad en la punta de la lengua.
Y con su llegada se alteraron
aquello que, tan vacía y
y se paralizaron por com- Esta experiencia de vulnerabilidad frente a la que
populistamente se dice
pleto nuestras agendas y estamos nos muestra que, por un lado, sea cual sea
muchas veces, es verdad:
nuestras rutinas diarias. Sí, nuestra posición y nuestra condición y el lugar que
el poder está en cada uno
desde que está con nosotros, ocupemos en la sociedad, y las etiquetas que traiga-
de nosotros
todo eso que creíamos im-
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mos encima, siempre nuestra vida puede ser alterada Yo soy porque son otros
por acontecimientos que escapan a nuestro control;
Una nota decisiva que nos Esta crisis nos deja la
vivimos expuestos a eso que los griegos llamaban for-
recuerda y vuelve a enseñarnos lección que no basta
tuna, y nosotros a veces solemos nombrar como suerte
esta pandemia es que, lo acep- con amar y reconocer en
o azar. Lo más preciado que hoy tenemos mañana ya
temos o no, somos interdepen- su dignidad a mi grupo.
no puede estar más. Y, por otro, la huella suprema de
dientes: dependemos los unos Que nuestra vida, su
nuestra vulnerabilidad es que lo único cierto de nues-
de los otros. No existimos a posibilidad, requiere de
tra vida es la muerte. Y somos para la muerte no por
solas. La posibilidad de tener todos, la capacidad de eso
defecto, sino como rasgo fundamental. Nadie puede
vidas felices, libres, plenas y que los ingleses clásicos
vivir si no es con la certeza de la muerte. Da igual
autónomas depende de otros. llamaban sympathy, y
cual sea nuestra contingencia, tarde o temprano todos
Sí, así de paradójico y con- nosotros traducimos como
vamos a morir.
tradictorio: la posibilidad de
compasión o solidaridad
Que así seamos no es motivo para estar tristes o nuestra individualidad y au-
desanimarnos. Más bien, esta fresca memoria y ac- todeterminación es el otro, su
tualización de nuestra condición para la muerte, nos presencia… Y es curioso que
regala la oportunidad de preguntarnos ¿cómo estamos solo en momentos y circunstancias de horror y des-
viviendo? El precio de no poder hacer nada frente a concierto humano, volvamos por obligación a recordar
la muerte, es recompensado con la posibilidad de po- la innegociable necesidad de otro. Y su importancia
der hacer todo frente a la vida. La muerte está para radica en el mero hecho de que solo a través de él po-
hacernos amar la vida. Pero claro, tenemos vidas tan demos salir de nosotros mismos y descubrir quiénes
ocupadas que nos hemos olvidado de lo único cierto: somos. El tú es condición del yo, como en medio de la
nadie sale vivo de aquí. A riesgo de parecer un poco guerra lo declaraba en el siglo pasado Martin Buber. Y
intimista, me atrevo a confesar mi esperanza en que el otro es condición de mí mismo, porque en sus ojos,
tener a la muerte merodeando nuestras calles ojalá nos en su mirada, en su presencia, me experimento en mi
enseñe, a quienes se quedan o nos quedamos, a amar
la vida y a vivirla con autenticidad.
finitud, en mi circunstancialidad, en aquello que soy
concretamente; solo en el espejo de sus ojos me está
9
Todos los aprendizajes individuales, que como permitido mostrarme.
personas concretas podamos sacar son cruciales. Es En línea con lo dicho, lo que nos toca recuperar
momento de entender que los gestos sencillos, los ac- para nosotros, a manera de aprendizaje, es una actitud
tos pequeños, como lavarse las manos, pueden ser los fundamental que nos permita construir vínculos sanos
actos más importantes de los que seamos capaces. La con los demás. No se trata de los vínculos que tenemos
pandemia nos está enseñando que aquello que, tan va- con los otros a quienes me unen afectos, se trata de
cía y populistamente se dice muchas veces, es verdad: reconocer con el mismo valor a aquellos otros a quie-
el poder está en cada uno de nosotros. En tal virtud, nes no necesariamente me une un afecto particular. A
me parecen sugerentes las siguientes palabras del presi- ellos debería unirnos un afecto universal por todas las
dente de Italia que, en un contexto tan sombrío como personas, afecto del que deberíamos ser capaces por el
el nuestro, pronunció hace unos pocos días: “el sentido mero hecho de ser congéneres. Esta crisis nos deja la
de la responsabilidad de los ciudadanos es el recurso lección que no basta con amar y reconocer en su dig-
más importante con el que un estado democrático nidad a mi grupo. Que nuestra vida, su posibilidad,
puede contar en momentos como aquel en el que vivi- requiere de todos, la capacidad de eso que los ingle-
mos”. Sin actos responsables individuales pequeños y ses clásicos llamaban sympathy, y nosotros traducimos
sencillos cualquier proyecto de sociedad es fallido. A como compasión o solidaridad.
Italia, a nosotros y a otros, son muchas las muertes que
Esta necesaria sympathy con los demás necesita
nos está costando aprender esto.
trasladarse también al resto de huéspedes del planeta.
Así, es urgente aprender también que las costumbres
y valores con los que veníamos habitando el planeta,
la casa de todos, no eran las mejores. Ya nos lo decían
distintos organismos y voces de influencia mundial:
tenemos que cambiar nuestros hábitos de consumo y
las maneras en las que reproducimos materialmente
nuestras vidas. Y esto nos resultaba menos que absur-
do. No nos cabía por ningún lado, siquiera imaginar,
que las industrias y nuestro sistema económico pue-
dan parar un día. El solo hecho de sugerir esta posi-
bilidad era un despropósito. Disminuir los niveles de
CO2 a causa de nuestra actividad económica no era
una posibilidad para nadie, aunque se hacían peque-
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SOCIAL
12
Cristian Peralta, S.J.1 en el “respeto de la autonomía” del paciente para que
no se cometieran abusos en la práctica clínica y en la
investigación científica. También trajo como conse-
La bioética es una disciplina relativamente joven. El cuencia práctica la obligatoriedad del “consentimien-
término “bioética” comienza a tener mayor difusión a to informado” del paciente, antes de someterse a un
partir de un artículo del oncólogo Van Rensselaer Po- tratamiento médico o participar de una investigación.
tter (1911-2001, publicado en 1970 con el título Bioe- Ambas propuestas quedaron consagradas en el Informe
thics: bridge to the future [Bioética: puente hacia el fu- Belmont de 19793 y en la obra de Tom Beauchamp y Ja-
turo]. En el año 1971, el autor publicó una compilación mes Childress4. Podríamos afirmar, de manera general
de artículos donde afirma: y apresurada, que con esto se dio inicio a la influyente
La humanidad necesita urgentemente una nueva
bioética principialista y, también, a la consagración del
sabiduría que brinde el “conocimiento de cómo giro que centró el ejercicio de la bioética en los proble-
usar el conocimiento” para la supervivencia del mas de la investigación y la práctica médica.
hombre y para mejorar la calidad de vida. […]
Una ciencia de la supervivencia debe ser más que La bioética principialista propone cuatro princi-
solo ciencia, y por eso propongo el término Bioéti- pios básicos que ayudan al discernimiento ético de los
ca para enfatizar los dos ingredientes más impor-
problemas que se presentan, estos son: el “respeto de la
tantes para lograr la nueva sabiduría que se nece-
sita con tanta urgencia: el conocimiento biológico autonomía”, la “beneficencia”, la “no maleficencia” y la
y los valores humanos2. “justicia”. A nuestro modo de ver, el problema de estos
principios no es que sean incorrectos en sí mismos, sino
En la visión de Potter, una ciencia sin valores huma-
que, en el modo en que lo han definido Beauchamp y
nos podría conducir a un mal uso del conocimiento en
Childress, la autonomía se transforma en el principio
detrimento de la vida en general. Potter no estaba lejos
rector que define y condiciona a los otros tres. Resulta
de la verdad. El avance de los conocimientos científi-
co-técnicos y las atrocidades cometidas en los campos
claro que el principio de respeto a la autonomía no debe 13
descartarse, al contrario, necesitamos que se vele por
de concentración nazi (Juicios de Nuremberg) o en los
él, pero debemos ser conscientes de que su acentuada
estudios sobre la sífilis en poblaciones afroamericanas
centralidad coloca a la bioética bajo la sombrilla de la
de Estados Unidos (Tuskegee), entre otros ejemplos,
ética individual.
daban prueba de la capacidad de hacer daño que tiene
una práctica científica divorciada de los valores éticos. Para poner un ejemplo, un estudio realizado por
Resulta evidente que no todo lo técnicamente posible Henk Ten Have, titulado Vulnerability: challenging
es éticamente plausible. bioethics5, indica que el concepto de vulnerabilidad se
ha parcializado, arrastrado por el principio de autono-
La ebullición de las posibilidades científico-técnicas
mía, hacia una definición que la considera como “in-
y de los cambios culturales a partir del final de la Se-
capacidad de proteger el propio interés”. Sin embargo,
gunda Guerra Mundial, traían consigo una cantidad
los acuerdos internacionales o los estudios sobre salud
ingente de preguntas que la ética tradicional parecía
pública entienden la vulnerabilidad desde los mecanis-
no poder responder de manera adecuada. Esto, con-
mos sociales que conducen a ciertas poblaciones a si-
jugado con el contexto liberal de los países en los que
tuaciones de riesgo en términos de salud, lo que presu-
surgían estas preguntas, condujo a un necesario énfasis
1 Bioeticista. Profesor del Instituto Superior Bonó, Rep. Dominicana. Cursante del Doctorado en Filosofía y Bioética en la Universidad Pontificia Comillas de Madrid, Es-
paña. Artículo originalmente publicado en Acento, el 04/05/2020. Extraído de https://acento.com.do/2020/opinion/8812576-boetica-pandemia-y-exclusion-social/ Este
artículo es una adaptación de la ponencia “Bioética, pandemia y exclusión social” que presentó el autor vía Zoom, el 23/04/2020, por invitación de la Comisión Nacional
de Bioética de República Dominicana.
2 Potter, Van Rensselaer (1971): Bioethics: bridge to the future. New Jersey: Prentice-Hall, 1-2.
3 Informe extraído de http://www.conbioetica-mexico.salud.gob.mx/descargas/pdf/normatividad/normatinternacional/10._INTL_Informe_Belmont.pdf
4 Beauchamp, Toms y Childress, James (1979): Principles of Biomedical Ethics. New York, Oxford University Press.
5 Ten Have, Henk (2016): Vulnerability: challenging bioethics. New York.
No se trata,
pues, de rastrear
soluciones solo para
el empoderamiento pone una comprensión de la Creo que es oportuno recordar el artículo 14 de la
individual, como los vulnerabilidad en términos Declaración Universal sobre Bioética y Derechos Hu-
de justicia. manos, promulgada por la Conferencia General de la
que buscaría una
UNESCO en 2005:
respuesta liberal En América Latina y el
desde el principio Caribe, tenemos un alto nú- 1. La promoción de la salud y el desarrollo social
para sus pueblos es un cometido esencial de los
de autonomía, mero de personas que viven gobiernos, que comparten todos los sectores de la
sino de buscar en vulnerabilidad por facto- sociedad. 2. Teniendo en cuenta que el goce del
respuestas desde res sociales, culturales y eco- grado máximo de salud que se pueda lograr es uno
nómicos, por lo que su situa- de los derechos fundamentales de todo ser huma-
la justicia social no sin distinción de raza, religión, ideología polí-
que hagan frente a ción sobrepasa lo individual tica o condición económica o social, los progresos
las problemáticas y exige una respuesta respon- de la ciencia y la tecnología deberían fomentar: a)
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sable y articulada desde los el acceso a una atención médica de calidad y a los
colectivas y, por medicamentos esenciales, especialmente para la
tanto, se infiere que estamentos comunitarios,
salud de las mujeres y los niños, ya que la salud
dicha respuesta sociales y gubernamentales. es esencial para la vida misma y debe considerar-
ha de ser desde De cara al mejoramiento de se un bien social y humano; b) el acceso a una
la vida de las personas afecta- alimentación y un agua adecuadas; c) la mejora
estructuras políticas, de las condiciones de vida y del medio ambiente;
das por la pobreza, la exclu-
comunitarias o de d) la supresión de la marginación y exclusión de
sión social y la desigualdad, personas por cualquier motivo; y e) la reducción
Estado
supone mirar las estructuras de la pobreza y el analfabetismo7.
que provocan que una pobla- Según lo anterior, es importante tener presente, en
ción determinada no pueda nuestras discusiones bioéticas en torno a la pandemia
gozar de la salud que podría tener si tuviera todas las del COVID-19, la perspectiva de la exclusión social.
oportunidades que su ambiente amerita. Esta va más allá de la pobreza y se comprende desde
No se trata, pues, de rastrear soluciones solo para un carácter estructural que hace referencia a los que
14 el empoderamiento individual, como los que buscaría quedan fuera, de una manera u otra, del bienestar ge-
una respuesta liberal desde el principio de autonomía, neral y que pone en entredicho la condición misma de
sino de buscar respuestas desde la justicia social que ha- ciudadanos de las personas que la sufren.
gan frente a las problemáticas colectivas y, por tanto, se Esther Raya, socióloga española, destaca tres zonas
infiere que dicha respuesta ha de ser desde estructuras en las que se puede encontrar un individuo dentro de
políticas, comunitarias o de Estado. En este sentido, la una sociedad. La primera, la “zona de integración”, en
propuesta ha de ser la de considerar la vulnerabilidad la que el sujeto tiene un empleo estable que le permi-
como posibilitadora de un discurso ético de responsa- te consumir bienes sociales, se encuentra protegido de
bilidad, que conduzca a la solidaridad y al bien común. riesgos y puede participar de los valores culturales de su
Autonomía, por supuesto, pero también justicia social. entorno. La segunda es la “zona de vulnerabilidad”, en
Henk Ten Have afirma: la que la inestabilidad, la precariedad laboral y la frágil
Personas que están viviendo en condiciones de po- configuración de las relaciones sociales pone en riesgo
breza, privación, hambre, opresión y corrupción,
su participación como ciudadano social. Y, por último,
no son vulnerables como resultado de sus decisio-
nes individuales, ellos son marginalizados incluso Raya identifica la “zona de exclusión” en la que los su-
si ellos son personas totalmente autónomas. […] jetos no tienen trabajo y sufren de aislamiento social,
Aquí el argumento es que la justicia solo puede ser acentuándose así la marginalidad y la inseguridad ante
restaurada en un nivel más sistemático, a través de
un enfoque institucional6.
la ausencia de protección social8.
9 Wester, Jutta (2008): “Responsabilidad en contextos de pobreza”, en Diccionario Latinoamericano de Bioética, por Juan Carlos Tealdi (Ed.). Bogotá: UNESCO-Universidad
Nacional de Colombia p. 517.
10 Ver https://www.cepal.org/es/temas/covid-19
UNA
IGLESIA
ABIERTA,
ACTIVA Y
SOLIDARIA
16
Inés Aray1
Unidos es mejor desde una colaboración estrecha En el caso de Monagas, pese a que las últimas cifras
e incluyente indican que sólo se ha tenido un caso con COVID-19
(según los organismos públicos de salud), ello nos co-
Ciertamente, hay una gran tentación de asumir ló-
loca en un contexto organizacional de gran vulnerabi-
gicas unilaterales y aisladas ante la complejidad de lo
lidad operativa y la necesidad de trabajar juntos como
que estamos viviendo como personas y organizaciones.
obras sociales.
En efecto, ante las alternativas de huir, resignarnos e
imponernos ante los otros, queda la opción de la co- Según los datos que manejan los organismos hu-
laboración: entendida como un movimiento conscien- manitarios, Monagas cuenta con 1.031.761 habitan-
te para implicarnos y ofrecer la mente, el corazón y tes repartidos en 13 municipios y 72 parroquias ci-
las manos para abordar una solución que no puede ni viles con índice de vulnerabilidad del 41,6%, lo que
debe asumirse de manera individual. la ubica en el puesto 10 de zona prioritaria para las
acciones humanitarias (Fuente: OCHA), mostrando
En este sentido, desde hace algún tiempo, se ha
procurado aglutinar a las organizaciones sociales que
niveles preocupantes en el acceso a la educación, la 17
falta de protección social, pro-
hacen vida en Maturín, en la Red de Acción Social de
blemas de nutrición, soberanía
la Iglesia (RASI), desde una estrategia común que ha aunque muchas
alimentaria, así como una cri-
venido incorporando a actores de la Diócesis de Ma- organizaciones no se han
sis severa en términos de agua,
turín (Pastoral Social), Cáritas Maturín, la AVEC, el detenido a pensar qué
saneamiento e higiene. Por otra
Movimiento Juvenil Cristiano Huellas, Fe y Alegría es lo que conviene hacer
parte, las recientes limitaciones
(Oficina Zonal), la Comunidad Jesuita en Maturín y y cómo prepararse ante
de transporte, como conse-
el Centro Gumilla (Coordinación de Formación de las contingencias, las
cuencia de la falta de gasolina,
Monagas). organizaciones sociales de
han complicado las cosas en
los municipios más poblados la Iglesia están invitadas
Ver la realidad de lo que pasa nos afecta y nos como es el caso de Maturín, lo a leer y discernir, en sus
desinstala cual evidentemente restringe fundamentos, las claves
y afecta la acción de todas las de actuación más factibles
Asumir nuestro contexto en Monagas, y concre-
organizaciones sociales de la y que hagan justicia a la
tamente en Maturín, pasa por entender que ya veni-
Iglesia. realidad que se impone
mos de una emergencia humanitaria compleja donde
los más vulnerables han sufrido y seguirán sufriendo
como consecuencia de carecer de los elementos míni-
mos para una vida digna.
1 Responsable Centro Gumilla Monagas y Coordinadora Red de Acción Social de la Iglesia, Capítulo Monagas, Venezuela. Texto escrito con la colaboración del P. Manuel
Gerónimo Sifuentes (Director Cáritas Maturín) y el Lic. Yolmer Meza (Director Zonal Fe y Alegría Oriente). Publicado en la Revista SIC, el 06/05/2020. Extraído de
http://revistasic.gumilla.org/2020/templos-y-centros-cerrados-pero-una-iglesia-abierta-activa-y-solidaria/
Juzgar a partir de criterios válidos para un discer- pacios de hogar que han pasado a convertirse en Igle-
nimiento apostólico sias domésticas.
Ahora bien, aunque muchas organizaciones no se Evidentemente, todo este espíritu de colaboración
han detenido a pensar qué es lo que conviene hacer nos impulsa a vencer miedos, agendas propias y limi-
y cómo prepararse ante las contingencias, las organi- taciones para procurar como organizaciones de Iglesia
zaciones sociales de la Iglesia están invitadas a leer y ver lo que pasa, juzgando lo que puede y debe hacer-
discernir, en sus fundamentos, las claves de actuación se para actuar unidos de manera integrada, “en una
más factibles y que hagan justicia a la realidad que se alianza social desde los que tienen y pueden; los que
impone. saben y los que necesitan”. A continuación, se compar-
ten algunas experiencias bajo esta lógica y en distintos
Hoy, más que nunca, vale la pena comprometerse
niveles.
con lo que plantean los Estatutos de la Red de Acción
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Social de la Iglesia, sobre asumir el trabajo en red como 1. A nivel del trabajo en red: al inicio de la pan-
una relación y labor articulada para promover la paz, demia surgió la necesidad de dotar de tapabo-
la convivencia y el desarrollo local. Todo ello desde el cas (EPS) a los equipos en labores de alimenta-
horizonte de la Doctrina Social de la Iglesia, que lleve al ción. Como las organizaciones no tenían para
respeto de la dignidad de la persona humana, el bien comprarlos, desde una estrategia de responsa-
común, la subsidiariedad y solidaridad. bilidad social empresarial, organizaciones alia-
das recurrieron a empresas privadas para que
Por otra parte, estos criterios deberían complemen-
donaran la tela. Posteriormente, se pidió a cos-
tarse con los protocolos de actuación humanitaria, de
tureras pertenecientes a las pequeñas comuni-
manera tal que se garantice el cumplimiento de unas
dades cristianas, que elaboraran los tapabocas
normas mínimas para aliviar el sufrimiento, brindar
con la tela conseguida en las donaciones. Fi-
asistencia y protección, en razón del derecho que tie-
nalmente, gracias al aporte de todas las madres
nen las personas a una vida digna.
cuidadoras de los colegios de Fe y Alegría y los
18 Actuar juntos, empezando por lo pequeño y
equipos de Alimentación de Cáritas, se pudo
contar con tapabocas que permitieron seguir la
haciéndolo rápido labor de alimentar a los más vulnerables.
La situación ha demostrado 2. A nivel de escuelas y educación a distancia:
que la mejor manera de colabo- Fe y Alegría ha atendido a 1.062 de los 2.238
todo este espíritu de rar es sobre la base de asuntos estudiantes de sus dos escuelas en Maturín (Pa-
colaboración nos impulsa concretos. En este sentido estas dre Luis Antonio Ormieres en la Murallita y
a vencer miedos, agendas organizaciones se han articulado Ángel de la Guarda en Sabana Grande) a nivel
propias y limitaciones para trabajar en iniciativas como educativo y alimentario. Y está generando es-
para procurar como el apoyo de la “Campaña Com- trategias con aliados, en cada zona, para llegar
organizaciones de Iglesia partir” en torno al agua, junto al al resto de los niños escolarizados y sus fami-
ver lo que pasa, juzgando aporte de algunos gremios profe- lias, quienes lamentablemente no tienen acceso
lo que puede y debe sionales (como los Planificadores a tecnologías y comunicaciones, por lo que no
hacerse para actuar unidos del Colegio de Ingenieros del han podido ser asistidos. Complementaria-
de manera integrada, “en Estado Monagas), la creación de mente, el IRFA, desde la emisora 105.9 FM,
una alianza social desde grupos de voluntarios para asis- realiza un trabajo educativo y periodístico para
los que tienen y pueden; tir en la pandemia, así como el alimentar la programación y llevar adelante los
los que saben y los que acompañamiento pastoral y for- procesos administrativos, informativos y edu-
mativo de los integrantes de las cativos, desde el trabajo en casa de los equipos,
necesitan”
obras y sus colaboradores, en es- tanto radiales como formativos. Por otra parte,
aurora • año 2020 • Nº 2
la AVEC Seccional Barcelona Maturín, man- personal y organizacional ante lo que está acontecien-
tiene informados a los 16 centros educativos do. Lo cual, si se canaliza, se sistematiza y se hace visi-
en Maturín, así como a los afiliados no sub- ble, puede servir de un modo superador para inspirar
vencionados, de los lineamientos educativos y a otros actores en las comunidades, en las organizacio-
administrativos oficiales e institucionales para nes y en la sociedad.
el aprendizaje en casa, y alimenta a los equipos
Todo ello desde una lógica y talante de colabora-
directivos con cápsulas, subsidios espirituales,
ción más estrecho y fraterno que vaya más allá de lo
lecturas y links para el auto-aprendizaje, desde
convencional. No solo trabajar juntos por la evidente
una opción preferencial por la interiorización
familiaridad y afinidad que tenemos por ser obras de
de la palabra de Dios, la oración, la reflexión y
la Iglesia, sino ahondar en la colaboración incorporan-
vivencia de los valores del evangelio en familia.
do cada vez a más actores, cuyo principal requisito sea
3. A nivel de acciones de solidaridad y aten- una visión compartida sobre el bien común y la con-
ción de la vulnerabilidad: Cáritas sigue lle- ciencia de que trabajar juntos por los más necesitados
vando adelante su Programa Vivero (para la es mejor que hacerlo individualmente.
atención de niños de 0 a 5 años en riesgo de
Ahora bien, asumir cristianamente lo que sucede
desnutrición); así como las ollas comunitarias
en lo personal y en lo organizacional pasa por una vida
(para personas en condición de vulnerabili-
de recogimiento, reflexión y oración, de manera tal
dad), ampliando incluso su red de acción en 14
que las palabras sean oportunas y la acción sea efecti-
sectores con dos ollas comunitarias por lugar.
vamente expresada en clave de servicio y solidaridad.
Por su parte, a nivel de voluntariado y acompa-
Sumado a ello, hoy más que nunca se requiere mostrar
ñamiento juvenil, el Movimiento Juvenil Cris-
iniciativas que muevan a otros también a actuar, y se
tiano Huellas, desde la cuaresma y la Semana
puedan vencer dinámicas de desesperanza, miedo e
Mayor, ha acompañado a los jóvenes y ha veni-
individualismo. Quizá las buenas prácticas sean una
do impulsando un proceso de evangelización
luz en el camino para aquellos que buscan alternativas.
web para los huellistas y los campistas (durante
la Semana Santa); además, sigue ofreciendo Finalmente, consideramos que la coherencia entre
19
herramientas para el desarrollo de los itinera- lo que pensamos, decimos y hacemos nos permitirá
rios formativos por las redes sociales, para ge- ampliar el campo de actua-
nerar un compartir comunitario y familiar que ción, no sólo de una coalición
propicie la convivencia y la interiorización, in- de los “nuestros”, sino abrir-
tegrando el uso de las tecnologías y las alianzas nos a muchos otros que, al ser No solo trabajar juntos por
naturales con Fe y Alegría. Finalmente, a nivel vistos con ojos de misericor- la evidente familiaridad y
de acompañamiento social, el Centro Gumi- dia, fraternidad y respeto, se afinidad que tenemos por
lla en Monagas ha contribuido con acompa- sentirán invitados a colaborar ser obras de la Iglesia, sino
ñamiento, formación y socialización de temas bajo la premisa de que todos ahondar en la colaboración
pertinentes en el contexto (info-ciudadanía, estamos afrontando las mis- incorporando cada vez
manejo de protocolos para abordar la crisis, mas dificultades, necesidades, a más actores, cuyo
orientaciones para voluntarios). incertidumbres, pero también principal requisito sea una
los mismos anhelos, las mis- visión compartida sobre el
mas búsquedas, los mismos bien común y la conciencia
La Red de Acción Social de la Iglesia como signo fines, en razón de mitigar, de que trabajar juntos
superador de lo que acontece transformar y reconstruir al por los más necesitados
En cualquier caso, aunque no contemos con todos país, al Estado y a la ciudad es mejor que hacerlo
los recursos, posibilidades y operatividad, lo que veni- durante y después de la pan- individualmente.
mos haciendo ha implicado un proceso de conversión demia.
APRENDER
aurora • año 2020 • Nº 2
en tiempos de P A N D E M I A
20 Dicen que no se valora lo que se tiene hasta que se ran de los nuestros. Cuando se deterioró la educación
pierde. Y ese es nuestro mayor peligro presente: desde porque no quisimos pagar el costo de su universalidad,
las estrecheces del confinamiento añorar los tiempos creamos colegios privados. Cuando los hospitales no
perdidos, como si no fueran en gran medida respon- pudieron mantener la calidad al aumentar sus servi-
sables de la crisis. Tenemos el riesgo de vivir el síndro- cios, creamos clínicas privadas para garantizar nuestra
me del éxodo, añorando los ajos y cebollas de Egipto salud. Crear instituciones privadas para protegernos
cuando tenemos la oportunidad de caminar hacia la li- de los otros. Cuando la policía se corrompió, creamos
bertad. No miremos atrás con nostalgia de lo perdido. guardas privados para proteger nuestra vidas y propie-
Tendremos el peligro de incapacitarnos para avanzar dades y cerramos nuestros vecindarios. Cuando los
hacia la novedad que nos salva, como la mujer de Lot. migrantes nos invadieron en busca de vida, levanta-
Soñemos con el futuro diferente. Es el tiempo de nues- mos muros para excluirlos ded nuestro bienestar. Pero
tra oportunidad. No busquemos recuperar el pasado. no pudimos evitar vivir en un mundo sin educación
Aprovechemos para dar el salto hacia adelante. que nos arropó; ni pudimos escapar de habitar ciuda-
des violentas; ni escondernos de la muerte; ni producir
Vivimos en un mundo dividido: entre hombres y
sin el trabajo de los migrantes; ni defendernos de un
mujeres, izquierda y derecha, creyentes y ateos, blancos
virus que atravesaba puertas, clases y nacionalidades.
y negros, ricos y pobres, nacionales y extranjeros, …
Tenemos fronteras para separarnos del otro, que es pe- Somos parte de una humanidad que no puede en-
ligroso. Pensábamos que la manera de protegernos era cerrarse en burbujas asépticas. Los botes salvavidas no
levantar muros y verjas, cerrar puertas a los que no fue- llegan a puerto. O nos salvamos todos o nos hundi-
anda andrajoso por la calle, del que tiene ideas peli- redes que nos conectaban
rona que trans-
grosas, del que puede ser un pederasta. Al conectarnos en nuestra diversidad.
gredió todas las
aprendimos a tener amigos de otros países, a comu- Descubrimos que lo
fronteras y se
nicarnos con desconocidos, a descubrir que los dife- importante no es acumular
expandió rápida-
rentes son también humanos y sensibles, a desmontar conocimientos, dinero,
mente, con agre-
prejuicios que llevábamos tatuados por generaciones. poder, sino conectarnos
sividad, por todo
Y de buenas a primeras percibimos en quien se nos bien.
el mundo. No
acerca que puede ser un portador del virus, y comen-
respetó naciones,
zamos a tomar distancia de todos. Hasta de los más
culturas, edades,
cercanos. El abrazo efusivo se hace gesto distante. El
género, religiones. No pidió permiso, ni sacó visa. Y
beso se convierte en una mirada temerosa. Se evitan
pareció justificar las fronteras cerradas. Pero en reali-
las palabras que pueden portar el virus al pronunciar-
dad nos reveló que, por más barreras que levantemos,
las. Pero empezamos a fijarnos en los más ancianos, en
somos uno, un solo cuerpo que responde al mismo vi-
22 los más débiles, en los más desprotegidos. Los hasta
ahora desechables, que no eran el centro de ninguna
rus. Somos del mismo barro, comemos el mismo pan
y bebemos el mismo vino. Estamos llamados a ser un
mirada, son ahora sujetos de nuestro cuidado. La mi-
pueblo, su pueblo y que Él sea nuestro Dios. Necesita-
rada, a pesar del miedo, se nos hace compasiva. Quizá
mos, todos, la misma vacuna. Tenemos que repensar
porque sospechamos que, si ellos se salvan, nosotros
nuestros conceptos de nación y frontera y aprender a
nos salvamos. Y recordamos que lo que hicieron a uno
pensar en “un mundo uno”, en la gran familia de Dios.
de estos pequeños… Que la pandemia ni nos haga más
desconfiados, ajenos, sino que nos enseñe a construir El reto es aprender para no volver atrás, sino sal-
relaciones desde la transparencia y la confianza, a dar tar adelante. Necesitamos reunirnos para juntos re-
los buenos días y una sonrisa a todos, a disfrutar del flexionar esta experiencia y sacar conclusiones que
don de la vida que amanece cada día con cuantos nos nos ayuden a caminar hacia la novedad de un mundo
rodean, aunque sean diferentes. mejor preparado para enfrentar las pandemias. Que
las empresas, los centros educativos, las iglesias, los
Las fronteras son una herida sangrante de nuestro
gobiernos, los medios de comunicación promovamos
mundo. Ellas representan el límite de nuestra libertad,
la reflexión compartida, la búsqueda colaborativa de
el cierre del horizonte, la tierra prohibida, la conde-
nuevos caminos. Que no volvamos a reconstruir los
na a la exclusión. Para los que nacimos en una isla, la
viejos modos de proceder. Que nos reencontremos
frontera es un mar que nos incomunica. El sueño está
para repensarnos, para innovar nuestras formas de re-
siempre más allá de esa frontera que nos retiene. El
lación.
mundo moderno ha ido rompiendo fronteras: geográ-
ficas, culturales, científicas, … Hemos llegado a tierras
prohibidas, hemos transgredido fronteras saltando va-
llas, rompiendo prejuicios, cambiando culturas y le-
C UA R E NTE N A ,
A M B I E NTE Y D E S A R R O L L O
SOSTENIBLE
Joaquin Benitez Maal1
3 Eichenbaum, M. S., S. Rebelo, and M. Trabandt (2020): “The Macroeconomics of Epidemics”. Working Paper 26882, National Bureau of Economic Research.
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Se podría argumentar que, más que inteligente, se- infectados, los no infectados podrían continuar una
ría un confinamiento “informado”, ya que requiere del vida normal.
conocimiento sobre el estado de salud de cada indivi-
Los resultados numéricos de este modelo indican
duo. El hecho de que la enfermedad pueda presentarse
sin manifestar síntomas complica la situación. Sin sín-
que esta política de confinamiento condicional es 29
preferible a la alternativa sin pruebas. No solamente
tomas inequívocos, algunas personas pueden no saber
el pico de infección disminuye y se pospone unas se-
si son susceptibles, infectadas o recuperadas. Surge la
manas, sino que también la actividad económica se ve
pregunta, ¿qué hacer con los infectados asintomáticos?
menos afectada. Esto ocurre porque todos los no in-
La respuesta es: ¡someterlos a exámenes y pruebas!
fectados (ya sea porque nunca lo han estado o porque
En el segundo artículo del seminario, David Ber- se han recuperado) pueden participar plenamente de
ger (Duke University), Kyle Herkenhoff (University of las actividades económicas.
Minnesota) y Simon Mongey (University of Chicago)4
En conclusión, la investigación actual sobre la pan-
estudian la forma en que la realización de pruebas pue-
demia de COVID-19 es fundamental para la orienta-
de afectar el curso de la pandemia. El grado de confi-
ción de las políticas de salud y económicas con las que
namiento óptimo dependerá del número de infectados
se busca enfrentar la crisis. El análisis de estos temas
asintomáticos. El gobierno debe hacer más estricto el
parece orientarse hacia una dirección clara: el confi-
confinamiento cuando muchos asintomáticos resultan
namiento debe realizarse a pesar de sus efectos severos
estar infectados, y viceversa. En ausencia de pruebas,
sobre la actividad económica, y su intensidad depen-
la mejor política implica confinamiento parcial para
derá de la fracción de infectados en la población y de
quienes ignoran su estado de salud y cuarentena para
la identificación del estado de aquellas personas que no
los infectados. Las pruebas permiten mejorar la foca-
presentan síntomas.
lización de la política: la cuarentena solo afecta a los
4 Berger, D., K. Herkenhoff, and S. Mongey (2020): “An SEIR Infectious Disease Model with Testing and Conditional Quarantine”. Working Paper 26882, National Bureau
of Economic Research.
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La voz lúcida de
los profetas en
30 tiempos de
COVID-19
El profeta tiene
conciencia de que
injusticia y religión Jaldemir Vitório S.J.1
no se casan.
Desde allí brotan Desde el comienzo de la pandemia del COVID-19, un oráculo de Amós, profeta bíblico del si-
las palabras duras glo VIII a.c. en el distante Israel, ronda en mi cabeza. Se trata del capítulo 4, versos 4 al 11, donde
contra los agentes el profeta enumera una serie de fenómenos naturales que son entendidos como una invitación a la
de la maldad y su conversión. El pastor-agricultor interpretaba la realidad de manera peculiar. Su experiencia de fe le
permitía ver más allá de las apariencias y escuchar a Dios hablando por medio de lo que llamamos
religión deformada.
“signos de los tiempos”.
Quienes oían al profeta eran personas religiosas que, colocando su confianza en falsas segurida-
des, entendían la prosperidad del momento (shalom) como señal de bendición. Am 4,4-5 describe el
culto practicado por ellos en los santuarios tradicionales de Betel y Gilgal. Allí ofrecían sacrificios de
1 Profesor y Director del Departamento de Teología y de Asuntos Comunitarios y Pastorales de la Faculdade Jesuita de Filosofía e Teología
(FAJE), Belo Horizonte – Brasil. Traducción de Santiago Suarez, S.J.
alabanza y hacían ofrendas voluntarias con la intención de plagas en los campos de cultivo, la peste y el terremoto (Am
agradar a Dios; sin embargo, Dios mismo desautorizaba todo 4,6-11) deberían llevar al pueblo a reflexionar y convertirse de
eso ironizando: “ya que es eso lo que les gusta, israelitas”; en sus malos pasos y, principalmente, de la injusticia cometida
otras palabras: “Ustedes están felices con ese culto que yo contra los indefensos.
detesto. ¡Ese tipo de agradecimiento no me agrada!”.
Sin embargo, hay una constatación se repite después de
¿Cuál es el motivo del rechazo divino del culto celoso de cada experiencia de sufrimiento y de muerte: “¡pero ustedes
los fieles? ¿Por qué, en vez de alegrar a Dios, lo molestaba no han vuelto a mí!” La dureza de corazón de los promotores
tanto? La conciencia religiosa del profeta identificaba la diver- de la iniquidad con grandes tormentos para los pobres, im-
gencia entre la fe y la vida, liturgia y justicia, comunión con pedía que se dieran cuenta de la inutilidad del culto prestado
Dios y respeto al prójimo, como origen de la corrupción de la a Dios.
religión. La manera como eran tratados los más débiles de la
La falta de determinación para volver al buen camino de
sociedad no correspondía con las exigencias de la fe. Amós,
la justicia y de la misericordia llevó a Dios a enfrentarse con
hablando en nombre de Dios, denunciaba sin medias tintas a
su pueblo. “Prepárate a enfrentarte con tu Dios, Israel” (Am
los ricos piadosos:
4,12). Quien no escucha a Dios hablando por la boca de sus
“venden al justo por dinero y al pobre por un par profetas y por los “signos de los tiempos”, ¡qué se cuide!
de sandalias; pisotean sobre el polvo de la tierra
Lejos de considerar el COVID-19 como un castigo divi-
la cabeza de los débiles y desvían el camino de
no, siguiendo a Amós, sospecho que podría servir de alerta
los humildes; el hijo y el padre tienen relaciones
en este momento de la historia, donde el dios dinero genera
con la misma joven, profanando así mi santo
corazones insensibles frente a los empobrecidos y margina-
Nombre” (Am 2,6-7);
dos, frente a los migrantes y refugiados forzados, frente a las
“ustedes, que oprimen a los débiles, maltratan a víctimas de las guerras, del narcotráfico y del tráfico humano,
los indigentes” (Am 4,1); de los nuevos esclavos, de las minorías explotadas y de tantos
otros seres humanos cuyos derechos fundamentales son ne-
“¡opresores del justo, que exigen rescate y atrope-
gados y sus vidas inocentes son segadas. La pandemia, con-
llan a los pobres en la Puerta!” (Am 5,12);
siderada como “signo de los tiempos”, confronta toda la hu-
“ustedes convierten el derecho en veneno y el manidad con la exigencia de encontrar una nueva sabiduría
fruto de la justicia en ajenjo” (Am 6,12); de vida, fundada en la fraternidad, en el cuidado de los mas
“ustedes, los que pisotean al indigente para ha- débiles, en la defensa de los derechos de los pequeños y, como
nos alerta el papa Francisco: en atención a la sostenibilidad
31
cer desaparecer a los pobres del país” (Am 8,4).
de la Casa Común. ¡Todo aquel que se considere discípulo
El profeta tiene conciencia de que injusticia y religión no del profeta Jesús de Nazaret debería sentirse cuestionado de
se casan. Desde allí brotan las palabras duras contra los agen- manera particular!
tes de la maldad y su religión deformada.
Cuidándonos para no caer en las trampas de los falsos
Las advertencias del profeta se transformaron en pala- profetas, somos ahora más que
bras muertas. “Busquen el bien y no el mal, para que tengan nunca convocados a escuchar
vida” (Am 5,14), “aborrezcan el mal, amen el bien, y hagan la voz lúcida de los científicos,
triunfar el derecho en la puerta” (Am 5,15), “que el derecho
La pandemia, considerada
de los líderes sociales, políticos
corra como el agua, y la justicia como un torrente inagotable” y religiosos, de los pensadores como “signo de los
(Am 5,24), son llamadas de atención que indican el camino y de aquellos que nos ayudan tiempos”, confronta toda
para vivir la fidelidad a la fe de los padres. Como la injusticia a atravesar con determinación la humanidad con la
se mantuvo intacta, no tuvo mas alternativa que anunciar el estos tiempos sombríos y dra- exigencia de encontrar
fin de una sociedad opuesta al proyecto de Dios. “Así mori- máticos. La voz lúcida de los
rán por la espada todos los pecadores de mi pueblo, esos que
una nueva sabiduría
verdaderos profetas tiene una
decían: “No se acercará, no nos sucederá la desgracia” (Am impostación peculiar: como de vida, fundada en la
9,10). en otros tiempos lo hizo la de fraternidad, en el cuidado
Amós tenía certeza de haber sido elegido y enviado para Amós, ella nos invita a discer- de los mas débiles, en la
hablar en nombre de Dios. “El Señor me sacó de detrás del nir - en las entrelíneas de esta defensa de los derechos
terrible pandemia - la voz de
rebaño y me dijo: «Ve a profetizar a mi pueblo Israel»” (Am de los pequeños y,
7,15). Ese hecho marca el inicio de una misión cumplida a Dios que nos llama a ser más
humanos, más fraternos y más como nos alerta el papa
pesar de la intolerancia y la persecución. Sin embargo, se daba
solidarios. En una palabra: Francisco: en atención a la
cuenta de como Dios advertía al pueblo y llamaba a la con-
versión de una forma diferente: sirviéndose de calamidades ¡cuidar mejor a los pobres, sus sostenibilidad de la Casa
que afectaban a todos sin excepción. El hambre, la sequía, las hijos predilectos! Común
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32
La PANDEMIA y la
manifestación de lo
HUMANO
Clovis Salgado Gontijo1
Frente al desafío de reflexionar filosóficamente so- El ser humano no se reduce a lo que lo convoca aquí
bre el contexto complejo de esta pandemia, decidimos y ahora. Como señala Kant, en la Crítica de la facul-
abordarlo desde un ángulo común a todos, a saber, tad de juzgar (§ 76, 77), nuestro entendimiento es capaz
su dimensión antropológica. En 1962, la filósofa nor- de distinguir, de manera singular en el conjunto de los
te-americana Susanne K. Langer publica, bajo el título seres, entre “realidad” y la “posibilidad”. Tal capacidad
Philosophical Sketches, una serie de ensayos en los que es resaltada por el neokantiano Ernst Cassirer, como
presenta los rasgos más distintivos y constitutivos del ser crucial para su concepción de las formas simbólicas,
humano, fundamentales para el análisis de cuestiones recibida y re-elaborada por Langer. No sólo es preciso
como el conocimiento, el lenguaje, el símbolo, la civi- distinguir esos dos niveles, sino también transitar por
lización y su crisis. Curiosamente, en estos tiempos de ambos para ser auténticamente humanos. Como dice la
pandemia que hoy experimentamos, podemos recono-
cer algunos de esos rasgos en nosotros mismos.
filósofa, “necesitamos vivir en la estructura conceptual 33
de un mundo mayor que el medio ambiente que percibi-
En primer lugar, todos sabemos que vivimos una mos sensorialmente”2.
experiencia probablemente inédita en la historia de Trayendo esas palabras para la experiencia de confi-
la humanidad: el aislamiento simultáneo de diversas namiento, constatamos que no ocupamos las horas de
poblaciones alrededor del globo. Para enfrentar tan- espera y de temor solamente con las noticias acerca de
tas horas de forzada reclusión también se encuentran a los hechos concretos. Muchos de nosotros sólo nos hace-
nuestro alcance herramientas inéditas, proporcionadas mos capaces de soportar
por los medios digitales. En la relación con tales medios algunas de ellas (como
se hacen evidentes, obviamente, elementos de nuestra aquellas vehiculizadas
identidad humana. Pensemos, por ejemplo, en el caso por la prensa), abaste-
de una video llamada, en la cual expresamos nuestra Para enfrentar tantas
ciéndonos de fuentes
humanidad por el uso de un refinado instrumento del horas de forzada reclusión
relacionadas con lo que
lenguaje. Sin embargo, cuando interactuamos virtual- Langer y Cassirer com- también se encuentran
mente con alguien que está del otro lado del mundo, prendieron como campo a nuestro alcance
todavía estamos respondiendo, gracias a nuestra percep- simbólico. Es en él que herramientas inéditas,
ción ampliada por la tecnología, a estímulos “presentes” se encuentran el mito, la proporcionadas por los
sobre los cuales podemos actuar y reaccionar, capacidad religión, el arte, la filo- medios digitales. En la
que también muchos animales poseen en algún nivel. sofía, y también las for- relación con tales medios
se hacen evidentes,
1 Profesor del Departamento de Filosofía de la Faculdade Jesuita de Filosofía e 2 Langer, Susanne (1971): “En- obviamente, elementos de
Teología (FAJE), Belo Horizonte – Brasil. Artículo publicado el 05/05/20 en ht-
tps://www.faculdadejesuita.edu.br/artigo/a-pandemia-e-a-manifestacao-do-huma-
saios filosóficos”. Tradução revista
por: José Paulo Paes. São Paulo:
nuestra identidad humana
no-05052020-145120 Traducido al español por Raúl Santiago Suárez Delgado, S.J. Cultrix, p. 119.
el cultivo de las formas
simbólicas en estos mulaciones científicas. y religiosas, podría indicar una amplitud del “mun-
tiempos de pandemia, en Pero, ¿cuál sería la con- do” humano. En vez de mero devaneo de individuos
particular de las artísticas tribución de los sím- alienados que esquivan su compromiso político, como
y religiosas, podría indicar bolos? En este tiempo ironizó Nietzsche en una fase algo susceptible a los
una amplitud del “mundo” pascual, por ejemplo, encantos musicales (El viajero y su sombra, § 167), el
humano. En vez de mero aunque no contemos arte (y también la espiritualidad) vehiculizaría conoci-
devaneo de individuos con la figura de Cristo miento valioso e insustituible “sobre” nosotros, “sobre”
resucitado delante de los contenidos y los ritmos de nuestros sentimientos.
alienados que esquivan su
nosotros, la narración Esa posibilidad de expresar algo al respecto del mun-
compromiso político evangélica de los dis- do (externo o interno) es otro atributo específicamente
cípulos de Emaús (Lc humano.
21,13-35) favorece una
Es válido resaltar que, al oír o al interpretar una
aurora • año 2020 • Nº 2
aproximación a la pre-
pieza musical, al leer
sencia, al mismo tiempo patente y evanescente, de lo
una novela, al pre-
divino en nuestras vidas. En el caso del arte, la escucha
senciar un ballet y al
del Magnificat, de J. S. Bach, sea en vivo o reproduci- Es válido resaltar que, al oír
adoptar una práctica
da, no precisa conducirnos a acción específica alguna,
de meditación no sólo o al interpretar una pieza
ni siquiera a rezar, ya que su apreciación no está limi-
nos alejamos de los es- musical, al leer una novela,
tada a oyentes cristianos o religiosos. No obstante, el
tímulos concretos que al presenciar un ballet y
primer movimiento de dicha obra musical nos permite
nos incitan a la acción al adoptar una práctica
“visualizar” fuera de nosotros un sentimiento conta-
inmediata, sino tam- de meditación no sólo nos
gioso de júbilo, que desborda las posibilidades expresi-
bién nos aproximamos
vas de las palabras. Por lo tanto, podríamos brevemen- alejamos de los estímulos
a otros momentos de
te concluir que los símbolos propician “concepciones”
nuestra historia. Cons- concretos que nos incitan
de las cosas, que, al mismo tiempo, participan activa- a la acción inmediata, sino
tatamos, empleando
mente del modo como las aprendemos. también nos aproximamos a
una imagen de Lan-
34 Una contribución relevante de Langer, hoy un
poco olvidada en el medio filosófico, se encuentra en
ger, que cada uno de
nosotros es como una
otros momentos de nuestra
historia. Constatamos,
la extensión de nuestras concepciones y formas arti- hoja compartiendo un empleando una imagen de
culadas más allá del ámbito de la razón y del lenguaje mismo tronco. No es- Langer, que cada uno de
discusivos (en los cuales “enfilamos” ideas). También tamos solos y la con- nosotros es como una hoja
concebimos por narrativas místicas, por sacramentos ciencia de un pasado
compartiendo un mismo
religiosos, por obras de arte, que implican otro proceso que nos constituye es
de abstracción, por los cuales establecemos analogías, exclusivamente huma- tronco
sobre todo, con nuestras experiencias interiores. De na. Delante de nuestros
manera sugerente, en estos momentos en que nuestra instrumentos musica-
relación con el mundo exterior se hace más estrecha, les, parlantes, libros y
buscamos recursos pertenecientes a la dimensión sim- pantallas, recurrimos hoy a un legado que nos nutre,
bólica, en sus diversas manifestaciones. De este modo, como savia, posibilitándonos vislumbrar algo de una
cabría cuestionar la célebre proposición de Wittgens- humanidad intangible.
tein, “los límites de mi lenguaje significan los de mi
La presente crisis nos conecta a los hombres y mu-
mundo” (Tractatus logico-philosophicus, 5.6), en el caso
jeres del presente con los del pasado. Tenemos en co-
que el término “lenguaje” se restrinja al lenguaje dis-
mún valores y ansias que también quedan en eviden-
cursivo. Más en consonancia con Langer, el confina-
cia con esta pandemia. Para traducir tales contenidos
miento nos muestra que son los límites (tal vez ilimita-
impalpables del espíritu humano recurrimos, una vez
dos) de mi repertorio simbólico los responsables por el
más, a formas simbólicas. Muchos de nosotros nos
delineamiento de mi mundo.
conmovimos frente de la proyección que, en el Do-
Así, el cultivo de las formas simbólicas en estos mingo de Pascua, vistió de médico al Cristo Redentor
tiempos de pandemia, en particular de las artísticas en Río de Janeiro. En aquel símbolo, se materializó
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TERROR
36
Pablo Mella, S.J.1 protocolos para organizar la oración y la práctica de fe llamó “ejerci-
cios espirituales”. Estos protocolos vienen tejidos con “reglas de dis-
cernimiento” que ayudan a distinguir entre experiencias religiosas
No todo el que me diga “Señor, Señor”, engañosas y experiencias religiosas auténticas. La expresión “ejercicios
entrará en el Reino de los Cielos espirituales” ya había sido utilizada en la filosofía griega, pero ahora
(Jesús de Nazaret, Mt 7, 21) adquiría un significado novedoso.
Esta tradición espiritual resulta preciosa en estos momentos en que
San Ignacio de Loyola, maestro espiritual reconocido de la el terror de la pandemia propicia manifestaciones religiosas que pue-
Iglesia católica, hizo uno de los más grandes aportes para la den resultar dañinas no solo a las personas que las proclaman, sino
encarnación de la vida cristiana en nuestros días. Su pedagogía también al conjunto de la sociedad sedienta de buenas noticias mi-
se centró en enseñar a orar con “modo y orden”, conceptos lagrosas.
que aprendió de los estudios tomistas que realizó en la Uni-
versidad de París. En buena medida, esta pedagogía consistió Por qué hacer “ejercicios espirituales”
en ofrecer protocolos de oración para hacer más razonable la
fe, no dejándose llevar por fáciles sentimentalismos. A esos La idea subyacente a la propuesta de hacer ejercicios espirituales puede
explicitarse con una analogía bien simple. Así como el cuerpo necesita
ejercicios físicos para estar en forma, la vida espiritual necesita deter-
1 Profesor del Instituto Superior Bonó, Rep. Dominicana.
minadas “calistenias” o rutinas reflexivas para responder o ético, pues la razón se refiere tanto a lo teórico como a
coherentemente a la voluntad de Dios, revelada en la vida lo práctico. El fideísmo ha sido declarado como doctrina
y enseñanzas de Jesús de Nazaret. Otra analogía pue- no válida por la Iglesia católica (Denzinger, Enchiridion,
de ayudarnos a entender el propósito de tales ejercicios 10ma. ed., núms. 553-570; Conc. Vat. I, Const. Apostólica
espirituales: solo escribe bonito quien ha hecho mucha Dei Filius, cap. IV). La Iglesia católica, siguiendo a Tomás
caligrafía. La caligrafía es un medio para mejorar la le- de Aquino, ha entendido que razón y fe son las dos alas con
tra, no un fin. Lo importante es llegar a escribir bonito las que debe volar todo creyente cristiano (ver Juan Pablo
(kallós (bello), graphia (escritura); pero para ello hace fal- II, Fides et ratio, introito). Con otro vocabulario, el mismo
ta ejercitarse una y otra vez, comparando los productos Jesús de Nazaret condenó el fideísmo cuando expresó que
del ejercicio con el modelo de letra que se propone. Así, no todo el que le llame machaconamente “Señor, Señor…”
en los ejercicios espirituales se repiten entra inmediatamente en la dinámica
imaginativamente diversas escenas en de lo querido por el Dios vivo y ver-
las que uno se ve envuelto con vistas Así como el cuerpo dadero.
a reconocer los sentimientos que es- necesita ejercicios físicos De la Devotio Moderna se derivó una
tas escenas producen. A seguidas, se para estar en forma, la espiritualidad que bien puede denomi-
identifican las reacciones que esos
vida espiritual necesita narse “fraternidad de la vida común”,
sentimientos nos provocan y se compa-
determinadas “calistenias” como se llamaron las comunidades que
ran estas reacciones con la manera en
o rutinas reflexivas para se fundaron en aquellos siglos al calor
que Jesús actuó. Gracias a esta caligra-
responder coherentemente del movimiento de renovación espi-
fía espiritual, una persona cristiana aca-
a la voluntad de Dios, ritual nacido en los Países Bajos. Más
bará por darse cuenta que no todas sus
revelada en la vida y que buscar grandes signos en el cie-
reacciones religiosas expresan conve-
enseñanzas de Jesús de lo (Hch 1, 11), actitud ya denunciada
nientemente la voluntad de Dios. Podrá
como falso cristianismo en los mismos
aquilatar las motivaciones ocultas a las Nazaret
evangelios (Mt 24, 23-24), se trata de
que responde su conducta y ponderar
encontrar la voluntad divina en la vida
el resultado final que se obtiene con
ella.
ordinaria. Según esta espiritualidad, la
vida de todos los días está repleta de signos divinos que nos
37
Los ejercicios espirituales de san Ignacio se inscriben en llevan a preguntar qué debemos hacer, tomando en cuenta
la corriente espiritual denominada Devotio Moderna. al mismo tiempo las grandes potencialidades de nuestra
Este movimiento de renovación eclesial de la Baja Edad inteligencia y los límites de nuestras capacidades e ini-
Media se caracterizaba por su objetivo general: poner algo ciativas.
de racionalidad en la propia experiencia de fe, haciendo de
Como tarea espiritual queda entonces recorrer un cami-
la vida ordinaria un espacio de encuentro con Dios. Dios
no parecido al que recorrió Jesús en las tentaciones del
ha de buscarse “en todas las cosas”, en el día a día. Entre
desierto (Mt 4, 1-11; Lc 4, 1-13). Según el testimonio de
sus estrategias fundamentales se encontraban conectar con
Jesús, Dios no nos mandará ángeles del cielo para que no
las nuevas preguntas teológicas que traía la irrupción de la
nos tropecemos con la dureza de la vida terrenal. Dios
ciencia moderna y cuestionar el sacramentalismo litúrgi-
nos manda más bien a asumir nuestras vidas esperanzados,
co que había marcado la fe católica desde el siglo XIII,
preguntándonos de todo corazón ¿dónde está tu hermano?,
sobre todo en torno a la adoración del Cuerpo de Cristo
¿quién es tu prójimo?
en la hostia consagrada. Entendía que un devocionismo
litúrgico exagerado o irracional amenaza en su raíz la res-
ponsabilidad moral de los cristianos, la santa libertad res- El Dios de Jesús no es sádico
ponsable querida por Dios. La imagen de un Cristo mágico La primera tentación que tenemos en estos tiempos de
nos hace buscar en un cielo espectacular a quien nos invita a pandemia que nos aterroriza es considerar a Dios como
encontrarlo resucitado en el hermano solo y desamparado un ser sádico. Este es el archiconocido Dios castigador, el
(Mt 25, 31-46). que esperaba Juan el Bautista (Lc 3,7) y al cual se opuso
Se conoce como “fideísmo” la doctrina filosófica y teológica Jesús. Según esta concepción muy extendida, que podría
según la cual se llega a Dios renunciando al uso de la razón encontrar eco en muchos pasajes del Antiguo Testamento,
tanto en el dominio teórico como en el dominio práctico Dios ha mandado el coronavirus para castigar a la humani-
dad por sus pecados. Suponiendo las imágenes dantescas ro por el don del Espíritu en el bautismo (Lc 3, 21-22),
del juicio final, su objetivo sería humillar al ser humano Jesús fue tentado sobre su “ser hijo de Dios”. En un mo-
para que vuelva su corazón hacia Dios. mento místico, Jesús había sentido profundamente que
Dios es Padre y que todos los seres humanos somos sus
Esta imagen de Dios castigador tiene como trasfondo un
hijos y por tanto hermanos. De esto él no tenía ninguna
ser celoso, egocéntrico y distante. Desde su trono celestial
duda. Pero se dio cuenta de que esta convicción profun-
este dios envía “avispas que te piquen” para mostrar a
da no le ahorraba la responsabilidad de discernir cómo
la humanidad que es él quien tiene el poder absoluto y
debía ser hijo de Dios. Dicho de otra manera, ser hijo
que lo ejerce como le viene en gana, sin rendir cuentas
de Dios no se le mostraba como un estatus adquirido
a nadie. Este dios no dialoga, escarmienta maquiavéli-
sino como un modo de caminar en la vida a la luz de la
camente y ejecuta justicieramente sin parpadear.
palabra que Dios nos dirige.
A este Dios sádico solo se le puede rezar “pidiendo cacao”,
La primera de las tentaciones que Jesús enfrentó fue la del
aurora • año 2020 • Nº 2
40
CONFIAR
COMO LOS NIÑOS
Rivaldave Paz Torquato, O. Carm 1
Desafiado por la “noche oscura” causada por el CO- señal de la presencia de este mismo Dios para su pueblo
VID-19 comencé a pensar en escenas bíblicas que pu- y vencieron a los madianitas (8,22).
dieran ayudarme a pasar esta noche. Las escenas que me
Agar, la egipcia, cuando descubrió su embarazo con
vinieron a la memoria no son mágicas ni van resolver la
Abraham (Gn 16) comenzó a despreciar a Sara, su se-
epidemia, pero pueden ayudar a enfrentar la obscuridad
ñora (vv. 4-5). Sara decidió defenderse y “ la maltrató de
de forma más serena. Pensando de esta forma, tengo la
tal modo que ella huyó de su presencia” (v. 6b). Agar fue
“osadía” inocente y modesta de compartirlas.
encontrada por el ángel del Señor en el desierto (v. 7),
En el contexto de sufrimiento impuesto a los israe- la interpeló sobre sus andanzas y ella respondió: “Huyo
litas por los madianitas (Jz 6, 1-7), el ángel del Señor se
le apareció a Gedeón, que “estaba sacudiendo el trigo
de la presencia de mi señora Sarai” (v. 8). El ángel le dijo
que regresara y agregó: “Estás embarazada y darás a luz
41
en el lagar” (v. 11), y le dice: “El Señor esté contigo, ¡va- un hijo, y tú le darás el nombre de Ismael, pues el señor
liente guerrero!” y Gedeón respondió: “Si el Señor está escuchó tu aflicción” (v. 11). Ahora, en hebraico, Ismael
con nosotros, ¿por qué nos ha ocurrido todo esto?” (Jz significa “Dios oye (u oirá)”. Es lo que el mismo verso
6,12-13). Este valiente guerrero se sintió abandonado explica: “pues el Señor oyó tu aflicción”. Curiosamente,
por Dios (v. 13b). El escepticismo de Gedeón es existen- el texto no dice en ningún momento que Agar se dirigió
cial, humano y actual. a Dios y le expresó su súplica. Ella estaba emprendiendo
¿Cómo creer en algo una fuga, afligida, en el desierto y en pleno embarazo.
Desafiado por la “noche que la realidad niega? Es una mujer, esclava y extranjera (v. 3). Pero el texto
oscura” causada por el Gedeón, en segui- afirma que Dios oyó su aflicción. Y Agar dio a Dios el
COVID-19 comencé a da, dialogó con Dios nombre de “Tu eres El-Roi”, esto es, “Tu eres el Dios
pensar en escenas bíblicas (vv. 14-23) y le pidió que me ve” (v. 13). La escena deja claro que Dios no sólo
que pudieran ayudarme una prueba (vv. 36- ve el drama humano, sino que también acoge la súplica
a pasar esta noche. Las 40). Era de noche (vv. no verbalizada, no expresada. Esta escena nos remite a
25.40) Pero Gedeón otra en el Nuevo Testamento.
escenas que me vinieron a
fue madurando y, de
la memoria no son mágicas En una ciudad llamada Naín, Jesús “al aproximarse a
escéptico, se dejó en-
ni van resolver la epidemia, la puerta de la ciudad, coincidió que llevaban a enterrar
viar y se convirtió en
pero pueden ayudar a un muerto, hijo único de una madre viuda…El Señor,
enfrentar la obscuridad de
forma más serena 1 Profesor titular en el departamento de Teología de la Faculdade Jesuita de Filosofía e Teología (FAJE), Belo Ho-
rizonte – Brasil. Artículo publicado el 27/04/2020 en https://www.faculdadejesuita.edu.br/artigo/confiar-como-as-crian-
cas--27042020-101228 Traducido al español por Rodrigo José Pinto Escamilla.
al verla, sus entrañas se conmovieron” (Lc 7,12-13). Él lectura es reafirmada en Hch 7,9: “Dios estaba con
despertó al joven y se lo entregó vivo a su madre (vv. él”. Por tanto, Dios no se ahorra la aflicción de José,
14-15). En ningún momento de la escena esta mujer sino que lo asiste en ella. El pozo no es sólo lugar de
abrió la boca. Ella estaba tomada por el dolor y por su sufrimiento, sino también de la asistencia inefable de
esperanza muerta. Por cierto, un elemento característi- Dios. La narrativa transparenta la forma misteriosa de
co del género de milagro de curas, en la cual el caso se ser de la divinidad. Cuando parece que él no viene
encuadra, es la súplica del(los) interesado(s). Elemento para auxiliar, él ya está ahí. No espera la verbalización
completamente ausente de la escena. Pero el drama de de la súplica. Nuestros ojos no están entrenados para
la madre toca a Jesús que se adelanta y lo acoge como percibir eso en nuestro día a día. El autor del libro de
petición no verbalizada, como súplica muda. El cla- Sabiduría percibe la presencia de Dios en el pozo de
mor mudo y silencioso es visto y escuchado por Jesús. aquél vendido, siglos después.
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José de Egipto, a los diecisiete años, provocó a sus Esta sabiduría se convirtió en proverbio en el AT:
hermanos con sus sueños, que fueron entendidos como “Beba cada uno del agua de su propio pozo!” (II Rs
expresión del deseo de superioridad sobre ellos, y tam- 18,31; Is 36,16; cf. Pr 5,15). Dicho de otro modo: es-
bién gozaba de la predilección del padre (Gn 37, 2-11). temos atentos para percibir a Dios en nuestro propio
Estos elementos desencadenaron el celo y el odio de sufrimiento, en nuestra propia inseguridad, en nuestra
los hermanos a tal punto que no podían más hablarse propia noche oscura. Y, si se levantan los ojos más allá
amigablemente (v. 4). El odio creció (vv. 4.5.b.8b.). Los de sí mismo, se percibirá su presencia en los pozos de
hermanos tomaron una decisión radical: “matémoslo, las UTI’s (Unidades de Tratamiento Intensivo), en los
arrojémoslo en un pozo cualquiera “(v. 19). En segui- agentes de salud, en los que trabajan en los servicios
da, “se arrojaron contra él y lo lanzaron al pozo. Era esenciales, etc. Lugares y personas bastante golpeados
un pozo vacío, donde no había agua” (v. 24). Después últimamente. Ahora, mirando de forma más profun-
cambiaron de idea y terminaron por vender a José a los da, ¿Qué hizo Jesús en su encarnación sino bajar al
comerciantes (vv. 27-28) y así él fue llevado a Egipto pozo humano?
42 (v. 38). Más tarde los hermanos confesaron: “vimos su
aflicción cuando él nos rogaba, y no lo oímos” (42,21).
La experiencia fundante y paradigmática del Dios
de Israel no fue hecha en el templo, ni en el culto, sino
El propio José se refiere a Egipto como “tierra de su
en la fuga de Egipto, en el éxodo. El profeta Amós re-
aflicción” (41,52). De este drama familiar y humano
toma esta experiencia con una pregunta retórica: “¿qué
emerge otra vez la pregunta: ¿Dónde estaba Dios? Dios
acaso me ofreciste sacrificios y ofrendas en el desierto
no impidió el conflicto, no impidió el pozo, no impi-
durante cuarenta años, oh casa de Israel?” (Am 5,25).
dió la venta, no impidió la ida para Egipto, no impi-
Ni por eso, Israel dejó de ser alimentado y asistido por
dió la condición de esclavo ahí, nada hizo. Es un Dios
su Dios.
inerte que nunca llega y, cuando llega, viene siempre
atrasado. Por otro lado, el texto no registra ninguna Elías eliminó los falsos profetas (I Rs 18,40) y esto
expresión religiosa de José. No hay aparición del ángel le costó la persecución de muerte por parte de la reina
a José, no hay cualquier súplica o rito de su parte, el Jezabel (I Rs 19,2). “Viendo esto, Elías se levantó y
pozo no es espacio sagrado, no ocurre milagro, nada partió para salva la vida” (v. 3). En el desierto él pidió
sensacional. El José del pozo es un hombre en silen- la muerte (v. 4). Apareció un ángel del Señor que no
cio o silenciado. El narrador no le da más la palabra aseguró el fin de la persecución, pero lo asistió y le avi-
hasta la prisión en Egipto, ni siquiera para dirigirse a só que “el camino sería muy largo” (vv. 5.7). El profeta
Dios. Sin embargo, el libro de Sabiduría retoma este se dirigió al monte Horeb y se escondió en una gruta
episodio y afirma que la sabiduría divina, Dios en su donde pasó la noche (vv. 8-9). Dios vino a su encuen-
atributo, “no abandonó al justo vendido, sino que […] tro no por las vías convencionales (huracán, el terre-
bajó con él al pozo” (Sb 10,13-14). Más tarde, como moto y el fuego), sino en una brisa suave (vv. 11-13),
esclavo en la casa de Putifar, todo lo que él hacia pros- esto es, de una forma nueva. Ocasión que el profeta
peraba “porque Dios estaba con él” (Gn 38, 2-3). Esta no perdió. La narrativa es clara en mostrar que Elías
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hace su experiencia de Dios en la fuga, en el miedo, en para ayudarnos a crecer y organizar un mundo y las
el desierto, en la noche oscura y no en el templo o en relaciones de un nuevo modo?
una liturgia.
Por otro lado, el profeta Isaías habla de “un Dios
En la escena de los discípulos de Emaús, Jesús resu- que se esconde” (Is 45, 15) y que debe ser “buscado”
citado hizo todo el camino con ellos sin ser reconocido (Is 55,6). El tema de la “búsqueda” de Dios aparece en
(Lc 24, 1-29). El texto deja claro que el Cristo resuci- varias ocasiones (p. ex.: Dt 4, 29; Jr 29, 13-14; II Cr
tado no reconocido no significa un Cristo muerto, el 15, 2 etc.). Este tema no sólo apunta para el misterio
Cristo no percibido no significa un Cristo ausente. de lo inefable y que quiere ser buscado como un padre
que se esconde para que el hijito tenga la alegría del
En el texto joánico, Magdalena fue al sepulcro de
encuentro. Es también un modo de decir que Dios no
madrugada para vivir y procesar su luto, movida por
se deja cristalizar, congelar, fosilizar en conceptos, en
una ausencia que dolía. Aún mantenía la esperanza de,
el corazón y en la mente del creyente. Por eso no tole-
por lo menos, estar cerca de los resquicios de la presen-
ra imágenes. Él es dinamismo y necesitamos rehacer,
cia del maestro, el cuerpo. No lo encuentra y entiende
actualizar la visión que tenemos de Él. Si la visión de
que él fue robado de ahí (Jo 21, 1-2). El discípulo ama-
Dios que tenemos de “oídos”, que heredamos del pasa-
do fue a la tumba, la encontró vacía y el evangelista
do (tradición), no nos ayuda a “verlo” en el momento
afirma que “él vio y creyó” (v. 8). Es el desafío de la fe:
presente (experiencia), entonces no cumple su papel,
ver la presencia del resucitado en la aparente ausencia,
necesita hacerse de nuevo. ¿No es eso que nos enseña
en el vacío. En seguida, Magdalena encontró a Jesús
el hombre de la tierra de Uz (Job 1,1) cuando dice:
resucitado y pensó que era el jardinero (v. 15). Otra
“Te conocía sólo de oídas, ¿ahora te vieron mis ojos”
vez, como en Emaús, no reconocer a Aquél que vive en
(Jó 42,5)?
las madrugadas de la vida no signifi-
ca que él esté muerto o ausente. El pozo era aún la imagen del
exilio para donde el pueblo fue
Regresando al episodio de José, Pero el momento, sin
llevado: “Para que me destruye-
no es oportuno preguntarnos por el
“¿por qué?” de todo eso. La búsqueda
asambleas, sin misas,
sin eucaristías, etc.,
ran, me lanzaran en el pozo” (Lm 43
3,53). Israel se quedó sin templo
por una causa o razón nos lleva para nos fuerzan a repetir y
y sin altar. ¿Cómo hacer sus sa-
atrás y fácilmente nos puede empujar recordar lo obvio. Por crificios? El libro de Daniel es
para el moralismo. Es momento de cierto, tenemos ahí una una obra tardía, pero el autor la
mirar para adelante y preguntarnos ocasión, que no podemos sitúa en el período del exilio (cf.
por el “¿para qué?”, por una finali- perder, de evaluar nuestra Dn 1,1-2). En el canto de Aza-
dad. ¿Será que a los ojos de Dios no visión de Dios y nuestras rías, conservado en la tradición
está una invitación paterna para ver formas de relacionarnos griega, se describe el drama del
el mundo y las relaciones de otra for- con él, nuestras prácticas. pueblo en estos términos: “No
ma? José de Egipto, consiguió mirar Él está en las Iglesias, hay más en estas circunstancias,
los hechos con los ojos de la fe. Eso
pero está también en ni jefe, ni profeta, ni príncipe, ni
le permitió ver la mano de Dios pre-
los pozos de la vida. Es holocausto, ni sacrificio, ni obla-
sente en los acontecimientos y trans-
ocasión para redescubrir ción, ni incienso, ni lugar donde
formar la venta en un envío, la des-
el valor de la solidaridad, ofreceremos las primicias delante
gracia en gracia (Gn 45, 5-8; 50,20)
de la complicidad con de ti” (Dn 3,38). Significa que
y, a partir de esto, consiguió rehacer
el semejante, de la el aparato político-religioso esta-
las relaciones. ¿Será que Dios, que
obviamente no causó esta catástrofe
responsabilidad con la ba desmontado. El exilio fue la
como no causó el pozo de José, no se
casa común, etc. gran noche oscura de Israel. Sin
embargo, una de las noches más
serviría de todo esto en su pedagogía
fecundas, que le permitió a Israel
reencontrarse consigo mismo, re-
encontrar a su Dios y purificar la visión que tenia de Yo era pequeño, ni me acuerdo
él. Zacarías, releyendo el hecho, escribe: “Aunque en Sólo recuerdo que, en la noche, al pie de la cama
cuanto a ti, debido a la sangre de tu alianza, liberé a Juntaba las manitas y rezaba apresurado
tus cautivos del pozo en que no había agua” (Zac 9, 11) Pero rezaba con alguien que me ama
Estas escenas bíblicas enlistadas hasta aquí me pro-
Jesús, en su sabiduría, decía: “aquél que no recibe
vocan dos conclusiones inmediatas. La primera es que
el Reino de Dios como un niño, no entrará en él” (Mc
nuestras formas convencionales de alimentar nuestra
10,15). El maestro tiene a los niños como modelos.
fe y hacer la experiencia de Dios, nuestras prácticas
Ellos no están preocupados con las formas de expre-
religiosas, más exactamente, nuestras liturgias, nues-
sión de la fe, con nuestras prácticas religiosas. Ellos
tro culto organizado, nuestros ritos, nuestros espacios
simplemente rezan de forma sincera, con pureza de
sagrados, etc., son esenciales, son de mucha importan-
corazón. Más aún, el trazo común y elemental que ca-
aurora • año 2020 • Nº 2
retornar a una normalidad demia. Ser solidarios en una circunstancia como esta
orquestada sobre la base es tener sentido de humanidad. Cuidarnos y no arries-
de relaciones políticas más gar la vida propia ni las de los demás asumiendo la
democráticas y fecundas cuarentena y las recomendaciones médicas con res-
ponsabilidad y conciencia colectiva es parte de ese ejer-
cicio. Pero, además, comprender que una pandemia no
se derrota individualmente, sino con una articulación
No podríamos perder más tiempo. Este pandemó- social e institucional que oriente todos los esfuerzos en
nium está en marcha y nos sorprendió a todos. For- una sola dirección, para sumar intensidad y eficiencia.
talecer las capacidades asociativas y los ejercicios ciu- Las redes de solidaridad para apoyar a personas con
dadanos serán claves para relanzar sistemas políticos, mayor vulnerabilidad son vitales para nuestra demos-
económicos y sociales de cara al futuro inmediato que tración de humanidad y supervivencia. Además, todo
se abrirá a partir de la post-pandemia. Mientras más lo que signifique aupar y apoyar el trabajo de miles y
50 rápido tomemos conciencia de ello, más prontamente
podremos retornar a una normalidad orquestada sobre
la base de relaciones políticas más democráticas y fe-
cundas. Lo contrario sería contribuir el caos actual y
el desmembramiento de la institucionalidad democrá- La solidaridad es la otra clave
tica mínima. El pandemónium existe, hay que recono- vital frente a la pandemia.
cerlo, pero hay que actuar para superarlo en el menor
Ser solidarios en una
tiempo posible.
circunstancia como esta es
Y para ello, sin la verdad acuciosa y científica es tener sentido de humanidad.
difícil combatir la pandemia. Cuando los gobiernos Cuidarnos y no arriesgar la
intentan sacar provecho político o simplemente afian- vida propia ni las de los demás
zar la propaganda en su manejo estratégico de la si- asumiendo la cuarentena y las
tuación, corremos muchos más riesgos. Ocultar infor- recomendaciones médicas con
mación, tergiversarla o manipularla termina siendo un responsabilidad y conciencia
boomerang contra la población misma. El coronavirus colectiva es parte de ese
es real y está matando gente a una enorme velocidad. ejercicio. Pero, además,
En medio de ello, observamos cualquier cantidad de comprender que una pandemia
teorías conspirativas que terminan desinformando y, no se derrota individualmente,
en algunos casos, bajando la guardia necesaria, que los sino con una articulación
sistemas sanitarios y las sociedades deben tener activa- social e institucional que
dos para superar lo más pronto posible la pandemia. oriente todos los esfuerzos en
El gobierno de China, la organización Mundial de la
una sola dirección, para sumar
intensidad y eficiencia
aurora • año 2020 • Nº 2
miles de personas de los sistemas sanitarios de los dife- recuperar una nueva normalidad con nuevas carac-
rentes Estados en la labor que realizan es, sin duda, la terísticas. Más humanidad y menos egoísmo contra
fórmula más adecuada para fortalecer la primera línea la pandemia. A este fenómeno lo venceremos entre
de batalla contra el virus. Pero luego está el trabajo todos, no individualmente. Son muchos los ejem-
de las organizaciones vinculadas a la Iglesia, quienes plos que estamos viendo alrededor del mundo sobre
junto a miles de asociaciones civiles y fundaciones han actividades de solidaridad. Falta ver que la verdad
entretejido diversas redes de solidaridad global, sin pa- ocupe, sin vacilaciones, las agendas de información
rangón, para atender directamente a los sectores más pública para actuar en consecuencia junto a las re-
vulnerables agobiados por esta crisis. des de solidaridad. El tiempo apremia.
Sin solidaridad, difícilmente podríamos cantar vic-
toria lo más pronto posible. El ejercicio ciudadano en
clave de solidaridad es vital para la supervivencia de
la civilización actual. Por lo tanto, la ecuación verdad
más solidaridad debemos impulsarla desde todos los
espacios posibles: comunitarios, familiares, institucio-
nales, religiosos y públicos. No puede quedar ninguno
descubierto. Es el verdadero plan que nos permitirá
CLAVE DE 51
SOLIDARIDAD Y
VERDAD