LA ESCUELA DISFUNCIONAL COMO REFLEJO DE LA SOCIEDAD

CAÓTICA

JOSE CELESTINO GARCIA PABON

CONVIVENCIA, CIUDADANÍA Y CULTURA DE PAZ EN LAS IED

III SEMESTRE

DOCENTE

SAMARA ROMERO CABALLERO

CORPORACION UNIVERSIDAD DE LA COSTA

DEPARTAMENTO DE POSTGRADO

MAESTRIA EN EDUCACIÓN

26 MARZO DE 2020
LA ESCUELA DISFUNCIONAL COMO REFLEJO DE LA SOCIEDAD CAOTICA

Es un hecho claro y contundente que la convivencia entre los humanos siempre ha

tenido mucha fricción.¿ Que será los que nos pasa? ¿Por qué la convivencia se torna tan

difícil? ¿Los gobiernos si están haciendo lo propio para poner en práctica todos los

acuerdos firmados nacionales e internacionalmente para vivir en paz? ¿O es que algunos

países necesitan someter a otros seres humanos para ellos poder vivir mejor? ¿La escuela si

está haciendo su cometido de entregar un ciudadano integral a la sociedad o es que solo lo

está preparando para ser parte del andamiaje económico?¿ la institución religiosa con sus

dogmas que tiene siglos de estar calando en las mentes de los ciudadanos ha hecho un

aporte de paz o violencia, o de ambas?¿ estaremos esclavizados como sociedad a vivir en

esta situación?

La educación tiene una promesa de generar una mejor sociedad pero esta se

encuentra cojeando hace rato, su estructura anquilosada no permite que el ser humano

encuentre otro horizonte. Es por eso que el currículo debe ser revisado por personas de

mente abierta que entiendan que no podemos seguir tratando de construir seres humanos

que puedan avanzar hacia una sociedad tecnológica y humanista, con los mismos derroteros

que no nos permiten ver un mejor horizonte.

 A los ojos de todos, está la realidad violenta que nos consume, desde la familia, las

empresas, los colegios etc. La familia ya no es capaz de darles valores a los hijos, la escuela

con sus docentes tampoco atina a generar un nuevo ser humano, el gobierno de muchas

maneras propicia la violencia al no ser justo con sus leyes. A nivel internacional

observamos que los estamentos internacionales encargados de poner orden ya no son

respetados por las grandes potencias, estamos en manos de un mundo unipolar que no le

interesa el bien común, sino el particular.

Hay que caer en la cuenta que este presente abrumador es el resultado de ese pasado

no resuelto de nuestros antepasados que a cada instante nos persigue, es un legado violento

que muchas veces no queremos reconocer. Muchas veces afirmamos que no sabemos qué

pasa, si nuestra educación pasada fue mejor que la actual, éramos más respetuosos, más

educados, pero no podemos negar lo que la realidad actual nos muestra. Mirando el pasado

los hechos violentos son muchos, conquistas, invasiones genocidios; no podemos negar el

pasado si queremos transformar el presente.

Mirando nuestra América la colonización y la conquista fue violenta con los

habitantes autóctonos, ellos fueron desaparecidos violentamente para darle paso a otra

civilización. En nuestro país Colombia los momentos de violencia no han sido pocos,

conquistas, guerras internas, masacres. Esos seres que nos conquistaron trajeron su

violencia del viejo mundo y la enquistaron en la sociedad colombiana.

 Hay que pensar en una nueva sociedad, en una nueva educación, en una nueva

espiritualidad, ellas han sido violentas y por eso el caos actual.

En ese orden de idea debemos hacer una resignificación sobre la violencia y la paz,

la forma como la abordamos, la entendemos y la aplicamos. Nuestro país que siempre ha

estado bañado de sangre ha mostrado en los últimos acontecimientos que el gobierno

anterior realizo un proceso de paz pero una parte de la clase política y económica se opuso

y manipulo a una parte de la población especialmente a la gente religiosa aludiendo que los

acuerdos estaban mal y que se iba a dañar la moral de los niños por unos elementos que

estaban en los acuerdos que hacían alusión al respeto, la convivencia, el libre desarrollo a la

personalidad el enfoque de género etc.

Es así como pudimos ver lo mal que esta la educación y lo fácil que se pueden

manipular las personas por aquellos que tienen en sus manos los medios de comunicación

y el poder económico. Es sabido que dentro de esa manipulación de ideas estos” personajes

de la guerra” nos han metido en la trampa del odio, aludiendo con la frase “si a la paz, pero

así no”. También vimos un senador de la republica afirmando que era preferible ver a esas

personas que delinquieron en la guerrilla en el monte, que sentado en el senado.

A todas luces es un hecho que algunos sectores de la sociedad que ostentan el poder

económico y político, les es más rentable la guerra, que la paz. También hay otro grupo que
nos quiere hacer creer que si se llena a un acuerdo con las guerrillas entraríamos a un

remanso de paz. Todos sabemos que las causales de la violencia no terminan con la entrega

de los guerrilleros y de sus armas de combates. Para que ello tenga un final feliz se necesita

mucha inversión de parte del gobierno en todos los elementos causantes de la guerra.

Para entender mejor este proceso de la violencia traemos a colación a Johan Galtung

(citado en Fisas, 2006), fundador de la investigación para la paz, existen básicamente tres

tipos de violencia: violencia directa, violencia estructural y violencia cultural. Galtung, nos

dice que la violencia directa es aquella que es visible y se concreta en actos de violencia,

guerras, confrontaciones y agresiones, se encuentra sustentada en la violencia estructural y

cultural; los otros dos tipos de violencia ejercen el mismo poder devastador que aquella que

se traduce en acciones agresivas o destructivas. Son violencias silenciosas, a veces casi

imperceptibles ya que son inherentes a las estructuras sociales y culturales e igualmente

generan efectos negativos en el tejido social.

Siguiendo la línea discursiva de Johan Galtung observamos como la violencia

cultural reúne todos esos aspectos que se materializan en la religión, el arte, la ciencia etc.

Ellas pueden ser utilizadas para justificar tanto la violencia directa como la estructural. Los

gobiernos pueden utilizar esa violencia con los símbolos como las banderas, los himnos, los

desfiles militares etc. De la misma manera las religiones tienen una gran carga de violencia

con sus dogmas e imposiciones, algo difícil de erradicar por lo que la escuela siempre ha

sido colonizada por ellas desde antaño.

 Es así como todos los estamentos de los gobiernos ejercen la violencia en sus

ciudadanos y ellos de la misma manera lo ejercen en la familia, centros educativos,

localidades religiosas etc. Es toda una cadena de violencia en donde todos están

involucrados y a la vez son cómplices.

Todo esto nos pone a pensar como la conceptualización de la paz tiene muchas

connotaciones es decir, cuando en un país o región hay ausencia de guerras o conflictos,

esta paz es impuesta desde el poder del estado pero sin la reducción de las desigualdades

sociales. Caso concreto lo podemos ver en la situación que se está presentando en el país de

Chile que se mostraba como el gran ejemplo de avance económico, de justicia e igualdad

social, pero tarde o temprano el tejido social de la aparente paz se rompe por algún lado.

Esta paz impuesta desde el poder del estado, muchos escritores la han llamado la

paz negativa, por lo que se impone un orden pero sin acatar la justicia e igualdad social. Es

por eso que la paz no se puede concebir solamente como la carencia de conflictos o guerras

sino que se debe propiciar un estado en donde se involucre la justicia social y la igualdad,

en donde haya crecimiento y posibilidades para todos, tanto para la mayoría como la

minoría de sus ciudadanos.

Por lo anterior expresamos que la paz no debe concebirse desde la guerra sino

desde las causas sociales que la generan, la paz no es acallar al otro con los fusiles, la paz
es la empaticidad en donde se buscan soluciones de las carencias de sus ciudadanos para

poder permitir su crecimiento material y espiritual.

Son tantas las causales de violencia en nuestro país que uno a veces piensa que es

imposible llegar a una solución, pero en definitiva es la educación la que puede lograr ese

cometido, naturalmente que ella debe ser nutrida desde el estado, la familia y sus

exponentes principales como son los docente, estar dispuestos todos con honestidad, hacia

una resignificacion de toda esta complejidad social.

Muchas voces gritan para generar una educación hacia la ciudadanía mundial

( ECM) en donde sus ciudadanos tenga el conocimiento que les permitan formar una

sociedad inclusiva con equidad con justicia social y humanismo. Considero que para que

ese propósito se lleve a cabo debe gestionarse una educación pública, suprimiendo la

educación privada como hicieron países como Finlandia, esto trajo como resultado una de

las sociedades menos desiguales. Naturalmente que esa labor hecha por Finlandia denota

que hay una política para todos sus ciudadanos, se está pensando como país, no como en la

mayoría de los países en donde hay una educación para pobres y una para la clase rica.

La UNESCO plantea que es importante la ECM, apuntando hacia una comunidad

más globalizada que luche por unos acuerdos comunes, educando hacia una

interdependencia política, social y cultural. Evidentemente que muchas voces apuntan que
para la ECM se debe educar para los derechos humanos, la paz, el desarrollo sostenible, la

concordia y el entendimiento.

En Colombia se dio un pequeño avance con la constitución de 1991 en donde se

tuvieron en cuenta temas relacionados a la paz y también las competencias ciudadanas

.Estos cambios permitieron más inclusión del ciudadano y la convivencia pacífica. A pesar

de todo lo que trajo la nueva constitución hemos visto como señalamos anteriormente que

hay un poder económico y político que vive de la guerra y no ha permitido transitar

cómodamente en ese nuevo escenario de la paz.

Así mismo cuando se apuntó desde el Ministerio de Educación Nacional a trabajar

por el desarrollo de las competencias ciudadanas, se dijeron unas utópicas palabras de parte

de la Ministra de entonces: formar unos ciudadanos comprometidos, respetuosos de las

diferencias y defensores del bien común. Unos ciudadanos que desde sus casas, escuelas,

colegios y universidades extiendan lazos de solidaridad, abran espacios de participación y

generen normas de sana convivencia...

Sin pecar de ser repetitivo, vemos como los políticos se burlan de las sociedades,

aparentando que quieren hacer un cambio, pero ya Paulo Freire lo afirmo con su famosa

frase: “Sería en verdad una actitud ingenua esperar que las clases dominantes desarrollasen
una forma de educación que permitiese a las clases dominadas percibir las injusticias

sociales en forma crítica”.

Nuestra realidad colombiana y latinoamericana está reflejada contundentemente en

las palabras de Paulo Freire: “Los problemas relacionados con la educación no son

solamente problemas pedagógicos. Son problemas políticos y éticos como cualquier

problema financiero”. Debemos de ser conscientes que para romper toda la estructura que

una clase política ha construido para poder ellos navegar en un mar de certezas y la

comunidad en un océano de incertidumbres, no es fácil, cada uno de nosotros debe poner su

grano de arena en este propósito educativo.

Es por todo lo anterior que la educación debe girar en torno a la formación del

pensamiento crítico, los valores, la ética, lo colaborativo para permitir que la comunidad

pueda emanciparse hacia la transformación de la sociedad, permitiendo que nos que

gobiernen las mejores personas y no los que desean el beneficio de ellos y de sus

cómplices para poner un estado de rodillada y poder usufructuar, dejando a la sociedad

huérfana y sin esperanzas.

Anteriormente habíamos comentado el error de la educación actual queriendo

solamente formara la parte cognitiva del niño, olvidándose de su parte afectiva. Es decir

nos olvidamos que el ser humano para que pueda funcionar integralmente debe desarrollar
tanto su parte intelectual como la emocional, pero recordemos que el investigador

Waldemar De Gregory va más allá: la teoría tríadica sistémica dice que el cerebro humano

en su proceso de evolución se ha diferenciado la funcionalidad en cada una de sus partes

hacia un cerebro integrado, es decir el cerebro reptil que sería lo operativo central( el

instinto);el cerebro derecho formado por el sistema límbico( emocional) y por último el

cerebro izquierdo o lógico, formado por la Neo-corteza( intelectual). En sus premisas da

una metodología para que cada ser humano conozca qué tipo de cerebro tiene y de ahí partir

para su proporcionalidad es decir algunos serán intelectual-emocional-central; emocional-

intelectual-central; central-intelectual-emocional; intelectual-central-emocional etc.

Dependiendo de la combinación así tocaría proporcionar el cerebro.

Todo esto nos señala que hay que prepara mejor al gremio docente para que pueda

realizar una excelente labor y poder así formar a los ciudadanos del futuro correctamente.

Un ser pensante, sintiente y que pueda poner en práctica todo su pensar y sentir. Todo está

formación del ser humano será necesaria para poder enfrentar todo el caos en que se

encuentra la sociedad actual. Pero seamos correctos en nuestro pensar y no olvidemos que

no solamente la escuela es la que debe general el cambio dentro de su currículo

institucional, no, es la sociedad entera que debe poner el hombre para general el cambio

verdadero que necesita el país

 BIBLIOGRAFIA

Villamil, M. (2013) Educación para la Paz en Colombia: una búsqueda más allá del
discurso. Espiral, Revista de Docencia e Investigación. 3 (2

Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura,

(2018). Hacia un mundo sin muros: educación para la ciudadanía mundial en el ODS
Agenda E2030”