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Literatura ES.

4 Con antología
La cautiva
E/matadero
Antígona

-~ tJntoJresca·
Gerente general Jefa de preprensa o Tinta fresca ediciones S.A.
e
Leandro De Sagastizábal y fotografía Corrientes 526
Carlos Raúl Yujnovsky
Li teratura ES. 4 /Carlos Raúl
L~
Andrea Balbi (Cl 043AAS) Ciudad de Buenos Aires Yujnovsky; Eisa Margarita Leibovich;
Mónica Pironio. - 1a ed. 1a reimp. -
Selección
Directora editorial
y retoque de imágenes Hecho el depósito que establece
Buenos Aires: Tlnta Fresca, 2011.
192 p.: il.; 28x21 cm.
L,
Susana Pironio la Ley Nº 11.723.
Vicedirectora
Silvina Piaggio
Libro de edición argentina. ISBN 978-987-576-404-0
El
Alina Baruj Impreso en la Argentina.
1. Literatura. 2. Enseñanza
Ce
Asistente editorial Printed in Argentina. Secundaria. l. Lelbovich, Eisa Margarita
11. Mónica Pironio 111. Título
Le
Carolina Pizze
Autores
ISBN: 978-987-576-404-0
COD4 10.712 u
Eisa Leibovich
Carlos Yujnovsky
Producción editorial ISBN: 978-987-576-406-4 [PACK]
o
Nora Manrique La presente publicación se ajusta a la L
Mónica Pironio (aperturas
car tografía oficial establecid a por el
de capítulos)
Cartografía Poder Ejecutivo Nacional a través del u
IGN - Ley Nº 22.923- y fue aprobada Li
Coordinadora de edición Miguel Forchi por Expte. Nº GG l 1 3351/5.
y editora E
Marisa García Ilustraciones E
Corrector Mónica Pironio
Federico Rubí
u
Fotografías L
Jefa de arte Archivo Clarín L
LA FóTOCOPIA
Eugenia Escamez Angela Corbalán MATA'ai.~IBRO
A
Diseñador
y coordinador gráfico
IUNA
~iii7
Federico Gómez ~ (
Diseño de tapa Este logo alerta al lector sobre la En español, el género mascu lino G
Pablo Branchini amenaza que fotocopiar libros en singular y plural incluye ambos
Di agra mador representa para el futuro de la géneros. Esta forma propia de la
escritura. En efect o, la fotocopia de lengua oculta la mención de lo }
Diego Linares fem enino. Pero, como el uso explícito
libros provoca una disminución tan
importante de la venta de libros que de ambos géneros dificulta la lectura, L
atenta contra la posibilidad de los los responsables de esta pub licación
autores de crear nuevas obras y de las emplean el masculino inclusor en
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editoriales de publicarlás. todos los casos. L

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no autorizada por los editores, viola
"
derechos reservados, es ilegal Nuestro agradecimiento a la Fundación
y constituye un delito. Internacional Jorge Luis Borges.
' ~11;
11 .

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·.
Capítulo 1 Fragmentos de Juan de Betanzos,
Los héroes míticos ..................................... 6 Pedro Sarmiento de Gamboa, Cristóbal de Molina,
Juan de Acosta y ellnca Garcilaso ..................... 42
La Odisea, Homero ............................................ 8 La poesía inca ............................................................ 44
El nacimiento de la poesía griega .......................... 12 "Himno de Manko Q!iapaj".............................. 44
Condiciones de producción de los poemas épicos ...... 12 "Alturas de Macchu Picchu", Pablo Neruda ....... 45
La l/íada, símbolo de las pasiones guerreras ............. 12 LECTURA ACADÉMICA: Conciencia e identidad
Ulises, el héroe de los mil recursos ................................ 13 de América, Alejo Carpentier ................................... 46
De Troya al Lacio ........................................................ 14 Los textos argumentativos ..................................... 47
La Eneida, Virgilio ........................................... 14 ACTIVIDADES FINALES .............. ..................................... ... 48
Un viaje por la eternidad ....................•.................... 17
La historieta,¿ un género marginal? ............................. 17 Capítulo 3
El Eternauta ................................................................ 18 Mitos y leyendas de Hispanoamérica ... 50
El Eternauta, Héctor Oesterheld ....................... 18
La saga de El Eternauta .........................•.......•........... 20 ¿Aventuras de la imaginación? ............................... 52
LECTURA ACADÉMICA: El héroe mítico ........................... 22 Fragmentos de Gabriel García Márquez, Ulrico
Los textos académicos ............•.....••...........•............. 23 Schmidl, Pedro Mártir deAnglería, Cristóbal Colón,
ACTIVIDADES FINALES •••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••• 24 Fray Bartolomé de las Casas y Américo Vespucio. 52
Diario de viaje, Cristóbal Colón ........................ 54
Capftulo 2 LaArgentina manuscrita, Ruy Díaz de Guzmán. 55
Cosmogonías ........................................•... 26 Entre la realidad y la fantasía .................................. 56
Entre el Medioevo y el Renacimiento .................... 56
Popo! Vuh ......................................................... 28 Crónicas y cronistas .................................................. 57
Los mitos de los orígenes ........................................ 35 Mitos y leyendas de los orígenes ........................... 58
El libro sagrado de los mayas-quichés .................. 35 La leyenda .............................................................................58
La estructura del relato ..................................................... 35 La estructura de la narración .................................. 58
La creación del hombre en el Popo/ Vuh ......................36 "La laguna de la niña encantada" ....................... 59
Los héroes cosmogónicos mayas ........................... 37 Historias v iej as y voces nuevas ............................... 60
Popo! ·vuh ......................................................... 37 "La leyenda del Sombrerón",
El héroe cosmogónico azteca ................................. 39 Miguel Ángel Asturias ..................................... 60
"La leyenda de Huitzilopochtli" ........................ 39 Otras voces, otros ecos ............................................. 64
La poesía náhuatl ...................................................... 40 "La noche boca arriba",Julio Cortázar .............. 64
Poemas anónimos, de Nezahualcóyotl y LECTURA ACADÉMICA: Contar historias ......................... 70
Octavio Paz ..................................................... 40 ACTIVIDADES FINALES •••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••• 72
El héroe cosmogónico inca .......•............................. 42
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Capítulo4 ' Los compromisos de la ficción .............................. 109


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Cap
Los héroes épicos .....................................74 Historias y personajes para la polémica ............. 11 O @
La
Facundo, Domingo F. Sarmiento ..................... 11 O
Poenia del Cid ................................................... 76 ¿Ensayo, ficción o panfleto? .................................. 112
Los cantares de gesta ............................................... 82 Cuando termina la función .................................. 113
El mester de juglaría ..........................................................82 "La representación", Beatriz Guido ................. 113
Evolución de los cantares de gesta ...............................82 LECTURA ACADÉMICA: Del rastreador al hombre Mar
La gesta de Rodrigo Díaz de Vivar .......................... 83 de ciencia, Pablo Capanna ..................................... 116 Lo s 1
Contexto histórico de la obra .........................................83 ACTIVIDADES FINALES .................................................... 118 Lap
Las grandes gestas europeas .................................. 84 La g
La epopeya germánica: Beowulf ............................ 84 Capítulo 6 ¿Out
Beowulf. ........................................................... 85 La poesía gauchesca .......•..................... 120 Lag
Otra epopeya germánica: el Cantar Cara
de los nibelungos ........................................................ 88 "Cielito patriótico que compuso un gaucho para Poe:
La epopeya francesa: el Cantar de Roldón ............. 89 cantar la acción de Maipú", Bartolomé Hidalgo. 122 Poe1
La batalla de Roncesvalles .................................. 89 Los orígenes de la gauchesca ............................... 125 Ant
El Romancero ............................................................. 92 Hidalgo, un precursor..................................................... 125 R
"Ro.m anee de los condes de Carrión" ................. 92 Un gaucho que va a la ópera ................................. 126 Los
"Romance de Ahenámar" ................................. 93 Fausto, Estanislao del Campo ......................... 126 ReCl
"Ro manee de1pns1onero
·· "................................ . 93 Entre el humor y la ironía ....................................... 128 ReCl
LECTURA ACADÉMICA: los romances ............................. 94 El desarrollo de la poesía gauchesca ................... 129 Reci
La organización de los textos académicos ........... 95 Datos para leer el Martín Fierro ............................ 130 ReCl
ACTIVIDADES FINALES ...................................................... 96 Las circunstancias políticas y sociales ....................... 130 Po e:
La ley de leva y el gaucho matrero ............................. 130 Po
Capítulo 5 Martín Fierro vuelve ........................................................ 130 Ped
Orígenes de la literatura argentina ....•.. 98 Elgaucho Martín Fierro,José Hernández ......... 131 Ge~
Recursos y construcción del Martín Fierro .......... 135 ¿Ha1
La cautiva, Esteban Echeverría ....................... 100 El monólogo y la polifonía ............................................ 135 "La
Primeras visiones de lo nacional .......................... 102 Métrica, rima y recursos expresivos ........................... 135 LECT
Un lenguaje poético ....................................................... 102 Distintas miradas de un final ................................ 136 Arn
El Romanticismo ..................................................... 103 "Elfin",JorgeL.Borges .................................. 137
El Romanticismo en el Río de la Plata ........................ 103 LECTURA ACADÉMICA: El escritor argentino
La generación de 1837 ........................................... 104 y la tradición, Jorge L. Borges ................................ 140
Un violento relato de denuncia ............................ 105 ACTIVIDADES FINALES .................................................... 142
El matadero, Esteban Echeverría ..................... 105
Capítulo 7 Capítulo 8
La poesía española del siglo XX .......... 144 Las heroínas trágicas ............................ 166

Voces de la poesía española del si glo XX ............ 146 Mariana Pineda, Federico García Lorca .......... 168
Poemas de Antonio Machado, El teatro de Federico García Lorca ........................ 178
Juan RamónJiménez, Federico García Lorca, Mariana Pineda, en el teatro y en la historia .......... 178
ManuelMachado,DámasoAlonso ................. 146 Heroínas que lucharon por la libertad ................ 179
Los géneros literarios ............................................. 148 En la tragedia griega ...................................................... 179
La poesía y el discurso poético ............................. 149 Antígona, Sófocles.......................................... 179
La generación del 98 .............................................. 150 En la tragedia moderna ..............•.......................... 181
¿Qué es una generación literaria? .............................. 150 La versión de Jean Anouilh ........................................... 181
La generación del 27 .............................................. 151 Antígona,JeanAnouilh .................................. 181
Ca racterísticas de la generación del 27 .................... 151 La versión d e Leopoldo Marechal .............................. 182
Poesía de la generación del 98 ............................. 152 Antígona Vélez, Leopoldo Marechal ................ 182
Poemas de Miguel de Unamuno, La versión de Griselda Gambaro ................................. 184
Antonio Machado.Juan RamónJiménez, Antígonafuriosa, Griselda Gambaro .............. .'184
Ramón del Valle-lnclán, Manuel Machado ..... 152 LECTURA ACADEMICA: Drama, Ja ime Rest .................. 186
Los recursos poéticos ............................................. 154 Reescribir la lectura ................................................ 187
Recursos fónicos .............................................................. 154 ACTIVIDADES FINALES .................................................... 188
Recursos sintácticos ........................................................ 154
Recursos semánticos ...................................................... 155 Bibliografía ............................................ 190
Recursos gráficos ............................................................. 155
Poesía de la generación del 27 ............................. 156
Poemas de Federico García Lorca,
Pedro Salinas, RafaelAlberti, Luis Cernuda,
G ªrardo Diego, Miguel Hernández ................ 156
¿Hay historias de gente común? .......................... 158
"La felicidad", Ana María Matute ................... 158
LECTURA ACAD~MICA: El discurso poético ................... 162
ACTIVIDADES FINALES .............•..............•..............•...•.... 164
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Los héroes míticos
Las esculturas y las decoraciones de los vasos griegos han ayudado
a interpretar los poemas épicos que narran sucesos protagonizados
por héroes y dioses. Los arqueólogos pueden establecer con bastante
certeza el lugar y la época de producción de estas manifestaciones
artísticas y conocer, gracias a ellas, aspectos de la vida cotidiana y las
creencias de los pueblos que habitaron la Grecia antigua.
En la página anterior se muestra una crátera, vasija usada para
mezclar agua y vino. Por sus características, se sabe que fue realizada
por ceramistas del Atica, especializados en la producción de grandes
vasos, llamados de Di pilón, porque se encontraron cerca de una de
las pue rtas d e la ciudad de Atenas que tenía ese nombre.
Las figuras del color de la arcilla sobre fondo negro, que pueden
u bicarse a finales del siglo VI a.c., fueron posteriores a las siluetas
negras sobre fondo rojo y representan un notable cambio en el
d ibuj o de la figura humana, porque hay en ellas sugerencia de
volumen y detalles de la anatomía humana.
En estas decoraciones del denominado estilo severo, los artistas
suelen representar temas mitológicos y homéricos, como la lucha
entre hombres y centauros. El hombre que lucha desnudo contra la
bestia, sin más recursos que su propio cuerpo, encarna el ideal griego
de belleza antropomórfica, en la que se equilibran el vigor físico y el
espiritual.
La Odisea
HOMERO Acabada la guerra de Troya, Odiseo, también llamado Ulises, regresó
(Siglo VIII a.C.) a su patria, !taca; pero antes, venciendo la ira de Poseidón*, debió
enfrentar numerosas adversidades. En el canto IX cuenta su aventura
Según la tradición, Homero era con el Cíclope.
un juglar ciego que recorría
los pueblos recitando poemas
épicos. A él se le atribuye la
Canto IX
autoría de las dos grandes Soy Odiseo, el hijo de Laertes, el que está en boca de todos los hombres y mi
epopeyas de la Antigüedad, fama llega hasta el cielo. Habito en Ítaca, hermosa al atardecer. Nada hay tan
La //lada y La Odisea, aunque bello como la tierra de uno. Y aun cuando Calipso, divina entre las diosas, me
algunos estudiosos ponen
en duda que ambas obras
retuvo en una profunda cueva ya que deseaba que fuera su esposo, y también
pertenezcan al mismo autor. me apresó en su palacio Circe, la engañosa, anhelando tomarme como marido,
Según datos históricos y ninguna logró persuadirme, que no hay nada más dulce que la tierra de uno.
lingüísticos, suscomposiciones
Ahora les narraré mi atormentado regreso, el que Zeus me ha dado al venir
pueden ubicarse hacia el siglo
VIII o IX a.C. de Troya. El viento que me traía de Ilión me empujó hacia los Cicones, hacia
Ismaro. Alli asolé la ciudad, a sus habitantes los pasé a cuchillo [... ] y ordené a
los míos que huyeran con rápidos pies. [ ... J
Proseguimos navegando con el corazón acongojado, y llegamos a la tierra
de los Cíclopes, los soberbios, los sin ley; los que, obedientes a los inmortales,
no plantan con sus manos frutos ni labran la tierra, sino que todo les nace sin
sembrar y sin arar; la lluvia de Zeus les hace crecer trigo y cebada y viñas que
producen vino de gordos racimos . No tienen ágoras* donde reunirse para emitir
leyes; habitan las cumbres de elevadas montañas en profundas cuevas y cada
uno es legislador de sus hijos y esposas, y no se preocupan u nos de otros. [ ... ]
En la parte alta del puerto corre un agua resplandeciente. H acia allí navega-
mos y un dios nos conducía a través de la oscura noche. No teníamos luz, pues
la bruma era espesa en torno a las naves, y Selene* no irradiaba su luz desde el
cielo; así que nadie vio la isla con sus ojos ni vimos las enormes olas que roda -
ban hacia tierra hasta que arrastramos las naves. Entonces amarramos las velas
y esperamos durmiendo allí a la divina E os*. Y cuando se mostró la hija de la
mañana, la Aurora de dedos rosados, deambulamos llenos de admiración por la
isla de los Cíclopes y vimos el humo de sus fogatas y escuchamos el vagido de
sus ovejas y cabras. Y cuando H elios* se sumergió y sobrevino la oscuridad, nos
echamos a dormir sobre la ribera del mar.
En la mañana convoqué una asamblea y les dije a todos:
- Qyédense, mis fieles compañeros, que yo con mi nave y los que me acom-
pañen llegaré hasta esos hombres para saber quiénes son, si soberbios, salvajes
Poseidón: dios del mar en la y carentes de justicia o amigos de los forasteros y con sentimientos de piedad
mitología griega. para con los dioses.[ ... ]
ágora: plaza pública en las ci udades
Al llegar, vimos una cueva cerca del mar, elevada, techada de laurel. En ella
griegas.
Selene: diosa lunar en la mitología pasaban la noche ovejas y cabras, y alrededor había una alta cerca construida
griega. con piedras y enormes pinos y encinas de elevada copa. Alli habitaba un hom-
Eos: diosa de la aurora en la mitología bre monstruoso que apacentaba sus rebaños, solo, apartado, no frecuentaba a
griega.
Helios: personificación del sol en la
los demás.[... ] Escogí a mis doce mejores compañeros y me puse en camino.
mitología griega. Llevaba un pellejo de cabra con negro y agradable vino y también provisiones,
porque mi noble ánimo sospechó que marchaba en busca de un hombre dotado
de gran fuerza, salvaje, desconocedor de la justicia y de las leyes.
8 I Capítulo 1 Los héroes míticos
Llegamos enseguida a su cueva y no lo encontramos; por lo tanto entramos
y miramos con admiración los canastos que se inclinaban bajo el peso de los
quesos, y los establos llenos de corderos y cabritos. Entonces mis compañeros
me rogaron que nos apoderásemos de los quesos y regresáramos, y que sacára-
mos luego cabritos y corderos y, conduciéndolos a la nave, diéramos velas sobre
a el agua salada. Pero yo no les hice caso, pues deseaba ver al monstruo.
Encendiendo una fogata, hicimos un sacrificio, repartimos quesos, los comi-
mos y aguardamos sentados dentro de la cueva hasta que el Cíclope llegó con-
duciendo el rebaño.Traía una pesada carga de leña seca para su comida y la tiró
ymi dentro con gran estrépito. Nosotros, atemorizados, nos refugiamos al fondo
y tan de la cueva, y él introdujo sus gordos rebaños. Después levantó una gran roca
;, me y la colocó sobre la puerta, tan pesada que no la habrían levantado del suelo ni
.bién veintidós buenos carros de cuatro ruedas. Se sentó luego a ordeñar las ovejas y
rido, las cabras, y debajo de cada una colocó un cordero. Enseguida puso a cuajar la
). mitad de la blanca leche en cestas bien entretejidas, y la otra mitad la colocó en
renir cubos, para beber cuando comiera y le sirviera de adición al banquete.
iacia Cuando hubo realizado todo su trabajo, prendió fuego, y al vernos, preguntó:
:né a -Forasteros, ¿quiénes son? ¿D e dónde vienen navegando los húmedos sen-
deros? ¿Marchan errantes por algún asunto, o sin rumbo como los piratas por la
terra mar, los que andan a la aventura exponiendo sus vidas y llevando la destrucción
:ales, a los de otras tierras?
e sin Nuestro corazón se estremeció por miedo a su voz grave y su aspecto mons-
que truoso. Pero le contesté:
nitir -Somos aqueos* y hemos venido errantes desde Troya, zarandeados por
:ada toda clase de vientos sobre el mar, nos dirigimos de vuelta a casa.[ ... ] Hemos
.] dado contigo buscando hospitalidad, como es costumbre entre los huéspedes.
ega- Ten respeto a los dioses; somos tus suplicantes y Zeus es el vengador de los
pues suplicantes y de los huéspedes.
:le el Él me contestó con su cruel corazón:
)da- -Eres estúpido, forastero, o vienes de lejos, que me ordenas temer o respe-
1elas tar a los dioses; pues los Cíclopes no se cuidan de Zeus ni de los dioses felices,
:ie la pues somos mucho más fuertes. No te perdonaría ni a ti ni a tus compañeros, si
orla el ánimo no me lo ordenara. Pero dime, ¿dónde detuviste tu nave?
o de Me dirigí a él con palabras engañosas:
,nos - L a nave me la ha destrozado Poseidón, el que conmueve la tierra; la ha
lanzado contra los escollos en los confines de tu país, conduciéndola hasta un
promontorio, y el viento la arrastró del ponto*. Por ello he escapado de la dolo-
om- rosa muerte.
No me contestó nada, pero se abalanzó y echó mano a mis compañeros.
Agarró a dos y los golpeó contra el suelo como a cachorritos, y sus sesos se aqueo: nombre con que se designa al
esparcieron empapando la tierra. Cortó en trozos sus miembros, se los preparó pueblo griego en su conjunto.
ponto: mar.
ella como cena y se los comió, como un león montaraz, sin dejar ni sus entrañas ni
magnánimo: noble, generoso.
üda sus carnes ni sus huesos.
)m- Nosotros elevamos llorando nuestras manos a Zeus, pues la desesperación
ba a se apoderó de nuestro ánimo.
mo. Cuando el Cíclope había llenado su enorme vientre de carne humana y leche,
nes, se tumbó dentro de la cueva, entre los rebaños. Entonces yo tomé la decisión
:ado en mi magnánimo* corazón de acercarme, sacar la aguda espada y atravesarle el

9
pecho. Pero me contuvo otra decisión, pues alli hubiéramos perecido también en
nosotros, ya que no habríamos sido capaces de retirar de la entrada la piedra de
lQUÉ ES LA que había colocado. Así que, llorando, esperamos a la divina Eos, la Aurora.
TEORÍA LITERARIA? ...
Y cuando se mostró la hija de la mañana, de rosados dedos, el Cíclope se puso M
~

La teoría literaria es una disciplina a encender fuego y a ordeñar sus rebaños. Luego, tomó dos compañeros a la E
teórica cuyo objeto de estudio es .!!
vez y se los preparó como desayuno. Posteriormente condujo fuera de la cueva o.
el discurso literario. Se propone ~
definir qué es la literatura en a sus gordos rebaños, retirando con facilidad la gran piedra de la entrada y .E
a de
relación con otros tipos de volviéndola a poner como si colocara la tapa a una aljaba*. .¡¡
:¡;
;;:_
discurso y examinar la estructura, Mientras encaminaba sus rebaños hacia el monte, yo me quedé meditando: ~
significados, construcción y
en
.;.
recursos de las obras literarias.
- ¡Si pudiera vengarme y Atenea* me concediera lo que le suplico ... ! .,;
.,"'e:
Tomé una decisión. Junto al establo yacía la enorme estaca de olivo verde del
En todos los capítulos encontrarán
plaquetas con conceptos de esta Cíclope: la comparábamos con el mástil de una nave, así era su anchura. Me acer-
·8
.,
'6 PJ
a 1
~isciplina. J qué, le corté una braza* y ordené a mis compañeros que la afilaran. Ellos la alisa- ~
~ tar
ron, y luego le agucé el extremo y la puse al fuego. La cubrí con estiércol y ordené !!!
e: En
¡:
que sortearan quién se atrevería a levantarla y retorcerla en el ojo del Cíclope g

cuando le llegara el dulce sueño. Ellos eligieron a cuatro, y yo fui el quinto. vel
Llegó el Cíclope por la tarde conduciendo sus ganados de hermosos vello- lle1
nes y los introdujo en la amplia cueva. Después colocó la gran piedra que hacía me
de puerta y se sentó a ordeñar las ovejas y las baladoras cabras. Luego que h ubo As:
realizado sus trabajos, agarró a dos compañeros a la vez y se los preparó como la e
cena. Entonces me acerqué y le dije sosteniendo entre mis manos una copa de poi
negro vino: dat
- ¡Aquí, Cíclope! Bebe vino después que has comido carne humana, para da~
que veas qué bebida escondía nuestra nave.[ ... ] cor.
Él tomó, bebió y gozó la dulce bebida:
- D ame más de buen grado y dime ahora ya tu nombre para que te ofrezca bas
el don de hospitalidad con el que te vas a alegrar. Pues también la donadora de
de vida, la Tierra, produce para los Cíclopes vino de grandes uvas y la lluvia de la
Zeus las hace crecer. Pero esto es una catarata de ambrosía* y néctar. qui
Le ofrecí rojo vino tres veces y él bebió sin medida. Después, cuando el vino do1
había invadido su mente, me dirigí a él con dulces palabras: une
-Cíclope, ¿me preguntas mi célebre nombre? Te lo voy a decir, mas dame cor
tú el don de hospitalidad como me has prometido. Nadie es mi nombre, y Nadie
me llaman mi madre y mi padre y todos mis compañeros. cor
Y él me contestó:
-A Nadie me lo comeré el último entre sus compañeros, y a los otros, antes. lar
E ste será tu don de hospitalidad. rar:
Así diciendo cayó boca arriba; estaba tumbado con su robusto cuello incli- veU
aljaba: caja para flechas que pende nado a un lado, eructaba y de su garganta saltaba vino y trozos de carne humana.
de una correa con la que se cuelga del Entonces arrimé la estaca a las brasas para que se calentara y comencé a ani-
hombro izquierdo a la cadera derecha. mar a mis compañeros. Cuando estaba a punto de arder, la saqué del fuego, y mis ceg
Atenea: diosa de la sabiduría, la
compañeros me rodearon, pues sin duda una deidad les infundía valor. Tomaron el r.
estrategia y la guerra justa en la
mitología griega. la aguda estaca de olivo y se la clavaron en el ojo, y yo hacía fuerza desde arriba y
braza: medida de longitud, le daba vueltas, [ ... ] y la sangre corría por la estaca caliente. Al arder la pupila, el cor
equivalente a 1,6718 m. soplo del fuego le quemó los párpados, y las cejas crepitaban [ ...] y rechinaba su
ambrosía: manjar o alimento de los
dioses. ojo. Lanzó un gemido grande, horroroso y nosotros huimos aterrorizados.
Entonces se extrajo del ojo la estaca empapada en sangre y, enloquecido, la
arrojó. Y al punto se puso a llamar a grandes voces a los Cíclopes que habitaban

1O 1Capítulo 1 Los héroes míticos

.b._______. _. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . .. . . . .
én en cuevas por las ventiscosas cumbres. Al oír estos sus gritos, vinieron alrededor
ira de su cueva y le preguntaron qué le afligía. [... ]
ra. Y Polifemo les contestó: TIPO DE VERSOS
ISO ......, -Amigos, Nadie me mata con engaño y no con sus propias fuerzas .
'.'.'
la E Y ellos le respondieron: En este capítulo, la versión
:va 1i
..
o -Pues si nadie te ataca y estás solo ... es imposible escapar de la enfermedad de La Odisea se presenta en
g prosa para facilitar su lectura,
:i.y .2
~
del gran Zeus, pero al menos suplica a tu padre Poseidón, al soberano. pero originalmente los poemas
.,,
~

Así dijeron y se marcharon. Y mi corazón rompió a reír: ¡cómo los había homéricos están escritos en verso,
~
o: ~ engañado mi nombre y mi inteligencia irreprochable! en hexámetro dactílico. La un idad
.. El Cíclope gemía y se retorcía de dolor, y palpando con las manos, retiró la rítmica de los versos, llamada pie

:iel ..""'
u!

piedra de la entrada y se sentó a la puerta, las manos extendidas, por si atrapaba


dáctilo, combinaba una sílaba
la rga seguida de dos breves y se
~r-

;a-
o
·¡¡
..
'O

~
a alguien saliendo. ¡Tan estúpido pensaba que era yo! Entonces me puse a medi-
tar para encontrar el medio de liberar a mis compañeros y a mí de la muerte ...
' epetía seis veces en cada verso.J
né ..
~
1:
¡:
Entretejí toda clase de engaños y planes, ya que se trataba de mi propia vida.
pe Q Y tomé una decisión: los carneros estaban bien alimentados, con densos
vellones, hermosos y grandes. Los até, juntándolos de tres en tres; el del medio
.o- llevaba a un hombre, y los otros dos marchaban a cada lado. M e apoderé del
::ía mejor carnero de su rebaño y me coloqué bajo su velludo vientre hecho un ovillo.
bo Así aguardamos rogando a Eos divina, y cuando se mostró la hija de la mañana,
no la de dedos rosados, sacó a pastar a los machos de su ganado. Su dueño, abatido
de por funestos dolores, tentaba el lomo de todos sus carneros. El inocente no se
daba cuenta de que mis compañeros estaban sujetos bajo el pecho de las lanu-
lra das ovejas. El último del rebaño en salir fue el carnero cargado con su lana y
conmigo. Polifemo lo palpó y se dirigió a él:
-Carnero amigo, ¿por qué sales último de la cueva? Antes jamás marcha-
:ca bas detrás de las ovejas. [... ] Ahora, en cambio, eres el último. Sin duda echas
ira de menos el ojo de tu soberano, el que me ha cegado un hombre malvado con
de la ayuda de sus miserables compañeros, sujetando mi mente con vino: Nadie,
quien todavía no ha escapado, te lo aseguro, de la muerte. ¡Ojalá estuvieras
no dotado de voz para decirme dónde se ha escondido! Entonces sus sesos, cada ~ ACTIVIDADES
uno por un lado, reventarían contra el suelo de la cueva, herido de muerte, y mi
ne corazón se repondría de los males que el vil Nadie me ha causado. 1. Ulises dice que regresa de la
die A sí diciendo alejó de sí al carnero. Y cuando llegamos lejos de la cueva y del guerra de Troya. Busquen datos
corral, yo me desaté de debajo del carnero y liberé a mis acompañantes. [ ... J acerca de la ciudad troyana y su
Nuestros compañeros dieron la bienvenida a los que habíamos escapado de historia.
es. la muerte, y a los otros los lloraron entre gemidos. Pero yo no permití que llo- 2. Los habitantes de la antigua
raran, antes bien, les di órdenes de embarcar el abundante ganado de hermosos Grecia eran politeístas. ¿En
li- vellones y de navegar el salino mar. qué dioses creían? ¿Cuál es el
1a. Cuando estábamos alejados, me dirigí a Polifemo: [ ... ] lugar que ocupa la rel igión en
11- -Cíclope, si alguno de los mortales hombres te pregunta por la vergonzosa la cultura griega? ¿Cómo se
1is ceguera de tu ojo, dile que lo ha dejado ciego Odiseo, el destructor de ciudades; reconoce en este texto?
on el hijo de Laertes que tiene su casa en Ítaca. [ ... ] 3. Describan al personaje
ay Proseguimos navegando desde allí, nuestro corazón acongojado, huyendo principal. ¿En qué radica su
1 el con gusto de la muerte, aunque habíamos perdido a nuestros compañeros. astucia? ¿Cómo logra vencer al
su Cíclope?
H omero, La Odisea. Adaptación de la traducción de Luis Segalá y Estalella 4. ¿Quién es el narrador de este
.la en Historia universal de la literatura, Barcelona, Orbis y Origen, 1984. relato?
an

11
El nacimiento de la poesía griega
el
RECURSOS EXPRESIVOS La historia de Odiseo y el Cíclope, con que comienza este capítulo, pertenece a g
DELA ÉPICA La Odisea, poema épico atribuido a Homero. Un poema épico es una obra narrativa
M
N

~ c
Los poemas homéricos extensa, que refiere acciones bélicas y hazañas rea lizadas por héroes y divinidades. ~
.,;
establecieron para la posteridad Los términos epikós y epoppoía, de los que derivan épico y epopeya, aluden al
'éi
el
las características de la epopeya. ~
.!!
caráct er oral de las composiciones de este género, ya que épos, en griego, significa ~ n
En ellos se reconocen los .,,
~

siguientes recursos expresivos: "palabra". Desde la época micénica, alrededor de 1.500 o 2.000 años a.c. y hasta el :o
-¿ d
• Lenguaje formulario: siglo VIII a.c. se transmitieron oralmente y en verso - lo que ayudaba a su memori- ~ d
conjunto de frases hechas y
zación- numerosos relatos sobre héroes; de ellos se nutren los poemas homéricos.
.. la
expresiones fijas que se repiten.
Hasta que apareció el alfabeto, la cultura griega era oral, y los estudiosos ubi-
.."'
ul

e
o p
En general son epítetos que ¡;

describen personajes u objetos. can entre fines del siglo VIII y mediados del VII a.C. las obras conservadas, como los ..
'O

Este lenguaje es propio de la poemas homéricos (La //íada y La Odisea), los perten ecientes a Hesíodo (Teogonía y .~ u
tradición oral, pues con estos ~
Los trabajos y los días) y las primeras elegías, composiciones poéticas en las que se !:
recursos los poetas eran capaces
lamenta la muerte de una persona o un acontecimiento desdichado. Estas obras se o m
de componer y memoriza r miles
de versos. Ejemplo: la hija de la cantaban ante un auditorio, genera lmente con el acompañamiento de un instru- q1
mañana, la Aurora de dedos mento mu sical. En el caso de La llíada y La Odisea, dada su ext ensión, se cree que Tr
rosados.
fueron compuestas y fijadas por escrito para conservarlas. g1
• Comparación: figura que
establece una relación de d¡
semejanza entre dos objetos o Condiciones de producción de los poemas épicos ql
ideas, mediante el nexo como, o SE
En el período anterior a la polis, en las casas de los nobles habitaban los aedos,
mediante un verbo que signifique
cantores que, mediante fórmulas y un repertorio de escenas típicas, creaban poe- te
semejanza (semejar, parecer).
Ejemplo: se los comió, como un mas sobre temas tradicionales. Estos poemas se adaptaban al artista y al gusto del ql
' ón montaraz. J público, y variaban con cada repetició n. Con el paso del tiempo, los poetas se profe- d(
sionalizaron y fueron artesanos de la palabra. Estos rapsodas narraban las historias
a su modo y, al repetirlas, conservaban su composición con mínimos cambios. Sur- er
gieron así los Homéridas, grupo de rapsodas del siglo VI a.c. que recitaban las obras d1
de Homero. Aunque algunos estudiosos suponen que el poeta jamás existió y que, d(
en realidad, La //íada y La Odisea son obras de, por lo menos, dos diferentes autores. d1

La llíada, símbolo de las pasiones guerreras b1


Más allá de la manera en que fue creada, es válido preguntarse qué interés des-
pierta La llíada, qué la ha hecho perdurar en el tiempo. pl
er
La obra consta de 15.693 versos y está organizada en 24 cantos o rapsodias. La rri
acción transcurre en Troya (llión, para los griegos) y cuenta la hi storia de Aquil es,
hijo del rey Peleo y la nereida Tetis. Su cólera lo enfrenta con Agamenón, j efe de los
aqueos, quien le ha robado su parte del botín y a la joven sacerdotisa Briseida. Eno-
jado, Aquiles se niega a seguir colaborando con el ataque a Troya, aunque Telamo-
nio, Odisea y dos heraldos son enviados para pedirle disculpas, entregarle regalos
y devolverle a Briseida.
Entre tanto, Paris, hermano de Héctor, el j efe de las tropas troyanas, desafía al
La guerra de Troya finalizó gracias aqueo Menelao y, ayudado por la diosa Afrodita, lo vence y se queda con su mujer,
a la estratagema concebida por Helena, de singular belleza.
Odiseo: escondidos en un caballo de
Patroclo, compañero de armas de Aquiles, hace huir a los troyanos, pero es ase-
madera, construido como ofrenda
sinado por Héctor. Para vengar la muerte de su amigo, Aq uiles se reconcilia con
a Atenea, los soldados griegos
lograron penetrar en la ciudad
Ag amenón y vuelve a la lucha. Los dioses también pelean entre ellos, unos a fa-
y destruirla. Representación del vorde los aqueos y otros, de los troyanos. En un enfrentamiento, Aquiles mata a
caballo en una vasija (650 - 600 a.C.). Héctor, ata el cadáver a su carro de combate y da vueltas alrededor de la ciudad.

12 1Capítulo 1 Los héroes míticos


Tras el funera l de Patroclo, Aquiles continúa amedrentando a los troyanos con
el maltrato del cadáver de Héctor. Príamo, rey de Troya, se dirige al campamento
:e a griego para suplicarle la devolución del cuerpo de su hijo. El vencedor acepta y se
::l celebran los funera les de Héctor.
ti va :e
:les. ~ La //íada muestra héroes descomunales cuyo modelo es Aquiles o Héctor. Para
·~ el lector contemporáneo, ingresar en ese mundo es un desafío. Se trata de un esce-
n al o

fica ~ nario de hombres heroicos, de guerreros signados por la muerte, que todo lo con-
a
~

a el diciona. El drama se presenta como un espejo de la condición humana. La fuerza


J
2
orí- a. del relato está en su historia, pero también en el modo como es contada . Quizás
cos. ./.
.,; la gran pregunta que la obra formula a quien la lee es por qué pelean los hombres,
.Jbi- ""'e
o por qué se enfrentan, por qué se matan.
·¡;
'O
olos "
íay ~ Ulises, el héroe de los mil recursos
~
:¡ Los héroes griegos, vencedores en Troya, regresaron a sus tierras. Exist ieron nu-
~se e
¡:
sse o merosos relatos de las travesías que emprendieron y de las circunstancias adversas
tru- que atravesaron, pero solo se conserva la historia de Ulises u Od iseo, rey de haca.
::iue Tras veinte años de ausencia y muchas experiencias vividas en los mares, perse- La Troya homérica
guido por la ira de Poseidón, finalmente el héroe arriba a su palacio donde lo aguar- A fines del siglo XIX, Heinrich
Schliemann descubrió restos
dan su hijo Telémaco y su mujer Penélope. Asediada por numerosos pretendientes
arqueológicos que parecían
que deseaban tomarla por esposa, Penélope había resistido diciéndoles que solo corresponder a la Troya homérica;
:los, se casaría cuando acabase una labor de tejido. Todas las noches, la fiel esposa des- esto llevó a pensar que la obra
tejía lo hecho para volver a tejer al día siguiente. Al igual que las Moiras, las diosas tenía un fondo de veracidad
•Oe-
histórica y que la Grecia del siglo
del que tejían el destino de los hombres, Penélope tej e y desteje congelando el tiempo XII a.c. descripta por el poeta no
Jfe- de sus pretendientes, a fin de esperar a su esposo y alcanzar su destino anhelado. era ficticia.
rias Por su parte, Ulises es el héroe que se adapta a cada circunstancia, que pone
5ur- en juego mil recursos y, a diferencia de Aqu iles, que nunca cambia, logra escapar
)ras de las prisiones de mágicas hechiceras, vence la crueldad del sa lvaje Polifemo o se Pueden consultar las obras
¡ue, defiende de las sirenas, y vive experiencias maravillosas. Su mundo mítico es fruto completas en Internet.
del ingenio, de los recursos del hombre puestos en acción. Las bibliotecas virtuales Antorcha
res.
y Cervantes brindan versiones
A diferencia de La llíada, en La Odisea no hay combate heroico. Si bien los hom- digitalizadas de La Jlíada y La
bres mueren, el poema está centrado en la vida, en la aventura, en las muchas Odisea. Estas son sus direcciones:
ies- posibilidades que se ofrecen a la inteligencia del héroe que reflexiona, medita, y http://www.antorcha.net/
biblioteca_virtual/literatura/
encuentra la forma de vencer los obstácu los. La Odisea es un símbolo del héroe
http://www.cervantesvirtual.com/
;. La mortal, que sufre y aprende, que enfrenta desafíos y que vence la adversidad.
iles,
dos OTROS RECURSOS DE LOS POEMAS HOMÉRICOS
no-
no- • Epítetos: adjetivos o expresiones explicativas, propios de la persona a la que se aplican. Ejemplo:
Aquiles, el de los pies ligeros; Odiseo, rico en ardides; Atenea, la de los ojos de lechuza. Pero
llos
también se usan con objetos: las veloces naves; la espada, tachonada de argénteos clavos;
el labrado escudo.
a al • Descripciones minuciosas, por ejemplo: En la parte alta del puerto corre un agua
ijer, resplandeciente, una fuente que surge de la profundidad de una cueva, y en torno crecen álamos.
• Estilo d irecto, propio de la tradición oral. Se trata de reproducir lo que los personajes dicen.
Ejemplo:
lSe- -¡Aquí, Cíclope! Bebe vino después que has comido carne humana, para que veas qué bebida
con escondía nuestra nave.
fa- Él tomó, bebió y gozó la dulce bebida:
1

ta a
l -Dame más de buen grado y dime ahora ya tu nombre... ,,J

13
De Troya al Lacio*
au
LA INTERTEXTUALIDAD El poeta Virgi lio escribió La Eneida, una colección de poemas épicos que relata se
las aventuras de Eneas, héroe de la guerra de Troya . A diferencia de los personajes rr
Se denomina intertextualidad de Homero, Eneas no pertenece al bando de los griegos, sino al de los derrotados. tr
a la relación que se produce entre Así com ienza su poema:
dos o más textos, cuando en uno
e
de ellos aparecen enunciados A
tomados de otro. En algunos Voy a contar las proezas de un héroe, el primero entre todos, a quien el destino
casos, como el de la cita, la alejó despiadadamente de Troya, y que vino a Italia .. . re
intertextualidad es explícita.
Pero en muchísimas ocasiones, el
las
intertexto no se explicita sino que La obra pretend e mostrar a Eneas como el héroe perfecto. Hijo del mortal
aparece una alusión o referencia Anquises y de la diosa Venus, Eneas es un semidios. De su fam ilia nacerá la que, en
que algunos lectores descubren y
\)trosno. J unión con el dios Marte, será la madre de los mellizos Rómulo y Remo, fundadores
de Roma . De este modo el poeta intent a explicar la filiación divina del emperador ya
Augusto. vo
La Eneida es una historia de navegantes y guerreros, muertes y venganzas, tor- pe
mentas y amores, entre muchos otros temas. Ex iste una re lación de intertextua- cis
lidad entre La Eneida y los poemas de Homero. Ya en la Antigüedad se reconocía
la vinculación de los seis primeros cantos de La Eneida con La Odisea y de los seis
últimos, con La l/íada.

do
LaEneida
qu·
Destruida Troya, Eneas parte a fundar una nueva ciudad. Venus, su rec
VIRGILIO madre, lo ayuda; la diosaJuno*, en cambio, lo retrasa con una tempestad est
(70 a.c. - 19 a.C.) que lo arroja a las costas de Cartago. Allí la reina Dido se enamora del
héroe e intenta retenerlo. El canto IV narra los amores de Dido y Eneas y me
El poeta latino PublioVirgilio cómo Venus envía a Mercurio, el mensajero de los dioses, con el objeto de tie:
Marón escribió Las Bucólicas, recordar a su hijo la obligación de buscar un nuevo lugar para Troya.
en las que desarrolló temas
al;
de la tradición pastoril, y Las
Geórgicas, en apoyo de la política Canto IV gin
imperial. Pero trascendió por La Mercurio volaba entre la tierra y el cielo hacia la arenosa playa de Libia y Uff
Eneida, obra en la que se propuso ma
hendía los vientos. Apenas tocó con sus aladas plantas las cabañas de Cartago,
exaltar lasvirtudes del pueblo
romano y crear una mitología vio a Eneas, que estaba echando los cimientos de las fortalezas y de las casas de cal
para el origen de su nación. la nueva ciudad. Ceñía una radiante espada con empuñadura de verde jaspe, y
de los hombros le caía un manto de púrpura de Tiro, reluciente como lumbre,
regalo de la opulenta Dido, obra de sus manos, en que había entretejido delica-
das labores de oro. Al punto se llegó a él y le dijo:

Lacio: región central de Italia.


Juno: diosa del matrimonio y
reina de los dioses en la mitología
romana. Equivale a la diosa Hera de la
mitología griega.

14 I Capítulo 1 Los héroes míticos


- ¡Qyé!, ¡ahí estás ech ando los cimientos de la soberbia Cartago,y sometido
a una mujer, le edificas una hermosa ciudad, olvidando, ay, tu reino y tus intere-
ata ses! El mismo rey de los dioses, que ri~e con su voluntad suprema el cielo y la tie-
~j es rra, me envía desde el claro O limpo. El me ordena cruzar los raudos vientos para
los. traerte estos mandatos. ¿En qué piensas? ¿Con qué esperanzas pierdes el tiempo
en las tierras de Libia? Si nada quieres acometer por tu propia gloria, piensa en
Ascanio*, a quien reservan los dioses el reino de Italia y la romana tierra.
ino Dicho esto, se desp ojó Mercurio de la mortal apariencia, sin aguardar la
respuesta de Eneas, y se desvaneció ante su vista, a lo lejos, confundiéndose con
Ascanio: hijo de Eneas.
las leves auras. aparejar: poner a un buque su
rta l Enmudeció Eneas, consternado ante aquella aparición, y se erizaron de horror aparejo (velas, palos y jarcias) para
,en sus cabellos, y la voz se le pegó a la garganta. Atón.ito con tan grave aviso y con el que pueda navegar.
escuadra: conjunto de buques de
>res expreso mandato de los dioses, arde ya en deseos de huir y abandonar aquel dulce
guerra.
dar y amado suelo; mas ¡ah!, ¿cómo hacerlo? ¿Con qué razones osará ahora tantear la Fama: divinidad, mensajera de
voluntad de la apasionada reina? ¿Por dónde empezar a prepararla? Y mil rápidos Júpiter. Los poetas la representan
tor- pensamientos se suceden en su mente y la agitan. Después de una larga inde- como una mujer hermosa, que toca
una trompeta, o como un monstruo
:ua- cisión, llama a Mnesteo y a Sergesto y al fuerte Seresto, y les m anda que, con alado, horrible, con tantos ojos, orejas,
xía sigilo, aparejen* la escuadra* y, con disimulo, reúnan a sus compañeros en la playa, bocas y lenguas como plumas cubren
seis mientras él, cuando aun nada sepa la noble D ido, n.i espere ver roto un amor tan su cuerpo.
grande, verá cuál ocasión será la más propicia para hablarle y cómo salir bien de
aquel trance. Todos al punto obedecen y ejecutan sus órdenes.
Empero la reina (¿quien podría engañar a una amante?) presintió el aban-
dono y supo los movimientos que se preparaban.
La misma impía Fama* fue quien llevó a la enamorada Dido la nueva de La Eneida y otras artes
que se estaba armando la escuadra y dispon.iéndose la partida; con lo que, enfu- Oído y Eneas, de Henry Purcell
(1658-1695), es considerada la
recida, inflamada y fuera de sí, recorre toda la ciudad [... Jy a Eneas interpela en primera ópera nacional inglesa.
l estos términos: Se estrenó en Londres en 1689.
-¿Esperabas, pérfido, poder ocultarme tan negra m aldad y salir furtiva-
mente de mis estados?,¿no te contiene mi amor, ni esta diestra que te di en otro
tiempo, ni la desastrosa muerte que espera a Dido? [ ... ]
En tanto el piadoso Eneas, aunque bien quisiera consolar
a la triste Dido y calmar su afán con afectuosas palabras,
gimiendo amargamente y quebrantado su ánimo por
1ia y un grande amor, decide, no obstante, obedecer el
ago, mandato de los dioses. Los troyanos desen-
s de callan en toda la playa las altas naves.
Je, y [...]
1bre,
.ica-

15
Luego que se ha levantado en el interior de su palacio una gran pira*, con
teas* y ramas de encina, enguirnalda la reina aquel recinto, lo corona con fúnebre
pira: hoguera en que se quemaban ramaje, y coloca sobre el tálamo* los atuendos de Eneas, su espada y su imagen,
los cuerpos de los difuntos y las segura de la suerte que le aguarda. Varios altares rodean la pira, y la sacerdotisa,
víctimas de los sacrificios.
tea: palo impregnado con resina que,
suelto el cabello, invoca tres veces con voz tonante a los cien dioses infernales
encendido, sirve para alumbrar. [ ... ] al tiempo que derrama turbias aguas para simular las del Averno*.[ ... ]
tálamo: lecho conyugal. Ya la naciente Aurora inundaba la tierra de nueva luz, cuando vio la reina
Averno: nombre dado por griegos y desde la atalaya despuntar el alba y alejarse en orden la armada; vio también
romanos a un cráter que se creía era
la entrada al mundo de los muertos y
desierta la playa y el puerto sin remeros; y golpeándose tres y cuatro veces el
losespíritus. hermoso pecho y mesándose el rubio cabello* exclamó:
mesarse el cabello: arrancarse el -¡Oh, Júpiter!, ¡se me escapará ese hombre!, ¡ese advenedizo se habrá bur-
cabello con las manos en señal de
lado de mí en mi propio reino![... ]
preocupación.
Iris: mensajera al servicio de Juno, E sto diciendo, ha subido las gradas de la pira, [ ... ] se esfuerza por levantar
tenía una misión extraordinaria: los pesados ojos, y cae desmayada; y de la profunda herida que tiene debajo del
cortar el cabello de las mujeres que pecho sale silbando su aliento. E ntonces la omnipotente Juno, compadecida de
iban a morir.
Proserpina: diosa romana de la
aquel largo padecer y de aquella difícil agonía, manda desde el Olimpo a Iris*
vida, la muerte y la resurrección, para que desprenda de los miembros a aquella alma, afanada por romper su pri-
equivalente a la griega Perséfone. sión; porque muriendo la desventurada Dido, no por natural ley del destino ni
Orco: mundo de los muertos y los en pena de un delito, sino prematuramente y arrebatada de súbito furor, aun no
espíritusen la mitología roma na.
Estigia: laguna del infierno
había Proserpina* cortado de su frente el rubio cabello ni consagrado su cabeza
mitológico. al Orco* estigio*. Iris, pues, desplegando en los cielos sus alas, húmedas de rocío
que tiñe el opuesto sol de mil colores, se para sobre la cabeza de la reina:
-Cumpliendo con el mandato que he recibido, llevo este sacrificio y te des-
ligo de este cuerpo.
D ice así y corta el cabello con la diestra; disípase al punto el calor, y la vida se
desvanece en los aires.

~ ACTIVIDADES Virgilio, La Eneida. Adaptación de la traducción de E ugenio de O choa,


en Historia universal de la literatura, Barcelona, Orbis y Origen, 1984.
1. ¿Qué relación podría n
establecer entre el héroe
homérico y el de Virgilio? Las peripecias de Eneas
Elaboren un cuadro Las peripecias de Eneas terminan cuando el héroe llega a Sicilia, donde organiza juegos fúnebres
en honor de Anquises, su padre muerto. Desde allí se dirige a las costas de Italia, desciende a los
comparativo.
infiernos y tiene una visión del futuro.
2. ¿Qué semejanzas y qué Establece luego una alianza con el rey Latino, que le ofrece en matrimonio a su hija Lavinia. Pero Juno
diferencias se pueden provoca la enemistad de Turno, prometido de Lavinia. Eneas hace alianza con Evandro, rey de los
establecer entre Penélope y Arcadios y, durante su viaje, Turno ataca el campamento de los troyanos, quema sus barcosy ocupa el
campo.
Dido? Después de la batalla se dispone una tregua. Posteriormente Eneas ataca y vence al escuadrón de la
3. Reconozcan en La Eneida reina de las Amazonas, Camila; a los guerreros Volscos, y asalta la ciudad de La urento. Por último, el
recursos expresivos propios del héroe yTurno, protagonista y antagonista respectivamente, se enfrentan; la ninfa luturna ayuda a su
hermano Turno, y Venus a su hijo. Eneasvence aTurno y lo mata.
poema épico.

OTROS RECORRIDOS DE LECTURA


• Para conocer a un héroe que vivió hacia el año 2600 a.c. pueden cuneiformes. Cuenta las aventuras del semidiós sumerio
leer Las aventuras de Gilgamesh. Se trata de la narración más Gilgamesh y su amigo Enkidu. En el poema se cuestiona el
antigua que sobrevivió en doce tablillas escritas con caracteres significado de la vida, la muerte, la inmortalidad y el destino.

16 I Capítulo 1 Los héroes míticos


con Un viaje por la eternidad
ebre
gen, El sit io ofici al en la web de El Eternauta se
·tisa, ~
~

"...: abre con est as palabras: "Quien recorre el agua


.ales g es un acua nauta; qu ien recorre los astros, un
.;
a.
o astrona uta; q uien recorre el cosmos, un cos-
g
eina 2
~
mona uta y el q ue viaja po r la eternidad es el
Jién ,,
~

eterna uta''.
:¡;
'E
;:s el ~ En latín nauta significa "marino'; "navegante';
.;, y El Eternauta es el tít ulo de la obra que Héctor
)Uf- ..
.,;
~

e:
o Germán Oest erh eld y el d ibujante Francisco
·¡¡
..
'O Solano Ló pez crearon en 1957 y pu blicaron
n tar ..~
~
semanalmente en la revista Hora Cero durante
>del fl
e: dos años. La historieta narra la aventura de Juan
F
ade Q Sa lvo y su viaje por el espacio-tiempo. Salvo es
Iris* un héroe co nde nado a repetir su fut uro en un
pri- ciclo interm inable, ya que vaga por la eternidad
10 ni purificado por el olvido. Pero en ese devenir no está solo, lo acompaña Germán, un
nno guionista, que recuerda la histo ri a del Eternauta y la mantiene viva para los ho m-
Jeza bres del futuro.
o cío Existen diferentes ediciones de la obra, y en ellas su autor no solo fue modifi-
cando la trama, incorporando diferentes hechos, sino que contó con la colabo ra-
des- ción de distintos dibujantes. Su estructura es la de un relato enmarcado.

ia se La historieta, ¿un género marginal? LA TRAMA


Durante muchos años, la historieta fue considerada un género marg inal; pero
hoy se la valora como un medio de expresión que desafía al lector a relacionar la se- La trama es la organización de
choa, cuencia narrati va con las viñetas, en las q ue se reconoce un lenguaje mixto, verbal acontecimientos y acciones de
la obra para obtener un efecto
1984. e icónico. artístico determinado; se articula
Para el semiólogo Umberto Eco, la hist oriet a es un género literari o autó nomo, en función del cambio que va de
dotado de elementos estructurales p ropios, de una técni ca com unicativa original, la dicha al infortunio, o viceversa.
Busca establecer conexiones
fu ndada en la existencia de un código compa rti do por los lectores y al cual el autor
causales y no una simple sucesión
se remite para articular un mensaj e que se dirige simultáneamente a la inteligen-
cia, a la imaginación y al gusto de los propios lectores.
' ecuencial de los hechos. J
mo El Eternauta es una historieta realista argentina; es un relato que obliga al lector
a preg unta rse qué significa recordar y pa ra qué sirve, y también cómo se relaciona
·ael
eso que se recuerda con aq uello que se espera para el futuro.
Guillerm o Saccomanno, escritor argentino contemporáneo y periodista cultu- EL RELATO ENMARCADO
ra l, sostiene que "Oesterheld encarn a al creador intelectual anónimo que desde
su una redacción establece un sólido vínculo con una inabarcable masa de lect ores. Técnica narrativa mediante la cual
Esa clase de narrador mítico que goza y hace gozar conta ndo historias que no son se presenta una historia principal
y un conjunto de historias cortas
de nadie al ser de una comunidad. Oesterh eld se consideraba ante todo un arte- dentro de esta; se trata de una
sa no, quizás por ese motivo t rabaj aba con lápiz y pa pel amasando cada palabra, ' icción dentro de otra.
cada histori a, apa rtando una ruidosa máquina de escribir. Tampoco le preocupaba

J demasiado que muchos de sus personajes recorrieran el mundo sin citarse su auto-
ría.[...] [Fue un] creador que supo t ransform ar un género menor (menor por popu-
lar) en un objeto de culto prestigiante''.

17
El Eternauta
lla
Germán, un guionista de historietas, recibe la visita de un viajero del tiempo que
HÉCTORG. ro
OESTERHELD se hace llamar el Eterna uta y cuyo nombre rea l es Juan Salvo. Este le narra su odisea.
B
(1919 -1 977)
®' lfUIOO M.'fS ri
l!Alro ... Clllk)IÓ
IGUAL COMO "
Nació en Buenos Aires. Comenzó Al.GUI EN 6E HU-
l~ll'A ' ' AP0- b
su carrera como escritor de
0o
cuentos infantiles y textos de
divulgación científica. A partir
de 1950 se desempeñó como
guionista de historietas. El éxito
de tiras como Bu// Rockett y
Sargento Kirk lo llevaron a crear
la Editorial Frontera, que lanzó
las revistas Fron tera y Hora Cero. se
Sus personajes fueron dibujados
por prestigiosos artistas, como
Alberto Breccia, Hugo Pratt y ju1
Francisco Solano López, entre se
otros. Activo militante político, es
desde 1977 integra la lista de
el
desaparecidos durante la última
dictadura militar. en

cu
ca

El Eternauta le cuenta que vivía en Vicente López, con su esposa Elena y su hija ¿e
Martita. Un día, mientras compartía una partida de truco con sus am igos Favalli,
Lucas y Polsky, cayó una nevada mortal de copos fluorescentes que aniquiló a gran
parte de la humanidad. Ellos se sa lvaron gracias a que la casa estaba hermética-
ment e cerrada. Como supusieron que se trata ba de una cat ástrofe p rovocada por
pruebas nucl eares, buscaron comida, remedios y armas. Pronto comprendieron
que la nevada era el principio de una t errible invasión extraterrestre.

EWKY> llO'
LA MU~E,QUE Sl<GUÍA CAYEMOO DE
A los copo s les siguieron las invasio nes de
LO ALTO EH AOUElLOló COPOS TE NUES
BIH'°'4ES QUE, FO!>FOl<'ESC6NTES. AQUELLA HliVAM
6N LUG,<R CE
QUEDAA' All1A·
D1i l'li""-OILLA QUE 0E UN GOLl'e ~A· los Casca rudos, enormes insectos; los Manos,
&C.. BOR'llAOO CASI TODA LA VIDA ..
Flo.DOS EH UNA
ISLA, E<.T,(114· seres superd otado s que coma ndaban a los
IKJ'> AISLA~
liH HU;;&Tl!A Casca rudos, y los Hom bres-Robot, prisioneros
PROPIA CMA.
NO NOS ROCEA·
BA EL oa:ANQ.
al servicio del invasor gracias al implante de
Plif<'O s(LA
MUElrfE. un teledirector en la nuca.
.d':Íi:_ .
~· -

18 I Capítulo 1 Los héroes míticos


Los sobrevivient es se unen y comienza una serie de bata-
llas en lugares emblem áticos de la ciudad de Buenos Aires: la
:::¡ ue rotonda de Genera l Paz, la ca ncha de River, las Barra ncas de
sea. ~ Belgrano, hasta que en la bata lla de Plaza Italia hacen su apa-
:::
,.. rición los Gurbos, g igant escos animales que destrozan todo a
~

·~ su paso. Entre tanto, algunos países logran organ izarse y bom-


~
.2
, bardean Buenos Aires, base de la invasión .
~

~o
.t El grupo formado por Juan Salvo, Fava lli, Pablo, el perio-
..
vi dista Mosca y Franco sobrevive a la experiencia no sin antes
ie:í1
saber la tem ib le rea li dad: todos

---
o
·¡;
..
'ij

ti
los atacantes son so lo esclavos de
"' los verdaderos invasores, los El los,
~
ri
e: seres a los que nunca verán.
I=
o Juan intenta hu ir en una nave
junto a Elena y Ma rtita, pero son
...•/ / ~,.
se parados y los t res v iaj an por el
NTRE'. EL FRAGOR CATA6TRO-
F ICO Dt l.06 ecu:·icOG QUE ~
es pacio y el tiempo. Fi nalmente, CJE:t;;pt_~N ,RETUMBAEIAN
Lo<; ~.COY.O GOU"I::<; OE
el v iaj ero de la etern id ad aparece -"ARTINET90, CE LA10 INCRGI~
UNOIENOO EL PAVIMENTO A CA°" ~AVAN·
7ARQ¡ LENTAMENTE HACIA NCXiOTROG. <;E:GU-
~ BeGTIAG. Ro; OI& QJ •NMEl'50 ~ llCONTI~;•.G,.,...eu; Pl:XlEOO.
en la casa de Germán, en 1959, dos
años antes de la invasión. Al darse
cuenta de que su mujer e hija están aún vivas, en su casa, el Eterna uta corre a bus-
carlas y se fusiona con el Sa lvo del presente.
Germán se pregunt a si la hist oria que oyó es rea l y deja abierto el interrogante:
h ija ¿en dos años llega rá la invasión?
alli,
1ran POOl?ÍA iv.ne CEN-
TENAl?E!. DE NOM·
ica- Bf?E'!.. Y NO TE MEN·
por T IJ?(A: TODO!. HAN
SIPO M(°'. PEl?O
ro n QUIV: EL QU6 TE
f?E6ULTE MA'6 ~­
PREN"Blb-

;de
)05,
los

... 6EA EL QUE ME ... MI CONDICIÓN ~


~O UNA ESPEC.16 NAVEGANTE DEL
DE FILÓSOFO, DE TIEMPO, DE VIAJE·
FINE!. DEL !.IGLO RO DE LA 6TEll'NI·
XICI ... EL 'ITllNAU- DAD. MI T l<'l,TE Y
TA' ME LLMIÓ ~L ... OE60LADA CONDl-
PAR'A EXPLIGAI?, E.N C:ldN DE PEl?E61l'I·
UNA !.OLA PALABl?A- NO De L~ "Gl.06-

19
·1
La saga de El Eternauta q
se
El Eternauta no es una historieta más. Ha trascendido como una obra de arte
que permite incluirla entre las grandes obras de la literatura argentina. A la cali- ..,
5 va
dad e innovación de la historia hay que sumarle la decisión de Oesterheld de si-
E
.. m
tuar la acción en la Argentina. Numerosos lugares reconocibles para el lector se van ·a
o
sucediendo: las calles de Vicente López -donde la historia de Juan se inicia - , j,
se
el combate de la General Paz, el estadio de River Plate, las Barrancas de Belgrano, j de
Plaza Italia, la estación de subterráneo, Congreso. De este modo, Oesterheld acerca "~
al público el imaginario de la ciencia ficción, un género que se veía habitualmente J.

en producciones extra njeras, ubicándolo en el ámbito local y con un tono realista. .,"'"'e
§
Otra prueba de la importancia de su obra son las múltiples ediciones y conti - .,
ii

nuaciones que ha tenido hasta la fecha. Entre ellas, la publicación en Italia, de 1983, rl

con guión de Alberto Ongaro y dibujos de Mario Morían, Carlos Meglia y Oswald;
if!
e
·,::
las versiones de Pablo Maiztegui y Solano López, publicadas en serie con el título G

de El Eternauta. El mundo arrepentido, entre junio de 1997 y mayo de 1998; o la de


principios del año 2000, de los mismos autores, El Eternauta. El Regreso.
Libros, revistas y fascículos continuaron y continúan la obra de Oesterheld,
dando vida a los personajes de esta apasionante aventura.

1• •
la <
fici
pr<
2.
de
Condiciones de producción ar
En 1969, la rev ista Gente le e ncargó a mi
Oesterheld una nueva v ersión de El Eter- en
nauta. Con dibujos de Alberto Breccia, el texto 3.
tu vo que ser condensado por exigencias edito- ali.
riales. Sin embargo, el autor introdujo una im- inc
portante modificación respecto del original: la re!
invasión extraterreste ya no afectaba a todo el a.
planeta; ahora las grandes potencias pactaban b.
con el invasor la entrega de Sudamérica a cam - co
bio de no ser atacadas. 4.
En 1976, Ediciones Récord reeditó la obra es·
original y, además, le encargó a Oesterheld una co
continuación: El Eternauta 11. Nuevamente con la ·
dibujos de Solano López, la historia de Salvo ad- s.
quirió connotaciones políticas. Ubicada temporalmente unos trescientos años en ep
el futuro, Oesterheld presenta una Tierra devastada, dominada por los Ellos y en la es

20 1Capítulo 1 Los héroes míticos

L.._______._........._._.__._.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. . . .
que sobreviven muy pocos humanos, recluidos en cuevas. Juan Salvo es ahora un
ser con superpoderes que lucha contra los Manos y los Zarpos, sus soldados.
arte Germán y Sa lvo vivirán una serie de aventuras hasta ser transportados nue- El Eternauta y otras
ca li- ..,....
~
vamente en el tiempo. Pero el Salvo actual persigue sus fines sin importarle los manifestaciones de la
e si- cultura
E medios.
·van ~
·¡¡_ Esta obra ha sido leída como una referencia al contexto cultura l de su autor, in- En la estación Uruguay de la
3-, ~ línea B de subterráneos de la
2 serto en el movimiento político al cual pertenecía. Desde esa perspectiva, el viaje ciudad de Buenos Aires puede
~
ano, del Eternauta refleja una lucha por la resistencia frente a la impunidad, la soberbia y verse un mural dedicado a
":¡:
:¡;
erca ~ brutalidad de los invasores - person ificación del mal El Eternauta. El dibujo principal
corresponde a la versión de
?nte •
.,;
en la figura de los Ellos-, y la necesidad de unirse de
Alberto Breccia, y aparecen otros,
;ta. "'e
Q)
los seres humanos, para vencerlos.
o
·¡;
más pequeños, que reproducen
mti- ..
i5 los realizados por Solano López.
983, ~ En 1998, el Correo Argentino
~ emitió un sello dedicado a
1a ld; B
e
F El Eternauta, con ilustración de
tul o g
Solano López.
a de La ópera rock El Eterna uta está
basada en la primera parte de la
historieta y fue compuesta por
1eld,
Pablo Conti, y Pablo y Emiliano
Magliano.

ACTIVIDADES

1. Averigüen cuál es el contexto político en el que se produce la continuación de


la obra en 1976. ¿En qué medida puede ser leída solo como un texto de ciencia
ficción, o como un testimonio de acontecimientos contemporáneos a su proceso de
producción? Conversen entre ustedes y anoten las conclusiones.
2. El escritor y periodista Juan Sasturain sostiene que El Eternauta es el "mejor relato
de aventuras que ha dado este país y el mito más perdurable que creó la narrativa
argenti na en la segunda mitad del siglo XX''. ¿Por qué creen que Sasturain habla de
mito? ¿Qué ca racterizaba al héroe mítico en la Antigüedad clásica y qué lo caracteriza
en el siglo XX?
3. Algunos autores sostienen que en la obra aparece un protagonismo grupal, más
allá de que es Juan Salvo quien relata su historia. Para estos críticos, no hay un héroe
individual que supere a los demás: el protagonista es colectivo. Luego de leer la obra
respondan:
a. ¿Quiénes constituirían este grupo?
b. ¿Qué valor le adjudica el autor a este personaje colectivo? ¿Son sus integrantes
J com parables a los acompañantes de Ulises o de Eneas? ¿Por qué?
i 4. ¿Qué relación podrían establecer entre las figuras femeninas de las obras leídas en Pueden consultar el sitio
oficial de El Eterna uta en
este capítulo? ¿Elena está presentada como una heroína capaz de generar estrategias,
http://www.eternauta.com/
como Penélope, para no entregar el t rono a sus pretendientes; o como Dido, para dar Para conocer estrategias que
la vida por un ideal? los ayuden en la realización de
S. Dado que Salvo es un perso naje que vive una serie de aventuras, intercalen un historietas, consulten:
sen http://www.makebeliefscomix.
episodio dentro de la primera parte. Elaboren los dibujos, confeccionen las viñetas y
com/comix/
!n la escriban los textos.

21
EL HÉROE MÍTICO _;-
..
a.
Los poemas épicos son relatos que cuentan una 8
El halo trágico del héroe
~ nar
historia heroica, en la que el protagonista es un héroe "También -sostiene Muschg- hay un rasgo trá- ~
~

que lleva a cabo hazañas. La épica se refiere a textos gico inherente a la épica, arraigado en el pensamiento ~ do~
:2
literarios de la Antigüedad. heroico. A la ingenua alegría de vivir corresponde el ~ div1
Como sostiene Francisco Montes de Oca en su dolor por la transitoriedad. [...) Este halo trágico no es .¡
Teoría y técnica de Ja literatura : "La épica se propone expresión de debilidad, es la otra cara del orgullo mas- "'~
exalt ar sentimientos de tipo colectivo, patrióticos y culino, la sombra necesaria de la luz más radiante. En e:
o so~

religiosos". En los poemas épicos, el héroe debe en- el héroe más perfecto alienta la disposición a morir i5
" ra
frentar obstáculos en el cumplimiento de su misión; mientras se sienta en la cumbre de su poder. Tiene ~ -e
él encarna las cual idades, atributos y habilidades más que caer en medio del esplendor de la juventud para ~
apreciadas por su pueblo; por ejemplo, es un gran gue- ser un ejemplo inmortal. [...] La muerte y la vida son .,
!l
e: má
rrero, astuto, compasivo, o fiel, entre otros. Estos atri- una unidad natural, en toda poesía ingenua el gozo y
g
ela
butos hacen de este personaje un modelo a segui r. Su el sufrimiento están unidos indisolub lemente. Esta
historia se inserta en un marco cultural que acepta el necesidad impenetrable es el numen ante el cual se est
pensam iento mágico, porque la rel igión y el mito1 pro- inclina el cantor heroico" (capítulo " Los cantores",
porcionaban explicaciones sobre el mundo y su crea- pp. 188-189). za
ción, explicaciones que en la actualidad da la ciencia.
El t ono épico Lo
El deus ex machina Los poemas épicos están generalmente escritos
La expresión latina deus ex machina significa "dios en verso y tratan un asunto sublime, excelso, elevado,
que surge de la máquina" , y se origina en el teatro ya que expresan el espíritu de todo un pueblo, de una
de1
griego y romano, cuando una grúa (máquina) introdu- civilización; en ellos abundan las figuras retóricas 2 que
cía una deidad en el escenario para que resolviera una dan plasticidad a las descripciones y, en general, be- co~
situación. Desde entonces, se utiliza para referirse a lleza y ritmo al lenguaje. Entre las epopeyas de la Anti- tar
la intervención de un elemento externo a la historia. güedad se destacan el Mahabharata y el Ramayana, de
En el caso de los poemas épicos, se reconoce la inter- la India; La llíada y La Odisea, de Grecia, y La Eneida, ver
vención divina a través de elementos sobrenaturales o de Italia. ge1
maravillosos, por ejemplo, los dioses, los personajes Por lo expuesto se puede conclu ir que:
mito lógicos o los magos que ayudan u obstaculizan • En los poemas épicos se reconoce un héroe que de·
al héroe. En su Historia trágica de la literatura, Walter cumple una misión, venciendo obstáculos con la ayuda
Muschg sostiene que "el canto mundano de los pue- de seres superiores. du
blos culm ina en la glorificación del heroísmo guerrero • El héroe encarna las cualidades y atributos de su de
en el que se revela el supremo esplendor del hombre: época y de la cultura a la que pertenece.
el brillo de las armas, la alegría salvaje de la guerra, el • Los poemas épicos tienen un tono elevado, con
tumulto de la batalla [... ] es lo que arrastra a los canto- personajes de alta clase social y numerosas figuras
ex1
res hacia un placer admirativo, eso es lo que los hace retóricas. rar
tañer el arpa. Invocan a los dioses para protección y E. L. die
glori a del héroe radiante que sign ifica para ellos la
más alta realización de la vida. Ensalzan sus hazañas, Bibliografía
siguiendo sus acciones lo glorifican como predilecto
El
• CARMONA, CRISTINA, Bitácora de lectura, disponible en
de los dioses, lo deifican. En el héroe distinguen la pre- http://cczcris.blogspot.com/2009/04/ que-es-un-poema-epico.html
sencia divina en su forma más hermosa y lo adornan • MONTES DE ÜCA, FRANCISCO, Teoría y técnica de la literatura, México, mé
con los atributos de la inmortalidad: con las virtudes Porrúa, 1971.
Oí!
de la belleza y la sed de gloria , la fuerza y el honor, la • MuscHG, WALTER, La historia trágica de la literatura, México, FCE,
fidelidad y la venganza". colección Lengua y Estudios Literarios, 1965. de
qu
1 EI mito es una narración maravillosa, situada fuera del tiempo grupos: las de significado (antítesis, comparación, hipé rbole,
histórico y protagonizada por personajes de carácter divino o ironía, metáfora, metonimia, personificación, entre otras); las
heroico. Con frecuencia interpreta el origen del mundo o grandes de dicción (metátesis, paragoge, etcétera); las de repetición
cié
acontecimientos de la humanidad. (anáfora, exclamación, interrogación, onomatopeya, y otras), y las lle
2 Las figuras retóricas se emplean para dar énfasis a una idea. Esto de construcción, que afectan la estructura sintáctica (hipérbaton, m1
se produce a través de una desviación con respecto al sentido asíndeton, polisíndeton, etcétera).
literal de la palabra o grupo de palabras. Se reconocen cuatro
pa
Los textos académicos
se denomina discurso académico a los textos, ora les o escritos, que se relacio-
nan con la elaboración y transmisión de saberes. Pueden ser técnicos y estar dirigi-
dos exclu sivamente a los especia listas de una disciplina, o tener como objetivo la
divulgación de un tema para un público no especializado.
Ent re los textos académicos se reconoce: la reseña bibliográfica -comentario
so bre un texto recientemente aparecido-; la ponencia o comunicación -elabo-
rada para ser presentada en congresos o reuniones de especialistas-; el artículo
- que se publica en revistas profesionales-; la monografía -que trat a un tema
más exhaustivamente que un artículo; el ensayo -escrito breve, que propone una
elaboración personal sobre un tema generalmente polémico-.
Para su lectura, es aconsejable partir de lo que ya se conoce (¿qué sé sobre esto?) y
establecer un propósito (¿para qué leo esto?). También importa descubrir la organi- ~ ACTIVIDADES
zación de la información en los párrafos que lo componen e interpretar el paratexto.
1. ¿Qué se pretende explicar
Los recursos en el texto"EI héroe mítico"?
Para lograr que el lector comprenda un tema, se usan recursos tales como la ¿Incluye definiciones?
definición, los ejemplos y las reformulaciones. Márquen las en el texto.
Al definir se aclara el significado de una palabra o expresión. Los textos académi- 2. Reconozcan elementos
cos incluyen definiciones de las palabras propias de la disciplina, que pueden resul- paratextuales. ¿Qué aportan al
tar desconocidas para el lector. Las definiciones se reconocen por la presencia de los texto el títu lo y los subtítulos,
ve rbos ser, denominarse, llamarse. A veces, en su lugar, se usa coma o dos puntos. En las notas al pie, la bibliografía,
general, la definición responde a las preguntas: ¿Qué es... ?, ¿A qué se denomina .. . ? los tipos de letra (negrita,
La ejemplificación sirve para acercar los nuevos conceptos a la experiencia del bastardilla )?
destinatario, o para clarificarlos y posibilitar así una mejor comprensión. Para intro- 3. Subrayen las citas de
ducir los ejemplos suelen usarse los conectores por ejemplo y como. También pue- autoridad. ¿Qué signo auxiliar
den usarse los dos puntos en lugar del conector. las enmarca? ¿Qué relevancia
Por su parte, las reformulaciones expresan con palabras distintas una idea ya tienen? ¿Por qué se recu rrirá a
expuesta que puede presentar dificultades de comprensión . También se incorpo- ellas en un texto académico?
ran a través de conectores, como es decir, o sea, en otras palabras, a saber, esto es, 4. El texto hace especial
dicho de otro modo, o luego de los dos puntos. hincapié en la figura del
héroe. Marquen las diferentes
El paratexto maneras en que se refiere a él.
Los títulos y los subtítulos ayudan a entender cómo está organizada la infor- S. Subrayen los ejemplos que
mación - el tema general y los subtemas-. En genera l, el texto académico está aparecen en el texto. ¿Facil itan
organizado en apartados. Cada uno de ellos trata distintos subtemas o aspectos su comprensión?
del tema g lobal propuesto en el título del texto. Cada apartado lleva un subtítulo 6. Busquen la palabra numen
que anticipa el contenido que se desarrolla. en el diccionario e indiquen
Las fotografías y las ilustraciones, las tablas y las infografías completan la exposi- cuál de los significados que
ción del tema, es decir, agregan datos y ejemplos al texto principal. Habitualmente aparecen debería apl ica rse de
llevan epígrafe: una oración o un texto breve que resume el contenido de lo que se acuerdo con el cotexto.
muestra, o da algún dato aclaratorio. 7. ¿Qué recurso se emplea para
También las notas al pie son parte del paratexto. Sirven para hacer aclaraciones, resumir los datos que aporta
para brindar información complementaria o para dar referencias bibliográficas. el texto?
..

••'a¡

1. En La Odisea, Ulises se enfrenta con las sirenas, seres fabulosos cuyo extraordina-
rio canto seduce a los marinos y los lleva, generalmente, a la muerte. Lean el cuento
"El silencio de las sirenas'; del escritor checo Franz Kafka (1883-1924) y respondan a
las preguntas que siguen.

El silencio de las sirenas


Existen métodos insuficientes, casi pueriles, que también pueden servir para
la salvación. H e aquí la prueba: para protegerse del canto de las sirenas, Ulises
tapó sus oídos con cera y se hizo encadenar al mástil de la nave. Aunque todo .
el mundo sabía que este recurso era ineficaz, muchos navegantes podían haber
hecho lo mismo, excepto aquellos que eran atraídos por las sirenas ya desde
lejos. El canto de las sirenas lo traspasaba todo, la pasión de los seducidos ha-
bría hecho saltar prisiones más fuertes que mástiles y cadenas. Ulises no pensó
en eso, si bien quizá alguna vez, algo había llegado a sus oídos. Se confió por
completo en aquel puñado de cera y en el manojo de cadenas. Contento con
sus pequeñas estratagemas, navegó en pos de las sirenas con alegría inocente.
Sin embargo, las sirenas poseen un arma mucho más terrible que el canto:
su silen cio. No sucedió en realidad, pero es probable que alguien se hubiera
salvado alguna vez de sus cantos, aunque nunca de su silencio. Ningún senti-
miento terreno puede equipararse a la vanidad de haberlas vencido mediante
las propias fuerzas.
En efecto, las terribles seductoras no cantaron cuando pasó Ulises; tal
vez porque creyeron que a aquel enemigo solo podía herirlo el silencio,
tal vez porque el espectáculo de felicidad en el rostro de Ulises, quien solo
pensaba en ceras y cadenas, les hizo olvidar toda canción.
Ulises (para expresarlo de alguna manera) no oyó el silencio. Estaba con-
vencido de que ellas cantaban y que solo él estaba a salvo. Fugazmente, vio
primero las curvas de sus cuellos, la respiración profunda, los ojos llenos de
lágrimas, los labios entreabiertos. Creía que todo era parte de la melodía que
fluía sorda en torno de él. El espectáculo comenzó a desvanecerse pronto;
las sirenas se esfumaron de su horizonte personal, y precisamente cuando se
hallaba más próximo, ya no supo más acerca de ellas. a. Av
Y ellas, más hermosas que nunca, se estiraban, se contoneaban. D esple- b. ¿A
gaban sus húmedas cabelleras al viento, abrían sus garras acariciando la roca. enga
Ya no pretendían seducir, tan solo querían atrapar por un momento más el c. Tra
fulgor de los grandes ojos de Ulises. aba
Si las sirenas hubieran tenido concien cia, habrían desaparecido aquel día. d. ¿Q
Pero ellas permanecieron y Ulises escapó. e. ¿A
La tradición añade un comentario a la historia. Se dice que Ulises era tan
astuto, tan ladino, que incluso los dioses del destino eran incapaces de pe- 3. En
~~~~~~~~~~-,,,- netrar en su fuero interno. Por más que esto sea inconcebible para la mente bore
humana, tal vez Ulises supo del silencio de las sirenas y tan solo representó •(
tamaña farsa para ellas y para los dioses, en cierta manera a modo de escudo. les
• r
Franz Kafka, El silencio de las sirenas. Escritos y fi'agm entos póstumos, Barcelona, Debolsillo, 2005.
ªº
ina- a. Lean el canto XII de La Odisea, donde se narra el episodio en el q ue Ulises escapa
!nto de las sirenas. ¿Qué rasgos del héroe se recuperan en el cuento?
:ma b. ¿Qué estrategia se les adjud ica a las sirenas en el cuento de Kafka? ¿Por qué la
implementan?
c. ¿Quién es el vencedor de la contienda en la versión de Homero? ¿Y en el cuento
deKafka?
)ara
ises 2. Lean el soneto " Eneas y Dido': del poeta español Juan de Arguijo (1567- 1623) y
::ido realicen las actividades.
tber
:sde Eneas yDido
ha- De la fenisa"' reina importunado
nsó el teucro"' huésped le contaba el duro
por estrago que asoló el troyano muro
con y echó por tierra el Ilión sagrado.
.te.
fenisa: fenicia. Se refiere a Dido, la
1to: Contaba la traición y no esperado reina de Cartago, ciudad fundada por
iera engaño de Sinón* falso y perjuro, los fen icios.
1ti- el demarrado* fuego, el humo oscuro, teucro: natural de Troya. En este caso
se refiere a Eneas.
.nte y Anquises en sus hombros reservado . Sinón: guerrero griego.
demarrarse: extraviarse,
tal Contó la tempestad qu'embravecida descarriarse.
cio, causó a sus naves lamentable daño,
.olo y de Juno el rigor no satisfecho.

:m- Y mientras Dido escucha enternecida


v10 las griegas armas y el incendio extraño,
; de otro nuevo y mayor le abrasa el pecho.
:¡ue
ito; Juan de Arguijo en Poetas líricos de los siglos XVIy XVII, Madrid, Atlas, 1951.
) se
a. Averigüen qué clase de composición poética es un soneto.
b. ¿A q ué episod io de La Eneida hace referencia el soneto "Eneas y Dido"? ¿A qué
)Ca. engaño alude?
s el c. Tras la derrota, Eneas carga sobre sus hombros a su anciano padre Anquises para
abandonar Troya. ¿Qué valor le adjudica el poeta al héroe por esta acción?
:lía. d. ¿Qué postura adopta Juno respecto del viaje de Eneas? ¿A qué diosa se opone?
e. ¿A qué se refiere el último verso del poema?
tan
pe- 3. En pequeños grupos lean El Eternauta en cualquiera de sus versio nes. Luego ela-
nte boren un nuevo episodio de la saga ubicado en la actua lidad. Tengan en cuenta:
ntó • Caracterizar a los personajes de acuerdo con el tiempo y el espacio, y adjudicar-
.do. les una cierta ideología.
• Narrar una historia que permita una lect ura del contexto en que ocurren los
JOS. acontecimientos.
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Cosmogonías

Cuando los españoles iniciaron la conquista de América continental, en 1519, las


únicas sociedades urbanas existentes eran los aztecas, en la región mesoamericana,
y los incas asentados en la región andina. Los mayas, que vivieron en la península
de Yucatán, alcanzaron el período clásico de su cultura entre los años 300 y 900 de
nuestra era, organizados en ciudades-estado; su presencia en la realidad americana
precolombina se extendió hasta el siglo XV.
Los tres pueblos desarrollaron sus culturas a partir de la construcción de notables
obras d e riego y la aplicación de técnicas agrícolas adaptadas a las características de
su región; también practicaron el comercio. En sus monumentos, dejaron huellas de
sus conocimientos y de su complejo sistema de creencias religiosas.
Mayas y aztecas elaboraron códices con escrituras ideográficas en los que relataron
su historia y registraron sus saberes sobre la naturaleza y los seres humanos. Los
incas, por su parte, formaron un poderoso imperio que, en 1438, comprendía un
amplio territorio en el oeste sudamericano, atravesado por miles de kilómetros
de caminos y poblado por diez millones de habitantes. Un siglo después, cuando
llegaron los españoles, la rivalidad por el trono entre los hermanos Huáscar y
Atahualpa aceleró su fin.
La escultura en piedra de la página precedente representa a Coatlicue, diosa de la
tierra. Es una de las obras más características de la cultura azteca. En lengua náhuatl,
su nombre significa " la falda de la serpiente'~
En general, las cosmogonías precolombinas -relatos míticos que explican los
orígenes del mundo- se basan en la relación entre la vida y la muerte; y, como
se puede observar, estos elementos están en los símbolos que forman la enorme
figura: tiene pies y manos en forma de garras, serpientes entrelazadas, y el pecho
cubierto por cráneos, manos y corazones humanos. La cabeza de la diosa está
formada por dos cabezas de serpiente enfrentadas. Es decir, varios elementos reales
componen una figura imaginaria, bifronte.
PopolVuh la
c
Preámbulo
Este es el principio de la antiguas historias de este lugar llamado Qyiché*.
Aquí escribiremos y comenzaremos las antiguas historias, el principio y origen a
de todo lo que se hizo en la ciudad de Quiché.[ ... ] Cl
Esto lo escribiremos ya dentro de la ley de Dios, en el cristianismo, lo di
sacaremos a luz, porque ya no se ve el Popo! Vuh, así llamado, donde se veía
claramente la venida del otro lado del mar, la narración de nuestra oscuri- ci
dad, y se veía claramente la vida.
Existía el libro original, escrito antiguamente, pero su vista está oculta
al investigador y al pensador. Grande era la descripción y el relato de d
cómo se acabó de formar todo el cielo y la tierra, cómo fue formado y
repartido en cuatro partes, cómo fue señalado y el cielo fue medido y se lai
trajo la cuerda de medir y fue extendida en el cielo y en la tierra, en los la
cuatro ángulos, en los cuatro rincones; cómo fue dicho por el Creador
y el Formador, la madre y el padre de la vida, de todo lo creado, el que
da la respiración y el pensamiento, la que da a luz a los hijos, el que
vela por la felicidad de los pueblos, la felicidad del linaje* humano, ca
el sabio, el que medita en la bondad de todo lo que existe en el la:
cielo, en la tierra, en los lagos y en el mar.
e
Primera Parte - Capítulo 1 el
Esta es la relación de cómo todo estaba en suspenso, todo
en calma, en silencio; todo inmóvil, callado, y vacía la exten- sa
sión del cielo. Esta es la primera relación, el primer discur-
so. No había todavía un hombre, ni un animal, pájaros, peces, e
cangrejos, árboles, piedras, cuevas, barrancas, hierbas ni bos-
ques: solo el cielo existía. lo
No se manifestaba la faz de la tierra. Solo estaban el mar en se
calma y el cielo en toda su extensión.
No había nada que estuviera en pie; solo el agua en reposo, el
mar apacible, solo y tranquilo. No había nada dotado de existencia. ne
Solamente había inmovilidad y silencio en la oscuridad, en la noche.
Quiché: pueblo que habitó de
Solo el Creador*, el Formador*, Tepeu*, Gucumatz*, los Progenitores*estaban
Guatemala, donde estableció
un poderoso Estado, en tiempos en el agua rodeados de claridad. Estaban ocultos bajo plumas verdes y azules, y
precolombinos. Se conservan las por eso se les llama Gucumatz. D e grandes sabios, de grandes pensadores es su a
ruinas de su ciudad más importante: naturaleza. De esta manera existía el cielo y también el Corazón del Cielo, que
Gumarcaah o Utatlán. d<
linaje: ascendencia o descendencia
este es el nombre de Dios. Así contaban.
de una familia, especialmente noble. Llegó aquí entonces la palabra, vinieron juntos Tepeu y Gucumatz, en la le
el Creador y el Formador: se refiere oscuridad, en la noche, y hablaron entre sí. Hablaron, pues, consultando entre P.
a los dioses Tzacol y Bito l. sí y meditando; se pusieron de acuerdo, juntaron sus palabras y su pensamiento.
Tepe u: rey o soberano. la
Gucumatz: serpiente cubierta de Entonces se manifestó con claridad, mientras meditaban, que cuando ama-
plumas verdes. neciera debía aparecer el hombre. Entonces dispusieron la creación y creci- ti;
los Progenitores: referido a miento de los árboles y los bejucos* y el nacimiento de la vida y la creación del
lxpiyacoc e lxmucané: el viejo y la
hombre. Se dispuso así en las tinieblas y en la noche por el Corazón del Cielo,
vieja, los sabios.
bejuco: enredadera o planta que se llama Huracán. [ ... ]
trepadora. Entonces vinieron juntos Tepeu y Gucumatz; conferenciaron sobre la vida y

28 1Capítulo 2 Cosmogonías
la claridad, cómo se hará para que aclare y amanezca, quién será el que produz-
ca el alimento y el sustento.
-¡Hágase así! ¡<2.1ie se llene el vacío! ¡<2.1ie esta agua se retire y desocupe [el
ché*. ;:¡ espacio], que surja la tierra y que se afirme! -así dijeron-. ¡<2.1ie aclare, que
:::
~igen E amanezca en el cielo y en la tierra! No habrá gloria ni grandeza en nuestra crea-
-!o ción y formación hasta que exista la criatura humana, el hombre formado - así
9
10,lo a
Jl dijeron.
:veía "
~
Luego la tierra fue creada por ellos. A sí fue en verdad como se hizo la crea-
:::uri-
-i
J.
ción de la tierra:
-¡Tierra! - dijeron, y al instante fue hecha.
culta
.."'.n
e
o
Como la neblina, como la nube y como una polvareda fue la creación, cuan-
:o de ~.. do surgieron del agua las montañas; y al instante crecieron las montañas.
1doy ..rl"'
ol:
Solamente por un prodigio, solo por arte mágica se realizó la formación de
'y se l'l
e las montañas y los valles; y al instante brotaron juntos los cipresales y pinares en
;;
nlos o la superficie.
ador Y así se llenó de alegría Gucumatz, diciendo:
lque -¡Buena ha sido tu venida, Corazón del Cielo! [ ... ]
l que Primero se formaron la tierra, las montañas y los valles; se dividieron las
iano, corrientes de agua, los arroyos se fueron corriendo libremente entre los cerros, y
enel las aguas quedaron separadas cuando aparecieron las altas montañas.
Así fue la creación de la tierra, cuando fue formada por el Corazón del Cielo, el
Corazón de la Tierra, que así son llamados los que primero la fecundaron, cuando
el cielo estaba en suspenso y la tierra se hallaba sumergida dentro del agua.
todo De esta manera se perfeccionó la obra, cuando la ejecutaron después de pen-
:ten- sar y meditar sobre su feliz terminación.
:cur-
eces, Capítulo 11
bos- Luego hicieron a los animales pequeños del monte, los guardianes de todos
los bosques, los genios de la montaña, los venados, los pájaros, leones, tigres,
lf en serpientes, culebras, víboras, guardianes de los bejucos .
Y dijeron los Progenitores:
;o, el -¿Solo silencio e inmovilidad habrá bajo los árboles y los bejucos? Convie-
1oa. ne que en lo sucesivo haya quien los guarde.
Khe. Así dijeron cuando meditaron y hablaron en seguida. Al punto fueron crea-
aban dos los venados y las aves. En seguida les repartieron sus moradas a los venados
.ules, y a las aves.[... ] Luego designaron también su morada a los pájaros pequeños y
es su a las aves mayores. [ ... J
,que D e esta manera los Progenitores les dieron sus habitaciones a los animales
de la tierra. Y estando terminada la creación de todos los cuadrúpedos y las aves,
en la les fue dicho a los cuadrúpedos y pájaros por el Creador y el Formador y los
!ntre Progenitores:
en to. - Hablen, griten, gorjeen, llamen, hablen cada uno según su especie, según
ima- la variedad d e cada uno - así les fue dicho a los venados, los pájaros, leones,
reo- tigres y serpientes.
n del -Digan, pues, sus nombres, alábennos a nosotros, su madre, su padre. ¡Invo-
:ielo, quen, pues, a Huracán, Chipi- Calculhá, Raxa-Calculhá, el Corazón del Cie-
lo, el Corazón de la Tierra, el Creador, el Formador, los Progenitores; hablen,
ida y invóquennos, aclárennos! -les dijeron.

29
Las ediciones Pero no se pudo conseguir que hablaran como los hombres; solo chillaban, =
del Popo! Vuh cacareaban y graznaban; no se manifestó la forma de su lenguaje, y cada uno y1
Existen varias traducciones gritaba de manera diferente.
del Popo/ Vuh. Una de las más
di
Cuando el Creador y el Formador vieron que no era posible que hablaran, se ,.m
reconocidas es la de Adrián "
Recinos, que seguimosen este dijeron entre sí: ~~ tz
libro. Este historiador y ensayista -No ha sido posible que ellos digan nuestro nombre, sus creadores y for- 8
éi
er
guatemalteco es el autor de la g
madores. E sto no está bien -dijeron entre sí los Progenitores. ,!!
¡: fo
primera edición española del
Entonces se les dijo:
Popo/ Vuh a partir del manuscrito
- Serán cambiados porque no se ha conseguido que hablen. Hemos cam-
i
o
hallado en la Biblioteca Newberry,
deChicago. biado de parecer: su alimento, su pastura, su habitación y sus nidos los tendrán,
-
o:
.;.
Vl
"'

¡
También el escritor Miguel Ángel 'g
serán los barrancos y los bosques, porque no se ha podido lograr que nos adoren si
Asturias tradujo el texto a partir
de una versión francesa. En 1981, ni nos invoquen. Todavía habrá quienes nos adoren, haremos otros [seres] que ac
otro guatemalteco, Adrián Chávez, sean obedientes. Ustedes acepten su destino: sus carnes serán trituradas. Así
realizó una traducción, quizás la será. Esta será su suerte -así dijeron cuando hicieron saber su voluntad a los
más poética. Él no solo hablaba la
~
lengua quiché, también conocía
animales pequeños y grandes que hay sobre la faz de la tierra. [...] ~ su
en profundidad el mundo en el Así, pues, hubo que hacer una nueva tentativa de crear y formar al hombre
~
que se había desarrollado el texto por el Creador, el Formador y los Progenitores.
sagrado. Por esa razón, su versión - ¡A probar otra vez! Ya se acercan el amanecer y la aurora; ¡hagamos al que 1
he
resulta sumamente valiosa.
Chávez llama al libro Pop Wuj,
nos sustentará y alimentará! ¿Cómo haremos para ser invocados, para ser recor-
título que traduce como Libro del dados sobre la tierra? Ya hemos probado con nuestras primeras obras, nuestras pa
tiempo o Libro de acontecimientos. primeras criaturas; pero no se pudo lograr que fuésemos alabados y venerados su
por ellos. Probemos ahora a hacer unos seres obedientes, respetuosos, que nos
sustenten y alimenten -así dijeron.
Entonces fue la creación y la formación. D e tierra, de lodo hicieron la carne
[del hombreJ.Pero vieron que no estaba bien, porque se deshacía, estaba blando,
no tenía movimiento, no tenía fuerza, se caía, estaba aguado, no movía la cabe- sec
za, la cara se le iba para un lado, tenía velada la vista, no podía ver hacia atrás. Al en
principio hablaba, pero no tenía entendimiento. Rápidamente se humedeció 1
dentro del agua y no se pudo sostener. 1

Y dijeron el Creador y el Formador: 1

-Bien se ve que no podía andar ni multiplicarse. Qye se haga una consulta 1


e
acerca de esto -dijeron.
Entonces desbarataron y deshicieron su obra y su creación. Y en seguida rec
dijeron:
-¿Cómo haremos para perfeccionar, para que salgan bien nuestros adora- fo
dores, nuestros invocadores? -así dijeron cuando de nuevo consultaron entre sí.
-¡Prueben suerte otra vez! ¡Prueben a hacer la creación! -así dijeron entre
sí el Creador y el Formador cuando hablaron a Ixpiyacoc e Ixmucané. rü
t
En seguida les hablaron a aquellos adivinos, la abuela del día, la abuela del
alba, que así eran llamados por el Creador y el Formador, y cuyos nombres eran he
lxpiyacoc e Ixmucané. u
Y dijeron Huracán, Tepeu y Gucumatz cuando le hablaron al agorero, al '\ lo:
formador, que son los adivinos: ca
-Hay que reunirse y encontrar los medios para que el hombre que vamos a ne
crear nos sostenga y alimente, nos invoque y se acuerde de nosotros.[ ...]

30 1Capítulo 2 Cosmogonías
iban, -Echen la suerte con sus granos de maíz y de tzité*. Hágase así y se sabrá EIPopWuj
.uno y resultará si labraremos o tallaremos su boca y sus ojos en madera -así les fue deAdrián Chávez
dicho a los adivinos. A diferencia de la traducción de
Recinos, la versión de Chávez es
in, se A continuación vino la adivinación, la echada de la suerte con el maíz y el más hermética: su comprensión
tzité. "¡Suerte! ¡Criatura!'', les dijeron entonces una vieja y un viejo. Y este viejo resulta más compleja, aunque
· for- era el de las suertes del tzité, el llamado Ixpiyacoc. Y la vieja era la adivina, la guarda mayor musicalidad pues
trata de respetar la lengua original.
formadora, que se llamaba Chiracán Ixmucané.
No está dividida en secciones
Y comenzando la adivinación, dijeron así: y contiene notas que explican
:am- -¡Júntense, acóplense! ¡Hablen, que los oigamos, digan, declaren si con- y amplían la historia del libro,
drán, viene que se junte la madera y que sea labrada por el Creador y el Formador, y así como aspectos fonéticos y
morfológicos de la lengua quiché
loren si este [el hombre de madera] es el que nos ha de sustentar y alimentar cuando
o kiché, como él la llama.
] que aclare, cuando amanezca! [ ... J Quizás la más profunda diferencia
.. Así Entonces hablaron y dijeron la verdad: entre una y otra es la concepción
a los -Buenos saldrán sus muñecos hechos de madera; hablarán y conversarán de las deidades no como seres
duplicados, mellizos, sino como
sus muñecos hechos de madera, hablarán y conversarán sobre la faz de la tierra.
una sola deidad nombrada de dos
nbre -¡Así sea! -contestaron, cuando hablaron. maneras. Así, por ejemplo, los dos
Y al instante fueron hechos los muñecos labrados en madera. Se parecían al jóvenes dioses no son Hunahpú
hombre, hablaban como el hombre y poblaron la superficie de la tierra. e lxbalanqué, sino que el primero
lque
señala su condición de cazador y el
~cor­ Existieron y se multiplicaron; tuvieron hijas, tuvieron hijos los muñecos de segundo, su nombre propio.
:stras palo; pero no tenían alma, ni entendimiento, no se acordaban de su Creador, de Algunos estudiosos han visto
·ados su Formador; caminaban sin rumbo y andaban a gatas. en la versión de Chávez una
aproximación más objetiva al
~nos Ya no se acordaban del Corazón del Cielo y por eso cayeron en desgracia.
manuscrito original; con un
Fue solamente un ensayo, un intento de hacer hombres. Hablaban al principio, cuidado por la expresividad
:arne pero su cara estaba enjuta*; sus pies y sus manos no tenían consistencia; no poética y un énfasis en el sentido
mdo, tenían sangre, ni sustancia, ni humedad, ni gordura; sus mejillas estaban secas, pedagógico del texto.

:abe- secos sus pies y sus manos, y amarillas sus carnes. Por esta razón ya no pensaban
is.Al en el Creador ni en el Formador, en los que les daban el ser y cuidaban de ellos.
:leció Estos fueron los primeros hombres que en gran número existieron sobre la
faz de la tierra.

.sulta Capítulo 111


En seguida fueron aniquilados, destruidos y deshechos los muñecos de palo,
;uida recibieron la muerte.
Una inundación fue producida por el Corazón del Cielo; un gran diluvio se
:lora- formó, que cayó sobre las cabezas de los muñecos de palo. tzité: árbol de baya con semillas de
tre sí. D e tzité se hizo la carne del hombre, pero cuando la mujer fue labrada por el color rojo utilizado, junto con granos
de maíz, para la adivinación por los
entre Creador y el Formador, se hizo de espadaña* la carne de la mujer. Estos mate-
sabios y antiguos quichés.
riales quisieron el Creador y el Formador que entraran en su composición. enjuto: delgado, seco o de pocas
.a del Pero no pensaban, no hablaban con su Creador, su Formador, que los habían carnes.
eran hecho, que los habían creado. Y por esta razón fueron muertos, fueron anegados. espadaña: planta de tallos altos
y cilíndricos, con las hojas largas y
Una resina abundante vino del cielo. El llamado Xecotcovach llegó y les vació
estrechas dispuestas en dos filas y con
ro, al los ojos; Camalotz vino a cortarles la cabeza; y vino Cotzbalam y les devoró las flores en forma de espiga. Sus hojas
carnes . El Tucumbalam llegó también y les quebró y magulló los huesos y los secas se tejen.
nos a nervios, les molió y desmoronó los huesos.

31
Y esto fue para castigarlos porque no habían pensado en su madre, ni en su
padre, el Corazón del Cielo, llamado H uracán. Y por este motivo se oscureció la
faz de la tierra y comenzó una lluvia negra, una lluvia de día, una lluvia de noche. s
Llegaron entonces los animales pequeños, los animales grandes, y los palos y "''"'
::::
las piedras les golpearon las caras. Y se pusieron todos a hablar; sus tinajas*, sus 5
tinaja: vasija grande de barro cocido. ~

Sirve pa ra guardar agua, aceite u otros comales*, sus platos, sus ollas, sus perros, sus piedras de moler*, todos se levan- ~
g
líquidos. taron y les golpearon las caras. .E
coma!: utensilio de cocina de barro - Mucho mal nos hacían; nos comían, y nosotros ahora los morderemos .,
o metal, usado para cocer tortillas de
- les dijeron sus perros y sus aves de corral.
~
~
maíz, o para tostar granos de café o
de cacao. Y las piedras de moler: J.

piedra de moler: o metate, utensilio -Éramos atormentadas por ustedes; cada día, de noche, al amanecer, todo .."'
.,;

e:
o
·¡¡
usado como machacador en las
poblaciones de Mesoamérica y los
el tiempo hacían holi, holi, huqui, huqui nuestras caras, a causa de ustedes. Este ..
,;
d
era el tributo que les pagábamos. Pero ahora que han dejad o de ser hombres ~
países del sur de América Central. ~
probarán nuestras fuerzas. Moleremos y reduciremos a polvo sus carnes -les !!
e: r:
¡:
dijeron sus piedras de moler. g
f1
Y he aquí que sus perros hablaron y les dijeron: n
- ¿Por qué no nos daban nuestra comida? Apenas estábamos mirando y ya
nos arrojaban de su lado y nos echaban fuera. Siempre tenían listo un palo para l:
pegarnos mientras comían. A sí era como nos trataban. Nosotros no podíamos i:
hablar. 01iizás no les diéramos muerte ahora; pero ¿por qué no reflexionaban, e
por qué no pensaban en ustedes mismos? Ahora nosotros los destruiremos,
ahora probarán ustedes los dientes que hay en nuestra boca: los devoraremos F
-dijeron los perros, y luego les destrozaron las caras. e
Y a su vez sus comales, sus ollas les hablaron así:
- D olor y sufrimiento nos causaban. Nuestra boca y nuestras caras estaban
tiznadas, siempre estábamos puestos sobre el fuego y nos quemaban como si
no sintiéramos dolor. Ahora probarán ustedes, los quemaremos -dijeron sus
ollas, y todos les destrozaron las caras. L as piedras del hogar que estaban amon-
tonadas, se arrojaron directamente desde el fuego contra sus cabezas causándo-
les dolor. !!
Desesperados corrían de un lado para otro; querían subirse sobre las casas e
y las casas se caían y los arrojaban al suelo; querían subirse sobre los árboles y
los árboles los lanzaban a lo lejos; querían entrar a las cavernas y las cavernas se
cerraban ante ellos.
Así fue la ruina de los hombres que habían sido creados y formados, de los
hombres hechos para ser destruidos y aniquilados: a todos les fueron destroza- f
Para localizar dónde das las bocas y las caras. I
se desarrolló la cultura Y dicen que la descendencia de aquellos son los monos que existen ahora en l
maya-quiché, ver imágenes
los bosques; estos son la muestra de aquellos, porque solo de palo fue hecha su I
que remiten a su concepción
cosmogónica y leer el libro carne por el Creador y el Formador.
completo, pueden ingresar en: Y por esta razón el mono se parece al hombre, es la muestra de una genera-
http://www.literaturaguatemalteca. ción de hombres creados, de hombres formados que eran solamente muñecos y
org/popol.html
hechos solamente de madera.

32 1 Capítulo 2 Cosmogonías
~n su Tercera Parte - Capítulo 1
:ió la He aquí, pues, el principio de cuando se dispuso hacer al hombre, y cuando
xhe. se buscó lo que debía entrar en la carne del hombre.
Llosy y dijeron los Progenitores, los Creadores y Formadores, que se llaman Tepeu
*,sus yGucumatz:
van- -Ha llegado el tiempo del amanecer, de que se termine la obra y que aparez-
can los que nos han de sustentar y nutrir, los hijos esclarecidos, los vasallos civi-
~mo s lizados; que aparezca el hombre, la humanidad, sobre la superficie de la tierra.
Se juntaron, llegaron y celebraron consejo en la oscuridad y en la noche; lue-
go buscaron y discutieron, y aquí reflexionaron y pensaron. [... ]
todo Poco faltaba para que el sol, la luna y las estrellas aparecieran sobre los Crea-
Este dores y Formadores. [ ... ]
ibres Vinieron las mazorcas amarillas y las mazorcas blancas.[ ... ] Y así encontra-
-les ron la comida y esta fue la que entró en la carne del hombre creado, del hombre
formado; esta fue su sangre, de esta se hizo la sangre del hombre. Así entró el
maíz [en la formación del hombreJ por obra de los Progenitores.
>yya Y de esta manera se llenaron de alegría, porque habían descubierto una
para hermosa tierra, llena de deleites, abundante en mazorcas amarillas y mazorcas
irnos blancas. [ ... ] Abundancia de sabrosos alimentos había en aquel pueblo llamado
:iban, de Paxil y Cayalá.
mos, Había alimentos de todas clases, alimentos pequeños y grandes, plantas
~mos pequeñas y plantas grandes. Los animales enseñaron el camino. Y moliendo
entonces las mazorcas amarillas y las mazorcas blancas, hizo Ixmucané nueve
bebidas, y de este alimento provinieron la fuerza y la gordura, y con él crearon
:aban los músculos y el vigor del hombre. Esto hicieron los Progenitores, Tepeu y
no si Gucumatz, así llamados.
n sus A continuación entraron en pláticas acerca de la creación y la formación de
non- nuestra primera madre y padre. De maíz amarillo y de maíz blanco se hizo su
ndo- carne; de masa de maíz se hicieron los brazos y las piernas del hombre. Única-
mente masa de maíz entró en la carne de nuestros padres, los cuatro hombres
casas que fueron creados.
)les y
ias se Capítuloll El Popo! Vuh y otras artes
[ ... ] Se dice que ellos solo fueron hechos y formados, no tuvieron madre, El Museo Popo! Vuh ofrece al
visitante un recorrido único por
le los no tuvieron padre. Solamente se les llamaba varones. No nacieron de mujer, ni la historia de Guatemala, con una
roza- fueron engendrados por el Creador y el Formador, por los progenitores. Solo de las mejores colecciones de arte
por un prodigio, por obra de encantamiento fueron creados. [ ... JY como tenían prehispánico y colonial del país.
·raen El museo es una institución
la apariencia de hombres, hombres fueron; hablaron, conversaron, vieron y oye-
científica privada, no lucrativa,
ha su ron, anduvieron, agarraban las cosas; eran hombres buenos y hermosos y su que forma parte de la Universidad
figura era figura de varón. Francisco Marroquín. Sus objetivos
nera- Fueron dotados de inteligencia; vieron y al punto se extendió su vista, alcan- incluyen la conservación,
investigación y divulgación del
:cos y zaron a ver, alcanzaron a conocer todo lo que hay en el mundo.[ ... ] Grande era
patrimonio cultural y arqueológico
su sabiduría; su vista llegaba hasta los bosques, las rocas, los lagos, los mares, las de Guatemala. Para realizar una
montañas y los valles.[... ] visita virtua l pueden ingresar en:
Y en seguida acabaron de ver cuanto había en el mundo. Luego dieron las http://www.popolvuh.ufm.edu/
infog.htm
gracias al Creador y al Formador:

33
-¡En verdad les damos gracias dos y tres veces! H emos sido creados, se nos
ha dado una boca y una cara, hablamos, oímos, pensamos y andamos; sentimos
L
perfectamente y conocemos lo que está lejos y lo que está cerca. Vemos también
lo grande y lo pequeño en el cielo y en la tierra. L es damos gracias, pues, por ::: res
habernos creado.[... ] "
~ yl
Acabaron de conocerlo todo y examinaron los cuatro rincones y los cuatro ~ de
puntos de la bóveda del cielo y de la faz de la tierra. j
Pero el C reador y el Formador no oyeron esto con gusto. .
3
,,:!l ra
:<
-No está bien lo que dicen nuestras criaturas, nuestras obras; todo lo saben, ~ rer
lo grande y lo pequeño -dijeron. -
Y así celebraron consejo nuevamente los Progenitores:
".."'"'
e
.g mi
-¿Qyé haremos ahora con ellos? ¡Oye su vista solo alcance a lo que está ..13
<i de
cerca, que solo vean un poco de la faz de la tierra! No está bien lo que dicen. ."' qu
.i:
¿Acaso no son por su naturaleza simples criaturas y hechuras [nuestras]? ¿H an fle
¡:
de ser ellos también dioses? ¿Y si no procrean y se multiplican cuando amanez- g
El
ca, cuando salga el sol? ¿Y si no se propagan? -así dijeron.
-Refrenemos un poco sus deseos, pues no está bien lo que vemos. ¿Por
ventura se han de igualar ellos a nosotros, sus autores, que podemos abarcar ha
grandes distancias, que lo sabemos y vemos todo? [ ...J ca
A sí hablaron y en seguida cambiaron la naturaleza de sus obras, de sus lo:
criaturas. tré
Entonces el Corazón del Cielo les echó un vaho sobre los ojos, los cuales se
empañaron como cuando se sopla sobre la luna de un espejo. Sus ojos se velaron irr
y solo pudieron ver lo que estaba cerca, solo esto era claro para ellos. ar
Así fue destruida su sabiduría y todos los conocimientos de los cuatro hom- es
bres, origen y principio [de la raza quiché].
Así fueron creados y formados nuestros abuelos, nuestros padres, por el m
Corazón del Cielo, el Corazón de la Tierra. li<
01
Anónimo, Popo! Vuh. Las antiguas historias del Quiché, México, G
Fondo de Cultura Económica, 1975 {fragmento adaptado).
e1

N
111
n
e
p
q

34 I Capítu lo 2 Cosmogonías
nos Los mitos de los orígenes
mos
Jién Todos los pueblos del mundo han tratado de responder a las preguntas que se
por resuelven en los primeros capítulos del Génesis bíblico: ¿cómo se formaron el cielo
y la tierra?, ¿de dónde surgió el hombre con su cuerpo y su alma?, ¿qué hay más allá
atro de la muerte?
A estos y otros interrogantes los distintos pueblos, a pesar de encontrarse sepa-
rados en el tiempo y el espacio, responden -para sorpresa de los estudiosos de las
ben, religiones- de manera semejante.
Los mitos de creación, denominados cosmogonías, son una forma de conoci-
miento, diferente de la ciencia y la filosofía. Hay en esos mitos una verdad producto
est á de la fe, pues tienen un valor religioso. El mito de los orígenes, para cada cultura
cen. que cree en él, es historia verdadera, porque es sagrada.
~fan

lez- El libro sagrado de los mayas-quichés


Por Los misioneros españoles que tuvieron a su cargo la instrucción religiosa de los
rcar habitantes del Nuevo Continente también les enseñaron a hablar y a leer en lengua
castellana. Algunos aprend ieron a escrib ir con el alfabeto latino y así transcribieron
sus los textos indígenas. De este modo se conservaron las narraciones que se habían
transmitido en forma oral, de generación en generación.
:s se El Popo/ Vuh o Libro del Consejo fue recopilado en lengua quiché, en una época
tron imprecisa, por un indígena de Santo Tomás de Chichicastenango que conocía las
antiguas tradi ciones de Guatemala. El compilador, según manifiesta en el prólogo,
)ID-
escribió después de la conquista, bajo la influencia del cristianismo.
A pri ncipios del siglo XVIII, el fraile Francisco Ximénez tomó contacto con este
1r el manuscrito y se dedicó a estudiarlo y traducirlo al español. Para garantizar la fide -
lidad de su re lato, transcribió también, a su lado, el documento indígena. Este y
otros trabajos de fray Ximénez permanecieron en la biblioteca de la Universidad de
:xico, Guatema la hasta 1830. Allí los encontró el austriaco Carl Scherzer, quien los publicó
ado).
en Viena en 1857.
El manuscrito del padre Ximénez se conserva en la actua lidad en la Biblioteca
Newberry de Chicago. Pero quien realmente hizo famoso el libro sagrado de los La cultura maya-quiché
mayas fue Brasseurde Bourbourg; él lo tradujo al francés y lo publicó en 1861 con el La civilización maya, que
habitó el área mesoamericana
nombre de Popo/ Vuh. Literalmente Popo/ Vuh significa "l ibro de la comunidad o del
antes de la llegada de los
consejo", donde popo/ es "junta'; "reunión" o "casa común'; y vuh o uúh significa "pa- españoles, estaba formada por
pel" o"trapo"y deriva del maya; rem ite al árbol con cuya corteza se hacía el papel y nu merosos pueblos, entre los
que los nahuas llaman amatl. que es posible mencionar a los
quichés, los cakchiqueles, los
ch oles y los mayas, que es el
La estructura del relato colectivo mejor conocido y que,
En el Popo/ Vuh se distinguen tres partes. La primera es una descri pción de la a su vez, da nombre a todo el
grupo. Se extendieron por los
creación y origen del hombre; la segunda se refiere a las aventuras de los jóvenes
actuales estados mexicanos de
semidioses Hunahpú e lxbalanqué y de sus ancestros sacrificados por los genios Yucatán, Campeche, Tabasco
del mal en el reino de Xibalbá. y Chiapas; por un área extensa
La tercera parte cuenta el origen de los pueblos indígenas de Guatema la, sus de Guatemala, y por algunas
regiones de Belice y Honduras.
migraciones y distribución en el territorio antes de la conquista española.

35
La creación del hombre en el Popo/ Vuh
En los primeros capítu los del Popo/ Vuh se pueden reconocer las etapas de
creación del mundo, partiendo de un caos inicial, y la s distintas creaciones del ser
humano hasta dar con la estirpe definitiva. Dos parejas realizan los actos de crea-
ción en esta cosmogonía: la pareja de los Cons-
60· tructores y Formadores, y la de los Gestantes y
Fecundadores. Ellas crean a partir de la palabra
y de sus deliberaciones. Cuando comienza la
narración ya está construida la estructura o es- ga
pacio limitado y se encuentra formado el firma-
mento, el Corazón del Cielo. ye
En el caos hay agua, elemento primordial en

NOR E
todas las cosmogonías, que también reconocen s
• Ecuador el silencio y las tinieblas anteriores a la creación
propiamente dicha.
Posteriormente emerge la tierra y sobre ella, El
como un manto, la vegetación. Aparecen luego la (
los seres animados: los que no tienen entendi- la
miento; los que tienen forma humana, pero son N~
- 20: de barro y se deshacen; los de madera, que no en
OctANO tienen sangre ni vísceras. La cua rta creación es Vu
PACÍFICO de criaturas bellísimas, de carn e y sangre, con
SUR inteligencia suprema, a las que se les permitió los
saber demasiado y por eso fueron condenadas
a una existencia más humana. Sus hijos consti -
tuirán la comunidad de los mortales. Intercala-
das con estas etapas de creación aparecen las
Dominio inca de destrucció n, que se reconocen en la mayoría dij
so· 60"
de las narraciones cosmogónicas de América y es<
El mapa muestra los territorios que ocuparon las tres culturas precolombinas dependen de los cuatro elementos: agua, ai re, el .
más importantes: mayas, incas y aztecas. fu ego y tierra. H
m~

SU!

~ ACTIVIDADES
de
1. Relean la cosmogonía maya-quiché y seña len en el texto • Cuarta destrucción: los seres son condenados a perder casi
los fragmentos que responden a la siguiente estructura. todo su poder de visión y su saber.
• Caos y oscuridad iniciales. 2. En pequeños grupos elaboren un cuadro comparativo
• Designio de los Creadores. entre el texto del Popo/ Vuh y el Génesis bíblico. ¿Cuál es la e
• Separación de la tierra. influencia que la conquista y su transmisión del cristianismo
• Primer acto de creación: las plantas y los animales. ej erció sobre el nativo que realizó el manuscrito
• Primera destrucción. conservado? la
• Segundo acto de creación. 3. ¿En qué momento del relato les parece que el pueblo se
• Segunda destrucción: las criaturas de lodo se deshacen en transformó de nómada en sedentario? cfr
el agua. 4. Relean el fragmento de la rebelión de los objetos. se
·Tercer acto de creación: los hombres de madera. Escriban un texto en que se produzca una rebel ión de
• Tercera destrucción. objetos en el siglo XXI. có
• Cuarto acto de creación. ell

_________________________________
[.._
36 1Capítulo 2 Cosmogonías
Los héroes cosmogónicos mayas
pas de
del ser La segunda parte del Popo/ Vuh relata las hazañas de dos héroes, los gemelos
le crea- ..,~ Hunahpú e lxbalanqué, y cómo vencieron a los Señores de Xibalbá, los Príncipes del
s Cons- g Infierno. La leyenda cuenta que su padre, Hun-Hunahpú, y su tío, Vucub-Hunahpú,
~
·¡;_
antes y nacieron en la oscuridad de la noche, antes de que existieran el Sol y la Luna, antes
)a labra
j7
de que fuese creado el hombre. Ellos solían jugar a la pelota, pero el ruido moles-
~

2nza la "O
taba a los Señores de Xibalbá, quienes los desafiaron en sus dominios. Cuando lle-
~
ra o es- ~ garon allí, fueron sometidos a engaños y asesinados.
1 firma-
J.
.,¡ Los capítulos que siguen narran cómo fueron concebidos Hunahpú e lxbalanqué
.."'
e
o y cómo se vengaron de los Príncipes del Infierno.
·¡;
·dial en ..11

)nocen "'
~
Segunda Parte - Capítulo 11
·eación ~
¡::
[ ... ]
g Los castigos de Xibalbá eran numerosos; eran castigos de muchas maneras.
)re ella, El primero era la casa Oscura, en cuyo interior solo había tinieblas. El segundo,
, luego la casa donde tiritaban. El tercero, la casa de los Tigres. La casa de los Murcié-
itendi- lagos se llamaba el cuarto lugar de castigo. El quinto se llamaba la casa de las
:ro son Navajas, dentro de la cual solamente había navajas cortantes y afiladas. Muchos
que no eran los lugares de tormento de Xibalbá. Cuando entraron H un-Hunahpú y
ción es Vucub-Hunahpú [... ]les dijeron:
re, con -Está bien. Hoy será el fin de sus días. Ahora morirán. Serán destruidos,
?rm it ió los haremos pedazos y aquí quedará oculta su memoria. Serán sacrificados.
:nadas En seguida los sacrificaron y los enterraron en el Pucbal-Chah, así llamado.
consti- Antes de enterrarlos le cortaron la cabeza a Hun-Hunahpú y enterraron al her-
:ercala- mano mayor junto al hermano menor.
cen las - Lleven la cabeza y pónganla en aquel árbol sembrado en el camino -
iayoría dijeron. Y habiendo ido a poner en él la cabeza, al punto se cubrió de frutas
1érica y ese árbol que jamás había fructificado antes. Con admiración contemplaban
1a, aire, el fruto redondo que estaba en todas partes; pero no se distinguía la cabeza de
Hun-Hunahpú; era un fruto igual a los demás . La naturaleza de este árbol era
maravillosa, por lo que había sucedido en un instante, cuando pusieron entre

-
der casi
sus ramas la cabeza de Hun-Hunahpú. Y los Señores de Xibalbá ordenaron:
- ¡Qye nadie venga a tomar de esta fruta! ¡Qye nadie venga a ponerse cerca
de este árbol!
Sin embargo, una muchacha oyó la historia maravillosa. Ahora contaremos
cómo fue su llegada.
tivo
es la Capítulo 111
3nismo Esta es la historia de una doncella, hija de un Señor llamado C uchumaquic.
Llegaron [estas noticias] a sus oídos. Su nombre era Ixquic. Cuando ella oyó
la historia de los frutos del árbol, se quedó admirada de oírla.
-¿Por qué no he de ir a ver ese árbol que cuentan? -exclamó la joven-,
ciertamente deben ser sabrosos los frutos de que oigo hablar. A continuación
se puso en camino ella sola y llegó al pie del árbol sembrado en Pucbal- Chah.
-¡Ah!, ¿qué frutos son los que produce este árbol? ¿No es admirable ver
cómo se h a cubierto de frutos? ¿M e he de morir, me perderé si corto uno de
ellos? -dijo la doncella.

37

, .._,,Ir, . . ..·~~;
Habló enton ces la calavera que estab a entre las ramas del árbol y dijo:
-¿ Qyé es lo que quieres? E stos objetos redondos que cubren las ramas del
El h
• Si quieren observar
árbol no son más que calaveras-así dijo la cabeza de H un-H unahpú dirigién-
Al
versiones manuscritasde la dose a la joven-. ¿Por ventura los deseas? - agregó. ::: ro n e
obra en quiché y español, visiten:
:::
- Sí, los deseo - contestó la don cella.
http://library.osu.edu/sites/
E dad c
-Muy bien -dijo la calavera- . Extiende hacia acá t u m ano derecha. ·~
o fil osó
popolwuj/
• Para leer completa la historia - Bien - replicó la joven, y extendió su mano en dirección a la calavera. j expli
~
de los gemelos, ingresen en la E n ese instante la calavera lanzó un chisguete de saliva que fue a caer direc- "
~

:o de H
biblioteca virtual de la Universidad :e
tamente en la palma de la mano de la doncella. Se miró esta rápidamente y con ~
de San Carlos de Guatemala:
atención la palma de la mano, pero la saliva de la calavera ya no estaba en ella. ./.
http://www.digi.usac.edu.gt/ .;
- En mi saliva y mi baba te h e dado mi descend encia - dijo la voz en el ..""' La
:Q
árbol- . Ahora mi cabeza ya no tiene nada encima, no es más que una calavera ..
"O

despojada de carne. Así es la cabeza de los grandes príncipes, la carne es lo único B


"'
~
M ue.
que les da una hermosa apariencia. Y cuando mueren se espantan los h ombres ~ Teno
¡::
a causa de los huesos. Así es también la naturaleza de los hijos, que son como la o aztec
saliva y la baba, ya sean hijos de u n Señor, de un hombre sabio o de un orador.
Su condición no se pierde cuando se van, sino que se hereda; no se extingue ni E1
~ ACTIVIDADES desaparece la imagen del Señor, del h ombre sabio o del orador, sino que la dejan cuatrc
a sus hijas y a los hijos que engendran. E sto mismo he h ech o yo contigo. Sube, u
1. Comparen los héroes míticos pues, a la superficie de la tierra, que no morirás. [ ...] seguí
del capítulo 1 con Hunahpú L a doncella volvió a su casa, habiendo concebido inmediatamente los hijos do lo:
e lxbalanqué, teniendo en su vientre por la sola virtud de la saliva. Y así fueron engendrados H unahpú jaron
en cuenta sus acciones y e Ixbalanqué.
características. y
2. La madre de los jóvenes es El destino de lxquic
una heroína mítica, ¿cuá les son Al enterarse del estado de su hija, el padre de la doncella expone su problema ante la asamblea de
perve
losSeñores de Xibalbá, quienes deciden que unos mensajeros la maten y les lleven su corazón como
sus características? prueba. Sin embargo, lxquic logra convencerlos de que la perdonen y engañen a los Señores con C1
3. En la historia de la una bola de resina roja en lugar de su corazón. La muchacha huye entonces al mundo superior y los su
concepción de Hunahpú e se refugia en la casa de Hun-Hunahpú. Tras cierto tiempo, lxquic da a luz a los gemelos Hunahpú e bebé
lxbalanqué se hace alusión lxbalanqué, que vengarán a su padre en el reino de Xibalbá. También ellos son llevados a la casa de
le dije
la Oscuridad, a la de las Navajas, a la casa del Frío y a la de los Tigres, donde son sometidos a grandes
a un fruto prohibido. ¿Con pruebas, pero no mueren a causa de lostormentos, ni son vencidos por los animales ferocesque allí
qué hecho del Génesis habitan. Entonces los Señores del Infierno preparan una gran hoguera y los llaman para que pasen C1
bíblico podría relacionarse? por encima de ella. Los mellizos se dejan ir sobre el fuego y mueren juntos. Todos los de Xibalbá se to; lm
llenan de alegría creyendo que los han vencido.
Intercambien opiniones acerca nació
de si este episodio puede ser dardc
originario del pueblo maya- Molieron sus huesos y hechos p olvo los arroj aro n a la corrien te del río cortó
quiché o si recibió influencia siguiendo los consejos de los adivinos, pero el agua no se los llevó sino que, h acia
de la conquista y colonización yéndose al fondo, se convirtieron en dos hermosos muchachos. [...] Tomaron a cabez
cristiana. uno de los que miraban, lo hicieron pedazos y en un instante lo juntaron todo y Sol. .E
4. Cuando Hunahpú vuelca lo resucitaron.[ ... ] Al ver estos prodigios los Señores pidieron también ser des- dispe
su sem illa en la palma de la pedazados y resucitados. Los muchachos los despedazaron p ero ya no volvieron cuanc
doncella pronuncia palabras a resucitarlos. Y así fueron vencidos los Señores de Xibalbá, los Prín cipes del se los
acerca de los hombres y su Infierno, por Hunahpú e Ixbalanqué, quienes, después de haber vengado en los E1
descendencia, ¿qué conceptos de Xibalbá la muerte de su p adre, subieron al cielo : uno fue puesto por Sol y el y sen
pueden rescatar? otro por Luna; así se iluminó la bóveda del cielo y la faz de la tierra. toma1

Anónimo, Popo! Vuh. Las antiguas historias del Quiché, M éxico,


Fondo de Cultura E conómica, 1975 (fragmento adaptado).

38 I Capítulo 2 Cosmogonías

____________._.................................
El héroe cosmogónico azteca
as del
gién- A principios del siglo XIV, los mexicas -también llamados aztecas- domina- La obra de Bernardino
::l ron el valle de México luego de sojuzgar a otros pueblos, y fundaron allí su ciu - deSahagún
"' dad capita l: Tenochtitlán. Poseían una rica y compleja tradición religiosa, política, Fray Bernardino de Sahagún
E
,; (1499-1590) vivió en una época
¡;. filosófica, astronómica y artística. Como otras culturas, también ellos buscaron una
de transición de dos culturas, y
a. ~ explicació n al origen del mundo a través de las aventuras de sus dioses, en especial,
Jl comprendió que la mexica iba
~
lirec- ...
M
de Huitzilo pochtli. a desaparecer absorbida por la
~ europea. Desde 1547 comenzó
y con
~lla. -~J. a recopilar datos acerca de las

en el .."' La leyenda de Huitzilopochtli


creencias y costumbres de los
antiguos mexicanos. Para llevar
"eo
·¡¡
avera i a cabo su tarea inventó y puso en
.ínico IS marcha un moderno método de
:a M ucho honraban los mexicas a Huitzilopochtli, dios supremo de investigación: ayudado por un
J:
nbres J!e T enochtitlán, patrono de la guerra, el fuego y el sol. Protector de los equipo de estudiantes, elaboró
¡:
mola o aztecas, él les ordenó llamarse mexicas. Así narraban su origen. cuestionarios que distribuyó
~ador. entre ancia nos indígenas,
conocidos como los "informantes
:ue ni En Coatepec habitaba una mujer de nombre Coatlicue*. Era madre de los de Sa hagún''. Su obra, la Historia
:iejan cuatrocientos surianos* y de una hermana de nombre Coyolxauhqui. general de las cosasde la Nueva
3ube, Una vez, sobre ella bajó un plumaje, como una bola de plumas finas. En España (conocida como Códice
Florentino), consta de doce libros
seguida lo recogió y colocó en su seno. En ese momento quedó encinta y cuan-
escritos en náhuatl, castellano y
hijos do los cuatrocientos surianos vieron que su madre estaba embarazada, se eno- latín, entre 1547y 1577.
ahpú jaron y dijeron:
- ¿Qyién le ha hecho esto? Nos afrenta, nos deshonra.
Y su hermana Coyolxauhqui les dijo:
- Hermanos, ella nos ha deshonrado, hemos de matar a nuestra madre, la
e
perversa que se encuentra ya encinta. ¿Qyién le hizo lo que lleva en el seno?
mo
Cuando supo esto, Coatlicue se espantó y se entristeció mucho. Pero uno de
los surianos, llamado Qyauitlicac, sintió pena por su querida madre y le contó al
bebé por nacer, Huitzilopochtli, la traición que preparaban sus hermanos. Este
le
le dijo a la madre desde su seno:
les
3ilí - No temas, yo sé lo que tengo que hacer.
·n C uando los surianos estuvieron resueltos a matar, se pusieron en movimien-
to; los guiaba Coyolxauhqui. [ ... ]Entonces ocurrió el milagro: en ese momento
nació Huitzilopochtli, se vistió sus atavíos, su escudo de plumas de águila, sus
Coatlicue: diosa de la tierra y de la
dardos, su lanzadardos azul, se pintó el rostro.[ ...] Hirió a Coyolxauhqui, le
vida.
:1 río cortó la cabeza, que quedó en la ladera de Coatepec, y su cuerpo fue rodando suriano: natural del sur de México.
que, hacia abajo, cayó hecho pedazos, por diversas partes. H uitzilopochtli tomó la
ron a cabeza de su hermana, la arrojó al cielo, y se convirtió en la Luna, siendo él, el
)doy Sol. Entonces Huitzilopochtli persiguió a los cuatrocientos surianos, los hizo
des- dispersarse desde la cumbre de Coatepec. [ ... ] Cuando les hubo dado muerte,
1eron cuando hubo dado salida a su ira, les quitó sus atavíos, sus adornos, y se los puso,
s del se los apropió, los incorporó a su destino, hizo de ellos sus propias insignias.
nlos Entonces a él lo veneraban los mexicas, le hacían sacrificios, lo honraban ..,..~.. ACTIVIDADES
l y el y servían. Y Huitzilopochtli recompensaba a quien así oraba. Y su culto fue
tomado de allí, de Coatepec, la Montaña de la Serpiente. 1. En pequeños grupos,
busq uen otros mitos
léxico, Fray Bernardino de Sahagún, H isto1·ia general de las cosas de la Nueva España, Libro III, cosmogónicos aztecas y
•tado). capítulo 1, Madrid, Dastin, 2009 (adaptación). compartan su lectura en clase.

39

........s.................... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .~
La poesía náhuatl
Los nahuas, cuyos ancestros fueron los m exicas, const it uían un grupo de p ue-
NEZAHUALCÓYOTL blos de Mesoamérica que t enían en comú n la leng ua náhuatl. Dejaron testimonios ...
~

(1403-1 472) :::


de su cult ura en monumentos, pinturas, orfebrería, cerámica, arte plumari o, códi-
E
ces y docum entos.
Sabio, poeta y rey de la ciudad-estado Los cantares nahuas pueden clasificarse en poesía sagrada, en la que se exa l- ta
S!
nos
·Al
1
de Texcoco. Se cree que, aunque su taba a los dioses y se acom pañaba con música y da nza; poesía hero ica, destinada ~
'2
est
pueblo era politeísta, comenzó a
desarrollar la idea de un dios único, al
a alabar a los antepasados, y poesía lírica, que t rataba temas fil osófi cos, como el i ·D
1
cual llamó Tloquenahuaq ue. Varios de valor de la exist encia, la fin alidad de la acción humana y la posibilidad de hallar algo < ye
sus versos se encuentran actualmente verda dero en la tierra. Estos textos se conservan en el manuscrito conocido com o ..
.,"'
e:
en los muros del Museo Nacional de .g
Antropología en la ciudad de México.
Cantares mexicanos, en la Biblioteca Nacional de México. La poesía náhuatl ha in- ..
'6
A
flu ido en poetas contemporáneos, como Oct avio Paz. j
~
F

Canto de primavera No es.verdad "


.
que vivimos
casa o templo de los cantos y En la casa de las pinturas*
las pinturas: en esta cultura, lugar comienza a cantar, No es verdad que vivimos,
donde se vive lo sagrado. La energía
ensaya el canto, no es verdad que duramos
de los dioses es representada por
medio de danzas, flo res y colores, derrama flores, en la tierra.
símbolos del universo. alegra el canto. ¡Yo tengo que dejar las bellas flores,
Resuena el canto, tengo que ir en busca del sitio del
los cascabeles se hacen oír, [misterio!
a ellos responden Pero por breve tiempo,
nuestras sonajas floridas. hagamos nuestros los hermosos
Derrama flores, [cantos.
alegra el canto.
Sobre las flores canta Anónimo
el hermoso faisán,
su canto despliega
en el interior de las aguas.
A él responden
varios pájaros rojos,
el hermoso pájaro rojo
RECURSOS ESTILÍSTICOS bellamente canta.
EN LA POESÍA NÁHUATL Libro de pinturas es tu corazón,
Se reconocen repeticiones, has venido a cantar,
paralelismos, estribillos, uso haces resonar tus tambores,
intensivo de imágenes y metáforas
tú eres el cantor.
que aluden a flores, piedras
preciosas, aves de plumaje fi no y En el interior de la casa de la
' alarido. J [primavera,
alegras a las gentes. 1.E
car
Nezahualcóyotl 2. ~
ye
rec

40 1Capítulo 2 Cosmogonías

...........................................................
b ímlm
¡Oh flores que · El pájaro
portamos ... !
oue- Un silencio de aire, luz y cielo.
·nios ¡Oh flores que portamos, En el silencio transparente
:ódi- oh cantos que llevamos, el día reposaba:
nos vamos al reino del misterio! la transparencia del espacio
=xal- ¡Al menos por un día era la transparencia del silencio. Poeta, ensayista, dramaturgo y
1ada La inmóvil luz del cielo sosegaba diplomático mexicano. En 1990
estemos juntos, amigos míos!
obtuvo el Premio Nobel de Literatura.
io el ¡Debemos dejar nuestros cantos: el crecimiento de las yerbas. Entre sus libros más destacados se
a lgo y con todo la tierra seguirá Los bichos de la tierra, entre las piedras, encuentran El laberinto de la soledad,
JmO [permanente! bajo la luz idéntica, eran piedras. El arco y Ja lira, Águila o sol y Libertad
a in- El tiempo en el minuto se saciaba. bajo palabra.
Amigos míos, gocemos, gocemos,
[amigos. En la quietud absorta
se consumaba el mediodía.
Anónimo
Y un pájaro cantó, delgada flecha. CARPEDIEM
Pecho de plata herido vibró el cielo,
se movieron las hojas, El carpe diem es un tópico de la
las yerbas despertaron ... literatura acuñado por el poeta
latino Horado en sus Odas. En latín

s,
Y sentí que la muerte era una flecha
que no se sabe quién dispara
y en un abrir los ojos nos morimos.
,1 esta expresión significa "aprovecha
día'; "vive el día de hoy''. J
·io! Octavio Paz, Condición den ube (1944), en YO LÍRICO
Libertad bajo palabra, Madrid, Cátedra, 2005.

'
Es quien habla en un poema. No
ebe confundirse con el autor. J
nimo

(
í ~ ACTIVIDADES

1. En estos p oemas puede recon ocerse el tópico literario del 3. Reconozcan la influencia de la poesía náhuatl en el
carpe diem. ¿Qué experiencias vita les rescatan los poetas? poema de Octavio Paz. Para ello, tengan en cuenta:
2. Señalen los versos en que el yo lírico considera el m undo a. Imágenes, met áforas, piedras, plumas multicolores, flora
y el paso de los seres por él como una obra de arte. ¿Qué t ropica l, etcét era. b. El cl ima emocional sombrío.
recursos estilísticos se ut ilizan para describirlo? c. El misterio de la vida y el destino de las personas.

41
El héroe cosmogónico inca
rit
La civilizació n inca se desarrolló en los actuales territorios de Perú, Bolivia, Ecua- ve,
dor, sur de Colo mbia, norte de Chile y noroeste de la Argentina. Los pueblos incas cr
consol idaron un Estado, elTahuantinsuyu, sumamente organizado.
Al igua l que los azt ecas con Huitzilopchtli, o los quichés con Hunahpú, los incas
tenían una máxima entidad, a quien llamaban Wiracocha o Pachacámac (en que-
chua Pachakamaq sign ifica "soberano del mundo, creador del mundo"). lo,
El relato cosmogó nico afirmaba que el mundo creado por Wiracocha no tenía Cf'
sol, ni luna, ni estrellas y q ue en él fo rmó una raza de g igantes; pero luego, en una n·
segunda creaci ón, hizo hombres como los actuales que vivían en la oscuridad. Con s
el tiempo, estos seres tuvieron orgullo y codicia, así que Wiracocha los maldijo y los
transformó en p iedras, o los absorbió la tierra o el mar, o sufrieron una inundación.
Se cuent a que, tras una lluvia de sesenta días, se ahogaron todas las cosas creadas y 1!
solo queda ron los convertidos en piedra como ejemplo para la posteridad.
Los incas no t uv ieron escritura, de m odo q ue f ueron los cronistas de Indias (so-
bre los q ue podrán leer más en el capítulo 3) quienes recog ieron y p usieron por te
escrito los testimonios orales que nos permiten conocer su historia y cosmogonía. el
Juan de Betanzos, en Suma y narración de los incas, de 1551, relata: Cl

Hizo [Wiracocha] de piedra cierta gente[ ... ] yun principal [Kuraqka*J que
Kuraqka o Curaca: jefe político la gobernaba y señoreaba y muchas mujeres preñadas y otras paridas y que los A
y administrativo de la comunidad niños tenían en cunas, según su uso, todo lo cual así h echo de piedra [ ... ];y di
andina. que él luego hizo otra provincia allí en Tihuanaco formándole en piedra de la ye
manera ya dicha ... re
Del nombre de esta gente y del Señor que la mandaba no se acuerdan. Y en n.
estos tiempos que esta tierra era toda de noche, dicen que salió de una laguna que CI

es en esta tierra del Perú en la provincia que dicen de Collasuyo, un señor que lla- a
maron Con Titi Viracocha, el cual dicen haber sacado consigo cierto número de Cl

gentes del cual número no se acuerdan. el


~ ACTIVIDADES Y como hubiese salido de esta laguna, fuese a un sitio junto a esta laguna,
que está donde hoy día es un pueblo que llaman Tihuanaco, en esta provincia ya la
1. Analicen el valor histórico, dicha del Collasuyo...
lingüístico y literario de est os
textos. Para ello, respondan a Por su part e, Ped ro Sa rm ient o de Gamboa, en su Historia de los incas, de 1572, h
las pregunt as que siguen. det alla ta m b ién la creac ió n de la hu ma n idad en Tiah uan aco y propone dos St

a. ¿Qué aporte hacen al creaciones: re


conocimiento del origen de los re
pueblos americanos? Y dejando [Wiracocha] la isla [Titicaca], pasó por la laguna a la tierra fume, d
b. ¿Qué variaciones observan y llevando en su compañía a los dos criados que había conservado fuese a un se
en el lenguaje de los hablantes asiento, que ahora llaman Tiaguanaco, que es de la provincia de Collasuyo, y en á1
del español del sig lo XVI? este lugar esculpió y dibujó en unas losas muy grandes todas las naciones que el
c. ¿Qué recursos expresivos pensaba criar...
util izaban los cronistas para [ ... ]Otros afirman que esta creación el Wiracocha la hizo desde el sitio de o
t~
dejar testimonio de la historia? Tiaguanaco, adonde habiendo formado al principio unos bultos de jayanes y
SI
d. Conversen sobre el valor que pareciéndole desproporcionados, los tornó a hacer de su estatura -era, según
tiene para un alumno del siglo dicen, el Wiracocha de mediana disposición de las nuestras-y formados, les le
XXI leer estas crónicas. dio espíritu, y que de allí se partieron a poblar las tierras ... e:

42 I Capítulo 2 Cosmogonías
Cristóbal de Malina, apodado el Cuzqueño, en su obra Relación de las fábulas y
ritos de los incas, de 1573, describe la obra de Wiracocha. Resulta interesante obser-
cu a- var cómo plantea la creación del hombre de barro, no de piedra, por su formación
neas M
cristiana, ya que era sacerdote:
""
E
.;
neas ·o. [ ... ]en Tiahuanaco, el H acedor, Wiracocha, empezó a hacer a las gentes y
~ue-
j, naciones que en est a tierra h ay; y haciendo de barro cada nación, pintándoles
~
"O los trajes y vestidos que cada uno había de traer y tener, y los que habían de traer
f
cabellos con cabello, y los que cortado, cortado el cabello, y que concluyó, a cada
enía
una
-~J. nación dio la lengua que había de hablar y los cantos que habían de cantar y las
~

Con e
o
~
. simientes y comidas que habían de sembrar.
y los ..
'¡;
a
:ión. ~ El padre Juan de Acosta señala en su Historia natural y moral de las Indias, de
~
las y ~ 1590, que Tiahuanaco fue el asiento de Wiracocha:
¡::
11

(so- Como quiera que sea, dicen los indios que con aquel su diluvio se ahogaron
por todos los hombres y cuentan, que de la gran laguna Titicaca, salió un W iracocha,
nía. el cual hizo asiento en Tiaguanaco, donde se ven hoy ruinas y pedazos de edifi-
cios antiguos y muy extraños. ~ ACTIVIDADES

que Con la llegada de los conquistadores aparecen los primeros documentos sobre 2. Tal como advierte Poma
! los América escritos en español. Estas crónicas tenían como objetivo da r testimonio de Aya la en el prefacio de
.]; y de l Nuevo Mundo, sin una fina lidad literaria. Por el contrario, los escritores con ma- su Primera nueva crónica y
lela yor conciencia artística fueron los nacidos en e l continente americano, indios pu- buen gobierno, el material
ros, criollos o mestizos. Entre ellos se destacaron Felipe Guamán Poma de Ayala, está tomado de "historias
{en nacido entre 1530 y 1540, descendiente de incas, que escribió su Primera nueva sin escrituras'; "de los quipos
que crónica y buen gobierno; y e l Inca Garcilaso de la Vega (1539-1616), perteneciente (sistema mnemotécnico
:lla- a la nobleza inca. Su obra capita l son los Comentarios Reales. En la primera parte constituido por cuerdas
o de cuenta el origen de los incas, su gobierno, leyes y costumbres, y en la segunda narra de lana de varios colores,
e l descubrimiento del Perú por los españoles y las guerras entre Pizarra y Almagro. que presentaban nudos) y
una, En relación con las creencias cosmogónicas de sus antepasados, el Inca Garci- memorias y relaciones de los
.aya laso sostiene que los incas habían concebido la idea de un Dios único: viejos testigos de vista''. Así lo
hicieron también los demás
De más de adorar al Sol por dios visible, a quien ofrecieron sacrificios e cronistas. Comparen los textos
572, hicieron grandes fiestas (com o en otro lugar lo direm os) , los R eyes Incas y de las diferentes fuentes,
dos sus amautas, que eran los filósofos, rastrearon con lumbre natural al verdade- reconozcan semejanzas y
ro Sumo Dios y Señor nuestro, que crio el cielo y la tierra [ ... ], al cual llama- diferencias, y analicen cómo
ron P achacámac: es nombre compuesto de P acha, que es mundo universo, y se produce la irrupción de
:me, de Camac, participio de presente del verbo cama, que es animar, el cual verbo la cultura occidental en las
l un se traduce del n ombre cama, que es ánima. Pachacámac quiere decir el que da tradiciones americanas.
yen ánima al mundo universo, y en toda su propia y entera significación quiere decir 3. Supongan que son cronistas
que el que hace con el universo lo que el ánima con el cuerpo.[ ... ] de la actualidad. Seleccionen
Tuvieron al P achacám ac en m ayor veneración interior que al Sol, que [ ... J no un hecho histórico, una
) de osaban tomar su nombre en la boca, y al Sol le nombran a cada paso. Pregun - creencia, un rasgo de la
.es y tado quién era el P achacámac, decían que era el que daba vida al universo y le cultura y descríbanlo. ¿Cómo
gún sustentaba; pero que no le conocían porque no le habían visto, y que por esto no imaginan que podrá ser leído
;, les le hacían templos ni le ofrecían sacrificios: mas que lo adoraban en su corazón, e interpretado su testimonio
esto es mentalmente, y le tenían por Dios no conocido. dentro de 500 años?

43
La poesía inca Al
Además de dejar testimonio del Nuevo Mundo en sus crónicas, los españoles
recogieron los poemas que los incas crearon para describir el mito cosmogónico de
Dam
los orígenes.
zona
Los himnos o jailli tienen carácter religioso. En ellos se descubre el fervor de
Novo
quien habla hacia el creador, Pachacámac, su omnipotencia y omnipresencia, su Novo
voluntad divina en el mundo inca. Novo
Para comprender el sentido de los versos es necesario entender que los incas Novo
concebían la Tierra como una superficie plana. En lo profundo de la subtierra colo- Míran
caban el piso interior denom inado Ukupacha, Ucu Pacha o Urín Pacha. Era el espa- labrad
cio reservado para los muertos. Kay Pacha era el mundo de aquí, donde puso el dios doma<
creador a los humanos, los animales y las plantas, incluidos los espíritus. En la Tierra albañ·
consideraban cuatro cuadrantes, el sector de la cordillera, el de la costa, el del su- aguad
doeste y el del altiplano; su integridad daba como resultado el Tahuantinsuyu, cuyo o joyero
centro era el Cusco. Por encima reconocían el plano superpuesto o firmamento, agricu
Hana Pacha, el mundo de arriba. El creador, en este plano, puso a los dioses, que alfaret
tenían el aspecto brillante del Sol y de la Luna, de las estrellas y de los cometas. traed:
Esta poesía y el mundo inca inspiraron la producción de poetas contemporános vuestr
como Pablo Neruda. Most1

Himno de Manko Qb.apaj decid1


PREGUNTAS RETÓRICAS porqu
Las preguntas retóricas son
¡Ah Wiracocha, de todo lo existente Cuando pueda ver, noen1
aquellas que se formulan sin [el poder! cuando pueda saber,
~spera r respuesta. "~e este sea hombre, cuando sepa señalar, señala
que esta sea mujer" (dijiste) cuando sepa reflexionar, y lam
Sagrado... señor me verás, encen
de toda luz naciente me entenderás. las vie
el hacedor.
¿~ién eres? El sol, la luna
¿Dónde estás? el día, la noche,
¿No podría verte? el verano, el invierno,
¿En el mundo de arriba no están libres, 1. Ave
o en el mundo de abajo ordenados andan: 2.Rec<
o a un lado del mundo están señalados poéti~
está tu poderoso trono? y llegan metáf<
"J· ay.1" , d'1me so1amente a lo ya medido. 3. Señ,
desde el océano celeste ¿Adónde, a quién ser hui
o de los mares terrenos en que habitas. el brillante cetro de la p
Pachacámac enviaste? cultur,
Creador del hombre, "Jay!", dime solamente,
Señor, tus siervos, escúchame,
a ti, cuando aún
con ojos manchados no esté cansado,
desean verte. muerto.
Anónimo (transcripto por el cronista indio Santa Cruz
www
Pachacuti), en Poesfa quechua, Buenos Aires, Eudeba, 1965.

44 I Capítulo 2 Cosmogonías
Alturas de Macchu Picchu
1añoles XII a través de los siglos en las llagas
nico d e Dame la mano desde la profunda y las hachas de brillo ensangrentado. PABLO NERUDA
(1904-1973)
zona de tu dolor diseminado. Yo vengo a hablar por vuestra boca
rvor de No volverás del fondo de las rocas. [muerta.
icia, su No volverás del tiempo subterráneo. A través de la tierra juntad todos Seudónimo del escritor chileno
los silenciosos labios derramados Neftalí Ricardo Reyes Basoalto,
No volverá tu voz endurecida.
considerado uno de los poetas más
•S incas No volverán tus ojos taladrados. y desde el fondo habladme toda esta importantes del siglo XX. Recibió
·a colo- Mírame desde el fondo de la tierra, [larga noche el Premio Nobel de Literatura en
~1 espa- labrador, tejedor, pastor callado: como si yo estuviera con vosotros 1971. Entre sus librosse destacan:
el dios Crepusculario, Residencia en la
1 domador de guanacos tutelares: [anclado,
tierra, Canto general, Los versos
a Tierra albañil del andamio desafiado: contadme todo, cadena a cadena, del capitán, Odas elementales,
del su- aguador de las lágrimas andinas: eslabón a eslabón, y paso a paso, Extravagario, Memorial de Isla
u, cuyo joyero de los dedos machacados: afilad los cuchillos que guardasteis, Negra y Confieso que he vivido.
11ento, agricultor temblando en la semilla: ponedlos en mi pecho y en mi mano,
es, que alfarero en tu greda derramado: como un río de rayos amarillos,
as. traed a la copa de esta nueva vida como un río de tigres enterrados,
orános vuestros viejos dolores enterrados . y dejadme llorar, horas, días, años,
Mostradme vuestra sangre y vuestro edades ciegas, siglos estelares.
[surco, D adme el silencio, el agua, la esperanza.
decidme: aquí fui castigado, D adme la lucha, el hierro, los volcanes.
porque la joya no brilló o la tierra Apegadme los cuerpos como imanes.
no entregó a tiempo la piedra Acudid a mis venas y a mi boca.
[o el grano: Hablad por mis palabras y mi sangre.
señaladme la piedra en que caísteis
y la madera en que os crucificaron, Pablo Neruda, en Cantogeneral, Caracas,
encendedme los viejos pedernales, Fundación Biblioteca Ayacucho, 1981
(fragmento).
las viejas lámparas, los látigos pegados

~ ACTIVIDADES

1. Averigüen quién fue Manko Qh apaj. 4. ¿Cuáles son las preguntas que esperan respuesta?
2. Reconozcan en el "Himno a Manko Qhapaj"recursos ¿Consideran que esas preguntas t ienen va lidez para los
poéticos (invocaciones, paralelismos, preguntas retóricas, seres humanos de todas las latitudes y en todas las épocas?
metáforas, etc.) y reflexionen sobre su va lor expresivo. 5. ¿Dónde está ubicada Macchu Picchu y qué va lor tiene la
3. Señalen los versos que aluden al proceso de creación del fortaleza pa ra la cultura inca?
ser humano. Dado que dicha creación se efect úa por medio 6. ¿Quién es el destinatario en "Alturas de Macchu Picchu"?
de la palabra, comparen con las cosmogon ías de otras 7. ¿Se hace alusión a sucesos anteriores o posteriores a la
cu lturas, por ejemplo, la maya, la azteca y la judeo-cristiana. conquista? Justifiquen su respuesta con versos del poema.

OTROS RECORRIDOS DE LECTURA


• Para disfrutar de una mirada particular sobre el tema del diluvio •Si desean conocer más acerca de cosmogonías de otros pueblos,
en distintas etnias y creencias, se recomienda el cuento de Alejo por ejemplo, de los griegos, pueden leer Los mitos griegos, de
Carpentier"Los advertidos''. Podrán leerlo completo en http:// Robert Graves.
ita Cruz
>a, 1965. www.ciudadseva.com/textos/cuentos/esp/carpen/adverti.htm

45
5 Lo
CONCIENCIA E IDENTIDAD DE AMÉRICA ¡;
-'
~
g.
E1
Lejos quedaron los ti empos en que veíamos nues- adornan el templo de Bonampak, 5
en Yucatán, se nos g8
s sino
tra historia como una mera crónica de acciones milita- presentan figuras humanas e n escorzos 6 d e una au-
res, cuadros de batall as, intrigas palaciegas, encum- dacia desconocida por la pintura europea de la misma a pa
bramientos y derrocamientos, en textos ignorantes época [ ... ]. Y eso no es todo: solo ahora estamos em- es el
del factor económico, étnico, telúrico [ ... ] que hacían pezando a ahondar en la maravillosa poesía náhuatl y
del t i
d e nuestra historia una historia distinta a /as demás estamos co menzando a percibir el singu lar y profundo
historias del mundo. Historia distinta, desde un princi- trasfondo filosófico de las grandes cosmogonías y mi- es p
pio, puesto que este suelo americano fue teatro del tos originales de América. plan1
más sensacional encuentro étnico que regi strasen los Y eso no es todo. Sin dem orarnos e n ejemp los E!
anales de nuestro planet a: encuen- que podrían multiplicarse al infinito,
tro del indio, del negro, y del europeo
de tez más o menos clara, destina-
.11111•••••••••-1
fFragmentodel discurso
desde los días de la con quista y de
la colonia, vemos afirmarse, de cien
cripti

dos, en adelante, a mezclarse, en- pronunciado por Alejo maneras, la originalidad y audacia del que5
tremezclarse, establecer simbiosis Carpentier en el aula magna de la hombre americano en obras de muy posic
de culturas, de creen cias, de artes Universidad Central de Venezuela distinto carácter.
populares, en el más t remendo mes- y la e
el15demayode1975,enelacto [... ]Mucho, mucho, mucho podría
tizaje que haya podido contemplarse organizado en su honor por la hablarse de t odo esto. Sobran ej em- Er
nunca ... " Ten e mos que ser origin a- Universidad, el Ateneo de caracas, plos gratos d e citar. [ .. .] Y ahora que, que E
les", sol ía decir Simón Rodríguez, 1 la Asociación de Escritores disponie ndo de un instrumental ana-
lla su
maestro del Libertador. Pero, cuando Venezolanos y la Asociación lítico que ha t ransformado la historia
tales pala bras pronunciaba, no ha- en una ciencia, podemos considerar etcét
Venezolana de Periodistas.
bía que hacer ya el me nor esfuerzo Despuésformó partedesulibro el pasado desde nuevos á ng ulos, N~
por ser originales, pues éramos ya Razón de ser, publicado en comproba ndo verdades que habían todo
originales, de hecho y de derecho, l Venezuela en 1976. J p asado inadvertidas para nuestros mant
mucho antes de que e l concepto de \...,..,.•••••••••"" mayores, es cuando el hombre -
originalidad se nos hubiese ofrecido ciudad-sig lo XX , e l hombre nacido, tativc
como meta. crecido, formado en nuestras proli - Le
No incu rre en va na jactancia americanista quien ferantes ciudades de concreto armado, ciudades de sana,
puede afirmar hoy en perfecto conocim iento de causa América Latina, tiene el deber ineludible d e conocer
ejem
que, a ntes de que lo contemplara n los con quistadores a sus clásicos americanos, de releerlos, de meditar-
españoles sin entenderlo, se nos ofrecía en el t emplo los para hallar sus raíces, sus árboles genea lógicos de mi en
de Mitla,2 en México, la perfecta cu lminación de un arte palmera, de apamate o de ceiba ,7 para t ratar de saber
abstracto3 largamente madurado - que no se debía a quién es, qué es y qué papel habrá de desempeñar en
un mero intento de ornamentación geométri ca, simé - absoluta identificación consigo mismo en los vastos y
trica y reiterada, s ino a la disposición perfecta me nte turbulentos escenarios [ ...] de nuestro continent e.
d el iberada de composiciones abst ractas, de idéntico
tamaño, jamás repetidas, vistas cada una como un va- 1.¿ü
lor plástico completo, 4 independiente y cerrado-. No Alejo Carpentier, "La novela latinoamericana", en Vísperas Carpe
es necesario ser guiado por un excesivo amor a nues- de un nuevo siglo y otros ensayos, México, Siglo XXI, 1981
tra América, para reconocer que en las pinturas que
¿Qué'
(fragmento adaptado).
homt
2.¿Pc
1
Filósofo y educador venezolano (1769-1854), tutor y mentor de 4 Con esta expresión se refiere al valor estético dentro de las artes
identi
Simón Bolívar. plásticas: arquitectura, pintura, escultura, grabado, cerámica, 3.¿CL
2 Mitla o Mictlan ("lugar de muertos", en náhuatl) es una de las etcétera.
5 Sitio arqueológico maya que parece datar de los años 580 a 800.
ameri
zonas arqu eológicas más importantes del estado mexicano de
Oaxaca. Constituye una de las expresiones más refinadas de la Debe su fama a los murales de uno de sus edificios conocido con subra
arquitectura prehispánica -zapoteca con influencia mixteca- el nombre de Templo de los Murales. eleed
cuyos decorados, de gran valor estético, demuestran el dominio 6 Escorzo, en pintura: representar, acortándolas, según las
de todas las técnicas para el tallado de la piedra. reglas de la perspectiva, las cosas que se extienden en sentido
•Es si;
3 Arte abstracto: estilo artístico que resa lta la utilización del color, perpendicular u oblicuo al plano del papel o lienzo sobre el que se m ism
la forma y la estructura, destacando su fuerza expresiva y dejando pinta. •Es in
de lado los modelos o las formas naturales. 7EI apamate y el ceibo son árboles americanos.
::: Los textos argumentativos
2
s
t8 En la argumentación no se pretende transmitir información nueva al lector,
os ~
s
sino convencerlo de una idea determinada - llamada generalmente hipótesis-,
I U- ;¡
na ] a partir de una serie de argumentos. Dicha hipótesis no siempre está explicitada y
:<
m- es el lector quien debe formularla a partir de lo que el autor dice en distintas partes
ly -~J. del texto o de lo que no se dice pero se sugiere. La finalidad de la argumentación
jo "'
~
~
e es persuadir, convencer al destinatario de la posición que se defiende; para ello se
ni- o
~
~
plantean puntos de vista, perspectivas, formas de considera r un tema.
os 3
~ Este tipo de texto utiliza segmentos organizados en secuencias narrativas, des-
:o, ~
l'!e criptivas y explicativas, que funcionan como estrategias de argumentación.
je ¡:
en
g La estructura básica de u na argumentación contempla una introducción, en la
tel que se presenta el tema; la exposición de los hechos, para que el receptor conozca la
uy posición que se defiende; la exposición de los argumentos, con fina lidad persuasiva

·ía
y la conclusión, donde se insiste en la posición adoptada.
m- En los textos argumentativos se plantea una polémica a partir de una cuestión
1e, que es objeto de debate; el enunciador se hace cargo de sus palabras y desarro-
1a- lla su discurso desde el lugar del experto (político, filósofo, científico, educador,
·ia
·ar etcétera).
•S, No obsta nte se puede decir que la dimensión argumentativa está presente en
3n todo tipo de texto, ya que el uso del lenguaje implica una toma de posición y la
os manera en que se organiza un discurso, aunque no sea eminentemente argumen-
·e-
lo, tativo, desarrolla una visión del mundo y una valoración de la situación planteada.
>li- Los recursos que emplea el texto argumentativo son el uso de la primera per-
:je sona, los subjetivemas - palabras que muestran la subjetividad del emisor, por
:er
ejemplo, adjetivos evaluativos, adverbios-, las citas de autoridad, los cuestiona-
3r-
de mientos; y también metáforas, analogías, ejem plos y definiciones.
1er
en
;y
L ACTIVIDADES

1. ¿Cuál es el tema en debate en el discurso de Alej o •Es un arte rebuscado que no implica creatividad.
·as
Carpentier? ¿Cuál es la hipótesis que sustenta el autor? •Es un arte original y audaz.
81
o). ¿Qué argumentos la sostienen? ¿Por qué considera que el 4. El autor utiliza la primera persona del plural. ¿Qué
hombre del sig lo XX debe conocer los clásicos americanos? finalidad t iene este uso? ¿Pretende ocultar la voz del autor
2. ¿Por qué en el título aparecen las palabras conciencia e por modestia o q uiere incluir en ese nosotros tanto a quien
s identidad? ¿Cómo se relacionan? habla como al destinatario? ¿A quiénes dirige su d iscurso?
3. ¿Cuál es la posición de Carpentier en relación con el arte Justifiquen su respuesta.
americano? Elijan la respuesta que consideren correcta y S. Carpentier apela a un "hombre-ciudad-siglo XX'; ¿qué
O.
subrayen en el texto ideas que les permitan defender su características tiene este individuo? ¿Consideran que
elección. pueden identificarse con él?
•Es superior al que se había desarrollado en Europa en ese 6. Organicen un breve texto argumentativo donde
e mismo período. sostengan su posición en relación con el conocimiento del
•Es inferior al que se había desarrollado en Europa para el arte americano. ¿Están de acuerdo con la opinión del autor?
mismo período. ¿Porqué?
1. Lean las cosmogonías y resuelvan las siguientes consignas.
a. Reconozcan en cada texto las características del mito de creación.
b. Observen si todas parten de un caos inicial y cómo se lo describe.
c. Identifi quen el o los dioses a quienes se adjudica la creación.
d. Averigüen cuáles son los héroes o dioses míticos de cada cu ltura.
e. Relacionen los relatos con la procedencia geográfica de los mit os.

El mito africano de la creación


El pueblo Fon cuenta cómo la serpiente cósmica,Aido-Hwedo, fue crea-
da al principio de los tiempos por el Creador, un dios andrógino con dos
caras: Mawu, la Luna (femenino), y Lisa, el Sol (masculino).
Aido-Hwedo contribuyó a la creación al llevar al Creador en su boca
mientras se formaba el mundo. Cuando terminó, el Creador vio que era un
peso excesivo para la Tierra: demasiados árboles, demasiadas montañas, de-
masiados elefantes, demasiado de todo.
Entonces, le pidió a Aido-Hwedo que se enroscase y se colocase por de-
bajo de la sobrecargada Tierra, como si fuese un cojín, para poder transpor-
tarla. Como a Aido-Hwedo no le gustaba el calor, el Creador hizo el océano
para que viviera allí.
Al sentir Aido-Hwedo una gran presión sobre sí, tiene que cambiar de
postura para descansar; en esos casos se desatan terremotos. La serpiente se
alimenta de barras de hierro que forjan unos monos rojos que viven bajo el
mar. Cuando el hierro se agota, se come su propia cola. Luego, la Tierra, con
toda su carga se desequilibra y cae al mar.
Una segunda Aido-Hwedo, la serpiente del arco iris, vive en el cielo y
envía a la Tierra los rayos de los dioses.

El mito chino de Pan Gu y la creación del mundo


En el principio, el universo estaba contenido en un huevo dentro del cual
las fuerzas vitales del yin -oscura, femenina y fría- y del yang - clara,
masculina y caliente- se relacionaban una con otra.
Dentro del huevo, Pan Gu, formado a partir de estas fuerzas, durmió
durante dieciocho mil años . Al despertar, se estiró y lo rompió. Los elemen-
tos más pesados del interior del huevo se fueron hacia abajo para formar la
tierra y los más ligeros flotaron, para formar el cielo. Entre la tierra y el cielo,
estaba Pan Gu.
Cada día, durante otros dieciocho mil años, la tierra y el cielo se separa-
ron un poco más. Pan Gu crecía en la misma proporción y llenaba el espacio
intermedio. Finalmente, la tierra y el cielo llegaron a sus posiciones defi-
nitivas. Agotado, Pan Gu se echó a descansar, pero estaba tan agotado que
murió. Su cuerpo y sus miembros se convirtieron en montañas. Sus ojos se
transformaron en el Sol y la Luna. Su carne, en la Tierra; sus cabellos, en los
árboles y las plantas; sus lágrimas, en ríos y mares. Su aliento fue el viento;
su voz, el trueno y el relámpago. Y por último ... las pulgas de Pan Gu ¡se
convirtieron en la humanidad!
::: El mito olímpico de la creación
"
j E n el principio de todas las cosas, la M adre Tierra surgió del Caos y dio
~ a luz a su hijo Urano mientras dormía. Contemplándola tiernamente desde
j las montañas, él dejó caer sobre ella una fértil lluvia que penetró en sus hen-
a
~
B
diduras secretas, y le hizo producir hierba, flores y árboles, con las bestias y
~
ir las aves propias para cada planta. E sta misma lluvia hizo fluir los ríos y así se
-J. crearon los lagos y los mares.
~

lle Sus primeros hijos de forma semihumana fueron los gigantes de cien
o
!crea- i manos llamados Briareo, Giges y Coto. Después aparecieron los tres Cíclo-
m dos
!
~
pes, salvajes de un solo ojo, constructores de gigantescos muros y maestros
herreros, con cuyos hijos se encontró Ulises en Sicilia. Se llamaban Brontes,
¡:
1 boca o Estéropes y Arges, y sus espíritus han habitado el volcán Etna desde que
era un Apolo los m ató.
is, de-
El mito nórdico de la creación
or de- En un principio solo existía el vacío. No había océano que ocupara su
1spor- vasto imperio, ni árbol que levantase sus ramas o hundiera sus raíces. Al nor-
1céano te se formó una región de nubes y sombras llamadas Niflheim. En el sur se
formó la tierra del fuego, Muspellsheim. L os doce ríos de pura agua glacial
•iar de que trascurrían desde Niflheim hasta encontrarse con los de Muspellsheim
:nte se llevaban amargo veneno y pronto se solidificaron. Cuando las heladas aguas
)ajo el del norte tocaron sus rígidos cuerpos serpentinos, el abismo se llenó de gé-
:a, con lida escarcha.
Con el aire cálido que soplaba desde el sur se empezó a derretir la escar-
:ielo y cha y de las amorfas aguas surgió Y mir, un gigante, el primero de todos los
seres vivientes.
D el hielo surgió una gran vaca llamada Audurnla. E Ymir apagó su sed
en uno de los cuatro manantiales de leche que fluían de la criatura. Cada
::1 cual uno de estos seres primarios tuvo hijos sin contacto sexual: Ymir a partir de
-clara, su propio sudor y Audumla lamiendo el hielo. El matrimonio de Bestla, hija
de Ymir, con Bor, nieto de Audumla, trajo a los tres dioses, Odín, Vili y Va,
urmió quienes exterminaron a todos los gigantes menos a dos, que escaparon para
!men- perpetuar la raza. Al calmarse el caos que se produjo al derretirse el hielo,
mar la los tres dioses sacaron el cuerpo inerte de Ymir fuera de las aguas y crearon
l cielo, la Tierra, a la que llamaron Midgard, la Principal Morada. D e los huesos de
Ymir se crearon las montañas, y su sangre llenó los océanos. Su cuerpo se
::para- convirtió en tierra y sus cabellos en árboles. Con su calavera los dioses for-
spacio maron la bóveda de cielo, que atestaron de brillantes chispas de los fuegos de
; defi- Muspellsheim. E stas chispas son las estrellas y los planetas. [ ... ]
lo que El hombre y la mujer fueron creados a partir de los troncos de dos árboles
>jos se inertes. Odín les infundió la vida. El dios H oenir los dotó de alma y capaci-
en los dad de juicio. Lodur les dio calor y belleza. El hombre fue llamado Ask (de
riento; ash, "ceniza") y la mujer Embla ("parra"), y de ellos desciende la raza humana.
}u ¡se
TQA\rAXO~ •

~- . -
~ ~--
¡ - • - - - _ _;_ _ _ :..:._. ..-

- -~

--- -···-·--- ··
Mitosyleyendas
de Hispanoamérica
El dibujo reproducido pertenece a una obra encontrada en la
Biblioteca Real de Copenhague, Dinamarca, en 1908. Se trata de un
manuscrito de casi dos mil páginas, de las cuales una tercera parte
son ilustraciones que dan testimonio del pasado inca. Su autor fue un
indígena nacido en el departamento de Huánuco, Perú, entre 1530
y 1540, llamado Felipe Guamán Poma de Aya la. Solo se conoce de él
esta o bra y la probable época de su nacimiento.
La imagen ilustra las actividades del mes de junio. Las palabras en
quechua, al pie de la imagen, explican que es el momento de recoger
las pa pas y hacer ch uño. Este proceso tecnológico consistía en
deshidratar las papas al aire libre para conservarlas disecadas en gran
cantidad. En ese mes, cuando ya no hay otras cosechas, los pobres
han de tejer ropa, y limpiar calles, caminos reales y atajos hacia las
ciudades y las villas.
El primer Nueva Coronica [crónica] i buen gobierno, así se titula el
conjunto de textos e ilustraciones, es un alegato contra el mal trato
que tanto los religiosos como los funcionarios coloniales daban a
ese pueblo originario. Expresa las preocupaciones de orden social,
económico y espiritual, y los abusos que afectaban a esa comunidad
indígena bajo el dominio español. El propósito de su autor era
solicitar a la Corona española una reforma del gobierno colonial y
sa lvar así a su pueblo de las enfermedades y la explotación. La carta,
con la que pretendía conmover al rey Felipe 111, nunca llegó a destino
y fu e encontrada trescientos años después. Es un valioso registro
gráfico de época, que ha contribuido a esclarecer cómo era la vida,
la organización y las acciones de los habitantes y los colonizadores
españoles en esa región de América.
¿Aventuras de la imaginación?

Antonio P igafetta, un navegante florentino que acompañó a M agallanes


GABRIEL GARCÍA en el primer viaje alrededor del mundo, escribió a su paso por nuestra América los c
MÁRQUEZ (1927) meridional una crónica rigurosa que, sin embargo, parece una aventura de la
imaginación. Contó que había visto cerdos con el ombligo en el lomo, y unos
Nació en Aracataca, un pequeño páj aros sin patas cuyas hembras empollaban en las espaldas del macho, y otros
pueblo de Colombia. Comenzó como alcatraces sin lengua cuyos picos parecían una cuchara. Contó que había
su carrera como periodista. Su
primera novela, La hojarasca, es
visto un engendro animal con cabeza y orejas de mula, cuerpo de camello, patas
de 1955, a la que siguió el libro de de ciervo y relincho de caballo. Contó que al primer nativo que encontraron
cuentosLos funerales de la Mamá en la Patagonia le pusieron enfrente un espejo, y que aquel gigante enardecido [.
Grande (1961). Su consagración
perdió el uso de la razón por el pavor de su propia imagen. se p
literaria se produjo en 1967 con
Cien años de soledad. Recibió
numerosas distinciones, entre Gabriel G arcía Márquez, Discursopronunciado al recibii· el
ellas, el Premio Nobel de Literatura Premio Nobel de Literatura, 1982 (fragmento).
en 1982. Entre sus obras es posible
mencionar: Crónica de una muerte
anunciada (1981 ), El amor en los
tiempos del cólera (1985), Doce Allí qued amos durante cuatro días y el rey preguntó a nuestro
cuentos peregrinos (1992) y Noticia capitán sobre nuestro deseo o intención; entonces nuestro capitán
de un secuestro (1996).
contestó al rey de los jerús que él quería buscar oro y plata. [ ... J [.
Entonces le contestó el rey de los jerús a nuestro capitán que él no en la
tenía más oro ni plata; tal oro y plata que yo he indicado antes, él lo habría que e
ganado en las guerras, conquistado o quitado tiempo antes a las amazo- de es
nas. Pero por lo que él nos dio a comprender de las amazonas y comunicó pone
de la gran riqueza, estuvimos muy alegres ... Entonces marchamos hacia
las sobredichas amazonas; esas son mujeres con un solo pecho y vienen a
sus maridos tres o cuatro veces en el año y si ella se embaraza por el hom-
bre y es un varoncito, lo manda ella a casa del marido, pero si es una niñita,
la guardan con ellas ...

Ulrico Schmidl, Derrotero y viaje a


España y las Indias (fragmento).

1. Est
Entre ellas, a la distancia de trescientas veinticinco leguas de la Españo- testir
la, cuentan que hay una isla, los que la exploraron en el interior, que se llama preg1
Boyuca, alias Ananeo, la cual tiene una fuente tan notable que, bebiendo de su a.¿Q
agua, rejuvenecen los viejos. b.¿Q
c. ¿Pe
Pedro Mártir d e Anglería, Historia d.¿C
del Nuevo Mundo (fragmento). 2.Ar
presE
3.Bu
Angl
4.Ca
yreei
ejem
alud1

52 I Capítulo 3 Mitos y leyendas de Hispanoamérica


Decían que era muy grande y que había en ella gente que tenía un ojo en la
frente y otros que se llamaban caníbales, a quien mostraban tener gran miedo.
anes Y desque vieron que llevaban este camino, dizque no podían hablar porque
~rica los comían, y que son gente muy armada.
:le la
Jnos Cristóbal Colón,
)tros Diario de viaje (fragmento).
1abía
>atas
aron
cido

·ibirel Fray Bartolomé de las Casas,


ento). Historia de las Indias (fragmento).

!Stro
iitán
[ ... ] y mientras estábamos en esto, llegaron treinta y seis hombres y entraron
:1 no en la casa donde nos encontrábamos bebiendo y eran de estatura tan elevada
tbría que cada uno de ellos era de rodillas más alto que yo de pie. En conclusión, eran
azo- de estatura de gigantes, según el tamaño y proporción del cuerpo, que corres-
nicó pondía con su altura ...
tacia
.en a Américo Vespucio,
om- Cartas (fragmento).
ñita,

na;e a
ento). J. ACTIVIDADES
1. Estos fragmentos dan una imagen del mundo americano a pa rtir de los primeros
1ño- testimonios de conquistadores y cronistas. Vuelvan a leerlos y respondan a las
ama preguntas que siguen.
le su a. ¿Qué adjetivos se les ocurren para dar cuenta de esa imagen?
b. ¿Qué situaciones atraen y sorprenden a los recién llegados?
c. ¿Por qué parecen una "aventura de la imaginación'; según García Márquez?
'storia d. ¿Cuáles son las impresiones, las sensaciones que transmiten estos textos al lector?
~nto). 2. A partir de las pregunt as anteriores, escriba n un texto breve que funcione como
presentación de los fragmentos leídos.
3. Busquen información para saber quiénes fueron Ulrico Schmidl, Pedro Mártir de
Anglería, fray Bartolomé de las Casas y Américo Vespucio.
4. Cada uno de los testimonios construye imágenes fabu losas de la realidad americana
y recoge historias fantásticas, mit os y leyendas de la época de la conquista. Por
ejemplo, la de las amazonas, en el texto de Schmidl. ¿A qué historias fabulosas o mitos
aluden los cuatro últimos textos?

53
Diario de viaje La
Durante su viaje de exploración rumbo a las Indias, Cristóbal Colón, el
CRISTÓBAL
COLÓN primer cronista de América, redactó en un Diario de viaje las peripecias
(1451 ?-1506) de la aventura emprendida desde la salida de España. El texto original no
se conserva, pero la obra aparece compendiada en la Historia de las Indias,
Navegante genovés. En 1492 llegó escrita por fray Bartolomé de las Casas, quien en algunos fragmentos
a América, adonde realizó otros resumió lo que decía el original y en otros lo transcribió textualmente.
tres viajes (1493, 1498 y 1502).
Cronológicamente, es el primer
El Diario registra, con una mirada asombrada e ingenua, la sucesión de
escritor de lengua española en los hechos, los lugares recorridos, las observaciones y sensaciones que le pri
dicho continente. Durante el provocaron el paisaje y el hombre americanos. fue
primer viaje escribió el Diario de
viaje. Entre sus escritos, también se suc
conservan un memorial a los Reyes El Almirante llamó a los dos capitanes y a los demás que saltaron en tierra,
Católicos, cartas y un testamento. [ .. .]y dijo que le diesen por fe y testimonio cómo él por ante todos tomaba, E
como de hecho tomó, posesión de la dicha isla por el Rey y por la Reina sus habi
señores [ .. .].Luego se ajuntó allí mucha gente de la isla. Esto que se sigue hall1
son palabras formales del Almirante [ ... J "Yo - dice él- , porque nos tuviesen arril
mucha amistad, porque conocí que era gente que mejor se libraría y convertiría Rui!
a nuestra Santa Fe con amor que no por fuerza, les di a algunos de ellos unos coro
bonetes colorados y unas cuentas de vidrio que se ponían al pescuezo, y otras mU)
cosas muchas de poco valor, con que hubieron mucho placer y quedaron tanto aqw
nuestros que era maravilla. Los cuales después venían a las barcas de los navíos muj
adonde nos estábamos, nad ando, y nos traían papagayos e hilo de algodón en derr
azagaya: lanza pequeña. ovillos y azagayas* y otras cosas muchas, y nos las trocaban* por otras cosas que pañ
trocar: cambiar, canjear. nos les dábamos, como cuentecillas de vidrio y cascabeles. En fin, todo toma- fue1
harto: muy.
mancebo: joven.
ban y daban de aquello que tenían de buena voluntad. Mas me pareció que era surt
presto: rápido, pronto. gente muy pobre de todo. Ellos andan todos desnudos como su madre los parió, sus
y también las mujeres, aunque no vi más de una harto* moza. Y todos los que qu
yo vi eran todos mancebos*, que ninguno vi de edad de más de treinta años: de~
muy bien hechos, de muy hermosos cuerpos y muy buenas caras: los cabellos leo1
gruesos casi como sedas de cola de caballo, y cortos [ ... J. Ellos no traen armas bie1
ni las conocen, porque les mostré espadas y las tomaban por el filo y se cortaban los
con ignorancia. No tienen algún hierro: sus azagayas son unas varas sin hierro, dol
y algunas de ellas tienen al cabo un diente de pez, y otras de otras cosas. Ellos má:
todos a una mano son de buena estatura de grandeza y buenos gestos, bien har
hechos. Yo vi algunos que tenían señales de heridas en sus cuerpos, y les hice y C<
señas qué era aquello, y ellos me mostraron cómo allí venían gente de otras islas bár
que estaban cerca y les querían tomar y se defendían. Y yo creí y creo que aquí
vienen de tierra firme a tomarlos por cautivos. Ellos deben ser buenos servi-
dores y de buen ingenio, que veo que muy presto* dicen todo lo que les decía,
y creo que ligeramente se harían cristianos; que me pareció que ninguna secta
tenían. Yo, placiendo a N uestro Señor, llevaré de aquí al tiempo de mi partida
seis a Vuestras Altezas para que aprendan a hablar. Ninguna bestia de ninguna
manera vi, salvo papagayos, en esta isla". Todas son palabras del Almirante.

Cristóbal Colón, Los cuah·o viajes de/A lmimntey Sll testamento,


Buenos Aires, Espasa-Calpe, 1946 (fragmento).

54 I Capítulo 3 Mitos y leyendas de Hispanoamérica


La Argentina manuscrita
:l Ruy D íaz de Guzmán, autor de una obra conocida como LaArgentina o
RUYDÍAZDE
L aArgentina manuscrita, fue el primer historiador nacido en América. Su GUZMAN
no obra relata los sucesos que van desde el descubrimiento del Río de la Plata {1558?-1629)
as, hasta la fundación de Santa Fe. Si bien se ocupa de los hechos históricos,
t ambién da cuenta de algunas leyendas, recogidas de la tradición oral, Nació en Asunción (Paraguay).
como el episodio de la Maldonada. En el capítulo XII, el texto refiere la Participó activamente de la
conquista como militar y escribió
historia de una mujer española que, debido al hambre terrible que sufría la Historia del descubrimiento y
e primera Buenos Aires en 1536, sitiada por los indios, escapó del fuerte y se conquista del Río de Ja Plata,
fue a vivir a la selva donde ayudó a una leona a tener cría. Tiempo después, cronológicamente la primera
sucedió lo que Díaz de Guzmán cuenta de este modo. historia escrita sobre la conquista
del Río de la Plata. Su obra también
erra, es conocida como La Argentina
taba, En este tiempo sucedió una cosa admirable que por serlo la diré; y fue que o La Argentina manuscrita, para
l sus habiendo salido a correr la tierra un caudillo en aquellos pueblos comarcanos*, diferenciarla de un poema histórico
escrito por Martín del Barco
igue halló en uno de ellos, y trajo, en su poder, aquella mujer de que hice mención
Centenera, titulado La Argentina y
esen arriba, que por la hambre se fue a poder de los indios: la cual como Francisco conquista del Río de Ja Plata.
tiría Ruiz la vio, condenó a que fuese echada a las fieras para que la despedazasen y
JnOS comiesen; y puesto en ejecución su mandato, cogieron a la pobre mujer, y atada
)tras muy bien a un árbol, la dejaron una legua fuera del pueblo, donde acudiendo
comarcano: cercano, vecino.
anto aquella noche a la presa número de* fieras, entre ellas vino la leona a quien esta número de: varias, muchas.
lVÍOS mujer había ayudado en su parto: la cual conocida por ella, la defendió de las acometer: embestir.
nen demás fieras que allí estaban y la querían despedazar; y quedándose en su com- constreñir: obligar, llevar a que
alguien haga algo.
; que pañía la guardó aquella noche, y otro día y noche siguiente, hasta que al tercero desamparar: abandonar, dejar.
>ma- fueron allá unos soldados por orden de su capitán a ver el efecto que había
e era surtido de dejar allí aquella mujer; y hallándola viva, y la leona a sus pies con
1arió, sus dos leoncillos, la cual sin acometerles* se apartó algún tanto dando lugar a
; que que llegasen, lo cual hicieron quedando admirados del instinto y humanidad
tños: de aquella fiera, y desatada por los soldados, la llevaron consigo, quedando la
ellos leona dando muy fieros bramidos, y mostrando sentimiento y soledad de su
rmas bienhechora, y por otra parte, su real instinto y gratitud, y más humanidad que
aban los hombres; y de esta manera quedó libre la que ofrecieron a la muerte, echán- ~ ACTIVIDADES
.erro, dola a las fieras: la cual mujer yo la conocí, y la llamaban la Maldonada, que
Ellos más bien se le podía llamar la Biendonada, pues por este suceso se ha de ver no 1. ¿Qué elementos describe el
bien haber merecido el castigo a que la ofrecieron, pues la necesidad había sido causa Diario de viaje?
hice y constreñídola* a que desamparase* la compañía, y se metiese entre aquellos 2. ¿Qué adjetivos caracterizan
islas bárbaros. [ . ..J el caso sucedió como queda referido. la actitud del observador?
aquí 3. ¿Por qué predomina la
erv1- Ruy Díaz de Guzmán, La Argentina manuscrita, descripción como tipo textual?
lecía, Buenos Aires, Espasa-Calpe, 1945 {fragmento). 4 . ¿A qué se debe el empleo de
secta las comillas?
rtida S. ¿Cuáles son los elementos
guna fabulosos que relata el texto de
Ruy Díaz de Guzmán?
6. Busquen información
mento, sobre la primera fundación de
1ento). Buenos Aires y el sitio al que fue
sometida la ciudad.

55
Entre la realidad y la fantasía La
tural
La literatura hispanoamericana, es decir, la Eda
literatura americana escrita en lengua española, ...
"2 las i
se origina con el proceso por el que España em- nista
E
p rende la conquista y colon ización de América • conv
en el siglo XVI; más precisamente se puede de- l
a E
cir que el text o inaugural es el Diario de viaje, de tos R
Cristóbal Colón.
Exótico y deslumbrante, extraño en su geo-
1 toda

grafía, su gente, sus plantas y animales, ese Cr


nuevo mundo se d espliega ante la m irada de
los conqu istadores. Así lo afirma el humanista L
Pedro Mártir de Anglería, designado Cronista cribE
Oficial en 1510: " Reservado estaba a nuestra textc
época ver acrecentarse de esta suerte nuestras cripc
concepciones y aparecer impensadamente en ydif
el horizonte t antas cosas nuevas". Como di ría e
varios sig los después el naturalista Alexa nder tient
von Humboldt (1769-1859), luego de sus viaj es herc
exploratorios por América, fue como si la obra de I<
entera de la Creación se hubiera duplicado. tori<
Hernán Cortés llega a Veracruz, obra Una rea lidad desconocida supera la capa ci dad racional y emociona l de esos pee
del artista mexicano Diego Rivera hombres que se enfrentan a ella y parece confirmar viejas leyendas y fantasías bí- Ren
(1886-1957).
blicas, clásicas o medieva les. Ese est upor, que se extiende a los lectores contempo- ~
ráneos, se manifiesta con claridad en los t extos que producen los conquistadores y
La conquista y otras artes cronistas, como muestran los ejemplos leídos al inicio de este capítulo.
Además de los testimonios La intención de dar testimon io de los sucesos que viven en el Nuevo Mundo y
históricos y literarios, otras de describ ir su geog rafía vacila ante una realidad que resulta difícil de asimilar y da
manifestaciones artísticas
lugar al juego de la imaginación. Fábulas y sueños parecen confirma rse; la maravi-
han abordado el proceso de la
colonización de América. Como lla y la verd ad se entrecruza n; se d esdibujan los lím ites entre la historia y la litera- par;
ejemplo, dospelículas: Aguirre, tura de ficción, entre lo rea l y lo imaginario. Sin embargo, a pesar de que la realidad 1
la ira de Dios (1972), del director
se ree labora a través de una óptica fantasiosa, lo ha bitual es que los cronistas no rio <
alemán Werner Herzog (a la
creen imaginativa m ente un mundo de ficción: los hechos relatados y los persona- Co~
cual corresponde la imagen),
y la misión (1986), producción jes mencionados han sucedido y existido en un tiempo y en un espacio rea les y sob
británica dirigida por Roland Joffé. pueden ser verificados. cuy
su\
Entre el Medioevo y el Renacimiento
his1
El Nuevo Mundo plant ea un desafío a los conquistadores: conocer y dar cuenta ver,
de una rea lidad t an diferente de la propia a partir de los esquemas conceptuales y t an
fil osóficos medievales. Pero este no es el ún ico conflicto. El enfrentamiento entre SU1

dos cu lturas en pugna, la del hombre b lanco y la del indígena, dej a su huella en vi si
los primeros reg istros escritos de la colonización de América y se extiende durante
los sig los XVI, XVII y XVIII. A pesar de que varios pueblos originarios tenían cultu-
ras muy desarrolladas y sus propias lenguas, ese enfrentamient o impondrá tanto la
cultura europea como el idioma español.

56 I Capítulo 3 Mitos y leyendas de Hispanoamérica

-H-----------.-..-....._._._._....................i-..
La etapa de la conquista coincide con el auge de un movimiento artístico y cul-
tural que manifiesta un cambio fundamental en la transición de la Edad Media a la
cir, la Edad Moderna: el Renacimiento. Este movimiento propone una revalorización de
1ñola, 1l las ideas y formas de las culturas griega y romana; sitúa al hombre como protago-
"
3em- g nista de la historia y como centro de la reflexión fil osófica; la ciencia y la historia se
1érica i convierten en modos de conocer y explicar el mundo.
e d e- j En esa época comienza en América Latina la literatura colonial, con textos escri-
je, de
.
"
~

¡; tos por hombres que responden a los nuevos ideales del Renacimiento, pero que LAS CRÓNICAS V LA ÉPICA
~ todavía están sujetos a esquemas medievales.
-J.
geo-
;, ese
."
~

o
Crónicas y cronistas
En general se usa la denominación
género épico como equivalente
¡¡
¡;
de género narrativo, uno de
:la de • los géneros literarios clásicos o
mist a •&
j:
La literatura colonial comprende ca rtas, crónicas y poemas épicos, que des- tradicionales en que se clasifican
mist a ~ criben el mundo descubierto y narran las hazañas y las victorias españolas. Estos los textos literarios. Los géneros
¡:
1estra o textos presentaban América a los lectores europeos; por ello, se detenían en la des- que completan esta clasificación
son el lírico y el dramático.
:!stras cripción de est as tierras y las formas de vida de sus habitantes, un modo de ordenar El poema épico es un tipo
1te en y difundir datos de la antropología y la naturaleza del Nuevo Mundo. particular de narración literaria:
'diría Conocidos como crónicas de Indias, los relatos escritos por los conqu istadores el relato de hechos heroicos en
verso, como los cantares de gesta
rnder tienen un tono épico: dan t estimonio de la conquista como una gesta espectacular,
viajes
1obra
heroica, desde el punto de vista del europeo. Estas crónicas destacan la gra ndeza
de la empresa y el coraje de sus protagon istas. Contienen información sobre la his-
(pueden buscar más información
' n los capítulos 1 y 4). J
). toria y las costumbres de los habitantes originarios del contin ente desde la pers-
~esos pectiva del conocimiento científico en el período de transición de la Edad Media al
ías bí- Renacimiento.
~mpo- Las crónicas pertenecen al p lano de la historia, por cuanto establecen hechos
o res y del descubrimiento y de la conquista, basados en la realidad objetiva, en datos y en
la observació n directa. Pero también pertenecen al plano de la literatura, pues con-
ndoy tienen elementos fantásticos que provienen de mitos del mundo grecolatino, de
ir y da las historias bíblicas, de las leyendas medievales y de las novelas de caballería del
1aravi- siglo XV. La realidad y la fa ntasía se fu sionan, la historia y la imaginación confluyen
litera- para mostrar ese mundo ext raño.
ali dad Cristóbal Colón es el primero de los cronist as de Indias con sus Cartas y el Dia-
tas no rio del primer viaje. Algunos conq uistadores se destacaron com o cronistas: Hernán
·son a- Cortés, el primero que relató la conquista de México en las cinco Cartas de relación
!ales y sobre el descubrimiento y conquista de Nueva España, y Alvar Núñez Cabeza de Vaca,
cuya obra más conocida, Naufragios, recopi la aventuras de
su v ida en América.
Entre los primeros narradores va liosos de la literatura HISTOUA
VERDADERA
:uenta
hispanoamericana se sitúan Bernal Díaz del Castillo (Historia
verdadera de la conquista de Nueva España) y el más impor-
....
llh LA CONQ)'ISTA

NUEVA·.ESP~A·
Ja les y tante de los cronistas indios, el Inca Ga rcilaso de la Vega. En
' entre su obra, los Comentarios Reales, aparece por primera vez la
:!lla en visión de los conqu istados frente a los conquistadores.
urante
cultu-
Los escritores hispanoamericanos
3nto la
contemporáneos han tomado de las
crónicas temas, personajes y mitos,
al elaborar sus obras literarias.

57
Mitos y leyendas de los orígenes se da •
ese or
Los textos del período de la conquista y la colonización exhiben el comienzo de dery 1
un proceso complejo de confluencia y mestizaje de las distintas culturas y lenguas, Ex
las de los pueblos originarios y las de los europeos. mani~
Lo que se ha dado en llamar literaturas indígenas, y ha llegado hasta la actuali- mitos
dad como tal, son versiones de antiguos relatos orales y poemas, escritos durante
la colonización por los cronistas que recogieron m itos, leyendas y tradiciones reli- pre se
giosas de los pueblos americanos.
Por su parte, las crónicas registran las tensiones y la violencia que origina ese en- tensi
frentamiento de mundos y culturas: la aceptación o el rechazo de las construccio- •r
nes cu lturales y las creencias religiosas indígenas; su posible trasplante y adapta- se rec
ción, en pugna con la visión europea; el poder de la fuerza m ilitar y la presión de la su Ita
LA LENGUA ORAL Iglesia católica. En ese proceso los t estimonios escritos da n cuenta de ese confli cto
violento al tiempo que re latan historias y leyendas de los pueblos originarios y, en
La lengua oral, más espontánea,
menos cuidada que la lengua
consecuencia, incorporan voces ind ígenas a la lengua española. Algunos críticos e
escrita, tiene una finalidad práctica historiadores afirman que ese proceso y los nuevos modos de sentir e interp retar la La
e inmediata (por ejemplo: pedir, realidad crean una visión peculiar que desembocará en el desarrollo de una expre-
saludar, responder, etcétera).
sión propia en la literatura latinoamericana. L
Por esa razón, suele presentar
construcciones que se apartan de yun1
la sintaxis considerada correcta La leyenda amo
y emplear un voca bulario que En todas las comunidades hay historias t radicionales que circulan durante mu - selva
no pertenece al léxico general
de la lengua. Así, en el caso de
cho ti empo de boca en boca. Hi storias que hablan de cost umbres y creencias, de B
las leyendas, es frecuente que animales y plantas de la región, de determinados lugares geográficos u objetos.
aparezcan regionalismos, es decir, Dichos relatos forman parte d e la cultura popular. No t ienen un autor determi-
términos y construcciones propios nado y, por eso, se dice que son anónimos. Anécdotas, leyendas, fábulas, relatos de
de una determinada región; por
ejemplo: ñácara, en América origen folclórico se transmiten ora lmente hasta que alguien por distintas razones
Central, por úlcera o llaga. Cuando les da una forma escrita, una versión posible, como sucede en el caso de las cróni- pero
los regionalismos tienen su origen cas cuando regi stran tradiciones orales de los pueblos americanos. Can
en lenguas indígenas, se trata pied
Las leyendas son textos narrativos breves. Suelen relatar sucesos de la tradición
de indigenismos; por ejemplo,
cancha es una palabra de origen ora l o explicar el origen de hechos y fenómenos naturales mediante historias ima- vos]
' tuechua. j ginarias que incorporan habitualmente elementos marav illosos o sobrenaturales, l\
como transformaciones, intervención de los dioses, presencia de animales y plan- mor
t as con atri butos hu manos. Por ese cruce entre lo rea l y lo maravilloso, se considera caye
que la leyenda es un género que está entre el mito y el cuento ma ravil loso. I
EL CUENTO
MARAVILLOSO Estos relatos parten de lo que se dice en torno de un acontecim iento o un per-
sonaje; por esta razón, en ellos importa más decir " lo que se cree" que la verda d
Los cuentos maravillosos narran
histórica. Se puede afirmar que, de algún modo, la leyenda parte d el recu erdo y la
hechos sobrenaturales dentro
de un ambiente sobrenatural, memoria colectiva .
en el que no resultan extraños:
son creíblesdentro de la ficción.
Los cuentos de hadas son relatos
La estructura de la narración
maravillosos; por ejemplo, el sapo
se transforma en príncipe; la Bella Los textos narrativos -cuentos, leyendas, fábu las, mitos, novelas- refieren
' urmiente duerme cien años. j hechos que tienen entre sí una relación temporal (unos siguen o anteceden a ot ros)
y una relación causal (unos son ca usa o consecuencia de otros).
El re lato de esos hechos puede reproducir el orden cronológico en el que suce-
den y, por lo tanto, seguir un orden lineal de los acont ecimientos. También, como

58 1Capítulo 3 Mitos y leyendas de Hispanoamérica


se da con frecuencia en la narrativa del siglo XX, el discurso narrativo puede alterar
ese orden y contar los acontecimientos sin seguir la sucesión cronológica (retroce-
zode der y relatar un hecho anterior, anticipar sucesos posteriores).
guas, ~ Existe una estructura canónica o estructura clásica del texto narrativo que se
"
g manifiesta, en especial, en los relatos tradicionales de transmisión oral -fábulas,
,;
tu ali- a mitos, leyendas, cuentos populares-. Esa estructura consta de tres momentos:
rante
j · situación inicial: el comienzo funciona como una introducción a la historia: se
s reli-
.
~
o presenta a los personajes, qué pasa, dónde y cuándo sucede la acción;
~
r · complicación: uno o varios hechos modifican esa situación primera y generan
-
;een-
JCciO-
.•' tensión en el relato; es lo que, en genera l, se denomina nudo de la narración;
· resolución: la situación planteada se resuelve en una dirección u otra, es decir,
~ se recupera el equilibrio del comienzo o se produce una nueva situación como re-
apta- o

de la ~ sultado de los sucesos relatados.
!
1flicto
;y, en
'~
Q

icos e
~tar la La laguna de la niña encantada ~ ACTIVIDADES
~x pre -

La mujer más hermosa de la tribu era Elcha, la joven hija del cacique Nuca- 1. "La laguna de la niña
yunki. Estaba enamorada de Cantimpán, pero sus padres se oponían a ese encantada" es una leyenda
amor. Por esta razón y decididos a estar juntos, los dos jóvenes huyeron a la argentina, de la región de Cuyo.
e mu- selva. Respondan a las siguientes
as, de Pero la cacica Chulpán también estaba enamorada de Cantimpán, y juró preguntas.
os. que a cualquier precio se vengaría y conquistaría el amor del joven. Intrigante a. ¿Cuál es el origen de la
:ermi- y temeraria, para evitar que los enamorados la reconocieran, se transformó en laguna según esta leyenda?
:osde una lechuza; los siguió y se apareció ante ellos. b. ¿Qué elementos
zones Elcha se asustó. Se miró entonces en el espejo de las aguas de una laguna sobrenaturales aparecen en la
cróni- pero quedó petrificada. D esesperado, sin poder tolerar la muerte de su amada, historia?
Cantimpán se arrojó al agua y Elcha quedó sola, convertida en una estatua de c. Vuelvan a leer la
:lición piedra, al borde de la laguna. Desde ese día terrible, ese lugar fue para los nati- caracterización del género
sima- vos la laguna de la niña encantada. leyenda y comenten qué rasgos
irales, Muchos, muchos años después, triste en su soledad de piedra, Elcha se des- se aplican en este caso.
·plan- moronó impulsada por el deseo poderoso de reunirse con su amado. Sus restos d. Marquen en el texto las
sidera cayeron al agua y allí se reencontró para siempre con Cantimpán. referencias temporales,
Dicen los que conocen el lugar que, cuando comienza a anochecer, las aguas es decir, las palabras y
n per- de la laguna se inquietan y su oleaje llega bramando hasta la costa, en pro- construcciones que ubican
erdad testa por el destino cruel de los enamorados y la tremenda crueldad de los hechos en el tiempo. ¿Son
:lo y la Chulpán. Ella sigue siendo una lechuza agorera y sus chisti- precisos? ¿Permiten datar con
dos asustan a los indios que la creen capaz de todos los precisión los hechos o saber
males y origen de todos los daños. con exactitud cuánto tiempo
D esde entonces, Chulpán vive oculta ha transcurrido? ¿Qué efecto da
en tenebrosas cuevas y solo sale de noche a la historia esa imprecisión?
fieren pues está condenada: nunca más verá la e. Resuman brevemente los
otros) magnífica luz del día. tres momentos en que se
articula la narración.
suce- Anónimo, Leyendas argentinas,
como Buenos Aires, Centro Editor de América
Latina, 1972 (adaptación).

59
Historias viejas y voces nuevas
en ce
En el siglo XX, la novela y el cuento hispanoamericanos reflejaron de una ma- nalL
nera crítica la realidad socia l y adqui rieron un lugar fundamental, tanto desde un Nue'
punto de vista histórico como literario. El desarrol lo de la narrativa latinoameri- cond
cana, estrechamente vi nculado con los procesos sociales y políti cos, trascendió las que
fronteras de los países que la producen. p
Uno de sus escritores más significativos, el guatemalteco Miguel Ángel Asturias, E
recuperó, de un modo original y muy personal, tradiciones y creencias de los pue- y loe
blos originarios recreándolas en una prosa que emplea nuevas técnicas narrativas, por s
propias de los esti los de las vanguardias. nega
"La leyenda del Sombrerón" toma a un personaje fabuloso muy popular en los p•
Améri ca Centra l y le adjudica un origen bastante particular. dem
E:
acert1
vente;
La leyenda del Sombrerón y
El Sombrerón recorre losportales... y
ñay 1
En aquel apartado rincón del mundo, tierra prometida a una Reina por un se la 1
MIGUEL ÁNGEL
ASTURIAS Navegante loco, la mano religiosa había construido el más hermoso templo al E
(1899-1974) lado de las divinidades que en cercanas horas fueran testigo de la idolatría* del tra S
hombre - el pecado más abominable a los ojos de D ios-, y al abrigo de los to ex
Poeta, narrador, periodista, tiempos de montañas y volcanes detenían con sus inmensas moles. dad I
dramaturgo y diplomático L os religiosos encargados del culto, corderos de corazón de león, por flaqueza 1mpu
guatemalteco, es uno de los
humana, sed de conocimientos, vanidad ante un mundo nuevo o solicitud hacia la sobre
protagonistas de la literatura
latinoamericana del siglo XX. tradición espiritual que acarreaban navegantes y clérigos, se entregaron al cultivo E.
Entre sus obras se destacan de las bellas artes y al estudio de las ciencias y la filosofía, descuidando sus obli- ustar.
Leyendas de Guatemala (1930), brars
gaciones y deberes a tal punto, que, como se sabrá el D ía del juicio, olvidábanse
El Señor Presidente (1 946),
Hombres de maíz (1949) y de abrir el templo, después de llamar a misa, y de cerrarlo concluidos los oficios ... asien
E/alhajad/to (1961). En 1966 Y era de ver y era de oír y de saber las discusiones en que por días y noches se una a
ganó el Premio Lenin de la Paz enredaban los más eruditos, trayendo a tal ocurrencia citas de textos sagrados, jo go·
y en 1967, el Premio Nobel de Se
los más raros y refundidos.
Literatura. Murió en París.
Y era de ver y era de oír y de saber la plácida tertulia* de los poetas, el dulce con t
arrebato de los músicos y la inaplazable labor de los pintores, todos entregados quier
a construir mundos sobrenaturales con los recados* y privilegios del arte. en el
idolatría: adoración de los ídolos; Reza en viej as crónicas, entre apostillas* frondosas de letra irregular, que a po d~
amor excesivo a una persona o cosa. nada se redujo la conversación de los filósofos y los sabios; pues, ni mencionan la cel
tertulia: reunión de personas que se sus nombres; para confundirles la Suprema Sabiduría les hizo oír una voz que les Pe
juntan habitualmente para conversar
mandaba se ahorraran el tiempo de escribir sus obras. Conversaron un siglo sin come
o recrearse.
recado: condición, característica. entenderse nunca ni dar una plumada, y diz* que cavilaban en tamaños errores. en se
apostilla: acotación o nota que De los artistas no hay mayores noticias. Nada se sabe de los músicos. En las to, re
completa y aclara un texto. estre
iglesias se topan pinturas empolvadas de imágenes que se destacan en fondos
diz: dicen.
imaginero: pintor o escultor de pardos al pie de ventanas abiertas sobre panoramas curiosos por la novedad del palpi
imágenes, generalmente relig iosas. cielo y el sinnúmero de volcanes. Entre los pintores hubo imagineros* y a juzgar
por las esculturas de Cristos y D olorosas que dejaron, deben haber sido tristes y N
españoles. Eran admirables. L os literatos componían en verso, pero de su obra ra ini
solo se conocen palabras sueltas. come

60 1Capítulo 3 Mitos y leyendas de Hispanoamérica

•n. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. . . .~
Prosigamos. Mucho me he detenido
en contar cuentos viejos, como dice Ber-
ama- nal Díaz del Castillo en "La Conquista de
de un ;:¡ Nueva España", historia que escribió para
2 contradecir a otro historiador; en suma, lo
meri- s
Mlas t que hacen los historiadores.
§
! Prosigamos con los monjes ...
~
:urias, ~ Entre los unos, sabios y filósofos, y los otros, artistas
; pue- ~ y locos, había uno a quien llamaban a secas el Monje,
-
~

3tivas,
.•'
o
por su celo religioso y santo temor de Dios y porque se
negaba a tomar parte en las discusiones de aquellos, en
la r en ~ los pasatiempos de estos, juzgándoles a todos víctimas del

~ demonio.
l
~ El Monje vivía en oración dulces y buenos días, cuando
¡::
o acertó a pasar, por la calle que circunda los muros del con-
vento, un niño jugando con una pelotita de hule*.
Y sucedió...
>rtales... Y sucedió, repito para tomar aliento, que por la peque-
ña y única ventana de su celda, en uno de los rebotes, colo-
1orun se la pelotita.
.plo al El religioso, que leía la Anunciación de Nues-
:a* del tra Señora en un libro de antes, vio entrar el cuerpeci-
de los to extraño, no sin turbarse, entrar y rebotar con agili-
dad midiendo piso y pared, pared y piso, hasta perder el
.queza impulso y rodar a sus pies, como un pajarito muerto. ¡Lo
aciala sobrenatural! Un escalofrío le cepilló la espalda.
:ultivo El corazón le daba martillazos, como a la Virgen des-
; obli- ustanciada en presencia del Arcángel. Poco, necesitó, sin embargo, para reco-
hule: tela pintada y barnizada para
tbanse brarse y reír entre dientes de la pelotita. Sin cerrar el libro ni levantarse de su hacerla impermeable.
cios ... asiento, agachase para tomarla del suelo y devolverla, y a devolverla iba cuando presto: pronto, diligente.
bes se una alegría inexplicable le hizo cambiar de pensamiento: su contacto le produ-
rados, jo gozos de santo, gozos de artista, gozos de niño...
Sorprendido, sin abrir bien sus ojillos de elefante, cálidos y castos, la apretó
. dulce con toda la mano, como quien hace un cariño, y la dejó caer en seguida, como
:gados quien suelta una brasa; mas la pelotita, caprichosa y coqueta, dando un rebote
en el piso, devolviose a sus manos tan ágil y tan presta* que apenas si tuvo tiem-
. que a po de tomarla en el aire y correr a ocultarse con ella en la esquina más oscura de El Sombrerón
la celda, como el que ha cometido un crimen. El Sombrerón es un personaje
:ionan
legendario al que se representa
:¡ue les Poco a poco se apoderaba del santo hombre un deseo loco de saltar y saltar como un enano. Lleva un enorme
:;lo sin como la pelotita. Si su primer intento había sido devolverla, ahora no pensaba sombrero negro, que casi le tapa
:ores. en semejante cosa, palpando con los dedos complacidos su redondez de fru- el rostro, una guitarra, y usa botas
que hacen ru ido. Viaja en una mula
En las to, recreándose en su blancura de armiño, tentado de llevársela a los labios y
que lleva carbón, da serenatas a
nndos estrecharla contra sus dientes manchados de tabaco; en el cielo de la boca le las mujeres y las seduce con su
lad del palpitaba un millar de estrellas ... encantador sombrero de ranchero.
juzgar -¡La Tierra debe ser esto en manos del Creador! -pensó.
:istes y No lo dijo porque en ese instante se le fue de las manos - rebotado-
u obra ra inquietud- , devolviéndose en el acto, con voluntad extraña, tras un salto,
como una inquietud.

61
-¿Extraña o diabólica? ...
Fruncía las cejas - brochas en las que la atención riega dentífrico invisi- de
ble- y, tras vanos temores, reconciliábase con la pelotita, digna de él y de toda ve1
alma justa, por su afán elástico de-levantarse al cielo. ge
Y así fue como en aquel convento, en tanto unos monjes cultivaban las
Bellas Artes y otros las Ciencias y la Filosofía, el nuestro jugaba en los corredo-
res con la pelotita. la
Nubes, cielo, tamarindos .. . Ni un alma en la pereza del camino. De vez en yl<
celeroso: rápido, presuroso. cuando, el paso celeroso* de bandadas de pericas* domingueras comiéndose el
perico: especie de papagayo silencio. El día salía de las narices de los bueyes, blanco, caliente, perfumado.
pequeño, propio de Cuba y de
América del Sur.
A la puerta del templo esperaba el monje, después de llamar a misa, la lle-
arrobado: embelesado, extasiado. gada de los feligreses jugando con la pelotita que había olvidado en la celda. de.
sosegado: sereno, tranquilo. ¡Tan liviana, tan ágil, tan blanca!, repetíase mentalmente. Luego, de viva voz, y ÍOJ
recua: conjunto de animales de entonces el eco contestaba en la iglesia, saltando como un pensamiento: SOi
carga.
¡Tan liviana, tan ágil, tan blanca!. .. Sería una lástima perderla. Esto le ape-
naba, arreglándoselas para afirmar que no la perdería, que nunca le sería infiel,
que con él la enterrarían ... , tan liviana, tan ágil, tan blanca...
¿Y si fuese el demonio?
Una sonrisa disipaba sus temores: era menos endemoniada que el Arte, las
Ciencias y la Filosofía, y, para no dejarse mal aconsejar por el miedo, tornaba a
las andadas, tentando de ir a traerla, enjuagándose con ella de rebote en rebo-
te ... , tan liviana, tan ágil, tan blanca . . .
Por los caminos -aún no había calles en la ciudad trazada por
un teniente para ahorcar- llegaban a la iglesia hombres
y mujeres ataviados con vistosos trajes, sin que el reli-
11
gioso se diera cuenta, arrobado* como estaba en sus 1.
pensamientos. La iglesia era de piedras grandes; 2.
pero, en la hondura del cielo, sus torres y cúpu- sit
la perdían peso, haciéndose ligeras, aliviadas, .! 3.
sutiles. Tenía tres puertas mayores en la entra- 4.
da principal, y entre ellas, grupos de columnas 5.
salomónicas, y altares dorados, y bóvedas y de
pisos de un suave color azul. L os santos estaban es
como peces inmóviles en el acuoso resplandor cli
del templo.
Para buscar biografías de Por la atmósfera sosegada* se esparcían
autores, un comentario que tuteos de palomas, balidos de ganados, trot es
los presente, títulos y fechas de sus
obras, pueden consultar:
de recuas*, gritos de arrieros. Los gritos abrían-
http://www.buscabiografias.com/ se como lazos en argollas infinitas , abarcán-
http.//www.biografiasyvidas.com/ dolo todo: alas, besos, cantos. Los rebaños, al ir
subiendo por las colinas, formaban caminos blan-
cos, que al cabo se borraban. Caminos blancos,
caminos móviles, caminitos de humo para jugar
una pelota con un monje en la mañana azul. .. •
-¡Buenos días le dé Dios, señor! La voz IE

de una mujer sacó al monje de suspensa- e


mientos. Traía de la mano a un niño triste.

62 1Capítulo 3 Mitos y leyendas de Hispanoamérica


-¡Vengo, señor, a que, por vida suya, le eche los Evangelios a mi hijo, que
visi- desde hace días está llora que llora, desde que perdió aquí, al costado del con-
tada vento, una pelota que, ha de saber su merced, los vecinos aseguraban era la ima-
gen del demonio .. .
1 las (... tan liviana, tan ágil, tan blanca ... )
edo- El monje se detuvo de la puerta para no caer del susto, y, dando la espalda a
la madre y al niño, escapó hacia su celda, sin decir palabra, con los ojos nublados
:z en y los brazos en alto.
•Se el Llegar allí y despedir la pelotita, todo fue uno.
lo. - ¡Lejos de mí, Satán! ¡Lejos de mí, Satán!
t lle- La pelota cayó fuera del convento - fiesta de brincos y rebrincos de cor-
elda. derillo en libertad- , y, dando su salto inusitado, abriose como por encanto en
-oz,y forma de sombrero negro sobre la cabeza del niño, que corría tras ella. Era el
sombrero del demonio.
ape- Y así nace al mundo el Sombrerón.
nfiel,
Mig uel Ángel A sturias, en Leyendas de Guatemala,
Buenos Aires, L osada, 1957.
·e, las © H erederos de Miguel Ángel Asturias, 2010.
aba a
·ebo-

Para leer material de y sobre


~.L ACTIVIDADES Miguel Angel Asturias,
pueden consultar:
http://www.literaturaguatemalteca.
1. ¿Quién y cómo es el personaje central? org
2. ¿Cuál es la compl icación, o sea, el segundo momento del relato, que modifica la Para leyendas urbanas de terror en
Internet:
situación inicial? ¿Qué cambios introduce?
http://www.cibersociedad.net
3. ¿Cuál es el origen del Sombrerón según el fina l de este relato? Leyendas americanas en:
4. ¿En qué elementos del texto se advierte la presencia de un pensamiento mágico? http://www.7calderosmagicos.
S. Relean el relat o y busquen t res ej emplos de párrafos donde predomine la com.ar
descripción. ¿Qué tipo de descripciones son? (Como guía: parciales/ globales,
estáticas/dinámicas, min uciosas/ generales, poéticas/ informativas, etcét era). ¿Qué
clima le otorgan esas descripciones al relato?

·;J1
];¡1/ 1
f9rROS RECORRIDOS DE LECTURA
• Desde el punto de vista histórico y en relación con la Argentina, de Juan Ambrosetti; Seres sobrenaturales de la cultura
colonización del Río de la Plata, se recomienda la lectura de popular argentina, de Adolfo Colombres.
La Argentina manuscrita, de Ruy Díaz de Guzmán, al que muchos • Reelaboraciones literarias de leyendas en la versión de escritores
consideran el primer historiador de la región, y la comparación españoles: se sugiere la lectura de textos de José Zorrilla y Gustavo
con algunos fragmentos de los Comentarios Reales, del Inca Adolfo Bécquer (de este último, en particular, "Los ojos verdes"y"EI
Garcilaso de la Vega. monte de las ánimas").
•Para leer sobre aparecidos, ánimas en pena y personajes • La versión poética de un relato de aparecidos en un magnífico
legendarios de la Argentina: Leyendas argentinas, publicado por cuento de Ricardo Güiraldes:"EI pozo'; del libro Cuentos de muerte
el Centro Editor de América Latina; Supersticiones y leyendas en la y desangre.

63
Otras voces, otros ecos
El interés por recuperar en la ficción narrativa los rasgos culturales de los pue-
JULIO CORTÁZAR blos orig inarios no se manifiesta solo en la reelaboración literaria de relatos, leyen- :o
(191 4-1984)
das y mitos de la t radición ora l. "
J
,_. A lo largo de los sig los XIXy XX, varios narradores apelaron a algunos de esos !8
Escritor fundamental de la motivos y temas para la escritura de sus cuentos y novelas. Vayan como ejem plos ]
~
narrativa hispanoamericana del Jorge !caza, José María Arg uedas, Alejo Carpentier, Juan Rulfo, Carlos Fuentes. ~
¡;
siglo XX. Nació en Bélgica, pero 7'
El cuento de Cortázar"La noche boca arriba" propone una vuelta de tuerca par-
vivió en la Argentina desde los 4
años. Si bien en 1952 se rad icó en ticular: e mplea nuevas técnicas narrativas en la convergencia de dos mundos dis í- -~..
~
~
París, toda su producción literaria miles y confluyentes a la vez. ~
g
es en lengua española. Algunos
de sus libros de cuentos son: ~
Bestiario (1951 ), Final deljuego j quit
(1956), Las armas secretas (1959)
y Todos los fuegos el fuego (1966). La noche boca arriba
.,o~ cu id
tiem
Entre sus novelas se destacan:
Y saffan en ciertas épocas a cazar enemigos; do rr
Los premios (1960), 62 /Modelo
para armar (1968) y, en le llamaban la guerra florida•. 1
particular, Rayuela (1963). húm
A mitad del largo zaguán del hotel pensó que debía ser tarde y se apuró a raci(
salir a la calle y sacar la motocicleta del rincón donde el portero de al lado le radi1
permitía guardarla. En la joyería de la esquina vio que eran las nueve menos de u
diez; llegaría con tiempo sobrado adonde iba. El sol se filtraba entre los altos algo
edificios del centro, y él - porque para sí mismo, para ir pensando, no tenía algu
nombre- montó en la máquina saboreando el paseo. L a moto ronroneaba G
entre sus piernas, y un viento fresco le chicoteaba* los pantalones. olor•
D ejó pasar los ministerios (el rosa, el blanco) y la serie de comercios con han
brillantes vitrinas de la calle Central. Ahora entraba en la parte más agradable yen
guerra florida: tipo de guerra ritual
del trayecto, el verdadero paseo: una calle larga, bordeada de árboles, con poco mov
que se daba entre los pueblos aztecas
del valle de México, siglos antes de la tráfico y amplias villas que dejaban venir los jardines hasta las aceras, apen as
conquista. Las ciudades organizaban demarcadas por setos bajos. C2!Jizá algo distraído, pero corriendo por la derecha
combates en los que se capturaban como correspondía, se dejó llevar por la tersura, por la leve crispación de ese día
hombres de ambos bandos y se los
apenas empezado. Tal vez su involuntario relajamiento le impidió prevenir el
sacrificaba.
chicotear: agitar, mover. accidente. Cuando vio que la mujer parada en la esquina se lanzaba a la calzada deli
a pesar de las luces verdes, ya era tarde para las soluciones fáciles. Frenó con el hab
pie y con la mano, desviándose a la izquierda; oyó el grito de la mujer, y junto puñ
con el choque perdió la visión. Fue como dormirse de golpe.
Volvió bruscamente del desmayo. Cuatro o cinco hombres jóvenes lo esta-
ban sacando de debajo de la moto. Sentía gusto a sal y sangre, le dolía una rodi-
lla y cuando lo alzaron gritó, porque no p odía soportar la presión en el brazo
derecho. Voces que no parecían pertenecer a las caras suspendidas sobre él, lo
alentaban con bromas y seguridades. Su único alivio fu e oír la confirmación
de que había estado en su derecho al cruzar la esquina. Preguntó por la mujer,
tratando de dominar la náusea que le ganaba la garganta. M ientras lo llevaban
boca arriba hasta una farmacia próxima, supo que la causante del accidente no
tenía más que rasguños en las p iernas. "Usté la agarró apenas, pero el golpe le
hizo saltar la máquina de costado ... " Opiniones, recuerdos, despacio, éntrenlo
de espaldas, así va bien, y alguien con guardapolvo dándole de beber un trago
que lo alivió en la penumbra de una pequeña farmacia de barrio.

64 j Capítulo 3 Mitos y leyendas de Hispanoamérica


La ambulancia policial llegó a los cinco minutos, y lo subieron a una cami-
lla blanda donde pudo tenderse a gusto. Con toda lucidez, pero sabiendo que
pue- estaba bajo los efectos de un shock terrible, dio sus señas al policía que lo acom-
~yen- ~
~
pañaba. El brazo casi no le dolía; de una cortadura en la ceja goteaba sangre por
toda la cara. Una o dos veces se lamió los labios para beberla. Se sentía bien,
esos
1plos
'•
¡;
so
Ji
era un acciden te, mala suerte; unas semanas quieto y nada más. El vigilante le
dijo que la motocicleta no parecía muy estropeada. "Natural", dijo él. "Como
..,,.
~
que me la ligué encima... " Los dos rieron y el vigilante le dio la mano al llegar
i par- "~ al hospital y le deseó buena suerte. Ya la náusea volvía poco a poco; mientras lo
-
; disí-
.•
e
llevaban en una camilla de ruedas hasta un pabellón del fondo, pasando bajo
árboles llenos de pájaros, cerró los ojos y deseó estar dormido o cloroformado.
~
o
•B Pero lo tuvieron largo rato en una pieza con olor a hospital, llenando una ficha,
quitándole la ropa y vistiéndolo con una camisa grisácea y dura. Le movían
~
~ cuidadosamente el brazo, sin que le doliera. Las enfermeras bromeaban todo el
¡:
o tiempo, y si no hubiera sido por las contracciones del estómago se habría senti-
emigos; do muy bien, casi contento.
1orida*. Lo llevaron a la sala de radio, y veinte minutos después, con la placa todavía
húmeda puesta sobre el pecho como una lápida negra, pasó a la sala de ope-
•uró a raciones. Alguien de blanco, alto y delgado, se le acercó y se puso a mirar la
ido le radiografía. Manos de mujer le acomodaban la cabeza, sintió que lo pasaban
1enos de una camilla a otra. El hombre de blanco se le acercó otra vez, sonriendo, con
altos algo que le brillaba en la mano derecha. Le palmeó la mejilla e hizo una seña a
tenía alguien parado atrás.
neaba Como sueño era curioso porque estaba lleno de olores y él nunca soñaba marisma: terreno pantanoso,
olores. Primero un olor a pantano, ya que a la izquierda de la calzada empeza- cercano a la costa.
moteca: nombre de un pueblo
>s con ban las marismas*, los tembladerales de donde no volvía nadie. Pero el olor cesó, inventado por Cortázar.
tdable y en cambio vino una fragancia compuesta y oscura como la noche en que se
tpoco movía huyendo de los aztecas. Y todo era tan natural, tenía que huir de los azte-
.p enas cas que andaban a caza de hombre, y su única probabilidad era la de esconderse
~recha en lo más denso de la selva, cuidando de no apartarse de la estrecha calzada que
~se día solo ellos, los motecas*, conocían.
::nir el Lo que más lo torturaba era el olor, como si aun en la absoluta aceptación
alzada del sueño algo se revelara contra eso que no era habitual, que hasta entonces no
con el había participado del juego. "Huele a guerra", pensó, tocando instintivamente el
·junto puñal de piedra atravesado en su ceñidor de lana tejida. Un sonido inesperado

) esta-
:i.rodi-
brazo
e él, lo
nación
mujer,
~vahan
:nte no
olpe le
1trenlo
1 trago

65
lo hizo agacharse y quedar inmóvil, temblando. Tener miedo no era extraño, en
ahora j
sus sueños abundaba el miedo. E speró, tapado por las ramas de un arbusto y la subió~
noche sin estrellas. Muy lejos, probablemente del otro lado del gran lago, debían amule
estar ardiendo fuegos de vivac*; un resplandor rojizo teñía esa parte del cielo. trae la
vivac: campamento militar para
El sonido no se repitió. Había sido como una rama quebrada. Tal vez un animal motee
pasar la noche a cielo descubierto.
ventear: acción de algunos animales que escapaba como él del olor a guerra. Se enderezó despacio, venteando*. No se despa
de rastrear el viento con el olfato. oía nada, pero el miedo seguía allí como el olor, ese incienso dulzón de la guerra hacía ·
florida. H abía que seguir, llegar al corazón de la selva evitando las ciénagas. A tres dí
tientas, agachándose a cada instante para tocar el suelo más duro de la calzada, donan
dio algunos pasos. Hubiera querido echar a correr, pero los tembladerales palpi- le si
taban a su lado. En el sendero en tinieblas, buscó el rumbo. Entonces sintió una Pero 1
bocanada del olor que más temía, y saltó desesperado hacia adelante. que lo
-Se va a caer de la cama -dijo el enfermo de la cama de al lado-. No estaba
brinque tanto, amigazo. Oy
Abrió los ojos y era de tarde, con el sol ya bajo en los ventanales de la larga se inc<
sala. Mientras trataba de sonreír a su vecino, se despegó casi físicamente de cerca.
la última visión de la pesadilla. El brazo, enyesado, colgaba de un aparato al cue.
con pesas y poleas. Sintió sed, como si hubiera estado corriendo kilóme- rodeal
tros, pero no querían darle mucha agua, apenas para mojarse los labios enton•
y hacer un buche. La fiebre lo iba ganando despacio y hubiera podido
dormirse otra vez, pero saboreaba el placer de quedarse despierto, dome
entornados los ojos, escuchando el diálogo de los otros enfermos, Al
respondiendo de cuando en cuando a alguna pregunta. Vio llegar delicic
un carrito blanco que pusieron al lado de su cama, una enfermera ojo pr
rubia le frotó con alcohol la cara anterior del muslo, y le clavó una era gr:
gruesa aguja conectada con un tubo que subía hasta un frasco lleno Habí:
de líquido opalino. Un médico joven vino con un aparato de metal y polea
cuero que le ajustó al brazo sano para verificar alguna cosa. Caía la noche, y botell
la fiebre lo iba arrastrando blandamente a un estado donde las cosas tenían un tingu:
relieve como de gemelos de teatro, eran reales y dulces y a la vez ligeramente no de
repugnantes; como estar viendo una película aburrida y pensar que sin embargo recue
en la calle es peor; y quedarse. pensa
Vino una taza de maravilloso caldo de oro oliendo a puerro, a apio, a perejil. dente
Un trocito de pan, más precioso que todo un banquete, se fue desmigajando no al<
poco a poco. El brazo no le dolía nada y solamente en la ceja, donde lo habían levan
suturado, chirriaba a veces una punzada caliente y rápida. Cuando los venta- Y al .
nales de enfrente viraron a manchas de un azul oscuro, pensó que no iba a ser había
difícil dormirse. Un poco incómodo, de espaldas, pero al pasarse la lengua por en es·
los labios resecos y calientes sintió el sabor del caldo, y suspiró de felicidad, inme
abandonándose. mani
Primero fue una confusión, un atraer hacia sí todas las sensaciones por un los h•
instante embotadas o confundidas. Comprendía que estaba corriendo en plena de la
oscuridad, aunque arriba el cielo cruzado de copas de árboles era menos negro volve
que el resto. "La calzada", pensó. "Me salí de la calzada". Sus pies se hundían algu1
en un colchón de hojas y barro, y ya no podía dar un paso sin que las ramas de tirarl
los arbustos le azotaran el torso y las piernas.Jadeante, sabiéndose acorralado gant
a pesar de la oscuridad y el silencio, se agachó para escuchar. Tal vez la calzada devc
estaba cerca, con la primera luz del día iba a verla otra vez. Nada podía ayudarlo se ib

66 j Capítulo 3 Mitos y leyendas de Hispanoamérica


1ño,en ahora a encontrarla. La mano que sin saberlo él aferraba el mango del puñal,
:to y la subió como un escorpión de los pantanos hasta su cuello, donde colgaba el
:lebían amuleto protector. Moviendo apenas los labios musitó la plegaria del maíz que
1cielo. ::: trae las lunas felices, y la súplica a la Muy Alta, a la dispensadora de los bienes
;
tnimal motecas. Pero sentía al mismo tiempo que los tobillos se le estaban hundiendo
.No se .5s
¡¡ despacio en el barro, y la espera en la oscuridad del chaparral desconocido se le
guerra o
j hacía insoportable. L a guerra florida había empezado con la lu na y llevaba ya
,
gas.A tres días y tres noches. Si conseguía refugiarse en lo profundo de la selva, aban-
j
uzada, á donando la calzada más allá de la región de las ciénagas, quizá los guerreros no
palpi-
•-
..• le siguieran el rastro. Pensó en la cantidad de prisioneros que ya habrían hecho .
ióuna : Pero la cantidad no contaba, sino el tiempo sagrado. L a caza continuaría hasta
g
o que los sacerdotes dieran la señal del regreso. Todo tenía su número y su fin, y él

- .No
j estaba dentro del tiempo sagrado, del otro lado de los cazadores.
Oyó los gritos y se enderezó de un salto, puñal en mano. C omo si el cielo
'
e
ilarga "
g se incendiara en el horizonte, vio antorchas moviéndose entre las ramas, muy
nte de cerca. El olor a guerra era insoportable, y cuando el p rimer enemigo le saltó
Jara to al cuello casi sintió placer en hundirle la hoja de piedra en pleno pecho. Ya lo
lóme- rodeaban las luces y los gritos alegres. Alcanzó a cortar el aire una o dos veces, y
labios entonces una soga lo atrapó desde atrás.
•odido - E s la fiebre -dijo el de la cama de al lado- . A mí me pasaba igual cuan-
)ierto, do me operé del duodeno. Tome agua y va a ver que duerme bien.
~rmo s,
Al lado de la noche de donde volvía, la penumbra tibia de la sala le pareció
llegar deliciosa. Una lámpara violeta velaba en lo alto de la pared del fondo como un
rmera ojo protector. Se oía toser, respirar fuerte, a veces un diálogo en voz baja. Todo
7 Ó una
era grato y seguro, sin acoso, sin... Pero no quería seguir pensando en la pesadilla.
1lleno Había tantas cosas en qué entretenerse. Se p uso a mirar el yeso del brazo, las
Letal y poleas que tan cómodamente se lo sostenían en el aire. L e habían puesto una
1che, y botella de agua mineral en la mesa de noche. Bebió del gollete, golosamente. D is-
1an un tinguía ahora las formas de la sala, las treinta camas, los armarios con vitrinas. Ya
nente no debía tener tanta fiebre, sentía fresca la cara. La ceja le dolía apenas, como un
.bargo recuerdo. Se vio otra vez saliendo del hotel, sacando la moto. ¿Qyién hubiera
pensado que la cosa iba a acabar así? Trataba de fijar el momento del acci-
)erejil. dente, y le dio rabia advertir que había ahí como un hueco, un vacío que
jando no alcanzaba a rellenar. Entre el choque y el momento en que lo habían
1abían levantado del suelo, un desmayo o lo que fuera no le dejaba ver nada.
renta- Y al mismo tiempo tenía la sensación de que ese hueco, esa nada,
:i. a ser había durado una eternidad. No, ni siquiera tiempo, más bien como si
ia por en ese hueco él hubiera pasado a través de algo o recorrido distancias
:idad, inmensas. El choque, el golpe brutal contra el pavimento. De todas
maneras al salir del pozo negro había sentido casi un alivio mientras
>orun los hombres lo alzaban del suelo. Con el dolor del brazo roto, la sangre
plena de la ceja partida, la contusión en la rodilla; con todo eso, un alivio al
negro volver al día y sentirse sostenido y auxiliado. Y era raro. Le preguntaría
ndían alguna vez al médico de la oficina. Ahora volvía a ganarlo el sueño, a
1aS de tirarlo despacio hacia abajo. La almohada era tan blanda, y en su gar-
·alado ganta afiebrada la frescura del agua mineral. Qyizá pudiera descansar
ilzada de veras, sin las malditas pesadillas. La luz violeta de la lámpara en lo alto
!darlo se iba apagando poco a poco.

67
Como dormía de espaldas, no lo sorprendió la posición en que volvía a reco-
nocerse, pero en cambio el olor a humedad, a piedra rezumante* de filtraciones,
bla
le cerró la garganta y lo obligó a comprender. Inútil abrir los ojos y mirar en todas mía
direcciones; lo envolvía una oscuridad absoluta. <2.1iiso enderezarse y sintió las ima ·
sogas en las muñecas y los tobillos. Estaba estaqueado en el piso, en un suelo de el al
lajas helado y húmedo. El frío le ganaba la espalda desnuda, las piernas. Con el
mentón buscó torpemente el contacto con su amuleto, y supo que se lo habían
rezuma nte: que transpira agua o un arrancado. Ahora estaba perdido, ninguna plegaria podía salvarlo del final. Leja-
líquido por los poros.
namente, como filtrándose entre las piedras del calabozo, oyó los atabales* de
atabal:tambor pequeño o tamboril.
teocalli: templo de los antiguos la fiesta. Lo habían traído al teocalli*, estaba en las mazmorras del templo a la
pueblos de América Central. espera de su turno.
acólito: monaguillo que asiste al Oyó gritar, un grito ronco que rebotaba en las paredes. Otro grito, acabando
sacerdote.
dedc
en un quejido. Era él que gritaba en las tinieblas, gritaba porque estaba vivo, roca
todo su cuerpo se defendía con el grito de lo que iba a venir, del final inevi- mer
table. Pensó en sus compañeros que llenarían otras mazmorras, y en los que bra,
ascendían ya los peldaños del sacrificio. Gritó de nuevo sofocadamente, casi no la c~
podía abrir la boca, tenía las mandíbulas agarrotadas y a la vez como si fueran de busc
goma y se abrieran lentamente, con un esfuerzo interminable. El chirriar de los y C(
cerrojos lo sacudió como un látigo. Convulso, retorciéndose, luchó por zafarse nat,
de las cuerdas que se le hundían en la carne. Su brazo derecho, el más fuerte, las r
tiraba hasta que el dolor se hizo intolerable y hubo que ceder. Vio abrirse la san¡
doble puerta, y el olor de las antorchas le llegó antes que la luz. Apenas ceñidos par:
con el taparrabos de la ceremonia, los acólitos* de los sacerdotes se le acercaron apre
mirándolo con desprecio. Las luces se reflejaban en los torsos sudados, en el log1
pelo negro lleno de plumas. Cedieron las sogas, y en su lugar lo aferraron manos aba:
calientes, duras como el bronce; se sintió alzado, siempre boca arriba, tironeado sacr
por los cuatro acólitos que lo llevaban por el pasadizo. Los portadores de antor- cen
chas iban adelante, alumbrando vagamente el corredor de paredes mojadas y esta
techo tan bajo que los acólitos debían agachar la cabeza. Ahora lo llevaban, tod•
lo llevaban, era el final. Boca arriba, a un metro del techo de roca viva que por ciuc
momentos se iluminaba con un reflejo de antorcha. eno
Cuando en vez del techo nacieran las estrellas y se alzara ante él la escalinata ·de
incendiada de gritos y danzas, sería el fin. El pasadizo no acababa nunca, pero ace;
ya iba a acabar, de repente olería el aire libre lleno de estrellas, pero todavía no, con
andaban llevándolo sin fin en la penumbra roja, tironeándolo brutalmente, y
él no quería, pero cómo impedirlo si le habían arrancado el amuleto que era su
verdadero corazón, el centro de la vida.

.•~

suo

.
en

As
[

I
68 Capítulo 3 Mitos y leyendas de Hispanoamérica
reco- Salió de un brinco a la noche del hospital, al alto cielo raso dulce, a la sombra
iones, blanda que lo rodeaba. Pensó que debía haber gritado, pero sus vecinos dor-
todas mían callados. En la mesa de noche, la botella de agua tenía algo de burbuja, de
~ió las :l imagen traslúcida contra la sombra azulada de los ventanales. Jadeó buscando
::lo de ~
g el alivio de los pulmones, el olvido de esas imágenes que seguían pegadas a sus
:on el párpados. Cada vez que cerraba los ojos las veía formarse instantáneamente, y ~ ACTIVIDADES
abían f
~
se enderezaba aterrado pero gozando a la vez del saber que ahora estaba des-
Leja- pierto, que la vigilia lo protegía, que pronto iba a amanecer, con el buen sueño 1. Resuman las dos historias

-J•
::s* de profundo que se tiene a esa hora, sin imágenes, sin nada... Le costaba mantener que se entrecruzan en el
.o a la ~
los ojos abiertos, la modorra era más fuerte que él. Hizo un último esfuerzo, con cuent o.
~ la mano sana esbozó un gesto hacia la botella de agua; no llegó a tomarla, sus 2. Desde el punto de vista de
g
>ando 9 dedos se cerraron en un vacío otra vez negro, y el pasadizo seguía interminable, los hechos relatados:
i
. vivo,
nevi-
! roca tras roca, con súbitas fulguraciones rojizas, y él boca arriba gimió apagada-
mente porque el techo iba a acabarse, subía, abriéndose como una boca de som-
a. ¿Cuá les son los elementos
comunes, es decir, los puntos
s que
'
<
¡::
o bra, y los acólitos se enderezaban y de la altura una luna menguante le cayó en de contacto entre ambas?
as1 no la cara donde los ojos no querían verla, desesperadamente se cerraban y abrían b. ¿Cuáles, las diferencias entre
·ande buscando pasar al otro lado, descubrir de nuevo el cielo raso protector de la sala. una y otra?
delos Y cada vez que se abrían era la noche y la luna mientras lo subían por la escali- c. ¿Qué valor adquiere el título
:i.farse nata, ahora con la cabeza colgando hacia abajo, y en lo alto estaban las hogueras, del cuento en relación con esas
uerte, las rojas columnas de rojo perfumado, y de golpe vio la piedra roja, brillante de dos historias?
rse la sangre que chorreaba, y el vaivén de los pies del sacrificado, que arrastraban 3. ¿Qué elementos de la
ñidos para tirarlo rodando por las escalinatas del norte. Con una última esperanza tradición y la cultura de los
caron apretó los párpados, gimiendo por despertar. Durante un segundo creyó que lo pueblos aborígenes recupera
en el lograría, porque estaba otra vez inmóvil en la cama, a salvo del balanceo cabeza el cuento en la historia del
1anos abajo. Pero olía a muerte y cuando abrió los ojos vio la figura ensangrentada del moteca?
1eado sacrificador que venía hacia él con el cuchillo de piedra en la mano. Alcanzó a 4. No hay referencias en la voz
.ntor- cerrar otra vez los párpados, aunque ahora sabía que no iba a despertarse, que del narrador que indiquen los
tdas y estaba despierto, que el sueño maravilloso había sido el otro, absurdo como momentos de pasaje de una
aban, todos los sueños; un sueño en el que había andado por extrañas avenidas de una historia a la otra. Formulen
te por ciudad asombrosa, con luces verdes y rojas que ardían sin llama ni humo, con un hipótesis acerca de las posibles
enorme insecto de metal que zumbaba bajo sus piernas. En la mentira infinita razones de esa construcción
Unata de ese sueño también lo habían alzado del suelo, también alguien se le había y del tipo de lectura que ello
,pero acercado con un cuchillo en la mano, a él tendido boca arriba, a él boca arriba determ ina, es decir, qué actitud
fa no, con los ojos cerrados entre las hogueras. busca generar en el lector.
nte,y
~ra su Julio Cortázar, en Final de/juego, Buenos Aires, Sudamericana, 1966.
©Herederos de Julio Cortázar, 2010.

OTROS RECORRIDOS DE LECTURA


• Para ver cómo la ficción narrativa reelabora hechos históricos, se • Dos cuentos de Cortázar, también del libro Final del juego, con
sugiere la lectura del cuento"EI hambre': de Manuel Mujica Láinez, presencia de ídolos y referencias mitológicas:"Las ménades"y"EI
en Misteriosa Buenos Aires. ídolo de las Cícladas''.
• Dos novelas muy valiosas: El Señor Presidente, de Miguel Ángel
Asturias y El reino de este mundo, de Alejo Carpentier.

69
CONTAR HISTORIAS
Desde siempre y en todas partes, los hombres Remontándonos en el tiempo, las primeras narra-
cuentan, inventan y escuchan historias. Las narracio- ciones fueron orales y anónimas; a través de ellas, se
nes conviven entre nosotros y forman parte de nuestra conservaban en la memoria de las personas hechos
vida cotidiana. históricos, relatos ficticios y creencias, que variaban
Son innumerables los relatos que circu lan en el según las culturas. Hoy conocemos muchas de estas
mundo y bajo las más variadas formas: tradiciones, 1 narraciones por la tradición oral, y otras, porque fueron
romances, 2 crónicas, cantares de gesta, cuentos, no- rescatadas y pasadas a la escritura.
velas, leyendas, fábulas. Distintos modos de contar un
suceso (real o ficticio) 3 y referir así aquellos hechos Mitos y leyendas
que se quiere dar a conocer o parecen dignos de re- Los hombres siempre necesitaron explicar el origen
latar: una noticia de actualidad, la historia de un per- de las cosas, y en todas las culturas aparecen temas ~
¡::
sonaje verdadero o legendario, los detalles de un ro- recurrentes: la creación de los seres humanos y del o
mance, un chiste, una anécdota. universo, la muerte, los fenómenos naturales.
Una narración es el relato de sucesos reales o Ante los misterios del mundo, los sucesos se expli-
de hechos ficticios, que se transmite en forma oral o caron con un sentido mágico, y así nacieron los mitos,
escrita. Encontramos narraciones en la televisión, la que constituyen, sin duda, las primeras narraciones.
radio, los diarios, el cine, algunos libros. Las diferen- Los héroes y los dioses eran agentes de una creación
cias entre uno y otro soporte4 generan variables en su creíble y posible. Se consideraban reales personajes
extensión, los usos del lenguaje, las estructuras y las que poseían un poder mágico e incomprensible para
pautas de recepción.5 los hombres. Héroes, dioses, semidioses son criaturas

Actualmente los textos circulan


en múltiples soportes. Los nuevos
soportes electrón icos conviven con
el papel y los grafitis.

1 Relato breve en prosa, por lo general de origen popular o 4


EI soporte es el material sobre el cual se inscribe un texto para
folclórico, a veces con intención didáctica o humorística. conservarlo o hacerlo conocer. Hoy, además del papel, existen
2 Poema lírico-narrativo, en versos octosílabos. De origen soportes electrónicos y magnéticos (cintas grabadas, pantalla de
medieval, en la literatura española se los considera la computadora, películas, discos láser, etcétera).
desprendimientos modificados de los antiguos cantares de gesta. 5 Se refiere a los modos como se " recibe" (se lee) un texto por
3Se denominan ficticios los hechos, personajes y circunstancias parte de lectores, críticos e instituciones, y los efectos que
no reales, aunque lo parezcan, representados en los textos ello provoca en la historia de la literatura. La obra literaria no
literarios. Se considera la ficción como obra de la imaginación por proporciona la misma experiencia a los receptores de distintas
oposición a la categoría de hechos reales; por esta razón se habla épocas; por lo tanto, la histo ria de la literatura es un proceso de
de ficción también para referirse a la narrativa. producción y recepción estéticas que se realiza entre lectores,
autores, críticos e instituciones académicas.
1rra- extrañas que viven en un mundo propio en el que exis- Por lo general, se trataba de textos que referían histo-
' se ten buenos y malos; se trata de seres con valores y rias de santos y vidas piadosas, en las cuales interve-
llos características alejadas del género humano. El tiempo nía, muchas veces, el elemento maravilloso en forma
ban tiene una dimensión particular: es el pasado remoto, de milagro.
;tas el de "aquellos tiempos ", el de los orígenes del mundo En el siglo XIX, la palabra adquiere su sentido ac-
l.
iron y de los hombres. tual: texto narrativo en el que se relatan sucesos tradi-
"
l

Todas las culturas propagaron estos relatos de
generación en generación para conservar la historia
y recordarla. Consideraban que los mitos eran verda-
cionales de carácter maravilloso.
c. Y.
gen j des, mientras que hoy los relacionamos con sucesos
Bibliografía

nas ~
o
fabulosos. • BLAKE, CRISTINA, La narración en la literatura y en los discursos
sociales, Buenos Aires, Longseller, 2003.
del La palabra leyenda deriva del latín legenda ("co-
sas que deben leerse o se leen"), ya que este término • MONTES DE FAISAL, ALICIA, El viejo oficio de contar historias,
Buenos Aires, Kapelusz, 1999.
<pli- se usaba para designar los textos que se leían, en la
tos, Edad Media, durante los servicios re ligiosos y también • REST, JAIME, Conceptos fundamentales de la literatura moderna,
Buenos Aires, Centro Editor de América Latina , 1979.
1es. en los monasterios mientras los religiosos comían.
:ión
1jes
ara
iras

'"1 ACTIVIDADES
1. Relean la información sobre los recursos propios de los textos académicos en el
apa rtado "Los textos académ icos': del capítu lo 1, y resuelvan las consignas que siguen.
a. La estructura sintáctica clásica de la definición es la construcción: sujeto+ verbo ser
+ predicativo. Busquen un ejemplo en el texto "Contar historias''.
b. También se puede definir un término empleando otras estructuras y otros verbos.
Marquen dos ejemplos en el texto leído.
c. Subrayen dos casos de ejemplificación. ¿Qué signo de puntuación se usa,
generalmente, antes de mencionar ejemplos?
d. Otro recurso habit ual de los textos académicos es la clasificación. Consiste en
establecer grupos o conjuntos de un fenómeno según un criterio determinado; por
ejemplo: "Una narración es el relato de sucesos rea les o de hechos ficticios .. .''. Busquen
en el texto otros ejemplos de clasificación.
2. En el texto, una palabra aparece con su explicación etimológica, es decir, se da el
origen de su significado y de su forma. ¿Cuál es? ¿Qué sentido tiene indicarlo?
3. ¿Qué función tiene el uso de las negritas en el texto? Dicho de otro modo: ¿para qué
Je
se emplean?
4 . Indiquen qué distintos valores tiene el uso de los paréntesis en estos dos casos:
•Distintas formas de contar un suceso (real o ficticio) .. .
• La palabra leyenda deriva del latín legenda ("cosas que deben leerse o se leen") ...
a. Reescriban los ejemplos anteriores empleando conectores u otras construcciones
sintácticas.
:::
"
1. Lean esta versión de u na leyenda del Noroeste argentino y resue lvan con un !
compañero las actividades que siguen. •
¡¡

j
3
La leyenda del girasol j
Desde hacía mucho tiempo, Yupá, un hombre joven y fuerte, esperaba ese ~

día. E staba impaciente y se sentía responsable por la misión que le habían -'
.;
"
asignado: debía llevar el fuego sagrado al pueblo vecino. 1
¡¡
Se despidió de sus familiares y se dirigió al lugar donde lo aguardaban el í entt
sacerdote y los ancianos de la tribu. j
Entonces el sacerdote le entregó la antorcha encendida; Yupá aseguró f Peo
F
que la llevaría a destino y cumpliría con su tarea aunque tuviera que sacrifi- o era
car su vida. con
No debía perder tiempo e inmediatamente se echó a correr. en e
Sin embargo, sucedió que los dioses malignos, envidiosos, se habían reu-
nido para conspirar contra el joven e impedir que su misión fuera exitosa. Lo
Al anochecer comenzaron los truenos y al rato se desató una terrible tor- por
menta. Yupá seguía corriendo sin detenerse. Sabía que estaba cerca; eso le
daba valor y energías.
La tempestad se hizo más violenta y la lluvia cada vez más intensa. Ya sin
aliento, Yupá resbaló y cayó en un pantano; allí un rayo lo fulminó. Pr
Pachamama, la Madre Tierra, que había visto lo sucedido, se apiadó de la dUI!
nobleza del joven indio y quiso que su memoria quedara para siempre entre per·
su gente. Entonces, del cuerpo hundido en el barro, surgió una planta fuerte Fue
y grande, con una flor brillante que se parecía al sol.
Esa planta mira siempre hacia el sol y, al atardecer, cuando no lo ve, deja Un
caer su brillante corona. ex
Versión de Carlos Yujnovsky. La
· Gu
a. ¿Cuá l es el fenómeno natural cuyo origen explica esta leyenda? Mencionen tam-
b ién dos elementos maravillosos o sobrenaturales que aparezcan en la historia. a. Col
b. Respondan brevement e a estas preguntas: ¿Por qué Yupá estaría orgulloso de cotex
la misió n que debía cumpli r? ¿Por qué los dioses malignos conspiraron contra el b. Co
indio? ¿Por qué recibe ayuda de la Pachamama? nom,
c. ¿Qué elementos de la realidad histórica pueden inferirse del texto? ¿Qué relacio- c. Ha1
nes encuentran entre ellos y la situación del moteca en "La noche boca arriba"? elem
d. Identifiquen las tres partes en que se estructura el relato: situación inicial, com- d. El 1
plicación y resolución. tiem1
e. Imaginen una introducción más detallada y reescriban el fragmento de la situa- t iva e
ción inicial, ampliándola. Pueden agregar datos sobre la v ida de Yupá en la tribu e. Re·
y sobre su aspecto físico, información sobre sus famil iares, las características del cons·
lugar y la misión que debía cumplir. últi

72 1 Capítulo 3 Mitos y leyendas de Hispanoamérica


Jn un 2. Lean el poema del escritor argentino Jorge Luis Borges (1899-1986) y resuelvan
las actividades que siguen.

Fundación mítica de Buenos Aires Un almacén rosado como revés de naipe


)a ese ¿Y fue por este río de sueñera y de barro brilló y en la trastienda conversaron un truco;
abían que las proas vinieron a fundarme la patria? el almacén rosado floreció en un compadre,
Irían a los tumbos los barquitos pintados ya patrón de la esquina, ya resentido y duro.
)an el entre los camalotes de la corriente zaina.
El primer organito salvaba el horizonte
;:guró Pensando bien la cosa, supondremos que el río con su achacoso porte, su habanera y su gringo.
tcrifi- era azulejo entonces como oriundo del cielo El corralón seguro ya opinaba Yrigoyen,
con su estrellita roja para marcar el sitio algún piano mandaba tangos de Saborido.
en que ayunó Juan Díaz y los indios comieron.
i reu- U na cigarrería sahumó como una rosa
)Sa. Lo cierto es que mil hombres y otros mil arribaron el desierto. La tarde se había ahondado en ayeres,
e tor- por un mar que tenía cinco lunas de anchura los hombres compartieron un pasado ilusorio.
~so le y aún estaba poblado de sirenas y endriagos Solo faltó una cosa: la vereda de enfrente.
y de piedras imanes que enloquecen la brújula.
{a sin A mí se me hace cuento que empezó Buenos Aires:
Prendieron unos ranchos trémulos en la costa, la juzgo tan eterna como el agua y el aire.
de la durmieron extrañados. Dicen que en el Riachuelo,
entre pero son embelecos fraguados en la Boca. Jorge L uis Borges, en Cuaderno San Martín,
Üerte Fue una manzana entera y en mi barrio: en Palermo. Buenos Aires, Emecé, 1929.

:, deja Una manzana entera pero en mitá del campo


expuesta a las auroras y lluvias y suestadas.
novsky. La manzana pareja que persiste en mi barrio:
Guatemala, Serrano, Paraguay, Gurruchaga.
itam-
ia. a. Con ayuda del diccionario, expliquen el significado de estas pa labras según su
•SO de cotexto: sueñera, zaina, azulejo, endriagos, trémulos, embelecos, achacoso, habanera.
1tra el b. Conversen y form ulen una hipótesis: ¿por qué el t ítulo del poema dice mítica y
no mitológica?
·lacio- c. Hagan un cuadro con dos columnas y anoten, en referencia a la fundación, los
''? elementos fabulosos y los datos de la rea lidad histórica.
com- d. El poema construye dos tiempos d iferentes para dar la imagen de la ciudad: el
tiempo de los orígenes (o del mito) y una época posterior (actual, desde la perspec-
si tu a- tiva del sujeto que enuncia). Den varios ejemplos de uno y otro caso.
' tribu e. Reformulen en prosa, con los cambios necesarios (vocabulario, orden de las
as del construcciones, estructura sintáctica, expansión, eli m inación de la rima), los dos
últimos versos del poema.
Loshéroes épicos

En la época medieval europea, mientras los caballeros se batían en los duelos y


conquistaban tierras, las mujeres realizaban tareas relacionadas con el cuidado
de las ovejas, el tratamiento de la lana, el hilado y tejido de prendas de vestir con
esta fibra, como se muestra en la pintura de la página anterior. Se titula Pastoras
preparando lana e ilustra un manuscrito francés, fechado en 1485, que se conserva
en la Biblioteca Nacional de París. Dicen las crónicas medievales que las madres
solían enseñar a sus hijas las artes textiles. Las mujeres nobles producían refinados
tapices y bordados con lana y seda.
Como fondo, hay un paisaje con las construcciones características, como el castillo
con foso y la iglesia, el campo cultivado y un rebaño de ovejas. En la pintura
medieval se usó la "vista de pájaro'~ llamada perspectiva caballera, según la cual
el artista representa la realidad vista desde lo alto. En la práctica pictórica, los
elementos de la composición se disponen en hileras o filas, unas sobre otras, para
situar abajo los elementos que están cerca, y hacia arriba, los que están lejos.
La perspectiva, tanto la caballera como la renacentista, es un sistema que permite
representar tres dimensiones sobre una superficie plana de dos dimensiones, y
otorga volumen a los objetos colocados en un ambiente de falsa profundidad.
Por otra parte, los arquitectos que diseñaron las catedrales góticas reemplazaron
las grandes paredes pintadas en el interior por altos vitrales sostenidos por pilares.
La pintura quedó entonces en libros, códices y miniaturas; era, por eso, miniatura
o pintura de pequeñísimo formato. La palabra miniatura se asocia también con
la pintura "miniada'~ porque el minio fue uno de los pigmentos base para hacer
' delicadísimas escenas e iniciales historiadas en los códices que se copiaban a
mano en monasterios y escuelas catedralicias. Otro nombre para este trabajo era la
"iluminación" de manuscritos, puesto que sus imágenes iluminaban, facilitaban la
lectura de los textos, no siempre accesibles para una población mayoritariamente
analfabeta.
Poema del Cid
El rey Alfonso envía a Ruy Díaz de Vivar a cobrar el tributo que todos los
años debían pagarle los reyes de Córdoba y Sevilla. Ruy Díaz se entera
de que el rey de Granada planea atacar al de Sevilla e intenta persuadido
mediante cartas; pero como esto no lo detiene, el Cid lo enfrenta y vence
en cruenta batalla. Así recibe el apodo de Cid Campeador. Este triunfo
despierta la envidia de muchos nobles que logran enemistarlo con el rey
Alfonso, quien destierra al Cid de su reino en el término de nueve días.

Cantar Primero: El destierro del Cid

VERSIFICACIÓN DEL 1
CANTAR DE MÍO CID A los que conmigo vengan que Dios les dé muy buen pago;
El poema está compuesto por también a los que se quedan contentos quiero dejarlos.
versos anisosílábicos, es decir
Habló entonces Álvar Fáñez, del Cid era primo hermano:
que tienen desigual número
de sílabas, con una sola rima. "Con vos nos iremos, Cid, por yermos y por poblados;
Los versos están divididos en no os hemos de faltar mientras que salud tengamos,
dos hemistiquios - mitad de y gastaremos con vos nuestras mulas y caballos
un verso- , separados por una
y todos nuestros dineros y los vestidos de paño,
' esura -corte o pausa-. J siempre querremos serviros como leales vasallos".
Aprobación dieron todos a lo que ha dicho don Álvaro.
Mucho que agradece el Cid aquello que ellos hablaron.
El Cid sale de Vivar, a Burgos va encaminado,
allí deja sus palacios yermos y desheredados.
Los ojos de Mío Cid mucho llanto van llorando;
hacia atrás vuelve la vista y se quedaba mirándolos.
Vio como estaban las puertas abiertas y sin candados,
vacías quedan las perchas ni con pieles ni con mantos,
sin halcones de cazar y sin azores* mudados*.
Y habló, como siempre habla, tan justo tan mesurado:
"¡Bendito seas, Dios mío, Padre que estás en lo alto!
Contra mí tramaron esto mis enemigos malvados".

2
Ya aguijan a los caballos, ya les soltaron las riendas.
Cuando salen de Vivar ven la corneja a la diestra*,
pero al ir a entrar en Burgos la llevaban a su siniestra.
Movió Mío Cid los hombros y sacudió la cabeza:
"¡Ánimo,Álvar Fáñez, ánimo, de nuestra tierra nos echan,
azor: ave rapaz diurna. pero cargados de honra hemos de volver a ella!"
mudado: que se ha desprendido de
las plumas.
corneja a la diestra: ver una corneja 3
(pájaro negro) a la diestra (derecha) Ya por la ciudad de Burgos el Cid Ruy Díaz entró.
significaba buena fortuna; a la Sesenta pendones* lleva d etrás el C ampeador.
siniestra (izquierda) indicaba mala
Todos salían a verle, niño, mujer y varón,
fortuna.
pendón: insignia militar, bandera o a las ventanas de Burgos mucha gente se asomó.
estandarte. ¡Cuántos ojos que lloraban de grande que era el dolor!

I
76 Capítulo 4 Los héroes épicos
Y de los labios de todos sale la misma razón: RECURSOS EXPRESIVOS
"¡Qyé buen vasallo sería si tuviese buen señor!" DELA ÉPICA

;los • Descripciones: los sustantivos


l :o 4 y verbos dan dina mismo a
"-
las escenas que se muestran,
rlo De grado le albergarían, pero ninguno lo osaba,
ice
~

:o
'!t
o que a Ruy Díaz de Vivar le tiene el rey mucha saña.
La noche pasada a Burgos llevaron una real carta
describiendo para el oyente/
lector un cuadro pleno de fuerza y
' ovimiento. J
~
ey j con severas prevenciones y fuertemente sellada
;, l mandando que a Mío Cid nadie le diese posada,
- que si alguno se la da sepa lo que le esperaba:
:•'
e sus haberes perdería, más los ojos de la cara,
o
~ y además se perdería salvación de cuerpo y alma .

!E Gran dolor tienen en Burgos todas las gentes cristianas
de M ío Cid se escondían: no pueden decirle nada.
¡:
o Se dirige Mío Cid adonde siempre paraba; Las conquistas del Cid
cu ando a la puerta llegó se la encuentra bien cerrada. El Cid marcha rumbo a Cardeña a
despedirse de su mujer, Jimena,
Por miedo del rey Alfonso acordaron los de casa y de sus hijas, Elvira y Sol. Un
que como el Cid no la rompa no se la abrirán por nada. centenar de castellanos se juntan
L a gente de Mío Cid a grandes voces llamaba, en Burgos para acompañarlo en
los de dentro no querían contestar una palabra. el destierro. Cuando acampa en
la frontera de Castilla, un ángel lo
Mío Cid picó el caballo, a la puerta se acercaba, consuela en sueños. Ya en reinos
el pie sacó del estribo, y con él gran golpe daba, moros, el Cid libra batallas y toma
pero no se abrió la puerta, que estaba muy bien cerrada. ciudades. Cuando Alcocer cae en
su poder, dispone un presente
La niña de nueve años muy cerca del Cid se p ara:
para el rey, pero este no lo
"Campeador que en bendita hora ceñiste la espada, perdona.También vence al conde
el rey lo ha vedado, anoch e a Burgos llegó su carta, de Barcelona y gana la famosa
con severas prevenciones y fuertemente sellada. espada Colada.
No nos atrevemos, Cid, a darte asilo por nada,
porque si no perderíamos los haberes y las casas,
perderíamos también los ojos de nuestras caras.
Cid, en el mal de nosotros vos no vais ganando nada.
Seguid y que os proteja Dios con sus virtudes santas".
E sto le dijo la niña y se volvió h acia su casa.
Bien claro h a visto Ruy Díaz que del rey no espere gracia.
D e allí se aparta, por Burgos a buen paso atravesaba,
a Santa María llega, del caballo descabalga,
las rodillas hinca en tierra y de corazón rogaba.
Cuando acabó su oración el Cid otra vez cabalga,
de las murallas salió, el río Arlanzón cruzaba.
Junto a Burgos, esa villa, en el arenal posaba,
las tiendas mandó plantar y del caballo se baja.
Mío Cid el de Vivar que en buen hora ciñó espada
en un arenal posó, que nadie le abre su casa.
Pero en torno suyo h ay guerreros que le acompañan.
A sí acampó Mío Cid cual si anduviera en montaña.
Prohibido tiene el rey que en Burgos le vendan nada
de todas aquellas cosas que le sirvan de vianda.
No se atreven a venderle ni la ración más menguada.

77
Cantar Segundo: Las bodas de las hijas del Cid

RECURSOS EXPRESIVOS Sembrando temor entre los moros, el Cid conquista Valencia y obtiene un
DE LA ÉPICA rico botín. Envía entonces un nuevo presente al rey Alfonso, pidiéndole
• Fórmulas y epítetos: que permita a su esposa e hijas reunirse con él. El rey le concede este favor.
construcciones que se repiten para El rey de Marruecos cerca Valencia, pero el Cid lo vence incrementando
caracterizar a los personajes, como
sus riquezas. Nuevamente le envía un regalo al rey Alfonso. Entre tanto,
el que en buen hora nació; el que
\ n buena hora ciñó espada. J los infantes*de Carrión, que aspiran a casarse con las hijas del Cid, logran
que el monarca interceda por el matrimonio. A orillas del Tajo, el rey
Alfonso perdona al Cid y pide la mano de sus hijas para los infantes.

110
"Mi mujer, doña}imena, sea lo que quiera D ios.
A vos os digo, hijas mías, doña Elvira y doña Sol,
que con este casamiento ganaremos en honor,
pero sabed que estas bodas no las he arreglado yo:
os ha pedido y rogado don Alfonso, mi señor.
Lo hizo con tanta firmeza, tan de todo corazón,
que a aquello que me pedía no supe decir que no.
Así en sus manos os puse, hijas mías, a las dos.
Pero de verdad os digo: él os casa, que no yo".

111
Entonces se comenzó a adornar todo el palacio,
los suelos y las paredes con tapices los taparon,
telas de púrpura y seda y much os paños preciados.
¡Cuánto gusto os daría comer en aquel palacio!
Los caballeros del Cid todos se fueron juntando.
Van entonces a buscar a don Diego y don Fernando:
ya cabalgan los infantes, caminan para palacio
con muy buenas vestiduras, ricamente ataviados.
¡Qyé bien y con qué humildad en el alcázar entraron!
L os recibe Mío Cid, con él todos sus vasallos.
Al Cid y a doña Jimena los infantes saludaron;
luego fueron a sentarse en un magnífico escaño.
infante: pariente del rey que por
gracia real obtiene el título. T odos los de Mío Cid, prudentes y mesurados,
bienhadado: afortunado. tenían puesta la vista en su señor bienhadado*.
El Campeador Ruy D íaz entonces se ha levantado:
"Ya que tenemos que h acerlo, no hay para qué retardarlo:
Para acceder a una versión
facsímil del manuscrito venid acá, buen Minaya, a quien tanto quiero y amo,
de Per Abbat del Cantar de aquí tenéis mis dos hijas, póngalas en vuestras manos.
Mío Cid, pueden ingresar en Sabéis que con don Alfonso en hacerlo así quedamos,
http://www.cervantesvirtual.com/
en nada quiero faltar a lo que está concertado:
bib_obra/Cid/obra.shtml
Para leer la versión completa en dádselas a los infantes de Carrión con vuestras manos,
castellano moderno del escritor que la bendición reciban y esto se vaya acabando".
español Pedro Salinas, ingresen en Alvar Fáñez contestó: "Yo lo haré de muy buen grado''.
http://amediavoz.com/
cantardemiocid.htm
Las dos se ponen en pie, él las cogió de la mano,
y a los de C arrión, Minaya así entonces les va hablando:

78 j Capítulo 4 Los héroes épicos


''Ante Álvar Fáñez estáis presentes los dos hermanos;
por mano del rey Alfonso, que me lo tiene mandado,
eun estas damas os entrego-y son las dos hijasdalgo*- , RECURSOS EXPRESIVOS
DELA ÉPICA
le tomadlas vos por mujeres para honra y bien de los cuatro".
.vor. ,t Recíbenlas los infantes de corazón y buen grado, • Apelaciones al oyente/lector
al Cid y a doña Jimena les van a besar la mano. o fórmulas fáticas: se llama la
fo
to,
ª
~
~ Cuando hubieron hecho esto se salieron del palacio,
atención del público mediante
construcciones como ya oiréis Jo
~an
l
~
~
;
todos a Santa María de prisa se encaminaron.
El obispo don Jerónimo revistiose apresurado
' tue dirá; ya veréis... J
-
'
.i
J
~
y en la puerta de la iglesia ya los estaba esperando,
bendiciones les ech ó, la misa les ha cantado.
Q
o
• Cuando salen de la iglesia cabalgan a muy buen paso,
j al arenal de Valencia todos los del Cid marcharon.
~ ¡Dios, qué bien que juegan armas Ruy Díaz y sus vasallos!
~
g El que en buen hora nació tres veces mudó el caballo.
Satisfecho se halla el C id de lo que estaba mirando.
Buenos jinetes allí los de Carrión se mostraron.
Con las damas se volvieron y ya en Valencia han entrado,
muy ricas bodas se hacen en el hermoso palacio.
Al otro día el Cid manda que planten siete tablados
y, antes de comer, las tablas de los siete derribaron.
Qyince días bien cumplidos aquellas bodas duraron
y al cabo de ellas empiezan a marcharse los hidalgos.
Ruy Díaz el de Vivar, Mío Cid el bienhadado,
hijasdalgo: hijas de hidalgo, persona
entre mulas, palafren es* y corredores caballos
que por su sangre es de una clase
lo menos un centenar de bestias ha regalado noble y distinguida.
y además muchos vestidos y ricas pieles y mantos, palafrén: caballo manso.
y dinero de oro y plata que no es posible contarlo.
También se ponen de acuerdo de Mío Cid los vasallos
y a todos los invitados hicieron buenos regalos.
Al que algo quiere llevarse bien que le llenan las manos;
ricos vuelven a Castilla los que a las bodas llegaron.
Ya todos aquellos huéspedes de Valencia van marchando,
despídense de Ruy D íaz, Mío Cid el bienhadado,
despídense de las damas y de todos los hidalgos,
muy satisfechos se marchan del Cid y de sus vasallos.
Agradecidos hablaban de lo bien que les trataron.
También están muy alegres don Diego y don Fernando,
los infantes de Carrión, h ijos del conde Gonzalo.
Ya han regresado a Castilla los huéspedes invitados,
Mío Cid y sus dos yernos en Valencia se han quedado.
Allí moran los infantes muy cerca de los dos años,
en Valencia todo el mundo hacíales agasajos.
Muy contento estaba el Cid, muy contentos sus vasallos.
Ojalá quiera la Virgen María y el Padre Santo
que salgan bien estas bodas al que así las ha casado.
Las coplas de este cantar aquí se van acabando.
Qye Dios creador os valga y con Él todos sus santos.

79
Cantar Tercero: La afrenta* de Corpes*
Lue
yqu
112 [ ...
Estaba el Cid con los suyos en Valencia la mayor ~
'- Las
y con él ambos sus yernos, los infantes de Carrión. 5; em
Acostado en un escaño* dormía el Campeador, o con
ahora veréis qué sorpresa mala les aconteció. ¡ hié
3
De su jaula se ha escapado, y andaba suelto el león, .a yle
al saberlo por la corte un gran espanto cundió. 1 sob
Embrazan* sus mantos las gentes del Campeador
-
~

Las
~

y rodean el escaño protegiendo a su señor. ~


·Oli
'o
'G
J
Pero Fernando González, el infante de Carrión, í que
afrenta: vergüenza y deshonor que
no encuentra dónde meterse, todo cerrado lo halló,
metiose bajo el escaño, tan grande era su terror.
f 152
resulta de algún dicho o hecho.
Corpes: municipio de España, en la El otro, Diego González, por la puerta se escapó
''
¡:
o [ ...~
provincia de Guadalajara, comunidad gritando con grandes voces: "No volveré a ver Carrión". Qyc
autónoma de Castilla-La Mancha.
escaño: banco con respaldo.
Detrás de una gruesa viga metiose con gran pavor las ~
embrazar: meter el brazo por y, de allí túnica y manto todos sucios los sacó. [ ... :
la embrazadura del escudo para Estando en esto despierta el que en buen hora nació Em
proteger el cuerpo. Qyi
y ve cercado el escaño suyo por tanto varón.
mesnada: compañía de gente de
armas que servía bajo el mando del "¿Qyé es esto, decid, mesnadas*? ¿Qyé hacéis aquí alrededor?" que
rey o caballero principal. "Un gran susto nos ha dado, señor honrado, el león". Pen
hincar: apoyar algo en otra cosa Se incorpora Mío Cid y presto se levantó, mu 1

como para clavarlo.


y sin quitarse ni el manto se dirige hacia el león: Hal
robledal: sitio de gran extensión
poblado de robles. la fiera cuando lo ve mucho se atemorizó, ¡Q]
escarnecer: humillar, afrentar. baja ante el Cid la cabeza, por tierra la cara hincó*. por
El Campeador entonces por el cuello le cogió, La
como quien lleva un caballo en la jaula lo metió. "G1
Maravilláronse todos de aquel caso del león yae
y el grupo de caballeros a la corte se volvió. Ca,
Mío Cid por sus yernos pregunta y no los halló, Yac
aunque los está llamando no responde ni una voz. yto
Cuando al fin los encontraron, el rostro traen sin color Sus
tanta broma y tanta risa nunca en la corte se vio, los
tuvo que imponer silencio Mío Cid Campeador. ya
Avergonzados estaban los infantes de Carrión, Vec
gran pesadumbre tenían de aquello que les pasó. que
Ese
Los infantes de Carrión 128 ya
Luego del episodio del león, los En el robledal* de Corpes entraron los de C arrión, Pas
infantes vuelven a mostrar su en
cobardía; por eso los hombres
[ ...]
del Cid se burlan de ellos. En Qyédanse solos los cuatro, todo el mundo se marchó. Ta1
venganza, deciden agraviar a sus Tanta maldad meditaron los infantes de Carrión. Es1
esposas. Para ello piden permiso en
"Escuchadnos bien, esposas, doña Elvira y doña Sol:
al Cid para llevarlas a Carrión.
Al entrar en el reino de Castilla, vais a ser escarnecidas* en estos montes las dos,
duermen en el robledal de Corpes. nos marcharemos dejándoos aquí a vosotras, y no
Por la mañana los infantes se tendréis parte en nuestras tierras del condado de Carrión.
preparan a maltratar a sus mujeres.

80 1Capítulo 4 Los héroes épicos


Luego con estas noticias irán al Campeador
y quedaremos vengados por aquello del león''.
[ ... ]
Las damas mucho rogaron, mas de nada les sirvió;
empezaron a azotarlas los infantes de Carrión,
con las cinchas corredizas les pegan sin compasión,
hiérenlas con las espuelas donde sientan más dolor,
y les rasgan las camisas y las carnes a las dos,
sobre las telas de seda limpia la sangre asomó.
Las hij as del Cid lo sienten en lo hondo del corazón.
¡Oh, qué ventura tan grande si quisiera el Creador
que asomase por allí Mío Cid Campeador!

152 Reparación de la afrenta


[ ... ] Los infantesabandonan a sus
mujeres, pero como Félix Muñoz,
Qye despejaran el campo el rey Alfonso mandó, el sobrino del Cid que las había
las armas que allí quedaron él para sí las tomó. escoltado, sospecha de ellos,
[ ... ] vuelve a buscarlas. Cuando el Cid
Envilecidos se quedan los infantes de C arrión. se entera de lo sucedido, envía un
emisario al rey para pedir justicia.
Qyien a damas escarnece y así abandona a traición, El monarca promete reparación
que otro tanto le acontezca o alguna cosa peor. y convoca a la corte en Toledo.
Pero dejemos ya a esos infantes de Carrión, Allí Ruy Díaz expone su demanda
y sus hombres retan a duelo a
muy pesarosos están de sus castigos los dos.
los infantes. Al mismo tiempo,
Hablemos ahora de este que en tan buen hora nació. llegan mensajeros que piden en
¡Qyé grandes eran los gozos en Valencia la mayor, matrimonio a las hijas del Cid para
por honrados que quedaron los tres del Campeador! los hijos de los reyes de Navarra y
de Aragón. El rey Alfonso otorga el
L a barba se acariciaba don Rodrigo, su señor: nuevo casamiento y los hombres
"Gracias al rey de los cielos mis hijas vengadas son, del Cid vencen en la contienda a
ya están limpias de la afrenta esas tierras de Carrión. los de Carrión.
Casaré, pese a quien pese, ya sin vergüenza a las dos".
Ya comenzaron los tratos con Navarra y Aragón,
y todos tuvieron junta con Alfonso, el de León.
Sus casamientos hicieron doña Elvira y doña Sol,
los primeros fueron grandes pero estos son aún mejor,
y a mayor honra se casan que con esos de C arrión.
Ved cómo crece en honores el que en buen hora nació,
que son sus hijas señoras de Navarra y Aragón. .L ACTIVIDADES
Esos dos reyes de E spaña ya parientes suyos son,
y a todos les toca honra por el Cid Campeador. 1. Señalen en el texto la
Pasó de este mundo el Cid, el que a Valencia ganó: relación del protagonista con
en días de P ascua h a muerto, Cristo le dé su perdón . el rey, y los acontecimientos
También perdone a nosotros, al justo y al pecador. que contribuyen al
Estas fueron las hazañas de Mío Cid Campeador: engrandecimiento del héroe.
en llegando a este lugar se ha acabado esta canción. 2. ¿Cuáles son las características
del Cid? Compárenlas con las
Anónimo, Poema del Cid, Buenos Aires, Losada, 1981 de otros héroes, como Ulises o
(versión libre de la elaborada en castellano moderno por Pedro Salinas). Eneas. Revisen el capítulo 1.

81
los cantares de gesta La~
Con la caída del Imperio Romano, en el año 476, comienza la Edad Media y la ex- Sil
pansión del cristianismo por Europa. En este período se retomaron antiguas leyen-
castel\
das y m itos de origen germano y escandinavo en los que aparecían dioses, batallas
.l'¡ suan~
y héroes. Estos fueron exaltados en las epopeyas, poemas que narraban las haza-
•s conoi
ñas de los guerreros más destacados, aquellos que representaban los valores de su '
§ La
l
comunidad. Se los conoció como cantares de gesta, poemas en verso de extensión
variable que no se organizaban en estrofas.
i, des di

Esta poesía épica se transmitió en forma oral, lo que ha significado la pérdida -'
¡;

(
cualn
solo si
de poemas completos, en algunos casos, o la conservación solo de fragmentos, en '~ reúne
otros. A veces el juglar o bardo que los recitaba era su autor; en otros casos, reela- 8
o
• dán,y
boraba materiales heredados, recreándolos en cada interpretación. En el lenguaje
j Pirine
oral era habitual la inclusión de fórmulas y epítetos que contribuían a la memoriza- Díazc
~
¡::
ción de las largas tiradas y, además, permitían improvisar los versos a medida que o ción t1
se recitaban . El (
En genera l, en los poemas conservados aparecen las figuras del rey y el héroe, y nuscri
este último, fiel o rebe lde, siempre protege a su señor. firma
del XI
El mester de juglaría prodL
Durante el Medioevo, en una sociedad casi por completo iletrada y donde la a dos
LA NOVELA DE CABALLERÍA oralidad era dominante, la figura del juglar adquirió una enorme importancia para narrac
la actividad literaria y la conservación del patrimonio cultural. lejanc
Descendientes de las antiguas
poesías épicas, las novelas de La pa labra mester significa "oficio'; "arte'; y en este caso hace referencia a la pro- invest
caballería surgieron a fines del fesión de los juglares. Estos componían o reelaboraban los poemas épicos que re- La
siglo XV y gozaron de una gran citaban ante el público que se congregaba para escucharlos. Además, tenían dotes deCo
popularidad durante el siglo XVI.
actorales: dominaban la gestualidad y el espacio escénico y, en ocasiones, se acom- págin
En este período, el trovador se
convirtió en un hombre de letras pañaban con instrumentos musica les. nicad
cuyas composiciones en prosa La literatura juglaresca reunía las siguientes características:
fusionaron leyendas nacionales y • Oral: como la gran mayoría de la población era analfabeta, la literatura fue Cont
locales. Además, mientras la épica
retomaba hechos ocurridos en el
compuesta para ser escuchada, mediante la recitación o la lectura en voz alta. DL
pasado que el público conocía, · Popular: dirigida al pueblo en general, sin distinción de clases sociales. · y mor
las novelas de caballería narraban • Tradicional: el héroe encarnaba los valores de una comunidad - la valentía, la en 14'
hechos ficcionales y sus personajes
se movían impulsados por sus
fidelidad al rey, el amor paterno, entre otros- que, transmitidos oralmente, perdu- ca:
sentimientos, cumplían sus ideales raban a través de las generaciones. quistél
\ ! morían luego de una larga vidaJ • Anónima: no es posible atribuir la autoría a un juglar determinado y solo hay pond11
reg istro de algún copista que no fue, necesariamente, el autor. ydoñ
1
sea re¡
Evolución de los cantares de gesta con la¡
EL ROMANCE Con el transcurso del tiempo, los cantares de gesta sufrieron alteraciones y los ser re l
manuscritos dedicados a las aventuras de un mismo héroe fueron agrupados. De ton ce
.1
Poesía popular de versos este modo los ciclos mostraban una unidad y se alejaban de la difusión oral. A partir conv1¡
octosílabos. Las colecciones de
de la segunda mitad del siglo XII, muchos se transformaron en novelas de aventu- Af
romances recibieron el nombre
de Romancero. (Encontrarán más ras y de caballería en las que las hazañas de los legendarios héroes sobrevivieron nes d1,
información en la página 92 de hasta los siglos XV y XVI. En España y Portugal se fragmentaron y pervivieron aque- a otrc;
' ste capítulo.) J llos episodios más llamativos para el público convertidos en romances. Además, ataqu
por su valor histórico, tanto cronistas como historiadores los usaron en sus obras. fami li
botín

82 1Capítulo 4 Los héroes épicos


La gesta de Rodrigo Díaz de Vivar
·la ex- Si bien de los cantares de gesta que poblaron Europa, la epopeya
eyen- castellana fue cronológicamente la más tardía, comenzaremos con
1tallas su análisis privilegiando su cercanía idiomática para continuar, luego,
j
haza- con otros ciclos que ejercieron influencia sobre su producción.
•'
de su j La épica española está constituida por tres ciclos: el de los con-
nsión .
¡

~
des de Castilla, que gira en torno de los orígenes de Castilla y del
t'
~
cual no se conserva casi ningún poema. El ciclo francés -del que
!rdida
os, en .• solo se conserva un fragmento del Poema de Roncesvalles-, que
reúne historias sobre el emperador Carlomagno y su sobrino Rol-
re e la-
guaje
.l dán, y sus luchas en defensa del cristianismo en la frontera de los
Pirineos. Y el ciclo del Cid, que se centra en la figura de Rodrigo
o riza- Díaz de Vivar, nacido hacia 1043 y muerto en 1099, cuya actua-
a que ción tuvo como marco histórico la guerra de la Reconquista española. Escena medieval que muestra el
oficio del j uglar.
El Cantar de Mío Cid es el poema más importante y el más antiguo. Si bien el ma-
roe, y nuscrito que se conserva es de mediados del siglo XIV, realizado por alguien que lo
firma como Per Abbat, la obra suele considerarse de fines del sig lo XII o principios
del XIII, aunque Ramón Menéndez Pida!, máximo estudioso del poema, sitúa su
producción hacia 1140. Este especialista sostiene que la autoría de la obra se debe
1de la a dos juglares: uno, vecino de San Esteban de Gormaz, más cercano a los hechos
para narrados, tanto geográfica como históricamente; y otro, el juglar de Medinacelli,
lejano en el tiempo, y que introduce episodios más novelescos. No obstante, otros
1 pro- investigadores suponen la existencia de un único autor.
Je re- La obra está constituida por tres partes: "El destierro''. "Las bodas" y "La afrenta
:!otes de Carpes" que se desarrollan a lo largo de 3.730 versos. Al poema le faltan algunas
com- páginas que se suplen con el relato que, de esos mismos hechos, se hace en la Cró-
nica de Veinte Reyes.

a fue Contexto histórico de la obra


Durante siete sig los la guerra de la Reconquista enfrentó en España a cristianos
y moros: desde la invasión árabe en el año 71 1 hasta la recuperación de Granada, ,L ACTIVIDADES
:ía, la en 1492, por los Reyes Católicos.
~rdu- Con la muerte de Fernando 1, rey de Castilla y de León, y baluarte de la Recon- 1. Reconozcan en el Cantar de
quista cristiana, en 1065, sus tierras se reparten entre sus hijos: a Sancho le corres- Mío Cid los siguientes motivos:
>hay ponde Castilla; León es para Alfonso, y Galicia, para García . A sus hijas, doña Urraca • Los padecimientos que causa
y doña Elvira les corresponden Zamora y Toro, respectivamente. Como Sancho de- el destierro.
sea reunificar el reino de su padre, conspira para quedarse con Galicia, y más tarde, • La valentía del héroe.
con la ayuda del Cid, con las tierras de Alfonso. Por un breve período, Sancho logra • La generosidad del Cid.
y los ser rey de Castilla y León, hasta que es asesinado en 1072. Alfonso encarcela en- • El perdón otorgado por el rey.
5. De tonces a su hermano García, quien muere en prisión en 1090, y recupera el trono, • El casamiento de las hijas con
1artir convirtiéndose en el único rey. los infantes de Carrión.
·ntu- Años más tarde, en 1080, Rodrigo Díaz de Vivar, que servía a los reyes musulma- • La afrenta de Carpes.
~ron
nes de Sevilla y Zaragoza, va a Sevilla a cobrar las parias, tributo que un rey pagaba • Las bodas con los hijos de los
::iue- a otro en reconocimiento de superioridad. El noble García Ordóñez organiza un reyes de Navarra y Aragón.
11ás, ataque contra el rey de Sevilla, pero el Cid lo vence y esto genera su odio y el de la • La honra y el encumbramiento
as. familia de Carrión. El noble acusa a Ruy Díaz ante el rey Alfonso de retener parte del del Cid al relacionarse con las
botín de Sevilla que debía entregarle. El rey cree la mentira y destierra al Cid. casas reales.

83
Las grandes gestas europeas Beow.
A partir del siglo X los pueblos que constituían el Imperio
Romano hablaban lenguas distintas, germá nicas o románi-
cas, que dan origen a las literaturas nacionales.
3
Los poemas épicos se desarro llaron en dos grandes zo-
nas: la germánica, al norte, que incluye la obra anglosajona
i
o
h uman
6 goza de
'i
Beowulf; la islandesa, que narra las hazañas de las divinida - o'
~
des Odín y Thor y de los héroes Sugurd, Gudrún y Atila; y la á Grénd
alemana, cuyo ciclo más famoso es el de los nibelungos. -'
¡;

En el sur, la zona románica, con los ciclos de Francia dedi-



g
Llam
cados a las haza ñas de Carlomagno y sus caball eros -cuyo 1• g ales*, e
l.IA ' poema más famoso es la Chanson de Rolando el Cantar de j los seres
CllirursoN o• 011.MD~\r•
R Roldón-; y el ciclo español con el Poema del Cid. bién los
P AR .._ '..
Muchos estudiosos entienden que esas narraciones, ba-
io Oculto e
u . 6.AUTIEIR .
sadas en hechos históricos pero ricas en proezas fantásticas, saber qu
surgieron por la necesidad de los pueblos de pelear por un so, pron
mundo mejor, más ordenado, donde se destacasen grandes líderes. Además de las llevó a s1
razones políticas, se estima que estos poemas respondían también a la necesidad [ ... ]
de encontrar códigos morales, regidos por leyes éticas, espirituales y religiosas. Beov
Como consecuencia nacieron historias tan poderosas que no se perdieron con serv1c10i
el paso del t iempo, a tal punto que siguen presentes en libros, películas, óperas, se- -¡'f.
ries de t elevisión, dibujos animados, y se mantienen vivas en la cu ltu ra tradicional j oven r e
colectiva y anónima, en los relatos populares y los cuentos de hadas. mi t erru
volver c
La epopeya germánica: Beowulf gigant e:
te. Qyie
Beowulf es un poema épico compuesto en inglés antiguo, que la crítica ha ubi- dañino
cado entre los siglos VIII y XII. Conservado en el códice Nowel o Cotton Vitellius, permíte

aqu~:~
en la Biblioteca Británica, el poema narra las hazañas del héroe Beowulf que lucha
contra el ogro Gréndel y su madre para defender a los daneses, y cincuenta años
más tard e, contra un feroz dragón que ataca su reino. at aca. Y
Como obra de la Edad M edia, el poema narra hazañas que se produjeron du- do, sol
rante las invasiones bá rbaras en Inglaterra, entre los siglos V y VI. Los estudiosos Grénde
reconocen la influencia del folclore en las leyendas acerca del héroe Beowulf, resca- gautas,
tadas por uno o dos copistas cri stianos que se basaron en poem as existentes. anegad
La obra con sta de 3.182 versos, en los que abunda la aliteración, es decir, la re- ufano, J
petición interna de sonidos. Este recurso estructura el verso, a diferencia de la rima tiempo
al fin al de cada línea, que cumple ese papel en la tradición ligada a las lenguas ro- A sí
mances y en la poesía mo derna. Est e tipo de verso, llamado germánico, se divide -E
LA ALEGORÍA en dos hemistiqui os separados por una cesura, y cada una de estas mitades t iene me cau
dos sílabas fuertemente acentuadas. El poeta germánico también contaba con una celoso
La alegoría es una figura literaria serie de recursos, como los epítetos o fórmu las poéticas, para reforzar la aliteración. malign
que permite representar una
Muchos expertos han interpretado la obra no solo como una recopil ación d e B eoj
idea valiéndose de otras formas,
ya sean humanas, animales o de antiguos cantares, sino básicamente como una alegoría cristiana, en la que el hé- cota* ~
' bjetos cotidianos. J roe es el paladín de la luz enfrentado a la maldad, representada esta última no por quecu1
enemigos humanos sino por monstruos, como ogros y dragones. En est e sentido,
se pierde el carácter trágico de la muerte de Beowulf, en la medida en que, a costa
de su propia vida, es capaz de salvar a sus semejantes.
84 I Capítulo 4 Los héroes épicos
Beowulf
nperio El príncipe Beowulf, del linaje de los gautas -pueblo de origen
)máni- germánico que habitó el sur de Suecia-llega a la corte de Hrothgar, rey
de Dinamarca, donde todas las noches un demonio gigante, con forma
5
ies zo- ! humana, devora a los guerreros. El terrible monstruo, llamado Gréndel,
sajona l¡ goza de un encantamiento que lo hace invulnerable a las armas.
1inida- i
ila;y la
)S.
•t
~
Gréndel
3 dedi-
•' Llamábase Gréndel aquel ser espantoso y perverso que moraba en fan -
-cuyo 1

gales*, en grutas y charcas desde tiempos remotos. D e él descienden
/
itarde § los seres malignos, los ogros y silfos* y todos los monstruos, y tam-
i
bién los gigantes que se opusieron al Señor desde tiempos lejanos.
es, ba- Oculto en la noche, Gréndel marchó al hermoso palacio, queriendo
1sticas, saber qué hacían los hombres. El demonio infernal, dañino y furio-
Jor un so, pronto tomó de sus lechos a treinta vasallos y con ira y rabia los
de las llevó a su guarida como botín de guerra ...
:sidad [ ... ]
3S. Beowulf se dirigió a palacio con sus guerreros para ofrecer sus
m con servicios al rey H rothgar, de Dinamarca, y así le dijo:
·as, se- -¡Te saludo, H rothgar! Yo soy pariente y vasallo de Híglak. De
cional joven realicé gloriosas hazañas. Supe de tu lucha con Gréndel. En
mi terruño, las gentes saben de mi fuerza terrible, pues me han visto
volver cubierto de sangre de la fiera batalla en que atrapé a cinco
gigantescos monstruos del mar; ellos me propusieron venir a ver-
te. Qyiero enfrentarme yo solo con Gréndel, acabar con el ogro, el
'ª ubi- dañino gigante. Por eso te pido, oh fuerte señor de la gente danesa,
elliu s, permíteme, noble monarca, buen soberano, que habiendo venido hasta
lucha aquí de tan lejos con mis bravos compañeros, libere tu castillo.
1años He oído decir que el feroz enemigo, en su loca arrogancia, sin armas
ataca. Yo también lucharé, mi noble señor, sin ayuda de espada o escu-
in du- do, solo mi mano se enfrentará con la fiera en mortal desafío. Sé que si
liosos Gréndel logra vencerme, en la alta morada podrá sin temor devorar a mis
resca- gautas, como antes ha hecho con tantos guerreros. Mi cabeza quedará
anegada en mi sangre; mi cuerpo será arrastrado hasta su cueva donde,
. la re- ufano, me engulla, saciado en mi sangre. No tendrás que velar mucho
3 rima tiempo mis restos mortales. ¡Deja que decida el destino!
as ro- Así respondió el rey Hrothgar, protector de skildingos*:
iivide - En mi pecho me agobia el dolor cuando hablo de los males que Gréndel fangal: sitio lleno de barro.
tiene me causa, tiñendo de sangre mi palacio. Te encomiendo su defensa, guarda silfo: ser fantástico, espíritu
elemental del aire.
nuna celoso la excelsa morada; piensa en tu gloria, muestra tu fuerza y espera al skildingo: descendiente de Skild,
KiÓn. maligno. ¡Cuanto quieras tendrás, si no pierdes la vida en la dura batalla! fundador de la dinastía skildinga; por
:Sn de Beowulf, confiado en su fuerza terrible, en el don del Señor, se quitó su extensión, danés.
cota: arma defensiva del cuerpo
21hé- cota* de hierro, su yelmo y su espada adornada, y a su buen escudero ordenó
hecha de mallas de hierro
0 por que cuidara sus armas de guerra. entrelazadas.
itido,
costa

85
Se acostó el famoso guerrero, reclinó la cabeza; sus heroicos marinos se aco- Fue
modaron con él en la sala. No tenían esperanzas de salvarse, de volver con su ciénaga
gente a la patria querida. Todos sabían que muchos valientes habían encontra- términc
do la muerte en aquel palacio. No obstante, el Señor les fue favorable y les dio su En\
ayuda. Así consiguieron vencer al maligno. El Dios Poderoso mostró su poder y danés. 1
protegió a los seres humanos. de Hro
Tan pronto la luz se ocultó, el nocturno asesino, venciendo las negras tinie- males e
blas, se presentó en la sala. Dormían los bravos que en la alta morada montaban mano, e
la guardia. ¡Bien sabían los hombres que el fiero enemigo a ninguno echaría a
las negras tinieblas, Dios los protegía!
Uno solo velaba: Beowulf, vigilante, a la espera del monstruo; él ansiaba el
combate con rabia terrible.
Aquel que cargaba con la ira de Dios salió de su ciénaga, oculto en las som-
bras, caminó por la tierra, marchó a la morada cuyo techo cubrían láminas de Beow
Para preservar el cód ice oro, sala conocida de antiguas visitas, pero donde nunca, hasta entonces, tan Esa nocl
manuscrito, afectado por un valientes guerreros se hallaban. Hrothgé
incendio hacia 1731, en la en una<
Llegó hasta la puerta, rompió los cerrojos, pisó el pavimento de hermosos pendía•
Universidad de Kentucky se ha
colores, con furia avanzó, tenía en sus ojos un brillo espantoso, una mirada de la espac
desarrollado un proyecto de
fuego. porcua·
digitalización del poema conocido Cincuer
como Proyecto del Beowulf Vio en el palacio la tropa excelente de jóvenes héroes, y allá se dispuso a
lasnod
electrónico. arrancarles la vida. Oculto en la noche lo observaba animoso el bravo Beowulf. escond1
No obstante, el dañino gigante veloz atrapó a un guerrero dormido. D es- reino. B
trozó al indefenso, mordió su carne, bebió su sangre, lo tragó vorazmente, todo él muer
cabalgé
su cuerpo desapareció en las terribles fauces de la bestia, sus manos, sus pies, su las nob
cuerpo todo. yen su
D espués, lentamente, palpó al heroico Beowulf, el que, alzándose valiente, del prír
todos I<
se dispuso al ataque. El falaz criminal de inmediato comprendió que nunca se
había topado con una mano tan poderosa. Un terror espantoso lo invadió y qui-
so precipitarse en su fangal.
Beowulf apretó con fuerza la garra del ogro y le rompió los dedos. El gigante
tiraba; el varón no cedía; el monstruo trataba de huir, procuraba escapar a su
ciénaga oculta. ¡Disputábanse ambos, con furia terrible, el hermoso palacio! ·1.Beo
La pelea era aterradora; el palacio, destrozado. Crecía el espanto de todos los recono
hombres del pueblo danés que fuera del muro escuchaban los gritos, el lamento 2. Presl
del ogro enemigo de Dios, su canción de derrota, el quejido doliente del ser hecho!
infernal. 3.Elab
Aquel cuya fuerza ninguno igualaba lo agarraba firme, decidido a hacer que 4. Escri
muriese el voraz visitante. En torno a Beowulf, sus bravos blandían las viejas deGré
espadas queriendo salvar del peligro a su jefe, al famoso señor. Mas aquellos consid
vasallos de recio coraje no hallaban la forma de herir al terrible y poderoso ene-
migo, pues él con su magia hechizaba las armas.
Beowulfy otras artes El destino, no obstante, ordenó que este día le llegase su fin, y por siempre se
De esta obra se han realizado hundiese en el reino infernal de los malos demonios. • Es p
numerosas adaptaciones
Por fin comprendió el que tantas desgracias había causado con gozo perver- J. R. R
cinematográficas. La más reciente,
so al género humano, oponiéndose a Dios, que su cuerpo poco podría aguantar, fuent
de 2007, es Beowu/f, Ja leyenda,
guerr
una película animada dirigida por pues la mano del bravo pariente de H íglaklo tenía cautivo, buscando su muerte,
Robert Zemeckis, con guión de enel
procurándole un dolor espantoso en el hombro.Justamente en ese sitio, un hue- paree
Neil Gaiman y Roger Avary.
co mostraba tendones desgarrados y rotos los huesos.

86 I Capítulo 4 Los héroes épicos


;e aco- Fue de Beowulf la gloriosa victoria. Herido de muerte, Gréndel huyó a su
::on su ciénaga oculta, a su torva guarida; pues claramente veía que la vida llegaba a su
ontra- término.
dio su En un fiero combate, el valiente guerrero acabó con las penas del pueblo
·odery danés. Aquel que de lejos llegara había salvado, animoso y prudente, el palacio

tinie-
'~
~ de Hrothgar. El príncipe gauta cumplió su promesa y terminó con todos los
males que el pueblo sufriera. Como claro trofeo, el varón victorioso colgó la
¡
itaban mano, el brazo y el hombro de Gréndel de la alta techumbre.
iaría a f
;:

(
Anónimo,Beowuif,Barcelona, SeÍJ( Barral, 1974
iaba el

•• (versión libre a partir de la traducción de Luis Lera te) .
8'ó
•s
;som-
nas de
!
Beowulfyeldragón
es, tan Esa noche se celebró la victoria, pero la madre de Gréndel entró en la sala, mató a un amigo de
Hrothgar y se llevó el brazo de su hijo. Beowulf siguió el rastro de sangre y llegó a la ciénaga donde,
en una cámara submarina, combatió con la bruja, decapitándola. Con una espada monumental que
mosos pendía del muro, también decapitó el cuerpo de Gréndel. La sangre del monstruo quemó la hoja de
:i.da de la espada. Beowulf resurgió de la ciénaga con la empuñadura de la espada y la cabeza que fue llevada
por cuatro hombres hasta la sala real.
Cincuenta años después, cuando Beowulf es rey de los gautas, aparece un dragón que merodea en
JUSO a
las noches oscuras. Durante t res siglos él había cuidado un tesoro, hasta que un esclavo fugitivo se
Jwulf. esconde en su caverna y le roba una jarra de oro. Luego de matarlo, el dragón comienza a asolar el
. Des- reino. Beowulf lo persigue hasta su cueva, lo enfrenta en un duro combate y lo mata. Pero también
!, todo él muere, envenenado por una mordedura del monstruo. Beowulf es enterrado; doce guerreros
cabalgan alrededor del túmulo y deploran su muerte; lloran al rey, entonan su canto y elogian su vida,
•1es, su las nobles hazañas del bravo diciendo:"Es justo que el hombre dedique alabanza a su amigo y señor
y en su pecho lo llore, cua ndo llega el momento en que debe alejarse y partir de su cuerpo. La muerte
liente, del príncipe mucho apenó a los gautas que un día en su sala moraron; afirmaban que fue de entre
nea se todos los reyes el más apacible y amante del pueblo, el másamigable y ansioso de gloria".

y qui-

igante (L ACTIVIDADES Pueden leer una versión


Ha SU completa de la obra en
io! verso en: http://elistas.egrupos.
1. Beowulfes un cantar de gesta, al igual que el Poema de/Cid. ¿Qué rasgos en común
net/lista/geotm/ficheros/1 /
los los reconocen? verFichero/8/
:nento 2. Presten atención a los atributos que se otorgan al palacio donde se desarrollan los
lel ser hechos. A partir de ellos, realicen u na descrip ción del palacio.
3. Elaboren una lista de las fórmulas con que se menciona al héroe y a su oponente.
erque 4. Escriban el monólogo que podría haber pronunciado Beowu lf al entrega r la cabeza
viejas de Gréndel al rey Hrothgar. Tengan en cuenta que, por su maldad, el mon st ruo es
u ellos considerado un descendiente de Caín.
:J ene-

1pre se (ornos RECORRIDOS DE LECTURA


•Es posible advertir la influencia de Beowulfen la obra del escritor que le ocurre a la espada del héroe sajón cuando toca la sangre del
erver- J. R. R. Tolkien, q ue lo conocía en profundidad y recu rrió a él como terrible Gréndel.
iantar, fuente literaria. Así, en las historias de E/SeñordelosAnillos, los • Al igual que en Beowulf, donde un ladrón roba al dragón en su
merte, guerreros se divierten en los salones de los castillos como ocurre cueva y provoca su ira, en El Hobbit, Bilbo Bolsón roba una copa en
en el poema; y cuando una espada clavada en un jinete negro la guarida de un dragón.
1hue-
parece disolverse por la maldad que este contiene, se reconoce lo

87
Otra epopeya germánica:
el Cantar de los nibelungos
El Cantar de los nibelungos constituye un hito fundamental en la épica germá- :J dat
"
nica. Compuesto entre 1200 y 1204, se desconoce su autor, aunque se cree que g tra/
fue un juglar o un culto caballero austriaco por la denominación de dos ciudades ;
añ ,
imaginarias, Zazamanc y Azagouc, mencionadas en el poema. El Cantar está for- f
~
Ro
mado por treinta y nueve cantos que llevan el nombre de las aventuras narradas. ~
~
Las estrofas constan de cuatro versos largos, con rimas pareadas y algunas rimas ~

interiores. -..
~


po

. .. ·- .,. 1 En la mitología germánica, los nibelungos constituían el linaje de los enanos. Su


rey, Alberich, era el encargado de proteger el tesoro de su pueblo. Este tesoro fue ;'
g bu
no
conquistado, primero, por Sigfrido. Cuando este fue asesinado, quedó en poder de j
Manuscrito del Cantar de los los burgundios y a ellos se les transfirió también el nombre de nibelungos. E
nibelungos. ¡:
Basado en antiguas leyendas, en las que se destacan temas como la venganza,
" L
la fidelidad y la lucha contra la adversidad del destino, en el poema se funden dos
historias: la del héroe germánico Sigfrido y la destrucción del reino de los burgun- Tr
dios. Sigfrido es inmune a la muerte por haberse bañado en la sangre de un dragón. Es
Sin embargo, una parte de su cuerpo es vulnerable, ya que una hoja de tilo impidió ayi
el contacto de la sangre con la piel de su espalda. El héroe se casa con la noble Cri- fr2
milda, cuya mano obtiene tras ayudar a Gunther, hermano de Crimilda y rey de los re1
burgundios. Gracias a la complicidad de Sigfrido y a su capacidad de volverse invisi-
ble, Gunther supera las pruebas que la joven Brunilda, reina de Islandia, pone a sus
pretendientes y logra casarse con ella. Cuando Brunilda descubre que Gunther ha
ganado la contienda con la ayuda de Sigfrido, se siente humillada y, despechada, d
El Cantar de los decide vengarse. Acude al traidor Hagen para que asesine a Sigfrido localizando el ro
nibelungos y otras artes punto vulnerable en su espalda. Resentida por la traición, su viuda solo piensa en be
El compositor alemán Richard la venganza. Para ello contrae matrimonio con Atila, rey de los hunos, pero deberá ap
Wagner (1813-1883) se inspiró en
este poema épico y en la tradición
esperar doce años antes de que se presente la ocasión de llevar a cabo su desquite, Pa
mitológica germánica y nórdica pues gracias a la intervención de los hunos logra aniquilar a los burgundios. Gun- OÍ1
para componer, entre 1848 y ther muere en presencia de Crimilda: ella misma lo decapita con la espada de Sig-
1874, sus cuatro óperas conocidas
frido y después muere trágicamente.
con el nombre de El anillo de los
nibelungos. Ellas son: El oro del Rin, Esta mujer es, sin duda, la figura central del poema, ya que su personaje evo- re:
La valquiria, Sigfrido y El ocaso de luciona desde la ternura y delicadeza del comienzo hasta convertirse en la cruel y gr:
los dioses. despiadada vengadora del final. de
ci1
di

J. ACTIVIDADES
va
1. Imaginen un nuevo episodio para este Cantar, por ejemplo:
•El encuentro entre Sigfrido y el dragón. ce
Para escuchar la música que
•Un diálogo entre Crimilda y Brunilda. a
Wagnerescribió para
El anillo de los nibelungos •Las palabras de Crimilda al lograr su venganza.
pueden ingresar en YouTube, Recuerden incluir elementos mágicos y mostrar rasgos propios de los cantares de
donde encontrarán fragmentos de gesta germánicos (localización, nombres de los personajes, costumbres, fo rmas de
sus óperas.
guerrear, marco histórico, etcétera). V<

88 I Capítulo 4 Los héroes épicos


La epopeya francesa: el Cantar de Roldón

La Chanson de Roland, conocida en español como el Cantar de Roldón o Rolando,


1ermá- data de fines del siglo XI o principios del XII. El poema narra la derrota del ejército
~e que francés conducido por su rey, Carlomagno, en el desfiladero de Roncesvalles, en el
1dades año 778. En el Cantar los hechos adquieren una dimensión legendaria: el caballero
;tá for- Roldán -sobrino del emperado r- protagoniza la heroica batalla.
·rada s. Durante el tiempo transcurrido entre los hechos históricos y el nacimiento del
; rimas poema, los acontecimientos permanecieron vivos en la memoria del pueblo.
El poema, escrito en francés antiguo, consta de 4.002 versos decasílabos, distri-
1os. Su buidos en 291 estrofas de longitud desigual. Su autoría fue atribuida a un monje
>ro fue normando, cuyo nombre aparece en el último verso.
derde

:Janza, La batalla de Roncesvalles


~n dos
1rgun- Tras siete años de cruzadas, el emperador Carlomagno ha conquistado
ragón. España. Solo resiste Zaragoza, en manos del rey moro Marsilio. Con la
npidió ayuda de Ganelón, que traiciona a los suyos, Marsilio ataca al ejército
>le Cri- francés que está regresando a su tierra. Comandada por Roldán, la
de los retaguardia francesa es aniquilada en el desfiladero de Roncesvalles.
invisi-
:! a sus LXXIX
her ha Ármanse los infieles con sus cotas sarracenas*, casi todas con triple espesor
:hada, de mallas, atan sus excelentes yelmos de Zaragoza y ciñen sus espadas de ace-
ndo el ro vienés. Poseen ricos escudos, picas valencianas y banderas blancas, azules y
1sa en bermejas. Abandonando sus mulos, han montado sus corceles y cabalgan en
leberá apretadas filas. El día luce claro y brilla el sol: resplandecen todas las armaduras.
;quite, Para realzar tal belleza, resuenan mil clarines. Tal es el zafarrancho que llega a
. Gun- oídos de los franceses . Y dice el conde Oliveros:
le Sig- - Señor compañero, puede ser que nos topemos con los sarracenos.
-¡Ah! ¡Así lo permita D ios! -responde Roldán- . Aquí habremos de
e evo- resistir, por nuestro rey. Es preciso sufrir por él las mayores fatigas, soportar los
:ruel y grandes calores y los grandes fríos, y perder la piel y aun el pelo. ¡Cuiden todos sarraceno: que profesa la religión
islámica.
de asestar violentas estocadas, para que no se cante de nosotros afrentosa can-
olifant e: cuerno de ma rfil que
ción! Mala es la causa de los infieles y con los cristianos está el derecho. ¡Nunca usaban los caballeros medievales.
dirán de mi acción que no fue ejemplar!

• LXXX
Oliveros ha subido a una colina. Ve avanzar las huestes de los infieles por un
valle cubierto de hierba. Llama al punto a Roldán, su compañero, y le dice:
- ¡Tan crecido rumor oigo llegar por el lado de E spaña, veo brillar tantas
cotas y tantos yelmos centellear! E sas huestes habrán de poner en grave aprieto
~ ACTIVIDADES

1. Reconozcan las
características de Roldán, el
héroe que se niega a capitular
a nuestros franceses. Bien lo sabía Ganelón, el bajo traidor. [ ... ] o a pedir auxilio. Compárenlo
con la figura del Cid (sus armas,
LXXXIV su caballo, su actitud como
le -¡Roldán, mi compañero, tocad vuestro olifante*! Carlos habrá de oírlo y vasallo, amigo y ferviente
volverá con el ejército; podrá socorrernos con todos sus barones. cristiano).

89
-¡No permita Dios que por mi culpa sean menoscabados mis parientes y e:
que Francia, la dulce, arrostre el desprecio! -replica Roldán-. ¡Más bien habré El
de dar recios golpes con Durandarte, mi buena espada que llevo ceñida al cos- cabal
tado! Veréis su hoja cubierta de sangre. L os desleales sarracenos se han reunido vand
para desdicha suya. Os lo juro: todos ellos están señalados para la muerte.[ ... ] 1
:M
LXXXVIII
Cuando advierte Roldán que está por entablarse la batalla, ostenta más
coraje que un león o leopardo. Interpela a los franceses y a Oliveros:
- Señor compañero, amigo, el emperador que nos dejó sus franceses ha ele-
gido a estos veinte mil: sabía que no hay ningún cobarde entre ellos. Es necesa-
rio soportar grandes fatigas por su señor, sufrir fuertes calores y crudos fríos, y
también perder la sangre y las carnes. Herid con vuestra lanza, que yo habré de
hacerlo con Duran darte, la buena espada que me dio el rey. [ ... J L

XCI de se
Pasa Roldán por los puertos de España cabalgando a Briador, su rápido cor-
cel. Su coraza realza su figura y blande denodadamente su lanza. Hacia los cie- e
baluarte: amparo y defensa. los endereza la punta; un estandarte todo blanco está atado al hierro y las fran- V
jas le azotan las manos. Noble es su apostura, risueño y claro su rostro. Le sigue Con
su compañero, y los caballeros de Francia lo proclaman su baluarte*. Su mirada
~ ACTIVIDADES se dirige amenazadoramente hacia los sarracenos y luego, humilde y mansa, viere
hacia los franceses, a los que dice con gran cortesía estas palabras: mue
1. El estudioso Axel Olrik - Señores barones, ¡despacio, cabalgad al paso! Estos infieles van en busca
distingue en las narraciones de su martirio. Antes de que caiga la noche habremos ganado un botín tan bello e
épicas una serie de leyes, como suntuoso: nunca rey de Francia conquistó otro igual. E
algunas de las cuales son: Y al tiempo que así hablaba, topáronse los dos ejércitos.[ ... ] ardio
claridad de la narración rom
(la trama es simple y los CIX lo te
elementos descriptivos se La batalla se ha tornado encarnizada. Francos y sarracenos cambian gol-
subordinan a los narrativos); pes que es maravilla verlos. El uno ataca y el otro se defiende. ¡Tantas astas se mis
dualidad escénica (aunque han roto, ensangrentadas! ¡Tantos estandartes yacen desgarrados! ¡Son tantos vida
haya muchos personajes, los buenos franceses que han perdido sus jóvenes vidas! Jamás volverán a ver a todc
solo dos, o a lo sumo tres, sus madres ni a sus esposas, ni a las huestes de Francia que los aguardan en los I
están activos en forma desfiladeros. Llorará por ello y gemirá Carlomagno; mas ¿de qué le valdrán sus pon
simu ltánea); esquematización lamentaciones? Nadie podrá socorrerlos. Mala faena le hizo Ganelón, el día en
(los personajes y las acciones que se fue a Zaragoza para vender a sus fieles. [ ... ] l
tienen rasgos comunes); Ele
caracterización por la acción CXXXIV
(los atributos o cualidades de El conde Roldán, con esfuerzo y grandes espasmos, toca dolorosamente su
una persona o cosa se expresan olifante. Por su boca brota la sangre clara, y se ha roto su sien. El sonido del
por medio de la acción); cuerno se difunde a lo lejos. Carlos, que cruza los puertos, lo ha oído y exclama: gua
unicidad (solo hay una trama -¡Es el olifante de Roldán! ¡No lo tocaría si no estuviese en trance de batalla! pon
concentrada en el personaje - ¡No hay tal batalla! - responde Ganelón-. Sois ya viejo, vuestras sienes que
principal). ¿Encuentran estas están blancas y floridas; por vuestras palabras parecéis un niño. [ ... ] Por una insi
características en el Cantar sola liebre se pasa el día tocando el olifante. Hoy será algún juego que lleva a dos
de Roldón? Justifiquen su cabo entre sus pares. ¿Qyién bajo el firmamento se atrevería a ofrecerle batalla?
respuesta. Cabalguemos, pues. ¿Por qué detenernos? [ ... ]

90 1Capítulo 4 Los héroes épicos


ntes y CXXXVI
habré El emperador manda tocar sus olifantes.[ ... ] Todos los barones del ejército
t1 cos- cabalgan en sus corceles y clavan espuelas durante el paso de los desfiladeros. Y
unido van diciéndose los unos a los otros:
[ ...] -Si Roldán está aún con vida, ¡qué recios golpes daremos con él!
Mas, ¿de qué sirven las palabras? Llegarán demasiado tarde. [ ... ]

a más CXLVII
Siente Oliveros que lo han herido de muerte. Nunca llevará a cabo venganza
ta ele- suficiente. En lo más compacto de la tmba, acomete como verdadero barón.
~cesa­ Hace pedazos escudos y picas, pies y puños, monturas y espinazos. Qyien lo
ríos, y hubiera visto descuartizar infieles, amontonar los muertos sobre los muertos,
Jré de tendría memoria de un buen caballero.[... ]
Luego llama a Roldán, su par y amigo, y le dice:
-Señor compañero, venid a mi lado, muy cerca, ¡con gran dolor habremos
de separarnos en este día!
J cor-
1s cie- CLI
fran- Ve Roldán que ha muerto su amigo, y que yace con el rostro contra el suelo.
sigue Con gran dulzura, le dirige palabras de adiós:
lirada - ¡Señor compañero, lástima grande de vuestra intrepidez! Días y años nos
tansa, vieron juntos: jamás me causasteis daño alguno, ni yo a vos. Ahora que os veo
muerto, me es ya dolor vivir.[ .. .]
busca
bello CLVI
El conde Roldán pelea noblemente, mas su cuerpo está empapado de sudor,
ardiente; siente en su cabeza un dolor violento: al hacer resonar su olifante, se
rompieron sus sienes. Pero quiere saber si ha de llegar Carlos. Toma el cuerno y ~ ACTIVIDADES
lo toca, pero es débil el sonido. El emperador se detiene y escucha:
t gol- -¡Señores! -exclama- , ¡gran infortunio nos alcanza! En este día, Roldán, 1. Creen la figura de un héroe,
tas se mi sobrino, habrá de dejarnos. La voz de su olifante me dice que le resta poca construya n su contexto
antas vida. ¡Qyien quiera valerle, clave espuelas a su corcel! ¡Tocad vuestros clarines, histórico, sus relaciones con
ver a todos cuantos haya en este ejército! el rey, sus características
!n los Resuenan sesenta mil clarines, y tan alto que retumban las cumbres y res- físicas, morales y espirituales,
.n sus ponden las hondonadas. Óyenlos los infieles, y no se sienten movidos a risa. basándose en los personajes
lía en -Muy pronto nos dará alcance Carlomagno -se dicen los unos a los otros. de las obras leídas. Elaboren
Huyen los infieles, llenos de pesar y enojo. H acia España apresuran el paso. diferentes momentos
El conde Roldán no puede darles caza: ha perdido a Briador, su corcel.[ ...] de la secuencia narrativa
contemplando el clima de
1te su C LXXIV guerra o enfrentamiento,
o del Siente Roldán que la muerte arrebata todo su cuerpo. Corre apresurado a la descripción d e las armas,
.ama: guarecerse bajo un pino, y se tiende de bruces sobre la verde hierba. Debajo de él los opon entes humanos o
.talla! pone su espada y su olifante. Vuelve la faz hacia las huestes infieles, pues quiere fantásticos, el encuentro con el
1enes que Carlos y los suyos digan que ha muerto vencedor, el gentil conde. D ébil e enemigo, la va lentía. Realicen
runa insistentemente, golpea su pecho, diciendo su acto de contrición. Por sus peca- una puesta audiovisual, ya
eva a dos, tiende hacia Dios su guante. Los ángeles del cielo descienden hasta él. sea en láminas, historietas o a
talla? t ravés de una p resentación en
Anónimo, El cantar de Roldón, Madrid, Espasa-Calpe, 2003 (fragmento). diapositivas.

91
El Romancero

RECURSOS EXPRESIVOS Como ya se dijo, las canciones de gesta se fragmentaron y pervivieron como
poemas breves, de carácter narrativo, transmitidos en forma oral. Respecto de su
• Anáfora: repetición de una estructura y versificación, eran largas tiradas d e versos octosílabos -cada uno de
palabra al comienzo de varios los hemist iquios en que se dividían los largos versos de los poemas épicos- con
versos.
rima asonante en los versos pares y libre en los impares.
• Arcaísmo: palabra o frase cuya
forma o significado, o ambos
a la vez, resultan anticuados
en relación con un momento
determinado.
• Hipérbaton: alteración del
Romance de los condes de Carrión (JA aun
por susjornadasandand~
orden sintáctico habitual de la
frase con el propósito de destacar De concierto están los condes, -Y<
un concepto, generalmente
ubicado en primer término.
hermanos Diego y Fernando; en el robledal de Corpes ¡) -
~ aqu<
• Hipérbole: exageración de una afrentar quieren al Cid, dentro del monte han entrado; ¿~
idea con fines expresivos. muy gran traición han armado, espeso es y muy oscuro, ¡Alt
• Personificación: forma de quieren volverse a sus tierras; de altos árboles poblado. - E
animación que consiste en atribuir
sus mujeres demandando, Mandan ir toda su gente yla1
cualidades humanas a seres que
no las tienen, haciéndoloscapaces y luego les dice el Cid, adelante muy gran rato; los e
' el lenguaje. J cuando se las h a entregado:
-Mirad, yernos, que tratedes
labr:
Eln
como a dueñas hijasdalgo
mis hijas, pues que a vosotros
por mujeres las he dado.
lasriendas les han quitado;
sus mujeres que lo ven
\ ~\I
f~ ~
cien
yel1
otra
Ellos ambos le prometen muy gran llanto han levantado µ dese
de obedecer su mandado. Apéanlas de las mulas elre
Ya cabalgan los condes; ambas las han desnudado;
y el buen Cid ya está a caballo cada uno azota la suya,
con todos sus caballeros con riendas de su caballo,
~ ACTIVIDADES que le van acompañando; danles muchas espoladas, R
por las huertas y jardines en sangre las han bañado;
1. Asocien este romance con van riendo y festejando. con palabras injuriosas ~e
el episodio correspondiente Por espacio de una legua mucho las han denostado. cu ar
del Poema del Cid. ¿Qué el Cid los ha acompañado; L os cobardes caballeros cu ar
simil itudes plantean los cuando dellas se despide, allí se las h an dejado. yes1
personajes? lágrimas le van saltando. -De vueso padre, señoras, cu ar
2. Reconozcan recursos Como h ombre que ya sospecha en vos ya somos vengados; ym
expresivos: hipérbaton, la gran traición que han armado, que vosotras no sois tales cu ar
hipérbole, diálogos, llamó a su sobrino Ordoño para con nusco casaros. van
arcaísmos, voz del narrador. y en secreto le ha mandado Ahora pagáis las deshonras
3. ¿Se trat a de un poema que vaya tras de los condes que el Cid a nos hubo dado
narrativo o descriptivo? cubierto y disimulado. cuando soltara el león
Justifiquen su respuesta. Los condes con sus mujeres y procurara matarnos.

• FI
Pid
pu<
Romance deAbenámar J. ACTIVIDADES
no -¡Abenámar, Abenámar, porque no labre otros tales 1. El "Romance de Abenámar"
su moro de la morería, al rey de Andalucía. pertenece a los d enominados
de el día que tú naciste El otro es Torres Bermejas, romances fronterizos, que
on grandes señales había! castillo de gran valía; divulgan hechos relativos a la
Estaba la mar en calma, el otro Generalife, guerra de la Reconquista que se
la luna estaba crecida: huerta que par no tenía. libra en la frontera de Granada,
moro que en tal signo nace Hablara allí el rey don Juan, donde moros y cristianos se
no debe decir mentira. bien oiréis lo que decía: enfrentan. En 1431, el rey Juan
-No te la diré, señor, -Si tú quisieses, Granada, 11 de Castilla llega ante Granada
aunque me cueste la vida. contigo me casaría; y, luego del combate, la ciudad
-Yo te agradezco, Abenámar, clarete en arras y dote se rinde. Lean el poema a
aquesta tu cortesía. a Córdoba y a Sevilla. la luz de esta explicación y
¿Qyé castillos son aquellos? - Casada soy, rey don Juan, reconozcan en él:
¡Altos son y relucían! casada soy, que no viuda; •las diferentes voces que
- El Alhambra era, señor, el moro que a mí me tiene permiten, en un texto breve,
y la otra la mezquita; muy grande bien me quería. reconstruir la hist oria;
los otros los Alixares, Hablara allí el rey don Juan, •la personificación adjudicada
labrados a maravilla. Estas palabras decía: a Granada - esposa o
El moro que los labraba, -Échenme acá mis lombardas novia-y su actitud frente al
cien doblas ganaba al día, doña Sancha y doña Elvira; co nquistador cristiano.
y el día que no los labra, tiraremos a lo alto, 2. Averigüen quiénes eran
otras tantas se perdía; lo bajo ello se daría. doña Sancha y doña Elvira.
desque los tuvo labrados El combate era tan fuerte 3. El "Romance del prisionero"
el rey le quitó la vida que grande temor ponía. suele ser cata logado como un
romance novelesco. Reflexionen
sobre las razones de tal
d enominación.
Romance del prisionero 4. Reconozcan las dos partes
en que se divide el poema de
Qye por mayo era, por mayo, sino yo, triste, cuitado, acuerdo con el estado anímico
cuando hace la calor, que vivo en esta prisión; del yo lírico.
cuando los trigos encañan que ni sé cuándo es de día S. Identifiquen recursos
y están los campos en flor, ni cuándo las noches son, expresivos.
cuando canta la calandria sino por una avecilla
y responde el ruiseñor, que me cantaba el albor.
cuando los enamorados Matómela un ballestero;
van a servir al amor; dele Dios mal galardón.

1 OTROS RECORRIDOS DE LECTURA


• Flor nueva de romances viejos es la obra de Ra món Menéndez aún seguían vivos en la tradición oral. El libro ofrece una selección
Pidal quien en compañía de su esposa, María Goyri, recorrió los de ellos.
pueblos de Castilla la Vieja recopilando antiguos romances que

93
La
LOS ROMANCES
L
Decía el escritor español Azorín: 1 "Romances, vie- la divulgación oral y las colecciones impresa s se pu-
jos romances, centenarios romances, roma nces po- blicaron romances en hojas sueltas que tuvieron una ¡ t uaci
pulares: ¿quién os ha compuesto? ¿De qué cerebro amplia difusión . f mico
habéis salido y qué corazones habéis aliviado en tanto Es imposible trazar la historia del Romancero tradi- ~
que la voz os cantaba?" cional sin caer en errores cronológicos. Algunos textos -
~

J.
cent
expo
La palabra romance posee varios significados : se se pueden fechar sin dificultad, pero otros son reela- •
aplica a las lenguas derivadas del latín, como el es- boraciones ta rdías de antiguas ca nciones de gesta 'o= prop
~
pañol, el francés, el italiano o el portugués; también y resulta imposible saber cuándo empezaron su vida ¡ pose
durante la Edad Media designó a los poemas narrati- independiente. El romance es no solo la narración de ~ de SE
vos en lengua vulgar, tanto de la juglaría como de la un hecho o de una anécdota, sino también el modo !
tativ¡
clerecía 2 y, a partir del siglo XV, designó canciones o poético de expre sar los sentimientos de una comu- ''
¡:
Q
de la
poesías destinadas al canto o la recitación, cuyas pie- nidad, que elabora y altera el poema sin modificar el
zas constituyen el Romancero. contenid o, adecuándolo a las nuevas formas de pen- ción,
Justamente, a lo largo de los siglos XIV y XV se de- sar y de sentir. Sustituidos o coexistentes con otros Le
sa rroll aron, como nueva forma de expresión poética, de nueva creación, en muchas ocasiones resulta difícil
yen e
composiciones destinadas al canto, de carácter amo- saber si los impresos en el siglo XVI proceden de la
roso o guerrero. En un princi pio fueron fragmentos tradición oral o si han llegado a ella tras su publica- cons
desgajados de los poemas épicos que cobraron vida ción; en cualquier caso, resulta claro que muchos de el es<
propia . Los romances elaboraron los aspectos más los que se cantaban en las plazas en el Siglo de Oro,4 crear
atractivos de la épica para un público que no era ya el o que fueron impresos por entonces , se han podido
de los cantares de gesta. También heredaron de estos recoger aun en nuestros días en España, Portugal, His- signi
el carácter noticioso y por eso no debe extrañar que, ya panoamérica, y entre los judíos sefardíe s, expulsados mue!
desde mediados del siglo XIV, haya romances dedica- de España en 1492. medi
dos a los acontecimientos más notables del momento; Por su parte, los romances nuevos o artísticos, prod
más tarde, la guerra de Granada,3 con sus numerosas aquellos que fueron escritos para ser leído s, a par-
escaramuzas, suministró abundante material para la tir de los últimos decenios del siglo XVI, por poetas
elaboración de nuevos poemas protagonizados por cultos, mantuvieron vivo el espíritu de una España de
personajes conocidos. hace siglos.
La transmisión oral configuró las características
esenciales del género: anonimia, inestabilidad textual, E. L.
sobriedad de recursos superfluos, fragmentarismo,
simplificación estructural, comienzo brusco, repeticio- Bibliografía 1.Als
nes y paralelismos. preg1
• AA.W., El autor y su obra, en Historia universa/ de la literatura,
Hasta fines del siglo XV no empezaron a recogerse Buenos Aires, Hispamérica Ediciones, 1982.
2.De
por escrito, y a partir del XVI resultó habitual su com- • BoRELLO, RoooLFO A., La lírica española de la Edad Media, Buenos
pilación y publicación en libros. El Romancero llegó así Aires, Centro Editor de América Latina, col. Capítulo Universal, prese
a todos los est ratos sociales y culturales, y junto con 1970. 3.En
estos
1Azorín, seudónimo del escritor José Augusto Trinidad Martínez 3 Guerra de Granada: nombre con el que se conoce el conjunto de el tex
Ruiz (1873-1967), novelista , ensayista y crítico literario campañas militares que tuvieron lugar entre 1482 y 1492, durante 4.A ft
español. el reinado de los Reyes Católicos, para reconquistar el reino de
2Junto con el mester de juglaría, se desarrolla en la Edad Granada, en poder de los musulmanes. refon
4 Siglo de Oro: nombre con el que se conoce el período de
Media el mester de clerecía, que comprende la producción pre se
literaria de los clérigos, es decir, hombres instruidos, aunque no apogeo del arte español que comprende los siglos XVI y XVII.
Se desarrollaron dos movimientos culturales y artísticos : el que r
necesariamente sacerdotes. Nació en ámbitos cultos, como las
escuelas catedralicias o monacales, y sus t emas son religiosos y Renacimiento (siglo XVI) y el Barroco (siglo XVII). Entre los texto
moralizantes: vidas de santos y milagros de la Virgen. El propósito escritores del Siglo de Oro es posible mencionar a Garcilaso de
de estas obras es entretener, enseñar e impulsar a la gente a la la Vega, Luis de Góngora, Francisco de Quevedo, Lope de Vega y 5.Lo!
virtud y la piedad. Miguel de Cervantes, entre otros. los hi
6. ¿Q
ampl
La organización de los textos académicos
Los textos presentan una forma particular de construcción en función de la si-
tuación comunicativa a la que están destinados. Por ejemplo, en el ámbito acadé-
mico -manuales, evaluaciones, informes, exposiciones orales de alumnos y do-
cente, artículos de divulgación científica, etcétera- predomina una trama textual
expositivo-explicativa. La secuencia textual es el modo en que se encadenan las
proposiciones que constituyen el t exto. Como no existen textos puros, es decir que
posean un solo tipo de trama -en general, es posible reconocer distintos tipos
de secuencias en un mismo texto, por ejemplo, narrativa, descriptiva y argumen-
tativa- , se habla de predominio. Así, en los t extos académicos hay un predominio
de la trama expositivo-explicativa, ya que estos textos no solo transmiten informa-
ción, sino que establecen con el lector un contacto que apela a la comprensión.
Los textos académicos se centran en contenidos más bien estáticos, que inclu-
yen conceptos, definiciones, reformulaciones y explicaciones. Presentan un saber
construido en centros de estudio e investigación, legitimado socialmente {"Decía
el escritor español Azorín ..:') y tienden a borrar las huellas del sujeto enunciador,
crea ndo una distancia que genera objetividad ("La palabra romance posee varios
significados: se aplica a las lenguas derivadas del latín ..:'). De este modo, el texto
muestra que la distancia asumida por el enunciador busca autorizar su discurso
med iante el empleo de un lenguaje técnico o el uso de citas textuales. Algunas
producciones emplean la primera persona del plural para generar un efecto seme-
jante, con un "nosotros" que ubica al enunciador como miembro de una comuni-
dad científica que lo respalda.

ACTIVIDADES

1. Algunos textos expositivos enuncian el objeto de la explicación a partir de una


preg unt a que delimita el problema. ¿Qué recurso se utilizó en el texto "Los romances"?
2. De acuerdo con la secuencia explicat iva, es posible reconocer el esquema
presentación - respuesta -conclusión. Identifiquen en el texto cada una de estas partes.
3. En las explicaciones se recu rre a nexos o en laces para vincular las proposiciones;
estos nexos reciben el nombre de conectores. Observen los conectores destacados en
el texto. ¿Qué t ipo de relación est ablecen entre las partes que vinculan?
4. A fin de evitar reiteraciones, se emplean recursos como la sinonimia, la
reformu lación o la deixis. La deixis es la relación q ue se establece entre element os
presentes en el texto o en el contexto, es decir, fuera de él, mediante el seña lamiento
que realizan los pronombres personales y los demostrativos. ldentifíquenlos en el
texto.
S. Los hiperónimos son palabras abarcadoras, q ue incluyen a otras en su significado:
los hipónimos. Reconozcan los hipónimos del hiperónimo "recursos del género''.
6. ¿Qué datos les resultan relevantes del texto leído? ¿Qué información buscarían
ampliar?
1. Lean la canción de Joan Manuel Serrat que se tran scribe a continuación, rastreen ::
previamente qué valores encarnan los personajes que se nombran, y respondan a 2
J
las siguientes preguntas.
a. ¿Cómo definirían las pa labras héroe y honor en la Edad Media y en la actualidad?
¿Consideran que los conceptos han variado su connotación?
í
J
Ca
ca
b. ¿Qué oposición plantea Serrat entre los héroes y la gente común? ¿Coinciden
con esta postura? Escriban un texto en el que aparezca el concepto de héroe coti-
1
- de
,j
us
diano, puede ser un ensayo o un texto de ficción.
'
c. Busquen en internet la canción "Si volvieran los dragones'; de Joaquín Sabina y 1 D

'
Fito Páez. ¿Por qué los autores p lantean el deseo del retorno de los dragones? ¿Qué de1
simbolizan los personajes que se mencionan? ¿Qué podría modificarse en el mun- C01
1
do contemporáneo "si volvieran los dragones"? • de

Detrás está la gente


D etrás de los héroes y de los titanes,
detrás de las gestas de la humanidad 2. or
y de las medallas de los generales. medi
Detrás de la estatua de la Libertad. dad,
Para
Detrás de los himnos y de las banderas. • F.
D etrás de la hoguera de la Inquisición. Ad
D etrás de las cifras y de los rascacielos. qu
D etrás de los anuncios de neón. qu
• E
D etrás, está la gente ne
con sus pequeños temas, tar
sus pequeños problemas re<
y sus pequeños amores. pa
ha
C on sus pequeños sueldos, in1
sus pequeñas campañas, • I
sus pequeñas hazañas de
y sus pequeños errores. sir
ca
D etrás del Oliijote y de Corín Tellado, • I
de Miss U niverso y del Escorial.
Detrás de Hiroshima y del Vaticano.
D etrás de la víctima y del criminal.
e
Detrás de la mafia y de la policía.
D etrás del Mesías y de Wall Street.
treen Detrás del Columbia y d e la heroína.
dan a j Detrás de G oliat y de David.

idad? 1
i
Cada uno a su manera
cada quien con sus modos;
ciden t detrás estamos todos,
~ coti-
-•
¡

usted, yo y el de enfrente.

)ina y i
: Detrás d e cad a fecha,
¿Qué detrás d e cada cosa,
mun-
f
¡ con su espina y su rosa,
F
o detrás, está la gente.

Joan M anuel Serrat

2. Organ icen la clase en grupos y elaboren entrevistas ficticias a un caballero


medieval (Ruy Díaz de Vivar, Roldán, Beowulf u otro) y a figuras que, en la actuali-
dad, podrían considerar heroicas. Confronten sus producciones.
Para rea lizar las entrevistas apócrifas tengan en cuenta:
• Recopilar información que pueda ser de utilidad, documentar las fuentes.
Adentrarse en el tema sobre el que se preguntará y sobre los datos de la persona
que se entrevistará; entender por qué y para qué se hará la entrevista, conocer
qué puede interesarles a quienes la lean.
• Elaborar un cuestionario. A pesa r de que se trata de una entrevista ficticia será
necesario pensar qué preguntas se le harán a l personaje. Es aconsejable concre-
tar e l tema; ir de lo general a lo particular; e laborar preguntas abiertas, que no
requieran solo una respuesta por sí o por no. Las preguntas deben ser d irectas,
para obtener datos sobresalientes, llamativos, únicos. Ana lizar desde dónde
habla el entrevistado, es decir, porqué dice lo que dice, a quién representa, a qué
intereses responde.
• Antes de redactar la entrevista es conveniente seleccionar la información basa-
dos en e l interés sobre el entrevistado, ser lo más precisos posible y usar frases
sintéticas, que reú nan la mayor cantidad de información en el menor espacio, así
como aquellas que comuniquen efectivamente las ideas del entrevistado.
• Llegado e l momento de la redacción deberán tener en cuenta:
·Elegir una frase significativa de la entrevista para usar como título.
· Elaborar una entrada o prese ntación del personaje.
· Transcribir las preguntas y las respuestas empleando los signos de puntuación
que permiten reconocer claramente las diferentes voces.
·Elaborar un párrafo de cierre.
Orígenes de la literatura
argentina
En la obra que se reproduce, Carlos Alonso, artista mendocino
nacido en 1929, interpreta un episodio de El matadero, de Esteban
Echeverría. La edición del Centro Editor de América Latina (CEAL),
de 1966, incluía veinticinco obras en tinta sobre papel.
En su desarrollo como artista plástico, Carlos Alonso adoptó el dibujo
como forma de expresión y dedicó buena parte de su obra a ilustrar
textos de famosos escritores nacionales y de la literatura universal.
Algunas de ellas son El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha,
de Miguel de Cervantes; El gaucho Martín Fierro y la vuelta de Martín
Fierro, de José Hernández; la guerra al malón, del comandante
Manuel Prado; la divina comedia, de Dante Alighieri, y varios
volúmenes de poesía de Pablo Neruda.
En las ilustraciones de El matadero, el artista dialoga con el texto
literario, y sus imágenes, de carácter narrativo o simbólico, son
poéticas desde una perspectiva plástica. La serie que compone la
obra total está resuelta solo con tinta roja y lápiz negro sobre el fondo
crudo del papel. En algunos casos, aplica un sello con la figura de una
vaca y lo repite como elemento base que conforma una composición
mayor. El color rojo puede interpretarse como símbolo de la sangre
que se derrama en el matadero; a veces la presenta como mancha, y
otras, como plano de forma geométrica.
Alonso elige el lugar desde el cual ilustra, es decir, asume una actitud
comprometida ante la obra. En este caso, la imagen muestra una de
las escenas en las que los carniceros del matadero toman por la fuerza
al joven unitario que, desprevenido, se ha acercado al lugar. Contra él
desatan toda la violencia del conflicto entre unitarios y federales.
La cautiva En
qu
Canto 1. El desierto cua
se
Era la tarde, y la h ora L a humilde yerba*, el insecto, sor
ESTEBAN
ECHEVERRIA en que el sol la cresta dora la aura* aromática y pura, ' se
(1805-1851) de los Andes. El desierto
inconmensurable, abierto
el silencio, el triste aspecto
de la grandiosa llanura,
1
1
co
de
Nació en Buenos Aires, pero y misterioso a sus pies el pálido anochecer. 1 se
adquirió gran parte de su se extiende, triste el semblante, -' da
formación literaria en Francia,
solitario y taciturno L as armonías del viento •'
adonde viajó en 1825. A su
como el mar, cuando un instante dicen más al pensamiento
regreso, en 1831, introdujo el 1 B'
Romanticismo en el Río de la
Plata y se convirtió en un autor
el crepúsculo nocturno, que todo cuanto a p orfía*
1 d:~
pone rienda a su altivez. la van a filosofía el e
fundamental en los orígenes de f
~
la literatura nacional. Entre sus pretende altiva enseñar. o y e1
obras se destacan el poema La Gira en vano, reconcentra ¿Olié pincel podrá pintarlas cor
cautiva y el cuento El matadero, su inmensidad, y no encuentra sin deslucir su belleza? vel
publicado luego de su muerte,
la vista, en su vivo anhelo, ¿Olié lengua humana alabarlas? veí
en 1871. Otras obrasson: E/vira o
la novia del Plata, Los consuelos y do* fijar su fugaz vuelo, Solo el genio su grandeza cal
el Dogma socialista. como el pájaro en el mar. puede sentir y admirar. ye
Doquier* campos y heredades de
del ave y bruto guaridas, Ya el sol su nítida frente
doquier cielo y soledades reclinaba en occidente, ¿Q
do: dónde/ donde. de Dios solo conocidas, derramando por la esfera COl
doquier: dondequiera, en cualquier que Él solo puede sondar*. de su rubia cabellera las
sitio.
el desmayado fulgor. de
sondar: averiguar, descubrir.
arcano: secreto, misterio.
A veces, la tribu errante, Sereno y diáfano el cielo, so.
yerba: hierba. sobre el potro rozagante, sobre la gala verdosa ¿(]
aura: viento suave y apacible. cuyas crines altaneras de la llanura, azul velo se
a porfía: con insistencia, con
flotan al viento ligeras, esparcía, misteriosa cu
tenacidad.
piélago: parte del mar alejada de la lo cruza cual torbellino, sombra dando a su color. ¿
costa. y pasa; o su toldería en
sobre la grama frondosa El aura, moviendo apenas
asienta, esperando el día sus alas de aroma llenas, 1·G
duerme, tranquila reposa, entre la yerba bullía de
sigue veloz su camino. del campo que parecía to
corno un piélago* ondear. 1·:N
¡Cuántas, cuántas maravillas, Y la tierra, contemplando hi
sublimes y a par sen cillas, del astro rey la partida, E
sembró la fecunda mano callaba, manifestando, d<
de Dios allí! ¡Cuánto arcano* corno en una despedida, V~

que no es dado al vulgo ver! en su semblante pesar. y


[ ...] p:

100 1Capítulo 5 Orígenes de la literatura argentina


Entonces, como el rüido ¿Dónde va? ¿De dónde viene?
que suele hacer el tronido* ¿De qué su gozo proviene?
cuando retumba lejano, ¿Por qué grita, corre, vuela,
se oyó en el tranquilo llano clavando al bruto la espuela,
sordo y confuso clamor; sin mirar alrededor?
se perdió... y luego violento, ¡Ved que las puntas ufanas*
como baladro* espantoso de sus lanzas, por despojos,
de turba inmensa, en el viento llevan cabezas humanas,
se dilató sonoroso, cuyos inflamados ojos
dando a los brutos pavor. respiran aún furor!

Bajo la planta sonante A sí el bárbaro hace ultraje


del ágil potro arrogante al indomable coraje
el duro suelo temblaba, que abatió su alevosía;
y envuelto en polvo cruzaba y su rencor todavía
como animado tropel, mira, con torpe placer,
velozmente cabalgando; las cabezas que cortaron
veíanse lanzas agudas, sus inhumanos cuchillos, tronido: estampido del trueno.
baladro: grito, voz espantosa.
cabezas, crines ondeando, exclamando: -"Ya pagaron
hollar: pisar, abatir.
y como formas desnudas del cristiano los caudillos yermo: terreno no habitado.
de aspecto extraño y crüel. el feudo a nuestro poder. ufano: arrogante, presuntuoso.

¿Qyién es? ¿Qyé insensata turba Ya los ranchos do vivieron


con su alarido perturba presa de las llamas fueron,
las calladas soledades y muerde el polvo abatida ~ ACTIVIDADES
de Dios, do las tempestades su pujanza tan erguida.
solo se oyen resonar? ¿Dónde sus bravos están? 1. El paisaje de la pampa se
¿Qyé humana planta orgullosa Vengan hoy del vituperio, presenta como un desierto
se atreve a hollar* el desierto sus mujeres, sus infantes, inconmensurable, abierto ...
cuando todo en él reposa? que gimen en cautiverio, Vuelvan a leer el comienzo del
¿Qyién viene seguro puerto a libertar, y como antes, canto 1, prestando atención
en sus yermos* a buscar? nuestras lanzas probarán". a los adjetivos y los verbos,
y mencionen qué otras
¡Oíd! Ya se acerca el bando Tal decía, y bajo el callo características adquiere.
de salvajes, atronando del indómito caballo, 2. ¿En qué momento del día
todo el campo convecino. crujiendo el suelo temblaba; se sitúa la escena descripta?
¡Mirad! Como torbellino hueco y sordo retumbaba ¿Cómo se marca la progresión
hiende el espacio veloz. su grito en la soledad. del tiempo? Den ejemplos.
El fiero ímpetu no enfrena Mientras la noche, cubierto 3. ¿Qué relación establece el
del bruto que arroja espuma; el rostro en manto nubloso, poema entre la inmensidad de
vaga al viento su melena, echó en el vasto desierto, la pampa y la divinidad?
y con ligereza suma su silencio pavoroso, 4. Comparen la presentación
pasa en ademán atroz. su sombría majestad. del paisaje antes y después de
la aparición del malón.
Esteban Echeverría, La cautiva. El matadero, S. ¿Cómo están caracterizados

1
Buenos Aires, Kapelusz, 1972 (fragmento). los indios?

101
Primeras visiones de lo nacional El ~
Entre las obras literarias de Echeverría, La cautiva y El matadero contienen las El
claves del Romanticismo rioplatense; inaugu ran un recorrido y se convierten en ~ mera
obras fundacionales de la literatura nacional por razones políticas y literarias.
'
5 dia q j
Considerado por algunos críticos un poema épico, La cautiva manifiesta la idea
del autor que concibe "la poesía como expresión nacional de un pueblo''.
t
§
movi
s
¡
La cautiva presenta algunos motivos potentes del movimiento romántico, que : los p
~
perduran en la literatura argentina a lo largo del siglo XIX: la pampa, como un pai - ~

saje inmenso, riesgoso y solitario; la violencia que resulta del enfrentam iento de -•
¡;

;
idea <
tos f
sectores en pugna; la figura del cautivo o de la cautiva, en cuanto testimonio de la i colm
lucha contra el indio; la brutalidad y el sa lvajismo de los malones y los indios. ~
i El
FUNCIONES
DEL LENGUAJE
Publicado en 1837 en su libro Rimas, el poema está organizado en nueve cantos j pree
y un epílogo. Los cantos son: 1. El desierto; 2. El festín; 3. El puñal; 4. La alborada; S. El ~ será 1
Los hablantes utilizan la lengua con pajonal; 6. La espera; 7. La quemazón; 8. Brian; 9. María. •o activ
distintas intenciones o propósitos: La historia que re lata el poema es la siguiente: un malón de indios asalta y sa- Ai
transmitir emociones, opinar,
quea una población de la pampa y toma ca utivos, entre otros, al capitán Brian y a su imag
escribir una canción, explicar algo,
etcétera. Esas formas que adopta esposa María. Durante un festín en que los indios se emborrachan en un alto del ca- amo1
la lengua según la intención mino, María libera a su esposo herido y ambos huyen al desierto. All í t ienen varias prov
del hablante, diferentes en peripecias: la sed, la aparición de un tigre, la quemazón de pastiza les. Brian no logra sado
recursos, estructura, vocabulario,
constituyen las funciones del
soportar la situación y muere. María lo entierra y sig ue su marcha; se encuentra con gare:
lenguaje, que se manifiestan en una patrulla de soldados cristianos, por quienes se entera de la muerte de su pe- SOciE
' istintos tipos de textos. J queño hijo durante el ataque de los indígenas. La mujer no puede sobreponerse a
la desgracia y muere en presencia de los soldados.
EI Ri
E1
Un lenguaje poético nues
.L ACTIVIDADES La función poética o literaria del lenguaje, predominante en los textos litera- origE
rios, se caracteriza porque busca llamar la atención sobre el mensaje mismo y lo- prod
1. Con un compañero relean la grar un texto sugerente, atractivo: además de lo que se dice, importa cómo se dice. arde
tercera estrofa y luego armen El discurso literario no se propone un objetivo, constituye un fin en sí mismo. Po r ríod<
el texto sin el hipérbaton, es ello, aprovecha y explota las variadas posibilidades de la lengua: la sonoridad, la les y
decir, según el orden si ntáctico selección de las palabras, la construcción sintáctica, las figuras retóricas y otros re- E
habitual. ¿Qué efecto produce cursos literarios. no c
la lectura en un caso y otro? Son varios los recursos utilizados en La cautiva; entre otros: sino
2. Busquen otras tres • El hipérbaton: un proced imiento habitual de la poesía que consiste en alterar tituc
enumeraciones en el text o. el orden sintáctico habitual; por ejemplo: ... la hora / en que el sol la cresta dora / de por 1
3. Comenten en qué otros tipos los Andes (la hora en que el sol dora la cresta de los Andes). mon
de textos es frecuente el uso de • La pregunta retórica: pregunta aparente; es una forma indirecta de afirmar zadz
la enumeración y formu len una o negar; por ejemp lo: ¿Qué pincel podrá pintarlas / sin deslucir su belleza? (ningún text<
hipótesis acerca de la razón. pincel puede pintarlas sin deslucir su belleza). l.!
4. Escriban tres ejemplos de • La enumeración: consiste en nombrar sucesi vamente objetos, conceptos, tica '
personificaciones frecuentes cualidades; por ejemplo: La humilde yerba, el insecto,/ la aura aromática y pura,/ el situé
en la leng ua coloquial. Por silencio, el triste aspecto/ de la grandiosa llanura. ens<
ejemplo: Ojo que las paredes • La personificación: figu ra por la que se ot organ características humanas a mer
oyen .. . ideas, fenómenos o animales; por ejemplo: ... el duro suelo temblaba. Esta figura se E
S. Elijan una estrofa y analicen vincu la con un rasgo man ifiesto en la literatura romántica: el paisaje adquiere v ida del<
qué otros recursos descubren. propia y transmite el estado de ánimo del observador o de los personajes. min•

1 02 1Capítulo 5 Orígenes de la literatura argentina


El Romanticismo
?nlas El Romanticismo es un movimiento artístico y cultural que tiene lugar en la pri- MOVIMIENTO
en en mera mitad del siglo XIX en Europa y América. Surge como una fue rza de vanguar-
dia que propone la renovación de las artes fuera de los moldes establecidos por el En la historia de la cultura,
:i idea movimiento anterior, el Neoclasicismo. se denomina movimiento
Se desarrolla en el marco político del liberalismo y está vinculado, en casi todos a la orientación que toma la
producción artística y cultural
), que los países, a movimientos de independencia nacional y de liberación política. La
de un período histórico.
n pai- idea del amor patriótico se manifiesta en el interés por la historia local y los elemen- Existen manifestaciones de un
1to de tos folclóricos y populares; se prefiere lo particular a lo universal y la búsqueda del movimiento en la filosofía, las
1de la ciencias, las artes, la política.
color local se relaciona con una valoración de lo nacional.
El movimiento literario (por
El movimiento romántico propone una cosmovisión sentimental: proclama la ejemplo, el Romanticismo) es
antos preeminencia de la sensibilidad sobre la razón, del genio sobre las reglas. El "yo" una tendencia que abarca las
a;S. El será el centro del mundo del creador y la idea de originalidad se vuelve clave en la características que aparecen
en la escritura de una época, en

3y sa-
actividad artística: no hay modelos; valen, en su lugar, la intuición y la inspiración.
Así, el escritor se cree un ser único, distinto del resto, incomprendido. Nace la
' iversos países y géneros. J
ya su imagen del artista bohemio como un sujeto excéntrico, sol itario, que sufre por
iel ca- amor, que lucha contra lo establecido y se aparta de los cánones burgueses. Esto
varias provoca otros rasgos característicos de la literatura romántica: la fuga hacia el pa-
•logra sado; el exotismo, visible en la predilección por personajes y lu-
ra con gares extraños; el interés por la naturaleza, como rechazo de la
;u pe- sociedad burguesa; la sobrevaloración del sentimiento amoroso.
erse a

El Romanticismo en el Río de la Plata


Entre 1830 y 1860, con la consolidación del Romanticismo en
nuestro país, se origina una literatura con perfil nacional. En ese
litera- origen, marcado por los acontecimientos políticos y sociales, se
º y lo- produce una literatura al servicio de las ideas y de las luchas de
2 dice. orden político que se desarrollaban en nuestro territorio. Es el pe-
10. Por ríodo de la anarquía, del enfrentamiento entre unitarios y federa-
fad, la les y de la vigencia de Rosas en el poder.
ros re- Esta tendencia del Romanticismo, llamada Romanticismo social,
La vuelta del malón, óleo sobre tela
no concibe la actividad literaria como una producción estética, del pintor argentino Angel Della
sino como un modo de pensar el país, de proponer una organización política e ins- Valle (1852-1903). La obra fue
:ilterar titucional y de ser un elemento fundamental en la formación de la opinión pública; exhibida al público en 1892.
•rolde por lo tanto, como una vía de exponer y difundir ideas, de tomar partido. En este
momento conflictivo, en el que la mayor parte de la producción literaria fue reali-
firmar zada en el exilio y en oposición al poder político que imperaba en Buenos Aires, los
ingún textos y los géneros estuvieron condicionados por estas preocupaciones.
EL ENSAYO
Los escritores románticos desplegaron una intensa actividad pública y la polí-
eptos, tica ocupaba un lugar primordial, en tanto que la ficción adquiría un interés menor, El ensayo es un tipo de texto
1ra,/el situación que se mantendrá hasta muy avanzado el siglo XIX. Por estas razones, el argumentativo, es decir que se
propone persuadir o influir en
ensayo se convierte en la práctica de escritura adecuada para plantear ideas y argu-
el receptor: el autor desarrolla
anas a mentar a favor de ellas. ideas y plantea una posición
En este período se destaca la obra de Echeverría, Juan Bautista Alberdi (autor sobre determinado tema (político,
1ura se
·e vida de las Bases), Juan María Gutiérrez, José Mármol (autor de la novela Amalia) y Do- ~rtístico, religioso, etcétera). J
mingo Faustino Sarmiento.

103
La generación de 1837

U na historia En 1837, encabezados por Esteban Echeverría, los jóvenes intelectuales que
del tiempo de Rosas compartían los ideales del movimiento libera l romántico comenzaron a reunirse en
Una dramática historia de amor, el Salón Literario, constituyendo lo que se conoce como generación de 1837. En la
basada en hechos reales, y una librería de Marcos Sastre se nucl earon hombres como Juan Bautista Alberdi y Juan
interesante reconstrucción del
María Gutiérrez, entre otros. Discutían sobre arte y política, compartían lecturas de
período histórico muestra la
película argentina Camí/a, de la los románticos europeos, como Goethe, Chateaubriand y Víctor Hugo, y daban a
directora María Luisa Bemberg. conocer sus propios escritos.
Los integrantes del Salón Literario buscaron difundir sus ideas e influir en la opi-
nión pública a través de periódicos. El 18 de noviembre de 1837 apareció La Moda,
una hoja semanal que tenía a Alberdi entre sus principales columnistas. Firmaba
sus notas con un seudónimo, Figarillo, en homenaje al escritor español José María
de Larra. Las notas dedicadas a la moda, al mobiliario o al baile buscaban instalar lo
novedoso y poner en circulación las ideas de los pensadores fran ceses, ya que los
hábitos arraigados obstaculizaban la reforma social y el progreso.
A partir de 1838, Rosas clausuró el Salón Literario y el clima de violencia política
hizo que sus miembros se exiliaran en Uruguay y Chile.
Los intelectuales de la generación del 37 no estaban enrolados en posturas uni-
tarias o federales; formulaban ideas que rescataran los principios de la Revolución
de Mayo, es decir, los ideales de libertad, democracia y, sobre todo, de independen-
cia cultural respecto de los modelos españoles. Después de la caída de Rosas, con
EL COSTUMBRISMO la batalla de Caseros en 1852, sus ideas y sus textos se convertirían en la base de la
organización institucional del país.
Representación de usos y En el ámbito de las letras, se proponían fundar una literatura nacional apartada
costumbres, lugares verdaderos y de los modelos españoles y defendían la libertad en el uso de la lengua aceptando
personajes típicos, como modo de
registrar lascaracterísticaspropias las variantes americanas.
de un medio y de una época, con La idea de literatura nacional es uno d e los enunciados t eóricos de la genera-
el fin de lograr color local. Es un ción de 1837 y del Rom anticismo social en la Argentina, una literatura ba sada en
rasgo notorio de la literatura del
' omanticismo y del Realismo. J la búsqueda del color local y que, segú n Juan M. Gutiérrez, "represente nuestras
costumbres y nuestra naturaleza''. Como un rasgo propio del costumbrismo en la
narrativa romántica y realista, el color local se manifiesta en describir costumbres
y paisajes del ámbito que se quiere mostrar y en emplear el lenguaje característico
del lugar.
La intención testimonial d e contenido social se observa tambi én en la litera-
tura gauchesca y en el desarrollo de la novela realista y naturalista hasta fin es del
siglo XIX.

OTROS RECORRIDOS DE LECTURA


• Dos obras de Juan Bautista Alberdi, interesantes desde el punto también en la poesía gauchesca: canto XIII del Santos Vega, de
de vista político, sociológico y literario. Un ensayo fundamental Hilario Ascasubi; cantos VII a X de la segunda parte del Martín
en la historia institucional del país: Bases y puntos de partida para Fierro, de José Hernández.
la organización política de la República Argentina. Una breve obra • Dos cuentos notables de Jorge Luis Borges reelaboran el tema
teatral, extraña y adelantada a su tiempo: El gigante Amapolas. del cautiverio con una mirada particular:"EI cautivo': del libro
• El tema de la mujer cautiva en poder de los indios aparece El hacedor, e"Historia del guerrero y de la cautiva" en EIAleph.

104 I Capítulo 5 Orígenes de la literatura argentina


Un violento relato de denuncia
Echeverría escribió El matadero, considerado el primer cuento de la literatura
argentina, hacia 1840. Fu e publicado mucho más tarde: por la intervención de
Juan María Gutiérrez, apareció por primera vez en la Revista del Río de la Plata en
·Juan ' 1871 y luego en las Obras completas en 1874.
·as de I
¡
Los primeros fragmentos que se reproducen describen el ámbito físico y social
ban a j en que se desarrolla la acción; luego, se transcribe la situación fina l del cuento que
! relata el ataque al joven unitario.
aopi-
-'
' •••
vi oda,
'
11aba ••
º El matadero
María
3lar lo
f
Je los
''
¡:
g [ ... ]
El matadero de la Convalecencia o del Alto, sito en las quintas del sur de
)lítica la ciudad, es una gran playa en forma rectangular, colocad a al extremo de dos
calles, una de las cuales allí se termina y la otra se prolonga hacia el este. E sta
s uni- playa con declive al sur, está cortada por un zanjón labrado por la corriente de
ución las aguas pluviales, en cuyos bordes laterales se muestran innumerables cuevas
1den- de ratones y cuyo cauce recoge en tiempo de lluvia toda la sangraza seca o
s, con reciente del matadero. En la junción del ángulo recto hacia el oeste está lo que
~de la llaman la casilla [ . . .J.
Estos corrales son en tiempo de invierno un verdadero lodazal, en el cual
rrtada los animales apeñuscados* se hunden hasta el encuentro* y quedan como pega- apeñuscado: amontonado.
tanda dos y casi sin movimiento. En la casilla se h ace la recaudación del impuesto encuentro: contacto de los cuartos
traseros.
de corrales, se cobran las multas por violación de reglamentos y se sienta el
chiripá: calzón amplio, característico
~nera- juez del matadero, personaje importante, caudillo de los carniceros y que ejerce del gaucho.
da en la suma del poder en aquella pequeña república por delegación del Restaura- rebullir: entrar en movimiento.
estras dor. Fácil es calcular qué clase de hombre se requiere para el desempeño d e
>en la semejante cargo. La casilla, por otra parte, es un edificio tan ruin y
nbres pequeño que nadie lo notaría en los corrales a no estar asociado
rístico su nombre al del terrible juez y a no resaltar sobre su blanca pin-
tura los siguientes letreros rojos: "Viva la Federación", "Viva el
litera- Restaurador y la heroína doña Encarnación Ezcurra", "Mue-
es del ran los salvajes unitarios" . [ .. .]
La perspectiva del matadero a la distancia era grotesca,
llena de animación. Cuarenta y nueve reses estaban tendidas
sobre sus cueros y cerca de doscientas personas hollaban aquel
suelo de lodo regado con la sangre de sus arterias. En torno de
cada res resaltaba un grupo de figuras humanas de tez y raza
distinta. La figura más prominente de cada grupo era el carni-
cero con el cuchillo en mano, brazo y pecho d esnudos, cabello
largo y revuelto, camisa y chiripá* y rostro embadurnado de
sangre. A sus espaldas se rebullían* caracoleando y siguiendo
na
los movimientos, una comparsa de muchachos, de negras y
mulatas achuradoras [ ... ].

105
Por un lado dos muchachos se adiestraban en el manejo del cuchillo tirán- clero,
dose horrendos tajos y reveses; por otro, cuatro, ya adolescentes, ventilaban a cuanc
cuchilladas el derecho a una tripa gorda y un mondongo que habían robado suyo1
a un carnicero; y no de ellos distante, porción de perros flacos ya de la forzosa A1
abstinencia, empleaban el mismo medio para saber quién se llevaría un hígado 5 llosli!
envuelto en barro. Simulacro en pequeño era este del modo bárbaro con que se a bus
ventilan en nuestro país las cuestiones y los derechos individuales y sociales. En f
l
les
fin, la escena que se representaba en el matadero era para vista, no para escrita.
Un animal había quedado en los corrales, de corta y ancha cerviz*, de mirar J
fiero, sobre cuyos órganos genitales no estaban conformes los pareceres porque
tenía apariencias de toro y de novillo. Llegole su hora. Dos enlazadores acaba-
llo penetraron en el corral en cuyo contorno hervía la chusma a pie, a caballo
y horquetada sobre sus ñudosos palos. Formaban en la puerta el más grotesco
y sobresaliente grupo varios pialadores* y enlazadores de a pie con el brazo
[...Jl
desnudo y armado del certero lazo, la cabeza cubierta con un pañuelo punzó y porl
chaleco y chiripá colorado, teniendo a sus espaldas varios jinetes y espectadores pecho
de ojo escrutador y anhelante.
El animal prendido ya al lazo por las astas, bramaba echando espuma furi- mata
bundo, y no había demonio que lo hiciera salir del pegajoso barro donde estaba
como clavado y era imposible pialarlo. Gritábanle, lo azuzaban en vano con las los s2
mantas y pañuelos los muchachos prendidos sobre las horquetas del corral, y L
era de oír la disonante batahola de silbidos, palmadas y voces tiples* y roncas no sa
que se desprendía de aquella singular orquesta. tortu
Los dicharachos, las exclamaciones chistosas y obscenas rodaban de boca en
boca y cada cual hacía alarde espontáneamente de su ingenio y de su agudeza
excitado por el espectáculo o picado por el aguijón de alguna lengua locuaz. E
[ ... ] en ce
La matanza estaba concluida a las doce, y la poca chusma que había pre- ban1
senciado hasta el fin, se retiraba en grupos de a pie y de a caballo, o tirando a la ojos
cincha alguna carretas cargadas de carne. eriza
Mas de repente la ronca voz de un carnicero gritó: viole
-¡Allí viene un unitario! -y al oír tan significativa palabra toda aquella
chusma se detuvo como herida de una impresión subitánea*.
-¿No le ven la patilla en forma de U? No trae divisa en el fraque ni luto en
el sombrero. en u:
- Perro unitario.[ ... ] estre
-¿A que no te le animas, Matasiete?
- ¿A qué no? u
-A que sí. Diol
Matasiete era hombre de pocas palabras y de mucha acción. Tratándose de pica:
violencia, de agilidad, de destreza en el hacha, el cuchillo o el caballo, no habla-
cerviz: parte dorsal del cuello.
ba y obraba. Lo habían picado: prendió la espuela a su caballo y se lanzó a brida
pialador: el que sujeta al animal con suelta* al encuentro del unitario.
el lazo. Era este un joven como de veinticinco años, de gallarda y bien apuesta per- higo
tiple: aguda.
sona, que mientras salían en borbotón de aquellas desaforadas bocas las anterio-
subitánea: súbita.
a brida suelta: al galope, a toda res exclamaciones trotaba hacia Barracas, muy ajeno de temer peligro alguno.
velocidad. Notando, empero, las significativas miradas de aquel grupo de dogos de mata-

106 j Capítulo 5 Orígenes de la literatura argentina


rán- clero, echa maquinalmente la diestra sobre las pistoleras de su silla inglesa,
•an a cuando una pechada al sesgo del caballo de Matasiete lo arroja de los lomos del
ndo suyo tendiéndolo a la distancia boca arriba y sin movimiento alguno. [ . .. ]
zosa Atolondrado todavía, el joven fue lanzando una mirada de fuego sobre aque-
:rado
::> s llos hombres feroces, hacia su caballo que permanecía inmóvil no muy distante
.ie se
;. En • §
l a buscar en sus pistolas el desagravio y la venganza. Matasiete dando un salto
le salió al encuentro y con fornido brazo asiéndolo de la corbata lo tendió en el
¡
:ita. j suelo tirando al mismo tiempo la daga de la cintura y llevándola a su garganta.
mrar ' í
•- [ ... ]
rque .'
'
• ,¡ ¡Qyé nobleza de alma! ¡Qyé bravura en los federales! Siempre en pandillas
aba- cayendo como buitres sobre la víctima inerte.
nllo
:esco
lI¡
!
-Degüéllalo, Matasiete: quiso sacar las pistolas. Degüéllalo como al toro.
[ ...]
l.
razo ¡' 'e -Probemos -dijo M atasiete, y empezó sonriendo a pasar el filo de su daga ·~· ;_:-'•. :
'¡: ... :-~ ~ ...
tzóy o por la garganta del caído, mientras con la rodilla izquierda le comprimía el
lores pecho y con la siniestra mano le sujetaba por los cabellos.
-No, no lo degüellen -exclamó de lejos la voz imponente del juez del
furi- matadero que se acercaba a caballo.
;taba -A la casilla con él, a la casilla. Preparen la mazorca* y las tijeras. ¡Mueran
nlas los salvajes unitarios! ¡Viva el Restaurador de las leyes! [ .. . ]
ral, y La sala de la casilla tenía en su centro una grande y fornida mesa de la cual
neas no salían los vasos de bebida y los naipes sino para dar lugar a las ejecuciones y ~r-~·. •.·
l .-__. _: '·c... ·~
.
torturas de los sayones* federales del matadero. [ . .. ]
:aen -Infames sayones, ¿qué intentan hacer de mí?
deza -¡Calma! -dijo sonriendo el juez-, no hay que encolerizarse. Ya lo verás.
:uaz. El joven, en efecto, estaba fuera de sí de cólera. Todo su cuerpo parecía estar
en convulsión. Su pálido y amoratado rostro, su voz, su labio trémulo, mostra-
pre- ban el movimiento convulsivo de su corazón, la agitación de sus nervios. Sus
>a la ojos de fuego parecían salirse de la órbita, su negro y lacio cabello se levantaba
erizado. Su cuello desnudo y la pechera de su camisa dejaban entrever el latido
violento de sus arterias y la respiración anhelante de sus pulmones.
.iella -¿Tiemblas?-le dijo el juez.
- D e rabia porque no puedo sofocarte entre mis brazos.[ ... ]
:o en Dos hombres le asieron, uno de la ligadura del brazo, otro de la cabeza y
en un minuto cortáronle la patilla que poblaba toda su barba por bajo, con risa
estrepitosa de sus espectadores.
-A ver-dijo el juez- , un vaso de agua para que se refresque. [ ... ]
Un negro petiso púsosele al punto delante con un vaso de agua en la mano.
Diole el joven un puntapié en el brazo y el vaso fue a estrellarse en el techo, sal-
;e de picando el asombrado rostro de los espectadores. mazorca: forma de castigo. Además,
1bla- -Este es incorregible. la Mazorca era el nombre de Ja
organización armada que apoyaba a
>rida -Ya lo domaremos. J. M. de Rosas.
- Silencio - dijo el juez-, ya estás afeitado a la federala, solo te falta el sayón: verdugo.
per- bigote. Cuidado con olvidarlo.Ahora vamos a cuentas. ¿Por qué no traes divisa*? divisa: señal distintiva. Se refiere a la
divisa punzó, usada por los partidarios
~rio- -Porque no quiero.
de Rosas.
;uno. - ¿No sabes que lo manda el Restaurador? librea: vestido o uniforme que
tata- - La librea* es para vosotros, esclavos, no para los hombres libres. usaban Jos criados.

107
-A los libres se les hace llevar a la fuerza. Lo~
- Sí, la fuerza y la violencia bestial. Esas son vuestras armas, infames. El
lobo, el tigre, la pantera también son fuertes como vosotros. Deberíais andar o
como ellos, en cuatro patas. [ .. .] El mi
- ¡Insolente! Te has embravecido mucho. T e haré cortar la lengua si chistas. .l' reali
verga: látigo.
taciturno: triste, apesadumbrado. Abajo los calzones a ese mentecato cajetilla y a nalga pelada denle verga*, bien tima
atado sobre la mesa. f
¡
está
Apenas articuló esto el juez, cuatro sayones salpicados de sangre suspendie- j rela
<
ron al joven y lo tendieron largo a largo sobre la mesa comprimiéndole todos •'~
intol
sus miembros. ' •
:
' cani1
-Primero degollarme que desnudarme; infame canalla. & ticisr
Atáronle un pañuelo a la boca y empezaron a tironear sus vestidos. Enco- 1
~• den
gíase el joven, pateaba, hacía rechinar los dientes. T omaban ora sus miembros § L
1!
la flexibilidad del junco, ora la dureza del fierro y su espina dorsal era el eje de .! ¡:~ ses E
un movimiento parecido al de la serpiente. Gotas de sudor fluían por su rostro, g
in te
grandes como perlas; echaban fuego sus pupilas, su boca espuma, y las venas de delc;
su cuello y frente negreaban en relieve sobre su blanco cutis como si estuvieran lueg
repletas de sangre. [ ... ] eldí;
En un momento liaron sus piernas en ángulo a los cuatro pies de la mesa, un lé
volcando su cuerpo boca abajo. Era preciso hacer igual operación con las manos, luga
para lo cual soltaron las ataduras que las comprimían en la espalda. Sintiéndo- E
las libres, el joven, por un movimiento brusco en el cual pareció agotarse toda polí1
su fuerza y vitalidad, se incorporó primero sobre sus brazos, después sobre sus y sar
rodillas y se desplomó al momento murmurando: la so
-Primero degollarme que desnudarme, infame canalla. rela1
Sus fuerzas se habían agotado. Inmediatamente quedó atado en cruz y sect
empezaron la obra de desnudarlo. Entonces un torrente de sangre brotó bor- case
bolloneando de la boca y las narices del joven, y extendiéndose empezó a caer a mur
chorros por entrambos lados de la mesa. L os sayones quedaron inmóviles y los el ca
espectadores estupefactos. E
- Reventó de rabia el salvaje unitario -dijo uno. [ . ..] gúrr
-Pobre diablo, queríamos únicamente divertirnos con él y tomó la cosa narr
demasiado a lo serio -exclamó el juez frunciendo el ceño de tigre- . Es preci- part
so dar parte; desátenlo y vamos. de e
Verificaron la orden; echaron llave a la puerta y en un momento se escurrió crip·
la chusma en pos del caballo del juez cabizbajo y taciturno*.
Los federales habían dado fin a una de sus innumerables proezas.
En aquel tiempo los carniceros degolladores del matadero eran los apóstoles
que propagaban a verga y puñal la Federación rosina, y no es difícil imaginarse
qué Federación saldría de sus cabezas y cuchillas. Llamaban ellos salvaje uni- 1. El
tario, conforme a la jerga inventada por el Restaurador, patrón de la cofradía, acci
a todo el que no era degollador, carnicero, ni salvaje, ni ladrón; a todo hombre siml
decente y de corazón bien puesto, a todo patriota ilustrado amigo de las luces y 2. c
de la libertad; y por el suceso anterior puede verse a las claras que el foco de la 3.¿C
Federación estaba en el matadero. 4.Bi
narr
Esteban Echeverría, La cautiva. El matadero, Buenos Aires, Kapelusz, 1972 {fragmento). s.E1
mat
Los compromisos de la ficción
:s. El
ndar De acuerdo con la práctica de escritura que exhibe
El matadero, la literatura es una forma de mostrar la
istas. 5 rea lidad social y de reflexionar sobre ella, de dar tes-
bien timonio y tomar partido. La actividad de l escritor no
f
idie-
.
í está separada de la activ idad política. El contenido del
relato, que denuncia la v io lencia, el autoritarismo y la
..~
¡; intolerancia, que cuestiona las instituciones y los me-
odos
cani smos de ejercicio del poder, participa del Roman-
~
o ticismo social y prefigura parte del desarrollo posterior
ii
nco- ó
• de nuestra literatura.
.bros La anécdota inicial de El matadero es la falta de re-
je de ses en el matadero de la Conva lecencia, debida a las
1stro, intensas lluvias. Se parte de una descripción minuciosa
lS de del ambiente físico y social como marco de la historia;
eran luego, en su desarrollo narrativo, el relato se centra en
el día que se reinicia el trabajo: un toro se escapa y huye,
1esa, un lazo le corta la cabeza a un niño, un unitario llega al
mos, lugar y es torturado y asesinado por los mazorqueros. El dibujante y guionista Enrique
1do- En el enfrentamiento entre unitarios y federales, la obra manifiesta una posición Breccia real izó una versión de El
toda política, clara y expresa, a favor de los unitarios; el matadero, un sitio sucio, violento matadero en historieta.
:! sus y sangriento, es el ámbito de los federales y, a su vez, un símbolo que representa a
la sociedad en su conjunto y exhibe fo rmas autoritarias de ejercicio del poder. Este
relato de denuncia plantea el conflicto político centra l de la época; la lucha ent re
UZ y sectores antagónicos, representados por el unitario y la gente del matadero en este
bor- caso, por los blancos y los indios en La cautiva, es también el enfrentamiento entre
ier a mundos y posiciones ideológicas en pugna: la civi lización y la barbarie, la ciudad y
y los el campo, el progreso y la tradición.
En cuanto al género, algunos estudiosos advierten características del texto ar-
gumentativo en El matadero y lo consideran un t exto de denuncia, si bien el ritmo
:osa narrativo y la impo rtancia que adquieren los episodios relatados en la segunda
:eci- parte lo acercan a la categoría de cuento. Otros críticos lo han visto como un cuadro
de costumbres, en función del interés significativo de su primera parte en la des- CUENTO
irrió cripción del matadero, su gente y sus comportamientos sociales.
Narración en prosa de hechos
ficticios. Más breve que la novela,
el cuento tiende a producir una
·oles "' ACTIVIDADES impresión rápida y de conjunto, a
arse través de una rigurosa estructura
narrativa centrada en los núcleos
.in1- 1. El título del cuento alude literalmente al espacio físico en el que tiene lugar la
tdía,
1bre
acción: el matadero. En función del relato y de la posición política del autor, ¿qué valor
simbólico adquiere ese título?
del relato, es decir, los sucesos
' entra les que arman la historia. J
:esy 2. Caractericen al unitario y a Matasiete.
le la 3. ¿Cuáles son los dos sectores enfrentados y cómo se manifiesta ese enfrentamiento?
4 . Busquen en el texto ejemplos de las distintas tramas q ue aparecen: descriptiva,
narrativa, conversacional, argumentativa. ¿Cuáles predominan y por qué?
nto). S. En los fragment os leídos, identifiquen los tramos descriptivos que caracterizan el
matadero. ¿Qué efecto se busca provocar en el lector con esa presentación?
Historias y personajes para la polémica Elrast
El rr.
Facundo o civilización y barbarie en las pampas argentinas, de Domingo F. Sar- gaucho:
miento es otro texto fu ndaciona l de la literatura argentina que plantea un punto de sendas·
vista personal, apasionado y controvertido, para ana lizar un período de la historia transita
nacional y proponer un modelo de país. mal,yd
Se reproduce a continuación el comienzo de la Introducción de la obra y un cargad
fragmento de " El rastreador'; del capítulo 2, titulado "Originalidad y caracteres camino
argentinos''. comod
muy bu
ensillad
Este
Facundo y hacía
estaba e
Introducción Pues es
DOM INGO ¡Sombra terrible de Facundo, voy a evocarte, para que, sacudiendo el ensan- de árrea
FAUSTI NO grentado polvo que cubre tus cenizas, te levantes a explicarnos la vida secreta El n
SARMIENTO
y las convulsiones internas que desgarran las entrañas de un noble pueblo! Tú fe en lo
(1811-1 888)
posees el secreto, ¡revélanoslo! Diez años aún después de tu trágica muerte, el dignida
Nació en San Juan y murió en hombre de las ciudades y el gaucho de los llanos argentinos, al tomar diversos porque
Asunción del Paraguay. Hombre senderos en el desierto, decían: "¡No!, ¡no ha muerto! ¡Vive aún! ¡Él vendrá!" que su 1
polémico y de intensa actividad
¡Cierto! Facundo no ha muerto; está vivo en las tradiciones populares, en la bien se
pública, fue maestro, militar,
periodista, escritor, senador, política y revoluciones argentinas; en Rosas, su heredero, su complemento: su algo pa:
diplomático y presidente de alma ha pasado a este otro molde más acabado, más perfecto; y lo que en él era rastro y
la Nación. Como presidente, solo instinto, iniciación, tendencia, convirtiose en Rosas en sistema, efecto y de relie·
estimuló el desarrollo de
la educación y creó varias fin. L a naturaleza campestre, colonial y bárbara, cambiase en esta metamor- atravies
instituciones educativas. Como fosis en arte, en sistema y en política regular, capaz de presentarse a la faz del dice frí:
escritor, su vasta producción mundo como el modo de ser de un pueblo encarnado en un hombre que ha resiste~
comprende cincuenta y dos
aspirado a tomar los aires de un genio que domina los acontecimientos, los
volúmenes y en ella se destacan:
Facundo, Recuerdos de provincia, hombres y las cosas.
Educación popular y Viajes. Facundo, provinciano, bárbaro, valiente, audaz, fue reemplazado por Rosas,
hijo de la culta Buenos Aires, sin serlo él; por Rosas, falso, corazón helado, espí-
ritu calculador, que hace el mal sin pasión y organiza lentamente el despotismo
con toda la inteligencia de un Maquiavelo. Tirano sin rival hoy en la tierra, ¿por
qué sus enemigos quieren disputarle el título de Grande que le prodigan sus cor-
tesanos? Sí, grande y muy grande es, para gloria y vergüenza de su patria, porque
si ha encontrado millares de seres degradados que se unzan* a su carro arras-
trado por encima de cadáveres, también se hallan a millares de almas generosas
que en quince años de lid* sangrienta no han desesperado de vencer al mons- 1. ¿Con
truo que nos propone el enigma de la organización política de la República. Un 2.En eli
día vendrá, al fin, que lo resuelvan, y la Esfinge Argentina, mitad mujer por lo sus sign
cobarde, mitad tigre por lo sanguinaria, morirá a sus plantas, dando a la Tebas ensangr
del Plata, el rango elevado que le toca entre las naciones del Nuevo Mundo. 3. ¿Qué
Necesítase, empero, para desatar este nudo que no ha podido cortar la espa- conteni1
da, estudiar prolijamente las vueltas y revueltas de los hilos que lo forman, y 4 . ¿Qué

uncir: atar o sujetar al yugo. buscar en los antecedentes nacionales, en la fisonomía del suelo, en las costum- 5. ¿Qué
lid: combate, lucha. bres y tradiciones populares, los puntos en que están pegados. 6.¿Enq
[ ... ]

11 O 1Capítulo 5 Orígenes de la literatura argentina


El rastreador
El más conspicuo* de todos, el más extraordinario, es el rastreador.Todos los
. Sar- gauchos del interior son rastreadores. En llanuras tan dilatadas, en donde las
to de sendas y caminos se cruzan en todas direcciones, y los campos en que pacen o
.toria transitan las bestias son abiertos, es preciso saber seguir las huellas de un ani-
, 'f mal, y distinguirlas de entre mil, conocer si va despacio o ligero, suelto o tirado,
y un
te res
.
§
¡

J
cargado o de vacío: esta es una ciencia casera y popular. Una vez caía yo de un
camino de encrucijada al de Buenos Aires, y el peón que me conducía echó,
t como de costumbre, la vista al suelo: ''Aquí va - dijo luego- una mulita mora
-• muy buena ... ; esta es la tropa de don N . Zapata ... , es de muy buena silla .. ., va
•'t
ensillada ... , ha p asado ayer... ".
.'
o
ii
ó E ste hombre venía de la Sierra de San Luis, la tropa volvía de Buenos Aires,
y hacía un año que él había visto por última vez la mulita mora, cuyo rastro
~ estaba confundido con el de toda una tropa en un sendero de dos pies de ancho.
' ;o
1 Pues esto, que p arece increíble, es, con todo, la ciencia vulgar, este era un peón
san- de árrea* y no un rastreador de profesión.
:reta El rastreador es un p erson aje grave, circunspecto*, cuyas aseveraciones hacen
conspicuo: insigne, destacado.
>!Tú fe en los tribunales inferiores. La conciencia del saber que posee le d a cierta á rrea: arreo: acción y efecto de arrear
te, el dignidad reservada y misteriosa. Todos le tratan con consideración: el pobre, a los animales (estimular a las bestias
:rsos porque puede hacerle mal, calumniándolo o denunciándolo; el propietario por- para que echen a andar o aviven el
:ira., I" paso).
que su testimonio puede fallarle. Un robo se ha ejecutado durante la noche: no
ci rcunspecto: prudente, cuidadoso.
:n la bien se nota, corren a buscar una pisada del ladrón, y encontrada, se cubre con
:>: su algo para que el viento no la disipe. Se llama en seguida al rastreador, que ve el
1 era rastro y lo sigue sin mirar sino de tarde en tarde, el suelo, como si sus oj os vieran
:to y de relieve esta pisada, que para otro es imperceptible. Sigue el curso de las calles,
nor- atraviesa los huertos, entra en una casa y, señalando un h ombre que encuentra,
Para obtener información
~del dice fríamente: "¡Este es!". El delito está probado, y raro es el delincuente que sobre Sarmiento y otros
e ha resiste a esta acusación . escritores argentinos, como
, los Borges, Sábato, Cortázar,
pueden consultar:
D om ingo F. Sarmiento, Facundo,
http.//www.autoresdea rgentina.
Jsas, Buenos Aires, Centro Editor de América L atina, 1979 (fragmento). com y http://www.taringa.net
:spí-
smo
¿por
cor-
:que
Tas- ,L ACTIVIDADES
osas
)nS- 1. ¿Con qué fina lidad se invoca a la sombra de Facundo al comienzo?
.Un 2. En el inicio de la Introducción, varias palabras se asocian por rasgos comunes de
>rlo sus significados, es decir, arman un determinado campo semántico: sombra, terrible,
~bas ensangrentado, cenizas, convulsiones, desgarran. Busquen otros ejemplos en el texto.
3. ¿Qué campo de significado establecen esas palabras? O sea: ¿con qué ideas o
>pa- contenidos se vinculan?
.n, y 4. ¿Qué relaciones entre Facundo y Rosas plantea el texto de la Introducción?
lm- 5. ¿Qué funciones sociales cumple el rastreador?
6. ¿En qué consiste su sabiduría y cuál es la importancia que se le otorga en el texto?

111
¿Ensayo, ficción o panfleto? Cu
El Facundo fue publicado en 1845 en Santiago de Chile, donde Sarmiento se L~
encontraba exiliado desde 1840. Apareció como folletín en el diario El Progreso, con ria d
el título de Civilización y barbarie: vida de Juan Facundo Quiroga. En la cuarta edi- defi
ción (París, 1874), el autor invierte los términos y propone otro título, Facundo o ci-
vilización y barbarie, quizá por la importancia otorgada a la biografía del personaje
'f com
Er
¡
romántico.
Dos propósitos centrales motivaron la escritura de la obra: desprestigiar a la fi- i

de r
Gui
gura de Rosas y a la embajada diplomática enviada a Chile para que se suprimiera
el asilo concedido a Sarmiento, y fundamentar en el terreno sociológico e histórico
la causa de los emigrados argentinos opositores a Rosa s. sacie
A partir del estudio de la figura de Facundo, Sarmiento se propuso explicar los
problemas que aquejaban la realidad nacional; en su análisis examina las causas de
orden geográfico, histórico y social que provocan esos males. La
Los quince capítulos del texto pueden agruparse a partir de tres grandes ejes:
el aspecto físico general de la Argentina y la sociedad que ese ambiente genera; la y
vida de Juan Facundo Quiroga; el gobierno unitario, donde Sarmiento expone su idea
Durante el siglo XIX era frecuente ideario político y su propuesta de país. COil '
la publicación de caricaturas en Algunos críticos sostienen que el Facundo es el primer ensayo sociológico de la F
diarios y revistas para ridiculizar cultura argentina, en función de los aportes realizados por Sarmiento en esa direc- los e
al oponente. Sarmiento fue
ción. Así, por ejemplo, el capítulo 2, "Originalidad y caracteres argentinos'; describe Mar
un personaje habitual de esas
viñ etas. Aquí se lo ve en El
con evidente interés y cierta admiración los personajes típicos que la vida rural ge- \
Mosquito, periódico semanal que nera: el rastreador, el baqueano, el gaucho malo y el cantor. Según sus palabras: lo e~
se autodefinía como satírico- "Del centro de estas costumbres y gustos generales se levantan especialidades no- la q1
burlesco. Apareció por primera vez tables. [. .. ] Yo quiero solo notar aquí algunas que servirán a completar la idea de las todc
el 24 de mayo de 1863. costumbres''. I
El esquema básico del libro parte de la oposición civilización-barbarie, dicoto- -le
mía que se revela en otros contrastes a lo largo de la obra: modernidad-tradición, corr
ciudad-campaña, Buenos Aires-interior. La civilización se manifiesta mediante Eu- 1
ropa, Norteamérica, las ciudades, los unitarios; la barbarie se identifica con América rios-
Latina, España, el campo, los federales, Facundo y Rosa s. Según algunos historia- mi F
dores, Facundo dio forma así a una polémica que comenzó en el período colonial y lasv~
continúa hasta el presente. fren1
tod
pre<
un g
la ne
vafü
mo~

beb•
OTROS RECORRIDOS DE LECTURA Car
•En una familia rosista de clase acomodada y con el El ejército de ceniza, de José Pablo Feinmann, y Elfarmer, de Andrés con
enfrentamiento entre unitarios y federales como marco, la obra Rivera. deci
teatral La malasangre, de Griselda Gambaro, se centra en una •¿Una escuela en el matadero? Punto de partida de un interesante
corr
conflictiva relación amorosa. cuento de Roberto Fontanarrosa:"Maestras argentinas. Clara
•Se sugiere la lectura de tres novelas valiosas de escritores Dezcurra': del libro La mesa de Jos galanes.
argentinos: Los cautivos. El exilio de Echeverrfa, de Martín Kohan; má~

112 j Capítulo 5 Orígenes de la literatura argentina


Cuando termina la función ...
·o se Los escritores que comienzan a pu blicar alrededor del año 1955 toman la histo-
con ria del país como fuente de temas; además, sus procedimientos narrativos podrían
edi- defin irse como una nueva forma de realismo, con influencia de otros lenguajes,
o ci- como el cinematográfico y el periodístico.
naje En "La representación'; desde la mirada de un personaje femenino y en un juego
de referencias a unitarios, cautivas y tiempos pasados que fueron mejores, Beatriz
la fi- Guido relata una historia ambigua donde la v io lencia y la crueldad aparecen casi
1iera como inocentes. En este cuento, la oposición entre ciudad y campo, entre esplen-
>rico dor y decadencia, entre presente y pasado, se vincula con un conflicto de clases
sociales en el ámbito de una famil ia venida a menos.
r los
1sde
La representación
:jes:
·a; la Yo los llevaba a La Cautiva en Pacheco. Nada les conformaba tanto como la
e su idea de "ir a la pampa", como si esa palabra significara una estación de provincia BEATRIZ GUIDO
(1922-1988)
con un cartel preciso: algún lugar de esta tierra donde h abía que descender.
:Jela Para mí significaba desentenderme de "ellos". Yo llegaba a La Cautiva y se
irec- los entregaba a Lucas, mi padre; también a su padre y a mi hermana María Escritora argentina, nacida
:ribe Martha; pero sobre todo, a los mellizos. en Rosario. Formó parte
de la generación del SS. Su
1ge- Vivían en La Cautiva todo el año. No hubiera podido ser de otra manera; así producción está muy ligada al
xas: lo establecimos para poder conservarla. Vendimos la casa de la calle Suipacha, desarrollo del cine argentino:
; no- la quinta en Los Troncos. Todo eso estaba bien, pero no La Cautiva. Ella era varias de sus novelas se
convirtieron en películas, y tuvo
e las todos nosotros y cada uno de nosotros también.
una reconocida labor como
El general. Roca le regaló la tierra a mi abuelo: "hasta que aguante el caballo" guionista cinematográfica. Entre
oto- - le ordenó-, y el casco* lo edificó Chaperouche. En ella Echeverría escribió o sus novelas se destacan: La casa
:ión, corrigió "La cautiva". L e dejó su nombre y algunos originales. del óngel, Fin de fiesta, La mano
en la trampa, El incendio y las
? Eu - También decían que los pasillos y escondrijos de la torre -refugio de unita-
vísperas.
~rica rios- encerraban endemoniados y las almas asesinadas de nuestra familia. Lucas,
Jria- mi padre, aseguraba que los espantapájaros, los hombrecitos huecos que cuidaban
1ial y las viñas, el parque, los naranjos y también el jardín, eran nuestros ángeles custodios
frente al mal, que nos perseguía implacable en las dos últimas generaciones. Y sobre
todo, a los muchachos, a los payos*, a los mellizos, como los llamaban: al borde siem- casco: espacio que ocupan las
pre de asesinar despiadadamente a un gorrión, quemar un sapo, abrir las entrañas de edificaciones principales de una
estancia.
un gato y arrojarse luego arrepentidos al suelo, en busca de mi perdón. Asistir toda payo: hombre de campo, paisano.
la noche al nacimiento de un potrilla para meses después hacerlo saltar, exhausto,
vallas de fuego. Preocuparse por los insomnios de mi padre y luego, durante el día,
mostrarle el aviso de publicidad donde él aparecía diciendo: "También nosotros
bebemos American Dry", o "La sociedad argentina también bebe Yatasto Drink".
Canturreaban hasta enloquecerlo. Escribían sus nombres en las paredes del casco,
rés con lazos y raíces móviles. Mi hermana nada podía h acer por ellos. Sin embargo,
decía que el aire de La Cautiva los había mejorado. Eso fue antes de que dieran de
nte
comer a los galgos vidrio molido para luego cuidarlos durante días y noches.
Lucas, mi padre, festejaba todos sus gestos, sus actos. Era su colaborador
más próximo. Recuerdo que a mi madre, mientras vivía, la obligaba a vestirse
de gala para el Colón; llegar a la puerta del teatro y cambiar su itinerario por los

113
bailes del Rosedal o del Babilonia, y después llevarla a tomar un helado en la Sin1
confitería El Vesubio de la calle Corrientes, que ella tanto odiaba. pró.x
Pero cuando decidimos eso de la representación -quizá no lo decidimos,
se les ocurrió a ellos, a los mellizos- las cosas parecieron mejorar, porque se ~ F
pagaron los impuestos y se hicieron los arreglos necesarios en La Cautiva, que de si
5
era algo así como recetarnos una larga cura para nuestros cuerpos.
!
g
hud
Yo comencé acompañando a una delegación de norteamericanos a la estancia E Los
~
La Armonía. Después las cosas vinieron solas: fueron los mellizos quienes dije- j más
ron, quienes propusieron que los llevara a La Cautiva. Hasta María Martha pareció o'
-• ron
interesarse. Yo comencé por llevar de visita a dos o tres norteamericanos. Después,
los mellizos y mi padre se organizaron; es decir, decidieron representar, cada domin- .
~
o
la n
mar
go, una yerra*, improvisar partidos de pato*, carreras de sortija, carreras cuadreras*: ~

los mellizos marcaban al mismo caballo todos los domingos entre risas y carcajadas. ~ ello,
!
Desde la terraza del primer piso mi padre repetía la frase del general y decía: ~ hue1
~
-La Cautiva llega hasta donde "revienta" un caballo, hasta su último suspiro. g p
El alambrado solo llegaba hasta las viñas. lom
D espués terminé llevando a uno solo, no siempre al mismo, por supuesto.
Cuando les entregaba el dinero por la representación, repetían: F
-Volveremos a tener todo lo nuestro. C orreremos el alambrado. Los melli- I
zos podrán viajar. .. educarse. se le
Ellos reían y reían. Pero solo ellos me preguntaban: sóta
"La representación" -¿Con cuál de los que traés te vas a casar?
yelcine Acariciaba su frente. Les agradecía que asociaran la palabra "casamiento"
El cuento de Beatriz Guido tuvo con alguno de esos efímeros visitantes de mi vida. te . ..
una versión cinematográfica en Fue una tarde de noviembre. Ellos quisieron servirle el té al convidado, en las
1963. La película, titulada Paula
cautiva, con guión de Beatriz
terrazas de las begonias, frente al huerto de los naranjos. El olor a azahares me hizo Ync
Guido y del director, fue dirigida sentir muy lejos, muy lejos de mi departamento de la calle Rodríguez Peña. Un
por Fernando Aya la y obtuvo departamento con un solo ambiente y una terraza sobre los jardines de Duhau. No
el Cóndor de Plata como mejor
m e importaban las horas que vendrían; no me importaba la incomunicable presen-
película de 1964.
cia del visitante de hoy ni tampoco el regreso, la ardua comida en mi departamento
o en ''A.u bec fin". Las consabidas preguntas por su mujer y sus hijos, sorprenderme
ante el nacimiento de ciudades como Nueva México, o Salt Lake City, o Amarillo ... I
Pero la representación había comenzado ya. Los mellizos aparecieron con el mis- VlVO
mo caballo de todos los domingos, y anunciaron yerra y doma para el atardecer.María
Martha, seguida de Nana, trajo la bandeja de "scons'', y esperé a que repitiera: Scons
y té de Blakestone, como en su casa, seguramente. "No solo comemos carne los argenti-
nos". Mi padre apareció vistiendo el mismo saco de tweed* inglés de una propaganda; algu
yerra : acción de marcar con hierro el también con el vaso de whisky en una mano; también con su consabida sonrisa.
ganado para identificarlo. U no de los mellizos pasó galopando furiosamente y, haciéndome un guiño, dijo: hoy
pato: juego de a caballo en el que dos -Mira qué lindos están los espantapájaros ... I
equipos se disputan una pelota con
manijas (el pato).
Expliqué en inglés al visitante lo que quería decir "espantapájaros". L o vi son- tení
carrera cuadrera: competencia de reír, dirigir su mirada hacia el huerto de los naranjos, ensombrecérsele el rostro, mal.
gauchos en la que mostraban sus entornar los ojos y decirme: unl
habilidades como jinetes. - He seems alive ... * )
tweed: tipo de tejido resistente
hecho con lana. No quise levantar los ojos, como si deseara postergar el reconocimiento ... el c~
He seems ali ve: en inglés: Parece Pero me obligué a levantarlos. horr
vivo. Nada anormal tenían esa tarde los espantapájaros, nuestros ángeles custodios. I

114 I Capítulo 5 Orígenes de la literatura argentina


la Sin embargo, no pude apartar la mirada de uno de ellos, el más cercano, el más
próximo. Y él, el visitante, adivinándome, propuso:
JS, - Te molesta; parecen hombres crucificados.
se Recordé la historia de los unitarios de Lezama y Mármol, escondidos dentro
ue de sus cuerpos huecos durante dos días, mientras acamparon en La Cautiva las
huestes de Rosas. Y comenzó la representación. Todo sucedió como siempre.
::ia
f
o
Los mellizos y sus hombres demostraron coraje, intrepidez y alegría. Sí, estaban ha ras: sitio destinado a la cría de
-e- l
f i.
l más alegres que nunca y eso me preocupaba. María Martha y mi padre mostra- caballos.
:ió d ron la capilla, el haras* desierto, bajo pretexto de caballos en pastoreo, y también
és, .' •( la negra hacienda del campo vecino, cuyo alambrado, disimulado con arbustos,
1i
n- marcaba la división de nuestras tierras.
s*: 1~ Pero yo no me atrevía a regresar por el camino de las begonias. Sin embargo,
as. lj ellos, los mellizos, dirigieron el jeep, como si nos arriaran, hasta las arcadas del
l • huerto, junto a los espantapájaros.
ro.
É
•o~ Pasamos a su lado; sí, pasamos a su lado y quizá rocé su mano. Los mellizos
lo miraban a él y a mí sucesivamente, con una imperceptible ironía en los labios.
-De cera, parece de cera este monigote -traduje de él.
Rocé su mano y me enfrenté con la cavidad ya vacía de sus ojos.
li- Los mellizos apuraron el paso ... Arrastré al visitante al interior de la casa y
se lo entregué a mi padre. Liberada de él, corrí a buscarlos. Los encontré en el ~ ACTIVIDADES
sótano de las armas ...
-¿Qyé le hicieron? ¿Qyé le hicieron?-los enfrenté. 1. ¿En qué consi ste la
:o" -Y. .. murió esta mañana el pobre. ¡<2!.1é querés! ... Vos venías con el visitan- representación y cuál es
te ... ¿Qyerías que te dejáramos sin representación? su fina lidad?
.as - Después de todo él decía que los unitarios se quedaron así un día entero. 2. Expliquen y comenten este
zo Y no estaban muertos los pobrecitos. fragmento: "La representación
Jn - ¿Acaso no lo vestía él mismo a su angelito? había terminado y no
~o -¿Lo sabe tu madre ... y papá?-grité. demasiado mal. A é l, a mi
n- -Ya lo sabrán. ¿Para qué preocupados? abuelo, le gustaban los
.to -Cuando se vaya el gringo. espantapájaros, y es mejor
ne -Lo difícil fue vestirlo. ser velado en un hu eco de
Los dejé allí, en el sótano, arreglando sus armas de perdigones, para cazarlos azahares que en la húmeda y
is- vivos, como decían, y asarlos después. tétrica sala de La Cautiva''.
ría De regreso yo tomé el volante y apreté el acelerador. 3. Si se toma representar como
•ns - Si querés morir, yo no tengo inconveniente a tu lado. "simular': "fingir': ¿qué otros
ti- -Tendrías que perdonarme. No me siento bien esta noche. Puedo buscarte significados adqu iere el título
la; alguien que me reemplace. del cuento?
-Yo también estoy muy cansado ... ; pero dejame descansar a tu lado, por 4 . Caractericen a los mellizos y
jo: hoy-creí entender. a la protagonista.
E staba demasiado triste para alegrarme por sus palabras. Sin embargo, quizá S. La voz del narrador es una
n- tenían razón los mellizos. La representación había terminado y no demasiado primera persona, la de un
:o, mal. A él, a mi abuelo, le gustaban los espantapájaros, y es mejor ser velado en personaje central de la historia.
un hueco de azahares que en la húmeda y tétrica sala de La Cautiva. Busquen marcas en el texto
Y tampoco era demasiado lejano el visitante; tenía unas manos hermosas y que lo indiquen y comenten
el cabello lacio le cubría la frente. Además, no lo dudo, había adivinado que el qué caracte rísticas le otorga
hombre del hueco era alguien de mi casa, y no le importaba demasiado. al relato el uso de la primera
)S. Eso está bien, después de todo. persona.

Beatriz Guido, "La representación", en Piedra libre, Buenos Aires, Garlerna, 1976.

115
SIGUIENDO LOS PASOS PERDIDOS hor
tira
Del rastreador al hombre de ciencia el t
llar
dor
Hombres y mujeres, cuando vivían de la caza, aprend ieron a reconocer los movimientos de sus
presas a través de huellas, vestigios e indicios. Así adquirieron la capacidad de ejecutar complejas las
ani
operaciones mentales en pocos segundos. Y quizás esa característica de aquellos "primitivos" pe
continúa de algú n extraño modo en el científico: algunos grandes detectives de la ciencia (Fleming, ala
Roentgen) procedieron como expertos rastreadores ante evidencias ambiguas que otros hubieran má
ignorado. El escritor Pablo Capanna se dedica a seguirles el rastro a quienes persiguen huellas [...)
- desde Sarmiento a Sherlock Holmes- , esos precursores, sin laboratorio, de los científicos, que
quedaron olvidados en el tiempo, casi como injustas piezas de museo. El

e uando Sarmiento se puso a


escribir Facundo, ignoraba
que ese libro que alguna vez
él mismo calificó de panfleto* sería
recordado más por el poderoso es-
observación atenta de la naturaleza
y de los hombres, que le permite ob-
tener resultados asombrosos. [...] Su
enorme capacidad de observación,
su memoria y la lógica con la cual in-
co nj etura'~ racional es u na apuesta
que hace el científico para explicar
los fenómenos observados, el detec-
tive "científico" procede del mismo
modo para inferir quién puede ser el
len
es¡:
sel
ina
cor
tilo con el cual esbozaba la primera fiere hechos a partir de indicios mí- asesino a partir de algunos indicios cor
sociología criolla que por su diatriba nimos lo destacan como una suerte que escapan a la observación del co- tífi
contra Quiroga. [...) de sabio rústico. Calíbar es capaz de mún de la gente.
Puesto a describir el marco físico seguir las pisadas de un ladrón hasta Hay un largo camino que va de
y social de la Argentina con su despo- señalarlo con su dedo acusador[...]. las pisadas de Calíbar a las huellas
blado territorio, Sarmiento pintaba Su talento inspira un temor supers- dactilares, que en definitiva son una
con truculencia el atraso y el despo- ticioso entre los paisanos, y el propio suerte de pisadas. Fue J. E. Purkyne
tismo de la "barbarie", aunque tam- Sarmiento se anima a la efusión re- quien descubrió, en 1923, que el di-
poco parecía confiar demasiado en tórica, exclamando: "¿Qué misterio seño de las huellas digitales es dis-
los ilustrados unitarios, cuya cabeza es este del rastreador? ¿Qué poder tinto en cada persona. Otro rastrea-
andaba perdida por París y Londres. microscópico se desenvuelve en el dor-científico como Galton concibió 1. El te
Las cosas no parecen haber cambiado órgano de la vista de estos hombres? un sistema de identificación basado
ot ras~
mucho desde entonces. [...] ¡Cuán sublime criatura es la que en ellas. [...]
Cuando Sarmiento esquematiza Dios hizo a su imagen y semejanza!". Siguiendo esta analogía'\ el his- 2. ¿Co
algunas figuras típicas de esa cultura toriador italiano Carlo Ginzburg ha 3.¿Po
pastoril que engendró a Quiroga y Rastreadores, detectives y relacionado las conjeturas del crítico 4. Bus
Rosas, parece dejar de lado los prejui- científicos de arte Giovanni Morelli, quien en
cios ideológicos, y por momentos no 1870 había desarrollado un método y qué
¿Quiénes fueron los primeros
puede ocultar su admiración. científicos? Sanadores, curanderos y para detectar falsificaciones, con 5.Rel
Las figuras sarmientinas (el ras- hechiceros parecen ser los candida- las de Sherlock Holmes y Sigmund a. ¿Cu
treador, el baqueano, el gaucho malo tos naturales a ganarse ese lugar, en Freud. Todos ellos fueron una suerte b. Exp
y el payador) representan algunas la medida que encarnan la primitiva de rastreadores modernos. [...]
dimensiones básicas de toda una cul- Las pistas de Holmes, los sínto- cientí1
acumulación de saber empírico* en
tura, desde la ciencia hasta la poesía. el mundo prehistórico. [...] mas de Freud y los tics de estilo de 6. Se c
(...] Según el antropólogo Louis Li- Morelli no son, en el fondo, otras co- signifi
benberg, que estudió a los poblado- sas que huellas que saben seguir los
ovalo
Calíbar y colegas res del Kalahari, habría que buscar rastreadores modernos.
Al evocarlos, el sanjuanino no el disc
el origen del pensamiento científico
vacila en reconocer en el rastreador y entre los rastreadores, los calíbares Penicllllum notatum procec
el baqueano los rasgos de cierta "sa- de la prehistoria. En 1928, Alexander Fleming es- ignore
biduría" y hasta parece sustraerlos al Puesto que tanto en la ciencia taba tratando de controlar la gripe
a .¿QL
marco denigratorio de la "barbarie". como en los tribunales lo que en de- desde el laboratorio del hospital
[...] finitiva cuenta son las pruebas, se ha donde trabajaba. Algún asistente "Cuar
Calíbar, el ra streador de Sar- hecho habitual comparar al cientí- le alcanzó unos cultivos que se ha- él mis
miento, posee un saber basado en la fico con el detective. (...] Así como la bían estropeado por la acción de los esbo2
b.Bu!
panfleto: texto generalmente breve
hongos y le pidió autorización para Pero si bien el azar y la creatividad
usado como vehículo de propaganda
tirarlos a la basura. Fleming se tomó son factores ineludibles para explicar
política o de ideas de cualquier clase.
el trabajo de averiguar el porqué. Le algunos descubrimientos, lo que no
saber empírico: el que se basa en la
llamó la atención que en los lugares se suele decir es que estos solo pueden
experiencia directa y en una práctica
donde se había desarrollado el moho darse cuando existe una mente expe-
determinada; en tanto ocasional
las bacterias del cultivo habían sido rimentada y entrenada en el oficio de
y no sistemático, se diferencia del
aniquiladas. Acababa de descubrir la investigar. [... ]
conocimiento científico.
penicilina, el primer antibiótico que Pero estos modernos descendien-
conjetura:juicio que se forma
alargó nuestras expectativas de vida tes del arcaico cazador tenían curiosi-
de una cosa o acontecimiento por
más de lo que ya había hecho Pasteur. dad, atención, concentración y expe-
las señales o indicios que de él se
[... ] riencia. Habían desarrollado la habili-
tienen; suposición, conocimiento no
dad de hacer inducciones*, analogías
comprobado.
El oficio del investigador y conjeturas. Cazaban microbios,
analogía: semejanza de una cosa con
Estas conocidas historias se sue- partículas, radiaciones, fósiles o leyes
otra, similitud de unos caracteres o
len contar de dos maneras opuestas, con los mismos recursos básicos que
funciones con otros.
especialmente a nivel escolar. A veces habían nacido con el oficio del ba-
inducción: tipo de razonamiento
se las presenta como destellos de genio queano o el rastreador de antaño.
que va de lo particular a lo universal;
inaccesibles al hombre común, y otras generalización a partir de ciertos
como impredecibles golpes de suerte, fenómenos o datos.
con lo cual se convierte el trabajo cien- Pablo Capanna
tífico en una lotería.
Fuente: Nota publicada en el Suplemento "Futuro" de Página/12.
Buenos Aires, 3 de mayo de 2002 (fragmento).

Í~ ACTIVIDADES

5 1. El texto de Capan na parte de una referencia literaria para establecer vínculos con
J
otras producciones de la cultura. ¿Cuál es esa referencia?
2. ¿Con qué otras manifestaciones culturales se la relaciona? ¿Por qué?
;¡ 3. ¿Por qué el autor analiza y revaloriza la figura del rastreador?
)
4. Busquen información acerca de quiénes fueron Roentgen, Fleming, Pasteur y Freud,
1
) y qué aportes realizaron al conocimiento científico.
l S. Relean el copete y el apartado "EI oficio del investigador" y respondan.
i a. ¿Cuál es la hipótesis que enuncia Capanna? ¿Cómo la demuestra?
b. Expliquen cuáles son las conexiones establecidas entre rastreadores, detectives y
científicos.
6. Se denomina subj etivernas a las palabras o construcciones que poseen una
significación subjetiva y manifiestan, por ende, una posición del enunciador (afectiva
o valorativa). Su empleo es frecuente en la lengua coloquial, el discurso literario y
el discurso argumentativo. Por ejemplo: ... algunos grandes detectives de la ciencia
procedieron como expertos rastreadores ante evidencias ambiguas que otros hubieran
ignorado.
a. ¿Qué significado tienen los subjetivemas destacados en el siguiente fragmento?
"Cuando Sarmiento se puso a escribir Facundo, ignoraba que ese libro que alguna vez
él mismo calificó de panfleto sería recordado más por el poderoso estilo con el cual
esbozaba la primera sociología criolla que por su diatriba contra Quiroga".
b. Busquen otros ejemplos en el texto de la nota y analicen sus significados.
1. En la edición de 1837, Echeverría escribe una Advertencia para presentar su obra ~ Ten
La cautiva. Lean el fragmento, coméntenlo y resuelvan las actividades que siguen. • Vi

El principal designio del autor de L a cautiva ha sido pintar algunos ras-


't
!
con
• P;
1
gos de la fisonomía poética del desierto; y, para no reducir su obra a una ~ tint
mera descripción, ha colocado, en las vastas soledades de la pampa, dos seres 1
, • El
ideales, o dos almas unidas por el doble vínculo del amor y el infortunio.
'• pes
El suceso que poetiza, si no cierto, al menos entra en lo posible; y como 1 seg
a guisa de: a modo de, como. no es del poeta contar menuda y circunstancialmente a guisa de* cronista ; • V
lance: hecho, situación.
ornato: adorno, decorado.
o novelador, ha escogido solo, para formar su cuadro, aquellos lances* que
pudieran suministrar más colores locales al pincel de la poesía; o más bien,
l la c

~
ma
ha esparcido en torno de las dos figuras que lo componen algunos de los más g

peculiares ornatos* de la naturaleza que las rodea. 3. J


an
a. Con ayuda del diccionario, propongan sinónimos para reemplazar los términos en
que siguen, según el significado que tienen en el texto: designio, fisonomía, mera, ese
vastas, infortunio, peculiares. qui
b. ¿Qué rasgos del Romanti cismo apa recen formu lados en el texto?
c. Expliquen qué ideas sobre la literatu ra manifiestan estos enunciados:
• "El suceso que poetiza, si no cierto, al m enos entra en lo posible ..."
• "... no es del poeta contar menuda y circunstancialmente a guisa de cronista o
novelador..."
d. ¿Qué significado adquieren estos conceptos en boca de Echeverría? Den ejem-
plos a partir de los fragmentos leídos del canto 1:
• "la fisonomía poética del desierto"
• "suministrar más colores locales al pincel de la poesía"

2. Lean El matadero completo y resuelvan las consignas que siguen.


a. Busquen más información sobre el período de la anarquía y el enfrentamiento a.
unitarios-federa les. es1
b. En pequeños grupos intercambien ideas sobre la obra a partir de la propuesta de b.
temas que aparece en la página siguient e. c. I
c. Luego elijan uno de los íte ms (las preguntas van solo como una posible g uía) y pi<
escriban, individualmente, un texto sobre el tema elegido. •<
d. En el trabajo escrito d esarrollen una posición personal a partir del análisis de la
obra y de la información obtenida; fundamenten sus opiniones y ejemplifiquen
con citas textuales. e (

e. Antes de escribir la versión definitiva, revisen y corrijan su trabajo teniendo en


cuenta: la claridad y precisión de datos y argumentos; la coherencia en el desarrollo
concept ual y en la construcción del escrito; la selección del vocabulario; los aspec-
tos normativos (ortografía, puntuación). d.
re
e.
m
gl
es
J obra 2 Temas
~
uen. j •Vigencia del texto. (¿Interesa hoy?, ¿significa algo para nosotros?, ¿habla solo a sus
i contemporáneos?)
5 r as- I1 •Pa rtidismos y rencores. (Los otros, los que vive n de ot ro modo, piensan y actúan dis-
tuna
i
~
t into, ¿quiénes son?, ¿son peligrosos?, ¿son los enemigos?)
ser es ; •El matadero: ¿texto de opinión o cuento? (¿Qué elementos atraen más y tienen mayor
u nio. -' peso en el re lato: la denuncia, es decir, la crítica, los fragmentos argumentativos o los

j''
:orno segmentos narrativos?)
·ni st a •Víncu los entre literatura y política. (¿Una de las dos es más importante que la otra o
~
que j la contiene?, ¿son actividades independientes?, ¿la literatura pierde su valor est ético si
bien, manifiesta una posición política?)
; m ás
3. Al comienzo de la Introducción de Facundo, Sarmiento reproduce un texto breve
a modo de epígrafe, es decir, la cita de un texto que encabeza una obra o, co mo
1inos en este caso, cada capítulo. El epígrafe de la Introducción pertenece a un libro del
nera, escritor e historiador francés del siglo XIX Abel -Franc;:ois Villemain. Lean el t exto
que se reproduce, como en el origina l, en francés y en su versión castellana.

'Je demande a!'historien l'amour de l'humanité ou de la liberté; sa j ustice


impartiale ne doit pas etre impassible. JIfaut, au contraire, qu'il souhaite, qu'il
sta o espere, qu'il soujfre, ou soit heureux de ce que'il raconte".
Villemain (Cours d e littératur e)
jem-
"Yo pido al historiador el amor a la humanidad o a la libertad; su j usticia
imparcial no debe ser impasible*. E s necesario, al contrario, que desee, que espere, impasible: incapaz de padecer;
que sufra o seafeliz con lo que narra". indiferente a las emociones.
Villem ain (Curso de literatura)

~nto a. En pequeños grupos comenten el texto de Villemain sobre la actitud que se


espera de un historiador.
ade b. ¿Qué función cumple este epígrafe? ¿Con qué finalidad lo incluye Sarmiento?
c. Mencionen q ué otros sentidos puede tener un epígrafe a partir de estos ejem-
ía) y plos tomados del Facundo.
• Capítulo 2, "Originalidad y caracteres argentinos" :
le la 'Yl.sí como el océano, las estepas llenan al espíritu del
uen sentimiento de lo irifinito". Humboldt.
• Capítulo 4, "Revolución de 181 O":
) en "Cuando la batalla empieza, el tártaro da un grito terrible, llega, hiere,
olio desaparece y vuelve como el rayo". V íctor Hugo.
iec-
d. Relean la Introducción y vean de qué modo el autor se ajusta o respond e a estos
requerimientos de la tarea del historiador. Den ej emplos textuales.
e. Debatan en el grupo qué piensan ustedes acerca de las afirmaciones de Ville-
main. ¿Las comparten? ¿No ser impasible sign ifica ser parcia l? ¿Ser impasible ase-
gura la imparcialidad? ¿Qué lugar se le otorga a la historia y al historiador según
estas pa labras? ¿Cuál creen que es la función de un historiador?
La
Algu
vinCl
Casté
Com1
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en la
Buer
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En 1~
para
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más
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dibu
país;
port
com
pers
Enp
com
inst1
La poesía gauchesca
Algunos artistas plásticos argentinos, además de realizar su obra pictórica, se
vincularon con la edición de libros como ilustradores. Uno de ellos es Juan Carlos
Castagnino, que nació en 1908, en Mar del Plata y murió en Buenos Aires, en 1972.
Como su padre era herrero en las tierras de Carnet, él se crio en un paisaje rural,
entre carros, caballos y peones de campo. De joven, durante los veranos, trabajó
en la sucursal de Mar del Plata de la casa Witcomb, la galería de arte más antigua de
Buenos Aires. Estudió arquitectura y también siguió cursos en la Academia Nacional
de Bellas Artes. Desde 1982, el Museo de Arte de Mar del Plata lleva su nombre.
En 1962 Castagnino realizó numerosos bocetos, antes de presentar las ilustraciones
para el poema Martín Fierro, de José Hernández, que le había encargado la Editorial
Universitaria de Buenos Aires (EUDEBA). Logró darle un rostro definido al personaje
m ás popular de la literatura argentina, como lo muestra la obra reproducida:
Retrato del gaucho Martín Fierro. EUDEBA llegó a vender 215.000 ejemplares de
d icha obra, repartidos en varias ediciones. Los ejemplares económicos contenían
reproducciones en blanco y negro; hubo otros con copias litográficas -a partir
d e un grabado en piedra- más costosos que los primeros, y los especiales, con
imágenes coloreadas a mano.
Las pinturas de Castagnino son reconocibles por su estilo de mancha suelta y
dibujo preciso. Sus temas incluyen retratos de mujeres del pueblo, gente del norte,
paisajes del Paraná o del Uruguay, orillas marplatenses, arrabales y personajes
porteños, caballos criollos de crin al viento y maternidades obreras. Fue un artista
comprometido personal y estéticamente con las luchas populares a través de los
personajes de sus obras.
En palabras del artista:"EI pintor actual no puede negarse ni a la idea de la pintura,
como puro reflejo de la realidad, ni a la idea de la pintura como puro y simple
instrumento para trascender esa realidad. La síntesis es la confrontación entre
poesía y verdad, entre pasión y razón':
Cielito patriótico Al
se
que compuso un gaucho para cantar la acción de Maipú en
qu
No me neguéis este día De noche avanzaron ellos
BARTOLOMÉ
HIDALGO cuerditas vuestro favor, y allá tuvieron sus tratos; Ci
(1 788-1822) y contaré en el Cielito compraron barato, es cierto, ci
de Maipú la grande acción. ¡qué malo es comprar barato! pá
Nació en Montevideo y murió q
en Buenos Aires. Fue empleado Cielo, cielito que sí, Cielito, cielo que sí, ;.
de comercio, funcionario y •
soldado. Como tal, participó en
las invasiones inglesas y se unió
cielito de Chacabuco,
si Marcó* perdió el envite
le dijo el sapo a la rana,
cantá esta noche a tu gusto l

más tarde al ejército del general
Artigas. Considerado el precursor
Osorio* no ganó el truco. y nos veremos mañana. j ye
~ to
de la literatura gauchesca, la ¡:
obra de Hidalgo se compone de
E n el paraje mentado* Se reúnen los dispersos o
cielitos y diálogos patrióticos. que llaman Cancha Rayada*, y marchan las divisiones, c.
el general San Martín y ya andaban los paisanos
llegó con la grande armada. con muy malas intenciones. cu
qt
Cielito, cielo que sí, Allá va cielo, y más cielo,
era la gente lucida, cielito de la cadena, Pe
Marcó: se refiere al brigadier Marcó
del Pont, derrotado por San Martín en y todos mozos amargos* para disfrutar placeres la
Chacabuco (1817). para hacer una embestida*. es preciso sentir penas. h:
Osorio: general derrotado en la p
batalla de Maipú por el general San
Lo saben los enemigos Pero ¡bien ayga* los indios!
Martín (1818).
mentado: nombrado, conocido. y al grito ya se vinieron, Ni por el diablo aflojaron, e
Cancha Rayada: derrota sufrida por y sin poder evitarlo mueran. todos los gallegos, b
el ejército de San Martín en 1819. nuestro campo sorprendieron. viva la Patria, gritaron. a
amargo: valiente.
embestida: ataque.
q
godo: español. Cielito, cielo que sí, Cielito digo que no,
bien ayga: bienvenidos. cielito del almidón, no embrome, amigo Fernando*,
Fernando: se refiere a Fernando VII, no te aflijas godo* viejo si la Patria ha de ser libre
rey de España.
que ya te darán jabón. para qué anda reculando.

122 I Capítulo 6 La poesía gauchesca


Al fin el cinco de abril Cargaron nuestros soldados
se vieron las dos armadas y pelaron los latones*,
en el arroyo Maipú, y todo lo que cargaron
~
o que hace como una quebrada. flaquearon los guapetones.
5 La obra de Hidalgo
;
¡¡
Cielito, cielo que no, Cielito, cielo de flores, Bartolomé Hidalgo inicia la
j cielito digo que sí, los de lanza atropellaron; fecunda tradición de la literatura
¡
gauchesca en el Río de la Plata.
j párese mi don Osorio pero del caballo, amigo, Su producción poética, escrita al
l
! que allá va ya San Martín. limpitos me los sacaron. modo de los gauchos, fue muy
-
1
.'o Empiezan a menear bala Osorio salió matando
popular en la década de 1810.

~
1• los godos con los cañones, al concluirse la contienda,
¡ .
o
8
y al humo ya se metieron sin saber hasta el presente
! g
todos nuestros batallones. dónde fue a tirar la rienda.
'o'
~

C ielito, cielo que sí, Cielito, cielo que sí,


cielo de la madriguera, cielito de los reveses; latón: sable.
cuanto el godo pestañó nos ganaron el albur* albur / entreses: lenguaje
quedó como tapadera. y perdieron los entreses*. correspondiente al juego del monte.
entrevero: pelea, disputa.

Peleó con mucho coraje Godos como infierno, amigo,


la soldadesca de España, en ese día murieron,
habían sido guapos viejos porque el Patriota es temible
pero no por la mañana. en gritando el entrevero*.

Cielo, cielito que sí, Cielo, cielito que sí,


la sangre amigo corría hubo tajos que era risa,
a juntarse con el agua a uno el lomo le pusieron
que del arroyo salía. como pliegues de camisa.

MONIJMENTO A lA. f;
z.
o
..,
"'
>

1 NEPUBLICA Al/CENT/NA
\A(t t 1 \J' ~•. f o.ti
EL YO POÉTICO Qyedó el campo enteramente Ya puede el virrey de Lima L
por nuestros americanos, echar su barba en remojo,
El yo poético es la voz del y Chile libre quedó si quiere librar el cuero
que enuncia o habla en un ¡:¡
para siempre de tiranos. vaya largando el abrojo. ~ se
texto lírico, que se expresa en
primera persona. No coincide
s pé
Cielito, cielo que sí, Cielito, cielo que sí, yl
necesariamente con el autor del
poema y se manifiesta en el sujeto por ser el godo tan terco, largue el mono, no sea primo,
fs re
~
expreso ("yo"), los pronombres se ha quedado el infeliz porque cuanto se resista ~ d(
i!
personales de la primera persona ~
o
como avestruz contra el cerco. ya quedó como racimo. pe
("limpitos me los sacaron") o en las -
~

'
terminaciones verbales ("contaré
n el cielito"). J Hubo muchos prisioneros Viva nuestra libertad
.•
< ti
..
o
;:¡
de resultas del combate, y el general San Martín, o CL
3
y según todas las señas y publíquelo la fama ~
no les habían dado mate. con su sonoro clarín. ~
¡:
di
o tl,1

echar culo: en el lenguaje de este Cielito, cielo que sí, Cielito, cielo que sí, gi
juego, salir perdiendo. americanos unión, de Maipú la competencia ri<
y díganle al rey Fernando consolidó para siempre
que mande otra expedición. nuestra augusta independencia. fo
e~

Ya, españoles, se acabó Viva el gobierno presente, y:


el tiempo de un tal Pizarra, que por su constancia y celo dE
ahora, como se descuiden ha hecho florecer la causa
les ha de apretar el carro. de nuestro nativo suelo. ne
d1
Cielito, cielo que sí, Cielito, cielo que sí, lít
cielito del disimulo, vivan las autoridades,
de balde tiran la taba y también que viva yo H
porque siempre han de echar culo*. para cantar las verdades.
H
Ci
Bartolomé Hidalgo, Cielitos y diálogos patrióticos, te
Buenos Aires, Centro Editor de América Latina, 1979
t
ru
d1
~ ACTIVIDADES di
ce
1. La poesía de Hidalgo tenía una fuerte repercusión popular. Formulen, a partir del de
texto leído, una hipótesis acerca del porqué.
2. Marquen algunos versos donde se manifieste el espíritu festivo, de exaltación, por el Cé

triunfo del ejército de San Martín. ci


3. El poema apela, por momentos, al humor, a tomar en broma algunas cuestiones. E:
Den algunos ejemplos del texto y comenten qué efecto produce. ci
4 . El poema se abre y se cierra con enunciados referidos al yo poético (o yo lírico): sí
"contaré'; "que viva yo''. Relean las dos estrofas y expliquen cómo se vinculan y qué
sentido tienen ambas referencias. rr
ir

124 I Capítulo 6 La poesía gauchesca
Los orígenes de la gauchesca
Desde los tiempos de la colonia, los gauchos que vivían en la pampa argentina
se reunían en fogones, postas y pulperías, para ca ntar sus canciones y coplas acom-
g pañados por la guitarra. Payadores y poetas anónimos improvisaban, en fo rma oral
j
i~ • j
y habitualmente en versos octosílabos, coplas y rimas de temas diversos, no solo
referidos al ámbito rural. Esta producción poética, la de quienes improvisan y la
~
l ~
. de quienes recuerdan y repiten, se incorpora a la tradición popular y constituye la
~ i
i'
-i poesía gaucha.

.•' .'
'
Más q ue una función estética, la poesía tenía entonces una intención informa-
o tiva (o noticiosa) y d idáctica. En un medio social sin escritura, sin iglesia y sin es-
o
~ ~ cuela, el payador era el letrado, el periodista y el consejero.
.• !••
3 3
~
Al caracterizar al gaucho cantor en el segundo capítulo de Facundo, Sarmiento
dice: "El cantor está haciendo, candorosamente, el mismo trabajo de crónica, cos-
!
•o ¡:o'
~ ' tumbres, historia, biografía, que el bardo de la Edad Media, y sus versos serían reco-
gidos más tarde como los documentos y datos en que habría de apoyarse el histo-
riador futuro''.
A comienzos del siglo XIX, en el proceso de lucha por la independencia, esas
formas de la lengua y la poesía popular fueron adoptadas por escritores cultos para
escribir al modo de los gauchos, es decir, componer versos que imitaban su lengua
y su estilo. No se trata de una literatura folclórica, sino de una prod ucción que surge
de los escritores letrados de la ci udad, y que se denominó poesía gauchesca.
Esta literatura popular habla de las costumbres del ámbito rural y de sus perso-
najes típicos en el lenguaje de los gauchos. El poeta relata las experiencias privadas
de sus personaj es, pero también es una voz que transmite los acontecimientos po-
líticos y sociales de la época y opina al respecto.

Hidalgo, un precursor Dos links para tener en


La etapa fundacional de la literatura gauchesca, a la que pertenece Bartolomé cuenta:
· Biblioteca nacional:
Hida lgo, se extiende desde 1812 hasta 1825; es un período muy conflictivo, de ac-
ciones armadas y fuerte contenido político (la Revolución de Mayo, el sitio de Mon-
http://www.bn.gov.ar/
· Academia Argentina de Letras: ·I
?S, tevideo, las luchas de Artigas y la campaña al Alto Perú). http://www.cervantesvirtual.com/
En las composiciones de Hidalgo no aparecen elementos que luego serán habi- portal/AAL/
tua les en el género gauchesco; no hay descripciones de la naturaleza ni de la vida
rural. Lo nuevo reside en que es una obra de intención m ilitante: el poeta, en la voz
del ga ucho, manifiesta ideas políticas al ref erirse a acontecimientos significativos

1 de la gesta emancipadora; las ideas de libertad e igualdad impregnan su poesía


concebida como un modo de acompañar y celebrar las acciones del p ueblo en pos
de su independencia.
Los cielitos son poesías satíricas, contra el ejército realista, dirig idas en muchos
~1 casos a los soldados del ej ército patrio y destinadas a celebrar sus victorias; muchos
circulaban en pliegos sueltos y se cantaban durante el primer sitio de Montevideo.
Escritos en lengua rura l, en un estilo sencillo y espontáneo, deben su denomina-
ción a una danza popular de la época y al estribillo característico "cielito, cielo que
sí .. .'; y sus variantes.
Los diálogos patrióticos son conversaciones en verso entre dos paisanos que
muestran los hechos desde su óptica y con su lenguaje. Risueños, aparentemente
inocentes, relat an las luchas por la libertad y denuncian la injusticia q ue sufre el habi-
t ante de las zonas rurales, rasgo distintivo en el desarroll o de la literatura gauchesca.
125
Un gaucho que va a la ópera
[ ... -
Una obra significativa en la evolución de la poesía gauchesca es Fausto, de Es- Nd
ESTANISLAO
DEL CAMPO tanislao del Campo. El poema se abre con un encuentro entre paisanos, según una rom
( 1834-1880) convención habitua l del género gauchesco: e l gaucho Anastasia el Pollo se en- que

Desde 1857 publicó sus poemas


cuentra con don Laguna, vecino de Bragado, y conversan.
¡
la ]
con el seudónimo Anastasio
el Pollo y su obra fundamental ~ Yy,
es Fausto, publicada en 1866.
Fausto e
~
¡ un~
Combatió en las batallas de • 1
• ¡ que
Cepeda y de Pavón del lado de Impresiones del gaucho Anastasio el Pollo •f me
la fracción defensora de Buenos
en la representación de la ópera
L
t í
Aires. Fue empleado en la
Aduana, secretario de la Cámara
I Cuando el flete relinchó,
!j Atr
un ]
de Diputados, y diputado por la f~
¡ •
provincia de Buenos Aires. media güelta dio Laguna, 1 g que
En un overo* rosao, y ya pegó el grito: -¡Ahijuna! era
flete* nuevo y parejito, ¿No es el Pollo?-Pollo, no,
Fausto caía al bajo, al trotecito, ese tiempo se pasó, - ¿.
Fausto es un personaje famoso y lindamente sentao, (contestó el otro paisano), del
en la historia del arte, que ha un paisano del Bragao, ya soy jaca* vieja, hermano, lo o
inspirado obras musicales,
pictóricas y literarias. Según la
de apelativo Laguna: con las púas como anzuelo, pon
leyenda, la historia se origina en mozo jinetazo ¡ahijuna!, y a quien ya le niega el suelo
un personaje real: un hechicero como creo que no hay otro, hasta el más remoto grano. -Y
y astrólogo alemán, que habría pen
capaz de llevar un potro
vivido en el siglo XVI, vende su
alma al diablo, Mefistófeles, a a sofrenarlo en la luna. Se apió el Pollo y se pegaron ¡Ba:
cambio de placeres terrenales. [ ... ] tal abrazo con Laguna, Un
La obra Fausto, del escritor alemán que sus dos almas en una
Johann Goethe -en particular,
En fin, como iba a contar, acaso se misturaron*. Dej
el tema del amor entre Margarita
y Fausto, y la intervención del L aguna al río llegó, [ ... ] que
diablo- fue el punto de partida contra una tosca se apió pue
para la ópera Fausto, del músico y empezó a desensillar. A la cuenta se creería dós
francés Charles Gounod, cuya
En esto, dentró a orejiar que el Diablo y yo ... - ¡Callesé, [ ...
representación en el teatro Colón
relata el personaje del poema de y a resollar el overo, amigo! ¿No sabe usté
Estanislao del Campo. y jue que vido un sombrero que la otra noche lo he visto Pm
que del viento se volaba al demonio? - Jesucristo! elI
de entre una ropa, que estaba -Hace bien, santigüesé*. yer
más allá, contra un apero*. de e
- ¡Pues no me he de santiguar!
D io güelta y dijo el paisano: Con esas cosas no juego; Dij
overo: caballo de color dorado. -¡Vaya Záfiro! ¡Qué es eso? pero no importa, le ruego con~
flete: caballo de cualidades Y le acarició el pescuezo que me dentre a relatar que
sobresalientes. con la palma de la mano. el cómo llegó a topar per
apero: recado de montar.
jaca: caballo pequeño.
Un relincho soberano con el malo*, ¡Virgen santa!
misturar: mezclar. pegó el overo que vía, Solo el pensarlo me espanta... Qi
santiguarse: persignarse, hacerse a un paisano que salía -Güeno, le voy a contar, derl
cruces.
del agua en un colorao, pero antes voy a buscar pm
el malo: el diablo, el demonio.
que al mesmo overo rosao con qué mojar la garganta. sie1
nada le desmerecía. [ ... ] [ ...

126 1Capítulo 6 La poesía gauchesca


II Qye cansado de sufrir, La representación
[ .. . ] y cansado de llorar, A partir del canto 11, Anastasio
el Pollo le cuenta a Laguna la
Es- Ni bien me había sentao, al fin se iba a envenenar
experiencia que vivió en el teatro
Jna rompió de golpe la banda, porque eso no era vivir. Colón durante la representación
en- que detrás de una baranda de la ópera Fausto. Como
El hombre allí renegó, no conoce los códigos de la
la h abían acomodao.
representación teatral, cree que
tiró contra el suelo el gorro, lo que ha visto es verdadero y
Y ya tamién se corrió y, por fin, en su socorro lo relata como tal. Así narra el
un lienzo grande, de modo al mesmo Diablo llamó. comienzo de la representación.

.. :
(
que a dentrar con flete y todo
me aventa*, creameló. ¡Nunca lo hubiera llamao!
l1 ¡Viera sustaso, por Cristo!
l~ .i Atrás de aquel cortinao ¡Ahí mesmo jediendo* a misto*,
un D otor apareció, se apareció el condenao!
que asigún oí decir yo,
era un tal Fausto mentao*. H ace bien: persinesé
que lo mesmito hice yo.
-¿Dotor dice? Coronel -¿Y cómo no disparó?
de la otra banda, amigazo; -Yo mesmo no sé por qué.
lo conozco a ese criollazo
porque h e servido con él. ¡Viera al Diablo! Uñas de gato,
flacón, un sable largote,
- Yo tamién lo conocí, gorro con pluma, capote
pero el pobre ya murió. y una barba de chivato.
¡Bastantes veces montó [ .. .]
U n zaino* que yo le di!
''.Aquí estoy a su mandao,
D ejeló al que está en el cielo cuente con un servidor",
que es otro Fausto el que digo, le dijo el Diablo al D otor,
pues bien puede haber, amigo, que estaba medio asonsao.
dos burros del mesmo pelo.
[ ... ] "Mi Dotor, no se me asuste
que yo lo vengo a servir:
Pues como le iba diciendo, pida lo que ha de pedir
el Dotor apareció, y ordenemé lo que guste".
y en público se quejó
de que andaba padeciendo. El Dotor, medio asustao,
le contestó que se juese...
Dijo que nada podía -Hizo bien: ¿no le parece?
aventar: echar, espantar.
con la cencia que estudió, -Dejuramente, cuñao. menta o: mentado, de nombre.
que él a una rubia quería, zaino: caballo de color castaño
pero que a él la rubia no. Pero el Diablo comenzó oscuro.
al ñudo: inútilmente, en vano.
a alegar gastos de viaje pastoriar: pretender, cortejar.
Qye al ñudo* la pastoriaba* y a medio darle coraje jeder: oler.
dende el n acer de la aurora, hasta que lo engatusó*. misto: mixto: mezcla inflamable
usada para explosivos o iluminación.
pues de noche y a toda hora [ .. .]
engatusar: engañar, hacer creer.
siempre tras de ella lloraba. Estanislao del Campo, Fausto, Buenos Aires,
[ ... ] Plus Ultra, 1965 (fragmento).

127
Entre el humor y la ironía El
Como señala Estanislao del Campo en el subtítu lo, el poema narra las impre-
siones que el paisano Anastasio el Pol lo le transmite a don Laguna; el personaje
central comenta con sorpresa y asombro la representación de la ópera Fausto, de •5
Gounod, a la que asistió en el teatro Colón. ~
El diálogo entre una pareja de paisanos es una convención propia de la litera- ¡ f¡
tura gauchesca y aparece en los textos de Bartolomé Hidalgo, en algunas composi-
l
ciones de Hilario Ascasubi (1807-1875) y en la re lación entre Fierro y Cruz en el Mar- ~ ((

tín Fierro. En el caso de Fausto, ese diá logo, que construye el desarrollo del texto,
tiene la característica peculiar de que sirve de marco a otra historia; la conversación
.'
• ¡ gauc
camr
~ ACTIVIDADES 11
de los gauchos contiene otro relato: el argumento de la ópera que da nombre al
': E!

1. ¿Por qué el doctor Fausto


poema en la voz de Anastasia el Pollo. Un relato primero (el encuentro de los dos
amigos) contiene y se entrelaza con un relato segundo (el argumento de la ópera).
Hi
!
no le
yen1
l ~
pide ayuda al diablo? ¿Qué le Anastasia el Pollo tran smite su versión de la ópera y cuenta el argumento como oo con 1
pasa cuando este aparece? si se tratara de hechos real es, a partir de los elementos de su propio mundo; la re- de la
2. ¿Qué elementos (personajes, lación entre ambos re latos produce efectos humorísticos, pretende divertir y pro- ciera.
objetos, historias) del mundo pone una parodia del espectáculo. A
del gaucho aparecen en el Además del diálogo que estructura la obra, también aparecen en el texto otras cons
canto 11? características propias de la gauchesca: origen y ra sgos de los personajes, lenguaje El gé
3. Marquen en el texto gauchesco, referencia a costumbres del cerG
varios ejemplos de ámbito rural. dos,
palabras o construcciones Sin embargo, el poema presenta la ca
que representen el habla algunas diferencias con respecto al polít
gauchesca. Por ejemplo: sentao desarro llo del género. En lugar d e ser N
(por"sentado''. con supresión el hombre de la ciudad quien relata las saba
de la d). peripecias del gaucho en su ambiente, de la
4. Imaginen y relaten el campo, es el gaucho quien va a la ciu- SOCié
ora lmente otras situaciones a dad y narra sus impresiones. Por otra E
las que se puedan aplicar estos parte, el púb lico al que está dirigida la un le
enunciados: obra no es el hombre de campo, sino el bién
•"bien puede haber, amigo,/ habitante de la ciudad. habí
dos burros del mesmo pelo" Otra particularidad consiste en que litan
•"dijo que nada podía / con la el rasgo central de la gauchesca, la in- blicc
cencia que estudió''. tención realista de denunciar las injus- sep
Luego, elijan una de estas t icias y los problemas sociales que pa- inte1
historias y escríbanla. d ecen los gauchos, no se da en Fausto, E
ya que el poema se ocupa de un acon- mo ~

tecimiento cultural y presenta hechos •


Fausto según el ilustrador argentino Osear Grillo. de la vida privada de sus personajes. laql

OTROS RECORRIDOS DE LECTURA Casi
unit
• Muy lejos del humor y como ejemplo de una escritura militante • Historias con diablos hay muchas y muy buenas. Algunas son:
que denuncia el horror de la tortura, se sugiere la lectura del Markheim y El diablo de la botella, ambas de Robert L. Stevenson; desl
poema La refalosa, de Hilario Ascasubi. Un pacto con el diablo, de Juan J. Arreola. También pueden leer Esta
• Si les interesó, completen la lectura de Fausto, de Estanislao del el relato"EI herrero y el diablo': episodio narrado en la novela de •
Campo. Ricardo Güiraldes, Don Segundo Sombra, o la versión teatral del la lit
mismo título, escrita por Juan Carlos Gené.
pub

128 I Capítulo 6 La poesía gauchesca


El desarrollo de la poesía gauchesca
)re- Santos Vega, elpayado1;
1aje aquel de la lmgafama,
.de
~~ murió cantando su amor
!5
l
¡ como elpájaro en la rama.
~ ra - l ~ Copla popular anónima
1 ¡
:>si- .., l
''
í
;
1ar- ( ~ Como se ha señalado, la gauchesca toma el estilo y los temas de la poesía EL SAINETE
cto, gaucha, es decir, la producción espontánea, oral y anónima de los habitantes del
••
1
i

ión iji campo, que habitualmente se cantaba con acompañamiento de guitarra. En su origen, el sainete era una
~al i ~ Esa poesía gaucha, antecedente de la gauchesca, era la expresión de sectores pieza teatral breve, por lo general
¡ ' de intención humorística, que se
fos ¡ i no letrados y sus formas estaban vinculadas con la tradición española en los temas
a).
TlO
l
~
~
o
!
j
'
'
Q
y en el uso del verso octosílabo; luego se incorporaron otros aspectos relacionados
con los trabajos y las costumbres del ámbito rural. El primer testimonio conocido
representaba en los intermedios
~e otra obra. J
re- de la literatura oral del gaucho es el sa inete, de autor anónimo, El amor de la estan-
ro- ciera, estrenado en Buenos Aires alrededor de 1790. LAS DÉCIMAS
A partir de las guerras de la Independencia en el Río de la Plata, la gauchesca
ras constituyó un modo de propaganda política y acom pañó la lucha revolucionaria. La décima, una de las formas
3je El género se volv ió muy popular y siguió presente a lo largo del siglo XIX, siempre estróficas frecuentes en las
payadas, es una estrofa de diez
:lel cercano a los avatares de la organización política de la Nación. Los escritores letra-
versos octosílabos combinados
dos, que toman en sus obras temas, personajes y modos de expresión propios de en un esquema variado de rima
ita
al
la campaña, respondieron a la finalidad de involucrarse así en los acontecimientos
políticos del momento histórico.
consonante. Por ejemplo:
'1;1canto1 del Fausto. J
;er No se usaba el canto solo como un juego lírico o ameno; la gracia del estilo pa-
as saba a un segundo plano. Se buscaba ser un testigo de la verdad, del sufrimiento,
te, de las luchas por la independencia; la reflexión y el comentario sobre cuestiones
u- socia les y políticas adquirieron una importancia fundamental.
:ra Esta poesía compuesta en lengua gaucha tuvo dos circuitos de recepción. Por
la un lado, convocó a un nuevo público: los habitantes de la campaña, que eran tam-
el bién los soldados d e los ejércitos patrios; los gauchos memorizaban los versos que
habían escrito los letrados, a partir de la lectura en pulperías y campamentos mi-
.te litares que hacía alguien que supiera leer. Por otro lado, tuvo la recepción del pú-
n- b lico instruido de la ciudad, pues los poemas (cielitos, décimas, coplas, diálog os)
s- se publicaban en pliegos sueltos o en folletos y periódicos, que llegaban al
a- interior del país, y más tarde en libros.
·o, En el desarrollo de la literatura gauchesca, se advierten distintos
1- momentos:
)S • Una etapa fundacional que va, aproximadamente, de 1812 a 1825, de
la que se habló a propósito de la obra de Bartolomé Hidalgo.
• Un momento de consolidación, que se extiende hasta la batalla de
Caseros en 1852, marcado por la oposición ideológica entre federales y
unitarios, a partir de la figura de Juan Manuel de Rosas. En este período se
destaca la obra del unitario Hilario Ascasubi y la del poeta ros ista Luis Pérez.
"......... ".. ,
-...-·-·
Estanislao del Campo se ubica en la transici ón hacia el período sig uiente.
• La culminación del género gauchesco con el poema más famoso de
t ..........
_ ,, . . . .
-
_,..... ..... ....
- ·- -
l\llU)

la literatura argentina: las dos partes del Martín Fierro, de José Hernández,
publicadas en 1872 y 1879.

129
~:¡, c;AUOllO

MARTIN FIERRO Datos para leer el Martín Fierro


Considerada la obra cumbre de la poesía gauchesca, el extenso poema
Martín Fierro, de José Hernández, fue publicado en dos partes. La primera,
LA VUELTA titulada El gaucho Martín Fierro - co nocida como "La ida"- , tiene 13

MARTIN FIERRO
cantos y apareció en 1872 en forma de folleto con otros escritos políticos.
Luego del éxito alcanzado por El gaucho Martín Fierro, la segu nda parte,
'f
§
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de 33 cantos, se publicó en 1879 con el título de La vuelta de Martín Fierro.
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JOS F. llE llNANOEZ

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Las circunstancias políticas y sociales .' ,¡


Las transformaciones económicas producidas a mediados del siglo XIX
i
como consecuencia de la modernización del país ocasionaron cambios en ~ F

la situación de los gauchos. Las luchas por la independencia y el período
j1 q
de la anarquía habían quedado atrás y el gaucho no hallaba inserción posi- ! 1
··"'"'''_lll_.......... .. . ! <
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.......... llUUll JU rt1t1. ,... h r .... u
ble en la nueva configuración. Era considerado un vago, útil solo como sol- 'o
dado en los fortines y en la lucha contra el indio. En "La ida'; Hernández se r
hace eco de esta situación, retomando la tendencia de la protesta social de
la gauchesca: es central el tema de la injusticia que padecen los gauchos y
su denuncia marca el tono predominante del texto.
Esos versos, que contaban la historia de un gaucho perseguido injustamente por V
las autoridades, tuvieron un éxito notable y se hicieron populares. Su protagonista c
se transformó en un héroe. A raíz de la mala aplicación de la ley, los gauchos se iden- }
tificaban con el destino de Martín Fierro, cuya historia adquiría un valor colectivo.
f
e
La ley de leva y el gaucho matrero
El contexto histórico de la "La ida" se relaciona con un marco político que le daba
sentido. La ley de leva implicaba el reclutamiento forzado del gaucho que no estu- e
viera trabajando como peón en alguna estancia, para ir a la frontera a luchar contra )
el indio. Para justificar ese reclutamiento, se los acusaba de vagos o se los asociaba
con delincuentes; eso los convertía en gauchos malos o matreros y, según la pers-
I
pectiva oficial, quienes cuestionaban las arbitrariedades políticas y judiciales eran
bandidos, rebeldes y debían ser perseguidos.
En muchas ocasiones, como también lo testimon ia el Martín Fierro, el gaucho es- 1
capaba y se transformaba en un desertor perseguido por la policía. La primera parte J
del poema termina cuando Cruz y Fierro huyen y deciden irse a vivir con los indios.

Martín Fierro vuelve


La segunda parte de la obra, La vuelta de Martín Fierro, que Hernández escribe
cuando las circu nstancias históricas del país son otras, cierra el ciclo de la gauchesca.
Muchos gauchos han muerto en la lucha contra el indio y en otros enfrenta-
mientos violentos; desde 1870 parte de la población rural se traslada a los subur-
bios de la ciudad de Buenos Aires. El ingreso de la Argentina al mundo capita lista, la
campaña de Roca contra el indio y la ley de capitalización de Buenos Aires generan
un personaje de distinto perfil: la rebeldía y la denuncia se atenúan para acentuar,
en cambio, la posibilidad de reinserción socia l del gaucho y lograr su aceptación de
la v ida democrática. En La vuelta, Fierro regresa de las tolderías, se encuentra con
sus hijos y con el hijo de Cruz, evita la lucha con el Moreno y da consejos sabios a
sus hijos para que aprendan a vivir y trabajar en sociedad.

130 1 Capítulo 6 La poesía ga uchesca


El gaucho Martín Fierro
~ma I Cantando me he de morir,
JOSÉ
era, cantando me han de enterrar HERNÁNDEZ
~ 13 Aquí me pongo a cantar y cantando he de llegar (1834-1886)
eos. al compás de la vigüela*, al pie del eterno Padre;
irte, que el hombre que lo desvela dende el vientre de mi madre Escritor fundamental en la
rro. una pena estrordinaria, vine a este mundo a cantar. literatura argentina del siglo
XIX, fue un profundo conocedor
.
'
como la ave solitaria
de la vida del campo y de las
(
con el cantar se consuela. Qµe no se trabe mi lengua costumbres de los gauchos.
XIX :' ni me falte la palabra; Desempeñó varios cargos
'
o
~
;en Pido a los Santos del cielo el cantar mi gloria labra administrativos y judiciales; fue
B
j!
poeta y periodista, y participó
Jdo que ayuden mi pensamiento: y poniéndome a cantar, activamente de la vida política
osi- les pido en este momento cantando me han de encontrar del país. En prosa escribió Vida
sol- que voy a cantar mi historia aunque la tierra se abra. del Chacho (1863) e Instrucción
zse del estanciero (1881 ); en verso,
me refresquen la memoria
las dos partes que componen el
l de y aclaren mi entendimiento. Me siento en el plan de un bajo Martín Fierro: El gaucho Martín
JS y a cantar un argumento; Fierro (1872) y La vuelta de Martín
Vengan Santos milagrosos, como si soplara el viento Fierro (1879).
por vengan todos en mi ayuda hago tiritar los pastos.
ista que la lengua se me añuda* Con oros, copas y bastos
en- y se me turba la vista; juega allí mi pensamiento.
pido a mi Dios que me asista
en una ocasión tan ruda. Yo no soy cantor letrao
mas si me pongo a cantar
iba Yo he visto muchos cantores, no tengo cuándo acabar
.tu- con famas bien otenidas y me envejezco cantando:
1tra y que despues de alquiridas las coplas me van brotando
iba no las quieren sustentar: como agua de manantial.
~rs -
parece que sin largar [ ... ]
·an se cansaron en partidas*. .j
Yo soy toro en mi rodeo vigüela: vihuela, guitarra.
es- Mas ande otro criollo pasa y torazo en rodeo ajeno; añudar: anudar, no poder hablar por
rte emoción.
Martín Fierro ha de pasar; siempre me tuve por güeno
partida: recorrido corto que hacían
IS. nada lo hace recular* y si me quieren probar, los jinetes para practicar antes de
ni las fantasmas lo espantan, salgan otros a cantar iniciar la carrera.
y dende que todos cantan y veremos quién es menos. recular: retroceder.
be yo también quiero cantar. [ ... ]
ca.
ta-
ur- ~ ACTIVIDADES
, la
an 1. ¿Cuáles son las características del gaucho? Señalen los versos que las presentan.
ar, 2. El verbo cantar funciona en el comienzo del poema como un hiperónimo que
de engloba otros verbos; por ejemplo:"cantar mi historia" por relatar mi historia. ¿Qué otros
on sentidos tiene cantaren este fragmento? ¿Por qué el canto resulta un tema central?
sa 3. La invocación religiosa es un recurso frecuente en la gauchesca. Relean la segunda y
la te.rcera estrofa, y expliquen en qué consiste esa invocación y cuál es su propósito.

131
No me hago al lao de la güeya* Mi gloria es vivir tan libre
aunque vengan degollando; como el pájaro del cielo;
con los blandos yo soy blando no hago nido en este suelo
y soy duro con los duros, ande hay tanto que sufrir,
y ninguno en un apuro y naides me ha de seguir
me ha visto andar tutubiando*. cuando yo remonto el vuelo.

En el peligro ¡qué Cristos! Yo no tengo en el amor


el corazón se me enancha*, quien me venga con querellas;
pues toda la tierra es cancha, como esas aves tan bellas
y de eso naides se asombre; que saltan de rama en rama,
el que se tiene por hombre yo hago en el trébol mi cama,
ande quiera hace pata ancha*. y me cubren las estrellas.

Soy gaucho, y entiéndalo Y sepan cuantos escuchan


güeya: huella, camino. como mi lengua lo esplica: de mis penas el relato
tutubiando: titubeando, dudando.
para mí la tierra es chica que nunca peleo ni mato
enancha: ensancha; toma valor.
hacer pata ancha: enfrentar el y pudiera ser mayor; sinó por necesidá;
peligro, no retroceder. ni la víbora me pica y que a tanta alversidá
peje: pez. ni quema mi frente el sol. solo me arrojó el mal trato.
truje: traje (del verbo traer).
relación: relato, narración.
Nací como nace el peje* Y atiendan la relación*
en el fondo de la m ar; que hace un gaucho perseguido,
naides me puede quitar que padre y marido ha sido
aquello que Dios me dio: empeñoso y diligente,
lo que al mundo truje* yo y sin embargo la gente
del mundo lo he de llevar. lo tiene p or un bandido.

J.. ACTIVIDADES
1. Expliquen qué significan las sigu ientes construcciones y a qué rasgos de la imagen
del gaucho aluden (por ejemplo: pendenciero, amante de la libertad, solitario,
etcétera):
• "con los blandos yo soy blando / y soy duro con los duros;'
• "el que se tiene por hombre/ ande quiera hace pata ancha:'
• "para mí la tierra es chica / y pudiera ser mayor;"
• "Mi gloria es vivir tan libre/ como el pájaro del cielo"
• "yo hago en el trébol mi cama,/ y me cubren las estrellas:'
2. Reescriban en prosa, expandiéndola, la última estrofa. Les damos algunos
ejemplos de posibles comienzos: Escuchen con atención la dura historia de un gaucho
perseguido. .. ; Aunque la gente me considera a veces un bandido ...
3. En la última estrofa se dan a conocer dos datos importantes referidos al pasado de
Fierro: ¿cuáles son?

132 I Capítulo 6 La poesía ga uchesca


III Ni los mirones salvaron Antes de la frontera
de esa arriada de mi flor, Martín Fierro no es solo un
nombre: tiene una historia. En el
Tuve en mi pago en un tiempo fue acoyarao* el cantor
canto 11, el gaucho recuerda los
hijos, hacienda y mujer, con el gringo de la mona, tiempos idílicos del pasado en
pero empecé a padecer, a uno solo, por favor, que tenía trabajo y vivía feliz con
me echaron a la frontera, logró salvar la patrona. su familia:"Yo he conocido esta
tierra / en que el paisano vivía /
¡Y qué iba a hallar al volver! y su ranchito tenía / y sus hijosy
tan solo hallé la tapera*. Formaron un contingente mujer... / Era una delicia el ver /
con los que del baile arriaron, cómo pasaba sus días". Pero luego
comienzan las desgracias ...
< Sosegao vivía en mi rancho con otros nos mesturaron,
• El canto 111 presenta la situación del
como el p ájaro en su nido, que h abían agarrao también,
f
ó allí mis hijos queridos las cosas que aquí se ven
gaucho que es reclutado y enviado
a la frontera para luchar contra los
3
l
i~ iban creciendo a mi lao ... ni los diablos las pensaron. indios.

solo queda al desgraciao


lamentar el bien perdido. A mí el Juez me tomó entre ojos
en la última votación:
[ . .. ] me le había h ech o el remolón
y no me arrimé ese día,
Cantando estaba una vez y él dijo que yo servía
en una gran diversión, a los de la esposición*.
y aprovechó la ocasión
como quiso el Juez de Paz ... Y ansí sufrí ese castigo
se presentó, y ahí nomás tal vez por culpas ajenas,
hizo arriada* en montón. que sean malas o sean güenas
las listas, siempre me escondo:
Juyeron los más matreros* yo soy un gaucho redondo*
y lograron escapar: y esas cosas no me enllenan.
yo no quise disparar,
soy manso y no había p orqué, Al mandarnos nos hicieron
muy tranquilo me quedé más promesas que a un altar,
1 y ansí me dejé agarrar. el Juez nos jue a proclamar
y nos dijo muchas veces: tapera: rancho en ruinas.
n Allí un gringo con un órgano "Muchachos, a los seis meses arriada: acción y efecto de arrear,
conducir el ganado.
y una mona que bailaba, los van a ir a revelar*". matrero: rebelde.
haciéndonos rair* estaba, rair: reír.
cuanto le tocó el arreo, [ ... ] zanjiador: que cava zanjas.
Inca-la-perra: alusión a Inglaterra.
¡tan grande el gringo y tan feo,
acoyarao: unido a otrospor cadenas.
lo viera cómo lloraba! Ansíen mi moro, escardando*, esposición: oposición.
enderecé a la frontera. redondo: de una pieza, honrado.
Hasta un inglés zanjiador* ¡Aparcero*, si usté viera revelar: relevar.
escardar: escarcear, dar vueltasel
que decía en la última guerra lo que se llama cantón*!...
caballo.
que él era de Inca-la-perra* ni envidia tengo al ratón aparcero: compañero, amigo.
y que no quería servir, en aquella ratonera. cantón: fortín.
también tuvo que juir
a guarecerse en la sierra.

133
De los pobres que allí había Yo primero sembré trigo Re
a ninguno lo largaron, y después hice un corral,
los más viejos rezongaron, corté adobe pa un tapial,
pero a uno que se quejó hice un quincho, corté paja ... con
en seguida lo estaquiaron, ¡la pucha que se trabaja can
y la cosa se acabó. sin que le larguen un rial*! !' cia d
•l
[ ... ] Y es lo pior de aquel enriedo El rt
que si uno anda hinchando el lomo* L
A naides le dieron armas,
pues toditas las que había
se le apean como plomo ...*
¡quién aguanta aquel infierno!
..
( 1

i :
de u
!- í ción;
~
el Coronel las tenía, si eso es servir al gobierno, l ~ pi as
sigún dijo esa ocasión, a mí no me gusta el cómo. narre:
pa repartirlas el día j'
5 l
t 1
un re
en que hubiera una invasión. Más de un año nos tuvieron oo polif1
en esos trabajos duros; El
Al principio nos dejaron y los indios, le asiguro convi
de haraganes criando sebo*, dentraban cuando querían: reflex
pero después ... no me atrevo como no los perseguían,
a decir lo que pasaba ... siempre andaban sin apuro. Métr
¡Barajo!... si nos trataban La
como se trata a malevos. [ ... ] basm
verso'.
[ ... ] Allí sí, se ven desgracias diez v.
y lágrimas y afliciones; He
criar sebo: haraganear, no hacer
nada. ¡Y qué indios, ni qué servicio, naides le pida perdones sextin
el infiel: el indio. si allí no había ni cuartel! al indio: pues donde dentra, poem
rial : real: moneda de níquel de diez nos mandaba el Coronel roba y mata cuanto encuentra abbcc
centavos.
a trabajar en sus chacras, y quema las poblaciones. Arr
hinchar el lomo: resistirse.
apear como plomo: caer encima, y dejábamos las vacas har
castigar con severidad. que las llevara el infiel*. [ ...] Es ti
de1
José Hernández,Ma1·tín Fierro, has
'1 ACTIVIDADES Buenos Aires, Huemul, 1976 (fragmento). y lo

1. Lean completo el canto 111 y Laida Alg1


respondan a estas preguntas: Agobiado por esa vida miserable, después de pasar tres años en el fortín, Fierro huye y regresa a • Fó
su pago. Encuentra su rancho abandonado y se entera de que su mujer y sus hijos se han ido para
a. ¿Por qué Fierro cae en la era n al
poder subsistir. Entonces comienza su vida como gaucho matrero y desertor. Cuando la policía logra
redada? cercarlo, Fierro le hace frente con la ayuda de Cruz, un sargento de la partida que se rebela yse une al aten ció
b. ¿Qué otros personajes son gaucho. Tras vencer a la policía, Cruz le cuenta su historia y deciden irse juntos al desierto, a refugiarse • Ell
entre los indios.
enviadosa la frontera junto con naides;
el gaucho? • Co
2. Comenten por escrito La vuelta · Me
cómo es la vida en el fortín y Comienza con el regreso de Fierro, quien relata su vida en las tolderías: las costumbres de los indios, • Ex¡
los estragos de una epidemia de viruela, la muerte de su amigo Cruz, el episodio en que salva a una
qué características tenían los
mujer cautiva. Se reencuentra con sus dos hijos, que también cuentan su propia historia. Aparecen
hoyoloi
malones. el gaucho Picardía, que resulta ser hijo de Cruz, el viejo Vizcacha y el Moreno, hermano de una de las · Re!
víctimas de Fierro. El Moreno se enfrenta al protagonista en una payada y lo reta a duelo, pero Fierro nal de la
no acepta. Finalmente, da consejos a sus hijos acerca de cómo actuar en la vida y se marcha con ellos.
e/sudor;

134 1Capít ulo 6 La poesía gauchesca


Recursos y construcción del Martín Fierro

Si bien el poema de Hernández exhibe rasgos típicos del género gauchesco, ya


constituido como tal, presenta al mismo tiempo características diferentes que mar-
can la particularidad de su construcción: el uso del monólogo y, por ende, la ausen-
cia de diálogo, y la sextina hernandiana.
1
¡
¡ ¡
t j El monólogo y la polifonía
* ! ¡¡ La convención de la pareja de paisanos que dialoga es sustituida por el relato

.
• 1
'
de una voz en primera persona, que se constituye como narrador interno de la fic-
ción; narrador y a su vez protagonista: los personajes relatan y comentan sus pro-
1f pias historias. Esto produce un mayor acercamiento a la verdad de las experiencias
Jj narradas y, al mismo tiempo, al incorporar va rias voces (Fierro, Cruz, Pica rdía) logra
! l un registro de diferentes perspectivas, proced imiento narrativo que se denomina
i !
o 1 polifonía.
El sujeto individual que se expresa en primera persona (básicamente, Fierro) se
convierte en una voz colectiva que transmite las situaciones, las desventuras y las
reflexiones del gaucho como personaje social.

Métrica, rima y recursos expresivos


La gauchesca se caracteriza por el empleo del verso octosílabo (de ocho síla-
bas métricas). Las formas estróficas habituales eran la redondilla (estrofa de cuatro
versos de arte menor, es decir, versos de hasta ocho sílabas) o la décima (estrofa de
diez versos). ~ ACTIVIDADES
Hernández crea una estrofa de seis versos octosílabos, que ha sido denominada
sextina hernandiana; no es la única que emplea, pero predomina a lo largo del 1. Analicen la métrica y la rima
poema. Con respecto a la rima, en general es consonante y su esquema habitual, de la siguiente estrofa:
abbccb. Cruz y Fierro, de una estancia
Amigazo, pa sufrir a una tropilla se arriaron;
han nacido los varones. b por delante se la echaron,
Estas son las ocasiones b como criollos entendidos,
de mostrarse un hombre juerte, c y pronto sin ser sentidos
ro, hasta que venga la muerte c por la frontera cruzaron .
o). y lo agarre a coscorrones. b 2. Lean los cantos VII y VIII
de "La ida" y resuelvan las
Algunos recursos utilizados en el t exto son: consignas q ue siguen.
• Fórmulas o construcciones referidas a la situación comunicativa, que involu - a. Resuman el argumento y
cran al público receptor (q ue escucha o lee): Atención pido al silencio / y silencio a la expliquen por qué razones
atención. Fierro pasa a ser un gaucho
• El humor y los juegos de palabras: Al ver llegar la morena / que no hacía caso de perseguido.
naides ! le dije con la mamúa: / Va .. . ca ... yendo gente al baile. b. Busquen ejemplos de los
· Comparaciones: mas nos llevan los rigores / como el pampero a la arena. recursos expresivos que se
• Metáforas: Yo soy toro en mi rodeo /y torazo en rodeo ajeno. emplean en el text o.
• Expresiones del habla gauchesca, muchas veces con valor metafórico: y yo al c. Expliquen qué valor
hoyo lo mandé. adquieren los recursos que
• Refranes y sentencias de intención reflexiva o moralizante, en ocasiones al fi - seleccionaron en el cotext o en
nal de la estrofa a modo de cierre o conclusión: que la tierra nodo fruto / si nota riega que se utilizan: qué significan,
el sudor; más cuesta aprender un vicio/ que aprender a trabajar. cuál es su sent ido.

135
Distintas miradas de un final El~

Hay una hora de la tarde en que la llanura está por decir algo; nunca lo dice Re
o tal vez lo dice infinitamente y 110 lo entendemos... De 1~
Jorge Luis Borges, "El fi n" laber"
R
Jorge Luis Borges, uno de los grandes escritores del siglo XX, demostró siem- nunc1
pre un interés particular por la literatura argentina del siglo XIX, en especial, por la naria
gauchesca. Muchos de sus ensayos y conferencias dan cuenta de ello; estudió la se dil
obra de los escritores gauchescos anteriores a Hernández, ana lizó y valoró el Martín en el
Fierro, polemizó con las interpretaciones que otros habían form ulado de la obra. que ]
En una entrevista, Borges señaló: "Hernández fue indiscutiblemente un gran segu
poeta. Yo creo que debemos admirar la obra de Hernández, que es muy impor- apari
tante, pero no a su personaje. En esto yo creo que hay un error: el culto just o de la forai
obra ha llevado al culto absurdo del gaucho Martín Fierro. Es como si uno confun- pulp
diera el cu lto hacia Shakespeare con el culto de Macbeth, que fue un asesino, por no h
ejemplo. Con Martín Fierro ha ocurrido eso. Ahora el ton o de Martín Fierro es muy habí
Ilustración del pintor Juan Carlos lindo, y una de sus felicidades es que todo se enumera; es decir no se corta lo na- ría, 1
Castagnino para la edición de rrado, no se intercalan descripciones inútiles''. yerb
Martín Fierro, publicada por También tomó elementos y situaciones del poema de Hernández como punto Aft
EUDEBA en 1962.
de partida para algunos de sus cuentos: "El fin'; de Ficciones;"Biografía de Tadeo Isi- mo ~

doro Cruz (1829-1874)'; de El Aleph; "Martín Fierro'; de El hacedor. el Sl


Esa relación de intertextualidad entre sus obras y los textos ace¡
anteriores que ellas reelaboran constituye un rasgo manifiesto en en (
la producción de Borges, actualizando temas, motivos y persona- sab:
jes que adquieren una nueva y distinta vigencia.
Dicha reelaboración - que modifica, desdibuja, aclara, com- la f
pleta, supone- genera texto s habitualmente complejos, que par
trabajan en gran parte con los huecos y los silencios de la ficción: ne ~

lo que no se dice, lo que no se sabe, lo que se cree, lo que quizá"su- i~q


ced ió''. Subrayar el carácter opciona l, de posibilidad y de variantes po<
de lo que se dice, acentúa la construcción de la ficción como un
Nochero (c. 1937), obra del pintor argentino rasgo fundamental de la literatura; logra que los hechos relatados en
Florencio Molina Campos (1891-1959). y los modos de contar de otros, quizá extraños, quizá supuesto s, un
quizá distantes, se vuelvan también los propios al ser asimilados
al estilo y el universo borgeano: ello posibilita, por otro lado, que cal
esas historias incursionen en algunos motivos y temas recurren- ga
tes de la obra de Borges (la identidad, los laberintos, la espera, el de!
at:
destino, la infinitud).
Las voces de los narradores en Borges informan y dudan,
avanzan y retroceden, y lo que re latan (los hechos de la historia)
constituye muchas veces una hipótesis posible ... entre otras. La
práctica de la escritura de la ficción supone al mismo tiempo una
reflexión sobre las posibilidades del conocimiento de la realidad.
"El fin'; que se reproduce a continuación, propone otro final
posible. Para comprender y analizar el cuento, es necesario que
Fogón y guitarra (1950), obra del pintor entrerriano relean el canto VII de la primera parte de Martín Fierro y los cantos
Cesáreo Berna Ido de Quirós (1879-1968). XXIX y XXX de La vuelta.

136 1Capítulo 6 La poesía gauchesca


Elfln
odice Recabarren, tendido, entreabrió los ojos y vio el oblicuo cielo raso de junco.
JORGE LUIS
10S. .. De la otra pieza le llegaba un rasgueo de guitarra, una suerte de pobrísimo BORGES
:1 fin" laberinto que se enredaba y desataba infinitamente ...
.'
' ~
¡
Recobró poco a poco la realidad, las cosas cotidianas que ya no cambiaría
(1899-1986)

em- g
¡ nunca por otras. Miró sin lástima su gran cuerpo inútil, el poncho de lana ordi- Nació en Buenos Aires ymurió
x la ~
naria que le envolvía las piernas. Afuera, más allá de los barrotes de la ventana, en Ginebra, Suiza. Escritor de una
~
cultura vastísima, sus numerosas
ó la !, se dilataban la llanura y la tarde; había dormido, pero aún quedaba mucha luz obras, que incluyen ensayo,
;
rrtín
•~ en el cielo. Con el brazo izquierdo tanteó hasta dar con un cencerro de bronce poesía y cuento, lograron un
l. : que había al pie del catre. Una o dos veces lo agitó; del otro lado de la puerta reconocimiento universal y han
¡ 'g
ejercido una notable influencia
1ran i •6 seguían llegándole los modestos acordes. El ejecutor era un negro que había
en la producción de grandes
~
Jor-
:!1 ~e aparecido una noche con pretensiones de cantor y que había desafiado a otro escritores. Entre sus obras en
e la forastero a una larga payada de contrapunto. Vencido, seguía frecuentando la verso se destacan Fervor de
·un-
' ¡;9'
~
o pulpería, como a la espera de alguien. Se pasaba las horas con la guitarra, pero BuenosAires(1923) y Luna de
enfrente (1925); en prosa, los
por no había vuelto a cantar; acaso la derrota lo había amargado. L a gente ya se
cuentos de Ficciones (1944),
nuy había acostumbrado a ese hombre inofensivo. Recabarren, patrón de la pulpe- El Aleph (1949) y El informe de
na- ría, no olvidaría ese contrapunto; al día siguiente, al acomodar unos tercios de Brodie (1970), y los ensayos
yerba, se le había muerto bruscamente el lado derecho y había perdido el habla. de Discusión (1932) y Otras
inquisiciones (1952).
nto A fuerza de apiadarnos de las desdichas de los héroes de la novelas conclui-
lsi- mos apiadándonos con exceso de las desdichas propias; no así
or. el sufrido Recabarren, que aceptó la parálisis como antes había
:tos aceptado el rigor y las soledades de América. Habituado a vivir
>en en el presente, como los animales, ahora miraba el cielo y pen-
na- saba que el cerco rojo de la luna era señal de lluvia.
Un chico de rasgos aindiados (hijo suyo, tal vez) entreabrió
>m- la puerta. Recabarren le preguntó con los ojos si había algún
¡ue parroquiano. El chico, taciturno, le dijo por señas que no; el
ón: negro no contaba. El hombre postrado se quedó solo; su mano
su- izquierda jugó un rato con el cencerro, como si ejerciera un
tes poder.
un L a llanura, bajo el último sol, era casi abstracta, como vista
:los en un sueño. Un punto se agitó en el horizonte y creció hasta ser
:os, un jinete, que venía, o parecía venir, a la casa.
fos Recabarren vio el chambergo, el largo poncho oscuro, el
1ue caballo moro, pero no la cara del hombre, que, por fin, sujetó el
~n- galope y vino acercándose al trotecito. A unas doscientas varas
,el dobló. Recabarren no lo vio más, pero lo oyó chistar, apearse,
atar el caballo al palenque y entrar con paso fume en la pulpería.
:in,
·ia)
La
na
1d.
ial
ue
:os

__....l _____________________________________ 137


Sin alzar los ojos del instrumento, donde parecía buscar algo, el negro dijo vigi
con dulzura: a la
-Ya sabía yo, señor, que podía contar con usted. aho
El otro, con voz áspera, replicó: maj
-Y yo con vos, moreno. Una porción de días te hice esperar, pero aquí he
venido.
Hubo un silencio. Al fin, el negro respondió:
-Me estoy acostumbrando a esperar. H e esperado siete años.
El otro explicó sin apuro:
-Más de siete años pasé yo sin ver a mis hijos. Los encontré ese día y no
quise mostrarme como un hombre que anda a las puñaladas. 1. T
-Ya me hice cargo - dijo el negro-. E spero que los dejó con salud. a. A
El forastero, que se había sentado en el mostrador, se ria de buena gana. fine
Pidió una caña y la paladeó sin concluirla. b. E
-Les di buenos consejos - declaró- , que nunca están de más y no cues- c. S
tan nada. Les dije, entre otras cosas, que. el hombre no debe derramar la sangre per
del hombre. d. E
Un lento acorde precedió la respuesta del negro:
- Hizo bien. Así no se parecerán a nosotros. • "-
-Por lo menos a mí -dijo el forastero y añadió como si pensara en voz e. ¿
alta-: Mi destino ha querido que yo matara y ahora, otra vez, me pone el 2.F
cuchillo en la mano. a. e
El negro, como si no lo oyera, observó: "Ct
-Con el otoño se van acortando los días. de~
- Con la luz que queda me basta -replicó el otro, poniéndose de pie. b."
Se cuadró ante el negro y le dijo como cansado: ter
-Dejá en paz la guitarra, que hoy te espera otra clase de contrapunto. c. ¡
Los dos se encaminaron a la puerta. El negro, al salir, murmuró: 3. 1
- Tal vez en este me vaya tan mal como en el primero. de
El otro contestó con seriedad: re ~

- En el primero no te fue mal. Lo que pasó es que andabas ganoso de a •.,


llegar al segundo. b. ,
Se alejaron un trecho de las casas, caminando a la par. Un lugar de la c. I
1

llanura era igual a otro y la luna resplandecía. De pronto se miraron, se detu- na:
vieron y el forastero se quitó las espuelas. Ya estaban con el poncho en el el ·!
antebrazo, cuando el negro dijo: to '
-Una cosa quiero pedirle antes que nos trabemos. Qye en este encuen-
tro ponga todo su coraje y toda su maña, como en aquel otro de hace siete
años, cuando mató a mi hermano. 1

Acaso por primera vez en su diálogo, M artín Fierro oyó el odio. Su sangre
lo sintió como un acicate. Se entreveraron y el acero filoso rayó y marcó la cara ·I
del negro. ;¡
Hay una hora de la tarde en que la llanura está por decir algo; nunca lo dice
o tal vez lo dice infinitamente y no lo entendemos, o lo entendemos pero es ·/
'I
intraducible como una música .. . Desde su catre, Recabarren vio el fin . Una <I

embestida y el negro reculó, perdió pie, amagó un hachazo a la cara y se tendió


en una puñalada profunda, que penetró en el vientre. Después vino otra que el
pulpero no alcanzó a precisar y Fierro no se levantó. Inmóvil, el negro parecía

138 I Capítulo 6 La poesía gauchesca


ijo vigilar su agonía laboriosa. Limpió el facón ensangrentado en el pasto y volvió
a las casas con lentitud, sin mirar para atrás. Cumplida su tarea de justiciero,
ahora era nadie. Mejor dicho era el otro: no tenía destino sobre la tierra y había
'
~ matado a un hombre.
he
Jorge Luis Borges, Ficciones, en Obras completas, Buenos Aires, Emecé, 197 4.
f
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1~ .l ACTIVIDADES
.:
' ~

10 <
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!
¡ 1. Trabajen con uno o varios diccionarios para resolver las consignas que siguen.
•'
g
i ¡ a. Reflexionen sobre las diferencia s de sentido entre estos términos: fin, final, finito,
.a. ~
~
j finalidad.
! b. El título del cuento alude literal, específicamente, a un determinado fin : ¿a cuál?
~
5- o c. Si piensan en ese título con un significado más amplio e inclusivo, en relación con el
re personaje, la obra y la literatura gauchesca, ¿qué otros valores adquiere?
d. Expliquen los significados de la palabra contrapunto en estos casos:
• "... y que había desafiado a otro forastero a una larga payada de contrapunto:'
• "-Dejá en paz la guitarra, que hoy te espera otra clase de contrapunto:'
e. ¿En cuál de los dos ejemplos la palabra tiene un sentido figurado o metafórico?
2. Relean el último fragmento del cuento: ¿qué sucede?
a. Comenten el significado del final que propone Borges:
"Cumplida su tarea de justiciero, ahora era nadie. Mejor dicho era el otro: no tenía
destino sobre la tierra y había matado a un hombre''.
b. Teniendo en cuenta las frases destacadas en la cita anterior, ¿cuáles son los dos
temas, recurrentes en la obra de Borges, que presenta explícitamente?
c. ¿Qué cambios introduce este fin con respecto al final de Fierro en La vuelta?
3. En el comienzo Recabarren, un personaje testigo al que el narrador toma como eje
de la mirada, es quien observa y oye lo que sucede, sabe lo que alcanza a ver u oír, y
registra el comienzo y el fin de los hechos.
a. ¿Qué sucede entre ambos momentos?
b. Reflexionen sobre los efectos que produce la presencia de ese personaje.
c. Reescriban el comienzo del cuento desde la perspectiva de Recabarren, con un
narrador en primera persona que observa y relata los acontecimientos. Háganlo con
el texto a la vista: si bien no es necesario que imiten el estilo de Borges, mantengan el
tono y el ritmo del original.
d. Elijan o hagan una ilustración para ese nuevo comienzo.

OTROS RECORRIDOS DE LECTURA


• Es importante que completen la lectura de las dos partes del •A quien le interese la historia de Santos Vega, "el payador aquel
Martín Fierro. de la larga fama'; además de la versión de Hilario Ascasubi (Santos
• Si les interesa en particular el tema del folclore (coplas, Vega o Los mellizos de la flor), también pueden leer el poema de
adivinanzas, piropos, relatos tradicionales), dos libros muy Rafael Obligado que se titula Santos Vega.
atractivos son: Retablo popular, de Rafael Jijena Sánchez y • Lean los otros dos cuentos de Jorge Luis Borges que reelaboran
Selección del cancionero popular de La Rioja, de Juan A. Carrizo. situaciones y momentos de la historia de Fierro:"Biografía de
• Lean la caracterización del gaucho malo y del cantor que hace Tadeo Isidoro Cruz (1829-1874)" (en El Aleph) y"Martfn Fierro" (en El
Sarmiento en el capítulo 2 de Facundo. hacedor).

139
EL ESCRITOR ARGENTINO Y LA TRADICIÓN
[... ] ahí 1 se lee que los argentinos poseemos un mejicano o un español pueden comprender inmediata-
poema clásico, el Martín Fierro, y que ese poema debe mente las poesías de los payadores, de los gauchos, qu
ser para nosotros lo que los poemas homéricos fue- y en cambio necesitan un glosario* para comprender, rer
ron para los griegos. Parece difícil contradecir esta siquiera aproximadamente, a Estanislao del Campo o mE
opinión, sin menoscabo del Martín Fierro . Creo que el Ascasubi. qu
Martín Fierro es la obra más perdurable que hemos Todo esto puede resumirse así: la poesía gau- Si 1
escrito los argentinos; y creo con la misma intensidad chesca, que ha producido -me apresuro a repetirlo- en
que no podemos suponer que el Martín Fierro es, como obras admirables, es un género literario tan artificial re1
algunas veces se ha dicho, nuestra Biblia, nuestro libro como cualquier otro. En las primeras composiciones mé
canónico* . gauchescas, en las trovas* de Bartolomé Hidalgo, ya as
[... ] Rojas 2 estudia la poesía de los gauchescos, es hay un propósito de presentarlas en función del gau-
decir, la poesía de Hidalgo, Ascasubi, Estanislao del cho, como dichas por gauchos , para que el lector las
Campo y José Hernández, y la deriva de la poesía de lea con una entonación gauchesca. Nada más lejos de
los payadores, de la espontánea poesía de los gau- la poesía popular. El pueblo - y esto yo lo he obser-
chos. Hace notar que el metro de la poesía popular es vado no solo en los payadores de la campaña, sino
el octosílabo y que los autores de la poesía gauchesca en los de las orillas de Buenos Aires- , cuando versi-
manejan ese metro, y acaba por considerar la poesía fica, tiene la convicción de ejecutar algo importante,
de los gauchescos como una continuación o magnifi- y rehuye instintivamente las voces populares y busca
cación de la poesía de los payadores. voces y giros altisonantes. Es probable que ahora la
Sospecho que hay un grave error en esta afirma- poesía gauchesca haya influido en los payadores y es-
ción; podríamos decir un hábil error, porque se ve que tos abunden también en criollismos, pero en el princi-
Rojas, para dar raíz popular a la poesía de los gauches- pio no ocurrió así, y tenemos una prueba (que nadie ha
cos, que empieza en Hidalgo y culmina en Hernández, señalado) en el Martín Fierro.
la presenta como una continuación o derivación de Ja El Martín Fierro está redactado en un español de
de los gauchos. [...] entonación gauchesca y no nos deja olvidar durante
Entiendo que hay una diferencia fundam ental en- mucho tiempo que es un gaucho el que canta; abunda
tre la poesía de los gauchos y Ja poesía gauchesca . en comparaciones tomadas de la vida pastoril; sin em- 1. En
Basta comparar cualquier colección de poesías popu- bargo , hay un pasaje famoso en que el autor ol vida la ga
lares con el Martín Fierro, con el Paulina Lucero , con esta preocupación de color local y escribe en un espa-
desa
el Fausto, para advertir esa diferencia , que está no ñol general, y no habla de temas vernáculos, sino de
menos en el léxico* que en el propósito de los poe- grandes temas abstractos, del tiempo, del espacio, 2.¿C
tas. Los poetas populares del campo y del suburbio del mar, de la noche. Me refiero a la payada entre Mar- 3.5u
versifican temas generales: las penas del amor y de tín Fierro y el Moreno, que ocupa el fin de la segunda que l
la ausencia, el dolor del amor, y lo hacen en un léxico parte. Es como si el mismo Hernández hubiera que-
4.ld·
muy general también; en cambio, los poetas gauches- rido indicar la diferencia entre su poesía gauchesca y
cos cultivan un lenguaje deliberadamente popular, que la genuina poesía de los ga uchos. Cuando esos dos S. EI
los poetas populares no ensayan. No quiero decir que gauchos, Fierro y el Moreno, se ponen a cantar, olvi- su pi
el idioma de los poetas populares sea un español co- dan toda afectación gauchesca y abordan temas filo- ensz,
rrecto, quiero decir que si hay incorrecciones son obra sóficos. [... ]
de la ignorancia. En cambio, en los poetas gauchescos La idea de que la poesía argentina debe abundar en • Pro
1

hay una busca de las palabras nativas, una profusión rasgos diferenciales argentinos y en color local argen- • De· 1

de color local. La prueba es esta: un colombiano, un tino me parece una equivocación. [... ] • Ref

·Em
• Us;
l
1Borges se refiere al libro El payador, de Leopoldo Lugones, 2 Se refiere a Ricardo Rojas, crítico e historiador de la literatura percl
publicado en 1916. Lugones consideró al Martín Fierro como un argentina. Situó al Martín Fierro como un poema naciona l de
6.51
poema épico porque expresa la vida heroica de los gauchos que ca rácter épico, junto con Facundo, y lo consideró germen de otros
lucharon por su libertad. (La nota es nuestra , es decir, no forma géneros en la literatura nacional. (La nota es nuestra, es decir, no
parte del texto original de Borges.) forma parte del texto original de Borges.)
iata- Además , no sé si es necesario decir que la idea de ingleses, y si le hubiesen dicho que, como inglés, no
hos, que una literatura debe definirse por los rasgos dife- tenía derecho a escribir Hamlet, de tema escandinavo,
ider, renciales del país que la produce es una idea relativa- o Macbeth, de tema escocés. El culto argentino delco-
po o mente nueva; también es nueva y arbitraria Ja idea de lor local es un reciente culto europeo que los naciona-

gau-
.
.J
,
que Jos escritores deben buscar temas de sus países.
Sin ir más lejos, creo que Racine ni siquiera hubiera
listas deberían rechazar por foráneo .
[... ]
lo- entendido a una persona que Je hubiese negado su de-
icial
1nes
f '•
¡ l
recho al título de poeta francés por haber buscado te-
mas griegos y latinos. Creo que Shakespeare se habría Jorge Luis Borges, Discusión, en Obras completas,
>,ya l ~ asombrado si hubieran pretendido limitarl o a temas Buenos Aires, Emecé, 1974 (fragmento).
gau- ' '.f
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s de
ser-
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I de
1nte
J_, ACTIVIDADES
nda
em- 1. En este ensayo Borges polemiza, es decir, cuestiona determinadas posiciones sobre libro canónico: en este caso, el
•ida la gauchesca y el Martín Fierro, y discut e con ellas. ¿De qué autores y textos parte para libro"oficial" o modelo; el que se
;pa- ajusta a ciertos parámetros de
• de desarrollar su posición?
corrección o excelencia.
:io, 2. ¿Cuáles son las ideas que cuestiona? ldentifíquenlas. léxico: vocabulario, conjunto de
~a r- 3. Subrayen en el texto los fragmentos donde plantea su postura, es decir, la hipótesis las palabras de un idioma.
1da que luego demostrará. Intercambien ideas y escriban cuál es esa hipótesis. glosario: lista ordenada de los
ue- términos específicos de un texto,
:a Y 4. Identifiquen y subrayen los argumentos que la sostienen. donde se registran los voca blos y
:los S. El texto argumentativo utiliza ciertas estrategias para convencer al lector y sostener sus definiciones.
1lvi- su propuesta. Busquen y anoten ej emplos de algunas utilizadas por Borges en su trova: composición en verso
'ilo- escrita generalmente para ser
ensayo:
cantada; puede designar tam bién
·en •Proponer ejemplos. al verso en genera l o a una canción
en- •Definir. amorosa.
•Repetir (como modo de enfatizar).
•Emplear subjetivemas.
•Usar conectores que establecen distintas relaciones semánticas (es decir, sin embargo,
pero, por lo tanto, sin duda, por ejemplo, etcétera).
)S
6. Subrayen la conclusión que formu la el texto en el fragmento reproducido.
JO
1. Lean e l siguiente fragmento del libro Vidasdel Gallo ye/ Pollo, del escritor argenti-
no Manuel Mujica Láinez, y resuelvan las consignas que siguen. .
Entre la risa de Ascasubi, barullero, chacotón, y el amargo rictus de H er- fl
nández, que se identificó con lo más sombrío del drama gauchesco, está la
sonrisa de Estanislao del Campo. 1 q
e q

a. Comenten la opinión del autor y formulen la propia a partir de lo que han le ído. r
b. En e l fragmento se emplean subjetivemas que ponen de manifiesto la postura 1 e
del enunciador. Den tres eje mplos y expliquen sus sentidos. en el texto.
J
c. Resuelvan brevemente por escrito.
•¿Por qué es amargo e l rictus de He rnández?
1o a. ¿
·¿En qué reside lo sombrío del dra ma gauchesco en el Martín Fierro? car
•¿Cómo se manifiesta la sonrisa de Del Campo e n Fausto? b. E

2. Lean y traten de escuchar la "Payada de la vaca'; del grupo Les Luthiers, que perte- 3. L
nece a su disco Mastropiero que nunca. pri1

Payada de la vaca
- Dígame usté compañero, - .. . que pa ayudar la salú q
dígame usté compañero y pa que a usté le aproveche, d
y conteste con prudencia nos da la carne y la leche }
cuál es la mansa presencia en generosa actitú, q
que puebla nuestras praderas tiene cola y cuatro patas y
y en melancólica espera y cuando muge hace mu.
con abnegada paciencia a. e
nos da alimento y abrigo - No me asusta el acertijo, cor
fingiendo indiferencia. no me asusta el acertijo b: F
porque a mí no me asusta el acertijo, Fac
-No me asusta el acertijo, no me asusta el acertijo cas
no me asusta el acertijo jamás me ...
y... y ya mi mente barrunta ¡L a vaca! S. L
por donde viene la punta .. . Ya le rimo la respuesta con
da la .. . de un ... de esa .. . de la ... tan ya le rimo la respuesta
difícil historia que de la duda nos saca,
la . .. la destreza y la memoria el animal que usté dice e
son buenas si van en yunta, tiene por nombre la vaca. g
no se ofende si le pido a
me repite la pregunta. - Me extraña mucho, compadre, S¡
me extraña mucho, compadre,
-Nómbreme usté el animal que sea tan ignorante, a. ¿
nómbreme usté el animal una payada brillante b. 11
que no es toro ni cebú ... octosílabos precisa, c. F'
en el final finaliza
-¡La vinchuca! y empieza por adelante,
debe tener ocho versos con rima que se destaca,
y ser de rima elegante. con elegancia lo digo
i
¡
-No me asusta el acertijo,
sin hacer tanta alharaca.
Her-
:stá la
a 1 le contesto en ocho versos -¿Y el animal?

.I
f
(
así su enojo se aplaca,
el error que usté me achaca - ¡Ah! La vaca.
:!ído.
)Stura il1! no es error ni es para tanto
en octosílabos canto
Les Luthiers, Mastropiero que nunca, l 979.

f i
~
o o
. a. ¿Qué rasgos de la payada se mencionan? Busquen más información sobre las
características de la payada.
b. Elijan un tema y escriban una payada con un compañero.

)erte- 3. Lean este fragmento del prólogo escrito por José Hernández, que antecede a la
primera edición de El gaucho Martín Fierro, y resuelvan las actividades.

Me he esforzado, sin presumir haberlo conseguido, en presentar un tipo


que personificara el carácter de nuestros gauchos, concentrando el modo de ser,
de sentir, de pensar y de expresarse que les es peculiar, dotándolo con todos los
juegos de su imaginación llena de imágenes y de colorido, con todos los arran-
ques de su altivez, inmoderados hasta el crimen, y con todos los impulsos
y arrebatos, hijos de una naturaleza que la educación no ha pulido y suavizado.

a. Comenten los fragme ntós destacados y ejemplifiquen, los que sean posibles,
con citas del Martín Fierro.
b. Relean la caracterización del rastreador que hace Sarmiento en el capítulo 2 de
:rtijo, Facundo y establezcan relaciones con la del gaucho que hace Hernández en este
caso.

5. Lean estas afirmaciones de Jorge Luis Borges, extraídas del libro Conversaciones
con Borges, entrevistas de Roberto Alifa no, publicado en 1984.

Yo escribí ese cuento ["El fin"] imaginando que ese hecho, de la manera
en que yo lo relato, pudo haber sido entrevisto por Hernández. Ahora mucha
gente ha dicho que yo escribí ese cuento en contra de Hernández, lo cual es
absurdo. Creo que ese cuento lo habría aprobado el artífice de Martín Fierro;
re, salvo que como yo soy un mal versificador no me animé a escribirlo en verso.

a. ¿Qué quiere decir que ese fin "pudo haber sido entrevisto por Hernández"?
h. Intercambien ideas a favor o en contra de la posición de Borges.
c. Formulen una opinión propia y den los argumentos que la sostienen.
~~-- -- -~~~---------

La
Entre
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Las e
colo
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que
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La poesía española del siglo XX
Entre 1880 y 1914, durante la segunda revolución industrial, surgieron en el
campo filosófico los principios de la mayor parte de las corrientes de pensamiento
contemporáneas. Algunas vanguardias artísticas no pueden comprenderse sin las
bases filosóficas que las sustentaron.
Los artistas desplegaron diversos modos de ver y plasmar la realidad. Así, los
pintores llamados fauvistas optaron por el color; los cubistas desarrollaron la
visión múltiple del objeto y la planimetría; los expresionistas buscaron transmitir
sentimiento y subjetividad; los dadaístas introdujeron un nuevo sistema de
pensamiento, la provocación y la aparente falta de orden; los futuristas, la velocidad
y el dinamismo; los surrealistas, el mundo de los sueños y los fenómenos del
subconsciente. También apareció la abstracción, un arte no figurativo que toma lo
esencial de la realidad y tiene muchas vertientes.
En la Argentina, hacia 1930, influenciados por los europeos, numerosos artistas
p lásticos cambiaron su orientación con innovaciones. Ya desde 1940, muchos se
volcaron a la abstracción. Entre ellos, Josefina Robirosa, que nació en Buenos Aires,
en 1932, pintora, mura lista y dibujante vinculada con el espíritu de la abstracción,
y más tarde, con el expresionismo abstracto y la abstracción lírica. En los años
sesenta formó parte del grupo de artistas del Instituto DiTella, que estimuló las
manifestaciones de la vanguardia porteña.
La obra reproducida se titula Espacio (1968). Es una pintura al óleo en la que
predomina el juego lineal por sobre el de las figuras que determina, que no han sido
creadas desde el contorno, sino por el efecto de volumen y el cambio de color. Tal
vez, podría ser una figura y su reflejo de espaldas. Empleó una paleta de colores fríos
combinados arbitrariamente.
Las obras de Robirosa concentran la luz, el movimiento y la combinación del
color siempre en equilibrio. Utiliza las transparencias en espacios que sugieren
atmósfera de paisaje, o el color pleno en la geometría. De estas últimas, ella dice
que pertenecen a un período en el que intentaba solucionar el desequilibrio de su
energía, o un bloqueo emocional y, por eso, ponía "gente metida en rayitas':
Voces de la poesía española del siglo XX

Castilla
MANUEL
MACHADO El ciego sol se estrella
(1874-1947)
en las duras aristas de las armas,
llaga de luz los petos* y espaldares
Considerado por algunos críticos y flamea en las puntas de las lanzas.
como el poeta nacional, el más El ciego sol, la sed y la fatiga.
representativo de la España de
principios del siglo XX. Por la terrible estepa castellana,
al destierro con doce de los suyos
-polvo, sudor y hierro-, el Cid cabalga.
Cerrado está el mesón a piedra y lodo ...
Nadie responde. Al pomo de la espada
y al cuento de las picas*, el postigo
va a ceder... ¡Qyema el sol, el aire abrasa!
A los terribles golpes,
de eco ronco, una voz pura, de plata
y de cristal, responde ... Hay una niña
muy débil y muy blanca
en el umbral. Es toda
ojos azules, y en los ojos, lágrimas.
Oro pálido nimba*
su carita curiosa y asustada.
"-¡Buen Cid! Pasad ... El rey nos dará muerte,
arruinará la casa
y sembrará de sal el pobre campo
que mi padre trabaja ...
Idos. El Cielo os colme de venturas ... 1\1
En nuestro mal, ¡oh, Cid!, no ganáis nada."
Calla la niña y llora sin gemido .. .
Un sollozo infantil cruza la escuadra ci<
de feroces guerreros,
y una voz inflexible grita: "¡En marcha!"
El ciego sol, la sed y la fatiga.
Por la terrible estepa castellana,
al destierro, con doce de los suyos
-polvo, sudor y hierro- el Cid cabalga. ca
dt
peto: armadura del pecho. Manuel Machado, en Alma. Caprichos. El malpoema, Madrid, dt
pica: lanza larga.
Clásicos Castalia, 2000. te
nimbar: rodear de aureola una figura;
glorificar. q1
se

se

146 I Capítulo 7 La poesía española del siglo XX


XLI ¡Inteligencia, dame
ANTONIO
el nombre exacto de las cosas! MACHADO
Bueno es saber que los vasos .. . Oye mi palabra sea (1875-1939)
nos sirven para beber; la cosa misma,
lo malo es que no sabemos creada por mi alma nuevamente. Poeta español, perteneció a la
para qué sirve la sed. Oye por mí vayan todos generación del 98. Su poesía,
despojada y aparentemente
los que no las conocen, a las cosas;
simple, reclama "el derecho de la
XXIX que por mí vayan todos lírica a contar la pura emoción''.
los que ya las olvidan, a las cosas;
Caminante, son tus huellas que por mí vayan todos
el camino, y nada más; los mismos que las aman, a las cosas . ..
caminante, no hay camino, ¡Inteligencia, dame
JUAN RAMÓN
se hace camino al andar. el nombre exacto, y tuyo, JIMÉNEZ
Al and ar se hace camino, y suyo, y mío, de las cosas! (1881 -1958)
y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca Juan RamónJiménez, en Poesía española del Poeta español de la generación
se ha de volver a pisar. " •. , .~i~jo)O<, Buenos Aires, Abril, 1982. del 98. Su obra señala la t ransición
entre la poesía de fines de siglo XIX
Caminante, no hay camino,
y las vanguardias del siglo XX.
sino estelas en la mar.

/ · Antonio Machado, Proverbios y cantares, en,, ·i ~,·;


Obra completa, Ma~cid, E spasa-Calpe, 1989.
,.._:::.~~ .'!

.\ ..
.,(...::.·,¡·~~~~:·~
~. ·; ..
....
Canción del jinete

C órdoba .
. .- ,. Lejana y sola.
.~...;:~~;< ''.:~:);·?·:;'.'._.""º DAMASO
ALONSO
Mañana lenta , :\."¡;,~ ;',.;.:.¡¡ Jaca* negra, luna grande, (1898-1990)
,,4111" y aceitunas en mi alforja.
Mañana lenta, Aunque sepa los caminos Su obra poét ica privilegia el
cielo azul, yo nunca llegaré a Córdoba. aspecto creativo del lenguaje y
renueva la lírica española.
campo verde,
tierra vinariega*. Por el llano, por el viento,
Y tú, mañana que me llevas. jaca negra, luna roja.
FEDERICO
Carreta La muerte me está mirando GARCÍA LORCA
demasiado lenta, desde las torres de Córdoba. (1898-1936)
carreta
demasiado llena ¡Ay qué camino tan largo! Poeta y dramaturgo. Es el nombre
de mi hierba nueva, ¡Ay mi jaca valerosa! más famoso de la lírica española
del siglo XX, fundamenta l en el
temblorosa y fresca, ¡Ay que la muerte me espera, desarrollo de la poesía de raíz
que ha de llegar - sin darme cuenta- antes de llegar a Córdoba! popular.
seca,
-sin saber cómo- Córdoba.
vinariego: que produce vino.
seca. Lejana y sola. jaca: caballo pequeño.

Dámaso Alonso, en Oscura noticia, Federico García Lo rea, en Canciones (1 921-


Madrid, Espasa-Calpe, 1971. 1924), Madrid, Alianza, 1998.

147
Los géneros literarios L.
L a gallina es la única cocinera que sabe hacer con
un poco de maíz sin huevo un huevo sin maíz.
Ramón G ómez de la Serna

LITERATURA Entre los diferentes discursos sociales que producen las culturas, hay una clase C<
1

determinada que llamamos literatura. Esta cl ase no es un conjunto hom ogéneo, ce,
1

La palabra literatura proviene del sino que comprende textos diversos en sus propósitos, estructuras y recursos. Se-
latín litteratura, de littera, "letra''. g ún estos rasgos, es posible agrupar las obras en distintos géneros litera rios.
Por lo tanto, en su sentido primero,
Si bien los géneros no son inmutabl es y sus rasgos varían según los períodos
el término se refiere al carácter
escrito de los textos, a lo que está históricos, la clasifica ció n tradiciona l es la siguiente: e
"en letras''. En el siglo XIX, literatura • Género narrativo, o épico en su denominación original. Como ya leyeron en el y
pasa a designar una producción capítulo 3, los textos narrativos relatan hechos fi ccionales, en la voz de un narrador;
cultural específica de determinado g
hechos que parten de una situación primera que se modifica y que tienen entre sí
tipo de escritura, o sea, comienza
a emplearse con su significado una re lación temporal y de causa-consecuencia. Desde la modernidad, las formas d
actua l. Como producción oral, características de la narración literaria son la novela y el cuento. n
la literatura nace antes de la
• Género dramático o teatral. A diferencia de la narrativa, el género dramático lé
invención de la escritura; a partir
del desarrollo de la cultura letrada, no se vale de un narrador, sino que el lector conoce a los personajes y sus conflictos
las manifestaciones orales y a través del discu rso directo: el diálogo. El género dramático no es un fenómeno IE
' scritas coexisten. exclusivamente literario, ya que la obra se escribe con la finalidad de convertirse en V
un hecho teatral, es decir, los textos están destinados a la representación escénica e
(por ejemplo: comedias, tragedias, farsas, tragicomedias). Esto transforma al texto
en componente de un espectáculo. I<
· Género lírico, es decir, la poesía lírica. Se refiere a textos escritos preferente- r.
mente en verso, que expresan sobre todo sensaciones y sentimientos. Se cara cteri- lé
zan por la apelación a la sensibilidad, su valor expresivo y el empleo de un lenguaje li
cuyas reglas se apartan del lenguaje de la prosa y del de otros discursos sociales. ~
En la actualidad, los teóricos de la literatura hablan del género ensayístico, con- c
siderando el ensayo como un cuarto género por su grado de elaboración y el em- t
'I p leo de procedimientos habituales en el texto literario.
1

Si bien durante mucho tiempo la escritura en verso fue un ra sgo distint ivo de la
1

literatura, desde la Edad Moderna la práctica del verso se limita a los textos poéti-
cos o líricos; la narración, el teatro y el ensayo emplean genera lmente la prosa.

J, ACTIVIDADES
1. En pequeños grupos, re lean los poemas y resuelvan las siguientes consignas.
a. ¿De qué hablan estos poemas? Enuncien por escrito los temas que presentan. Por
ejemplo: el hombre construye su camino; su propia historia; no existe un destino prefijado.
b. Elijan adjetivos para ca racterizar el vocabula rio y j ustifiquen su elección: específico o
técnico, coloquial, raro, simple, transparente, rebuscado, difícil. Pueden proponer otros.
c. ¿Se juega con la repetición de sonidos, palabras o estructuras sintácticas?
d. ¿Cuáles de estos recursos se emplean: comparación, repetición, cita, metáfora,
definición, imágenes, diálogo, rima ?
e. ¿Necesitaron leer más de una vez cada poema para comprenderlo? ¿Por qué?
2. Escriban un texto breve, a modo de copete, que presente los poemas leídos.
3. ¿Por qué se dice que los textos literarios forman parte de los d iscursos sociales?

I
148 Capítulo 7 La poesía española del siglo XX
• 1

La poesía y el discurso poético


ercon Que el verso sea como una llave que abra milpuertas.
•naíz. Vicente Huidobro
>erna
Desde siempre la poesía, como producción individual y
lase colectiva, forma parte de la vida de los seres humanos, para
1eo, canta r, hacer bromas y divertirse, alabar a los dioses o dor-
. Se- mir a los bebés, relatar las aventuras y los hechos del pasado,
•• acompañar la jornada de trabajo y los juegos grupales.
dos • Así, la poesía se ha ocupado y se ocupa de temas que
'
l. !'
ó
• emocionan y preocupan a las personas, en cualquier tiempo
·nel j ~ 8
y espacio: la amistad, el amor y el cuerpo, la soledad y la an-
:lor;
1 3
o o'
gustia, la guerra, el placer, el dolor, la muerte.
·e sí
' Sin embargo, es difícil definir lo poético. Por un lado, se trata de un concepto, Obra del pintor belga
nas de una abstracción para cuya explicación se recurre habitualmente a un lenguaje René Magritte (1898 -1967),
metafórico; por otro, su concepción, alcances y producción han variado mucho a lo Los amantes, 1928.
tico largo del tiempo, si bien ciertos rasgos persisten.
:tos Un sentido general que se atribuye al término poesía es considerarlo equiva-
:no lente de creación literaria; esta concepción incluye cualquier escrito en prosa o en
!en verso que manifieste una preocupación especial por dar forma litera ria al lenguaje,
1ica es decir, por priv ilegiar la función poética o literaria del lenguaje.
xto En un sentido más estricto, se identifica a la poesía con el poema, en particu-
lar con la poesía lírica: un texto habitualmente escrito en verso, cuyos rasgos ca-
te- racterísticos son el ritmo y el valor expresivo d el lenguaje, y la manifestación de
eri- la subjetividad del yo poético (sensaciones, valores, sentimientos). El yo poético o
aje lírico es la voz del que enuncia o habla en un texto lírico, que se expresa en pri mera
persona. No coincide necesa riamente con el autor del poema porque es una voz
)n- que crea el poeta y se manifiesta en los pronombres personales (yo, me, mi} y las DENOTACIÓN
m- terminaciones verbales de la primera persona ("yo nunca llegaré a Córd oba").
El discurso poético prioriza una expresión personal: manifiesta y genera imá - La denotación es el significado
~la genes y emociones; para ello, explora el plano sonoro y rítmico de las palab ras, directo, habitual, de una palabra
~ti- produce asociaciones a partir de sus sign ificados, busca combinaciones nuevas y
o de una construcción, el literal,
el específico que aparece en
originales en el plano semántico y en los aspectos formales. el diccionario. Por ejemplo,
Por esto, la poesía apela a la capacidad connotativa del lenguaje. La connota- lucha: "combate" o "disputa". La
1 ción es la posibilidad que tiene la pa labra de provocar y evocar distintos sentidos, denotación preva lece en los textos
expositivos, donde predomina la
de sugerir alg o no dicho litera lmente y abrirse a otras significaciones. La conno-
función referencial del lenguaje, es
tación es una característica de la función poética del lenguaje y se manifiesta con

lo.
mayor intensidad en la poesía lírica.
decir, donde importa básicamente
~ información que se brinda. J
Es pertinente aclarar que la capacidad connotativa del lenguaje poético implica
o que no existe un único modo privilegiado de leer (o interpretar) un poema: va rias
interpretaciones son posibles. Como el discurso poético dice de un modo no habi- SEMANTICA
tual, sorprende y establece una relación especia l entre son idos y conceptos; se abre
así a nuevas significaciones, porque el lector asocia de diversas ma neras los senti- En el estudio de los hechos de
lenguaje, el nivel semántico
dos d e las palabras que el texto combina y las imágenes que proponen los versos.
es el que analiza los aspectos
Las sucesivas lecturas de distintas generaciones y distintos períodos históricos, e in- relacionados con el significado de
cluso de una misma persona en diferentes momentos de su vida, provocan nuevas pala bras, construcciones y textos.
connotaciones que dan lugar a otros modos de construir los sentidos de un t exto.

149
La generación del 98 La
en este verbo silencioso y blanco
que habla con líneas y colores, dice
sufa mipueblo trágico. !
Miguel de Unamuno
1
~
¡
me
·con el nombre de generación del 98 se designa a un importante grupo de escri- ~ con
~
tores españoles cuya obra renueva la literatura peninsular de fines del siglo XIX y da f
una impronta muy fuerte a la de las primeras décadas del siglo XX.
-
(
ten/
•;
Estos poetas, ensayistas y novelistas, así como los intelectuales en general, se • épo
~ apc,
vieron profundamente afectados por la crisis moral, política y social que España l
8 glo
vivió a causa de la derrota militar sufrida en la guerra contra Estados Unidos y la
1
consiguiente pérd ida de sus últimas colonias - Puerto Rico, Cuba y las Filipinas- de l
en 1898. Este conflicto se sumó a los problemas internos que aquejaban al país; poli
en una España dolida y angustiada, en un momento en que algunos hablaron de la e:
"desastre'; la producción literaria expresó con intensidad ese dolor, manifestó su por
preocupación por España y se preguntó por la historia y el destino de la Nación. 1

Sus integrantes más representativos son Miguel de Unamuno (1864-1936), Ja- (18~
cinto Benavente (1866-1954), Ramón delValle-lnclán (1866-1936), Pío Baroja (1872- Lorc
1956), Azorín, seudónimo de Juan Martínez Ruiz (1873-1967), Antonio Machado Alei
(1875-1939), Manuel Machado (1874-1947) y Juan Ramón Jiménez (1881-1958).
Detalle de fachada de la casa Ca1
Batlló, realizada por el arquitecto ¿Qué es una generación literaria?
catalán Antonio Gaudí en Ciertas condiciones hacen que un grupo de escritores forme una generación
Barcelona (1904).
literaria, como la generación del 37 en el Río de la Plata (que estudiaron en el capí-
tulo 5), y las generaciones de 1898 y 1927 en España. Estas condiciones son: tier
• se trata de escritores coetáneos, es decir, tienen edades aproximadas;
• la educación recibida y su formación intelectual son semejantes; mu
• se conocen, se tratan y comparten experiencias; fi~l
· hay acontecimientos y situaciones históricas, por lo general críticos, que los marcan; por
• tienen ideas semejantes acerca del arte y la literatura.
¿De qué modo estas condiciones se manifiestan en los integrantes de la genera- tice
ción del 98? Estos escritores nacen entre 1864 y 1881; son autodidactas y, aun en los
universitarios, como Antonio Machado y Miguel de Unamuno, sus lecturas persona-
les influyen decisivamente en su formación y producción. Además, mantienen rela- sen
ciones personales, intercambios epistolares y participan en revistas, diarios y mani-
fiestos literarios. Estos intelectuales sienten con fuerza el impacto de la decadencia clót
Las otras artes del país y la necesidad de devolverle la grandeza perdida. Por otra parte, comparten
El período que va desde fines una visión del mundo que se manifiesta en sus producciones literarias como: var
1
del siglo XIX hasta la Guerra Civil
• preocupación por lo nacional: España es el centro de sus preocupaciones y fon
española (1936-1 939) se destaca
por una producción artística quieren conmover la conciencia nacional; les interesa el paisaje y la historia local; 1

notable, no solo en la literatura.


Hay varios nombres importantes
que sobresalen: entre otros, los
• reacción contra el Romanticismo y el Realismo, en tanto posturas agotadas
que cercenan la libertad artística;
· anti barroquismo, como rechazo a una expresión complicada o indirecta en la
.
fa
(

músicos Isaac Albén iz y Joaquín


Granados, los pintores Ignacio búsqueda de un lenguaje directo y simple; Ar
Zuloaga y Pablo Picasso, y el •I
• desesperanza, pesimismo, en una visión muchas veces trágica de la vida;
arquitecto catalán Antonio Gaudí. ro
• importancia fundamental de los aspectos éticos de la conducta humana.

150 1 Capítulo 7 La poesía española del siglo XX


La generación del 27
La luna cuenta los perros.
blanco Se er¡uivoca y empieza de nuevo.
·es, dice Federico García L orca
'rágico.
!
l
.muno La producción poética de los escritores del 27 está profunda-
~
f mente influenciada por el proceso de la Guerra Civil española y la
¡
~scri - conmoción que precedió y siguió a la Segunda Guerra Mundial.
~yda
'
J Algunos poetas del grupo ven en la literatura un modo de in-
tervenir, como artistas e intelectuales, en los acontecimientos de su
al, se época. La concepción de la función social de la literatura, elaborada
Jaña
s y la
as-
país;
n de
'
l
!

¡:
Q
a partir del Romanticismo en relación con las luchas políticas del si-
g lo XIX, lleva a que el escritor se constituya en una voz que participa
de los conflictos de su tiempo; esto se manifiesta en la conciencia
política de varios autores, que toman partido, y en una práctica de
la escritura que reflexiona sobre el sentido de la literatu ra y la res-
:ó su Las señoritas de Avignon (1907),
ponsabilidad del escritor.
obra del p intor español
l. Los integrantes más representativos de la generación del 27 son Pedro Salinas
Pablo Picasso (1881-1973).
), Ja- (1891-19S1 ), Jorge Guillén (1893- 1984), Gerardo Diego (1896-1987); Federico García
872- Larca (1898-1936), Luis Cernuda (1902-1963); Dámaso Alonso (1898-1990), Vicente
1ado Aleixandre (1898-1984), Rafael Alberti (1902-1999) y Miguel Hernández (1910-1 942).
).
Características de la generación del 27
• Son coetáneos, ya que nacieron alrededor de 1900 (entre 1892 y 191 O).
:ión • Tuvieron formación universitaria; varios fueron profesores.
:apí- · Participaron en actividades culturales, conferencias y congresos que compar-
tieron como escritores y amigos; se escribían e intercambiaba n opiniones y textos.
• La denominación proviene de que en 1927 se cumplió el tricentenario de la
muerte del poeta y dramaturgo Luis de Góngora. Además de la revalorización de su
figura y su obra, esto generó en ellos un interés por la literatura del Siglo de Oro y
can; por la tradición de la poesía española, más allá de las modas imperantes.
• Vivieron en un período en que el conflicto bélico y los enfrentamientos po lí-
era- ticos e ideológicos marcaron, dolorosamente, su s vidas y su producción artística.
dos · El g rupo es heterogéneo, pero su obra permite establecer rasgos comunes:
•na- · como a la generación del 98, España les duele: les preocupa la historia y el pre-
ela- sente del país; el impulso de la creación estética parte a veces del dolor y la angustia;
3ni- · reivindican la tradición de la poesía española: apelan a formas populares y fol -
1cia clóricas de la cultura nacional y regional;
ten · al mismo tiempo actualizan esa tradición: son voces nuevas, vinculadas con las
vanguardias artísticas, y buscan su propio lenguaje; experimentan con los recursos
~s y formales y producen una importantísima renovación poética.
I;
:ias OTROS RECORRIDOS DE LECTURA
• Un tono poético para hablar de la identidad, la memoria, la • Una novela de Miguel de Unamuno que reelabora el mito de Caín
l la fami lia y el amor: dos obras de teatro de los hermanos Manuel y y Abel: Abe/ Sánchez.
Antonio Machado, Las adelfas y El hombre que murió en la guerra. • Si les interesa la poesía, hay antologías de Federico García Lorca
• Para abrir puertas a culturas y tiempos distintos: Selección de y varias ediciones del Romancero gitano; también hay antologías
romances viejos de España y de América (Kapelusz, 1976). con poemas de Miguel Hernández, Rafael Alberti y León Felipe.

151
Poesía de la generación del 98

MIGUEL DE
XVII Yo voy soñando caminos
UNAMUNO e
(1864- 1936) Con esos brazos a la cruz clavados Yo voy soñando caminos si
has hecho, Maestro carpintero, casa de la tarde. ¡Las colinas y
Su obra, combativa, inclasificable, de Dios a nuestra pobre tierra, dándole doradas, los verdes pinos,
lo sitúa como uno de losgrandes morada a nuestro suelo. Cuatro clavos, las polvorientas encinas!... 1
de la generación del 98 y de la
historia literaria de España.
hijos del arte humano, te enclavijan* ¿Adónde el camino irá? l~
al árbol de tu muerte y vida nuestra,
formándole a tu Padre en nuestro suelo Yo voy cantando, viajero
.
(

solar* de amor. Y aquí sueña y descansa, a lo largo del sendero ... 1


su celeste cabeza, en la que el Verbo - La tarde cayendo está- . j
mora increado, como en almohada "En el corazón tenía
recostando en tu pecho, y a tu toque la espina de una pasión; (
siéntese hombre, que es del todo el fin. logré arrancármela un día,
ya no siento el corazón."
Miguel de Unamuno, en El Cristo de Velázquez,
Madrid, E spasa-Calpe, 1963. Y todo el campo un momento
're.
se queda, mudo y sombrío, e
meditando. Suena el viento
en los álamos del río. j
Canción de invierno l
Cantan. Cantan. La tarde más se oscurece; (
¿Dónde cantan los pájaros que cantan? y el camino que serpea* j
Ha llovido. Aún las ramas y débilmente blanquea
están sin hojas nuevas. Cantan. C antan se enturbia y desaparece. I
los pájaros. ¿En dónde cantan 1
los pájaros que cantan? Mi cantar vuelve a plañir*:
No tengo pájaros en jaulas. ''Aguda espina dorada,
No h ay niños que los vendan. Cantan. quién te pudiera sentir
El valle está muy lejos. Nada ... en el corazón clavada." 1
Yo no sé dónde cantan )
los pájaros -cantan, cantan- Antonio Machado, Soledades (1899-1907), en (

los pájaros que cantan. Obra completa, Madrid, Espasa-Calpe, 1989. (

Juan RamónJiménez, Canciones, en Nueva 1


antologíapoética, Buenos Aires, L osada, 1974.

enclavijar: asegurar con clavijas o


clavos una cosa.
solar: casa, terreno.
serpear: andar o moverse como una
serpiente.
plañir: gemir, llorar sollozando.

152 1Capítulo 7 La poesía española del siglo XX


Rosa del caminante

Álamos fríos en un claro cielo azul, La fuente se seca, en torno el vocerío,


RAMÓN DEL
'
~
con timideces de cristal los odres* a la puerta del mesón, VALLE-INCLAN
} sobre el río la bruma como un velo, y las recuas* que bajan hacia el río ... (1866-1936)

fj
y las dos torres de la catedral.
~
¡
Y las niñas que acuden al sermón. Escritor de una obra vastísima,
l
~ Los hombres secos y reconcentrados ¡Mejillas sonrosadas p or el frío, personal y apasionada, en la que
~ ;
~ se destaca, en especial, su teatro.
i las mujeres deshechas de parir, de Astorga, de Zamora, de L eón!
~
'
~

1
rostros obscuros llenos de cuidados,
¡
: : todas las bocas clásico el decir. Ramón del Valle-lnclán, en
1 ''u
~ ó' Claves /fricas, M adrid, E spasa-Calpe, 1995.
.
~
~
s
t
~
g Cantares El poema

Vino, sentimiento, guitarra y poesía ¡No le toques ya más,


hacen los cantares de la patria mía. que así es la rosa!
Cantares ...
Qyien dice cantares dice Andalucía. Juan Ramón J iménez, Piedra y cielo, en Nueva
antología poética, Buenos Aires, Losada, 1974.
A la sombra fresca de la vieja parra,
un mozo moreno rasguea la guitarra...
Cantares ...
Algo que acaricia y algo que desgarra.

L a prima* que canta y el bordón* que llora...


Y el tiemp o callado se va hora tras h ora.
Cantares...
Son dejos* fatales de la raza mora.

No importa la vida, que ya está perdida,


y, después de todo, ¿qué es eso, la vida? ...
07), en Cantares ...
:, 1989.
Cantando la p ena, la pena se olvida.
odre: vasija de cuero que sirve para
Madre, pena, suerte, pena, madre, muerte, contener líquidos, sobre todo, vino.
ojos negros, negros, y negra la suerte ... recua: conjunto de animales de carga.
Cantares ... prima: en algu nos instrumentos de
cuerda, la primera en el orden, la más
En ellos el alma del alma se vierte. delgada.
bordón: en los instrumentos de
Cantares. Cantares de la patria mía, cuerda, la más gruesa, que da los
sonidos más graves.
quien dice cantares dice Andalucía.
dejo: sabor, regusto; impresión que
C antares .. . deja algo; tono o acento peculiar de
No tiene más notas la guitarra mía. una región.

M anuel Machado,
en Antología poética, Madrid, Edaf, 2003.
Los recursos poéticos Recl
Cuando chico, mocoso. Se
Cuando viejo, sabroso. a par1
~
¿Quién soy? ~ t ra ns
:
~ •1
~
Se hace camino al andar En el texto literario, ciertos proced imientos del lenguaje caracterizan la func ión e y pro
García Larca, Alberti, los Machado, poética: se llaman recursos poéticos o figuras. No son exclusivos de la poesía lírica, ~
2
. (
Miguel Hernández, León Felipe y
pero en ella se dan con especial intensidad y la definen. "j ricia)
otros poetas españoles siguen y
seguirán vivos en las voces de los Según con qué aspecto del lenguaje se relacionen, estos recursos pueden ser: .-
<
e

•5
cantautores que los dicen y los fónicos o rítmicos, vinculados con la sono ridad de las palabras y el ritmo; sintácticos, gene
cantan. Muchos de sus poemas relacionados con la construcción de la oración; semánticos, ligados con el signifi-
"e~ ch ad
,g
son muy populares gracias a la
cado de las palabras y expresiones, y gráficos, los que refieren a la distribución de los ~ guita
voz y la música de Ana Belén, Joan
Manuel Serrat, Víctor Manuel y versos en el espacio. .
•3
i
•1
Paco lbáñez, entre otros. ~
e men1
¡::
Recursos fónicos 9 de ce
En los textos poéticos, el componente sonoro se destaca de d iversas maneras. bos: 1
Como ya estud iaron, la rima es un recurso rítm ico; si bien no es esencial para ejem
crear el ritmo, lo enfatiza. La poesía actual no emplea habitualmente la rima, pero un ve
era un recurso frecuente hasta fines del siglo XIX y p rincipios del XX. ("Ro~
La repetición es un procedimiento frecuente que no solo se man ifiesta en la •I
rima con los sonidos finales de los versos; se produce en la reiteración de sonidos, nóni
palabras, construcciones y estructuras sintácticas, como también en la medida de ejem
los versos. A lgunas formas de la repetición son: ch ad
· Aliteración: repetición de sonidos en el mismo verso o en versos sucesivos. Por un el
ejemplo: Nadie responde. Al pomo de la espada /y al cuento de las picas, el postigo que¡
("Castilla'; de Manuel Machado). amb
• Anáfora: repetición de una o más palabras, al comienzo o en el interior de va- origi
rios versos. Por ejemplo, en estos versos de Pedro Salinas: De ti, que nunca te hice,/ Té
de ti, que nunca te hicieron,/ de ti me fío ("Fe mía"). quel
· Estribillo: repetición de un verso, un grupo de versos o una estrofa completa. LorG
Por ejemplo: que por mí vayan todos ("Inteligencia, dame'; de Juan Ramón Jiménez). •I
o ser
Recursos sintácticos Man
Son los que se relacionan con el orden de pa labras y expresiones y con la con s-
trucción oracional. val:¡
• Hipérbaton: alteración del orden sintáct ico habitual; por ejemplo, en estos done
versos de Luis Cernuda: Poeta alguno / su tradición escoge ni su tierra, que equiva le
a decir: poeta alguno(= ningún poeta) escoge su tradición ni su tierra ("La poesía Rec 1

habla en nosotros"). E
· Paralelismo: reiteración de la m isma estructura o con strucción sintáctica, no ráne
de las palabras utilizadas; por ejemplo, en el verso La prima que canta y el bordón pági
que llora... ("Cantares'; de Manuel Machado), se repite la estructura de la construc- blan
ción nominal: artículo, núcleo sustantivo, proposición inclu ida adjetiva. e
· Enumeración: se nombran sucesivament e términos separados por la coma o lenté
unidos por un nexo coordinante. Por ejemplo: ¡Mejillas sonrosadas por el frío,/ de
Astorga, de Zamora, de León! ("Rosa del caminante'; de Ramón del Valle-lnclán).

154 I Capítulo 7 La poesía española del siglo XX


• t

Recursos semánticos
, mocoso. Son los que se relacionan con el significado de las palabras y las construcciones,
sabroso. a partir de la combinación particular que hace la poesía para decir de otro modo y
1iénsoy ? ~ transgredir las reg las lógicas del lenguaje.
"
,s
· Imagen: palabras y construccio nes que impresionan la imaginación del lector
rnción R y provocan algún tipo de represent ación mental. Las imágenes pueden ser:
~
3 lírica, <! · anímicas o afectivas: se refieren a los sentimientos; por ejemplo: Algo que aca-
a
~ ricia y algo que desgarra ("Cantares'; de Manuel Machado).
?n ser: j · sensoriales: generan sensaciones percibidas mediante los sentidos. Estas imá-
cticos,
- genes son visuales, táctiles, auditivas, gustativas u olfativas. En este verso de Ma-
;ignifi- ;
chado, se combinan una imagen visual y una auditiva: un mozo moreno rasguea la
g
de los i guitarra {"Cantares").
j · Comparación: esta figura establece una re lación de semejanza entre un ele- ~ ACTIVIDADES
~
t mento real, que se enuncia, y otro elemento evocado que funciona como término
¡:
Q de comparación. Para vincular ambos términos, se emplea n formas verba les (ver- 1. En pequeños grupos, relea n
eras. bos: parecer, semejar) o nexos comparativos (como, cual, del mismo modo que). Por los poemas de las páginas 152
1 para ejemplo, en el siguiente verso de Ramón del Valle-lnclán: sobre el río la bruma como y 153 y resuelvan las consignas
1, pero un velo, que equiva le a decir: sobre el río la bruma es como un velo o parece un velo que siguen.
("Rosa del caminante"). a. ¿Qué trama textual
1 en la • Metáfora: prod uce una re lación de equivalencia entre palabras que no son si- predomina en "Rosa del
nidos, nónimas, pero a las que el texto les adjudica rasgos de significado en común. Por caminante'; de Ramón del
da de ejemplo: Cantares... / Son dejos fatales de la raza mora ("Cantares'; de Manuel Ma- Valle-lnclán? Justifiquen su
chado). En este caso, el element o rea l (los cantares de Andalucía) es asociado con respuesta.
>s. Por un elemento figurado (los dejos, es decir, los sabores, las impresiones, los gustos), b. Comenten el sentido de la
Jstigo que adq uiere su significado como equivalente en una relación de identid ad entre segunda estrofa.
ambos (cantares = dejos). Esta asociación provoca una representación diferente, c. ¿Qué significan, qué sugieren
:le va- original, de un objeto, una idea o un sentimiento. los dos últimos versos?
hice,/ Tamb ién hay metáfora cuando a un elemento se le atribuye una ca racterística d. ¿A quién habla el yo lírico en
que habitualmente no está asociada con él. Por ejemplo, en estos versos de García el poema "XVll'; de Unamuno?
pi eta. Larca: La tarde loca de higueras / Yde rumores calientes. ¿Qué sentimientos religiosos
~n ez). • Personificación: consiste en otorgar características humanas a objetos, ideas expresa el texto?
o sentimientos. Por ejemplo: Y el tiempo callado se va hora tras hora ("Cantares'; de e. ¿Qué formas de la repetición
Manuel Machado). aparecen en los poemas de
cons- • Antítesis: esta figura contrapone conceptos, pues v incula expresiones de un Antonio y Manuel Machado?
valor semántico opuesto, como en est os versos de Pedro Sa linas: de ti me ffo, re- Den ejemplos.
estos dondo ! seguro azar ("Fe mía"). f. ¿En qué consisten y cómo se
iivale llaman los recursos empleados
oesía Recursos gráficos en estos versos?
El verso tiene una dimensión gráfica, un ritmo visua l, que la poesía contempo- •¿Adónde el camino irá?
:a, no ránea ha explorado con los distintos recursos que da la ubicación del texto en la • ... el campo un momento /
>rdón página: los cortes final es del verso y del poema, las sangrías y otros espacios en se queda, mudo y sombrío,/
;true- b lanco, la tipografía, el dibujo que arma el recorrido de versos y estrofas. meditando.
Como ejemplos, observen la distribución en la página de los poemas "Mañana g. Comenten entre todos
mao lenta'; de Dámaso Alonso (página 147) y"Ajedrez'; de Gerardo Diego (página 157). "El poema'; de Juan Ramón
1,/de Jiménez, y sugieran un título
con valor connotativo.

155
Poesía de la generación del 27 Ajedr¡

La guitarra La encerrada, IV H oylo


1
RAFAEL ALBERTI Todos
(1902- 1999)
Empieza el llanto L o sabe ya todo el pueblo.
de la guitarra. Lo canta el sillero*,
Autor de una poesía popular que Se rompen las copas lo aumenta
busca sus motivos en el folclore y de la madrugada. el barbero, Debaj
la tradición española. siempr
Empieza el llanto Lo dice el albardonero*,
de la guitarra. yel yegüero
Es inUtil callarla. lo comenta Y aquí
E s imposible en las esquinas con el mulero.
callarla. Lo cuenta
Llora monótona el carpintero al sepulturero.
como llora el agua, ¡Lo saben ya hasta los muertos!
como llora el viento ¡Y tú sin saberlo!
sobre la nevada.
Uno de los grandes renovadores Es imposible Rafael Alberti, en Marinero en tierra.
de la poesía española callarla. La amante. El alba de alhelí, Madrid, Castalia, 1990. todaví
contemporánea; parte de su obra © Rafael Alberti, 1929. El alba del alhelí, S.L. lluevei
está motivada por la Guerra Civi l
Llora por cosas
española. lejanas.
Arena del Sur caliente Canción última Algun
que pide camelias blan cas.
Llora flech a sin blanco, Pintada, no vacía: Lamt
la tarde sin mañana, pintada está mi casa
y el primer pájaro muerto del color de las grandes
sillero: persona que se dedica a hacer sobre la rama. pasiones y desgracias.
sillas o a venderlas. ¡Oh, guitarra!
a lbardonero: el que prepara las Corazón malherido Regresará del llanto
bestias de carga.
por cinco espadas. adonde fue llevada
con su desierta mesa,
Federico García Lorca, Poema del cantejondo, con su ruinosa cama.
en Antología poética, Madrid, Edaf, 1981.
Florecerán los besos
sobre las almohadas,
y en torno de los cuerpos Lap1
elevará la sábana
su intensa enredadera Lapc
nocturna, perfumada .. la mi~

El odio se amortigua ymu<


detrás de la ventana. las ge

Será la garra suave. Noei


sino 1
D ejadme la esperanza. a qui1

Miguel Hernández, en El hombre acecha.


Cancioneroy romancero de ausencias, Madrid,
Cátedra, 1988.
156 I Capít ulo 7 La poesía española del siglo XX
Ajedrez Fe mía
PEDRO SALINAS
(1891-1951 )
Hoy lo he visto claro No me fío de la rosa
Todos mis poemas de papel,
tantas veces que la hice Poeta de una lírica intimista y
son solo epitafios yo con mis manos. reflexiva. Su obra La voz a ti debida
fue considerada el "gran poema
Ni me fío
contemporáneo de amor''.
Debajo de cada cuartilla* de la otra rosa verdadera,
siempre hay un poco de mis huesos hija del sol y sazón*,
.¡ la prometida del viento .
• l
: l Y aquí en mi corazón De ti, que nunca te hice,
11 se ha cariado* el piano. de ti, que nunca te hicieron, GERARDO DIEGO
(1896-1987)
N o sé quién habrá sido de ti me fío, redondo
J~ !~ pero el reloj seguro azar.
~ ;
o ' en vez del péndulo vivo Su obra poética, que se hace eco de
colgaba un ancla anclada Pedro SaUnas, en Poesía española del la situación de España, combina la
siglo XX, Buenos Aires, Abril, 1982. experimentación de la vanguardia
y la fidelidad a lo clásico.
tierra. Y sin embargo
1990. todavía del paracaídas
í,S.L. llueven los cánticos

Alguna vez ha de ser

La muerte y la vida
me están cuartilla: hoja de papel para escribir
jugando al ajedrez cuyo tamaño es el de la cuarta parte
de un pliego.
cariado: atacado de caries.
Gerardo Diego, Limbo, en Poesía española del siglo XX,
sazón: punto o madurez de las cosas;
Buenos Aires, Abril, 1982.
ocasión, tiempo oportuno.

/'
·I

La poesía habla en nosotros ¿Puede cambiar eso? Poeta alguno


su tradición escoge ni su tierra, LUIS CERNUDA
(1902-1963)
L a poesía habla en nosotros ni tampoco su lengua; él las sirve,
la misma lengua con que h ablaron fielmente si es posible.
[antes, M as la fidelidad más alta Su obra posee un estilo personal,
y mucho antes de nacer nosotros, es para su conciencia, yo a esa sirvo alejado de las modas, se aparta del
lenguaje elaborado para acercarse
las gentes en que h allara raíz nuestra pues, sirviéndola, así a la poesía a un tono coloquial, despojado.
[existencia. al mismo tiempo sirvo.
No es el poeta solo quien ahí habla,
sino las bocas mudas de los suyos Luis Cernuda, en La realidady el deseo,
a quienes él da voz y les libera. México, Séneca, 1964.

cha.
.rid,
>88.
157
¿Hay historias de gente común?
También el cuento y la novela han abordado, de modos distintos, aspectos polí-
ticos, sociales y morales de España. Entre los narradores posteriores a la generación c
del 27, Ana María Matute, una de las voces más personales del siglo XX, ha sido con-
! s u
siderada por algunos como la mejor novelista de la posguerra española.
Esta escritora, esencialmente realista, apela con frecuencia a una prosa lírica y a jf
¡ ¡
técnicas narrativas innovadoras para retratar la sociedad con una mirada sensible p
y atenta, que puede ser tri ste, irónica, dolorosa. Suelen ser motivos de la ficción en f1 ;;
;

sus obras la hipocresía y la mentira, las pequeñas miserias, el desinterés por el otro, e

pero también la valoración de las situaciones cotidianas, la importancia de las pe- p
queñas historias de gente común. 1 e
En un tono simple y ti erno, "La felicidad" propone acercarse a un mundo donde
Ji
las cosas no parecen ser de un único modo posible, y en sus diferentes matices con- rr
fluyen la locura, el frío, la maternidad y el dolor.
1
o
i Q u

La felicidad q

Cuando llegó al pueblo, en el auto de línea*, era ya anochecido. El regatón*
ANA MARÍA de la cuneta brillaba como espolvoreado de estrellas diminutas. Los árboles,
MATUTE(1926)
desnudos y negros, crecían hacia un cielo azulado, transparente. d
El auto de línea paraba justamente frente al cuartel d e la Guardia Civil. L as ti¡

Novelista y cuentista, una de las puertas y las ventanas estab an cerradas. H acía frío. Solamente una bombilla, a
vocesfemeninas más importantes sobre la inscripción de la puerta, emanaba un leve resplandor. Un grupo de p
de la literatura española del
mujeres, el cartero y un guardia esperaban la llegada del correo. Al descender
siglo XX. Fue candidata al Premio
Nobel de literatura y su obra n otó crujir la escarcha b ajo sus zapatos. El frío mordiente se le p egó a la cara.
ha sido traducida a numerosos Mientras bajaban su maleta de la baca*, se le acercó un hombre.
idiomas. Entre sus obras se - ¿Es usted don L orenzo, el nuevo m édico? - le dijo.
destacan: Primera memoria (1959),
Historias de Ja Artámila (1961) y Asintió.
Olvidado rey Gudú (1996). -Yo, A tilano Ruigómez, alguacil, para servirle.
L e cogió la maleta y echaron a andar hacia las primeras casas de la aldea. El
azul de la noche naciente empap aba las paredes, las piedras, los arracimados p
tejadillos. D etrás d e la aldea se alargaba la llanura, levemente ondulada, con H
pequeñas luces zigzagueando en la lejanía. A la derecha, la sombra oscura de c
los pinares. Atilano Ruigómez iba con paso rápido, junto a él.
-He de decirle una cosa, don L orenzo. g
-Usted dirá.
-Ya le hablarían a usted de lo mal que andaba la cuestión
del alojamiento. Ya sabe que en este pueblo, p or no haber, ni

auto de línea: servicio de transporte


---- posada hay.
-Pero, a mí me dijeron . . .
r
I
público que circula entre dos o más - ¡Sí, le dirían! Mire us ted: nadie quiere I
poblaciones. alojar a nadie en casa, ni en tratándose del
regatón: de regato: arroyuelo. m éd ico. Ya sabe: andan malos tiem-
baca: sitio en la parte superior de
las diligencias y otros coches para
pos. Dicen todos por ahí que no se
trasladar el equipaje. pueden comprometer a dar
d e com er. .. Nosotros n os
arreglamos con cualquier cosa: un trozo de cecina*, unas patatas .. . Las mujeres
van al trabajo, como nosotros. Y en el invierno no faltan ratos malos para ellas.
:>olí- Nunca se están de vacío. Pues eso es: no pueden andarse preparando guisos y
ción comidas para uno que sea de compromiso. Ya ni cocinar deben saber. .. Disculpe
:on- usted, don Lorenzo. La vida se ha puesto así.
-Bien, pero en alguna parte he de vivir.
3ya J? -¡En la calle no se va usted a quedar! Los que se avinieron a tenerle en un
;ible i principio se volvieron atrás, a última hora. Pero ya se andará ...
1 en ~ Lorenzo se paró consternado. Atilano Ruigómez, el alguacil del Ayunta-
)tro, -
~ 1 miento, se volvió a mirarle. ¡Qyé joven le pareció, de pronto, allí, en las primeras
pe-
ji
¡ :
piedras de la aldea, con sus ojos redondos de gorrión, el pelo rizado y las manos
en los bolsillos del gabán raído!
nde jl -No se me altere. Usted no se queda en la calle. Pero he de decirle: de
:on- momento, solo una mujer puede alojarle. Y quiero advertirle, don Lorenzo: es Para buscar otros textos,
~
Q '''
g una pobre loca. comentarios y presentación
de los autores, algunos sitios que
- ¿Loca ... ? pueden consultar son:
-Sí, pero inofensiva. No se apure. L o único que es mejor advertirle, para http://www.poemasde.net
que no le choquen a usted las cosas que le diga .. . Por lo demás, es limpia, pací- http://amediavoz.com
fica, y muy arreglada. http://www.los-poetas.com
http://www.poemas-del-alma.com
·ó n* -Pero loca ... ¿qué clase de loca?
oles, -Nada de importancia, don Lorenzo. Es que . .. ¿sabe? Se le ponen "humos"
dentro de la cabeza, y dice despropósitos. Por lo demás, ya le digo: es de buen
Las trato. Y como solo será por dos o tres días, hasta que se le encuentre mejor
illa, acomodo ... ¡No se iba usted a quedar en la calle con una noche así, como se
, de prepara!
der La casa estaba al final de una callecita empinada. Una casa muy pequeña, con
l. un balconcillo de madera quemada por el sol y la nieve. Abajo estaba la cuadra*
vacía. La mujer bajó a abrir la puerta, con un candil de petróleo* en la mano. Era
menuda, de unos cuarenta y tantos años. Tenía el rostro ancho y apacible, con
los cabellos ocultos bajo un pañuelo anudado a la nuca.
- Bienvenido a esta casa -le dijo. Su sonrisa era dulce.
.El La mujer se llamaba Filomena. Arriba, junto a los leños encendidos, le había
:ios preparado la mesa. Todo era pobre, limpio, cuidado. Las paredes de la cocina
::on habían sido cuidadosamente enjabelgadas* y las llamas prendían rojos resplan-
. de dores a los cobres* de los pucheros, a los cacharros de loza amarilla .
-Usted dormirá en el cuarto de mi hijo - explicó, con su voz un tanto apa-
gada-. Mi hijo ahora está en la ciudad. ¡Ya verá cómo es un cuarto muy bonito!
Él sonrió. Le daba un poco de lástima, una piedad extraña, aquella mujer
ión menuda, de movimientos rápidos, ágiles.
~ni El cuarto era pequeño, con una cama de hierro negra, cubierta con colcha cecina: carne salada y seca.
cuad ra: lugar cubierto destinado
roja, de largos flecos. El suelo de madera se notaba fregado y frotado con estro-
para estancia de los caballos y bestias
pajo. Olía a lejía* y a cal. Sobre la cómoda brillaba un espejo, con tres rosas de de carga; caballeriza.
ere papel prendidas en un ángulo. candil de petróleo: lámpara de
del L a mujer cruzó las manos sobre el pecho: aceite.
enjabelgado: blanqueado con cal.
m- -Aquí duerme mi Manolo - dijo-. ¡Ya se puede figurar cómo cuido yo cobres: referencia al material de las
, se este cuarto! vasijas usadas para cocinar.
:lar - ¿Cuántos años tiene su hijo? - preguntó, por decir algo, mientras se des- lejía: lavandina.
lOS pojaba del abrigo.

159
- Trece cumplirá para el agosto. ¡Pero es más listo! ¡Y con unos ojos ... ! lue¡
Lorenzo sonrió. La mujer se ruborizó: ·Él
1
- Perdone, ya me figuro : son las tonterías que digo ... ¡Es que no tengo más Pas
que a mi Manuel en el mundo! Ya ve usted: mi pobre marido se murió cuando el ~

niño tenía dos meses. Desde entonces ... .


~

~ ~i1
Se encogió de hombros y suspiró. Sus ojos, de un azul muy pálido, se cubrie- tler
ron de una tristeza suave, lejana. Luego, se volvió rápidamente hacia el pasillo: t
~ la
:
-Perdone, ¿le sirvo ya la cena? me
-Sí, en seguida voy.
i
l
Cuando entró de nuevo en la cocina la mujer le sirvió un plato de sopa, que -•

tomó con apetito. Estaba buena.
- Tengo vino . .. -dijo ella con timidez-. Si usted quiere ... Lo guardo, 1 tar:
siempre, para cuando viene a verme mi Manuel.
- ¿Qyé hace su Manuel?-preguntó él.
1!1
~ las
¡:: ;
Empezaba a sentirse lleno de una paz extraña, allí, en aquella casa. Siem- o J do1
pre anduvo de un lado para otro, en pensiones malolient es, en barrios tristes pa1
y cerrados por altas paredes grises . Allá afuera, en cambio, estaba la tierra: la poi
tierra hermosa y grande de la que procedía. Aquella mujer - ¿loca?, ¿qué clase
de locura sería la suya?- también tenía algo de la tierra, en sus manos anchas y dei
morenas, en sus ojos largos, llenos de paz.
- Está de aprendiz de zapatero, con unos tíos. ¡Y que es más avisado*! Verá
qué par de zapatos me hizo para la Navidad pasada. Ni a estrenarlos me atrevo. no
Volvió con el vino y una caja de cartón. L e sirvió el vino despacio, con gesto nn
comedido de mujer que cuida y ahorra las buenas cosas. Luego abrió la caja, que
despidió un olor de cuero y almendras amargas. pu
-Ya ve usted, mi M anolo ...
Eran unos zapatos sencillos, nuevos, de ante* gris.
-Muy bonitos. la
- No hay cosa en el mundo como un hijo - dijo Filomena, guardando los
zapatos en la caja-. Ya le digo yo: no hay cosa igual. m:
Fue a servirle la carne y se sentó luego junto al fuego. Cruzó los brazos
sobre las rodillas . Sus manos reposaban y L orenzo pensó que una paz extraña,
inaprensible, se desprendía de aquellas palmas endurecidas.
-Ya ve usted -dijo Filomena, mirando hacia la lumbre- . No tendría yo, ba
según todos dicen, motivos para alegrarme mucho. Apenas casada quedé viuda.
Mi marido era jornalero*, y yo ningún bien tenía. Solo trabajando, trabajando,
saqué adelante la vida. Pues ya ve: solo porque le tenía a él, a mi hijo, he sido
muy feliz. Sí, señor : muy feliz. Verle a él crecer, ver sus primeros pasos, oírle
cuando empezaba a hablar. .. ¿no va a trabajar una mujer, hasta reventar, solo
por eso? Pues, ¿y cuando aprendió las letras, casi de un tirón? ¡Y qué alto, qué
avisado: inteligente, sagaz.
espigado me salió! Ya ve: por ahí dicen que estoy loca. Loca porque le he quita-
ante: alce (mamífero rumiante
parecido al ciervo).
do del campo y le he mandado a aprender un oficio. Porque no quiero que sea
jornalero: persona que trabaja y un hombre quemado por la tierra, como fue su pobre padre. L oca me dicen, m
gana por día de trabajo. sabe usted, porque no me doy reposo, solo con una idea: mandarle a mi M anuel
quincallero: persona que fabrica o
dinero para pagarse la pensión en casa de los tíos, para comprarse trajes y libros.
vende quincalla (objetos de metal,
generalmente de poco valor, como ¡Es tan aficionado a las letras! ¡Y tan presumido! ¿Sabe usted? Al quincallero*
tijeras, dedales). le compré dos libros con láminas de colores, para enviárselos. Ya le enseñaré

160 1 Capítulo 7 La poesía española del siglo XX


luego ... Yo no sé de letras, pero deben ser buenos. ¡A mi Manuel le gustarán!
¡Él sacaba las mejores notas en la escuela! Viene a verme, a veces. E stuvo por
1ás Pascua y volverá para la Nochebuena.
) el Lorenzo escuchaba en silencio, y la miraba. L a mujer, junto al fuego, parecía
nimbada* de una claridad grande. Como el resplandor que emana a veces de la
1e- tierra, en la lejanía, junto al horizonte. El gran silencio, el apretado silencio de nimbado: cubierto o rodeado de una
:>: la tierra, estaba en la voz de la mujer. "Se está bien aquí -pensó-. No creo que aureola.
me vaya de aquí".
La mujer se levantó y retiró los platos.
ue -Ya le conocerá usted, cuando venga para la N aviciad.
- Me gustará mucho conocerle -dijo Lorenzo-. D e verdad que me gus-
fo, tará.
-Loca, me llaman -dijo la mujer. Y en su sonrisa le pareció que vivía toda
la sabiduría de la tierra, también-. Loca, porque ni visto ni calzo, ni un lujo me
n- doy. Pero no saben que no es sacrificio. Es egoísmo, solo egoísmo. Pues, ¿no es
:es para mí todo lo que le dé a él? ¿No es él más que yo misma? ¡No entienden esto
la por el pueblo! ¡Ay, no entienden esto, ni los hombres, ni las mujeres!
tse -Locos son los otros -dijo Lorenzo, ganado por aquella voz-. L ocos los
sy demás.
Se levantó. L a mujer se quedó mirando al fuego, como ensoñada.
:rá Cuando se acostó en la cama de Manuel, bajo las sábanas ásperas, como aún
'O. no estrenadas, le pareció que la felicidad, ancha, lejana, vaga, rozaba todos los
;to rincones de aquella casa, impregnándole a él, también, como una música.
ue A la mañana siguiente, a eso de las ocho, Filomena llamó tímidamente a su
puerta: J: ACTIVIDADES
-Don Lorenzo, el alguacil viene a buscarle ...
Se echó el abrigo por los hombros y abrió la puerta. Atilano estaba allí, con 1. Resuman oralmente la
la gorra en la mano: historia relatada en sus tres
os - Buenos días, don Lorenzo. Ya está arreglado ... Juana, la de los Guadarra- momentos: situación inicial,
mas, le tendrá a usted. Ya verá cómo se encuentra a gusto. complicación, resolución.
os Le interrumpió, con sequedad: 2. Caractericen a los dos
ía, - No quiero ir a ningún lado. Estoy bien aquí. personajes centrales: quiénes y
Atilano miró hacia la cocina. Se oían ruidos de cacharros. La mujer prepara- cómo son.
'0, ba el desayuno. 3. ¿Cómo se explica la
la. -¿Aquí ... ? sensación de paz y felicidad
lo, Lorenzo sintió una irritación pueril. que tiene Lorenzo?
:lo -¡ Esa mujer no está loca! -dijo-. Es una madre, una buena mujer. No 4. El narrador se desplaza,
·le está loca una mujer que vive porque su hijo vive ... , solo porque tiene un hijo, como una cámara
lo tan llena de felicidad. cinematográfica, del exterior
.ié Atilano miró al suelo con una gran tristeza. L evantó un dedo, sentencioso, (las calles del pueblo) hacia el
a- y dijo: interior de la casa. ¿Cuáles son
ea - No tiene ningún hijo, don Lorenzo. Se le murió de meningitis, hace lo las diferencias entre un espacio
n, menos cuatro años. y el otro?
el S. ¿Cuál es la situación de los
>S. Ana María Matute, Historias de la Artámila, pueblos de España según el
o* Barcelona, Destino, 1975. relato?

161

d
~
~
:
El DISCURSO POÉTICO s
Tradicionalmente se ha afirmado que la poesía es
algo indefinible, inefable, un concepto difícil de cerrar
• La ambigüedad3 de las palabras: la poesía apela 1i
~
¡ ¡
a esa posible ambigüedad y manifiesta los conceptos
en categorías. En realidad, en tanto se trata de una con rodeos, de una manera oblicua; puede decir una ¡
-~
abstracción , el concepto poesía debe ser ana lizado cosa que signifique otra. La prosa, en cambio, intenta ,
a través del tipo de discurso en el que se realiza (es
decir, el poema) y de las características del fenómeno
despejar esa ambigüedad e ident ifica la pa labra con
uno de sus posibles significados. .' 1
¡
l
que lo constituye (es decir, la palabra poética).
La palabra lírica proviene de lira, un antiguo ins-
• Una emoción, que se sugiere intenciona lmente 1• ío
u

.s
~
y tiene un carácter transitivo: el poeta la siente y la
trumento de cuerdas con el que los poetas primitivos R
transmite a los demás. La poesía lírica no busca solo
acompañaban sus poemas puesto que, originalmente, i g
narrar algún hecho o describir objetos, sino mostrar ~
se cantaban. la emoción que esos hechos y objetos producen en el
t
~

Desde entonces, el nombre poesía lírica designa a o


poeta.
la que expresa más directamente los sentimientos del
poeta: el asombro ante los misterios de la vida, el do-
Prosa y verso
lor del amor frustrado, el entusiasmo del amor corres-
A simple vist a, un elemento que permite diferen-
pondido, el temor a la muerte, el deseo de libertad ...
ciar la prosa de la poesía es la disposición del texto
Cualquier sentimiento puede originar la actitud lírica.
en el espacio. Desde el moment o en que el t exto del
El sentimiento , que aparece elaborado, mediatizado
poema aparece como una forma de discurso part!cular
en el texto es el motor básico del poema , que trans-
por su ubicación en la página, ent ramos ~n ~n ~uego
form a la vi~encia en un acto poético, la actualiza Y le
poético, en el que funcionan otras reglas smtact 1cas Y
otorga un sentido.
semánticas.
En el discurso poético convergen varios elementos
La prosa se enunci a de corrid o; los cortes, si len-
diferentes.
• Una relación particular entre sonidos y concep-
cios, espacios y pausas rítmicas se relacionan, en ge-
neral, con el significado de las ideas que se expone~,
1
tos, capaz de impresionar y llamar la atención sobre el
en función de que el escrito resu lte claro, comprensi-
mensaje. . 1
ble. En la prosa se mantiene una relación denotativa
• La búsqueda de síntesis, por la que se transmite 2
entre la palabra y su significado, prima una ordenación
mucha información en poco t exto; en el poema, la pala-
lógica y el discurso es lineal. e
bra condensa o reúne varios significados. Según Paul
El aspecto fundamental que distingue el verso de a
Valéry,1 a diferencia de la prosa, la poesía propone
la prosa está en el ritmo, que no desempeña un papel
siempre varios sent idos para una misma forma, lo que 3
importante en la prosa, mientras que en el poema es
genera una reacción peculiar y una mayor participación e
un elemento constitutivo. El texto poético se organiza
afectiva en el lector.
generalmente en versos y est os, en estrofas, lo ~~e e
• La apertura a nuevas significaciones: el modo de
lleva a valorar tanto las palabras como la entonac1on q
vincular palabras e ideas provoca distintas y sucesivas
y los son idos , los silencios y las pausas, e inc l u~o a
asociaciones, y por lo t anto, diferentes lecturas o inter- 4
suspender el hilo del discurso (o la lectu ra de corrido)
pretaciones, basadas en la capacidad connot ativa del /
para det enerse en la suge rencia que proponen las
lenguaje. . .
• Una s intaxis especial que se basa en la el1 ps1s 2 palabras. . , . e
El verso, cada línea del poema, es la urndad m1rnma 5
de determinados elementos. Esto favorece la expre-
del text o y responde a una estructura rítmica, marcada
sión más sintética, concentrada, y contribuye a gene-
por la medida, el ritmo de la frase y el uso de los re-
rar ambigüedades y sobrentendidos.
cursos sonoros del lenguaje; esa estructura rítmica se
E

t Paul Valéry (1871-1945): poeta y ensayista francés; elaboró una economía textual que apela a que el receptor reponga el elemento
concepción rigurosa de la poesía lírica a la que relaciona con el faltante.
pensamiento y la música. 3La ambigüedad o imprecisión en el sentido de un enunciado . _
2 La elipsis es un procedimiento que consiste en suprimir posibilita sus múltiples interpretaciones. Es un rasgo de la func1on
palabras o frases de modo que la construcción sintáctica queda poética que parte de la capacidad connotativa del lenguaje para
incompleta, pero se comprende el sentido; es un recurso de sugerir varios significados.

162 1 Capítulo 7 La poesía española del siglo XX


mantiene a lo largo del poema y produce un efecto de bién de significación, porque cada estrofa desarrolla
musicalidad. En poesía, los recursos rítmicos son fre- una idea o una serie de ideas. Hasta fines del siglo
3 cuentes y recurrentes, ya que también se explota el va- XIX y principios del XX, la estrofa agrupaba versos de
s lor connotativo que poseen . La combinación de acen- igual medida (por ejemplo, octosílabos en las coplas)4
3 tos y silencios que provoca el ritmo se vincula más con o con una combinación regular de dos medidas (por
3 el lenguaje oral que con el escrito, ya que se trata de ejemplo, endecasílabos y heptasílabos, es decir, de
1 un efecto sonoro, no gráfico. once y siete sílabas).
1 Cada conjunto de versos separados por un espa-
H cio en blanco es una estrofa, unidad rítmica pero tam- C. Y.
3 i í
)

r
j l 4La copla es una composición breve y muy popular, cuya forma
Bibliografía
• BAv10, CARMEN, El imperio de la subj etividad. El discurso poético,
1 i
Q
estrófica es cuatro versos octosílabos con rima consonante o Buenos Aires, Kapelusz, 1999.
asonante en los versos pares. • BousoÑo, CARLOS, Teoría de la expresión poética, Madrid, Gredos,
1962.
• MARfN, MARTA, Conceptos claves (Gramática, Lingüística y
Literatura), Buenos Aires, Aique, 1992.

ACTIVIDADES

1. Sinteticen en un cuadro o esquema las principales características de la poesía lírica.


2. En el tercer párrafo, el texto afirma que el motor básico de la actitud lírica es la
expresión del sentimiento y se mencionan varios ejemplos. Intercambien ideas y
agreguen otros sentimientos que, a su juicio, manifieste la poesía.
3. Comenten qué otras necesidades, experiencias y vivencias humanas se relacionan
con la expresión poética. Por ejemplo: hacer bromas y chistes (adivinanzas, piropos,
coplas); describir un paisaje o un lugar que resu lten significativos. Anoten otras cinco
que se les ocurran.
4. Expliquen el recurso de la elipsis en estos versos de Pedro Salinas: No me fío de la rosa
/ depapel,/tantas veces que la hice/ yo con mis manos. Luego repongan el término o la
construcción faltante y ordenen la frase sin hipérbaton .
5. Expliquen en qué reside la ambigüedad y qué significados produce en estos casos:
•Empieza el llanto / de la guitarra. (Federico García Lorca)
•No tiene más notas la guitarra mfa. (Manuel Machado)
6. El dolor y el llanto son temas recurrentes en la obra de los poetas del 27. Relean "La
guitarra': de García Lorca, y"Canción última': de Hernández. ¿Qué relación pueden
establecer entre ambos textos?
7. ¿Cuál es la concepción del poeta en el texto de Luis Cernuda "La poesía habla en
nosotros"?
8. ¿Qué efecto produce la disposición gráfica del poema"Ajedrez'; de Gerardo Diego?
Averigüen qué relación tiene este juego con la muerte.
9. ¿Sobre qué habla el poema " La encerrada"? ¿Qué relación pueden establecer entre
el título y el texto?

t
.1
1

1. Lean este poema de Manuel Machado. ma'


mi~
La copla Procura tú que tus coplas • • . 1'

Hasta que el pueblo las canta, vayan al pueblo a parar,


1
las coplas coplas no son, aunque dejen de ser tuyas Ya
y cuando las canta el pueblo,
ya nadie sabe el autor.
para ser de los demás.

C2!ie, al fundir el corazón


.

'
I
d. ,
qu

Tal es la gloria, Guillén, en el alma popular, 11 3. 1


de los que escriben cantares;
oír decir a la gente
lo que se pierde de nombre
se gana de eternidad.
llf po

1: •
que no los ha escrito nadie. o ¡
M anuel Machado, en Antología, Madrid,
Espasa-Calpe, 1966.

a. En pequeños grupos conversen a partir de las preguntas que siguen .


• ¿Qué quiere decir que las coplas no son coplas hasta que el pueblo las canta?
• ¿Por qué pasan a ser de los demás? a.
• ¿Qué otras significaciones tiene la palabra coplas en este poema? Si se lee como b.
un hiperónimo, ¿qué otros términos podría incluir? Propongan tres hipónimos. pe
b. Digan de otras maneras estos versos, sin modificar su sentido: lo que se pierde de
nombre/ se gana de eternidad.
c. ¿Qué relación existe entre esta idea y la literatura tradiciona l, de transm isión oral?
¿Y con la literatura de autor?
d. Teniendo en cuenta el poema y lo que conversaron, escriban un texto que res-
ponda a esta pregunta, a partir de la propia opinión: ¿cuál sería la g loria de los que
escriben cantares? 4.
e. Intercambien los textos para conocer las opiniones de sus compañeros.

2. Lean, primero en forma silenciosa y luego en voz alta, estos versos de García Lar-
ca. Para percibir el ritmo, enfaticen los acentos internos y fina l de cada verso (están
marcados), la entonación, las repeticiones y las pausas.

Antonio Torres Heredia, a


Camborio de dura crin, b
moreno de verde luna, p
voz de clavel varonil: d
¿quién te ha quitado la vida
cerca del Guadalquivir?

a. ¿Qué dice, es decir, qué información brinda esta estrofa?


b. La repetic ión de ciertos sonidos (voca les, consonantes, sílabas) es un recurso
sonoro que produce un efecto rítmico. ¿Cuáles son esas repeticiones? Por ejemplo:
la v de verde y voz se repite en .. .
c. Para reconocer la rima, subrayen las terminaciones de cada verso a partir de la últi-
ma vocal acentuada (por ejemplo: Heredia). Identifiquen los versos según esas ter-
! minaciones con la letra correspondiente (se sigue el orden alfabético). Por ejemplo:
... Heredia a
1 ~
... crin b
Y así sucesivamente.

..f i
''
d. ¿Qué versos riman? ¿La rima es consonante o asonante? ¿Por qué? Recuerden
que algunos versos pueden no rimar con otros (se llaman versos b lancos) .

11 3. Lean este fragmento del libro Obra abierta, del escritor y filósofo italiano contem-
1! poráneo Umberto Eco.

g í La palabra poética es aquella que, poniendo en una relación absolutamente
:lrid, nueva sonido y concepto, sonidos y palabras entre sí, uniendo frases de manera
966. no común, comunica al mismo tiempo que un significado dado, una emoción
inusitada; hasta el punto de que la emoción surge incluso cuando el significado
no está inmediatamente claro.

a. ¿A qué se refiere Eco con "la palabra poética"?


mo b. Expliquen el sentido de los fragmentos destacados, ejemplifiquen a partir de los
•S. poemas de la generación del 27 y fundamenten su elección:
?de • busquen frases o construcciones en las que la relación entre el sonido y la idea
resulte rara o particular;
·al? • otras que estén unidas de un modo no común;
• den ejemplos de los significados "dados'; los manifiestos o claros;
es- • otros que no resulten inmediatamente claros.
rue
4. Lean el siguiente texto de la escritora Ana María Matute.

Escribo, pues, porque no estoy contenta. Porque no estoy conforme, ni


or- dormida, ni ciega, ni muerta. En definitiva, porque el oficio de escribir es
:án también una forma de protesta. Protesta contra todo lo que representa opre-
sión, fariseísmo e injusticia.

a. ¿Qué postura manifiesta la escritora con respecto al sentido de su literatura?


b. Busquen en un diccionario fariseísmo y los distintos significados de protestar.
Piensen y comenten qué operaciones intelectua les implica y cuáles son los senti-
dos de la acción de protestar.
c. ¿Qué re laciones pueden establecer entre esta opinión de Matute y su cuento "La
felicidad"?
d. Relean los poemas de la generación del 27 e intercambien ideas:
• ¿se puede hablar de una intención de protesta?, ¿en qué casos?;
so • ¿contra qué protestan?, ¿de qué modo lo hacen?
lo: e. ¿Les parece vá lido o interesante que el cuento, la poesía, la novela sean formas
de protesta? ¿Por qué sí o por qué no? ¿Se les ocurren otros ejemplos? Fundamen-
ti- ten sus opiniones.
1

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Las heroínas trágicas

El Modernismo es un movimiento artístico que se desarrolló a fines del sig lo XIX


y el primer cuarto del siglo XX. Tuvo varias denominaciones, según los países, y
diversas características: en Inglaterra influyó en el llamado Arts and Crafts, y se
desplegó hacia el diseño de cubiertas de libros, ilustraciones, afiches comerciales,
paneles decorativos y tipografía; en Bélgica y Francia se lo llamó Art Nouveau, y se
caracterizó por el ornamento con formas orgánicas, como vegetales, flores, insectos,
peces, sirenas, dragones y pájaros de colores.
En esta corriente se ubica el arte gráfico de Alphonse Maria Mucha que nació en
Moravia, República Checa (1860-1939). Desarrolló su arte como pintor decorativo
en puestas teatrales; realizó murales y retratos, y diseñó también objetos y joyas.
Continuó sus estudios en París e ilustró revistas y publicidades; así diseñó el primer
cartel litográfico para la actriz Sarah Bernhardt (1844-1923) y su Théatre de la
Renaissance. Gracias al éxito que tuvo el cartel pegado en los muros de París, la actriz
le ofreció un contrato de exclusividad por seis años. Esta colaboración ayudó al
reconocimiento de ambos en el exterior. Mucha diseñó, además, la escenografía y el
vestuario de las obras.
El afiche que se reproduce (1897, Biblioteca Nacional de Francia) corresponde a la
obra La Samaritana, del dramaturgo francés Edmund Rostand. En la corona que
enmarca el rostro femenino con flores, puede leerse el nombre de la actriz, Sarah
Bernhardt, conocida por su estilo de actuación basado en la naturalidad. Ella
detestaba profundamente las viejas normas del teatro francés, según las cuales los
actores declamaban histriónica mente y hacían gestos sobreactuados. Profundizó
en la psicología de los personajes, y logró el gesto adecuado y la entonación sin
artificio de los textos teatrales. Fue también la primera actriz-empresaria del mundo
del espectáculo, y representó papeles de reina y grandes heroínas de tragedia en
teatros de muchos países.
Mariana Pineda Ese.
CL
Esta obra de teatro de Federico García Lorca está basada en la vida de ¿Yl
Mariana de Pineda Muñoz, personaje histórico que nació en Granada en ..,
:::
:
1804 y fue ejecutada en 1831. Esta heroína es un símbolo de la lucha por ! ANI
la libertad y como tal ha sido reconocida por el Parlamento Europeo y el i Bo~
~
Congreso de Diputados de Madrid. 11, Yol
,,~ Par!
¡;

••
1
Romance popular en tres estampas un1

A la gran actriz Margarita Xbgu. e


= CL
~• ¡Te
Personajes ~
FEDERICO ~
MARIANA PIN EDA NOVI CIA PRIMERA CONSPIRADOR SEGUNDO ~ Ar-.
GARCÍA LORCA e
¡:
(1898-1936) I SABEL LA CLAVELA NOVICIA SEGUNDA CONSPIRADOR T ERCERO o ¡Ne
DoÑA A NGUSTIAS MONJA CONSPIRADOR CUARTO
Nació en Fuente Vaqueros, España. AMPARO FERNANDO MUJER DE L VELÓN C1
Fue uno de los más grandes poetas LucíA DoN PEDRO SoTOMAYOR NIÑAS ¿Se
y dramaturgos de la primera mitad
N I ÑO PEDRO SA MONJAS
del siglo XX. El suyo es un teatro
poético que incluye símbolos, N I ÑA ALEGRITO A~
mitos, el cancionero popular, SoR CARMEN CONSPIRADOR PRIMERO De
alegorías y que aborda la farsa, la
comedia, el drama y la tragedia.
Entre estas últimas pueden citarse Prólogo Cr
Yerma, Bodas de sangre, La casa de Telón representando el desaparecido arco árabe de las Cucharas y perspectiva de la plaza ¿Pe
Bernarda Alba. Fue fusilado en los Bibarrambla, en Granada, encuadrado en un margen amarillento, como una vieja estampa
comienzos de la Guerra Civil.
iluminada en azul, verde, amarillo, rosa y celeste, sobre imfando de paredes negras. Una de Ar
las casas que se vean estarápintada con escenas marinas y guirnaldas defrutas. Luz de luna. EU
A lfondo, las Niñas cantarán, con acompañamiento, el romance popular:

¡Oh! Qyé día tan triste en Granada, Es


que a las piedras hacía llorar [ ...
al ver que Marianita se m uere
en cadalso* por no declarar.

Marianita, sentada en su cuarto,


no paraba de considerar:
"Si Pedrosa me viera bordando M
la bandera de la Libertad". fü
[ .. .] [¿~

A
E stampa Primera M
Casa de Mariana. Paredes blancas. Alfondo, balconcillos pintados de oscuro. Sobre una
cadalso: tablado que se levanta para mesa, un frutero de cristal lleno de membrillos. Todo el techo estará lleno de esta mismafruta,
la ejecución de la pena de muerte. colgada. Encima de la cómoda, grandes ramos de rosas de seda. Tarde de otoño. Al levan-
maja: mujer que se distinguía
tarse el telón, aparece doña Angustias, madre adoptiva de M ariana, sentada, leyendo. Viste
por su traje vistoso, su arrogancia
y su manera de hablar graciosa y de oscuro. Tiene un airefi·ío, pero es maternal al mismo tiempo. Isabel la Clave/a viste de IV
desenfadada. maja*. Tiene37 años. fa
168 I Capítu lo 8 Las heroínas trágicas
Escena ! Escenas 11y111
CLAVELA: (Entrando.) que la obligan sus amigos liberales*. Las hijas del Oidor de la
Cancillería* visitan a Mariana en
¿Y la niña? (Con intenci6n.)
su casa. Lucía es rubia tostada,
n ¡¡ D on Pedro, sobre todos; y por ellos y Amparo, morenísima, de ojos
-'
! ANGUSTIAS: (Dejando la lectura.) se expone... (Con gesto doloroso.) profundos y movimientos rápidos.
• ¡
a lo que no quiero acordarme. Vestida de malva claro, con un
Borda y borda lentamente.
fl 41 Yo lo he visto por el ojo de la llave.
peinado de bucles, peineta y una
a í gran rosa roja detrás de la oreja,
j ! Parecía el hilo rojo, entre sus dedos, CLAVELA: Mariana luce preocupada, y da
< 1
l ¡ una herida de cuchillo sobre el aire. Si pensara como antigua, le diría ... muestras, conforme avanza el
,
diálogo, de gran inquietud. Las

·gu. &
.• CLAVELA:
embrujada.
muchachas hablan de sus hijos.
]
¡Tengo un miedo! ANGUSTIAS: (Rápida.)
.l"•
3 Enamorada.
~ ANGUSTIAS:
'º ~
o o ¡No me digas! CLAVELA: (Rápida.)
o ¿Sí?
CLAVELA: (Intrigada.) liberal: régimen establecido tras
¿Se sabrá? ANGUSTI AS: (Vaga.) las guerras napoleónicas, en el que
el rey y la representación popular
¡C29ién sabe! (Lírica.) compartían poderes. Durante el
ANGUSTIAS: Se le ha puesto la sonrisa casi blanca, reinado de Fernando VII (1814-1833)
Desde luego, por Granada no se sabe. como vieja flor abierta en un encaje. se entabló la pugna entre los que
pretendían liberalizar el sistema
Ella debe dejar esas intrigas.
y aquellos que, defendiendo el
CLAVELA: ¿C29é le importan las cosas de la calle? continuismo del monarca, abogaban
¿Por qué borda esa bandera? Y si borda, que borde unos vestidos por sus privilegios.
2 para su niña, cuando sea grande. Oidor de la Cancillería: ministro
que en las audiencias del reino oía y
ANGUSTIAS: C29e si el rey no es buen rey, que no lo sea;
sentenciaba en las causas y los pleitos.
'.l. Ella me dice las mujeres no deben preocuparse.

Escena I V
[ ... ] ¡Cuéntame! Si vieras
cómo necesito de tu fresca risa,
AMPARO: cómo necesito de tu gracia joven.
No me has preguntado Mi alma tiene el mismo color del vestido.
[por mi estancia en Ronda. (Mariana sigue de pie.)

MARIANA: AMPARO:
Es verdad que fuiste; C29é cosas tan lindas dices, Marianilla.
[¿y has vuelto contenta? [ ... ]

AMPARO: MARIANA: (Resignada.)


Mucho. Todo el día baila que te baila. ¿Estuviste en los toros?

LUCÍA: (Seria) LucíA:


Vamos, Amparo. ¡Estuvo!

MARIANA: (Inquieta por algo que ocurre AMPARO:


fuera de la escena.) En la corrida más grande

169
calesa: tipo de carruaje. que se vio en Ronda la vieja. parecía que la tarde FERN.
jaca: caballo de poca alzada. Cinco toros de azabache, se ponía más morena. "Ador;
pinturero: apuesto o gracioso.
calañés: sombrero de ala vuelta hacia
con divisa verde y negra. ¡Si hubieras visto con qué a mi p·
arriba y copa comúnmente baja en Yo pensaba siempre en ti; gracia movía las piernas! § quesa¡
forma de cono truncado, usado por yo pensaba: si estuviera ¡Qyé gran equilibrio el suyo ~ absol~
los labriegos y la gente de pueblo. !i
conmigo mi triste amiga, con la capa y la muleta! o.
8
gos.N
gente de brega: toreros subalternos 2
que ayudan al matador durante la mi Marianita Pineda. Ni Pepe-Hillo ni nadie ~ absol
~
lidia. L as niñas venían gritando toreó como él torea. ~ adela
~
zaino: de color castaño oscuro. sobre pintadas calesas* Cinco toros mató; cinco, ~ mane
con abanicos redondos con divisa verde y negra. .. ' donll
bordados de lentejuelas. En la punta de su estoque "
;
estás '

Y los jóvenes de Ronda cinco flores dejó abiertas, ..
.!!
.!!
o salvar
sobre jacas* pintureras*, y a cada instante rozaba 2 (Enai
~
los anchos sombreros grises los hocicos de las fieras, s ¡Mari

¡:
calados hasta las cejas. como una gran mariposa o
La plaza, con el gentío de oro con alas bermejas. MAR
(calañés* y altas peinetas) La plaza, al par que la tarde, unan
giraba como un zodíaco vibraba fuerte, violenta, ¡Me!
J, ACTIVIDADES de risas blancas y negras. y entre el olor de la sangre Pero
Y cuando el gran Cayetano iba el olor de la sierra.
1. Las acotaciones o didascalias cruzó la pajiza arena Yo pensaba siempre en ti; FER!
tendrán una importancia con traje color manzana, yo pensaba: si estuviera ¡Cón
fundamental a lo largo de bordado de plata y seda, conmigo mi triste amiga, delo
la obra, ya que los colores destacándose gallardo mi Marianita Pineda. (Mai
descriptos contribu irán a crear entre la gente de brega* Noe
el clima de cada estampa. frente a los toros zainos* [ .. .] ahor
Marquen, en cada caso, la que España cría en su tierra, aun
información que aportan; yel (
les será útil para resolver las
actividades al finalizar la lectura. Escenas V y VI
2. Ya en los primeros versos se Las jóvenes se despiden y al comenzar la escena V Mariana mira la hora; se asoma a los cristales y ve
la última luz de la tarde. Llega entonces Fernando preguntando por sus hermanas; es un joven de
Es
delinea la visión de la sociedad
18 años que se turbará ante la presencia de Mariana, a la que ama en silencio. Ella lo consulta acerca
española sobre la mujer. de lo que pasa en la calle y el joven le comenta que un capitán liberal se ha escapado de la cárcel Ew
Identifiquen los versos que de la Audiencia, pero que un grupo de tropa se dirige a capturarlo. También hablan de Pedrosa, el Mai
tratan el tema y expongan sus cruel representante del rey. De pronto llaman a la puerta y en la escena VI llega un jinete que entrega Ped;
una carta. Mariana, asustada, la abre y la lee. Decide confiar en Fernando y pedirle que lleve a cabo
puntos de vista. lo que en ella se le solicita. En la escena VII, las luces topacio y amatista de las velas hacen temblar
deu
3. La obra comienza con un lírica mente la habitación. Fernando lee el comienzo de la carta y tiene un gesto de dolor y desaliento. ado¡
romance y en la escena IV otro
describe una corrida de toros. PEI

Relean las características del Escena VII Gn


romance en el capítulo 4 y [ ... ] MARIANA:
reconozcan los rasgos de estilo. FERNANDO: (Leyendo la carta, con sorpresa, y No interrumpas la lectura. M1
4. En el romance del torero, mirando asombradoy triste a Mariana.) Un corazón necesita Cu
reconozcan recursos ''Adorada Marianita". lo que pide en la escritura. (D:
expresivos, como imágenes dez
sensoriales, metáforas, [...
comparaciones y presencia del
yo lírico.

170 1 Capítulo 8 Las heroínas trágicas


FERNANDO: (Leyendo, desalentado, aunque sin afectación.)
''Adorada Marianita: Gracias al traje de capuchino*, que tan diestramente hiciste llegar capuchino: religioso que pertenece
a la orden reformada de San Francisco.
a mi poder, me he fugado de la torre de Santa Catalina, confundido con otros frailes,
s..
presa: represa.
que salían de asistir a un reo de muerte. E sta noche, disfrazado de contrabandista, tengo
absoluta necesidad de salir para Válor y Cadiar, donde espero tener noticias de los ami-
gos. Necesito antes de las nueve el pasaporte que tienes en tu poder y una persona de tu
absoluta confianza que espere con un caballo, más arriba de la presa* del Genil, para, río
adelante, internarme en la sierra. Pedrosa estrechará el cerco como él sabe, y si esta mis-
ma noche no parto, estoy irremisiblemente perdido. Me encuentro en la casa del viejo
don Luis, que no lo sepa nadie de tu familia. No hagas por verme, pues me consta que
estás vigilada. Adiós, Mariana. Todo sea por nuestra divina madre la libertad. Dios me
salvará. Adiós, Mariana. Un abrazo y el alma de tu amante. Pedro de Sotomayor".
(Enamoradísimo.)
~ ¡Mariana!

MARIANA : (Rápida, llevándose El que de niño te amara


una mano a los ojos.) lleno de amarga pasión.
¡Me lo imagino! Mucho antes de que robara
Pero silencio, Fernando. don Pedro tu corazón.
¡Pero quién te deja en esta
FERNANDO: (D1wnático.) triste angustia del m omento!
¡Cómo has cortado el camino Y torcer mi sentimiento
de lo que estaba soñando! ¡ay qué trabajo me cuesta!
(Mariana protesta mímicamente.) [ ... ]
No es tuya la culpa, no; Yo iré en busca de tu amante
ahora tengo que ayudar por la ribera del río.
a un hombre que empiezo a odiar,
y el que te quiere soy yo.
Estampa Segunda
Fernando parte y, al comenzar la
Estampa Segunda escena VIII, Angustias le cuenta a
Mariana que los niños inventaron
un juego con la bandera que
Escena V ella borda en secreto y se han
Mariana llega corriendo a la puerta en el momento en que don Pedro entra por ella. Don tendido en ella, fingiéndose
Pedro tiene 3 6 años. Es un hombre simpático, sereno y fuerte. Viste correctamente y habla muertos. Angustias le pide que
reflexione y piense en ellos para
de una manera dulce. Mariana le tiende los brazos y le estrecha las manos. Doña Angustias no comprometerse con la causa
adopta una triste y reservada actitud. liberal. La Estampa Segunda
comienza en la sala principal de
la casa de Mariana. Entonación en
PEDRO: (Efusivo.) PEDRO: (Apasionado.)
grises, blancos y marfiles, como
Gracias, Mariana, gracias. ¡Qyién pudiera pagarte una antigua litografía. Al fondo,
[lo que has hecho por mí! una puerta con una cortina gris, y
MARIANA: (Casi sin hablar.) Toda mi sangre es nueva, puertas laterales. Es de noche.
Los hijos de Mariana le piden a
Cumplí con mi deber. [porque tú me la has dado Clavel a que les diga el romance
(Durante esta escena dará Mariana muestras exponiendo tu débil corazón al peligro. del duque de Lucena. Finalmente
de una vehementísima y pro.funda pasión.) ¡Ay, qué miedo tan grande tuve por él, Mariana acuesta a los niños y llega
a la casa Pedro Sotomayor.
[ .. .] [Mariana!

171
MARIANA: (Cerca y abandonada.) MARIANA: MAR!
¿D e qué sirve m i sangre, Pedro, Yo tengo mucho miedo. ¡Y alg
[si tú murieras? ¡Qyé '
Un pájaro sin aire, ¿puede volar? (Cogiéndole una mano.) [aleg
PEDRO: §
[¡Entonces ... ! ¡Ven aquí! un gr.
rea lista: partidario y defensor de la !
~ mep~
monarquía absolutista. Llamados (Bajo.) ~
2 [dela
también carlistas, los realistas Yo no podré decirte cómo te quiero nunca; MARI ANA: (Se sienta.) ¡¡
a
pretendían el establecimiento de una a tu lado me olvido de todas las palabras. Mucho miedo de que esto se adivine, j quen
rama alternativa de la dinastía de los e
[en la
Barbones en el trono español.
de que pueda matarte la canalla realista•. ..
2
'
P EDRO : (Con voz suave.) Y si tú ... ..
~

¡Cuántos peligros corres sin el menor (Con pasión.)


~

•e [ ... ]
[desmayo! yo me muero, lo sabes, yo me muero. ..~• MAi
~ ¡Mi'
¡Qyé sola estás, cercada de maliciosa gente!
~
¡Qyién pudiera librarte de aquellos que P EDRO: (Con pasión.) ~ Enn
~
[te acechan ¡Marianita, no temas! ¡Mujer mía! o [tú n
con mi propio dolor y mi vida, Mariana! [¡Vida mía! Cua1
¡Día y noche, qué largos sin ti por esa sierra! En el mayor sigilo conspiramos. ¡No temas! yqu
L a bandera que bordas temblar á hast
MARIANA: (Echando la cabeza en el [por las calles Alb
hombroy como soñando.) entre el calor entero del pueblo de Granada. [cua
¡Así! Deja tu aliento sobre mi frente. Por ti la Libertad suspirada por todos se ei
[Limpia pisará tierra dma con anchos pies de plata. yya
esta angustia que tengo y este sabor Pero si así no fuese; si Pedrosa ...
[amargo; PEJ

esta angustia de andar sin saber dónde voy, MARIANA: (Aterrada.) ¡M:
y este sabor de amor que me quema la boca. ¡No sigas! Coi
(Pausa. Se separa rápidamente del caballero así
y le coge los codos.) PEDRO: [co
¡Pedro! ¿No te persiguen? ¿Te vieron ... sorprende nuestro grupo y
[entrar? [hemos de morir... M.
Al:
P EDRO: (Se sienta.) MARIANA: [tu
Nadie. ¡Calla! Ce
Vives en una calle silenciosa, y la noche qu
se presenta endiablada. P EDRO: acc
Mariana, ¿qué es el hombre sin libertad? en
[¿Sin esa
luz armoniosa y fija que se siente
[por dentro? ~I
¿Cómo podría quererte no siendo libre, L
[dime? b.J

~I
¿Cómo darte este firme corazón
[si no es mío?
No temas; ya he burlado a Pedrosa l
[en el campo,
y así pienso seguir hasta vencer contigo,
que me ofreces tu amor y tu casa
[y tus dedos.
MARIANA: PEDRO: Escenas VI, VII y VIII
¡Y algo que yo no sé decir, pero que existe! No es hora de pensar en quimeras*, Tres conspiradores se reúnen
¡O!ié bien estoy contigo! Pero aunque [que es hora con Pedro en casa de Mariana.
Aguardan noticias. Cuando el
[alegre noto de abrir el pecho a bellas realidades cercanas
cuarto conspirador llega, se enteran
un gran desasosiego que me turba y enoja; de una España cubierta de espigas y de que la situación es grave para
me parece que hay hombres detrás [rebaños, los liberales y que deben aplazar
[de las cortinas, donde la gente coma su pan con alegría, el alzamiento. Mientras beben una
copa, llega Pedrosa. Mariana los
que mis palabras suenan claramente en medio de estas anchas eternidades convence de que deben huir y se
ta*. [en la calle. [nuestras sienta al piano para disimular.
y esta aguda pasión de horizonte y silencio.
[ ... ] España entierra y pisa su corazón antiguo,
MARIANA: (Radiante.) su herido corazón de Península andante,
¡Mi victoria consiste en tenerte a mi vera! y hay que salvarla pronto con manos y
En mirarte los ojos mientras [con dientes.
quimera: aquello que se propone
[tú no me miras. a la imaginación como posible o
Cuando estás a mi lado olvido lo que siento MARIANA: (Pasional.) verdadero, no siéndolo.
.nas! y quiero a todo el mundo: Y yo soy la primera que lo pide con ansia .
hasta al rey y a Pedrosa. O!iiero tener abiertos mis balcones al sol
Al bueno como al malo, ¡Pedro!, para que llene el suelo de flores amarillas
.ada. [cuando se quiere y quererte, segura de tu amor
se está fuera del tiempo, [sin que nadie
lata. y ya no hay día ni noche, ¡sino tú y yo! me aceche, como en este decisivo momento.
(En un arranque.)
PEDRO: (Abrazándola.) ¡Pero ya estoy dispuesta!
¡Mariana! (Se levanta.)
Como dos blancos ríos de rubor y silencio,
así enlazan tus brazos mi cuerpo PED RO: (Entusiasmado, se levanta.)
[combatido. ¡Así me gusta verte,
hermosa Marianita! Ya no tardarán mucho
MARIANA: (Cogiéndole la cabeza.) los amigos, y alienta
Ahora puedo perderte, puedo perder ese rostro bravío y esos ojos ardientes J, ACTIVIDADES
[tu vida. (Amoroso.)
Como la enamorada de un marinero loco sobre tu cuello blanco, que tiene luz de luna. 1. ¿Cuál es la visión de Pedro
que navegara eterno sobre una barca vieja, (Fuera comienza a llover y se levanta el Sotomayor sobre el futuro de
acecho un mar oscuro, sin fondo ni oleaje, viento. Mariana hace señas a Pedro de que España?
:i? en espera de gentes que te traigan ahogado. calle.) 2. Relean el diálogo entre
Mariana y Pedro. En pequeños
grupos conversen: ¿creen
E scena IX que Mariana está realmente
,, Las cortinas delfondo se levantan y aparece Clave/a, aterrada, con el candelabro de tres comprometida con la causa
bujías en una mano y la otrapuesta sobre elpecho. Pedrosa, vestido de negro, con capa, llega liberal o se une a ella por
detrás. Pedrosa es un tipo seco, de una palidez intensa y de una admirable serenidad. Dirá amor a Pedro? Anoten sus
lasfrases con ironía muy velada y mirará minuciosamente a todos lados, pero con con·ección. conclusiones para revisarlas al
Es antipático. Hay que huir de la caricatura. Al entrar Pedrosa, Mariana deja de toca1: terminar la lectura de la obra.

173
*El abuso de autoridad [ ... ] P EDROSA: (Reconviniéndola.) MA1
Pedrosa alude al cabecilla que PEDROSA: (Serio.) ¡Mariana! ¿Por
intenta capturar. Mariana juega ¡Mariana! (Pausa.) pero
con su anillo para evitar la
conversación, pero cuando este
Una mujer tan bella como usted,
¿no siente miedo de vivir tan sola?
M ARIANA:
¡Salga pronto!
s Aho1
[lo hj
cae al piso ambos se agachan y ~
~
Pedrosa aprovecha la ocasión para ysd
abrazarla y besarla. Ofendida, ~
MARIANA: PEDROSA: (Frío y reservado.) ~
, [den
Mariana lo echa de su casa, pero
mientras ella dice que él quiere ¿Miedo? ¡Ninguno! ¡Está muy bien! Yo seguiré el asunto ~ Yob/
~
perderla, él le asegura que viene a y usted misma se pierde. ~ [Yo !
salvarla: le propone que delate a
los conspiradores y hace alusión a
PEDROSA: (Con intención.) •
~
para
H ay tantos liberales M A RIANA: •e
~

Más
la bandera que bordó. Finalmente
Pedrosa le revela que será suya o y tantos anarquistas por Granada, ¡Qié m e importa! ..~. [ya 1
morirá. que la gente no vive muy segura. (Firme.) Yo bordé la bandera con mis manos; ~ ¿Am
.!:
¡Usted ya lo sabrá! con estas manos, ¡mírelas, Pedrosa! !!
e ¡Pue
¡:
[ .. .]* y conozco muy grandes caballeros o [que
que izarla pretendían en Granada.
MARIANA: ¡Mas no diré sus nombres! FER

¡Eso nunca! ¡P rimero doy mi sangre! ¡Séc


Qie me cueste dolor, pero con honra. [inst
¡Salga de aquí! vend
[ydi
¡Por
Estampa Tercera Estampa Tercera [la V
La Estampa Tercera com ienza
en el convento de Santa María Escena V MA
Egipcíaca, donde Mariana está
[... ] ¿D ónde está la razón de la Justicia? ¡No
presa por orden de Pedrosa. A
través de Alegrito, el jardinero, se MARIANA: (Exaltada y protestando En la bandera de la Libertad [¡M
entera de que Pedro ha partido fieramente de su muerte.) bordé el amor más grande de mi vida. tend
rumbo a Inglaterra. La joven se ¡No puede ser! ¡Cobardes! ¿Y quién manda ¿Y he de permanecer aquí encerrada? [con
desespera, pero confía en que
dentro de España tales villanías? ¡Qiién tuviera unas alas cristalinas ¡Mii
él volverá a salvarla. Entre tanto
Pedrosa le recuerda que puede ¿Qié crimen cometí? ¿Por qué me matan? para salir volando en busca tuya! que
salvarla si confiesa los nombres [ .. .] Si d·
de los conspiradores. Ante la este
negativa de Mariana, le comunica
que esa tarde será ajusticiada.
Escena VIII FE!l
[ ... ] FERNANDO: (Enérgico y desesperado, al ¡No
MARIANA: ver la actitud de Mariana.) [¡N<
¡Pedro! ¿D ónde está Pedro? D on Pedro no vendrá, ¡Tú·
¡Dejadlo entrar, por Dios! porque nunca te quiso, Marianita. [ ... ]
¡Está abajo, en la puerta! Ya estará en Inglaterra, con otros liberales.
¡Tiene que estar! ¡Qie suba! Te abandonaron todos tus
Tú viniste con él, [antiguos amigos.
¿verdad? Tú eres muy bueno. Solamente mi joven corazón te acompaña.
Él vendrá muy cansado, pero entrará ¡Mariana! ¡Aprende y mira cómo
[en seguida. [te estoy queriendo!
[ ... ]

174 j Capítulo 8 Las heroínas trágicas


MARIANA: (Exaltada.) MARIANA: (Retirándolo.)
¿Por qué m e lo dijiste? Yo bien que lo sabía; ¡Ya estoy muerta, Fernando!
pero nunca lo quise decir a mi esperanza. [Tus palabras me llegan
Ahora ya no me importa. Mi esperanza a través del gran río del mundo
[lo ha oído [que abandono.
y se ha muerto mirando los ojos Ya soy como la estrella sobre el agua
[de mi Pedro. [profunda,
Yo bordé la bandera por él. última débil brisa que se pierde en los
[Yo he conspirado [álamos.
para vivir y amar su pensamiento propio. (Por elfondo pasa una M onja, con las manos
Más que a mis propios hijos cruzadas, que mira llena de zozobra algrupo.)
[y a mí misma le quise. [ ... ]
¿Amas la Libertad más que a tu Marianita?
¡Pues yo seré la misma Libertad ¡Morir! ¡Qyé largo sueño sin ensueños
[que tú adoras! [ni sombras!
Pedro, quiero morir por lo que tú
FERNANDO: [no mueres,
¡Sé que vas a morir! Dentro de unos por el puro ideal que iluminó tus ojos:
[instantes ¡¡Libertad!! Porque nunca se apague J, ACTIVIDADES
vendrán por ti, Mariana. ¡Sálvate [tu alta lumbre
[y di los nombres! me ofrezco toda entera. ¡¡Arriba, corazón!! 1. ¿Cómo reacciona Mariana
¡Por tus hijos! ¡Por mí, que te ofrezco ¡Pedro, mira tu amor a lo que cuando se entera de que
[la vida! [me ha llevado! Pedro y los liberales la han
M e querrás, muerta, tanto, abandonado? ¿Por qué, si
MARIANA: [que no podrás vivir. ya sabía que no vendrían, lo
¡No quiero que mis hijos me desprecien! (Dos Monjas entran, con las manos cruza- disimula?
[¡Mis hijos das, en la misma expresión de angustia, y no 2. ¿Por qué razón no los delata?
tendrán un nombre claro se atreven a acercarse.)
[como la luna llena! Y ahora ya no te quiero,
¡Mis hijos llevarán resplandor en el rostro, [porque soy una sombra.
que no podrán borrar los años ni los aires! ·I
Si delato, por todas las calles de Granada
este nombre sería pronunciado con miedo.

FERNANDO: (Dramático y desesperado.)


¡ ¡No puede ser! ¡No quiero que esto pase!
[¡No quiero!
¡Tú tienes que vivir! ¡Mariana, por mi amor!
[... ]
tles.

iña.

175
Escena última (Un
Entran por elforo todas las Monjas. Tienen la tristeza reflejada en los rostros. [ ..} ro mi
Toda la escenafinal irá adquiriendo, hasta elfinal, una gran luz extrañísima de crepúsculo Mor.
granadino. Luz rosa y verde entra por los arcos, y los cipreses se matizan exquisitamente, s Niñ
hasta parecerpiedras preciosas. Del techo desciende una suave luz naranja, que se va intensi-
..~ ¡Oh
ficando hasta elfinal ¡
~ que
a
al V
~2
MARIANA: Amas la Libertad por encima de todo,
¡Corazón no me dejes! ¡Silencio! pero yo soy la misma Libertad. ~
ene
[Con un ala, [Doy mi sangre, ..
~
(No ,
;
¿dónde vas? Es preciso que tú también que es tu sangre y la sangre de todas e
o
:¡¡
[descanses. [las criaturas. "..
Nos espera una larga locura de luceros ¡No se podrá comprar el corazón de nadie! ~
!!
que hay detrás de la muerte. (Una monja la ayuda a ponerse la mantilla. ~
~
[¡Corazón, no desmayes! Mariana se dirige alfondo, gritando:) Q

Ahora sé lo que dicen el ruiseñor y el árbol.


C ARMEN: El hombre es un cautivo y no puede
¡Olvídate del mundo, preciosa Marianita! [librarse.
¡L ibertad de lo alto! Libertad verdadera,
MARIANA: enciende para mí tus estrellas distantes.
¡Qyé lejano lo siento! ¡Adiós! ¡Secad el llanto!
(Aljuez.)
CA RMEN: ¡Vamos pronto!
¡Ya vienen a buscarte!
CARMEN:
MARIANA: ¡Adiós, hija! 1. L
Pero, ¡qué bien entiendo lo que dice Dal
[esta luz! MARI ANA: en E
¡Amor, amor, amor, y eternas soledades! Contad mi triste historia a los niños ma1
(Entra eljuez por la puerta de la izquierda.) [que pasen. rela
2~P
[ ... ] CARMEN: cor.
JuEz: Porque has amado mucho, Dios te abrirá vah
Señora, a sus órdenes; [su puerta. 3. F
hay un coche en la puerta. ¡Ay, triste Marianita! ¡Rosa de los rosales!
''í 1, . [ ... ] 4.~

[ ...] ¡Marianita, Marianita, de bello y triste ilur


MARIANA: [nombre, ent
¡Os doy mi corazón! ¡Dadme un ramo que los niños lamenten tu dolor por la calle! S. ¿
Podrán leer la obra [de flores! la t'.
completa si ingresan en En mis últimas horas yo quiero MARIANA: (Saliendo.) mi!
http://bivir.uacj.mx/ 6. 1
[engalanarme. ¡Yo soy la Libertad porque el amor lo quiso!
libroselectronicoslibres, donde
Qyiero sentir la dura caricia de mi anillo ¡Pedro! La Libertad, por la cual me dejaste. cat
también encontrarán otras
producciones de Federico García y prenderme en el pelo mi mantilla ¡Yo soy la Libertad, herida por los hombres! mí•
1
Larca. [de encaje. ¡Amor, amor, amor, y eternas soledades! lo !.
7.1
sig
pe

176 I Capítulo 8 Las heroínas trágicas


(Un campaneo v ivo y solemne invade la escena, y un coro de Niños empieza, lejano, el
romance. Mariana se va, saliendo lentamente, apoyada en Sor Carmen. Todas las demás
'U/o Monjas están arrodilladas. Una luz maravillosa y delirante invade la escena. Alfando, los
Niños cantan.}
mi-
¡Oh, qué día triste en Granada,
que a las piedras hacía llorar,
al ver que M arianita se muere
en cadalso por no d eclarar!
(No cesa el campaneo.)
Telón lento
Federico García Lorca,Mariana Pineda,
en Obras completas, Madrid, Aguilar, 1964 .
.die!
'/la.

bol.

ra,
s.

~ ACTIVIDADES

1. La obra está organizada en tres estampas. Teniendo en cuenta que el pintor Salvador
Dalí (1904-1989) fue el escenográfo de la represent ación, ¿por qué creen que se divide
en estampas y no en actos? ¿Cómo son los espacios donde transcu rre la acción?Ya
marcaron los colores que se indican en cada estampa; ahora reflexionen sobre la
relación que existe entre ellos y el clima de la obra.
2. Anal icen el comporta miento de Fernando y de Pedro Sotomayor en relación
con Mariana. ¿Cómo reaccionan uno y otro? ¿Cuál demuestra mayor generosidad y
trá va lentía?
3. Pedro parece ant eponer el ideal de libertad a cualquier sentim iento. ¿Le sucede lo
.es! mismo a Mariana? ¿Porqué?
4. Mariana dice:"Ped ro, qu iero morir por lo que tú no mueres,/ por el puro ideal que
iluminó tus ojos: / ¡¡Libertad!! Porque nunca se apague tu alta lumbre/ me ofrezco toda
entera". ¿Qué quiere decir co n esas palab ras?
lle! S. ¿Qué t ransformación se ha producido entre la Mariana de la Primera Estampa y la de
la ú lt ima, ten iendo en cuenta que ella le dice a Pedro, p róxima a morir:"¡Pues yo seré la
misma Libertad que tú adoras!"
.so! 6. Más adelant e sostiene:"Ahora sé lo que dicen el ru iseñor y el árbol. / El hombre es un
>te. cautivo y no p uede librarse./ ¡Libertad de lo alto! Libertad verdadera,/ enciende para
:es! mí t us estrellas distantes''. ¿Por qué considera que los hombres son ca ut ivos?, ¿de qué
1 lo son?
7. Elaboren por escrito un retrato de Mariana Pineda que tenga en cuenta los
siguientes aspectos: personalidad, sentimientos, modo de pensar, evolución del
personaje a lo largo de la obra.

177
El teatro de Federico García Lorca Heroí
En el capítulo 7 leyeron al poeta, en este conocerán al dramaturgo. Federico Garcí
1
García Larca definió el teatro como la síntesis de todas sus vocaciones: "El teatro nes hos
- dijo- es la poesía que se levanta del libro y se hace humana"; sostuvo también ellos el o
que "el t eatro neces ita que los personajes que aparezcan en la escena lleven un hombr~
traje de poesía, y, al mismo t iempo, que se les vean los huesos, la sangre''. Su t :
Su obra teatral refleja la influencia de los escritores españoles que lo precedie-
i
ron: Jorge Manrique, Francisco de Quevedo, Luis de Góngora, Pedro Calderón de la 1
Barca, Félix Lope d e Vega. •• terístiG
Sin negarle categoría literaria, Lorca concibe el teatro como un espectáculo to- contad¡
tal en el cual el texto es el elemento básico que se articu la con lo gestua l, lo corpo- 1 dolor e
ral, la música, la plástica, la danza, la escenografía.
Su producción dramática comienza el 22 de marzo de 1920, con el estreno de
1 En la 1
~Q Un;
La actriz argentina María Luisa El maleficio de la mariposa, mezcla de fábula, drama y poesía que resulta un rotundo
Robledo en una interpretación de fracaso. En 1927 sube a escena, en Barcelona, Mariana Pineda, con la compañía de la obr;
Bodas de sangre. tea~ro de Ma rgarita Xirgu. Los decorados serán obra suya - Federico era un talen- su nor
toso pintor-y de Salvador Dalí. desob
En 1930 publica La zapatera prodigiosa y por esta época funda La Barraca, un y dar~
grupo de teatro universitario que se presenta en los pueblos de España, y cuyo re- cump
pertorio incluía obras cortas, pasos, églogas y entremeses de autores como Cer-
va ntes, Tirso de Malina, Lope de Vega y Calderón de la Barca, entre otros. Esta ex- An
periencia le proporciona los conocimientos que aplicará en la producción de sus
próximas grandes obras: Bodas de sangre (1933), Yerma (1934), Doña Rosita la sol- A
tera (1935) y La casa de Bernarda Alba (1936). sem¡
En el teatro lorquiano todo se vive al máximo, todo son situaciones lím ite. Sus fon e'
personajes, basados en leyendas populares y en hombres y mujeres de la vida real, cien•
siguen un destino previamente fijado del que no pueden ni quieren apartarse; y alca~
hablan un lenguaje hondo, tierno, sin estridencias: el lenguaje v ital del pueblo que qufü
muestra s~s gra ndezas y sus miserias. do'
fün<
Mariana Pineda, en el teatro y en la historia co {
La obra se estrenó en Barcelona el 24 de junio y en Mad ri d el 12 de octubre de aun
1927. Su autor la subtitu ló Romance popular en tres estampas. sici
El personaje de Mariana Pineda est aba unido a la infancia de Federico, ya que est<
su fam ilia v ivió durante alg ún tiempo cerca de la plaza que llevaba el nombre de la bre
heroína, y él conocía la hi storia a través de las canciones populares que narraban Ha
su ajusticiamiento el 26 de mayo de 1831 - es decir, casi cien años antes de que Pa:
Visión de la mujer escribiera la pieza- por haber bordado una bandera con las palabras Ley, libertad ffi(
Mariana Pineda es un símbolo: e igualdad.
con su ejecución no solo se te1
Pero ¿quién fue Mariana Pineda y por qué se convirtió en una leyenda popular?
pretendía castigar a los liberales,
sino también la participación de Mariana de Pineda Muñoz nació en 1804 y murió cuando tenía 26 años, en 1831. ch
la mujer en la vida política:"Y si Tuvo una activa militancia contra el absolutismo imperante en España y contra el de
borda, que borde unos vestidos /
para su niña, cuando sea grande.
/Que si el rey no es buen rey, que
rey Fernando VII, ayudando a presos o actuando como en lace entre los exiliados.
Su casa f ue alberg ue para quienes huían del régimen. En 183 1 le requisaron una :1
le
no lo sea;/ las mujeres no deben bandera en la que se había bordado el lema liberal. Enca rcelada, fue acosada por
preocuparse''. Ramón Pedrosa para que delatase a sus compañeros de conspiración. A nte su ne- h
gativa, Fernando VII firmó su sentencia de m uerte.

178 I Capítulo 8 Las heroínas trágicas


Heroínas que lucharon por la libertad
·rico García Larca imprime a sus obras la mirada del poeta trágico, ya que las pasio-
atro ., nes hostigan a sus personajes, llevándolos hacia un final adverso. Se cumple en
)ién
s
! ellos el destino, fuerza desconocida que obra irresistiblemente sobre los dioses, los
1 un hombres y los sucesos, en la tradición clásica.

~
J!
¡¡
Su teatro plantea los grandes problemas de la condición humana. Así en Ma-
:lie- ~ riana Pineda, la protagonista es un ser que enfrenta conflictos, que lucha con sus
!!
lela .."e fantasmas, pero siempre rodeada de un halo de humanidad y de grandeza, carac-

to-
." '
~
'
1
terísticas que ya se reconocen en las mujeres de la Antigüedad clásica, cantadas y
contadas por los grandes poetas. En su rol de hermanas, hijas, esposas, amantes, el
u5 ¡
po- ii l dolor es uno de los sentimientos más intensos en estas mujeres.
~ l
l !
· de :! ;
e : En la tragedia griega
¡: ;
1do o 1 Una de las heroínas griegas que trascendió al teatro moderno y fue modelo de
de la obra lorquiana es Antígona, protagonista de la tragedia de Sófocles que lleva
en- su nombre. Hija del rey Edipo, hermana de lsmena, Polinices y Eteocles, la joven
desobedece la orden de su tío Creonte, quien le prohíbe realizar los ritos fúnebres
un y dar sepultura al cuerpo de Polinices. Desafiando la ley de los hombres, Antígona
re- cumple la ley divina au nque eso le cuesta su propia vida.
er-
=x- Antígona
iU S SÓFOCLES
o/- ANTÍGONA. -¡Oh sepultura! ¡Oh, cámara nupcial! Prisión subterránea (495 a.C.-406 a.C.)

sempiterna donde me encamino junto a los míos, los finados, de los que Persé-
us fone* h a recibido el número mayor. Soy la última de ellos. Con gran pesar des- Poeta griego. Alcanzó su fama
·al, ciendo antes de llegar al término de la vida. Sin embargo, después de haberlo como autor trágico. Escribió más
;y de cien piezas dramáticas, de las
alcanzado, alimento firmemente la esperanza de que seré querida a mi padre, cuales se conservan siete tragedias
ue querida de ti, madre, y de ti, amadísimo hermano, por haber venido aquí. Cuan- completas -Edipo Rey, Antígona,
do vosotros m oristeis, con m is propias manos lavé, adorné, di las libaciones Electro, Ayax, Las Traquinias,
funerarias. Ahora, en cambio, Polinices, por haber enterrado tu cuerpo, merez- Filoctetes y Edipo en Colono-, y
fragmentos de otras ochenta o
co esta recompensa. Sin embargo, para los que piensan bien, te honré.Jamás noventa.
aunque hubiera sido m adre, o si el cadáver de mi esposo entrara en descompo-
sición me hubiera puesto esta tarea, a pesar de los ciudadanos. ¿Por qué ley digo
ie esto? Hubiera tenido otro marido si hubiera muerto él, y un hijo de otro h om-
la bre, si faltaba el mío; pero de una madre y un padre que han sido encerrados en
1n Hades* no hay quien me haga jamás un nuevo hermano. Te honré con esa ley.
re Pareció a Creonte que he cometido un delito y que me he atrevido exagerada-
·d mente, querido hermano.
Ahora me lleva así, tomada de las manos, célibe, sin himen eo*, sin haber Perséfone: hija de Zeus y Deméter.
? tenido una parte de matrimonio, ni crianza de un niño. Viviendo así desdi- Fue raptada por Hades mientras
l. recog ía flores. Ejerce su imperio sobre
chada, privada de amigos, me encamino hacia la tumba de los muertos. ¿Qyé las almas.
~I decreto de los dioses violé? ¿D e qué m e sirve, infortunada, elevar todavía mi Hades: en la mitología griega, Hades
),
mirada a los dioses? ¿Qyé ayuda puedo invocar, ya que el premio de mi piedad alude tanto al dios de los muertos,
a señor de las profundidades de la tierra
es ser tratada como una impía? Si la suerte que me aflige es justa a los ojos de
y protector de las cosechas, como a la
los dioses, acepto sin quejarme el crimen y la pena; pero si los que me juzgan lo morada de los muertos.
hacen injustamente, que sufran males m ayores que los que me ocasionan. himeneo: casamiento, boda.
[... J
179
ANTÍGONA. - ¡Oh! Ciudad paterna en tierra tebana! ¡Y dioses de mis ante- E
pasados! Me llevan y no debo esperar más. Ved, príncipes de Tebas, a la que
quedaba, la única de las princesas, ved cómo sufro y por qué hombres, al reve-
renciar la piedad. s¡;..
su
~ ' Cr
,;
Antígona es conducida por los guardias a la cueva donde cumplirá su sentencia de muerte. Llega o
e2 q
Tiresias, el adivino ciego, que vaticina grandes males a Creonte. Este se dirige hacia donde está .!1
a as
Antígona y es un Mensajero quien le cuenta a Eurídice, esposa de Creonte, lo que allí ha ocurrido. ~
§ te
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-~

MENSAJERO. - Yo, querida señora, hablaré también por estar presente y no


omitiré palabra de verdad. ¿Para que ablandar una noticia, si luego he de quedar
.•
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la!,

como embustero? L a verdad es siempre lo correcto. Seguí a tu esposo hasta


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el extremo de la llanura; allí todavía yacía sin piedad, el cuerpo despedazado
~
de Polinices. D espués de haber rogado a la diosa de los caminos* y a Plutón* l!
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que retuvieran la ira* y que nos fueran propicios, lo lavamos con agua lustral*. o
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Qyemamos lo que quedaba con ramas de olivo fresco y después de levantar un
elevado túmulo* en tierra familiar, de nuevo volvimos hacia la caverna de pie- YI
diosa de los caminos: referencia a dra, cámara de Hades de la joven. Alguien escucha un grito y agudos gemidos, a Cl
Hécate, esposa de Plutón, diosa de los lo lejos, provenientes de esta cámara nupcial, sin entierro. Va a decirle a su señor
cam inos y de las tumbas que en ellos
se encuentran.
Creonte, que al aproximarse distingue sonidos confusos de tristes lamentos, y }
Plutón: nombre dado a Hades. da un grito desgarrador. "¡Desdichado de mí! ¿Acaso soy adivino? ¿Estoy en
retener la ira: Hécate y Plutón un camino más desolado d e los que he pasado? M e acaricia la voz de mi hijo.
debían estar ofendidos por la injuria
¡Ea, servidores! Id rápidamente y rodeando el túmulo, arrancad la piedra que
que Creonte infligió a los derechos del
muerto. cierra la entrada ¡mirad si la voz que oigo es de Hemón* o si soy burlado por los ~I
agua lustral: con la que se rociaba a dioses!" d
las víctimas en los sacrificios. Obedientes a las órdenes de nuestro abatido dueño, miramos. A ella la dis-
túmulo: sepulcro levantado de la
tinguimos en el fondo de la tumba, suspendida por el cuello, ahorcada con un p
tierra.
Hemón: hijo de Creonte y Eurídice, lazo de hilo fino; y a él, abrazándole la cintura y gimiendo la desgracia de la que g
r
prometido de Antígona. ha muerto, obra de su padre, y la desdichada boda. i
Cuando Creonte lo ve, avanza hacia él, grita horriblemente y lo llama lamen- h
tándose: "¡Ah, desdichado! ¿Qyé has hecho? ¿Qyé piensas? ¿En qué desdicha d
te consumes? Sal, hijo, te ruego suplicante".
~ ACTIVIDADES Pero el hijo mira con ojos extraviados y lo escupe en el rostro, no dice pala-
bra. Tira su cuchillo de doble puño. El padre se desvía. Irritado el desdichado,
1. Comparen las actitudes de sin dejar el arma, con los brazos extendidos, se clava la espada en el medio del
Mariana Pineda y de Antígona, pecho; desfalleciente estrecha en sus brazos el cadáver de la joven y exhala una
ambas condenadas a muerte. respiración jadeante. U na corriente le golpea contra la pálida mejilla.
¿Cómo reaccionan frente al Muerto, yace junto a un cadáver. El infortunado ha obtenido la realización
destino?, ¿qué actitud asumen de sus bodas en el H ades, mostrando en cuánto es la insensatez para los hom- e
ante sus enemigos? bres, el mayor mal.
2. Ambas despiertan el amor de
los hombres, pero ¿responden (Sin decir palabra, sube Eurídice las escaleras y entra en palacio, donde se suicida. ~'
estos de igual modo frente al El mensajero cuenta los acontecimientos a Creonte.)
destino de sus mujeres?
3. ¿Qué personaje representa a Sófocles,Antígona, Buenos Aires, Albatros, 1976 (fragmento).
Creonte en el drama lorquiano?
¿En qué se parecen ambos
personajes?

180 1Capítu lo 8 Las heroínas trágicas


1te- En la tragedia moderna
que
:ve- El mito de Antígona alcanza gran tra scendencia a lo largo del sig lo XX, ya que
...
~
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sus personajes adquieren va lor simbólico: el poder y la ambición, en la figura de
~ .
, Creonte; el desafío a la sociedad de los hombres y su sistema patriarcal, y la bús-

J.
~

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queda de paz y libertad de múltiples tiranías, en la de la protagonista. Se produce
fl
'2.
así el fenómeno de intertextualidad, definido por la teórica y escritora Julia Kris-

j 1 teva como el nexo que existe entre obras de distintas épocas y autores, que conti-
"
-•~
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núan, modifican, actualizan o critican las obras arquetípicas de la humanidad, entre

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no las que se encuentra Antígona .
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La versión de Jean Anouilh
Jean Anouilh escribe Antígona en 1942 y la estrena en 1944. En se momento
)n* I!
los nazis ocupan Francia y la obra t raza un paralelismo entre la figura del t irano JEAN ANOUILH
~
al*. G
Creonte y Pétain, jefe de Estado durante la ocupación y colaboracionista. (1910-1987)
un La Antígona de Anouilh, basada en la obra clásica, muestra a una joven rebelde
ie- y pura enfrentada con el Estado corrupto y decadente; por ello su muerte es digna: Dramaturgo francés. Entre sus
s, a cumple con los va lores de la ley divina. obras es posible mencionar:
íor Humu/os el tonto (1929);
Hermine (1932); El viajero sin
>,y Antígona equipaje (1937); La invitación al
en castillo (1947); Arde/e o Margarita
JO. CREONTE. - (La mira y la suelta con una sonrisita. M urmura.) Dios sabe sin (1948);L'a/ouette(1 953). En 1959
ue publica tres obras: Hurluberlu o
embargo que tengo otras cosas que hacer hoy, pero con todo perderé el tiempo el reaccionario enamorado, La
!os necesario para salvarte, pequeña peste. Al día siguiente de la revolución frustra- pequeña Moliere y Becket o el honor
da h ay entuertos que enderezar, te lo aseguro. Pero los asuntos urgentes espe- de Dios,· en 1969, Querido Antaine.
is- rarán. No quiero dejarte morir por un lío político. Vales más que eso. Porque tu
un Polinices, esa sombra desconsolada y ese cuerpo que se descompone entre sus
ue guardias y todo ese patetismo que te inflama, no es más que un lío político.[ ... ]
¡Tienes razón, debería hacer enterrar a tu hermano aunque más no fuera por
n- higiene! Pero para que los brutos a quienes gobierno comprendan, el cadáver
1
:ia de Polinices tiene que apestar toda la ciudad durante un mes.[... ] Me diviertes.

a- A NTÍGONA. - No, le doy miedo. Por eso trata de salvarme. A pesar de todo ~ ACTIVIDADES
!o, sería más cómodo conservar una pequeña Antígona viva y muda en este palacio.
el E s usted demasiado sensible para ser un buen tirano, eso es todo. Pero sin embar- 1. Busquen información sobre
1a go me hará morir dentro de un instante, usted lo sabe, y por eso tiene miedo. [ ... J el contexto histórico en el
que Anouil h escribe la obra y
>n C REONTE. -Entonces ten lástima de mí, vive.[ ... ] Tiene que h aber quienes relacionen el fragmento con
1-
digan que sí. Tiene que haber quienes gobiernen la barca.[... ] la situación política. ¿Qué dice
Creonte al respecto?
ANTÍGONA. -No quiero comprender. E so está bien para usted. Yo estoy 2. ¿Con qué personajes de la
a. aquí para otra cosa que para comprender. E stoy aquí para decirle que no y para obra de Lorca establecerían un
morir. [ ... ] ¿Qyé será de mi felicidad? ¡En qué mujer feliz se convertirá la peque- paralelo?, ¿en qué escena?
ña Antígona? ¿ Qyé mezquindades tendrá que hacer día a día, para arrancar con 3. La Antígona de Anouilh y
>). los dientes su pedacito de felicidad? D ígame, ¿a quién deberá mentir, a quién Mariana Pineda no renuncian a
sonreír, a quién venderse? ¿A quién deberá dejar morir apartando la mirada? sus ideales para salvar sus vidas,
¿qué argumentos esgrimen
Jean Anouilh,A11tigo11a, Buenos Aires, L osada, 2003 (fragmento). una y otra?

181
La versión de Leopoldo Marechal Ml
En 1950 Leopoldo Marechal da a conocer su versión de la tragedia griega con Mu
Antígona Vélez. La historia transcurre en la pampa argentina durante la Conquista
del Desierto, campaña militar que produjo el exterminio de los pueblos aborígenes.
A diferencia de Anouilh, que sostiene los nombres de los personajes de la tra-
§
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rul
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gedia griega, Marechal los modifica. Creonte será don Facundo Galván; su hijo He- o. M
món, Lisandro Ga lván; y Antígona, Antígona Vélez.
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-11 M
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En la obra de Marechal, Ignacio Vélez (Polinices) deserta de la ci vilización y se ~
!i!
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M1
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une a los aborígenes. En un ataque a los blancos, él y su herm ano, Martín Vélez
(Eteocles) mueren. Facundo Galván actúa com o el Creonte clásico y esto lleva a la M·
muert e a su sobrina Antígona y a su hijo, Lisa ndro, que cumplen así su fatíd ica pre-
..
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destinación, no del destino - como presuponían los clásicos-, sino de la pampa y ..,~
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su contexto inhóspito. ..
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11 (S
Antígona Vélez
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Cuadro quinto M
LEOPOLDO
MARECHAL L a explanada del cañón, en un atardecer que irá de un suave dorado a un rojo de
(1900-1970) incendio y a un índigo final. Antígona Véfez, en primerplano y centro, vestida con Alan
ropas de hombre. A su izquierda, el Coro de Mujeres. Cuan
ante
Poeta, narrador, dramaturgo y
ensayista. Durante la década [ ... ]
de 1920 fue colaborador de las
revistas literarias Martín Fierra y
A NTÍGONA. -El hombre que ahora me condena es duro porque tiene razón. I
Proa. En 1930 escribió, en París, Él quiere ganar este desierto para las novilladas gordas y los trigos maduros; para -H
loscapítulos iniciales de su novela que el hombre y la mujer, un día, puedan dormir aquí sus noches enteras; para mira
Adón Buenosayres (1948). Entre sus 1\
cubrir de flores el desierto! (Mira desolada su atuendo varonil.) Ahora me viste de
obras es posible mencionar: Cinco
poemas australes (1937), Cóntico hombre y está ensillando su mejor alazán* y me prepara esta muerte fácil. I
espiritual (1944), Banquete de MUJERES. -¡Niña, es tu verdugo! l
Severa Arcóngelo (1966), Historia ANTÍGONA. - ¡No! Todo lo ha ordenado él así porque anda sabiendo. due1
de Ja calle Corrientes (1967).
MUJER PRI MERA.-¿ Qyé sabe, para ordenar una muerte sin culpa? I
ANTÍGONA. -¡Él quiere poblar de flores el sur! Y sabe que Antígona Vélez, l
muerta en un alazán ensangrentado, podría ser la primera flor del jardín que J
alazán: caballo o yegua de color más busca. E so es lo que anda sabiendo él, y lo que yo supe anoche, cuando le tiré ene
o menos rojo, o muy parecido al de la a Ignacio Vélez la última palada de tierra y subí cantando a esta loma. ¡Era la
canela.
piedad, y también el orgullo de los Vélez! [...]

(Entran los hombrespor fa derecha en busca deAntígona Véfez: están conmovidos,


perofatales en su consigna. El Coro de Mujeres, petrificado a fa izquierda; el Coro de
H ombres, rígido a fa derecha;Antígona, con expresión abstracta, en el centro.)

Antígona se libera de los guardianes y sale galopando hacia la llanura. Lisandro intenta retenerla,
pero no lo logra.
.•

•I
de
er

182 1Capítulo 8 Las heroínas trágicas


MUJER PRIMERA. -¡Es ella! ¡Galopa contra el sol! [ ...]
con MUJERES. -¡Y la muerte delante!
Jista
nes. (Un silencio. Se oye otro galope que arranca de afuera.)
3"'
tra- ~
.!? MUJER PRIMERA. -¿Qyién ha salido ahora?
He- ~
~
~ MUJERES. (Tras observar un instante.)-¡Lisandro Galván!
a
y se ~ MUJER PRIMERA. -¡En un potro como de tinta! [ ... ] parejero: caballo de carrera, en
~
élez ~ MUJERES. -¡Dos parejeros* frente al sol! ¡Y la muerte delante! general caballo excelente y veloz.
a la •'
~
MUJER PRIMERA. -¿Qyé se ha movido allá lejos?
Jre- ~ MUJERES. -¡Algo brilla de punta!
e
·8
...
Ja y b MUJER PRIMERA. (Entiende.) -¡Lanzas!
~
MUJERES. - ¡Lanzas!
~
l!
~
o (Se oye a lo lejos una gritería de chusma salvaje. Después, el silencio.)

MUJER PRIMERA. -¡Antígona Vélez! ¡Lisandro Galván!


M UJERES. -¡Y la muerte afuera y sobre todo! ~ ACTIVIDADES

con Al amanecer un batallón de soldados persigue a los indios hasta el desierto, más allá del río Salado. 1. Busquen información sobre
Cuando regresan a la estancia, traen dos muertos que entregan a Facundo Galván. Este se descubre el momento histórico en el que
ante los cadáveres y los contempla. Marechal contextualiza su obra.
2. ¿Qué relación pueden
ón. DoN FACUNDO. (Arrancándose a su contemplación, dice a los Hombres:} establecer entre la
ara - Hombres, cavarán dos tumbas, aquí mismo, donde reposan ya. Si bien se representación literaria de la
:i.ra m ira, están casados. pampa que elabora Marechal y
de MUJERES. -¿Casados? las lecturas que realizaron en el
D oN FACUNDO. (Doliente y a su vez altivo.)-Eso dije. capítu lo6?
H oMBRE PRIMERO. (A don Facundo.) -Señor, estos dos novios que ahora 3. A diferencia de las heroínas
duermen aquí, no le darán nietos. leídas hasta aquí, Antígena
D oN FACUNDO. - ¡Me los darán! Vélez coincide con Facundo
ez, HOMBRE PRIMERO. -¿Cuáles? Galván en que su muerte es
ue D oN FACUNDO. -Todos los hombres y mujeres que, algún día, cosecharán necesaria. ¿Por qué? ¿Qué se
iré en esta pampa el fruto de tanta sangre. espera que su muerte y la de
la Lisandro traigan a la nueva
Leopoldo Marchal,AnHgona Vllez, Buenos Aires, Citerea, 1965 (fragmento). nación?

os,
de

J OTROS RECORRIDOS DE LECTURA


•Si quieren conocer otras versiones modernas del personaje
clásico, pueden leer las obras de Jean Cocteau o Bertolt Brecht.
• Por su parte, Bertolt Brecht publicó su obra en 1945
relacionándola con la situación política que se vivía en Berlín: al
• El escritor francés Jean Cocteau realizó una versión de Antígona salir de un refugio antiaéreo, dos hermanas ven a su hermano
destancando la valentía y la firmeza de la muchacha que se ahorcado junto a su victimario, un soldado de la Gestapo. Brecht
enfrenta al poderoso Creonte para defender sus ideales. hace hincapié en la figura del tirano como reflejo del régimen nazi.

183
La versión de Griselda Gamba ro
En 1986 Griselda Gambaro publica Antígona furiosa. Su obra busca p lasmar la
realidad argentina de las décadas de 1960 y 1970. Para ello recurre a los personajes
creados por Sófocles, como Antígona, Corifeo y Creonte, y present a otros, como
., .-
.." '
Ant inoo. Mediante la técnica del collage, Gamba ro introduce tanto fragmentos de
la obra clásica, como versos de Rubén Darío y palabras de Cristo o de Perón.
También aquí Antígona se revela contra el poder, pero solo para morir una y
otra vez, porq ue a diferencia de la tragedia griega, en la que el tirano es castigado,
la obra de Gambaro muestra la imposibilidad de luchar contra el poder del Estado,
de los adu ltos; de allí que Antígona, furiosa, se quite la v ida. La protagonista no
t iene salida ya que, como todos los jóvenes que mant ienen sus convicciones, es m
susceptible de sufrir por transgredir el orden establecido. La obra pretende mostrar
el conflicto histórico y político del país, con sus persecuciones, censura, tortu ra y
atropellos.
er

Antígona furiosa
La obra comienza con una Antígona ahorcada que se desciñe el lazo y
GRISELDA canta: "Se murió y se fue, señora; I se murió y se fue; / el césped cubre su C<
GAMBARO (1928) cuerpo, / hay una piedra a sus pies".
ac
Comenzó a escribir tempranamente, A NTÍGONA. (Grita.) - ¡Eteocles, Polinices, mis hermanos, mis hermanos!
dedicándose en principio a la CORIFEO. (Se acerca.)-¿O!ié pretende esta loca? ¿Criar pena sobre pena?
narrativa, género que alternó
ANTINOO. -Enterrar a Polinices pretende, ¡en una mañana tan hermosa! n
después con la dramaturgia.
Durante la dictadura militar, un CORIFEO. -Dicen que Eteocles y Polinices debían repartirse el mando un e
decreto prohibió su novela Ganarse año cada uno. Pero el poder tiene un sabor dulce. Se pega como miel a la mosca. l<
la muerte, por lo que debió exiliarse Eteocles n o quiso compartirlo.[ ... ] e
en España. Entre sus obras se
encuentran: Nosferatu, Cuatro
ANTÍGONA. (Avanza serenamente.) - Temor y temblor, temor y temblor.
ejercicios para actrices, Las paredes, CORIFEO. - Hiciste lo que prohibí.
El desatino, Los siameses, El campo, ANTÍGONA. -Reconozco haberlo h echo y no lo niego.
Nada que ver, Efectos personales,
ANTINOO. (Asustado.) - ¡No lo niega!
Desafiar al destino, Atando cabos,
La casa sin sosiego. CORIFEO. - Transgrediste la ley.
ANTÍGONA. -No fue Dios quien la dictó ni la justicia.
CORIFEO. - T e atreviste a desafiarme, desafiarme.
ANTÍGONA. - M e atreví.
CORIFEO. - ¡Loca!
ANTÍGONA. -Loco es quien me acusa de demencia.[ ... ]
CORIFEO. - Ni ella ni su h ermana escaparán a la muerte más terrible.
A NTÍGONA. (Palidece.)-¿Ismena? ¿Por qué Ismena? [... ]Ella no quiso ayu-
darme. Tuvo miedo.
CoRIFEo. -¿Y cómo no iba a tener miedo? Es apenas una niña. ¡Tan tierna!
ANTÍGONA. - Delante de Creonte, yo también tuve miedo.
ANTINOO. -¡Es nuestro rey!
A NTÍGONA. -¡Y yo una princesa!, aunque la desgracia me haya elegido.
ANTINOO. - ¡Sí! Hija de Edipo y de Yocasta. Princesa.
CORIFEO. - E stá triste, ¿qué tendrá la princesa? Los suspiros se escapan de
su boca de fresa [ ... ]

184 I Capít ulo 8 Las heroínas trágicas


ANTÍGONA. -Delante de Creonte tuve miedo. Pero él no lo supo. Señor, mi Antígona y otras artes
3r la rey, ¡tengo miedo! Me doblo con esta carga innoble que se llama miedo. No me El tema de Antígona dio lugar a
varias obras, entre ellas ensayos
ajes castigues con la muerte. Dejame casar con Hemón, tu hijo, conocer los placeres
como La tumba de Antígona
•mo ... de la boda y la maternidad. Qyiero ver crecer a mis hijos, envejecer lentamente .
~ (1983), de María Zambrano, o
~

s de !
g ¡Tengo miedo! (Se llama con un grito, trayéndose al orgullo.) ¡Antígona! (Se incor- novelas y cuentos como Antígona,
.; a• pora, erguida y desafiante.) ¡Yo lo hice! ¡Yo lo hice! [... ] de Henry Bauchau (1997); Die
f1 Berliner Antígone, de R. Hochhuth
ia y
3do,
<!!
~
.¡¡
.• ~
ANTINOO. -¡Las mujeres no luchan contra los hombres!
ANTÍGONA.-Porque soy mujer, nací para compartir el amor y no el odio. [ ... J
(1946). También óperas tales como
las de Tommaso Traetta (1772),
'iª 1 CORIFEO. - Avanza hacia el lecho donde todos tenemos que acostarnos. Arthur Honegger (1927), Carl
ido,
-
~
-
1no .... •••o
. ANTÍGONA. - H ice mi último viaje. D ecir "la última vez", (La voz se le defor- Orff (1949) y Georg Katzer (1991).
También el tema fue abordado en
;, es ~
e e
o
u
ma.) Úl. .. tima vez. Saber... que más allá no hay luz, ninguna voz. La muerte, las artes plásticas, con la pintura
~ • ¡;
trar
ra y ..
~

3 B
.:: ~
~
que duerme todo lo que respira, me arrastra hacia sus bordes. No conocí noche
de bodas, cantos nupciales . Virgen soy. Mi desp osorio será con la muerte .
Edipo maldice a su hijo Polinices, de
André Marcel Baschet (1883).
!! B
e CoRIFEO. -Te olvidas de las ventajas; te encaminas a las sombras con gloria,
~ ¡::g
Q ensalzada.
ANTINOO. - ¡Todo el mundo te aprueba!
CORIFEO. -¡Sin enfermedades, sin sufrimientos!
ANTINOO. - ¡Sin achaques de vejez!
CORIFEO. -Por propia voluntad, podría decirse, entre todos nosotros, des-
cenderás libre y viva a la muerte. ¡No es tan trágico! [ ... J
ANTÍGONA. -Oh, ciudadanos afortunados, sean testigos de que nadie me
acompaña con sus lágrimas...
.,
>. CORIFEO. -¡Dios mío, empieza a compadecerse! (Intenta hui1~)
? ANTÍGONA. - Qye las leyes, ¡qué leyes!, me arrastran a una cueva que será
1 mi tumba. Nadie escuchará mi llanto, nadie percibirá mi sufrimiento. Vivirán
un en la luz como si no pasara nada. ¿Con quién compartiré mi casa? No estaré con
:ca. los humanos ni con los que murieron, no se me contará entre los muertos ni
entre los vivos . Desapareceré del mundo, en vida.
CORIFEO. (Bondadosamente.) -El castigo siempre supone la falta, hija mía.
No hay inocentes.
ANTINOO. (Bajo.)-¿Nunca? (Se recompone.) Lo apruebo: ¡muy bien dicho!
CORIFEO. -Y si el castigo te cayó encima, algo hiciste que no debías hacer.
¿Qyé pretendes? Llevaste tu osadía al colmo, te caíste violentamente.
ANTINOO. - ¡Pum! i ACTIVIDADES
ANTÍGONA. - ¡Ay, qué aciaga boda conseguiste para mí, hermano! Con tu
muerte me mataste, cuando te sobrevivía. 1. Busquen información en
ANTINOO. - ¡Me parte el corazón! fuentes diversas sobre el
CORIFEO. -A mí también. Pero el poder es inviolable para quien lo tiene. período histórico al cual hace
¿Cómo se le ocurrió oponerse?[ . .. ] referencia la obra, es decir, los
u- ANTÍGONA. - Por última vez. Me llevan sin llantos, sin amigos, sin esposo. años sesenta y setenta en la
En mi muerte, no hay lágrimas ni lamentos. Solo los míos. [ .. . J Argentina.
ia! CORIFEO. -¡Yo la termino! [ . .. ] ¡Enciérrenla! Qye sea abandonada en esa 2. Señalen en el texto
tumba. Si ella desea morir allí, que muera. Si desea vivir sepultada bajo ese las referencias a ideas y
techo, que viva. Qyedaremos puros de su muerte y ella no tendrá contacto con acontecimientos políticos.
los vivos. 3. Debatan las ideas que
ANTINOO. - ¡Qyé sabiduría! E stá y no está, la matamos y no la matamos. sostienen los personajes. ¿A
de quiénes representan? ¿Qué
Griselda Gambru:o,Antígonafuriosa, en Teatro 3, Buenos Aires, De la Flor, 1989 (fragmento) . posiciones se asumen ?

185
DRAMA ~
.;
o.
Desde un punto de vista estrictamente literario, el en tanto que la comedia presenta a la gente "menos e
2
término drama sirve para designar el "texto destinado digna"; en consecuencia, el clima trágico se logra me-
.¡;
a q
a la representación teatral". Esto quiere decir que nos
hallamos en presencia de una composición escrita,
diante la evocación de individuos egregios [. .. ] que en-
frentan con valentía y decoro las vicisitudes del des-
~e p
Q. d
pero cuya forma natural de vincularse con el público no t ino, mientras que la atmósfera cómica surge de expo- ~
~
s
consiste en una posible lectura directa - como en el ner en escena el comportamiento del hombre común ~

caso de la ficción, la poesía o el ensayo-, sino que re- en la vida cotidiana. A su vez esta dicotomía puede en-
~
e
o
p
·¡;
quiere Ja mediación de actores que deben transformar trañar-como lo enfatizan los preceptistas del Renaci- '6
~ r•
ese texto en acción y diálogo escénicos. En tal pers- miento- una tajante distinción social entre los grupos G~

.!!
e
pectiva, el drama -en cuanto composición escrita- ilustres y las clases populares; tal discriminación fue !'!
e
es equ ivalente a la partitura musical, cuyas virtudes respetada y mantenida por Shakespeare y por los auto- ¡:
plenas como obra de arte solo pueden estimarse gra- res del clasicismo francés (Corneille, Moliere, Racine). o e
cias al concurso de adecuados intérpretes. En este El segundo criterio para distinguir las dos especies t
sentido, si nuestro acceso a la pieza dramática se li- dramáticas es expuesto claramente por Dante, quien
mita a la lectura, en la creación de un gran dramaturgo Jo toma de Séneca; según esta doctrina, la tragedia
-Sófocles, Shakespeare, lbsen- posiblemente ha- comienza respetando un cuadro admirable y tranquilo,
llaremos notables cualidades literarias, sea en el em- pero termina en un desenlace triste y desolador[. ..].
pleo del lenguaje, en la caracterización de los persona- Cabe consignar, empero, que la drástica separa-
jes o en la enunciación de ideas; pero como se trata ción entre las dos especies dramáticas señaladas se
de una labor concebida en términos teatrales, solo se ha ido debilitando en el teatro moderno. Con el avance
alcanzará a percibir la totalidad de su fuerza y de sus de las clases medias y la creciente democratización de
méritos al ser representada en condicione s óptimas. la sociedad fue necesario implantar un drama burgués
Por eso mismo, no basta con ser un excelente poeta o -definido por Diderot en el siglo XVIII y practicado por
pensador para escribir buenos dramas; además debe lbsen cien años después- que enfoca con seriedad
poseerse un dominio pleno de los recursos escénicos los problemas familiares y sociales del hombre común.
específicos, una imaginación de exclusiva naturaleza Pero no solo ha sufrido un vuelco el aspecto social del
teatral. En síntesis, el texto dramático admite ser des- drama, sino tambien la estructura misma de la compo-
cripto como una composición integrada por parlamen- sición escénica; a causa de ello, las fronteras entre la
tos, es decir, expresiones orales de los personajes, tragedia y la comedia se han ido borrando.
sea en prosa, en verso o mediante la combinación de Además de las dos especies examinadas pueden
ambos, y por indicaciones dest inadas a ordenar la re- recordarse otras de significación más restringida: el
presentación, a precisar la escenografía, a señalar los drama de sátiros griego; el misterio, el milagro y la mo-
movimientos de Jos actores. Al finalizar la pieza dra- ralidad del teatro cristiano medieval; la farsa de fines
mática, el crítico literario generalmente concentra su de la Edad Media; la pieza histórica que tuvo repercu-
interés en los parlamentos, de los que suele extraer sión en el teatro isabelino inglés; el auto sacramental
su juicio sobre los valores poéticos del lenguaje, la in- cultivado en la España del Siglo de Oro; la pantomima
tensidad de las situaciones y la verosimilitud y hondura que se extendió desde la Antigüedad hasta piezas de
de las pasiones humanas expuestas; pero el drama es Beckett, con exclusión de todo diálogo. Inclusive la pa-
una creación híbrida, en el sentido de que incorpora labra drama pasó a tener un valor especial izado como
recursos diversos y presupone el trabajo de un equipo texto escénico que representa un cuadro serio de los
procedente de distintos campos artísticos . problemas burgueses . Por supuesto, esta enumera-
Ya en el teatro griego la actividad dramática se ción se halla lejos de agotar las especies dramáticas
repartía entre la tragedia y Ja comedia. Esta división del teatro occidental, a las que deben añadirse las for-
puede ser explicada de dos maneras diferentes: mas del teatro de Oriente.
1) de acuerdo con la naturaleza e intensidad de las si-
tuaciones y personajes expuestos; 2) de acuerdo con
el desenlace feliz o infortunado de Ja anécdota. Aris- Jaime Rest, Conceptos fundamentale s de la literatura mo-
tóteles adopta el primero de estos criterios y declara derna, Buenos Aires, Centro Editor de América Latina, 1979
que la tragedia exhibe a los personajes "más dignos", (adaptación).

. 1
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s Reescribir la lectura
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:} Los textos académicos son, en general, extensos y presentan recursos como los
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~- a l que se han explicado en capítulos anteriores -definición, reformulación, ejem-
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plos, analogías, etcétera-. Para recordar este tipo de texto y estar en condiciones
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de exponerlo en exámenes, ya sea en forma oral o escrita, se suelen elaborar re-
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súmenes. La elaboración de resúmenes pemite establecer las relaciones del texto.
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Para resumir es necesario realizar varias operaciones: entender lo que está escrito,
i- i3.. relacionarlo con otras informaciones, apropiarse de un vocabula rio específico de la
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disciplina que se está estudiando y pensar cómo se expresarán los conceptos des-
e J!
1- e tacados. ¿Cómo decir lo mismo con otras palabras o con nuestras propias palabras,
¡:
l. 9 como muchas veces nos solicitan ? Para elaborar un nuevo texto que responda al
s texto fuente es necesario jerarquizar las ideas. Al hacerlo se toma conciencia de
1
aquello que no resultó claro en el texto leído y que es necesario releer; de la nece-
3
sidad de buscar palabras en el diccionario; de la importancia de identificar dudas y
tratar de resolverlas. Quien resume comprende qué es lo importante y qué datos
son accesorios.

r
J
~ ACTIVIDADES- - - -
1. Relean el texto fuente y resuelvan las consignas que siguen.
a. ¿De dónde fue extraído? ¿Qué destinatario habrá tenido en mente el autor? ¿Existe
en el texto algún indicio al respecto?
b. Reconozcan definiciones, reformulaciones, analogías (¿con qué se compara la pieza
dramática?) y ejemplos.
c. ¿A qué hacen referencia en el texto las sigu ientes construcciones?
• "En tal perspectiva .. :'
•"En est e sentido .. :'
• "Por eso mismo.. :'
d. En la construcción"... pero como se trata de una labor concebida en términos
teatrales, solo se alcanzará a percibir la totalidad de su fuerza y de sus méritos al ser
representada en condiciones óptimas'; ¿qué ideas contrapone el conector pero?
e. En la construcción"... además debe poseerse un dominio pleno de los recursos
escénicos específicos, una imaginación de exclusiva naturaleza teatral'; ¿a qué idea
suma información el conector además?
f. ¿Qué significa la frase"el drama es una creación híbrida"?
g. Elaboren un esquema que dé cuenta de las semejanzas y diferencias entre la
comedia y la tragedia a lo largo de su evolución histórica.
h. Busquen información relacionada con el tema en otras fuentes.
i. Elaboren un resumen que reúna la información extraída del texto fuente y de las
nuevas consultas realizadas. Expongan en forma oral los datos incluidos en el resumen.
¿Pueden hacer comprensible para otros aquello que han leído?

187

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1. Si bien parece no haber protagonistas femeninas en nuestra historia nacional, los 5
escritores se ocuparon de rescatar mujeres que participaron en el descubrimiento, ~ 1
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la colonización y la construcción de las nuevas naciones, destacando su nobleza, o.
~
coraje, osadía, rebeldía y heroicidad. Tal es el caso de la Maldonada, que conocieron .!?
,
en el capítulo 3. Esta actividad les permitirá ponerse en contacto con las vidas de ~

mujeres que vivieron en diferentes momentos de nuestra historia. En pequeños ..~e


grupos, rastreen su contexto histórico. Luego elaboren diálogos teatrales entre
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ellas y una mujer del presente. "e


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~
Mariquita Sánchez ""
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En el virreinato del Río de la Plata, las primeras publicaciones de los l!


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criollos criticaron la costumbre de arreglar los casamientos entre familias sin g

darle lugar al amor, muy valorado por las nuevas tendencias del Romanticis-
mo. Por su parte, Manuel Belgrano recomendó vivamente que se educara a
las mujeres, algo que constituía también una forma de reconocer a su madre,
Josefa González Casero, sostén del hogar y entusiasta de la buena educación.
La defensa del derecho de las mujeres al amor, a la educación y la cultura,
y fundamentalmente a una vida propia, tuvo una representante genuina en
Mariquita Sánchez (1786 -1868). Su lugar en la historia suele limitarse al de
anfitriona de un salón refinado en el que se dieron cita las personalidades
de la política, la ciencia y la cultura y en el que se habría cantado el Himno
Nacional por primera vez. Pero más allá de esto, ella se convirtió en símbolo
de la modernidad porque recurrió a la ley para defender su derecho a elegir
marido contra la voluntad de sus padres.
Ese rol protagónico en la revolución de las costumbres la impulsó a par-
ticipar más tarde en la conspiración de Mayo de 1810, junto con su esposo,
Martín Jacobo Thompson. No se conocen datos concretos sobre su actua-
ción, pero algunas cartas suyas indican que estaba al tanto de los riesgos que
se corrían, que temió por sus seres queridos y que apoyó desde un principio
el cambio político.
Esta patriota de 1810 y su grupo de amigas del patriciado porteño se
plantearon el tema de cuál sería el lugar de la mujer en la sociedad después
de la Revolución. Según puede leerse en El Grito del Sud, pronto entendie-
ron que el gobierno no había tomado ninguna medida dirigida a mejorar su
educación: a "las madres, las esposas, las hijas, hermanas y compatricias de
los americanos no les han debido hasta ahora un solo rasgo de atención y
de liberalidad, no han podido conseguir que den una sola ojeada compasiva
hacia ese sexo degradado inmemorialmente y que forma la más dulce mitad
de su especie".

María Saenz Qyesada, "Mujeres que hicieron la historia", en


LaNación,23 de mayo de 2010 (fragmento).

188 1Capítulo 8 Las heroínas trágicas


DS Eduarda Mansilla
:o, Sobrina de don Juan Manuel de Rosas, hija de Agustina Rosas y del ge-
!
~
. ',·
neral Lucio Mansilla, quienes fueron además padres de Lucio Victorio [ ... J
'ª, ~ l
~n .!! ¡ Eduarda era capaz de servir de intérprete a su p oderoso tío cuando ante él
le
a l se presentaba un diplomático inglés o francés, la niña que cantaba y tocaba
j ¡
)S ..e = , el piano y hechizaba a todos quienes llegaban a conocerla. Creció y se casó
re en 1855, tres años después de Caseros, con Manuel G arcía, hijo de un tenaz
oponente de Rosas y diplomático en ese momento del gobierno de Urquiza.
Se habló de Montescos y Capuletos, de Romeos y de Julietas. [ ... ] Se podría
recordar que en un momento en el que se discutía con ardor la definición de
)S nación, el casamiento de Mansilla y G arcía brillaba como la esperanza de
n conseguir en la esfera política la unificación de los opuestos o cuando menos
¡- el encuentro ideal, civilizado y en paz, de los extremos en pugna. Pero la
a cuestión es que fue, además de un acontecimiento social y político, el inicio
e, de una vida en común que trajo viajes, hijos y libros en la vida de Eduarda
] . Mansilla. El médico de San Luis: novela americana, firmada con el nombre de
a, Daniel, su hijo mayor, apareció cinco años después de su casamiento. Tam-
n bién aparece ese año Lucía M iranda. En París, en 1869 se publica Pablo ou
.e la vie dans les Pampas, y en 1880, en Buenos Aires, Cuentos y L a Marquesa de
:s Altamira, drama en prosa que se pone en escena en Montevideo, y R ecuerdos
o de viaje (1882). Llegan después Creaciones, relatos y teatro, de 1883 y Un
o amor, de 1885. [ ...]
.r Tal vez Eduarda sea la primera mujer argentina a quien le calza estricta-
mente la definición de "argentina" más que la de "unitaria" o "federal". Ella
nunca se llama a sí misma "argentina". En su lugar habla de "lo nuestro" o de
"la Patria ausente". "L o nuestro" es lo que la autora y sus lectores comparten,
incluyendo la religión, los idiomas (castellano y francés) y una "way of life"
e similar a la de las clases altas de Europa. Eduarda se siente conmovida por
) la situación de los pueblos originarios de E stados Unidos (los "hijos del
desierto") y habla incluso de genocidio. Pero en ningún momento plantea la
e misma situación con resp ecto a los pueblos originarios de "la Patria ausente"
s y además nunca cuestiona la esclavitud. [ ... ] La jerarquía social es para ella
de principal importancia, cosa que se transparenta aun en la descripción de
l la mujer que trabaja en Estados Unidos. Habla incluso de "la soberanía de la
mujer" que puede ganar su propio dinero, poner un comercio, solicitar crédi-
y tos bancarios. [ ... ] A Mansilla le atrae la idea de la participación de las mu-
l jeres en la vida pública, pero se opone a su emancipación ("ese disparate").
Cualquier emancipación, de las mujeres o de los negros, es para ella cuanto
menos sospechosa, y del control de la natalidad y el aborto son "aberracio-
n es". [... ] Eduarda Mansilla de García murió de una afección al corazón en
Buenos Aires en 1892. Tenía 54 años .

Gorodischer, Angélica, "A dos voces. D iálogos entre dos escritoras del siglo XIX: Eduarda Mansilla
y Emma De L a Barra", en Sylvia Iparraguirre (coordinadora), La literatura aigentina po1· escritores
argentinos, Buenos Aires, Biblioteca Nacional, 2009 (fragmento).

189
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