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EL COLEGIO DE LA FRONTERA SUR

Equipo Abejas
Panamericana y Periférico Sur, Barrio Ma. Auxiliadora,
29230 San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, México
www.ecosur.mx/abejas - abejas@ecosur.mx
Tel +52 (967) 674 9022

Primeros Pasos en la Construcción de los


Principios de la Meliponicultura
Existe en Mesoamérica un entusiasmo de muchas organizaciones y muchas personas para cuidar y criar las abejas sin
aguijón o meliponinos, lo que se le ha llamado meliponicultura.
Estas abejas son nativas de la región, son un legado de los pueblos que desde la época prehispánica han aprendido a
conocerlas, y a trabajar con ellas. Son una riqueza de la naturaleza en las regiones con clima tropical. Estas abejas ofrecen
también la oportunidad de producir y regalar o vender miel, como dulce o como medicina, y así generar un nuevo ingreso
para las comunidades rurales. La meliponicultura es entonces una triple riqueza, cultural, natural y económica.
En el Equipo Abejas de Ecosur, después de casi 30 años trabajando con las abejas nativas y los meliponicultores, nos
conmueve este renacimiento de la meliponicultura, y nos sentimos comprometidos para acompañarlo. Al mismo tiempo,
reconocemos que, con el entusiasmo, se realizan prácticas que rápidamente podrían poner en riesgo las abejas y todas las
riquezas que representan.
Por ello sentimos importante, a través de este documento, compartir nuestra reflexión. Primero queremos reconocer que
aprendizajes que hemos tenido en el camino de la apicultura, nos hace pensar que en meliponicultura hay que prevenir
ciertas prácticas. Esto nos permitirá reflexionar en varios sentidos:
¿se vale sacrificar árboles para hacernos de nidos de abejas?
¿se vale mover nidos de una región a otra?
¿se vale alimentar a las abejas?,
¿se vale comprar colmenas?
Finalmente queremos pensar en ¿por qué y para qué ser meliponicultures?
Estos principios están en construcción. Los ponemos a discusión, y toda retroalimentación estará bienvenida.

Lecciones de la apicultura para los meliponicultores


En apicultura se trabaja con Apis mellifera, una abeja generalista, muy robusta, que aguanta mucho el manejo: se pueden
alimentar las colmenas, movilizarlas, dividirlas, revisarlas en casi cualquier hora del día, y las abejas aguantan, las colmenas
están bien. Sin embargo, en las últimas décadas, se observa que esta especie va mal. En varios países, en particular en
Europa y en Estados Unidos, se mueren de 30 a 50% de las colmenas cada año. ¿Por qué? Los que han estudiado este
problema coinciden que las razones principales son la pérdida de recursos alimenticios (por la deforestación y la
urbanización), y la exposición a los plaguicidas (cada vez más usados en agricultura).
Pero otra razón fundamental del declive de Apis mellifera es el manejo intensivo de las abejas. Cuando se llevan colmenas o
reinas de un lugar a otro lugar lejano, se llevan patógenos (enfermedades) desconocidos que las abejas del lugar no saben
enfrentar. Además, en este movimiento, se pierde la diversidad de abejas y sus posibilidades de defenderse o de adaptarse a
nuevas condiciones. Cuando se alimentan las abejas de forma intensiva, se hace que pierdan su capacidad de prepararse a
los momentos de escasez de recursos (tiempo de lluvias). Cuando se aplican medicinas para curar sus enfermedades, se hace
que pierdan su capacidad para defenderse ellas mismas de estas enfermedades.
El mensaje que deja la apicultura intensiva es entonces que, si se usan prácticas intensivas en meliponicultura, con
seguridad las abejas nativas estarán mal, en 10 o en 20 años. Realmente todo en la medida: una manejo mesurado y bien
pensado ayuda a las abejas y a los meliponicultores; un manejo intensivo que solo busca producir y vender mucha miel, es
nefasto para las abejas, y finalmente para los meliponicultores.
Veamos cuatro situaciones…
1. ¿Se vale sacrificar árboles para hacernos de nidos de abejas?
Problemática
Cuando se quiere empezar en la meliponicultura, es necesario obtener los primeros nidos. Una opción es buscar árboles que
tengan nidos, tumbarlos y llevarse los nidos – pero entonces se contribuye a la deforestación. En algunos casos es posible
obtener nidos de otra manera y no deforestar. En otros casos no es posible, y si no se quiere sacrificar árboles, es imposible
iniciar en meliponicultura. Entonces, ¿se vale sacrificar árboles, si o no?

Condiciones
- Si se está arrancando de cero la instalación de un meliponario
- Si no hay colmenas que se puedan conseguir de otra forma localmente
- Si se asegura que la especie de abeja es realmente adecuada para el manejo, es decir para la meliponicultura
- Si es un árbol seco o está dañado
- Si no se van a tumbar árboles viejos o poco comunes
- Si hay abundancia de ese árbol y es fácil de propagar
- Si se tiene permiso de la comunidad para talar este árbol
- Si de todas formas se va a tumbar este árbol (por ejemplo, para sembrar milpa u obtener madera)

Si se cumple lo anterior, es posible tumbar uno u otro árbol, pero se recomienda:


- Sembrar otros árboles nativos
- Buscar el acompañamiento de alguien con experiencia en la obtención de nidos, para asegurar que el trasiego se haga en
las mejores condiciones
- Tener todas las condiciones necesarias (materiales, espacio adecuado para la colmena, tiempo para el seguimiento…)
- Conocer las amenazas que enfrentan las abejas (plagas)
- Tener disposición para más adelante, dar divisiones a otros que quieren comenzar la actividad

2. ¿Se vale mover nidos de una región a otra?


Problemática
Una opción para tener colmenas es traerlas de otra región. Pero esto implica dos grandes problemas.
El primero es porque en una colmena hay cientos de especies de ácaros, insectos o bacterias: estás no son ningún problema
en el lugar de origen de la colmena, porque a través de millones de años, las abejas aprendieron a defenderse de estas
especies. Pero cuando se trasladan a otro lugar, se transmitirán a las colmenas locales, que no conocen estas nuevas
especies, y no saben defenderse de ellas. Y entonces es muy probable que estas especies se conviertan en plagas, en
patógenos.
El segundo es porque las abejas de una especie no son todas iguales. De un lugar a otro son diferentes, aunque a veces no se
vean las diferencias pues solo es una diferencia genética. Estas diferencias son importantes: gracias a ellas, tenemos
seguridad que siempre habrá un tipo de abejas capaz de adaptarse a otros ambientes, o los cambios del medio ambiente.
Pero cuando las abejas se trasladan a otro lugar, se mezclan, se pierden estas diferencias, y entonces las abejas pierden sus
posibilidades de adaptarse.
Entonces, ¿se vale mover nidos de una región a otra?

Condiciones
- Si no se puede conseguir colmenas localmente
- Si se moverá la colmena a un lugar donde ya existen colmenas de la misma especie (dentro de su rango de distribución)
- Si no se va a hacer un traslado muy lejano de la colmena (no más de 50 kilómetros en línea recta)

Si se cumple lo anterior, es posible mover uno u otro nido, pero se recomienda:


- Que el traslado no implique un riesgo para la colmena
- Que sea una colmena establecida en tronco o caja, con condiciones estables
- Que sea muy pocas colmenas y que sirvan como pie de cría (para multiplicación)
- Que sea temporada de floración y sequía
- Que se tenga disposición para más adelante, dar divisiones a otros que quieren comenzar la actividad
3. ¿Se vale alimentar a las abejas?
Problemática
Hay meliponicultores que alimentan sus colmenas, para que sean más fuertes, o para poder hacer más divisiones. Sin
embargo, esto genera dos problemas.
El primero es que estamos dando un alimento a las abejas, del que no sabemos si realmente es lo más apropiado. Si es miel
de otras abejas, tiene diferentes azúcares. Si es azúcar industrial, tiene residuos de químicos. No se sabe los efectos que
puedan tener a largo plazo.
El segundo es que las abejas se acostumbran a estar alimentadas y pierden sus capacidades de prepararse al tiempo de
escasez, por ejemplo, haciendo grandes reservas o reduciendo su cantidad de cría.
Entonces, ¿se vale alimentar a las abejas?

Condiciones
- Si se ha hecho todo lo posible para que las abejas tengan reservas, en particular de no cosechar toda la miel de la colmena,
o no cosechar a muy cerca del tiempo de lluvias.
- Si se hace una división y se ve necesario reforzarla
- Si una colmena está débil y a punto de colapsar (baja población, pocas reservas de miel y polen)

Si se cumple lo anterior, es posible alimentar a las colmenas, pero se recomienda:


- Conocer las implicaciones de alimentar con otros productos que no sean la miel de la propia abeja
- Alimentar las colmenas con su propia miel, o en caso de no tener, conseguir miel de la misma especie; de no conseguirse
miel de la misma especie, alimentar con miel de Apis mellifera
- En el último de los casos y de forma excepcional, si no se consiguiera miel, y si las colmenas estuvieran en condición
crítica, alimentar con jarabe de azúcar
- Mantener limpieza durante la alimentación, para no provocar pillaje y no atraer moscas
- Evitar alimentar por periodos muy largos
- Sembrar árboles de importancia nectarífero y polinífera

4. ¿Se vale comprar colmenas?


Problemática
Existe otra forma de iniciar en la meliponicultura, que es comprando colmenas. Ahí hay dos problemas. Primero son los
problemas derivados de mover colmenas de un lugar a otro (ver arriba). Segundo se está incrementando la demanda por
comprar nidos, lo cual puede hacer que suban los precios de los mismos, y hace más difícil a las personas interesadas iniciar
en la meliponicultura.
Entonces, ¿se vale comprar colmenas?

Condiciones
- Si no se tienen colmenas propias para dividir
- Si nadie en la región está dispuesto a regalar una colmena
- Si nadie en la región está dispuesto a prestar una colmena en tronco, a cambio de devolvérsela en caja después de haber
realizado el trasiego ya una división

Si se cumple lo anterior, es posible comprar colmenas, pero se recomienda:


- Comprar solamente las necesarias para iniciar la actividad (3 ó 4 de la especie seleccionada)
- Asegurarse que sean de una especie presente en el lugar donde se pretende traer, y que no vengan de un lugar alejando de
más de 50 km en línea recta
- Evitar propiciar la tala de árboles al comprar troncos recientemente cortados
- Tener disposición para dar más adelante, divisiones a otros que quieren comenzar la actividad, y no tengan los mismos
problemas para arrancar.
Al fin…

¿Por qué y para qué ser meliponicultores?

¿Por qué?
- Tenemos el tiempo, el espacio y las condiciones para desarrollar la meliponicultura
- Queremos impulsar la actividad entre los niños, jóvenes, hombres y mujeres de nuestras comunidades
- Nos comprometemos a hacer un aprovechamiento responsable e integral de la meliponicultura

¿Para qué?
- Conservar y repoblar algunas especies locales
- Complementar la salud y alimentación de nuestras familias con los productos de la colmena
- Permitir a nuestros descendientes conocer las abejas nativas sin aguijón
- Rescatar y/o mantener viva la tradición y los saberes ancestrales de la meliponicultura
- Conservación el medio ambiente y la biodiversidad
- Garantizar la polinización de los cultivos locales
- Diversificar las actividades de traspatio de las familias

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