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Asuntos Internacionales
IVº Edición
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LEGISLATURA
Ciudad Autónoma de Buenos Aires
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la seguridad interior -a causa deí aun1ento dei deíito y del 5entimiento
de inseguridad de los ciudadanos-se han coiocado entre tos pru,cípales
problemas que preocupan a la pobíación. Por otro iado, los temas re-
feridos a la defensa del país han ido decayenáo progresivamente como
asuntos de baj o interés para los argentinos.
Esta situación genera que mucoos miembros de la acaóemia y líde-
res de opinión se posicionen a favor de la utiíizacíón de ias FFAA -con
., el respectivo cambio de las ieyes de defensa, segurióad interior e inteli-
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gencia- para con1píernentar y fonaíecer ias tareas de segurictad interior
llevadas a cabo por ei · aparato de seguridad (poi idas, genóarmeria y
prefectura). Este invoíucramiento áe 1as FFAA en tareas áe seguridad
interior en reaiidad pone en roanifiesto eí interés que Iienen derermina-
dos sectores de que el instrurnento n1iíitar argentino sea utiiizado para
la lucha contra ias denorrlinarias · nuevas mnenazas.. , en-ere. las que se in-
ciuyen el .terrorismo, el narcotráfico y eí crirnen organizado en generai .
Si bien este posicíonamíento viene acon1pañado por un declive en
el interés en los temas de deÍensa por pari:e de ía opinión púbiica, esta
razón no es exhaus·i:iva para expi icar eí surgimiento de sectores que
están a favor de ia participación de las FFAA en tareas de segurjóad
interior. Un factor aún n-iás reíevante fueron íos camoios en términos de
seguridad que ha experin1entaoo ía región a parcir de la úitirna oieada
de de1nocratizaciones. Desde principios óe ia áécaria del 90 ' hasta ia
actualidad, ha habido una d1s1n1nución áe ías hipótesis de conflictos
en Sudamérica. Puede óecirse que esie proceso de óesactivación cte las
probaoilidacies de confroni:ación ntiíirar comenzó en 1991 a panir del
Consenso de Santiago firmado en el marco de la OEA, se profundizó
a lo largo de toda la década mediante acueroos biíaterales referidos a
temas de defensa entre íos principales países de Arnenca deí Sur (Ar-
gentina, Brasil y Chile) y se consolidó con ia creación del Consejo de
Defensa Suramericano dentro del tnarco de la Unasur. en donde se ins-
titucionalizaron 1necanismos de coordinación, cooperación y consuita
en asuntos de defensa.
En definitiva, podemos decir que huoo en las últimas décadas. en
primer lugar, una desactivación del pianean1iento 111iiitar argentino oa-
sado en hipótesis de conflicto con los países vecinos. En segunoo lu~ar.
120
. . · t'tucionales que favorecen la coo-
una consolidación de n1ecarnsrnos ms 1 .
., . .• t . l "n1as de defensa. En tercer 1ugar,
perac1on coordmac1on Y consu,ta en t . -
' . A ~ . " ,Jt·l Sur con10 una zona de paz por
se comenzó a considerar a inenL.a l , . ,
. 5 1 do a la voluntad unan1n1e de es-
todos los n1iembros de la Unasui. un a . . .fi
tos de tnantener la paz en esta región . En cuarto lugar, un~ ~ªJª s1gn1 -
cativa del presupuesto nacional otorgado al instrumento mi htar sumado
a un declive grande en el interés sobre asuntos de defensa por parte del
poder polític~. la academia y la opinión pública.
Estos hechos. si bien son ex.tre1nada1nente positivos para la segr:-
ridad de los países del continente, plantean ciertos interrogantes para
la Argentina en relación con sus FFAA. En este contexto de seguridad
cooperativa y bajas probabilidades de conflicto en el que nos encontra-
1nos. ¿.Cuái es la función actual de nuestras FFAA? ¿Qué deberia1nos
hacer con ellas? Creernos que la voluntad de incorporar a ia~ f f A.. A.
para c01nbatir fenómenos relativos a la seguridad interi or son íntento5,
-a nuestra visión, no satisfactorios,.. que buscan responder a esos interro-
gantes. Sin en1bargo, desde nuestro punto de vista estas respuestas no
solo no son satisfactorias. sino que también ayudarían a distorsionar la
naturaleza, rol y dinámica característica de las FFAA argentinas. Con-
sideramos que las respuestas pueden encontrarse en las tres funciones
principales de las FFAA mencionadas al principio~ y que las misn1as
tienen que dar al aparato militar argentino la orientación y ~l desarrollo
que puede y debe tener en las próxin1as décadas.
Por un lado, si considerarnos la prin1era función mencionada de las
FFAA (salvaguardar ia soberanía de un Estado) y la observan-1os 2 la luz
del caso argentino, podemos dar cuenta que el instrumento militar de
nuestro país cumple con esa función. Es cierto que puede discutirse en
qué medida las FFAA argentinas están suficienten1ente equipadas para
responder con un alto grado de efectividad a una agresión de parte de
otro Estado (en especial si el agresor es una potencia n1undial ). Pero, a
la luz del contexto regional y notando que los principales intereses de
las potencias están geográficamente bastante alejados - por ahora- de!
continente suramericano, pocos pueden poner en duda la capacidad del
aparato de defensa argentino de conjurar y repeler cualquier agresión
militar externa proveniente de otro Estado.
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P?r ?tro lado, Y teniendo en cuenta el tercer punto mencionado con
~n~enondad (que las FFAA pueden ser utilizadas para mejorar el pres-
tigio Y _la capacidad de soft power de un Estado), se puede ver que la
Argentina también orienta la acción de sus FFAA para lograr ese pro-
pósito. Ejemplos de esto son el envío de tropas a Haití en la operación
MINUSTAH y a Chipre.
Ahora bien, a pesar de que las FFAA argentinas cumplen con la
pri1nera y la tercera función mencionada, todavía persiste la idea de que
los objetivos del aparato n1ilitar argentino no están bien definidos y, por
lo tanto, la pregunta sobre qué hacer con las FFAA en el contexto actual
persiste.
En este sentido, esta idea no es una n1era sensación ni algo imagi-
nado, sino que tiene un claro anclaj e en la realidad. La ausencia com-
pleta de políticas vinculadas a mejorar las capacidades de las FFAA, a
reorganizar el despliegue de las mismas en el territorio y a reorientar la
asignación del presupuesto dentro de éstas en pos de un objetivo estra-
tégico de politi~:a cJ:terior, demuestra la falta de interés y consideración
que han tenido iO'.; ternas de defensa en las últimas tres décadas por
parte del poder polit1eo.
En relación con lo n1encionado, consideramos la mejor aproxima-
ción a una respuesta satisfactoria a las preguntas "¿Cuál es la función
actual de nuestras FFAA? ¿Qué deberíamos hacer con ellas?" está liga-
da con la segunda función que n1encíonamos, relativa a la vinculación
de las FFAA con la política exterior argentina. Es decir, la forma en la
que el instrumento n1ilitar de un Estado afecta a las relaciones que éste
tiene con sus pares del sistema internacional. Con esto en considera-
ción, la pregunta da un salto cualitativo y pasa a ser la siguiente: ¿De
qué forma las FFAA pueden colaborar a los objetivos de política exte-
rior de la Argentina?
Para lograr una respuesta conveniente es perentorio repasar los prin-
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1. cipales objetivos de política exterior de nuestro país. Esta tarea reviste
:
de dificultad si consideramos. que, históricamente, estos objetivos es-
tuvieron vinculados al campo económico. En la actualidad, podemos
destacar como objetivos de política exterior: la entrada a la OCDE, la
convergencia deJ Mercosur con la Alianza del Pacífico y el acuerdo de
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libre comercio entre el Mercosur y la Unión Europea. Sin embargo,
hay un asunto de vital importancia y no relacionado en su totalidad al
ámbito económico que suele soslayarse cuando se habla de los intereses
argentinos en términos de política exterior: el Atlántico Sur.
La región del Atlántico Sur incluye las Islas Malvinas, sus adya-
centes y la Antártida. Es una región de sumo interés para la Argentina
por diversas razones. En prin1er lugar, es una región que contiene una
amplia cantidad de recursos, especialmente en lo que respecta a hidro-
carburos, recursos hídricos y pesqueros. En segundo lugar, no hay sobe-
ranía en el continente Antártico, sino que hay pretensiones de soberanía
de distintos Estados, por lo que cuando finalice y se tenga que renego-
ciar el Protocolo de Tv1adrid en 2048. que prohíbe cualquier explotación
económica de] continente y vela por la sustentabilidad de las accio-
nes que se llevan a cabo en él, es probable (si no se logra renegociar
el tratado) que varios Estados -principahnente ios rr1ás poderosos del
sistema- compitan unilateralmente, y sin descartar el uso de su poder
militar, por hacerse de los recursos antárticos. En tercer iugar, las Islas
Malvinas. cuya ubicación es geopolíticainente relevante ya que permite
habilitar o denegar el acceso a un sectC?r de la Antártida, están ocupadas
militarmente por Gran Bretaña, lo que -por lo ya mencionado- supone
una gran desventaja para la A~gentina.
En consideración del escena rio de] Atlántico Sur sumado a la pro-
gresiva importancia que éste va a ir asurrüendo a lo largo de las décadas
venideras, consideramos imperiosa la necesidad de repensar el rol de
las FFAA argentinas en función de los intereses que tiene la ~Argentina
en esa región.
Nuestras FFAA en la actualidad tienen un despliegue y un gasto
por jurisdicción totalmente anacrónicos. Por un lado, el despliegue fue
ideado a mediados del siglo XX en función de posibles enfrentamientos
con Brasil y en menor medida con Chile, por lo que tiene la mayor parte
de sus regimientos y brigadas en el noreste de nuestro territorio y en la
Provincia de Buenos Aires. Además, las bases navales y los principales
buques ofensivos y defensivos se encuentran en Bahía Blanca, Mar del
Plata y Buenos Aires, protegiendo una zona en donde las probabilida-
des de conflicto son muy baj as. Por otro lado, el gasto por jurisdicción
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de las FFAA argentinas se distribuye de la misma manera que a me-
1 , .1 diados del siglo XX, gastando más en el ejército que en la armada y
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:1 en la fuerza aérea e invirtiendo muy poco en la adquisición de mejores
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capacidades y en el desarrollo de nuevas tecnologías.
i!. A partir de lo mencionado, cree1nos fuertemente que las FFAA de-
ben ser uno de los principales instru1nentos de la política exterior ar-
gentina en el Atlántico Sur, por lo que debe modificarse su despliegue,
orientando el misn10 hacia el sur de nuestro territorio. Al mis1no, se
deben repa11ir los gastos y adquirir capacidades teniendo en considera-
ción las fuerzas que van a tener un mayor protagonismo según las ca-
racterísticas geográficas propias de la región del Atlántico Sur (armada
.v fuerza aérea).
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Poí últin10. se debe invertir en el desarrollo de nuevas
tecnologías también en función de las necesidades propias de la región
en donde se espera que las FFAA tengan mayor presencia. En este sen-
tido, continuar con las investigaciones para desarrollar vehículos aéreos
no tripulados y radares es aigo prioritario.
Vale la pena aclarar que el aun1ento de la presencia militar argentina
en el sur de nuestro territorio no tiene por objetivo aun1entar las tensio-
nes ni entrar en conflicto con los demás Estados que pretenden tener un
rol activo en dicha región, sino que es simplemente una demostración
de que la .Argentin:; está dispuesta a resguardar sus intereses en el Atlán-
tico Sur. al mismo tien1po que se compromete con la internacionaliza-
ción del continente blanco y con la vigencia tanto del Tratado Antá11ico
como del Protocolo de Madrid. Es por esto que cuaiquier aumento de la
presencia militar argentina en la zona al igual que cuaiquier 1nejora en
las capacidades de las FFAA, debe estar acompañada por políticas de
transparencia, coordinación, cooperación y consulta con el resto de los
países con pretensiones en la región.
En su1na, si bien el aparato militar argentino no está en las mejores
condiciones, esto no significa que la incursión de éste en asuntos de se-
guridad interior 111ejorará su estado actual. Lo que debe hacerse es bus-
car de qué forma las FEA.A pueden ayudar a alcanzar los objetivos d~
política exterior argentinos. En este sentido, la identificación del Atlán-
tico Sur como una zona de interés estratégico para la Argentina es una
posibilidad más que atractiva para comenzar a planear el insmm1entc,
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1
de defensa nacional para un escenario en donde es realmente necesario,
dejando de lado aquellas visiones que lo quieren asociar con los proble-
n1as de delito internos y devolviéndole el prestigio y la ·capacidad a las
FFAA. a partir de su desenvolvin1iento en pos de las metas de la política
exterior argentina.