CONOCIMIENTOS DE OFTALMOLOGÍA QUE DEBEN SER ADQUIRIDOS POR

EL MÉDICO GENERAL:

Los estudiantes de medicina, médicos generales, y serumistas debemos tener los

conocimientos básicos-generales que nos permitan efectuar un adecuado primer y
definitivo tratamiento, basados en un correcto y oportuno diagnóstico para poder
referir al paciente a un especialista. Pero para realizar un correcto primer
tratamiento, depende de un acertado diagnóstico, el cual depende de una correcta
técnica semiológica, con la realización de pruebas complementarias, pero debido
a que un médico general o serumista, no posee con tecnología óptima, debe
intentar maniobras semiológicas adecuadas para poder estar seguros en sus
diagnósticos.

En primer lugar debemos saber realizar un correcto examen oftalmológico, que

consta de:

 Una adecuada anamnesis (Énfasis en los antecedentes personales,

heredo-familiares, patológicos y médicos, identificar los síntomas
principales, presentación y evolución de la enfermedad)
 Agudeza visual, con una tabla de Snellen, y estenopeico.
 Inspección externa ocular, con linterna (párpados, transparencia corneal,
lesiones, conjuntivas, diámetro pupilar, simetría, con la linterna se puede
diagnosticar un glaucoma de ángulo estrecho, etc.)
 Examen de la motilidad ocular, reflejos (corneal, consensuado, pupilar,
etc.), podría incluirse examen de campo visual por afrontamiento (descartar
hemianopsias, o tumores subyacentes, entre otros), tonometría digital (para
el diagnóstico de glaucoma en especial agudo), uso de rejilla amsler
(degenración macular)
 Fondo de ojo, con oftalmoscopio (reflejo rojo, tumores, uso de cintas de
fluoresceína).

En el manejo de las enfermedades de las enfermedades, debemos estar

capacitados en el reconocimiento pronto de emergencias y urgencias
oftalmológicas, tener capacidad para poder dar tratamiento de primera instancia
y/o en base a correctos criterios poder realizar la referencia al oftalmólogo.
Además de poder diagnosticar y manejar enfermedades oculares tratables por
médicos generales (blefaritis, chalazión, conjuntivitis, entre otras.),
proporcionándonos y reforzándonos esquemas de diagnóstico y tratamiento para
ello, incluso basados en los escasos recursos que se poseen en zonas rurales del
Serums.

Considero que debe ser vital, además se debe estimular a que busquemos, o
tratemos de identificar estadios tempranos o iniciales de muchas enfermedades,
que pueden ser prevenibles, como la ceguera, o ambliopía, en distintos grupos
etarios, especialmente en niños, y adultos mayores. Por lo que se debe invitar a
realizar un adecuado examen oftalmológicos en recién nacidos, niños o adultos de
edad media para descartar muchas enfermedades como: Glaucoma congénito,
catarata congénito, tumores (retinoblastoma, otros), enfermedades congénitas
(TORCH), ametropías (miopías patológicas, descartar causas de otra índole como
queratocono, uso adecuado del agujero estenopeico), poder indicar tratamiento
inicial en ambliopía (parchar ojo) y referir al especialista. Además de hacer
exámenes preventivos en pacientes cuyos factores de riesgos sean identificados,
para glaucoma (uso de linterna para detectar glaucoma de ángulo estrecho,
campimetría por afrontamiento), cataratas, presbicia, pterigión, desprendimiento
de retina, degeneración macular y poder dar tratamiento inicial, usar criterios para
referir al especialista, especial énfasis en enfermedades sistémicas con un
adecuado uso del fondo de ojo, para descartar retinopatía diabética, o
hipertensiva. Es esencial estar preparado para situaciones de emergencias, para
evaluar reflejo corneal (traumatismo encefalocraneano), inspección pupliar (TEC,
intoxicación por venenos), saber actuar frente a un trauma ocular, o quemadura
ocular, ya que una actuación oportuna podría mejorar el diagnóstico, ya sea con
un tratamiento inicial y/o referencia al oftalmólogo.