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Procesos de dictaduras militares en Chile y

Argentina 1973-90: una comparativa histórico-jurídica

Ensayo monográfico para optar al grado académico de Bachiller en


Humanidades y Ciencias Sociales

Estudiante: Bastián Gustavo Rojas Inostroza


Profesor guía: Daniel Cavada Robles
LA INTERVENCIÓN EXTRANJERA

“Mi nombre es Chile y mi apellido lo infinito…”


Pablo De Rokha

Mi nombre es Chile y fui torturado


esto que digo con palabras pasó en mi cuerpo
afuera el tiempo debió ser infinito
en mí la eternidad insoportable

he vivido muchos años ya muriendo


he vivido muchos años ya no sé cómo
nada dije a nadie todo lo dije a todos creo
dios estuvo ausente dios estuvo presente el mismo
demonio

señor de los ejércitos fui torturado.1

El presente tiene por objetivo hacer una revisión histórica acerca de los
sucesos que dieron forma a los procesos de dictaduras militares tanto en Chile
como en Argentina, de manera en que se pueda llevar a cabo una comparativa en
cuanto al trato que los sistemas jurídicos -principalmente por medio de leyes- de
ambos países le dieron a violaciones a los Derechos Humanos consagrados en la
Declaración Universal de Los Derechos Humanos de la ONU (Organización de
Naciones Unidas) en el año 1948, tras dos guerras mundiales y millones de
personas muertas. De esta manera se dará énfasis a los actos de tortura
acontecidos en ambos países y cómo, una vez que estos regímenes finalizaron
-cada cual a su forma- y se volvió a la democracia, los gobiernos y los sistemas
jurídico-legales enfrentaron las herencias y procesos vividos dentro de las
dictaduras militares. Junto a lo anterior, se buscará también hacer una
comparativa respecto al tratamiento de quienes fueron los responsables de los
respectivos regímenes de facto en cuanto a su oportuno enjuiciamiento y los

1
Anzieta, Edgardo (2016) La buena ventana. Antología Poética. Proyecto El Árbol (p. 76)

2
distintos contextos que definieron las decisiones a tomar una vez que fue posible
recuperar -o no- la institucionalidad democrática en su plenitud.
Derechos Humanos

Tras dos sangrientas guerras mundiales acontecidas principalmente en


Europa, Asia y Norteamérica durante la primera mitad del siglo XX en donde
millones de personas, tanto soldados como población civil -niños, bebés,
ancianos- perdieron la vida y en muchos casos hasta fueron exterminados de
manera planificada, los países reunidos decidieron conformar la Organización de
Naciones Unidas (ONU) en el año 1948. Dentro de esta Organización surgieron
diversas medidas para tratar de, en primer lugar, tratar de restaurar la paz mundial
post guerras por medio de ayuda humanitaria hacia los lugares más desprotegidos
una vez finalizado el conflicto bélico. Una vez que se logró una cierta estabilidad,
las naciones deciden hacer una especie de carta en donde se estipularan
derechos fundamentales, intrínsecos e inquebrantables que las personas poseían
por el solo hecho de ser personas. Es ahí donde surgió la Declaración Universal
de los Derechos Humanos, en la que se estipulan una serie de derechos con las
características mencionadas con el fin último de evitar en un futuro la existencia de
masacres colectivas, ya sea entre Estados o bien, entre el Estado y su propia
población civil.

Desgraciadamente el fin último no pudo cumplirse en reiteradas


oportunidades; las guerras entre Estados siguieron ocurriendo (Guerra de
Vietnam) y, con una fuerza implacable surgieron específicamente en América una
serie de dictaduras militares que masacraron a sus pueblos con argumentos de
reestablecer la estabilidad interna o bien, simplemente combatir al enemigo
interno.

Dentro de las dictaduras militares acontecidas en América durante la


segunda mitad del siglo XX, nos centraremos particularmente en dos; las más
australes del mundo.

3
Golpe de Estado en Argentina: la asunción de Videla

El día 24 de marzo de 1976, tras el golpe de Estado llevado a cabo por los
Comandantes Generales del Ejército (Videla), de la Armada (Massera) y de la
Fuerza Aérea (Agosti), derrocando así el gobierno de María Estela Martínez de
Perón conocida popularmente como Isabel Perón e instaurando un régimen
dictatorial que se autodenominó como cívico-militar, el que se extendió hasta
diciembre del año 1983.2 Los Comandantes Generales recién mencionados
proclamaron por medio de la siguiente declaración los pertinentes motivos y
razones que los hizo asumir el control de la República de Argentina

Agotadas todas las instancias de mecanismo constitucionales, superada la


posibilidad de rectificaciones dentro del marco de las instituciones y demostrada en forma
irrefutable la imposibilidad de la recuperación del proceso por las vías naturales, llega a su
término una situación que agravia a la Nación y compromete su futuro. Nuestro pueblo ha
sufrido una nueva frustración. Frente a un tremendo vacío de poder, capaz de sumirnos en
la disolución y la anarquía, a la falta de capacidad de convocatoria que ha demostrado el
gobierno nacional, a las reiteradas y sucesivas contradicciones demostradas en las
medidas de toda índole, a la falta de una estrategia global que, conducida por el poder
político, enfrentara a la subversión, a la carencia de soluciones para el país, cuya
resultante ha sido el incremento permanente de todos los exterminios, a la ausencia total
de los ejemplos éticos y morales que deben dar quienes ejercen la conducción del Estado,
a la manifiesta irresponsabilidad en el manejo de la economía que ocasionara el
agotamiento del aparato productivo, a la especulación y corrupción generalizadas, todo lo
cual se traduce en una irreparable pérdida del sentido de grandeza y de fe, las Fuerzas
Armadas, en cumplimiento de una obligación irrenunciable, han asumido la conducción del
Estado. Una obligación que surge de serenas meditaciones sobre las consecuencias
irreparables que podía tener sobre el destino de la Nación, una actitud distinta a la
adoptada.

Esta decisión persigue el propósito de terminar con el desgobierno, la corrupción y


el flagelo subversivo, y sólo está dirigida contra quienes han delinquido y cometido abusos
del poder. Es una decisión por la Patria, y no supone, por lo tanto, discriminaciones contra
ninguna militancia cívica ni sector social alguno. Rechaza por consiguiente la acción
disociadora de todos los extremismos y el efecto corruptor de cualquier demagogia. Las
Fuerzas Armadas desarrollarán, durante la etapa que hoy se inicia, una acción regida por
pautas perfectamente determinadas. Por medio del orden, del trabajo, de la observancia
plena de los principios éticos y morales, de la justicia, de la realización integral del hombre,
del respeto a sus derechos y dignidad. Así la República llegará a la unidad de los
argentinos y a la total recuperación del ser nacional, metas irrenunciables, para cuya
obtención se convoca a un esfuerzo común a los hombres y mujeres, sin exclusiones, que
habitan este suelo, tras estas aspiraciones compartidas, todos los sectores representativos

2
"¿Qué Ocurrió El Día Del Golpe De Estado En Argentina, El 24 De Marzo De 1976?". 2016. Notimerica.Com.
http://www.notimerica.com/sociedad/noticia-ocurrio-dia-golpe-estado-argentina-24-marzo-1976-
20160324095943.html.

4
del país deben sentirse claramente identificados y, por ende, comprometidos en la
empresa común que conduzca a la grandeza de la Patria.

Al contraer las Fuerzas Armadas tan trascendente compromiso formulan una firme
convocatoria a toda la comunidad nacional. En esta nueva etapa hay un puesto para cada
ciudadano. La tarea es ardua y urgente, pero se la emprende con el absoluto
convencimiento de que el ejemplo se predicará de arriba hacia abajo y con fe en el futuro
argentino.

La conducción del proceso se ejercitará con absoluta firmeza y vocación de


servicio. A partir de este momento, la responsabilidad asumida impone el ejercicio severo
de la autoridad para erradicar definitivamente los vicios que afectan al país. Por ello, a la
par que se continuará sin tregua combatiendo a la delincuencia subversiva, abierta o
encubierta, se desterrará toda demagogia.

No se tolerará la corrupción o la venalidad bajo ninguna forma o circunstancia, ni


tampoco cualquier transgresión a la ley en oposición al proceso de reparación que se
inicia.

Las Fuerzas Armadas han asumido el control de la República. Quiera el país todo
comprender el sentido profundo e inequívoco de esta actitud para que la responsabilidad y
el esfuerzo colectivo acompañen esta empresa que, persiguiendo el bien común, alcanzará
con la ayuda de Dios, la plena recuperación nacional. 3 4

Cabe destacar el grado de convencimiento manifiesto en la proclama por


parte de los militares, quienes prácticamente se sintieron en la obligación de
salvar a la nación de caer en manos de subversivos y los vicios que estos grupos
conllevaban. Dice mucho del carácter del proceso el que se planteen desde un
inicio en contra de un enemigo interno; esto es, un grupo inserto en la misma
sociedad -argentina en este caso- que se responsabiliza por lo malo que pueda
estar sucediendo, o bien, pueda potencialmente suceder si es que no existe
intervención directa de otro grupo que solucione el o los conflictos -generalmente
por medio del uso de la fuerza-. Este fue uno de los más relevantes elementos
comunes presentes entre los regímenes cívico-militares de Argentina y Chile, ya
que delimitaron de buena forma el tratamiento que se le dio al conflicto interno y la
forma de resolución del mismo.

La conexión chileno-argentina
3
"Proclama del 24 de Marzo de 1976". Desaparecidos.org. Accessed August 25.
http://www.desaparecidos.org/nuncamas/web/document/document.htm .
4
"El Historiador: Proclama del 24 De marzo De 1976". 2017. Elhistoriador.com.ar. Accessed August 25.
http://www.elhistoriador.com.ar/documentos/dictadura/proclama_del_24_de_marzo_de_1976.php.

5
Durante este período de la historia argentina se cometieron violaciones
sistemáticas de los Derechos Humanos de sus propios habitantes. No cabe duda
alguna sobre la relevancia que posee en la actualidad este período histórico y, por
lo mismo, ha sido seleccionado de manera en que, por sus similitudes en tanto a
hechos como en sus consecuencias post dictadura, para ser contrastado con el
régimen militar chileno y así lograr conocer sus similitudes y diferencias
especialmente en los ámbitos político, jurídico, cultural y social. Precisamente una
de las similitudes fundamentales entre ambos regímenes militares fue el uso del
mecanismo de tortura para diversos fines tales como la persecución política del
bando disidente, el llamado enemigo interno o simplemente castigar a quienes no
se sometían el régimen dictatorial.

Estas similitudes no son una mera casualidad. Así como tampoco lo es el


que hayan coincidido temporalmente con otros procesos de igual magnitud a lo
largo de toda Latinoamérica. Como muchos de los hechos del pasado siglo, tienen
que ver con el proceso de guerra ideológica y estratégica indirecta conocido como
la Guerra Fría, proceso en el que Estados Unidos de Norteamérica (desde ahora
E.E.U.U.) se enfrentó con la en ese entonces Unión de Repúblicas Socialistas
Soviéticas (desde aquí U.R.S.S) -ahora Rusia- para, a muy grandes rasgos, ver
quién era la verdadera potencia mundial hegemónica en el mundo post II Guerra
Mundial. Para no desviar el foco y perdernos en temas, que si bien muy
interesantes, nos harían perder el hilo conductor del tema que nos convoca, es de
vital importancia señalar el rol que cumplió Latinoamérica para esa guerra
ideológica.

Al ser un mundo ideológicamente polarizado, los países debían definirse


por uno de los dos bandos; comunismo, socialismo o marxismo (U.R.S.S) o bien,
capitalismo o neoliberalismo (U.S.A), y con eso aceptar las consecuencias que
esto conllevaba. Latinoamérica, en general, se vio sometida a la influencia

6
norteamericana de acuerdo con los intereses hemisféricos de E.E.U.U., claro,
salvo un par de excepciones como lo fueron los gobiernos de Argentina y Chile.

Y fueron excepciones debido a que se encontraban bajo el mando de


gobiernos de corte izquierdista, con proyectos país que iban en dirección al
fortalecimiento del rol estatal y que, en ese sentido, provocaba un choque con
E.E.U.U. al tomar una dirección que se alejaba del ideal que en el país
norteamericano se quería llevar a cabo. El país trasandino -al igual que nuestro
país- sufrió los estragos de planificaciones ideadas directa e indirectamente por
los estadounidenses como formas de contener y repeler las posibles
aproximaciones hacia el modelo cubano, de manera que, por ejemplo, en la
Escuela de Las Américas se entrenaba directamente a soldados para “(..) enseñar
los controvertidos cursos de contrainsurgencia, además de promover el uso de la
tortura y la ejecución sumaria.” 5 De este mismo modo, se idea la Operación o Plan
Cóndor, creado el 28 de noviembre de 1975 en nuestro país “en el marco de una
reunión de seguridad presidida por Manuel Contreras -jefe de la DINA (Dirección
de Inteligencia Nacional)- y en la que participaron militares de Argentina, Brasil,
Bolivia, Paraguay y Uruguay.” 6 Este plan es caracterizado por el CELS (Centro de
Estudios Legales y Sociales) de Argentina como "un sistema formal de
coordinación represiva entre los países del Cono Sur que funcionó desde
mediados de la década del 70 hasta iniciados los años 80 para perseguir y
eliminar a militantes políticos, sociales, sindicales y estudiantiles de nacionalidad
argentina, uruguaya, chilena, paraguaya, boliviana y brasileña." 7

Con estos antecedentes resulta prudente preguntarnos entonces acerca de


las motivaciones que pudo tener el gobierno estadounidense para ser ideólogo de

5
"Escuela De Las Américas - Memoria Chilena, Biblioteca Nacional De Chile". Memoriachilena.cl. Accessed
August 16. http://www.memoriachilena.cl/602/w3-article-94598.html.
6
"4 Claves Para Entender El Plan Cóndor, La Empresa De La Muerte Creada Por Regímenes Militares En
Sudamérica". 2016. BBC Mundo. Accessed August 16.
http://www.bbc.com/mundo/america_latina/2016/05/160524_america_latina_plan_operacion_condor_arg
entina_uruguay_bolivia_brasil_paraguay_jcps.
7
"Plan Cóndor". cels.org.ar. Accessed August 16. http://www.cels.org.ar/especiales/plancondor/#una-
asociacion-ilicita-para-reprimir-opositores.

7
verdaderos planes de exterminio sistemático en el Cono Sur de América. Pese a
ello, el principal objetivo del presente no es entregar más valoraciones morales de
las que ya hay, o bien, sólo juzgar y condenar enérgicamente estos hechos, sino
que más bien, asumir que estos hechos provocaron consecuencias ineludibles en
el sentir colectivo de los países y pueblos aludidos, en personas que perdieron a
sus familias enteras en manos de militares que cumplían órdenes y que estaban
entrenados para, por medio del dolor y sufrimiento de la disidencia, obtener
información relevante y con ello disminuir al rival.

Un factor por destacar en todo este proceso es que se enfrentó personal


militar armado y altamente entrenado (como ya se hizo ver anteriormente) contra
la población civil, que en su inmensa mayoría no poseía ningún grado de
entrenamiento ni especialización en cuanto a autodefensa, ni menos en el dañar al
otro de forma significativa. Por lo mismo la elevada cantidad de muertos,
desaparecidos, torturados y exiliados. Fue un plan perfecto, es decir, no había
posibilidad alguna de contrarrestar el ataque ejercido por parte del Estado y
ejecutado por medio de las Fuerzas Armadas, lo que se tradujo en la masacre que
ya conocemos.

Para aproximarnos al concepto de tortura utilizado por el sistema jurídico


argentino, resulta útil revisar los objetivos que están detrás de ésta

“El objetivo de la tortura es aniquilar la resistencia del sujeto. Desde los golpes
hasta los instrumentos más sofisticados son usados para producir gradaciones crecientes
de dolor físico, intentando llegar al límite de la resistencia de la víctima.” 8

La tortura apunta a un mismo objetivo: quebrar la resistencia del sujeto, para que
aporte información, para que se transforme en un colaborador (incluso más allá de la etapa
de los interrogatorios) y, en última instancia, para que abandone su actitud de militante o
de disidente político.9

El elemento común que se sostiene en ambos fragmentos es el de aniquilar


o quebrar la resistencia del sujeto. Los métodos utilizados para lograr ese objetivo,

8
Kordon, D., Edelman, L., Lagos, D., & Kersner, D. (2005). La tortura: más allá de la extrema soledad.
KORDON, DIANA, LUCILA EDELMANN, DARÍO LAGOS, DANIEL KERSNER: Efectos Psicológicos y psicosociales
de la represión política y la impunidad. Buenos Aires: Ediciones Madres de Plaza de, 243-257.
9
Kordon, La tortura: más allá de la extrema soledad.

8
que en ocasiones hasta se escapan de lo imaginable, son inmensamente
variados. Más adelante se especificará un poco más acerca de ellos, sin embargo,
resulta útil tratar de dimensionar -hasta el grado en que sea posible- el inmenso e
intenso sufrimiento en todos los ámbitos posibles que significa el uso de la tortura
en una persona.

Pasando al ámbito netamente jurídico tenemos que según el artículo 144


ter. del Código Penal argentino, en su inciso tercero indica que “Por tortura se
entenderá no solamente los tormentos físicos, sino también la imposición de
sufrimientos psíquicos, cuando éstos tengan gravedad suficiente.” 10

Y es justamente la segunda parte de este enunciado que cobra una


importancia que a veces se puede pasar por alto: la estabilidad emocional de, no
sólo de las personas torturadas sino también de su círculo cercano (familia,
amigos) se puede ver inconmensurablemente dañada en procesos que fácilmente
pueden durar toda una vida. El hecho de jugar con las mentes de los torturados -a
veces al mismo tiempo que eran torturados físicamente- jugó un rol fundamental
en ambos procesos de violaciones sistemáticas a los DD.HH., y es que les daba
una victoria prácticamente asegurada a los torturadores, debido a que no existía la
más mínima posibilidad de la autodefensa ni de asegurarle esa defensa a los
seres queridos, quienes podían ser torturados o incluso asesinados ante la más
plena imposibilidad e impotencia del torturado.

De esta manera tenemos una definición del mundo jurídico que ha sido
resultado del mismo proceso histórico vivido por el país trasandino, como una
forma de impedir y al mismo tiempo prevenir que vuelvan a suceder hechos de
similares características en el presente, así como también en el futuro próximo y
lejano.

10
"CODIGO PENAL DE LA NACION ARGENTINA". 2017. Servicios.Infoleg.Gob.Ar. Accessed August 16.
http://servicios.infoleg.gob.ar/infolegInternet/anexos/15000-19999/16546/texact.htm#19.

9
Argentina posee un mayor grado de avance que Chile en lo que respecta a
la sanción efectiva de violadores a los Derechos Humanos ocurridos en los
respectivos períodos de Dictadura en cada país. Tanto es así que Jorge Rafael
Videla, quien fue el líder golpista en el año 1976 y, posteriormente en ese mismo
año, designado presidente de la Nación Argentina de facto por la Junta Militar
desde el 29 de marzo de 1976 hasta el 29 de marzo de 1981 fue juzgado y
encarcelado por los crímenes que cometió, que validó y que ayudó a gestar al ser
la máxima autoridad durante la mayor parte de la dictadura. En el año 1985, ya
con la vuelta a la democracia, la junta militar encabezada por Videla -hasta 1981-
fue juzgada y éste último fue condenado a cadena perpetua “por 504 secuestros,
torturas, robos, usurpaciones, esclavización de detenidos y robo de bebés.” 11 Pese
a esto, en 1990, durante el gobierno del presidente Carlos Menem recibió un
indulto y quedó en libertad. Luego, en 1998 volvió un mes a prisión por robo de
niños que no habían sido investigados anteriormente, pero debido a que tenía más
de 70 años se le concedió el arresto domiciliario. Tuvo que llegar el año 2003 para
que comenzara un proceso de inconstitucionalidad del indulto recibido en el año
1990, que terminaría con Videla en prisión nuevamente por la condena de 1985,
sumado a una nueva condena en el año 2012 tal como lo señala en un artículo el
diario argentino El País, titulado El hombre que nunca pidió perdón

En 2003, el peronista Néstor Kirchner llegó al poder e impulsó la declaración de


inconstitucionalidad de los indultos. En 2007, la Corte Suprema los dio de baja y al año
siguiente otro juez ordenó que Videla regresara a prisión por la condena de 1985. En 2010,
recibió otra pena de reclusión perpetua por crímenes cometidos en la provincia de
Córdoba. En 2012, fue condenado a 50 años de cárcel por el robo de bebés y todavía tenía
varios juicios pendientes más. Uno de ellos, por el Plan Cóndor, de coordinación con las
dictaduras de Perú, Bolivia, Chile, Paraguay, Brasil y Uruguay para perseguir opositores. 12

Finalmente, Videla muere el año 2013, condenado y en la cárcel.

11
Rebossio, Alejandro. 2013. "El Hombre Que Nunca Pidió Perdón". EL PAÍS.
https://elpais.com/internacional/2013/05/17/actualidad/1368796031_746064.html.
12
Rebossio. “El hombre que nunca pidió perdón”.

10
Las Madres -y abuelas- de Plaza de Mayo

Un aspecto fundamental en el proceso argentino han sido las Madres de


Plaza de Mayo, una organización conocida alrededor de gran parte del mundo
que, a más de 40 años del golpe militar, sigue activa hasta el día de hoy con el
mismo propósito inicial: que se haga justicia con sus hijos y nietos. El diario
español El Mundo las caracteriza como

Un reducido grupo de madres encabezado por Azucena Villaflor se reunía el 30 de


abril de 1977 frente a la Casa Rosada para visibilizar su protesta y exigir a la Junta Militar
la liberación de sus hijos. Ante la prohibición para concentrarse en la Plaza de Mayo,
decidieron caminar en círculos alrededor de la pirámide que preside la plaza. Y así lo han
hecho, jueves tras jueves, durante las últimas cuatro décadas. 13

Este grupo de madres y abuelas argentinas han logrado hacer visible el


problema de las desapariciones, tortura y muerte de miles de argentinos (las cifras
estimadas en relación con la cantidad de denuncias que nunca han podido
hacerse hablan de más de 30 mil personas desaparecidas durante el régimen
dictatorial14) no sólo ante la sociedad argentina, sino a toda Latinoamérica y buena
parte del mundo, en donde se han hecho conocidas por sus historias de
sufrimiento, lo que permitió que durante el mismo régimen se comenzara a hablar
del tema tanto interna como externamente, por lo que sirvieron también como un
mecanismo de presión efectiva.

Concepto de tortura en Chile: implicancias jurídicas y políticas

El Código Penal chileno tipifica en su ley número 20.968 publicada y, por


tanto, vigente desde el día 22 de noviembre del año 2016 lo que es, y a su vez, lo
que no es la tortura para el sistema penal chileno

“… Se entenderá por tortura todo acto por el cual se inflija intencionalmente a una
persona dolores o sufrimientos graves, ya sean físicos, sexuales o psíquicos, con el fin de
obtener de ella o de un tercero información, declaración o una confesión, de castigarla por

13
Calero, César. 2017. "40 Años De Las Madres De La Plaza De Mayo". EL MUNDO.
http://www.elmundo.es/internacional/2017/04/30/5906212846163fc9058b45ea.html.
14
"Una Duda Histórica: No Se Sabe Cuántos Son Los Desaparecidos". 2003. Clarin.com.
http://www.clarin.com/ediciones-anteriores/duda-historica-sabe-desaparecidos_0_B1FG1JglCKl.html.

11
un acto que haya cometido, o se le impute haber cometido, o de intimidar o coaccionar a
esa persona, o en razón de una discriminación fundada en motivos tales como la ideología,
la opinión política, la religión o creencias de la víctima; la nación, la raza, la etnia o el grupo
social al que pertenezca; el sexo, la orientación sexual, la identidad de género, la edad, la
filiación, la apariencia personal, el estado de salud o la situación de discapacidad.

    Se entenderá también por tortura la aplicación intencional de métodos tendientes


a anular la personalidad de la víctima, o a disminuir su voluntad o su capacidad de
discernimiento o decisión, con alguno de los fines referidos en el inciso precedente. Esta
conducta se sancionará con la pena de presidio menor en su grado máximo.
 
   No se considerarán como tortura las molestias o penalidades que sean
consecuencia únicamente de sanciones legales, o que sean inherentes o incidentales a
éstas, ni las derivadas de un acto legítimo de autoridad.". 15

Desde aquí podemos desprender una serie de conceptos útiles para lograr
obtener una mejor comprensión acerca de lo que se habla cuando se menciona el
tema de la tortura.

Sin embargo, cabe destacar que esta ley es bastante reciente dentro de
nuestro sistema legal, por lo que, debido a principios mismos de las leyes,
cualquiera sin un conocimiento especializado podría tender a pensar en la
irretroactividad de las normas legales como una característica que debiese estar
presente en la mencionada norma. La irretroactividad de las normas legales en
general se refiere a que, desde el momento de su publicación en el Diario Oficial
comienzan a regir en el sistema legal, pero siempre hacia el futuro. Esto quiere
decir que, por ejemplo, si se cometiese un delito cinco minutos antes de que la ley
que busque regular sea publicada, aunque esta se encuentre promulgada
(aprobada por el Congreso Nacional), el mencionado delito no podría ser
sancionado bajo la(s) pena(s) que estipula la ley, debido a que esta rige hacia el
futuro.

Pese a ello, los delitos de lesa humanidad cometido en Chile durante la


Dictadura Militar desde septiembre del año 1973 y principios de 1990 son
perseguidos bajo estas normas, debido a que poseen un carácter legal especial
por tratarse de violaciones a los Derechos Humanos por parte del Estado hacia

15
"LEY-20968 22-NOV-2016 MINISTERIO DE JUSTICIA Y DERECHOS HUMANOS - Ley Chile - Biblioteca Del
Congreso Nacional". 2016. Ley Chile - Biblioteca Del Congreso Nacional. http://bcn.cl/1yi9x.

12
sus mismos ciudadanos, por lo que son regidos bajo el concepto de la
imprescriptibilidad.

A pesar de la complejidad aparente de lo recientemente descrito, lo


principal a destacar es que los delitos relacionados con violaciones a los Derechos
Humanos no tienen fecha de vencimiento, motivo por el cual se pueden investigar
hechos ocurridos hace más de cuarenta años, por ejemplo, bajo la normativa legal
actualmente vigente y aplicar castigos (penas), si así fuese necesario a quienes
resulten responsables.

Este, precisamente, es un avance considerado como de vital importancia


tanto para organismos internacionales como para las propias víctimas y sus
respectivas familias, debido a que permite abandonar las trabas dejadas por las
mismas autoridades de la Dictadura con el fin de que no se les pudiese formalizar
al encontrarse prescritos los delitos una vez que se retorna a la democracia en el
año 1990.

Pese a esto, el General José Ramón Augusto Pinochet Ugarte,


Comandante en Jefe del Ejército desde el 23 de agosto de 1973 hasta el 10 de
marzo de 1998, Presidente de la Junta Militar de Gobierno desde el 11 de
septiembre de 1973 hasta el 11 de marzo de 1981, Jefe Supremo de la Nación
desde el 17 de junio de 1974 hasta el 16 de diciembre de 1974, Presidente de la
República de Chile desde el 16 de diciembre de 1974 hasta el 11 de marzo de
1990 y posterior Senador de la República de Chile desde el 11 de marzo de 1998
hasta el 4 de julio de 2002, por mencionar algunos de los cargos que ocupó
durante y después de la Dictadura Militar chilena, nunca fue condenado por delitos
de violaciones a los Derechos Humanos en el período comprendido entre el 11 de
septiembre de 1973 y el 11 de marzo de 1990. Esto nos pone inmediatamente un
peldaño por bajo Argentina, que como se detalló, sí lo hizo con su símil Jorge
Rafael Videla, quien gobernó en el periodo comprendido entre el 29 de marzo de

13
1976 y el 29 de marzo de 1981 y fue, efectivamente condenado por la justicia
trasandina en más de una oportunidad.16

Sin embargo, los avances anteriormente mencionados sirvieron para


condenar a militares con participación directa, como a algunos altos mandos del
Ejército y de instituciones de inteligencia tales como Manuel Contreras
(condenado a 529 años en total) y Miguel Krassnoff (condenado a 460 años en
total).17 18

Nociones básicas de tortura

En cuanto a la tortura y los diversos métodos utilizados, al menos en Chile,


se rescatan parte de los mayoritariamente utilizados por parte de testimonios tanto
de los mismo torturados que lograron sobrevivir a estos hechos, como en algunos
casos por quienes los perpetraron; los militares que confesaron y aportaron con
información a las posteriores investigaciones realizadas por las distintas
comisiones tanto estatales como de organizaciones no gubernamentales (ONG) o
bien, investigaciones periodísticas. Dentro de estos trabajos se encuentra el sitio
web de Villa Grimaldi, conocido centro de tortura en el régimen dictatorial militar en
Chile, quienes nos muestran los principales utilizados en el mismo centro de
detención y tortura

La “parrilla”: esta era la forma más habitual de tortura. Consistía en un catre de


metal sobre el que se amarraba desnudo al detenido para proceder a aplicarle descargas
de corriente eléctrica sobre distintas partes del cuerpo, especialmente aquellas más
sensibles como labios o genitales y aun sobre heridas o prótesis metálicas. Una modalidad
particularmente cruel de este método consistía en la utilización de un camarote metálico de
dos pisos; como modo de presión y debilitamiento psicológico, se colocaba al interrogado
en la cama inferior y en la superior se torturaba a un familiar o un amigo.

16
"Los Crímenes Del Ex Dictador Argentino Jorge Rafael Videla". 2013. Cooperativa.cl.
http://www.cooperativa.cl/noticias/mundo/argentina/dd-hh/los-crimenes-del-ex-dictador-argentino-jorge-
rafael-videla/2013-05-17/093551.html.
17
"Manuel Contreras: El General (R) Que Tenía Que Cumplir 529 Años De Cárcel". 2015. La Tercera.
http://www.latercera.com/noticia/manuel-contreras-el-general-r-que-tenia-que-cumplir-529-anos-de-
carcel/.
18
"Corte Suprema Confirmó Nueva Condena Para Miguel Krassnoff Por Secuestro En 1974". 2016.
Cooperativa.cl. http://www.cooperativa.cl/noticias/pais/dd-hh/judicial/corte-suprema-confirmo-nueva-
condena-para-miguel-krassnoff-por-secuestro/2016-09-15/104441.html.

14
“Colgamientos”: la víctima era colgada de una barra ya sea por las muñecas o por
muñecas y rodillas. En ambos casos, al dolor producido por el peso del cuerpo colgado por
largo tiempo se sumaba la aplicación de corriente eléctrica, golpes, heridas cortantes y
vejámenes.

“Submarino húmedo”: hundimiento de la cabeza en un recipiente con agua,


generalmente sucia o con otro tipo de líquido; la cabeza era mantenida sumergida hasta un
punto cercano a la asfixia. Similar efecto se conseguía mediante el llamado “submarino
seco”, que consistía en la colocación de una bolsa plástica en la cabeza de la persona
impidiendo la entrada del aire, también hasta un punto cercano a la asfixia.

A los métodos de tortura descritos, se sumaban otras prácticas habituales de


tortura y malos tratos: golpes de todo tipo, algunos tan violentos que lograban provocar
graves lesiones físicas, o golpes imprevistos dados a una persona con la vista vendada.
Las violaciones y vejaciones a mujeres y hombres delante de sus esposos, padres y
compañeros era una forma habitual de tortura, ejerciendo incluso la tortura y la violación
con perros amaestrados.19

Resulta difícil no sucumbir ante la crueldad enunciada en las descripciones


entregadas y recién señaladas, sin embargo, el objetivo principal del presente es
lograr desligarse un poco, por frío que parezca, de los juicios valorativos
asociados que, aunque pueden ser completamente válidos, a veces pueden no
expresarse de manera adecuada o bien, dejarse llevar por consideraciones
influidos por historias personales. En este sentido, el acercamiento hacia los
métodos de tortura del presente busca tratar de ver la otra cara de la moneda:
esto es, ¿Cuál es o puede ser el fin de realizar semejantes actos?

Es de vital importancia dejar en claro que en ningún caso se les resta


importancia a estos crímenes de lesa humanidad, condenados y rechazados tanto
por los mismos sistemas judiciales de los países afectados como por los
organismos internacionales, sino tratar de, como se dijo anteriormente, buscar y
encontrar la motivación o diversas motivaciones (si es que las hay) que llevaron a
i) los militares de alto rango a cargo en los respectivos países a acatar los planes
destinados para los mismos países y b) los ideólogos de los planes en U.S.A. a
pensarlos y aplicarlos posteriormente con un éxito avasallador.

19
"Formas De Tortura". Villa Grimaldi. Accessed August 15. https://villagrimaldi.cl/historia/formas-de-
tortura/.

15
Informe de la comisión nacional sobre prisión política y tortura

Cuando actualmente se habla de tortura en Chile, es inevitable recurrir al


proceso de la Dictadura Militar. Esto debido a que es el último referente de
violaciones sistemáticas a los Derechos Humanos por parte del Estado y, a modo
de opinión, es uno de los procesos más influyentes en la formación social, política
y cultural de la sociedad chilena actual.

Precisamente bajo estos términos se desarrolló una comisión que buscó


sacar a la luz pública tanto nacional como internacional la verdad acerca de los
sucesos de violaciones a los Derechos Humanos cometidas durante y a lo largo
del proceso de Dictadura Militar por parte del Estado de Chile, personificado en los
militares hacia la población civil. Junto con que se dieran a conocer los hechos, la
motivación fundamental al realizar este informe fue el deseo de justicia para con la
gente que sufrió los efectos de la utilización de las armas de la milicia en contra de
su propia población y con esto, juzgar y condenar a quiénes resultaran
responsables de la masacre ocurrida, para así lograr algún grado de tranquilidad
por sobre todo de las familias y las personas directamente involucradas en tortura,
desapariciones, muertes y represión en todos sus grados durante casi 17 años de
la historia de Chile.

Para la Organización de Naciones Unidas (ONU) y el Informe Rettig, la


tortura se define como

(..) todo acto por el cual se inflija intencionadamente a una persona dolores o
sufrimientos graves, ya sean físicos o mentales, con el fin de obtener de ella o de un
tercero información o una confesión, de castigarla por un acto que haya cometido, o se
sospeche que ha cometido, o de intimidar o coaccionar a esa persona o a otras, o por
cualquier razón basada en cualquier tipo de discriminación, cuando dichos dolores o
sufrimientos sean infligidos por un funcionario público u otra persona en el ejercicio de
funciones públicas, a instigación suya, o con su consentimiento o aquiescencia. No se
considerarán torturas los dolores o sufrimientos que sean consecuencia únicamente de
sanciones legítimas, o que sean inherentes o incidentales a éstas. 20 21

20
Convención contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes
(ONU), art. 1.1, promulgada
21
Definición adoptada por el Informe de la Comisión Nacional sobre Verdad y Reconciliación(Rettig).

16
Por otro lado, para la Organización de Estados Americanos (OEA)
conceptualiza la tortura como
(..) todo acto realizado intencionalmente por el cual se inflijan a una persona penas
o sufrimientos físicos o mentales, con fines de investigación criminal, como medio
intimidatorio, como castigo personal, como medida preventiva, como pena o con cualquier
otro fin. Se entenderá también como tortura la aplicación sobre una persona de métodos
tendientes a anular la personalidad de la víctima o a disminuir su capacidad física o mental,
aunque no causen dolor físico o angustia psíquica.22

La comisión Valech adoptó en cambio la siguiente definición acerca de lo


que significa el concepto de tortura para efectos de los hechos ocurridos en
dictadura:
Constituye tortura todo acto por el cual se haya infligido intencionadamente a una
persona dolores o sufrimientos graves, ya sean físicos o mentales, con el fin de obtener de
ella o de un tercero información o una confesión, castigarla por un acto que haya cometido
o se sospeche que ha cometido, intimidar o coaccionar a esa persona u otras, anular su
personalidad o disminuir su capacidad física o mental, o por razones basadas en cualquier
tipo de discriminación. Siempre y cuando dichos dolores o sufrimientos se hayan cometido
por un agente del Estado u otra persona a su servicio, o que actúe bajo su instigación, o
con su consentimiento o aquiescencia.23

Existe un alto grado de semejanzas entre las definiciones recién


propuestas, por lo que se desprende de ello una cierta unanimidad que se le ha
tratado de dar a los tratos que tengan que ver con la tortura, con el fin de
demarcar de buena manera lo que se pueda o no entender por ella y que no
existan contradicciones entre las mismas organizaciones, para que así los
distintos procesos involucrados puedan ser lo más fluidos posible.

Cabe destacar que la principal diferencia existente entre el Informe Rettig y


la Comisión Valech es que el primero se refiere a las muertes y desapariciones
ocurridas durante la dictadura militar y el segundo, en cambio, trata sobre
testimonios entregados por los sobrevivientes que fueron sometidos a diferentes
tipos de tortura durante el mismo período histórico.

Transiciones a la democracia

22
Convención Interamericana para Prevenir y Sancionar la Tortura (OEA), art. 2, promulgada
por Chile mediante el Decreto N. 809, publicado el 26 de noviembre de 1988.
23
Informe: Comisión Nacional sobre Prisión Política y Tortura (Valech), p. 19.

17
La diferencia entre los procesos que permitieron volver al marco
institucional democrático en Argentina y Chile definieron los distintos rumbos que
se tomaron desde ese momento hacia el futuro y actual presente en cada país.
Por un lado, en Argentina fue una transición no negociada entre el sector político y
el gobierno de facto debido a una serie de factores, siendo principal el
debilitamiento militar provocado por la Guerra de las Malvinas, transcurrida entre
el 2 de abril de 1982 hasta el 14 de junio de 1982, en donde se vieron enfrentados
y superados por un ejército con mayor poder militar como lo sigue siendo el Reino
Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte. En este enfrentamiento hubo
“alrededor de 700 muertos y casi 1300 heridos” 24, bajas que, sumadas al poco
apoyo internacional recibido por parte de los países vecinos (Chile decidió apoyar
al bando británico) obligaron a rendirse al país trasandino, luego de setenta y
cuatro días de guerra. Por otro lado, en Chile se vivió una transición pactada; la
constitución de 1980 estableció los plazos y la forma en que se iba a proceder a
un posible cambio de gobernante, por lo que se fijó inmediatamente un rumbo
distinto al seguido por Argentina en un proceso de similares características. El
proceso de transición a la democracia chileno vio en el resultado del plebiscito
llevado a cabo el 5 de octubre de 1988, en donde los ciudadanos con derecho (y
deber) de votar debían decidir si querían que el presidente Augusto Pinochet
siguiera o no en su cargo por X años más o, en su defecto, entregara el mando de
la nación y se realizaran elecciones populares en el siguiente año. Los chilenos
decidieron que Pinochet dejara el cargo al obtenerse en los resultados del
mencionado plebiscito los siguientes datos:

(...) se acordó dejar constancia que el resultado definitivo


de dicho acto de consulta popular, teniendo en consideración
una masa electoral ascendente a siete millones doscientos cincuenta
y un mil novecientos cuarenta y tres ciudadanos, fue el siguiente:

TOTAL OPCION SI 3.119.110 votos


TOTAL OPCION NO 3.967.579 votos
TOTAL NULOS 94.594 votos

24
Valencia, Luciano. 2006. "Guerra De Malvinas: Otras Voces De Combatientes". Scielo.org.ar.
http://www.scielo.org.ar/scielo.php?pid=S1851-28792006000100008&script=sci_arttext&tlng=en.

18
TOTAL BLANCOS 70.660 votos25

En consecuencia, con los resultados obtenidos y el triunfo del NO (a


Pinochet), se debieron convocar elecciones presidenciales para el año 1989 con el
fin de que se eligiera al próximo presidente de la república de Chile y se diera por
finalizado el período de Pinochet como la máxima autoridad política del país.
Simultáneamente a ello se tenía que, pese a le derrota del SÍ, esta opción obtuvo
un alto porcentaje (44,01%) de votantes que le permitieron al, en ese entonces,
presidente Pinochet además de su gabinete y su sector -ideológico, militar y
político- una importante capacidad de negociación, de manera que les facilitara el
proceso de salida del gobierno y, a su vez, que no fueran juzgados ni perseguidos
por la justicia chilena como sí se hizo en el país trasandino. En este sentido, lo que
hizo el plebiscito de 1988 fue sacar por las buenas a los militares de los poderes
ejecutivo y legislativo, para así iniciar un proceso democrático con la asunción al
poder de Patricio Aylwin Azócar el día 11 de marzo de 1990.

Reflexiones finales

A lo largo del trabajo se ha abordado las violaciones a los derechos


humanos desde una perspectiva histórica y comparativa, donde Chile y Argentina
han mostrado varias diferencias en el tratamiento político en cuanto al ofrecimiento
de una verdad histórica (Informe Retting, Informe Nunca Más Argentina), medidas
de reparación (Informe Valech en Chile) y seguimiento de nuevos casos (Informe
Valech II en Chile, caso de robos de bebés en Argentina). Tal vez el principal
factor que produjo dicha diferencia fue el hecho de que en Argentina haya habido
una guerra (el de Malvinas), que desprestigió completamente a las Fuerzas
Armadas, y que en Chile se haya presentado una transición negociada (aplicación
de la Ley de Amnistía en los noventa)

25
Tribunal Calificador de Elecciones de Chile. 1988. SENTENCIA PLEBISCITO 1988. Ebook. Santiago.
http://www.tribunalcalificador.cl/php/descargar.php?
archivo=YSt5dHlSZzY0YTVRNUpZSGU0NTI1a2VYZ3NlU1ZPeFRSV2xibVNkL05nUnlWWGViOWhpVmUyV3BLW
TVLaVY3VEEzcG5wOW9mMnRWYURURUZ4REtENVhqd2pYZ3NSdzJQZHAyVnFPMVJSUVhZNFUraTNCcGlWQ
XdDd3IwMG9RYzM.

19
Por todo lo anteriormente expuesto durante el desarrollo del presente, se
puede concluir que los mecanismos a los cuales se recurrió con fines de poder
instaurar políticas públicas de manera tal que se asegure una protección a los
ciudadanos en lo que respecta a sus derechos fundamentales fue -en distinto
grado- exitosa en ambos países. El grado de preocupación existente por parte de
las autoridades una vez que finalizaron los procesos de gobiernos militares así lo
denota al establecer las modificaciones pertinentes a los sistemas jurídicos con el
fin de evitar que, reunidas ciertas condiciones similares a las experimentadas
previo a los golpes de estado por parte de militares en 1973 (Chile) y 1976
(Argentina), vuelvan a suceder actos similares. De esta forma se tiene que el
reforzamiento a la ley existe, efectivamente, en ambos países.

Con respecto al juzgamiento de los responsables existen mayores


diferencias entre ambos países; mientras que en Argentina se logró enjuiciar a
toda la Junta que llevó a cabo el golpe de estado, incluido el que lideró por mayor
cantidad de tiempo el llamado Proceso de Reorganización Nacional, Jorge Rafael
Videla, en Chile esto dista bastante de la realidad. Pese a que se logró condenar a
varios militares de gran importancia, nunca se consiguió el mismo resultado con
quien fue el responsable directo desde inicio a fin. Augusto Pinochet Ugarte murió
hace ya más de 10 años y nunca fue condenado por su participación o
responsabilidad en algún acto que tenga que ver con la violación sistemática de
los Derechos Humanos ocurrida en Chile, justamente durante el período de tiempo
en que él lideró a la Nación. Es precisamente esta una de las mayores deudas de
Chile: el juicio a los responsables.

Resulta difícil creer que, a más de 25 años de la vuelta a la democracia,


nunca se haya juzgado, no tan solo a Pinochet, sino que a ninguno de los
miembros de la Junta Militar de Gobierno. Esto puede tener distintas
explicaciones, pero los hechos hablan por sí mismos; las violaciones a los
Derechos Humanos producidos en y por la dictadura militar en Chile no tienen

20
responsables directos. Y eso es gravísimo, porque no sólo pasa a llevar a quienes
fueron torturados, asesinados, hechos desaparecer y exiliados contra su voluntad
por el régimen cívico-militar, sino que también perjudica el proceso de sanación de
la sociedad chilena en su conjunto, como un organismo social que quedó
altamente fragmentado y que cada vez ve más lejana su unión en torno a la
verdad.

Finalmente, en cuanto a perspectivas futuras de mediano plazo en lo que


respecta a una cultura de Derechos Humanos en Chile, el panorama se torna
complejo. La irrupción de lo que se ha denominado como la “era Trump” y, a su
vez, nuevos autoritarismos que acumulan -y concentran- su poder en el ejecutivo
se han convertido en un problema. Pese a que esta última situación se ha repetido
a lo largo de buena parte de la historia en las sociedades modernas y
contemporáneas, la novedad es que los autoritarismos de hoy se dan dentro de
regímenes de carácter democrático; esto es que los gobernantes se valen de
mecanismos democráticos para acercar a sus países a un sistema autoritario.
Estas situaciones en el contexto de un mundo globalizado son, al menos,
peligrosas para conservar y mejorar una ya mencionada cultura de Derechos
Humanos, no sólo en Chile, sino que en toda Latinoamérica y el mundo. Esto
porque ya existen diversos ejemplos concretos en donde la situación recién
planteada es una realidad: Rusia, bajo los gobiernos de Vladimir Putin y Dimitri
Medvedev; Venezuela con el presidente Nicolás Maduro y Turquía con Recep
Tayyip Erdoğan. Los factores comunes entre estos tres países tienen que ver con,
en primer lugar, el alto poder que se concentra especialmente en el órgano
ejecutivo -ya sea presidente o primer ministro-, pasando a llevar una equitativa
distribución del poder en lo que a repúblicas o estados democráticos se refiere. Un
segundo factor común está dado por la restricción -gradual o no- de las libertades
civiles presente en la ciudadanía; y es aquí donde el problema comienza a
acrecentarse, ya que, sumados ambos factores cabe hacerse la pregunta: ¿Podría
Chile salvarse de las influencias del entorno internacional, considerando que

21
nuestro país aún presenta problemas pendientes en lo que a derechos humanos
se refiere?

Lo preocupante de esta situación es que los conflictos internacionales se


encuentran completamente vivos, y no sólo eso, sino que están en constante
aumento. Las tensiones entre el gobierno de Donald Trump, Vladimir Putin y el
líder supremo de la República Popular Democrática de Corea (Corea del Norte),
Kim Jong-un no parecen tener un punto de salida evidente que sea distinto al del
conflicto militar directo. Esto provoca en las naciones un clima de inseguridad e
incertidumbre evidentes, lo que en muchos casos sirve de trampolín para que,
debido al miedo general de la población, se alcen figuras de líderes identificados
con la extrema derecha que en sus programas de gobierno prometen mano dura y
promueven los valores patriotas, generando en la población una identificación que
permita otorgar una mayor seguridad. Esto es peligroso porque existe una
conexión -no precisamente nueva, ni inédita- entre la presencia de autoritarismos
y la supresión de libertades civiles o, en un caso más extremo, la violación de los
Derechos Humanos hacia la misma población civil. Por lo mismo es menester
resolver los problemas pendientes en cuanto a Derechos Humanos de forma
eficaz y verdaderamente reparadora, con el fin de establecer desde ahí políticas
informativas que se dirijan principalmente hacia la propia sociedad chilena, de
manera que se logre fortalecer la cultura de Derechos Humanos en una sociedad
más educada e informada al respecto. Así podremos tomar mejores decisiones
-por medio de la elección de nuestros representantes- en lo que respecta tanto a
la política exterior como interior del país y, de este modo, se pueda evitar
desenlaces desfavorables para nuestra propia sociedad y su gente.

22
Bibliografía

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Biblioteca Del Congreso Nacional". 1980. Ley Chile - Biblioteca Del
Congreso Nacional. http://bcn.cl/1wb8d.

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7. Kordon, Diana, Lucila Edelman, Darío Lagos, y Daniel Kersner. 2005. La


tortura: más allá de la extrema soledad. Efectos Psicológicos y
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8. Mejía, Alejandro. 2011. ¿Un legado autoritario?: Putin y su ascenso al


poder en Rusia. Lima: Revista Andina de Estudios Políticos.

9. Rebossio, Alejandro. (2013) El hombre que nunca pidió perdón. Diario El


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11. Romero, Luis Alberto. 2001. Breve historia contemporánea de la Argentina,


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23
12. Salazar, Gabriel. 2006. La violencia política en las "Grandes Alamedas"; La
violencia en Chile 1947-1987 (Una perspectiva histórico-popular). 2da ed.
Santiago: LOM Ediciones.

13. ------. 2011. En El Nombre Del Poder Popular Constituyente (Chile, Siglo
XXI). 1era ed. Santiago: LOM Ediciones.

14. Salazar, Gabriel y Julio Pinto. 1999. Historia Contemporánea de Chile. 2da
ed. Santiago: LOM Ediciones

15. Sidicaro, Ricardo. 2013. 1983-2012: las etapas de la transición a la


democracia argentina (en claves sociológicas). Temas y Debates 25 (enero-
junio):13-32. En: http://www.scielo.org.ar/pdf/tede/n25/n25a01.pdf

16. Valencia, Luciano. 2006. Guerra de Malvinas: otras voces de


combatientes. Quinto sol (9-10): 199-226. Recuperado en 22 de septiembre
de 2017, de http://www.scielo.org.ar/scielo.php?
script=sci_arttext&pid=S1851-28792006000100008&lng=es&tlng=en.

Índice

24
Introducción ................................................................................................... 2
Desarrollo ...................................................................................................... 3
 Derechos Humanos ............................................................................ 3
 Golpe de Estado en Argentina: la asunción de Videla ........................ 4
 La conexión chileno-argentina ............................................................. 6
 Las Madres -y abuelas- de Plaza de Mayo ..........................................11
 Concepto de tortura en Chile: implicancias jurídicas y políticas ...........11
 Nociones básicas de tortura ..................................................................14
 Informe de la comisión nacional sobre prisión política y tortura ........... 16
 Transiciones a la democracia ............................................................... 18
Reflexiones finales ........................................................................................... 19
Bibliografía ....................................................................................................... 23

25

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