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Acerca de la enseñanza y aprendizaje de palabras nuevas para niños y niñas en edad

preescolar

Paulina Pizarro Laborda1

Aprender palabras nuevas es un proceso complejo y dinámico. Los autores Nagy y


Scott plantean que el proceso de adquisición de palabras en niños y niñas de edad
preescolar tiene varias dimensiones. En primer lugar, conocer una palabra y los diversos
significados que esta pueda tener es un proceso gradual. Es, además, un proceso
multidimensional, debido a que los niños y las niñas tienen distintos modos de relacionarse
con las palabras. Hay quienes, por ejemplo, comprenden el significado de la palabra en un
contexto determinado, pero no necesariamente pueden definir la misma palabra; en
cambio, otros u otras podrán definir la palabra, pero no comprender todos los aspectos de
su significado. Esto está relacionado con los diversos significados que puede tener una
palabra. Finalmente, dada la heterogeneidad que tienen las palabras, se puede acceder a
su significado de acuerdo con el tipo de vocabulario que se pretenda estudiar. Todo lo
anterior hace que el aprendizaje de nuevo vocabulario pueda resultar complejo para niños
y niñas en edad preescolar. Sin embargo, las prácticas basadas en la investigación permiten
reconocer algunos aspectos fundamentales que facilitan la enseñanza deliberada de
palabras nuevas o poco familiares para ellos/as.
Cuando hablamos de instrucción explícita de vocabulario, es decir, de la enseñanza
deliberada de palabras nuevas o poco familiares, nos referimos al modo directo en que la o
el docente puede dar a conocer el significado de palabras nuevas o desconocidas. Para ello,
se puede realizar una serie de experiencias de aprendizaje dinámicas e interactivas que, por
una parte, le permitan al niño o a la niña conocer una palabra nueva y su significado, así
como también interactuar con dicha palabra y su significado. Existe también la posibilidad
de que la enseñanza de vocabulario no sea explícita o deliberada, sino implícita, como

1Pizarro, P. (2019). Mejorar la Educación: Aprendizajes desde la Investigación Educativa, Ed. Luis Felipe de la
Vega. RIL Editores, Santiago de Chile.
cuando el proceso de enseñanza y aprendizaje de palabras nuevas ocurre de forma indirecta
mediante otras experiencias, por ejemplo, la lectura de cuentos infantiles. En este capítulo
nos focalizaremos en la enseñanza deliberada de palabras nuevas a niños y niñas en edad
preescolar.
Cabe preguntarte ¿es importante que los niños y las niñas en edad preescolar
aprendan palabras nuevas? y ¿por qué es importante la enseñanza deliberada de una
palabra nueva o poco familiar para ellos/as? Para comprender la importancia de la
enseñanza del vocabulario durante los años de educación parvularia nos referiremos a tres
aspectos que consideramos fundamentales.
En primer lugar, la brecha que existe en el sistema escolar a propósito de las
diferencias socioculturales y socioeconómicas, tanto en Chile como en otras realidades
latinoamericanas, es alarmante. Se ha comprobado que niños y niñas que pertenecen a
niveles socioeconómicos más desfavorecidos tienen significativamente niveles más bajos
de vocabulario en comparación con sus pares de contextos más favorecidos. En parte, esto
ocurre porque es más probable que en sus hogares estén expuestos a menor cantidad de
libros y textos infantiles, y a menos lecturas de cuentos y, por lo tanto, se relacionen menos
con el mundo letrado. Esto significa que los niños y las niñas que se desenvuelven
cotidianamente en contextos desfavorecidos tienen un lenguaje oral más limitado y que,
cuando llegan a los 6 años, las diferencias en la cantidad de lenguaje oral son muy grandes
respecto a quienes se desenvuelven en un nivel sociocultural y socioeconómico más
favorecido, siendo muy amplia la brecha cuando inician la educación formal.
En segundo lugar, se ha estudiado extensamente que el vocabulario que tienen los
niños y las niñas en edad preescolar va a impactar tanto la comprensión oral, esto es lo que
comprenden de un cuento cuando una persona adulta les lee en voz alta o bien cuando les
da instrucciones orales, así como también la comprensión de lectura que puedan tener en
los años siguientes de escolaridad. De este modo, se ha concluido que el vocabulario es un
predictor importante del grado de comprensión de lectura que los niños y las niñas lograrán
en sus años de escolaridad, lo que significa que es probable que quienes tengan mayor
cantidad de vocabulario en los niveles de transición (prekínder y kínder) logren mejores
niveles de comprensión de lectura, en comparación con niños y niñas que tienen más bajos
niveles de vocabulario. Específicamente en Chile, Katherine Strasser ha constatado en sus
investigaciones que cuando a niñas y niños se les entrega el significado de las palabras
desconocidas de un cuento, logran mejor comprensión oral que si no se les entrega el
significado de estas palabras. Por lo tanto, es fundamental promover la adquisición de
palabras nuevas y poco familiares en niños y niñas de educación parvularia, pues esto
favorecerá su comprensión oral y escrita.
En tercer lugar, se ha evidenciado que, en distintas realidades, como los son Chile y
Estados Unidos, las prácticas de instrucción explícita de vocabulario son escasas, sin
embargo, cuando las y los educadores participan en programas de desarrollo profesional
docente referidos a estas prácticas, es posible que estas se incrementen en el aula. Esto nos
da esperanzas de que sí es posible potenciar el proceso de enseñanza y aprendizaje del
vocabulario durante los años de educación parvularia.

¿Cómo apoyamos el proceso de enseñanza-aprendizaje de palabras nuevas?


Si bien en nuestro país la enseñanza de vocabulario es relativamente reciente y, en
la actualidad, no hay documentación oficial que entregue lineamientos respecto a cómo
promover el aprendizaje de palabras nuevas en el aula de la educación parvularia, la
investigación nacional e internacional tiene bastante que aportar en esta área y ha
entregado luces respecto a cómo promover la enseñanza deliberada de vocabulario. A
modo general, hay ciertas prácticas pedagógicas que son efectivas para mejorar el lenguaje
oral y vocabulario de los niños y las niñas en edad preescolar.
Algunos aspectos claves para ampliar el vocabulario se relacionan con exponer a los
niños y a las niñas en reiteradas ocasiones a la palabra enseñada, así como también proveer
una serie de experiencias explícitas (deliberadas) para interactuar con dicha palabra.
Específicamente, de acuerdo con lo descrito en diversas investigaciones, las prácticas
deliberadas para la enseñanza del vocabulario que han demostrado ser exitosas en
contextos más desfavorecidos presentan las siguientes características:
(a) Se presentan las palabras sofisticadas a través de un cuento. En los textos escritos
se encuentra un lenguaje diferente al utilizado cotidianamente. Las investigadoras Isabel
Beck y Margaret McKeown nos hablan de palabras sofisticadas para referirse justamente a
aquellas palabras que se utilizan escasamente de forma oral en el día a día, pero que es muy
probable que aparezcan en el lenguaje escrito como, por ejemplo, plácido, tortuoso o
tambalear. Así, utilizar palabras sofisticadas que están en los cuentos infantiles en distintos
espacios de lectura, como la lectura en voz alta y la lectura dialogada, es muy recomendado,
pues la palabra aparece en un contexto específico, como lo es el cuento, otorgándole
sentido y significancia a esta experiencia. Algunos estudios plantean realizar una lectura
completa del cuento y posteriormente volver al contexto donde se encuentra la palabra a
enseñar y releer esa parte con la intención de entregar una definición amigable. Otros
estudios proponen leer el cuento y hacer hincapié en la palabra a enseñar de forma
inmediata. Lo importante es que el niño o la niña identifique la palabra y pueda tener
claridad de qué palabra nueva está aprendiendo.
(b) Se utiliza una definición corta y amigable de las palabras. Al comparar el grado
de incremento del vocabulario de los niños y las niñas según la forma de definición de las
palabras, se ha observado un mayor impacto de prácticas de instrucción de vocabulario que
consideran la definición directa del significado de la palabra, respecto del uso de
definiciones implícitas o de definiciones organizadas en categorías. Para ello, es importante
que la definición sea amigable para favorecer la comprensión que el niño o la niña adquiera
de ella. Además, es muy importante que la definición sea efectiva, por lo cual se recomienda
buscar el significado de la palabra en el diccionario y adaptarlo a uno más breve y simple
que le permita al niño o a la niña comprender su significado.
(c) Las palabras a enseñar se utilizan en distintos contextos. Una vez que se ha leído
el cuento y se ha explicitado el significado de las palabras sofisticadas, es necesario que el
o la docente le otorgue al niño o a la niña ejemplos de la misma palabra enseñada en otros
contextos.
(d) La palabra enseñada se repite en voz alta en diversos momentos por parte de los
niños y las niñas. Esta repetición de la palabra se realiza con el objetivo de generar una
representación fonológica de la misma. Esta estrategia se utiliza en el contexto del
desarrollo de actividades para aprender la palabra y en el uso de ejemplos que promuevan
la generación de oportunidades para la utilización de la palabra en otros contextos.
d) Se usa el muro o abecedario de palabras. El muro de palabras es un abecedario
que está en la sala de clases, idealmente a la altura de los niños y las niñas, donde se ubican
las palabras aprendidas asociadas a la letra con la que comienzan. Así, por ejemplo, si la
palabra es divisar, será colocada abajo o arriba de la letra D. Las palabras pueden
permanecer en el muro o abecedario de palabras durante una o dos semanas, o el tiempo
que sea necesario, siendo muy importante que, durante diferentes momentos de la rutina,
las niñas y los niños tengan la oportunidad de interactuar con la palabra enseñada.
e) Se facilita la interacción oral con la palabra enseñada. Se ha reconocido que es
necesario incorporar las palabras en actividades de la rutina cotidiana de los niños,
otorgándoles la oportunidad de manipularlas e interactuar oralmente tanto con la palabra
como con su significado. Además, se ha establecido que es importante proponer preguntas
a los niños y a las niñas respecto del significado de las palabras, tanto para apoyar el proceso
de aprendizaje de las palabras nuevas como para verificar la comprensión del significado de
estas después de las instancias de lectura. Esto permitirá que se expongan múltiples veces
a una misma palabra enseñada, lo que es un aspecto clave para incrementar el nivel de
vocabulario de las niñas y los niños en edad preescolar.
Todas estas características presentes en experiencias exitosas de la enseñanza
deliberada del vocabulario son fundamentales en los procesos propios de la educación
parvularia, al motivar a niñas y niños a familiarizarse con cuentos infantiles desde lo lúdico,
invitándolas/os a jugar y a interactuar de modo dinámico y didáctico, pues, así, el proceso
de enseñanza-aprendizaje, al estar enraizado en su propio contexto, será significativo. Estas
estrategias, en su conjunto, tendrán un impacto positivo en el desarrollo del vocabulario de
los niños y las niñas en edad preescolar, lo que a su vez favorecerá su lenguaje escrito
durante los futuros años de escolaridad.
Bibliografía

Nagy, W. E., & Scott, J. A. (2000). Vocabulary processes. En M. L. Kamil, P. B. Mosenthal, P.


D. Pearson, & R. Barr (Eds.), Handbook of reading research (Vol. 3) (pp. 269–284).
Mahwah, NJ: Erlbaum.
Strasser, K. (2013). Las interacciones lingüísticas que provocan los libros. ¿Por qué
recomendamos leer en lugar de hablar? Plan Nacional de Fomento a la Lectura.
Actas del Seminario Internacional ¿Qué leer? ¿Cómo leer? Perspectivas sobre la
lectura en la infancia. 6 y 7 de diciembre 2012.
Strasser, K., Del Río, F., & Larraín, A. (2013). Profundidad y amplitud del vocabulario: ¿Cuál
es su rol en la comprensión de historias en la edad pre-escolar? Estudios de
Psicología, 34(2), 221-225.
Beck, I., & McKeown, M. (2007). Increasing Young low-income children´s oral vocabulary
repertories through rich and focused instruction. The Elementary School Journal,
107(3), 251-271.

Recomendaciones de libros y artículos para revisar:

Guardia, P. (2016). Informe Final: Evaluación de eficacia de una intervención preescolar para
promover lenguaje y alfabetización inicial en niños de sectores deprivados
socioculturalmente. Santiago, Chile: Fondo de Investigación y Desarrollo en
Educación – Proyecto FONIDE N° F911446.
McKeown, M., Deane, P., Scott, J., Krovetz, R. & Lawless, R. (2017). Vocabulary Assessment
to Support Instruction. Building Rich Word-Learning Experiences. The Guilford
Press.
Mendive, S. y Weiland, C. (2013). Adherencia y dosis de los equipos de aula al programa Un
Buen Comienzo y su relación con los resultados en los párvulos. Fondo de
Investigación y Desarrollo en Educación – FONIDE N°: F611106_2011. Ministerio de
Educación: Santiago de Chile.
Treviño, E., Varela C., Romo, F., & Nuñez, V. (2015). Presencia de lenguaje académico en las
educadoras de párvulos y su relación con el desarrollo del lenguaje de los niños.
Calidad en la Educación, 43, 137-168.
Villalón, M. (2011). Alfabetización Inicial. Claves de acceso a la lectura y escritura desde los
primeros meses de vida. Ediciones UC: Santiago de Chile.

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