La idea de los micro-diálogos tiene su antecedente en una experiencia investigativas
con grupos focales (o grupos de ficción), integrados por una pretendida muestra aleatoria simple. En el ejercicio, los estudiantes participantes, crearon unos personajes supuestamente arquetípicos. Estos personajes hablaron de algunos problemas álgidos, como las actitudes cuestionables de los profesores, funcionarios y compañeros, el consumo de estupefacientes y el establecimiento utilitario de las relaciones. Construyeron un personaje que era un estudiante de la misma universidad en que estudiaban ellos. Con los resultados que obtuvimos elaboramos una encuesta, que aplicamos a una muestra aleatoria simple de los estudiantes de pregrado de la universidad. La encuesta arrojó, entre otros resultados, que había una distribución en las lógicas de acción de las respuestas abiertas. Distribución que favorecía a una lógica de acción de subjetivación débil (integración y estrategia fuerte), pero con posibilidades tácticas de mejoramiento total de la experiencia estudiantil en la Universidad Central. Por otro lado, la teoría sociológica de la investigación insiste en una retroalimentación, en entregarle a los jóvenes los resultados de la investigación sociológica. En la entrega, de ese conocimiento sobre ellos mismos, podrán tener unas herramientas más para tomar las decisiones. Ese conocimiento podrá ser considerado en aquellas decisiones sobre el destino de sus experiencias sociales. Como ya habíamos tenido la experiencia con la dramaturgia en los grupos focales, decidimos construir esta retroalimentación con los estudiantes. El producto de esta retroalimentación queda en unas piezas de ficción, reescritas por los estudiantes y actuadas por ellos mismos. El empleo de la ficción como herramienta de indagación, se amplía en una nueva fase de la investigación. Ahora, para elaborar estas piezas de comunicación (dramatizados) con contenidos investigativos. En nuestra investigación, la ficción vuelve a ser una herramienta de indagación. Tenemos una investigación que sigue en curso, indaga por las formas que puede adoptar la experiencia social en los estudiantes universitarios. Los resultados de la investigación son del campo de la ciencia, de la sociología. La sociología que pueden hacer unos profesores universitarios de formación diversa, que estudian la forma en que los estudiantes pueden estar viviendo la universidad. Entre otras cosas, porque somos profesores universitarios los que investigamos, y a la vez, vivimos la universidad.
Subjetivación y empleos de la literatura
La subjetivación la entendemos como una lógica de acción de la experiencia social. La
subjetivación sería la lógica de acción con la que se va conquistando una voz propia, autónoma, independiente. Para la conquista de una voz propia, puede ser importante los datos que tengan sobre ellos mismos. Datos como los que arroja la investigación: el enriquecimiento de las acciones de subjetivación es en lo más rápido que podemos actuar para mejorar la experiencia estudiantil en la Universidad Central. La subjetivación podrá quedar trasladada a la las piezas de audio, más los efectos de difusión que dichas piezas pueda tener en la comunidad universitaria. Habría, por lo menos, dos formas de aprovechamiento de la relación entre ficción e investigación. En el primero, los resultados de la investigación pueden ser empleados en proyectos de creación. En el segundo, las creaciones (dramático-radiales) pueden ser empleadas para presentar los resultados de la investigación. En nuestro caso, la propuesta la centramos en estas dos formas combinadas. En la investigación usamos unas categorías que pertenecen a la sociología de la experiencia. Las categorías son lógicas de acción: de integración, de estrategia y de subjetivación. Categorías que hemos convertido en una propuesta de estructura dialógica para unos talleres de creación. Los productos de esos talleres ingresan a la investigación como retroalimentación de la misma. Finalmente, en esta forma combinada de aprovechamiento, a los estudiantes le podría quedar su propia experiencia estudiantil enriquecida, al crear las formas en que les cuentan a sus pares, algo de su subjetivación. Aquí lo que hacemos es intuir unas estructuras dialógicas que puedan usarse como material de trabajo. Tomamos, como metáfora, las formas escriturales de diálogos radiales en pequeñas piezas. Los esquemas de diálogos para las piezas dramatizadas están asociados, directa o indirectamente, con las categorías de la investigación sociológica, con énfasis en la lógica de acción de subjetivación. Con atrevimiento tomamos de la literatura estas estructuras ficcionales que en el taller podrán transformarse en cuanto a: léxico, sintaxis, asuntos.
Metodología
La propuesta es compartir con un grupo de estudiantes que representan todas las
carreras1, unos esquemas de diálogos. Estos esquemas están inspirados en unas categorías, medidas cualitativamente en una muestra suficiente de estudiantes universitarios. Los estudiantes participantes de los talleres de creación, en estos grupos, son invitados a darle verosimilitud a los diálogos (que no la tienen). Empleando, desde el uso de la jerga, hasta las lógicas con que se dicen las cosas, dadas las situaciones implícitas que identifican y articulan. Con los esquemas de diálogos proponemos unas estructuras básicas que provoquen la modificación. La estructura garantiza el asunto, las variaciones corren a cargo de los estudiantes universitarios. El taller con los estudiantes intenta garantizar la verosimilitud en la reescritura de los guiones. Con la modificación se introducen posibilidades de creación colectiva, de co-creación. La modificación de los diálogos es incorporada, se graba la dramatización en audio con los mismos estudiantes, bajo la dirección del estudiante de arte dramático. Los guiones mejorados de los micro-diálogos se convierten en unos podcasts para radiar en la emisora de la universidad y en otras emisoras universitarias. Los contenidos, de los podcasts dramatizados, son discutidos y creados por los estudiantes, con el respaldado de una investigación social. Aquí tenemos un proyecto de investigación-creación. En los talleres intentamos probar que de alguna forma puede aprovecharse el resultado de la investigación para la creación. El resultado de una creación tiene que conquistar su propio destino como obra, pocas creaciones sobreviven, ese es su albur. Pero esto no detiene al creador, que insiste, insiste y emplea para su producción materiales simbólicos de aquí y de allá. Tal vez uno de los participantes en los talleres tome la estructura de los diálogos como material para alguna obra. Mientras tanto, el taller pule con la pregunta por la verosimilitud, el contenido de la micro-dramatización. 1 Unos 16 estudiantes de pregrado en total: contaduría, creación literaria, arte dramático, cine, ingeniería, administración, matemática, biología, administración, servicio social, comunicación social, derecho, publicidad, mercadología, música y economía. Estamos diciendo que es posible aprovechar los resultados de la investigación social para la creación. Creación en tanto poner de presente un dato nuevo en el mundo. Para que algo sea nuevo, es nuevo respecto a aquello que no lo es, que es viejo. La estructura, en los diálogos de las dramatizaciones, encierra algún conocimiento investigativo, desplegado y dosificado en temáticas. Y, las temáticas intentan ser las categorías de la investigación. Son esquemas, aún no son creaciones, son estructuras temáticas para la creación. Son, también, una cadena de astucias para hacer decir al estudiante. La verosimilitud es regla para construir, con los estudiantes de diversos programas académicos, una mejor versión de los micro-diálogos ofrecidos como estructura sintáctica y temática. Lo que aquí presentamos es una materia para la transformación, para darle forma, aquella que resulta del trabajo con colectivos de estudiantes.