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Reflexión 1:

EL FIN DEL HOMBRE SOBRE LA TIERRA:

Jesucristo:

Hijo, el más alto fin de tu vida es la unión conmigo en el cielo. Haz que tus intenciones
a lo largo del día vayan dirigidas hacia esa verdad. Estate seguro en todas las cosas de
esta verdad. Estate seguro que en todas tus cosas avanzas en el camino hacia el cielo.
No te entregues demasiado a los deseos pasajeros y a las satisfacciones de esta vida
terrena.

Yo te he dado cuanto tienes y cuanto eres. Todo te viene de Mí, Dios Supremo.
Acéptalo, úsalo, disfrútalo como yo quiero y en la medida de mi voluntad.

Si solo piensas en tu propia satisfacción sin tener en cuenta mi aprobación, tu


inteligencia quedará nublada y tu voluntada debilitada. Faltas y pecados te quitaran la
paz en la tierra y la felicidad eterna en el cielo. Así, pues, en las cosas mantén tus ojos
fijos en Mí.

Son felices los que solo desean lo que yo quiero, tratando por todos los medios de hacer
lo que yo quiero. Éstos nunca quedan completamente absorbidos por sus trabajos
diarios. Me ofrecen con frecuencia sus actividades, comprenden la brevedad de las
satisfacciones del hombre.

Examina los motivos de tus palabras y acciones diarias. Busca cómo me puedes agradar
más y elimina aquello que te pueda apartar de Mí.

Piensa:

Yo he sido creado para la felicidad eterna con Dios en el cielo. Todo lo demás me debe
de parecer secundario, porque si se pierde el cielo habré perdido todo. Guía seguro del
cielo es el santo querer de Dios. Si lo hago en mi vida cotidiana, cada momento de mi
vida en la tierra será un paso hacia la perfecta felicidad que ambiciona mi corazón.

Oración:

Dios y Padre amante, aumenta en mí el deseo de pensar, hablar y actuar cada día como
Tú quieres. Que nunca sea tan loco como para estar en desacuerdo contigo, supremo
Bien y Querer. Nada de en la tierra me puede dar una felicidad definitiva, haz que nunca
peque por la busca de nada. Quiero vivir para la perfecta santidad para la que me
creaste. Amén.
Reflexión 02:
EL FIN DE LAS COSAS CREADAS:

Jesucristo:

Hijo, si orientas tus deseos conforme a mi querer aprenderás la santa lección de los sucesos de la
vida diaria. No hay nada tan pequeño y carente de importancia que no refleje, de algún modo, mi
Querer y Bondad. Cuando hayas llegado a ser tan bueno y desprendido de ti como deberías ser,
encontrarás fácil entender el sentido profundo de los acontecimientos de tu vida diaria.

Un corazón puro ve mucho más de lo que aparece en la superficie.

Yo creé el cielo y la tierra para servicio del hombre. Puse a los ángeles para ayuda del hombre, de
hecho, yo mismo estoy continuamente ayudando y sirviendo al hombre. Si él vive conforme a mi
voluntad, participará un día conmigo de la perfecta felicidad del cielo.

¿Qué haces tú en retorno por mis continuos favores? Deberías servirme cada día de tu vida. Con
todo, no me has servido desinteresadamente ni un solo día. Yo merezco toda obediencia, todo
honor, toda alabanza. Me debes cada respiración, cada segundo de tu vida. Sin que yo te sostenga
continuamente, nada podría agradar ni aprovechar. Toda asistencia, toda ayuda es obra de mi
mano.

Piensa:

Si hubiera de escribir una lista de todos lo beneficios que he recibido de Dios, debería escribir un
libro entero. Cada cosa, cada persona es siempre un regalo de Dios con un fin determinado. No
solo algunas cosas, sino todos los acontecimientos de mi vida suceden por buenas razones que
Dios tiene. De una u otra manera tienen por objeto ayudarme a entender la felicidad y gloria eterna
del cielo. Debería de desechar cualquier cosa o persona que me apartara de este fin por medio del
pecado. Todas las cosas han de ser usadas debidamente, es decir, de modo que me ayuden a vivir
una vida buena y útil. Por el uso inteligente y el control de las necesidades y actividades diarias
pruebo mi sincero deseo de llegar al amor amistad eterna con Dios en el cielo.

Oración:

Dios mío, todas las cosas buenas que se relacionan conmigo en la tierra son tenues reflejos de tu
perfecto atractivo y Bondad. Que nunca aparte mis pensamientos de Ti, Bien Perfecto. Espero
apartarme de todos y de todo lo que me aparte de Ti. Todos los bienes de esta tierra pasan pronto,
pero Tú permaneces para siempre. Me decido ahora por una sincera batalla cotidiana contra el
pecado. Dame el gran favor de agradarte sobre la tierra y de amarte en el cielo. Amén.
Reflexión 03:
INTENCIÓN RECTA EN TODAS LAS COSAS:

Jesucristo:

Hijo, quiero que tengas la intención recta en todas las cosas. Esto quiere decir que deseo que tengas un fin
sobrenatural en todo lo que hagas, pienses o digas. Si buscas evitar el infierno, disminuir tu purgatorio, o
ganar el cielo, son todos ellos motivos sobrenaturales y por lo tanto intenciones rectas. Naturalmente que a
menudo eres inconciente de tus motivos, pero mientras no estés en pecado mortal y tus acciones estén de
acuerdo con mis mandamientos, tienes una intención recta.

De todos modos, se dan grados en la rectitud de intención. Así, cuando haces algo para agradarme, tus
intenciones son más puras que si piensas en tu propio provecho. Con todo, sea cual sea el grado de tu
intención recta, ella siempre busca cumplir mi Querer y siempre te promocionará mayores bienes que
aquella intención que se preocupa solamente para buscar tu provecho terreno.

Pese a todos los sentimientos, prejuicios o preferencias, lucha por mantener una intención recta en todo
momento. Tan pronto como tu deseo contradiga mi Voluntad, apártalo como apartarías cualquier otra
ocurrencia absurda.

No permitas que los diarios acontecimientos de tu vida te distraigan y aflijan demasiado. Procura conocer
mi Voluntad y cumplirla en todas las cosas. Con esta pura intención tendrás una profundidad interior en
todo. Este es mi regalo a todos los que permiten que gobierne sus vidas.

La intención de una persona tiende a empañarse en el proceso de sus cotidianas ocupaciones.


Gradualmente se siente influenciado por deseo y egoísmos. Por ello renueva tu pureza de intención varias
veces a lo largo de la jornada. Ofréceme cada actividad y evita todo lo que pueda llevarte al pecado.

Recuerda tu fin celestial de vez en cuando. No permitas que nada te parezca grande, alto, grato, aceptable,
a menos que te ayude en el cumplimiento de mi voluntad. Considera toda consolación indebida, todo
placer pecaminoso como reaccionas ante una gran pérdida de dinero.

Quien me ama de verdad, odia cuanto le aparta de mí. Yo solo, Dios eterno e infinito, Gozo perfecto del
Alma puedo traer verdadera paz al alma y felicidad duradera al corazón.

Piensa:

¿Dónde están los placeres y satisfacciones que disfrutaste el año pasado? Idos y olvidados. Si me hicieron
peor, encontraré la muerte y el juicio dentro de bien pronto. ¿Por qué no me esfuerzo por valorar las cosas
de acuerdo con la manera de ver las cosas de Dios? Él quiere que viva una vida inocente y útil. Incluso
mis ratos de placer deberían de mejorarme de alguna manera y hacerme más capaz para realizar mi tarea.
El cielo es más grande que todo lo que yo puedo merecer. Con todo, debería de tratar ser cada día un poco
menos indigno de El.

Oración:

Señor, lo que tu dices es verdad. Haz que siga tus palabras en mi vida cotidiana. Tu verdad me enseñará,
guiará y protegerá. Ella me puede librar de todos los malos deseos y de todos los amores locos. Haz que
no estime nada por grande o digno de valor o admirable, sino en cuanto me haga mejor y más grato a tus
ojos. De esta manera no seré nunca esclavo de esta tierra, sino que avanzaré cada día hacia el cielo con
una santa libertad de corazón. Amen.
Reflexión 04:
SANTA INDIFERENCIA:

Jesucristo:

Hijo, déjame hacer contigo como a Mi me parezca. Yo se lo que es mejor para ti. Tú piensas al modo
humano, de manera que tus pensamientos a menudo estén influenciados por tus sentimientos y prejuicios.

Yo tengo más cuidado de ti del que tú podrías tener. El que no se me entrega a mí de todo corazón y con
lealtad corre un gran riesgo. Solo yo te puedo llevar a la vida eterna. Déjame hacer lo que me parezca. LO
que Yo haga será lo mejor para ti.

Puesto que se todas las cosas, conozco tus necesidades más importantes. Deseo para ti el gozo perfecto e
inacabable del cielo. Por esta razón de tiempo en tiempo te colocare en una oscuridad espiritual llena de
dudas y confusión. Otras veces te regocijaré con la luz de mi verdad y mi gozo. Un día te consolaré y al
siguiente encontraras la vida dura y llena de pena. Pero a través de todas estas cambiantes condiciones
acuérdate que mi mano te esta llevando al cielo.

Sigue mi voluntad en todas las cosas. Estate tan dispuesto para soportar sufrimientos como para tener
gozo, tan contento para ser pobre y necesitado como para poseer de todo. Si prefrieres mi voluntad en
todas las cosas estas prefiriendo el querer perfecto y el más alto bien.

Piensa:

Dios me ha hecho para la vida perfecta del cielo. Cuanto me envía lo manda teniendo ante los ojos este
fin. Yo puedo remediar y mejorar algunas cosas de mi vida cotidiana, pero otras están fuera de mi control.
Una vez que he hecho todo lo que estaba de mi parte, debería aceptar los resultados como la voluntad de
Dios sobre mí. Sea duro o fácil, grato o desagradable, yo puedo estar siempre seguro de Que Dios conoce,
quiere y permite lo que es bueno para mi alma.

Oración:

Mi Dios y mi todo, Tú haces y controlas todas las cosas de mi vida. ¿Cómo puedo yo olvidar esta verdad y
olvidarme de ello? Acrecienta en mí la Santa disposición de la que hace un momento hablabas. Hazme
igualmente dispuesto para recibir de tu mano lo dulce y lo amargo, el gozo y la pena. Te doy gracias
desde ahora por cuanto me quieras enviar. Líbrame únicamente del pecado y no temeré ni a la muerte ni al
infierno. En tanto, en cuanto no me separes de ti, ni me borres del libro de la vida, cualquier sufrimiento
que venga no me molestara mucho tiempo. Dame la gracia de ver, amar y preferir tu voluntad en cada
acontecimiento del día. Amén.

"No lo que yo, sino lo que tú. No como yo, sino como tú. No cuando yo, sino cuando tú. Lo que tú quieras eso
quiero yo Jesús." Beata Concepción Cabrera de Armida.
Reflexión 05:
MIRANDO LAS COSAS DESDE DIOS:

Jesucristo:

Hijo, la persona que encima algo en si mismo, olvidando mi bondad y mi amor será siempre pequeña y
ruin como las cosas que valora. Cuantas veces dejas de esforzarte por agradarme carece de verdadero
valor tu vida. Deberías de considerar estos momentos como perdidos.

A menos que me veas en tu vida diaria, pronto o tarde te sentirás descontento de cuanto eres y de cuanto te
preocupas.

Si el hombre trata de enjuiciar algún acontecimiento como que existiera él solo, no tendrá ni satisfacción
en la conciencia, ni verdadera libertad. Se encontrará atado de mil maneras e incapacitado para acercarse a
Mí.

Quién piensa en las cosas de la tierra más que en Mí, no encontrara otra cosa que inseguridad, tormento y
pena. No se autorrealiza sino que planea su propia destrucción.

Si valoras algo más de lo que se merece, aunque sea una cosa pequeña, te apartara de Mí, el más grande
Bien, y debilitará tu alma. El hombre que busca solo satisfacciones terrenas se vuelve ciego a la presencia
amante se creador.

Piensa:

Quien busca sólo placer, tranquilidad y honor es un amante de este mundo, es decir, vive para esta vida.
Gradualmente se va haciendo un esclavo de sus deseos terrenos, de manera que no podrá incluso pensar en
Dios. Pensará en el cielo demasiado tarde cuando encuentre las puertas cerradas ante sí para siempre.

Oración:

Dios mío, necesito tu asistencia para conservarme libre de la esclavitud de las atracciones terrenas. Usaré
cuanto poseo y mis diarias satisfacciones como cosas que me has dado. Yo no puedo ofenderte con estos
regalos de ti recibidos. Así como ya han quedado atrás las satisfacciones de ayer así pasarán también las
de hoy. Quiero vivir para el Dios más grande, para ti mi Dios y mi todo. Solo tú eres el mejor y el más alto
solo tú puedes satisfacer las angustias de mi corazón de una manera definitiva. Amén.
Reflexión 06:
EL ÚLTIMO Y MÁS GRANDE LOS FINES:

Jesucristo:

Hijo, mis verdaderos amigos rehúyen la acumulación de más y más cosas, sencillamente porque se sienten
satisfechos. No quieren nada que tengan solo valor temporal. Todas sus esperanzas y ambiciones tienden
hacia el éxito que yo proporciono. El éxito que nunca pasa. Saben que el amor excesivo de las cosas de
este mundo puede llevarle fuera del camino del único gozo y gloria finales. Por eso en su activad diaria
mantienen un ojo en mi y en mi más mandamientos.

Entre todas las maravillas del cielo y de la tierra no hay nada como Yo. Mis obras son absolutamente
buenas y mis Juicios definitivamente verdaderos. Mi providencia gobierna el universo.

Deja a los otros que busquen cuanto quieran fuera de mí. En cuanto a ti que nadie te agrade si no Yo, tu
esperanza y eterna salvación.

Diariamente mírame a mí por encima de las cosas, trata de encontrarme en las cosas. Yo soy el solo dador
de paz y de felicidad verdadera.

Piensa:

No hay lengua capaz de describir la paz que Dios da a los que con sinceridad desean su voluntad por
encima de todo. Muchos no encuentran nunca esta paz porque les faltan arrestos y coraje para vivir
enteramente en los caminos de Dios. Tratan de obedecer la ley de Dios solamente en parte. Dios ama al
hombre que es lo suficientemente honesto como para anteponer a su deseo lo que es lo primero.

Oración:

Mi querido Salvador y Generoso Dios. ¿Puedo ser yo tan loco como para pensar que se puede encontrar
felicidad sin Ti? ¿Podrá acaso proporcionarme verdadero gozo el pecado cuando me separa de ti, la fuente
de todo gozo verdadero? No. Espero con tu ayuda, guardar mis ojos fijos en ti en medio de mi vida
cotidiana. Espero evitar todo lo que te desagrade y vivir como tú quieres que viva cada hora de mi día. Tú
me enseñaras el camino para quedar inundado de paz y felicidad. Déjame amar tu querer en todas tus
cosas. Amén.
Reflexión 07:
VANIDAD EN LA VIDA COTIDIANA:

Jesucristo:

La vanidad es otra manera de llamar las pretensiones absurdas y las ilusiones sin sentido. Algunas
personas esperan demasiado de las cosas buenas de este mundo. Otros esperan llegar a ser más que lo que
objetivamente son capaces y pretenden atraer más la atención de la que merecen.

Vanidad de vanidades y todo es vanidad para quienes no me aman o se niegan guardar mis mandamientos.
No hay nada estable bajo el sol. Cuando amas algo por sí mismo y no en cuanto te ayuda a hacer mi
voluntad eres victima de la vanidad. La muerte te privará de todas las cosas sin dejarte ni una de ellas.
¡Que tranquilo vive el hombre que valora estas verdades!

Es vanidad aferrarse a las riquezas perecederas y poner en ellas las esperanzas. Vanidad es también seguir
ciegamente los deseos de la carne y querer cosas que más tarde han de proporcionarte un gran castigo.

Es vanidad pretender tener una vida larga sin preocuparse gran cosa de tener una vida buena. Es vanidad
entregar todos los cuidados a esta vida sin preocuparse de la vida que ha de venir más tarde. Es vanidad
amar solamente aquello que pasa rápidamente en lugar de fijar tu corazón en el cielo, la casa de gozo
definitivo.

Piensa:

Si la muerte devolviera las vidas, ¡de qué diferente manera se valorarían las cosas! Los hombres sabrían
que locuras eran muchas cosas por las que ellos vivían, trabajaban e incluso pecaban. Los buenos disfrutan
ahora ya en el cielo de una felicidad y gozo perfecto con Dios porque rechazaron ofenderle a cambio de
placeres o glorias humanas. Mi vida está en mi elección. ¿Trataré de agradar a Dios en todas las cosas
humanas o preferiré unas cuantas satisfacciones humanas contra su voluntad?

Oración:

Señor, concédeme una voluntad celestial, de manera que aprenda a buscarte por encima de todo. Que te
encuentre en mi vida, que disfrute de tu presencia en mi vida y que te ame por encima de todo. Que
entienda todas las cosas de acuerdo con su importancia ante tus ojos. Haz que evite prudentemente lo que
me puede envanecer y que soporte pacientemente lo que hace mi vida más difícil. Se requiere una gran
voluntad para luchar contra la influencia perniciosa de algunas palabras humanas para mantener los ojos
puestos en tu santa ley. Así avanzaré en la vida que lleva a la vida eterna, a la felicidad indefectible y al
único verdadero éxito final. Amén.
Reflexión 08:
LA VOZ DE LA CONCIENCIA:

Jesucristo:

Hijo, no hagas el mal por nada de este mundo. Es mejor tener a todo el mundo en frente que tenerme a mí
en Contra. Ya que si me pierdes a Mi pierdes más que si te falta el mundo entero. Cuando amas sobre la
tierra no es más que un reflejo de mi bondad. Si fijas tu atención solamente en las cosas de la tierra y en
los hombres pronto te apartarás de Mí y perderás mi gracia.

Tan pronto como estés demasiado interesado en los placeres y comodidades de este mundo sentirás
remordimientos de conciencia. La mayor maldad que puedas ejecutar se hace mucho peor aún si tratas de
excusarte o de justificar tus acciones.

Ningún hombre puede enjuiciar adecuadamente la vida si no es aquel cuya conciencia está limpia. Quien
anda con tapujos nunca tiene verdadero gozo ni paz interior. Puede que diga que tiene paz, que nada
espera que nada tema de arriba. O miente, o está loco. Mi justicia se encargará de poner fin a sus hazañas.
Después pensarán de un modo muy distinto.

Una mala conciencia siempre esta temerosa y preocupada. Una buena conciencia tiene paz incluso en los
momentos más difíciles. La gloria del hombre bueno se basa en el testimonio de una buena conciencia.

No hay verdadera libertad ni gozo que aproveche sin una conciencia clara u un santo temor a todo pecado.
Bendito el hombre cuyos ojos están permanentemente puestos en Mí y que mantiene sus deseos terrenos
dentro de mi ley. Una vida es buena si sigue mi voluntad y tiene una estima profunda de ella en su
existencia terrena.

Piensa:

Dios ha hecho al hombre lo suficiente inteligente para que sea capaz de ver que debe hacer lo que es recto.
Y así el pecador reconoce que lo es. Sabe que su vida no marcha como es debido. Si se empeña en
aferrarse a sus pecados se esforzará, por encontrar alguna excusa, pero no es capaz de engañarse a sí
mismo por mucho tiempo, lo misma si vive sin paz en el alma que si logra embotar su conciencia. El
hombre con la conciencia embotada encontrará distracciones y centros de interés en muchas cosas, pero
jamás poseerá, la paz de los que viven para el cielo.

Oración:

Dios mío, haz que yo nunca sea insincero en mi vida diaria. Que tenga siempre la rectitud, el coraje y la
lealtad de hacer lo que se debe. No quiero buscar ninguna satisfacción temporal o descanso que te
desagrade. Haz que viva para la eternidad escogiendo siempre lo que Tú quieres que yo escoja. Así nunca
me cogerá la muerte por sorpresa. Espero vivir cada hora del día con lealtad a tu santa voluntad y paz
contigo. Amén.
Reflexión 09:
FRAGILIDAD DE LA NATURALEZA HUMANA:

Jesucristo:

Todos los seres humanos son débiles. No te creas más fuerte que los demás. Las circunstancias no crean la
debilidad del hombre. Lo único que hacen es ponerla de manifiesto. Te debes convencer de esta realidad.
Tu querer es débil, y tus deseos humanos irracionales robustos.

No debería resultarte difícil aceptar tu fragilidad. Mira cuántas veces te perturba cualquier tontería. A
menudo propones ser un hombre como es debido, Pero en seguida viene una tentación cualquiera y se
volatiza tu resolución. Precisamente en aquel momento en que tú te crees a salvo, cuando menos lo
esperas, es cuando quedas fuera del combate por una tentación ridícula. Incluso aunque no consientas
plenamente tus deseos y sentimientos te deben de avergonzar. Las imaginaciones vergonzosas se te echan
encima y no hay modo de desecharlas.

Antes de que cuides seriamente de tu propia perfección es necesario que estés convencido de su necesidad.
Mira lo débil que eres. A menudo tiendes hacia lo que está mal. Te confiesas hoy y mañana caes en los
mismos pecados. Propones estar en guardia y al cabo de una hora actúas como si nunca hubieras hecho tal
resolución. Eres así de débil y caedizo. Por lo tanto solo cabe una postura de humildad y renunciar a
estimarse en algo.

Eres más inclinado a dar marcha atrás que a avanzar. No eres capaz de permanecer un período de tiempo
en el mismo estado de ánimo. Tus caprichos y actitudes cambian a lo largo de las horas del día. ¡Si
confiaras solo en Mí! Yo puedo ayudarte a levantarte por encima de todos esos cambiantes sentimientos.
Vuelve a Mí tu corazón y encontrarás en Mí descanso.

Piensa:

Mi naturaleza humana es como un brioso caballo. Debe ser controlado en cada paso, por más que le
gustaría correr libre y sin control. Así pues, no me debo sorprender por mis cambiantes sentimientos y
estados de ánimo. No existe en mí yo superior independientemente sin mi yo rastrero. Dios me honrará
únicamente por lo que yo trato de ser. Yo mejoraría mucho más de prisa si pidiera su ayuda mucho más
frecuentemente por la oración y los sacramentos. Con demasiada frecuencia tengo que entablar una batalla
contra mis sentimientos y mis deseos ciegos. En otros tiempos trataba de luchar yo solo. Solo con la
ayuda de Dios puedo hacer un progreso permanente. Con los conocimientos que me da a través de su
Iglesia y con la fuerza que me ofrece en sus sacramentos, puedo vivir una vida santa pese a todas las
insinuaciones de mi yo más bajo.

Oración:

Señor, Tu conoces bien mis debilidades y pequeñeces. Ten piedad de mí. Sácame del fango de mi propio
yo, para que no quede aprisionado en él definitivamente. Mira los esfuerzos y trabajos de mi vida diaria;
ayúdame en mis esfuerzos. Robustéceme en mis resoluciones. He fallado demasiadas veces porque me he
apoyado en mi mismo. De ahora en adelante quiero buscar consejo y dirección cuantas veces lo necesite.
Solo así puedo esperar hacer progresos en las virtudes sólidas y verdaderas. Hazme generoso y honesto en
mis tareas cotidianas de manera que no pierda el tiempo aprovechable. Así espero llegar finalmente a ser
una persona como Tu quieres que sea. ¡Sin ti nada puedo, ayúdame, Señor! Amén.
Reflexión 10:
RENOVACIÓN DIARIA DE LA INTENCIÓN:

Jesucristo:

Hijo, el progreso en la virtud depende de mi gracia y de tu propia determinación. Mi gracias esta siempre a
tu disposición. Es tu resolución la que esta sujeta a fluctuaciones y cambios. Tu determinación sería más
firme si obtuviera más gracia para robustecerla. Busca más gracia por la oración y el sacrificio y con el
uso frecuente de mis sacramentos. Así te encontraras más fuerte para seguir en tu resolución día a día.

No basta con hacer por la mañana un acto de rectitud de intención. Debes recordarlos y renovarla entre
día. Examina si has sido fiel a tu intención y procura robustecer el esfuerzo. Cuando rompas el propósito
empieza de nuevo. Esto es mucho mejor que abandonar una vez más la rectitud de intención. Cualquiera
puede hacer buenos propósitos, pero guardarlos y renovarlos en obra de hombre autentico.

Si te cuesta empezar de nuevo o te sientes desanimado por el fracaso, es porque no entiendes cual es la
manera de que marche bien la vida diaria. Sin Mí nada puedes. Basta tu firmeza en mi ayuda. Después haz
todo lo que puedas confiadamente para cumplir tus resoluciones. Si caes renueva tu intención al punto y
comienza de nuevo. Yo te juzgaré más por tus esfuerzos que por tus caídas. Tu orgullo natural es quien se
resiste a empezar de nuevo, quien se descorazona en las caídas. El orgullo desearía el éxito a las
inmediatas.

Sé honesto y serás humilde. Lucha seriamente, pero no te extrañes de tus debilidades y de tus caídas
inesperadas. Pide mi gracia y trata de alcanzarla. Deja todo en mis manos. A quien se esfuerza en
agradecerme nunca lo abandonaré.

Piensa

¿Tengo el coraje necesario para mantener todos los días mis resoluciones y para renovar mi intención y
para hacer un honesto esfuerzo para seguirlas? La ayuda de Dios no me faltará. Mis faltas antiguas irán
desapareciendo poco a poco en la medida en que yo vaya avanzando en la práctica de las virtudes
contrarias. Así, si tengo faltas de pereza, la venceré más fácilmente si busco oportunidades de realizar
empresas. Y así con todas las demás faltas.

Oración:

Señor, hazme ver que es necesario luchar siempre contra mis faltas y avanzar en las virtudes contrarias. Si
tengo que acabar con alguna persona o lugar, si tengo que tomar alguna determinación concreta, haz que
lo haga sin retardarlo locamente. Así lo pide tu gloria y mi mayor bien. Señor, ahora empiezo, y
continuaré, empezando una y otra vez porque te quiero agradar. Amén.
Reflexión 11:
UN RAZONABLE ESFUERZO DIARIO:

Jesucristo:

Hijo, a menudo tus pensamientos son sobre cosas fútiles. No te centras suficientemente en Mí ni en tus
mayores necesidades. Tras un momento de recogimiento, tus pensamientos se vuelven inmediatamente a
las distracciones habituales. Con lo que rara vez haces una madura reflexión sobre ti m mismo y sobre tus
acciones. Difícilmente eres capaz de conocer en lo que vales porque no reflexionas sobre tus deseos,
motivos e intenciones. No estás impresionado por muchas de tus faltas porque estas ciego para ver lo que
va y viene por tu corazón. Tus motivos interiores son a menudo egoístas y corrompidos. Con lo que tus
acciones son imperfectas y llenas de defectos. De un corazón imperfecto solo puede surgir una vida
imperfecta.

La actividad externa procede del interior. Si me sirves Con solo actos externos no eres un verdadero
discípulo mió. Debes aplicar el hacha a la raíz de tus turbaciones. Aprende a controlar tu egoísta
naturaleza y poseerás mi paz. Cada día te ofrezco mi gracia para esta tarea divina. No mires a tu debilidad.
No tengas miedo de intentar la obra. Nada hay imposible para mí. Pon tus ojos en Mí y haz un sincero
esfuerzo por seguirme. Tus dificultades irán desapareciendo de un modo gradual.

Por más que te esfuerces siempre cometerás una serie de defectos inevitables. Pero, con un pequeño
esfuerzo, irás siendo gradualmente capaz de irme sirviendo con más plenitud. Con que solo quitaras de tu
vida un defecto cada año, pronto serías un hombre perfecto. Pero todo el mundo parece estar en el
mismísimo comienzo de su conversión, puesto que consideran un gran triunfo si no se hacen peores cada
día.

Piensa

Muchos admiten que tienen faltas, pero cuando se les hace notar una falta concreta, inmediatamente se
justifican por los medios posibles. Renuncian a enfrentarse con cada falta personal concreta. Como
consecuencia pasan su vida con poquísimo progreso en la virtud. Para mejorar mi vida debo ver y
reconocer lo que esta mal. Seguidamente podré pasar a mejorarlo.

Oración:

Dios mío dame el valor necesario para enfrentarme con mis faltas, la honestidad necesaria para conocerlas
y el esfuerzo suficiente para luchar contra ellas. Cada día pienso en muchas cosas, pero la mayoría de ellas
carecen de importancia. Dame la fuerza y generosidad necesaria para hacer resoluciones concretas contra
faltas concretas. No puedo ser tan egoísta que cese en el empeño de agradarte cada día más. Aunque mis
faltas parezcan continuar, con todo, mi esfuerzo debo continuar firmemente y debo seguir tratando de ser
cada día un poco mejor. Un esfuerzo continuado irá destruyendo cada día un poco de mi egoísmo y mis
faltas se irán debilitando y desapareciendo. Señor, dependo de Ti para tener luz y fuerza para esta batalla
diaria. Amén.
Reflexión 12:
AMOR EXCESIVO A ESTA VIDA:

Jesucristo:

Hijo, aprende de los hombres terrenales y locos a tener voluntad. Mira cómo se afanan en sus cosas
humanas. ¡Por una ganancia humana los hombres sufren y trabajan todo lo que haga falta!, pero sus
negocios espirituales son fácilmente olvidados. Se interesan a menudo por asuntos que tienen muy poco
valor y aun quizás ninguno y tratan negligentemente los asuntos importantísimos. Toda su actividad está
absorbida por los asuntos externos. Si no luchas por controlar tus pensamientos también tú quedarás
esclavizado por la cambiante sucesión de acontecimientos de cada instante.

¡Qué locos son los que no advierten su miserable condición, haciendo de esta pasajera vida terrena el
único objeto de sus deseos! Algunos se apegan de tal manera a esta vida que si pudieran permanecer aquí
para siempre no se preocuparían para nada del Reino de Dios. Preferirían permanecer definitivamente en
la tierra pese a las dificultades y luchas que lleva consigo su existencia terrenal.

¡Que locos y ciegos demuestran ser! Están tan profundamente inmersos en las cosas terrenales que solo
entienden los placeres sensibles. Dentro de muy poco se acabará esta vida. Entonces caerán
repentinamente en la cuenta de lo inútiles y faltos de sentido que eran sus amores.

Piensa

La mejor manera de advertir el valor pasajero de las atracciones terrenas es mirar al pasado. ¿Dónde están
los ratos de gozo del año último? ¿Dónde está la honra por la cual luche durante los cinco últimos años?
¿Qué resta de los placeres del verano último? ¡Se acabó! ¡Todo se ha terminado e ido para siempre! ¿He
de vivir yo para este tipo de felicidad o me preocuparé por la felicidad que nunca se acaba? Solo un loco
puede dudar en la elección.

Oración:

Señor y Padre de toda inteligencia. ¿Cuándo me veré libre del delito de suprema locura? - ¡la locura de
quienes creen en los placeres del día de hoy en esta vida terrenal sin preocuparse para nada de la salvación
eterna! En el Evangelio hablas de cierto hombre que se sentó y se puso a pensar solamente en los placeres
y satisfacciones de sus posesiones terrenas. Tú le dices: ¡Insensato! Esta noche pediré cuentas a tu alma. Y
murió esa misma noche carente de toda preparación ante el Juez. Haz que me enfrente al hecho más
importante de esta vida: Vivo para el cielo o para el infierno. Mi vida terrena mostrará, cual ha sido mi
elección. Señor, dame las fuerzas para vivir santamente en la tierra de manera que reciba la eterna
recompensa en el cielo viviendo contigo. Amen.
Reflexión 13:
EN LAS PROXIMIDADES DE LA MUERTE:

Jesucristo:

Hijo, en un momento esta vida pasará. ¿Estas preparado para ir a la otra vida? El hombre existe hoy y
mañana ya no es. Cuando desaparece de la vista desparece también enseguida de la memoria. ¡El corazón
humano es capaz de tanta ingratitud y dureza! Fija su atención en las cosas presentes. Se despreocupa bien
a menudo de las cosas que ya han pasado.

Considera por la mañana que es bien posible que esta tarde ya no existas, y por la tarde no estés
demasiado seguro de que vivirás mañana. Estos pensamientos no te deben de hacer perezoso, sino
práctico. Vive de tal manera que la muerte no te coja desprevenido. Vive cada día como si fuera realmente
el último día de tu vida. Son demasiados los que mueren repentinamente y sin estar preparados. Yo he
avisado: “El hijo del hombre vendrá en la hora en que menos se le espere.”

¡Cuantos pensaban que tenían aún tiempo para largo y fueron sacados de esta vida inesperadamente!
Cuántas veces has oído que uno murió en una batalla, de otro que se ahogó, de otros que se cayó y partió
la cabeza. Uno murió mientras estaba comiendo y otro mientras estaba practicando deporte. Algunos han
muerto abrazados, otros violentamente; unos han muerto de enfermedad, otros asesinados. La muerte
acaba con todos y la vida pasa rápidamente como una sombra.

Piensa

¿Por qué he de renunciar a enfrentarme con estos hechos? ¿Moriré acaso antes porque piense en la
muerte? ¿Escaparé de la muerte porque nunca piense en ella? La muerte más terrible que puedo tener es
aquella que me coja en pecado mortal. Todas las demás circunstancias de la muerte con pasajeras, pero
este último aspecto me dañaría para siempre.

La muerte pese a todas sus incertidumbres es un hecho. Yo debería enfrentarme a los hechos y ver qué
puedo hacer con ellos. ¿Qué puedo hacer yo con la muerte? Puedo vivir de tal manera que me importe
poco cuando ha de venir la muerte, pues me encontrará en gracia santificante.

Oración:

Señor, para quienes mueren en pecado mortal, la muerte es la puerta del infierno, pero para quienes
fallecen en gracia santificante es el atrio de cielo. Que mi mayor deseo en la vida sea vivir de tal manera
que pueda recibir la muerte sin miedo en cualquier momento. Que tema el pecado más que la muerte o
cualquier otro mal terreno. Amén.
REFLEXIÓN 14:
LOS ÚLTIMOS MOMENTOS DEL HOMBRE:

Jesucristo:

Hijo, cuando lleguen tus últimos momentos verás esta vida con una nueva luz. Si has sido negligente y
despreocupado con Mi Ley tendrás gran arrepentimiento. Si has vivido conforme a mi voluntad, tu
corazón estará rebosante de gozo.

Se aproxima el tiempo en que querrás tener un día más e incluso una hora más para arrepentirte de tu
pasado. Aprovecha este día y hora, ahora que lo tienes. ¿Qué te garantizará una hora cuando sientas que tu
vida se termina?

La muerte puede venir en cualquier momento. Estate siempre preparado. Así te verás libre de todo miedo
o peligro, sin que te importe gran cosa el momento en que mi ángel te llame de esta vida. Vive de tal
manera que el recuerdo de la hora de la muerte te proporcione más gozo que miedo. No ames las cosas de
este mundo más allá de ciertos límites. Pon tu confianza en Mí y considérame como un gran Tesoro. Yo
soy para ti mucho más de lo que te puedes imaginar. Un alma débil esta esclavizada por sus deseos y
amores terrenos. El hombre de oración goza de una libertad celestial en esta vida, libertad que no pueden
entender los demás.

Piensa

Cuando la muerte viene no interesa la importancia de los negocios o la opinión de los hombres. Dejaré
todo e iré al juicio. Otros ocuparán mi puesto y tendrán mi importancia y mis actividades. Poca gente
piensa que su muerte esta próxima. La mayoría quedan sorprendidos cuando llega la muerte. Para quienes
aman a Dios la muerte es motivo de gozo. Para quines aman esta vida más de lo debido es algo aterrador.

Oración:

Dios mío, hazme discreto en mi estima del trabajo, los placeres, el honor y los sucesos de esta vida. Haz
que no quiera nada que me pueda separar de ti. Que mi primer interés sea agradarte, hacer cada cosa
conforme a tu voluntad. Así espero estar preparado para la eternidad en cualquier momento del día. Amén.
Reflexión 15:
LA PAZ DE LA BUENA CONCIENCIA:

Jesucristo:

Hijo, si tienes una buena conciencia no tendrás miedo a la muerte. Es mejor tratar de evitar el pecado que
esforzarse por huir de la muerte.

Un hombre juicioso reflexiona a menudo sobre la hora de la muerte de manera que está preparado para
ella en todo momento.

Si me quieres agradar, trata de ser hoy como quisieras haber sido a la hora de la muerte. Esfuérzate en
lograrlo y la muerte te encontrara lleno de confianza y de paz. Debes luchar por esto cada día: un ardiente
deseo de avanzar en la virtud, un amor al recto orden en tus acciones, un espíritu humilde, presto a
obedecer a la autoridad, autodominio y paciencia para soportar la adversidad por amor mío.

Piensa

Una buena conciencia implica que he tratado honestamente de saber lo que Dios quiere de mí, y he tratado
sinceramente de ser así.

Sin estas dos preocupaciones no puede existir una buena conciencia. Quien crea que ha tenido estas dos
preocupaciones, tiene una buena conciencia. A este hombre Dios le da paz. Otros estarán distraídos por las
actividades terrenas pero no tienen esta paz interior que permanece incluso frente a la muerte.

Oración:

Dios mío, espero obtener tu asistencia de manera que nunca me despreocupe de conocer tu voluntad, ni
deje de cumplirla en mi vida diaria. Quizás goce un poco menos de las cosas de este mundo si sigo tu
voluntad pero tendré tu paz que es superior a todo placer. Si alguna vez soy tan egoísta que desprecio tu
voluntad que mi conciencia me remuerda y me angustie hasta que vuelva a Ti. Amén.
Reflexión 16:
Preparado para la muerte:

Jesucristo:

Hijo, tus acciones y tus pensamientos deberían ser siempre tan rectos como si esperaras morir ese mismo
día. Si hoy no estas preparado ¿Por qué lo vas a estar mañana? Mañana es incierto. ¿Como sabes que vas a
llegar a mañana? Si has visto desaparecer a una persona, reflexiona que tú también puedes morir.

Puedes hacer muchas obras buenas mientras tangas buena salud, pero cuando caigas enfermo, ¿Qué sabes
tú que serás capaz de hacer? Pocos son los que se hacen mejores en la enfermedad. Los que tienen muchas
ocupaciones rara vez crecen en santidad porque están llenos de distracciones, El recogimiento y la oración
son la semilla de una buena vida y una buena vida es el camino de una santa muerte.

Es mejor que te preocupes de ti mismo mientras estás en esta vida. No te fíes de las oraciones o de la
ayuda de otros después de tu muerte. El tiempo presente es precioso. Ahora tienes tu oportunidad. Estas en
tú día de salvación. Aprovecha el día de hoy. Envía tus oraciones, sacrificios y buenas obras por delante
antes de que vengas a Mí para ser juzgado. Está en tus manos el ganar la vida eterna por un recto uso del
tiempo presente.

Piensa a menudo en la muerte y recuerda que el tiempo perdido no vuelve. No tienes morada permanente
en esta tierra. En esta vida eres viajero. No te debes descansar del todo hasta que no estés unido conmigo
tu Salvador.

Piensa

Pocas cosas son ciertas en esta vida. Lo más cierto es que voy a morir. ¿Cuándo? ¿Dónde? ¿Cómo? No lo
se. Pero que voy a morir es cierto. Muchos están muriendo en este mismo momento. Estoy demasiado
ocupado con mi propia vida para dar demasiada importancia a esto. Lo mismo les sucederá a los otros
cuando yo muera. En este momento me será muy importante, pero el mundo seguirá en sus negocios sin
enterarse. Si yo no me preparo para la muerte mediante una buena vida, es que estoy loco.

Oración:

Señor, haz que no tema la muerte con un miedo vacío, sino con un miedo útil y santo. Nada se saca de un
miedo tonto, pero un santo temor ayuda a mejorar nuestras vidas. Me prepararé a la muerte tratando de
agradarte más y más hoy mismo en mis pensamientos deseos y palabras y acciones. Si vivo este día como
Tú quieres, estaré preparado en cualquier momento y la muerte no será otra cosa que tu llamada. Amén.
Reflexión 17:
EL JUICIO:

Jesucristo:

Hijo, un día darás cuenta de tu vida en la tierra. ¿Cómo estarás delante de Mí, Juez justo, ante quien nada
es limpio? Yo soy insobornable y no acepto excusas. Ahora puedes aprovecharte de mi misericordia.
Cuando se acabe esta vida serás tratado en justicia estricta.

¿Serás tan loco que desprecies tus buenos propósitos cuando es tan fácil obtener ahora el perdón? Si vas
dejando para más tarde tus propósitos. ¿Cómo te enfrentarás a mi Justicia divina, tú que tantas veces has
temblado a un hombre airado?

¿Por que no empiezas a prepararte desde hoy para el día del juicio? Lo encontrarás mucho menos terrible
si empiezas desde ahora a vivir como Yo mando. En el día del juicio ningún hombre será defendido ni
excusado por otro hombre. Cada uno tendrá bastante con salir en defensa de su propia causa.

Piensa

Mientras estoy en la tierra, mis esfuerzos son útiles, mis lágrimas aceptadas, mi pena tiene poder para
purificar mi alma. Dios quiere perdonarme ahora aquí. Es mejor purificar ahora mis pecados y corregir
ahora mis malos hábitos que dejar su purificación para después de la muerte. Estoy engañándome a mí
mismo cuando me dejo llevar de mis sentimientos y dejo para más tarde mi arrepentimiento y propósito de
la enmienda.

Oración:

Señor, que piense en mis pecados y me avergüence de ellos, de manera que el día del Juicio esté seguro
entre tus Ángeles y tus santos. Enséñame a hacer pequeñas penitencias ahora para que después no esté
sujeto a terribles tormentos. En verdad que todo esto lo debía de hacer por lealtad contigo, pero soy tan
egoísta que temo dejar espolearme cuando mi amor hacia Ti decrece. Amén.
Reflexión 18:
EL DÍA DEL JUICIO:

Jesucristo:

Hijo, los que son fieles a mis mandamientos en esta vida no estarán aterrados en el día del Juicio. La señal
de la Cruz aparecerá en el cielo cuando venga a juzgar a los hombres. Entonces todos mis seguidores
leales, los seguidores de la cruz, vendrán con gran confianza a mi encuentro, pues yo soy su Rey y Juez
crucificado.

En este día los justos se levantarán contra los que les despreciaban y perseguían. Quines soportaron
humildemente el juicio de los demás se levantarán, ese día para juzgar a los demás. El pobre y el humilde
tendrán gran confianza y gozo, pero el orgulloso y el egoísta amador de este mundo tendrá muchas
razones para esta temblando.

Este día todo el mundo verá que quien tenía razón eran quines preferían seguir mis mandamientos y vivir
en mis caminos. Ya no serán por más tiempo tenidos por locos por los sabios de este mundo. Toda obra
mala será silenciada y condenada mientras que cada sufrimiento soportado con paciencia traerá su
contento y gozo. El irreligioso estará triste, los devotos seguidores de Cristo, llenos de felicidad. Muchos
me darán las gracias por las cruces y sufrimientos que soportaron en la tierra. Este día aparecerá claro mi
poder, voluntad y Majestad.

Piensa

Como un río qué avanza siempre hacia el mar, así la corriente de nuestra vida diaria avanza hacia el día
del Juicio. Este día corregirá los falsos criterios y los locos ideales de los hombres de este mundo. Será el
Día de la gran verdad, el triunfo de la santidad. ¿Seré yo arrastrado por mi diaria corriente o dirigiré
debidamente mi dirección por un inteligente examen de conciencia? ¿Me preparo para un juicio dichoso o
para uno terrible según el genero de vida que llevo ahora?

Oración:

Jesús, mi Juez y mi Rey, no quiero ser arrastrado por la corriente de cada día hasta que la muerte me
sorprenda. Quiero seguir tus directrices conforme me las comuniques por medio de tu Iglesia. Dime cómo
quieres que viva y espero seguir cada deseo tuyo. No tengo que temer al Juicio si sólo pienso en serte leal
en mida diaria.
Reflexión 19:
LAS DIRECTRICES DE DIOS:

Jesucristo:

Hijo, en el Día del juicio los harapos del pobre relucirán más brillantemente que los ricos vestidos de los
que amaron más de la cuenta esta vida. Las casas de los pobres serán más honradas que las mansiones de
los ricos. En esta hora la paciencia de mis leales seguidores será más estimada que toda la inteligencia
humana.

En el día de la verdad una conciencia pura y recta proporciona más satisfacción que toda la ciencia del
mundo. El hombre que renunció a una ganancia humana por no pecar será envidiado por quienes vivieron
solo para este mundo. Tendrás más satisfacción por haber orado devotamente que por haber disfrutado de
todos los placeres y satisfacciones de este mundo.

Estarás orgulloso de tu silencio orante, mucho más que de haber hablado mucho. Las obras buenas serán
de mucho más valor que las buenas palabras. El dominio propio y una sana penitencia será más grata que
todos los encantos de la tierra.

Piensa

¡Que distintos son los juicios de Dios de los juicios de los hombres! ¿No es raro que los que viven
conforme a la voluntad de Dios parece que llevan una vida descabellada? Pero los locos de verdad son los
que proceden contra lo que Dios manda. Cristo está seguro del triunfo en el Juicio y los que siguen sus
criterios pueden estar ciertos del triunfo con El.

Oración:

Jesús, ¿estaré yo tan loco como para pensar en otros criterios distintos de los tuyos? Que abrace yo tus
criterios en mi vida diaria. Aunque esto haga mi vida dura, no me quejaré si sé que tu querer es quién me
guía. Por medio de la Iglesia y de las Escrituras prometes que me conducirás a un juicio feliz y a una
eternidad gozosa. Yo espero a mi vez serte un fiel seguidor cada día de mi vida terrena. Amén.
Reflexión 20:
LAS PENAS DEL INFIERNO:

Jesucristo:

Hijo, Yo he probado mi bondad por mis numerosos, beneficios a los hombres. No podéis mencionar una
sola cosa de vuestra vida que no proceda de Mí. Mi Amor por vosotros ha sido bien probado por mi vida
terrena llena de trabajos, sufrimientos y plegarias para obtener perdón por vuestros pecados. Nadie que se
preocupe un poco en considerar lo que he hecho puede negar que me debe mucho más de lo que él puede
pagar. Con todo, pese a mi bondad y amor, algunos se esfuerzan por vivir al margen de Mí. Se niegan a
aceptar mis directrices. En consecuencia caen en el pecado. Aunque los he hecho para el cielo, nunca la
verán porque rechazan el camino que a el conduce.

El infierno fue hecho para el demonio y sus Ángeles rebeldes. El hombre fue hecho para el cielo.
Rehusando vivir una vida para el cielo el hombre escoge una existencia sin Mí. Tendrá su deseo: se
juntará a los Ángeles rebeldes en el infierno. Rehusando seguir mi ley el hombre me vuelve la espalda
como hicieron los ángeles malos. Si muere en esta situación, se condena el mismo al infierno. El derecho
que le condena es su misma vida de pecado. Yo no hago más que pronunciar la sentencia que él mismo se
ha buscado.

No hay nada en la tierra que se pueda comprar con el infierno. Está por encima de toda descripción. Es
necesario verlo para saber como es. Aunque trataré de darte una pequeña idea de él, ten en cuenta que esto
no es más que una pálida idea de los que en realidad es. Las palabras quedan muy lejos de la realidad. Yo
no trato aquí de amenazar. Yo no pretendo sino que te enfrentes a este hecho: si no vives para el cielo, un
día estarás en el infierno.

Todos los sufrimientos conocidos por los hombres son nada comparados con el infierno. El hombre
sensato debería preferir cualquier tormento en esta tierra antes que ponerse en peligro de ir al infierno.
Una sola hora en el infierno es peor que un siglo de sufrimiento en la tierra. En esta tierra los hombres
tenemos momentos de respiro en nuestros trabajos y sufrimientos. Obtenemos consuelos de los amigos.
En el infierno no hay descanso, no hay consuelos, no hay amigos.

Los fuegos del infierno nunca se acaban. No habrá fin para el sufrimiento. No se tendrá el consuelo de
pensar que ya se ha estado allí un millón de años. No se puede esperar un fin para esas torturas. Todos los
demás sufrimientos se harían llevaderos solo con que el condenado tuviera esperanza de acabar. La
desesperación es la peor de las penas del infierno.

En el infierno el hombre será castigado por las mismas faltas que cometió en la tierra. Cada pecado tendrá
su peculiar tormento. El perezoso será obligado a trabajar continuamente. El glotón será castigado con
terrible hambre y sed. El soberbio se sentirá lleno de vergüenza y el codicioso sentirá la angustia de la
necesidad.

Y no es ésta aún la mayor de las penas del infierno. Los condenados soportarían todo esto gustosamente y
mucho más con que pudieran esperar Mi amistad y amor, no importa cuándo fuera esto, aunque fuera
dentro de un billón de años. Su más terrible tormento es que me han perdido para siempre a Mí que soy la
fuente de todo gozo verdadero y de toda felicidad perfecta. Este sufrimiento es el que hace del infierno la
casa de la desesperación y del odio sin fin.

Hijo, sigue mi Voluntad en tu vida y no tendrás que temer el infierno. De hecho, si guardas mis
mandamientos y frecuentas mis sacramentos tienes razón para vivir feliz y tranquilo. No te condenes a ti
mismo al infierno rechazando la obediencia a mis mandamientos. Yo te amo tiernamente. No temas que
deje de llevarte al cielo.
Piensa

El infierno es un hecho. Cristo, nuestro Señor, lo dejo bien claro una y otra vez en su vida. Negar este
hecho es negar la palabra de Cristo. Él probó muchas veces su divino poder durante y después de su vida
terrena. Su palabra es verdadera. Él predico la verdad del infierno y continúa predicándola a través de la
Iglesia y de las Santas Escrituras.

Oración:

Jesús, a muchos les resulta demasiado duras aquellas palabras: “Nieguese a sí mismo, tome su cruz y
sígame”. Pero un mandamiento mucho más duro será este otro: “Apártate de Mí, maldito, al fuego
eterno”. Si ante un pequeño sufrimiento soy ahora tan impaciente, ¿cómo soportaré el infierno? No puedo
esperar gozar sin restricciones en la tierra y gozar también contigo en el cielo. Así pues, Señor, ahora que
puedo aún librarme del infierno que ponga todo mi empeño en llevar las cruces de esta vida. Haz que
prefiera sufrir en la tierra incluso la muerte antes que cometer un pecado mortal. Amén.
Reflexión 21:
SANTO TEMOR DE DIOS:

Jesucristo:

Hijo, si quieres progresar en tu camino al cielo, ten en tu corazón un santo temor de Dios. Deberías
temerte a ti mismo. Cuando pecas te estas haciendo a ti mismo objeto de mi justicia. Yo, Verdad Eterna,
no puedo acercarme como bueno si en realidad te has hecho malo por el pecado. Controla, pues, tus
deseos terrenos y no aceptes rendirte a placeres innecesarios y peligrosos. Este santo temor de de mi
justicia te ayudará a verte libre de la esclavitud de las atracciones terrenas.

No es muy prudente pensar únicamente en pasarlo bien y olvidar tus necesidades espirituales. Es
razonable y te es útil el temor de la pérdida de mis gracias. Sin ellas no podrás alcanzar jamás la
perfección y la eterna felicidad.

Si tu amor hacia mí no es aún lo suficientemente fuerte ¿cómo hará que te libre de hacerlo todo mal? Que
el temor al infierno te proteja de pecar. Quien carezca de ese santo y razonable temor no hará el bien por
mucho tiempo. Pronto caerá en las redes de Satanás en cuanto deje de ser cuidadoso en evitar sus
tentaciones. Este miedo es santo porque Yo mismo lo doy. Hace al hombre fuerte en la batalla diaria
contra sus deseos irracionales y egoístas.

Incluso los santos con toda su confianza en Mí, tienen miedo de la divina Justicia. Conocen su flaqueza y
la ceguera de la naturaleza humana. No son ni más ni menos cuidadosos ni menos humildes por sus
grandes virtudes y sus muchas gracias.

Piensa

Si mi amor a Dios no es suficientemente fuerte como para preservarme del pecado, se deberá a que mi
amor propio está muy fuerte en ese momento. Con todo, aun entonces tengo un recurso contra este amor
desordenado: el pensamiento de la justicia de Dios que se portará conmigo conforme a mis obras. Sería un
loco quien rehúsa a considerar los trastornos que le tomaría el tomar un determinado sendero. Este santo
temor de Dios es el “principio de la sabiduría” porque lleva al hombre a una vida más santa.

Oración:

Dios mío, no quiero presumir de amarte hasta el punto de olvidarme de tu Justicia. Tú retribuirás un día a
cada hombre según sus obras. Yo quiero hacer uso de los regalos que cada día nos das. No puedo olvidar
que un día se me pedirá cuentas de todos ellos. Este pensamiento me puede ayudar para luchar contra el
pecado y para agradarte cada día en mi vida. Amén.
Reflexión 22:
COMPUNCIÓN DEL CORAZÓN:

ESCUCHA LA VOZ DE DIOS


Hijo, ¿como puede un hombre abandonarse a los placeres de este mundo?, Quienes así proceden no
aprecian la miserable condición de sus almas, ni el fugaz paso por esta vida, No se detienen a pensar y a
considerar más allá de sus diarias actividades. Ríen cuando tienen muchas razones para llorar. Feliz aquel
a quién las distracciones no le absorben de tal manera que no le impiden pensar rectamente.

En cuanto a ti, esfuérzate por desarrollar en ti una auténtica compunción de corazón y una profunda
tristeza por tus pecados. No melancolía ni una depresión, sino una inteligente admisión de tus pecados y
una sincera determinación de hacer algo contra ellos. Puesto que la compunción viene de caer en la cuenta
de cómo has fallado tú ante un Dios tan bueno, lleva consigo la aceptación de cualquier cosa que venga de
mi mano.

La compunción abre el camino a muchas bendiciones y gracias preciosas. Cuando la compunción llena el
alma, el mundo pierde su mágico atractivo y se vuelve despreciable. La compunción te ayudará a conocer
cuán rápidamente pasan los gozos terrenos, mientras que los eternos duran para siempre. Debes ver con
toda claridad que tus pecados me han ofendido. Quien tiene una auténtica compunción es lo
suficientemente honesto como para reconocer sus propios pecados y para sentirse verdaderamente triste
por ellos. Y su pena se manifiesta por un sincero deseo por hacer desaparecer sus faltas.

REFLEXIONA
La compunción es una gran gracia con la que Dios me ayuda a enfrentarme con la realidad de mis
pecados. Me ayuda también a probar la pena que siento por mis pecados. Gracias a la compunción el
hombre empieza a luchar contra sus faltas y a practicar las virtudes contrarias. Yo puedo estar seguro de la
sinceridad de mi pena cuando he empezado a hacer algo contra mis faltas. La compunción es una pena
duradera porque no es una mera emoción sino la inteligente admisión de unos hechos. Ella me muestra
mis faltas, la bondad de Dios y mi propia necesidad de cambiar para ser mejor. Ayuda también a entender
la tarea diaria por abandonar las faltas y adquirir las virtudes contrarias.

ORA CONFIADAMENTE
Señor, quiero vivir una vida de amor, pero no quiero un amor que no acepte la verdad. Puedo admitir mis
pecados y vivir con amor en la medida que trabajo por cubrir y eliminar esos pecados. No quiero dones de
inteligencia que me puedan hacer orgulloso. No todo lo que es alto es santo, no todo lo que agrada es
bueno. No siempre son útiles los buenos deseos. A ti Señor, no siempre te agradan las cosas de las que
estamos orgullosos. Es mucho mejor tener compunción que saber hablar de ella. Dame una compunción
auténtica de manera que odie mis pecados y luche diariamente contra ellos. Amén.
Reflexión 23:
ESFORZÁNDOTE POR LA COMPUNCIÓN:

ESCUCHA LA VOZ DE DIOS


Hijo si no te esfuerzas seriamente por sentir una santa pena por tus pecados, no serás enriquecido por mi
celestial consolación. ¿Haces todo lo que puedes por sentir la compunción?

Esta gracias la obtendrás con mayor facilidad si diariamente te retiras por un momento de tus distracciones
habituales. Ven más a menudo a estar a solas conmigo. Reflexiona en mis dones y tu mayor
aprovechamiento de ellos. Sé sincero y enfréntate con la realidad. La lectura y la reflexión te ayudarán a
comprender el absurdo de todos los pecados, inclusive de los pequeños. No te preocupes de teorías nuevas
o de curiosidades, sino fundaméntate en las verdades sólidas de siempre, verdades que mejoren tu vida
diaria.

En la soledad y la quietud descubrirás el tesoro oculto en las Sagradas Escrituras. Si te haces íntimo harás
grandes progresos. Encontrarás cosas que purifiquen tu alma, tendrás también un profundo gozo interior
como el de mis ángeles y yo estaré contigo. Aprende a trabajar y no a ser visto por los hombres.

Lentamente a medida que la compunción llene tu alma, te sentirás invadido por un nuevo vigor. A medida
que más diligentemente quieras quitar tus pecados irás encontrando que las cosas más difíciles se te hacen
más fáciles.

REFLEXIÓN
Jesús dijo que ciertos demonios solo podrán ser expulsados por la oración y el ayuno. Lo cual demuestra
que algunos dones de Dios solo nos son comunicados si nosotros nos preparamos de nuestra parte para
ellos. La compunción será duradera y profunda solamente si realizo un esfuerzo personal y sincero por
recibirla plenamente y aplicarla con todas las consecuencias. En la soledad, en la oración, lectura y
meditación entenderé como puedo recibir la mejor compunción y aprovecharla en la vida ordinaria.

ORA CONFIADAMENTE
Jesús, Santo y Misericordioso, llena mi alma de verdadera compunción. Que sea yo honesto en reconocer
mis pecados, y que este determinado a aniquilarlos cada día. Necesito de tu asistencia de manera que no
sea un cobarde, sino que cada día haga un esfuerzo sincero por agradarte más en mis actividades.
Ayúdame a abandonar todo lo que se oponga a tu don santo de la compunción. Amén.
Reflexión 24:
EL PURGATORIO AHORA O DESPUÉS:

ESCUCHA LA VOZ DE DIOS


Hijo, no esperes encontrar paz hasta que hayas pasado por cantidad de tribulaciones y oposiciones. Si
dices que ya no puedes soportar más sufrimientos ahora, ¿Cómo podrías llevar las penas purificadoras del
purgatorio más tarde?

El hombre paciente encuentra un purgatorio purificador en esta vida. Cuando los demás le hacen mal
siente más por el pecado de los otros que por su propio mal. Perdona a quién le hace el mal desde el fondo
de su corazón. NO es lento en pedir perdón cuando ha causado algún daño a los otros. Se mueve más
fácilmente a piedad que ha dureza. Con frecuencia pasa por encima de sus sentimientos y procede
independientemente de ellos de acuerdo con su inteligencia y mi gracia.

REFLEXIONA
O ahora en la tierra o después en el purgatorio debo purgar por cada una de las faltas que he cometido.
Nada manchado entrara en el Reino de los Cielos. Ahora puedo purificar mi alma siguiendo los ejemplos
de Cristo nuestro Redentor. Él logró la gracia para vencer al pecado y al error, ahora debo de hacer lo que
este de mi parte para vivir una vida santa. Si no quiero y caigo en el pecado venial tendré que pagarlo en el
purgatorio. Si caigo en pecado mortal me condenaré a mí mismo al infierno.

ORA CONFIADAMENTE
Jesús. Tú hiciste eternamente la voluntada de tu Padre durante toda tu vida terrena. Es por tanto de justicia
que yo, miserable pecador, sea paciente en mi vida diaria. Aunque esta vida me pesa como un fardo, con
tu gracia, tengo una gran oportunidad para ganar meritos para el cielo. Tu ejemplo y la vida de los santos
la hacen más luminosa, y llevadera para aquellos que cada día se esfuerzan en ver con claridad cual es el
camino del cielo. Amén.
Reflexión 25:
EL MAYOR TESORO DEL HOMBRE:

ESCUCHA LA VOZ DE DIOS


Solo en Mi Voluntad puedes encontrar lo que es mejor y más precioso para ti. Dios es mucho mayor y
mejor que todas las cosas creadas. Yo soy el Más Alto. No hay otro que sea todo poderoso. Solo Dios es
perfectamente amable y lleno de consolación. En mí encontrarás la perfecta belleza y el amor que satisface
plenamente. Más noble y más glorioso que todas las cosas es el creador de ellas.

Pide a menudo la gracia de encontrar tu gozo en Mí por encima de todas las cosas creadas; por encima de
la belleza, o de la salud, por encima de la gloria y honor; por encima del poder y de la dignidad; por
encima de la inteligencia y de la ciencia; por encima de toda cosa admirable y asombrosa; por encima de
todas las artes y cantos; por encima de todas las comodidades materiales y riquezas; por encima de toda
consolación y apreciación humana. Atesorarme más que todos los dones y recompensas que proporciono
al hombre. En Mí encontrarás más que todas las otras cosas.

Lo que Yo doy no es Dios, por lo tanto es demasiado pequeño e insuficiente para ti. Te hice para mí, el
bien Perfecto. Tu corazón no descansará hasta que descanse en Mí, el Dador perfecto y el Don perfecto.

REFLEXIONA
Nada hay más que me interese o que ame más que Tú, Dios mismo, nada de lo demás puede dar la
perfecta felicidad, que mi alma desea. Así muchos que buscan el éxito terreno fracasan. ¿Por qué? Porqué
llegan a descubrir que nada sobre la tierra les puede dar la felicidad que ellos buscaban. Deberían haberse
volcado finalmente en Dios pero se olvidaron de El en su locura por buscar el gozo en la tierra.

ORA CONFIADAMENTE
Querido Señor, no puedo vivir para un gozo que esta abocado para marchitarse. Aunque espero un gozo
razonable de esta tierra, nunca te volveré la espalda por el pecado. Las cosas buenas de este mundo no
hacen sino reflejar tu bondad, tu belleza y tu poder. Nunca abandonaré la Gran Realidad por el brillo de
sus reflejos. Cuando este tentado de pecar por algún atractivo humano, dame la gracia de acordarme de tu
bondad, grandeza y amor. Amén.
Reflexión 26:
EMPEZANDO UNA NUEVA VIDA:

ESCUCHA LA VOZ DE DIOS


Hijo, no pierdas la esperanza de hacer progresos en el espíritu. Aún tienes tiempo. No has perdido aún la
oportunidad. ¿Por qué dejas para mañana tus buenas intenciones? ¡Ahora es el momento de actuar!
Empieza ahora mismo. Es tu oportunidad. Empieza una nueva vida con la ayuda de mis gracias.

Mantén una esperanza firme de lograr el éxito. Que no te descorazonen tus fallos. Guárdate también de la
presunción, de manera que no seas victima de la vanidad ni de la pereza.

Si has omitido alguna vez tus oraciones o algún ejercicio espiritual a causa de alguna ocupación urgente o
por el bien de tu prójimo, trata de hacerlo más tarde. No dejes con facilidad los ejercicios espirituales por
cansancio. Puede convertirse en un hábito que te perjudique.

REFLEXIONA
Es fácil comenzar de nuevo. Todo lo que tengo que hacer es: 1) examinar mi vida, 2) enfrentar lo que
tengo que hacer 3) pedir a Dios fuerza 4) empezar a hacerlo.

Puedo caer en una y otra ocasión, pero lo importante no es eso, sino que he empezado y estoy determinado
a seguir pese a todos los fracasos que puedo tener.

ORA CONFIADAMENTE
Señor, ¡ahora empiezo! Ayúdame a vivir conforme a tu deseo. Sí así lo quieres, puedo lograrlo. Si deseas
esto de mí, debo hacerlo. Que yo no sea un cobarde que me escapo a tu voluntad. Tú sabes lo que es justo
y que es bueno. Debo comenzar ahora. Señor, ayúdame. No puedo esperar a ser otra persona distinta de la
noche a la mañana. Así como las faltas se desarrollan lentamente durante un período, lo mismo sucede con
las virtudes contrarias. No puedo desanimarme cuando las faltas antiguas me ataquen por sorpresa. Mi
amor hacia ti quedará probado con mi actuar, es decir con mi prontitud y esfuerzo paciente por vencer las
faltas y la práctica de las virtudes contrarias. Ahora empiezo. Amén.
Reflexión 27:
SANTIDAD EN LA VIDA DE CADA DÍA:

ESCUCHA LA VOZ DE DIOS


Hijo, oirás a veces a la gente que están demasiado ocupadas para atender las cosas de la religión. Quién así
habla, ni me entiende a Mí, ni a ellos mismos, ni a la vida diaria. No caen en la cuenta que la religión es
una actividad diaria, como lo puede ser el comer o el dormir.

Yo soy para ti mucho más importante que el aire que respiras, el alimento que comes o el descanso que
repara tus energías. Todo esto te lo doy yo con mi mano. Sin mi amante sostenimiento en cada momento
todo esto te faltaría y tú mismo te desvanecerías de la faz de la tierra.

Yo soy el centro de tu existencia. Depende de Mí más de lo que te imaginas. Así como das importancia a
la gente con la cual te tienes que relacionar a diario, debes prestarme atención a mí. Hablarme, tratar de
agradarme, pedir mi ayuda, manifestar el sentimiento por las ofensas que se me hacen, y amarme por mi
bondad son todos ellos actos normales para un ser inteligente. De la misma que yo me comunico con el
hombre, este debe de procurar agradarme en su vida diaria.

La religión es un lazo que nos a ti y a Mí. Descuidarla es una locura tan grande como el querer no respirar,
comer o descansar. De hecho es aún peor. Estas cosas mantienen la vida de tu cuerpo, pero la religión
mantiene la vida de tu alma.

El hombre que es negligente con esta parte de su vida es anormal, es decir, le falta algo que debería de
tener. Carece de algo que es natural y normal en su naturaleza, algo que le perfecciona más de lo que
piensa.

No hay ninguna oposición en trabajar para satisfacer las necesidades terrenas y trabajar para las del cielo.
Tienes que trabajar cada día, pero este mismo trabajo tiene que ser una gloriosa plegaria. Debes dormir,
trabajar, y recrearte, pero todas estas acciones, pueden hacerte santo, acciones verdaderas para la vida
eterna.

Cuando lo hagas, hazlo como yo quiero que se haga, y lo harás lo más perfectamente que es posible
hacerlo. Se razonable en cuanto hagas, digas o pienses. No violes mis mandamientos, ni por todas las
ventajas o desventajas del mundo. Yo he hecho todas las cosas de este mundo para ti, de manera que te
perfecciones usando de ellas inteligentemente. Que mis palabras y ejemplo te dirijan en cuanto hagas. En
caso de duda consulta mi Iglesia. Haciendo así trabajaras por triunfar en el mundo y al mismo tiempo para
alcanzar la gloria del cielo.

REFLEXIONA
Si he logrado tener una visión total de este mundo, comprenderé la importancia que tiene Dios en Él. En
lugar de vivir para el momento o para los próximos años, viviré para mi más alto e importante fin. Veré la
importancia trascendental de lo que estoy haciendo ahora. Entenderé cómo cada acto de este día me ayuda
a ser más perfecto, un poco más apto para el cielo. Solo el pecado es locura. Solo el pecado es malo. Todo
es bueno o grato a Dios porque me ayuda de una manera o de otra.

ORA CONFIADAMENTE
Padre celestial, deseo hacer el mejor uso de esta mi vida. Quiero vivir una vida tan plena como me sea
posible. Por eso quiero que en cada cosa que haga, diga o piense, Tú seas mi Socio. Si Tú me sostienes en
todo lo que yo haga, o diga, o piense, te agradaré en ello. Viviendo así seguiré tu voluntad y mi propio
mayor bien. Quiero juntar mi vida con la vida de Jesús, Tu divino hijo en la tierra. Con su ejemplo y la
ayuda de tus santos sacramentos, espero agradarte en todo momento. Así mi vida será la mejor
preparación para la vida eterna. Amén
Reflexión 28:
AMISTAD INTIMA CON DIOS:

ESCUCHA LA VOZ DE DIOS


Hijo, ya te he dicho que el Reino de los Cielos esta contigo. Vuélvete a mí con todo tu corazón. No
pienses demasiado en este mundo y tu alma descansará en Mí. No dejes que esta vida ocupe toda tu
atención. Piensa a menudo en mí y en el modo de hacer Mi Voluntad en tu vida.

Así serás conciente de mi presencia en tu alma. Yo te atraeré los dones de la paz y del Espíritu Santo.
Estos dones no se dan a quienes se entregan demasiado a las cosas de esta tierra.

Quien me ama y vive mi verdad es una persona sobrenatural. Con mi gracia se ve libre del pecado y de los
deseos peligrosos. Se vuelve libremente hacia Mí. Es capaz de levantarse por encima de este mundo
visible y disfrutar de mi amistad.

Como el acero se purifica y pierde las impurezas y se vuelve brillante con la llama, así también el hombre
que tiene todo su corazón vuelto hacia mí se purifica de toda su impureza y se convierte en un hombre
nuevo.

REFLEXIONA
Si tomo este camino y me concentro más en Dios en mi vida diaria, encontraré la paz de Cristo. Las penas
de este mundo y las distracciones se hacen pequeñas en la presencia de Dios. Cuando más impresionado
esté por Dios, menos me impresionarán todas las demás cosas.

ORA CONFIADAMENTE
Dios mío, quiero estar profundamente impresionado por Ti y por tu santa voluntad en mi vida diaria.
Enséñame a vivir en esta mi vida en tu presencia, participando contigo mis pensamientos, deseos y cada
acto a lo largo del día. Que conozca tu voluntad y la siga según se manifiesta a través de los
acontecimientos y personas y a lo largo del día. Amén.
Reflexión 29:
EL CONFLICTO INTERIOR DEL HOMBRE:

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Hijo, cuando creé al primer hombre y mujer, les di tantos dones para que su vida en la tierra, fuera tan
pacífica y cómoda como fuera posible. Estaban libres de sufrimientos, trabajos, enfermedades y muerte.
Estaban capacitados para resolver cualquier problema que se les presentara. Tenían un dominio absoluto
sobre sus apetitos y deseos del cuerpo y del alma. Y por encima de todo esto les había dado la gracia de
vivir una vida sobrenatural. Habitando en sus almas les di más que la luz natural de su inteligencia y la
fuerza natural de sus voluntades.

Ninguno de estos dones les pertenecía por naturaleza. Yo los añadí por encima del don de la vida,
humanaron todos los poderes naturales al cuerpo y al alma. En cualquier tiempo podía quitarles estos
dones, y el hombre seguiría poseyendo todo lo que le pertenecía por naturaleza. Yo dejé a Adán la
decisión de que si él y sus descendientes deberían de conservar todos estos dones sobrenaturales. Adán, en
representación de toda la raza humana tenía que hacer un acto libre, un acto de obediencia a mi voluntad.
Por ese acto conocerían la suprema verdad de la existencia: que son criaturas completamente dependientes
de Dios.

Desobedeciendo mis mandamientos en el paraíso, Adán no quiso reconocer esta verdad suprema. El acto
externo de comer el fruto prohibido fue un acto de poca importancia, pero la rebelión interna contra mi
voluntad fue de trascendental importancia. Adán quería hacerse igual a Mí, lo mismo que los Ángeles
rebeldes en el paraíso. Como consecuencia de la desobediencia de Adán, yo quité mis dones PRE-
naturales. El hombre fue privado de la ayuda de mis dones extra, excepto que podía obtener aun la gracia
de ganar el cielo.

Ahora el hombre tiene que soportar un conflicto interno, un conflicto que le es connatural. Sus apetitos
animales actúan como quieren sin tener en cuenta el recto juicio y el libre querer. Incluso cuando quiere el
hombre seguir los dictados de su corazón y buscar lo que es bueno, tiene que luchar para controlar los
apetitos irracionales y los deseos ciegos. Ya no tiene ciencia infusa, sino que debe de resolver los
problemas de cada día con el trabajo y su experiencia.

Con harta frecuencia este conflicto interior produce confusión en la razón e indecisión en la voluntad. Con
todo, la razón humana tiene capacidad para juzgar el bien y el mal es capaz de distinguir lo verdadero de
lo falso. Para librarte de tus dudas te he dado la Iglesia que guía tu razón y robustece tu voluntad.

Mientras tengas un cuerpo terrenal, no podrás verte libre de tus pecados veniales, ni podrás vivir sin
alguna pena y tristeza. De todos modos, debes hacer cuanto puedas con paciencia y decisión, pese a todos
los fracasos. Pronto todo este estado de desorden pasará. Esta vida terrena dará paso a la vida perfecta que
te tengo prometida a los que guardan mis mandamientos.

REFLEXIONA
Adán trasmitió a sus descendientes la naturaleza humana que él mismo tenía, una naturaleza debilitada por
la desobediencia. Gran parte de las flaquezas humanas tienen aquí su raíz, Tras la caída, la naturaleza
humana animal conserva su fuerza y apetitos, pero no esta ya bajo el perfecto control del más alto poder
del hombre, su razón y su libre querer. De todos modos, Dios sale en defensa de nuestras flaquezas
dándonos la gracia de Dios; de esta forma, el hombre puede evitar los pecados completamente deliberados
y hacerse así otra vez del timón de su vida.

ORA CONFIADAMENTE
Dios, me siento contento de tener tu Ley para que me guíe. Con tu ayuda quiero corregir el mal de mi vida
y evitar en la medida que sea posible las tentaciones que se presenten en el futuro. Es verdad que yo a
menudo sigo la ley del pecado obedeciendo a mis sentimientos en lugar de mi razón. Quiero el bien, pero
no siempre sé cómo lograrlo. Una y otra vez tomo resoluciones, pero por mi flaqueza, pronto me vuelvo
atrás después de haber hecho poca resistencia. De vez en cuando sé lo que debo hacer, pero sencillamente
no lo hago. Con tu ayuda empezaré a actuar. Quiero hacer todo lo que esté de mi parte para vivir una vida
de lealtad a tu santa voluntad. Amén.
Reflexión 30:
LA LEY NATURAL EN EL HOMBRE:

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Hijo, de no ser que aprendas a controlar tus sentimientos, encontrarás muy difícil obedecer a los que
tienen autoridad sobre ti. Los sentimientos no siguen a ala razón. Se apartan sencillamente de lo que es
desagradable sea bueno o malo. Los sentimientos pueden aquietarse dentro de cierto grado por una
inteligencia clara. De todas maneras nunca tendrás un enemigo mayor y que te perturbe tanto como tus
propios sentimientos irracionales y tus deseos ciegos.

Por la oración y la meditación lograrás una visión más clara. Verás lo irracional y lleno de egoísmo de tus
sentimientos y movimientos. Yo te mostraré el fin glorioso para el que te he señalado. Cando hayas hecho
fuego y sangre el alto fin de tu vida terrena, tendrás un santo desprecio por todo lo que se oponga a este
fin. Este conocimiento celestial y este fin eterno traerán unidad y orden a tu vida. Entonces te resultará
más fácil guiar tu naturaleza de acuerdo con mi querer.

De vez en cuando tendrás que enfrentarte, incluso hacer violencia contra tus tendencias irracionales. A
veces tendrás que prescindir de gustos y disgustos y seguir la recta razón. Con mi verdad para guiarte y
mis sacramentos para robustecerte no puedes fracasar en el combate por el cielo.

REFLEXIONA
Un caballo obediente puede obedecer al hombre en su trabajo diario pero una mula terca causará más
trastornos que ayuda. Así sucederá con la naturaleza humana: razón y voluntad dirigidas por la gracia,
pueden guiar los apetitos irracionales y los deseos a una acción justa. Una vida buena es aquella que sigue
la ley de Dios. Sólo la voluntad de Dios me puede llevar al cielo.

ORA CONFIADAMENTE
Señor Jesús, espero seguirte cada día de mi vida, con tu ayuda, espero tener fuerza para permanecer firme
contra las ciegas tendencias y deseos. Tú eres mi Rey. Hazme un leal servidor tuyo. Deseo y espero vivir
una vida como tú deseas que sea. Dame tu gracia. Tú mismo me has mostrado cuan necesario es para mi
salvación. Dámela con tal abundancia que invada mi débil naturaleza que de por si me arrastra al pecado y
al infierno. En mi propia carne siento la ley del pecado que contradice la ley de la razón y que en muchas
ocasiones me hace esclavo de los sentimientos. No puedo resistir estos sentimientos si no es con tu ayuda,
poniendo en mi corazón la gracia de una ardiente lealtad a Ti. Estoy necesitado de la gracia para que
continuamente cubra los fallos de esta naturaleza que desde su juventud tiene al mal. Espero tu ayuda.
Amén.
Reflexión 31:
SINCERO RECONOCIMIENTO DE LOS PROPIOS DEFECTOS:

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Hijo, deja a mi infinita sabiduría que te enseñe a ti lo que es mejor para tu conducta diaria. Piensa en tus
pecados con gran pena y desagrado. No te consideres rico por tus buenas obras. La verdad sencilla es que
eres un pecador. Con mucha frecuencia tus acciones están controladas por emociones y sentimientos más
que por la inteligencia y la gracia.

Si te dejará a ti mismo, tenderías hacia el mal y caerías en pecado. Con facilidad te domina el egoísmo. Tu
autocontrol te falla en cualquier momento. Eres más débil de lo que crees. Tienes muy poca razón para
sentirte orgulloso de ti y bien de motivos para humillarte.

No temas a nada tanto como a tus tendencias desordenadas y a tus pecados. Apártate de ellas más que de
otra cosa. Te pueden causar mucho mayor trastorno que cualquier otra pena. Cuídate de mis juicios y teme
la ira del Todopoderoso. No presumas de juzgar las obras de Dios. Mira tus pecados. Considera el mal que
has hecho y el bien que has dejado de hacer.

REFLEXIONA
Dios ama a los hombres sinceros. ¿Por qué nos será tan difícil admitir la verdad de lo que en realidad
somos? Si me oculto a mí mismo la verdad. ¿Cómo voy a ser agradable a Dios? Necesito no sentirme
deprimido y desanimado al ver mis faltas. Todo lo que Dios espera de mi hoy es que luche contra ellas.
Ser un pecador no es lo peor. Mucho peor es seguir siendo un pecador. Dios ama al pecador que se
arrepiente, es decir, que detesta sus pecados y hace un honesto esfuerzo para acabar con sus faltas.

ORA CONFIADAMENTE
Dios misericordioso, al menos he entendido que no debo quedar triste y paralizado por mis faltas. Haré lo
que quieras de mí. Probaré mi auténtica pena por mis pecados haciéndoles la guerra en mi vida diaria.
Muéstrame qué faltas te desagradan más y yo empezaré una vez más a luchar contra ellas. Nunca venceré
definitivamente mientras esté en este mundo, Señor, pero al menos, cada día puedo tratar de lograrlo. No
tengo otra cosa que ofrecerte que este esfuerzo diario contra mis faltas. Te lo ofrezco como una prueba de
que estoy realmente arrepentido de haberte ofendido. Amén.
Reflexión 32:
LA FALTA PREDOMINANTE:

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Hijo, yo doy fuerzas a los que hacen un sincero esfuerzo por luchar contra sus faltas. Cuando más se
esfuercen más progresarán en la virtud. El autocontrol que yo doy es una de las mayores glorias del
hombre porque es lo que más se aproxima a mi perfección.

No hay hombres que tengan la misma proporción y combinación de faltas, ni el mismo cúmulo de gracia.
Yo doy más a quines hacen buen uso de la que ya han recibido.

Si progresas en tu lucha contra la falta más importante, encontrarás más fácil someter a control otras
faltas. Una vez que te hayas hecho dueño de tu corazón, serás dueño de tu vida. Tu inteligencia te guiará
por mi gracia y tu voluntad seguirá mi santa ley con facilidad.

Empieza ya. Ataca primero tu falta más frecuente. Cuando caigas en esas faltas en lugar de entristecerte y
descorazonarte, prueba tus sentimientos comenzando de nuevo. Encontrarás que el egoísmo es la raíz de
todas las faltas. Tus sentimientos se rebelarán pero debes fijar tus ojos en Mí y mantener tu propósito
firme en mi Ley.

Te ayudarán a sentirme más cerca la oración, la penitencia y mis sacramentos y yo te daré la fuerza para
seguirme.

REFLEXIONA
Cada hombre tiene un defecto predominante, es decir, algo que le hace cometer la mayor falta de pecados
en su vida diaria. Venciendo esta falta desaparecerán muchas faltas de diferente tipo. Esta falta no muere
con facilidad, pero con un esfuerzo sincero y continuo la iré debilitando cada vez más. Nuestro Señor no
me dejará luchar en vano. Me dará fuerzas para hacer un verdadero progreso. No necesito sino
continuidad en mi esfuerzo haciendo lo que sea necesario para vencer el defecto.

ORA CONFIADAMENTE
Señor, enséñame a usar las ayudas que Tú nos has proporcionado para la victoria espiritual. Que nunca sea
perezoso o descuidado en seguir las instrucciones de tu Iglesia no en el uso frecuente de los sacramentos.
La victoria de esta batalla diaria me traerá gloria eterna en la maravillosa vida del cielo. La recompensa
que tienes preparada es mucho mayor que mi esfuerzo. Que nunca me sienta fatigado de luchar por el
cielo. Amén.
Reflexión 33:
ES NECESARIO MIRAR POR SI MISMO:

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Hijo, cada uno debe de tomar un cuidado razonable de si mismo. En el tiempo de la tentación levántate,
anímate, defiéndete y evita las debilidades. No importa lo que has hecho por los demás, no te descuides de
ti mismo. Guárdate de hablar mucho. En la medida de lo posible procura estar a solas conmigo.
Aprovéchate de mi presencia. Vive cada momento de tu vida en mi presencia. Posees a aquel que no te
puede quitar el mundo entero. Yo soy más rico que todas las demás cosas juntas.

Si te despreocupas de ti mismo, en poco tiempo puedes perder el esfuerzo espiritual que has adquirido
lentamente y con gran trabajo en un gran periodo de tiempo. Reflexiona a menudo en el fin de tu vida
terrena. Tienes que ser un hombre espiritual para lograr este don. Yo te diré por medio de la Iglesia cómo
tienes que hacer en esta vida terrena. No hay otro camino. Examina tu progreso de cada día. Pronto se
acabará tu vida. Si tienes fe no has de sentir pena, ni conocer el miedo. Por el pequeño trabajo que puedas
hacer en esta vida ganarás una gran recompensa en el cielo. Yo no abandonaré a los que esperan en mi
voluntad.

El hombre que ha aprendido a orar, considera su propia perfección como su principal y más alto negocio.
Quien se examina honestamente encuentra fácil no hablar de los demás. Aprende a frenar la lengua en lo
concerniente a los demás a no ser que tengas la obligación de hablar. Pon atención en tus propias faltas y
haz algo en contra de ellas. Si eres realmente hombre de Dios, los hechos de los otros no te harán peor de
lo que eres. Si puedes remediar algo que esté mal, hazlo. Pero con frecuencia no podrás hacer nada sin
pedir a Dios por las necesidades de los demás. Hazlo como un pecador que pide por otro, no como un
superior que pidiera por sus inferiores. Cuando hayas aprendido a fijar tu atención en tus propios asuntos,
encontrarás gran paz en el alma.

REFLEXIONA
En la medida de mis posibilidades, debería preocuparme de ayudar a los demás. Pero en muchas ocasiones
no podré ayudarles más que con las oraciones, buen ejemplo y silencio. La oración obtiene la gracia para
si y para otros. El buen ejemplo recuerda a los otros lo que debe hacerse. El silencio previene los
escándalos y el choque de los temperamentos. Pensar solo en mis propios negocios es una gran virtud. Mi
primera tarea es salvar mi propia alma. En cuanto pueda debo tratar de ayudar a los otros a tener una vida
más fácil y más santa. Después que haya hecho todo lo que puedo para ayudarles, debo dejarlo todo en las
manos de Dios.

ORA CONFIADAMENTE
Señor, dame el coraje de mirarme a mí mismo, la sinceridad de admitir mis faltas y limitaciones, la
honestidad de tratar mi propio mejoramiento y un amor hacia Ti que me mantenga en esta postura por el
resto de mi vida. Haz que me despreocupe de todo lo que no me atañe, si no es para pedir tu ayuda. En
todo lo demás, que yo viva aquellas palabras: “Hágase tu voluntad”. Amén.
Reflexión 34:
AYUDAS Y ESTORBOS PARA LA SANTIDAD:

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Hijo, hay una cosa que estorba mucho en el progreso espiritual e impide el propio perfeccionamiento: el
miedo a las dificultades o el esfuerzo necesario para superarlas. Aquellos que se elevan en la santidad son
los que tiene la bravura necesaria para luchar contra cualquier cosa que les aparte de Mí, sin importarles
que sea duro o desagradable el esfuerzo que haya que hacer. Cuando más te esfuerces en dominar tus
sentimientos y ciegos deseos tanto más gracias yo te ofreceré, si perseveras en el esfuerzo, obtendrás todos
los éxitos que de ti deseo Yo.

Los hombres según su diversidad de carácter, tienen que superar diferentes obstáculos. Con todo, una
persona diligente y celosa, hará mayor progreso en la virtud, aunque tenga que luchar contra defectos más
grandes. Algunos tiene pocos defectos y con todo no avanzan en la sanidad porque no son fervientes en el
esfuerzo por lograr la virtud.

REFLEXIONA
Muchos se espantan con solo el pensamiento de tener que cambiar su sistema de vida. Con todo, la cosa se
simplifica mucho con solo que lo intentaran. En primer lugar, necesitan un director espiritual que los guíe
y les ayude a verse a sí mismos sin prejuicios ni miedos. En segundo lugar, deben ser honestos en la
batalla por las virtudes contrarias a sus faltas. En tercer lugar, deben caer en la cuenta de que sus
sentimientos y deseos ciegos se revelarán y harán más difíciles sus esfuerzos diarios. Finalmente
aprenderán a sacar provecho espiritual de todas las circunstancias, imitando las virtudes que ven en los
otros y evitando los defectos de sus prójimos.

ORA CONFIADAMENTE
Oh, Espíritu Santo, Dios y Santificador, aumenta en mí la luz para ver que gran oportunidad tengo ahora
para comenzar una vida mejor. Ayúdame a tomar cuantas decisiones sean necesarias para purificar mi
alma con un sincero esfuerzo diario. No me niegues la fuerza que necesito si he de tratar de desarrollar las
virtudes que más necesito en mi vida diaria. Amén.
Reflexión 35:
VARIEDAD EN LA VIDA ESPIRITUAL:

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Hijo, no todo le mundo practica los mismos ejercicios espirituales. Una devoción aprovecha a una persona
determinada y otra distinta a otra persona. Un cambio en los ejercicios espirituales de tiempo en tiempo
puede hacerte bien. Cierta devoción puede ayudar en los días ordinarios y otra puede ser más útil para los
días de fiesta. Necesitarás un tipo de actividad espiritual en los tiempos de tentación y otra en los tiempos
de paz. Algunos gustan de determinados pensamientos cuando están tristes y en otros días de alegría
prefieren otros.

La verdad en la vida espiritual te ayudará a vivir una vida más rica y santa. Ponte tus metas espirituales y
haz tus resoluciones de acuerdo al espíritu de las diferentes estaciones del calendario de la Iglesia. Planea
tu vida espiritual como uno que esta estudiando como servirme mejor. Vive como quién mira al cielo.

Piensa en la muerte como puerta del cielo. Aprende a considerar tu vida terrena como la gran oportunidad
para hacer una abundante cosecha en el cielo. Si aún no te he llamado, considera que aún no estas
preparado para recibir la gloria celestial que te esta reservada. Planea como prepararte para la recompensa
celestial. Nunca olvides aquellas palabras: “Bendito el siervo que el Señor encontró aguardando cuando
vino. Os aseguro que le colocará al frente de todas sus posesiones.”

REFLEXIONA
Es muy fácil caer en la rutina. Muchos, día tras día, hacen las mismas cosas de la misma manera. La
variedad hace interesante a la vida, pero son muy pocos que tienen la ambición y la energía necesaria para
dar variedad a sus vidas. En lo concerniente a la oración, trataré de tener diferentes métodos o por si acaso
necesito de ellos para vencer la rutina. Puedo leer la vida de los santos y ver donde puedo hacer algunos
pequeños cambios en mi vida espiritual. El director espiritual me puede dar ideas para refrescar mi celo
por la gloria de Dios y el bien de mis prójimos.

ORA CONFIADAMENTE
¡Oh Espíritu Santo, mi Dios y Santificador!, dame luz para ver como puedo fructificar más en mi vida
para el bien. Que no caiga en un camino trillado y me estanque en él. La vida es una oportunidad
espléndida para hacer cosas grandes, para venir a ser como Tú, mi Dios, por medio del amor y el bien que
yo puedo dar a los otros. Ayúdame a ver nuevas vías de incrementar el bien en mi vida diaria. Dame la
insatisfacción propia y la fuerza de hacer el bien por Ti. Amén.
Reflexión 36:
COMUNIÓN FRECUENTE:

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Hijo, deberías de venir a menudo a mí, dador de gracia y recompensas divinas. Fuente de toda bondad y
santidad. Así aumentarías el control sobre tus pasiones, faltas y defectos. En la sagrada comunión, Yo te
haré más fuerte contra las tentaciones e insinuaciones del demonio.

Cuando vengo a ti en el Sacramento, te ofrezco luz y fuerza interiores. Estos dones son apreciados solo
por mis creyentes. No son apreciados por los que carecen de fe, ni por quienes son amantes del pecado. En
este sacramento el alma recibe la gracia de superar las virtudes y la belleza perdidas por el pecado.

Los ciegos deseos del hombre tienden hacia el mal desde su juventud. Si no le asiste esta medicina pronto
se deslizará de mal en peor. La Sagrada Comunión te preserva de lo que está mal y te endereza en el bien.
Me necesitas. Haz uso total de mi ciencia y de mi fortaleza que te ofrezco en la comunión.

REFLEXIONA
Para luchar contra el pecado necesito mas fuerzas de lo que yo tengo. Jesús ha prometido dármelas en la
comunión. No puedo pasar por alto esta maravillosa invitación. Lo recibiré a menudo como me sea
posible. A sus pies pondré mis esperanzas, planes y ambiciones. El me dará la fortaleza para hacer lo que
es mejor.

ORA CONFIADAMENTE
Señor, ciertamente que me es necesario este regalo celestial. ¡Me desanimo fácilmente y caigo en pecado
con tanta facilidad! Necesito ser espiritualmente refrescado, limpiado e inflamado con plegarias frecuentes
y confesiones, y sobre todo por la amante recepción de tu Sagrado Cuerpo y Sangre. Permaneciendo
alejado mucho tiempo de ti, puedo decaer de mis buenas intenciones. Que vaya a Ti con la mayor
frecuencia que me sea posible de manera que cuente con tu gracia para el trabajo para la vida eterna.
Amén.
Reflexión 37:
INVITACIÓN A LA SAGRADA COMUNIÓN:

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Hijo, pondera a menudo mis palabras: “Venid a mi los que estéis cansados y llenos de trabajos y Yo os
aliviaré”. Son palabras mías, y deberías recibirlas lleno de fe y gratitud. Son mías porque fui yo quién la
pronuncio, pero son tuyas también, pues las dije para tu salvación. Recíbelas de mis labios con gozo. Que
penetren en tu corazón. En estas palabras puedes ver cómo me preocupo leal y francamente por ti. No
detengas tu conciencia que pide que te entregues a mis brazos. Yo sé lo necesitado que estás de mi
amistad, pero pese a ello, te amo.

A pesar de tu nada y de tu pecado te mando que te acerques a Mí con confianza. Es mi deseo que en este
momento me recibas a Mí, alimento de inmortalidad. Por medio de este alimento celestial, que en realidad
de verdad es Mi propio cuerpo y sangre, obtendrás vida imperecedera y gloria eterna. Yo he dicho “Venid
a Mí todos lo que estén cargados y llenos de trabajar y yo los aliviaré”. Estas palabras son consoladoras en
los oídos de un pecador. Yo, tu Señor y tu Dios, te invito a ti, pobre y necesitado a que recibas mi Cuerpo
Santo. No digas ¿Quién seré yo para pretender acercarme a Ti? Te mando que vengas y me recibas,
porque sin Mí estás perdido.

Prepárate por medio de la confesión en el caso de que sea necesario y con oraciones. Aproxímate, después
a mi altar con confianza y con un ardiente deseo de agradarme en tu vida diaria.

REFLEXIONA
Dios es tan poderoso, tan grande, tan perfecto, que nosotros somos nada en su comparación. Los ángeles y
santos del cielo ven a Dios cara a cara y caen en cuenta de cuan minúsculos son en su presencia. Y en
consecuencia sienten un profundo e indescriptible respeto hacia Él. Con todo, este Dios, en su bondad,
ama a sus criaturas más de lo que se puede decir. Ha hecho muchas cosas para convencernos de que
debemos amarle a Él. Incluso llegó a enviarnos a su hijo amado para mostrarnos su amor de un modo
inteligible a los hombres. Después de vivir y morir por nosotros, Jesús inventó un modo de quedarse con
nosotros en la Sagrada Eucaristía. En este admirable Sacramento se hace alimento de nuestras almas. Para
que no haya nadie que no quiera recibirle en la Comunión, impone la obligación de comulgar. Es su deseo
expreso que le recibas en la Santa Comunión.

ORA CONFIADAMENTE
Señor, ¿por qué eres tan generoso y preocupado conmigo? Tú sabes que estoy lleno de defectos. Te he
ofendido a menudo con mis faltas y negligencias. ¿Cómo puedo osar recibirte en mi corazón? He sido
orgulloso contigo pese a toda la generosidad tuya conmigo. Tus Ángeles y arcángeles están con profundo
respeto ante ti. Los santos y los justos tienen un santo temor ante ti. Con todo, dices: “Venid a Mí” De no
ser tu quien dice esto, ¿Quién podría creerlo y quién podría acercarse a la Santa Mesa? En virtud de tu
santo mandamiento iré. Pensaré en tu voluntad y me olvidaré de mi miseria y así comeré ese Pan de
Ángeles. Amén.
Reflexión 38:
EL HOMBRE DE FE:

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Hijo, mi leal servidor no se rebela por las cosas desagradables que permito en su vida. Es un hombre de fe,
esto es, que cree en mis palabras y sigue mis enseñanzas en la vida ordinaria. Este ve mi sabiduría que
gobierna en su vida en todo momento.

Esta fe sobrenatural le ayuda a guardar la paz en su alma incluso cuando los hombres parecen complicar
las cosas con sus intromisiones e indiferencias.

Lo que yo envío no es siempre fácil de entender. Puede parecer absurdo e injusto a los que viven solo para
este mundo. Pero el hombre de fe lo toma como recibido de mi mano sabiendo que yo planeo todas las
cosas para lo mejor.

En sus juicios no depende solo de su razón natural, sino que me consulta a Mí y a mi Iglesia en todas las
materias de importancia.

REFLEXIONA
Debo ser una persona de fe, con una visión clara de Dios y a su acción en la vida diaria. Él siempre está
cerca, siempre interesado, siempre prestando su ayuda. Con una visión interior de fe, no puedo sentirme
desconcertado por los dichos o hechos que suceden a mi alrededor.

ORA CONFIADAMENTE
Padre Sabio y Bueno, ¿Cuándo veré las cosas con tu mirada eterna y gloriosa? Que no me influyan los
criterios de los hombres de este mundo. Aunque se rían o critiquen lo que Tú has mandado, dame coraje y
fuerzas para hacer lo que Tú quieras de mí. Tu sabiduría vencerá la loca sabiduría de este mundo. La
locura del pecado será condenada un día y puesta en ridículo. Que odie lo que es malo y tema al pecado en
mi vida diaria. Amén.
Reflexión 39:
EL VERDADERO BIEN DEL HOMBRE:

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Hijo, a menudo es mejor para el hombre no tener muchos consuelos y placeres en este mundo. Trata de
comprender esta verdad y así no estarás muy triste y deprimido cuando no obtengas lo que deseas.

Si tuvieras todos los gozos y satisfacciones que te puede ofrecer esta vida, ¿Cuándo terminarías? El
pensamiento de que algún día ciertamente se acabarían solo servirían para hacerte la muerte más terrible y
desagradable.

Lo cierto es que tu alma no encontrara gozo pleno sino en mi amistad y amor. La verdadera paz y alegría
duradera vienen sólo de Mí. Los amadores locos de este mundo piensan que conocen el sentido de la paz y
la felicidad, pero lo que ellos disfrutan es imperfecto y de corta duración. La auténtica paz se da solo a mis
leales seguidores que se sienten satisfechos en hacer mi voluntad, generosos en imitar mis ejemplos.

REFLEXIONA
Dios quiere que trabaje por mi pan cada día y aprueba los placeres rectos de cada día. Pero no me debo
entregar a estas cosas de manera que peque por ellas. Cada día es un paso hacia la vida verdadera y
perfecta del cielo. Necesito poner toda la confianza en la sabiduría de Dios y en su verdadera caridad.
Cada día veré más claramente cómo puedo agradar a Dios más en cada cosa que haga.

ORA CONFIADAMENTE
Jesús dígnate no dejarme pensar demasiado en necesidades terrenas. Puesto que pueden inundar mi
pensamiento y ponerme en tantas ocupaciones que no pueda pensar en Ti y en tus santas palabras.
Sálvame del amor ciego del placer y de la esclavizante ansia de seguridad en esta vida. Dame la libertad
de los que viven para el cielo. Nada en la tierra me puede apartar de hacer tu voluntad Amén.
Reflexión 40:
DESEOS CELESTIALES:

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Hijo, no te dejes impresionar por las apariencias. La opinión mundana piensa que un hombre no puede ser
feliz sino es rico o poderoso o si no tiene fama e influencia. Siéntete a gusto con mis criterios. Fija tu
corazón en las riquezas celestiales. Entonces caerás en la cuenta de que las glorias pasajeras y los
contentos inseguros no son tan deseables como parecen. A menudo los acompaña un montón de trabajos,
penas y miedos.

La felicidad del ser humano no consiste en tener un montón de cosas. Una adecuada medianía en los
bienes de este mundo es suficiente si cada día te preocupas de trabajar para el cielo. Cuando más veas la
vida desde mi punto de vista, más caerás en la cuenta que la vida terrena es una cruz. Tienes fracasos,
cargas, desilusiones y penas que deben de ser llevadas pacientemente. No es fácil ser una persona
espiritual porque las cosas de este mundo continuamente están llamando a nuestros sentimientos. Aprende
a gobernar tus sentimientos con las riendas de la razón y la gracia. Contrólate con tu inteligencia y mis
mandamientos.

A medida que aumenten tus deseos de perfección espiritual te encontrarás pensando con más frecuencia en
el cielo. Tus deseos del cielo se irán haciendo más fuertes y más fuertes. Tendrás incluso que controlar el
sentimiento de disgusto por las necesidades y obligaciones de la vida diaria.

REFLEXIONA
Cuando más se piensa en el destino eterno más se comprende que esta vida terrena es un itinerario para
algo más grande que este mundo. Se ve cada día como un escalón para el cielo y se mira uno a sí mismo
para ver si esta dentro del sendero recto. Poco a poco se van valorando los acontecimientos de la vida
diaria conforme a la voluntad de Dios y a la facilidad eterna del cielo.

ORA CONFIADAMENTE
Señor, nada en la tierra puede darme el gozo y la felicidad del cielo. No hay gozo duradero fuera de ti.
Que no pueda yo estar nunca sin tu santa gracia. Deseo ver las cosas de este mundo en su real valor. Que
no ame a ninguna persona o cosa más que a Ti, es decir, que no peque nunca por ellas. Amén.
Reflexión 41:
LA RECOMPENSA:

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Hijo, por razones que no puedes apreciar del todo en esta vida, he hecho de ella un período del trabajo y
fatiga. Cada vez que permito que sufras penas, pesadumbres o desilusiones, lo hago por tu bien. Estas
penas te ayudan de una manera u otra a abrazarte más estrechamente de Mí. Yo soy quien ha hecho de tu
vida un período de penas y trabajos. No pienses en esta vida en placeres y descanso. Prepárate a ejercitar
la paciencia mucho más que a disfrutar de descanso y consuelos. Piensa más en llevar la cruz que evitar lo
que es desagradable.

¿Esperas disfrutar consolación cuando te parezca? Ni mis santos pudieron eso durante su vida terrena.
Tuvieron que enfrentarse con muchas preocupaciones, tentaciones, miserias interiores y desolaciones.
Pero pasaron a través de todos esos obstáculos fiándose más de Mí que en sí mismos. Ellos fueron
conscientes de que los sufrimientos de esta vida no pueden compararse con la gloria que vendrá.

¿No te das cuenta de lo egoístas que son tus deseos? Quieres alcanzar pronto la paz y la santidad que otros
han logrado después de muchos trabajos y sufrimientos. Te preocupas de gozar de mis dones que de
merecerlos. No. Debes hacer las cosas a mi modo si quieres acertar en el buen camino.

Aguarda la luz y la fuerza que yo comunico en el momento debido. Mientras tanto, ten coraje y sé
paciente. No abandones la batalla contra faltas y defectos. Haz todo lo que puedas por ser un hombre
como yo quiero que seas. Déjame a Mí los resultados. Se lo suficientemente desinteresado como para
tratar de moverte por amor mío. Algún día te recompensaré mucho más allá de lo que puedes imaginarte.

REFLEXIONA
El cielo es una recompensa: una cosa a alcanzar. Aunque nunca lo lograré con mis esfuerzos humanos
solos, Jesús ha hecho posible que pueda trabar por ello con su ayuda. Dirigido por su gracia, puedo luchar
por el cielo. Un honesto esfuerzo diario contra mis faltas y una atención confiada para hacer la voluntad de
Dios en todas las cosas, me proporcionará la recompensa gloriosa del cielo. La vida terrena tiene estos
trabajos, penas y dificultades. Cada día puedo ver si estoy sinceramente trabajando para el cielo según
sean mis palabras, obras y pensamientos.

ORA CONFIADAMENTE
Espíritu Santo, Dios mío, ayúdame a ver tu mano directora en el tiempo de prueba y haz que siga
humildemente y con lealtad lo que quieras de mí. Quiero hacer todo lo que pueda, por poco que sea. El
cielo es más de lo que jamás he merecido, pero yo puedo al menos hacer todo lo posible por ser un poco
menos indigno de él. Dios mío, en Ti confió para tratar cada hora del día de alcanzarlo. Amén.
Reflexión 42:
GENEROSIDAD CON DIOS:

ESCUCHA LA VOZ DE DIOS


Hijo, no te preocupes por la consolación espiritual o por los buenos sentimientos interiores en tus plegarias
u obras buenas. Sírveme por amor, como yo quiero. Deja que tu servicio dependa de mi palabra y no de
sentimientos placenteros que yo te envíe. Si yo no diera interior consolación y buenos sentimientos por
cada una de las obras que hicieras, muchos mundanos guardarían mis mandamientos por disfrutar de esos
dones.

Mientras estés en este mundo, serás tentado por el ciego egoísmo de la naturaleza humana caída. Vuélvete
a Mí con frecuencia y deja que yo te guíe en tus intereses. Yo quiero que tus cosas marchen
inteligentemente y bien ordenadas, Ponme por encima de todas las cosas y personas creadas.

Yo soy mucho más grande que todas mis palabras. Soy el más grande tesoro. Búscame por encima de
todo. Considera lo que significo en tu vida. ¿Qué espero Yo de ti? ¿Qué tengo yo derecho a esperar de ti?
¿Puedes tu respirar o dar el próximo paso sin mi consentimiento y asistencia? ¿Podrías existir un instante
más si yo no te diera mi asistencia? Solo debes darme el servicio inteligente que me debes teniendo en
cuenta estos hechos y viviéndolos en cada momento del día.

La consolación espiritual es solo un don temporal para animar a quién esta empezando a tratar de
servirme. Este regalo no está a disposición de nadie y no será dado a nadie que lo busque por sí mismo.
Esa persona se parece demasiado a quienes buscan toda la felicidad en los placeres, satisfacciones y
honores de este mundo. Un recuerdo inteligente y franco de tu indignidad te ayudará a hacer tus oraciones
y obras buenas sin esperar consolaciones espirituales en retorno.

REFLEXIONA
Jesús tiene razón. Yo no merezco ni el último de sus dones. Le debo tanto que debería estar muy contento
de hacer su voluntad sin esperar más dones de Él. Nada me debe Él a mí y yo le debo todo a Él. Si escoge
dejarme en la miseria y en la tristeza no me hará ninguna injusticia, puesto que todo el que soy y tengo se
lo debo a Él.

ORA CONFIADAMENTE
Señor sé que nunca me tratarás con la austeridad que merezco si trato realmente de mejorar en mi vida. Tú
nunca te dejas ganar en generosidad. Cada deseo santo y cada buena obra de mi voluntad serán
recompensados cien veces más allá de lo merecido. No me dejarás en mi miseria, no en mis tinieblas más
de lo que sea necesario para mi bien. Poco te he servido, pero necesito y espero tu ayuda. Permíteme que
busque tu santa voluntad buscándote a Ti primero y a tus dones solo en cuánto Tú quieras dármelos.
Amén.
Reflexión 43:
PRUEBAS DIARIAS DEL HOMBRE:

ESCUCHA LA VOZ DE DIOS


Hijo, quién no conoce mi plan se desinfla fácilmente por las pruebas de esta vida terrenal. La vida en la
tierra es breve. Apenas hay momentos libres de preocupaciones. Los hombres mientas están en la tierra,
están manchados por los muchos pecados, arrastrados por los muchos deseos, esclavizados por los
temores, puestos en peligro por las muchas contingencias, distraídos por las muchas curiosidades,
entretenidos con vanidades, sometidos a errores, agotados por trabajos, turbados por tentaciones,
asqueados de placeres, atormentados con mil deseos.

Rara vez faltan las aflicciones y las penas. Estás rodeado por infinidad de trampas y enemigos. Apenas
desaparece la angustia de una tentación cuando ya está otra encima. A menudo aún esta la primera cuando
hace aparición la segunda. Puedes admirarte de que puede haber quién ame esta existencia terrenal con
tantas desgracias, angustias y miserias. Pese a todo ello, muchos aman esta vida y buscan toda satisfacción
en ella.

Pero mis leales servidores pueden sonreír y estar contentos en medio de todas estas sombras y pruebas.
Ellos no fijan sus ojos en la prueba presente sino en el gran fin de esta vida terrena. Ven detrás de las
obscuridades presentes el horizonte luminoso del día eterno que pronto despuntará. Después estarán ya
libres de toda esclavitud de los deseos irracionales y de las ambiciones egoístas. Después será el gozo
perfecto de la vida plenamente satisfecha. Poseerán al fin la verdadera libertad celestial sin límites, sin
fatigas del cuerpo y de la mente: La libertad que solo Yo os puedo dar.

REFLEXIONA
La vida sobre la tierra es corta y llena de insatisfacciones y necesidades. Pero Dios es, pese a todo, un
padre amante. Todo padre sufre cuando tiene que educar a su hijo. El hijo aprecia la sabiduría y el amor de
su padre solamente cuando ha alcanzado una virtud robusta y un carácter firme. Sucede lo mismo con
nosotros. No nos hacemos ni idea de lo débiles que somos hasta que no sentimos las exigencias de la
comodidad, el egoísmo o la vanidad. Nunca sospecharíamos lo que realmente somos si Dios no nos diera
una vida de pruebas en esta tierra. Dios me ha hecho para el cielo, una recompensa que no puedo ni
empezar a imaginar. Él demanda que haga algo para que sea un poco menos indigno del cielo mediante un
esfuerzo en la tierra para participar en algo de su santidad y bondad.

ORA CONFIADAMENTE
Mi amante Dios, ¿qué saco de creerme mejor de lo que en realidad soy? Señor, si no fuera por las pruebas
que me mandas no podría llegar a conocer cuán egoísta y vanidoso soy en realidad. Te doy gracias, Señor,
por haberme dado la oportunidad de lograr en la práctica lo que en teoría quiero. Las obras son la prueba
de la verdadera virtud. Cada pena o molestia ha sido puesta o permitida por tu infinita Sabiduría. Tú sabes
que necesito hacerme una persona verdaderamente santa. Algún día te daré las gracias de las muchas
pruebas que ahora me resultan demasiado pesadas. Hazme lo suficiente desprendido para que siga tus
mandamientos lo mismo que si mi vida transcurre en la prosperidad que en la miseria. Trátame como
quieras y esto será lo mejor para mi. Amén.
Reflexión 44:
LAS TENTACIONES VIENEN DE TODAS PARTES:

ESCUCHA LA VOZ DE DIOS


Hijo, el demonio nunca duerme, ni esta muerta aún tu carne. Lo que quiere decir que siempre has de estar
listo para la batalla, puesto que en todas partes hay enemigos que están preparados para atacarte. Nuestro
enemigo antiguo se opone a todo lo bueno. Nunca se fatiga en su faena de tentar al pecado. Vela día y
noche con la esperanza de que algunas almas caigan en sus trampas. Estate en guardia contra las
tentaciones. Ora para alcanzar la gracia de superarlas.

Ninguna persona está enteramente libre de tentaciones aquí en la tierra. Tú tienes en ti mismo la fuente de
las tentaciones, puesto que has nacido de la concupiscencia. Concupiscencia del cuerpo es la tentación
ciega de tus sentimientos y apetitos animales en busca de satisfacción, sin atender a la inteligencia ni a la
razón. Concupiscencia del alma es un irracional y nada racional apetito que busca favorecerse a sí mismo
sin tener en cuenta lo que es justo y verdadero.

Cuando una tentación o prueba se va, viene otra. Mientras estés en esta tierra las tendrás siempre que
sufrir porque el hombre ha perdido la felicidad original que Dios había planeado darle también en este
mundo.

REFLEXIONA
Cada hombre lleva sus propias tentaciones. Muestra lo que es en su conducta frente a ellas. Si hace todo lo
que puede por apartarlas de las ocasiones de la vida diaria, es una buena persona. Los otros, por el
contrario, juegan con las tentaciones y caen en pecado. El mayor enemigo del hombre es su propio y
espontáneo irracional yo. El más grande aliado del enemigo contra mi verdadero bien es este loco yo
egoísta. El demonio apela siempre a él prometiéndole u ofreciéndole algo que le parezca bueno. Si yo
conozco la manera de pensar de dios conoceré en seguida el cebo del demonio y con la ayuda de Dios,
controlaré mis deseos irracionales y loco egoísmo.

ORA CONFIADAMENTE
Amante Padre y Omnipotente Dios, tengo que reflexionar seriamente sobre tu santa honradez al tenerme
en lo que realmente soy. Que no sea ciego a mis faltas y flaquezas. No quiero ningún trato de favor si no
es el fundamental de todos: que me des la vida eterna por el cumplimiento de los mandamientos en mi
vida de cada día. Quiero evitar y contradecir todo lo que ponga en peligro mi salvación eterna. Deseo
practicar un autocontrol y propia mortificación para tener un gran dominio sobre mis pasiones ciegas e
irracional egoísmo. Sólo con este control puedo esperar superar las tentaciones, grandes o pequeñas, de
cada día. Amén.
Reflexión 45:
NO HAY TIEMPO NI LUGAR LIBRE DE TENTACIONES:

ESCUCHA LA VOZ DE DIOS


Hijo, en esta vida nadie es tan perfecto, tan santo que no experimente tentaciones en un tiempo o en otro.
Nunca estarás enteramente libre de ellas. Ninguno de mis santos tuvo una oración tan sublime o fue tan
iluminado por mi gracia que no sufriera tentaciones de una manera u otra.

Mis santos pasaron por muchas tentaciones y pruebas y sacaron provecho de estas experiencias. Los que
no quieren enfrentarse y luchar contra las tentaciones pronto se apartarán de Mí. No te descompongas
porque las cosas no vayan como tú quieres. Mira las pruebas como parte de tu vida. Sopórtalas
pacientemente como algo que tú no puedes remediar. Esto te demostrará que eres un verdadero seguidor
mío.

Las tentaciones te pueden venir a cualquier hora del día y de la noche. Unas vendrán de ti mismo, otras de
las cosas y personas que están a tu alrededor. No hay tiempo ni lugar libre de tentaciones. Y cada persona
tiene las propias suyas. Pese a todo yo siempre estoy dispuesto a echar una mano, preparado a dar fuerza
celestial a los que quieren luchar.

En el tiempo de la tentación tienes una gran oportunidad de probar más desinteresadamente tu amor hacia
Mí. Ahora es cuando tienes la ocasión de elevarte sobre tu “yo” y alcanzarme a Mí.

REFLEXIONA
La tentación es lote de cada hombre. Nadie esta libre de ellas. No hay sitio en el mundo, ni momento del
día seguro contra las tentaciones. La naturaleza humana nunca se siente enteramente satisfecha y el
demonio nunca duerme. Entre ambos está Cristo con los brazos extendidos hacia mí. Yo caminaré recto
hacia Él, dominando mis pensamientos y controlando mis deseos, palabras y acciones. En Él solo
encontraré gozo que llene y felicidad completa. Esta atracción continua dentro y fuera de mí, hacia y
contra Cristo, es lo que hace de la vida una prueba diaria.

ORA CONFIADAMENTE
Querido Padre Celestial, ninguna de las cosas que hoy busco tiene tanta importancia como tu divina
voluntad. Solo tú me puedes mostrar el camino para la felicidad eterna del cielo. Ayúdame a ser un fiel
seguidor de Jesús, Tu Divino hijo. Quiero hacerle a Él, Rey de mi corazón con mi lealtad a su ejemplo.
Hazme cada día más semejante a Él, No hay fin más alto. Pero no me puedo contentar con menos de eso.
Mi felicidad verdadera lo pide. Su generosidad sin límites demanda esto de mí. Espero con tu ayuda darle
al menos, la lealtad de un esfuerzo cotidiano. Amén.
Reflexión 46:
DOS CAUSAS INTERIORES DE TENTACIONES:

ESCUCHA LA VOZ DE DIOS


Hijo, tentaciones muy serias pueden proceder de la falta de decisión o de la falta de confianza en Mí. Un
barco sin timón es llevado de un lado para otro por lo vientos y mareas. Así también, cuando un hombre
no se determina a trabajar por las virtudes que necesita o si abandona sus buenas intenciones, pronto es
tentado por sus faltas y flaquezas.

Yo soy el Señor, que da fuerzas en el tiempo de la tentación. Ven a Mí cuando las cosas no te salgan bien.
A menudo te son retiradas la luz y la fuerza celestial porque eres remiso en hacer uso de la oración. ¡Con
cuanta frecuencia, en lugar de buscar paz en la oración, la buscas en las consolaciones mundanas y
pretendes sacar tu felicidad de las satisfacciones naturales y de las ocupaciones temporales!

Encontrarás poco consuelo hasta que adviertas que Yo estoy dispuesto a ayudar a los que confían en Mí.
No hay asistencia perfecta, ni avisos útiles, ni remedios definitivos, sino son bendecidos por mi amor y
robustecidos por mi presencia.

REFLEXIONA
¡Falta de determinación! ¡Cuántas veces caigo en las mismas faltas porque no estoy enteramente
determinado a acabar con ellas! Una resolución a medias es poco mejor que no hacer nada. Debo estar
enteramente decidido a luchar contra mis faltas con una acción eficaz no solamente con vagas
resoluciones. Debería de mantener la decisión por encima de todos los fracasos repetidos. La insuficiente
confianza en la ayuda de Dios es otra de las razones de falta de progreso en la virtud. Dios no ayuda a un
hombre de poca confianza. Debo ganar su ayuda con humildes oraciones, firme confesar y un sincero
esfuerzo de lucha contra las caídas.

ORA CONFIADAMENTE
Señor, ¿dónde está mi verdadera confianza en esta vida? De entre todas las cosas y personas del mundo,
¿de cuál puedo esperar consuelo? Ciertamente de Ti, mi Señor y mi Dios, cuya misericordia no tiene
límite. ¿Me sentiré yo completamente bien si no es en Ti? ¿Podré yo sentirme pobre estando cerca de Ti?
Donde Tú estás, está el cielo, y donde Tú faltas solo hay muerte e infierno. Que viva yo siempre en
estrecho contacto contigo a través de mi vida diaria. En unión contigo haré mis propósitos con un honesto
esfuerzo por seguirlos. Amén.
Reflexión 47:
EL PROGRESO DE LAS TENTACIONES:

ESCUCHA LA VOZ DE DIOS


Hijo, vigila de un modo especial al comienzo de las tentaciones. Te será más fácil vencer al enemigo si
resistes desde el primer momento. Páralo a la puerta, en el momento mismo en que llame. Habla con
sabiduría el que dice: “Resiste al comienzo, es demasiado tarde cuando el demonio se ha colado dentro de
ti por un descuido”. Aunque nunca es demasiado tarde para volverse hacia mí, resultará más difícil cuando
más hilo des a la tentación.

Primero es un simple pensamiento lo que se desliza en tu mente. A este le sigue una vívida imaginación.
Después viene la delectación, la mala inclinación y finalmente el consentimiento. Así, poco a poco, el
enemigo logra plena entrada en tu alma, porque no se le resistió al comienzo.

REFLEXIONA
Muchas vidas arruinadas se pudieron prevenir al principio, solo con haber seguido este consejo. Muchos
coquetean demasiado con un placer, tratando de disfrutar de él lo más posible sin caer en el pecado que
hay en él. Tanto le cuesta a la gente perder algo. Y de esta manera se aproximan paso a paso al pecado
actual, hasta que este, como araña expectante, los alcanza y los devora.

ORA CONFIADAMENTE
¡Oh Espíritu Santo, mi Dios y Santificador!, espero de ti la sabiduría de reconocer el pecado antes de que
me conquiste. Aumenta mi fuerza para resistir a cuanto lleve al pecado. Tendría menos pecados hoy si me
hubiera apartado al mismísimo comienzo. Con tu ayuda espero hacer lo que se necesario para desbaratar
las tentaciones de mi vida diaria. Amén.
Reflexión 48:
ENFRENTÁNDOSE A LAS TENTACIONES:

ESCUCHA LA VOZ DE DIOS


Hijo, con mi ayuda iras gradualmente superando las tentaciones que te molestan a diario. Nunca estarás
enteramente libre de ellas. Mientras estés en este mundo tendrás que guardarte de ellas. A tu alrededor hay
multitud de cosas que hacen de reclamo a tu debilidad. Cuando no las puedas evitar, sopórtalas con
paciencia mejor que con ansiedad o excesiva severidad. Corrige y remedia lo que puedas. En cuanto a las
cosas que no tengan remedio en tus manos, sopórtalas con paciencia por Mí.

A no ser que tengas tus ojos puestos en Mí, no podrás mantenerte entre las apreturas de esta guerra diaria.
Sin mi ayuda nunca alcanzarás la recompensa de los santificados en el cielo. Enfrentándote a la vida con
valor, con una firme determinación, toma medidas muy concretas para vencer las tentaciones en tu vida
diaria. Yo daré mi fuerza celestial a quién se esfuerza honestamente. El perezoso cae en una miserable
derrota.

Algunos se esfuerzan por salirse de todas las tentaciones y aun así caen en pecado. Quién lucha no solo
vencerá las tentaciones. A donde quiera que vayas siempre encontrarás ocasiones de pecado. Serás más
fuerte que los enemigos de tu alma por medio de la humildad, paciencia y una acción bien determinada.

REFLEXIONA
La paciencia me ayudará a mantener la calma en medio de mis tentaciones y dificultades. Lo cual me
ayudará a pensar más limpiamente. Y como consecuencia me resultará más fácil volverme a Dios cuando
lo necesite. La humildad me ayudará a admitir mi debilidad y mi nada. Lo cual me hará menos irritable y
menos resentido por mis fracasos. Estas dos virtudes me ayudarán a tener paz en medio de mis luchas.
Después con un plan bien definido, puedo proceder contra las faltas y superar mis tentaciones.

ORA CONFIADAMENTE
Jesús, con tu ayuda espero hacer en cada día lo que pueda para superar mis faltas y aumentar mis virtudes.
Cuando se trate de cosas superiores a mis posibilidades y no me quede otra cosa que sufrir la pena y
malestar, haz, Señor, que vea tu divina Providencia llevando mi vida por ese camino. Que acepte mi cruz
con paciencia y humildad. Nunca me detendré en mi esfuerzo. El resultado lo dejo en tus manos. Amén.
Reflexión 49:
LA TENTACIÓN COMO MAESTRA

ESCUCHA LA VOZ DE DIOS


Hijo, cuando un hombre de buena voluntad es atacado por malos pensamientos e inclinaciones debe
entender más profundamente cuánto me necesita. Impresiona nuestra debilidad cuando tratamos de llevar
una vida santa.

Si comprendes que la perfecta seguridad y la paz no están en tus manos en este mundo, encontrarás la vida
más atractiva. La muerte aterra menos porque es la entrada al cielo. Incluso somos capaces de pedírsela a
Dios para que nos libre de las tentaciones que nos rodean.

¡No temas! ¡Ten confianza en Mí! Después de esta tormenta serás más fuerte que antes. Yo estoy cerca
para ayudarte a crecer, a crecer más en santidad y en el bien. Saldrás de la tentación mejor y más avisado.

¿Hay algo difícil para Mí? ¿Faltaré yo a mis promesas? Permanece firme y lucha contra las tentaciones.
Ten paciencia. Se valeroso y aguarda mi gracia. Tus miedos tienen que quedar superados por la confianza
y la fe robusta en mí. Cuando estés preparado vendrán a ti consolación y ánimo.

REFLEXIONA
Las tentaciones tienden a entristecer y desanimar el alma al hombre bueno. Con todo, lo único que tiene
que hacer es volverse a Dios en demanda de ayuda y hacer lo que pueda. Haciendo esto no debe temer, ni
lamentarse o desanimarse. Su sabiduría y paz aumentará al ver el carácter pasajero de las pruebas.

ORA CONFIADAMENTE
Señor, en todas las pruebas y tentaciones fijas lo ojos en mi. Así será mucho más fácil ver la falsedad de
los atractivos terrenales. Me niego a estar triste, o desanimado por las tentaciones. No me sorprendo de la
rebelión de mis apetitos y deseos ciegos. Porque contigo espero luchar y conquistar todas las tendencias
desordenadas. Amén.
Reflexión 50:
Las tentaciones prueban el valor del hombre.

Jesucristo:

Hijo, las tentaciones te son a menudo muy provechosas, pese a todo lo desagradable y turbadoras que te
resulten. Te ayudan a acabar con tu loco orgullo al demostrarte tu debilidad. Sin tentaciones podrías caer
en una autosuficiencia muy peligrosa. Te enseñan muchas cosas que te ayudan a acercarte más a mí en tu
vida diaria. Purifican tu alma forzándote a resistir el mal practicando la virtud. Turbaciones, aflicciones y
oposiciones te dan oportunidad de merecer para el cielo.

Las tentaciones señalan el peso real de tu virtud. A menudo no te conoces a ti mismo. Hacen que tu virtud
reluzca y te ayuden a ver tus progresos en el espíritu. Cualquiera obra bien cuando las cosas salen a
medida de sus deseos. Pero el hombre que conserva su paciencia en el tiempo de la adversidad puede
esperar con derecho una recompensa de Mí.

Piensa.

Si nunca hubieras sido tentado, no conocerías mi valor real. No puedo estar seguro de mi sinceridad y de
mis motivos. En el bien hasta que los he probado con otras. Cualquiera puede hablar de lo que es bueno,
peor la única prueba de la bondad es vivir una buena vida. Me debería de avergonzar por haber caído en la
cuenta tan tarde de los mal que he aprovechado los dones de Dios. Mis tentaciones me dan una
oportunidad para probar si realmente es eso lo que quiero cuando digo que tengo que alabar a Dios en
todas las cosas.

Oración:

Padre de toda la verdad y bondad, haz que sea leal a tu santa voluntad. Tus caminos son los únicos y los
que debo de seguir. Dame la gracia de ver mis faltas y de quitarlas por tu amor. Prefiero morir antes que
ofenderte con el pecado en cualquier tentación que sea. Amen.
Reflexión 51:
Variedad de tentaciones:

Jesucristo:

Hijo, algunos tienen que soportar tentaciones muy serias cuando se resuelven a seguir de veras. Otras
padecen al fin de su vida. Los hay que están llenos de tentaciones todo a lo largo de su vida terrena.

Algunas personas son tentadas ligeramente de acuerdo a mi sabiduría y justicia. Yo tengo consideración
con los méritos y las fuerzas de cada uno y planifico todas las cosas para la salvación de los que aman mi
Ley.

Algunas personas escapan sin serias tentaciones y están aquejadas continuamente por otras pequeñas en su
vida diaria. Lo permito así para que se humillen a sus propios ojos. Siendo concientes de su propia
pequeñez en su vida diaria. Lo permito así para que se humillen a sus propios ojos. Siendo concientes de
sus propias fuerzas y por loo tanto no caerán en pecado mortal.

Cuando experimentes tentaciones no temas ni desesperes. Pide mi ayuda y haz después lo que puedas para
quietar la tentación. Acuérdate de aquellas palabras inspiradas: “Fiel es el Señor que no permitirá que
seamos tentados más allá de nuestras fuerzas, sino que con la tentación nos dará también el modo de
vencerla”.

Piensa.

No puedo ser tan egoísta que piense que soy el único que piense que tengo tentaciones. No hay mejor
muestra de lo pobre hombre que s alguno que advertir que se considera con mayores pruebas y tentaciones
que los demás. Cada hombre tiene su cruz y algunos la tienen que llevar mucho más de lo que yo hubiera
querido. Y con todo no es este un motivo cristiano de paciencia y perseverancia en tiempo de prueba y
tentación. El verdadero seguidor de Cristo tiene razones más elevadas para llevar su prueba, Sus razones
son sobrenaturales. Quiere librarse del infierno, de un largo purgatorio. Desea reparar por los pecados
pasados con sus esfuerzos actuales. Quiere agradar a Dios venciendo sus faltas, aumentando sus virtudes.
Busca ayudar a las almas santas del purgatorio. Trabaja para obtener alguna gracia especial para si misma
o para otra persona. Incluso lucha por asegurar y aumentar su corona en el cielo, Finalmente puede que
tanga el más alto de toso los motivos: dar a Dios una prueba generosa de amor abrazado las cruces
sencillamente por ser parte del plan de Dios omnisciente.

Oración:

Jesús, haz que haga todo lo posible pro vivir con lealtad hacia Ti, ni Rey. No quiero compadecerme ni
tener piedad de mí. Deseo con tu ayuda, enfrentarme a cada tarea o prueba y manejarme en ella como tú
quieres. Las tentaciones de la vida diaria pueden hacer de mí un gran santo. NO me importa la turbación,
cono que quiero enfrentarme cada hora con los deberes y trabajos por amor a Ti. Que trabaje, descanse,
me divierta y sufra como Tú quieras. Amén.
Reflexión 52:
Oración, el primer remedio para la tentación:

Jesucristo:

Hijo, enfréntate a la vedad y no des la espalda a los hechos. Mientras estés en este mundo no estarás libre
de luchas y tentaciones. Ya lo dice mi Palabra escrita: “La vida del hombre sobre la tierra es lucha” De
todos modos no te familiarices tanto con las tentaciones, sino guárdate siempre de ellas por la plegaria y el
auto negación. De esta manera nunca te atacará el demonio por sorpresa. El nunca duerme, sino como león
hambriento anda buscando a alguien a quien devorar.

Oración para pedir luz.

Ilumíname, ¡oh buen Jesús!, con los resplandores de la luz eterna y aparte de mí la oscuridad de mi
corazón. Que vea entre mis alocados pensamientos y ayúdame a remplazarlos por pensamientos buenos y
santos. Defiéndeme contra las malas bestias que vienen a mí en forma de deseos atractivos. Infunde en mí
con tu poder verdadera paz interior. Tu alabanza resuene en el interior de mi alma como en un templo. Di
al mar: “Quieto”, ordena al viento huracanado: “Enmudece” y reinará una gran calma en mi alma. Amén.

Plegaria contra las tentaciones:

Señor, Dios mío, no te apartes de mí. Mira por mí y ayúdame. Malos pensamientos se han levantado en
mí, contra mí y han llenado de aflicción mi alma. ¿Cómo puedo pasar entre ellos sin que me aprisione?
Muéstrame como puedo cruzar por encima de ellos. Tu has dicho: “Yo iré delante de ti y humillaré a los
grandes de la tierra. Abriré las puertas de las prisiones y te daré a conocer los secretos ocultos”. Señor, haz
como dices y quita todos estos pensamientos y deseos bajos de tu presencia. Amen.
Reflexión 53:
Buscando consejo:

Jesucristo:

Hijo, los principiantes y los faltos de experiencia en el camino de la santidad pueden ser engañados
fácilmente a no ser que sean dirigidos por los consejos de un hombre sabio.

Cuando las tentaciones turben tu paz interior, busca consejo en un director espiritual. Es preferible seguir
los consejos de un hombre experimentado que las propias ideas. El propio Satanás es capaz de citar las
Escrituras para su provecho. Puede también imitar mis inspiraciones en muchas cosas. No es fácil siempre
descubrirá sus engaños. Buenas intenciones solas no son sufrientes para hacerte santo. Debes ir recto por
el camino emprendido.

Yo te he dejado mi Iglesia como guía segura de mi verdad. Te he dejado también mi ejemplo y mis
ejemplos y las palabras de mis santos. No te avergüences de aprovechar estas ayudas. No desaproveches
los proverbios del pasado. Están cargados de la sabiduría de la experiencia.

Después de que has recibido un aviso, se lo suficiente inteligente y humilde como para seguirle. Trata de
descubrir la fuente de tus tentaciones, para que puedas arrancarla de tu vida. Un hombre que ofrece solo
resistencia externa de las tentaciones, sin remover las causas de ellas, hará poco progreso en la virtud. En
seguida tornarán a él y su situación será loa misma y aun quizás peor.

Piensa.

El orgullo y el miedo impiden a muchos el que busquen un consejero que les es necesario. En
consecuencia sufren heridas mayores por ir solos en la vida. El tener un confesor da humildad al tener que
admitir las propias faltas y limitaciones. Da coraje por hacer algo más de lo pedido. ¿Seré tan loco como
para despreciar la ayuda de quienes pueden ayudarme? En segundo lugar, no puedo negar a los demás la
comprensión y ayuda que yo desearía de encontrarme en un apuro.

Oración:

Padre de la Sabiduría, Señor de la Misericordia, haz que nunca sea tan orgulloso y loco para que rechace
un concejero. Quiero vivir inteligentemente, si el consejero acrecienta mi sabiduría en la acción; dame el
coraje y sabiduría para admitirlo. Espero, de esta macera, evitar, o al menos disminuir las tentaciones de
mi vida diaria. Amén.
Reflexión 54:
Tentaciones contra la fe:

Jesucristo:

Hijo, ciertas gentes están fuertemente tentadas a no creer lo que enseña la Iglesia. Dichas tentaciones esta
con frecuencia producidas por el demonio, enemigo de la verdad. Perturba a mis seguidores
avergonzándoles y haciéndoles temer por su manera de vivir. A los pecadores habituales ya no les lleva
por este camino porque ya los tiene cogidos con otros pecados. Satán inspira a muchas doctrinas falsas
entre los que no conocen mi Iglesia. Bajo la apariencia de bien, estos errores atrapan a muchos. Atérrate a
la iglesia y nunca caerás en las trampas de Satanás. Si no estás de acuerdo con la palabra de la Iglesia,
discrepas de mi Palabra.

Si tienes este tipo de tentaciones no te turbes ni angusties. No dejes a las dudas que roben la paz de tu
alma. Sencillamente pon tu confianza en mi Iglesia y el enemigo será puesto fuera de combate. Cree en
mis Apóstoles y en sus sucesores. Yo garantizo que no pueden caer en el error: “Quién a vosotros escuche
a Mi me escucha”, les dije. Su tarea es continua hasta el fin de los tiempos.

Sométete por la fe. Quiero que conozcas mi verdad. Yo añadiré sabiduría a tu alma por medio de la gracia
cuando sea necesario. No exijo grandes conocimientos, ni un conocimiento profundo de mis santos
misterios. Solo pido una fe robusta en mi palabra y una vida virtuosa.

Piensa.

Una investigación honesta y humilde de la verdad es cosa buena mientras no quiera apartarme de la
doctrina tradicional de la Iglesia de Cristo. De todas formas debo recordar que la razón y la investigación
humana no pueden pensar hasta el fondo del misterio que Dios ha revelado. Tengo que sometes la razón a
su palabra. Es una locura pretender creer que solamente yo soy capaz de entender. ¿Es que no puede Dios
saber y conocer cosas que están muy encima de mi limitada inteligencia? ¿Me inducirá a error el Autor de
la verdad? Razones de peso piden asentimiento a las cosas que dios ha revelado, sin que importe hasta
adonde soy capaz de comprender eses realidades.

Oración:

Señor, si hay tantas cosas en la tierra que soy incapaz enteramente de comprender, ¿Cómo voy a entender
las cosas del cielo? La razón humana es débil y limitada. Puede equivocarse fácilmente. Pero la verdadera
nunca se equivoca. Esta fe se basa en tu Palabra y tu Palabra es la verdad. Si tus obras fueran tales que
pudrían ser entendidas fácilmente por mi limitada razón no podrían ser llamadas divinas y prodigiosas. No
puedo dudar de los que me dice la Iglesia puesto que sé como eres Tú quien me habla por medio de ella.
Amén.
Reflexión 55:
Fe en la sagrada Eucaristía:

Jesucristo:

Hijo, abstente de una inquisición curiosa e inútil sobre la realidad de mi presencia en la Eucaristía. En la
última cena cambie el Pan y Vino en mi Cuerpo y Sangre. Y después le di poder a mis Apóstoles para
hacer lo mismo que yo había hecho. Ellos a su vez trasmitieron ese poder y el modo de realizarlo a sus
sucesores. Y así hoy tienes el privilegio de recibirme en la Sagrada Comunión. Lo que Yo hice es un
hecho histórico, pero un hecho que supera toda capacidad de comprensión y demasiado prodigioso para
que podamos comprenderlo plenamente.

No hay hombre capaz de comprender la gloria de mis acciones. Dios, el Eterno y Omnipresente, fuente de
un Poder sin límites, hace cosas demasiado grandes para ser entendidas por el hombre. Pide un aumento
de Fe y Amor. Estas dos virtudes tiene el poder para arrastrarte hacia Mí en el Santo Sacramento.

Bendito el que tiene la suficiente simplicidad para no ser continuamente atormentado con multitud de
preguntas sobre lo que no puede encontrar solución. ¿No basta al hombre con Mi Palabra? Hay quines se
han perdido por un orgullosos afán de investigar. Ten la sabiduría para hacer el uso frecuente de este
sacramento. Me conocerás mejor por medio de las gracias que se derivan de la Santa Misa y de la
Comunión.

Piensa.

Debería vivir mi vida con una fe simple e incapaz de dudas en la palabra de Dios, acercándome a la
comunión humilde y reverentemente. Allí El esta esperándome. Aunque no lo puedo comprender, El me
da permiso para ir a El. Puedo todo y no es capaz de engañarme. Cristo, Dios y Salvador, van con los
humildes, se revela a los simples, y da su entendimiento a los pobres de espíritu. Enseña el profundo
sentido de sus palabras a los entendimientos puros. Y quita su favor de los orgullosos y curiosos.

Oración:

Jesús, dame las gracias de la simplicidad, de manera que reciba tus palabras con confianza y sin la
oposición de innecesarias dudas. Probaste tu poder a lo largo de la vida en la tierra, tu palabra es la
Palabra de Dios y la creo sin preocuparse de si la entiendo o no. Eres la Fuente de Toda la verdad y
bondad. Ponga toda mi fe y mi confianza en Ti. Amen.

.
Reflexión 56:
La Sagrada Comunión:

Jesucristo:

Hijo, no dudes de tu preparación para recibirme en la Sagrada Comunión. No es necesario tener Santos
sentimientos y Devotos afectos. Haz lo que puedas y ven. Sigue el consejo de un docto confesor y
despreocúpate de ansiedades y escrúpulos. Demasiadas reflexiones pueden echara perder mi gracia. Quita
toda angustia. Te puede apartar tu atención de Mí de manera que no oigas mi voz en tu alma.

Pero evita también el otro extremo, esto es, no recibirme sin una adecuada preparación. No espero que
seas perfecto, pero espero que hagas lo que puedas para serlo. Por miserable que seas, si haces lo que
puedes, me doy por satisfecho.

Algunos se me entregan tan a medias que apenas hay diferencia en ellos si me reciben que si dejan e
hacerlo. Confiesan y Comulgan si pensarlo. No están interesados en unirse conmigo. Algunos hasta
deliberadamente me huyen para no aprender sus obligaciones. No quieren cambiar. Si van al infierno es
porque se negaron a dejarse ayudar por Mí. Haz lo que puedas pero con la seguridad de que no te estas
engañando a ti mismo. Haz lo que puedas y no temas a los hombres ni a los demonios porque yo estoy
contigo.

Piensa.

Si soy sensato, seguiré este consejo tan maravilloso. Si hago loo que puedo no hay motivo alguno para
temores ni ansiedades. No hay motivo alguno para estar apartado de Cristo, en la Misa y en la Comunión.
Es peligroso alejarse de El por mucho tiempo. Pero me debo precaver contra el autoengaño. Si me
preocupo de lo que conviene o deja de convenirme, fallare a Cristo muchas veces y esquivaré su voluntad
en muchas cosas. El sabe y quiere lo mejor para mí.

Oración:

Jesús, te preocupaste de dejarme tus santos Sacramentos. En ellos te olvidas de mis pecados y me das
sabiduría y fuerza. No quiero despreciar este medicamento y comida celestial. Ni dejare desaprovecho a
estos dones por falta de cuidado o por tibieza en la entrega. Con tu ayuda espero vencer mis faltas y
aumentar mis virtudes en mi vida diaria. Amén.

.
Reflexión 57:
No perder La Sagrada Comunión:

Jesucristo:

Satán sabe la fuerza y la luz que Yo doy a los que me reciben devotamente en l Sagrada Comunión. Por lo
que se preocupa por todos los medios de apartar a la gente lejos de Mí. Trama sus mayores ataques y sus
mayores insinuaciones contra algunas personas cuando piensan ir a comulgar.

Yo he revelado en el libro de Job que el mal espíritu tiene permiso para tentar a los hombres. Así es como
molesta a mis seguidores con sus maldades. Trata de hacerles temerosos y ansiosos, o por el contrario
presuntuosos y descuidados. De este modo confía en debilitar su lealtad contra Mí. Manteniéndolos
apartados de la Sagrada Comunión espera corromper su fe y su caridad.

No tienes que temer a Satanás ni a sus seguidores. NO atiendas no a lo más mínimo ni a sus seguidores no
a sus trucos, ya que son tan feos y sucios. Arrójaselos a la cara. Le duele ser despreciado y ridiculizado.
Nunca seas tan tonto como que llegues a omitir la Sagrada Comunión a causa de malas imaginaciones y
sentimientos. Procura pensar en otras cosas y ven con confianza.

Piensa.

Mi voluntad y mis esfuerzos continuadamente muestran mi ser real. Imaginaciones y sentimientos no


pertenecen a mi real “yo”, a no ser que voluntariamente las acepte. Permaneciendo unido a Cristo en la
Santa Comunión recibiré la fuerza para vencer las Tentaciones. Acudiré a Cristo y la Comunión con toda
la frecuencia que pueda.

Oración:

Jesús, siempre presente en la sagrada Eucaristía, Tu quieres venir a mí con mayor frecuencia posible, para
darme luz y fuerzas para la batalla diaria. No dudaré en acudir a Ti. Líbrame de todos los deseos
pecaminosos. Con tu ayuda espero vencerlos o al menos despreciar las imaginaciones irracionales y los
ciegos apetitos de mi naturaleza más baja. Yo no los quiero. Solo te quiero a Ti y Tu Santa Voluntad.
Amén.

.
Reflexión 58:
La tibieza espiritual:

Jesucristo:

Hijo, la tibieza espiritual es otra manera de llenar el servicio de Dios a media maquina. Un hombre tibio
no huye por lo común de su deber, pero no esta entusiasmado con él. Hace lo menos que puede y de un
modo rutinario. Ha perdido el gozo de servirme.

Cuando debe de crecer tu ardor en mi servicio, consulta a tu director espiritual. Te estás deslizando a una
situación muy peligrosa de la que puede depender tu futrillo. El alma tibia tiene miedo a esforzarse.
Empieza a buscar consuelo en las cosas humanas que la rodean. El tibio ha contraído una enfermedad que
trae la muerte espiritual. Los gérmenes que hay que matar en su alma son la pereza y amor al mundo.

Piensa.

La tibieza ataca a la mayoría de los hombres más o menos. En este estado de ánimo se pierde
momentáneamente el entusiasmo y el celo en la obra de Dios y del cielo. El verdaderamente tibio es
solamente el que permite que este estado de ánimo se convierta en un hábito. Y en consecuencia no tiene
ganas de orar y ya teme ni lucha contra las tentaciones como debería hacerlo. El que no supera la tibieza
son su esfuerzo pierde muchas gracias actúales y muchas oportunidades de hacer el bien. Sin caer en la
cuneta se va deslizando e pecados más y más serios por no reconocer las ocasiones de pecado.

Oración:

Protégeme, Señor, contra esta enfermedad. ¿Cómo llegaré al final tan fácilmente si me entibiezco?
¿Buscare la tranquilidad y el descanso en la tierra como si hiciera llegado al cielo? Tengo aún que luchar
contra los enemigos de mi alma y no puedo aflojar en la actividad como si estuviera seguro de todo
peligro de pecar. Señor, déjame que te sirva por medio de la plegaria, el trabajo y la penitencia. Buscare
conocer tu voluntad siempre mejor de manera que te sirva no a mi manera, sino como te giste e Ti. Amen.
Reflexión 59:
Remedios contra la tibieza:

Jesucristo:

Hijo, es visión desagradable para mi ver como los hombres viven mal. Los he creado par la gloria eterna.
Y ellos no caen apenas en la cuenta de lo malo que es descuidar sus obligaciones de cada día o ponerlas
con descuido. Pon atención a tu fin en la vida u mantén ante tus ojos la imagen del Señor crucificado.
Medita en mi vida terrena y duélete si no haces todo lo posible por imitarme.

Cada día deberías de aumentar tu lealtad y esfuerzo en mi servicio. Hoy en día se considera cosa grande si
uno en el entusiasmo del primer momento. Ya se considera notable al que no hace más que evitar los
pecados o si tiene suficientemente paciencia como para llevar las cargas de la vida diaria. La grandeza
estriba no tanto en evitar el mal como en hacer bien positivamente.

Esto me lleva a ver cuantos son lo que tiene a entregarse a medias. Con canta facilidad pierden la
devoción y se cansan de una vida santa a causa de la pereza o de la tibieza espiritual. Debe desear que tu
progreso en la virtud aumente cada día. Estudia los ejemplos de mis santos y aprende a apreciar su
permanente lealtad hacia mí.

Piensa.

Si pensarás a menudo en la muerte que en vivir serías mucho más espabilado por vivir en la virtud. El
oportuno pensamiento de la realidad del infierno y purgatorio, me ayudará a soportar los trabajos, penas y
molestias de esta vida. No me envanecería ni sería tan perezoso o dimidiado en la entrega a Cristo mi Rey.
Debería pensar a menudo en su vida y hacerla modelo de mi vida diaria.

Oración:

Salvador, cada hora del día es una parte importante de mi vida. Ya esté en el trabajo o en el descanso o en
la diversión, puedo hacer todas estas cosas de manera que me conduzcan a la santidad o al pecado. Cada
hora trae su motivo de paciencia, amabilidad, generosidad y demás virtudes. Si tengo una entrega a
medias, no haré el esfuerzo necesario para actuar conforme a los deseos de Dios. Puedo curar esta
enfermedad por medio de un guía espiritual, variedad de oraciones, meditaciones de tu vida y sufrimiento
y el uso frecuente de los Sacramentos. Jesús, dame la gracia de hacer todo lo que haga falta para evitar la
tibieza en mi vida diaria. Amén.
Reflexión 60:
Malos pensamientos:

Jesucristo:

Hijo, no te turbes si eres visitado por malos pensamientos o extrañas atracciones. Mantén firme tu
resolución y tu intención clara. No estás padeciendo ilusiones porque en un momento determinado estés
lleno de gozo y deseos espirituales y poco después estés de vuelta en tus locas bajezas, Algunos de tus
defectos son quemados por mi amor lentamente. Desaparecerán después en la medida en que te
desagraden y no consientas en ellos.

Yo permito al demonio que haga bandarías por la tierra. Continuamente trata de matar tu deseo por Mí.
Trata de muy diferentes maneras de apartarte de cada santo ejercicio. Sólo te puede hacer daño si sigues
sus insinuaciones. En sus intentos por apartarte de Mí te estudia para ver donde flaqueas.

Satán sugiere malos pensamientos para hacerte daño o para desesperarte. Quisiera apartarte de toda
plegaria, lectura espiritual y obra buena. Teme ver a cualquiera haciendo una buena confesión. Si pudiera
te quitaría de ir a comulgar. Y a pesar de todos sus fantásticos y constantes esfuerzos contra ti, carece de
todo poder si te decides por Mí con fe, esperanza y caridad.

Despréciale y no te temas. Fija tu atención en tus ocupaciones diarias. Sigue mis palabras en tu vida diaria.
Busca la gracia y las inspiraciones por la plegaria y la meditación. Piensa a menudo en mi vida. Honra a
mis santos. Detesta y deplora tus pecados. Vigila tus deseos, pensamientos e intenciones. Toma
resoluciones renuévalas a menudo, y haz todo lo que puedas por seguirlas. Para todo lo demás confía en
mi voluntad y amor.

Piensa.

No tengo necesidad de creer que he perdido mi lealtad al Señor cuando no tengo los sentimientos de
devoción que quisiera tener hacia Dios y sus santos. Los santos sentimientos son un favor que Dios da
momentáneamente. Son un preludio del cielo. No pueden ser un regalo permanente en esta vida. No debo,
pues, depender de ellos. Mi verdadera virtud y merito se conocen mejor cuando no están presentes estos
sentimientos. En el ajetreo diario, ¿Cómo he resistido a mis deseos y tendencias irracionales? ¿He tratado
de agradar a Dios en todas las cosas? Si he hecho lo que he podido en todo esto, el demonio no tiene nada
que hacer conmigo.

Oración:

Padre de la Luz, dame la luz de tu gracia cuando mi entendimiento esté dominado por la confusión o la
angustia, de manera que fije mis ojos en Ti y camine eficazmente hacia el cielo. Buscaré mi guía en tu
Iglesia como quieres que lo haga. Todos los poderes del infierno son impotente conmigo si soy lo
suficientemente inteligente como para buscar solo tu verdad y usar sabiamente de la fuerza de tus santos
sacramentos. Amén.
Reflexión 61:
Miedo:

Jesucristo:

En las penas y sufrimientos soy Yo quien viene a ti y e pide que creas en Mi. Pon tu
confianza en Mí y prueba que entiendes mis planes, rechazando la preocupación. Si las
penas no fueran buenas para ti, Yo las quitaría.

No seas asustadizo. ¿Por qué preocuparse por cualquier cosa? Preocúpate de los
problemas de hoy y deja el mañana en mis manos. Muchas de las penas del mañana
existen solo en tu imaginación. ¿Como sabes que vas a vivir un día más? ¿Has pensado
en la cantidad de cosas que puedes solucionar el asunto que te preocupa? En fin
acuérdate que nada puede suceder sin mi consentimiento. Ponte a cuidado mío y no
temas.

El demonio puede hacer fácilmente malo a un hombre que vive de sentimientos.


Recurre a sus gustos y disgustos y así corrompe sus ideas sobre el bien o sobre el mal.
Finalmente lo lleva adonde quiere. Sus esclavos van ciegamente sobre el camino del
infierno controlado por sus sentimientos y dirigido por su imaginación.

No caerás en este error si te guías por la fe y la razón... Escucha mi voz que viene a ti
por medio de mi Iglesia. Sigue mis palabras. Pon tus ojos en Mí. No permitas que el
mundo te oculte mi presencia y mi amor. No temas. Yo estoy junto a ti. Conmigo vas
hacia la vida eterna. Avanza bravamente y sigue mi querer en todas las cosas. Mi paz
estará contigo.

Piensa:

La imaginación y los sentimientos dirigen la vida de muchos. En consecuencia temen y


evitan multitud de cosas. No piensan con la inteligencia, sino con los sentimientos.
Exageran de tal manera lo que les es molesto que son incapaces de enfrentarse a ello.
Son esclavos de sus temores. Debo regirme por mi inteligencia y la gracia de Dios me
dará la luz y libertad en la vida diaria. Así le escucharé a menudo hablándome por su
Iglesia y de su gracia. Obrando así me veré libre de muchos temores.

Oración:

Señor, ¿Qué puedo temer? Sabes todas las cosas y prevés lo que me puede suceder. No
me puede suceder nada sin tu consentimiento. Y tú nunca me consentirás nada que sea
malo para mí. Sabiendo esto, ¿Puedo tener otro estado de ánimo que no sea una gran
paz en mi vida diaria? Que no te ofenda por la falta de confianza. Yo te creo. Haré todo
lo posible por solucionar cuantas dificultades surjan, pero sean los que fueren los
resultados de mis esfuerzos los aceptaré como tu santa voluntad. En tu sabio y amante
querer encontrare mi paz. Amén.
Reflexión 62:
Desesperación:

Jesucristo:

Hijo, cuando persisten las tentaciones, y vuelven una y otra vez no desesperes. En todas las
necesidades estoy cerca y preparado para ayudarte. TE daré mi gracia y cuanto es necesario para
mantenerte libre de todo pecado.

No temas, ni te angusties. Mantén alto tu coraje y estate preparado para luchar contra las
tentaciones. No estás perdido, porque tengas tentaciones a menudo. Tus inclinaciones humanas no
siguen siempre la razón y así proporcionan a menudo tentaciones de pecar.

Tu primer paso hacia la salvación es reconocer tu debilidad. El segundo, no descorazonarse por las
tentaciones. Sencillamente procura volver tu mente hacia otros objetos. Las tentaciones no te
pueden hacer pecar.

Muy a menudo sucede que se hacen los mayores progresos en la vida espiritual, precisamente
cuando uno cree que esta resbalando. Yo miro el esfuerzo y la intención. Por ellos juzgo tu lealtad
hacia mí.

Esfuérzate por mi amo. No te consideres un fracasado sencillamente porque sientes como hombre
que eres. Se valiente y sígueme. Yo vencía al mundo. Con mi ayuda vencerás la batalla diaria por
el cielo.

Piensa:

La tendencia por echar todo a rodar esta en todo el hombre. Para vencerla Dios nos da la virtud de
la esperanza. ¿Por qué desesperar? No esta todo perdido porque a mi así me parezca. Dios quiere
que espere en su misericordia y que crea en su amor. Las tentaciones vienen y van; pueden durar
horas y días, pero es la voluntad lo que decide lo que realmente quiero y lo que soy en realidad a
los ojos de Dios.

Oración:

Dios mío, quiero obedecer tu ley y seguir tu voluntad en todas las cosas. Aunque mis sentimientos
me pueden arrastrar hacia lo que es malo, ayúdame para hacer lo que esta bien y es bueno. Dame
Reflexión 63:
Vanas esperanzas:

Jesucristo:

Hijo, muchos hombres dependen más de la cuenta de las ayudas humanas y de los remedios
humanos. Olvidan que todas las cosas humanas están a mi mano y que sin Mí nada sirve de ayuda.
Los mundanos se fían más de sus propios talentos y posesiones o en el poder y ayuda de sus
amigos.

Dinero, salud, reputación, amigos, admiración, superioridad sobre los demás, son cosas que a los
ojos de los hombres de este mundo son tesoros. Pero en realidad no son tan valiosos como parecen.

Yo soy el verdadero tesoro que da la paz y el gozo indefectible. Cuando me tienes a Mí, tienes al
único tesoro que no te puede ser quitado. Mantente en Mí por la fe y la lealtad. No dependas
demasiado de los hombres ni de las ayudas humanas. Tu mayor esperanza debería estar siempre en
Mí.

Mi amor te ayudará y te salvará cuando los amigos de este mundo te fallen y las cosas terrenas no
te asistan.

Piensa:

El hombre que vive solo para lo que le pueden ofrecer las cosas de esta vida está abocado a
grandes fracasos y tremendos remordimientos. Depende de cosas que tiene corta vida. Cuando este
en el fin de su vida se dará cuenta de lo loco que ha sido. Sólo Jesús le puede dar un amor sin
límites y el gozo que inunda los corazones humano. Por el contrario, los hombres terrenales se
darán cuenta que han perdido a Jesús.

Oración:

Jesús, en Ti pongo toda mi confianza y deseos. Te ofrezco todas mis penas, luchas y fracasos. Que
nunca atesore lo que me puede apartar del camino que lleva a Ti, no desee nada que me pueda
impedir que haga tu santa voluntad. Ni amigos no cosas creadas pueden ocupar tu puesto en mi
vida. Estate conmigo y enséñame como vivir en unión contigo. Ilumíname, robustéceme y
corrígeme de manera que te busque antes que a nada y a tu amor por encima de todo.
Reflexión 64:
Prosperidad mundana:

Jesucristo:

Hijo, de vez en cuando verás que tu vida mundana irías mucho mejor si no tuvieras que
preocuparte de mi Ley. Parece como que los mundanos se divirtieran mucho más sin preocuparse
de Mí. No te engañen las apariencias. Su vida no es tan deseable como puede parecer.

Buscan el placer y se olvidan de sí mismos en el momento presente. En la vida de cada uno, de


todos modos, hay siempre momentos en los que hay que reflexionar sobre uno mismo. Tarde o
temprano no quede más remedio que pensar en la brevedad de satisfacciones terrenas. El hombre
que se ha olvidado de Mí, mirara para atrás y vera todos sus placeres y gozos terminados. Ya no
habrá más lugar para felicidad.

Incluso mientras se goza de estas satisfacciones humanas el mundano tiene sus penas,
preocupaciones y miedos. Conoce lo que es el fracaso, preocupaciones y miedos. Conoce lo que es
el fracaso y la caída.

Como el humo del tabaco desaparece rápidamente en el aire, sí se desvanecerá los placeres
terrenos. A menudo los placeres terrenos dejan de deleitar antes de que se hayan terminado. Lo que
se esperaba que fuera a producir mucha felicidad produce pena u desagrado. Muchas eminencias
de la sociedad han terminado sus días en la amargura.

Que pena ver a los jóvenes en busca de placeres y satisfacción que los más viejos hombre de
mundo han comprendido ya que son breves y limitados. Ciegos y locos, corréis tras placeres
terrenos olvidando el único gozo verdadero: el cielo. Razonan falsamente: ¿Por qué pensar ahora
en el cielo o en el infierno estando la muerte tan lejos?

Piensa:

¡Locos! Pensamos bien en muchas cosas pero, cuando se trata de pensar sobre la eternidad, nuestro
sentido común enmudece. Para tener una idea clara de la brevedad de los placeres y gozos
terrenos no tengo sino que mirar a los placeres del año pasado e incluso de la semana última.
Entones me parecían importantísimos, pero ahora los veo acabados e idos. ¿Merecerá la pena
poner tal interés por este tipo de placeres de manera que llegue incluso a pecar para lograrlos?
¿Arriesgará la felicidad perfecta y sin fin del cielo por tan breve e incompleta felicidad? Solo un
loco puede dudar en la elección.

Oración:

Dios amante, Tú quieres darme lo mejor, la felicidad plena del cielo. Tú no me prohíbes las
satisfacciones de la vida terrena con tal que las use con inteligencia y rectitud. Que me prohíbes es
el amor loco por lo que es malo y disconforme don mi dignidad, aumenta mi amor por tu sabiduría
y que siga tu voluntad en todas las cosas. Solo tu puedes darme la perfecta e inimaginable felicidad
que llenará mi alma con gozo eterno. ; Me pides que me prepare para ello por una vida buena y
razonable sobre la tierra. Espero tu ayuda. Ahora empiezo. Señor. Amén.
Reflexión 65:
Deseos de ser apreciados por los hombres:

Jesucristo:

Hijo, algunos están ansiosos de causar una buena impresión y ser estimados. Otros tienen el afán
de tener muchos amigos. Aunque estas cosas son buenas, es peligroso buscarlas demasiado
intensamente. Tales deseos pueden hacer al hombre más preocupado de agradar los hombres que
de agradarme Mí.

Aunque debes a cada hombre consideración y respeto, mucho más me lo debes a Mí. Si alguien
espeta que hagas algo absurdo. O que lleva al pecado, levántate de todas las consideraciones
humanas y permanece leal. Cultiva en tu vida diaria, mi amor y amistad, por encima de todo. Si
eres inteligente evitarás todo lo que te aparte de Mí.

Algunas veces haces más bien a tu prójimo no permitiéndole que te conozca demasiado bien. La
proximidad puede mostrarle faltas y defectos que el no habría sospechado de ti. Con lo que puede
perder el influjo que con tus palabras y ejemplo le proporcionabas antes. No temas ser hipócrita
con eso, si realmente estas tratando de llegar a ser lo que otros piensas que eres-. Muy a menudo la
gente juzga por las caídas y debilidades más que por lo esfuerzos e ideales.

Es una locura fijar el corazón a favor humano y en su aprobación. Lo que otros piensan de ti con
frecuencia depende de lo que ellos a su vez son o de cómo se sienten en el momento. El favor
humano no se basa siempre en la verdad. Estima en lo debido a cada hombre en mi amor, pero no
busques la admiración y el aprecio de los hombres.

Algunas veces es mejor despreocuparse de los hombres y buscarme en la soledad. La estima de los
hombres te puede llevar a enorgullecerte, a la vanidad o a una loca autoestima. Algunos te creen
mejor de lo que realmente eres y otros en cambio te tienen por peor. Yo se lo que realmente eres y
lo que procuras ser.

Piensa:

Quien se afana por ser entendido y apreciado por los hombres, es un pobre hombre. Solo Dios me
estima conforme merezco. Y su juicio sobre mi será conocido y aceptado por todos los hombres el
día del Juicio. El secreto de la verdadera grandeza es seguir la voluntad de Dios en todas las cosas.
No tengo por que gastas ni un minuto en investigar lo que los demás piensan de mí. No hay nada
más tonto y vació que los pensamientos y los juicios de los hombres.

Oración:

Dios mío, ¡los juicios humanos dependen de tantas circunstancias cambiantes! Yo no puedo contar
con agradarte a Ti y agradar a cada uno de los hombres. Que nunca ofenda sin necedad a nadie.
Pero cuando se trata de cumplir con el deber, que no me preocupe de las opiniones de los hombres.
Tus Juicios quedaran patentes delante de los hombres y de los Ángeles el día del Juicio Final.
Quiero que apruebes mi vida, porque tu palabra es verdad. Amén.
Reflexión 66:
Orgullo loco:

Jesucristo:

Hijo, por más que poseas muchas cosas, no te estimes demasiado. Que yo sea tu tesoro, y que todo
lo demás pase a un segundo plano

Si eres rico o poderoso o popular o atractivo, acuérdate de tu propia realidad y no podrás ser
victima de un loco orgullo.

Cuanto bueno hay en ti, me pertenece. Las cosas que con tanta frecuencia se vanagloria el hombre
son mías. Se consideran mejores que sus vecinos a causa de su talento, habilidad u otras
circunstancias que están a su disposición. Pero yo podría haber dado estas cosas a los que ahora
más despojados están de ellas.

Haz todo el bien que puedas en tu vida pero no te enorgullezcas de tus obras. Sin Mi nada puedes
hacer. Si te consideras mejor que otros, ciertamente que este loco. A cualquiera le puedo hacer
muy superior a ti si me parece a Mí.

Piensa:

Si Dios tiene contados los pelos de mi cabeza, ¿Cómo puedo pensar vanamente de mí? Dependo
completamente de él aunque sea para mi próxima respiración. Este pensamiento me debería de
hacer temeroso de todo orgullo y autosatisfacción. Nunca puedo estar suficientemente
impresionado por el hecho de mi nada. Sin los dones de Dios, de mi mismo, soy nada. Este hecho
es la base de toda humildad. ¿Me podré considerar mejor que alguien en la tierra? Lo que yo ciento
cuando otros me miran con autosuficiencia experimentan los otros cuando muestro yo un sentido
de superioridad. Incluso sin mostrarlo, Dios ve mi orgullo y lo detesta porque el orgullo se basa en
una falta autoestima.

Oración:

Dios, amador de la verdad, ¡solo Tú eres grande por tu propia naturaleza! Todas las demás
grandezas, virtudes y bondades son un regalo tuyo. Ten piedad de este pobre corazón vanidoso.
Impresiona en mí la verdad de mi nada. Así seré amable, considerado, y caritativo con los que me
rodean. Dame tu gracia, Señor, y nunca me antepondré ni de palabra, ni de pensamiento, por
encima de nadie. En gratitud por tus dones, trataré de expandir tu bondad haciendo el bien a los
demás. Aparta de mí únicamente la humillación, terrible de que todo el mundo vea mí feo orgullo
en el Juicio Final. Amén.
Reflexión 67:
Autodecepción:

Jesucristo:

Hijo, no sabes lo fácil que es para el hombre sentirse decepcionada por si mismo en esta vida terrena.
Algunos piensan que están viviendo bien simplemente porque hacen algunas cosas buenas. Va a la Iglesia
una o dos veces por semana, recitan sus oraciones diariamente, y no comenten un crímenes públicos.

Pero yo no me agrado en ellos. En su vida diaria viven como si no dependieran de Mí, sino sólo de si
mismos. No son espiritualmente dignos de ser destacados entre una multitud ni por su paciencia,
amabilidad, simpatía o por su generosidad.

Muchos están demasiado interesados en sus ocupaciones e intereses diarios para preocuparse, como yo
quiero, por todas estas cosas. No niegan mi sabiduría en teoría. Sino que simplemente la desatienden en la
práctica. Actúan como si Yo no entendiera absolutamente nada de sus problemas. En realidad son ellos los
que nada entienden. Si siguieran mis Palabras muchos de sus problemas desaparecerían.

Algunos tienen miedo a aplicar mis palabras a la vida diaria. Tienen miedo de perder ventajas humanas o
satisfacciones terrenas. Son los que quieren ir al cielo, pero con el menor costo posible. Trabajan, sudan,
se sacrifican por sus intereses terrenos. Actúan sólo por miedo al infierno, no por amor mío.

Algunos se atormentan a lo largo de la vida. No advierten lo interesados que estoy en sus vidas diarias, lo
queridos que son. Actúan como si yo no me interesará por sus necesidades diarias y por sus problemas. A
veces miden mi proximidad en sus vidas, mi poder, sabiduría y amor hacia ellos según les van sus
negocios.

Un gran número de estos actúa con un ciego y loco egoísmo en sus relaciones conmigo. Con todo, no es el
caso de todos. La verdadera razón lo la cual algunos no me dan sino una lealtad a medias y hacen lo
estrictamente mandado es que no ven como se pueden adaptar mis palabras a la vida diaria. Leen: “No
matarás” y después en las mismas escrituras leen como yo mando a mi pueblo escogido que haga la guerra
a mis enemigos. Encuentran misterios y aparentes contradicciones en la Biblia y así en su confusión
prescinden de la religión en su propia vida.

Piensa:

No hay motivo para decepcionarse en mi seguimiento de Cristo. Puedo aprender su voluntad por medio de
la Iglesia. Si mis fuerzas me fallan puedo doblarlas, triplicarlas y centuplicarlas por medio de los
Sacramentos. Mi vida diaria prueba si son verdaderos en mi fe en Jesús y mi amor por El. ¿Soy yo de esos
que con su vida dan pie a los ateos o amadores de si mimos por su fe débil, su escasa confianza y fría
caridad?

Oración:

Jesús, Rey y Señor, ¿Qué más puedes hacer para probarme tu sabiduría, poder y amor? Yo quiero mi vida
para demostrarte que creo en Ti, confío en Ti y te amo por encima de todo. Enséñame a saber cada día
más las cosas de la religión de manera que pueda apreciarlas mejor. Espero hacer mejor uso de tus santos
Sacramentos de manera que Tu des fuerzas para hacer lo que mis fuerzas natrales son incapaces de lograr.
Tú quieres que te sirva con inteligencia y lealtad, yo deseo lo mismo. Espero empezar hoy mismo a
seguirte en el camino del cielo. Amén.
Reflexión 68:
Virtud de la desconfianza en si mismo:

Jesucristo:

Hijo, mientras estés en la tierra, no puedes estar cierto de tu verdadera riqueza espiritual. Solo después de
muerto sabrás lo que a ti te atañe. Cada día aprenderás más y más cosas sobre ti mismo, incluso cosas que
no sospechabas.

Cada hombre tiene algo de misterioso para si mismo. En cada corazón humano hay más de mil motivos
para decepcionarse de si mismo. La intensión que proclamas puede ser que no sea la razón que te mueve.
En lo más profundo puede ser que haya otras razones, egoístas y humanas. Por eso quiero fomentar en ti
una sana desconfianza y una confianza sobrenatural en mi ayuda. No importa lo santo que te sientas, ni
confíes demasiado en si mismo. No te apoyes en ti solo. Sin mi nada eres y sin mi ayuda no puedes hacer
nada que sea de provecho para el cielo.

Tu primera reacción ante esta realidad debe ser desconfiar de tu propia salvación. No es que pretenda
alarmarte, ni pretendo que te adentres sobre ti mismo de una forma anormal. Solo quiero que vivas de
acuerdo a la verdad. No morí en la cruz para que te condenaras, sino para que fueras al cielo. Tú debes de
hacer tu parte en este plan. Haz una sincera intención de obedecer mis mandamientos en tu vida diaria.
Prueba tu sinceridad por un honesto esfuerzo diario. Ante cualquier duda consulta a mi Iglesia buscando
dirección. Después que hayas hecho todo esto, coloca toda tu confianza y esperanza en mi amor y
misericordia.

Mis santos eran prudentes en desconfiar de sí mismos. Advirtiendo que la eternidad les avocaba al cielo o
al infierno estaban determinados a no dejar ninguna posibilidad de fracaso. Lo lograban por un santo
desprecio de si mismos y una santa desconfianza propia. Lo hacían de una manera inteligente. Fijaban sus
ojos en mis perfecciones sin límite, la vanidad de la vida terrena, y la locura de perder el gozo eterno en el
cielo. Esta concepción les convencía de que yo espera lo mejor de ellos y que todo lo mejor de ellos era
muy poco ante Mí. Se aseguraban doblemente de su generosidad para conmigo evitando muchas cosas que
les gustaban y abrazando otras muchas que les molestaban.

Incluso cuando se practicaban este auto negarse continuaban orando para que no se quedara en sus almas
la posibilidad de engaño. Hacían frecuentes actos de esperanza, de manera que sus buenas obras,
penitencias y plegarias me fueran aceptables. Sin miedos, sin angustias, ni preocupaciones tontas
administran mi infinita grandeza, confesaban su debilidad y pequeñez y acudían a mí misericordia y amor
para que les ayude a ganar la vida eterna.

Piensa:

A menudo, cuando creo que estoy haciendo algo por dios, me vuelvo molesto, proteston y falto a la
caridad para con los que interfieren en mis planes. El hecho de que yo haya perdido mi autocontrol prueba
que yo no solamente trabajaba para Dios. Mi mayor Tu fuiste el objeto de todos los deseos y pero enemigo
esta dentro de mí: este ciego, tonto y egoísta yo. Solamente cuando actuó puramente por Dios, resultará
perfecta mi acción. Debe pedir diariamente con humildad y esperanza que logre dominar este despreciable
yo. Este yo merece el desprecio porque se opone a la voluntad y bondad de Dios. Debería de tratar a este
yo como a un niño caprichoso que necesita ser educado. Así trataría de educarlo diariamente con actos de
desprecio y negación propia.

Oración:

Dios mío, los hombres más inteligentes de todos los tiempos han sido santos. . Todo lo demás era
secundario. Yo también quiero ponerte en el primer lugar de mi vida. Para ello debo controlar este ciego y
egoísta yo que hay en mí, Tú sabes lo que es bueno para mí, no con una bondad temporal, sino lo que es
bueno para mí definitivamente. Si sigo a mi yo, te perderé a Ti. Que haga yo todos los esfuerzos
necesarios para que mi yo no me controle. Quiero tener, más oración, generosidad y desprendimiento en
mis actividades diarias. Buscaré más fuerza en tus sacramentos. Haz que trate al yo que hay en mí con el
desprecio que se merece. Esto será mucho más fácil si mantengo los ojos fijos en tu admirable bondad y
amor, Amén.
Reflexión 69:
Honestidad interior:

Jesucristo:

Hijo, cuando Yo te doy luz celestial y fuerza no te vuelvas orgullosos y pegado de ti. Acuérdate de lo
débil y miserable que eres cuando careces de estos dones. Quien se confía cunado todo va bien a menudo
se pasa al otro lado del descorazonamiento, la tristeza o el miedo, cuando viene las tentaciones y las
dificultades.

Estate convencido de tu total dependencia de Mí. Sin Mí eres nada. El profundo sentimiento de esta
verdad te ayudará a controlas tus deseos y pensamientos. Te mantendrá fuerte en le momento de la
tentación de manera que no caigas tan fácilmente en el pecado.

Lucha como un buen soldado. Si caes como consecuencia de tu debilidad, pide más ardientemente ayuda
y levántate con una resolución mayor que antes. Defiéndete de la autosuficiencia y del orgullo. Estos dos
malos consejos llevan al hombre al error y a veces le hacen un ciego incurable de sus propias faltas y
caídas. Aprende la lección de los que cayeron por su loca confianza en su propia habilidad. Que sirvan de
aviso para mantenerte siempre humilde.

Piensa:

Dios tiene un plan definido sobre mi, plan que está íntimamente relacionado con mi salvación eterna, De
vez en cuando me da gozo interior, paz y presteza para el bien. En otras ocasiones quita estos dones
interiores y me siento abandonado, torpe, quizás incluso torpe y descorazonado. Las personas razonables
tratan de vivir una vida equilibrada sin dejarse llevar de sus afectos y sentimientos. Cuando Dios les
comunica la luz espiritual y gozo, tratan de juntar esos dones con el autocontrol, recordando que pronto
sentirán pruebas espirituales que les harán evaporarse este gozo presente. Así también, en tiempote
prueba, se acuerdan del gozo que disfrutaron antes y que volverán a tener a su debido momento. Evitan
los cambios extremistas y la variabilidad de quienes actúan guiados por sus sentimientos y modales. Se
sienten ligados con Dios y los hombres porque buscan el control de si mismos, lo mismo si se tienten
elevados por y gozo que si se ven sumergidos en la oscuridad espiritual y en la tristeza.

Oración:

Dios mió, no hay otra verdad sino que dependo en todo completamente de Ti. Sin Ti nada soy y nada
puedo hacer. Si admito esta dependencia de Ti en mi vida diaria llegaré a ser verdaderamente grande.
Hazme lo suficientemente honesto para que viva de acuerdo con esta verdad. Espero luchar más
arduamente para agradarte en mis diarias ocupaciones y actividades. No me enorgulleceré cuando disfrute
de tus dones ni me desanimare cuando los apartes de mí. Espero mantener mi pensamiento en tu sabiduría
y amor sin límites en todo lo que suceda hoy. Lo mismo si mi lealtad a tu santa voluntad para permanecer
inalterable y anclado. Amén,
Reflexión 70:
Tentación de la presunción:

Jesucristo:

Hijo, el demonio te tienta al pecado de la presunción de dos maneras distintas. En primer lugar,
sugiriéndote que mi misericordia te apartara fácilmente del castigo debido a tus pecados, o persuadiéndote
que eres lo suficientemente fuerte como para enfrentarte a la tentación. El es el padre de la mentira y gran
decepcionador. Mi misericordia esta en todas las obras pero no destruye mi justicia.

Aunque sufrí y morí por el perdón de tus pecados, tu debes también poner tu parte en la obra de salvación.
Ten fe en Mí; obedece a tu Iglesia; no te atormentes por tus pecados; y evita las ocasiones próximas de
pecado. Solamente si tu haces lo que esta de tu parte recibirás mi misericordia. Solamente cuando tú hayas
sido llamado por el Ángel de la muerte terminara el tiempo de merecer. Entones encontraras en Mí solo
Justicia.

En vez de fiarte demasiado de tus fuerzas acuérdate de tu completa dependencia de Mí, en cada
respiración, en cada latido, en cada segundo de tu vida. Si te crees independiente y fuerte eres un loco.
Quién ama el peligro en el perecerá. Si presumes de tus fuerzas, te sentirás débil mucho antes de lo que
piensas.

Cuando te doy luz interior y fuerza celestial, no te apresures demasiado a comunicárselo a los otros.
Acuérdate de tu indigencia y harás mejor uso de mis regalos. Debes usarlos con gratitud, humildad y
cuidado.

Piensa:

La presunción es un sueño de locos. El hombre es nada pura si Dios le abandona. Quién esta convencido
de la completa dependencia de Dios esta libre del pecado de la presunción y de cualquier otro pecado.
Trabaja y hace lo que pueda confiando en obtener de Dios las fuerzas necesarias. Si cae, le ofrece a Dios
sus intenciones y esfuerzos. Debería de mirar a Dios en todas las cosas. Siendo sincero conmigo mismo
evitaré el pecado de la presunción. Dios me dará luz y fuerza para caminar a Diario hacia la vida eterna.

Oración:

Mi Dios y mi todo, infunde en mí la ciencia y la honestidad necesarias para admitir mi nada. Haz que lo
admita no solo con palabras sino en mi vida diaria. Que no pretenda ser más de lo que en realidad soy.
Nuca más trataré de hacer lo que esta por encima de mis fuerzas. En la medida de lo posible evitare todas
las ocasiones de pecado mortal. Quienes presumen de sus propias fuerzas y sabiduría están peligro de caer
fuera de tus caminos. Quiero hacer solo todo lo que pueda por amor tuyo. Amén.
Reflexión 71:
La locura de la confianza en si mismo:

Jesucristo:

Hijo, guárdate de la confianza en ti mismo. Te puede perjudicar. No estés nuca satisfecho contigo mismo,
sino trata de ser cada día mejor.

El único que está a salvo de pecados serios es el que desconfía de si. Eres muy débil. La mayor de las
tentaciones te vencería necesariamente si no fiera por mi gracia.

NO te andes con bromas. Evita toda ocasión de pecado ya sea motivado por una persona, lugar o cosa.

Los santos con todas sus virtudes y penitencias, no se fiaban en absoluto de si mismos. ¿Cómo puedes
tomar a broma tus faltas y debilidades? El que ama el peligro en el caerá. Si quieres andar jugando con tu
alma, acuérdate que tú eres el único que perderá. Tú caerás para siempre en el infierno si mueres en
pecado mortal. La única garantía contra el pecado es un esfuerzo continuo contra tus faltas y debilidades.
Pide a menudo fuerzas y evita todas las ocasiones de pecado.

Piensa:

La seguridad de los pecadores se debe a presunción, orgullo y ceguera espiritual. La eternidad no tiene fin.
La sola posibilidad de perder el cielo es un pensamiento aterrador. Esta es la razón por la que los santos no
quisieron andarse con bromas con la tentación y el pecado. La recompensa que Dios dará a sus leales
seguidores es demasiado grande como para que yo la pueda describir. Así también el estado de las almas
condenadas es demasiado terrible para poder imaginarlo. No puedo permitir el lujo de las bromas en la
vida espiritual. Debo confiar en la ayuda y en la misericordia de Dios pero estro no me debe de dar pie
para al presunción. No me llevará al cielo si no he puesto de mi parte lo que debo para ganar tal privilegio.
Después de mi muerte su divina justicia me tratará como merezco.

Oración:

Padre amante, Dios verdadero, dame ver cuan maravillosos son tus planes para salvarme. Das a cada
hombre muchas oportunidades para levantarse encima de esta vida terrera con sus limitaciones y
satisfacciones pasajeras. A todos nos das la gracia de desarrollar una vida sobrenatural en virtud. Cada
hombre tiene la oportunidad de participar en tu divina sabiduría siguiendo tu voluntad. Tu gracia nos da
fuerza celestial para levantarnos por encima de nuestras fuerzas y de los atractivos de este mundo.
Mientras permanezcamos en este mundo dame la gracia de acordarme de que sin Ti nada puedo. A Ti sean
dados todas las gracias, honras y leal servicio en cada hora del día. Amén.
Reflexión 72:
El peligro de la confianza en si mismo:

Jesucristo:

Hijo, la seguridad que sentían mis santos estaba siempre mitigada por un santo temor de mi justicia, pero
la seguridad de los mundanos nace de su presunción y orgullo. Cada hombre se ha decepcionado a si
mismo muchas veces. Se deberían de aterrorizar si pudieran ver el riego indescriptible en que se
encuentran metidos.

Quiero que tengas una sana y normal confianza en ti mismo, pero estate seguro que se basa en hechos.
Uno de ellos es que si Mí nada puedes. La seguridad en si mismo es buena solamente cuando procede de
una fuerte confianza en Mí.

La confianza en sí mismo y la seguridad de los hombres del mundo procede de una falsa idea de su
grandeza o de una idea egoísta de que yo les perdonaré olvidándome de sus faltas. Otras también se
sienten con fuerzas para enfrentarse a cualquier ocasión de pecado.

De vez en cuando alguno de los que me fueron más respetados y admirados por los hombre se ponen en
gran peligro porque se olvidan de su debilidad humana.

Las tentaciones no son pecado. De hecho a menudo son una bendición porque ayudan al hombre a caer en
la cuenta de su debilidad. De todos modos meterse en la tentación voluntariamente es una locura. Quién
ama el peligro en el perecerá y solamente podrá echarse la culpa a sí mismo. No hay hombre con la
fortaleza suficiente para reírse de las tentaciones. Bastante harás si luchas contra la tentación que viene sin
quererla. No te fíes de ti mismo hasta el punto de meterte tu mismo en la tentación.

Piensa:

La confianza excesiva es peligrosa. Me pone en un gran riesgo cuando hay un peligro serio de pecado
mortal. Dios no puede bendecir las locuras. Debo fiarme de Dios pero no debo tentarle por abandonarme a
mi estupidez. Debo enfrentarme bravamente a los peligros que se me presenten en mi vida diaria, cuando
no pueda evitar la ocasión de pecado no debo dudar de arrostrarla

Oración:

Jesús, ¿puedo esperar razonablemente tu ayuda si yo de mi parte no me cuido de evitar las ocasiones de
pecado? ¿Por qué pienso que puedo tomarlo a broma? El que se arriesga en estas materias es un
presuntuoso. Espera que le des gracias especiales contra el peligro que él mismo se ha traído. Debo hacer
tu voluntad no la mía. Señor, nunca me debe de faltar la confianza en tu asistencia, pero no acepto a
ponerme yo mismo en ocasión de pecado. Esto es lo que Tú quieres de mí. Dame que evite en la medida
de lo que sea posible todas las personas y cosas que me puedan llevar al pecado. Espero que no te ofenda
nunca por confianza excesiva en mi propia habilidad o presumiendo la ayuda de tus gracias
extraordinarias. Amén.
Reflexión 73:
Los peligros del conocimiento:

Jesucristo:

Hijo, la ciencia es a menudo causa de orgullo y vanidad. Algunos se consideran mejores que los otros
porque saben más. No caen en la cuenta de que la ciencia es inútil a no ser que haga al hombre mejor.

La ciencia puede proporcionar una serie de distracciones inútiles. Muchas cosas de tu vida no cambian
porque tú lo sepas o las ignores.

Algunos están tan distraídos por el afán de lograr ser sabios que no advierten sus faltas y defectos. Si fuera
tan diligentes en arrancar los vicios y adquirir virtudes como lo son por lograr la ciencia, el mundo sería
mucho mejor.

Muchos prefieren ser honrados del hombre en lugar de ser humildes, y se pierden en sus imaginaciones
egoístas. Se arruinan a través de vanos conocimientos y de ciencias inútiles porque se olvidan de mí.

Los satisfechos de sí rara vez son capaces de admitir órdenes de otros. Valúan a los demás solamente por
su ciencia o falta de ella, como si los hombres no tuvieran sino intelecto.

Piensa:

La inteligencia es la mitad del hombre. La acción es la otra mitad. Cuando más aprenda más veré que
ignoro muchas cosas. La verdadera ecuación humilla al hombre mostrándoles las grandezas de la creación
divina y su propia pequeñez. El hombre más sabio es tremendamente consiente de que sabe muy poco. Si
me imagino que me educación me hace mejor que mi vecino, es porque he perdido el espíritu de la
verdadera educación. La verdadera educación me debe mostrar más u más el puesto de Dios en el mundo
y el glorioso significado de la vida diaria. Cada conocimiento nuevo me debe ayudar de alguna manera,
pero debo preferir más que nada a aprender a enriquecer mi vida lo más posible por las enseñanzas de dios
a través de su Iglesia. A menos de que mis conocimientos me lleven a una vida mejor, son una perdida de
tiempo precioso. Una vida virtuosa me hace querido de Dios. La educación se debe pretender para que me
ayude a vivir esa vida.

Oración:

Jesús, ¿Qué me aprovechará hablar y disputar de cosas grandes si yo no hago grandes cosas? Mi mayor
aprovechamiento delante de mi Padre Celestial es avanzar día a día un poco hacia tu santidad y bondad.
En el día del Juicio, no me preguntarán cuantas cosas he sabido, sino que he hecho. En verdad en que en
primer lugar debo de aprender que es lo que debo hacer, haz que no piense tanto aprender que es lo que
debo hacer, sino entender lo que Tú quieres de mí. Después con tu ayuda intentare pasar adelante y
ponerlo por obra. Amén.
Reflexión 74:
Ciencia sin virtud:

Jesucristo:

Hijo, el deseo de saber es natural y normal, pero no es bueno sino en cuanto te ayuda a ser mejor. Un
pobre obrero que sigue mis palabras es mejor que un sabio inminente que no se preocupa de mis
mandamientos.

Tu vida diaria es un camino para la eternidad. La ciencia que te ayude a ganar el cielo es la primera y más
importante de las ciencias. Cuanto más conozcas de mi y mi doctrina tanto mejor para ti.

Toda ciencia debe ser estimada de cuerdo a lo que te ayude para vivir una vida más santa y útil. Hay
muchas cosas que carecen de importancia en tu vida.

Si el hombre fuera haz diligente en arrancar sus faltas y en corregir sus defectos, sería mucho mejor de lo
que ahora es con todo lo que ha discutido sobre mil cosas.

Es mejor ser grande que ser tenido por grande. Serás grande si aprendes mis palabras y actúas conforme a
ellas en tu vida diaria. Sino haces sino hablar de la santidad, puede que impresiones a los hombres, pero
yo te conozco por lo que realmente eres, un fracasado para siempre.

Piensa:

Hay quien valúa la ecuación en si misma. Ven el ella el culmen de las posibilidades. Están en un error. La
ciencia carece de valor sino me hace mejor. Debería de amplificar mi punto de vista de la vida, darme un
conocimiento profundo del hombre y de las cosas y mejor preparado para recibir los dones de Dios. Si la
ecuación me reconcentra en mí mismo y me enorgullece, si me hace despreciar a los demás, es mala para
mí. La verdadera educación debería ayudarme a vivir una vida virtuosa porque me ayudaría a apreciar la
obra maravillosa creadora de Dios.

Oración:

Espíritu Santo, Dios mío, inspírame un amor por lo bueno y una ciencia sana. Muéstrame como vivir lo
que aprenda en mi vida diaria en la media que sea posible. Es mejor vivir tus palabras que predicar sobre
ellas elocuentemente, o enseñarlas bellamente. El hombre que fuera capaz de citar las sagradas escrituras
línea por línea no sería tan grande a tus hijos como el que aplicara estas líneas a su vida diaria. Muéstrame
cada día más como te merezco completamente. No quiero otra ciencia. Siempre oscura sino esta ciencia
primara y más alta. Amén.
Reflexión 76:
Los cambios de humor y sentimientos:

Jesucristo:

Hijo, no te desanimes porque tus disposiciones interiores cambien tan fácilmente. En un momento dado
estás lleno de un deseo ardiente de servirme y un poco después te sientes solo y falto de interés. No te
debes sorprender ni entristecer por esta tu inestabilidad. Por este proceso tu alma se purifica del egoísmo
en mi servicio. Pese a tus humores y siempre cambiantes puedes probarme tu lealtad. Simplemente, basta
con que renuncies a los deseos de abandonar las intenciones y los deseos que tenías antes. También mis
santos experimentaron esos cambios, pero estaban determinados a servirme por encima de los humores del
momento y de los sentimientos.

Tu sentimiento de devoción es un regalo mío para el momento presente. Después que has hecho una buena
resolución, Yo te quito el sentimiento para que puedas probar tu sinceridad o descubrir la falta de ella. Es
fácil tomar grandes resoluciones y hacer importantes promesas. Cualquiera lo hace en un momento de
fervor y emoción. Pero demasiado a menudo las buenas resoluciones se evaporan con los cambios de
sentimientos y humores.

Quiero que vivas tu vida con inteligencia. Yo te doy gracias para que entiendas que es lo mejor y lo
desees. Después te doy fuerzas y oportunidades para que sigas lo conforme la razón. Si sigues firme en el
bien cuando tus buenos sentimientos han desaparecido, pruebas que eres verdaderamente noble contigo y
digno de mi amistad y de la gloria en el cielo.

Piensa:

El hombre no es apto para ver a Dios cara a cara en el cielo hasta que ha probado que ya esta preparado,
antes debe purificarse de sus ciegos egoísmos. Como el oro se prueba en el ardiente crisol, así sucede
también conmigo. No puedo estar seguro de mi propia sinceridad hasta que haya sido purificado por la
multitud de acontecimientos de mi vida diaria. Según la forma como acepte mis triunfos y fracasos, mis
momentos de satisfacción y como necesito ser. Cuando mi voluntad acepte y escoja lo que envía la santa
voluntad de Dios, solo entonces seré tan grande como parezco ser. Para llegar a esto debo conquistar mis
cambiantes sentimientos con una actitud inteligente.

Oración:

En luz o tinieblas, pena o gozo, déjame que me vuelva hacia ti, mi Dios, y déjame que te pruebe que
realmente soy lo que tú quieres que sea. Mis palabras de gratitud, lealtad y amor deben de resplandecer en
la acción. Mis humores pueden cambiar y mis sentimientos cambiarán a través del día, pero yo deseo
seguir tu santa voluntad en cada tarea y ocupación. Dame fuerzas para probar mi real peso en la acción.
Amén.
Reflexión 76:
Consolación y desolación espiritual:

Jesucristo:

Hijo, Yo te doy consolación espiritual, acéptala agradecido. Acuérdate siempre de que se trata de un don
gratuito, no debido a ningún merito tuyo. Quita toda satisfacción u orgullo de tu corazón. Yo soy la fuente
de todo tu entusiasmo. Esta realidad te debe dar una sana humildad cuando yo te comunico un favor
especial. Guárdate de la vanidad. Abandona toda idea loca de tu propio valer o habilidad. En la hora de la
consolación acuérdate que pasará y seguirá el tiempo de prueba.

Cuando se vaya la consolación no te vuelvas tardo y desinteresado en tus tareas y ocupaciones diarias.
Mantén tus oraciones y obras buenas. Acepta humildemente mi voluntad y continúa pacientemente en tus
actividades normales. A su debido tiempo volverá la gracia de la consolación y el entusiasmo.

Estos cambios de consolación a desolación, de la luz a las tinieblas, del gozo a la tristeza, no son una
experiencia falta de utilidad. Todos mis seguidores a través de ella. Por su firmeza en los propósitos
prueban que me aman más que a mis dones.

Mantén tus ojos en mí, lo mismo si estas en el gozo o estás en la tristeza, si todo anda suavemente o a
tropezones. Si tu corazón esta lleno de dudas o con gozosa confianza en Mí, procura seguir mis palabras
en tus ocupaciones diarias. Así tu vida será un progreso continuo hacia la casa de la paz y de la eterna
felicidad.

Piensa:

Dios da a cada hombre la oportunidad de conocer y de mejorar su propio carácter. Muchos no conocen sus
limitaciones y faltas hasta que se encuentran con los éxitos y los fracasos. Esta es la razón por la que cada
uno tiene sus “altos y bajos”, momentos de satisfacción y momentos de prueba. El verdadero hombre de
Dios procura vivir una vida basada en los principios de la razón. No actuará a impulsos o sentimientos a
no ser que la acción tenga sentido.

Oración:

Señor, en la pena y la alegría, en el éxito y el fracaso, quiero vivir mi vida inteligentemente de acuerdo
con tu ley. Las penas y las alegrías de esta vida son demasiadas cortas. Por eso no deben conducir mi vida
en dirección al pecado. Yo vivo para las eternas alegrías del cielo. Haz que no lo pierda por el miedo a
pasar por cualquier adversidad o por deseo de disfrutar cualquier bien de la tierra. Dirigeme a través de los
gozos y de las penas como quieras. Dame únicamente el favor de arribar finalmente a la vida perfecta del
cielo. Amén.
Reflexión 77:
Progreso en el tiempo de la desolación:

Jesucristo:

Hijo, el progreso en la vida espiritual no consiste en tener una gran alegría y consolación interior. Sino
consiste en ser humilde, paciente, y exento de toda falsa autoridad en el tiempo que todas las cosas van
mal. Actúa en tus asuntos llenos de fe y no e descuides en tus obras buenas y en tus plegarias cuando no
encuentras la satisfacción en ellas. Continua haciendo todo lo que puedas en tus obligaciones diarias pese
a la falta de interés, la ansiedad e incluso el disgusto.

Algunos se tornan impacientes y sin interés en mi servicio cuando las cosas no van como ellos quieren. No
está siempre en poder de los hombres escoger lo él quiere en esta vida. Pese a todos los planes y todas tus
preocupaciones no podrás evitar todos lo fracasos. Incluso los pecados y errores de los otros, que te
molestan en tu vida, los permite Dios por motivos buenos.

Yo tengo un plan sobre ti, por lo que llegaras realmente a ser grande. Yo te envió lo que es mejor para ti.
Si sigues mi voluntad tendrás mi paz en la tierra y mi gozo en el cielo. Si te rebelas te dañarás a ti mismo y
probablemente a algunos más. Nada te debo. Tú en cambio me debes absolutamente todo. Recibas poco o
mucho estas siempre en deuda conmigo.

Piensa:

Muchos juzgan su proximidad a Dios por sus sentimientos. Si se sienten devotos, creen que le están
agradando, y si se sienten fríos y abandonados, creen que el les ha abandonado. Estos criterios son falsos y
decepcionadotes. Yo puedo probar mi mejor amor a Dios cunado me encuentro sin ningún sentimiento de
agradarle a El. En la medida en que cumplo lo que El espera de mí yo le amo, no importa para nada lo que
yo sienta. Jesús mismo dijo, “Si me amas, guardarás mis mandamientos”. Esta es la gran prueba de la
bondad y santidad. En la medida en que estoy siguiendo su santa voluntad estoy cumpliendo el
maravilloso plan de dios para mi salvación y la de otros que me están encomendados. A su debido tiempo
los sentimientos me pueden ayudar a servir a Dios con más entusiasmo, pero eso nunca será la prueba de
lo rico que soy a sus ojos. En tiempo de desolación, debería robustecer mis resoluciones y mantener mis
prácticas religiosas como hacía cuando disfrutaba con estas cosas. Este es el proceder del amor inteligente,
la manera como Dios quiere ser amado.

Oración:

Hazme un discípulo tal como tú deseas que lo sea: un seguidor inteligente. Ni sentimientos, ni humores
deben determinar mi modo de servirte en este días, yo debería de hacer todo lo posible por conocer tu
santa voluntad y seguirla sin dejar a mis sentimientos que gobiernen mi inteligencia o controlen mi
voluntad. No importa, lo que yo sienta sobre lo que debo de sufrir, pues se esto: Tú estas siempre atento
sobre mí, siempre ayudándome a trabajar por el cielo. Incluso el mal que permites en mi vida tiene un fina
más alto. Algún día me sentiré orgulloso de lo que hoy son motivo de preguntas angustiosas para los
hombres. Con los ojos fijos en Ti haz que cumpla tu santa voluntad cada día. Tú eres mí gozo perfecto, mi
eterna gloria, mi corona imperecedera. Amen.
Reflexión 78:
Palabras de Dios al que esta en desolación:

Jesucristo:

Hijo, créeme. Pon tu confianza en mi amor y misericordia. Muchas veces cuando piensas que estoy lejos
de ti, en realidad estoy muy cerca. Cuando tienes la impresión de que todas las cosas te salen mal, es
precisamente cuando estas dando la mejor prueba de tu amor y tu lealtad.

No eres un fracasado porque las cosas no te salgan como tú querrías. No juzgues las cosas por tu disgusto
o desacuerdo. Quita todo el desanimo de tu corazón, no te preocupes de las esperanzas frustradas. Haz lo
que puedas y acepta los resultados de mi voluntad.

Yo soy tu hacedor y Dios amante. Tus pensamientos más ocultos me son conocidos con toda claridad. Tu
salvación eterna es mi mayor interés. Cuando te sientas desinteresado y disgustado con tu trabajo de cada
día acuérdate de que yo tengo mis buenas razones para permitir que tengas tales sentimientos.

Si te he quitado algo, no tienes derecho a quejarte. Nada hay que puedas reclamar como propiedad tuya, ni
siquiera tu mismo. Todas las cosas son mías. Sin Mi eres nada. Incluso cuando parece que te trato con
dureza merezco obediencia y sumisión ya que mis acciones van regidas por una naturaleza infinita y un
amor eterno.

Lo que hago contigo se debe a que te amo mucho más de lo que tú mismo te amas a ti mismo o de lo que
te ama otra persona quienquiera que sea. Cuando te envió alguna pena o turbación, ni te lamentes no te
pongas triste. La paz y el contentamiento te vendrán cuando admitas que todo esto es por tu propio bien.

Piensa:

En todos los momentos Dios me ama y piensa en mi verdadera felicidad. Porque yo tengo una visión corta
y centrada en mi mismo. Me quejo cuando las cosas me van mal. Dios podría evitar muchas de mis
amargas experiencias. Pero no lo hace por muy buenas razones. Según me voy haciendo más viejo y
prudente, voy cayendo en la cuenta como sobreestimaba los sucesos pasados y las satisfacciones terrenas.

Oración:

Señor, si supiera lo sabio que eres y lo que me amas aprendería a contentarme en seguida con tu santa
voluntad. En mí egoísmo quisiera vivir en la tierra como después de la muerte. Quiero aceptar tu voluntad
en todas las cosas. Si me mandas consolación o desolación déjame servirte como Tú quieras. Pondré todos
mis esfuerzos en mejorar en mi vida diaria. Después que haya hecho lo que esté de mi parte aceptaré los
resultados como tu santa voluntad. Amén.
Reflexión 79:
Generosidad con Dios:

Jesucristo:

Hijo, Pon tu esfuerzo mayor en seguir mis palabras en tu vida diaria. No dependas de la simpatía o de la
admiración de los hombres para vivir bien. Sabes lo que esta bien. Hazlo sin que te importe el gusto o
desagrado que te produzca. Que te dirijan tu fe y tu caridad.

Si por cada obra buena que realizas te diera mi consolación, difícilmente podrías dar prueba de
generosidad. Sería fácil y muy atrayente para todo el mundo, incluso para los egoístas. Quiero que seas un
hombre de verdad, que vive la verdad y sigue lo recto. Mira lo que yo merezco y trata de darme la lealtad
pura que yo merezco. Olvídate de ti, y sigue mi voluntad y alcanzarás la verdadera grandeza, la grandeza
de una vida santa y buena.

Cualquiera puede sentirse devoto cuando yo le doy consolación. En estas condiciones es muy agradable
servirme, cuando se goza y disfruta de mis regalos y de mi consolación interior. Tu verdadera virtud y
autentica generosidad conmigo aparecen cuando yo quito estos santos sentimientos e inspiraciones.
¿Piensas aun en agradarme cuando no sientes el por que de ello? ¿Tienes la fe y el amor necesarios para
permanecer aferrado a Mí cuando tus deseos te orientan en cualquier otro sentido?

Piensa:

El verdadero amor a Dios no es un mero sentimiento. Es una firme convicción de que yo le debo todo a El.
Es una firme persuasión de que yo le debo a el todos los servicios que yo le pueda prestar. Con este firme
convencimiento Dios me ofrece la fuerza para hacer lo que esta bien y es recto, incluso, cuando mis
sentimientos y deseos preferirían que actuara de otra manera. La generosidad con Dios implica amar su
voluntad por encimota de toda otra de cualquiera inclinación o deseo propio.

Oración:

Mi dios y mi todo, te ofrezco mi mejor y más profundo amor. Eres en vedad mi Todo. Sin Ti nada tendría
y sería nada. De Ti proviene todo lo bueno que hay en mi vida. Tu generosidad hacia mi carece de limites.
Yo no puedo renunciar a ser generoso contigo. Quiero abrazarme a tu voluntad en todas las cosas,
despreciando todos los gustos egoístas y los desagrados de mi yo. Que tu voluntad se cumpla siempre en
mi vida. Amén.
Reflexión 80:
Angustia:

Jesucristo:

Hijo, nadie puede tener nada contra quienes son tranquilos y de buen temperamento. No tiene merito
especial asociarte con los que te son agradables o que ven las cosas con tus mismos criterios. La verdadera
grandeza se prueba con el trato con los que son de trato difícil u contrario o con los que son cabezones y
egoístas.

Algunos viven en paz con ellos mismos u con los que están a su alrededor. Otros, por el contrario, no
tienen paz ellos mismos, y parece que están dedicados a quitárselas a los demás.

Encontraras la paz solo si estás decidido a soportar pacientemente lo que no puedes remediar. El que sabe
sufrir pacientemente por mi causa recibirá de Mí el don de la paz. Este es maestro de si mismo, amigo mío
y heredero del cielo.

Si te vienen preocupaciones no los dejes que te atormenten. Mírame y al menos ten la lealtad de tener
paciencia con mi voluntad. Si los esfuerzos humanos no son capaces de traer remedio a esos tomentos,
quiere decir que yo quiero que padezcas estas molestias. Yo lo quiero por buenas razones que tú no puedes
entender ahora.

Por encima de todo evita la angustia cuando las cosas no salgan conforme a tus deseos. No dejes salir de
tus labios palabras de resentimiento. Da ejemplo de fe y de confianza en mí. Que tu paciencia
resplandezca delante de todos los hombres.

No obligues a los demás haciéndolos participar en tus sufrimientos haciéndolos sentir tus impaciencias, tu
angustia o tu autocompasión. Sigue mis palabras en este caso y tu angustia presente te proporcionará un
gozo más grande de lo que te puedes imaginar.

Piensa:

Nuestro habla de la mansedumbre y de la humildad como dos lecciones que debo de aprender.
Mansedumbre es la virtud de la gentileza con los demás, especialmente de los que me rodean dándome
motivo de angustia. Jesús quiere que lo tome como una lección especial dada por El. Angustia e
impaciencia son a menudo muestras de un orgullo y egoísmo interior. Quedo deprimido cuando las cosas
no salen como yo quiero. Las ocasiones para una angustia autentica son raras. La mayor parte de las veces
que estoy triste es por falta de inteligencia o de simpatía o de paciencia o por falta de voluntad para sufrir
lo que debo. ¿Cómo reaccionaría el Señor en mi situación? El es mi modelo.

Oración:

Jesús, manso y humilde de corazón, haz mi razón semejante al tuyo. Que esta petición sea una de mismas
frecuentes plegarias. Tú quieres que sea como tu. Podrías pensar que la vida es imposible si se practica la
mansedumbre con algunas personas. Que entienda que la mansedumbre es cosa muy distinta que la
debilidad, antes al contrario algo muy fuerte, con la fuerza de la virtud. ¿Quieres que practique la
mansedumbre? Quiero intentarlo por tu amor. Muéstrame el modo de hacerlo. Que no caiga más veces en
mi soberbia y en mis deseos egoístas por culpa de la angustia. Cuando las cosas no salen conforme a mis
planes, haz que actué como lo harías tú de estar en mi puesto. Hazme más y más parecido a Ti. Oh, Jesús
manso y humilde de corazón, haz mi corazón semejante al tuyo. Amén.
Reflexión 81: Impaciencia:

Jesucristo:

Hijo, se paciente con los defectos y debilidades de los otros. Ellos tienen a su vez que cargar con tus
defectos. Si tú caes tan a menudo de tus propósitos, ¿como puedes esperar que tú vayas a cambiar a los
demás en tan poco tiempo? Tú quieres ver a los otros corregir sus defectos pero no luchas la mitad ni
siguiera para corregir los tuyos.

Eres estricto a la hora de corregir a los otros, pero no eres tan riguroso cuando se trata de corregirte a ti
mismo. La pereza y la vagancia de los otros te irrita, pero te molesta si alguien trata de interferirse en tu
indulgencia para contigo mismo. Quieres que los demás practiquen las reglas pero te indignas con quién te
menciona a ti las tuyas.

Rara vez juzgas a tu vecino con la misma indulgencia con que te juzgas a ti mismo. A menudo de indignas
con los defectos de los otros porque se interfieren con la rutina de tu vida. Piensas que eres celador de los
justo, pero descubrirás el amor propio en el fondo de tu impaciencia y angustia.

Piensa:

¡A veces creo que soy virtuoso en materias en loas que en realidad estoy desagradando a Dios! Una
prueba segura que amo a Dios es el amor paciente hacia los demás. Cuando más trate de ayudar a los
otros y de ser paciente con sus faltas, defectos y cortedades, más podré probar mi desasimiento propio y
mi generosidad para con Dios. Dios quiere que le considere como a mi prójimo. Jesús dijo que yo le hago
a El lo que hago con los demás. ¿Mi trato con los demás demuestra que yo le amo a Dios o que me amo a
mi mismo? De la misma manera en que muchas ocasiones procuro buscara mi propia conveniencia, así
también debería de aprender a favorecer a mis prójimos por amor de Dios. Es fácil excusarse a uno
mismo. Que yo traté de excusar igualmente a los demás.

Oración:

Jesús, nunca podré obrar mal si amo a mi prójimo y trato de pensar bien de él pese a todas sus faltas.
Ciertamente que a menudo tendré que ser severo por su propio bien. Pero incluso entonces haz que actué
con amor en mi corazón. Tu seguidor no debe tener ni impaciencia, ni ira, sino que solo un deseo sincero
del bien a los demás. Que nunca más te desagrade con intolerancia o dureza para con lo que están a mí
alrededor. Hazme una décima parte de paciente con sus defectos de los que soy con los míos y nunca
heriré a nadie con mis impaciencias. Recuérdame a menudo mis propias faltas limitaciones y defectos de
manera que me incluya a mí mismo cuando truene por los pecadores. Espero probar mi gratitud y mi amor
por Ti mediante mi paciencia con los demás. Amén.
Reflexión 82:
Descubriendo faltas:

Jesucristo:

Hijo, aprende la lección que te di una y otra vez con mi vida y palabras en la tierra. Toda grandeza en la
tierra no es sino una imagen de mi grandeza increada. El hombre es obra de mi mano toda poderosa. Fuera
de mí el hombre es nada pura. De todos modos, si sigue mis palabras en esta vida, participará de mi
felicidad y gloria en el cielo.

¿Cómo puedes tenerte en algo grande cuando de ti mismo eres nada? ¿Por qué piensas alto de ti? Tienes
cantidad de faltas y defectos. Se humilde y vive como quién admite sus limitaciones. No dejes trasparentar
en tus acciones el orgullo ni la vanidad.

¿Cómo es posible que seas capaz de encontrar defectos en los otros, tu que estas tan lleno de faltas a tu
vez? Sin mi ayuda caerías pronto en los mismos defectos que criticas.

A no ser que sea tu deber corregir a los otros, piensa más en tus propias faltas que en las de los otros.
Trabaja y lucha contra tus propios defectos y estarás demasiado ocupado para entristecerte por los pecados
de los demás.

¿Cuál es el mejor de los conocimientos? Conocerme a Mí, preocuparse solamente por mi santa voluntad y
reflexionar a menudo sobre el modo de eliminar tus propias faltas y defectos. Trabaja en ese conocimiento
y avanzarás en el camino de la vida eterna.

Piensa:

No importa cuantos talentos tenga, nunca debo olvidar que pertenece Dios. En cualquier caso, pese a todas
mis cualidades y virtudes también tengo defectos. Una vez que este convencido de mis limitaciones y
cortedades me será más fácil pensar bien del prójimo. Si mi amor propio me ciega impidiéndome ver la
vedad sobre mi mismo, es que no es una amor propio ordenado. Me causa prejuicios y hará la vida un
poco más desagradable para los que están a mí alrededor.

Oración:

Jesús, dame tal amor a la verdad que nunca me ciegue por el amor propio y por mi soberbia y vanidad.
Que mi amor propio sea santo amor que se tuvieron los santos. No querían nada que no fuera lo mejor
para ellos mismos. Y encontraban lo mejor en tu santa verdad. Se respetaban en lo querrán y nunca
pretendías ser más de lo que eran. Su amor a los hombre provenía de saber que todos los hombres han sido
hechos a imagen y semejanza de Dios y que on amados por El. Dame tal amor a la verdad que siga en
todas las ocasiones, pese a mis gustos o molestias, prepucios y preferencias. Solamente una vida diaria
honesta y desprovista de egoísmo puede probar que yo te amo realmente, mi Rey y Señor. Amén.
Reflexión 83:
Juicios temerarios:

Jesucristo:

Hijo, preocúpate de tus propios asuntos y no te erijas en juez de quienes están a tu alrededor. Hay
cantidad de cosas de tu prójimo que las ignoras por completo, No es fácil juzgar a los demás con acierto.
Se prudente y déjame a mi el juicio.

Te es mucho más útil cuidarte de ti mismo y juzgarte a ti. Tienes cantidad de cosas que hacer antes de que
termines de corregir todas tus faltas. En cuanto a las faltas de los demás lo mejor que puedes hacer es dar
buen ejemplo, ofrecer un pequeño consejo en donde te sea pedido y pedir a dios sinceramente por las
personas que lo necesitan.

Tu preocupación por loas faltas de los demás no siempre arranca de virtud por tu parte. Fastidias a mucha
gente porque no te preocupas de tus propios asuntos y porque no has aprendido aún a tener paciencia y
comprensión.

La gente no siempre esta faltando cuando hiere tu sistema nervioso. La falta esta a menudo en ti. Yo sufrí
muchas cosas en silencio por tu amor. ¿Con que frecuencia sufres tú por Mí en silencio?

Date a tu trabajo y corrige tus faltas, así estarás demasiado ocupado para preocuparte de las faltas de los
demás.

Piensa:

Cuanta más paz de conciencia tendrá si me preocupara solamente de mis propios asuntos. Juzgar a los
demás es una perdida de tiempo precioso. A menudo me equivoco cuando pienso mal de los otros. Si
alguien de cae antipático me siento inclinado a juzgarle más duramente que los demás. Si mi única
preocupación fuera los intereses de Dios nunca pensaría mal de nadie, ni siquiera de los que en realidad
me ofenden. ¡Cuantas veces me levanto contra alguien porque conciente o inconcientemente me ha herido
mi orgullo o mi egoísmo! Yo debería pretender que los demás vieran las cosas con mis propios criterios.
Cada hombre es diferente y cada uno tiene sus propios criterios y experiencias. ¡Cuantas veces Dios
excusa a los que nosotros juzgamos!

Oración:

Señor, ando suspirando por un rayo de la voluntas divina de manera que vea que no puedo ser irracional
en mis juicios y opiniones de los otros. Tú tratas a cada persona como un individuo. Tú no me pides a mí
que sea como los demás en muchas cosas. Lo único que quieres de mi que aproveche los talentos y las
circunstancias de mi vida y los aproveche los mejor posible. Nos pides que te imitemos lo mejor que sea
posible de acuerdo con la inteligencia y la gracia con que cada uno cuenta. Que no juzgue yo duramente a
los que no siguen mis caminos. Yo quiero seguir tu santa voluntad en todas las cosas. Aunque vea las
faltas y los errores de los otros trataré de guardarme en hacer juicios duros. Sino puedo decir nada bueno
sonbre una persona, lo mejor que puedo hacer es callarme. Amén.
Reflexión 84:
Criticas poco caritativas:

Jesucristo:

Hijo, no creas todo lo que te dicen de los demás. Los hombres juzgan a menudo de los demás con
prejuicios. Con frecuencia sus juicios dependen de su temperamento, criterios, sentimientos, ambiciones y
amor propio. Normalmente harás bien si te niegas a juzgar a los demás por los juicios que sobre ellos
oigas. Muchas veces se condena a un hombre cuando esta ausente y no puede defenderse.

La gente se siente superior cuando critica a los demás. Están siempre inclinados a exagerar las faltas de los
demás. Si muestras interés por oír sus críticas, se animaran a continuar su poco caritativa charla. Muestra
que desapruebas toda murmuración al menos con tu silencio. Trata de cambiar el tema de conversación
con el mayor tacto posible.

Todo el mundo comete faltas. El criticón sabe hacer siempre mejor las cosas que los demás. Pero quizás
no es capaz de conocer los motivos e intenciones del que critica. Carece de todo derecho a revelar las
faltas ocultas de los demás sino es para proteger al inocente o para ayudar a la propia persona que esta en
la necesidad.

Acuérdate también que tú serás objeto de críticas cuando no estés presente. Habla ahora del criticado
como quisieras que los otros hablaran de ti cuando tú seas el criticado.

Piensa:

Una de las peores faltas de la naturaleza humana es condenar a los otros. Esta es la razón por la cual
Jesucristo expuso su doctrina de la caridad. Como yo juzgue a los otros, así seré juzgado por Dios. Si
condeno a los otros seré también condenado. Un verdadero servidor de Cristo esta presto a pensar bien de
los otros que a pensar mal.

Oración:

Jesús, Rey de mi corazón, dame algo de ti bondad de manera que siempre píense bien de mis prójimos. Yo
no se nada de ellos. Quizá sea incapaz de hacer eso que yo desapruebo. Puede que tenga cien excusas para
hacer lo que hace. Haz que deje todo juicio en tus manos y trate de pasar por encima de lo que los demás
hacen. Enséñame a preocuparme de mis propios asuntos y a pedir por aquellos que me parece que lo
necesitan. Nunca olvide tu gran misericordia conmigo pecador. Como Tú me haz perdonado a mí, así
perdonare yo siempre a los que me ofendan. Nunca revelare las faltas a los otros a no ser que este obligado
a proteger a los inocentes o el bien publico. Amén.
Reflexión 85:
Locura del amor al mundo:

Jesucristo:

Hijo, guárdate del espíritu mundano. Este espíritu ciega la verdad y hace que pensemos más en este
mundo que en el mundo que ha de venir. Ciega al hombre de tal manera que este más dispuesto a trabajar
por la muerte que por la vida. Hace que el hombre se interese más en aparecer como grande que en serlo,
viviendo una vida como es debida.

Si el mundano se preocupa de pensar sobre su vida terrena, pronto caerá en la cuenta de la locura que es
amarle tanto. En este mundo hay demasiada oposición, pena, tristeza y desilusiones. Rara vez quedan
satisfechas las ambiciones terrenas. El hombre de mundo con frecuencia encuentra amargura en donde
buscaba dulzuras. En las cosas y personas en las que entrego ve demasiadas pequeñeces y limitaciones.
Antes o después tendrá que admitir que la felicidad, la paz y satisfacción no se dan en este mundo.

No quieras tu aparecer también aparecer como un loco. Los hombres de este mundo están condenados al
fracaso pero mis seguidores nunca serán decepcionados en la medida en que se entreguen a mi voluntad.
Mis promesas no son palabras vacías, no decepcionarán a los que confían en mí. Lo que he prometido lo
daré. Lo que he dicho lo haré, con tal de que seas fiel hasta el fin.

Piensa:

El hombre que sigue sus sentimientos y se niega a reflexionar persigue la paz y felicidad
permanentemente donde nunca las podrá encontrar. Va esperando que después de los disgustos y
molestias actuales encuentre al fin lo que jamás encontrará. Poco sospecha que lo que desea solo lo
encontrara en la amistad y amor a Dios.

Oración:

Mi Dios amante y sabio, no puedo encontrar sino amargura en toda persona o cosa que me aparte de Ti.
Aparta de mi todo lo que me pueda llevar al pecado. Enséñame que nunca sea esclavizado por los
sentimiento, sino, por el contrario, dame una sabiduría interior que detecte el pecado en todos sus
escondrijos. Dame el coraje necesario para hacer lo que es bueno, y fortaleza para continuar haciéndolo lo
mejor. Yo voy tras el gozo interior de tu amistad y compañía. En lugar del loco aferramiento a las cosas de
este mundo, quiero un fuerte amor por tu santo y sabio querer en todas las cosas. Amén.
Reflexión 86:
Curiosidad tonta:

Jesucristo:

Hijo, la curiosidad incontrolada aparta tu atención de tus deberes y trae distracciones innecesarias. Te
puede gastar una enormidad de tiempo y energías que podrías empleas en cosas buenas. La curiosidad
lleva a visitas sin motivo y a conversaciones inútiles. Llena la cabeza con vacías distracciones, que te
impiden recibir libremente los santos sentimientos y buenos deseos que yo te envío a lo largo del día.

Tendrías más paz si fueras menos curioso sobre aquellas cosas que no te importan. Quién es demasiado
curioso de los dichos y hechos de los demás viene a olvidarse del glorioso ideal que Yo represento ante el:
el ideal de agradarme en todas las cosas y así ganar la vida eterna.

A lo largo del día ocurren muchas cosas que no te ayudan a ser mejor persona. ¿Qué te importa si este de
al lado tiene un mejor abrigo o si el de más allá a fracasado en un proyecto personal que tenía? Piensa en
lo que a ti te concierne hacer y como podrás hacer algún bien a los demás. Ten ante ti tu fin celestial en la
medida en que te lo permitan tus ocupaciones diarias. Evita las palabras inútiles y las actividades
incesarías.

Piensa:

Una naturaleza curiosa, inteligentemente controlada, lleva al hombre a grandes descubrimientos. Pero si la
curiosidad no se controla te puede dañar para siempre. Mi más alto interés debe de ser simple seguir la ley
de Dios y entrar de esta manera en la vida eterna. Cuando menos recargue mi entendimiento con intereses
innecesarios, mejor entender y apreciaré mi fin sobrenatural sobre la tierra. Excesivas preocupaciones
humanas me hacen dejar de atender a mi fin celestial. Muchos pecados de omisión y de falta de cuidado
nacen de una curiosidad no controlada.

Oración:

Jesús, Rey mío, tus enemigos me están continuamente rodeando para apartarme de Ti y meterme en el
pecado. La curiosidad incontrolada es tu enemigo. Si soy sincero contigo lucharé contra esos enemigos
tuyos. Haciendo esto lucharé también por mi propia felicidad eterna. Señor, dame la luz para conocer a
estos enemigos y para enfrentarme a ellos en mi vida diaria, Amen.
Reflexión 87:
Curiosidad de los ojos:

Jesucristo:

Hijo, muchos pensamientos pecaminosos y malos deseos entran en tu alma por la curiosidad por ver las
cosas. Esta falta te lleva sobre las atracciones peligrosas en este mundo. La memoria trae representaciones
de las cosas que hemos visto y en cierto sentido las hace tuyas.

Por medio de un razonable control de tus ojos encontraras más facilidad en permanecer unido conmigo a
lo largo del día. Las tentaciones exteriores herirán con más dificultad tu imaginación. Tendrás menos
pensamientos pecaminosos y deseos que perturben la paz de tu alma. Muchas tentaciones provienen de tu
falta de control en los ojos.

Esta falta de control a menudo proviene de pereza o falta de cuidado. A menudo miras un objeto para
tener conocimiento y juicio siquiera parcial sobre lo que esta prohibido. Esto no es más que una
componenda con la que tratas de servir a dos señores, tu deseo irracional y a Mí.

Algunas veces te sentirás fatigado de mi compañía porque no estás disfrutando de lo que yo te amo. En
tales casos buscaras escapar de ti mismo por un más libre uso de la vista. YO no prohíbo la razonable
necesidad de refrescar tu espíritu con un cambio de escenario, una nueva mirada o nuevas ideas. No hago
más que precaverte contra el libre o incontrolado uso de tus ojos.

A menudo lo que en realidad necesitas es renovar tus buenas intenciones y tus motivos para servirme.
¿Qué bien se sigue de estar continuamente buscando nuevos paisajes? NO hacen sino distraerte sobre tu
fin sobrenatural. Nos desees más cambios que los necesarios para mejorar los quilates de tus buenas obras
y plegarias.

Los hombres del mundo continuamente están corriendo intentando escapar de sí mismos, distrayéndose y
dando rienda suelta a su curiosidad. El hombre de Dios busca tener ante sí el glorioso fin de su vida: ganar
el cielo. Controla su curiosidad porque ésta disminuye su autocontrol y estropea su contacto conmigo.

Piensa:

Nada nuevo hay bajo el sol. Controlando mis ojos no perderé gran cosa. Mirando mi propio corazón veré
las emociones, tendencias y deseos que mueven a todos los mortales. Si yo viera en este momento a todas
las cosas hermosas que existen ¿aprendería muchas cosas que me ayudarían a mejorar mi vida? Es mucho
mejor vivir con Dios, atender a mis propios negocios y no preocuparse demasiado de nadie. Deja a los
hombres del mundo entregarse a pasajeras trivialidades si así lo quieren. YO por mi parte he nacido para
cosas más altas, cosas que me ganan una gloria infinita y una felicidad eterna.

Oración:

Jesús, en Ti encuentro todo: el más interesante, el más atractivo y mejor de los amigos. ¿Cómo puedo
apartarme de ti para prestar atención a pobres y limitadas criaturas como yo mismo? Algunas veces me
canso de Ti porque no te conozco bien. Si yo ocupo el tiempo en contemplar tu vida en la tierra, sabría
como apreciarte mucho más de lo que lo hago ahora. Me resultaría mucho más fácil guardar mis ojos al
margen de los sucesos humanos carentes de importancia. Ayúdame, Jesús, a concentrar en Ti mi vida
diaria en la medida en que lo permitan mis obligaciones. Amén.
Reflexión 88: Curiosidad sobre la gente:

Jesucristo:

Hijo, si tu dejas a los demás, los otros te dejarán solo a ti. No te entrometas en los negocios de los demás.
Preocúpate por tus propios asuntos. Estate seguro de que estás haciendo todo lo que debes. ¿Estas
haciendo todo lo que puedes para agradarme? En caso afirmativo es como debe de ser, por más que tus
prójimos no te lo aprueben.

Es una debilidad de la naturaleza humana la curiosidad sobre lo que hacen los demás. No podrás serme
fiel cien por cien sino has vencido esta debilidad. ¿A ti qué te importa lo que hacen los otros a no ser de
que sea tu deber saberlo? En todo lo que no se te refiere métete en mis propios asuntos por amor mió. No
te tienes que preocupar de los hechos de los además. Ten cuidado solo de tus pensamientos, necesidades y
omisiones.

Yo conozco a cada individuo. No hay acción, ni palabra, ni pensamiento, ni idea o deseo que me sea
oculto. Tus más ocultos deseos y tus intenciones más ocultas las veo yo con toda claridad y las entiendo
perfectamente. Deja todo en mis manos. Purifica tu intención cada mañana. Trata de renovarla durante el
día. Después métete en tus asuntos con toda paz.

No prestes demasiada atención a los que otros dicen o hacen a menos de que sea tu deber. Los malos
pensamientos y las obras injustas de los hombres se le pondrán enfrente en el último día. Después la
verdad resplandecerá y cada uno será visto y será tenido por lo que de verdad es.

Piensa:

Ocuparse en los propios negocios es positivamente bueno. Si otros necesitan mi ayuda de cualquier
manera que sea, debería de tratar de hacer lo que pudiera por ellos. Pero pensar demasiado en la vida de
los demás esta mal. Yo les puedo prestar mi ayuda por medio de las plegarias, buenos ejemplos y santos
deseos. Pero ciertamente no tengo que hablar nunca de las faltas de los demás a no ser que algo me
concierna. Pero incluso entonces, si no espero sacar bien de mis esfuerzos, ¿para que hacerlos? Debo vivir
mi vida y los demás deben vivir la suya. Después de que haya hecho lo poco que yo puedo hacer para
ayudarles debería disfrutar de la paz de mi propio corazón.

Oración:

Querido Señor, mi vida es un regalo tuyo, Este es un asunto que nos concierne a Ti y a mí, Es verdad de
que debo amar y ayudar a mis parientes, amigos y compañeros hasta donde sea capz. Pero en muchas
cosas mi vida es algo que no importa a los demás. Ni necesito depender de los demás en todas las cosas.
Que no sea yo víctima de una curiosidad vacía. Líbrame de hablar de mis prójimos y haz que sea lento
para entender las cosas malas que digan de ellas. Amén.
Reflexión 89: Curiosidad sobre la salvación propia:

Jesucristo:

Hijo, cierta persona una vez estaba ansionsa acerca de su propia salvación. Se postro junto al altar y
exclamo: “Oh si estuviera seguro de mi salvación!”. En ese mismo momento yo puse la respuesta en su
corazon: “Si lo supieras, ¿Qué harías? Vete, pues, y haz todo el bien que en el caso harías y no tend´ras
motivo alguno para temer”.

Al punto comprendio que Yo le había respondido. Marchó lleno de gozo y llevo una vida útil. Nunca más
se volvió a preocupar de su salvación, xino que dejo su futuro en las manos de Dios. Estaba interesado en
una sola cosa: “¿Cómo quiere Dios que proceda en esto que estoy haciendo ahora?”. Ewl que primero
estaba egoístamente preocupado ahora es un bravo operario mío. Haz tu lo mismo y vivirás. Lo haz de ser
despues de la muerte depende de lo que trates de ser en esta vida.

Piensa:

Si hago todo lo que puedo en cada momento viviré para el cielo, En la medida que estoy tratando de
ssaber lo que Dios quiere de mí, estoy haciendo todo lo que puedo para hacer su voluntad, no tengo por lo
tanto que temer al infierno.

Oración:

Señor, espero agradarte en toso lo haga, diga o piense. Dependo de tu gracias para que sea así. En lo que
se rifiere a mi salvción es asunto que dejo enteramente en tus manos. Si yo que Tú no me olvidarás de mí.
Amen.
Reflexión 90: Gusto por la novedad y variedad:

Jesucristo:

Hijo, la curiosidad es cosa muy buena en la medida es controlada por la razón y por la gracia. Pero en
muchas ocasiones la curiosidad trae más molestas que bienes. Muchas personas tienen tanto interés en ser
consideradas cultas e inteligentes que tratan de resolver todas las dificultades y solucionar todos los
problemas.

No hay hombre que tenga solución hará todo. De hecho hay ocasiones en que es mejor no saber la
respuesta. Pasa haciendo tu tares diaria y cumpliendo tus obligaciones. Cuenta con mi ayuda para vivir
una vida más útil y virtuosa. Tal conocimiento te ayudará a encontrar mi paz.

A veces la curiosidad puede interferir con tus mejores intereses. En lo que se refiere a mis enseñanzas
acéptalas con simplicidad y humildad en lugar de tratar de entender el porque de cada prescripción. A
veces es necesario aceptar mis enseñanzas por la sencilla razón de que son mías. Algunas verdades son
demasiado profundas para tu limitada inteligencia humana. Si fueras capaz de entenderlas por ti mismo no
habría necesidad de que Yo hubiera venido a enseñártelas. Debes pues aceptarlas con humildad, fe y
simplicidad. ¿Es que no soy Yo el autor de la verdad?

Controla tu curiosidad. Es mejor ignorar muchas cosas que pensar que no existen. A veces descubrirás que
es mucho mejor aparecer como ciego, mudo y sordo por mi amor. Aun no estas preparado para
comprender toda la realidad. Por el momento llena tu inteligencia y tu corazón con aquellos pensamientos
y deseos que te ayudarán a ganar la vida eterna. Dirige tu interés hacia las cosas que te ayudarán a ser más
honesto y más centrado en tus deberes de cada día.

Recuerda que el ojo no se satisface viendo, no el oído escuchando. Es mucho más importante para tu vida
diaria que lo que tu deseas ver y oír. Estas rodeado por un mundo invisible, el mundo de las realidad
espirituales, que existen aun antes de que pase esta vida terrena.

Trata de aprender todo lo que pueda sobre las verdades que Yo he revelado. Pero guárdate de la curiosidad
orgullosa de entender todas las cosas o busca impresionar a los otros con conocimientos.

Piensa:

La curiosidad te puede llevar a alcanzar gran número de conocimientos, pero también te puede ser
perjudicial. En lo que se refiere a la Palabra de Dios, al hombre le atañe en primer lugar creerla porque
Dios la ha inspirado. Si te preocupas más por estudiar la Palabra de Dios, que en vivirla la curiosidad se
vuelve algo malo. En la medida de que estas haciendo todo lo que puedas para servir a Cristo y a su
Iglesia, puedes estudiar con seguridad la Santa Revelación de Dios para entenderla mejor.
.
Oración:

Espíritu Santo, inspirador divino de los corazones, dame la gracia de estudiar la Palabra humildemente y
de obedecerla sin egoísmo. Haz que entienda cada día mejor el modo de aplicar tu voluntad a mi vida de
cada día. Cunado más fielmente siga tu santo querer tanto más seré capaz de entender lo que haz revelado
al mundo a través de tu Santa Escritura y de la Iglesia de Cristo. Amén.
Reflexión 91: Confianza vana en la ayuda de los hombres:

Jesucristo:

Hijo, no pongas demasiada confianza en la amistad de los hombres y en los remedios humanos. Los
hombres solo te pueden aportar una ayuda limitada en tus necesidades diarias. Si depende de ellos
demasiado, estás condenado a amargos desengaños. Por encima de las personas y cosas que satisfacen tus
necesidades cotidianas pon tu total confianza en Mí.

La gente que ahora está contigo mañana puede estar en contra de ti. Quines te agradan ahora te pueden
resultar desagradables más tarde. Las cosas que te satisfacen en este momento te pueden resultar
desagradables en el futuro. No seas loco como para ligarte demasiado a criaturas mundanas.

Solo Yo se y quiero lo que es realmente mejor en cada momento. Solo Yo soy inmutable y plenamente
capaz de satisfacer. Aférrate en primer lugar a mí y a mí voluntad. Depende de las cosas solamente en la
medida de lo que Yo te lo permito.

Son bien pocos los que tiene la fidelidad que yo exijo. Muchos carecen de la confianza que espero de
ellos. Si pones enteramente tu vida diaria en mis manos, Yo a mi vez haré lo que sea mejor para ti.

La vida perfecta del cielo es el único bien definitivo. Vive tu vida terrena de acuerdo con mi ley y no te
fallaré en tus necesidades verdaderamente importantes.

Piensa:

.Nunca debo depender demasiado de los seres humanos. Me pueden ayudar solamente hasta cierto punto.
Los demás son tan humanos como yo. Su conocimiento, su voluntad y su amor son limitados. Solo en
Dios podré encontrar el entendimiento perfecto, el amor plenamente saciador y la voluntad infinita. Si soy
capaz de hacer que Dios sea el único de mi vida diaria, se efectuará un gran cambio en mi visión de las
cosas, en mi bondad y en todo lo que me rodea. La gente carecerá de poder para robarme mi paz interior.
Ya no necesitaré la compañía de los hombres. Disfrutaré de una nueva libertad sobre las distracciones
humanas que ahora me preocupan y enfrían.

Oración:

En todas mis necesidades, Jesús, haz que no dependa solamente de a ayuda de los hombres. Tú debes de
ser el centro de mi existencia. Todo gozo, todo amor, toda ambición, todo éxito, cuanto he amado y
conocido, todo, son tenues imágenes de la gran y plenamente satisface dora gloria tuya. Cuando te vea
finalmente cara a cara l cielo, Dios mío, entonces caeré en la cuenta de lo incompletos que son los gozos y
las satisfacciones de esta vida. Haz que viva para ti y que avance para el cielo en cada momento de mi
vida. Quiero andar entre los hombres con los ojos fijos en ti. Que nunca dependa demasiado de los seres
humanos. Amén.
Reflexión 92: Las opiniones de los hombres:

Jesucristo:

Hijo, no te preocupes más allá de ciertos limites de lo que te gusta y lo que te desagrada. ¿Por qué gastas
tanto tiempo en considerar lo que esta contigo o contra ti? Haz todo lo que puedas en agradarme a Mí y
Yo estaré a tu lado. Yo estaré contigo mientras odies el pecado y lo evites en tu vida diaria. Cuando estoy
contigo, ¿Qué te importa quién sea el que pueda estar en contra tuya?

No te preocupes demasiado cuando otros digan cosas que te hieran. Si pensarás más en tus pecados,
incluso estarías de acuerdo en muchas de esas críticas.

Hablan a menudo conmigo y los hombres te impresionaran mucho menos de lo que te impresionan ahora.
Cuando más avances en la oración menos serás tentado a hablar en contra de otros. Te parecerá trivial lo
que hablen o dejen de decir contra ti cuando hayas aprendido a juntarte conmigo por medio de la oración y
el retiro.

Yo sé lo que eres realmente. Lo que losa hombres digan sobre ti, no cambiará nada lo que yo pienso de Ti.

Haz todo lo que puedas por mi amor y no te preocupes de lo que los demás puedan pensar o decir respecto
de ti. No temas losa juicios de los que te rodean. Vive para Mí tratando de agradarme en tu vida diaria.
Después disfrutarás de mi paz.

Piensa:

Solo en Dios encontraras tu paz y tu gloria. No debería desear agradar a los hombres ni temer
desagradarles, cuando se trate de hacer lo que es justo. El único juicio que realmente importa es el de
Dios. Todos los hombres estarán de acuerdo con la opinión de de mi tenga Dios en el día del juicio final.

Oración:

Dios mío, que locura preocuparse de los juicios y las opciones de los hombres. Sólo Tú eres la fuente de la
verdad. Si te estoy agradando a Ti no me debe importar en lo absoluto la opinión de los hombres. Haré
todo lo que pueda para vivir una vida santa tratando de ser amable, considerado, servicial, generoso y
obediente a tus mandamientos. Nunca jamás quise hacer nada para ganarme la opinión de los hombres.
¡Pensar que me puede a mi importar la opinión de los hombres! Todo por Ti, mi Jesús. Amen.
Reflexión 93: Amistades humanas:

Jesucristo:

Hijo, ¿tendrás muchos amigos cuando realmente los necesites? Tan pronto como les exijas un sacrificio,
muchos de los llamados amigos tienen que hacer en otros asuntos.

No te importe lo que te amen los demás, vivirás una vida mucho más plena si vives en mayor soledad. En
el medio de la noche, en los momentos de fatiga, o en los momentos en que los otros están absorbidos por
sus propios intereses una momentánea necesidad de estar solo, de ser ignorado y desconocido de los
demás.

No sobreestimes la amistad humana. Tarde o temprano deberás dejar a tus amigos o ellos te dejarán a ti. Si
dependes demasiado de una compañía humana, tendrás que soportar una separación más dolorosa más
tarde.

La amistad humana necesita de mi bendición. Trata de ayudar a tus amigos trayéndolos más cerca de mí
con tu ejemplo. Preocúpate de que esta amistad humana se purifique y pueda continuar en el cielo. Con mi
bendición las amistades humanas pueden ser una cosa muy buena. En el cielo se enriquecerán con un
nuevo lote de gozo.

Piensa:

Toda verdadera amistad se debe basar en la virtud y la lealtad a Cristo. Si no ayudo a mis amigos de
alguna manera a vivir mejor, no soy un verdadero amigo. DE la misma manera que quienes no me ayudan
a ser mejor no son verdaderos amigos míos, sino mero conocidos. Quién me lleva al pecado con sus
palabras o su conducta es un enemigo, pese a todas las buenas intenciones que puede tener.

Oración:

Jesús, Amigo Divino. Deseo vivir una vida verdadera, una vida que no se rija por ciegos sentimientos o
emociones incontroladas. Mis amigos son tan terrenos y humanos como yo, con faltas, limitaciones y
cortedades. Nunca se debe interponer un ser humano entre Tú y yo. En Ti esta la perfecta amistad. Todos
los demás amigos son de segunda categoría. Ninguno de ellos me comprende tan perfectamente como Tú.
¿Quién pude verme y ayudarme en mis necesidades como Tú? Quiero tenerte por el amigo maravilloso
que en realidad eres. Sólo en Ti encontraré la perfección de la amistad. Que nunca anteponga a Ti mis
otros amigos. Amen.
Reflexión 94: La amistad de los santos de Dios:

Jesucristo:

Hijo, Si buscas una amistad autentica la encontraras en mis santos. La Iglesia los ha declarado santos
porque tuvieron una lealtad heroica conmigo a lo largo de toda su vida terrena. Son mis favoritos porque
yo fui para ellos mi favorito. Prefirieron amarme a Mí más que a sus propias vidas. Me sirvieron con toda
generosidad y desprendimiento que Yo reclamo. Se entregaron a mi servicio con todas sus fuerzas y no
me negaron nada. Si les envíe trabajos, fracasos, amarguras, frustraciones o enfermedades, las aceptaron
alegremente como venidas de mi mano.

Incluso después de dejar este mundo los santos esta preocupados porque los hombres me glorifiquen. Su
mayor deseo es que tú te juntes algún día con ellos en la vida perfecta y el gozo infinito del cielo. Me
honras a Mí cuando les honras a ellos. Obras con prudencia cuando les pides que se una a ti para conseguir
Mi ayuda. LO que no puedes lograr por ti solo lo lograras cuando los santos intercedan por ti. Ellos son
mucho más dignos de mi favor que sus egoístas seguidores.

Honra a mis santos no solo por la ayuda que te pueden proporcionar sino también porque son grandes
héroes de la humanidad. Cuando mayor es la causa a la que un hombre esta entregado tanto mayor es ese
hombre. Los santos viven para mi gloria, para mi honra y para seguir mi verdad. Ellos fueron seguidores
de la causa más grande, más noble y más altruista de todas las causas.

Ellos trabajaron solo por Mí y me amaron por encima de todo provecho o ventaja personal. En la medida
de sus fuerzas procuraron en lo oculto, trabajaron por Mí y no buscaron agradecimiento de los hombres.
Comprendieron que Yo merezco todo lo mejor que hay en ellos. En su noble generosidad no pudieron
ofrecerme menos.

Piensa:

En los santos de Dios encontraré amigos sinceros y valiosos ayudantes en la presencia de Dios. Sus
plegarias y amistades me aportaran muchas ayudas extra de parte de Dios. Gracias a ellos que ganaron con
generosidad con Dios. En su entrega amorosa a Dios puedo ver un ejemplo continuo de entrega a El que
merece todo lo que yo puedo ofrecer.

Oración:

Dios mío, espero cultivar una amistad mayor con tus santos. Tienen un autentico interés en mi bien y
desean sinceramente ayudarme.

Santos de Dios, os honro por la grandeza con que te habéis entregado a Dios. Ayudadme en mis
necesidades de cada día y espacialmente a amar la santa voluntad de Dios en todas las cosas. Amén.
Reflexión 95: Devoción a María:

Jesucristo:

Hijo, cuando mi madre recibió las alabanzas de su prima Isabel ella dirigió las alabanzas inmediatamente a
Dios, la fuente de todo bien. Convencido por esta enrome prueba de humildad el Espíritu Santo le inspiro la
profecía de su futuro puesto en el corazón de mis leales seguidores. Bajo la influencia divida declaró:
“Todas las generaciones me llevarán bendita”. Honrando a mi madre te juntas a las multitudes incontables
que han cantado a lo largo de las centurias.

En el mismísimo comienzo de la salvación fue predicha su grandeza. Se le predijo a Satanás que su cabeza
sería aplastada por el pie de una mujer. Después de Dios, mi Madre Inmaculada es el mayor enemigo del
infierno.

Su mayor alabanza fue dicha incluso antes de que llegará a ser mi madre. El ángel Gabriel se dirigió a ella
como “La llena de gracias”, titulo reservado para ella. Cuando mayor entiendas esta santa advocación mayor
será tu admiración hacia mi madre.

Para estar lleno d e gracia es necesario un amor hacia Dios capaz de consumir todo, una dedicación total que
todas las formas de egoísmo quedan subordinadas a Dios en todo momento. Incluso antes de que llegará a
ser mi madre – Virgen, ya había alcanzado ella estas cimas de santidad. Ya entonces era llena de gracia.

No solo merece mi Madre tu admiración y alabanza, sino también mi más puro amor. Al ser constituida
Madre mía se hizo también tu madre en un sentido muy verdadero. De la misma manera que tus padres
cooperaron con Dios al darte la vida terrena, Así también mi Madre coopero con Dios para traer la vida
sobrenatural a tu alma.

Ella te conoce y te ama como una autentica Madre, sin duda alguna como la más perfecta de todas las
madres. Sus oraciones en tus necesidades son frecuentes y poderosas. Como obtuvo ayuda para los esposos
de Cana sin que ellos lo supieran, así también a menudo obtiene ayuda para ti en tus necesidades. Como Yo
no pude rechazar su petición en Caná, así tampoco puedo dejar de oír sus plegarias en el cielo. Sus meritos
te han proporcionado más favores de los que puedes sospechar. Sé un hijo leal a tu Madre celestial y tu
salvación esta asegurada.

Piensa:

El más grande merito de María fue su entrega a Dios. Cuando Jesús oyó a una mujer que le alababa a su
madre por tener tan prodigioso hijo, El dejo bien claro cual era la gloria mayor de su madre:
“Bienaventurados son más bien aquellos que oyen la palabra de Dios y la guarda” Ella que fue “llena de
gracia” vivió estas palabras a la perfección. Así, pues, ella se merece mis mayores alabanzas. Incluso
mucho más merece: “como madre mía celestial que desde el primer momento, me ha dado su atención y su
amor. ¿Puedo yo renunciar a amarla a mi vez? Mi amor quedará probado por la obediencia a los
mandamientos de su santo Hijo como nos recuerda la escritura: “Haced lo que El (Jesús) os diga”. Si yo soy
fiel a este mandamiento, el cielo lo tengo asegurado.

Oración:

¡Oh Virgen Madre de Jesús! Yo no te puedo pedir que seas mi Madre puesto que ya lo eres en realidad. DE
todos modos, si que reclamaré la ayuda para llegar a ser un buen hijo tuyo. Nunca me cansaré de cantar tus
alabanzas. ¡Cuantas veces me ha pasado desapercibido tu grande y puro amor hacia mí! Quiero reparar
ahora por tan grande ingratitud. Tú eres sin duda la madre perfecta. Tú me has dado los avisos y los
ejemplos que me llevarán al éxito definitivo en el cielo. Alcánzame la fuerza y la luz necesarias para seguir
por tus santos caminos. Ayúdame a dejar de una vez para siempre mis faltas diarias y a seguirte por los
caminos de Dios. Amén.
Reflexión 96: Amor inteligente:

Jesucristo:

Hijo, cuanto más estudies mi ley, tanto mejor comprenderás que ellas es lo único inteligente que se puede
hacer. Yo pido simplemente que valores las personas y las cosas en su autentico valor. Me ofendes
solamente cuando valoras falsamente a las personas y a las cosas en tu vida diaria.

No deberías aceptar dinero falso por autentico. Ni te deberías contentar con falsos valores en nada. Si
aprendes esta falsa honestidad no preferirás nunca a ninguna criatura más que a Mí.

Cuando pecas por entregarte a una creatura, estas poniendo en ella una estima que no se merecen. Estas
prefiriendo una satisfacción pasajera al gozo definitivo que yo te estoy preparando.

Si valoras las cosas como se merecen, tu mayor interés se orientará hacia mi voluntad en todas las cosas.
Pero en esta vida te engañas a ti con mucha frecuencia. Piensas que obras por caridad pero en realidad obras
por razones egoístas.

Piensa:

La única vida de la que uno no se avergüenza es de la vida honestamente pasada. Dios quiere ayudarme a
vivir tal género de vida. El quiere que estime a las personas y a las cosas como se lo merecen, Tal visión de
la realidad me evitaría muchas equivocaciones. Me enseñaría el verdadero significado de caridad y bondad.
Mis afectos se ensancharían y purificarían. Dejaría e juzgar cosas y personas con prejuicios. Los motivos
egoístas se harían más raros y débiles, comenzaría a ser lo que siempre he deseado ser. Sería un hombre de
la verdad, un hombre honesto, un hombre de Dios.

Oración:

Dios mío, dame las gracias de amar las cosas y personas conforme a sus meritos y valer. No permitas que mi
corazón controle mi cabeza. Deja que mi inteligencia controle mis emociones y que mi voluntad guíe mis
deseos irracionales. Haz que se capaz de amar lo que es bueno y de hacer lo que es recto incluso cuando
siente gusto por hacer lo contrario. No me será demasiado duro cunado considere que los amigos de esta
tierra me fallan. Tú, el mejor y más bueno de los amigos estas siempre conmigo. En la medida en que
cuento con tu amor y estoy en el camino del cielo tengo sólidos razones para sentir paz y gozo.
Reflexión 97: Los enemigos interiores del hombre:

Jesucristo:

No hay nada que te cause mayores preocupaciones que tu yo irracional. No podrías disfrutar de la paz del
cielo mientras no hayas adquirido control de tus deseos animales, de tus ambiciones egoístas y de tu loco
envidiar a los demás.

Si tu corazón no esta tranquilo, se debe a que estás aun controlado por tu ciego propio yo. Tu corazón no
descansa en Mí, sino en las comodidades, los juicios de los demás, las obras humanas o la seguridad en esta
vida. Están continuamente tentado al pecado porque estas centrado en ti mismo y lleno de deseos carnales.

Todo lo que no proviene de Mi y a Mi no lleva es malo. Algunos Santos se hacían asimismo frecuentemente
esta pregunta: ¿Que, me aprovecha esto para la eternidad? Esta es la única pregunta importante. Si vives
para esto perderás menos tiempo y harás mejores obres en tu vida diaria.

Tus sentimientos y deseos son buenos solamente cuando los mantienes bajo control. Tan pronto como se
hacen dueños de ti convertirán tu vida en esclavitud. NO tendrás paz contigo mismo y destruirán la paz de
cuantos están a tu alrededor. Te harás celoso, ambicioso, envidioso y difícil de vivir en su compañía.
Omitirán con frecuencia lo que deberías hacer y harás lo que no deberías. Te preocuparás demasiado de las
cosas de los otros y no tendrás tanto interés en las que debes hacer.

Harás un mundo mejor siguiéndome a Mí, empezando por ti mismo. Aprende mi verdad y haz que ella
gobierne tus pasiones, tus deseos de cada día, todos tus miedos y cada palabra y obra de tu vida diaria.

Piensa:

El hombre que no ha aprendido a mortificarse tiene dentro de si mismo el enemigo de su paz y de su bien.
Se levanta con facilidad contra los que contradicen o se oponen a sus deseos. Ve las obligaciones de los
otros, pero esta ciego para las suyas propias. Se ofende por las pequeñeces de los otros, mientras él, por su
parte, comete faltas mayores.

Oración:

Jesús, Tu conquistaste el mundo de las pasiones y los egoísmos. Por medio de tu vida de mortificación,
plegaria, trabajo y lealtad al querer del Padre, mereciste para mí todas las gracias necesarias para eliminar el
egoísmo en todas las actividades de mi vida diaria. Quiero empezar ahora una vida mortificada. Quiero
practicar el autocontrol hasta donde me sea posible, incluso cuando no haya peligro de pecado. Espero
obtener por medio de mi mortificación gracias para luchar contra las tentaciones futuras. Si estoy preparado
para sufrir por Ti ahora, estaré dispuesto para luchar por Ti después. Espero de Ti la fuerza necesaria para
empezar. Tú mereces esto. Haz que me olvide de mí y que piense solamente en Ti y en tu bondad
Omnipotente. Amén
Reflexión 98: Atracciones:

Jesucristo:

Hijo, cuando vas por la vida tu corazón se va aferrando a muchas cosas. Si este afearte se hace demasiado
fuerte te hará esclavo. Pecarás por su culta. En verdad que los gustos y disgustos naturales no son decisivos
en el acto de la voluntad, puedes pese a todo controlarlos, con la ayuda de la oración, la mortificación y mis
sacramentos.

Purifica tu amor a las cosas de la tierra usándolas sabiamente de acuerdo a mi ley. Solamente con un amor
puro como éste escaparás a la esclavitud de las atracciones terrenas. Nunca estarás demasiado preocupado
por la posibilidad de perder algo, ya sea un amigo o una pasión querida. No es esto una forma disimulada de
egoísmo, tú no haces más que poner en primer lugar lo que en realidad merece estar en primero: Dios por
encima de las creaturas.

No quier+as ser esclavo de nada en la tierra. Amaras a Mí y mi voluntad por enésima de todo. Te preocupas
demasiado cuando las cosas no salen conforme quieres y deseas. Aún no has sido capaz de entender la
pasajera realidad de las cosas de la tierra.

No permitas a los seres humanos ni a las satisfacciones humanas adueñarse demasiado de ti de manera que
llegues incluso a pecar por ellas. Si amas algo de esta forma, tu amor esta despistado y es una locura. Estás
prefiriendo un reflejo de Dios a Dios mismo.

Si quieres el gozo autentico y la grandeza de verdad, aférrate a

Mí por encima de todas las personas y cosas de tu vida. Deja a tus deseos y a tu amor que se guié por mi
voluntad y nunca te equivocarás.

Piensa:

Ni riqueza no esta en la posición ni en el disfrute de muchas cosas en la tierra, sino más bien en usar lo que
tengo con sabiduría y sin pecado, con la intención de agradar a Dios. Las riquezas, el honor, el orgullo, la
admiración, el poder y la superioridad sobre los otros y otras cosas por el estilo que me pueden atar a la
tierra, pasarán un día. ¿Por qué estoy tan seguro de poseer algo que estoy seguro que perderé? A no ser que
use esas cosas como Dios quiere, las usaré mal y me apartarán de El. Cuanto más llego a conocer a Dios
tanto más deseare desprenderme de las ataduras de a tierra, y desearé enriquecerme de El a lo largo de los
días. Mis necesidades reales son pocas. Pero la naturaleza humana protesta si es privada de lo que le gusta.
Con todo, debería apartarme de todo lo que no mejora realmente mi vida

Oración:

Díos mío, Tu eres el perfecto Bien. Cuanto me atrae a cualquier persona o cosa no es sino como un tenue
reflejo de tu infinita perfección. ¿Cómo puedo ser tan loco que pueda preferir la imagen a la realidad? Y
todo esto es lo que hago cuando te desprecio por el pecado. Ayúdame a enfrentar con la realidad. Desde este
momento quiero vivir para Ti por medio de un adecuado uso de las creaturas en mi vida diaria. Cuando me
lleva al pecado debe de ser eliminado. Dame amor y buscar solo que me ayuda a agradarte. Tú sabes qué es
lo mejor. Muéstrame tu voluntad y dame la fuerza necesaria para seguirlo. Amén.

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