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ESCUELA DE EDUCACIÓN
SUPERIOR TECNICOPROFESIONAL DELITOS CONTRA EL ORDEN PÚBLICO
I. DATOS GENERALES
II. SUMILLA
III. OBJETIVOS
A. OBJETIVO GENERAL
B. OBJETIVOS ESPECÍFICOS
I UNIDAD
DELITOS CONTRA EL ORDEN PUBLICO
CAPITULO I
MARCO CONCEPTUAL
CONCEPTOS FUNDAMENTALES
NOV MARCO CONCEPTUAL I PARTE
PRIMERA 1. Orden publico.-Elementos del Orden Publico.-
SEMANA Características del Orden Publico.-Funciones Policiales
Martes 08 relativas al Orden Publico.
Viernes 11
14:30 a 16:10
NOV MARCO CONCEPTUAL II PARTE
SEGUNDA 2. Orden Interno.- Elementos del Orden Interno.- Finalidad del
SEMANA Orden Interno. Características del Orden Interno.
Martes 15
Viernes 18
14:30 a 16:10
NOV MARCO CONCEPTUAL III PARTE
TERCERA 3. Paz Social- Características: igualdad, libertad, justicia,
SEMANA dinámica, presupuesto para el desarrollo social, económico y
Martes 22 general. 4. Acto Vandálico. 5. Bloqueos de carreteras:
Viernes 25 Realidad actual. 6. El derecho a la libertad de reunión-
14:30 a 16:10 jurisprudencia nacional. 7. Movilización social.
NOV MARCO CONCEPTUAL IV PARTE
CUARTA 7. Regímenes de Excepción. 8. Art. 137º Constitución Política
SEMANA del Estado. A. Estado de Emergencia. B. Estado de Sitio
Martes 29
Viernes 02DIC
14:30 a 16:10
MARCO CONCEPTUAL V PARTE
DIC
9. LaPolicía Nacional como garante del orden interno, el
QUINTA
orden público y la paz social: Finalidad.- La PNP en el
SEMANA
mantenimiento del Orden Interno y del Orden Publico.-
Martes 06
Relaciones entre el Orden Público y el Orden Interno.-El
Viernes 09
Orden Interno y la Paz Social: Concepto de Paz Social.-
14:30 a 16:10
Relaciones entre el Orden Interno y La Paz Social.
DIC MARCO CONCEPTUAL VI PARTE
SEXTA TEORIA DEL DELITO
SEMANA 1. Teoría del delito.- 2. Definición de delito. 3. Elementos del
Martes 13 tipo penal. 4. La tipicidad y el tipo penal. 5. El tipo penal
Viernes 16 doloso. 7. El tipo penal omisivo.8.El tipo penal culposo. 9. El
14:30 a 16:10 bien Jurídico Protegido. 10. El IterCriminis.
DIC MARCO CONCEPTUAL VII PARTE
SEPTIMA TEORIA DE LA PARTICIPACION
SEMANA 1. Teoría de la participación. 2. Autoría. 3. Coautoría. 4.
Martes 20 Complicidad. 5. Art. 23º, 24º y 25º Código Penal. 6.
Viernes 23 Jurisprudencia y Doctrina.
14:30 a 16:10
DIC
OCTAVA
SEMANA PRIMER EXAMEN PARCIAL
Martes 27
Viernes 30
14:30 a 16:10
II UNIDAD
DELITOS CONTRA EL ORDEN PUBLICO
CAPITULO II
DELITOS QUE ATENTAN EL ORDEN PUBLICO
ENE 17 1. Atentado contra los medios de transporte colectivo o
NOVENA de comunicación. Artículo 280 CP.- Tipo penal.- Bien
SEMANA Jurídico Protegido.- Sujeto Activo.- Sujeto Pasivo.-
Martes 03 Tipicidad Subjetiva.- Penalidad.- Casuística.-
Viernes 06 Jurisprudencia-Doctrina.
14:30 a 16:10
ENE 17 2. Atentado contra la seguridad común. Artículo
DECIMA 281.Forma culposa. Artículo 282 CP. Tipo penal.- Bien
SEMANA Jurídico Protegido.- Sujeto Activo.- Sujeto Pasivo.-
Martes 10 Tipicidad Subjetiva.- Penalidad.- Casuística.-
Viernes 13 Jurisprudencia-Doctrina.
14:30 a 16:10
ENE 17 3. Entorpecimiento al funcionamiento de servicio
DÉCIMO público. Artículo 283 CP. Tipo penal.- Bien Jurídico
PRIMERA Protegido.- Sujeto Activo.- Sujeto Pasivo.- Tipicidad
SEMANA Subjetiva.- Penalidad.- Casuística.- Jurisprudencia-
Martes 17 Doctrina.
Viernes 20 4. Abandono de servicios de transporte. Artículo 284 CP.
14:30 a 16:10 Tipo penal.- Bien Jurídico Protegido.- Sujeto Activo.-
Sujeto Pasivo.- Tipicidad Subjetiva.- Penalidad.-
Casuística. Jurisprudencia-Doctrina.
ENE 17 5. Sustitución o impedimento de funciones en medios
DÉCIMO de transporte. Artículo 285 CP.- Tipo penal.- Bien Jurídico
SEGUNDA Protegido.- Sujeto Activo.- Sujeto Pasivo.- Tipicidad
SEMANA Subjetiva.- Penalidad.- Casuística.- Jurisprudencia-Doctrina.
Martes 24 6. Disturbios. Artículo 315 CP.- Tipo penal.- Bien Jurídico
Viernes 27 Protegido.- Sujeto Activo.- Sujeto Pasivo.- Tipicidad
14:30 a 16:10 Subjetiva.- Penalidad.- Casuística. Jurisprudencia-Doctrina.
ENE 17
DÉCIMO
TERCERA SEGUNDO EXAMEN PARCIAL
SEMANA
Martes 31
Viernes 03FEB
14:30 a 16:10
III UNIDAD
LA ALTERACION DEL ORDEN PÚBLICO
CAPITULO III
DERECHOS FUNDAMENTALES DE LAS PERSONAS Y LA FUNCION
ESPECÍFICA DE LA POLICIA NACIONAL DEL PERU
V. PROCEDIMIENTOS DIDÁCTICOS
A. EQUIPOS
C. MATERIALES
VII. EVALUACIÓN
1. Talleres
2. Exposiciones
3. Dos exámenes escritos parciales (8ª y 13ª semana), enmarcados en los
modelos de la Prueba Objetiva, pudiendo, además, contener preguntas
tipo desarrollo y situación problema, en las que prime el empleo de la
capacidad reflexiva, la correlación de criterios, el análisis y el
pensamiento lógico.
4. Un trabajo de investigación monográfica que se valorará en su forma y
contenido.
Promedio General:
A. Constitución Política.
B. Código Penal.
C. Diccionario Jurídico.
D. Monografias.com.pe
E. Tercer Informe Relator Especial sobre el Derecho a la Libertad de asociación
y reunión pacífica en contexto de elecciones, 2013, MainaKiai
F. Resolución 22 10 Consejo de Derechos Humanos sobre Manifestaciones
Pacíficas
G. Resolución 13 15 del Consejo de Derechos Humanos sobre Manifestaciones
Pacificas
H. Código de conducta para funcionarios encargados de hacer cumplir la ley
(ONU)
I. Principios Básicos sobre el Empleo de la Fuerza y de Armas de Fuego por los
Funcionarios Encargados de Hacer Cumplir la Ley (OACDH)
J. Guía de Manifestaciones Públicas (Espacio Público)
K. Comentario de la Relatora Especial sobre la Situación de los Defensores de
los Derechos Humanos, a la Declaración sobre el Derecho de Promover y
Proteger los Derechos Humanos (OACDH)
L. Protesta Social Pacífica (FIDH)
I UNIDAD
DELITOS CONTRA EL ORDEN PÚBLICO
CAPITULO I
PRIMERA SEMANA
TEMA: MARCO CONCEPTUAL. ORDEN PÚBLICO. ELEMENTOS. CARACTERISTICAS.
FUNCIONES POLICIALES RELATIVAS AL ORDEN PÚBLICO.
1. ORDEN PUBLICO
2.2.2 Es factor de desarrollo.- Porque propicia una situación favorable del país.
2.2.6 Es adaptable.- Porque no es rígido. Hay una relación dinámica con factores
cambiantes que provienen de la sociedad y del exterior, lo contrario atentaría
contra su propia existencia.
2.2.7 Está basada en los Derechos Humanos.- Porque sus normas regulan el
respeto a los Derechos fundamentales de la persona, consagrada en la
legislación nacional e Internacional sobre esta materia.
SEGUNDA SEMANA
TEMA: MARCO CONCEPTUAL: ORDEN INTERNO. ELEMENTOS. FINALIDAD.
CARACTERISTICAS.
2. ORDEN INTERNO
El Orden Interno viene a ser una situación de normalidad dentro de territorio nacional,
en la cual las autoridades ejercen sus atribuciones y las personas sus derechos y
libertades, con sujeción a la normatividad jurídica existente, en donde se encuentra
garantizada la existencia, la estabilidad y soberanía del Estado, procurando el
desarrollo equilibrado del país y el logro de su fin supremo.
2.1.1 Situación de paz.- porque es una actitud, una postura, una condición, una fase,
una circunstancia que se da como un hecho indubitable, una posición y
disposición de Paz, sosiego, calma, tranquilidad y salutación en el territorio
nacional.
2.1.3 Regulado por el Derecho Público, porque éste se refiere al interés del Estado,
a sus relaciones y a los fines que persigue (comprende el Derecho
Constitucional, administrativo, Policial, Militar, Penal, Procesal Penal, y
Financiero), estando dentro del Derecho Penal los delitos que afectan al Estado
y a la Defensa Nacional (atentados contra la Seguridad Nacional, Terrorismo,
Traición a la Patria), así como contra los Poderes del Estado y el Orden
Constitucional (Rebelión, Sedición, Motín).
2.2 FINALIDAD:
2.3. CARACTERISTICAS:
2.3.8. Su control es potestad del Poder Político. De conformidad al Art. 188 Inc. 4
de la Constitución, la autoridad política dispone su necesidad y los términos de
su control de acuerdo al Art. 137. a. de la Constitución. El origen de esta
característica o principio, surge en Inglaterra en 1780 como consecuencia de
una serie de motines que se presentaron en Londres. Al respecto el jurista
parlamentario Lord Viansfield manifestó que los militares deberían intervenir no
como soldados, sino como ciudadanos y que la autoridad civil local mantenía el
ejercicio del mando supremo.
Las atribuciones y facultades que se dan en forma se requiere para los Art. 118
inc. 4 Presidente de la República, 137, 165 y 166 PNP, son niveles de
responsabilidad y no Órdenes internos menores no puede existir pues un orden
interno exclusivamente para el desarrollo del país a cargo del Presidente o del
gobierno de turno y otro orden interno menor, restringido a cargo de la PNP.; ya
que ésta figura jurídica como finalidad fundamental del Estado es única,
existiendo la responsabilidad de velar por él, en garantía, mantenimiento,
restablecimiento y control de niveles de responsabilidad que no solo compete al
Presidente de la República sino también a la PNP y las FFAA sino también de
conformidad a sus respectivas leyes Orgánicas al Ministerio del Interior, a los
Gobiernos Locales y a las Autoridades Políticas.
Por lo expuesto no puede haber dos clases de orden interno sino uno solo, con
diversos matices o manifestaciones de intensidad o violencia. Su control,
mantenimiento y restablecimiento en cualquiera de los casos constituye el
desarrollo nacional.
3. PAZ SOCIAL.
El Jurista Hans Kelsen nos dice que: "La Paz es una situación que se caracteriza por
la ausencia de la Fuerza. Dentro de una Sociedad organizada, sin embargo, la
ausencia absoluta de Fuerza la idea del anarquismo no es posible. El empleo de la
Fuerza en las relaciones entre los individuos se evita reservándolo para la Comunidad"
3.1.1 CARACTERÍSTICA
3.1.2 IGUALDAD. La condición previa para una Paz Social permanente es la igualdad.
Teniendo en consideración que sólo las desigualdades pueden provocar
situaciones desesperadas y violentas de rebelión ante la iniquidad.
3.1.3 LIBERTAD La Paz Social se da en libertad, que es la garantía que tienen todas las
personas para poner en evidencia el despliegue de sus capacidades y derechos
que les brinda el ordenamiento jurídico. Asimismo, para que las personas puedan
desarrollarse y alcanzar mejores niveles de vida.
3.1.5 DINAMICA. No constituye una situación o noción estática; muy por el contrario es
sumamente dinámica.
4. ACTOS VANDALICOS.
En nuestra lengua se denomina como actos vandálicos a aquellas acciones que son
perpetradas por una o varias personas y que consisten en destruir y devastar todo
cuanto se enfrente a su paso. Normalmente atacan con suma violencia y descaro
locales comerciales, casas, edificios, escuelas, instituciones públicas, entre otras,
rompiéndolas o atacándolas directamente con objetos contundentes que les producen
severos daños.
Los actos vandálicos se realizan bajo el amparo de una protesta que puede ser
legítima y justificada. De esta manera, el vandalismo suele formar parte de una
actuación general de tipo reivindicativo y normalmente con un sentido social. Sin
embargo, quienes cometen los actos vandálicos no tienen por qué compartir las
protestas, puesto que su objetivo es provocar el terror y la devastación.
5. BLOQUEO DE CARRETERAS.
Es evidente que estamos, frente a una colisión de derechos. Las posiciones más
estrictas dirían que, aunque se trate de una marcha pacífica, el solo hecho de impedir
el paso por una vía importante y en días de trabajo afecta los derechos de terceros y
hace que la reunión no sea legal. Sin embargo, para otros, no debería descartarse tan
fácilmente el derecho constitucional de las personas a reunirse en las vías públicas.
5.1.2. Lo preocupante es que solo se ven los actos de protesta y no se ven las razones de
esa protesta, tales como la destrucción del hábitat de estos pueblos y la amenaza a
la subsistencia de los mismos. Ciertamente aquí nadie pretende defender actos de
vandalismo y de violencia, como, por ejemplo, incendiar y saquear establecimientos
públicos, atentar contra la propiedad privada o poner en peligro los derechos
fundamentales de particulares.
5.2. EL DERECHO A LA LIBERTAD DE REUNIÓN
5.2.3. Hasta ahí todo parece claro. Sin embargo, qué hacer cuando el Estado, la opinión
pública y la prensa ignoran o desconocen las denuncias de comunidades
campesinas cuyos derechos son violados sistemáticamente. ¿Deben quedarse
cruzados de brazos luego de agotar los mecanismos formales de denuncia y
esperar cómo la vida se vuelve imposible en sus hábitats? Estas personas tienen
que afrontar un dilema medio tramposo. Si no toman la carretera (medios lícitos y
pacíficos), no les hace caso el gobierno; y, si toman la carretera, incurren en delito
penal (por interrumpir medios de transporte) y los procesan penalmente. ¿Qué
hacer? No se trata de una especulación de gabinete. El Ministerio del Interior acaba
de anunciar que se denunciará a los que promuevan el bloqueo de carreteras. Es
decir, está proponiendo la criminalización de la protesta. No es un caso
excepcional. En el evento de Arequipa, denominado “Foro Nacional de los Pueblos
alternativo a la 30º Convención Minera”, muchos dirigentes denunciaron que viene
siendo objeto de innumerables procesos penales por cortar carretas.
5.3.1. En este contexto, resulta oportuna una sentencia recientemente expedida por el
Poder Judicial en nuestro país, en un caso sobre criminalización de la protesta. En
efecto, el pasado 11 de agosto fue difundido la sentencia de la Sala Penal
Permanente de la Corte Suprema sobre el caso de los 21 indígenas procesados por
hechos ocurridos en el contexto de una protesta contra la empresa petrolera
PLUSPETROL, que tuvo lugar en el año 2008. En su resolución, el máximo
colegiado confirmó la sentencia absolutoria que emitiera en diciembre del 2009 la
Segunda Sala Penal de Justicia de Loreto.
5.3.2. Se trata realmente de un caso emblemático que debe motivar un debate. Segunda
Sala Penal de Justicia de Loreto precisó que la criminalización de la protesta social
es debido a “la falta de capacidad del Estado para dar solución satisfactoria a los
reclamos que formulan diversos sectores y grupos sociales, generalmente de bajos
o nulos recursos económicos que se ven excluidos de la sociedad”. Añade que “la
respuesta que viene dando el Estado a la creciente demanda y protesta social es la
judicialización o criminalización de la misma, persiguiendo a los activistas sociales,
en vez de dar solución a los reclamos planteados, involucrando al Poder Judicial en
asuntos que no le compete resolver toda vez que se trata de conflictos sociales”.
Agrega la mencionada sala que la protesta de los miembros de la comunidad de
ANDOAS “está enmarcada dentro del derecho constitucional de petición, por lo que
el hecho de haber participado en la ocupación de la pista de aterrizaje del
aeródromo de ANDOAS y de algún acto de fuerza, no constituye delito debido a
que el reclamo ante situaciones de real pobreza y falta de respuestas razonables
del Estado, constituye un estado de necesidad justificante, contemplado en el inciso
4.a. del artículo 20º del Código Penal”. Un buen análisis breve de esta sentencia,
fundamentalmente desde la perspectiva penal, podemos encontrarlo en el artículo
de Marlene Román. Se trata de un tema que debería merecer un amplio debate por
la comunidad jurídica penal. El tema de fondo no es otro que el uso del derecho
penal en contexto de conflictos sociales.
6. MOVILIZACIÓN SOCIAL.
CUARTA SEMANA
MARCO CONCEPTUAL IV PARTE
REGÍMENES DE EXCEPCIÓN. ART. 137º CONSTITUCIÓN POLÍTICA DEL
ESTADO. ESTADO DE EMERGENCIA. ESTADO DE SITIO
7. REGIMENES DE EXCEPCION.
7.1 DEFINICION
Un Régimen de Excepción puede ser definido como aquel Régimen que adopta un
Estado Constitucional, cuando se presentan en todo su territorio o parte de él,
circunstancias que afectan gravemente el orden interno, por lo que se adoptan
medidas urgentes y excepcionales, como la restricción de determinados derechos
fundamentales de las personas, por un tiempo determinado, a fin de lograr la
estabilidad y gobernabilidad.Como su mismo nombre lo indica, este régimen debe ser
excepcional, además de temporal (se establece por un tiempo determinado).
- Derecho a la libertad de reunión (Art. 2, inciso 12, de la CP93), por el cual, según el
texto constitucional de 1993, toda persona tiene derecho a reunirse pacíficamente sin
armas. Las reuniones en locales privados o abiertos al público no requieren aviso
previo. Las que se convoquen en plazas y vías públicas exigen anuncio anticipado a
la autoridad.
- Derecho a la libertad de tránsito (Art. 2, inciso 11, de la CP93), por el cual, toda
persona tiene derecho a transitar por el territorio nacional, a entrar y salir de él, salvo
limitaciones por razones de sanidad o por mandato judicial o por aplicación de la Ley
de Extranjería.
7.2.2Estado de Sitio
El Estado de Sitio se declara cuando se presentan circunstancias más graves que las
que permiten declarar el Estado de Emergencia. Así, en el artículo 137.2 de la CP93
se señala que el Estado de Sitio se puede decretar en caso de invasión, guerra
exterior, guerra civil, o peligro inminente de que se produzcan.
El Estado de Sitio también debe ser declarado por el Presidente de la República, con
acuerdo del Consejo de Ministros, y el plazo de su instauración no puede exceder de
cuarenta y cinco días. Así se ha señalado en el artículo 137.2 de la CP93.
Debe tenerse en cuenta, sin embargo, que existen determinados derechos que no
pueden restringirse ni siquiera en un Régimen de Excepción, por haberse así
dispuesto en Tratados Internacionales de Derechos Humanos, suscritos y ratificados
por el Estado peruano.
De la revisión del artículo 27.2 de la CADH se colige que en un Régimen de
Excepción no se puede restringir los derechos contemplados en los artículos
siguientes de la referida Convención: 3 (Derecho al reconocimiento de la
personalidad jurídica); 4 (Derecho a la vida); 5 (Derecho a la integridad personal); 6
(prohibición de la esclavitud y servidumbre); 9 (principio de legalidad y retroactividad);
12 (Libertad de Conciencia y Religión); 17 (Protección a la familia); 18 (Derecho al
nombre); 19 (Derechos del Niño); 20 (Derecho a la Nacionalidad), y 23 (Derechos
Políticos), ni de las garantías judiciales indispensables para la protección de tales
derechos.
De igual manera, de la revisión del artículo 4.2 del PIDCyP se colige que durante un
Régimen de Excepción no se autoriza a suspender lo regulado en los artículos 6,7, 8
(párrafos 1 y 2), 11, 15, 16 y 18 del referido Pacto. Esto es, no se puede suspender
los siguientes derechos: a la vida (art. 6), a no ser sometido a torturas ni a penas o
tratos crueles, inhumanos o degradantes, así como a no ser sometido sin libre
consentimiento a experimentos médicos o científicos (art. 7); el derecho a no ser
sometido a esclavitud y a servidumbre, así como la prohibición de la trata de esclavos
(art. 8, párrafos 1 y 2); el derecho a no ser encarcelado por el solo hecho de no poder
cumplir una obligación contractual (art. 11); derecho a no ser condenado por actos u
omisiones que en el momento de cometerse no fueran delictivos según el derecho
nacional o internacional, derecho a que no se imponga pena más grave que la
aplicable en el momento de la comisión del delito (art. 15); el derecho a la
personalidad jurídica (art. 16); derecho a la libertad de pensamiento, de conciencia y
de religión, este derecho incluye la libertad de tener o adoptar la religión o las
creencias de su elección, así como la libertad de manifestar su religión o sus
creencias, individual o colectivamente, tanto en público como en privado, mediante el
culto, la celebración de los ritos, las prácticas y la enseñanza (art. 18)
Por ejemplo, puede darse el caso que se haya declarado el Estado de Emergencia
en una determinada región por la existencia de manifestaciones violentas en plazas y
vías públicas, con ataques a la propiedad pública y privada. Como ya se ha
señalado, en estos supuestos, uno de los derechos que se restringe es el derecho de
reunión.
QUINTA SEMANA
TEMA: MARCO CONCEPTUAL: FINALIDAD DE LA PNP. LA POLICIA
NACIONAL COMO GARANTE DEL ORDEN INTERNO. EL ORDEN PÚBLICO Y
LA PAZ SOCIAL. FINALIDAD. LA PNP EN EL MANTENIMIENTO DEL ORDEN
INTERNO Y EL ORDEN PÚBLICO. RELACIONES ENTRE EL ORDEN PÚBLICO
Y EL ORDEN INTERNO. EL ORDEN INTERNO Y LA PAZ SOCIAL. CONCEPTO
DE PAZ SOCIAL. RELACIONES ENTRE ORDEN INTERNO Y PAZ SOCIAL.
1. FINALIDAD DE LA POLICIA NACIONAL DEL PERU
1.3 Además, agregan que "no le corresponde y no le puede corresponder a una sola
Institución, la supervisión total del Orden Interno", dado que esa finalidad asignada a
la Policía Nacional podría extenderse a todos los aspectos de la organización social y
hasta de la vida individual, lo que no es ni puede ser el propósito del constituyente ni
la intención de los funcionarios policiales.
1.4 Sin embargo, ante estas ponencias, resulta necesario recalcar que las actividades
que cumple la Policía Nacional, en todas y cada una de las circunstancias o
momentos a los que hace referencia el mandato constitucional, están referidas a
funciones relacionadas plenamente con el Orden Público de carácter netamente
Policial; es decir, la preparación y ejecución de actividades y operaciones materiales
destinadas a impedir que el Orden Interno sea resquebrajado, todas ellas
caracterizadas por su relación con la Prevención, la Seguridad y las Investigaciones
de los Delitos, para que exista una adecuada armonía y paz social en nuestra
sociedad.
1.5 En este sentido, debemos aclarar que la Institución cumple funciones que le señalan
exclusivamente la Carta Magna y la Ley de la Policía Nacional del Perú (ex Ley
Orgánica de la PNP), sin exceder el ámbito de sus atribuciones, responsabilidades y
capacidades.
2.3 Considerando que el Orden Interno guarda estrecha relación con la disposición que
adoptan las Instituciones del Estado, en esta Fase de la Finalidad Fundamental de la
Policía Nacional, como en las otras dos (Garantizar y Controlar), el Presidente de la
República y las autoridades políticas ejercen sin restricción o limitación alguna la
responsabilidad que tienen en el Orden Interno.
Hay que conocer también los derechos, las libertades y las obligaciones legales de
las personas que no participan en dichos acontecimientos. El mantenimiento del
orden consiste en velar por los derechos de un grupo de personas a ejercer sus
derechos y libertades legales sin infringir los derechos de otros, al tiempo que se
garantiza que todas las partes respeten la Ley.
Desde el punto de vista normativo, se entiende por orden público la vigencia de las
leyes y del principio de autoridad. Desde el punto de vista fáctico, orden público es el
estado relativo de tranquilidad y seguridad que reina en los espacios públicos y
demás lugares de convivencia humana, en observancia de las leyes y el respeto a la
autoridad, siendo la Policía Nacional responsable de garantizarlo, mantenerlo y re
establecerlo.
4.1 Las causas, hechos o motivos que alteran el Orden Público pueden ser orientados
intencionalmente hacia el resquebrajamiento del Orden Interno, pudiendo ser a la vez
independientes de éstos, pero en ciertas circunstancias se complementan.Algunas
de las alteraciones del Orden Público en determinadas circunstancias por su
magnitud y naturaleza, pueden derivar en riesgos y atentados contra el Orden
Interno, cuando ponen en peligro la estabilidad del Estado y de sus Poderes e
Instituciones.
4.3 Pueden presentarse eventos que alteran el Orden Público porque atentan contra la
población; sin embargo, en determinadas circunstancias, los mismos eventos alteran
simultáneamente el Orden Interno, por cuanto la acción conlleva peligro contra la
estabilidad del Gobierno o de las Instituciones Públicas. Ejm. Acciones de terrorismo
o de guerrillas.
4.4 El Orden Público tiene dimensiones funcionales mas amplias y variadas que las
correspondientes al Orden Interno, sin embargo el Orden Interno prevalece sobre el
Orden Público porque prima la seguridad y defensa de la estructura del Estado.
4.5 El Orden Interno y el Orden Público fluyen de la misma naturaleza filosófica, jurídica
y sociológica.
4.6 Son secuencia directa del acatamiento a la Constitución y las leyes dentro de un
Estado de Derecho en la comunidad nacional.
4.7 La finalidad y objetivo del Orden Interno y del Orden Público es mantener vigente el
principio de autoridad del Estado proporcionando orden, seguridad, desarrollo
nacional y paz social, dentro del ordenamiento jurídico del país.
Esta Paz Social debe ser entendida como un Objetivo Prioritario a perseguir por
todos, como una verdadera Tarea- País. La obtención de la Paz Social, permanente
y duradera en el tiempo, es tarea de todos y principalmente de quienes hoy tienen la
responsabilidad de sembrar el futuro de las nuevas generaciones.
La Paz Social constituye un "anhelo" de las personas, más allá de sus diferencias y
particulares puntos de vista. Si la Paz Social tiene sentido, es precisamente porque
se le aprecia y entiende como un elemento fundamental para el desarrollo y alcanzar
mejores niveles de vida, sin renunciar a la libertad, porque sin ésta, la Paz Social es
simplemente un imposible. Finalmente, la Paz Social verdadera parece que tiene
más que ver con el impulso y la protección de la libertad humana que con las
restricciones a la misma.La Paz Social no puede ni debe ser entendida como
inmovilismo o rigidez social. La Paz Social parece aludir exactamente a lo contrario.
Parece aludir al medio más adecuado para el progreso y desarrollo de las personas,
y a un mecanismo de impulso que es el "libre despliegue de las capacidades e
iniciativas de cada uno".
La Paz Social es el ambiente que hace posible que la gente concentre sus energías
en mejorar sus vidas, en desarrollarse y así lograr aportar a la sociedad. La clave es
que la Paz Social no constituye una noción o situación estática. Se trata de aludir
precisamente a un esquema de equilibrio que potencia las capacidades y creatividad
de cada uno y da espacio a nuevas iniciativas y esfuerzos por más diversos que
estos sean.En esencia, la Paz Social se basa en la asunción de un esquema de
reglas y criterios de situación que son comunes y que se aceptan en la medida que
se entienden funcionales al bienestar de todos. Es un esquema en que las personas
asumen que para su propio desarrollo y bienestar es preferible aceptar esas reglas
antes que rechazarlas.
SEXTA SEMANA
MARCO CONCEPTUAL.1. TEORIA DEL DELITO. 2. DEFINICION DE DELITO. 3.
ELEMENTOS DEL DELITO. 4. LA TIPICIDAD Y EL TIPO PENAL. 5. EL TIPO
PENAL DOLOSO. 6. EL TIPO PENAL OMISIVO. 7. EL BIEN JURIDICO
PROTEGIDO. 8. EL ITER CRIMINIS.
2. DEFINICION DE DELITO.
El delito es definido como una conducta típica, antijurídica y culpable, sometida a una
sanción penal y a veces a condiciones objetivas de punibilidad. Supone una conducta
infraccional del Derecho penal, es decir, una acción u omisión tipificada y penada por
la ley.
En sentido legal, los códigos penales y la doctrina definen al "delito" como toda aquella
conducta (acción u omisión) contraria al ordenamiento jurídico del país donde se
produce.
La palabra delito deriva del verbo latino delinquere, que significa abandonar,
apartarse del buen camino, alejarse del sendero señalado por la ley. La definición de
delito ha diferido y difiere todavía hoy entre escuelas criminológicas. Alguna vez,
especialmente en la tradición, se intentó establecer a través del concepto de Derecho
natural, creando por tanto el delito natural. Hoy esa acepción se ha dejado de lado, y
se acepta más una reducción a ciertos tipos de comportamiento que una sociedad, en
un determinado momento, decide punir.
Antes que todo queremos definir para fines de nuestro estudio lo que es elemento en
sentido amplio y en sentido estricto:
"Elemento" del latín elementum, designa "el fundamento o parte integral de una cosa".
Dentro del contexto jurídico-penal a la palabra elemento del delito, le damos una
connotación restringida, con dicha forma fonética designamos" Cada una de las partes
en que puede ser analizado el delito y que le da existencia, al delito en general o
especial.
Una vez que hemos esclarecido lo que entendemos por elemento strictu sensu y lato
sensu veremos cuáles son los elementos del delito:
3.2. Resultado: Para que la acción tenga relevancia para el Derecho Penal, tiene
que producir un cambio en el mundo exterior, es decir tiene que haber un delito
cometido para haya u resultado o una consecuencia y que puede ser formal o
material, y que puede colocarse en el peligro a que se sujeta en un bien jurídico.
4.1. La tipicidad.
Conducta típica o Tipicidad tiene que ver con toda conducta que conlleva una acción u
omisión que se ajusta a los presupuestos detalladamente establecidos como delito
dentro de un cuerpo legal. Esto quiere decir que, para que una conducta sea típica,
debe constar específica y detalladamente como delito dentro de un código.
De este modo, en cada legislación nacional o internacional, cada uno de los delitos
que se pretenden castigar debe ser «tipificado», o lo que es lo mismo, descrito con
precisión. Si una conducta humana no se ajusta exactamente al tipo penal vigente, no
puede considerarse delito por un juez. De este modo una norma penal está integrada
por dos partes: el tipo y la pena.
Por ejemplo, cuando se perpetra un delito de hurto, al sujeto activo de ese delito, o sea
al delincuente, lo tiene sin cuidado violar o no violar la ley penal; a él sólo le interesa
apoderarse de una cosa mueble ajena, es decir, su intención va dirigida a la obtención
de determinados propósitos o resultados prácticos al perpetrar el delito.
Manzini define al dolo como la voluntad consciente y no coaccionada de ejecutar u
omitir un hecho lesivo o peligroso para un interés legitimo de otro, del cual no se tiene
la facultad de disposición conociendo o no que tal hecho esta reprimido por la ley.
Una vez determinado que el puñal clavado en el pecho de la víctima proviene de una
conducta humana, conviene preguntarse por la posible relevancia de un tercero en ese
suceso.
El bien jurídico se denomina de formas diversas, tales como: derecho protegido, bien
garantizado, interés jurídicamente tutelado, objeto jurídico9, núcleo del tipo, objeto de
protección. No puede surgir el delito cuando por inexistencia del objeto de tutela o por
falta de idoneidad de la acción es imposible la lesión de un bien jurídico, el cual se
presenta en las formas más diversas debido a su pretensión de garantizar los
derechos de toda persona, como pueden ser entre otros: reales, jurídicos,
psicológicos, físicos, etcétera.
Rocco precisó que el concepto de bien jurídico ha de apoyarse sobre la idea de valor.
Según Cobo del Rosal, el bien jurídico se puede definir como "todo valor de la vida
humana protegida por el derecho". Para Jescheck el bien jurídico constituye el punto
de partida y la idea que preside la formación del tipo. Afirma además que son bienes
jurídicos aquellos intereses de la vida, de la comunidad a los que presta protección el
derecho penal. En nuestra opinión, el bien jurídico como objeto de protección del
derecho penal es todo valor individual o de conjunto que merece la garantía de no ser
vulnerado por la acción de otro. Así entonces, el tipo penal se debe entender como un
valor ideal del orden social jurídicamente protegido, por tanto, el bien jurídico
constituye la base de la estructura e interpretación de los tipos.
8. EL ITER CRIMINIS.
a) Fase interna:
b) Fase externa:
Sin embargo, no todos los actos externos -incluso los que en la mente del autor
formaban parte de su plan criminal- son penalmente relevantes, pues algunos, en
abstracto, no están inequívocamente destinados a perpetrar delitos, en otras
palabras, pueden constituir comportamientos adecuados socialmente: ama de casa
que compra un cuchillo o un veneno para ratas.
SEPTIMA SEMANA
MARCO CONCEPTUAL. 1. TEORIA DE LA PARTICIPACION. 2. AUTORIA. 3.
COAUTORIA. 4. COMPLICIDAD. 5. INSTIGACION. 6. ART. 23, 24 Y 25 DEL
CODIGO PENAL. 7. JURISPRUDENCIA Y DOCTRINA.
1. LA PARTICIPACIÓN.
1.1. La teoría de la participación se pone de manifiesto cuando el sujeto no realiza la
acción típica, no tiene dominio del hecho o no le incumbe el deber especial en los
delitos de infracción de deber. Es el acuerdo de dos o más personas para la comisión
de un delito que puede ser cometido por una sola persona.La participación implica
contribución en un hecho ajeno, esto es, en un hecho que tiene varios autores.
1.3. Esta participación es la participación en su forma dolosa. Esta participación exige que
el partícipe debe conocer y querer su participación en la realización de un hecho típico
y antijurídico de otra persona (según la teoría de accesoriedad que se mantenga) , el
cual es el autor. La participación solo es punible en esta forma, en la dolosa. Esto no
quiere decir que una participación imprudente en un hecho delictivo, doloso o
imprudente, ajeno, no pueda ser constitutiva de autoría de un delito imprudente. Y,
esto es así, porque en los delitos imprudentes la autoría se fundamenta tanto por la
infracción del deber de cuidado, como por el dominio objetivo de la acción imprudente
que se realiza. Si se dan ambos requisitos habrá autoría, pero no si falta uno de ellos.
Si falta alguno de ellos no se pude fundamentar la autoría del resultado que se
produzca.
2. AUTORÍA.
Una de ellas es la teoría objetivo formal, según la cual será autor quien realice la
conducta prevista en el tipo penal, y partícipe quien no realizando dicha conducta,
contribuye a su realización. El problema de esta teoría es que no da cabida a la
autoría mediata (pues el hombre de atrás no realiza directamente la conducta prevista
en el tipo).
La teoría del dominio del hecho, predominante en la actualidad, resuelve este
problema.Si la teoría objetivo formal fundaba la distinción entre autores y partícipes en
la realización personal de la acción típica, la teoría ahora examinada establece esa
diferencia en un criterio material: el dominio del hecho. Domina el hecho quien decide
el cómo y cuándo de la ejecución del hecho, quien controla sus aspectos esenciales,
es la figura central o señor del hecho punible.
3. COAUTORÍA.
1. Requisitos.
a) Decisión común: entre los intervinientes existe una decisión común de realizar el
delito, que se distingue del acuerdo de voluntades propio de la participación en razón
que las aportaciones de los coautores es manifiesta en un plano de igualdad, lo que
permite hablar de una acción conjunta formada por actos parciales que posibilita una
división de trabajo, o distribución de funciones orientado al logro exitoso del resultado.
4. COMPLICIDAD.
7. DOCTRINA Y JURISPRUDENCIA.(conversatorio)
OCTAVA SEMANA
TEMA: PRIMER EXAMEN PARCIAL
NOVENA SEMANA
II UNIDAD
DELITOS CONTRA EL ORDEN PÚBLICO
CAPITULO II
DELITOS QUE ATENTAN EL ORDEN PÚBLICO
TEMA: DELITO DE ATENTADO CONTRA LOS MEDIOS DE TRANSPORTE
COLECTIVO O DE COMUNICACIÓN.
1.1.2 Agravante.
Si el hecho produce naufragio, varamiento, desastre, muerte o lesiones graves y el
agente pudo prever estos resultados, la pena será no menor de ocho ni mayor de
veinte años.
1.6 Penalidad
1.6.1 Tipo base. Pena privativa de libertad no menor de tres ni mayor de seis años.
1.6.2 Agravante. La pena será no menor de ocho ni mayor de veinte años.
1.7 Comentario
En su primera parte del art.280° contempla que es un delito de peligro. No hace falta,
por tanto la producción de un resultado dañoso para que se configure cabalmente la
hipótesis legal. El solo hecho de poner en peligro la seguridad de una nave, una
aeronave, una estructura flotante, o cualquier otro medio de transporte colectivo o de
comunicación. Están comprendidos, por cierto, los medios motorizados de transporte
terrestre, medio automóviles, autobuses, trenes, así como los medios de
comunicación, de telefonía, telégrafo, cable, radio, televisión.
1.8 Jurisprudencia
Análisis de la jurisprudencia
La conducta del autor, consistió en efectuar un acto que puso en peligro la seguridad
del medio de transporte referido. Pero como medio probatorio se quedó acreditado que
dicha vía férrea estaba fuera de uso, coligiéndose en consecuencia, que con dicho
accionar no se puso en peligro el medio de transporte en referencia. Por lo cual no se
configuro el ilícito penal ya que es necesario que la acción ponga en peligro la
seguridad de los medios de transporte y comunicación.
DECIMA SEMANA
TEMA: DELITO DE ATENTADO CONTRA LA SEGURIDAD COMÚN
2.6 Penalidad
2.6.1 Pena privativa de libertad no menor de seis ni mayor de diez años.
2.6.2 Culposo. La pena será no mayor de dos años.
2.7 Comentario.
Las diversas hipótesis contenidas en el artículo 281° del CP se refieren todas ellas
adelitos de peligro que, como lo tenemos ya explicado, se completan en su fase
externa con la sola creación de un estado de peligro, independientemente delos
resultados que ese peligro pueda o no generar.
CASUISTICA-JURISPRUDENCIA-DOCTRINA.(Conversatorio)
3.6 Penalidad
Cuatro ni mayor de seis años, tipo base. Agravante: seis ni mayor de ocho años.
CUSUISTICA-JURISPRUDENCIA-DOCTRINA.(conversatorio)
4.6 Penalidad
Pena privativa de libertad no menor de uno ni mayor de cinco años.
CUSUISTICA-JURISPRUDENCIA-DOCTRINA.(conversatorio)
5. DELITO DE DISTURBIOS.
Será sancionado con la misma pena cuando los actos descritos en el primer
párrafo se produzcan con ocasión de un espectáculo deportivo, o en el área de
influencia deportiva.
6.6 Penalidad
Diferentes escalas, según la gravedad.
La diferencia con otras expresiones violentas del movimiento social puede ser mayor o
menor. Si los disturbios tienen mayor grado de repercusión o éxito, se puede hablar
alternativamente de revuelta, motín, rebelión o revolución.
La referida norma, Introduce un párrafo que establece que la misma pena (no menor
de 06 años ni mayor de 08 años) se aplicará también cuando los actos se produzcan
con ocasión de un espectáculo deportivo o en el área de influencia deportiva.
Debe observarse que el delito de Disturbio es tal, ya sea se desarrolle con ocasión o
no de un espectáculo deportivo, de manera que la inclusión del párrafo pareciera
innecesario; sin embargo, su inclusión en el Art. 315 obedece a que conforme a la Ley
26830 (Ley de Seguridad y Tranquilidad en Espectáculos Deportivos - derogado por la
Ley 30037) fijaba que las penas por delito o faltas cometidos en espectáculos
deportivos se sancionaban solo con la pena del delito cometido incrementado en un
50% o con la pena máxima para el hecho considerado falta, habiéndose creando una
diferencia innecesaria que en muchos casos podría resultar benévola cuando el
disturbio es realizado con ocasión de un espectáculo deportivo.
III UNIDAD
LA ALTERACION DEL ORDEN PÚBLICO
CAPITULO III
1. DERECHOS FUNDAMENTALES DE LAS PERSONAS. 2. LA LIBERTAD DE
MANIFESTACION Y EXPRESION. 3. LA REPRESION POR PARTE DEL
GOBIERNO. 4. LA PNP Y EL ROL FUNDAMENTAL EN CASOS DE
ALTERACION DEL ORDEN PÚBLICO. 5. DOCTRINA Y JURISPRUDENCIA.
1. Derechos fundamentales.
1.1 Art. 2º inc. 12, 13, 18, 20, 24 literal a, b, c, d, f, g, h.
Artículo 2°. Toda persona tiene derecho:
12. A reunirse pacíficamente sin armas. Las reuniones en locales privados o abiertos
al público no requieren aviso previo. Las que se convocan en plazas y vías públicas
exigen anuncio anticipado a la autoridad, la que puede prohibirlas solamente por
motivos probados de seguridad o de sanidad públicas.
13. A asociarse y a constituir fundaciones y diversas formas de organización jurídica
sin fines de lucro, sin autorización previa y con arreglo a ley. No pueden ser disueltas
por resolución administrativa.
18. A mantener reserva sobre sus convicciones políticas, filosóficas, religiosas o de
cualquiera otra índole, así como a guardar el secreto profesional.
19. A su identidad étnica y cultural. El Estado reconoce y protege la pluralidad étnica
y cultural de la Nación.
Todo peruano tiene derecho a usar su propio idioma ante cualquier autoridad
mediante un intérprete. Los extranjeros tienen este mismo derecho cuando son
citados por cualquier autoridad.
20. A formular peticiones, individual o colectivamente, por escrito ante la autoridad
competente, la que está obligada a dar al interesado una respuesta también por
escrito dentro del plazo legal, bajo responsabilidad.
Los miembros de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional sólo pueden ejercer
individualmente el derecho de petición.
24. A la libertad y a la seguridad personales. En consecuencia:
a. Nadie está obligado a hacer lo que la ley no manda, ni impedido de hacer lo que
ella no prohibe.
b. No se permite forma alguna de restricción de la libertad personal, salvo en los
casos previstos por la ley. Están prohibidas la esclavitud, la servidumbre y la trata de
seres humanos en cualquiera de sus formas.
c. No hay prisión por deudas. Este principio no limita el mandato judicial por
incumplimiento de deberes alimentarios.
d. Nadie será procesado ni condenado por acto u omisión que al tiempo de
cometerse no esté previamente calificado en la ley, de manera expresa e inequívoca,
como infracción punible; ni sancionado con pena no prevista en la ley.
e. Toda persona es considerada inocente mientras no se haya declarado
judicialmente su responsabilidad.
f. Nadie puede ser detenido sino por mandamiento escrito y motivado del juez o por
las autoridades policiales en caso de flagrante delito. El detenido debe ser puesto a
disposición del juzgado correspondiente, dentro de las veinticuatro horas o en el
término de la distancia.
Estos plazos no se aplican a los casos de terrorismo, espionaje y tráfico ilícito de
drogas.
En tales casos, las autoridades policiales pueden efectuar la detención preventiva de
los presuntos implicados por un término no mayor de quince días naturales. Deben
dar cuenta al Ministerio Público y al juez, quien puede asumir jurisdicción antes de
vencido dicho término.
g. Nadie puede ser incomunicado sino en caso indispensable para el esclarecimiento
de un delito, y en la forma y por el tiempo previstos por la ley. La autoridad está
obligada bajo responsabilidad a señalar, sin dilación y por escrito, el lugar donde se
halla la persona detenida.
h. Nadie debe ser víctima de violencia moral, psíquica o física, ni sometido a tortura o
a tratos inhumanos o humillantes. Cualquiera puede pedir de inmediato el examen
médico de la persona agraviada o de aquélla imposibilitada de recurrir por sí misma a
la autoridad. Carecen de valor las declaraciones obtenidas por la violencia. Quien la
emplea incurre en responsabilidad.
Artículo 3°. La enumeración de los derechos establecidos en este capítulo no excluye
los demás que la Constitución garantiza, ni otros de naturaleza análoga o que se
fundan en la dignidad del hombre, o en los principios de soberanía del pueblo, del
Estado democrático de derecho y de la forma republicana de gobierno.
Puede definirse como un ejercicio de acción cívica para expresar de forma pública
inconformidad o insatisfacción con problemáticas no resueltas, de diversa índole.
Esta acción cívica también puede estar motivada por la indignación, la disidencia o la
resistencia ante políticas públicas o conductas de los poderes públicos que afectan
de manera significativa el ejercicio de derechos.
3.2. Pueden llegar a tornarse violentas cuando se han cerrado todos los caminos de
diálogo y la resolución de conflictos por vías institucionales; o también cuando su
ejercicio provoca medidas de represión o criminalización que atentan contra la vida, la
integridad o la libertad de las personas.
3.4. Las manifestaciones pacíficas constituyen una expresión del derecho a la libertad
de reunión y, amparadas en este derecho, no requieren de autorización previa. En todo
caso debe aplicarse un procedimiento de notificación, siempre que éste no restrinja de
manera indirecta el derecho a la reunión pacífica. Son prácticas de restricción indebidas
por parte del Estado,: a) la prohibición de manifestaciones; b) la imposición de
restricciones injustificadas; c) la exigencia de requisitos innecesarios; d) la falta de
recursos para negar permisos; e) la existencia de leyes incompatibles con el derecho
internacional de los derechos humanos, ya sea porque dificultan o penalizan las
manifestaciones o se les enmarca en delitos como “terrorismo” o “desestabilización”.
Considerando que el Orden Interno guarda estrecha relación con la disposición que
adoptan las Instituciones del Estado, en esta Fase de la Finalidad Fundamental de la
Policía Nacional, como en las otras dos (Garantizar y Controlar), el Presidente de la
República y las autoridades políticas ejercen sin restricción o limitación alguna la
responsabilidad que tienen en el Orden Interno.
1. El uso de la fuerza
1.1 Aplicar de la ley, es el arte de comprender la letra y el espíritu de la ley, así como las
circunstancias específicas del problema particular que ha de resolverse. Las palabras
claves de la aplicación de la ley tienen que ser negociación, mediación,
persuasión y resolución de conflictos. Se requiere priorizar la comunicación, con
miras a lograr objetivos legítimos de aplicación de la ley, pero dichos objetivos no
pueden lograrse siempre mediante la comunicación, cuando ésta falla, básicamente
quedan, dos opciones: primero, la situación se queda como está, y no se logra
el objetivo de aplicación de la ley, o el funcionario encargado de hacer cumplir la ley
concernido decide recurrir a la fuerza para lograr el resultado previsto.
1.2 Los Estados confieren a sus estamentos encargados de hacer cumplir la ley la facultad
legal para emplear la fuerza cuando sea necesario a fin de alcanzar objetivos legítimos
de aplicación de la ley. Pero no sólo autorizan a sus instituciones a recurrir a la fuerza;
si no que algunos les obligan incluso a emplearla. Esto significa que, según la
legislación interna, un funcionario encargado de hacer cumplir la ley tiene el deber de
emplear la fuerza en las situaciones en que no pueda lograrse de otro modo el
resultado previsto.
1.3 Así también, los Estados al conferir a sus funcionarios encargados de hacer cumplir la
ley la facultad legal para emplear la fuerza y armas de fuego, no niegan su obligación
de proteger el derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad de las personas, así
como el reconocimiento de los reglamentos y prácticas relativos a la contratación,
la selección, la formación y la capacitación de los funcionarios encargados de hacer
cumplir la ley; debe considerarse que la calidad de la aplicación de la ley depende, en
gran medida, de la calidad de los recursos humanos disponibles, cuando se dispone
de buenas herramientas puede considerarse que la mitad de un trabajo está hecho,
sin embargo, las aptitudes de la persona que emplea esas herramientas determinan la
calidad del producto final.
4.1 Dado que todas las personas están autorizadas a participar en reuniones lícitas y
pacíficas, de conformidad con los principios consagrados en la Declaración Universal
de Derechos Humanos y en el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, los
gobiernos y los organismos y funcionarios encargados de hacer cumplir la ley
reconocerán que la fuerza y las armas de fuego pueden utilizarse solamente de
conformidad con los principios 13 y 14.
5. Casuística. (conversatorio)
3.1. El mejor plan para una emergencia urbana es aquel que se ha preparado de
antemano. Una fuerza policial sin preparación, que tenga que enfrentarse repentinamente
con un tumulto, puede encontrar que el derramamiento de sangre y los daños a la
propiedad sean las primeras consecuencias de su intervención. Otro peligro consiste en
que la policía actúe con medidas extremas de represión, debido a la falta de instrucción y
organización en el control de tumultos. Se pueden citar muchos ejemplos en que la policía
y el gobierno ante un disturbio ha abierto fuego sin discriminación resultando un inútil
derramamiento de sangre y un descrédito resultado para la policía y el gobierno al que
sirve, por parte del pueblo.
4.3. Toda la Policía en el lugar de los sucesos deberá trabajar como un equipo, bajo
ninguna circunstancia deberá manejarse vehículos en medio de una perturbación; los
choferes deberán saltar y correr en todas direcciones.
4.4. Mientras el militar tiene la misión de defender la integridad territorial, el policía tiene la
misión de hacer cumplir las leyes y mantener el orden. De ahí que es importante que en
tiempo de disturbios civiles sepa cual es su misión; no tiene el poder de herir o destruir a
los elementos de un disturbio salvo en las circunstancias más graves o en defensa propia.
La fuerza real que emplee, debe estar en proporción a la violencia que encuentre (igualdad
de fuerzas), a la resistencia que se oponga y al peligro que se prevea. Si bien la policía
debe oponer la fuerza, sin embargo, el derramamiento de sangre debe evitarse.
4.5. Una posición imparcial, impersonal, debe guiar su conducta para impresionar
favorablemente a la muchedumbre. No debe existir discriminación especial del policía
contra una clase en particular, raza, negocio, zona.
4.8. La Policía debe estar también instruida para estar alerta contra crímenes que se
puedan cometer aprovechando la confusión de un tumulto, tales como asesinatos,
violaciones, mutilaciones, hurtos y robos, secuestros, destrucción de la propiedad y
saqueos siendo estos últimos los crímenes que más comúnmente acompaña a los
disturbios y tumultos.
g. Se debe planear por adelantado que los alborotadores pueden escapar por varias
salidas. Cuantas más vías de escape tenga la multitud, se dispersará con más
facilidad. En el interior de un edificio, la policía deberá actuar desde el último piso alto
hacia abajo, empujando las turbas hacia las puertas y ventanas del piso bajo.En las
calles, se deberán dejar vías libres en la dirección que la policía desea que las turbas
se dispersen. No se debe impulsar a las masas hacia donde se encuentran
depositados los equipos de la policía, ya que estos pueden ser destruidos por la
violencia de las masas. Se debe mover a la gente en la dirección de sus casas, si es
posible, y si éstas se han destruido, hacia zonas abiertas, hacia el campo.
h. Se debe hacer que constantes informaciones lleguen al jefe de las fuerzas
destacadas, hasta el momento en que éstas se hayan concentrado para entrar en
acción, porque los objetivos y dirección de una turba puede cambiar
instantáneamente.
i. Las formaciones básicas del control de disturbios son la cuña., la línea y la diagonal
(pudiendo esta última ser a la derecha o a la izquierda). Las turbas sueltas y ralas se
atacan barriéndolas en masa. Las muchedumbres densas deben ser controladas poco
a poco atacando las alas y separando parte de ellas. Se debe poner atención en dejar
libre los extremos posteriores (y dentro de un edificio, las salidas), para evitar
movimientos envolventes y contraataques por las masas. Si la muchedumbre se
desplaza a lo largo de una calle, se debe acometer (encontrar, intervenir) a la cabeza
en una intersección y dividirla, dirigiendo las partes por calles opuestas, debiendo
haber reservas estacionadas a la derecha e izquierda para evitar su vuelta. Una turba
callejera es generalmente larga y estrecha y el modo de atacar es por los flancos.
m. Además las reservas pueden ser útiles para mantener a la turba en movimiento una
vez que haya quedado desorganizada. Asimismo pueden ser comisionadas para
custodiar detenidos. Se las debe estacionar en sitios estratégicos con respecto a la
turba, a la dirección del movimiento de estas y al punto de concentración para las
acciones de choque. El jefe de la acción debe estar constantemente informado
respecto a la posición de las reservas.
a. Preparación.
b. Apariencia.
El modo de pensar clásico de que los policías pertrechados con los equipos
antidisturbios completos, con cañones de agua, gases lacrimógenos y perros son un
factor de disuasión para la multitud y contribuyen a calmar la violencia, no es del todo
correcto.
c. Comunicación.
Se debe hacer lo posible para reunirse preliminarmente con los manifestantes. Durante
una manifestación o marcha pacifica es muy importante que exista una buena
comunicación, empleando en lo posible equipos potentes de altoparlantes, para así
advertir permanentemente y con firmeza las acciones que se van a tomar. El Jefe
Policial Operativo buscará dialogar con los lideres o dirigentes con el fin de que acaten
las disposiciones de la autoridad policial, no debiendo intimidarlos, engañarlos o retarlos,
ni prometer lo que no se va a cumplir.
Desde el punto de vista psicológico, una persona necesita tiempo para aceptar órdenes,
en especial si viene de un policía. Cuando esa persona forma parte de un grupo, las
cosas se complican. Ser el primero en ceder ante la presión policial significa quedar mal
ante el grupo.
Se debe tener en cuenta que la multitud es un conjunto de personas y no una masa
humana que debe tratarse como un todo. La mayoría de sus integrantes, o bien tendrá
demasiado miedo optará por cuidar su propia seguridad.
d. Intervención oportuna.
e. Empleo de la fuerza.
En la mayoría de los casos, la simple amenaza del uso de la fuerza no basta para
dispersar a la multitud.La unidad de control de disturbios intervendrá después de advertir
verbalmente su intención de usar la fuerza, con tiempo suficiente para que ésta sea
tomada en cuenta.Cuando se recurra a la fuerza, ésta deberá ser usada en forma
racional y progresiva, basada en los principios de legalidad, necesidad y
proporcionalidad, reduciendo al mínimo las lesiones.
No debe emplearse la fuerza en personas que huyen o caen mientras corren, sino
contra los individuos que ofrezcan resistencia física y agradan a los efectivos
policiales.No utilizar objetos contundentes (piedras, palos, fierros) lanzados contra el
personal policial, como reacción contra el ataque de los manifestantes; mostrar en todo
momento una actitud disuasiva y tolerante con éstos.El personal policial dejará de
utilizar la fuerza inmediatamente al cese de la resistencia o violencia, sin prejuicio de
adoptar las correspondientes medidas de seguridad.Auxiliar a las personas que resulten
lesionadas y evacuar a los heridos a centros asistenciales para su atención médica. Así
mismo se debe notificar de inmediato a las familias de las víctimas. Para ello debe
planificarse previamente los corredores humanitarios y el acceso de socorristas.
La intervención que realizara la policía Nacional del Perú frente a la alteración del orden
publico, sea cual sea la magnitud, estará a cargo de las unidades organizadas de
Servicios Especiales, el cual se realizara en cualquier circunstancias, en lugares de
afluencia y concentración de público sea en actividades deportivas, políticas o
Regionales, paros, huelgas y/o manifestaciones.
2. La detención policial.
2.1. Los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley, en sus relaciones con las
personas bajo custodia o detenidas, no emplearán la fuerza, salvo cuando sea
estrictamente necesario para mantener la seguridad y el orden en los
establecimientos o cuando corra peligro la integridad física de las personas.
2.2. Los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley, en sus relaciones con las
personas bajo custodia o detenidas, no emplearán armas de fuego, salvo en
defensa propia o en defensa de terceros cuando haya peligro inminente de muerte
o lesiones graves, o cuando sea estrictamente necesario para impedir la fuga de
una persona sometida a custodia o detención que presente el peligro a que se
refiere el principio.
2.3. Los principios precedentes se aplicarán sin perjuicio de los derechos, obligaciones
y responsabilidades de los funcionarios de establecimientos penitenciarios, tal
como se enuncian en las Reglas Mínimas para el Tratamiento de los Reclusos,
sobre todo las reglas 33, 34 y 54.
3.1. Los gobiernos y los organismos encargados de hacer cumplir la ley establecerán
procedimientos eficaces para la presentación de informes y recursos en relación
con todos los casos mencionados en los principios 6 y 11 f). Para los casos con
respecto a los cuales se informe de conformidad con esos principios, los gobiernos
y los organismos encargados de hacer cumplir la ley asegurarán que se establezca
un procedimiento de revisión eficaz y que autoridades administrativas o judiciales
independientes estén dotadas de competencia en circunstancias apropiadas. En
caso de muerte y lesiones graves u otras consecuencias de importancia, se enviará
rápidamente un informe detallado a las autoridades competentes para la revisión
administrativa y la supervisión judicial.
3.2. Las personas afectadas por el empleo de la fuerza y de armas de fuego o sus
representantes legales tendrán acceso a un proceso independiente, incluido un
proceso judicial. En caso de muerte de esas personas, esta disposición se aplicará
a sus herederos.
3.3. Los gobiernos y los organismos encargados de hacer cumplir la ley adoptarán las
medidas necesarias para que los funcionarios superiores asuman la debida
responsabilidad cuando tengan conocimiento, o debieran haberlo tenido, de que los
funcionarios a sus órdenes recurren, o han recurrido, al uso ilícito de la fuerza y de
armas de fuego, y no adopten todas las medidas a su disposición para impedir,
eliminar o denunciar ese uso.
3.4. Los gobiernos y los organismos encargados de hacer cumplir la ley adoptarán las
medidas necesarias para que no se imponga ninguna sanción penal o disciplinaria
contra los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley que, en cumplimiento del
Código de conducta pertinente y de estos Principios Básicos, se nieguen a ejecutar
una orden de emplear la fuerza o armas de fuego o denuncien ese empleo por
otros funcionarios.
3.5. Los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley no podrán alegar obediencia
de órdenes superiores si tenían conocimiento de que la orden de emplear la fuerza
o armas de fuego, a raíz de la cual se ha ocasionado la muerte o heridas graves a
una persona, era manifiestamente ilícita y tuvieron una oportunidad razonable de
negarse a cumplirla. De cualquier modo, también serán responsables los superiores
que dieron las órdenes ilícitas.