Esta planta generadora de Nuevo México libera dióxido de azufre y otros contaminantes del aire.
Contaminación atmosférica severa en China.
La contaminación del aire de una estación de energía de combustibles fósiles.
La contaminación atmosférica es la presencia en el aire de materias o formas
de energía que implican riesgo, daño o molestia grave para las personas y seres de la naturaleza popular,1 así como que puedan atacar a distintos materiales, reducir la visibilidad o producir olores desagradables. Desde que la Revolución Industrial inició en la segunda mitad del siglo XVIII, los procesos de producción en las fábricas, el desarrollo del transporte y el uso de los combustibles han incrementado la concentración del dióxido de carbono en la atmósfera y otros gases que son muy perjudiciales para la salud, como los óxidos de azufre y los óxidos de nitrógeno. La contaminación atmosférica puede tener carácter local, cuando los efectos ligados al foco se sufren en las inmediaciones del mismo, o global, cuando por las características del contaminante, se ve afectado el equilibrio del planeta y zonas alejadas a las que contienen los focos emisores. Ejemplos de esto son la lluvia ácida y el calentamiento global. Según la Organización Mundial de la Salud, el estado de la atmósfera actual provoca, por simple acto de respirar, la muerte a alrededor de siete millones de personas al año (respiración de partículas finas), viéndose muchas más perjudicadas.23 La contaminación atmosférica consiste en la liberación de sustancias químicas y partículas en la atmósfera alterando su composición y suponiendo un riesgo para la salud de las personas y de los demás seres vivos. Los gases contaminantes del aire más comunes son el monóxido de carbono, el dióxido de azufre, los clorofluorocarbonos y los óxidos de nitrógeno producidos por la industria y por los gases producidos en la combustión de los vehículos. Los fotoquímicos como el ozono y el esmog se aumentan en el aire por los óxidos del nitrógeno e hidrocarburos y reaccionan a la luz solar. El material particulado o el polvo contaminante en el aire se mide por su tamaño en micrómetros, y es común en erupciones volcánicas.
Índice
• 1Contaminantes atmosféricos primarios y secundarios
• 2Principales tipos de contaminantes del aire • 3Gases contaminantes de la atmósfera o 3.1CFC y similares o 3.2Monóxido de carbono o 3.3Dióxido de carbono o 3.4Monóxido de nitrógeno o 3.5Dióxido de azufre o 3.6Metano o 3.7Ozono • 4Efectos de los gases de la atmósfera en el clima • 5Sustancias que provienen de fuentes naturales • 6Efectos nocivos para la salud • 7Ciudades y Países más Contaminados (2018) • 8Dispositivos de control • 9Gestión ambiental del componente aire o 9.1Establecimiento de una red de monitoreo ambiental ▪ 9.1.1Modelado atmosférico-climático y confección de un modelo de contaminación atmosférico ▪ 9.1.2Europa • 10Véase también • 11Referencias • 12Bibliografía • 13Enlaces externos o 13.1Agencias de calidad del aire o 13.2Iniciativas de calidad del aire o 13.3Calidad del aire estatal o 13.4Información regional de calidad del aire o 13.5Información de Ciencias de la calidad del aire o 13.6Modelado de calidad del aire o 13.7Medición
Contaminantes atmosféricos primarios y
secundarios[editar] • Los contaminantes primarios son los que se emiten directamente a la atmósfera4 como el dióxido de azufre SO2, que daña directamente la vegetación y es irritante para los pulmones.
• Los contaminantes secundarios son aquellos que se forman
mediante procesos químicos atmosféricos que actúan sobre los contaminantes primarios o sobre especies no contaminantes en la atmósfera. 4 Son importantes contaminantes secundarios el ácido sulfúrico, H2SO4, que se forma por la oxidación del SO2, el dióxido de nitrógeno NO2, que se forma al oxidarse el contaminante primario NO y el ozono, O3, que se forma a partir del oxígeno O2.
Ciclo de condensación y precipitación
Ambas clases de contaminantes, primarios y secundarios, pueden depositarse en
la superficie de la Tierra por precipitación, deposición seca o húmeda e impactar en determinados receptores, como personas, animales, ecosistemas acuáticos, bosques, cosechas y materiales de diferentes tipos. En todos los países existen unos límites impuestos a la emisión o la concentración de determinados contaminantes que pueden incidir sobre la salud de la población y su bienestar o causar un impacto en el entorno. En España, existen funcionando en la actualidad diversas redes de vigilancia de la contaminación atmosférica, instaladas en las diferentes Comunidades Autónomas y que efectúan medidas de una variada gama de contaminantes que abarcan desde los óxidos de azufre y nitrógeno hasta hidrocarburos, con sistemas de captación de partículas, monóxido de carbono, ozono, metales pesados, entre otros.5 Principales tipos de contaminantes del aire[editar] • Contaminantes gaseosos: en ambientes exteriores e interiores los vapores y contaminantes gaseosos aparecen en diferentes concentraciones. Los contaminantes gaseosos más comunes son el dióxido de carbono (por su efecto sobre el clima), el monóxido de carbono, los hidrocarburos, los óxidos de nitrógeno, los óxidos de azufre y el ozono. Diferentes fuentes producen estos compuestos químicos, pero la principal fuente artificial es la quema de combustible fósil. La contaminación del aire interior es producida, comúnmente, por el consumo de tabaco, el uso de ciertos materiales de construcción, productos de limpieza y muebles del hogar. Los contaminantes gaseosos del aire provienen tanto del vulcanismo como de industrias. El tipo más comúnmente reconocido de contaminación del aire es la niebla tóxica (smog). La niebla tóxica generalmente se refiere a una condición producida por la acción de la luz solar sobre los gases de escape de automotores, fábricas, edificios, casas, entre otros. Más de la mitad de la población mundial depende de combustibles sólidos (leña, estiércol, entre otros.) para cocinar, lo que causa enfermedades respiratorias que afectan principalmente a mujeres y niños en países en desarrollo. Cada año, la contaminación del aire en lugares cerrados genera alrededor de millón y medio de muertes. Asimismo, la dependencia de los combustibles sólidos agrava las tasas de deforestación y contribuye por lo tanto al cambio climático mundial.6
• Los aerosoles (también llamados partículas en suspensión o material
particulado): un aerosol es una mezcla heterogénea de partículas sólidas o líquidas suspendidas en un gas, como el aire de la atmósfera.4 Algunas partículas son lo suficientemente grandes y oscuras para verse en forma de hollín o humo. Otras son tan pequeñas que solo pueden detectarse con un microscopio electrónico. Cuando se respira el aerosol, las partículas que contiene pueden entrar en los pulmones, irritarlos y dañarlos, con lo cual se producen problemas respiratorios. Los aerosoles de carbono negro tienen la capacidad de adsorber compuestos cancerígenos en la superficie de sus partículas. 7 Las partículas finas (representadas con PM2,5, mientras que las gruesas se representan con PM10) se inhalan de manera fácil profundamente dentro de los pulmones, donde pueden permanecer durante prolongados períodos de tiempo —causando mientras tanto efectos irritantes, inflamatorios y cancerígenos 8— o ser absorbidas por el torrente sanguíneo. Artículo principal: Partículas en suspensión