TESIS: La segunda adolescencia es una etapa de la vida inevitable que necesitamos vivir.

ARGUMENTO:

A la edad de cuarenta tanto hombres y mujeres sufren de distintos cambios, de formas

distintas emocionalmente. Llamado mejor como la crisis de los 40, los hombres suelen
llamarlo “el viajazo” y para las mujeres es llamado “la segunda adolescencia” pero ambos
son iguales. La adolescencia es una etapa desastrosa que todo adulto cree haber superado,
pero sin embargo a la edad de 40 años, resurge el deseo de ser joven nuevamente
haciendo que se produzca esta etapa nuevamente.

El viejazo afecta a los hombres de distintas formas, es el deseo de querer recuperar esos
veinte años ya enterrados junto con su juventud y hacen lo que sea para recuperarlos.
Normalmente los hombres que sufren de ello terminan sus matrimonios y hasta pueden
llegar a dar grandes cambios como en el trabajo y su círculo social, comienzan a interesarse
de mujeres más jóvenes que ellos. Este síntoma es cada vez más común en varones que
tienen presiones y exigencias sociales, entre los cambios que aparecen son un ligero
desequilibrio emocional en su madurez haciendo que se porte como un adolescente,
también es probable que sufran depresión y empiezan a sentirse derrotados por
adversidades de la vida que tuvieron.

En mujeres es similar el cambio, la “segunda adolescencia” como lo llaman ellas es una

etapa donde el deseo de libertad es más fuerte, quieren un espacio para ellas mismas y
poder satisfacerse, a esta edad el reloj biológico se detendrá, empezando la menopausia.
Esta etapa puede ser positiva o no, dependiendo de la predisposición de la persona.
Comúnmente las mujeres están tan preparadas y también dispuestas a atravesar esta crisis
sin salir afectadas tanto como los varones.

ANTITESIS: La segunda adolescencia se puede controlar.

CONTRAARGUMENTO:

Esta crisis no siempre será tan fatalista como suena, hay formas para saber sobrellevarla de
manera adecuada, según estudios, esta segunda adolescencia se puede prevenir dándole
importancia, con actitudes positivas y sabiendo valorar lo que tanto les costó conseguir ,
disfrutando de logros y sobre todo centrándose en su familia.
Las personas que pasan por esa crisis sufren cambios emocionales que pueden manejarlos
y hacen que esta etapa sea más fácil de afrontar.

Es cierto que los cuarenta es una edad muy difícil de afrontar, donde más que una segunda
adolescencia, es sino una transición por la que pasan donde afloran nuevos sentimientos y
deseos que se manifiestan de diferentes maneras tanto en hombres como para mujeres.

En mi opinión esta etapa amerita tener más reconocimiento para saber sobrellevarla de
manera adecuada, sin caer en la crisis donde pensamos más con el corazón lleno de
deseos, que con la cabeza y razonando.

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