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2017
Presentación
Las principales enfermedades que actualmente afectan a los mexicanos dejaron
de ser agudas y pasaron a ser crónicas. A pesar de la intensa reducción de la
desnutrición en niños, las deficiencias de micronutrientes y la desnutrición
crónica siguen prevaleciendo en grupos vulnerables de la población, como en
indígenas, y niños, mujeres y adultos mayores que viven en áreas vulnerables.
Simultáneamente la población mexicana está atravesando una transición
demográfica, epidemiológica, nutricional y alimentaria; de acuerdo con los
resultados de la última ENSANUT (INSP, 2016) los índices de obesidad y
sobrepeso se han mantenido al alza y la diversidad de la dieta de los mexicanos
se ve amenazada por aquellos productos de consumo no recomendado. Todo
esto genera un aumento alarmante por enfermedades crónicas no transmisibles
(ECNT), tales como: obesidad, diabetes, enfermedades del corazón, pulmón,
riñones y diferentes tipos de cáncer, debido en gran parte al cambio en el estilo
de vida de la población.
Preámbulo
La alimentación adecuada y saludable es un derecho humano básico, que
incluye la garantía de acceso permanente y regular, de forma socialmente justa,
a una alimentación adecuada a los aspectos biológicos y sociales de la persona
y de acuerdo con las necesidades alimentarias especiales, que tenga en cuenta
la cultura alimentaria y las dimensiones de género, raza y etnia. Ha de ser
accesible desde el punto de vista físico y económico, y armónica en cantidad y
calidad, guiándose por los principios de variedad, equilibrio, moderación
(Ministerio de Salud de Brasil, 2015).
Introducción
La guía alimentaria presenta un conjunto de informaciones y recomendaciones
sobre alimentación para promover la salud de personas, familias y comunidades
y de la sociedad como un todo, ahora y en el futuro (Ministerio de Salud de Brasil,
2015).
Por ello es que nace la necesidad de generar una guía alimentaria alterna a la
que actualmente se encuentra en funciones; para su elaboración de las se
consideró el perfil epidemiológico y genómico de la población, así como la
accesibilidad y disponibilidad de los alimentos, los hábitos culturales y el poder
adquisitivo de las familias, para que sean adoptadas y aplicadas en los hogares,
instituciones o empresas (Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social, 2012).
Objetivos
Promover una alimentación saludable adaptada al genoma mexicano.
Conceptos básicos
Alimentación
La alimentación se refiere a la ingestión de nutrientes, pero también a los
alimentos que contienen y proporcionan esos nutrientes, a la manera en que
esos alimentos se preparan y se combinan entre sí, a las características del
modo de comer, y a las dimensiones culturales y sociales de las prácticas
alimentarias, siendo todos ellos aspectos que influyen en la salud y el bienestar
(Ministerio de Salud de Brasil, 2015).
Alimento
Se entiende por "alimento" toda sustancia, elaborada, semielaborada o bruta,
que se destina al consumo humano, incluyendo las bebidas, el chicle y
cualesquiera otras sustancias que se utilicen en la fabricación, preparación o
tratamiento de los alimentos, pero no incluye los cosméticos ni el tabaco ni las
sustancias utilizadas solamente como medicamentos (FAO, 1997).
Alimentos locales
Los alimentos locales son aquellos cultivados (o criados) y cosechados cerca de
los hogares de los consumidores, luego distribuidos a distancias mucho más
cortas de lo que es común en el sistema alimentario industrial mundial
convencional. En general, los sistemas alimentarios locales / regionales están
asociados con la agricultura sostenible, mientras que el sistema industrial
mundial de alimentos depende de la agricultura industrial (GRACE
Communications Foundation, 2017).
Alimentos tradicionales
Los alimentos tradicionales son que han sido comidos durante muchas
generaciones por poblaciones específicas de todo el mundo. En muchos casos
los alimentos tradicionales son también los que se encuentran en su comunidad
local (Saunders, 2010). Se asocia el concepto de alimento tradicional a diez
dimensiones: hábito, ocasiones especiales, herencia (transmitido de generación
en generación), elaborado de una forma concreta, propiedades sensoriales,
simplicidad, ligado a un origen, con un efecto sobre la salud, influido por el
márketing, y que proporciona variedad de productos (Guerrero, y otros, 2010).
Hay alimentos que hoy forman parte de la dieta tradicional pero que en su día
fueron “nuevos alimentos”. Así, por ejemplo, a principios del siglo XVI, se
introdujeron en Europa el jitomate y la papa por lo que, en esos tiempos, fueron
considerados nuevos alimentos y hoy forman parte de los platillos tradicionales
(Madrid Conesa & Madrid Gomariz, 2006).
Alimentos étnicos
El término alimento étnico se asocia a las cocinas nacionales y a los productos
alimentarios que pertenecen a una cultura específica. Se asocian a un país,
grupo, religión, o herencia, pero cuyo consumo se extiende fuera de sus
fronteras. (Camarena & Sanjuan, 2008).
Alimentos de temporada
Los alimentos de temporada se cultivan en suelos ricos, con las condiciones
climáticas adecuadas y completando su calendario natural. Ofrecen el mejor
aporte nutricional, ya que en el momento de su recolección mantienen intactas
todas sus propiedades (mejores cualidades organolépticas: olor, sabor, textura,
etc.). También los alimentos de temporada suelen ser los más económicos. Las
cosechas (en frutas y verduras) y el ciclo de reproducción de los animales (en
pescados y carnes) permiten que, durante un periodo concreto del año, la
disponibilidad en las tiendas de estos productos sea mayor. Por lo que, al
aumentar oferta, el precio disminuye (Coordinadora de Usuarios de la Sanidad,
Salud, Consum y Alimentación, 2017).
Alimentos procesados
El término “alimento procesado” se suele asignar a los que son tratados
industrialmente, agregándoles diversos aditivos ya sean: conservantes (como la
sal), saborizantes (naturales o artificiales), colorantes, otros compuestos, o
simplemente alimentos sometidos a procesos de altas o bajas temperaturas,
cambio de su consistencia, mezclas con otros alimentos o por el tipo de
presentación y envasado (Pacheco, 2017).
Dieta
Se conoce como el conjunto y cantidades de alimentos o mezclas de alimentos
que se consumen habitualmente (todo aquello que se consume en 24 horas),
aunque también puede hacer referencia al régimen que, en determinadas
circunstancias, realizan personas sanas, enfermas o convalecientes en el comer
o el beber (Pinto Fontanillo & Carbajal Azcona, 2006).
Nutriente
Son componentes químicos de los alimentos que se pueden utilizar una vez se
han ingerido y absorbido. Comprenden los factores dietéticos de carácter
orgánico e inorgánico contenidos en los alimentos y que tienen una función
específica en el organismo (Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social,
2012).
Entre 1990 y 2009 – el último año para el que se cuenta con información- la
disponibilidad de alimentos por persona aumentó ligeramente: de 3,058 Kcal. en
1990 a 3,183 en 2009 (SAGARPA, 2013). Aunque se estima que México contará
para el trienio 2014-16 con 3.089 calorías al día por persona, lo que es más que
suficiente para satisfacer los requerimientos mínimos en términos calóricos
(FAO, 2015).
Hambre y desnutrición
Desde el trienio 2005-07 a la fecha la proporción de personas en situación de
subalimentación se encuentra en niveles inferiores al 5% (FAO, 2015).
Obesidad y sobrepeso
La prevalencia combinada de sobrepeso y obesidad en la población de 5 a 11
años de edad disminuyó de 34.4% en 2012 a 33.2% en 2016, una reducción de
1.2 puntos porcentuales; sin embargo, la diferencia no fue estadísticamente
significativa (INSP, 2016).
Genómica mexicana
Las adaptaciones genéticas a la dieta consumida a lo largo de la historia humana
han esculpido el genoma humano e influido en una variedad de rasgos humanos.
Las adaptaciones locales a los componentes dietéticos específicos de la región
podrían haber sido una fuerza decisiva del genoma humano, impulsando la
diferenciación de la población y estableciendo las bases genéticas para la
diversidad humana.
Los seres humanos compartimos cerca del 99.9% de la secuencia del genoma
humano. El 0.1% restante no se comparte, sino que otorga la individualidad
genómica a cada individuo, dando características propias como el color del pelo,
la forma de la cara o el tono del color de ojos. Estas variaciones en el genoma
también confieren a cada uno diferentes grados de riesgo o protección a
enfermedades comunes como diabetes, obesidad, hipertensión, cáncer, entre
otras (INMEGEN, 2010).
Los alimentos que se sugieren en esta guía son en su gran mayoría originarios
de estas tierras, alimentos típicos, de origen local, de fácil obtención, que son
perfectamente cultivables y pertinentes ya que han mostrado ser saludables o al
menos inocuos durante cientos de años; también se han integrado algunos otros
alimentos que aunque no son de origen mexicano no han mostrado tener una
influencia negativa en la salud sino todo lo contrario, y aquellos alimentos que
tienen gran aceptación pero que se han relacionado con algunas patologías se
indican como alimentos opcionales. Por otro lado, se señalan dentro de las
recomendaciones aquellos que no están recomendados.
Consta de:
• Mensajes que promueven el consumo de alimentos locales y
tradicionales.
• Mensajes que promueven la no existencia de alimentos indispensables.
• Mensaje que promueve la reducción del consumo de sal, grasas
saturadas y alimentos ultraprocesados.
Recomendaciones de la Guía