Вы находитесь на странице: 1из 5

Santiago De Cali / Palmira, mayo 29 De 2020

Universidad Santiago De Cali


Facultad De Derecho
Asignatura: Introducción Al Derecho
Docente: Emilio José Idrobo Enríquez
Tercer Parcial-Final
Nombre De Estudiante: Gasca Arias Carolina Código: 30039292
Nombre Del Estudiante: Montoya Contreras Juan Felipe Código:1113685228
Nombre Del Estudiante: Pareja Rivas Alexander Código: 94532930
Nombre De Estudiante: Vivas Alvarado Juan Sebastián Código: 94316134

1. Explique una por una las fuentes formales del derecho en Colombia y explique también
qué quiere decir la expresión “criterios auxiliares” contenida en el artículo 230 de la
Constitución Nacional.

R// En Colombia las fuentes del derecho son las siguientes:

 Las normas constitucionales. Se utiliza esa expresión porque no sólo se incluye a la


constitución, sino que también entran en esta categoría las leyes que hacen parte del Bloque
de constitucionalidad, categoría que se insertó desde 1994 y que la doctrina constitucional la
expresa en dos sentidos. Se incluyen en este primer escalón normativo aquellas normas que si
bien no están escritas en la Constitución tienen el rango y valor constitucional además de la
Constitución material. En este caso se estaría hablando del bloque de constitucionalidad en
sentido estricto. En cuanto al llamado bloque de constitucionalidad en sentido lato se hace
referencia a aquellas normas que sirven de parámetro constitucional pero no por ello tendrán
siempre el rango de Constitución.
 La legislación. Se compone de dos tipos de piezas normativas: las producidas por el
Legislador General o las leyes formales, y la otra son aquellas normas que sin ser
formalmente leyes tendrían la misma ubicación, fuerza y valor que las leyes formales, a estas
se le denomina leyes materiales. La legislación entonces no solo está conformada por las
leyes del Legislador General, sino también por la producción del Legislador Extraordinario o
Excepcional, habilitado por la Constitución Política de manera indirecta o directa. La
habilitación constitucional indirecta o delegación legal se refiere al reconocimiento constitucional
de la posibilidad de que Legislador General conceda a un órgano distinto la facultad de dictar normas
con rango de ley. La habilitación constitucional directa o delegación constitucional se presenta
cuando el Poder Constituyente (Primario o Secundario) permiten que un órgano diferente al
Legislador General, dentro de circunstancias especiales o en cualquier momento, legisle sin
intermediación de la ley formal.
 Actos administrativos. Los Actos de la Administración Pública se ubican en el tercer nivel
dentro de las fuentes formales del derecho en Colombia. La actividad administrativa no es
una actividad regulativa plena como lo es la labor legislativa y su competencia normativa
está limitada por la constitución y la legislación, en garantía del principio de legalidad, que
limita las actuaciones de la administración a lo explícitamente permitido y la subordina a la
ley. Dicho de otra manera, estos no pueden ejecutar la Constitución.
 Normativa restante. En este nivel encontramos dos tipos de normativas: los actos
jurisdiccionales y los actos entre/ de particulares. Los primeros han sido denominados en
Colombia genéricamente como providencias, que son de dos clases: las sentencias, que son
las encargadas de resolver litigios, o sea resuelven la controversia y ponen fin al proceso
judicial. También están los autos, que pueden ser interlocutorios, que ayudan al avance del
proceso en la toma de decisiones no relacionadas con el fondo directamente, y los autos de
trámite o de sustanciación, que ayudan a abrir o cerrar etapas para dar trámite al proceso.
En los llamados actos de/entre particulares se incluyen los hechos, actos y negocios jurídicos,
y que, por tanto, serán relacionados con, en términos amplios, con su carácter unilateral,
bilaterales y/o plurilateral. Dichos actos serán fuentes de obligaciones para los participantes
en su formación y para los terceros interesados, teniendo como limites los requisitos de
existencias, validez y eficacia de los mismos.
En cuanto a la explicación de: qué quiere decir la expresión “criterios auxiliares” contenida
en el artículo 230 de la Constitución Nacional, podemos decir que esto hace referencia a que
son unos criterios que deben ser seguidos en la labor jurisdiccional. Estos criterios se emplean,
aunque no como fuente directa, tanto para resolver casos concretos como para la ejecución de
labores interpretativas genéricas. Precisamente la Corte Constitucional dirá que:

La Carta prevé la existencia de cuatro criterios auxiliares de la actividad judicial. La


segunda frase del artículo 230 reconoce como tales a la doctrina, a la equidad, a la
jurisprudencia y a los principios generales del derecho. Tales criterios, según lo ha
entendido esta Corporación, son recursos para la interpretación que, dada su calificación
constitucional, nacen despojados de toda posibilidad para “servir como fuentes directas y
principales de las providencias judiciales”. Se trata pues de recursos interpretativos
que pueden contribuir a la fundamentación de las decisiones, pero nunca ser la
razón de las mismas.
El señalamiento de esos criterios en el artículo 230 es, según lo precisó la Corte,
meramente enunciativo, de forma tal que no se encuentran excluidos “otros criterios que
sean indispensables en relación con la materia sujeta a su decisión y que a este respecto
revistan utilidad como apoyo de la misma” (Corte Constitucional, C-284 de 2015).

Dado lo mencionado, entonces, se puede decir que el sistema normativo de Colombia, contendrá,
para efectos de su interpretación, tanto las fuentes formales como los criterios auxiliares, los
cuales no serán restrictivos a los cuatro enunciados en el art. 230 CP, sino que más bien estos
pueden ser integrados por formas adicionales y diversas herramientas como lo son: la analogía,
la costumbre, y otras.

2. ¿Cuáles son los tres sistemas normativos existentes en Colombia? y ¿Cuál debería ser la
relación entre los tres a juicio de Edgar Hernán Fuentes?

R// En Colombia coexisten tres sistemas normativos:

El sistema internacional. Está conformado por su propio orden y normativas y que se observa
como un sistema diferente al local pero que se interrelaciona ya que el sistema colombiano
definido como un monismo moderado permite aceptar las normas internacionales, a través de
normas internas que lo inserten al ámbito local.

El sistema nacional permanente. Según Fuentes, E (2017)., en el inicio de su texto “Sistema de


fuentes colombiano e implementación del acuerdo de paz”, este corresponde al sistema creado a
partir de la Constitución de 1991, que responde al de un Estado Constitucional y Democrático de
Derecho.

El sistema nacional o local transicional. Esta dado en época de posconflicto, que integra
límites del sistema permanente y del internacional.

Según Fuentes, E (2017)., en su texto “Sistema de fuentes colombiano e implementación del


acuerdo de paz” debe existir una interrelación y armonización entre estos tres sistemas,
superando el carácter jerárquico, de prevalencia, cronológico y espacialidad, debido a que
es necesario observar la prevalencia, principalmente de los derechos humanos y estos no
están integrados en un solo sistema.

3. ¿Qué quiere decir que el concepto jurídico de Paz en la Constitución Política de


Colombia de 1991 es polisémico? Justifique su respuesta.

R// El concepto de paz en la Constitución Política de Colombia de 1991 es polisémico porque se


le dan diferentes significados a lo largo de su articulado, es decir, se utiliza con diferentes
acepciones. Según Fuentes, E (2017)., en su texto “Sistema de fuentes colombiano e
implementación del acuerdo de paz” dice que la C.P. de 1991, hace referencia a la Paz desde
diferentes ópticas: En el Preámbulo se habla de la Paz como valor, en el Artículo 22 como un
derecho fundamental y en el Artículo 95 como deber constitucional. La jurisprudencia de la
Corte Constitucional también le ha dado otros significados como estado ideal y como principio,
tanto desde la perspectiva de derecho fundamental como de derecho colectivo.
Dado lo mencionado anteriormente, que el concepto de paz es utilizado con una diversidad de
connotaciones o significados dentro de la C.P., ello hace denotar que este es un concepto
polisémico, dentro de la C.P.

Preguntas 4 y 5.

Con base en el texto que se les entrega a continuación, sírvase responder las preguntas 4 y 5

“El plebiscito no era necesario para legitimar la paz, y menos para deslegitimarla”

Por Mauricio Martínez*

El jurista italiano Luigi Ferrajoli, considerado por muchos el Papa del derecho penal, habla de las
implicaciones jurídicas del triunfo del No y de cuál podría ser la salida a este limbo.
Luigi Ferrajoli. Foto: León Darío Peláez /

Semana.com: Usted siempre ha dicho que derechos como la paz no pueden llevarse a plebiscito.
¿Por qué?

Luigi Ferrajoli: La paz es un principio contra mayoritario. Por esto, como lo he sostenido tantas
veces, el Acuerdo para lograr la paz no tenía por qué ser sometido a un referéndum popular. El
referéndum no era y no es necesario para legitimar la paz, y mucho menos era y es suficiente
para deslegitimarla.

Semana.com: ¿A su juicio, qué significan entonces los resultados del plebiscito en Colombia?

L.F.: Los resultados negativos del plebiscito del 2 de octubre (sobre todo por pocos miles de
votos) no pueden comprometer el proceso de paz. El principio de la paz –al igual o mucho más
que otros principios fundamentales como la dignidad de la persona, la igualdad, la libertad y
otros derechos humanos- representa, en efecto, una precondición de la convivencia civil. Es el
valor político supremo, precedente de cualquier otro, pues representa el presupuesto necesario de
todos los demás. Su naturaleza reside en su carácter supremo y fundamental, en el sentido de que
la paz no necesita el consenso de la mayoría, ni mucho menos puede ser derogado por la
voluntad de cualquier mayoría.

Semana.com: ¿Qué quiere decir con que “la paz es el valor político supremo”?

L.F.: Quiero decir que en Colombia, además, el carácter contra mayoritario de la paz, como
fundamento de la convivencia nacional ha sido constitucionalizado: “La paz es un derecho y un
deber de obligatorio cumplimiento” consagra el artículo 22 de la Constitución colombiana. A
diferencia de otras Constituciones, como la italiana, que también consagran el rechazo a la
guerra, la Constitución colombiana consagra, entonces, la paz como un derecho fundamental de
la persona, y conjunta y correlativamente, como un deber de la esfera pública, cuya
implementación es tarea prioritaria del Estado.

Semana.com: ¿Y eso que quiere decir jurídicamente?

L.F.: Que ahí se fundamenta el carácter absoluto e incondicionado de tal derecho, así como la
inderogabilidad de la obligación, a cargo del Estado, de garantizarlo aun contra la voluntad de
cualquier mayoría. Por esto la impertinencia de la consulta popular sobre la paz. En efecto, sobre
la paz –en ninguno de sus ámbitos- no se vota ni se decide por mayorías, ni sobre la dignidad o la
igualdad de las personas o sobre otros valores supremos como el derecho a la vida y a las
libertades fundamentales. En resumen, el resultado del plebiscito no reduce la obligación
constitucional del Estado de garantizar la paz.
Semana.com: Al Acuerdo final suscrito entre el Gobierno y las FARC se le ha dado el carácter
de “especial” a la luz de los Convenios de Ginebra. ¿Usted cree que esto lo hace vinculante?

L.F.: Efectivamente, eso hace vinculantes todos los Acuerdos. Por esto es vinculante para ambas
partes negociadoras. Pero más allá de la cuestión puramente jurídica, es evidente que, realmente,
la ejecución del imperativo de la paz no puede suceder sino con base en aquellos Acuerdos,
alcanzados con esfuerzo en la larga negociación de La Habana: el desarme de los combatientes,
su reinserción en la vida civil y política y, sobre todo, las normas sobre la llamada Justicia
Transicional, destinada a los excombatientes y acordada por virtud del Marco Jurídico para la
Paz aprobado en el Congreso colombiano el 14 de junio del 2012 y del Acto Legislativo no. 1 del
31 de julio del 2012.

Semana.com: ¿Y qué pasaría entonces con los pactos de justicia que se hicieron en La Habana?

L.F.: Entre los Acuerdos pactados existe en particular la obvia condición de la paz, que
representa la renuncia del Estado a someter a los insurgentes a la justicia penal ordinaria y la
estipulación, para ellos, de un modelo de justicia diferente, precisamente, la Justicia
Transicional, llamada así por el carácter transitorio de las normas que la regulan, o sea para el
período de transición del estado de guerra al estado de paz.

Semana.com: Hay muchas críticas a ese sistema de justicia, en especial que esta lleva a la
impunidad. ¿Usted qué piensa?

L.F.: Precisamente la judiciabilidad de los que se mancharon con crímenes graves –o sea su


tratamiento con las normas del derecho, aún el de transición, en lugar del de la guerra-
transforma, en efecto, a los combatientes y enemigos de ayer en los ciudadanos y conciudadanos
del mañana, con lo que realiza una característica distintiva de la paz. Es claro que tal Justicia
Transicional –orientada a la verificación de la verdad, a la responsabilidad de los autores de las
atrocidades cometidas y al mismo tiempo al resarcimiento de las víctimas- no equivale para nada
a la impunidad que, en cambio, provendría de una amnistía política generalizada e
incondicionada. Se trata de una justicia de tipo reparatorio, orientada a la finalidad obvia de una
reconciliación nacional efectiva que no deje vivos los odios, rencores, sentimientos de injusticia
sufridos o deseos de venganza y, por tanto, basada en la idea de que la principal reparación de las
violencias sufrida por las víctimas consiste sobre todo en la reconstrucción de la verdad histórica,
en el reconocimiento público y en el resarcimiento de los sufrimientos y, por eso, en la
rehabilitación de su dignidad de personas.

*Exalumno de Ferrajoli en la Universita di Roma III y actual profesor de la Universidad


Nacional.

**Tomado de: https://www.semana.com


ENTREVISTA | 10/25/2016 11:00:00 PM

4. ¿Qué críticas y riesgos acarrea el criterio formal de democracia que supone que la
legitimidad del sistema democrático descansa en el sometimiento de las decisiones de
gobierno al voto popular?

R// Al someter cada decisión tomada por el gobierno al voto popular se está renunciando a las
facultades que le brinda la Constitución para ejercer sus funciones, o no las está asumiendo. Al
Estado se le reconoce su carácter de legitimidad y legalidad, esto significa que sus actuaciones
están dentro de un ordenamiento jurídico que incluye a todos los ciudadanos, así como al mismo
Estado y son vinculantes. El Estado cumple sus obligaciones enmarcadas dentro de la
Constitución Política, que lo faculta para ello y por eso se consideran legítimas. Las decisiones
de un gobierno, como representante del Estado y facultado constitucionalmente para hacerlo,
deben estar acordes al ordenamiento jurídico y no traspasar sus competencias, y existen los
recursos que facultan al ciudadano para actuar cuando no lo hace así. Por lo tanto, no es
necesario someter cada decisión, o decisiones sobre tema coyunturales, al voto popular. Sobre
todo, si se trata de temas como derechos fundamentales que le corresponde garantizar (Ejemplo:
la paz). Esto implica poner en riesgo los principios consagrados constitucionalmente y la
renuncia tácita a sus obligaciones.

5. ¿Qué se entiende por principio contra mayoritario y qué papel juega la paz en esta
categoría?

R// Por principio contra mayoritario se entiende que, es una precondición de la convivencia civil
como lo son: la paz, la dignidad de la persona, la igualdad, la libertad y otros derechos humanos.
Estos son el valor político supremo, precedente de cualquier otro, pues representa el presupuesto
necesario de todos los demás. Estos, no necesitan legitimarse legalmente por mayorías a través
de mecanismos democráticos de participación porque se entiende su carácter pre existente y se
trata de derechos que tienen un carácter supremo y fundamental que se deben garantizar aún en
contra de cualquier mayoría.

En cuanto al papel que juega la Paz en la categoría de principio contra mayoritario, se puede
decir que, la paz tiene la categoría de principio contra mayoritario, es decir que es un valor
político supremo que debe garantizarse, porque es un fundamento de la convivencia nacional. En
el caso de Colombia, también es un derecho fundamental consagrado en la Constitución Política
en el Artículo 22, lo que implica que existe una obligación inderogable del Estado, de
garantizarlo sin importar la oposición de cualquier mayoría y sin la necesidad de someterlo a
consultas populares a través de mecanismos de participación, como un plebiscito o un
referéndum.

Вам также может понравиться