Вы находитесь на странице: 1из 6

¿Miedo al coronavirus?

10
versículos sobre la paz de Jesús
para fortalecer tu fe
Las últimas semanas han sido un reto para todos. Desde que comenzó la
expansión del coronavirus no importa a dónde miremos o qué escuchemos,
siempre hay algo que nos recuerda que las cosas no son como antes: hay un
nuevo virus que nos amenaza. Esta nueva realidad puede causarnos ansiedad
llenándonos de miedo.

¿Cómo debemos responder los hijos de Dios ante esta situación? Primero,
debemos recordar que Jesús ya nos advirtió sobre esto, así que no debería
sorprendernos. En Lucas 21:11, cuando Jesús hablaba con sus discípulos
sobre las señales del fin de los tiempos, mencionó las epidemias como una de
las señales del fin.

Habrá grandes terremotos, hambre y epidemias por todas partes, cosas


espantosas y grandes señales del cielo.
(Lucas 21:11)

Segundo, debemos aferrarnos más a Dios fortaleciendo nuestra fe en él.


Necesitamos tomar tiempo para sentir su presencia y recibir esa paz tan
maravillosa que él nos da. No venceremos el temor con nuestras propias
fuerzas: lo haremos alimentando nuestra mente y nuestro espíritu con
la Palabra de Dios y llenándonos del Espíritu Santo.

Es un buen momento para recordar que Dios es nuestro refugio y que


podemos acudir a él en cualquier momento (Salmo 46). Él nos ama en gran
manera, no nos deja y está con nosotros en medio de estas circunstancias
adversas cuidándonos, ayudándonos y renovándonos con su
paz. ¡Aprovechemos este tiempo para refugiarnos en nuestro Dios
todopoderoso y así fortalecer nuestra fe!

1. ¡Jesús ya venció!
Verdad: No hay ninguna enfermedad ni ninguna aflicción que tenga más poder
que nuestro Dios.

Oración: Señor, gracias porque tus palabras traen tranquilidad y sosiego a mi


vida aun cuando me encuentre en medio de luchas y dificultades. ¡En ti está la
verdadera paz! Gracias porque tú ganaste la victoria sobre las aflicciones que
me toca enfrentar en este mundo. Tú tienes el control de todo y pongo mi
confianza en ti, Rey vencedor. Amén.

4 versículos sobre el poder de Jesús para sanar toda enfermedad.

2. Tiempo para escuchar al Señor


Voy a escuchar lo que Dios el Señor dice: él promete paz a su pueblo y a sus
fieles, siempre y cuando no se vuelvan a la necedad.
(Salmo 85:8)

Verdad: Dios está siempre cerca en medio de cualquier circunstancia. Si presto


la debida atención podré escuchar su voz.

Oración: Padre, ayúdame a tomar tiempo para guardar silencio ante ti y


escuchar tu voz. Ayúdame también a obedecerte porque es en la obediencia
donde encontramos la verdadera paz. Quiero servirte con todo mi ser, quiero
andar sabiamente y vivir dentro de tu voluntad. ¡Ayúdame, Papá! Amén.
3. Llevar los problemas ante Dios

Verdad: Puedo compartir todos mis sentimientos y anhelos con Dios. Él no


está aislado; él está siempre a mi lado y me escucha.

Oración: Padre Dios, enséñame a no inquietarme. Que mi primera reacción


ante los problemas sea ir en oración ante tu presencia, llevando todas mis
cargas y preocupaciones ante ti. Quiero recordar con gratitud todo lo que ya
has hecho por mí. Hazme consciente de tu presencia y de tu paz en todo
momento. Ayúdame a mantener mis pensamientos firmes en ti, alineados con
lo que tú dices en tu Palabra. Confío en que me ayudarás. En el nombre de
Jesús, amén.

Mira lo que la Biblia dice sobre la sanidad y orar por los enfermos.

4. Hay paz para los que aman la ley de Dios


Los que aman tu ley disfrutan de gran bienestar, y nada los hace tropezar.
(Salmo 119:165)

Verdad: Amar y servir a Dios trae bienestar y paz a mi vida. No hay


enfermedad ni problema que pueda arrebatármelos.
Oración: Señor, enséñame a amar hacer lo que te agrada. Sé que el conocer
tu Palabra y andar de acuerdo con lo que ella dice traerá paz a mi corazón. No
solo eso, seré más fuerte y lograré hacer frente a las tormentas de la vida sin
tropezar. Dame un amor verdadero por tu ley y un deseo ferviente de
agradarte. En el nombre de Jesús, amén.

5. Entregando la ansiedad al Señor

Verdad: Dios desea que comparta mis temores y ansiedades con él. Yo no
tengo que llevar la carga.

Oración: Señor, no quiero llevar esta carga sobre mis hombros. Te entrego
todos mis problemas y toda mi ansiedad. Gracias porque tú cuidas de mí,
puedo descansar con tranquilidad porque estoy en tus brazos. Muéstrame cuál
es mi responsabilidad en medio de esta situación y enséñame a actuar en
consecuencia. Confío y tengo fe de que tú harás todo lo demás. En su
momento veré los resultados. Que esta situación me acerque más a ti, que mi
dependencia en ti salga fortalecida. En tu nombre, Jesús. Amén.

31 versículos para vencer la ansiedad y el miedo

6. Llamados para vivir en su paz


Que gobierne en sus corazones la paz de Cristo, a la cual fueron llamados en un
solo cuerpo. Y sean agradecidos.
(Colosenses 3:15)

Verdad: Al acercarme a Dios él toma el control de mis sentimientos. Él


apacigua mi ansiedad y me llena de paz.

Oración: Señor, quiero vivir con el corazón lleno de tu paz. Anhelo inspirar a
otros a seguirte y a disfrutar también de la paz que tú das. Ayúdame a
representar bien tu nombre, a ser ejemplo aun en medio de las situaciones
difíciles que nos llegan de forma inesperada. Y ayúdame a darte gracias por tu
presencia, por tu paz y porque siempre obras a favor de los que te aman. En tu
nombre, Jesús, amén.

Cómo animar a los hermanos durante esta pandemia del coronavirus

7. La paz de Dios es especial

Verdad: No hay nada en este mundo que pueda llenarme de paz como lo hace
mi Señor. Su paz permanece para siempre y me llena de valor.

Oración: Gracias, Padre, porque la paz que tú me das no se puede comparar


con la del mundo. ¡Es especial! Estoy lleno de gratitud porque de ti recibo
nuevas fuerzas para lograr afrontar los problemas y dificultades que se me
presentan. Gracias porque tu Espíritu Santo vive en mí y me recuerda que
cuento contigo y con tu incomparable paz. Sé que podré salir adelante y
contigo obtendré la victoria (Salmo 60:12). En el nombre de Jesús, amén.

8. Dios nos da una paz perfecta


Al de carácter firme lo guardarás en perfecta paz, porque en ti confía.
(Isaías 26:3)

Verdad: Cuando confío en Dios me lleno de su paz. En medio de esta


situación, quiero confiar más y más en él.

Oración: Señor, gracias porque tu perfecta paz llena lo más íntimo de mi ser.
En ti confío. Ayúdame a perseverar en mi servicio a ti y en mi completa
dependencia de ti. Quiero permanecer firme en todo momento, con mis ojos
puestos en ti. Que las luchas de la vida no me hagan dudar de tu amor y de
que tú sí estás obrando aunque no pueda verlo de inmediato. A su debido
tiempo lograré ver tu poder manifestado en medio de cada situación. Amén.

¡Confía! Versículos para fortalecer tu confianza en Dios

9. Servimos al Príncipe de paz

Вам также может понравиться