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MUSEO O'HIGGINIANO
y DE BELLAS ARTES DE TALeA
(CASA DE LA INDEPENDENCIA)

MANU AL HI S '1' OR I CO y nESlR1PT1YO

DIRECCION GENERAL DE BIBLIOTECAS, ARCHIVOS Y MUSEOS

MUSEO Q'HIGGINIANO
y DE BELLAS ARTES DE TALeA
(CASA DE LA INDEPENDENCIA)

MANUAL HISTORICO y DESCRIPTIVO

 LA HISTORIA

El artículo 11 de la ley 13.936, promulgada con fecha 26 de abril de

1960, autorizó al Presidente de la República para proceder a la expro-
piación del inmueble ubicado en Talea, en el que don Bernardo O'Higgins
como Director Supremo del Estado aprobó y ordenó promulgar la De-
claración de la Independencia Nacional de Chile. Se disponía, además,
la restauración de esa casona señorial conforme a los planos que se
aprobaran oficialmente por Decreto Supremo y, por último, se destinaba
el edificio para establecer el Museo O'Higginiano y de Bellas Artes de la
ciudad de Talea.
Esta disposición legal , incorporaba este proyecto al plan conmemo-
rativo del Sesquicentenario del primer Gobierno Nacional, materia
resuelta en la citada ley 13.936 originada en un Mensaje redactado por
~l Ministerio del Interior y pretendía dar satisfacción a una antigua
aspiración de la ciudad de Talea, manifestada en reiteradas oportunidades
a través de su r epresentación parlamentaria y entidades culturales . Cabe
dejar constancia que, ya en la ley 8.167 de f echa 15 de sept iembre de 19-1.-.
originada en una moción del H. Senador don Ulises Correa, se declaraba
Monumento Nacional esta propiedad y se disponía su expropiación, lo que
no pudo materializarse tanto por dificultades de financiamiento corno
por razones jurídicas, al no prosperar judicialmente el trámite de la
expropiación.
En cumplimiento de la nueva ley, el Excmo. señor Presidente de la
República don ,J orge Alessandri Rodríguez designó una Comisión a-
cional organizadora de los actos conmemorativos del Sesquicentenari o,
bajo la dirección del Ministro del Interior don Sótero del Rí o Gundián.
y en la cual correspondió la designación de Secr etario General Ejecutivo

- 5
a don Jaime Silva Silva, Sub ecretario del Intel:ior. Produc!do.s los te-
rremotos del 21 Y 22 de mayo ele 1960. fue.necesan? anula r !~ractl camente
en su integridad el programa de festejos I;lrevlstos para celebr~r .el
Sesquicentenario de la Primera Junta de Gol;nerno y en la ley s~b~e re-
cO]1~tru cció n se destinaron los recursos fll1anCleros conte mplados pa la ;sa
conmemoración al objetivo primordIal ele aY~lda a _la zo~a daml111lcaJ.1.
No obstante el Subsecretario del InterIor senor SII.va obtuvo que
se mantuviera la 'asignación de 25.000 escudos para expropI ar y restaurar
la casa talquina en que se procl ~E1? la Independen cIa Nac l.c n~l, ~ un a sa-
biendas de que con tal suma sena ImposIble c.u mp 1.11' e.l o?.1etlvo II1chcado,
pero, al menos, se conservaba el instrumento Jundlco lI1dl spensable Y una
suma para inicia r la t~rea pro~uesta. El Secretari o q:ene~·.a l E.J ecu~l vo del
Sesqui centenario deblO, consent u' y lamentar la elImll1aClOll de oh?s pla-
nes como las restaura CIOnes de la Casa Colorada de SantIago, fu el tes es-
pafioles de Valdivia y Ancud, etc.
El Subsecretario seiior Silva di spuso la adquisición de los inmuebles
de propiedad de la sei1 ori~a L.aura Gaete y Sucesión Mazoy rlaga, 9ue .~n
conjunto formaban la primItiva Casa de la IndependencIa, tramltaclOn
que se hiciera con la intervención del señor Intendente de Talca don José
Escobar Puccio, previas las tasaciones legales, por un precio total de
24.000 escudos que, agregados a los gastos de eSCl'ltura y otros. agota-
ron totalmente la partida prevista en la ley, sin dejar disponible suma
alguna pa ra la muy costosa r estauración , Con todo, se había dado un
OTan paso al efectuar las compras en forma directa, evitándose los juicios
~xpropiato ri os, de lata tramitación.
Los planos de restauración fuero n encomendados a l arquitecto de
Santiago don Hipólito Vi llegas, descendiente del Mini stro de Hacienda de
O' Hi ggin s de igual nombre, y la ejecución de la obra estuvo a cargo de
este profesional , conjuntamente con el Arquitecto provincial de Talca,
-eñor Arturo Marambio. Entre tanto, el Subsecretario del Interior pro-
curaba los recursos finan cieros indispensables para la histórica restau-
ración, a cuyo efecto se ac udi é a emisiones filatélicas, fondos especiales
de la Sub ecretaría citada de li bre disponibilidad y aún a gast os reser-
vados, hasta cubrir el costo total de la obra que fue de 101.500 escudos,
ca nt idad varias veces superior a la consultada en la ley. (Decretos 6.739
de 1961 y 266 de 1962, Mini ster io del Interior).
Los t rabajos de restauración prosiguieron bajo el impul so local
expresado a través del In tendente señor Escobar, el Director del Museo de
'ralca don Bernardo Mandiola, el Director del diario " La Mañana" don
Juan C. Bravo y otros miembros de la Comi sión regiona l, y de las con-
tinuadas visitas a la zo na del Subsecretario del Interior señor Silva
Director de Bibliotecas y Mu seos don Guillermo F eliú Cruz quien desd~
un princip io acogió el proyecto con el mayor interés y be ~e p l ác ito' del
Vi sita? or de Intendenci as don Lui s Octavio Reyes Ugarte y otros' fun-
ClOnarlOS que, desde la capital, participaban en el noble esfuerzo de ren-
dir un homenaje al Padre de la Patria en una ciudad, como la de Talca,
especialmente vincu lada a su vida y obra, en et apas tan, culminantes
com o la Proclamación de la Independencia Naciona l. '
Consumada la obra de a rquitect ura colonia l, se ])]'oced ió a dota'!, el
Mu se? de Bellas Artes con los objetos disponibles en esa entidad talquina,
ademas de vanados objetos donados a l efecto, y el Mu seo O'Higginiano
con pIezas entregadas por el Mu seo Histórico Nacional de Santiago. Con-
clUlda esa etapa, f ue posible In a ugurar, con gl'an so lemnidad el día 20'
d~ agosto de 1964 la Casa d~ ,la Indepen dencia en Talca, acto que congr e-
go al,p~eb l o , los efectt.v0s mt!ltares y una delegación oficial presidida por
el ~ll11stro del Inter.lOr doctor Sótero del Río, quien representaba al
PresIdente Al essandn .

6-
 La Casa de la Independencia se mostró ese día fi elmente r estaurada,
ostentando hasta en los mínimos detall es las caracter ísticas de la arqui-
tectura colonial chilena. En cuanto a la casa misma, e de sólo un piso y
cuenta con tres patios. Al primero de ellos, en el siglo pasado, tenían acceso
todas las dependencias secu ndari as de la residencia. La vida familiar, a no
~udfl;rlo, se desarroll ó en los salones que dan al segundo patio, es decir, al
Jardm de naranjos y enredaderas. En torno a él se halla un gran salón,
precisamente en el cual se promul gó la Independencia de Chile. El tercer
patio era prácti camente un huerto y al lí se encontraban las cocheras, cocinas
y servicios. La superficie tot al del inmueble es de dos mil quinientos metros
cuadrados.

Si nos remontamos al pasado hi stórico y traemos al recuerdo el acto

trascendental de la proclamación solemne de la soberanía y libertad de
nuestro pueblo, en el gran salón de la casona solariega de la famili a
Albano, confirmaremos que ese sitio es un verdade ro Altar de la
Patria entregado a la veneración de todos los chilenos.
Dice el historia dor don J aime Eyzaguirre en su obra "O'Higgins"
lo que sigue:
"Desde hacía meses una idea estaba trabajando y ahora parecía
llegado el momento de darle cuerpo. Chile debía manifestar a la
faz de las naciones su resolución de vivir independiente, y por un docu-
mento solemne afirmar este propósito de liberación que ya había calado
hondo en las conciencias. Ahora que una enorme amenaza obscllrecía la
conquistas tan trabajosamente alca nzadas, esta voluntad de ser de la pa-
tria debía mostrarse más firme que nunca y oponer al invasor, no sólo
el poder de las a rmas, sino también la fuerza espiritual de un pueblo
interiormente cohesionado en su propósito de existir" .
"O'Higgins sentía la necesidad de este documento, que iba a ser co-
mo la partida de bautismo del nue vo Estado, pero conociéndose hombre
de espada y no de letras, había confiado a ma nos más expertas su redac-
ción. El Ministro Zañartu , don Juan Egaña, don Manuel de Salas y don
Bernardo de Vera cuidaron de dar al acta la forma más adecuada, no sin
que varias veces O'Hi ggins devolviera los originales, r eclamando una
precisión y brevedad de que el texto carecía. Al fin. t ra ladada c'lida-
dosamente al pa pel la f órmula definiti va, f ue enviada al Director Supre-
mo paJ'a su aprobación, la que éste otorgó en Talca el 2 de febrero de
1818, aunque el documento se dató en Concepción el primer día del año.
Chile, decía el acta, " para cumplir los altos destinos a que le llamaban el
tiempo y la naturaleza", había lucha do firmemente, hasta quedar "pal'a
siempre separado de la monarquía de E spa ña" . "Y de otra cualq ui era do-
minación", intercaló ahí mi smo de puño y letra el Director, convencido
como esta ba de que la patria, al tomar forma y desprenderse del cuerpo
español, no lo hacía para soportar pasivamente en el futuro las cadenas
que pretendieran colga rle otros imperios. Una PEr enne \'oluntad de exis-
tir libre l>Iabía de ser el norte de la nueva nación que ahora pedía un si-
tio individual en la comunidad de los pueblos" (Páginas 182 y 183, 51,1
Edición Especial).

La consulta cívica, a CJue se refiere el Acta. se había ord enado por

Decreto de 13 de noviembre de 1817 que COIl\'ocó a t dos los ciu -
dadanos a ma nifestar su opinión en favor o en contra ele la inelepend n-
cia, para lo cua l se establecían dos li bros (Libro de Suscripción y Libro

-7
 " ' ) "La tal'ea de recoger tales firmas, a lo largo del territorio
dde OposlclOn.
.' , de dos meses y no alcanzo' a cone 1u n'se . con sel.emc
. Iac.I En los
e~ ol o mads, de ellel'O de 1818 Osorio desembarcó en Talcahuano.
pl'lmeros .las sus tropas Y se" replego haCIa
. l' a Ica.
" (L' V I'
o'H l~gIl1L
' .
s. lDecogió UlS
eclal'ación de la Independencia de Chile. Imp. El Esfuerzo
a encJa
AVal la . a
1943k tales circunstancias nadie pretendi ó suscribir el libro de Opo.si-
. , . n los l'e"istros favorables sólo se conserva el "LIbro de Suscnp-
elOn d
eión yde e los Eclesiásticos
'" para que se dec Iare la I d n epen d encla'. d e
Chile".
Este libro reunió 253 firm as, inclt~i~as tres "a ruego del Padre Su-
perior", y están procedida~ ?e un mamflesto. que, entre .o~ros conceptos,
expresa: "Pos estos prmclplOs de eterna vel dad y .1 ustIc~a, nos declcj¡-
mos abierta y francamente, protestamos nuestros sacl'lflCJos y nuestros
\'otos, como Pastor, como Min!stro d~1 Altar y c?mo clU~adano hb!'e y
juramos con todos los infrascntos la mdependenc.la d~! r emo _de ChIle y
perpetua separación de Fernando VII y ?~ la domma,clOn espal:ola; nues-
ra cooperación en cuanto nos sei!- permItIdo al sosten de la. lIbertad sa-
ludable y nuestra constante obedIencIa a la, Supre!na ~utorJdad del Es-
tado" El Gobernador del Obispado, don Jose IgnacIO Clenfuegos, por ofI-
cio d~ f echa 19 de enero, remite al Gobierno ambos libros y deja constan-
cia de que el Libro de Oposición "ha quedado en blanco, porque los opo-
sitores habrán querido afirmar su negativa por la falta de concurl'lr".
Además del manifiesto eclesiástico, diversas entidades emitieron fer-
vo rosas proclamas para mover la opinión en apoyo a la causa de la in-
dependencia. Cabe destacar el manifiesto uni ve rsitario, impulsado por
Argomedo, que se desempeñaba como Secretario de la Universidad, quien
actuó ya persuadiendo o intimidando a sus mi embros y doctores. A pe-
sa r de prevenirles el " desagrado" del Director Supremo si no cooperaban,
algu nos no concurrieron a la convocatoria para suscribir el documento,
pero los más "apenas se les insinuó que acreditarían mejor su patriotis-
mo manifestándolo muchas veces, incluso en esta proclama, cuando vo-
luntariamente y con placer prestaron sus firmas".
E s un hecho histórico que, ante la imposibilidad de los pueblos de
Concepción para emitir sus votos "se apeló, entonces, al recurso de abril'
registros especiales en Talca y otras ciudades para los que emigraban de
ul tra Maule" (Valencia, Ob. citada).
Por otra parte en los registros de Talca "no sólo estamparon su firma
los "ciudadanos" sino también, las más distinguidas damas, que lo hicieron
como "cIudadanas" dando muestra de su preclaro patriotismo, único ca-
so entre todas las ciudades de la naciente República en que la mujer ex-
ten oJ'lzaba su sentIr de patriota y su sacrificio por una causa" (Gusta-
vo Opazo, Historia de TaJea, Pág. 242).
Con todo, sin conocerse los resultados de la encuesta, por no haberse
r ecuperado todos los registros, y ante el apremio de los patriotas, el Direc-
to r Supremo Delegado don Luis de la Cruz dispuso el día 16 de enero que
un expreso ll evara el Acta de la Independencia, redactada por Zañartu
hasta Talca para obtener la firma de O'Higgins "porque me parece que de:
be Ir fI rmada por él, de cuya gloria es digno". Pero O'Higgins que atri-
buía eñalada importancia a l doc um ento y le preocupaba su ' efecto en
Europa, lo devolvía con observaciones en documento datado en Talca el
día ~2 de enero. Disponía que una Comisión, formada pOr Zañartu, J{lan
Egana, Salas y Vera, le diera una nueva redacción conforme a sus ins-
truccIones.
Entre éstas hay una muy significativa : "La protesta de fe que ob-
ser vo ~n el borrador, cuando habla de nuestro invariable deseo de vivir
y monr lIbres, defendiendo la santa f e en que nacimos, me parece supri-
mlbl e en cua nto no hay de ella una necesidad absoluta, y que acaso pueda

8-
chocar algún día con nu estros principi os de política. Los países cultos han
proclamado abiertamente la libertad de creencias ; s in sa lir de la Amé-
rica e1el Sur, Bras il acaba de da rn os este notable ejemplo de liberalismo;
e importa ría tanto proclamar en Chile una r eligi ón excl uyente como p ro-
hibir la emigración hacia nosotros de multitud de talentos y de brazos
útiles de que ab unda el otro co ntin ente. Yo a lo menos no descubro el mo-
tivo que nos obligue a protestar la clefensa de la fe en la declaración de
nuesü·a independencia".
El día 28 de enero la Comisión entregaba a l General Cruz el nuevo
texto que, recibido pOi· O'Higg ins el 2 de f ebrer o, mereció su aprobación
con las enmiendas que estimó del caso agregar a ese doc um ento.
Con fecha 7 de febrer o el Director Supr mo Delegado, don Luis de la
Cruz, dicta un bando dis poni endo las ceremonias de la j ura. "Ese bando
contiene íntegra la f órmula del juramento que prestarían el pueblo y las
autoridades (distinta a la versió n que nos dejó Monteagudo) y guarda
estrecha analogía con uno de los agregados que O'Higgins hizo al Acta.
Dice así:
"Juráis por Dios y prometéis a la Patria, con la garantía de vuestras
fortunas, honor y vida, sostener la presente declaración de in dependen-
cia del Estado chileno, de F ernando VII, sus sucesores y de cualquiera
otra dominación extraña ?" Dada la r espuesta, se agregaba : "Si así lo hi-
ciéreis Dios os ayude, y si no, El y la Patria os hagan cargo" (Valencia,
Ob. ¡citada).
Con el juramento, prestado por los pueblos, se cumplía la a piración
de O'Higgins de qu edar "sellada para siempre la emancipación de Chile".
De la importancia que el Padre de la P atria atribu yó al Acta de la Inde-
pendencia nos dice un pánafo, citado por don Luis Valencia, de una carta
del prócer escrita desde el destierro: "Mi ambición se satisface con el'
chileno de nacimiento y ser el primer o en la gran Carta de su I ndepen-
dencia" (Carta a Mariano Ramón de Aris, 27 de Marzo de 1833) . Y en
el propio oficio datado en Talca el 22 de enero por el que rechaza el borra-
dor de Zañartu, expresa: "Un justo temor a l tribunal severo de la censura
universal, el respeto debido a la sabiduría de las nacione y refinada po-
lítica de los gabinetes, me han detenido suscribirle temiendo que compro-
metía el honor nacional firmand o con menos detención el escrito más aten-
dible y céleb1'e que :ia1n(w se puede d,a1· a luz".
Resta sólo consignar que el documento original, que se guarda en lo
archivos ·del Senado, no fue firmado por O'Higgins. En 1832 el Presiden-
te Prieto dispuso se r econstitu yera el do cumento por un calígrafo y, f ir-
mada el acta r eproducida por Zaña rtll , Villegas y Zenteno, fu e remitida
al Perú para la firma del prócer. que se encontraba en el destierro. Este
documento, en que se omiten las fras es agregadas por O'Higgin en el
Acta auténtica, se conserva en el Salón del Consejo de Gabinete ele la
Moneda.

-9
SEGUNDO Y COLONIAL PATIO DE LA CASA DE O'HlGGINS, DONDE HA QUEDADO UBICADA
UNA DE LAS GALERIAS DE ARTE DE MAYOR IMPORTANCIA.
MUEBLES, CUADROS, ARMAS Y OTROS OBJETOS E TRE-
GADOS POR EL MUSEO HISTORICO NACIONAL DE SANTIAGO
AL MUSEO O'HIGGINIANO DE TALC:\._

Muebles :

1 Amoblado de asiento con cuero verde, compuesto de un sofá y dos

sillones de madera talla do.
1 Cuna Rococó de madera ta llada con pabellón, mueble de luj o de co-
mienzos del siglo XIX.
1 Sillón de ba queta frailun o, con respa ldo de madera y asiento de cuero.
1 Sillón fr a ilero de ma der a, sencillo, con r espaldo a lto.
2 Mesas de ar rimo de caoba, con patas t a lladas.
1 Pliana a ntig ua de caoba, siglo X\ III, inglesa, con su .teclado.
1 Papelera (varg ueño) del siglo XVI II con incr u tacione de carei y
ma rfil, ba ra nda con cor onacién, dos cuad ri tos incrustados y patas de
ga rra, co n su pi e.
1 Mesa colonia l de a ler ce, siglo XV III, pata de cabra.
1 Ropero colonia l, siglo XVII, sencillo, con tableros lisos incrus tados.
1 Banco colonia l, siglo XVII, muy sim¡:¡le.
2 Vitrinas gr a ndes de centros sexagona les y redondas en el interior.
2 Máquinas primit ivas de coser con su pie. F ueron las primeras que
llega ron a Chile.
1 Cajuela ta llada colonia l.
2 Sill as coloni ales con asiento de cuer o y r espa ldo igual, repujado.

11
Objetos y armas:

2 P etates colon ial es de cuero .trenzado. d t

1 Pa noplia con 2 fusiles, 4 pistolas de chispa, 4 hojas e ya aganes y
4 bayonetas. . .
5 Sables antiguos, Sll1 v~m a ..
4 Yataganes antiguos Sll1 vall1a.
10 Bayonetas antiguas. G a
15 Cascos negros con adornos de bronce, de militares europeos. uerr
de 1914.
13 Kepis de militares europeos. Guerra de 1914.
5 Cart(¡cheras de cuero.
3 Petos metálicos.
2 Rejas coloniales grande. Pe~·tenecier~n a La Moneda.
1 Columna de piedra de esqUll1a Colo;1Ial, con su base.
1 E statua de bronce, frances. Alegona. .
1 E statua de mármol. La Victoria de Samotracia.
1 Busto de yeso. Don Valetín Let elier.
1 Busto de yeso. Don P edro Montt.
1 Busto de yeso. El Abate Molina.
1 Medallón Don Benjamín Vicuña Mackenna.
1 Medallón don Pedro Aguirre Cerda, Pdte.
1 Maquette proyecto monumento al Dr. don Nicolás Palacios.
1 Busto de mármol, chico, de Esopo.
1 Estatuilla de gr eda, don E smerado Sej~dor. .
1 Estatuilla de gr eda, doña Dolores P alacIos de Se]edor.
1 Bronce. Guerrero.
1 Sable antiguo.
1 E spada con vaina, antigua.
1 Yatagán con vaina de cuer o antiguo.
1 E spadín antiguo.
1 Machete.
4 Sables antiguos.
1 E spada antigua.
2 E spadas antiguas.
Cuadros y retratos:
1 Mapa Ilu strado de Chi·le. Antiguo.
1 Cuadro Cronológico de Historia Antigua de América Hispánica, im-
preso en colores por don Vicente P érez Rosales. Con marco y vidrio.
1 Cuadro cronológico de Historia Moderna de América His pánica. Mismo
autor.
1 Gran marco dorado y ta llllido con el escudo nacional en colores. Per-
teneció al Palacio de La Mon eda y en él se exhibía el Acta de la Inde-
pendencia de Chile.
3 Cuadros, proyecto del monumento a l Genera'l Bulnes. Marco y vidrio.
1 Cuadro Marina, óleo con marco.
1 Cuadro. Acta de la Proclamación de la Independen cia. Marco y vidrio.
1 Litografía. Batal la de Chaca buco en colores. Marco.
1 Litografía. Batalla de Maipú. Con marco.
1 Li tografía. Batalla de Maipú de H ernández ViIlanueva. Marco .
1 Litografía. R etrato de Bernardo O'Higgins de Alegría de R ezca.
1 Retrato de Bernardo O'Higgins. Li tografí a de Rojas. !Sin marco.
1 Retrato de Abate Molin a. Cuaclrito antiguo.
1 Ret rato de J osé Miguel Carrera.
1 Retrato del General San Martín. Litografía.
1 Retrato del General Guevara. Atribuido a Monvoisin. Oleo.

12
1 Retrato de Eusebio Lillo y Ramón Carnicero Dibujo.
1 Retrato de José Manuel Balmaceda. Litogr afía.
1 Retrato de Manu el Baqu edano. Dibuj o litográfi co .
1 Retrato de Fran cisco Bilbao. Di buj o litográfico.
1 Retrato de Andrés Bello. Dibuj o li tográf ico.
1 Retrato de Di ego Barros Arana. Dibujo li tográfico.
1 Retrato de Carlos Condell . Dibu jo litográfico.
1 Retrato de E stani slao del Canto. Dibuj o litográfico.
1 Retrat.o de Igna cio Domeyko. Dibuj o litogr áfico.
1 Retrato ele Baldom ero Dubl é. Dibujo litográfico.
1 Retrato ele Federi co Errá zuriz Z. Dibu jo litogr áfico.
1 Retrato de Ramón Freire. Dibuj o litográf ico .
1 Retrato ele Pedro León Gallo . Di bujo litogr áf ico.
1 Retrato ele P edro Lagos. Dibuj o litográfico.
1 Retrato de Juan José Latorre. Dibuj o litogr áfico .
1 Retrato ele Ma nuel An tonio Matta. Dibujo litográfico.
1 Retrato ele Ma rcos Maturana. Di bujo Iitogl'áfico .
1 Retrato ele Jorge Montt. Dibujo ·Iitográf ico.
1 Retrato ele Manuel Montt. Dibuj o litogr áf ico.
1 Retrato de Pedro Montt. Dibuj o litográfico.
1 Retrato de José Ollamo. Dibuj o litográfi co.
1 Retrato de Manuel José Orella na . Dibujo litográf ico.
1 Retrato de Anibal Pinto. Dibujo litográfico.
1 Retrato de Arturo Prat, Dibuj o litográfico.
1 Retrato de Pedro Nolasco Prendes, Dibuj o litográfico.
1 Retrato de Eleuterio Ra mírez. Dibuj o litográf ico.
1 Retrato de Vicente Reyes. Dibuj o litogr áfi co.
1 Retrato de Germán Riesco. Dibuj o litográf ico.
1 Retrato de Ernesto Riquelme. Dibujo lit ográfico .
1 Retrato de Domingo Sant a Ma r ía. Dibuj o litográf ico.
1 Retrato de Ig nacio Serrano. Dibuj o litográfico.
1 Retrato de Basilio Urrutia. Dibujo litogr áfico.
1 Retrato de Antonio Varas. Dibuj o litográfi co.
1 Retrato de Arturo Wilson. Dibuj o litogr áfi co.
1 Retrato de Benjamín Vicuña Mackenna . Dibuj o litográf ico.
1 Grabado. Altar con el Crist o y dos Santos. ¡ 'idrio y marco.
1 Grabado. Monumento a Manuel Rodríguez.
1 Fotografía grande del Regimien to 29 de Línea. Vidrio y marco.
1 Acuarela " La Gole ta Ancud" .
1 Cuadro de Pedro León G allo. Oleo.
1 Gran retrato del General San Martín. (2 x 1 50) con mar co .
1 Gran retrato de Pedro Aguil'l'e Cer da. Oleo con marco.
1 Cuadro al óieo a nt ig uo. Francisco P izarra.
1 'Fotograba do de F elipe IV. Cuadro ·d e Velázquez.
1 Fotograbado de Mariana de Austria. Inf anta española. Cuadro de
Velázquez.
1 Fotograba do de cua dro Las La nzas, de Velázquez.
1 Origina l. Despacho ascenso de don Diego P inochet, firma do por Go-
bernardor Luis Ml1ñoz de Guzmán.
1 E st andarte de satín blanco con la in ign ia de la Orden de Ca lah'a \'a,
en paño rosado (modelo) ,
1 E standarte de satín blanco con ,l a insignia de la Orden de Alcá ntar a,
en paño verde (modelo).
1 Estandarte de tela blanca con cru z r oj a al centro e inscripión "Esta
será la señal de nuestra buenave nt ura" (modelo).
1 Estanda r te de tela bl a nca con cru z en tel a r oj a al cent ro (modelo).
1 Fotograbado, r eproducción de cuadro de Gaya de Reina Ma ría Lu isa .

'~
- 1 i)
 1 Reproducción fotográfica de retrato de Pedro Fernández de Balma-
1 ceda. . t ro de CarI os JII .
Reproducción, retrato del Conde de Aranda. M'InIS
(Dibujo). . d Ch'l F '
1 Impreso del Real Decreto de Expulsión de -]os JesUitas, e l e . ' Ir-
mado por el Conde de Aranda. 1763. _
1 Ordenanza original firmada por el Rey de Espa~a, Carlos III, 1778,
de ascenso a Capitán, de don Francisco de BezamIla.
1 Retrato de Seilora Desconocida.
1 Cuadro con la nómina de Gobernantes de Chile, desde 1,5-36 (impreso).
1 Cuadro sinóptico de -la Historia de Chile (manuscrito).
1 Retrato del General de División, don José Francisco ,Gana, con marco,
y vidrio.
1 Fotografía del General José Francisco Ga.n:;! ovalada, de 8 x 6 cl1!s.
con marco en forma de pa'leta, de compOSlClOn negra, con flores pIn-
tadas de color y hojas verdes, y su atril de madera.
Imagen del Sagrado Corazón, con vidrio y soporte de madera, que el
General José Feo. Gana recibió de su confesor ,8 días antes de morir.
Mide 10,50 x 6,50 cms.
1 Otros materiales de níquel en forma de caja rectangular, con depósito
de loza. Mide 7,5 x 5 cms. Perteneció al General Gana.
1 Estuche de cuero que contiene una ·l ibreta de apuntes, una peineta, un
corta uilas, una lima, dos escapulario y un cadejito de cabellos. Mide
13 x 7 cms. Perteneció al Gral. Gana.
1 Asentador para navajas de afeitar, de dos caras. Mide 30 cms. Per-
teneció a·l Gral. Gana.
1 Retrato de García Hurtado de Mendoza (óleo chico).
1 Ret r ato de Gerónimo de Alderete (óleo).
1 Grabado de Jerónimo de Alderete ante Felipe 11.
1 Grabaelo de Juan de Ladl'illero al tomar p osesión del Estrecho de Ma-
gallanes.
1 Reproducción fotográfica de María Tudor.
1 F otograbado. Cuadro de Goya "Los condenados de la Inquisición".
1 Fotograbado, cuadro de Goya "El Tribunal de la Inquisición".
1 Panneau ele 3 fotografías de medallones de María Tudor.
1 Fotografía de Copón de 1599 para oficio misa.
1 Grabado de Jerónimo ele Alderete ante Carlos V.
1 Grabado de Pedro de ,la Gasea.
1 Grabado de Alonso de Monroy.
1 Grabado de Manzano y Ova lle.
1 F otograbado de dibujo de Bartolomé Flores.
1 Reprodu~ción de 2 .páginas del Acta de Fundación de Santiago.
1 Foto~l'af¡a de la Virgen del Socorro, que trajo don Pedro de Valdivia
a Chile.
1 Fotografí~ del retrato del Padre Antonio Correa 'que vino a Chile con
los ConqUIstadores.
1 ~otografía de copón obsequiado a la Cated ral de La Serena por Fe-
lipe 11.
1 Escudo el,e Pedro de Valdivia, bordado en seda .
1 Fotografla de grabado de Tomás Pastene
1 Fotograf!a de grabado de don Melchor 'B ;avo de Saravia
1 Fo tograf~a de grabado de don Juan Jofré.
1 Fotograf~a de grabado de don Franc isco Rodríguez del Manzano
1 Fotograf;a de grabado elel Licenciado Vaca de Castro. .
1 Fotograf~a de grabado de Francisco Drake.
1 Fotograf~a de grabado de Núñez de Pineda.
1 Fotograf~a de graba?o de Gaspar de Villarroel.
1 Fotografla de las rumas de Iglesia de Mancera.
14
1 Documento original nombra Sargento Ma,yor a don Agustín Herrera.
1 Escudo de Cristóbal Colón, en colores.
1 Fotograbado {le Isabel de Barbón, cuadro de Velázquez.
1 Caj ita-tintero de metal, en form a cilíndrica, con su pluma y lapicero
aju stable. :vlide 7 cms. alto por 2,7 cms. de circunsferencia. Perte-
neci ó a l Gral. Gana.
1 Florete que perteneci ó al Gral. Manuel Délano Díaz.
1 Maletín de campaña, de cuero negro con llave y correa para llevar
al hombro. Mide 2>8 x 21 cms. Perteneció al General Gana.
1 Espada grande con hoja de acero y empuñadura de bronce, protector
en forma de cruz, con el escudo de Chile, ele procedencia desconocida.
1 Cinturón de cuero amarillo, con cartuchera para revólver y estuche
para ba'las. Perteneció al Gral. Gana.
2 Hebillas antiguas de fierro damasquinado.
1 Bala de fierro. Mide 14 cms. alto x 4,5 cms. diámet ro.
1 Asentador con mango para navaja ele afeitar, de cuatro caras, con
cajita de madera ad-hoc, que contiene dos navajas con cacha de hueso,
en una hay grabada dos llaves cruzadas y se lee: G. owilis y Sons-
Scheffiel; en la otra : George Ritakera G. Ron y oor-Sheeffi eld.
Miden 24,30 y 25 cms. respectivamente. Perteneció al Gral. Gana.
1 Sable antiguo con empuñadura en forma de cabeza de águila, de co-
bre y protector del mismo metal. Vaina de cuero y adorno de bron-
ce liso, con las siguientes leyendas : " Pulachen y Teber, Va lparaí o".
1 Catalejo antiguo de madera, incompleto, con soporte y abrazadera
de bronce.
1 Kepis azul-rojo con adornos de cinta dorada, del t ipo usado en 1879.
1 Clavo colonial de fierro, encontrado en las excavaciones hecha en
el sitio en que estuvo el antiguo Co nvento de Santa Clara, en los con-
tornos del edificio correspondiente al Museo Histórico Nacional.
4 Obuses de diferentes tipos.
1 Bayoneta.
4 Pistolas de la Independencia encontradas en Chacabu co.
1 Sable antiguo.
1 Espada anhgua.
1 Florete antiguo.
1 Yatagán antiguo.
1 Yatagán antiguo.
1 Punta de asta de alabarda tru nca.
1 Bayoneta antigua.
1 Revólver antiguo.
1 Lote de 17 fu siles, arcabuses, trabucos y otras armas de fuego colo-
niales y de épocas posteriores.

-r
SEGUNDO PATIO DE LA CASA COLONIAL DE O'HIGGINS, CONSER-
VANDO SUS HERMOSOS NARANJOS. ESTE PATIO TAMBIEN CUENTA CON
GALERIAS DE ARTE.
CARTA DE LA F AMILI A FE RNANDE Z BARROS,

" Talca, 30 de ?""f/,ayo de 1964

S eñor
Bernardo Mandiola Cruz,
Conservador' del M~¿s eo O'Higgins,
Pr'esente,
Muy señor' n'uestr'o:
E n conocimiento de que en br'eve se inaugurará el Museo
O'Higgins, nos es gr'ato hace?' entrega a usted, a título de donación, para
el Museo, del s o fá .q~w ocupaba el estmdo del salón de la casa en la q~le
el Director' S~¿p1'el1w, don B e1'nar'do O'Higgins, firmó el acta de nuestra
inde1)endencic¿ nacionc¿l y que nuest1'a m adre, doña Julieta Ban'os de
F er'n án dez compr'ar'a hace ya muchos años a la.s seño?'itas Opazo, c~¿ando
eran dueiias de esta cc¿sa,
A simismo, y en considen wión a que e,l Ua habrá una. sala
de actos cultU1'ales, hacemos tam bién donación al Museo, del piano qu P
fu e de nuestr'a rnadr'e, en 1nemor'ia de ésta, e interpr'etando la vohmtad
que n os m anif es tar'a en mu chas ocasiones ,

Sal1¿clamos muy atentc¿mente a Cd,

A ur'elio Fe1'nánelez Ban'os, Ma1'ta F, ele Sepú,lveda,

Mwría F, ele Fuenzalida, Tila F, ele Meyer ,
Alfonso F e?'nández B arT OS , Cir'o Ferná,ndez Banos,
A lejanelr-o PaTot Fer'ná'ndez" ,

RE GALOS RECLBIDOS ULTIMAME'NT E:

Dos óleos, na tura leza mu er ta, de su a uto ra doña El i a .A \"a r ia de Ide,

Un sofá de caoba que per teneció a doña J avier a Carrera, donado
por doña Tila Fernánd ez de Meyer.
Un documento con la firm a de don Berna rdo O'H iggins, donado a
la memoria de don Guillermo Velasco Barro ,
Dos hermosas pl antas de ca melias, donadas por don Car los Riach
Gattas,

- 17
OTRA DONACION

CLUB DE LEONES
TaJea - Chile

NI> 60

Talca, 20 de Agosto de 1964,

Señor
José Escobar Puccio
Intendente de la Provincia·
Presente,
Muy se1'ior nuestro:
Nuest1'o Club de L eones de Talca, siemp1'e sensible a las
ef emérides nac'ionales y locales, no podía deja1' pasa?' por alto la inaugu-
'/'ación del Museo O'Higginiano, que ab1'e hoya la ciudadanía en la Casa
de la Independencia y en el día del Natalicio del P1'ócer y Pad1'e de la
Pat1'ia don Berna1'do O'Higgins ,
G'/'acias a la gene1'osidad de uno de nuest1'os socios, que desea
pe1'1naneCe1' en el anonimato, tenemos el hono1' y el ag1'ado de hacerle
ent1'ega de un juego de muebles de estilo pa'/'a que con ellos se adorne
y alhaje una de las salas de este Monumento Nacional que ha venido a
em'iquecer nuestra que1'Ída ciudad,
Con ello ponemos nuest1'a modesta cooperación al se1'vicio
de una Cas(~ que es 1Jat?'inwnio y o1'gullo de todos los chilenos,
SÍ1'vase recibÍ?' nuestm más cm'dial felicitación por haberle
cabido encabeza?' este acto solemne y ap1'ovecharrvos pa1'a reite1'arle las
más distinguidas conside1'aciones del leonismo de Talca,

lJo saludan atentamente,

KU1't Bolzmann CaldeTón Claudio San'a Ca1'bonell

Presidente en Ej, Secretario

18 -
 MUEBLES, MONEDAS, DOCUMENTOS Y OTROS
DONADOS AL MUSEO

Varios:
1 Paisaje. Liu Yen-tao. Obs. Embajada China .
1 Xilografía de f iguras legendarias (Anónimo) Em b. China.
2 Naturaleza Muerta. Elge A. de I de.
1 Paisaje. Ob. E . Meza.
Monedas:
10 Monedas chilenas, donadas por don Adolfo Eideltein.
9 Monedas de distintos países. En t r egadas por don B. :Vlandiola.
16 Monedas de distintos países, donadas por Inés Dacarett de Zaror.
12 Monedas obsequiadas por va rias persona
Billetes:
1 Billete de $ 20 color morado, donado por P edr o Catton i.
6 Billetes: franceses, genoveses y chilenos. Inés D. de Zara!".
Muebles:
1 Piano de cola . Obsequio de familia F emández Barros.
1 Amoblado compuesto de 1 sofá, 2 sillas, 2 illones con felpa roja y
una mesa de centro. Obsequio de don Juan Bravo.
1 Sofá coloni al. Obsequi o familia F em ández Barros.
1 Sofá que perteneció a doi1.a Javiera alTera. Tila F. de }leyer .

1 Archivador con va rios documentos histó ri cos entregados por don Al-
fonso F ernández Barros.
1 Brasero de bronce antig uo, con ta pa . don ado por la sei1.or·~ Eliana P.
de Rojas.
- 19
MUSEO DE BELLAS ARTES
TALCA

Talca, enero 23 de 1963.

NQ 1

Cúmpleme poner en su conocimiento, con profunda satisfacción , que

el distinguido hombre público don Germán Vergara ~onos? ha donado al
"Museo O'Higginiano de Talca", dependiente de la Dirección a su cargo,
las siguientes piezas históricas:

MedaIlas:
1) A los Vencedores de Yu~g~y, a ñ? 1-839.
2) A los Vencedores de Malpu, abnl 5 de 1,8118.
3) Legién de Mérito de Chile, Chacabuco.

Grabados:
4) Retrato de don Bernardo O'Higgins, grabado por Couper.
5) Batalla de Chacab uco.
6) Batalla de Maipo.

Diploma:
7) Diploma con su respectivo sello, de fundador de la Orden del Sol,
en favor de don Be1'l1ardo O'Higgins, suscrito por don José de San
Martín y por don Be1'l1ardo de Monteagudo.

Documentos :
8) Expedido por don Mariano Osorio, en Talca, el 22 de marzo de 1818.
9) Expedido por don Mariano Osorio, en Talca, el 27 de marzo de 1818.
com unicando el triunfo obtenido en Cancha Rayada.
10) Nota Reservada NQ 189 de fecha 21 de julio de 1818, expedida por
don Mariano Osorio al Virrey del Perú, don Joaquín de la Pezuela,
Marqués de Viluma, y providencia de éste.
11) Car ta de don José de San Martín, fechada el 31 de enero de 1821,
al Capitán de la Goleta Alcance.
12) Nota expedida por don José Miguel Carrera al Coronel Luis Cruz,
fechada en Talca, el 8 de octubre de 1819.
13) ·Car ta de don Ambrosio O'Higgins de Vallenar a don Francisco Diez
de Medina, fechada en Concepción el 19 de abril de 17'88.
14) Nota Reservada expedida por don Be1'l1ardo O'Higgins al >Director
de las Provincias Unidas del Río de la Plata, de fecha 27 de abril
de 1819.
15) Expedido por don Mariano Osorio en Talcahuano, el 12 de mayo
de 1818, al Virrey del Perú don Joaquín de la Pezuela.
16) Expedido por el Vice Almirante don Manuel Blanco Encalada en
Lima, el 8 de agosto de 1825, al Ministro de Guerra y Marina ·del
Perú.
17) Expedido por .d?n Ignacio Zenteno en Val paraíso, el 29 de diciembre
de 1823, al Mmlstro de Guerra y Marina del Perú.
18) Expedido por el Vice Almirante don Manuel Blanco Encalada a
bordo de la Fragata María Isabel, el 20 de diciembre de 1824 al
Exmo. señor Simón Bolívar, Dictador del Perú. '

20 -
19) Carta de don Juan Pedro de Sal,d ías, fechada en Lima, el 26 de
octubre de 1>813, a su tío don Manuel Qumpea, noticiándole que se
sabía por un barco fondeado en el Callao, procedente de Chileé, que
en dos bata llas libradas en Concepción con los rebeldes chilenos, éstos
habían sido completamente derrotados.
Folletos:

20) Proclama de O'Higgins, rubricada por éste, <le sept iembre 4 de 1819,
sobre empréstito interno, para la Expedi ción Libertadora.
21) Jornada de Maipo, impreso en Buenos Aires, imprenta de los E s-
pósitos.
22) Aurora de Chile. Prospecto anunciando su aparición, de 13 de febr e-
ro de 1812.
23) Expedido por don Ramón Freire a los Pueblos <le la Rep ública.
24) Viva el Rey, Gazeta del Gobierno de Chile, de fecha 10 de mayo
de 1816.
25) Con canción patriótica "Campaña de Chile y triunfo de Chacabuco" ,
26) Cuesta de 'Chacabuco, impreso en Buenos Aires, Imprenta de los E s-
pósitos.
27) Versos de Despedida de las chilenas al Ej ército Libertador del Perú ; y
28) Versos de Despedida de las coquimbanas al Ej ér cito Li bert ador del
Perú.
Por expresa disposición del señor Vergal'a Donoso, todas ellas per-
manecerán en poder del abogado de esta ciudad don Aurelio F ernández
Barros, mientras se concluye la reconstrucción de la propiedad en que SIC'
instalará definitivamente el museo y se efectúa, con arreglo a la Ley .
dicha donación.
Me parece interesante destacar la extraordinaria importancia de es-
te primer obsequio al Museo, ya que este gesto le ha significado al señor
Vergara Donoso desprenderse de documentos, medallas y otras piezas de
gran valor y calidad, que reunió, cuidadosamente, durante toda su "i da
y recogió tanto en Chile como en los países r econidos en sus viaj es al
extranjero.
Es asimismo, de interés hacer notar el significado que tiene la dona-
eón que un hombre público de tan elevada jerarquía - rebasando la tra-
dicional norma de ignorar su tierra natal-, la r ecuerda permanentemen-
te con singular afecto.
Igualmente, es del caso anticipar el agrado con que la ci udadanía r e-
cibirá esta primera donación, pues apreciará que los esfuerzos gasta dos
por Ud. y por el Subsecretario del Interior señor Jaime Silva Silva pOI' la
creación y realización del "Museo O'Higginiano de Talca" han servido de
ejemplo e iniciativa para que otros hijos ilustres de nuestra tierra , r es-
pondiendo a la tradición de sus mayores, vinculen su nombre para siem-
pre, a la fundación del Museo talquino destinado a perpetuar las gloria
de nuestro primer Padre de la Patria.
Saluda atte. al señor Director.
J. B e?'na1'do Mand'¡:ola C1"'U.Z, Conservador del Museo de Bellas Artes
de Talca.
Al seii.or Guillermo Feliú Cruz
Director de Bibliotecas, Archivos y Museos .
Santiago.

- 21
 CEREMONIA DE INAUGURA CION. DISCURSOS.

A nombre del Supremo Gobierno, el Intendente de Talca, don J osé

E scobar Puccio, hi zo entrega a la Dirección de Bibliotecas, Archivos
y Museos y a la ci udadanía talquina, la Casa de la Independencia .
En su discurso de entrega, dijo:
"Ha querido el Supremo Gobierno de S. E. don J orge Alessandr:i Ro-
dríguez, en cuya r ep resentación hablo, que en esta fe cha aniversa r io del
Natalicio del más grande de nuestros Héroes y Padre de la Pat r ia . don
Bernardo O'Higgin s, en senti do homena j e de gratitud y reconocimjento
a s u persona y a su obra , ina ugural' esta Viej a Casa que ll e\'a su nombr e.
en Museo de Historia y de Bellas Artes, donde un día memor able de nne -
tra Historia, 2 de Febrero de 1818, f irmara éste el Acta de Declar ación
de Independencia de Chile.
Quizo la Divina P rov id encia que fuera aqu í, en esta casa y en esta
t ierra que tan bien conociera desde su infan cia, donde dej a ra esta mpado
por primera vez y para siempre, en Documento Oficial nuestro Destino
de Nación Soberana, que se ha ma ntenido ina lterable para or g ullo nuestro,
has ta nuestros días, porque supo cimenta l'se desde un comienzo en Régi -
men Republi cano genuinamente democrático que ha sabido cuida r con
celo ·de mujer la Libertad, la J usticia e Igualdad de su Pueblo. que ha
hecho a Chil e Maestra de Naciones y Señera de América.
Es legítimo r econocer y agr adecer en este acto, el papel pr incipa l
que les ha cab ido al señor Mini stro del In terior don Sótero del R ío Cun-
dián' a l señor Subsecretario del Interior don Jaime Silva Sih'a, en la
resta'uración de esta Vieja Casona, r emozada a hora a la u anza de la
época ' quienes supier on buscar le adecuado financi a mi ento a su real iza-
ción, ya que los recursos proporcionado por la Ley que la decla ró Monu-

- 23
 men to Nacional fueron evidentemente insuficientes; y a don Luis Octa-
vio Reyes, Visitador de Intendencias quien con su constante tesón y dili-
gencia hi zo posible su expansión.
Es para mí motivo de profunda satisfacción y orgullo poder hacer
en este instante ent rega de ella al se·ñ or Director General de Bibliotecas
y Museos don Guillermo Feliú Cruz, como igualmente a la Ciudad de
Talca, a su Alcalde don José Fernández Llorens, en la esperanza de que
ésta, consagrada a su recuerdo, sea el trasunto de su personalidad, tes-
t imonio permanente para la generación presente y futura de nuestra
Ciudad y de Chile entero, de su gran amor a la Patria, de su generosidad
sin límites, de su heroismo y lealtad que lo llevó a sacrificar todo, bienes
y fortuna, anhelos y esperan zas en aras de su Independencia y Libertad".

24 -
DISCURSO PRONUNCIADO POR EL DIRECTOR DE BIBLIOTECAS,
ARCHIVOS Y MUSEOS, DON GUILLERMO FELIU CRUZ.

La circunstancia de este acto, el momento en que se realiza, el día

escogido para efectuarlo, -natal icio del héroe- el significath-o ambien-
te en que nos en contramos, todo, todo cuanto percibe nuestra imagen y
cuanto habla a nuestra sensibi lidad, le inf unden al suce~o las ca racte-
rísticas de una ceremoni a reli g iosa en la li t urgia hi stóri ca.
En tal virtud, siento la responsabilidad que asumo en el instan e.
Como Director de Bibliotecas, Archi vos y Museos r ecibo de r. ' ..
señor Intendente de Talca, la casa histó rica que me ent regáis, la cua l por
mandato de una ley, fue mandada r econstruir para el fin espiritual a
que se la consagra, correspondiéndole al Ministerio del Interior iniciar
el cumplimiento de la disposición suprema, r ealizarlo y concl uirlo en los
términos en que ingresa al servicio de mi cargo. Me llena de satisfacción
esta recepción, por otra parte, porque en este solar, man sión que fue de
la vieja sociedad talquina, el General Bernardo O ' Hi ggi n ~. Director Su-
premo del Estado, fundador de la nacional idad el 2 de febrer o - incier-
tos días de la Patria- firmó el acta de la independencia de Chile. aquÍ.
precisamente, en esta sala, en este punto. y que conservada milagrosa-
mente por el tiempo en lo que entonces era. - la cuadra de un hogar pa-
tricio- el Gobierno de S. E. el Presidente de la Rep ública J orge Ales-
sandri entrega en el conj un to de un museo a la veneración de las gene-
raciones.
La tradición nos envuelve en este recinto. F luye el espírit u que sa -
tura y ennoblece lo que el tiempo salva para el recuerdo de lo hombres.
Todo es aquí evocador de pasadas grandeza:> pan la P atria en formación.
Es un ciclo entero en que las cosas humana s tienen la dramatización de
 la histo ria, el que recordamos. Por eso, sombras solemnes y. silenciosas,
imperceptibles a nuestra pupila, cruzan. y entrecruzan el ambiente, 10 l1e-
na n de mi steriosas sugerencias y 10 a mm an de esplendores que nuestras
almas sienten en los momentos en que hay que fortalecel' la fe en el des-
ti no que Dios quiso fuera el de Chile. Lo que arroja ese pasado ¿ no es~á
l1eno de ensei'ianzas? En la imaginación de nuestras mentes, en la audacia
del pensamiento de nuestra inteligencia, nos ?,~lpea muy fU,erte, la, pre-
sencia del pretérito con sus hechos, con sus decISIOnes y sus frus,t IaclOnes,
En la aventura de la lucha por la emancipación se destacan en el ~uad,ro
los contornos y perfiles que muestran los ensueños y dolores, las mqUle-
t udes y aprehensiones; los ideales y las angustias; .las esperanzas y zo-
zobr as; en fin , las r ealizaciones y fracasos; las pasIOnes desatadas como
las bondades sencillas; las generosidades de las a lmas y los duros carac-
teres para imponer las decisiones. Un fin supremo .ha guiado ~as volun-
tades fuertes y débiles; es la aspiración de constrUir una PatrIa con un
nuevo con tenido, con la ensei'ianza de la dignificación del hombre. La es-
clavitud y despotismo habrían de morir.
Sólo el pensar en la jornada de 1810 a 1818 es para imponer el reco-
gimiento en las almas y hundirse en reflexiones de hondas dimensiones.
La ceremonia en que nos encontramos tiene por ello las proporciones de
un acto cívico, y de él, de este acto, del hecho mismo que 10 provoca, surge
por su alcance moral, la propia profundidad que lo invi ste. Además, los
facto r es con que el aco ntecer histórico 10 influye, proporciona a esta casa
la motivaciones que la convierten en santuario cívico. La esencia del
conten ido espiritual del santuario, lo da el suceso mismo que rememora,
pero hay otr os que un a tradición muy limpia le da su venerable fuerza.
Recojamos piadosamente los ecos de esas t radiciones, las que emanan de
los muros de la vetusta casona , las que secretamente esconden las piedras
sillares del viej o sola r colonial. Aprehendamos esas tradiciones y leyen-
das para que la aureo la de la gloria, de la fa ma, de la perennidad, envuel-
van el temp lo cívico con los f ul gor es del r ecuerdo.
¿ N o oís la voz de O'Higgins, no escucháis la voz de un niño? Porque
el1a no sólo f ue pronunciada en esta sala el día en que estampó la firma
en el documento sagrado que declaró libre al pueblo chileno constituyén-
dol o en nación soberana. Retrocedamos en el tiempo y evoquemos el mur-
mullo. P udier an las ondas hacé rnosl a sentir y llenar el ámbito con ella.
Venía de Talcahuano, había pasado por Concepción, cruzado Chillán, su
t ierr a, la de su madre, la de su nii'íez, y con acelerado paso atravesado
Linares. Recorría los , mismos sitios de sus proezas en las primeras cam-
pai'ías de la independencia de los 3Ji'íos de 18W y 1814 en El Roble en El
Membrillar, en Rancagua, la fama lo hab ía señalado un h éroe y' al sol-
dado lo rodeaba el nimbo de la gloria. Pero ahora ... La a dversidad le
había ne~ado el triu~fo, la glo r ia le era esquiva, la fama dejaba de ser
la companera. Era simpl emente un soldado derrotado, un General ven-
CIdo, un Jefe de Estado sm laureles . En las trincheras de los cerr0S de
Talcahuano los lau re~es quedaban .marchi tados y sólo el nimbo purísimo
del ho~ol' le acompanaba en esta Jorn ada de vencido. Hondas tribulacio-
nes agl~aban el al.ma, la desesper aban, la convertían en un infi erno ter ri-
ble de mterrogaclOne , dudas, sobresaltos. Era inminente otra vez como
~ n 1813, la, i~ v~s~ó.n d~ u~ ejército eSl?a~ol en las l?r?vincias s~reñas .
¿ Acaso en Chlloe. ¿ ~OI que no en Valdlvla? ¿ IrrumpIl'la en Talcahuano
donde sus tropa~ hablan se pul tado la reputación del solda do? Sa n Martí'll
le llamaba a umr las f uerzas y dejar libre la de la fro ntera. Le indicaba
Talca como pU!lto de co n ~ergen cJ a de las f uer zas. E n estas condiciones
llegaba a la CIUdad ta lqullla el G.enera l O'Higgins cua ndo aquí, justa-
n;ente en esta casona de la fam ilia Opazo buscó a loj a miento hasta los
dlas en que cautelo~amente la abandonó para permanecer en los a ledaños.
Abramos un parentesls. En esos afiebrados días de la permanencia en
26 -
la casa de Opazo ¿ r ecord ó O'H iggins que aqu í en su nlTIez había estado
por orden de su padre a l cu idado del portugués Juan Albano Pereira y
doña Bartolina de la Cruz, la hij a del genovés Juan de la Cru z y Berna-
dotte, el animador de la villa que hacía con el nombre de San Agustín de
Talca? En esta misma casa corrieron los años gratos de ensueños del
niño Bernardo Riquelme. Desde esta casa compungidamen te para reasegu-
rar el bautizo del infante, lo llevaron Juan Albano Pereira y su mujer
doña Bertolina de la Cruz a la parroquia y uncirl o co n el óleo que redime
del pecado. Tal es la t rad ición que muy viva y muy r espetable albérgase
en este solar, y esa tra,d ición, tan incesant emente repetida, le da a esta
casa, a sus muros, a su a mbien te, el aroma que la envuelve, los mereci-
mientos de ha ber sido, por menos, el lugar, el punto, el sitio que con su
pies holló el libertador de Chile. El hecho ennoblece la casona y le da
jerarquía en virtud de sus a ntecedentes.
Recordemos más todavía. Los días de la permanencia de O'Higgins
en ésta que fue la casa de su niñez, construida primeramente por Juan
Alba no Pereira, y en cuyos aireados corredores r odeados de madreselva
y lleno de los lindos soles en las épocas invernales, si fueron cor to por
sus años, los llenó con sus juegos, y aquí las t r avesuras infantiles la
secundó quien sería más tarde su a migo íntimo y de confi a nza . Ca imiro
Albano y Cruz, el canónigo y su bi ógr afo.
Ot ros días en épocas posteriores, f ormado ya el hombre en la a dver-
s idad de la lejana patria, sin los afectos mate rnales, entrañan nostálgica
evocaciones de un momento romántico de su vi da. Aquí e le desgarró el
corazón . Debió separarse de la joven bellísima, una pelirroj a . que habíale
despertado sentimientos de te rnura y amor. La joven lo reconfort aba de
las preocupaciones que lo abrumaban haciéndole olvidar la j ornada in
gloria que había significado la ret irada de Talcahuano.
Desde Tal ca envió a la joven a Santiago. La última ,ez que la vio
fue en las goteras de la urbe. Cuenta en efecto, una tndición re petable,
confirmada en parte por la hi stor ia, que al abandonar O'Higgins discre-
tamente esta casa de Opazo, fue a coloca r alguna parte de su ejército en
las orillas del Maule a f in de observar los movimientos de la t ropa' im-a-
soras. E l gru eso de las fu erzas habíalas situado a orillas del rí o Lircay
sólo a dos leguas al norte de la ciudad . Para campamento de lo "oldado .
eligió los contornos de un caserío de campo, en cuyos ranchos pajizos,
guardó las municiones y bagajes. En uno de estos ranchos yolvió a ,el'
a la joven que le había arreba tado el co ra zó n. E l campo que había e co-
g ido O'Higgins ten ía, a su vez, remembranza de su niñez. Era el caserío
de la chac ra de Juan Albano Pereira donde el héroe había pasado tam-
bién la infan cia . Ahora se encontraba en poder del hij o del portugu é . u
compañero Juan Albano Cru z, prQpietario de la heredad.
Los r ecuerdos sensibles da n a las cosas materia les una corpor ifica-
ción que los llena de esp iri t ualidad, los inunda de visiones y les comunica
el ai re que a dquieren las esfumaciones del ensueño. Nos golpea en la
imaginación y nos sed uce el espíritu, en .Ia magnificencia de! pas.ado. Sus
lejanos estertor es nos llenan de presagIOs y de mundos mIsteriosos. E l
espíritu de transfigura ción que da mos a las cosas l!1ertes lo llena el en-
canto de las viejas casas, purificadas por la belleza . Adornamos la Ima-
gen, la r evestimos de ensoñaciones, la evocamo como la luces de los
faros que lucha n por r omper la niebla en los días tempestuo os. Es todo
esto .10 que da a l pasa do la idealización uprema en que se el1\'uelven la "
ruinas.
Por leja nos que nos pa rezca n esos eco, aquí los estamos aprehen-
diendo para fo r ta lecer nuestras almas con las lecciones de en erez ' moral
que representa la image n del hér oe presente ,en .esta casa, . ~ u er~e en .el
acto supremo de un hecho cívico en que aqu I mismo tamblen f lrn~ a la
eman cipación de un pueblo. fo r ja una nac ión, crea un Estado y ahenta
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 en el chileno la noclon precisa de la República de Chile, convirtiéndolo
de súbdito en ciudadano libre.
Sagrada la casa que nos cobija; venerable el templo en ~ue nos en-
contramos ! Expresemos nuestra gratitud al Gobierno del PresIdente Ales-
sandri que ha hecho el prodigio de reconstruir la mansión que fue testigo
de un trozo de la historia nacional; saludemos al Ministro del Interior
como amparador de la obra en todo momento, y destacamos al Subsecre-
tario de ese Despacho Jaime Silva, mi querido ex alumno de la Escuela
de Derecho, como el incansable realizador de esta empresa, en la que
puso el poder invalorable de su iniciativa, de su inteligencia, de su pode-
rosa capacidad de trabajo. E,s ta es su obra, en justicia. Y digamos tam-
bién que la colaboración del Visitador de Intendencias don Luis Octavio
Reyes ha sido fecunda para cumplir con un patriótico anhelo. Lo propio
debo decir del señor Intendente de la Provincia.
En cuanto a mi recibo, el precioso monumento con devoción de sa-
cerdote que ofi cia en el templo de la Historia, y lo incorporo al patrimonio
de la cultura nacional, en la Dirección de Biblotecas, Archivos y Museos.
Como un honor insigne, recojo el presente que se me otorga. Pero si
grande es este honor porque como funcionario acrezco el servicio de mi
ca¡·go con la casa histórica que se me entrega, hay otra circunstancia es-
piritua l que me conmueve, que hace que el legado adquiera muy fuertes
emociones. Soy talquino ; y el serlo me vincula a los individuos que inter-
vinieron en la vida del héroe tan de cerca, tan intimamente. Corresponde
ahora a un descendiente de esos personajes que se anudan con la historia
del héroe, encontra rse en este acto, recibir la preciosa herencia y entre-
garla a la veneración de sus conciudadanos.
i Levantemos los corazones ! Pidamos al Padre de la Patria fortaleza
para t raba ja r por el porvenir de Chile. Pidámosle luz en nuestras inteli-
gencias para mejor servir la tierra que libertó. Miremos como el héroe
sólo la grandeza y na da más que la grandeza de Chile desde este t emplo
cívico, y oremos por el Padre y, al inclinarnos respetuosos, impetremos
su bendi ción para la buena ti.e rra que él forjó para nosotros.
Gracias, Padre O'Higgins.

28 -
ACTA DE HA UTIS MO DE O' H1 GG INS
(Archivo Pa rroquial de Talca).
 "PROCLAMACION DE LA INDEPENDENCIA
DE CHILE"
"EL DIRECTOR SUPREMO DEL ESTADO

La fuerza ha sido la razón suprema que por más de trescientos años

ha mantenido al N:Jevo Mundo en la necesidad de venerar como un dogma
la usurpación de sus derechos y de buscar en ella misma el origen de sus
más grandes deber es. Era preciso qu e a lgún día llegase a l término de esta
vio lenta sumisión; pero, entretanto, era imposible anticiparla: la resis-
tencia del débil contra el fuerte imprime un carácter sacrílego a sus pre-
tensiones y no hace más que desacreditar la justicia en que se fundan. Es-
taba reser~ado al siglo XLX el oír a la América reclamar s us derechos sin
ser delincuente y mostrar que el período de su sufrimiento no podía du-
rar más que el de su debi lidad que ya no exIste. La revolución del 18 de
septi embre de 1810 f ue el primer esfu erzo que hizo Chi le para cumplir esos
altos desti nos a que lo llamaba el tiempo y la naturaleza; sus habitantes
han probado desde entonces la energía y firmeza de su voluntad arros-
trando las vicisitudes de una guerra en que el Gobierno español ha queri-
do hacer velOque su política con respecto a la América sobrevivirá a l tras-
to rno de todos los abusos. E ste último desengai10 les ha inspirado, natu-
ralmente, la resolu ción de separarse para siempre de la Monarquía Es-
paIlola y proclamar su independen cia a la f az del mundo, 1'ese1"vando ha-
ce r demostmble 01JOTtuncLmente, en toda su. extensión, los sólidos funda-
,j¡entos de esta .inst a def enninación. Mas, no permit iendo las actuales cir-
cunstancia s de la guerra la convocación de un Congreso Nacional que san-
cione el voto público, hemos mandado abrir un Gran Registro en que todos
10 ciudadanos de l Estado sufraguen por sí mismos, libre y espontánea-
mente, por la necesidad urgente de que el Gobierno declare en el día la in-
depende ncia, o par la di lación o negati va . Y habiendo resu ltado que la
univer alidad de los ciudada nos está irrevocablemente decidida por la afir-
mativa de aquell a proposición, afianzadcL en l as fueTzas y 1'eCUTSOS q~Le
tiene para sos t en e?'la con cl~gnidad y ene1"gía, hemos t enido a bien, en
ejer cici o del poder extraordinario con que para este caso particu lar nos
han autor izad o los pueblos, declarar so lemnemente a nombre de ellos
en presen cia del Altísimo, y hacer saber a la gran confederación del gé~
nero hum an o, que el terr itori o continental de Chile y sus islas adyacen-
te , fo rman, de hecho y por derecho, un Estado libre, ind epend iente y
sober a no, y qu edan para s iempre separados de la Monarquía Espai10la
y de ot1'a cualquie1'a rlo'rni nación. con plena aptitud de a doptar la forma
de Gobierno que más convenga a sus inter eses. Y para que esta declara-
ción tenga toda la fu erza y solidez que debe caracterizar la primera
Acta de un pu eblo li bre, la afianzamos con el honor, la vida, las fortu -
nas y todas las r elaciones socia les de los habitantes de este nuevo Esta-
do ; comprometemos nuestra palabra, la dignidad de nuestro empleo y
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el decoro de las armas de la Patria; y ma ndamos que con los li bros del
Gran Registro se depos ite la Acta Original en el Archivo de la Muni cI-
palidad de Santiago, y se circule a todos los pu eb los, ejércitos y C01 '-
poraciones, para que inmediatam ente se jure y quede sellada para s iem-
pre la emancipación de Chile. Dada en el Palacio Directorial de Concep-
ción a 1Q de en ero de 1818, firmad a de nuestra mano, sign ada cen el de
la naci ón y r efr endada por nuestros Ministros y Secretarios de E stado
en los Departam entos de Gobiel'l1o, Hacienda y Gu ena".

En oficio f echado en Talca el 2 de f ebrero, O'Higgins c:omun icc. la

a probación del acta en los siguientes ténninos:

Es de mi e¡1J1'obaC'Íón la A cte~ de IndependenC'Ía qUf V . ', m e ,-emit e

con su comunicación de 28 de en eTO pTó ximo po sado, 1mes obs ?T O I'n su
contexto lct más ?neddad(t, conci sa y en éTgica expTes ión, bien ql< l' si aun no
se hubiese i'YI~1J?'eso, pod1'án añadíTsele la s q7tC indican las c ~tas puestas a
continuac':ón, 1J((1' C( q~¿e entiendan las naciones que ya n o ex isl p la d( bili-
dad que no s h(! manteni do en f01'zosa s~¿r¡úsión; q"ue debe esperars' un ma -
nifiesto ele la ,iusticic~ q1te nos asist e 1JClTa nuestra heroi ca resolución; qu e
t en emos fueTz as bastantes pcwa soste1'/a con ¿eco ro, y {f U ¡amás Sll -
j eta1'emos a n'ingunc~ ot1'(t dominación.
" Dios [/,ua1'de a 11. S. m~¡chos a1ios .- Ouartel D i1'ectorial de T alca,
2 de f eb1'eTO de 181 8 . BERNARDO O'HI GG INS.
S e1io'/' D-i1'ect01' S~tp1'erno Delegaclo".

NOTA : Las frases en curs iva fu eron incorporadas por O'Higgills y aparecen en el
Act a orig inal canlO notas al pie del dOC lunento. con la leb'a de Santiago Fern~~dez.
Secr etario del Director Supremo (Archivo del Senado, Tomo 1. Foj a 17,1 ), El manifIesto
que anuncia fue encargado a MonteagudoJ pero no fu e aprobado su texto (ver Anales
de la Rep,tblica, T omo 1, 1951).

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