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#APRENDOENCASA

Educación Primaria

6.o grado

SEMANA 20

¿Cómo se producen los recuerdos y


dónde se almacenan? Parte 2
Día 4

A continuación, se presentan aspectos de la memoria distintos a los desarrollados en la


ficha del día anterior. Conocerlos hará posible que podamos entenderla mejor.
La memoria requiere de la participación de diversas áreas del cerebro
En el aprendizaje y la memorización participan numerosas estructuras nerviosas. Por
ello, ambos procesos dependen de muchos factores, como el estado de motivación o el
interés que tenga la persona sobre lo que aprenderá, su estado emocional (tranquilidad,
seguridad, etc.), el grado de atención, sus conocimientos anteriores, el estado de sus
receptores sensoriales (ojos, oídos, etc.), y si el aprendizaje implica actividades físicas,
también, el estado de los músculos.
Como se puede apreciar, son muchos los elementos que participan en la memorización,
por lo que se requiere del correcto funcionamiento de varias áreas del cerebro; esto, debido
a que cuando se aprende, es necesario recordar diversos conceptos y movimientos. Por
ejemplo, para aprender a utilizar un teléfono, se requiere recordar, entre otras cosas,
los números telefónicos, dónde están guardados, a quiénes pertenecen, por dónde se
debe oír, por dónde se debe hablar; también, los movimientos que se deben hacer para
utilizar el teclado, para llamar, para colgar, etc.
En suma, la memoria es una capacidad intelectual que requiere de varias partes del
cerebro, en razón de la cantidad variable de conceptos y movimientos que debe recordar.
La memoria requiere de la maduración de las estructuras nerviosas
Aprender y memorizar también requieren de la maduración de las estructuras nerviosas.
De hecho, una niña o un niño va adquiriendo nuevas habilidades a medida que su cerebro
madura. Es decir, podrá almacenar solo la información que su cerebro le permita y, para
ello, el área de su cerebro que necesita utilizar deberá estar madura. Así, las áreas del
sistema nervioso relacionadas con el movimiento son las primeras en consolidarse, por
lo que para la niña o el niño será más fácil aprender comportamientos de movimientos,
como nadar, ir en bicicleta, patear una pelota, etc., y también recordarlos a lo largo de la
vida; pero no podrá realizar operaciones matemáticas complejas, porque el área de su
cerebro que necesita para ello aún no ha madurado lo suficiente.
La memoria requiere de la elasticidad de las conexiones
A temprana edad, las conexiones son más elásticas o flexibles y pueden modificarse,
pero, con el paso del tiempo, ya no lo son, y resulta más difícil que se modifiquen. Así,
por ejemplo, si un niño nace sordo e intenta aprender pronto un lenguaje alternativo,
como el lenguaje de señas, lo conseguirá y podrá comunicarse a través de ese lenguaje;
pero si no logra aprenderlo a temprana edad, perderá la oportunidad de desarrollar un
¿Cómo se producen los recuerdos EDUCACIÓN PRIMARIA
y dónde se almacenan? Parte 2 6.o grado

mecanismo eficaz para comunicarse con los demás. En cambio, si un niño carece de
audición por causa de un accidente, irá perdiendo la capacidad de comunicarse con
el lenguaje hablado, porque no podrá oírse a sí mismo y ya no podrá perfeccionar su
lenguaje. Y es que oírse a sí mismo generaba conexiones que, con el transcurrir del
tiempo, ya no serán elásticas ni podrán cambiar fácilmente.
Lo mismo ocurre cuando se trata de aprender otro idioma. Los estudios nos dicen que
la capacidad para aprender de manera fluida otro idioma está vigente hasta el inicio
de la pubertad. Pasada esta etapa, la capacidad para aprender disminuirá, porque las
conexiones serán cada vez menos elásticas.
Por lo expuesto, es necesario destacar que las experiencias, para que sean efectivas,
deben ocurrir en las primeras etapas de la adolescencia o antes, cuando todavía las
neuronas mantienen elasticidad. Esto se ha hecho evidente en los estudios sobre la
adquisición de los aprendizajes.
Aprender requiere memorizar
Memorizar es el proceso por el cual el conocimiento adquirido se codifica y almacena
para quedar disponible y pueda utilizarse en el momento preciso. Para ello, es necesario
el paso de la información de un tipo de memoria al otro (de la memoria a corto plazo a
la memoria a largo plazo). Pero para que esto ocurra, se requiere de una fase intermedia,
que es la consolidación. Esta fase se desarrolla cuando nos encontramos dormidos.

No obstante, hay otras tareas que requieren de otros tipos de


memoria. Por ejemplo, si un estudiante debe relatar pasajes
de la historia del Perú, la memoria que usará será la memoria
declarativa, pero si tiene que mostrar algo a través de actuaciones
sin necesidad de un relato verbal, por ejemplo, hacer un ejercicio
en la colchoneta o mostrar unos pasos de baile de marinera, la
memoria que utilizará será la memoria implícita.

Adaptado de Aguilar, Luis y otros. (2010). Aprendizaje, memoria y neuroplasticidad.


Lima, Perú: UNIFÉ.
Notas sobre los autores:

Luis Ángel Aguilar Mendoza es profesor de las cátedras de Neurociencias en la Facultad de


Psicología de la Universidad Femenina del Sagrado Corazón (UNIFÉ) y del Laboratorio de
Neurociencia y Comportamiento de la Facultad de Medicina Alberto Hurtado de la Universidad
Peruana Cayetano Heredia (Lima, Perú).

Grace Espinoza Pardo, Enver Oruro Puma y Daniel Carrión son profesores del Laboratorio de
Neurociencia y Comportamiento de la Facultad de Medicina Alberto Hurtado de la Universidad
Peruana Cayetano Heredia (Lima, Perú).

El texto original fue presentado por la Asociación Educativa para el Desarrollo Humano
(ASEDH) - CEREBRUM (Lima, Perú, agosto de 2010), para la conferencia dictada en
el marco del I Congreso Mundial de Neuroeducación. Ha sido publicado en línea por
Ciberdocencia el 25/08/10 en https://bit.ly/2PE6qVW

El contenido del presente documento tiene finalidad educativa y pedagógica, y forma parte de la estrategia de educación
a distancia y gratuita que imparte el Ministerio de Educación.

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