Вы находитесь на странице: 1из 46

DECIMOTERCERA REUNION ORDINARIA DEL CONSEJO

ANDINO DE MINISTROS DE RELACIONES EXTERIORES


10 de julio de 2004
Quito - Ecuador

DECISION 591

Estrategia Andina para la


Prevención y Atención de
Desastres

EL CONSEJO ANDINO DE MINISTROS DE RELACIONES EXTERIORES,

VISTOS: Los Artículos 3, segundo literal d), 16, 17 y 128 del Acuerdo de Cartagena,
codificado mediante Decisión 563, el Artículo 6, literales f), i) y o) del Reglamento del
Consejo Andino de Ministros de Relaciones Exteriores, codificado mediante Decisión
407; y,

CONSIDERANDO: Que el Acuerdo de Cartagena establece que para promover el


desarrollo equilibrado y armónico de los Países Miembros en condiciones de equidad,
mediante la integración y la cooperación económica y social, así como para procurar un
mejoramiento persistente en el nivel de vida de los habitantes de la Subregión, se
emplearán, entre otras, acciones para la conservación y aprovechamiento de los
recursos naturales y del medio ambiente;

Que la Subregión Andina, como espacio territorial con condiciones físico


geográficas similares, presenta características de alto riesgo frente a fenómenos como
inundaciones, sequías, deslizamientos, terremotos, tsunamis, actividades volcánicas,
incendios, epidemias, tormentas tropicales y eventos tecnológicos y antrópicos
adversos;

Que en la Subregión estos desastres tienen graves efectos sobre la población y


causan deterioro de las condiciones de salud, tienen impacto directo en la
infraestructura física de los sectores educación, vivienda, asentamientos humanos,
vialidad, producción agropecuaria y servicios públicos, aspectos que demandan un
lugar privilegiado en la agenda comunitaria;

Que la prevención y atención de desastres constituye un factor importante para


mejorar la competitividad en la medida en que permite ofrecer mayor seguridad a las
inversiones y al funcionamiento de la infraestructura básica para la producción y
comercialización de bienes y servicios, frente a eventuales desastres que pueden
prevenirse;

Que los desastres son un creciente problema mundial que ha motivado la


movilización de la comunidad internacional en la adopción de políticas para promover
su prevención y atención como un desafío global. En ese contexto, en el marco de la
Asamblea General de las Naciones Unidas en el año 2000, se adoptó la Estrategia
Internacional para la Reducción de Desastres;

Que los mismos se han visto acentuados por factores internos, como el deterioro
ambiental, que pueden verse agravados por la modificación global del clima; factores
que han sido abordados como un reto mundial, tanto por la Convención Marco de las
-2-
Naciones Unidas sobre Cambio Climático, como por la Cumbre Mundial del Medio
Ambiente de Johannesburgo;

Que para sistematizar la cooperación y la acción conjunta de los Países Miembros


de la Comunidad Andina en procura de prevenir y atender los efectos generados por
desastres de origen natural y antrópicos, se creó el Comité Andino para la Prevención y
Atención de Desastres (CAPRADE), mediante la Decisión 529;

Que el CAPRADE recomendó al Consejo Andino de Ministros de Relaciones


Exteriores adoptar una Estrategia Andina para la Prevención y Atención de Desastres;

Que la presente Estrategia es el resultado del trabajo intenso en la Subregión


donde han participado 280 entidades y más de 450 técnicos nacionales en reuniones de
trabajo y discusión especializada, en un proceso que ha sido conducido en cada País
Miembro por las entidades encargadas de la prevención de desastres, planeación,
defensas civiles y los Ministerios de Relaciones Exteriores;

Que el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) ha
sido significativo en el proceso de consulta y elaboración de la Estrategia en cada uno
de los Países Miembros a través de la Estrategia Regional de Reducción de Desastres.
De la misma manera otros organismos internacionales han acompañado dicho proceso,
presentando sus desarrollos sobre el tema en las reuniones del CAPRADE;

Que asimismo para el logro de la Estrategia ha sido de gran importancia la


participación de la Corporación Andina de Fomento a través del Programa Andino para
la Prevención y Mitigación de Riesgos, PREANDINO;

Que se reconoce en la cooperación subregional un gran potencial de superación de


los riesgos, por lo cual se debe modernizar y fortalecer las instituciones y políticas
nacionales de prevención y atención de desastres;

Que los Países Miembros ven en la adopción de políticas externas comunes un


mecanismo decisivo de influencia en los organismos y foros de decisión internacional
para lograr incorporar en sus agendas los intereses de la Subregión en la temática de la
prevención;

Que la Secretaría General presentó la Propuesta 132/Rev. 1, a consideración del


Consejo Andino de Ministros de Relaciones Exteriores;

DECIDE:

Artículo 1.- Aprobar la Estrategia Andina para la Prevención y Atención de


Desastres contenida en el documento anexo a la presente Decisión.

Artículo 2.- El Comité Andino para la Prevención y Atención de Desastres,


CAPRADE, trabajará en la ejecución de la Estrategia Andina para la Prevención y
Atención de Desastres, en todas aquellas áreas que han sido definidas en el documento
anexo y que requieran de desarrollo conceptual, metodológico o técnico, así como la
incorporación de otros aspectos que se consideren primordiales para alcanzar los
objetivos propuestos.
-3-
Artículo 3.- Encomendar al CAPRADE la elaboración del Plan de Acción y de la
Cartera de Proyectos derivados de los programas y subprogramas identificados, que
aseguren la ejecución de la Estrategia Andina para la Prevención y Atención de
Desastres.

Artículo 4.- Instruir al CAPRADE que informe anualmente al Consejo Andino de


Ministros de Relaciones Exteriores, a través de la Secretaría General de la Comunidad
Andina, sobre los avances en la ejecución de la Estrategia Andina para la Prevención y
Atención de Desastres y el desarrollo del Plan de Acción y de los Programas y
subprogramas. El primer informe anual se rendirá en la reunión del Consejo Andino de
Ministros de Relaciones Exteriores previa a la XVI Reunión Ordinaria del Consejo
Presidencial Andino.

Dada en la ciudad de Quito, República del Ecuador, a los diez días del mes de julio
del año dos mil cuatro.
-5-

ANEXO

ESTRATEGIA ANDINA PARA LA PREVENCION


Y ATENCION DE DESASTRES
-7-
CONTENIDO

Introducción

1. La Problemática Subregional de Riesgos y Desastres

El contexto Latinoamericano de ocurrencia de desastres

Rasgos subregionales comunes en la problemática de riesgos

Los procesos de ocupación y desarrollo y el inadecuado manejo de recursos:


factores determinantes del nivel de riesgos en la Subregión

Escasa capacidad social e institucional para la reducción de vulnerabilidades y


para enfrentar riesgos no controlados

El potencial y la responsabilidad del sector privado y la sociedad civil en la


prevención y atención de desastres

Reducción de desastres (vulnerabilidades existentes y potenciales): el desafío


prioritario para la Subregión

2. Contexto Internacional de la Prevención y Atención de Desastres

Antecedentes

Asumiendo el compromiso de la Estrategia Internacional para la Reducción de


Desastres

El apoyo de la Comunidad Internacional a la Subregión

El camino recorrido para otros esfuerzos de integración regional en América Latina

3. Contexto Institucional de la Comunidad Andina para la Prevención y Atención de


Desastres

Antecedentes de los esfuerzos comunitarios en la prevención y atención de


desastres

Desarrollo de la Agenda Ambiental de la Comunidad Andina

4. Fundamentos para la Estrategia Andina para la Prevención y Atención de


Desastres

4.1 Consideraciones Generales

4.2 Definición de la Estrategia Andina para la Prevención y Atención de


Desastres

4.3 Visión
-8-
4.4 Objetivo General

4.5 Orientación General de la Estrategia

4.6 El Proceso de Formulación de la Estrategia Andina

4.7 Lineamientos de Política

5. Estrategias Sectoriales

5.1 Líneas Estratégicas Sectoriales Comunes

5.2 Líneas Estratégicas Específicas

6. Ejes Temáticos

6.1 Eje Temático No. 1: Fortalecimiento de la Institucionalidad y de la Capacidad


a Nivel Subregional Andino, Nacional y Local

6.2 Eje Temático No. 2: Información, Investigación y Desarrollo

6.3 Eje Temático No. 3: Identificación, Evaluación y Monitoreo de Riesgos, Alerta


Temprana y Planes Específicos

6.4 Eje Temático No. 4: Fomento de una Cultura de Prevención con Participación
Social

6.5 Eje Temático No. 5: Asistencia Mutua en Casos de Desastre

Programas y Subprogramas
-9-
Introducción

La Estrategia Andina para la Prevención y Atención de Desastres1 se enmarca en el


propósito de buscar el desarrollo de los países dentro de una perspectiva de
sostenibilidad; bajo los principios reconocidos y compromisos globales adquiridos en la
Cumbre Mundial de Desarrollo Sostenible de Río 1992, Primera Conferencia Mundial
sobre Reducción de Desastres Yokohama 1995, Conferencia de Kyoto 1997, Cumbre
de Québec 2001, en el contenido de la Agenda 21 y revitalizados en la Cumbre de
Johannesburgo en septiembre de 2002.

La creciente ocurrencia de desastres en los países de la Subregión Andina compromete


la sostenibilidad del desarrollo; de otro lado, las debilidades en los procesos de
planificación que desconocen los fenómenos y las dinámicas ambientales están
acrecentando los riesgos de calamidades y los desastres en la Subregión.

En consecuencia, con el fin de avanzar hacia el desarrollo sostenible, se hace


necesario abordar la problemática de los desastres naturales y antrópicos de una
manera nueva, reemplazando la respuesta coyuntural y reactiva, por una visión que
aborde de forma sistemática y planificada la reducción del riesgo y del impacto de los
desastres naturales y antrópicos2.

La problemática de los desastres en la Subregión Andina demanda abordar en forma


articulada sobre dos vertientes prioritarias. Por una parte, se debe actuar sobre las
causas, evitando el aumento de vulnerabilidades a través del tiempo, y por otra,
enfrentando la situación actual de vulnerabilidades presentes no manejadas, lo que
obliga a un esfuerzo importante en prevención y atención3.

Los Países Miembros de la Comunidad Andina comprenden la relevancia de establecer


e implementar políticas nacionales de reducción de riesgos y atención de desastres que
sean consecuentes con el desarrollo sostenible, orientadas a lograr un desarrollo
económico y social que proteja la base de los recursos y el medio ambiente para
beneficio de las presentes y futuras generaciones, mediante el diseño de instrumentos
que promuevan la participación plural de los estados y las sociedades en forma
armónica.

El desafío de la prevención y atención de desastres requiere actuar en diferentes


niveles al interior de cada país, a nivel subregional y frente a los demás actores del
sistema internacional.

1
Decisión 529 ‘ Artículo 1 del Comité Andino para la Prevención y Atención de Desastres, CAPRADE.
Crear el Comité Andino para la Prevención y Atención de Desastres, CAPRADE, que tendrá por objeto
y competencia contribuir a la reducción del riesgo y del impacto de los desastres naturales y
antrópicos que puedan producirse en el territorio de la subregión andina a través de la coordinación y
promoción de políticas, estrategias y planes, y la promoción de actividades en la prevención,
mitigación, preparación, atención de desastres, rehabilitación y reconstrucción, así como mediante la
cooperación y asistencia mutua y el intercambio de experiencias en la materia.
2
Acorde con lo expresado en el Artículo 1º Decisión 529 de mayo 2002, del Consejo Andino de
Ministros de Relaciones Exteriores.
3
Señala la Secretaría de la Estrategia Internacional para la Reducción de Desastres Naturales de la
ONU, en la Conferencia Hemisférica, 2001: Seguirá habiendo necesidad de preparativos y servicios
especializados para responder a las emergencias cuando ocurran. Sin embargo, los gastos en socorro
para contingencias, o incluso para fomentar una capacidad especializada en defensa civil, solo se
justifican si al menos la misma cantidad de recursos se invierte en la protección de los recursos y en el
desarrollo duradero de capacidad para resistir las amenazas naturales.
- 10 -
De un lado, corresponde a los niveles subregional, regional y multilateral configurar e
impulsar programas de cooperación, promover la formulación de políticas nacionales
efectivas y el desarrollo de proyectos comunes. Es propio de los organismos y
mecanismos de alcance global el desarrollo de las estrategias y políticas mundiales, el
abordaje de problemas que superan ámbitos regionales, como ocurre actualmente con
el cambio climático y la conexión de estrategias regionales con las de los organismos
internacionales que se ocupan del tema.

En la esfera de cada país, los niveles nacionales podrán abordar la formulación y


adopción de políticas, definir y orientar los procesos de Prevención y Atención de
Desastres en el marco de la planificación del desarrollo y el impulso de programas, en
tanto que los niveles subnacionales podrán tener una responsabilidad central en la
planeación, priorización y ejecución de proyectos concretos.

De otro lado, el logro de los objetivos de la prevención y atención de desastres


demanda la participación de los organismos de protección y defensa civil, de
planificación del desarrollo, de ciencia y tecnología, entidades sectoriales,
organizaciones no gubernamentales, del sector privado y de la comunidad en general,
para que asuman el papel que les corresponde, a fin de que la población sea
protagonista de su propia protección.

La Estrategia Andina para la Prevención y Atención de Desastres tiene como propósito


ser un elemento de apoyo al entendimiento, orientación y construcción de sinergias
entre tan numerosos y variados actores, de forma que se le otorgue un derrotero al
camino que debemos recorrer en la construcción de un futuro mejor.

La Estrategia Andina para la Prevención y Atención de Desastres hace parte


fundamental de los compromisos y esfuerzos que ha venido haciendo la Comunidad
Andina alrededor de la reducción del riesgo y atención de desastres, para responder a
este desafío de la Subregión y en un marco de compromisos internacionales como el
adquirido en la Estrategia Internacional para la Reducción de Desastres Naturales y el
señalado en la Tercera Cumbre de las Américas (Québec 2001), en la cual los jefes de
estado declararon:

“Nos comprometemos a fortalecer la cooperación hemisférica y las capacidades


nacionales para desarrollar un enfoque más integrado en el manejo de desastres
naturales. Continuaremos implementando políticas que mejoren nuestra capacidad
para prevenir, mitigar y atender las consecuencias de los desastres naturales.
Acordamos estudiar medidas que faciliten el acceso oportuno a recursos financieros
para atender las necesidades de emergencia.”

1. La Problemática Subregional de Riesgos y Desastres

El contexto Latinoamericano de ocurrencia de desastres

La Estrategia Andina ha sido concebida para dar respuesta a la problemática de riesgos


de desastres presentes en la Comunidad Andina. La Subregión Andina se inserta en el
contexto general de los países de América Latina, los cuales han presentado en los
últimos años una cantidad desproporcionada de desastres que han causado graves
penalidades sociales y económicas. Entre 1900 y 1999 en América Latina y el Caribe se
registraron 1.309 desastres naturales, que corresponden al 19% de los desastres
reportados a escala mundial; esto ubica a esta región como la segunda de mayor
- 11 -
ocurrencia de desastres después de Asia (44%). Entre 1970 y 1999, la región se vio
afectada por 972 desastres que se estima causaron la muerte de 227.000 personas,
dejaron sin vivienda a aproximadamente ocho millones de habitantes y afectaron
indirectamente casi 148 millones de personas. El costo promedio anual de estos
desastres en los últimos 30 años se estima entre US$ 700 y US$ 3.300 millones4.

Cuadro 1. Región andina. Estadísticas básicas. 2003


Países Superficie Población Población PIB (p)
(Km2) Total urbana (millones
(%) US$)
Bolivia 1.098.581 8.894.363 65 7.688
Colombia 1.141.748 44.561.609 73 81.800
Ecuador 256.370 12.842.576 61* 26.844
Perú 1.285.216 26.950.838 72 60.993
Venezuel 916.445 25.553.504 93
a 97.000
Región 4.745.891 119.302.972 75 274.325
Andina
Fuente: Sistema de Información Macroeconómica – IMACRO- Secretaría General de la Comunidad
Andina. Datos oficiales preliminares.
* Datos oficiales del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos del Ecuador – INEC.

En lo que respecta a la Subregión Andina, constituida por Bolivia, Colombia, Ecuador,


Perú y Venezuela, ésta cuenta con una población de 119 millones de habitantes y una
superficie de 4´745.891 kilómetros cuadrados y donde se genera un PIB anual de 274
mil millones de dólares, y presenta uno de los más complejos panoramas de riesgos.

Las vulnerabilidades creadas por los modelos de desarrollo en los países andinos son
la explicación primaria de la mayor parte de los riesgos. La Subregión es
extremadamente propensa a terremotos, deslizamientos, tsunamis y erupciones
volcánicas debido a que su territorio se asienta sobre tres placas tectónicas activas
(Nazca, Suramericana y Caribe), y está ubicada dentro del “Anillo de Fuego” del
Pacífico, donde tiene lugar el 80% de la actividad sísmica y volcánica de la tierra y
donde ocurre un proceso de conformación del relieve que entraña fallas y fracturas
geológicas activas.

Las amenazas que se ciernen sobre la Subregión Andina están estrechamente


relacionadas con los fenómenos naturales que actuaron para su creación y de aquellos
modeladores del paisaje. En efecto, los Andes han sido objeto de una intensa erosión,
que ha llevado a la formación de sedimentos depositados en las vertientes exteriores o
en los valles existentes entre las cordilleras, lugares que han sido preferidos por la
población debido a la riqueza de los recursos, en especial, por la presencia de agua y
suelos fértiles (en su mayoría inestables), los cuales coinciden y han contribuido al
incremento de los riesgos de desastres, por las vulnerabilidades existentes y creadas
en la Subregión.

Por otro lado, en la Subregión Andina se observan extremos climáticos que se


manifiestan en forma de sucesivas y prolongadas sequías, inundaciones y fuertes
vientos, asociados a anomalías climáticas por diversas causas que afectan diversas
zonas en el territorio de los Países Andinos. Al parecer, los cambios climáticos recientes
han agravado la variabilidad del clima de la Subregión, con un incremento en la
cantidad de lluvias torrenciales y en la mayor frecuencia e intensidad de los fenómenos

4
Base de datos OFDA/CRED.
- 12 -
de El Niño y La Niña, que han provocado inundaciones y sequías. Igualmente, se
asume que un incremento de la temperatura de la Tierra llevaría a un aumento del nivel
del mar poniendo en riesgo las zonas costeras al hacerlas más vulnerables a
inundaciones.

Así, por ejemplo, durante la ocurrencia de El Niño en los años 1997 y 1998 las pérdidas
económicas en la Subregión se estima que ascendieron a 7.500 millones de dólares y,
en los últimos cinco años ha ocurrido, por lo menos, un desastre severo en cada uno de
los cinco países andinos5.

País Evento y efectos


Bolivia Año 1997 - 1998. Fenómeno El Niño. Sequías e
inundaciones. Efectos equivalentes a 527 millones de
dólares.
Colombia Año 1999. Terremoto en la región del Eje Cafetero.
1.811 muertes y más de 1.800 millones de dólares en
reconstrucción.
Ecuador Año 2001-2002. Erupciones Guagua Pichincha,
Tungurahua y El Reventador.
Año 1997-1998 – Fenómeno El Niño
Pérdidas cercanas a los 2.800 millones de dólares
Perú Año 2001. Terremoto sur del país afectó a 213.000
personas
Venezuela Año 2000. Tragedia del Estado Vargas.
10.000 muertes y 3.000 millones de dólares en pérdidas
Fuente: CAF

Rasgos subregionales comunes en la problemática de riesgos

La similitud de situaciones de riesgo constituye otro rasgo que refuerza la identidad a


nivel de la Subregión. El panorama de vulnerabilidades que tipifican de manera similar a
las sociedades de los diferentes países, es la consecuencia del tránsito por procesos
semejantes, en cuanto al uso de los recursos y a los esquemas de ocupación y
desarrollo del territorio desde las culturas prehispánicas hasta nuestros días.

A los eventos desastrosos rotundos y de gran significado se suman los eventos


menores, que aunque no son tan difundidos en los medios de comunicación, ocurren a
lo largo y ancho de los países latinoamericanos con gran frecuencia y con efectos
acumulados muchas veces superiores a la mayoría de los grandes desastres. El efecto
directo de los desastres, si bien se concentra en la población directamente afectada y
que habita en la zona donde éstos se manifiestan con mayor intensidad, tiene
repercusiones que, en general, afectan de una manera u otra la totalidad de la
población del país. En algunos casos la irradiación incluso llega a otros países de la
Subregión (migraciones, menor demanda de importaciones, interrupción en
comunicaciones, transmisión de vectores, etc.).

Los procesos de ocupación y desarrollo y el inadecuado manejo de recursos:


factores determinantes del nivel de los riesgos en la Subregión

La Estrategia Andina para la Prevención y Atención de Desastres ha sido construida


con base en la necesidad de reducir el nivel de los riesgos de desastres que la
caracteriza. En efecto, los riesgos como consecuencia de eventos naturales y/o

5
Según la ONU como consecuencia de un desastre severo las pérdidas pueden alcanzar o exceder el
10% del PIB de un país y reducir el crecimiento de uno a tres años.
- 13 -
antrópicos han estado determinados por la presencia de una gran variedad de
fenómenos físicos, la frecuencia de su ocurrencia y el alto grado de vulnerabilidad de
los asentamientos humanos.

Adicionalmente al incremento de amenazas/peligros determinados por la ubicación y el


clima propio de la Subregión, están los factores relacionados con las vulnerabilidades
socioeconómicas que aumentan considerablemente el riesgo o la probabilidad de daño.

Los mayores factores de vulnerabilidad en la Subregión se dan por los patrones de


asentamientos en suelos frágiles, mala calidad de las viviendas e infraestructura,
degradación ambiental, carencia de estrategias eficientes para reducir los riesgos, y el
tipo y manejo de las actividades económicas.

El rápido crecimiento demográfico y el aumento de la densidad poblacional en las tres


últimas décadas en la Subregión Andina han incrementado la cantidad de personas y
elementos expuestos a las mismas amenazas/peligros.

Esta dinámica se ha focalizado en las ciudades, que son física, funcional y


económicamente más vulnerables a las amenazas, debido a la concentración de
población y bienes y al alto grado de dependencia de redes de servicios públicos y de
distribución de alimentos. Adicionalmente, la atención de una emergencia en una ciudad
media o grande presenta una enorme complejidad por la gran demanda de recursos y
preparación para su manejo. En general las ciudades capitales de los países andinos
están ubicadas en zonas de medio o alto riesgo sísmico, como ocurre en el caso de
Lima, que desde 1856 ha sufrido seis grandes terremotos y desde 1940, año del último
sismo importante, su población se ha incrementado doce veces.

Las zonas de alta densidad poblacional, resultantes de los patrones de urbanización y


migratorios, suelen estar ubicadas en zonas costeras, zonas con fallas geológicas y/o
en zonas de fragilidad ambiental. En el Perú por ejemplo, la proporción de habitantes
que actualmente residen en áreas costeras a no más de 80 kilómetros del mar, más
susceptibles a El Niño y otros fenómenos, es del 73% en contraste con el 54% hace
tres décadas6.

Debido al acelerado crecimiento poblacional y a la migración rural, la gran mayoría de


las ciudades se ha expandido sin planificación, ni códigos de construcción, o
regulaciones apropiadas sobre el uso de la tierra que se adapten a su entorno físico. En
los últimos 30 años la Subregión Andina ha pasado de ser mayoritariamente campesina
o rural a tener la población concentrada actualmente en las ciudades (75%) y
representará el 79% para el año 2015. La colonización, la migración incontrolada y el
desplazamiento forzoso ha traído consigo la expansión de vecindarios pobres sobre
terrenos de bajo valor económico en áreas propensas a amenazas/peligros. Es así
como no sorprende que los barrios de invasión sean los más afectados por los eventos
adversos.

La mala calidad de la vivienda incrementa los efectos de los fenómenos naturales, y es


resultado de la incontrolada construcción y de la expandida pobreza. En general, los
hogares pobres, además de su imposibilidad de acceder económicamente a
condiciones de habitabilidad, tampoco pueden acceder a la información que les permita
lograrla, por lo tanto, carecen del conocimiento y destrezas técnicas de construcción

6
Federación Internacional de la Cruz Roja, 1999.
- 14 -
adecuada, y de los ingresos para atender las exigencias para el manejo de terrenos
inestables, el drenaje de aguas servidas y superficiales, entre otros aspectos.

Paralelamente, de las viviendas edificadas anualmente, sólo una mínima proporción es


controlada por las autoridades locales para el cumplimiento de las normas de
construcción. Cuando éstas normas existen, se desconocen o no se cumplen; como
ocurre inclusive con compañías de construcción del sector formal y en las empresas
responsables de la infraestructura pública. Es así como el fenómeno de la ilegalidad, la
corrupción y la indiferencia de las autoridades frente a las normas han dado espacio a
la proliferación del riesgo.

Por otra parte, el manejo inadecuado e indiscriminado de los recursos naturales ha sido
un factor determinante de las actuales condiciones de riesgo, al transformar hábitats,
que en el pasado eran seguros, en zonas con nuevas amenazas y vulnerabilidades.
Actividades como la deforestación, la agricultura y la minería incontrolada han sido
intervenciones generadoras de daño ambiental y riesgos. El 90% de hectáreas de
bosques que son deforestadas anualmente en la Subregión Andina es provocado por
prácticas de agricultura no sustentable7.

La degradación del medio ambiente, consecuencia de las actividades productivas y los


procesos de ocupación y desarrollo se constituye en un factor transformador de
fenómenos naturales en desastres. Actualmente en la Subregión Andina el riesgo de
inundaciones y deslizamientos se ve exacerbado por la deforestación de cuencas
hidrográficas, la ausencia de programas de conservación del suelo y el uso inapropiado
de la tierra. Cabe señalar, que la ocupación de ecosistemas frágiles, el desarrollo de
actividades agrícolas inapropiadas, o la construcción de carreteras rurales en laderas
inestables, para citar algunos ejemplos, alteran la capacidad reguladora hídrica de las
cuencas y detonan procesos erosivos y de remoción en masa.

Sumado a los riesgos asociados a eventos geológicos e hidrometeorológicos se


encuentran los antrópicos relacionados con el desarrollo de los procesos industriales,
tecnológicos y sanitarios, tal como ocurre cuando se presentan incendios, derrames de
hidrocarburos, contaminación química, epidemias, crisis en lugares de afluencia masiva
de personas, entre otros. Este conjunto de eventos se ha venido incrementando con el
proceso de desarrollo de los países.

En síntesis, el patrón de desarrollo seguido por los países andinos, con altos grados de
pobreza, exclusión socioeconómica y deterioro del ambiente es un factor determinante
de la alta vulnerabilidad y en consecuencia del riesgo ante las amenazas naturales y
antrópicas.

Escasa capacidad social e institucional para la reducción de vulnerabilidades y


para enfrentar riesgos no controlados

Si bien la Subregión Andina viene avanzando en la internalización de la nueva


perspectiva sobre la responsabilidad social en la generación de los desastres, lo que se
evidencia en la propia configuración del CAPRADE con participación de representantes
de las Defensas Civiles, Ministerios de Planificación o entidades que hagan sus veces y
los Ministerios de Relaciones Exteriores, se evidencia la debilidad en las políticas

7
Los Países Andinos poseen una superficie forestal de 230 millones de hectáreas y el 50% del territorio
amazónico del continente
- 15 -
públicas multisectoriales en el tema de riesgos y los frágiles procesos institucionales de
planificación del desarrollo.

Una de las mayores debilidades de las políticas públicas y el desarrollo institucional de


los países de la región en la reducción de riesgos radica en que los proyectos y
acciones de desarrollo e inversión carecen muchas veces de un proceso adecuado de
planificación de mediano y largo plazo donde esté incorporada una comprensión de los
límites y posibilidades que determinan la geografía y las condiciones de riesgo.

La construcción de infraestructura, como vías, servicios públicos, hospitales y colegios


se hace generalmente sin las condiciones de seguridad que deberían tener; así mismo,
el desarrollo de actividades productivas, como las agropecuarias y mineras, son cada
vez más susceptibles a los fenómenos, a la vez que se constituyen con frecuencia en
generadoras de condiciones de riesgo.

El fenómeno El Niño de los años 1982/83 y 1997/98 puso en evidencia las intensas
vulnerabilidades de los sectores del desarrollo como se aprecia en los estudios de
impactos socioeconómicos de la CEPAL y la CAF.

Pérdidas sectoriales por Fenómeno El Niño 1997 1998


Sector Pérdidas
millones de dólares
Agropecuario 2,070
Transporte 1,758
Industria 944
Emergencia 722
Electricidad 509
Comercio 394
Vivienda 384
Por Tipo de Sectores
Sectores Productivos 3,593
Infraestructura 1,752
Sectores sociales 736
Sectores de servicios 621
Otros sectores 844
Fuente. CEPAL, CAF. Evaluación Impactos FEN 1997 1998.

A pesar de que los países de la Subregión cuentan con políticas para la prevención y
atención de desastres existen deficiencias para su implementación. En lo que respecta
al sector del conocimiento de las amenazas y vulnerabilidades la principal
responsabilidad ha estado concentrada en los organismos estatales de investigación
débilmente financiados y poco articulados con los usuarios potenciales de la
información. Por su parte, el sector académico e investigativo está poco orientado a
formar a los futuros profesionales y ciudadanos con visión y conciencia de sus
realidades ambientales, geográficas y de sus riesgos.

La información sobre los riesgos, la medición de impactos y los mecanismos para


evaluar la prevención y atención de desastres son insuficientes y por lo tanto se carece
de la información necesaria que permita la toma de decisiones y por ende, el control de
la gestión pública.

Adicionalmente, se observa una limitada coordinación entre las autoridades nacionales


responsables de la planificación del desarrollo, de la prevención y atención de los
desastres, del medio ambiente, entre los niveles de los gobiernos nacionales,
- 16 -
regionales y locales, lo que limita la incorporación de la reducción de riesgos y atención
de desastres en la planificación del desarrollo.

La inexistencia o la débil formulación de responsabilidades y lineamientos centrales


para regular la ocupación en zonas de amenazas/peligros constituye otra debilidad
institucional en los países Andinos; en particular en la incorporación del componente de
prevención y atención de desastres8 en los planes de ordenamiento territorial, en planes
de desarrollo territoriales y en planes de expansión sectoriales.

Frente al cúmulo de vulnerabilidades ya creadas y no resueltas no se ha desarrollado


con la fuerza necesaria y con la participación activa y comprometida de los actores del
desarrollo, una política clara y fuertemente sostenida de prevención y atención de
desastres. Los organismos que tienen estas responsabilidades están mal financiados
con relación a los costos de la respuesta que ellos deben atender. Los organismos
fundados en cuerpos voluntarios carecen de mecanismos que soporten sus actividades;
así mismo, no toda la sociedad responde a la realización de planes de contingencia, y
cuando existen, la mayor parte de ellos son elaborados sin la participación intersectorial
requerida.

Los procesos de rehabilitación y reconstrucción post desastres han sido asumidos por
organizaciones creadas coyunturalmente para tal fin, con procesos de instalación y de
aprendizaje costosos y usualmente tardíos que no garantizan la preservación de
políticas y esquemas institucionales permanentes de respuesta para esta fase.

El potencial y la responsabilidad del sector privado y la sociedad civil en la


prevención y atención de desastres

Tradicionalmente, las responsabilidades en la prevención y atención de desastres han


estado concentradas en los Estados, comprometiendo, en el caso de los desastres, la
estabilidad fiscal y el desempeño macroeconómico, o, poniendo una carga excesiva en
la gestión que las administraciones no podrían atender. En este contexto, el papel del
sector privado ha sido poco explorado en áreas donde puede desempeñar un potencial
como en la creación de mercados de seguros y reaseguros, educación, investigación,
medios masivos e información pública, para citar algunos casos.

Igualmente, la sociedad civil ha estado débilmente vinculada a los procesos de


desarrollo institucional de prevención y atención de desastres y en los procesos de
reconstrucción, a pesar de haberse demostrado que el éxito de los procesos requiere la
vinculación activa de las comunidades en la orientación, gestión y control de los
programas.

Reducción de desastres (vulnerabilidades existentes y potenciales): el desafío


prioritario para la Subregión.

El cúmulo de vulnerabilidades ya creadas y la necesidad de un cambio de rumbo de las


tendencias pasadas, destacan para la Subregión dos vertientes interrelacionadas de
actuación prioritarias: la reducción de vulnerabilidades existentes o que podrían ser
generadas, y el abordaje a la gestión de los riesgos no manejados mediante una

8
La información sobre los riesgos, la medición de impactos y los mecanismos para evaluar la
prevención y atención de desastres son imprecisos y por lo tanto se carece de las suficientes
herramientas que permitan la toma eficiente de decisiones y el control a la gestión pública en este
campo.
- 17 -
consistente política de preparación apoyada desde todos los ángulos y esfuerzos
interinstitucionales estatales y privados, y de la sociedad civil. Ello implica, como se
deriva del diagnóstico anterior, una actuación sobre las causas y una voluntad política
para apoyar ambas vertientes, priorizando las actuaciones para maximizar los
resultados.

2. Contexto Internacional de la Prevención y Atención de Desastres

Antecedentes

La ocurrencia de desastres a escala mundial durante las décadas recientes llevó a la


Organización de las Naciones Unidas a asumir la tarea de incorporar el tema en la
agenda pública internacional, para lo cual se declaró el período 1990 – 1999 el Decenio
Internacional para la Reducción de los Desastres Naturales.

La Estrategia Internacional para la Reducción de los Desastres (EIRD) constituye el eje


central de los esfuerzos de las Naciones Unidas, con la identificación de las causas de
los desastres que puedan afectar el desarrollo de muchos países. Cada vez más se
vienen incrementando los postulados de la EIRD para orientar y guiar las acciones de
las diferentes agencias de las Naciones Unidas y los gobiernos de los Estados
Miembros, de acuerdo a las Resoluciones de la Asamblea General 56/195 y 57/256.
Las acciones de la EIRD se llevan a cabo bajo la guía y coordinación de la Fuerza de
Tarea Inter-Agencial sobre Reducción de Desastres y la Secretaría de la EIRD. El
último informe del Secretario General de las Naciones Unidas a la Asamblea General
sobre implementación de la EIRD se realizó durante el año 2003 y ante el LVIII Período
de Sesiones de la Asamblea General.

La EIRD fue adoptada por la Asamblea General de las Naciones Unidas como la
sucesora del Decenio Internacional para la Reducción de los Desastres Naturales
(1990-1999), con el fin de perseguir los objetivos a escala mundial al proporcionar un
marco estratégico global para su implementación por parte de los países, las regiones,
los organismos de las Naciones Unidas y la sociedad civil.

Este contexto internacional señala la dimensión del desafío, persuade y vincula a los
países al cumplimiento de compromisos asumidos internacionalmente y ofrece un
contexto de oportunidades para el desarrollo de las responsabilidades de los estados.

Asumiendo el compromiso de la Estrategia Internacional para la Reducción de


Desastres

El Mandato de Ginebra sobre la reducción de los desastres adoptado durante el Foro


del Programa de la EIRD (julio 1999) reafirmó la necesidad de que tanto la reducción de
los desastres como el manejo de los riesgos sean elementos esenciales de las políticas
gubernamentales y proporciona los cimientos para futuros esfuerzos con relación a la
reducción de los desastres.

Teniendo en cuenta que los países andinos han manifestado, mediante la Decisión 529
de julio de 2002 la cual da origen al CAPRADE, que se adopten los postulados de la
Estrategia Internacional para la Reducción de Desastres (EIRD) promulgada dentro del
marco de la Asamblea General de las Naciones Unidas del Año 2000 (54/219). En ella
tiene la Subregión Andina un punto de referencia fundamental para el desarrollo de la
presente Estrategia.
- 18 -
En cumplimiento de los compromisos internacionales y su articulación con las políticas
nacionales y de integración andina, corresponde a los Ministerios de Relaciones
Exteriores impulsar el seguimiento de los temas que de estas convenciones emanen,
así como de los programas y acciones que la Estrategia Andina establezca.

La adopción de la Estrategia Internacional se apoya, entre otros, en los siguientes


objetivos:

— Incrementar la concientización pública.


— Alcanzar compromisos por parte de las autoridades públicas.
— Estimular la formación de sociedades y redes multidisciplinarias e intersectoriales.
— Fomentar el conocimiento científico.
— Continuar con la cooperación internacional para reducir los impactos de El Niño y
otras variaciones climáticas.
— Fortalecer las capacidades para reducir los desastres a través de alertas
tempranas.

El apoyo de la Comunidad Internacional a la Subregión Andina

Como respuesta a los desastres y la evidente dinámica de los riesgos, así como por los
esfuerzos enmarcados en el Sistema de Naciones Unidas, en particular a partir del
Decenio Internacional para la Reducción de Desastres, el hemisferio ha venido
avanzando en una comprensión de la reducción del riesgo, producto, igualmente, del
desarrollo de investigaciones sociales, el intercambio de experiencias y la apertura del
tema a sectores sociales y políticos antes no involucrados.

No obstante los avances y el interés en la temática, la comprensión de la prevención y


la atención de los desastres es limitada, así mismo se carece de un mecanismo de
articulación de esfuerzos internacionales y por lo general, la sostenibilidad de las
iniciativas de apoyo es baja.

Este panorama del apoyo internacional a la Subregión, plantea la necesidad de hacer


un esfuerzo para lograr mayores niveles de coordinación entre los organismos y
agencias de cooperación, para construir sinergias, así como para el logro de una visión
más integral sobre los desastres, el desarrollo y el ambiente y sus interrelaciones.

En las dos últimas décadas, los países de la Subregión Andina han contado con el
apoyo de un número apreciable de entidades internacionales tales como el Programa
de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), la Organización Panamericana de la
Salud (OPS/OMS), la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y la
Media Luna Roja (FICR), el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), la
Oficina de Ayuda Humanitaria de la Comisión Europea (ECHO).

La Organización de Estados Americanos, la Asociación de Estados del Caribe, el Grupo


de Río y el Grupo de los Tres, han incluido en sus agendas el tema. Agencias de
cooperación internacional como las de la Unión Europea, alemana (GTZ), española
(AECI), italiana, sueca (ASDI), japonesa (JICA), suiza (COSUDE), entre otras,
adelantan programas para la prevención y atención de los desastres en los países
andinos. Por su parte USAID, OFDA y el HAP - Comando Sur del gobierno de los
Estados Unidos, y el Programa de Preparativos ante Desastres de la Oficina de Ayuda
Humanitaria de la Comisión Europea, DIPECHO, han desempeñado un papel
significativo en la fase de preparativos frente a desastres.
- 19 -
Por su parte, entidades como la Red de Estudios Sociales para la Prevención de los
Desastres en América Latina, han fomentado cambios de actitud, el desarrollo de una
nueva comprensión y nuevas capacidades dirigidas a reducir la vulnerabilidad en la
Subregión.

Instituciones como la Corporación Andina de Fomento (CAF), el Programa de las


Naciones Unidas sobre Medio Ambiente (PNUMA), con su Programa Ambiental
Caribeño (CEP), la Comisión Centroamericana sobre Ambiente y Desarrollo (CCAD), la
Unión Mundial para la Naturaleza (UICN), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID),
el Banco Mundial (BM) y el Banco Caribeño de Desarrollo (BCD) han dado cada vez
mayor énfasis a la prevención y la atención de desastres, la planeación del desarrollo y
el manejo ambiental.

El cambio climático, entretanto, ha impulsado a la Organización Meteorológica Mundial


(OMM) y otros a promover redes de investigación internacionales y regionales como en
el caso del Centro Internacional de Investigaciones sobre el Fenómeno de El Niño
(CIIFEN)9 y la Comisión Permanente del Pacífico Sur (CPPS), a mejorar la articulación
entre los entes del conocimiento de amenazas con prevención y la atención de los
desastres, la implementación y la optimización de sistemas de alerta temprana y el
fortalecimiento de la reducción del riesgo en el plano institucional. La Administración
Oceanográfica y Atmosférica Nacional de Estados Unidos (NOAA) ha establecido el
Foro sobre el Panorama Climático, el cual congrega a meteorólogos, pronosticadores y
administradores de desastres en un intento por integrar el uso de los pronósticos
climáticos en la gestión de los desastres, la agricultura y la salud en las diversas
subregiones. Así mismo, el Proyecto Multilateral Andino (PMA) apoya la articulación de
los servicios geológicos en la Subregión.

El Centro Regional de Información sobre Desastres (CRID), ofrece información y


documentación en línea, así como para consulta directa en sus oficinas, sobre
numerosas facetas del tema de los desastres y la Comisión Económica de las Naciones
Unidas para América Latina y el Caribe (CEPAL) colabora con otras agencias de la
ONU para mejorar la metodología de evaluación de los daños provocados por los
desastres, con el fin de promover la inversión en reducción de desastres durante las
etapas de recuperación en América Latina y el Caribe.

Numerosas agendas de Naciones Unidas, en particular las propuestas en las


convenciones ambientales, son de importancia para la región, aunque rara vez se
vinculan explícitamente con la "reducción de los desastres" en su definición tradicional,
ni con la comunidad que la practica. Tal es el caso del cambio climático, los problemas
de las sequías, heladas y desertificación; pérdida de biodiversidad y desaparición de
humedales. Esencialmente, estas preocupaciones nos remiten a la problemática de la
evaluación y la reducción del riesgo y los desastres. La sinergia entre estos dos temas
es motivo de creciente inquietud en la región.

El camino recorrido por otros esfuerzos de integración regionales en América


Latina

El desarrollo de esfuerzos coordinados para promover la prevención y atención de


desastres ha surgido como una posibilidad que tienen los países que comparten
problemas para optimizar sus posibilidades de superarlos.
9
El CIIFEN se origina en base a las Resoluciones de la Asamblea General de las Naciones Unidas,
vinculantes para la cooperación internacional: 53/185, 54/200, 55/197, 56/194, así como de las
Resoluciones del ECOSOC 1999/46 y 2000/33.
- 20 -
Ejemplos relevantes de trabajo conjunto y referentes valiosos lo constituyen el CDERA
en el Caribe y el Centro de Coordinación para la Prevención de los Desastres Naturales
en América Central (CEPREDENAC) que cuenta con un Marco Estratégico para la
Reducción de la Vulnerabilidad y los Desastres en Centroamérica.

3. Contexto Institucional de la Comunidad Andina para la Prevención y Atención


de Desastres.

La Comunidad Andina ha construido en años recientes una experiencia en el trabajo


intracomunitario en la prevención y atención de desastres y ha avanzado en la
construcción de una agenda de trabajo ambiental y una agenda social. Estos tres
procesos tienen dinámicas e intereses altamente coincidentes, lo que constituye una
fortaleza que potencia los resultados.

Antecedentes de los esfuerzos comunitarios en la prevención y atención de


desastres

Los Países Andinos han venido acumulando en los últimos años una experiencia en el
trabajo intracomunitario en la prevención y atención de desastres que sienta las bases
para adelantar con mayor confianza la Estrategia Andina.

Dos antecedentes de trabajo andino en el conocimiento de las amenazas han sido los
logrados por el Estudio Regional para el Fenómeno de El Niño desde el año 1974 en el
contexto de la Comisión Permanente del Pacífico Sur (CPPS) dedicado al desarrollo de
estudios hidrometeorológicos y oceanográficos; y el Centro Regional de Sismología
(CERESIS) focalizado en el desarrollo de estudios de vulcanología y sismología en la
Subregión.

En los años recientes, varias decisiones frente al tema de desastres han sido tomadas
en el marco del Sistema Andino de Integración que señalan una trayectoria de
delineamientos en este campo.

En 1998 el Consejo Presidencial Andino, a raíz de los recurrentes impactos del


fenómeno El Niño, solicitó a la Corporación Andina de Fomento realizar la evaluación
de los impactos socioeconómicos del fenómeno ocurrido en los años 1997 – 1998 y un
análisis de la institucionalidad andina frente a la prevención de desastres. Con base en
este estudio, el Consejo Presidencial Andino reunido en el año 2000 instó a la CAF a
apoyar a los países en este campo, lo que llevó al desarrollo del Programa Andino para
la Prevención y Mitigación de Riesgos, PREANDINO.

El PREANDINO, en el marco de sus objetivos, ha venido impulsando y apoyando, en


diferentes grados, en los países de la CAN desde el año 2001 “la formulación de
políticas nacionales y sectoriales de prevención y mitigación de riesgos y el desarrollo
de esquemas y formas de organización institucionales orientadas a incorporar el
enfoque de prevención en la planificación del desarrollo”.

En febrero de 2000 y agosto y noviembre de 2001 se llevaron a efecto la Primera y


Segunda Conferencia Anual de Preparación a Desastres de los países andinos,
organizadas por las instituciones de Defensa y Protección Civil de la Subregión, con el
propósito de fortalecer los sistemas nacionales y la creación de un Sistema Andino para
Reducir los Efectos de los eventos adversos, recomendando la creación del Comité
Andino para la Prevención y Atención de Desastres. Dicha recomendación fue ratificada
- 21 -
en la reunión de Reflexión sobre la Institucionalidad Andina realizada en Bogotá en
enero de 2002, la misma que fue convocada por la Estrategia Internacional para la
Reducción de Desastres, la OPS y OFDA.

En julio de 2002, los Ministros de Relaciones Exteriores dan un paso importante para la
sostenibilidad de las acciones iniciadas con la creación del Comité Andino para la
Prevención y Atención de Desastres -CAPRADE- mediante Decisión 529, al reunir en
una sola institucionalidad regional las diferentes facetas de la prevención y atención de
desastres. Dicho Comité fue creado con el objeto y competencia de:

“contribuir a la reducción del riesgo y del impacto de los desastres naturales y


antrópicos que puedan producirse en el territorio de la Subregión Andina, a
través de la coordinación y promoción de políticas, estrategias y planes, y la
promoción de actividades en la prevención, mitigación, preparación, atención
de desastres, rehabilitación y reconstrucción, así como mediante la
cooperación y asistencia mutuas y el intercambio de experiencias en la
materia. La Secretaría General de la Comunidad Andina se constituye, de
acuerdo a la mencionada Decisión, en la Secretaría de ese Comité”.

En el 2003, en una ampliación de la perspectiva de la integración regional hacia temas


diferentes al comercio, los Presidentes Andinos reunidos en Quirama, Colombia,
además de promulgar la integración en temas ambientales y de biodiversidad, instaron
a los países andinos a adelantar acciones para la prevención y atención de desastres.

En los últimos años, algunas instituciones del Sistema de Integración Andino,


reconociendo el impacto negativo que han tenido los desastres en la sostenibilidad de
sus esfuerzos regionales, vienen internalizando la prevención y atención de desastres
desde una perspectiva de desarrollo.

La Organización Regional de Salud (ORAS-Convenio Hipólito Unanue), en conjunción


con la OPS-OMS, ha incluido en su marco de políticas esta temática y trabaja
actualmente en un acompañamiento regional al CAPRADE para el sector salud desde
esta perspectiva. La CAF, en concordancia con el esfuerzo que viene haciendo el
PREANDINO con los países, trabaja en la definición de una política interna de la
institución para fomentar en los países, y a nivel de las acciones regionales, la
reducción de vulnerabilidades y el fortalecimiento institucional para todas las facetas de
la prevención y atención de desastres a través de sus operaciones y actividades.

Con este conjunto de decisiones, la Subregión acelera los procesos para la


institucionalización de las acciones orientadas a la prevención y atención de desastres
dentro de las instituciones del Sistema de Integración Andino y en los países miembros.

Desarrollo de la Agenda Ambiental de la Comunidad Andina

Otras decisiones que vinculan el tema de riesgos con el manejo ambiental y el


desarrollo sostenible fortalecen el marco regional de actuación con respecto a esta
temática.

Teniendo como marco de referencia la Cumbre Mundial sobre Desarrollo Sostenible fue
aprobada la Iniciativa Latinoamericana y Caribeña para el Desarrollo Sostenible y los
países de la Subregión Andina aprobaron los Lineamientos para la Gestión Ambiental y
Desarrollo Sostenible. Posteriormente, en el marco de la reunión de Países
- 22 -
Megadiversos, en el año 2002 se estableció un Plan Andino para el Seguimiento a la
Cumbre de Johannesburgo.

En la matriz de acciones del Plan Andino se establece el objetivo de desarrollar el


componente ambiental de la Estrategia Andina para la Prevención y Atención de
Desastres. Las acciones previstas son las de articular la política ambiental como
instrumento importante para la prevención de los desastres naturales, así como la
coordinación entre el Comité Andino de Autoridades Ambientales y el CAPRADE, en
desarrollo del Mandato 35 y 36 del Plan de Acción de la Cumbre de Johannesburgo.

La posición ambiental de la Comunidad Andina, señala en este campo, que las


acciones subregionales se deben orientar a:

• Construir una posición ambiental Andina que fortalezca la integración y


contribuya a definir una posición compartida para su presentación en foros
internacionales.

• Desarrollar una visión ambiental sistémica que permita entender las


interrelaciones entre el sistema natural y los sectores de la economía.

• Fortalecer la función reguladora del Estado en materia ambiental a través de la


coordinación interinstitucional e intraterritorial entre los diferentes actores
económicos y sociales con el propósito de mejorar la eficiencia y eficacia en la
gestión ambiental y garantizar la sostenibilidad.

• Estimular mayor participación pública mediante el desarrollo de una cultura del


diálogo entre los actores nacionales y los países de la Subregión.

• Diseñar una nueva educación ambiental y mecanismos de difusión que faciliten


la creación de una conciencia ambiental.

• Mejorar la vinculación con la cooperación internacional sobre la base de una


visión ambiental andina.

• Incorporar el principio de sostenibilidad como un factor integrado a los procesos


de desarrollo y que conduzca a la mejora de la calidad de vida de la población de
la Subregión Andina.

4. Fundamentos para la Estrategia Andina para la Prevención y Atención de


Desastres.

4.1. Consideraciones Generales

El Consejo Presidencial Andino ha decidido adoptar la Estrategia Andina para la


Prevención y Atención de Desastres, en el marco del proceso integral de desarrollo
equilibrado, armónico y sostenible que se ha propuesto la Comunidad Andina.

Los cinco países andinos reconocen que encuentran en la integración el medio


fundamental para encarar el proceso de organización de sus políticas nacionales y
aprovechar eficientemente sus recursos para la prevención y atención de desastres.
- 23 -
4.2. Definición de la Estrategia Andina para la Prevención y Atención de
Desastres.

La Estrategia Andina para la Prevención y Atención de Desastres es un conjunto de


políticas y orientaciones destinadas a lograr la reducción del riesgo y del impacto de los
desastres naturales y antrópicos en la Subregión.

Características de la Estrategia:

• Es la respuesta a un Mandato Presidencial y de los Ministros de Relaciones


Exteriores que expresa una voluntad política y un esfuerzo integrador para el
desarrollo sostenible de la Subregión.
• Es un marco conceptual para la negociación de acuerdos de trabajo, el logro de
visiones compartidas y el intercambio de experiencias, tanto en la Subregión como
a escala territorial y sectorial.
• Permitirá lograr posiciones conjuntas y articuladas que promuevan los diálogos de
la Subregión con la comunidad internacional.
• Es promotora de la temática y de los programas establecidos en ella a todos los
niveles.
• Es un instrumento para canalizar fuentes de recursos internacionales.
• Es un apoyo para el desarrollo de procesos para generar aprendizajes y
apropiaciones, divulgación, transferencia y distribución de conocimiento.

La consolidación de los programas y acciones indicados en la Estrategia será un


proceso dinámico y acumulativo de construcción de conocimiento comunitario de
desarrollo de capacidades, formas de organización y priorización de acciones
estratégicas; así como un medio para despertar fuerzas sociales que tienen un gran
potencial en la prevención y atención de desastres, como el sector privado, las
organizaciones no gubernamentales y los medios de información y comunicación social.

4.3. Visión

La Estrategia Andina para la Prevención y Atención de Desastres es la herramienta


para la construcción de un ideal visionario que orienta los esfuerzos de los pueblos de
Bolivia, Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela a construir una Comunidad Andina
integrada, caracterizada por una sólida cultura de prevención, reflejada en un marco de
políticas subregionales y nacionales eficientes y oportunas de gestión del riesgo para la
reducción de desastres, en aras del mejoramiento de la calidad de vida y la protección
de la población.

Esta visión de Comunidad Andina y su marco de políticas, contribuye al desarrollo


sostenible, fundada en la permanente reducción de vulnerabilidades, el fortalecimiento
de las instituciones, la planificación territorial y sectorial, así como la consolidación de
redes temáticas en el ámbito científico, sectorial y temático.

Esta es la visión de una Comunidad Andina en la que están comprometidos los


gobiernos, basada en la solidaridad, la cooperación y la participación de las
instituciones, la sociedad civil y el conjunto de los actores sociales, en el marco del
respeto a valores étnicos, éticos, culturales y ambientales.

La construcción de este ideal andino se logrará con un mayor nivel de desarrollo del
conocimiento científico, tecnológico, educativo, informativo y operativo.
- 24 -
4.4. Objetivo General

Contribuir a la reducción del riesgo y del impacto de los desastres para coadyuvar en el
desarrollo sostenible en todos los países de la Subregión Andina a través del
fortalecimiento institucional y el establecimiento de políticas, estrategias, programas y
subprogramas comunes entre los países; del intercambio de experiencias, la creación
de redes y del mejoramiento de la cooperación mutua en situaciones de desastres.

4.5. Orientación General de la Estrategia

4.5.1. Mecanismos de la Estrategia

La Estrategia Andina tiene como principal mecanismo de funcionamiento el Sistema


Andino para la Prevención y Atención de Desastres, concebido como un conjunto
coordinado de instituciones subregionales públicas y privadas que adelantan
programas, planes, proyectos y acciones relacionados con la prevención y atención de
desastres. El Sistema Andino para la Prevención y Atención de Desastres se
estructurará en redes temáticas e institucionales y opera como punto de encuentro para
el intercambio de experiencias y desarrollos metodológicos.

Corresponde al Plan de Acción Andino para la Prevención y Atención de Desastres,


determinar el conjunto de proyectos, acciones y responsabilidades que permitirán
desarrollar la presente Estrategia. Este Plan se elaborará teniendo presente los aportes
realizados en las reuniones de trabajo nacionales que han conducido a esta Estrategia.

En el Plan de Acción se identificarán los principales apoyos extra regionales que


pueden coadyuvar en su desarrollo, las prioridades en la ejecución, los programas que
serán de desarrollo conjunto entre dos o más países y aquellos que son de esfuerzo
individual, así como la oferta y demanda de cooperación horizontal entre países.

La Secretaría General de la Comunidad Andina, a propuesta y en coordinación con el


CAPRADE, podrá establecer convenios de cooperación con los organismos e
instituciones internacionales de cooperación para el desarrollo de esta Estrategia.

4.5.2. Principios Orientadores

La Estrategia Andina acoge, para el desarrollo eficaz de sus programas al interior de los
países y entre ellos, los siguientes principios orientadores:

Responsabilidad Compartida:

Autonomía: la coordinación se sustenta en el respeto de las autonomías nacionales,


para lo cual se deben emplear los instrumentos que permitan una acción sinérgica,
complementaria y articulada.
Transparencia y estabilidad: la construcción y desarrollo de los mecanismos e
instrumentos de coordinación deben fundarse en la claridad de los procesos y la
permanencia de sus reglas.
Consistencia: la articulación de políticas públicas desde las diferentes instancias de
formulación en el ámbito nacional o local, debe buscar una coherencia entre las
medidas adoptadas para un mismo territorio, así como para aquellos que tienen una
dependencia económica, social, cultural o física, entre sí.
- 25 -
Elasticidad: este principio reconoce la diversidad regional y local, con lo cual establece
que las acciones de coordinación deben ser flexibles para ajustarse a escenarios
cambiantes en aspectos administrativos, físicos, políticos, sociales y económicos. Es
una forma de decir que a pesar de la similitud de los problemas en las regiones y
localidades, sus soluciones deben ser ajustables a las especificidades locales.
Ascendente endógeno: se busca que las políticas regionales partan de los recursos
endógenos locales, en otras palabras, este desarrollo debe partir de un equilibrio entre
las potencialidades endógenas y exógenas, buscando que el crecimiento dependa del
aprovechamiento racional de los recursos y las capacidades locales.
Continuidad: los instrumentos y mecanismos que se acuerden en una región buscarán
su permanencia a través del compromiso político de sus dirigentes, lo anterior, con el fin
de consolidar y legitimar los procesos.
Participación: los procesos, mecanismos e instrumentos, deben involucrar a la
sociedad civil, con el fin de que sea ella el principal actor en la identificación de
necesidades, definición de prioridades y en el seguimiento y control de los acuerdos
alcanzados.
Evaluación: las medidas, instrumentos, mecanismos, procesos o acuerdos deberán
tener como característica principal, que éstos puedan ser objeto de seguimiento y
evaluación.
Integralidad: principio tratado en el desarrollo regional, consistente en asociar las
acciones de acuerdo con una gestión coherente y articulada para evitar despilfarros,
pérdidas de energía y disfunciones.
Asociativo: el desarrollo regional no sólo compete a las instituciones en sus diferentes
niveles, sino que también es el resultado de los acuerdos entre y con el sector privado.

4.6. El Proceso de Formulación de la Estrategia Andina

La Estrategia Andina se sustenta en una valiosa experiencia de las entidades que


tradicionalmente pertenecen a la prevención y atención de desastres y de otras que se
aproximan por primera vez a esta responsabilidad pública; ha sido construida con base
en un amplio proceso de participación y de discusiones nacionales que ha involucrado
alrededor de 500 funcionarios y 300 entidades nacionales en los cinco países de la
Subregión, donde han participado entidades de planeación nacional, instituciones
nacionales de defensa y protección civil, Ministerios de Relaciones Exteriores y de
sectores como salud, ambiente, agua y saneamiento, vialidad y transporte,
agropecuario, energía, organismos operativos, entidades del conocimiento científico,
gobiernos y organizaciones regionales y locales, organizaciones comunitarias e
internacionales.

4.7. Lineamientos de Política

Los principales fundamentos de política de la Estrategia Andina se sintetizan en las


siguientes apreciaciones.

Es esencial para la Estrategia Andina que las políticas y estrategias nacionales,


territoriales y sectoriales de prevención y atención de desastres nutran los planes
nacionales, territoriales y sectoriales de desarrollo y que se consideren en éstos las
relaciones entre el medio ambiente y riesgos, y que se fortalezcan los sistemas de
prevención y atención de desastres así como los organismos nacionales de
planificación o los encargados de estos temas.
- 26 -
Es una herramienta fundamental de la reducción de riesgos la promoción y coordinación
de las políticas y programas de investigación científica y tecnológica, la difusión de
información y la socialización del conocimiento, así como la preservación y
sistematización de la información científica existente y la que se ha de producir.

Es política de la Subregión buscar que cada individuo asuma un papel activo y


responsable en sus condiciones de la seguridad personal, familiar y comunitaria. Es
papel de los medios de comunicación social estar en sintonía con el nuevo enfoque de
la temática en la Subregión, a fin de promover la cultura de la prevención.

Los países buscarán otorgar a las administraciones subnacionales las herramientas


jurídicas, financieras y técnicas necesarias para cumplir con las funciones de
ordenamiento del territorio, control del uso del suelo, manejo de zonas de riesgos y
todas aquellas necesarias para la prevención y atención de desastres. Es política
subregional mejorar considerablemente los mecanismos de rendición de cuentas de las
autoridades en los diferentes niveles de responsabilidad.

La Estrategia Andina buscará mejorar considerablemente la prevención y atención de


desastres a través del fortalecimiento institucional, financiero y técnico de las entidades
rectoras y coordinadoras de los sistemas nacionales responsables de estas tareas.

La eficiente atención de los desastres demandará un salto en el grado de preparación y


respuesta con la disposición de recursos con los que cuenta cada país, haciendo
necesario invertir en la capacidad administrativa, logística, financiera y técnica, así
como el desarrollo de un marco normativo que le otorgue toda la fortaleza necesaria a
las entidades operativas para la atención de desastres.

Es parte integral de la Estrategia el desarrollo de políticas, planes, programas,


proyectos y acciones que orienten los procesos de reconstrucción postdesastre; con el
fin de evitar una reconstrucción que reproduzca o incremente la vulnerabilidad ya
evidenciada, y así como inconvenientes improvisaciones en el diseño y puesta en
marcha de procesos de esta naturaleza y procurando, en lo sucesivo, evitar la tardanza
en la respuesta de los Estados, los costos excesivos y los procesos antitécnicos de
reconstrucción.

5. Estrategias Sectoriales

La Estrategia Andina asume que el desafío de la prevención y atención de desastres es


una responsabilidad multidimensional que requiere respuestas intersectoriales,
interdisciplinarias e interterritoriales. La prevención y atención de desastres plantea que
sean las mismas entidades del desarrollo las responsables de asumir la incorporación
del tema en la planificación y la gestión de su propio sector, en concordancia con las
políticas nacionales de prevención y atención de desastres de cada país.

La Estrategia Andina señala un conjunto de líneas estratégicas comunes para todos los
sectores del desarrollo y otras de carácter específico. Estos lineamientos estratégicos
no son limitativos y los programas y subprogramas que se deriven de ellas deben
incorporarse a los ejes temáticos.

5.1. Líneas Estratégicas Sectoriales Comunes

Línea 1. Análisis de las amenazas y vulnerabilidades.


- 27 -
Línea 2. Evaluación de los impactos socioeconómicos generados como consecuencia
de los desastres que afectan o pueden afectar al sector.
Línea 3. Identificación de prioridades de prevención y atención de desastres en el
sector.
Línea 4. Establecimiento de líneas de política de prevención y atención de desastres.
Línea 5. Análisis de la capacidad sectorial para la prevención y atención de desastres.
Línea 6. Formulación y ejecución de planes sectoriales de prevención y atención de
desastres, en concordancia con las políticas nacionales relacionadas con dichos temas.
Línea 7. Promoción de los estudios ambientales y de prevención y atención de
desastres en los proyectos de inversión pública y privada de los diferentes sectores.
Línea 8. Establecimiento de redes andinas para el desarrollo de los programas y
subprogramas de la Estrategia Andina.
Línea 9. Incorporación de la temática de prevención y atención de desastres en los
programas de educación superior y el fomento de líneas de investigación que aporten al
desarrollo de los sectores.
Línea 10. Generación de modelos para el apoyo a las entidades territoriales en la
formulación de planes de contingencia.
Línea 11. Fortalecimiento de los sistemas de alerta y comunicaciones entre los entes
del conocimiento hidrometeorológico y geológico, los planificadores sectoriales y los
actores públicos y privados de los sectores.
Línea 12. Capacitación a los profesionales y consultores en los conceptos de PAD, de
forma que los incorporen dentro del ciclo de los proyectos.

La Estrategia Andina requiere el apoyo de los organismos internacionales para los


diferentes sectores, con la finalidad de contar con su concurso en la asistencia técnica y
financiera para el desarrollo de las líneas estratégicas.

Resulta valioso el apoyo que puedan ofrecer organismos y programas como la FAO, el
PMA, Hábitat, ORAS-CONHU, OPS/OMS, UNESCO, UNETE y PNUMA, entre otros.

5.2. Líneas Estratégicas Específicas

Sector Agropecuario

El objetivo de la prevención y atención de desastres en el sector agropecuario debe


estar orientado a garantizar la seguridad alimentaria en la Subregión, la protección de
calidad de vida campesina, el ambiente, la conservación de inversiones y activos
productivos y la competitividad de la producción y comercialización subregional.

Con relación al último tema, la prevención y atención de desastres constituirá para el


sector una importante ventaja competitiva en el contexto internacional, especialmente
en épocas de crisis por la ocurrencia de eventos de origen natural como el fenómeno El
Niño, o ante la dinámica de cambio climático adverso.

Las líneas estratégicas específicas son:

Línea 1. Promoción de políticas de aseguramiento agropecuario frente a desastres.


Línea 2. Promoción de redes gremiales y de sectores productivos para el intercambio
de información y experiencias.
Línea 3. Promoción de estudios para la implementación de tecnologías apropiadas de
producción y comercialización en zonas afectadas por desastres.
- 28 -
Línea 4. Promoción de políticas del sector agropecuario que incorporen las
consideraciones ambientales y de prevención y atención de desastres.

Sector Agua y Saneamiento Básico

La finalidad del abordaje sectorial es reducir los riesgos de desastres naturales que
afectan la prestación de los servicios, así como evitar que la deficiente infraestructura
sectorial sea generadora de riesgos. Se debe tener particular atención a la atracción de
población hacia zonas con amenazas/peligros, lo que requiere articular la planificación
sectorial con las políticas de ordenamiento del territorio.

Las líneas estratégicas específicas son:

Línea 1. Diseño de metodologías para el manejo de cuencas hidrográficas


abastecedoras de acueductos, así como para incorporar en los planes de ordenamiento
territorial criterios para la localización de infraestructura de agua y saneamiento desde
el punto de vista de riesgos y vulnerabilidades.
Línea 2. Transferencia de tecnologías alternativas y experiencias de proyectos de
prevención, mitigación, preparación, atención de desastres y rehabilitación de los
sistemas de abastecimiento de agua.
Línea 3. Promoción de sistemas de información de prevención y control de la
contaminación del agua para consumo humano.
Línea 4. Promoción de políticas y normas para el manejo de los residuos sólidos y
aguas residuales.
Línea 5. Promoción de normas y criterios técnicos de reducción de vulnerabilidad en los
sistemas de agua potable y saneamiento y desarrollo de planes de prevención y de
emergencia.

Sector Vivienda e Infraestructura

La Estrategia Andina atenderá en forma prioritaria el sector vivienda, en especial sobre


los asentamientos humanos de población de menores ingresos donde se concentran las
mayores vulnerabilidades.

Las líneas estratégicas específicas son:

Línea 1. Armonización a nivel subregional de normas técnicas de construcción de


viviendas seguras.
Línea 2. Generación de una red subregional para sistematizar y socializar estudios y
experiencias de prevención y atención de desastres que contribuyan a la promoción y
divulgación de una política de mejoramiento de vivienda.
Línea 3. Promoción de políticas que incentiven el reforzamiento estructural de
edificaciones esenciales para la reducción de riesgo de desastres.
Línea 4. Actualización e incorporación de la temática de prevención de desastres en los
planes de ordenamiento urbano y en los planes de expansión sectorial.
Línea 5. Formulación de programas para actualizar la información catastral y de
formalización de la propiedad predial, titulación y legalización.
Línea 6. Construcción de una cultura de aseguramiento de edificaciones y de calidad en
la construcción.
Línea 7. Promoción de procesos de formación de mano de obra y asistencia técnica
para la construcción con criterios de calidad y reducción del riesgo.
- 29 -
Sector Salud

El sector salud es especialmente relevante para la Estrategia Andina por su rol vital en
la prevención y atención de los desastres, por las vulnerabilidades de la infraestructura
hospitalaria y por el agravamiento de las condiciones sanitarias y epidemiológicas que
se presentan a raíz de ciertos desastres.

Las líneas estratégicas específicas son:

Línea 1. Formulación de un Plan de Acción Estratégico Andino del Sector Salud de


Preparativos y Respuesta para Emergencias y Desastres.
Línea 2. Desarrollo de modelos de gestión del sector salud que se articulen con
programas ambientales para la reducción de factores de riesgo frente a desastres.
Línea 3. Implementación de modelos de política y metodologías para la elaboración de
planes hospitalarios de emergencia que incorporen la realización de estudios de
vulnerabilidad hospitalaria y promuevan el reforzamiento de los establecimientos de
salud más vulnerables.
Línea 4. Elaboración de guías de uso subregional para el manejo de emergencias.
Línea 5. Apoyo al desarrollo de redes de vigilancia epidemiológicas, apoyo psicosocial,
manejo de suministros médicos de emergencias y evaluación de daños en salud.
Línea 6. Intercambio de experiencias entre países sobre dinámicas y estrategias de
sensibilización comunitaria y promoción en salud para situaciones de desastre.

Sector Vialidad y Transporte

La finalidad del enfoque sectorial es reducir los riesgos de desastres que afectan las
redes viales, así como evitar que la infraestructura vial inconvenientemente localizada o
en condiciones antitécnicas sea generadora de riesgos.

Las líneas estratégicas específicas son:

Línea 1. Compatibilización de normas técnicas del diseño de vías terrestres seguras.


Línea 2. Implementación de mecanismos de control del estado de transitabilidad de los
sistemas viales.
Línea 3. Reducción de vulnerabilidad ante fenómenos naturales y antrópicos en los
servicios de transporte terrestre, aéreo y marítimo.

Sector Energético, Minero e Industrial

Estos sectores son fundamentales para el desarrollo económico y social de la


Subregión y tienen un especial significado por su incidencia en las condiciones
ambientales y de generación de riesgos. De igual forma, son sectores susceptibles a la
ocurrencia de eventos adversos, para lo cual deben desarrollar políticas y programas de
prevención y atención de desastres.

Las líneas estratégicas específicas son:

Línea 1. Promoción de programas de seguridad y responsabilidad industrial.


Línea 2. Promoción de planes de contingencias frente al derrame de hidrocarburos y
otras sustancias tóxicas y emanación de sustancias peligrosas.
Líneas 3. Promoción de planes de contingencias frente a emergencias radiológicas.
- 30 -
Línea 4. Actualización y armonización de los estudios de impacto ambiental teniendo en
cuenta la generación posible de situaciones de riesgo y establecimiento de
responsabilidades de las industrias en la prevención y atención de desastres.
Línea 5. Diseño de metodologías para el manejo de cuencas hidrográficas generadoras
de energía, así como para incorporar en los planes de ordenamiento territorial criterios
para la localización de infraestructura.
Línea 6. Promoción de programas de prevención y atención de desastres en los
sistemas de producción y distribución de gas y otras fuentes de energía.

Comunicaciones

Las líneas estratégicas específicas son:

Línea 1. Promoción de una red de telecomunicaciones para la Subregión que integre los
sistemas nacionales de prevención y atención de desastres.
Línea 2. Creación y/o fortalecimiento de los sistemas de comunicaciones nacionales
para la prevención y atención de desastres.

Medio Ambiente

El objetivo de la prevención y atención de desastres en la gestión ambiental y de los


recursos naturales debe estar orientado a la conservación ambiental y al
aprovechamiento sostenible de la diversidad biológica, a través de los procesos de
manejo integrado de ambientes naturales.

Las líneas estratégicas específicas son:

Línea 1. Definición y promoción de medidas de prevención y atención de desastres en


los programas de conservación de la diversidad biológica, en especial en zonas de
riesgo.
Línea 2. Implementación y promoción de planes de protección al patrimonio natural.
Línea 3. Promoción de planes de prevención y atención de desastres en áreas
naturales protegidas.
Línea 4. Promoción de programas de manejo integrado de ambientes naturales.

Turismo y Comercio

Las líneas estratégicas específicas son:

Línea 1. Definición y promoción de medidas de prevención y atención de desastres en


programas turísticos, en especial en zonas de riesgo.
Línea 2. Implementación y promoción de planes de protección al patrimonio cultural,
histórico e inmueble.
Línea 3. Promoción de planes de prevención y atención de desastres en centros
comerciales, locales deportivos y lugares de afluencia masiva.
Línea 4. Promoción de acuerdos para la asistencia del sector privado en la provisión y
transporte de alimentos, medicinas y suministros en casos de desastres.

Educación

El sector educativo tiene una especial responsabilidad en la promoción y ejecución de la


presente Estrategia Andina, mediante el desarrollo de los programas y subprogramas
- 31 -
conducentes a incorporar la temática de prevención y atención de desastres en la
cultura de los habitantes de la Subregión. Se reitera la necesidad de estructurar
programas de formación y capacitación especializados a los diferentes sectores
institucionales y a la población.

De otro lado, el sector educativo debe asumir la responsabilidad sobre la seguridad


física y funcional de su infraestructura, lo que significa considerar el análisis de riesgos
en sus construcciones, el mantenimiento preventivo y el refuerzo de la infraestructura
educativa.

Las líneas estratégicas específicas son:

Línea 1. Implementación de modelos de política y metodologías para la elaboración de


planes educativos de emergencia que incorporen la realización de estudios de
vulnerabilidad y la promoción del reforzamiento de los establecimientos educativos más
vulnerables.
Línea 2. Definición del papel de la infraestructura educativa en las situaciones de
desastres como albergues temporales y centros de reservas.

6. Ejes Temáticos

Para el logro de los objetivos de la Estrategia se desarrolló un conjunto de ejes


temáticos, compuestos por programas y subprogramas iniciales que responden a líneas
de trabajo consecuentes con las principales necesidades y debilidades diagnosticadas
en la Subregión en la prevención y atención de desastres.

La Estrategia Andina se estructura en 5 ejes temáticos, estrechamente relacionados:

• Fortalecimiento Institucional y/o Creación de las Capacidades a Nivel


Subregional Andino, Nacional y Local.
• Información, Investigación y Desarrollo.
• Evaluación y Monitoreo de Riesgos, Alerta Temprana y Planes Específicos.
• Sensibilización y Fomento de una Cultura de Prevención y Atención de
Desastres y Participación Social.
• Asistencia Mutua en Caso de Desastres.

6.1. Eje Temático No. 1

FORTALECIMIENTO DE LA INSTITUCIONALIDAD Y DE LAS CAPACIDADES A


NIVEL SUBREGIONAL ANDINO, NACIONAL Y LOCAL

Es parte esencial de la Estrategia promover la creación, modernización y fortalecimiento


de mecanismos o esquemas institucionales permanentes de prevención y atención de
desastres, otorgando a las instancias locales y subnacionales funciones crecientes de
responsabilidad y apropiación del tema. La descentralización y el empoderamiento de
las regiones preservarán el principio de unidad y coherencia en los niveles de
planificación y gestión.

Los países andinos requieren consolidar una institucionalidad, tanto pública como
privada, capaz de asumir responsabilidades en la prevención y atención de desastres.
- 32 -
En el ámbito subregional, el fortalecimiento institucional y la creación de capacidades se
construirán a partir de la conformación y puesta en marcha del Sistema Andino para la
Prevención y Atención de Desastres.

Programa 01. Sistema Andino para la Prevención y Atención de Desastres.

El Sistema Andino para la Prevención y Atención de Desastres es el conjunto de redes


institucionales, sectoriales y temáticas, programas, planes y acciones que se realizan
tendientes a desarrollar la Estrategia Andina para la Prevención y Atención de
Desastres.

El Sistema Andino para la Prevención y Atención de Desastres, operará como la


plataforma para la ejecución de la Estrategia y constituye el mecanismo que permitirá el
desarrollo de redes y proyectos comunitarios para la prevención y atención de
desastres, el fortalecimiento de la gestión en cada país, la identificación de criterios de
vulnerabilidad en programas y proyectos de la Comunidad Andina, así como la
incorporación del tema de prevención y atención de desastres en políticas
internacionales de interés andino.

Se hace necesario articular la temática de riesgos con programas y organismos del


Sistema de Integración Andino como el Programa de Competitividad de la CAF, la Red
Andina de Ciudades, el Programa de Desarrollo Fronterizo, la Agenda Social, la Agenda
Ambiental, la Iniciativa para la Integración de la Infraestructura Regional en América del
Sur (IIRSA), la Red de Vigilancia, como parte del Escudo Andino de Salud Pública y la
Atención a la Salud en Fronteras, ORAS, y la Universidad Andina Simón Bolívar, entre
otros.

La puesta en marcha del Sistema Andino para la Prevención y Atención de Desastres


requiere diseñar y acordar un marco institucional de funcionamiento y de coordinación
subregional soportado en redes temáticas y técnicas entre países, así como en políticas
y mecanismos financieros.

Una tarea central del Sistema es abrir y mantener un diálogo permanente con la
cooperación internacional y relaciones con las entidades homólogas como el
CEPREDENAC, CDERA, con asociaciones como la Asociación Iberoamericana de
Organismos Gubernamentales de Defensa y Protección Civil, países y organismos
cooperantes, estrategias como la EIRD-ONU, Organismos del Sistema de Naciones
Unidas como PNUD, UN-OCHA, OMM, organizaciones como la Federación
Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y Media Luna Roja, el CERESIS, el
CIIFEN, el ERFEN y la banca multilateral, entre otras.

La Estrategia Andina procurará tener el acompañamiento de los organismos


internacionales que apoyan los diferentes sectores, con la finalidad de contar con su
concurso en la coordinación y apoyo a la Subregión, en particular para la formulación y
desarrollo de Planes Estratégicos Sectoriales. Resulta valioso el apoyo que pueden
ofrecer organismos como el ORAS-CONHU, OFDA, ECHO, OPS/OMS, FAO, el PMA,
Hábitat, UNESCO y PNUMA, entre otros.

El Plan de Acción identificará los organismos internacionales que pueden constituirse


en socios estratégicos de los diferentes programas y subprogramas de la presente
Estrategia.
- 33 -
Programa 02. Fortalecimiento institucional y diseño de políticas.

Este Programa tiene como finalidad apoyar la creación y actualización de los Sistemas
Nacionales para la Prevención y Atención de Desastres, el fortalecimiento de las
instituciones nacionales tutelares o coordinadoras del tema, así como de los
organismos técnico científicos generadores de información sobre amenazas/peligros y
vulnerabilidades y de las entidades operativas de manejo de emergencias y desastres.

Se impulsará la incorporación adecuada de la temática de riesgos en políticas, leyes y


normas nacionales de carácter general, sectorial y territorial, la articulación de las
políticas de prevención y atención de desastres con las ambientales y la definición e
implementación de políticas o mecanismos financieros nacionales para la prevención y
atención de desastres y procesos de reconstrucción.

La Estrategia promoverá la definición de herramientas idóneas que permitan a cada


país fijar modelos y capacidades de gestión que otorguen a los gobiernos de niveles
nacionales, subnacionales y locales, responsabilidades crecientes y coordinadas de
prevención y atención de desastres, así como el desarrollo de mecanismos de control y
de rendición de cuentas en todos los niveles.

Se definirán políticas y formas de organización frente a los procesos de reconstrucción


que sirvan de referentes ante futuros desastres, teniendo en cuenta la retroalimentación
de experiencias anteriores en la Subregión, especialmente los acontecidos en los
últimos años, producto del fenómeno El Niño y La Niña, los eventos sísmicos,
volcánicos y deslizamientos de terrenos inestables, sequías e inundaciones.

Los países andinos tienen un enorme potencial en los grupos de población que en
forma desinteresada conforman los cuerpos de voluntariado de los organismos de
socorro, pero que necesitan para su desarrollo mejorar los esquemas de organización.

En este sentido, la Estrategia fortalecerá y promoverá marcos nacionales institucionales


y normativos para el desarrollo del voluntariado y los mecanismos de conformación de
grupos especializados que puedan ofrecer su servicio a la Subregión en caso de ser
requeridos.

Programa 03. Desarrollo del sector privado en la prevención y atención de


desastres y relaciones con el sector público.

Los países andinos requieren definir políticas sobre el alcance de la responsabilidad de


los Estados en la atención y recuperación postdesastres, de forma que no se
comprometa recurrentemente la sostenibilidad financiera de cada nación y de que se
logre una participación compartida de responsabilidades en la reducción permanente de
los riesgos, atención y reconstrucción. La definición de las responsabilidades públicas
dará claridad sobre las que le competen al sector privado y a los particulares, a fin de
estructurar los incentivos que motiven las inversiones y decisiones privadas y
particulares en la prevención y atención de desastres.

Se identifica la necesidad de desarrollar políticas de aseguramiento y transferencia del


riesgo para proteger la infraestructura pública y privada, así como los activos y el
desempeño de múltiples sectores del desarrollo, como sucede con el aseguramiento de
la producción agropecuaria.
- 34 -
Esta línea de acción está referida al empoderamiento del sector productivo y de
servicios, para buscar que se realice la evaluación del componente de riesgos en los
proyectos de inversión y en las políticas de expansión; y de otro lado, el desarrollo de
planes de responsabilidad social y de seguridad industrial.

La Estrategia promueve el desarrollo de otros campos de participación del sector


privado, tales como la vinculación de universidades y centros de educación e
investigación en los programas de reducción del riesgo y atención de desastres.

De igual manera, fomenta el desarrollo de programas de prevención y atención de


desastres especialmente importantes para el sector productivo privado, en especial los
alusivos a seguridad industrial, salud ocupacional, programas de responsabilidad
integral, manejo de lugares de afluencia masiva de personas, transporte y manejo de
sustancias peligrosas, entre otros.

Programa 04. Incorporación de la variable riesgo de desastres en la planificación


del desarrollo.

La lógica del proceso de incorporar la variable riesgo de desastres en la planificación


del desarrollo lleva a que, una vez creados los marcos institucionales, las normas y
políticas, el paso subsiguiente consiste en incorporar dicha variable en los planes de
desarrollo nacionales, sectoriales y territoriales, en los planes de ordenamiento territorial
y en los planes específicos de prevención y atención de desastres. Lo anterior exige
una labor de priorización de acciones de acuerdo a la relevancia de los impactos
probables a fin de lograr una mayor efectividad en la aplicación de los esfuerzos y de
recursos de diferente índole.

Estos procesos de planificación demandarán la creación de capacidades y el diseño de


herramientas para la reducción del riesgo y la implementación de sistemas de
indicadores de impactos y de gestión, que podrán ser abordados de forma conjunta por
la Subregión.

Programa 05. Fortalecimiento de los procesos de planificación para la prevención


y atención de desastres.

En razón de la alta relevancia de los riesgos ya existentes en los países de la Subregión


y de los ingentes esfuerzos que exige la reducción de las vulnerabilidades, se requiere
avanzar en un fortalecimiento de los mecanismos que permitan minimizar
eficientemente los daños relacionados con los desastres que continuarán
produciéndose en las zonas de riesgo no manejadas adecuadamente.

La planificación para la atención de los desastres constituye un concepto a ser


abordado con alta prioridad en la Subregión, dando especial énfasis a la participación
sectorial y local en estos procesos, así como a la capacidad de coordinación de los
organismos de respuesta para su formulación y seguimiento.

Programa 06. Regiones estratégicas y ciudades sostenibles.

Una de las formas directas de la integración andina en el tema de la prevención y


atención de desastres se refleja en la tarea de desarrollar acciones coordinadas en las
zonas de frontera, así como en cuencas y espacios comunes.
- 35 -
Otra expresión de la integración entre dos o más países y que tiene mayor potencial de
resultados de aprendizaje y desarrollo común es la conformación de redes de ciudades
para coordinar programas de prevención y atención de desastres. Las similitudes en el
tipo de riesgos que enfrentan ciertas ciudades y las semejanzas en sus estructuras
administrativas y de funcionamiento llevan a que el intercambio de conocimientos y
experiencias sean considerablemente beneficiosos; así, por ejemplo, programas
mundiales del carácter de Ciudades Sostenibles, sirven de referencia y soporte a esta
iniciativa. Ciudades como Bogotá, Lima, Caracas, La Paz, Quito pueden ser base de
esta línea de acción; ciudades intermedias, menores o fronterizas, según el nivel de
riesgo, también pueden ser abordadas con estudios y mapas temáticos para la
prevención y atención de desastres, con miras al mejor ordenamiento territorial a
niveles locales.

6.2. Eje Temático No. 2

INFORMACIÓN, INVESTIGACIÓN Y DESARROLLO

La producción y uso de información sobre los riesgos constituye un insumo fundamental


de los procesos de planificación para la prevención y atención de desastres.

El desarrollo de sistemas de información, la conformación de redes de investigación, la


transferencia de experiencias y un mayor acceso a los datos y la información relevantes
a través de la sistematización coherente son las herramientas organizativas esenciales
para la reducción de los desastres en el Siglo XXI.

Programa 07. Sistemas de Información.

En esta línea se pretende fortalecer en los países los mecanismos de generación,


sistematización, conservación y difusión de información adecuada, oportuna y
sistemática conducente a ser aplicada para apoyar la planificación del desarrollo y de la
prevención y atención de desastres y, en general, el conocimiento y la toma de
decisiones.

A nivel subregional se buscará la normalización y estandarización de procedimientos


para producir, conservar e intercambiar información, así como fortalecer instituciones a
ese nivel que propicien este tipo de procesos. A cada país corresponde la creación de
sistemas de información nacionales para la prevención y atención de desastres que
sean compatibles con los demás sistemas de la Subregión y con posibilidad de estar
conectados, según lo demanden las redes temáticas.

Programa 08. Fortalecimiento de la ciencia y la tecnología.

Para la implementación de la presente Estrategia es necesario contar con redes


subregionales de investigación que promuevan la elaboración de estudios sísmicos,
volcánicos, tsunamigénicos, hidrometeorológicos, antrópicos, entre otras amenazas en
la Subregión.

El Programa impulsará la conformación y desarrollo de redes o nodos de investigadores


temáticos, sectoriales y por áreas geográficas de interés, para lo cual realizará un
inventario y acreditación de investigadores y consultores en prevención y atención de
desastres. Este Programa generará los mecanismos para la integración, intercambio y
socialización de programas de investigación locales y subregionales.
- 36 -
La Subregión dará apoyo al funcionamiento de los centros de investigación de influencia
andina, promoviendo la adecuada articulación de éstos con las entidades del
conocimiento nacionales y las redes del Sistema Andino para la Prevención y Atención
de Desastres. Se fortalecerá y armonizará el trabajo entre otros, del Centro
Internacional de Investigaciones sobre el Fenómeno El Niño (CIIFEN), del Programa de
Estudio Regional del Fenómeno El Niño (ERFEN) de la Comisión Permanente del
Pacífico Sur (CPPS) y del Centro Regional de Sismología (CERESIS). Los gobiernos de
los países procurarán apoyar la operación de los centros de acuerdo a los convenios
establecidos. Además buscarán implementar incentivos para investigación y desarrollo
tecnológico de los temas relacionados con la prevención y atención de desastres.

Programa 09. Normas jurídicas, técnicas y metodologías de referencia común.

El fortalecimiento institucional y el desarrollo de los procesos de planificación con el


componente de riesgos y atención de desastres demanda que cada país disponga de
herramientas normativas jurídicas y técnicas, metodologías y prácticas de referencia
común que sustenten esta finalidad.

Este Programa promoverá que los países andinos produzcan e intercambien el conjunto
de herramientas y modelos más relevantes para su desarrollo, en particular las normas
jurídicas y técnicas, metodologías para evaluación de amenazas, análisis de
vulnerabilidades, riesgos e impactos socioeconómicos y metodologías de planificación
territorial, urbana y sectorial, que armonicen a nivel Subregional, entre otras: las normas
técnicas de construcción de viviendas para certificación de sismoresistencia, las normas
técnicas del diseño de vías terrestres y la provisión de herramientas metodológicas para
la localización, evaluación de impactos y un sistema de indicadores para su medición.

En el caso de la preparación y atención de desastres se requiere compartir las


metodologías para los procedimientos de atención de emergencias, así como el
desarrollo y adopción de una terminología común para la preparación y atención de
desastres.

Programa 10. Estudios especiales.

El trabajo conjunto de los países andinos puede tener una destacada eficacia en el
desarrollo de estudios que beneficien a dos o más países de la Subregión. Algunas de
las áreas de mayor interés de estudio están en la ampliación y mejoramiento del
conocimiento sobre cambio climático, fenómeno El Niño y retroceso glaciar, y el estudio
que relacione el medio ambiente y desastres.

En el campo social, pueden resultar especialmente valiosos los estudios de las


relaciones entre pobreza y desastres y los alusivos a información histórica sobre
desastres en la Subregión.

Programa 11. Proyectos piloto.

Para temas de investigación de interés común a los países se promoverá el desarrollo


de proyectos piloto que permitan adquirir nuevos conocimientos y ser difundidos en
diferentes países con problemáticas similares.

Especial énfasis se dará al desarrollo del conocimiento de las relaciones de causa-


efecto, entre fenómenos naturales y las diferentes actividades afectadas, tanto en
- 37 -
términos de sensibilidad de estas últimas frente a los fenómenos anómalos como a la
generación de efectos intermedios que generan impactos sobre los mismos.

Experiencias específicas con el carácter de pilotos de nivel local y comunal, tanto en el


campo de la reducción de vulnerabilidades como de atención en sus diversas temáticas,
tendrán también una focalización prioritaria.

6.3. Eje Temático No. 3

IDENTIFICACION, EVALUACIÓN Y MONITOREO DE RIESGOS, ALERTA


TEMPRANA Y PLANES ESPECIFICOS

La evaluación y vigilancia de las amenazas y los riesgos, difusión de pronósticos y el


manejo de alertas son herramientas básicas para la realización de planes de
preparación para las emergencias y contingencias en los niveles subregional, nacional,
subnacional y local tendientes a la reducción de los impactos de los desastres.
Igualmente, sirven para priorizar las acciones de reducción de vulnerabilidades en el
ámbito del desarrollo sostenible.

Programa 12. Desarrollo de un sistema coordinado de redes de vigilancia de


riesgos y sistemas de alerta.

Estos sistemas son relevantes, tanto por su papel en el manejo de la preparación frente
a situaciones inminentes de desastres, como por la información histórica que derivan de
su manejo como base para el desarrollo del conocimiento sobre el comportamiento de
los fenómenos naturales y de los riesgos asociados a los mismos.

Para el monitoreo y seguimiento de eventos geológicos se hace necesario el desarrollo


y/o fortalecimiento de un sistema coordinado de redes de vigilancia y sistemas de
alerta, tales como las redes sismológicas y vulcanológicas nacionales. El
funcionamiento de estas redes puede articularse con los aportes del Centro Regional de
Sismología (CERESIS).

Para la vigilancia de inundaciones y sequías se hace necesario el fortalecimiento de las


redes de alertas hidrometeorológicas y oceanográficas nacionales con criterios de
complementariedad, apoyo y cooperación subregional. Para el desarrollo de estudios
subregionales es importante la coordinación de las redes con el Estudio Regional para
el Fenómeno de El Niño (ERFEN) y el Centro de Información Internacional sobre el
Fenómeno de El Niño (CIIFEN).

Para la vigilancia de tsunamis es necesario el desarrollo de la red de alerta de tsunamis,


enlazada con el PTWC- Pacific Tsunami Warning Center, fenómeno a tener en cuenta
especialmente en la costa Pacífica de Colombia, Ecuador y Perú.

La existencia de estas redes y sus complementarias en cada uno de los países se


justifica y soporta en la medida en que se desarrollen sistemas de comunicaciones para
la emisión de la alerta tanto para las autoridades encargadas de la toma de decisiones,
como para la comunidad que se encuentran en riesgo.

En el marco de las acciones regionales se promoverá el fortalecimiento y modernización


tecnológica de los sistemas de alerta y comunicaciones entre los entes del
- 38 -
conocimiento científicos, los planificadores de los Sectores y los prestadores de los
servicios.

Programa 13. Planes de respuesta específicos.

Los múltiples desastres que pueden ocurrir en la región Andina hacen necesaria la
realización de planes de emergencias y contingencias como elementos centrales de la
preparación frente a los desastres, para lo cual es necesario desarrollar metodologías
para la elaboración y evaluación de planes de emergencia y contingencias nacionales y
locales. Se recomienda desarrollar conjuntamente una serie de metodologías de uso
común para la realización de planes de emergencia y contingencia a escala
subnacional, nacional y subregional.

La Estrategia Andina promoverá el desarrollo de planes de emergencias y


contingencias en áreas fronterizas de interés común.

6.4. Eje Temático No. 4

FOMENTO DE UNA CULTURA DE PREVENCION CON PARTICIPACIÓN SOCIAL.

Es esencial fomentar y fortalecer la cultura de prevención en la población y su


socialización a múltiples sectores de la sociedad, con especial énfasis en los grupos
más vulnerables.

Un punto central de este Eje Temático es promover e incentivar que los actores sociales
involucrados con los sistemas de ciencia, tecnología y educación superior de cada país
asuman un papel proactivo en la producción de conocimiento sobre amenazas/peligros,
vulnerabilidades y riesgos y la transferencia de información y capacidades a sus
comunidades educativas y científicas, a los sectores público y privado y a los procesos
de planificación y toma de decisiones así como a la población en general.

Programa 14. Visibilidad de la estrategia andina para la prevención y atención de


desastres.

Para el desarrollo de la Estrategia y el logro de sus finalidades es necesario lograr


procesos sistemáticos de sensibilización de líderes políticos y tomadores de decisiones
territoriales y nacionales frente a las políticas, planes y programas de prevención y
atención de desastres aquí mencionados.

Programa 15. Fortalecimiento de la Educación Superior y Transferencia del


conocimiento.

Un punto central de este Programa es promover que los actores involucrados con los
sistemas de ciencia, tecnología y educación superior de cada país asuman un papel
proactivo en la producción de conocimiento sobre riesgos y en la transferencia de
información y capacidades a sus comunidades educativas y científicas, al sector privado
y a los procesos de planificación y toma de decisiones.

En esta línea de acción se promoverá la incorporación de la gestión del riesgo en la


formación profesional de pregrado y postgrado en centros educativos públicos y
privados, mediante la investigación, diseño y producción de contenidos y propuestas
curriculares básicas, guías, cursos y estándares de formación en áreas del
- 39 -
conocimiento de ingenierías, geociencias, ciencias sociales y de la salud, inicialmente.
Esta iniciativa puede ser adelantada como un proyecto común a los países, que se
logrará mediante el diseño de los contenidos y las metodologías.

Otra de las acciones específicas consiste en la promoción de programas de educación


superior enfocados en la gestión de riesgos como el desarrollo de programas de
diplomado, maestrías y doctorado; acciones que pueden ser estructuradas como un
proyecto común a los países andinos, así como la capacitación de profesionales y
consultores en los conceptos de prevención y atención de desastres, de forma que los
incorporen dentro del ciclo de proyectos.

Programa 16. Incorporación de la prevención y atención de desastres en la


educación básica, media y sus correspondientes en los países.

El desarrollo de valores sociales inherentes a la prevención y atención de desastres,


tales como la solidaridad, la responsabilidad social y el sentido de pertenencia, deben
lograrse a través de un proceso formativo estructurado que involucre dinámicas
pedagógicas cognitivas, emocionales y conductuales de las comunidades educativas.
Esta tarea de construcción de la cultura de la prevención demanda la incorporación del
tema de riesgos en la formación de la educación básica y media.

En este sentido, la Estrategia promoverá la creación de una red de investigación


pedagógica, que articule el trabajo con docentes y expertos en educación, el desarrollo
de proyectos de investigación y el diseño de metodologías para la inclusión del
conocimiento de riesgos en programas y sistemas curriculares.

Cada país promoverá el desarrollo de programas nacionales de formación en


prevención y atención de desastres y planes escolares de emergencias y contingencias.
Durante el desarrollo de estos programas, los países realizarán un Concurso o
Programa Escolar para promover la realización de procesos educativos formales y no
formales, en el tema, y el entrenamiento en planes escolares de emergencias.

Programa 17. Desarrollo de una red andina de capacitación.

Para optimizar y ampliar los procesos de capacitación que se realizan en la Subregión


Andina se requiere definir criterios para focalizar mejor los potenciales beneficiarios de
la capacitación y, a su vez, poder garantizar la calidad de los procesos de formación.

Para este fin, la Estrategia promoverá el diseño y estandarización de contenidos y


metodologías de capacitación, la definición de parámetros de medición de la efectividad
y calidad de la formación, actividades que deberán ser adelantadas como un proyecto
subregional.

Los países estructurarán procesos de capacitación especializados con énfasis en los


siguientes grupos focales: planificadores, funcionarios de instituciones de Defensa y
Protección Civil, técnicos de entidades del conocimiento científico, comunicadores
sociales y periodistas.

Se identifica la necesidad de capacitar a docentes en la temática y, para ello, se


desarrollará un proyecto de formación de formadores o facilitadores, que tendrá por
objeto poner en marcha espacios de capacitación dirigidos a docentes universitarios y
escolares.
- 40 -
Programa 18. Comunicación e información pública.

Este Programa promueve que, en forma integrada, los países definan criterios para el
manejo de la información en situaciones de emergencias y desastres y acerca de la
responsabilidad social de los medios de comunicación masiva.

Cada país podrá desarrollar programas de información pública alusivos a temas vitales,
tales como las normas y recomendaciones sobre la prevención y atención de desastres,
la diversidad de las amenazas y las vulnerabilidades.

El Sistema Andino para la Prevención y Atención de Desastres promoverá el desarrollo


de instrumentos básicos de información y comunicación, tales como bibliotecas y/o
centros de documentación virtuales, una revista andina de reducción de riesgo y
atención de desastres, un centro de documentación virtual y un sitio de información
Web sobre mapas de amenazas/peligros y vulnerabilidades y otros contenidos
relacionados.

Programa 19. Participación comunitaria.

Es fundamental para la Estrategia, impulsar la participación comunitaria en la reducción


del riesgo y la atención de los desastres, para lo cual se promoverá que las políticas y
los espacios de participación comunitaria en cada país se articulen con las políticas
nacionales de prevención y atención de desastres y con la estructura de los sistemas
nacionales institucionales relacionados con el tema, siendo necesario compartir
experiencias entre los países sobre dinámicas y estrategias de sensibilización
comunitaria.

Se buscará que las administraciones territoriales ofrezcan espacios de participación de


las comunidades en los procesos de prevención y atención de desastres, especialmente
en los grupos de población más vulnerables.

De igual forma se promoverán y fortalecerán metodologías y proyectos de capacitación


comunitaria mediante la promoción de subprogramas de sensibilización y capacitación a
líderes comunales, gremiales y autoridades políticas en los diferentes niveles
territoriales y se buscará que la sociedad civil participe a través de mecanismos de
control o veedurías ciudadanas y en procesos de rendición de cuentas en la prevención
y atención de desastres.
Las políticas y medidas para reducir el riesgo de los desastres deben implementarse
con un doble propósito: facultar a las sociedades para ser resilientes a las amenazas y
estar preparadas para las emergencias y garantizar que los esfuerzos por el desarrollo
no incrementen su vulnerabilidad.

6.5 Eje Temático No. 5

ASISTENCIA MUTUA EN CASOS DE DESASTRE

La asistencia mutua en casos de desastre constituye un eje que debe convertirse en el


instrumento de los Países Andinos para hacer frente a las situaciones de emergencia o
desastre que ocurran en uno o más países y que no puedan ser afrontadas o resueltas
en su totalidad nacionalmente, y que requieran por tanto, de la ayuda solidaria y
humanitaria de los países andinos y, en su caso, de la comunidad internacional,
- 41 -
situación que será calificada por el país o países que sufran el desastre; y soliciten
expresamente la asistencia.

Programa 20. Establecimiento de un marco normativo y técnico en los países de


la Subregión para facilitar la canalización de la asistencia mutua en caso de
desastres.

Definir un marco jurídico e institucional subregional que haga funcional la atención de


desastres y la asistencia mutua, como el establecimiento de regímenes aduaneros y
migratorios específicos y adecuados en caso de desastres.

Por otro lado, para hacer que la ayuda prestada sea realmente coordinada, efectiva y
acorde con los requerimientos del país afectado, se plantea la normalización
subregional de procedimientos, estándares operativos, protocolos y la correspondiente
adaptación nacional para enfrentar las situaciones de emergencias y desastres.

Estos instrumentos y herramientas serán específicos para los casos de frontera donde
la cercanía permite el rápido desplazamiento y la asistencia oportuna requerida por el
país vecino.

Programa 21. Establecimiento de redes subregionales de operaciones para


emergencias y desastres.

Este Programa promoverá la creación y establecimiento de una red de recursos y


apoyos para emergencias sustentada por convenios subregionales de tipo público y
privado que incluya aspectos como la evaluación de daños, las operaciones
especializadas como las de evacuación, búsqueda y rescate, la entrega de ayuda
humanitaria y suministros, así como la asistencia de salud.

Entre otros mecanismos y herramientas que se recomiendan desarrollar son la


instalación de redes nacionales de comunicación para emergencias y desastres con
enlaces subregionales y la existencia de centros de acopio y reservas nacionales
(almacenes) que sirvan eventualmente de apoyo ante las situaciones de emergencia y
desastres en otros países de la Subregión.
- 42 -

Programas y Subprogramas

EJE TEMATICO No. 1: FORTALECIMIENTO DE LA INSTITUCIONALIDAD Y DE LAS


CAPACIDADES A NIVEL SUBREGIONAL ANDINO, NACIONAL Y LOCAL.

Subprograma 01. Diseño del marco institucional de


funcionamiento y de coordinación subregional.
Subprograma 02. Creación y funcionamiento de redes
temáticas y técnicas subregionales.
Subprograma 03. Definición e implementación de
políticas o mecanismos financieros para el Sistema
Programa 01. Sistema Andino para la
Andino para la Prevención y Atención de Desastres.
Prevención y Atención de Desastres
Subprograma 04. Promoción de la incorporación de la
temática de la prevención y atención de desastres en las
políticas, programas y proyectos de la Comunidad
Andina y de carácter internacional.
Subprograma 05. Normativa subregional para reducción
de la vulnerabilidad.
Subprograma 01. Creación y/o actualización de los
Sistemas Nacionales para la Prevención y Atención de
Desastres.
Subprograma 02. Modernización y fortalecimiento de las
instituciones tutelares o coordinadoras de la para la
Prevención y Atención de Desastres en cada país de la
Subregión.
Subprograma 03. Modernización y fortalecimiento de las
instituciones técnico científicas nacionales generadoras
de información sobre riesgos.
Subprograma 04. Actualización y articulación a escala
nacional de las entidades operativas de atención de
emergencias.
Subprograma 05. Incorporación de los conceptos de
reducción de riesgos y atención de desastres en
políticas, leyes y normas de carácter sectorial y territorial.
Programa 02. Fortalecimiento
Subprograma 06. Desarrollo de marcos nacionales
Institucional y Diseño de Políticas
institucionales y normativos para el fortalecimiento del
voluntariado.
Subprograma 07. Definición e implementación de
políticas públicas y mecanismos financieros nacionales
para la prevención, mitigación, preparación, atención de
desastres, rehabilitación y reconstrucción.
Subprograma 08. Desarrollo de las capacidades de
reducción del riesgo y atención de desastres de
municipios y niveles subnacionales.
Subprograma 09. Desarrollo de mecanismos de control y
rendición de cuentas de la gestión en diferentes niveles
territoriales.
Subprograma 10. Articulación de las políticas de
prevención y atención de desastres con las ambientales.
Subprograma 11. Definición de políticas públicas frente a
procesos de reconstrucción.
- 43 -

Subprograma 01. Delimitación y definición de


responsabilidades de los sectores público y privado en la
prevención, mitigación, preparación, atención de
desastres, rehabilitación y reconstrucción.
Programa 03. Desarrollo del sector Subprograma 02. Promoción de políticas y programas de
privado en la reducción de riesgos, aseguramiento público y privado.
atención de desastres y relaciones con Subprograma 03. Articulación de las políticas y los
el sector público programas de seguridad industrial con la prevención y
atención de desastres.
Subprograma 04. Vinculación de universidades y centros
de educación e investigación privada en las políticas y
programas de reducción de desastres.
Subprograma 01. Desarrollo de capacidades y
herramientas en la reducción del riesgo en las entidades
de planificación del desarrollo y las de carácter sectorial.
Subprograma 02. Incorporación adecuada de la temática
de prevención y atención de desastres en los planes
Programa 04. Incorporación de la nacionales de desarrollo, de ordenamiento del territorio
variable riesgo de desastres en la
nacional y realización de planes específicos.
planificación del desarrollo
Subprograma 03. Incorporación de la variable riesgo de
desastres en la planificación nacional, subnacional,
sectorial y municipal en los proyectos de inversión.
Subprograma 04. Definición e implementación de
sistemas de indicadores de impactos y gestión.
Subprograma 01. Desarrollo de planes nacionales,
Programa 05. Fortalecimiento de los sectoriales y territoriales de prevención.
Procesos de Planificación para la Subprograma 02. Desarrollo de planes de atención de
Prevención y Atención de Desastres desastres.
Subprograma 03. Desarrollo de planes de contingencias.
Subprograma 01. Promoción de Proyectos conjuntos en
Cuencas, Espacios Comunes y Zonas de Frontera.
Programa 06. Regiones estratégicas y
Ciudades Sostenibles Subprograma 02. Promoción de la cooperación
horizontal y establecimiento de Proyectos de redes
Ciudades Sostenibles.
- 44 -

EJE TEMATICO No. 2: INFORMACIÓN, INVESTIGACIÓN Y DESARROLLO.

Subprograma 01. Normalización y estandarización de


procedimientos para generar e intercambiar la
información.
Programa 07. Sistemas de Información
Subprograma 02. Creación de sistemas de información
nacionales para la prevención y atención de desastres,
compatibles e interrelacionados.
Subprograma 01. Implementación y fortalecimiento de
Redes Subregionales de Investigación del Fenómeno El
Niño. Apoyo subregional al CIIFEN y al ERFEN.
Subprograma 02. Promoción de redes de estudios sísmi-
cos, hidrometeorológicos, volcánicos, tsunamigénicos, an-
trópicos, entre otras amenazas/peligros de la Subregión.
Subprograma 03. Integración y socialización de
Programa 08. Fortalecimiento de la programas de investigación locales y subregionales.
Ciencia y la tecnología Subprograma 04. Conformación y desarrollo de redes o
nodos de investigadores temáticos, sectoriales y por
áreas geográficas de interés, que incluya a las
universidades y otros centros de investigación públicos y
privados.
Subprograma 05. Inventario y acreditación de
investigadores y consultores en prevención y atención de
desastres.
Subprograma 01. Elaboración de herramientas Jurídicas
de Referencia Común.
Subprograma 02. Definición y aplicación de
metodologías para identificación de amenazas/peligros,
análisis de vulnerabilidades, evaluación de riesgos e
impactos socioeconómicos.
Programa 09. Normas Jurídicas,
Subprograma 03. Definición y aplicación de metodo-
Técnicas y Metodologías de Referencia
logías de planificación territorial, urbana y sectorial.
Común
Subprograma 04. Aplicación de metodologías para la
atención de emergencias.
Subprograma 05. Intercambio y desarrollo de estándares
y normas técnicas.
Subprograma 06. Desarrollo y adopción de una termino-
logía común para la prevención y atención de desastres.
Subprograma 01. Promoción, ampliación y mejoramiento
de estudios de cambio climático y retroceso glaciar,
vulnerabilidades e impacto socio económico en los
países de la Subregión.
Subprograma 02. Promoción de estudios de relaciones
Programa 10. Estudios Especiales entre el medio ambiente y la prevención y atención de
desastres.
Subprograma 03. Promoción de estudios de las
relaciones entre pobreza y desastres en la Subregión.
Subprograma 04. Promoción de estudios de información
histórica sobre desastres en la Subregión.
Subprograma 01. Identificación y desarrollo de proyectos
Programa 11. Proyectos Piloto
piloto.
- 45 -

EJE TEMÁTICO No. 03: IDENTIFICACION, EVALUACIÓN Y MONITOREO DE RIESGOS, ALERTA


TEMPRANA Y PLANES ESPECÍFICOS.

Subprograma 01. Creación y/o fortalecimiento de redes


sismológicas, vulcanológicas nacionales con criterios de
complementariedad y apoyo subregional.
Subprograma 02. Creación y/o fortalecimiento de redes
Programa 12. Desarrollo de un Sistema de alertas sobre amenazas/peligros hidrometeorológicos
Coordinado de Redes de Vigilancia de y oceanográficos nacionales con criterios de
Riesgos y Sistemas de Alerta. complementariedad y apoyo subregional.
Subprograma 03. Fortalecimiento de la Red de alerta de
los tsunami.
Subprograma 04. Definición e implementación de
mecanismos de comunicación de alertas.
Subprograma 01. Promoción de metodologías de planes
de emergencia y contingencia por eventos.
Programa 13. Planes de Respuesta Subprograma 02. Desarrollo de planes de emergencias y
Específicos contingencia en áreas de interés común.
Subprograma 03. Promoción de planes locales e
institucionales de emergencias.
- 46 -

EJE TEMÁTICO No. 04: FOMENTO DE UNA CULTURA DE PREVENCIÓN CON


PARTICIPACIÓN SOCIAL.

Subprograma 01. Sensibilización de líderes políticos


Programa 14. Visibilidad de la Estrategia
subregionales y nacionales frente a las políticas, planes y
Andina para la Prevención y Atención de
programas de la Estrategia Andina para la Prevención y
Desastres
Atención de Desastres.
Subprograma 01. Acciones estratégicas para la
Incorporación de la gestión riesgo y atención de
desastres en la formación profesional superior.
Programa 15. Fortalecimiento de la Subprograma 02. Diseño y elaboración de contenidos,
educación superior y transferencia del guías, cursos y estándares de formación a programas de
conocimiento educación superior para la prevención y atención de
desastres.
Subprograma 03. Desarrollo de postgrados
especializados en la gestión del riesgo.
Subprograma 01. Diseño de mecanismos para la
Incorporación de la prevención y atención de desastres
en educación básica y media.
Subprograma 02. Investigación y desarrollo de
Programa 16. Incorporación de la metodologías para inserción del conocimiento sobre
prevención y atención de desastres en desastres en programas y sistemas curriculares.
la educación básica, media y sus
correspondientes en los países Subprograma 03. Implementación de una Red de
investigación pedagógica, trabajo con docentes y
expertos en educación.
Subprograma 04. Elaboración de Planes escolares de
emergencias y contingencias.
Subprograma 01. Diseño y estandarización de
metodologías de capacitación, para la prevención y
atención de desastres.
Subprograma 02. Definir un sistema de medición de la
efectividad con estándares e indicadores para
seguimiento, evaluación y control.
Subprograma 03. Capacitación a instituciones de
Planificación del Desarrollo.
Programa 17. Desarrollo de una red
andina de capacitación Subprograma 04. Capacitación a entidades del
conocimiento científico.
Subprograma 05. Capacitación a organismos de
prevención y atención de desastres.
Subprograma 06. Capacitación comunitaria.
Subprograma 07. Capacitación a los comunicadores
sociales y periodistas.
Subprograma 08. Formación de formadores.
- 47 -
Subprograma 01. Estandarización de metodologías de
información y procedimientos para el manejo de
emergencias y desastres.
Subprograma 02. Definición de mecanismos y
herramientas de información sobre la normatividad, así
como difundir los incentivos acordados para motivar la
Programa 18. Comunicación e prevención en sectores como vivienda, servicios públicos
Información Pública. y agua potable entre otros.
Subprograma 03. Socialización de la Información a
través de bibliotecas virtuales.
Subprograma 04. Diseñar, estructurar y poner en marcha
la revista andina de prevención y atención de desastres.
Subprograma 05. Creación de un Centro de documenta-
ción virtual subregional.
Subprograma 01. Promoción de la participación comuni-
taria en la prevención y atención de desastres.
Subprograma 02. Promoción de espacios de participa-
Programa 19. Participación Comunitaria ción de las comunidades en las administraciones muni-
cipales para los procesos de prevención, mitigación,
preparación, atención de desastres, rehabilitación y
reconstrucción.
- 48 -

EJE TEMÁTICO No. 05: ASISTENCIA MUTUA EN CASOS DE DESASTRE.

Subprograma 01. Definición de un marco jurídico e


institucional subregional que haga funcional la atención
de desastres y la asistencia mutua.
Subprograma 02. Promover el establecimiento de proce-
Programa 20. Establecimiento de un dimientos aduaneros y migratorios específicos y adecua-
marco normativo y técnico en los países dos para la asistencia mutua en caso de desastres.
de la Subregión para facilitar la Subprograma 03. Normalización subregional de
canalización de asistencia mutua en procedimientos, estándares operativos, protocolos y la
caso de desastres correspondiente adaptación nacional para situaciones de
emergencias y desastres.
Subprograma 04. Impulsar el desarrollo de
procedimientos específicos de asistencia mutua en
zonas fronterizas de los países andinos.
Subprograma 01. Establecimiento de una red de
asistencia mutua de recursos humanos, técnicos y
financieros para apoyo en caso de desastres.
Subprograma 02. Instalación y/o fortalecimiento de redes
nacionales de comunicación para emergencias con
mecanismos de enlace con la Subregión.
Subprograma 03. Fortalecimiento de los Sistemas de
Programa 21. Establecimiento de redes
Voluntariado estableciendo el marco legal apropiado y
subregionales de operaciones para
mejorando las capacidades de acción.
emergencias y desastres
Subprogramas 04. Promoción de la Instalación y
operación de bodegas o centros de reserva estratégicos
(Almacenes) para los países con criterios de apoyo a la
Subregión.
Subprograma 05. Desarrollo de convenios subregionales
públicos y privados para la provisión de artículos de
ayuda humanitaria en caso de desastres.

*****

Вам также может понравиться