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Desde el inicio de los contagios de COVID -19 han surgido mil inconvenientes en todo el
mundo; viéndose afectada nuestra vida cotidiana, nuestra salud, el trabajo, el turismo, y la
economía en todos los aspectos.
Con el pasar de los meses, algunos Países han intentado reabrir poco a poco sus sectores,
con la esperanza de que sus protocolos, medidas de prevenció n y distanciamiento social
propuestos por cada país pueda mitigar esta crisis, unos mejor que otros, pero todos
queriendo sobrellevar la situació n.
En estados Unidos, luego haber estado en un punto crítico, finalmente comienza a ver una
pequeñ a disminució n en el nú mero de casos reportados por día, sin embargo, el promedio
de contagios diarios aú n es alto, pues la cifra ronda en los 50 mil contagios nuevos, lo que
ha elevado la cifra a 5 millones 402 mil 803 contagiados desde que se registró el primer
caso en el país, así que las medidas de prevenció n deben de seguirse al pie de la letra.
Por esta razó n, algunos negocios esenciales, como supermercados y no esenciales, como
tiendas de ropa, han decidido seguir operando con reducció n de horarios, para tener un
mayor control del flujo de personas y así evitar aglomeraciones y posibles nuevos
contagios.
Como medida para contrarrestar el nú mero de casos diarios de coronavirus, diversos
estados han optado por hacer obligatorio el uso de cubrebocas, tal es el caso de Nashville,
en donde, tan só lo en este fin de semana, se emitieron 3,000 multas, 25 citaciones y un
arresto debido a la violació n de las medidas de prevenció n, así lo dió a conocer el
Departamento de Policía de Metro Nashville (MNPD).
En el caso de Europa, ha vuelto a estar en punto de mira por culpa de los rebrotes. Tras
pasar lo peor de la pandemia los meses pasados, en las ú ltimas semanas el nú mero de
contagios vuelve a crecer en los países de la Unió n Europea. Má s de mil casos diarios
hacen temblar las fronteras de estos países, con el consiguiente efecto que tendría para la
economía.
El temor a una segunda ola hace que má s países piensen en tomar medidas, especialmente
relacionadas con el sector del turismo. Bélgica ya se plantea seguir la acció n de Reino
Unido, pese a que ya recomienda cuarentena para los llegados de determinadas zonas de
Francia.
Alemania, por su parte, recuerda a los suyos extremar las precauciones en caso de pasar
sus vacaciones en Españ a. "No es una prohibició n, sino una advertencia", señ ala el
ministro de Sanidad, Jens Spahn. Estos deberá n pasar una cuarentena de 14 días tras
regresar de Españ a.
También Italia monitoriza, desde al pasado 13 de agosto los vuelos llegados de Españ a,
Malta, Grecia y Croacia. En los ú ltimos días han experimentado un aumento en la cifra de
casos confirmados, muchos de ellos asociados, segú n las autoridades del país, al turismo
exterior.
Algunos países como Costa Rica y Uruguay siguen las recomendaciones de la Organizació n
Mundial de la Salud y destinan un 6% del PIB a sanidad.
La fuerte dependencia del comercio internacional y los precios de las materias primas
hacen que la fortuna de Latinoamérica esté necesariamente vinculada a lo que ocurra en
China y EEUU. La desescalada global impulsará la demanda de materias primas y el
dinamismo en el comercio internacional.
Hay quien argumenta que China estará en peores condiciones que en el pasado para
ayudar a Latinoamérica. Sin embargo, China será la ú nica economía grande, junto con
India, que se espera crezcan en el transcurso de este añ o 2020.
Otra cuestió n que afecta muchísimo aquí es el impacto social de la pandemia, que
seguramente será profundo debido a la elevada informalidad en la regió n (el FMI estima
que un 50% de los empleos totales está en economía sumergida). Esto dificulta la
efectividad de las políticas sociales al dejar a muchos trabajadores informales sin ningú n
tipo de cobertura durante la pandemia.
Es por ello por lo que las medidas de seguridad deben seguir acatá ndose al pie de la letra,
entre ellas, el uso de cubrebocas y el distanciamiento social, sin embargo, la reducció n de
horarios también ha resultado ser una gran medida de prevenció n, pues a través de esta se
mantiene el control del flujo de las personas y con ello se evita la aglomeració n de lugares
y así, posibles nuevos contagios.
Las recuperaciones tras una pandemia son má s rá pidas: por ejemplo, las llegadas de
turistas internacionales a nivel global volvieron a crecer en tan solo cinco meses tras la
epidemia por SARS, un período mucho má s corto que tras la debacle financiera de 2008.
Ademá s, las actuaciones expeditivas y globales por parte de bancos centrales y gobiernos
acrecentará n la efectividad de las medidas en esta crisis.
Se tiene una gran oportunidad de salir de esta crisis vinculando, por ejemplo, la ayuda
nacional o internacional a la inversió n a la necesaria mejora de los servicios pú blicos e
infraestructuras y la adopció n de medidas medioambientales. Y es sumamente importante
tener en cuenta lo que dice la Comisió n Europea de evitar " las restricciones ineficaces y de
controles fronterizos, al tiempo que indican que la respuesta debe ser "coordinada y
basada en evidencias científicas". Se trata de reformas estructurales necesarias para no
volver a experimentar, nunca má s, otra década perdida.