Вы находитесь на странице: 1из 1

6 siete días el nacional Domingo 26 de febrero de 2017

María Elena Ramos  Alberto Hernández:  Nelson Rivera 


HOY en la web:// sobre Enay Ferrer (2/3) Crónicas del olvido entrevista a Tulio Hernández

Director Nelson Rivera Investigación, Coordinación Editorial Lucía Jiménez • Diseño y diagramaciónMónica Mata • Correo electrónicopapelliterario@el-nacional.com / @papeliterario

Alonso Moleiro gabriel osorio / Archivo

U
na vez, hace años, en una
conversación que sostenía-
mos en casa de una amiga
LIBRO» Una interpretación del fenómeno chavista
común, Tulio Hernández
y yo convinimos en que la amistad

Tulio
que mantenemos encontraba su fun-
damento en que pertenecíamos “a la
misma familia política”.
Pero ahora, vamos a reconocerlo,
que la tragedia venezolana nos ha
hecho problematizarnos con algunas
de nuestras identidades políticas tra-
dicionales, me está produciendo un
enorme fastidio, como probablemen-
te le debe ocurrir a él, andar diciendo

Hernández,
por ahí que “soy de izquierda”.
Más allá de estas definiciones, siem-
pre he pensado que, durante estos

pensador
años, Tulio Hernández ha sido, como
muy pocas personas en Venezuela,
parte de lo más esclarecido y decan-
tado que ofrece el progresismo vene-
zolano. Desde la perspectiva académi-

anfibio
ca, comunicacional, política, urbana,
literaria y periodística.
Semana a semana, interpretando
con agudeza las ciencias sociales;
ofreciendo reflexiones penetrantes
y serenas; haciendo periodismo del
bueno; acompañando el dramático
pulso de la vida venezolana y univer-
sal, las entregas de Tulio Hernández
en El Nacional se convirtieron en
un objeto habitual de conversación
dominical y “post-dominical”.
Una nación a la deriva, el libro que
hoy presentamos, ofrece una indis-
pensable “presentación” de su autor,
que le otorga a la entrega más volu-
men del ya existente. Hay en estas
líneas una acertadísima interpreta-
ción de lo sucedido históricamente
al país en estos 17 años del fenómeno
caudillista chavista
y de sus característi-
cas constitutivas. Es- diagnóstico, la tris-
toy seguro de que lo Las palabras a continuación fueron teza y la esperanza. mente, no está tan lejano, y al cual, de
que acá asienta Tulio La última entrega seguro, todos los acá presentes que-
le servirá de insumo leídas en la presentación de Una dominical captura- remos pertenecer: el momento de la
a muchos de quienes
quieran aproximar-
nación a la deriva el pasado martes da es la correspon-
diente a la gigan-
reconstrucción.
Reconozco, además, y revindico, su
se, en el futuro, al trá- 13 de diciembre de 2016 en la sala tesca manifestación faceta de activista, menos comenta-
fico de estos inconce- popular del pasado da, pero igual digna de aplausos. Su
bibles y catastróficos experimental del Centro Cultural 1 de septiembre de entrega a la causa democrática, su
años de la historia
venezolana expresa-
Chacao 2016. Aquella rotun-
da demostración de
militancia noble, que me consta. Su
compromiso en estos años. Su com-
dos en el chavismo. descontento nacio- bate manifiesto, existencial, y com-
Los ejes temáticos nal que la nomen- partido, a la causa de las libertades
escogidos por el autor, presentados
de manera cervantina, le colocan los
los lleva, probablemente contra su
propia voluntad, el fenómeno cha-
clatura chavista y los mandos mo-
ralmente corrompidos del Consejo
Abren fuegos sus públicas en el país. Especialmente
ahora, en esta noche negra que nos
confines a sus reflexiones, inscritas vista. Consigno personalmente ante Nacional Electoral se negaron a re- notas sobre el 27 de ha tocado vivir.
todas en el tiempo que nos ha tocado ustedes cuan duro es terminar reco- conocer políticamente. Amigos: Venezuela ha cambiado.
vivir, el de la decadencia de la Vene- nociendo que, irremediablemente, en Reconozco en Tulio Hernández, en Febrero de 1989, el Hay un país mayoritario, gigantesco,
zuela contemporánea. Abren fuegos
sus notas sobre el 27 de Febrero de
esta historia se nos han ido 17 años
y que este lapso, que alguna vez con-
su devenir como intelectual público,
su agudeza, su pasión y su curiosi-
año a partir del cual, que está esperando una oportunidad
para expresarse. Pronto vendrán
1989, el año a partir del cual, vivien-
do de crisis en crisis, se acabó la feli-
sideramos un paréntesis, una excep-
ción, se ha convertido, por definición,
dad. Tulio es, sin dudas, un pensador
“anfibio”; una de nuestras mentes
viviendo de crisis nuevas situaciones. En la política no
existen vacíos. No perdamos de vis-
cidad en este país. en una marca y una pesadilla. más lucidas; una las reservas con las en crisis, se acabó la ta, ni ahora, ni después, aquello que
El grueso de las reflexiones del de- El libro cierra con una coda, en las que contamos para reconstruir a Ve- siempre tendrá que decirnos Tulio
venir venezolano que Tulio ofrece se cuales quedan insertos los temas del nezuela. Un momento que, histórica- felicidad en este país” Hernández todas las semanas.

RESEña »Montaje del impacto afectivo que significa versos ámbitos del conocimiento o de
revisar esta etapa oscura de la vida la actividad humana”; sino que tam-

El hilo perdido venezolana a través de la escritura


propia, me he sentido obligado a re-
dactar una presentación con el pro-
pósito de facilitarle al lector algunas
bién añade un quinto capítulo, “a
manera de preludio”: I. “Cría Cuer-
vos (1992-1996)”, en el que incluye tex-
tos “que fueron publicados en otras
de las claves que han guiado estos páginas de El Nacional y otros dia-
Diómedes Cordero ficción moderna, de Jacques Rancière ejercicios de interpretación tratan- rios antes de 1996”, para “intentar en-
(Ediciones Casus-Belli, Madrid, 2015) do de entender este período que ha tender lo que antecedió a la tragedia”
La aparente paradójica relación es doble. Por un lado, el homónimo significado el fin de la democracia bi- y una especie de epílogo: VI. “Coda:
que podría encontrarse entre Una título de esta reseña y el del libro de partidista y el retorno del militaris- entre el diagnóstico, la tristeza y la
nación a la deriva (Libros El Nacio- Rancière; y, por el otro lado, las estra- mo en Venezuela”; presentación a la esperanza (2016)”.
nal, Caracas, 2016), del escritor, so- tegias del montaje de los textos y el que no solo agrega una explicación Desde la perspectiva de una escritu-
ciólogo, profesor universitario, ex- uso que haría Hernández de las téc- que, precediendo a cada uno de los ra como la que Rancière piensa para
perto en cultura y opinión pública nicas de escritura que Rancière atri- cuatros capítulos –II. “La república la ficción moderna, en “la que se te-
y articulista Tulio Hernández, que buye a la ficción moderna, “la nueva del odio (2002-2005)”, III. “El cobrador jen las formas de la experiencia so-
reúne, principalmente, cuarenta ficción que ya no separa la acción de (o el extravío malandro) (2005-2016)”, cial y de la subjetivización política”,
y ocho textos de su columna en la su preparación; es ser infiel a ese te- IV. “Todo tiene su final (2013-2015)” y Tulio Hernández analiza, expone, cri-
página de opinión del suplemento jido sensible que no establece distin- V. “La peste (2006-2016)”– que organi- tica, enjuicia y valora, con la imagi-
dominical Siete días, del diario El ción alguna entre las aventuras y los zan y dividen los textos de la colum- nación política de un alto periodismo
Nacional, organizados, seleccio- pensamientos”. na, condensa lo que estos exponen, a de opinión, las paradójicas formas
nados y editados por Julio Bolívar, Hernández explica el procedimien- la manera de la ficción moderna se- democráticas de la antirepública del
quien los denomina “ensayos bre- to de su poética periodística en “No- gún Rancière, “un análisis de los pa- chavismo, como un teatro en el que se
ves”, provenientes de las dos mil ta del autor”, al referir la construc- radigmas de presentación de los he- convocan las falsas revoluciones y los
cincuenta columnas publicadas ción y arquitectura de los textos y chos, de encadenamiento entre los sucesos de la sociedad, para encon-
durante los últimas dos décadas, los propósitos de su escritura: “Lue- acontecimientos y de construcción trar el hilo perdido de la democracia
y El hilo perdido. Ensayos sobre la go de leerlos en su conjunto, además del sentido que circulan entre los di- liberal en una nación a la deriva.

Вам также может понравиться