Redefiniendo la Gestión del Rendimiento de los Activos

Autor: Terrence O´Hanlon

NOTA DEL EDITOR: He pasado cerca de 40 años aprendiendo y preguntando

sobre varios enfoques para avanzar en la Confiabilidad y la Gestión de Activos.
Aunque he hecho algunas de mis propias contribuciones, atesoro las
contribuciones que provienen de otros. De hecho, el negocio que lidero está
optimizado para brindar oportunidades tanto a grandes contribuyentes como a
pequeños contribuyentes. Incluye publicación de libros, publicación de revistas y
sitios web, presentaciones de conferencias, talleres de capacitación, mesas
redondas, conferencias magistrales, libros blancos, informes de investigación,
guías de proyectos, videos, podcasts, seminarios web y todas las demás formas
de comunicación moderna. Tengo una gran satisfacción al proporcionar un
escenario y una plataforma para que las personas expresen su trabajo,
especialmente cuando se puede utilizar para hacer que las personas a las que
servimos sean más seguras y más exitosas mediante el avance de la
Confiabilidad y la Gestión de Activos.

El objetivo de este artículo es redefinir Asset Performance Management (APM)

y sus niveles de madurez de una manera que propongo tendrá más sentido para
las partes interesadas del propietario del activo, las partes interesadas de la
compañía de tecnología y, con suerte, algunos analistas que definieron
originalmente APM.

El Mundo según la Confiabilidad

Si trabaja para una organización intensiva en activos y su función consiste en

garantizar el valor de los activos, es poco probable que organice el mundo por
aplicaciones de software como lo hacen los profesionales de marketing de
software o los analistas de software para describir estas aplicaciones y funciones
a los directores de informática, TI líderes u otros oficiales principales.
Como Líder de Confiabilidad, comienza con una Teoría de Confiabilidad, que, en
términos simples, se trata de una operación libre de fallas. Las empresas líderes
y las organizaciones centradas en la misión también incluyen una teoría de la
gestión de activos, que, en términos simples, es coordinar actividades a través
de los roles funcionales en la organización y en todo el ciclo de vida del activo y
en toda la empresa para garantizar que el valor se entregue de los activos. Una
Estrategia de Confiabilidad y Gestión de Activos generalmente incluirá una
colección integral de tareas de mantenimiento técnicamente válidas y
económicamente viables, incluidas tareas dirigidas por la condición, tareas
dirigidas por el tiempo, tareas de búsqueda de fallas y decisiones de fallas
empaquetadas como un programa de mantenimiento preventivo.

El mantenimiento preventivo explicado simplemente es el servicio de activos

(por ejemplo, reparación, renovación, reemplazo) y la inspección que forma parte
de su plan y estrategia. En otras palabras, sabes que lo vas a hacer.

El mantenimiento correctivo explicado simplemente es el servicio de activos

(por ejemplo, reparar, renovar, reemplazar) que lo sorprende, no es parte de su
plan o estrategia. En otras palabras, es una falla de activos que no había cubierto
con una estrategia de confiabilidad o hay un defecto en la estrategia de
confiabilidad que tenía para ello.

Sería genial si todos los activos estuvieran libres de mantenimiento y sin fallas,
pero esa es una aspiración que uno puede tener que esperar a que Industria 5.0
entregue ya que, que yo sepa, no es un objetivo para Industria 4.0.

Mientras tanto, la mayoría de las organizaciones industriales utilizan aplicaciones

de gestión de trabajos de mantenimiento, como los sistemas de gestión de
mantenimiento informatizados (CMMS) o la gestión de activos empresariales
(EAM), para gestionar su programa de mantenimiento preventivo y el programa
de gestión del trabajo correctivo creado a partir del desarrollo de estrategias de
confiabilidad u otras fuentes. Estas aplicaciones crean órdenes de trabajo,
almacenan el historial de mantenimiento del equipo (por ejemplo, cronogramas,
fallas, reparaciones, resultados de inspección, uso de materiales y piezas,
causas fundamentales, planes de trabajo, lista de materiales, observaciones y
notas, otros datos) y datos de activos.

Necesita una comprensión básica de dos conceptos de confiabilidad para

obtener una idea de cómo funciona la gestión del desempeño de los activos en
un sistema holístico o marco de confiabilidad, como se muestra en la Figura 1.
Uno es el desarrollo de la estrategia de confiabilidad utilizando los patrones de
falla. El otro es la gestión de la condición de los activos.
Figura 1: Elementos de tiempo de actividad Un marco de Confiabilidad y un
Sistema de Gestión de Activos

Desarrollo de la Estrategia de Confiabilidad

Como se indicó anteriormente, las organizaciones intensivas en activos utilizan

aplicaciones CMMS / EAM para administrar programas de mantenimiento
preventivo creados a partir del desarrollo de estrategias de confiabilidad u otras
fuentes. Como el famoso escritor de ficción, William Shakespeare declaró: "¡Ay,
ahí está el problema!"

De acuerdo con los elementos de Uptime ®: un marco de confiabilidad y un

conjunto de conocimientos de Asset Management System ™, el desarrollo de la
estrategia de confiabilidad utiliza herramientas como el mantenimiento centrado
en la confiabilidad (RCM), la optimización del mantenimiento preventivo (PMO)
y el modo de falla y análisis de efectos (FMEA) / modo de falla, análisis de efectos
y criticidad (FMECA), para identificar modos de falla / mecanismos de falla y
causas de falla, luego aplica una tarea de mantenimiento técnica y
económicamente viable para eliminar la falla funcional.

Pero, ¿qué pasa con las otras fuentes? Por lo general, las otras fuentes para
tareas de mantenimiento son:

 Fabricantes de equipos originales (OEM);

 "¡Siempre lo hemos hecho así!"
 Reacción universal al último punto de gestión de datos PM;
 "Nadie sabe por qué hacemos esto".
 Aunque es posible que algunas de estas tareas de mantenimiento
agreguen valor y contribuyan a la confiabilidad, es más probable que no
lo sean. En realidad, pueden estar causando daños a sus activos.

Solo se deben realizar tareas de mantenimiento que estén técnicamente

validadas, ya que existe una alta probabilidad de que imponer o invadir el límite
de un activo de trabajo perfectamente bueno creará lo que se conoce como
mortalidad infantil o una condición nueva o peor reparada, como se muestra en
Figura 2.

Figura 2: Riesgo de realizar tareas intrusivas, dirigidas por el tiempo

Las tareas de mantenimiento deben basarse en respuestas técnicas y

económicamente efectivas a los modos de falla que pueden vencer la función de
un activo o sistema. Dado que la mayoría de los patrones de falla son aleatorios
(es decir, no están relacionados con el tiempo), las decisiones de tareas de
mantenimiento más apropiadas generalmente serán tareas dirigidas por la
condición o ninguna tarea de mantenimiento en absoluto como una ejecución de
la decisión de falla. Las decisiones de ejecución a falla deben integrarse en
cualquier programa de mantenimiento preventivo porque muchos de sus activos
y sistemas no justifican el tiempo dirigido ni condicionan las tareas preventivas
dirigidas. Por ejemplo, una bombilla estándar funciona con falla, un empleado la
informa y se programa un reemplazo.

Los activos requieren algún tipo de intervención en forma de mantenimiento

debido a la edad excesiva (generalmente menos del cinco por ciento) o al
desgaste básico (menos del 12 por ciento). Es posible que pueda argumentar,
dependiendo del tipo de activos que opere su organización, que el desgaste
básico podría extenderse hasta el 23 por ciento (vea los patrones de falla en la
Figura 3), pero rara vez ve que se extiende mucho más. Los argumentos sobre
el envejecimiento de los activos se manejan caso por caso, dependiendo del
apetito de su organización por la inversión de capital.
Eso todavía deja un enorme 75 por ciento de fallas de activos causadas por el
activo que no recibe toda la atención que necesita para funcionar perfectamente.
Algunas razones de esas fallas incluyen:

 Los defectos que impiden el valor y causan fallas podrían haberse

creado en la etapa de diseño de la vida del activo y sin rediseño no es
algo que el mantenimiento vaya a mejorar.
 Los defectos que impiden el valor y causan fallas podrían haberse
creado en la fase de creación o creación de activos.
 Los defectos que impiden el valor y causan fallas podrían haberse
creado en la fase de puesta en marcha o instalación.
 Los defectos que impiden el valor y causan fallas pueden ser causados
por la entrada de materia prima o entradas de proceso.
 Los defectos que impiden el valor y causan fallas pueden ser causados
por problemas de disciplina operativa.
 Los defectos que impiden el valor y causan fallas pueden ser causados
por la mano de obra de mantenimiento.
 Los defectos que impiden el valor y causan fallas pueden ser causados
por el material de mantenimiento. Los defectos que evitan el valor y
causan fallas pueden ser causados por la entrada de materia prima o
entradas de proceso.
 Los defectos que impiden el valor y causan fallas pueden ser causados
por la deficiencia de datos o la mala gestión de la información.
 Los defectos que impiden el valor y causan fallas pueden ser causados
por la política de la alta gerencia.

Como propietario de un activo, desea que sus activos cumplan los objetivos de
la organización (es decir, el valor) y desea eliminar tanta incertidumbre (es decir,
riesgo) como sea necesario para hacerlo. Se trata de tener la capacidad de
administrar el rendimiento de los activos (es decir, APM) mediante la
automatización del monitoreo de condiciones, resultados de inspección, datos
operativos y otras observaciones y condiciones, estableciendo reglas,
posiblemente agregando aprendizaje automático (ML) e inteligencia artificial (AI),
y alimentando resultados y acciones de seguimiento solicitadas al sistema de
gestión del trabajo (CMMS / EAM). El ciclo de retroalimentación luego monitorea
la efectividad y eficiencia de la tarea para optimizar futuras decisiones de la tarea.

Gestión de la Condición de los Activos

La Gestión de la Condición de los Activos (ACM) implica medir y monitorear la

condición del equipo, las tendencias del sistema y el rendimiento operativo
utilizando parámetros y técnicas de operación seleccionados para pronosticar el
potencial de fallas futuras y permitir el mantenimiento oportuno antes de estas
fallas.

La tecnología moderna de monitoreo de condiciones proporciona información

que puede usarse con confianza para operar a la máxima capacidad y eficiencia
para una carga o rendimiento dado, así como para determinar y programar tareas
de mantenimiento emergentes / secundarias en función de la condición de los
activos. Esta capacidad de monitoreo también contribuye a la confiabilidad y
seguridad al garantizar que las fallas potenciales inminentes se identifiquen y
corrijan en una etapa temprana, minimizando tanto el costo como la posibilidad
de fallas catastróficas.

Figura 3: La curva D-I-P-F y los patrones de falla

A menudo, ACM brinda al personal de mantenimiento la capacidad de evaluar la

condición operativa del equipo en cualquier momento y permitir el monitoreo del
deterioro progresivo de los componentes sin la necesidad de su inspección física
a través de una inspección intrusiva.

El monitoreo de condición proporciona información útil para diagnosticar y

corregir problemas al principio de la secuencia de envejecimiento o falla. Esto
permite planificar y programar el mantenimiento con un impacto mínimo en la
operación de la planta.

El ACM generalmente no es intrusivo y no interfiere con las funciones de control

del equipo o la instrumentación.

La trampa de gravedad de los dominios de madurez de mantenimiento

La sabiduría de las mejores prácticas convencionales promovida por los expertos

tradicionales en mantenimiento de la vieja escuela lo guiará desde el dominio
reactivo hasta el mantenimiento preventivo o el dominio de mantenimiento
planificado. A partir de ahí, lo guían al dominio de mantenimiento predictivo,
luego al dominio de mantenimiento centrado en la confiabilidad y, finalmente, al
dominio de mantenimiento prescriptivo habilitado para Internet of Things.

Figura 4: Elementos de tiempo de actividad Dominio del conocimiento de Internet

de las cosas

Si la confiabilidad y el rendimiento de los activos son sus objetivos, estas son las
malas noticias: las mejores prácticas para el mantenimiento no funcionan. De
hecho, nunca lo hicieron! El dominio de mantenimiento planificado no es estable.

Las leyes de Terrence O'Hanlon establecen:

 No puede mantener su camino hacia la confiabilidad y el rendimiento de

los activos.
 No puede realizar un mantenimiento preventivo para obtener
confiabilidad y rendimiento de activos.
 No puede realizar un mantenimiento predictivo para obtener
confiabilidad y rendimiento de activos.
 No puede realizar un mantenimiento centrado en la confiabilidad para
obtener confiabilidad y rendimiento de los activos.
 No puede realizar un mantenimiento prescriptivo para obtener
confiabilidad y rendimiento de activos.
 El viaje de madurez hacia la confiabilidad y la administración de activos
es una de personas / cultura, prácticas / procesos y tecnologías y
probablemente se extenderá a varios dominios.
Tabla 1: Matriz de madurez de gestión de rendimiento de activos de elementos
de tiempo de actividad

Tabla 2: Cinco disciplinas de una organización de alta confiabilidad

El concepto de mantenimiento se ha entrelazado de manera tan errónea con la
confiabilidad que los dos términos se usan a menudo como sinónimos. Ningún
CEO quiere más mantenimiento: piense en "alto mantenimiento". Todos los CEO
quieren operaciones libres de fallas: piense en "alta confiabilidad". ¿Cuál
preferirías ser?

El dominio planeado no es un dominio estable porque sin una cultura de alta

confiabilidad, es probable que todos en la organización agreguen defectos al
sistema más rápido de lo que el sistema de mantenimiento e inspección puede
eliminarlos. Establezca el próximo destino para el dominio de precisión y tenga
en cuenta que partes de su estrategia y madurez se extenderán a través de
múltiples dominios.

Como líder en confiabilidad, su función es señalar el camino hacia la clase

mundial y establecer el destino final para ser una "organización de aprendizaje"
que tenga flexibilidad mediante el uso de un marco para la confiabilidad futura y
los desafíos de gestión de activos.

Anímate a aprender más sobre ISO55000 / 55001 / 55002, Sistema de gestión

para la gestión de activos, Elementos de tiempo de actividad: un marco de
confiabilidad y un Sistema de gestión de activos y un Marco de estrategia de
digitalización de elementos de tiempo de actividad para liderar el camino hacia
la creación de un equipo de trabajo multifuncional, comprometido y capacitado.
Líderes de confiabilidad en toda su empresa que representan la entrega de un
valor seguro, sostenible y sin fallas hacia los objetivos organizacionales de los
activos.
Hoy en día, existen numerosos proveedores de tecnología que ofrecen
plataformas para la gestión del rendimiento de activos que alimentan EAM.
Comience su avance con una visión estratégica hacia el lado de las personas
del viaje, que generalmente es el más significativo y difícil, el lado del proceso y
el lado tecnológico del viaje.

Un enlace dinámico y circuitos de retroalimentación entre la administración de la

estrategia de confiabilidad, la administración de la condición de los activos y la
EAM impulsarán el desempeño de los activos y la entrega de los objetivos
organizacionales de una manera segura y sostenible.

Fuente:
https://reliabilityweb.com/articles/entry/redefining-asset-performance-management