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Guía rápida para

nuevos teletrabajadores

Recomendaciones de teletrabajadores experimentados que


hubieran deseado saber esto antes de comenzar con la modalidad.

CONTENIDO

1 Los principales desafíos y cómo afrontarlos

2 Recursos para dominar la modalidad

3 Un mensaje de aliento
1 Los principales desafíos y cómo afrontarlos

Cada experiencia de teletrabajo es distinta, y cada persona logra adaptarse a los


cambios a su manera. Dicho esto, en nuestra experiencia e investigación encontramos
desafíos recurrentes en esta modalidad. Por supuesto, todos tienen solución.

Aislamiento / Soledad Trabajando a distancia puede sentirse la falta de


conexión con nuestros compañeros. En espacios
físicos solemos interactuar dentro de la oficina, en
los pasillos, tomando un café o almorzando juntos.
En un contexto de trabajo a distancia, todas estas
situaciones desaparecen. Puede que sigamos
charlando con algunos de nuestros compañeros,
pero la mayoría de estas charlas disminuyen.

Debemos asegurarnos de incluir videollamadas


específicas para conectarnos como seres humanos
al menos una vez por semana, o dedicar unos
minutos en las videollamadas laborales a este
propósito. Es importante tener un espacio
informal para charlar con nuestros compañeros,
como podría ser un grupo de chat en WhatsApp,
Telegram o Slack, sobre todo para aquellos con
quienes no trabajamos de forma directa.

Al perder el contacto físico del día a día es


muy probable que ocurran fallas en la
Fallas de Comunicación
comunicación: malentendidos, dobles
interpretaciones, huecos en la información. El
trabajo a distancia por sí mismo no
empobrece la comunicación, pero sí cambia
las condiciones de juego.

A los líderes les corresponde diseñar una


estrategia de comunicación y colaboración
acorde al contexto. Al trabajador le compete
entender cada canal de comunicación
para saber cómo usarlos correctamente y
esforzarse por comunicar lo máximo posible:
evitando ambigüedades en sus mensajes,
otorgando contexto y agregando emoción y
énfasis a través de emojis, signos de
puntuación, mayúsculas y negrita.
1 Los principales desafíos y cómo afrontarlos

En muchas ocasiones y al contrario de lo


Desbalance entre vida que se suele pensar, teletrabajar termina
personal y laboral implicando trabajar más en lugar de
trabajar menos. Dependiendo del caudal de
trabajo y de la organización que tenga el
equipo, el “trabajar desde casa” puede
convertirse en “vivir en el trabajo”.
Jornadas muy intensas, desgaste físico y
mental, mails y mensajes a cualquier horario.
Sabemos lo que se siente.

En caso de que tu equipo siga trabajando


con un horario definido, es importante
respetar y hacer respetar los horarios
de trabajo. La mayoría de las veces, ese
mensaje en el grupo de chat a las 23hs
puede esperar al día siguiente.
Desconectarse es un derecho. También es
importante poder realizar pausas entre
medio para tomar alguna infusión y charlar
con la familia.

Las distracciones de la oficina ya no están,


pero aparecen nuevas distracciones a las Distracciones
que seguramente no estábamos
acostumbrados: las necesidades constantes
de los chicos, las mascotas, los quehaceres
de la casa y la posibilidad de entretenerse con
Netflix, TV o redes sociales en cualquier
momento.

Existen aplicaciones con funciones como


bloquear el acceso a ciertas apps o sitios web
durante un período limitado (AppBlock,
StayFocused, Detox). También nos ayudará
tener un espacio de trabajo definido (una
sala de nuestra casa destinada a ser la
“oficina”). Puede que incluso nos ayude a que
nuestros hijos entiendan mejor que nos
encontramos trabajando. Por último, para
evitar desconcentrarnos con notificaciones
podemos activar el modo “No Molestar” en
nuestro celular o PC.
2 Recursos para dominar la modalidad

Dejando a un lado los requisitos particulares de cada puesto (que quedarán a criterio de
cada profesional), consideramos que hay ciertos recursos válidos para cualquier persona
que se encuentre trabajando a distancia. En esta ocasión nos vamos a concentrar en las
habilidades blandas necesarias, que son las actitudes y aptitudes personales más
adecuadas para abordar la modalidad con excelentes resultados.

Habilidades blandas

Los reclutadores de teletrabajadores coinciden en que hay tres


habilidades que son clave a la hora de poder desenvolverse
correctamente trabajando a distancia:

Autogestión: nadie va a controlar que estemos trabajando desde


nuestro hogar, por lo tanto tendremos que controlarnos nosotros
mismos. La presión de estar dentro de la oficina ya no está, y es más
importante que nunca ser capaces de auto-motivarnos para cumplir
con nuestras tareas. Nuestro objetivo es lograr ser nuestro propio
gerente: poder establecernos metas, desarrollar estrategias,
proponer mejoras y pensar a largo plazo. Autogestionarse no significa
trabajar sol@, significa tener dominio y control sobre nuestro trabajo
sin necesidad de supervisión.

Organización: ya sea a través de aplicaciones digitales o mediante


lápiz y papel, ser una persona organizada con las tareas es
especialmente útil en este contexto. Es importante saber con
exactitud qué tareas hay que hacer durante el día y durante la
semana, cuánto tiempo me va a llevar cada tarea, en qué orden las
voy a completar y qué necesito de otras personas para llevar a cabo
cada una de ellas. Toda esta información es crítica y de no tenerla es
muy probable que se me pasen cosas por alto.

Comunicación: como vimos, la comunicación a distancia suele ser


un desafío. Por lo tanto, ser una persona capaz de comunicar de
forma concisa, asertiva y clara es muy valorado. Expresar una
idea tanto de forma verbal como escrita (sobre todo escrita) ayuda a
mejorar la calidad y la velocidad de nuestro trabajo. Se valora
sobrecomunicar, lo que NO quiere decir comunicar más en cantidad
sino en calidad: dar la mayor cantidad de contexto posible y asumir
que la persona que está del otro lado podría no entender de qué le
estamos hablando.
2 Recursos para dominar la modalidad

¿Cómo puedo mejorar estas habilidades?


Si bien las habilidades blandas parecen ser cualidades personales innatas,
en realidad se aprenden y mejoran con la práctica. Veamos algunas técnicas
que ayudarán a mejorar nuestras habilidades:

Autogestión: Gran parte de la autogestión es simplemente una


mentalidad. La otra gran parte, es práctica. Una mentalidad de
desarrollo nos ayudará a buscar continuamente la forma de crecer
personal y laboralmente. En cuanto a la práctica, podemos planificar
metas (nosotros mismos o apoyándonos en nuestros superiores) para
lograr resultados superadores, mejorar nuestras habilidades de trabajo
y aprender herramientas nuevas. Involucrarnos en el proceso de
planificación nos ayuda a mantenernos motivados y a practicar la
planificación a largo plazo.

Organización: ”Lo más importante es que lo más importante sea lo más


importante”. Priorizar las tareas es el primer paso para cumplirlas en
tiempo y forma. De ser necesario, apoyémonos en nuestro equipo y en
nuestro líder para ello. ¿Qué es importante hacer esta semana? ¿Qué es
importante hacer hoy? Definamos objetivos semanales y diarios para
cumplir. Una vez identificadas las prioridades, será cuestión de registrar
las tareas a cumplir y asignarles una fecha. El resto de la organización se
basa simplemente en utilizar las herramientas y las técnicas
adecuadas. Una agenda será imprescindible (idealmente una agenda
virtual como pueden ser Google Calendar o iCloud Calendar), al igual que
un anotador de tareas.

Comunicación: Gran parte de una buena comunicación se basa en


elegir el canal adecuado. “¿Será mejor mandar un mail?” “¿Vale la
pena hacer una videollamada?” “¿Puedo resolver el tema por chat?”.
Pensar en el canal ideal para nuestro mensaje puede ser la diferencia
entre una engorrosa conversación sin resolver y una conversación
clara con buenos resultados. El resto se remite a mejorar nuestra
capacidad de ser clar@s: la forma de resumir una idea, estructurar
un mensaje, usar las palabras adecuadas. ¿También es cuestión de
práctica? Sí, pero cuestión de práctica a conciencia. Pasamos toda la
vida comunicándonos, pero si no nos detenemos a pensar en cómo lo
hacemos, difícilmente podremos mejorar.
3 Un mensaje de aliento

Si te encontrás en una situación complicada respecto a trabajar a distancia, si estás con


dificultades para adaptarte, o si estás tratando de liderar un equipo que está teniendo
mucha fricción con la modalidad, queremos darte un mensaje de aliento. O, mejor dicho,
dos:

Estás en el lugar correcto

En este momento puede que te encuentres en el período de


adaptación, pero a partir de ahora la situación sólo puede
mejorar. No sólo vas a poder abordar mejor la jornada laboral,
sino que también mejorará el contexto en el que lo hagas. Si en tu
región continúa el aislamiento obligatorio, entonces estás
afrontando todas las dificultades del teletrabajo pero sin
todos sus beneficios.

Incluso durante la cuarentena podés aprovechar grandes


ventajas de la modalidad como grandes ahorros ¹, mayor
satisfacción laboral ² y la posibilidad de contratar y ser contratado
desde cualquier lugar, abriendo la puerta a posibilidades en el
extranjero. Pero aún no estás disfrutando al 100% otros beneficios
como tener mayor tiempo disponible para otras actividades, poder
vivir en cualquier parte del globo sin necesitar cambiar de trabajo
(lo cual puede tener un gran beneficio financiero) e incluso visitar
otras regiones sin necesidad de pedir licencia por vacaciones.

Pero calma, habrá tiempo para aprovechar estos beneficios


porque el trabajo a distancia llegó para quedarse. Las
tendencias de mercado son claras: a raíz del aislamiento social, la
cantidad de teletrabajos crecerá. Al menos el 30% de los trabajos
cambiarán después del confinamiento y se llevarán de forma
parcial o completa de manera remota según el estudio Flexibility
at Work, llevado a cabo por Randstad. El mismo estudio afirma que
el 70% de los teletrabajadores quiere continuar trabajando bajo
esta modalidad.

(1) El ahorro es tanto para el empleador (alquiler de oficinas e infraestructura)


como para el trabajador (los teletrabajadores registran menor gasto en
viáticos, comida e incluso ropa).
(2) (múltiples estudios comprobaron que los empleados prefieren trabajar de
forma remota y eligen a las empresas que deciden adoptar esta modalidad).
3 Un mensaje de aliento

No estás sol@

Muchas personas se encuentran desorientadas, sobre


todo en tiempos como los que corren, llenos de
incertidumbre. Es perfectamente entendible: a todos los
problemas de nuestra diaria les estamos sumando una
pandemia que involucra aislarnos físicamente de nuestros
seres queridos, y un cambio laboral que puede llegar a ser
muy violento en algunos casos (muchas veces con graves
impactos económicos).

Hablar de tu situación ayudará a mejorar las cosas. Hablá


con quien puedas, con quien tengas confianza. Acercate a
Recursos Humanos dentro de tu empresa y proponé cambios
que te parezcan adecuados para mejorar la situación.
Programá una reunión con tu superior para contarle tus
inquietudes. Hablá con tus compañeros, con tus amigos, con
tus familiares. Evaluá comenzar con psicoterapia (si es que
todavía no lo hiciste).

En WorkSmart estamos para acompañarte: nos


dedicamos a pensar en la mejor forma de abordar el trabajo
en general y el teletrabajo en específico. Estamos para hacer
de tu trabajo una solución en lugar de un problema. Creemos
en una labor más colaborativa, simple, eficiente, valiosa y
flexible. Se puede trabajar mejor. Lo hemos vivido. Y
queremos compartirlo.

¡Te deseamos buena suerte


en este nuevo camino!

De parte de todo el equipo de WorkSmart.


Trabajá mejor.

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