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Los cuatro errores
do mediante sus errores: en primer lugar, él
pletamente; en segundo lugar, se
9 solo incom! i :
las; en tercer jugar, se sentia a si mismo
a los animales y 4 l
yas tablas de valores y se considero
te un largo tiemp' e incondicionado, de
tal manera que tan pronto uno co.
mano se encontraron en el primer lugar y fueron e
aloracion. Si uno descuenta el efecto de estos cuatro
secuencia de esta V: f ¢
errores, entonces Se elimina lo humano, Ja humanidad’® y la «dignidad
a naturaleza; en
cuarto lugar
{ mi durant :
poles nstinto y estado hu-
nnoblecidos, a con-
humana».
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Instinto de rebano
‘Alli en donde tropezamos con una moral, encontramos una valora-
cién y jerarquia de instintos y acciones humanas. Estas estimaciones
y Seesraies son siempre la expresion de lo que una comunidad yun
Phe ies se que para ellos es de provecho en pri
ahietebiterib it es a, en tercer lugar—, eso es tambien e] mas
ee aaees Bees le ae los individuos. Mediante Ja moral
eapmircunialéineblo a, lo para ser una funcién del rebafio ¥
iawetnaervaciéad omo tl funcién. Puesto que las condiciones
pecto alas d eer eoriinidad han sido muy diferentes con *°*
* e otra comunidad, ha habid: Hs . 3
enrelaci6n con proximas y esenci abido morales muy diferente 3
comunidades, Estados y Rises net aes ciones de rebansy
iedades, se puede profetizar que 20" ha-
bra moral
rorales muy diver;
en el individu, gentes, La moralidad es el instinto de ™ ebaiio
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El remordimiento de conciencia del rebatio
Enlosmas largosy alejados periodos de lahumanidad hubo remordimien-
tos de conciencia completamente diferentes alos de hoy en dia, Hoy uno
se siente responsable solamente por aquello que quiere y hace, y posee
en si mismo su propio orgullo: todos nuestros jurisconsultos parten des-
de este sentimiento de si mismos y de placer de los individuos, como si
desde antiguo se originase aqui la fuente del derecho, Pero a través del
do mas largo de la humanidad no hubo nada mas temible que sen-
tirse como alguien singular, Estar solo, sentirse como alguien singular,
ni obedecer ni dominar, significar un individuo eso no era en aquellos
tiempos un placer sino un castigo; uno era condenado «a ser individuo».
La libertad de pensamiento era considerada como la incomodidad mis-
ma, Mientras que nosotros sentimos la ley y el ordenamiento como una
obligacién y una mengua, antes se experimentaba el egoismo como un
asunto vergonzoso y como una verdadera penuria, Ser si mismo, valorar
uno mismo seguin criterios propios —eso iba, en aquellos tiempos, en
contra del buen gusto, Esa inclinacién habria sido sentida como locura:
pues toda miseria y todo temor se encontraban vinculados con el estar
solo, En ese entonces la «voluntad libre» tenia a la mala conciencia en su
_ més proxima vecindad: y mientras menos libremente uno actuase, mien-
tras mis se expresase en la accién el instinto de rebafio y no el sentido
onal, més moralmente se valoraba uno a si mismo. ‘Todo lo que cau-
cio al rebafio, fuese que el individuo lo hubiese querido o
en aquel tiempo un remordimiento de conciencia al indi-
ademas también a su vecino, incluso a todo el rebaiio! Sobre
ue, en primer lugar, hemos tenido que aprender de otro modo,
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Benevolencia
una célula se convierte en la funcion de una célula
ue hacerlo, ,¥ es malo cuando la mas fuerte asimila
e hacerlo igualmente; eso es necesario para ella, pues
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