SEMANA 3

El ahorro
¿Qué es el ahorro?

Ahorrar es reservar algo valioso para utilizarlo en el futuro. No solo se ahorra

dinero, también se puede ahorrar tiempo, recursos y bienes.

Aunque parece muy sencillo, guardar para el futuro implica disciplina y

sacrificio. Ahorrar es estar preparado para afrontar posibles riesgos y urgencias,
por ejemplo, malas cosechas, enfermedades o muertes; prever acontecimientos
o gastos que van a llegar, como pago de matrículas, una boda, la vejez o un
funeral; o para invertir, por ejemplo, en una nueva empresa o ampliación de la
existente.

Otras definiciones del ahorro son:

• Es la parte del ingreso que no se destina al gasto y que se reserva para

necesidades futuras.
• El ahorro es la parte de las entradas de dinero neto que no se dedican
al consumo corriente.
• Ahorrar no es juntar lo que nos sobra sino separar para lo que nos
falta.
• Ahorrar no es cuestión de cantidad, sino de constancia y significa
separar una parte de los ingresos y reservarla para cubrir necesidades
futuras.
• Comprender que el ahorro es el punto inicial de un futuro ventajoso y
probablemente más seguro.
• Pagarme a mi mismo primero.

¿Por qué ahorra la gente?

La gente ahorra por distintas razones:

• Prepararse para emergencias o riesgos futuros (catástrofes naturales,

lesiones, muerte).
• Amortiguar las variaciones en los ingresos y el consumo. Ahorrar lo que
sobra en los períodos de abundancia para utilizarlo en los de dificultades.
Hacer frente a las futuras necesidades.
• Educar a los hijos.
• Estar preparados para la vejez o la discapacidad o problemas de salud.
• Invertir en oportunidades potencialmente rentables o proyectos
productivos, como comprar una vaca, inicio de un negocio o una empresa,
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almacenamiento de cereales para venderlos en la temporada de precios
altos, etc.
• Cumplir obligaciones sociales y religiosas (matrimonio, funeral).
• Precaución para constituir una reserva.

¿Cómo ahorra la gente?

Una de las formas más seguras de ahorrar es depositar nuestro dinero en un

banco. Sin embargo, la gente ahorra de muchas formas, como individuos o en un
grupo. El ahorro puede hacerse en especie y en dinero (en el hogar o en un
banco).

Ahorro individual

Ahorrando individualmente, todo el dinero puede ser utilizado para invertir en el

negocio productivo personal.

Ahorro en grupo

Ahorrando en grupo se puede acumular rápidamente una cantidad mayor de

dinero, uniendo sus ahorros en un fondo común para una inversión productiva.
Con el ahorro grupal en entidades financieras, los jóvenes crean un lugar seguro
para depositar su dinero.

Ahorro en especie

Cuando los precios están subiendo continuamente (inflación elevada), cuando

hay poco dinero en circulación (economía de trueque) o cuando no hay ningún
banco en las cercanías, puede tener sentido ahorrar en especie. Quien ahorra en
especie normalmente lo hace en cereales alimenticios, como maíz o arroz; o en
ganado, como vacas, carneros o gallinas; y a veces en artículos como joyas u oro,
u otros bienes valiosos cuyo valor aumenta cuando suben los precios por efecto
de la inflación o la escasez.

Ahorro en el hogar

En el hogar los ahorros están cerca y fácilmente accesibles; pero esto significa
también que pueden acceder a ellos más fácilmente otros miembros de la
familia, o también los ladrones.
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El ahorro
¿Qué decir de los préstamos?

Utilizar el dinero de otros y devolverlo después parece más fácil que emplear el
recurso ahorrado por nosotros, pues tomar en préstamo no exige ningún sacrificio
inmediato.

Pero ¿es realmente más fácil que ahorrar?

El crédito es una solución para una necesidad de inversión o de gasto, pero debe
ser planeada su devolución y ajustarse a los ingresos proyectados para evitar
incumplimientos futuros, lo cual puede traer como consecuencia quedar
bloqueado ante el sector financiero y afrontar procesos jurídicos de cobro.