ALANIS ARCE ISAAC

313146783
ECONOMIA POLITICA VI
1701
LA TECNOLOGÍA DEL CAPITAL SUBSUNCIÓN FORMAL Y SUBSUNCIÓN REAL DEL PROCESO DE
TRABAJO AL PROCESO DE VALORIZACIÓN, Bolívar Echeverría

El dinero es también una unidad de valor de uso y valor de cambio. En primer

lugar, como el dinero crea valores de uso, el proceso de producción de capital es
sencillamente un proceso de trabajo, el cual contiene factores generales dentro de
sus variadas formas sociales de producción. Históricamente el capital subsume
no solo al proceso de trabajo en general sino que también tiene bajo su control
particulares formas de procesos reales de trabajo en el estado tecnológico en que
se encuentran. Dentro de su desarrollo, éste transforma al proceso de trabajo y lo
hace mediante el trabajador que pasa a estar vigilado por el mando del capital o
capitalista, es decir el trabajador pasa a recibir órdenes del capitalista.

El proceso de trabajo real es el consumo productivo que el trabajo hace de los

valores de uso que entran en él y por otro lado es el consumo que el capitalista
hace de la capacidad de trabajo. La subsunción formal del proceso de trabajo bajo
el capital es básicamente que el capitalista esté al pendiente de si el trabajador
trabajo correctamente y si utiliza los medios de trabajo pertinentemente, es decir el
capitalista tiene bajo su control to este proceso.

LA SUBSUNCIÓN REAL EN LA COOPERACIÓN CAPITALISTA

La cooperación se presenta como una fuerza productiva del capital, no del trabajo.
Las capacidades que contiene el trabajador ya están incorporadas al capital
cuando entran en el proceso de trabajo, su propia cooperación de éstas, reflejan
una unidad que es dominada y cuyo portador y director es el propio capital. Esto
quiere decir que el capitalista contrata trabajadores independientes y estos no
tienen ninguna relación entre sí, si no que hasta juntar su fuerza productiva dentro
del proceso de trabajo, se da una relación la cual se presenta como una relación
del capital y no como propia de ellos. Esta fuerza productiva social de su trabajo
da como resultado la fuerza productiva del capital. Este es el primer grado en el
que la subsunción del trabajo al capital no se presenta ya como una subsunción
formal sino que transforma el modo de producción mismo, de tal manera que el
modo de producción capitalista es un modo de producción específico. La
subsunción es formal cuando el trabajador individual en vez de trabajar como
propietario independiente de la mercancía, comienza a trabajar como una
capacidad de trabajo que le pertenece al capitalista, es decir deja de trabajar para
sí mismo y en vez de esto trabaja para el capitalista por lo que queda bajo el
mando de éste último. El trabajo realizado por el trabajador se presenta como un
medio para la realización de su trabajo, es decir para su absorción de trabajo.
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LA SUBSUNCIÓN REAL EN LA DIVISIÓN CAPITALIS-TA DEL TRABAJO

Esta subsunción consiste en los procesos u operaciones independientes que los

trabajadores realizan cuando efectúan su trabajo. Estos procesos son
exclusivamente de un trabajador determinado o de un número determinado de
trabajadores. Esto nos quiere decir que son repartidos entre los distintos procesos,
los cuales se vuelven para cada uno de ellos su proceso de vida exclusivo. Así
que el proceso completo de producción de una mercancía resulta ser una
operación compuesta, es decir es un conjunto de muchas operaciones que se
completan una a otra independientemente y que pueden ser ejecutadas una junto
a la otra simultáneamente. Por lo tanto el trabajador es únicamente un productor
de una operación parcial, que solo produce algo en interconexión con el todo del
mecanismo constituido en un taller. Por lo tanto ahora el trabajador en vez de
vender únicamente su capacidad de trabajo vende su tipo y modo de su trabajo lo
que hace que se encuentre subsumido bajo la producción capitalista. Es por eso
que debido a todo lo mencionado el trabajador mismo se convierte en un simple
detalle.

LA SUBSUNCIÓN REAL EN EL TALLER AUTOMÁTICO CAPITALISTA

La figura de las condiciones de trabajo se transforma como se mencionó

anteriormente, estas reciben nuevas transformaciones en virtud de que sirven de
condiciones a trabajadores que elaboran juntos. En la cooperación simple y en la
manufactura basada en la división del trabajo esta modificación solo se da en las
condiciones generales del trabajo pero en el taller automático basado en la
maquinaria la modificación se apodera del instrumento de trabajo. Estas
condiciones y su figura modificada permanecen como una circunstancia ajena a
los trabajadores, al igual que en la subsunción formal del trabajo al capital. En el
modo de producción la utilización de la máquina se presenta como utilización de
un sistema de maquinaria integrado, como una totalidad de procesos mecánicos
distribuidos en distintas fases y movidos todos por un motor común.

El taller automático es un mecanismo sistemático completo, con el surgimiento de

la maquinaria se desvaloriza la capacidad de trabajo especializada y se reduce la
capacidad de trabajo abstracta a simple. Este taller automático aparece en lugar
de la manufactura basada en la división del trabajo y de la empresa artesanal
independiente. Éste niega la cooperación simple, es decir, reemplaza la fuerza
generada por la cooperación por maquinaria. También niega la división de trabajo
en la medida en que suprime la manufactura o cooperación basada en la división
del trabajo. En el taller automático la maquinaria tiene un funcionamiento
simultáneo que obliga a los trabajadores a ser encargados de éstas, por lo cual los
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induce a ser encargados siempre de los mismos servicios, todos igualmente
simples, on esto me refiero a que la intervención real del trabajador solo depende
de si la maquina comete un error o no. Esto nos conduce a decir que lo que
caracteriza al trabajo automatizado es la supresión de la especialización misma
como especialización. Dentro de la manufactura, el taller automático ve al ser
humano como un accesorio viviente de un cuerpo global que existe aparte de él o
en este caso de la maquinaria automática. Y en la cooperación simple se ve al
trabajador como un accesorio dotado de movimiento que sirve a las maquinas. La
maquinaria no reduce la jornada de trabajo individual sino que reduce el número
de trabajadores. En conclusión sobre este apartado podemos decir que la
maquinaria no reemplaza totalmente al trabajador, pero si hace que sea menos
preciado, una de las ventajas de este sistema es que se puede obtener la
mercancía en un determinado tiempo e incluso puede haber un plusvalor mayor.