Вы находитесь на странице: 1из 12

Premiando la fe con Hambre

Génesis 12-13:4

Introducción:

En nuestro último estudio comenzamos con la biografía de Abraham, el pionero.


Descubrimos que se trataba de un hombre de fe; un hombre que estaba dispuesto a
dejarlo todo atrás, incluyendo su estabilidad económica y emocional. El dejo su sociedad
y su familia. Fue instruido por Dios a dejar todo lo que le era familiar e irse a una tierra
desconocida que Dios prometió darle.
¿Hubiésemos obedecido nosotros tales instrucciones de parte de Dios? Abraham
lo hizo. Vamos a ver esto en Génesis, Capitulo 12, al repasar una vez más la promesa de
Dios a Abraham, o Abram, como se llamaba en aquel entonces.

La Respuesta de Fe de Abram
Fíjese en Génesis, capitulo 12, versículos 1 al 4ª.

Pero Jehová había dicho a Abram: Vete de tu tierra y de tu parentela, y de la casa de tu


padre, a la tierra que te mostraré. 2Y haré de ti una nación grande, y te bendeciré, y
engrandeceré tu nombre, y serás bendición. 3Bendeciré a los que te bendijeren, y a los
que te maldijeren maldeciré; y serán benditas en ti todas las familias de la tierra. 4Y se
fue Abram, como Jehová le dijo; y Lot fue con él…

El hecho de que Lot fue con el fue un error, como lo vamos a ver mas adelante.
Continuemos con los versículos 4b al 5ª.

…Y era Abram de edad de setenta y cinco años cuando salió de Harán. Tomó, pues,
Abram a Sarai su mujer, y a Lot hijo de su hermano, y todos sus bienes que habían
ganado…

Tal vez usted se mudo hace poco y sabe perfectamente lo que significa trasladar todo lo
que ha acumulado. Uno siempre piensa como llego a juntar tantas cosas. Bueno, Abram
se llevo todas las cosas a su nuevo destino.
Sigamos con la próxima frase en el versículo 5.

… y las personas que habían adquirido en Harán,…

O sea, los sirvientes.


¡Que aventura que es todo esto! Sigamos con la última parte del versículo.

…y salieron para ir a tierra de Canaán; y a tierra de Canaán llegaron.

Abram va a construir ahora dos altares diferentes, los cuales son de mucho significado.
El lugar donde Abram construye el altar
Permítame contarle en cuanto al lugar adonde Abram erigió el altar.

El encino de More
1. El primer altar es en el encino de More.
El versículo 6 dice,

Y pasó Abram por aquella tierra hasta el lugar de Siquem, hasta el encino de More; y
el cananeo estaba entonces en la tierra.

Tenga en cuenta que el encino de More se trata literalmente de un árbol. Esta es la


ubicación del primer altar. “More” significa “maestro”, y en aquellos tiempos, en los
días de Abram, los maestros, o los discipuladotes por decirlo así, se sentaban bajo un
árbol. Este era el árbol de More, “el encino del maestro.”
El gurú idolatra decía escuchar las voces de los dioses bajando de las hojas del árbol. Fue
este mismo lugar, esta misma ubicación en la cual Abram erigió el altar. ¡Que hombre
valiente! Es como si hubiera dicho, “se que ustedes tienen sus practicas idolatras, pero
Dios me ha prometido esta tierra. Así que aquí mismo, bajo este árbol, voy a construir un
altar a mi Dios.”

Entre Bet-el y Hai


2. El segundo lugar en donde Abram construye un altar es entre Bet-el y Hai.
Fíjese en el versículo 7.

Y apareció Jehová a Abram, y le dijo: A tu descendencia daré esta tierra. Y edificó allí
un altar a Jehová, quien le había aparecido.

Es aquí adonde Abram se da cuenta que esta en Canaan. Construye un altar allí y luego
prosigue, como dice el versículo 8,

Luego se pasó de allí a un monte al oriente de Bet-el, y plantó su tienda, teniendo a


Bet-el al occidente y Hai al oriente; y edificó allí altar a Jehová, e invocó el nombre de
Jehová.

Ahora, estos lugares son muy importantes y altamente simbólicos. “Hai” significa
“montón de basura”. Se trata de un símbolo del mundo temporal. De hecho, se
transformaría en un lugar terrible para los Israelitas en el curso de su historia. Vamos a
ver esto al estudiar el Antiguo Testamento.
“Bet-el” significa “casa de Dios” y es símbolo de todo lo que representara la
presencia o la comunión de Dios, incluyendo el cielo o el reino.
Justo en el medio, entre la pila de basura, representando al mundo, y el lugar de
Dios, o el reino venidero, Abram construye un altar.
Esta es una gran ilustración del peregrino Neo-testamentario, usted y yo, que
hemos construido un altar. Vivimos nuestras vidas entre una pila de basura, este mundo
en que nos toca vivir y en el cual estamos de paso, y el reino venidero de Cristo. Allí es
adonde Abram construyo el segundo altar. Esa una ilustración para nosotros y, en cierta
manera, una advertencia del gran peligro de olvidarnos que este mundo no es
permanente. Nos distraemos con el paisaje y terminamos aferrándonos más de lo debido.
Somos peregrinos, no colonizadores.
Entonces Abram levanta la carpa y construye un altar.

La importancia del altar


Ahora, antes de seguir, tenga en mente la importancia del altar. Permítame darle
dos puntos.

El altar representa un lugar de adoración


1. Primero, el altar representa un lugar de culto o adoración.

Fíjese en el versículo 7, allí vemos una teofanía. Una teofanía es una manifestación o
aparición de Dios. Ningún hombre ha visto a Dios. Entonces esto es lo que se considera
teológicamente, una teofanía, o sea, la gloria visible de Dios presentándose ante Abram.
Es como si Dios le hubiera dado a Abram un bosquejo de Su figura, pero nunca le mostró
el rostro. El altar entonces, representa el lugar donde Abram adoraría a Dios.

El altar representa un lugar de comunión


2. En segundo lugar, el altar también representa un lugar de comunión.
Se trata de un gran día. Abram sobrevivió el desierto; ha llegado a la tierra. Dios dice,
“Esta es la tierra que voy a entregarte”, entonces Abram construye un altar y tiene un
hermoso tiempo de comunión con la gloria de Dios.
Debemos comprender que en esta instancia en la vida de Abram, el esta
emocionado, estremecido. Todo es maravilloso, todo marcha bien.
De pronto, bang! En el próximo versículo –no vive feliz para siempre, fíjese lo
que pasa. Versículo 10,

Hubo entonces hambre en la tierra…

En medio de todo esto que se veía de maravillas, Dios interrumpe el júbilo de Abram con
hambre.
¿Como responde usted cuando Dios interrumpe su periodo de alegría con un
periodo de hambre? ¿Cuál es su respuesta cuando una prueba golpea la puerta, en
especial cuando uno se encuentra en comunión con Dios? Uno se rasca la cabeza, no
comprende. Tal vez usted diga, “Pensé que había llegado Señor, Estoy en Canaan. Aquí
esta el altar. Tenemos una buena comunión y luego, una prueba.”
Tal vez usted se sienta como el rey Exequias. En II Crónicas, capitulo 31,
versículos 20 y 21, leemos las siguientes palabras,

De esta manera hizo Ezequías en todo Judá; y ejecutó lo bueno, recto y verdadero
delante de Jehová su Dios. 21En todo cuanto emprendió en el servicio de la casa de
Dios, de acuerdo con la ley y los mandamientos, buscó a su Dios, lo hizo de todo
corazón, y fue prosperado.

Y ahora fíjese el versículo 1 del capitulo 32,


Después de estas cosas y de esta fidelidad, vino Senaquerib rey de los asirios e invadió
a Judá…

Aquí es cuando uno piensa, no vale la pena. Después de ser fiel, ¿Qué hace Dios? Trae a
un rey enemigo a invadir la tierra.
Pienso del Señor Jesús mismo, quien, como dice Lucas, capitulo 3, fue bautizado.
Al salir del agua, la voz del Padre fue escuchada desde los cielos diciendo, versículo 22,

…Tú eres mi Hijo amado; en ti tengo complacencia.

Luego, en Lucas, capitulo 4, versículos 1 y 2ª, leemos,

Jesús,…fue llevado por el Espíritu al desierto 2por cuarenta días, y era tentado por el
diablo…

Permítame decirle algo. Esto es algo que la mayoría de los cristianos no perciben y como
resultado, se dan por vencidos cuando el hambre llega a sus vidas. Permítame leérselo,

La obediencia es el punto de partida en el camino a la madurez espiritual.

La obediencia inicial es el punto de partida. Nosotros tenemos la idea de que se trata del
destino final. Decimos, “Señor, me entrego a ti. Quiero ser como Cristo.”
Luego pensamos, “Bueno, eso debería ocuparse de mi santificación. Estoy aquí;
llegue.”
Sin embargo, de pronto, Dios trae pruebas a nuestras vidas, y decimos, “Un
momento Señor. ¿Qué estas haciendo?”
Dios responde, “Estoy respondiendo tu oración. Voy a hacerte como Cristo.”
¿“Pero como? un momento. Yo dije que quería ser como Cristo. Que quería entregar mi
vida”.
Dios dice, “No me interesa que hayas dicho eso, quiero que lo experimentes, que
sea una realidad en tu vida.”
Las pruebas vienen para que esto suceda.

Abram se retira con Temor

Ahora, ¿que queda por delante para Abram en cuanto a su vida espiritual? En los
próximos versículos vamos a ver que pasa.
Antes de ir a eso y de criticar a Abram por haberse ido a Egipto, fíjese la pregunta
que probablemente el se esta haciendo. Probablemente hemos hecho la misma pregunta
en varias oportunidades. “Dios, ¿adonde están tus promesas?

Las tres promesas de Dios a Abram


Dios le ha dado tres promesas a Abram. Le prometió:
1. La tierra –Abram llega a la tierra, mira a su alrededor y ve a los Cananeos con sus
carros de hierro y sus ejércitos comandados por paganos sanguinarios.
2. La simiente –a Abram se le promete un sin numero de descendientes, pero aun
esta sin hijos.
3. La bendición- Dios le promete bendecirlo, pero aquí viene el hambre.

Entonces, Abram se pregunta, ¿”Adonde están las promesas?”


Probablemente piensa, ¿”Adonde puedo encontrar pan?”
Egipto era conocido como “el granero del mundo antiguo”, así que se dirige hacia Egipto.
Abram se retira con miedo, de una manera cobarde.
Fíjese en los versículos 10 y 11 de Génesis 12

Hubo entonces hambre en la tierra, y descendió Abram a Egipto para morar allá;
porque era grande el hambre en la tierra. 11Y aconteció que cuando estaba para entrar
en Egipto, dijo a Sarai su mujer…

Vamos a ir a las palabras de Abram a su mujer en un momento. Pero primero, tengamos


en cuenta que Abram se dirige hacia el lugar que a través de todo el Antiguo Testamento
representa rebelión contra Dios y asociación al mundo. La ayuda no se encontraba en
Egipto, la ayuda se encontraba en el altar. Abram lo acababa de construir. Creo que los
ángeles en el cielo estaban diciendo, “Abram, quédate ahí. Tenemos una receta para hacer
mana y nos gustaría usarla.”
Probablemente los Ángeles dijeron, “Bueh, ahora vamos a tener que esperar a que
venga Moisés.”
Si Abram (o usted y yo) tan solo hubiera acudido a Dios. Pero el no puede ver las
promesas, entonces, Abram comienza a apoyarse en su propio entendimiento, su propio
razonamiento y se marcha hacia Egipto.
Damas y Caballeros, imagínense haberse dirigido a Abram entre estos dos
versículos y haberle dicho, “Escucha Abram, quiero que entiendas que en tres meses vas
a estar solo en Egipto sentado en tu tienda. Tu esposa va a ser parte del aren del Faraón y
tus rebaños se multiplicaran.”
Abram hubiera dicho, ¿“Que estuvo bebiendo?
“! Ese no soy yo!”

Sin embargo vamos a ver que eso es exactamente lo que pasa.


Miremos unos versículos antes de meternos más en el tema. El profeta Isaías
escribió estas palabras. ¿Puede verse reflejado en estas palabras? Fíjese en Isaías, capitulo
30, versículos 1 al 3, muy cuidadosamente.

¡Ay de los hijos que se apartan, dice Jehová, para tomar consejo, y no de mí; para
cobijarse con cubierta, y no de mi espíritu, añadiendo pecado a pecado! 2Que se
apartan para descender a Egipto, y no han preguntado de mi boca; para fortalecerse
con la fuerza de Faraón, y poner su esperanza en la sombra de Egipto. Pero la fuerza
de Faraón se os cambiará en vergüenza, y el amparo en la sombra de Egipto en
confusión.
Creo que podemos sumarle una posdata a estas palabras. “Y cuando vayas a Egipto;
cuando confíes en el sistema del mundo; cuando no busques mi consejo, no me eches la
culpa cuando te encuentres en problemas.”
Hace poco, viaje con mi familia a la ciudad de Atlanta. Estábamos listos para
salir. Como siempre solemos hacer, estábamos viajando de noche ya que los chicos son
más controlables y se quedan dormidos. Ahora, yo sabia que los neumáticos del auto se
estaban quedando lisos –lo sabía. Estaban quedándose sin dibujo y yo no tenia que
embarcarme en un viaje de ocho horas bajo esas circunstancias. De hecho, antes de salir,
me fije si la rueda de auxilio se encontraba en el maletero. Estaba actuando con mucha
necedad, de todos modos, salimos. No le dije nada a mi esposa de los neumáticos, por
supuesto. Yo dije, “bueno, Dios es soberano, así que vamos a llegar bien”
Bueno, como ya se podrán imaginar, a las dos de la mañana estábamos a un
costado de la ruta al haber pinchado una rueda. ¡A las dos de la mañana! ¿Por qué estas
cosas no suceden cuado uno esta saliendo de casa o cuando se aproxima a una estación de
servicio? -una de esas que hasta venden neumáticos-. Así que allí estábamos, a la vera
del camino y los camiones pasaban a toda velocidad. Trate de convencer a mi esposa a
que cambiara la rueda, pero no pude, tuve que bajarme yo.
Ahora, ¿no hubiese sido necio de mi parte bajarme del auto y darle puntapiés,
mirar hacia el cielo y decir, “Dios, por que me haces esto? ¿Por qué me metes en este lío?
¡Eso hubiera sido absolutamente necio!
La ultima cosa que Abram podría haber dicho, al ir a Egipto y todas estas cosas
comenzaron a suceder seria, ¿”Señor, por que me haces esto?”
Los problemas de Abram fueron resultado de su rebelión.
Muchas veces nos rebelamos contra Dios; nos alejamos de Dios. No buscamos consejo y
nos quedamos encerrados en un rincón. ¿A quien le echamos la culpa después? ¡A Dios!
Entonces, Salí del auto y saque la rueda de auxilio. Esta rueda en particular
parecía una rueda de bicicleta. Dicen que uno puede hacer cientos de kilómetros con
estas. ¡No es verdad! Tenia que parar cada 40 kilómetros y los chicos no podían dormir.
Tuvimos que para en un hotel.
Por la mañana, me levante y fui a una estación de servicio y justo tenían un
neumático usado que por seis dólares resolvió el problema.
Fíjese lo que dicen los versículos 11 al 13 de Génesis, capitulo 12.

Y aconteció que cuando estaba para entrar en Egipto, dijo a Sarai su mujer: He aquí,
ahora conozco que eres mujer de hermoso aspecto; 12y cuando te vean los egipcios,
dirán: Su mujer es; y me matarán a mí, y a ti te reservarán la vida. 13Ahora, pues, di
que eres mi hermana, para que me vaya bien por causa tuya, y viva mi alma por causa
de ti.

Ahora, esto no era una mentira del todo. En Génesis, capitulo 20, versículo 12, se nos
dice que Sarai es la media hermana de Abram. Tenían el mismo padre, así que ella era su
media hermana.
Abram es astuto. El dice, “no estoy mintiendo, simplemente estoy diciendo la
verdad a medias. Dile que eres mi hermana y todo va a salir bien. Nos quedaremos
aquí; tenemos toda la comida que necesitamos; vamos a sobrevivir. Después nos
regresaremos a Canaan, todo va a salir bien.”
Entonces, Sarai hace lo que Abram le pide.
Ahora, sabemos que era algo normal en esa época que si el Faraón quería una mujer, este
respetaba tanto al matrimonio que mandaba matar al esposo para tenerla a ella! De
hecho, es la misma práctica que siguió David. Tal vez usted recuerde que cuando vio a
Betseba, la codicio, así que se encargó de Urias, su esposo. David adopto la práctica de
un Faraón pagano. A propósito, yo creo que esa es, probablemente, la razón por la cual
nadie le dijo nada a David –eran paganos también. Quizá pensaron “Nuestro rey esta
actuando como uno de los Faraones. Se encargo de liquidar al marido.”
Fue así, hasta que Natán confronto a David. Esa era la práctica de aquel entonces
y es exactamente lo que le hubiera pasado a Abram y Sarai.
Bueno, continuemos con el versículo 14.

Y aconteció que cuando entró Abram en Egipto, los egipcios vieron que la mujer era
hermosa en gran manera.

Sarai tenía sesenta y cinco años. Teniendo en cuenta la cantidad de años que uno
vivía en aquel entonces, podríamos decir que se trata de un equivalente a treinta y cinco
años de edad en la actualidad. Ella estaba alcanzando el clímax, la plenitud de su vida.
Abram sabía que ella era hermosa. No era ningún tonto –sabia que ni bien le echaran el
ojo a ella, lo matarían.
Continuemos con el versículo 15 y fíjese lo que pasa. Esto impactó a Abram.

También la vieron los príncipes de Faraón, y la alabaron delante de él; y fue llevada la
mujer a casa de Faraón.

Oh, oh. Abram no se esperaba esto. No pensó que la situación llegaría a tal punto.
Ahora, la costumbre era tener un periodo de doce meses de preparación antes de
que la mujer fuera parte del aren. Durante ese tiempo, ella estaría bajo cuidados y el
Faraón no la tocaría. Ella seria agregada oficialmente al aren después de los doce meses.
No sabemos hasta que parte del proceso se llego, pero me imagino a Abram sentado solo
en su tienda pensando como se paso del límite.
Leí una historia que me dejo intrigado. Se trata de una historia de Gary
Richmond, uno de los cuidadores del zoológico de Los Ángeles. Contaba del día en el
cual los veterinarios tuvieron que ir para hacerle una cirugía a una cobra. Como Gary era
parte del personal le pidieron que ayudara. La dijeron “Gary, ven con nosotros cuatro.
Vamos a meternos en la caja de la cobra.”
Creo que esta cobra media como cuatro metros. Usted sabrá que la cobras tienen
la habilidad de mantenerse erguidas en forma vertical.
Entonces le dicen a Gary, bueno, vas a ayudar al cirujano. Tienes que tomarla por
la cabeza y los otros tres van a sujetar el cuerpo. Una vez que la tengas asegurada otra
persona va a reemplazarte así puedes ayudar con la cirugía.”
Se metieron entonces dentro del cubículo de los reptiles, el cual era inmenso. De
pronto la cobra se les acerco. Fue como si se hubiera percibido de que se trataba y vino a
ellos. Era como si estuviese seleccionando su presa. Gary estaba parado casi sin aliento
y sus rodillas chocaban una con otra.
De pronto, la serpiente se lanzo contra uno de ellos, con la suerte que este hombre
era un experto y pudo esquivarla y sujetarla con las manos. En seguida, los cinco
hombres se lanzaron sobre la serpiente, sujetándola firmemente contra el suelo.
Gary comenzó a ayudar al veterinario, el cual dijo “Busca algunas toallas y
mójalas, luego ponlas en la boca de la serpiente.”
Gary se percibió que la serpiente estaba enfadada y mas allá que le habían sacado
veneno, aun tenia suficiente como para matar a un elefante.
Entonces Gary procedió a ponerle las toallas en la boca y la serpiente comenzó a
apretarlas fuertemente con su mandíbula, de manera que el veneno chorreaba por las
toallas empapadas.
El veterinario dijo que la razón por la cual hicieron esto no era porque era difícil
atrapar a la serpiente pero si era difícil salir del lugar sin ser mordido. Así que
procedieron a succionar todo el veneno de manera que si se les escapaba y mordía a
alguno, esta persona no moriría.
Gary utilizo este suceso para ilustrar la historia de Abram en Egipto. Abram
atrapo a la serpiente; dijo una mentira, o una verdad a medias y pensó que ya estaba todo
bajo control. Sin embargo, se encuentra en su tienda sujetando a una serpiente venenosa.
Probablemente se encuentre mirando sobre sus hombros a ver sino vienen por el, al ser
descubierta la mentira, para matarlo. Y justo afuera de su tienda, aparece un regalo con
una nota: “Gracias Abram, por venir a Egipto. Ah, esa hermana tuya, será mía en tres
meses.”
Todo comenzó con una pequeña mentira. Mis amigos, la deshonestidad es una
epidemia, inclusive en la Iglesia. No obstante, hay esperanza, fíjese en la primera parte
del versículo 17 y marque estas palabras,

Mas Jehová…

De no haber sido por la intercesión Divina, no hubiera habido esperanza. ¿Qué iba a
hacer Abram? Presentarse ante el Faraón y decirle, “Faraón, mentí, me gustaría que me
devuelvas a mi esposa.”
De ninguna manera. Entonces el Señor interviene. Fíjese los versículos 17 al 19.

Mas Jehová hirió a Faraón y a su casa con grandes plagas, por causa de Sarai mujer
de Abram. 18Entonces Faraón llamó a Abram, y le dijo: ¿Qué es esto que has hecho
conmigo? ¿Por qué no me declaraste que era tu mujer? 19¿Por qué dijiste: Es mi
hermana, poniéndome en ocasión de tomarla para mí por mujer? Ahora, pues, he aquí
tu mujer; tómala, y vete.

Consecuencias del pecado de Abram


Ahora, no piense que todo quedo arreglado; que no hay mas problemas una vez
que Dios intervino. Permítame darle varias consecuencias del pecado de Abram.

Bendición perdida
1. En primer lugar, se perdió una bendición.
De haberse quedado en el altar en Bet-el; de haber acudido a Dios para que supliese de su
necesidad, Dios hubiera respondido milagrosamente para proveerle. Dios lo hizo con
Moisés y con el pueblo de Israel, con Elías y muchos más. Pero como resultado de
descansar en su propio razonamiento, Abram perdió la bendición de ver a Dios actuar;
ver a Dios supliendo su necesidad.
Tantas veces nos perdemos la bendición de Dios por no esperar en El para que
provea; pensamos que podemos descifrarlo todo.

Un aumento de su patrimonio
2. En segundo lugar, hubo un aumento de sus posesiones.
Cuando Abram dejó Egipto, en el versículo 2 del capitulo 13 nos dice que era muy rico.
¿Por qué se trata de una consecuencia? Porque estas riquezas causarían una disputa entre
los criados de Abram y los de Lot que llevarían a una ruptura familiar.
No piense siempre que las riquezas son la bendición de Dios. En Canaan, en la
voluntad de Dios, Abram estaba viviendo con lo justo, pero en Egipto el se estaba
enriqueciendo. Con esto no quiero decir que si uno se queda en Canaan, Dios va a darle
pobreza, ni que las riquezas provienen de Satanás. Pero en el caso de Abram, fue así.

Una sirvienta llamada Agar


3. En tercer lugar, Sarai trajo una sirvienta llamada Agar.

Esta sirvienta tendría un hijo, porque Abram, una vez más, le haría caso a su razón. Ese
hijo crecería y seria, hasta el día de hoy, el archienemigo de Israel –las naciones Árabes.

Lot se descarrió
4. En cuarto lugar, Es evidente que Lot desarrollo una afección por Egipto, la
cual persistió y lo aparto del camino.
Abram saco a Lot de Egipto y se lo llevo con el, pero no pudo sacar a Egipto del corazón
de Lot. Cuan trágico es cuando un creyente maduro en la fe lleva a un creyente joven por
el camino equivocado.

Pérdida de Testimonio
5. Fíjese la ultima consecuencia, en el versículo 18, que tal vez usted no haya
notado antes. El perdió su testimonio.

Entonces Faraón llamó a Abram, y le dijo: ¿Qué es esto que has hecho conmigo? ¿Por
qué no me declaraste que era tu mujer?

Abram es confrontado por un hombre que, en esta instancia, es mas piadoso que el –y se
trata nada mas ni nada menos que de un Faraón pagano. El Faraón le esta dando una
clase de ética a Abram; mostrándole como debe ser su moral.
Que difícil debe haber sido ser confrontado por un pagano que tiene mejores
convicciones que uno mismo. Tal vez usted ha recibido una amonestación de parte de
alguien hace poco. Tal vez un hijo que le dijo, “Papa, últimamente no estas casi en casa”
o un amigo que le pregunta, ¿”Estas bien? Te veo impaciente últimamente” o su cónyuge
diciéndole, ¿“Esta bien tu relación con Dios? No veo ningún fruto”.
Abram fue confrontado por un rey pagano y debía haber ganado.

El regreso de Abram a su Comunión con Dios

¿Hay esperanza? Si. Déjeme darle el motivo. Porque Abram regreso al altar.
En el versículo 20 del capitulo 12, Abram y todas sus pertenencias y familia, son
escoltados fuera de Egipto. O sea, se los llevaron hasta la frontera y le dijeron, “No
queremos volverlos a ver”.
Entonces, vemos en el Capitulo 13, versículos 1 al 4ª.

Subió, pues, Abram de Egipto hacia el Neguev, él y su mujer, con todo lo que tenía, y
con él Lot. 2Y Abram era riquísimo en ganado, en plata y en oro. 3Y volvió por sus
jornadas desde el Neguev hacia Bet-el, hasta el lugar donde había estado antes su
tienda entre Bet-el y Hai, 4al lugar del altar que había hecho allí antes;

Regresando al altar
¿Que nos esta diciendo Abram? Permítame darle un par de cosas.

Regresa al punto de partida


1. En primer lugar, regrese al lugar de partida; regrese al punto en el que usted se
desvío, cuando Dios le dijo que vaya a la derecha y usted fue para la
izquierda.

Si usted quiere poner las cosas en su lugar, regrese al lugar adonde partió. No se usted,
pero tal vez su Egipto sea un bar. Su Egipto puede ser la oficina del director por haberse
copiado. SU Egipto puede ser un canal de televisión en donde usted mira inmoralidad
cuando nadie esta presente. Su Egipto puede que sea en la casa de otro hombre o una
mujer. Tal vez sea mucho más sutil, como una conversación telefónica llena de
murmuración o una Biblia sin usar, llena de polvo que tiene las palabras invisibles “Para
ser usada los Domingos”. Sea donde sea, usted esta en Egipto. Regrese al punto de
partida.

Regrese al lugar de dependencia


2. Abram también nos esta diciendo que regresemos a el lugar de dependencia.

…e invocó allí Abram el nombre de Jehová….

¿Cuan esencial es Dios en su vida? Con cuanta frecuencia dice usted, “Puedo hacerlo yo
mismo.”
Regrese, como Abram, a ese lugar e invoque el nombre del Señor. Regrese al
punto de dependencia.

Aplicación –¡Lecciones de un Santo que se descarrió!

Permítame aplicar este pasaje con cuatro lecciones que podemos aprender de un santo
que se descarrió.
No se sorprenda cuando el hambre llegue a su vida
1. Primero, no se sorprenda cuando el hambre se haga presente en su vida.
El camino de la fe es como una colina, cuesta arriba, que fue diseñada por Dios para
desarrollar y fortalecer los músculos de nuestra fe. El viaje no es sobre un terreno plano
donde podemos caminar casualmente o cuesta abajo, donde podríamos dejarnos ir. Eso
no seria fe. Es cuesta arriba. Y ese periodo de hambre fue preparado por Dios para
ayudarlo en su peregrinar.

El hambre llega con el propósito de fortalecer nuestra dependencia en Dios


2. En segundo lugar, el hambre viene para probarnos y para fortalecer nuestra
dependencia en Dios, incluso cuando el parece estar en silencio; incluso
cuando parece estar distante, cuando parece injusto.
Como dice proverbios, capitulo 3, versículos 5 y 6,

Fíate de Jehová de todo tu corazón,


Y no te apoyes en tu propia prudencia.
Reconócelo en todos tus caminos,
Y él enderezará tus veredas.

A Dios nunca se le acaba la paciencia


3. En tercer lugar, a Dios nunca se le acaba la paciencia..
Esto es maravilloso. De haber sido Dios, yo hubiera dicho, “Abram, eres un perdedor.
Voy a buscar a otra persona para cumplir la promesa que le di a Israel. Olvídalo, has
hecho que los impíos blasfemen mi nombre. Casi entregas a tu esposa. Mejor me busco a
otra persona.”
Sin embargo, Dios no hizo eso.
Se dice de Tomas Edison, que cuando estaba trabajando para perfeccionar la primera
lámpara incandescente, ni bien la termino se la dio a un muchazo que lo ayudaba en su
laboratorio. El muchacho tenia que llevarla a una habitación especial en el segundo piso.
Al subir las escaleras, no pudo evitar que la lámpara se le deslizara de las manos. Todo el
equipo debería emplear al menos doce horas para hacer otra. Cuando terminaron, para el
asombro de todos los trabajadores, Edison le dio la lámpara al mismo muchacho.
Probablemente eso lo marco de por vida. Debe haber cambiado su vida, me imagino. Esta
vez, el muchacho logro lo cometido.
Multiplique esto por un millón. Así de paciente es Dios con sus hijos. Hacemos
lo equivocado, nos encontramos en medio de Egipto, pero Dios aun se interesa en
nosotros.

Acudir a otra fuente de ayuda nunca va a resolver lo que la fe en Dios puede


solucionar
3. Déjeme darle una aplicación más. Acudir a otra fuente de ayuda, nunca va a
resolver lo que la fe en Dios puede solucionar.
¡Si esto nos entrara en la cabeza! Egipto nunca nos va a ayudar; nunca nos va a
satisfacer. No hay altares en Egipto. No hay comunión en Egipto; no hay adoración en
Egipto. Tenemos que regresar a Bet-el, el lugar de adoración; de comunión, el lugar en el
cual Dios espera pacientemente nuestro regreso.

Вам также может понравиться