EFICIENCIA ENERGÉTICA

CERTIFICACIÓN ENERGÉTICA DE EDIFICIOS

Oscar Puche Ormaetxea, Ingeniero Industrial, CADEM - Grupo EVE
opuche@eve.es

El Certificado de Eficiencia Energética de Edifi-
cios supone un aval técnico de la calidad energé-
tica de un edificio, frente a un futuro comprador de
una vivienda. Es además un reconocimiento de
todos los agentes que intervienen en el proceso
(promotores, constructores, arquitectos, ingenie-
ros, etc) que desde una primera fase de diseño y
posteriormente de construcción del edificio, se
distinguen por su responsabilidad energética.
Antecedentes
CADEM, Centro para el Ahorro y Desarrollo
Energético y Minero, es una sociedad anónima perte-
neciente al Departamento de Industria, Comercio y
Turismo del Gobierno Vasco. Desde su creación en
1981, su principal misión ha sido fomentar el uso ra-
cional de la energía y potenciar la eficiencia energéti-
ca. Dentro del sector residencial y servicios, las medi-
das para obtener los objetivos anteriores son de distin-
to tipo:
• De sensibilización o concienciación ciudadana,
para evitar el despilfarro energético (medidas pre-
ventivas).
• Otro tipo de medidas, para disminuir la demanda
energética de los edificios y el consumo de sus ins-
talaciones térmicas y eléctricas (medidas correcti-
vas).
Ahora bien, la experiencia acumulada durante los
primeros años de actividad, demostró que si bien esta
labor es imprescindible, la nueva edificación quedaba
al margen de los límites normales de actuación. Es por
ello que surgió la idea de crear un modelo de Certifi-
cación Energética de Edificios para su aplicación a
la nueva construcción. Este proyecto se desarrolló
entre 1985 y 1993, fecha en la que se implanta un
modelo “no obligatorio” en la Comunidad Autónoma
del País Vasco.
Normativa aplicable
Nos tenemos que remontar al año 1975 para en-
contrar las primeras medidas orientadas al ahorro de
energía en el sector de la edificación. Poco más tarde,
en el año 1979 se aprueba la Normativa Básica de la
Edificación, Condiciones Térmicas, NBE-CT-79, que
fija el valor máximo del coeficiente global de transmi-
sión (KG) que puede tener un edificio, que es función
de los materiales empleados, la forma del edificio, la
energía utilizada y la zona climática en la que se en-
cuentra. Dicha normativa se encuentra todavía en
vigor, habiéndose quedado claramente obsoleta.
Por otra parte, en el año 1980 se publica el Regla-
mento de Instalaciones de Calefacción, Climatización
y Agua Caliente Sanitaria, que fija unos mínimos sobre
equipamientos y rendimientos. En el año 1998 se
publica el Reglamento de Instalaciones Térmicas en
los Edificios (RITE), que sustituye al anterior reglamen-
to, y que tras varias modificaciones, es el que se en-
cuentra en vigor a fecha de hoy.
Actualmente, se está desarrollando desde el Minis-
terio de Fomento del Gobierno Español el Código
Técnico de la Edificación, en el que se van a fusio-
nar éstas y otras normativas aplicables en la edifica-
ción. Además, la Directiva 2001/91/CE del parlamento
europeo y del consejo de 16 de diciembre de 2002
relativa a la eficiencia energética de edificios, detalla
que se deberá certificar energéticamente todo edificio
de nueva planta. Esta directiva debe ser aplicada en
los estados miembros a partir de enero de 2006.
¿Qué es el certificado de eficiencia energética?
Dado que el análisis energético de los edificios de
viviendas es distinto al de los edificios no residencia-
les, se han establecido dos procedimientos distintos
de certificación, el primero y sobre el que trata este
artículo, para edificios de viviendas, y el segundo, para
edificios no residenciales.
Como definición, el Certificado de Eficiencia
Energética de Edificios es una serie de procedimien-
tos que tienen como fin garantizar a los usuarios y a la
sociedad en general una calidad mínima, desde el
punto de vista energético, en la construcción de los
edificios residenciales. Se puede decir que es un Sello
de Calidad del edificio, desde un punto de vista
energético. Por un lado, para los agentes que han
intervenido en el diseño y construcción del edificio
(promotores, arquitectos, ingenieros, constructores,
etc) es un reconocimiento expreso de un trabajo bien
hecho. Por otro lado, para el propietario de la vivienda,
es una garantía de que su vivienda consumirá energía
de una manera eficiente, evitando despilfarros.
Di- ploma
del certi- ficado
La certificación energética de viviendas
La certificación energética valora la eficiencia
térmica de los edificios de viviendas en dos vertientes:
calefacción y agua caliente sanitaria. Para ambos
sistemas, se estudian aislamientos térmicos, ganan-
cias solares -pasivas y activas-, infiltraciones de aire, e
Instalaciones térmicas y sus rendimientos. No se es-
tudian los siguientes consumos energéticos, que en
general son consumos de electricidad: iluminación,
electrodomésticos, y refrigeración en verano.
Para la realización de los cálculos, se utiliza un
modelo matemático implementado en el programa
informático Programa de Eficiencia Energética de
Viviendas (PEEV), desarrollado desde CADEM para
tal fin. Con dicho programa, se estudia el consumo
energético del edificio a lo largo de un año en calefac-
ción y agua caliente sanitaria, y se compara este con-
sumo con el de un edificio de referencia. Dicho edificio
de referencia presenta las siguientes características:
• Su coeficiente global de pérdidas es el máximo
que le permite la NBE-CT-79.
• No presenta ganancias solares pasivas ni activas.
• Los sistemas de calefacción y agua caliente sani-
taria presentan los rendimientos mínimos exigidos
por el RITE.
De la comparación de dichos consumos se obtiene
la calificación del edificio en estudio. Existen tres posi-
bles calificaciones: A, B y C, siendo A la más eficiente,
y C la menos eficiente. En la calificación A, el coefi-
ciente de consumo del edificio en estudio debe ser
menor del 60 % del edificio de referencia. En la califi-
cación B, el coeficiente de consumo debe estar com-
prendido entre el 60 % y el 70 %. En la calificación C,
el coeficiente de consumo se debe encontrar entre el
70 % y el 80 %. Edificios cuyo coeficiente de consumo
fuera superior al 80 %, no serían certificados. En este
caso, al promotor o constructor que ha solicitado el
certificado se le proponen una serie de medidas de
eficiencia energética, con el objetivo de llegar al ahorro
de energía mínimo exigido para conceder el certifica-
do.
Escala de calificación energética
Metodología
Certificado provisional
Con el fin de que pueda utilizarse como argumento
de venta, se concede un certificado con carácter pro-
visional al proyecto. Se trata por lo tanto, de un estudio
teórico, realizado sobre los planos. En este primer
estadio, se revisa el proyecto, comprobándose en un
primer momento, que se ajusta a la normativa aplica-
ble, es decir, la NBE-CT-79 y el RITE. De esta forma,
el certificado de eficiencia energética es un mecanis-
mo más de control de cumplimiento de la normativa
vigente.
El consumo anual de calefacción de las viviendas,
estudiadas de forma individual, también se tiene en
cuenta dentro del certificado provisional. Se trata de
una condición adicional, que aunque no es exigible, sí
es recomendable que se cumpla, ya que hace refe-
rencia al consumo de calefacción de las viviendas más
desfavorables. Por lo general están situadas en la
primera o en la última planta ya que son éstas las que
presentan mayor superficie de separación con el exte-
rior.
Si el proyecto cumple con los requisitos demanda-
dos, se concede el certificado provisional. Sin embar-
go, se analizan y proponen ciertas medidas de eficien-
cia energética que, en el caso de ser adoptadas, redu-
cirían el futuro consumo energético del edificio. Dichas
medidas pueden afectar a todos los elementos que
contribuyen, en mayor o menor medida, al consumo
de energía del edificio. Entre estos elementos se in-
cluyen:
• Aislamientos térmicos empleados.
• Composición de cerramientos opacos.
• Composición de huecos acristalados.
• Sistemas de generación de calor, incluyendo sis-
temas solares para la producción de agua caliente
sanitaria.
• Sistemas de control y regulación de calefacción y
agua caliente sanitaria.
El fin fundamental es lograr con la adopción de es-
tas medidas de eficiencia energética, que el edificio
alcance o por lo menos se acerque a la mejor califica-
ción posible, la A. En el caso de que el edificio no
cumpla con los requisitos mínimos para obtener el
certificado, se le propondrá al constructor o promotor
una serie de medidas para llegar al ahorro de energía
mínimo exigido, y entrar así dentro de calificación.
Visita a obra
Los edificios que hayan obtenido el certificado pro-
visional, serán objeto de una o varias visitas a obra
durante el proceso de construcción de las mismas. El
fin fundamental que se persigue es comprobar las
especificaciones recogidas en el certificado provisio-
nal. Se hace especial hincapié en la correcta puesta
en obra de los distintos aislamientos térmicos.
Cartel informativo colocado en obra
Certificado definitivo
 Cuando el edificio se encuentra terminado, y si es El análisis termográfico se realiza con una cáma-
posible, antes de ser ocupado por los propietarios de ra de radiación infrarroja un barrido de toda la envol-
las viviendas, se realizarán al edificio una serie de vente de la fachada exterior. Con esta prueba se pre-
pruebas o mediciones. En función de los resultados de tende realizar un estudio cualitativo de la puesta en
estas pruebas, se modificarán los parámetros medi- obra del aislamiento térmico, incluyendo el tratamiento
dos, y se realizará de nuevo el estudio energético del dado a los puentes térmicos. La prueba se realiza
edificio, tras el que se concederá, si procede, el certifi- según la normativa ISO 6781.
cado definitivo. Para conocer de forma definitiva el
grado de eficiencia energética que presenta el edificio
ya construido, y conceder el certificado definitivo, se Termo mo-
procede a realizar una serie de comprobaciones que grafía de fa-
tienen por objeto: chada exte-
- Estimar las pérdidas energéticas de las viviendas rior
por ventilación, comprobando que la estanqueidad
de las viviendas es aceptable. El análi-
- Estimar las pérdidas energéticas por conducción a sis mo-
través de la fachada exterior, comprobando así el flujomé- trico
grado de aislamiento térmico del cerramiento. se realiza en un punto de la fachada exterior del edifi-
- Evaluar la calidad del aislamiento térmico de fa- cio. Durante siete días, se deja un equipo midiendo
chada, estudiando el aislamiento de puentes térmi- temperaturas interior y exterior y flujo de calor a través
cos, principalmente frentes de forjado y pilares. de la fachada. El tratamiento matemático de dichos
datos permite calcular la conductividad térmica de la
- Evaluar los rendimientos de generación, regulación
fachada, y con ella, su grado de aislamiento. La prue-
y distribución de los sistemas de calefacción y
ba se realiza según la normativa ISO 9869.
agua caliente sanitaria.

Las pruebas realizadas al edificio incluyen análisis

Ter- mo-
de infiltraciones, análisis termográfico, análisis termo-
flujóme- tro
flujométrico, e inspección técnica de instalaciones
colocado
El análisis de infiltraciones se realiza en todas
Me- diante
las viviendas tipo del edificio. Mediante una puerta
la ins- pec-
especial con ventilador acoplado, se cierra herméti-
ción
camente la vivienda, procediendo a presurizar y poste-
técnica de
riormente despresurizar la vivienda. Con unos manó-
instala- cio-
metros se calcula la diferencia de presión entre el
nes se evalúan los rendimientos de los sistemas de
interior y el exterior de la vivienda, y con este dato y el
calefacción y agua caliente sanitaria, comprobando su
caudal movido por el ventilador, se obtiene la tasa de
adecuación a lo especificado en proyecto.
renovación de aire interior en la vivienda en la que se
realiza la prueba. Dicha tasa se recomienda esté entre
0,4 y 0,6 renovaciones/hora. Por encima de 0,6 el
gasto en calefacción durante el invierno será elevado, Inspección técnica instalaciones
y por debajo de 0,4 se pueden presentar problemas de Finalmente, con toda la información obtenida del
calidad de aire interior. La prueba se realiza según la certificado provisional, la visita a obra y los resultados
normativa ISO 9972. de las pruebas realizadas, se elabora un documento
en el que se valora la eficiencia energética global del
edificio, con-
cedién- dose
el certifi- cado
de cien-
Puerta- cia
ventilador y energéti- ca en
manómetros su carác- ter
definitivo.

Vivien- das
certifica- ca-
das
Des- de el
año 1993 en
que se con-
cedió el primer certificado de eficiencia energética, en
la C.A. del País Vasco se han concedido 190 certifica-
dos provisionales y 55 definitivos, que en términos de de las nuevas promociones que han incorporado
viviendas, representan respectivamente 12.300 vi- colectores solares han mejorado en una media de
viendas y 3.100 viviendas certificadas. La evolución de 7 puntos su coeficiente de consumo pasando en
la certificación de viviendas comenzó a aumentar de algunos casos de una calificación C a una B o in-
forma importante a partir del año 1998. En el último cluso de B a A.
año del total de nuevas viviendas certificadas el 60% • Hoy en día las carpinterías instaladas en vivienda
eran de protección oficial de promoción pública, mien- nueva presentan buena capacidad aislante: alu-
tras que el 40% correspondieron a viviendas de pro- minio con rotura de puente térmico o madera y vi-
tección oficial de promoción privada y viviendas libres. drios dobles o bajo emisivos.
En este punto, hay que comentar la limitada reper-
cusión que ha tenido este certificado entre viviendas Todas estas mejoras hacen que en general los
libres, debido principalmente a: proyectos que se reciben sean más eficientes energé-
• Facilidad de venta de viviendas nuevas hoy en ticamente que hace unos años. Así, en los últimos
día, no haciendo falta sellos de calidad adiciona- años, si se analizan los coeficientes de consumo me-
les, como es el certificado de eficiencia energética. dios anuales, reflejados en el certificado provisional, se
• Escaso conocimiento de este certificado por parte observa que son muy similares, habiendo descendido
de promotores y constructores privados. 5 puntos desde 1997 hasta 2003. En todos los casos
• Escaso conocimiento y demanda de certificados estamos dentro de calificación B ó C.
de eficiencia energética por parte de los compra-
dores de vivienda nueva. 1 7 C
997 3%
1 7 C
998 4%
1 7 C
999 2%
2 6 B
000 9%
2 6 B
001 9%
2 7 C
002 1%
Placa de certificación 2 6 B
003 8%
Evolución de la calidad energética de los
proyectos
Se ha detectado la poca importancia que se le da a Hay que hacer mención especial a la tasa de reno-
los cierres de separación con locales no calefactados, vación de aire media hallada en las viviendas median-
tales como separación con caja de escalera, con caja te la prueba de infiltraciones. En general ésta es baja o
de ascensor o forjados de separación con sótanos o muy baja, sobre todo en los últimos años, de forma
trasteros. Efectivamente, presentan menos pérdidas que si el propietario de la vivienda no realiza una venti-
energéticas que los cierres de separación con exterior. lación adecuada, se pueden presentar problemas de
Sin embargo, según la NBE-CT-79, en función de la calidad de aire interior. Existen varias razones para
zona climática en la que se encuentre el edificio, la explicar estos valores tan bajos:
conductividad térmica del cerramiento no puede su- • Las carpinterías de hoy en día son cada vez más
perar un determinado valor. Y en ciertas circunstan- estancas al aire exterior.
cias, es necesario añadir aislamiento térmico a dichos • Se están eliminando las rejillas de ventilación de
cierres para cumplir con la normativa. fachada, al optar por sistemas de calefacción cen-
Sin embargo, se han comprobado una serie de tralizados o por calderas individuales colocadas
mejoras en las especificaciones energéticas de los en tendedero.
proyectos estudiados:
• Se están empezando a aislar térmicamente todos Una solución para mantener una tasa de renova-
los forjados del edificio, no solamente los de pri- ción de aire interior aceptable sería incorporar, bien
mera y última planta. Esta medidas es interesante carpintería que permita una infiltración de aire exterior
para disminuir las pérdidas energéticas cuando controlada, bien recurrir a sistemas de ventilación
existen viviendas deshabitadas. mecánica forzada.
• Hay un mayor número de sistemas de calefacción
y agua caliente sanitaria centralizados frente a in-
dividuales, y que presentan mejores rendimientos.
• Existen cada vez más promociones en las que se
instalan colectores solares para la producción de
agua caliente sanitaria, y que representan un gran
ahorro energético. Los coeficientes de consumo
Certificación definitiva de viviendas
Si comparamos los valores del coeficiente de con-
sumo provisional y definitivo, nos puede dar una idea
de la desviación habida durante la construcción. Así
por ejemplo, un cambio de aislamiento térmico llevado
a cabo durante la construcción del edificio, puede
llevar a una variación en el coeficiente de consumo
calculado. En general, estos cambios son detectados
principalmente en la visita o visitas a obra, y represen-
tan un empeoramiento en el comportamiento térmico
de los edificios. En el peor de los casos, puede ocurrir
que un edificio haya obtenido el certificado provisional,
y después de realizar las pruebas pertinentes, no ob-
tenga el certificado definitivo. Este caso es de difícil
solución, ya que el edificio se encuentra totalmente
terminado. Lo normal es haber detectado las deficien-
cias con anterioridad y haberlas subsanado a tiempo.
En algunos casos sin embargo, han representado
mejoras en el comportamiento térmico, por ejemplo, al
añadirse aislamiento térmico en zonas donde el pro-
yecto no lo contemplaba.
La mayor parte de los coeficientes definitivos otor-
gados en los últimos años son de calificación C. Para
comparar la diferencia entre la calificación provisional
y la definitiva, se supone que el período medio de
construcción de un edificio es de 3 años. Así por
ejemplo, un edificio certificado provisionalmente en
1997, se certificará definitivamente en el 2000. Se
comprueba como el coeficiente de consumo es peor
en el certificado definitivo que en el provisional. La
diferencia está entre 2 y 3 puntos. Esto es debido a
cambios ocurridos durante la construcción del edificio,
cambios que normalmente implican un empeoramien-
to en el comportamiento térmico del edificio.
2 7 C parte la disponibilidad de equipos de aire acondiciona-
000 4%
2 7 C derá de las características de cada zona climática.
001 1%
2 7 C potencia máxima instalada en iluminación, en función
002 2%
2 7 C consumo, evitándose consumos innecesarios. En
003 2%
Excelencia energética
Como se ha comentado anteriormente, existen tres
posibles calificaciones: A, que sería la más eficiente, B
y C, que sería la menos eficiente. En muchas ocasio-
nes, el promotor o constructor está interesado, no
solamente en obtener el certificado de eficiencia
energética, sino en llegar a la máxima calificación
posible.
Se debe tratar cada edificio de forma individual, y
en cada caso recomendar ciertas medidas, que pue-
den afectar tanto a los cerramientos como a las insta-
laciones del edificio, para obtener la calificación A. Sin
embargo, se pueden comentar ciertas directrices ge-
nerales, que se cumplen en los edificios estudiados:
• Si el edificio se basa en la electricidad como sis-
tema de calefacción (bien con radiadores eléctri-
cos convencionales o con acumulación nocturna
mediante hilo radiante) es muy difícil obtener el
certificado. En este caso se debe colocar un ais-
lamiento térmico muy importante en todos los ce-
rramientos que componen el edificio.
• Si el edificio presenta como sistema de calefac-
ción y agua caliente sanitaria caldera individual
mixta, la calificación posible será la C. Se puede
llegar a la B si el edificio tiene una buena orienta-
ción con gran aprovechamiento solar, o si los ais-
lamientos térmicos son muy importantes, del or-
den del doble de lo estándar.
• Si el sistema de calefacción y agua caliente sani-
taria es del tipo centralizado, con calderas de alto
rendimiento, y un nivel de aislamiento térmico me-
dio-alto, la calificación posible será la B.
• Para obtener la máxima calificación posible, es
necesario que el sistema de calefacción y agua
caliente sanitario sea centralizado con calderas de
alto rendimiento, aislamientos térmicos importan-
tes y aprovechamiento solar para la producción de
agua caliente sanitaria mediante colectores sola-
res.
Edificios no residenciales
Existe también la posibilidad de certificar un edificio
no residencial, como puede ser un edificio de oficinas,
un hotel, un polideportivo, o cualquier otro edificio con
1
un consumo importante de energía . El procedimiento
es distinto al de los edificios residenciales, ya que se
estudian unos consumos que en este tipo de edificios
pueden ser muy importantes: iluminación y refrigera-
ción en verano principalmente. La iluminación en un
edificio de viviendas, representa menos del 10 % del
consumo energético total, mientras que en un edificio
de oficinas puede representar más del 50 %. Por su
do, su utilización y el consumo en refrigeración depen-
Para la iluminación, el procedimiento establece una
de la tipología del edificio. El objetivo es limitar este
cuanto a la refrigeración en verano, se establece un
máximo en las pérdidas por conducción a través de
los paramentos verticales.
Futuro
El futuro de la certificación energética de edificios
está claramente marcado por la Directiva comunita-
ria 2001/91/CE, en la que se detalla que todo edificio
nuevo deberá ser certificado a partir del año 2006. Sin
embargo, sería positivo por parte de constructores y
promotores adelantarse a la aplicación de dicha direc-
tiva, adoptando las medidas pertinentes para que en el
1
Actualmente, se están realizando certificaciones energéticas de
hoteles de nueva construcción en la Comunidad Autónoma del País
Vasco. Esto es así desde la publicación del Boletín Oficial del País
Vasco, con fecha de 14 de junio de 2001, que establece que los
establecimientos hoteleros de 3 ó más estrellas aportarán copia de
su certificación de eficiencia energética.
año 2006 no haya problemas con el cumplimiento de
dicha directiva.
En estos dos años de espera de aplicación de la di-
rectiva, la tendencia es clara hacia un mayor número
de edificios certificados energéticamente. Si bien hasta
la fecha el sector que más se ha involucrado en este
sentido ha sido el público, siendo en este campo un
referente claro, el número de promotores y constructo-
res privados interesados por la certificación energética
está aumentando.
Para la progresiva implantación de la certificación
energética de edificios existen mecanismos que de
alguna manera incentivan a promotores a conseguir
este certificado. Así, hay ayuntamientos concienciados
con el consumo energético que incorporan en sus
ordenanzas fiscales reguladoras del impuesto sobre
construcciones reducciones en sus licencia de obra, si
obtienen el certificado de eficiencia energética. La
construcción de edificios que demanden menos energ-
ía es una preocupación que afecta cada vez a más
arquitectos y promotores. Para ello se están adoptan-
do medidas como las siguientes:
• introduciendo aspectos bioclimáticos,
• incorporando a los edificios sistemas cada vez
más eficientes,
• y utilizando herramientas como la certificación
energética que aseguren un consumo eficiente de
los edificios.