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I.E.E.P.O I. M.E.

GOBIERNO DEL ESTADO DE OAXACA

INSTITUTO ESTATAL DE EDUCACIÒN PÚBLICA DE OAXACA


INTITUTO MULTIDISCIPLINARO DE ESPECIALIZACIÓN
ESPECIALIZACIÓN

ENSAYO
“HISTORIA ¿PARA QUÉ?”.

MATERIA
PROBLEMAS EPISTEMOLÓGICOS DEL APRENDIZAJE EN LOS
PARADIGMAS ACTUALES DE LA PSICOLOGÍA

DOCTORADO 4

PRESENTA:
GUSTAVO ALVARADO GARCÍA

ASESOR:
DR. ALBERTO AGUILAR

OAXACA DE JUÁREZ, OAXACA A 17 DE ABRIL DEL 2010


Me encuentro solo en la habitación con un libro entre las manos titulado "teorías
de aprendizaje para maestros" de Morris Bigge, son varios capítulos donde cada
uno de ellos me invita a reflexionar y comprender realmente que he aprendido
durante mi proceso de aprendizaje y como los he aplicado en mi vida cotidiana.
¿Realmente han sido útiles? Estas y otras interrogantes comienzan a aparecer en
mi mente, necesito respuestas, busco en mi pasado los momentos más
significativos y relevantes. Es momento de mirar atrás y hacer un análisis real de
mis aprendizajes, valorar y entender del porque se me fueron enseñadas.

Al hacer un recuento de mis aprendizajes surge en mí la duda de cuales


han sido importantes en mi vida y las que he podido aplicar en el transcurso de la
misma. Realmente todas han cumplido con una función o únicamente los
trascendentales; me gustaría acordarme de todas pero al parecer únicamente
vienen a mi mente los más significativos ¿De qué manera se produjeron estos
conocimientos en mi proceso de enseñanza y de aprendizaje? Según la teoría de
la Gestalt fueron por insights, siendo estos aprendizajes conscientes y en otros
casos mecánicos.

En la actualidad con base en el curriculum que se aplica en nuestro país,


en todas las escuelas primarias se caracteriza por que el aprendizaje del alumno
sea más significativo, apoyándose en la teoría del constructivismo. Durante el
desarrollo del aprendizaje el alumno tiene que estar siempre motivado, que
encuentre una situación agradable en el momento de interactuar con el objeto de
estudio, en busca del conocimiento y de esta forma desarrolle una inhibición
interactiva.

Afirmaciones e interrogantes surgen en el análisis por entender


verdaderamente ¿Cuáles han sido los aprendizajes significativos y aplicativos en
mi vida escolar? ¿Cuáles me han facilitado desarrollarme en el contexto familiar,
cultural y social? tomare como referencia el aprendizaje de la historia con la
pregunta central: “La historia ¿para qué?” a partir de aquí se desprende subtemas
del ensayo que permite entender mejor mis interrogantes.

¿Qué es el aprendizaje?

Existen muchos conceptos de aprendizaje desde los que proponen los


conductistas y los de la Gestalt.

Los conductista dicen que el aprendizaje es producto de un proceso


mecánico de tanteos, así también los neo conductistas conciben el aprendizaje
como un condicionamiento o un reforzamiento de conductas donde el aprendizaje
incluye una intencionalidad y una finalidad.

Por otro los teóricos de la Gestalt admiten el aprendizaje como el


desarrollo de insights, desarrollo de nuevas ideas o modificación de las antiguas:
ocurre cuando el individuo advierte nuevas formas de utilizar los elementos de su
ambiente incluyendo su cuerpo, el aprendizaje connota nuevas ideas y
significados adquiridos y los psicólogos de la Gestalt ven el aprendizaje como una
empresa intencional, exploradora, imaginativa y creativa. Se trata de un desarrollo
no mecánico o de un cambio de insights, siendo estos propios del individuo.

Entender como las dos teorías manifiestan el interés porque los


conocimientos lleguen a los alumnos; por una parte de manera tradicional como es
la de transmitir o vaciar los saberes y por otro lado de manera más significativa
propiciando el aprendizaje de forma constructiva.
Por lo tanto el aprendizaje debe ser un proceso a través del cual se
adquieren, se desarrollan o combinan habilidades, destrezas, conocimientos,
conductas o valores como resultado del estudio, la experiencia, la instrucción y la
observación; lo cual nos lleva a entender que debe de ser un aprendizaje que nos
sea útil y aplicativas en nuestras vidas que no sea un aprendizaje obsoleto.

¿Para qué y para quién se enseña la historia en las escuelas


primarias?

Esta interrogante ha sido una de las que más me ha llamado mucho la atención, al
valorar y entender porque en las escuelas primarias se abordan con tanto ímpetu
la enseñanza de la historia, porque tenemos que aprender historia. He participado
y asistido en cursos, talleres y congresos donde los temas centrales son: como
propiciar el aprendizaje de la historia. Aun no comprendo él porque tenemos que
memorizar fechas y a personajes que participaron en los momentos históricos de
nuestro país.

¿Para qué o para quién se enseña la historia?, una pregunta difícil de


responder, pero el contexto actual de la educación nos señala de antemano; que
se enseña para formar y continuar el perfecto funcionamiento del modelo actual,
por lo cual tampoco se enseña con igualdad para todos ya que tristemente para
que este modelo funcione bien, unos deben ser mas “capaces” que otros,
entendiendo la necesidad de suplir espacios en la sociedad previamente
limitados.1

1
http://hablemosdehistoria.com/archivos/historia-¿para-quien/ consultado el 30/03/2010 a las 15:00 hrs.
Distintos autores han abordado con profundidad estudios acerca de la
finalidad de la educación, trabajos como “La Reproducción” de Pierre Bourdieu,
resultan bastante certeros a la hora de contextualizarnos un rol “objetivo” de la
educación (la reproducción de los parámetros económicos y de clase en el
educando).

Bajo la premisa de la teoría de la reproducción; la historia cumpliría un rol


fundamental en la formación de ciudadanos o de “sujetos/objetos”, sujetos por la
libertad de pensar, expresar o consumir, objetos por estar destinados a ocupar un
lugar en la maquinaria social, cultural y económica.

A partir de este texto podemos especular que la historia pudiera cumplir


dos finalidades: la formación de un pensamiento histórico y la formación de una
conciencia moral-valorativa.

Resulta claro que el día de hoy en las escuelas públicas y privadas o en la


vida misma se usa y ha usado la historia como un mecanismo para la creación de
una conciencia moral valorativa que pone al sujeto como ciudadano común y
servil, entregándole a este una historia basada en hechos puntuales construidos
por “personajes” imitables, pero en ningún caso cuestionables; ejemplos de vida
para cualquier individuo, ejemplos que hacen sentir al sujeto como parte de un
país.

En la actualidad los programas educativos están destinados a continuar un


proceso de reproducción social y cultural de los sujetos y de acuerdo a la currícula
la enseñanza de la historia estará vinculada a un aprendizaje memorístico de
fechas y de personajes, siendo los docentes los encargados de reproducir y vaciar
la información en los educandos.
¿Para qué aprendemos historia?

Ineludiblemente tenemos que entender que la historia ha sido parte de nuestras


vidas, desde el nivel preescolar hasta el nivel medio superior nos enseñan a
conocer nuestra historia personal, familiar y social. Donde hacemos recuentos de
nuestro pasado, teniendo presente los acontecimientos más relevantes de
nuestras vidas.

Al sentarnos frente a un espejo y visualizar en nuestro semblante las


huellas y cicatrices de los años, descubrimos que el tiempo ha transcurrido
dejando en nosotros un baúl lleno de recuerdos que al evocarlos llegan a nosotros
en forma de insights que facilita la reconstrucción de los acontecimientos.

Es necesario hacer una valoración de lo que aprendemos en la escuela


para conocer realmente los alcances de nuestros aprendizajes, entandamos que
la finalidad de la educación formal es la de facilitar los aprendizajes fuera de las
escuelas, el aprendizaje futuro de los alumnos y que fundamente las situaciones
de la vida. Por lo tanto el aprendizaje de la historia debe de contribuir a que el
individuo lo aplique en su contexto social y provoque satisfacciones en su actuar
proporcionando al educando herramientas que le permita interpretar, descifrar,
valorar y analizar al mundo de las realidades objetivas y subjetivas en la que nos
encontramos inmersos.

¿La historia es importante para la vida?

Es difícil entender a la historia misma y mucho más complicado explicar si la


historia es importante para la vida; conocer fechas relevantes, personajes que
plasmaron sus ideales, acontecimientos que cambiaron el rumbo de las
civilizaciones, conocer los pasajes históricos del país, de la sociedad, de la familia
y de uno mismo te lleva a la reflexión de que la historia siempre nos acompaña en
el tiempo y en el espacio.

Se debe entender a la historia como un recuento de los momentos más


relevantes en la vida de un país, lugar o persona para la cual debe de ser
estudiada a partir de un punto de interés. El aprendizaje conduce a la
comprensión pero requiere de una participación más activa de los estudiantes,
más crítica del pensamiento convencional, imaginación y creatividad. La
enseñanza reflexiva conduce al desarrollo de una atmosfera áulica más viva y
excitante, critica, penetrante y abierta a los pensamientos nuevos y originales.

Aplicación de un método más psicológico a la enseñanza y aprendizaje


que implica la necesidad de métodos idóneos basados en el conocimiento del
hombre y sus funciones mentales. La necesidad de maestros apropiados y un plan
de estudios. Destaco la importancia de una base de experiencia en el proceso de
la apercepción.

¿La historia nos brinda aprendizajes significativos?

En este apartado es importante entender que el aprendizaje significativo es el


proceso según el cual se relaciona un nuevo conocimiento o información con la
estructura cognitiva del que aprende de forma no arbitraria y sustantiva o no literal.
Esa interacción con la estructura cognitiva no se produce considerándola como un
todo, sino con aspectos relevantes presentes en la misma, que reciben el nombre
de subsumidores o ideas de anclaje (Ausubel, 1976, 2002; Moreira, 1997).
Para que se produzca aprendizaje significativo han de darse dos condiciones
fundamentales:

• Actitud potencialmente significativa de aprendizaje por parte del aprendiz, o sea,


predisposición para aprender de manera significativa.

• Presentación de un material potencialmente significativo. Esto requiere:

• Por una parte, que el material tenga significado lógico, esto es, que sea
potencialmente relacionable con la estructura cognitiva del que aprende de
manera no arbitraria y sustantiva;

• Y, por otra, que existan ideas de anclaje o subsumidores adecuados en el sujeto


que permitan la interacción con el material nuevo que se presenta.

Por lo tanto, uno de los mayores déficits de la enseñanza tradicional de la


historia en las escuelas, era la presentación de los contenidos como unidades de
sentido rígido, cristalizada, establecida de una vez y para siempre. Sin embargo,
como cualquier otro pensamiento científico, el conocimiento histórico es un
conocimiento construido. En ocasiones, trabajosamente construido. Como en
cualquier otra ciencia (exacta, natural o social) las conclusiones son siempre
provisionales, las teorías son siempre transitorias. Debemos entender que la
manera como se enseño y se enseña la historia en las escuelas primarias no
favoreció ni favorece en nada a adquirir aprendizajes significativos y que en la
actualidad no lo podamos proyectar en el contexto donde actualmente nos
desarrollamos.
¿Habrá otra forma de enseñar historia para que realmente sea un
aprendizaje para la vida?

Se puede enseñar historia desde otra perspectiva para intentar entregar al


educando las herramientas necesarias para que estos puedan interpretar y
analizar la historia, una historia de la que también son parte, por cual merecen sin
duda alguna ser libres de hacerle las preguntas que deseen.

Pero en este punto también podemos percatarnos de la importancia que


va adquiriendo la “fantasía” en el aprendizaje, ya que la historia se difunde y
arraiga con mayor impacto, cuando se le atañen elementos fantasiosos, llegando a
mitificar a sus personajes; haciéndolos cada vez mas heroicos.

Por otra parte el acondicionamiento de una historia destinada a la


formación de una conciencia histórica, implica el derribamiento de las verdades
históricas, derribar al “Prócer” para entender el “proceso”. Al incitar al educando a
analizar la historia, es hacerlo consiente de la misma, por lo cual se transformaría
en un sujeto consiente de su historia como de su clase.

Educar de un modo distinto sin dejar de lado los programas establecidos,


es parte del reto de las próximas generaciones de educadores, ya que al ser
testigos de cómo se usa la pedagogía para formar, disciplinar y construir, también
podemos observar que esta se puede usar para liberar y destruir la omnipotencia
de la historia de las “Gentes muy importantes” para entregarle al sujeto una
historia de la cual todos somos y seamos parte.
La pregunta es ¿Cómo te ha servido y cómo has aplicado el
aprendizaje de la historia en tu vida?

Al pasar por los 12 capítulos del libro "teorías de aprendizaje para maestros" de
Morris Bigge y regresar nuevamente al lugar de donde partimos, después de una
retrospectiva de nuestro pasado y vincularlo a las teorías del conductismo y la
teoría de la Gestalt, encontramos respuestas a las preguntas que en un principio
carecían de ellas.

Los métodos de aprendizaje que se utilizan en la escuela pública, se ha


fomentado a través de métodos tradicionales, en ocasiones se ha abusado de la
memoria, de la mecanización, es posible que no estén mal estas formas de
aprendizaje siempre y cuando se hicieran de manera consciente como primer
paso y luego estos se mecanizaran. Por lo tanto los alumnos al ingresar a la
primaria no saben del mundo que se van a encontrar y que a partir de ahí
comenzara un cambio con respecto a sus aprendizajes previos.

Después del análisis personal sobre el aprendizaje de la historia y en la


forma en que lo aprendí concluyo que no han sido aplicables a mi vida y
únicamente me han servido para conocer fechas, personajes y acontecimientos
importantes en el mundo y entender que se aprende por aprender sin ningún
sentido, además de pasar un examen y obtener una calificación aprobatoria.

En nuestras manos esta hacer que la historia se aprenda


significativamente y que promueva una historia real en donde todos estemos
involucrados y dejemos a un lado la historia que se nos vende en el curriculum
para dar paso al aprendizaje de la historia con un sentido aplicativo a la
cotidianeidad y que sean funcionales en el ámbito escolar y social. Termino
diciendo obtengo conocimiento para vivir, por lo tanto, “la vida es aprendizaje”.

“La cultura, herencia social de una sociedad, es resultado del aprendizaje


acumulado por muchas generaciones”

Morris Bigge
BIBLIOGRAFÍA

Bigge, Morris. "teorías de aprendizaje para maestros".

http://cmc.ihmc.us/papers/cmc2004-290.pdf

http://hablemosdehistoria.com/archivos/historia-¿para-quien/

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