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climático y
servicios
ambientales
en la
región
amazónica Septiembre 30 y Octubre 1º de 2010
* Auditorio del Banco de la República
Leticia, Amazonas
Colombia
“
El clima está cambiando”. Esta es
una frase que se comenta hoy en día
en la red, noticieros, universidades,
colegios y en la calle. Las investigaciones
científicas recientes señalan que el clima
global está siendo alterado
significativamente como resultado del
aumento de concentraciones de gases de
efecto invernadero, tales como el dióxido
de carbono, metano, óxidos nitrosos y el
cloro, los cuales atrapan una creciente
radiación infrarroja que hace suponer que se tienen diferencias en temperatura entre 1.5 y
4.5 grados centígrados.
Como consecuencia de este cambio se estima que los patrones de precipitación global y
corrientes marinas también se alteran. Aunque existe un acuerdo general sobre estas
conclusiones, hay una gran incertidumbre con respecto a las magnitudes y las tasas de
cambio a escalas regionales. Por ende, habrá cambio en los ecosistemas globales y por
consiguiente en la flora y la fauna silvestre. Estos cambios, sin duda son atribuidos directa
e indirectamente a la actividad humana, no sólo alteran la composición de la atmósfera
mundial, sino que se suman a la variabilidad natural del clima observado durante
periodos de tiempo comparables.
Es necesario un gran esfuerzo para que la distribución equitativa de los bienes y servicios
derivados de la biodiversidad sea la renta estratégica de los países amazónicos en el siglo
XXI, y para lograr también desarrollar capacidades para ser reconocidos como potencias
competentes de recursos genéticos en el mantenimiento del equilibrio climático global y
en el desarrollo de nuevos principios activos para la industria farmacológica.
Los gases emitidos principalmente por la quema de combustible, petróleo y gas natural
son el principal generador del cambio climático. Sin embargo, cerca del 20% de las
emisiones de dióxido de carbono proviene de la deforestación. Si la destrucción de los
bosques continúa, estos bosques pueden convertirse en una fuente neta de dióxido de
carbono, según indica WWF.
Dado este escenario, este evento es un aporte al conocimiento sobre los temas de servicios
ambientales de los bosques y cambio climático. Conocimiento que servirá tanto para
emprender nuevas acciones comunitarias de bosques como para interiorizar conductas
que contribuyan en el día a la mitigación del cambio climático.
En cuanto al tema de información, el análisis debe estar orientado a ver si el país respalda
adecuadamente sus instituciones de investigación como el Instituto Sinchi y la
Universidad Nacional, entre otros. El Sistema Nacional Ambiental tiene, desde hace 17
años, institutos de investigación, y el país se tiene que preguntar si se están fortaleciendo
2.1 Conferencia:
Contexto de los servicios ambientales y cambio climático
Ponente:
Javier Blanco, Corporación Ecoversa
Los servicios ambientales o ecosistémicos son los beneficios que la sociedad recibe de los
ecosistemas. Los servicios ambientales se clasifican en tres grandes grupos: de
aprovisionamiento, que son aquellos que brindan al ser humano directamente comida,
agua, madera, fibras y combustibles; de regulación, que son servicios indirectos, como la
regulación climática, el control de inundaciones, control de plagas y enfermedades,
depuración del agua y el aire, y se relacionan mas con la calidad del ambiente y la
generación de bienestar para el ser humano; y culturales, que son los relacionados con la
recreación, el paisaje, la educación y lo religioso, en un contexto de apropiación y
pertenencia del territorio.
El estudio en mención dio como resultado, entre otras, las siguientes recomendaciones:
c) Los cambios tecnológicos se deben orientar hacia tecnologías agrícolas que aumenten
rendimientos con muy bajo impacto, energías limpias y eficiencia energética, restauración
de ecosistemas,
d) se debe incorporar el valor de los ecosistemas en las decisiones de inversión, así como
el uso de los conocimientos tradicionales para el manejo de ecosistemas, impulsando
además la construcción de capacidad en instituciones y comunidades.
En lo referente al pago por servicios ambientales (PSA), se propone que los que se
beneficien con un servicio ambiental tendrán que hacer un pago para conservar el
ambiente. Este pago por servicios ambientales se caracteriza por tener un comprador que
se beneficia del servicio ambiental, que puede ser del sector privado, público, organismo
internacional o del Estado, y un proveedor que es quien que tiene control sobre el recurso
natural, y por consiguiente existe una retribución del comprador al proveedor.
El mercado de carbono regulado fue creado por el Protocolo de Kioto del Convenio de
Cambio Climático. Éste es limitado a proyectos de reducción de emisiones por procesos
industriales y reforestación. Completamente regulado por instituciones, metodologías y
verificaciones.
2.2 Conferencia:
Cambio climático generalidades y trabajos desarrollados en
Colombia
Ponente:
Margarita Gutiérrez, Ideam
Las evidencias del cambio climático en Colombia muestran en los últimos años una
reducción en la precipitación anual, pérdida de áreas glaciales, aumento del nivel del mar,
e incremento de la temperatura. Estos son unos indicadores importantes en lo referente a
cambio climático.
Por otro lado, están los proyectos de mecanismos de desarrollo limpio (MDL). Hasta
diciembre de 2009, el país tenía 31,25% en proyectos energéticos, un 31,25% en proyectos
industriales, 17,36% forestales y 8,3% de transporte. El potencial anual de reducción de
emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) del total de los proyectos de mecanismos
de desarrollo limpio es de aproximadamente 16.402.496 toneladas de CO2.
Se han identificado algunos lineamientos para la encarar la adaptación, entre los cuales se
destacan los siguientes:
2.3 Conferencia:
Oportunidades y retos para la región amazónica en el tema
de servicios ambientales y cambio climático contexto social
y político
Ponente:
Martín von Hildebrand. Director fundación Gaia - Amazonas
En relación a esto, se dice que entre más diversidad tiene el planeta, más capacidad de
adaptación tiene. Por eso, si perdemos la batalla de conservación del Amazonas,
perdemos la batalla contra el cambio climático.
Los servicios ambientales no están en el mercado regulado y hoy por hoy no se están
negociando. Por ejemplo, Chingaza le da el agua a Bogotá y hay un servicio ambiental
identificado, pero en sí no existe el pago por servicios ambientales del bosque. A nivel
nacional se trabaja sobre la normatividad y reglamentación del pago por el servicio de los
bosques en pie porque son fundamentales para el planeta.
P ¿Para los proyectos REDD en el Amazonas, a qué se refiere con resolver la confluencia
de figuras de protección parques, reserva forestal, etc.?
R.
R Actualmente no hay claridad con el régimen de protección, ni de quién es la autoridad
competente. Un proyecto o una iniciativa REDD debe contener un acuerdo de uso de los
recursos naturales y conservación, que deben articularse con medidas de manejo y
planificación consecuente con dichas figuras de conservación.
P. ¿En el caso de la Amazonia existen proyectos formulados y qué tipos de proyectos MDL
P
puede aplicar el departamento del Amazonas teniendo en cuenta sus particularidades
específicas?
R. Los temas de los proyectos REDD están en discusión. Se están evaluando en la región
R
amazónica las oportunidades teniendo en cuenta que todos los proyectos están en etapa
de diseño. Las instituciones, que se encuentran en una etapa muy temprana con respecto
a REDD, se están preparando y fortaleciendo sus capacidades.
P. ¿Por qué hay intermediarios en el esquema de pago por servicios ambientales? ¿Cuáles
P
son los pasos necesarios para que la sociedad amazónica llegue a los pagos por servicios
ambientales y una iniciativa REDD?
Las reglas no están acordadas a nivel nacional y el trabajo conjunto con comunidades y
autoridades indígenas debe orientarse al fortalecimiento de la visión frente a la
conservación y la preparación en el tema.
P. En abril se realizó la cumbre de los pueblos para debatir los fracasos de Copenhague y
P
para reducir las emisiones de CO2 y del cambio climático. Se habló de deuda ecología y
responsabilidad de los países industrializados, ¿por qué en este espacio no se habla de
estos temas, no es el clima que tiene que cambiar ese sistema económico que nos ha
llevado a un exagerado consumo de los recursos?
Hay una manera de identificar proyectos sospechosos. Este en alerta si quién los ofrece:
Actualmente hay un nuevo concepto denominado REDD+, o REDD plus, que reconoce
otras actividades elegibles para este mecanismo, tales como la conservación de los bosques
y sus stocks de carbono, la gestión sostenible de los bosques y el aumento de las reservas
forestales en los países en desarrollo.
Para REDD+ hay tres actores clave dentro este proceso. El primero es el tenedor de la
tierra, que puede ser, en principio, propietarios, las comunidades o una institución del
estado como Parques Nacionales Naturales, entre otros. El segundo, es el Estado
colombiano como garante de las negociaciones; y el tercero, es el comprador de bonos de
carbono: un ente internacional, puede ser un país, una institución o un mercado
voluntario. En este mecanismo es importante que se cuente con el apoyo y orientación de
personal especializado (instituciones o personas) para desarrollar el proceso.
Debe haber unos pasos mínimos que se deben cumplir para desarrollar un proyecto
REDD. Esto es un proceso complejo, que se inicia consultando a las autoridades
ambientales para saber qué se puede o qué no se puede hacer en determinada región, tras
lo cual se establecen unas tasas de deforestación y se calculan los contenidos de carbono.
Esto, sumado a una estimación de características socioeconómicas de una región que
permitan entender la dinámica de avance de la deforestación, lleva a generar un estudio
de línea base.
Después de este paso hay que diseñar una estrategia de reducción de deforestación y se
plantea un escenario de reducción de emisiones. Luego se hace un análisis de costo-
beneficio para saber si el proyecto es viable o no. Si es viable, se puede ejecutar el proyecto
Este mecanismo busca cumplir con un patrón de estándares técnicos que está
desarrollando el IDEAM. Debe trabajarse sobre el manejo de fugas, que es un factor
atado a las circunstancias nacionales: la movilidad de los motores de deforestación, el
monitoreo adecuado para detectar y controlar fugas.
El gobierno establecerá una serie de salvaguardas ambientales y sociales determinadas
mediante el proceso de socialización de la estrategia con comunidades, la sociedad civil,
entidades gubernamentales y en general, todos los actores relevantes. Estas serán
incorporadas a las tres etapas de la estrategia. Los proyectos REDD+ elegibles tendrán en
cuenta no sólo las actividades de deforestación, sino también las de conservación de los
bosques, de tal manera que se incluyan en las negociaciones los stocks de carbono de
bosques con una relativa baja tasa de deforestación. Estos son los lineamientos generales,
pero aún está en proceso de construcción.
La Propuesta de Preparación para REDD busca identificar cómo está el país, qué hace
falta para participar en REDD, cómo hacerlo y cuánto costaría estar preparado. Debe
llevar también a proponer un paquete de implementación que debe garantizar al final la
capacidad de país para desarrollar proyectos REDD.
4.2 Conferencia:
Capacidad institucional técnica y científica para el apoyo a
proyectos de reducción de emisiones por deforestación
REDD en Colombia.
Ponente:
María Fernanda Ordoñez. Ideam
¿En qué consiste este proyecto? Lo primero que busca es desarrollar protocolos para la
cuantificación de deforestación y la estimación de biomasa y carbono a escala nacional y
subnacional, así como establecer la ruta metodológica no sólo para el Instituto, sino para
posibles desarrolladores de proyectos REDD.
Por último, lo ideal es que todas estas capacidades del país se consoliden en la estrategia
que se está diseñado para la observación de estos resultados y en un aplicativo web donde
se pueda bajar toda la información, mapas, estimaciones de carbono y protocolos, entre
otros materiales.
Con respecto a la deforestación por regiones desde 1990 a 2005, del total del área
deforestada en el país, el 40% corresponde a la región Amazonia, seguida por Andes 30%,
Caribe 12%, Orinoquia 10% y Pacífico con un 8%. Sin embargo, aunque la cifra de
deforestación de Amazonia es la más alta, esta región cuenta en la actualidad con la mayor
cobertura de bosque.
4.3 Conferencia:
Mesa de cooperación amazónica y cambio climático
Ponente:
Edward Davey. Asesor de Cooperación Internacional y Medio
Ambiente de Acción Social.
Esta Mesa también tiene el reto de apoyar a las instituciones del Estado y organizaciones
locales, como las gobernaciones y corporaciones autónomas regionales. Esta Mesa tiene la
capacidad de apoyar procesos de liderazgo regional, tal como lo plantea la gobernación del
Amazonas como un departamento comprometido.
Los pilares de trabajo son cinco. El más importante y el que más ha avanzado es el de
fortalecimiento de capacidades, cuyo objetivo es generar conocimiento y divulgar ese
conocimiento a las comunidades, organizaciones, instituciones y profesionales, entre otros
actores, que trabajan en temas relacionados con el cambio climático.
Los temas que se están tratando son el calentamiento global, el efecto invernadero, los
bosques, los servicios ambientales, el carbono como indicador de cambio climático,
REDD y REDD+, administración y distribución de beneficios y actividades de réplica
para que los participantes de estos eventos lleven la información a su región, para que sea
conocida por todos.
El segundo eje es el tema Jurídico cuyo objetivo es identificar los temas críticos desde el
punto de vista jurídico e institucional para la implementación y viabilidad de REDD en
Colombia. Tiene dentro de sus responsabilidades la planeación, el diseño y la
implementación de una serie de talleres para expertos jurídicos, así como la producción
de material técnico y jurídico como resultado del taller; el trabajo del grupo de expertos y
el establecimiento de un plan de trabajo e implementación de los resultados del taller.
R Camilo Ortega: Para ver la viabilidad de un proyecto REDD se deben tener en cuenta
muchos parámetros.
Sí, es una gran ventaja tener un alto contenido de carbono en los bosques, aunque estos a
su vez éstos tengan unas altas tasas de deforestación. La gente no deforesta porque quiera,
lo hace por una razón, y es necesario entender cuáles son sus motivos.
En las zonas con grandes tasas de deforestación hay muchos motores que la provocan,
pero permiten identificar costos de oportunidad en esa zona; entonces la pregunta sería
¿hasta qué punto un proyecto REDD realmente podría llegar a cubrir esos costos de
oportunidad?
P. ¿Cuáles son las oportunidades reales de incluir los bosques con bajo grado de amenaza
P
en proyectos REDD Plus?
R . Estrategia y articulación. Para que la estrategia refleje las posiciones de los diferentes
actores se está trabajando en la búsqueda de una instancia doble que permita el
acercamiento institucional a cada comunidad, así como llegar hasta donde sea posible a la
Mesa Regional Amazónica.
La Mesa REDD tiene el propósito de fortalecer capacidades y hacer una interfaz entre las
organizaciones del gobierno con las comunidades indígenas. Está abierta la participación
de organizaciones indígenas y otras organizaciones interesadas.
R REDD se genera como un incentivo para unas prácticas que están generando un
impacto ambiental, y una reserva tiene como objetivo la conservación de un terreno,
entonces sería extraño aplicar un incentivo en algo que por su naturaleza debería no tener
esas situaciones de degradación ambiental.
R . Durante el primer año de la Mesa hubo un encuentro con las comunidades indígenas.
Ahora se busca que en las próximas reuniones estén algunos de los jefes en la Mesa de
Cooperación, y se está discutiendo el cómo lograrlo, porque la mayoría de las reuniones
se celebran en Bogotá y la distancia es un impedimento. Sería ideal la participación de
ellos y que estos tengan la posibilidad de llegar a Bogotá, aunque la logística y los costos
de viaje son muy altos. Es importante la participación activa de la Mesa Cooperativa y que
se haga en cada departamento amazónico del país.
R El intercambio se ha hecho con algunas de las organizaciones que trabajan con los
miembros de la Mesa, pero en forma directa se tiene planteado el componente de
capacitación y formación en el tema. Se debe realizar la solicitud y la Mesa está abierta
para esto.
6.1 Conferencia:
Plataforma nacional para la conservación y la sostenibilidad
de la Amazonia colombiana
Ponente:
Diana Castellanos. Directora Territorial Amazonia - Parques
Nacionales Naturales de Colombia.
Por un lado están las reservas naturales y las áreas sustraídas que ya son 2'000.000 de
hectáreas de áreas de sustracción de la reserva forestal; los resguardos indígenas con
24'000.000 de hectáreas en esta zona; y otras áreas de manejo especial que también
confluyen allí, como el área de manejo especial de la Macarena y el área de manejo de
suelos de la zona de Florencia, en el Caquetá. Las áreas protegidas son 7'900.000
hectáreas aproximadamente, cubriendo 11 áreas protegidas dentro de la región. Todas
estas conforman el conjunto de las figuras de ordenamiento existentes y que nos dan el
contexto para el trabajo posterior.
En los mapas del IDEAM, hay todavía dos continuos de bosque. Uno en la zona de la
Macarena y otro en la zona del Inchiyaco Tambor, de la bota caucana hacia la planicie en
donde todavía el continuo de bosques arranca desde la cordillera y se extiende hacia las
planicies. Nuestro interés es en el tema de ordenamiento territorial, porque esta zona es la
punta de colonización hacia la gran planicie.
Los aliados que han venido sumándose a la estrategia y la cooperación, lo han hecho
apoyando una o más líneas estratégicas mediante la ejecución conjunta de proyectos en el
área de intervención.
6.2 Conferencia:
Avances de Corpoamazonia en la implementación de
mecanismos de compensación por servicios ambientales
Ponente:
Nora Edith Solarte Ojeda, Corpoamazonia, e Ilbia Niño,
WWF.
La definición de bosque para MDL incluye criterios altura, mínimo 5 metros, área
continua de una hectárea y 30% de cobertura. Para este caso, lo que se conoce en la
Amazonia como rastrojo alto Amazonia podría cumplir estos criterios de elegibilidad.
Al evaluar la adicionalidad nos dimos cuenta que el proyecto ya estaba financiado, pues
tenía un costo de 15 mil millones de pesos, de los cuales 12 mil millones, eran aportados
por el Banco Agrario como créditos para la gente que pudiera acceder, y 3 mil millones
más los aportaba Corpoamazonia para ayudar a financiarlos. Estos créditos también se
estaban manejando a través del Incentivo para la Capacitación Rural (ICR).
Prácticamente de lo que la gente podía acceder era a un subsidio del 60% de los créditos,
así que definitivamente no aplicaba.
Se realizó también un ejercicio de modelación del carbono a través del TARAM, una
herramienta para modelar carbono y determinar si el proyecto se podía o no hacer en las
5.000 hectáreas planteadas para Caquetá y Putumayo. Dio resultado para las 2.650, solo
en Putumayo, y 20,52 toneladas hectárea/año. En ese momento el valor de la tonelada
estaba en 2,5 dólares, lo que daba un beneficio en pesos de $102.596 hectárea/año. Ya
con estos valores que había dado la modelación, se tomaron los niveles más bajos de
captura, lo que dio un valor pequeño, porque podrían ser más las toneladas de captura un
bosque o una plantación.
Con base en esto, se calculó la rentabilidad del proyecto con MDL y sin MDL. Sin MDL
era del 24,17% y con MDL del 25%. Finalmente, no era muy significativa la diferencia en
términos de rentabilidad. Este fenómeno se daba porque el número de hectáreas era muy
pequeño, entonces el costo del proyecto se dividía entre menos beneficiarios y no
compensaba la inversión. Se manejaban unos costos del proyecto 400 millones de pesos,
que fue lo que nos asesoró Corcuencas y Cornare. Con ellos se pudo hacer el trabajo
inicial de evaluación porque en ese momento eran los que estaban más avanzados en
MDL en la parte forestal.
Finalmente, decidimos dejar ese proyecto y no meterlo como MDL, principalmente por
los altos costos de formulación del PEB y porque implicaba mucho tiempo para
Procuencas, que ya llevaba casi 6 años en el proceso de validación del proyecto de MDL,
para poder vender certificados de reducción de emisiones, al igual que para Cornare, que
ya habían hecho todo el proceso de aprobación de metodologías.
La conclusión final fue que el proyecto tenía problemas grandes para demostrar
adicionalidad en su momento y por eso decidimos dejarlo. Sin embargo, hemos hecho la
consulta con el Ministerio y podríamos sacar las áreas que ya están sembradas y pensar en
incorporar al Caquetá como un proyecto de MDL.
El BID visitó el área y determinó que prácticamente las tasas de deforestación eran muy
bajas y que un proyecto de REDD no ameritaba. Como en esas zonas no había mucho
potencial para estos proyectos, se evaluaron otras tres zonas posibles: una de Mocoa al
Caquetá, Florencia; otra en la zona del Putumayo y del bajo Putumayo; y de Mocoa al
Valle del Guamuéz.
Los resultados del análisis revelaron que en estas zonas había bajo potencial para la
reducción de emisiones y para la de reserva de carbono; además de la presencia de grupos
armados y cultivos ilícitos, y de deforestación causada por ganadería. De igual manera, no
había disponibilidad de imágenes para identificar si las tasas de deforestación eran
significativas para un proyecto REDD y hacerlas constaba más de 300 millones de pesos.
Finalmente, lo que se concluyó fue que la región podría experimentar cambios a corto
plazo en términos de gobernabilidad y podían aumentar las tasas de deforestación, por lo
cual en algún momento se podría volver a retomar la iniciativa para ver si en ese
momento era factible.
Con base a esas experiencias previas que limitaban para trabajar con carbono, se trabajó
un esquema de compensación más local, que llevó finalmente al desarrolló de este
proyecto. Se realizó en 2008 un convenio con CIPAV para formular un proyecto con el
cual se desarrollara un esquema de compensación a través de la reconversión ganadera.
Para ello se debía existir un problema que los beneficiaros de los servicios ambientales
reconocieran. El problema es que hay una ganadería extensiva en la parte alta de la
cuenca y la gente de abajo se ven perjudicadas con la sedimentación y la escasez de agua.
La solución era que ellos reforestaran y quedaran con bosques, y así se mejorara el caudal
hídrico, pero surgió el interrogante de qué iba a vivir la gente.
El proyecto planteó otra alternativa para que tanto los de la parte alta como los de abajo
estuvieran contentos: de forma prioritaria, cerrar el paso del ganado a las fuentes hídricas
sin sacarlos definitivamente y garantizar unas formas de condición estables que la comida
que estaba distribuida en esta área, se pudiera concentrar o duplicar en un área menor.
Para eso se hizo una matriz de ponderación de las cuencas hidrográficas donde se podía
trabajar. Se tomaron inicialmente 16 cuencas abastecedoras de acueductos municipales en
el departamento del Putumayo, y con una serie de criterios que se evaluaron, se definió
como área de trabajo la cuenca hidrográfica del Valle del Sibundoy, el río Putumayo, en la
parte alta de San Francisco y en una cuenca que se llama Agua Negra, que es una
microcuenca que abastece al municipio de Puerto Asís, en la parte baja del Putumayo.
El valor a pagar se calculó a partir de una modelación de cuáles son las ganancias del
ganadero. Se les hizo una encuesta de cuánto están invirtiendo en veterinario, vacunos y
mejoramiento de pasturas, en abono de los suelos y la tendencia que ellos tenía, con el
sistema de ganadería extensiva, era bajando su rentabilidad hasta un punto del año 23-24
y generar perdidas a su sistema productivo.
El esquema que se sugirió fue hacer una bolsa común de recursos municipales, de
cooperación y de empresas de servicios públicos. Los recursos municipales, pensando en
el Artículo 111, que ya les permite no solamente la compra de predios, sino también
poder financiar proyectos o esquemas de proyectos por servicios ambientales. Igualmente
los recursos de cooperación, puede ser internacional, y las empresas públicas se van a
beneficiar del proyecto que se está adelantando y ellos podrían aportar a la bolsa común.
¿Cómo generar los servicios ambientales? Como se estaba trabajando en predios donde
no había servicios ambientales, sino que querían generarlos, se propuso unas metas que
eran el establecimiento de sistema silvopastoriles, el establecimiento de bancos de forrajes,
aislamientos de cuencas, cercas vivas y la implementación de bebederos. Aparte de esto, se
acompañó el proceso de conversión ganadera con dos capacitaciones y dos giras
nacionales para que la gente pudiera motivarse y así entender que este proceso era más
rentable, y que sería más sostenible en el tiempo y amigable con el ambiente.
Como los ganaderos hasta que no ven no creen, la idea era que conocieran los sistemas y
comprobaran que sí funcionan y así se motivaran a seguir en el proyecto. Lo que se quería
era hacer una planificación integral de la finca, poder establecer los componentes que se
están planteando. Si bien, la ganadería es el eje central, la idea es que ellos vayan
construyendo su visión de finca ideal.
El avance de campo nos permite ver que hay 105 mil especies forrajeras, y que sembrando
cercas vivas, no madera muerta, se favorecen los servicios como la captura de carbono. Se
están implementando sistemas de cercas eléctricas, y de doble cerca, para proteger la cerca
viva.
Inicialmente ha sido difícil que la gente empiece a ceder con el aislamiento del cauce,
pero día a día han ido comprendiendo el beneficio de hacerlo. Igualmente, para que se
Las conclusiones hasta el momento son: a) No es fácil conformar un fondo común para
mantener un pago de servicios ambientales sostenibles en el tiempo; y b) No existe
disponibilidad de pagar por parte los beneficiarios directos del servicio ambiental, quien
se beneficia de una mejor agua no tiene los recursos para pagar y los pagos no los estamos
haciendo a los beneficiarios.
Partimos de unos criterios para selección de estas iniciativas. Hay diez criterios: prestación
de servicios, servicio mensurable, enfoque de conversación, replicable, alternativa
superior, proveedores y beneficiarios, costo beneficio, capacidad legal o institucional,
actores claves, equidad y viabilidad política, y contexto económico. Para el ejercicio
salieron positivos todos los criterios, menos uno que son alternativas superiores.
La metodología se llama NatCap o capital natural y utilizar una herramienta que se llama
InVEST. Esta herramienta nos permite cartografiar servicios ambientales tales como
regulación hídrica, biodiversidad, secuestro y almacenamiento de carbono, retención de
sedimentos y regulación de la contaminación hídrica.
Esta herramienta se usa mediante una plataforma que está disponible para todo el
mundo y parte de nuestro trabajo es capacitar a los centros gubernamentales en el uso de
la herramienta para poder ser multiplicado en diferentes partes.
Una de las limitaciones de este modelo es que se basa en información secundaria. Parte
de la modelación que se está haciendo en estas cuencas, también se está haciendo para la
zona de la amortiguación en uno de los Parques Nacionales, como réplica de un proceso
en que hemos venido trabajando en la cordillera real oriental.
Los servicios ambientales son una cuestión de negocio, que se basan en una transacción
económica. Hay que identificar quién vende y quién compra. Hay muchos aspectos
críticos que es necesario definir y hacer una reflexión sobre si es a través de mecanismos
REDD como se contribuiría a la sostenibilidad ambiental y si se mejorarían las
condiciones de vida de la población.
El proceso adelantado por el Sinchi también ha permitido identificar cuáles son los
servicios ambientales de mayor potencialidad para la región, mediante procesos de
concertación con las comunidades locales e instituciones de los departamentos del norte
amazónico.
Ese fue un aspecto importante porque la gente está acostumbrada a usar los recursos
naturales, pero no sabe exactamente qué es lo que está usando, y no hay claridad si se
trata de un bien, un servicio, o si es materia prima. Entonces aún hay mucha confusión
frente a la separación del concepto entre bien y servicio ambiental.
El ejercicio también permitió la formulación de los objetivos del programa para los tres
departamentos, lo cual puso en evidencia que al contrario de lo que se pensaba, el
enfoque del programa no debía centrarse tanto en la identificación y priorización de los
servicios ambientales, sino en la promoción de condiciones para el desarrollo sostenible,
el manteamiento de los modos de vida y la reducción de la afectación de los recursos
naturales.
El trabajo realizado por el Instituto Sinchi concluye que los servicios ambientales se
consideran como una alternativa viable para la región y que pueden contribuir a inducir
cambios en el actual modelo de desarrollo. Sin embargo, existen limitaciones en lo
técnico, político e institucional para su aplicación, que necesitan esfuerzos para promover
procesos sólidos de identificación, valoración e instrumentalización de los servicios
ambientales. Esto implica el diseño de incentivos económicos y esquemas de pago por
servicios ambientales (PSA), aunque las características de la región y las situaciones
complejas de orden social hacen difícil la implementación de esquemas de PSA.
Por último, para poder decirle a un tomador de decisiones qué es lo que tiene que regular
y en dónde, hace falta un ejercicio de definición seria acerca de cuáles son los servicios
7. Panel de preguntas
Bloque 3.
P ¿Qué papel juega la gobernabilidad y el reconocimiento social dentro de la viabilidad
de los esquemas de pago por servicios ambientales?
P ¿Qué alternativas de solución, desde las instituciones ambientales, existen para mitigar
el impacto de la ganadería sobre las varzéas y territorios de las comunidades asentadas en
Yahuarcaca, después de casi 3 años de proceso legales de denuncia que han sido
imperantes, ya que siguen perdiendo cultivos de temporada y deteriorándose el sistema
hídrico?
R Lo que estamos intentando hacer con el proyecto es disminuir los impactos y evitar el
impacto de la ganadería en las fuentes hídricas, principalmente, las abastecedoras. Se
busca concentrar y mejorar la producción, así como controlar la cantidad de cabezas de
ganado por área y aumentar la capacidad de carga para evitar a que accedan a las fuentes
hídricas con la implementación de bebederos sustitutos.
R Los puntos se definieron a partir de una discusión, una experiencia que venía
manejando SINPAU. Ese proyecto fue como una réplica de un proyecto grande que está
manejando CEPAL, y lo que hicimos fue establecer unos puntos inicialmente, y como
técnicos le fuimos damos una puntuación según el servicio técnico que estamos
requiriendo. Había unos, por ejemplo, como el de plantaciones puras, lo habíamos
planteado como ceros puntos porque el proyecto de restauración de tierras estaba
apoyando, entonces sería una doble compensación. Finalmente, nos dimos cuenta que
no había ningún beneficiario del proyecto, entonces lo contemplamos como un
beneficiario de 60 puntos porque es importante para la prestación del servicio.
P ¿De qué manera van a fortalecer a las autoridades indígenas o vincularlas para la toma
de decisiones con las autoridades territoriales?
8.1 Conferencia:
Cambio climático ventajas y desventajas de REDD+ en la
cuenca amazónica
Ponente:
Ivan Escobar Guzmán. Delegado para medio ambiente de la
Coica.
La COICA trabaja por la lucha de los pueblos indígenas; ella no negocia ni habla en
nombre de los pueblos indígenas. Existen nueve organizaciones internacionales miembros
de la COICA: ORPIA en Venezuela, OPIAC en Colombia, CONFENIAE en Ecuador,
AIDESEP en Perú, CIDOB en Bolivia, COIAB en Brasil, FOAG en la Guyana Francesa,
OIS en Surinam y APA en Guyana.
¿Cuáles son los ámbitos de acción de la COICA? Esta tiene unos ámbitos de acción con
otras organizaciones regionales a nivel de Latinoamérica. Trabaja en conjunto para llevar
una sola vocería, tiene participación activa en la Convención Marco de la Naciones
Unidas sobre Cambio Climático (UNFCCC), en el Foro Permanente de las Naciones
Unidas para Cuestiones Indígenas (UNPFII), en el Foro Social Mundial (FSM), en el Foro
Indígena Latinoamericano sobre Cambio Climático y en la Cumbre Continental de
Pueblos Indígenas Abya Yala.
La COICA tiene también unos ámbitos de acción con organizaciones del Estado y tiene
un estatus consultivo en la ONU con las universidades amazónicas y con el parlamento
amazónico, entre otras organizaciones. Además, cuenta con alianzas como la Alianza
Las iniciativas REDD Plus no son la solución si no se garantiza el ejercicio de los derechos
de los pueblos indígenas a la propiedad, administración, control y gestión de sus recursos
naturales. Si no se garantiza una consulta basada en el consentimiento previo libre e
informado. Se debe garantizar que los pueblos indígenas son titulares de derechos y que
en esos territorios hay bosque. Entonces es necesario comprender cómo establecer una
relación para la gobernanza y administración de esos territorios, en donde también hay
mar, ríos y otros recursos.
Estas iniciativas representan a su vez amenazas y desventajas: son varios los representantes
de pueblos indígenas y de otras organizaciones involucradas en el tema de iniciativa
REDD+ que han expresado sus preocupaciones respecto a los posibles impactos negativos.
También preocupa que el mecanismo REDD+ esté siendo deliberadamente diseñado para
excluir los derechos de los pueblos indígenas. Por ahora nada indica en forma clara y
explícita que las comunidades o los pueblos indígenas vayan a verse beneficiados. Además
los pueblos indígenas y otros grupos, como las organizaciones de mujeres y los
movimientos campesinos han quedado casi totalmente excluidos del desarrollo del
sistema. Si esta tendencia se mantiene, dichos grupos no tendrán oportunidad alguna de
influir sobre los acuerdos ni de participar en pie de igualdad en las iniciativas REDD
Plus. La captura y acaparamiento de los recursos financieros internacionales disponibles
para la ejecución del mecanismo REDD+ por las grandes compañías y de las élites locales
y nacionales, no deben excluir a los pueblos indígenas y a las comunidades locales del
papel central que deben tener, si el objetivo es lograr de manera exitosa el fin de la
deforestación.
8.2 Conferencia:
Cambio climático y pueblos indígenas
Ponente:
Juan Álvaro Echeverri, profesor Universidad Nacional de
Colombia sede Amazonia
De acuerdo con la investigación realizada con los indígenas del medio Caquetá, de La
Chorrera, de la región del Río Putumayo y de los alrededores de Leticia, se estableció que
ellos perciben este cambio climático. Ellos tienen una clara percepción de los fenómenos
de variación climática y de las anomalías en los ritmos regulares climáticos, pues hacen sus
chagras, cazan y pescan, actividades que requieren y les permiten observar los periodos de
fructificación, de aparición de los insectos, de reproducción de los peces. Los indígenas
son muy buenos observadores de la naturaleza y perciben índices ecológicos que deben
corresponder a una cierta regularidad de las estaciones. Fue por esto mismo que
empezaron a manifestar, desde finales del Siglo XX, que había alteraciones y anomalías en
Los efectos del cambio climático tienen efectos diferenciados en los dos ecuadores
climáticos, lo cual se hizo evidente en los efectos de la sequía del 2005. Uno de los
indígenas mencionaba el calendario ecológico, donde la noción del ritmo estacional de la
selva es central en la ordenación de la vida productiva y ritual, en el manejo de la salud y
en la percepción de los fenómenos naturales. Los indígenas leen el cambio climático en la
naturaleza, mientras que las instituciones lo leen en Internet. Es necesario aprender
mucho de los indígenas en el tema del ritmo estacional; por ejemplo, cuando llega el
friaje, los indígenas saben que la creciente del río ya no va subir más, y que ese es el
tiempo de la cosecha de chontaduro. Los huitotos dicen que el friaje viene a fecundar
toda la naturaleza, que es como la menstruación de la tierra, porque se llenan todos los
rebalses y después todos los troncos podridos son arrastrados como una forma de
limpieza. Estos fenómenos son para salud y fecundidad en todo el sistema.
Después del friaje viene el verano, el cual tiene diferentes nombres en relación con las
cosechas, por ejemplo de caimo y piña. Luego de este verano viene el tiempo de gusano,
tiempo de enfermedad, en el cual hay tormentas, el río sube y baja, hay paludismo y
diarreas. Entonces se dice que los tiempos traen prevenciones, y que hay que tener un
diálogo con la naturaleza, que tiene que ver con prevenir todas las enfermedades que se
anticipan y hacer dietas y restricciones. Luego ya viene el verano de Umari y el de
chontaduro, al que se llama la madre del verano, en el que llegan los vientos del verano a
secar las tumbas (cortes de vegetación) que se hacen en este tiempo.
Esto es una manera muy abreviada de cómo los indígenas perciben estos cambios. Un
primer cambio es el incremento de temperatura. Los datos más notorios son la
estacionalidad seca y lluviosa: llueve cuando no debe llover, hace calor cuando no debe
En conclusión, las alteraciones de la estacionalidad, las alteraciones de los niveles del río y
de los regímenes de precipitación traen una cadena de efectos ecológicos. Por ejemplo, las
fallas en la creciente tienen efectos directos en la reproducción de los peces. Los vientos
de friaje traen efecto en la fecundación de los frutales, sobre la fauna terrestre, además de
que se asocia a que es época de más enfermedad. A consecuencia de esto, dos frutas
claves como son la de canangucho y chontaduro, han traído anomalías en sus cosechas.
Las alteraciones en los ríos traen consigo efectos en la fauna acuática, que es la principal
fuente de proteína para las comunidades indígenas. Uno de los efectos más importantes
es sobre el efecto en la horticultura de monte firme, que es la que mayor diversidad tiene.
Si no hay verano claramente establecido fracasa la quema de las chagras. La regularidad de
las lluvias y el calor marchita las plantas recién sembradas. La chagra no es un sistema
productivo; la chagra es una defensa y es un conocimiento. Todo esto combinado empieza
a tener efectos en la salud. Por ejemplo, el calor más alto en las chagras empieza a afectar a
las mujeres que son las que trabajan ahí. Ese calor aumenta el humor del monte que
también es enfermedad. Menos proteína por fracaso en la reproducción de los peces,
menos minerales y vitaminas por fracasos en las cosechas silvestres, esto afecta la salud de
los niños, quienes más requerimientos nutricionales tienen, es un sistema frágil.
Los grupos que más dependen del monte y del agua para su supervivencia son los más
concientes de estos fenómenos, porque viven en contacto con ellos. Estos son los más
vulnerables, por ejemplo los niños, las mujeres por el trabajo en la chagra, las personas
que hacen los rituales y por último los hombres.
8.3 Conferencia:
Las asociaciones indígenas y territorio de manejo en el
Amazonas
Ponente:
Omar Cubeo.
Las asociaciones de autoridades indígenas, las AATIS, muestran que la asociación tiene
una formación ancestral. Los pueblos indígenas son los que conservan en el
departamento. Los territorios indígenas enfrentan grandes amenazas internas hoy en día,
como lo son la amenaza de extracción de madera, la minería y la pesca comercial, entre
otras. No hay controles de pesca.
También hay amenazas que vienen desde afuera contra los pueblos indígenas, como por
ejemplo las relacionadas con las figuras de ordenamiento político y administrativo que no
están acorde con la dinámica de los territorios indígenas, pues sobre ellos han impuesto la
municipalización de corregimientos. Esta es una figura que para las asociaciones
indígenas no responde a la problemática que se tiene. Es claro que el interés es lograr
administrar con autonomía y propiedad lo que es el territorio propio, pero hay una lucha
por las identidades territoriales indígenas.
La deforestación en los territorios indígenas no se vive, pero ellos están al tanto de cómo
este tema está afectando. Hay amenazas que vienen de de países que no tienen una
política definida de manejo ambiental. Por ejemplo, por el Putumayo, por el lado de Perú,
hay mucha deforestación y esta afecta a las comunidades indígenas que habitan allí. Otras
amenaza son los grandes proyectos como lo es el IIRSA. Ese es otro problema por el que
pasan las comunidades indígenas.
Finalmente, no queremos ser dolientes del proceso, queremos ser gozantes del proceso,
comprometidos con una lucha que nos debe unir para garantizar la vida en todas sus
manifestaciones
R Iván Darío Escobar: Hoy en día las organizaciones indígenas están más organizadas
que antes, son autónomas. Todas las organizaciones indígenas se tienen que fortalecer en
el gobierno propio. Es claro que tienen debilidades, pero con el acompañamiento se
puede hacer un buen equipo de trabajo para implementar un adecuado manejo
administrativo.
COICA no está a favor o en contra de REDD, pero al llevar la información a sus bases
hace que se respete el derecho de los pueblos indígenas. COICA no apoya el
fortalecimiento de los resguardos indígenas, pero si incide ante los Estados para que se
cumplan los saneamientos de los resguardos.
P ¿Qué estrategias está utilizando COICA para preparar a las organizaciones de base
para asumir los retos que traen temas como el cambio climático y servicios ambientales?
P ¿Qué quiere decir para usted y la comunidad “fortalecer el gobierno propio”? ¿Cómo
se hace? ¿Cuáles son los espacios de concentración para establecer alianzas con
organizaciones que deseen apoyar los procesos? ¿Existe en AIPEA experiencia con
incentivos económicos para la conservación? ¿Es una realidad lo que se dice a lo que hoy
se vive dentro de las comunidades?
P Como dirigentes indígenas, ¿cómo ven la relación con los indígenas o con indígenas
que no están en resguardos que ya tienen una vida construida?
R Omar Cubeo: Hay que liderar políticas frente a las problemáticas que se avecinan.
Una de las cosas importantes que han hecho las AATIS es crear unos espacios de diálogo,
llamados espacios de dialogo ambiental, porque no solamente creemos que las
autoridades indígenas son las responsables, sino que con ayuda de otros actores y en
conjunto se puede formar una plataforma que responda a las necesidades de la gente que
vive en esas regiones.
Para la formulación de un proyecto REDD hay que tener en cuenta las implicaciones, las
limitaciones y las exigencias, no solamente desde la perspectiva técnica, sino también
desde el ámbito social y económico. En este momento no están claras las reglas de juego
acerca de cómo financiar un esquema de pago por servicios ambientales, pero de alguna
u otra forma el país le está apostando a la definición de la mejor forma posible, teniendo
en cuanta cuáles son esos mínimos técnicos, sociales y políticos de negociación para
poder entrar en este mercado de ofertas potenciales.
El cambio climático generado por los gases de efecto invernadero producido por las
actividades del ser humano generan impactos en la amazonia colombiana. Básicamente
nos lleva a que trabajemos en principio en dos frentes la mitigación de este fenómeno y la
adaptación para reducir la vulnerabilidad que tiene la población frente a estos
fenómenos.
Cuando los ecosistemas son reemplazados por otros usos del suelo, estos liberan grandes
cantidades de CO2. De aquí la importancia que la deforestación se reduzca y con ello sus
emisiones, garantizando la permanecía de estos ecosistemas. Se está facilitando la
mitigación y adaptación al cambio climático por medio de la capacidad de regulación de
los servicios ambientales provistos por la selva. De igual forma la importancia geopolítica
de la Amazonia ha llevado a que algunas agencias de cooperación internacional se
planteen la necesidad de trabajar conjunta y coordinadamente para actuar sobre los
factores que generan el cambio climático y la pérdida de cobertura de bosques.
Se observa que las instituciones han venido planteando estos temas como prioritarios
dentro de sus agendas, pero también lo han hecho de una manera muy desigual, pues hay
debilidad institucional y falta nivel de coordinación interinstitucional, por lo cual se hace
necesario definir agendas compartidas y complementarias para abordar estos asuntos.
Se debe considerar que hay vulnerabilidad local frente a estos temas, por lo cual es
necesario que los contenidos y procesos de cambio climático deban ser adaptados y
tratados desde los conocimientos que tienen las comunidades.
Hay incertidumbre, en la medida que hasta ahora no hay seriedad con asuntos de
derechos territoriales indígenas, cómo se está entendiendo el tema del conocimiento
indígena o cómo se percibe este cambio por parte de ellos. Esto debería ser parte de un
diálogo que esté relacionado con la posibilidad de participar activamente en los espacios
en los cuales se va a decidir.
No hay claridad por parte de las comunidades sobre cómo sería su participación en la
toma de decisiones, qué beneficios recibirán con los servicios ambientales y cómo sería la
noción de desarrollo de modelos económicos.
Es importante que dentro de los pueblos indígenas se establezcan cuáles son las
diferencias entre ellos en lo referente al territorio, para identificar qué comunidades
tienen mayor extensión y en dónde hay más vulnerabilidad, porque pueden haber más
oportunidades en términos de carbono en territorios que cuentan con mayor cantidad de
hectáreas. De esta forma, cuando exista la oportunidad de implementar los proyectos
REDD, se tendría un mecanismo que aporte a la disminución de la pobreza en estas
comunidades y haya equidad.
Hoy está en la mira la biodiversidad de la Amazonia y por eso han llegado personas ajenas
a los líderes para que firmen convenios con engaños. Los indígenas necesitan aliados,
pero de confianza que les informen, capaciten sobre las ventajas y desventajas de la
conservación de su territorio. Los planes de vida deben ser respetados.