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N. 14-17

Un artículo promiscuo
a tres géneros
Una entrevista, una crónica y una reseña
Luis Ariete*

Resumen

Éste, en palabras de su autor es “un artículo promiscuo alrededor de las relaciones


entre periodismo y literatura: una entrevista a (Albert) Chillon, una reseña de su libro y
una crónica-ensayo sobre cómo veo el “nuevo periodismo” de hoy”. La respuesta a la
pregunta por la necesidad de un “nuevo viejo” periodismo, que convine elementos
como la crónica y el reportaje con las nuevas formas de redacción tomadas desde la
literatura, se desarrolla en todo el artículo.
Palabras Clave: periodismo y literatura, escritura creativa, periodismo, literatura,
crónica, Colombia y el nuevo periodismo. Literatura y Periodismo. Una tradición de
relaciones promiscuas, Albert Chillon.

Recibido: 5 de Marzo
Aceptado: 10 de Abril

“La literatura es una noticia que siempre es noticia”.


Ezra Pound. El ABC de la lectura, 1934.

C
uando me fui a España a hacer un literatura en nuestros días? ¿Cuál es su futuro? Para
doctorado en periodismo, iba buscando a responder a estas preguntas, si les parece, haremos
un profesor llamado Albert Chillon, que un triple viaje a tres géneros periodístico-literarios.
había escrito un libro con un título muy sugerente:
Literatura y Periodismo. Una tradición de LA ENTREVISTA:
relaciones promiscuas (1999). El libro, que
combina análisis literario e histórico para explicar “Yo abogo por las relaciones promiscuas
las relaciones entre periodismo y literatura, es uno entre periodismo y literatura, crítica y
de los más completos que se han escrito sobre el cultamente orientadas”.
tema en español. Albert Chillon, estudió Ciencias de la Información
Ahora, cuatro años después de haberme en la Universidad Autónoma de Barcelona, y
encontrado con el profesor, me he propuesto hacer también Literatura Comparada y Filosofía en la
un artículo promiscuo alrededor de las relaciones misma U.A.B. Dice ser multiseparado, ateo
entre periodismo y literatura: una entrevista a Chillon practicante y políticamente de izquierda. En 1990
una reseña de su libro y una crónica-ensayo sobre terminó su tesis doctoral sobre el reportaje novelado
cómo veo el “nuevo periodismo” de hoy. y nueve años después publicó Literatura y
A principios del siglo XXI, ¿sigue todavía la Periodismo. Una tradición de relaciones
literatura teniendo influencia en el periodismo? ¿Cuál promiscuas. También ha publicado Periodismo
es el estado de las relaciones entre periodismo y informativo de creación (1985), Las mentiras de

* Seudónimo de Alfonso Buitrago. Comunicador Social – Periodista de la Universidad de Antioquia.

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una guerra. Desinformación y censura en el En Estados Unidos se habló mucho de new


conflicto del Golfo (1991), Literatura y journalism y su influencia se extendió por
periodismo (1993) y La literatura de hechos América y Europa. Hace un año, la revista
(1994). Entre los años 1999 y 2003 fue director colombiana el malpensante se preguntaba si
de la revista académica Análisis, del Departamento se necesita un “nuevo viejo” periodismo; en
de Periodismo de la U.A.B. Ahora está dedicado el sentido de recuperar los viejos géneros
a ahondar en los nexos entre cine y literatura y en periodísticos como la crónica y el reportaje
los criterios y fundamentos de una posible combinándolos con las técnicas y las
antropología de la comunicación. Acaba de innovaciones que los “nuevos periodistas”
terminar una novela sin título definido. tomaron de la literatura. ¿Se necesita un
nuevo viejo periodismo?
Empecemos por las relaciones promiscuas…
Aquí en Europa no se habla de “nuevo viejo”
El tratamiento que suele darse a la relación entre periodismo, expresión que sin embargo me parece
literatura y periodismo o viceversa es equívoco. Hay muy afortunada. En las últimas décadas, algunos
quienes afirman que el periodismo es un mero autores hemos tratado de reivindicar esa vuelta del
subgénero de la literatura y quienes abogan por periodismo moderno a sus raíces literarias. A la buena
dos campos radicalmente diferentes. No estoy de escritura, la buena narración y a la
acuerdo con ninguna de las dos descripción eficaz y elocuente. Se
posiciones. Son dos actividades trata de concebir y practicar el
autónomas, aunque no Son dos activida- periodismo en su compleja
independientes. Por eso se puede des autónomas, integridad y riqueza, en vez de
hablar de las relaciones entre aunque no indepen- someterlo al paradigma
periodismo “y” literatura y dientes. Por eso se anglosajón de “los hechos son
constatar que son muy ricas y puede hablar de las sagrados, las opiniones son libres”
promiscuas. relaciones entre pe- y la adoración acrítica de la
riodismo “y” litera- superstición objetivista, que yo
¿Hablar de relaciones creo que han hecho bastante daño.
promiscuas tiene alguna tura y constatar que
son muy ricas y pro- Hasta que fue influido por el
connotación negativa? periodismo anglosajón, el
miscuas.
periodismo latino (el de Italia,
En absoluto. La palabra
España, Portugal y Francia) tenía
promiscuidad tiene un sentido
una frescura que no era sólo deudora de la literatura
meramente descriptivo. Es una mezcla de
creativa, sino de la colusión entre periodismo y
impureza y de contaminación recíproca con zonas
literatura en un sentido amplio; ello se plasmaba
de intersección muy poderosas.
sobre todo en el ámbito del relato, en el arte de
narrar, como muy bien explica Juan José Hoyos en
¿Cuáles podrían ser esas zonas de
su libro “Contando historias. El arte de narrar en
intersección?
periodismo”. Lamentablemente este periodismo es
Hay tres grandes géneros donde se plasma esta minoritario y marginal hoy en día, pero debería ser
aleación: crónica, entrevista y reportaje. La noticia reivindicado y fomentado.
está menos afectada por esta mezcla. La crónica
hunde sus raíces en la literatura testimonial de la Esta indagación por viejas y nuevas formas se
antigüedad. El periodismo la toma en préstamo y da porque se percibe una especie de crisis en
la desarrolla. La entrevista, por su parte, es una el periodismo, que tiene muchas
depuración periodística del viejo género literario interpretaciones, a veces contradictorias.
del diálogo. El reportaje es el más genuinamente ¿Cree usted que hay una crisis en el
periodístico de todos los géneros. No es que periodismo?
todos sus procedimientos y recursos sean
radicalmente nuevos, pero puede decirse que la Desde que empecé a estudiar periodismo, a
cultura periodística ha hecho aportaciones ejercerlo y luego a enseñarlo, siempre he leído y
genuinamente innovadoras en este terreno. Es el oído hablar de la famosa crisis del periodismo.
género rey del periodismo. Me recuerda la famosa crisis de la novela que

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desde el año veinte del siglo pasado lleva anunciando Después está la patente recuperación de la
la muerte del género. No creo que pueda hablarse escritura. Hace treinta años la crisis de la cultura
de crisis del periodismo en términos económicos, Gutenberg era la comidilla habitual en las
porque la industria y el mercado de los medios de facultades de Ciencias Sociales y Humanidades.
comunicación vive una gran pujanza; sí creo, en Ahora resulta que estamos en plena era de las
cambio, que se da un excesivo sometimiento de los pantallas recuperando la escritura a través de
idearios y las prácticas profesionales a los emilios (emails), mensajes (sms) y bitácoras; sin
requerimientos de la industria y el embargo, hay que señalar que el
mercado. En nuestros días tiende periodismo ortodoxo ha casi
a perder posiciones el periodismo Hasta que fue in- agotado sus filones expresivos,
entendido como narración, fluido por el perio- por más que la industria sea
comprensión e interpretación pujante económicamente. Se
dismo anglosajón,
crítica de la realidad, debido a su escriben reportajes para prensa,
creciente sometimiento a lo que los
el periodismo latino desde luego, pero con
autores de la Escuela de Frankfurt (el de Italia, Espa- frecuencia son breves y pobres
llamaban “racionalidad ña, Portugal y Fran- en relación con las posibilidades
instrumental”. No creo que haya cia) tenía una fres- que ofrece el género. Se escriben
abandonado del todo su función cura que no era sólo crónicas y entrevistas, pero a
crítica, pero sí que se ha convertido deudora de la litera- menudo prima más la provisión
en una industria poco dada a librar tura creativa, sino rápida de información que la
combates románticos. de la colusión entre recreación compleja del
periodismo y litera- acontecer. Se redacta más de lo
Con respecto al romanticismo, que se escribe. Esta es una
tura en un sentido
¿es posible que hayan surgido cuestión clave. En el periodismo
nuevas formas de contar que
amplio de hoy prima la redacción
podrían definirse de esa forma, rutinaria sobre la escritura crítica
como poco románticas? y creativa. La redacción
comporta una mirada gregaria
Cuando decía que no abundan mientras que la genuina escritura
en el periodismo de hoy las Cuando decía que apela siempre al estilo, es decir,
actitudes románticas me refería no abundan en el pe- a las miradas singulares de los
sobre todo al talante de muchos riodismo de hoy las que escriben y de los que leen.
profesionales, que más parecen actitudes románti-
ejecutivos de empresa que cas me refería sobre Cuando hablamos de la
narradores críticos de la realidad todo al talante de “escritura” en estos términos
comprometidos con la sociedad muchos profesiona- singulares y creativos, ¿qué
civil. Existen excepciones muy papel juega la literatura en las
les, que más pare-
valiosas a esa tendencia, por posibilidades expresivas del
supuesto. Por otra parte, la llamada cen ejecutivos de escribir y del narrar?
cultura digital está recuperando empresa que narra-
dos modalidades culturales que dores críticos de la En potencia, la literatura de
hace pocas décadas parecían realidad compro- calidad puede jugar un papel
abocadas a vivir sus peores días: metidos con la so- extraordinariamente
el relato y la escritura. ciedad civil. enriquecedor. Es capaz de
Hoy la narración prolifera en los fecundar las mejores prácticas
medios y soportes informáticos, periodísticas. Esto lo sabían muy
en Internet, incluso en la telefonía móvil. Esto no bien los nuevos periodistas norteamericanos,
lo inventa Internet, pero es indudable que le presta suramericanos y europeos hace treinta y cuarenta
un gran impulso. El hipertexto estaba en El años. Y sin embargo, el grueso de la industria
Paralelo 42, de John Dos Passos; en Rayuela, periodística suele ignorar este acervo. Los
de Cortázar; en La vida, instrucciones de uso, periodistas pueden encontrar en el gran continente
de Georges Pérec; en las vanguardias literarias, literario un tesoro riquísimo de miradas, de estilos,
en un sentido amplio. de procedimientos, de maneras de decir y ver:

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de empalabrar, por emplear un neologismo Quim Monzó en el ámbito catalán, ¿cuál es su


acuñado por el antropólogo Lluís Duch. Y no estado actual?
obstante, las propias facultades de periodismo
y comunicación tienden a dejar de lado esta fértil Ahora mismo no veo innovaciones reseñables,
contribución. lo cual no significa que no existan. En los años setenta
y ochenta, al abrigo de la transición a la democracia
Aparte de las ganancias mutuas, ¿qué pierde y la introducción de cambios políticos y cívicos de
la literatura en estas relaciones promiscuas en gran calado, brotó en España un manantial de nuevo
cuanto a su capacidad imaginativa y periodismo. Fue la gran época de Manuel Vázquez
fabuladora? Montalbán y Manuel Vicent –quizá los más brillantes
periodistas literarios de los años posteriores a la
Las pérdidas no son inherentes a ningún dictadura –, de Eduardo Haro Tecglen, Francisco
campo, es importante entenderlo, sino que existen Umbral, Montserrat Roig, Eliseo Bayo, Maruja
tanto para la literatura como para el periodismo Torres, Ricardo Cid Cañaveral, Rosa Montero.
en la medida en que cultiven concepciones y Ahora hay gente interesante, con talento, que tiene
prácticas viciadas. Hay formas de hibridación imaginación y trabaja bien, como Juan José Millás
deplorables. Géneros y –o como Quim Monzó o Sergi
tendencias mediáticas – Pámies, en Cataluña–, pero en
infoentretemiento, espectáculos Se dan fenómenos términos generales no advierto la
de charla, reality shows– y mediáticos lamenta- innovación y el brío de un Umbral,
formas de amarillismo revestidas bles que no se deben un Montalbán o un Vicent.
con un atavío falsamente en absoluto a la in-
documental, una especie de fluencia recíproca Así como la literatura realista
pornografía de ciertas vivencias entre periodismo y tuvo un impacto fecundador en
fingidamente espontáneas. Se literatura, sino sólo el desarrollo del periodismo
dan fenómenos mediáticos literario moderno, ¿qué tipo de
a una hibridación
lamentables que no se deben en literatura se hace ahora que
absoluto a la influencia recíproca
que obedece a inte- pueda tener, de la misma
entre periodismo y literatura, sino reses bastardos de forma, un impacto creativo en
sólo a una hibridación que ciertos emisores y un periodismo futuro?
obedece a intereses bastardos audiencias.
de ciertos emisores y audiencias. El transvase no se da sólo de
la literatura al periodismo, sino que
Si miramos el fenómeno del nuevo periodismo se ha dado históricamente y se da hoy en día en
desde el punto de vista del lector, ¿cómo sentido inverso. Autores muy valiosos de nuestra
recibe estas innovaciones el público que época se mueven en el territorio híbrido de lo que
acepta leerlo y comprarlo? George Steiner llamó hace décadas “postficción”,
donde las presuntamente nítidas fronteras entre lo
Existe, naturalmente, una dialéctica muy ficticio y lo facticio –a mí no me gusta hablar de
intrincada e intensa entre los medios periodísticos, no ficción, sino de facción–, entre escritura creativa
los periodistas y los públicos. Cuanto más instruidos, y documental tienden a borrarse. En Claudio Magris
diversos y cultos son los públicos, más exigente y o W.G. Sebald, por poner sólo dos ejemplos
plural es la demanda. En general, puede decirse que significativos, se detectan ecos del periodismo de
la industria periodística no suele comprender que calidad, el ensayo, el cine y la vieja literatura
publicando un mejor periodismo, más y mejor testimonial. Y en otros autores, incluso, el eco
investigado y escrito, aumentaría su audiencia e incipiente de las nuevas formas de narrar asociadas
incorporaría nuevos lectores. Equivocadamente, se a las tecnologías digitales. Se trata de formas de
cree que la gente no lee textos complejos. Pero yo escritura híbridas, fruto de la promiscuidad textual
estoy convencido de que el periodismo de calidad y la aleación de estilos, que da lugar a obras a
engendra audiencias cultivadas y exigentes. menudo inclasificables que a su vez constituyen un
humus muy fértil donde germinan las innovaciones
Si hablamos del nuevo periodismo literario tanto del escritor creativo como del empalabrador
español, con autores como Manuel Vicent o periodístico.

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Hay voces críticas frente al desdibujamiento extremar las cautelas necesarias para empalabrar
de los límites entre ficción y realidad… del modo más fehaciente los hechos. Si el
periodista cobra conciencia de cuán delicado es
A mi entender, la confluencia entre periodismo el trato con las palabras, entonces podrá mejorar
y literatura y la consiguiente su relación con ellas mismas y
reflexión sobre ella, nos brinda con los hechos que las inspiran
una lección fundamental. En su El transvase no se y las incluyen. Negarlo en
trato cotidiano con los hechos, da sólo de la litera- redondo, como se hace
el periodista inevitablemente lo tura al periodismo, demasiado a menudo, es una
hace también con ficciones. No sino que se ha dado especie de escapada histérica,
existe ningún hiato nítido entre el un taparse los ojos para no ver
históricamente y se
campo de la ficción y el campo ni asumir lo que infunde
documental, sino que este último da hoy en día en incertidumbre y vértigo.
está perneado por la dinámica de sentido inverso.
la ficción. Esto lo explica Si el ser humano es así, ¿es
admirablemente George Steiner, entre otros totalmente contra natura cualquier aspiración
muchos autores cuya obra orbita en torno al a la objetividad? ¿No es también ésta una
llamado ‘giro lingüístico’. Y, como decía Ortega, aspiración honesta?
puede gustar o no, pero no tiene remedio. Los
llamados “hechos” y “acontecimientos” del El ser humano necesita imperativamente amarrar
mundo real están hechos de acción y discurso, su pensamiento y su comunicación al muelle de la
de dicción y acto, y por tanto no son en modo realidad. Y la soga con la que se ata al puerto es lo
alguno ajenos a las modulaciones ficticias y que solemos llamar ‘verdad’. Todos aspiramos a
facticias propias de todo discurso. Y eso sucede alcanzarla, sin excepción, incluso los mentirosos
no sólo cuando los narramos a posteriori, tal profesionales lo son sólo a veces. Y todos, de un
como puede llegar a pensarse, sino en el momento modo u otro, necesitamos alcanzar ese género de
en que individuos y colectivos los producen –y verdad que la ortodoxia periodística denomina
también antes de su ejecución: lo ha argumentado ‘objetividad’. Pero esa búsqueda es imprescindible
con gran solvencia Paul Ricoeur. Los hechos y saludable en la medida en que consideremos la
también son relatos en acto, por más que nos verdad un desideratum, un horizonte de nuestro
cueste caer en la cuenta de ello–. afán y nuestro esfuerzo. Y en la medida en que
asumamos que nuestros actos de empalabramiento
Esta hibridación, ¿no propicia no nos traen lo real cual es, sino
desinformación y tal cual lo imaginamos: convertido
manipulación? La posmodernidad en signo y símbolo, en icono y
nos ha hecho cons- palabra. La objetividad no se
Puede ser que sí, pero sólo cientes de que el ser cumple en periodismo, pero es útil
cuando los informadores actúan humano es un ince- en tanto que horizonte ético y
de un modo éticamente sante empalabrador, epistémico, en cierta forma
reprobable. Para bien y para mal, y de que ficción y utópico. La paradoja de todo esto
la posmodernidad nos ha hecho facción están estre- –divertida incluso, si bien se mira–
conscientes de que el ser humano es que el ser humano es incapaz
cha y antiguamente
es un incesante empalabrador, y de objetividad y en cambio muy
de que ficción y facción están hermanadas. capaz de objetivación. No
estrecha y antiguamente podemos capturar las cosas como
hermanadas. El ser humano vive no sólo con, sino son y ocurren, pero al empalabrarlas y narrarlas
en símbolos y en palabras. Somos seres de producimos enunciados que a su vez inspiran
palabra, y el periodista también, naturalmente. En acciones muy reales. En rigor, no somos capaces
la modernidad no había plena consciencia de ello de lograr la objetividad en un sentido
hasta que Humboldt y después Nietzsche, sobre epistemológico, pero sí la objetivación en un sentido
todo, propusieron sus iluminaciones fundamentales. ontológico. Para poner un ejemplo clásico, la
No tenemos por qué abocarnos al nihilismo ni al narración falsa que Orson Welles tramó cuando
cinismo, tal como suele temerse, sino hacernos radió La guerra de los mundos, produjo acciones

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muy reales –muertes y suicidios incluidos–, y ello a el Periodista Literario. Algo así como el oficio de
través de relatos informativos urdidos con una un veterinario cuando palpa una vaca, pero con “los
objetividad muy aparente. nuevos tiempos” (para quien nunca haya visto palpar
una vaca, se trata de un procedimiento en el que el
Si tenemos en cuenta los veterinario le introduce el brazo
beneficios de las relaciones por la vagina para inspeccionar el
entre periodismo y literatura, No podemos cap- útero y determinar, entre otras
¿no sería mejor hablar de unas turar las cosas cosas, el estado de preñez. La
relaciones profilácticas más como son y ocu- imagen muchas veces da la
que promiscuas, en tanto que rren, pero al sensación de estar viendo a un
podrían prevenir las perennes hombrecito untado de boñiga
empalabrarlas y
crisis que aquejan al hasta el cuello que quiere ser
periodismo?
narrarlas produci- succionado por la vaca).
mos enunciados que Este nuevo oficio literario
Las relaciones entre periodismo a su vez inspiran ac- periodístico consistía en meterle
y literatura son más promiscuas ciones muy reales. la mano a la “realidad” hasta
que profilácticas, y ello a pesar de descifrarla, entenderla y
los preservativos estilísticos e comunicarla; utilizando las
ideológicos que la ortodoxia periodística receta sin herramientas que hicieran falta: novela realista,
cesar a los profesionales que emplea. Yo abogo por prosa literaria testimonial, narrativa científica,
asumir esa promiscuidad, y por hacerlo de manera escritura periodística… (Aunque la mayoría de
crítica y cultamente orientada. Si insistimos en jugar veces los periodistas nos conformamos con apenas
con los términos, podemos decir que el periodismo agarrarle la cola a la vaca).
convencional tiende a actuar profilácticamente En Estados Unidos este oficio encontró una
porque ve en la literatura una contaminación que generación dispuesta a elevarlo a categoría de mito.
hay que evitar. Hay una prevención, una excesiva En su libro The New Journalism (1973), Tom
profilaxis con respecto a los préstamos narrativos, Wolfe reclamaba las técnicas narrativas de ficción
justamente debido a que el periodismo convencional de Balzac y Zola como la quintaesencia de un “nuevo
está severamente aquejado de esa racionalidad periodismo”, que sería el sucesor natural de una
neopositivista a la que antes aludía. Y es, por tanto, moribunda novela que había abandonado
un periodismo arrodillado, genuflexo y acrítico en impunemente el realismo social.
términos generales que tiende a hurtar a las La ilusión creada por Wolfe era magnífica,
audiencias la compresión cabal de lo que ocurre. excitante, gloriosa y glamorosa. Gay Talese, con
traje y corbata, se adentraba en el
La crónica: Del New mundo de la mafia italoamericana;
Journalism al Wandéy Este nuevo ofi- el mismo Wolfe hacía lo que le
Periodism cio literario perio- daba la gana en cualquier parte,
dístico consistía con sombrero y traje a medida.
Según Chillon, periodismo y en meterle la Se metía con el New Yorker, con
novela modernos tienen un mano a la “reali- toda la aristocracia del arte
“nacimiento coetáneo” y, por tanto, dad” hasta desci- neoyorkino, ridiculizaba a la
es imposible comprender el origen izquierda burguesa y aburguesada
frarla, entenderla
y la formación de uno sin el de la y, con todo, escribía una novela
otra. “No es que los grandes
y comunicarla. con aspiraciones balzacianas; y
escritores de ficción se dedicasen bueno, también estaba Capote,
también al periodismo –dice Chillon-, sino que a haciendo de las suyas, etiquetando géneros
partir del siglo XVIII y, sobre todo, del XIX aparece literarios a su antojo y perfilando vanidades de las
con fuerza en Europa y Estados Unidos una nueva estrellas de Hollywood.
sensibilidad realista, muy atenta a la captación de En un perfil de Tom Wolfe, publicado en 2004
las palpitaciones de los nuevos tiempos”. en el New York Times Magazine, el periodista
En el siglo XIX aparece, pues, un nuevo oficio: Charles McGrath cuenta, a modo de leyenda, como
el Captador de Palpitaciones o, menos surgió el nuevo periodismo: A finales 1962 Wolfe
pomposamente, pero no menos pretensiosamente, trabajaba para The New York Herald Tribune,

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cuando varios periódicos neoyorquinos se cuenta en Orígenes de un escritor de no ficción


declararon en huelga. Al verse sin trabajo, ofreció (cito de memoria: han pasado dos semanas y no
sus servicios a Esquire proponiéndoles un artículo he podido hablar con él, necesito un par de miles
sobre unos jóvenes de Los Ángeles que hacían de dólares más).
“tunning” y “customizaban” carros. Cuando se Con la portada de diciembre de 1963, en la que
acercaba la fecha de entrega, Wolfe no había escrito aparece la cara en primer plano del boxeador Sonny
ni una sola línea. En pánico, uno de los editores, Liston con un gorrito de navidad, “Esquire perdió
Byron Dobell, le pidió que le entregara sus notas cerca de 750 mil dólares”, dice el periodista Frank
para que alguien las pudiera reescribir y salvar aquel Digia como en un artículo publicado en Vanity Fair
desastre. Wolfe entregó un excéntrico memo de 49 en enero de 2007. Liston no sólo era un campeón
páginas que comenzaba “Dear Byron” y luego de los pesos pesados, sino un ex convicto que había
seguía una prosa discontinúa, llena de elipsis, signos estado preso por robo a mano armada y asalto a un
de puntuación y representaciones de sonidos que policía. Era “the baddest motherfucker”, como dice
pretendían describir una nueva subcultura que él Digiacomo. “La navidad nunca volvería a ser lo
había descubierto. Dobell quitó el “Dear Byron” y mismo”, añade el periodista para redondear el mito.
le puso un titular: “There Goes (Varoom! Varoom!) Para el propio Hayes fue “la portada perfecta”.
That Kandy-Kolored Tangerine-Flake Streamline Una simple imagen sin texto “que medía nuestras
Baby’’ y, ¡bingo!, así fue como nació el Nuevo vidas”, recordaba el editor antes de morir. Una
Periodismo: de la mano de un periodista en ese simple imagen que, publicada en un ambiente de
entonces inseguro y un editor atrevido. enfrentamiento racial, sintetizaba dos aspectos
El trabajo de los editores suele ser fundamentales de los Estados Unidos de la época:
menospreciado cuando se cuenta la historia del la división de la cultura norteamericana y la mentira
periodismo, quizás porque su labor sea precisamente de la igualdad racial.
la de pasar desapercibidos; sin embargo, no se Nora Ephron, “nueva periodista” que se hizo
entenderían los grandes logros periodísticos sin su famosa en Esquire, recuerda que Hayes tenía
mano invisible y, muchas veces, sin su bolsillo. exactamente lo que todos los grandes editores,
La generación de new journalists productores y políticos tienen: “confiaba
norteamericanos revolucionó el periodismo de absolutamente en sus tripas”.
Estados Unidos de las últimas décadas del siglo XX, En Colombia, el “nuevo oficio” también tenía una
especialmente el periodismo que se hacía en las larga tradición de grandes editores, aunque su historia
revistas, porque tenían el espacio, el tiempo y el es más prosaica. Para hacer periodismo literario en
dinero necesarios; pero sobre todo, porque el país había que ponerse las botas pantaneras, bajar
contaban con un grupo de editores visionarios –entre al arenal, sin camisa, con ampollas en pies y manos,
los que sobresalieron Harold Hayes en Esquire y sudoroso y con ropa vieja de trabajo. Era una
Clay Felker en la revista del New York Herald tradición veterana de cargaladrillos, generosa,
Tribune- que permitieron a Wolfe y sus profunda, terrenal. Basta recordar El Oro y la
contemporáneos transformar el panorama Sangre de Juan José Hoyos (Planeta, 1994) o
periodístico mientras captaban las palpitaciones cualquiera de los reportajes-libro de Germán Castro
de los agitados años sesentas. Caycedo para hacerse una clara idea.
“Point of view”, “Tone”, “Perspective”, Ocho años antes de que Liston saliera en la
“Irreverence”, eran palabras que se usaban a portada de Esquire, la publicación en catorce
menudo en la sede de Esquire. Durante una década entregas del relato de un náufrago –y las
de guerra, asesinatos y discriminación racial, Harold revelaciones que aportó- le costó a Guillermo Cano
T. P. Hayes y su grupo de editores talentosos, entre y José Salgar el enfado de la dictadura de Rojas
ellos Byron Dobell, trajeron un torrente Pinilla y el posterior cierre de El Espectador. Ambos
revolucionario a la prensa estadounidense: escritura, editores confiaban en sus tripas.
fotografía y arte que interpretaron una cultura en
plena efervescencia. El “nuevo oficio” en Colombia
Además de comprometerse editorialmente,
arriesgaban su bolsillo. Cuando Talese estaba Unos años antes de partir para Barcelona,
escribiendo su clásico sobre Frank Sinatra cuando todavía estaba en la facultad de
(publicado en Esquire en abril de 1966) pedía dinero comunicaciones, Maryluz Vallejo, con su libro La
a su editor Harold Hayes anecdóticamente, como crónica en Colombia. Medio siglo de oro

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(1997), me había puesto frente a una generación (Planeta, 1996), “lo tenía entre ceja y ceja porque
de cronistas muy creativa que cruzó y alteró se había visto obligado a reprenderlo por inventar
varias décadas del periodismo nacional, una crónica en la que relataba cómo un astuto
particularmente entre 1910 y 1960. negociante colombiano había vendido en dos
Mientras en Europa y Norteamérica el reportaje ocasiones unos restos falsos de Simón Bolívar a
maduraba junto con unas sociedades en rápido turistas de los Estados Unidos…”.
proceso de industrialización y rumbo a convertirse Este “nuevo periodista” colombiano, en 1941,
en sociedades de comunicación de masas, en mezclando realidad y ficción, dio vida a Rodrigo de
Colombia, más acorde con nuestra tradición de Arce en El misterioso caso de Herman Winter,
cronistas de indias, una brillante generación de una de las primeras novelas policíacas de nuestra
escritores narraba alegre y calmadamente la lenta literatura moderna.
modernización del país. Hacia 1945, como recuerda Rogelio Echevarria
Entre los cuarenta cronistas reseñados por en el prólogo al libro 20 crónicas policíacas de
Maryluz, encontramos periodistas y escritores muy Felipe González (Planeta, 1994), ya no se
promiscuos como Eduardo y Lucas Caballero inventaban historias en la prensa. No hacía falta, la
Calderón (1910-1993 y 1914- violencia empezaba a suplantar a
1981) Eduardo Zalamea Borda la imaginación. Y entonces
(1907-1963), Próspero Morales Nora Ephron, comenzaron a aparecer los
Pradilla (1920-1990), Héctor reporteros modernos.
“nueva periodista”
Rojas Herazo (1921-2002), Cofundadores de la revista
Álvaro Cepeda Samudio (1926-
que se hizo famosa Sucesos, Rogelio Echevarria y
1972), Gabriel García Márquez en Esquire, recuer- Felipe González Toledo fueron
(1928) y Gonzalo Arango (1936- da que Hayes tenía claves en la modernización del
1976), que llevaron el periodismo exactamente lo que periodismo Colombiano. En sus
nacional más allá de nuestras todos los grandes páginas escribía Germán Pinzón
fronteras. editores, producto- (Reportero hasta morir, Planeta,
El caso de José Joaquín res y políticos tie- 1999), otro “nuevo periodista” que
Jiménez, conocido como Ximénez, nen: “confiaba ab- en 1966 publicó Terremoto, texto
cronista estrella de El Tiempo solutamente en sus con el que ganó el primer premio
desde 1933 hasta su muerte en nadaísta de novela.
tripas”.
1946, no fue sólo un ejemplo de Al igual que en Estados
relaciones promiscuas entre Unidos, la generación dorada de
periodismo y literatura, sino algo cronistas colombianos contó con
que rayaba en la pornografía. suficientes directores de periódicos y semanarios
Eran tiempos, como cuenta Felipe González visionarios que permitieron, muchas veces a
Toledo, “en que los hechos triviales se sucedían jóvenes veinteañeros, escribir páginas
los unos a los otros con exasperante monotonía… memorables.
La imaginación venía en suplencia, y Ximénez Esta generación no sólo convirtió el periodismo
entretenía a sus lectores de El Tiempo con ‘la colombiano en un referente en América Latina,
infancia, juventud y aventuras del grande hampón sino que sirvió de base para que surgieran textos
señor Mediabola’ o con ‘la vulgar y sentimental como Relato de un náufrago, de Gabriel García
historia de la hampona Bárbara Jiménez’”. Márquez, publicado en El Espectador en 1955,
Y como si esto fuera poco, el cronista se inventó muchos años antes de que Tom Wolfe leyera el
un poeta, un tal Rodrigo de Arce, que perfil del boxeador Joe Louis de Gay Talese,
supuestamente era leído por suicidas, cuyas publicado por Esquire en 1962, y le sobreviniera
historias Ximénez reseñaba en las páginas judiciales la intuición de que un “nuevo periodismo”
de El Tiempo. Cuenta la leyenda que el cronista rondaba a la vuelta de la esquina.
escondía poemas de este susodicho poeta en los Pese a la larga tradición periodística nacional, es
bolsillos de las ropas de los suicidas que se tiraban entendible que los nuevos periodistas literarios
del Salto del Tequendama. colombianos de hoy se sientan herederos de la
El director del periódico de entonces, Germán tradición foránea con la que fueron educados (son
Arciniegas, como cuenta Juan José Hoyos en el hijos de las “facultades de comunicación” que no
prólogo de Las famosas crónicas de Ximénez comenzaron en Colombia hasta los años sesentas y

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que en los ochentas y noventas fueron las encargadas New Journalism, había delineado los mandamientos
de difundir la orden del “new journalism”). de una especie de “Orden del Nuevo Periodismo”:
Técnica, Técnica, y Técnica.
El new journalism o debo decir ¿ wandéy La “Técnica”, imperceptiblemente, se fue
periodism ? convirtiendo en “La Forma”: anécdota, párrafo de
arranque, escena, digresión, escena, cita de un
El éxito del libro de Wolfe no fue gratuito. En sociólogo de Harvard… Un credo que le permitía
1957 se había doctorado en American Studies en al periodista llegar a terreno seguro: artículo
Yale y antes de 1973, cuando apareció The New publicado y pagado.
Journalism, había publicado tres libros: The Pump Y le evitaba “el traicionero negocio de usar la
House Gang yThe Electric Kool-Aid Acid Test historia como una forma de explorar algo más
(1968) y Radical Chic and Mau-Mauing the grande. Caótico. Evasivo”. Y los editores también
Flack Catchers (1970). querían cosas seguras. Así que todos se adaptaron
En ellos desarrolló ampliamente a la Forma.
su profundo conocimiento de la En una conversación que tuvo
sociedad norteamericana, su estilo En Colombia (…) con Jimmy Breslin, uno de los
particular y su teoría del estatus. una brillante gene- pioneros del Nuevo Periodismo,
En 1973 estaba más que ración de escritores Shapiro le preguntó si había
preparado para, combinando narraba alegre y traicionado “el movimiento” al
teoría literaria y un hilarante y publicar novelas, ante lo cual
provocador estilo periodístico, dar
calmadamente la
Breslin le explicó que la novela le
a luz y cargar de poder su new lenta moderniza- daba la posibilidad de alcanzar un
journalism. ción del país. nivel más profundo de verdad
Su influencia dura hasta periodística.
nuestros días; sin embargo, su sombra a veces no De eso se trataba. Ése es el poder de la novela.
nos deja ver los tesoros que esconde la casa del No sólo brinda un abanico de posibilidades
vecino y, como suele suceder con las figuras técnicas, sino la oportunidad de aprender algo nuevo
sacralizadas, su doctrina se convierte en un molde narrando una historia.
que se repite continuamente sin que llegue a La Forma, en otras palabras, no era lo que
representar nada novedoso o importaba. La idea, la pregunta,
ilustrativo. lo que el periodista necesitaba
El fanatismo de Wolfe por las Al igual que en saber era lo importante. Perseguir
soluciones formales y estilísticas Estados Unidos, la una historia sin arriesgarse a
propuestas por los nuevos generación dorada perderse –dice Shapiro- es matar
periodistas norteamericanos, de cronistas colom- la posibilidad de un
produjo muchas críticas en descubrimiento real. Perderse, por
bianos contó con
Estados Unidos. Años después, tanto, es bueno, pero si se tiene a
todavía resuenan los ecos, sobre suficientes directo- alguien a tus espaldas con una
todo cuando la “Técnica” res de periódicos y linterna: un editor.
impulsada por Wolfe (construcción semanarios visiona- La “forma” del periodismo
escena por escena, registro total rios que permitie- literario que se hace hoy en día se
del diálogo, punto de vista en ron, muchas veces a materializa muy frecuentemente en
tercera persona y el retrato global j ó v e n e s la fórmula del “Un día en…”. En
y detallado de los personajes, veinteañeros, escri- lugar de New Journalism algo así
situaciones y ambientes) produce bir páginas memo- como One Day Journalism o
una manera estandarizada de hacer mejor Wandéy Periodism que
rables.
reportajes que, paradójicamente, provoca una ilusión de inmersión
aleja al periodista de los alcances en la realidad similar a un salto en
de la novela: el descubrimiento de bungee dumping: un, dos, tres… ayyyyyyyyyyyy
una realidad desconocida, caótica, misteriosa. jueeeeeeeeeee….....puuuuuuuu…
La “maldición de Tom Wolfe”, como la llama taaaaaaaaaa……………………………………
Michael Shapiro, escritor de reportajes y profesor me salvé. Es como querer meterle el brazo entero a
de Columbia University, era que con su libro The la vaca, pero sólo ser capaz de colgársele de la cola.

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El wandéy periodism es un bicho contagioso crónica con estilo literario escrita por Óscar Castaño,
multimedia que se adapta bien a la realidad un joven periodista bogotano.
nacional y a las necesidades de un periodismo de La revista Soho, que dirige Daniel Samper
masas barato y presuroso que se hace en todas Ospina, ha brindado muchas de sus páginas a
partes del mundo. En la portada de la versión todo tipo de escritores y periodistas, entre ellos
española de la revista Rolling Sergio Álvarez (La gran
Stone se anuncia: 24 horas en crónica del pibe, diciembre de
Ése es el poder de 2005) y Alberto Salcedo
Ibiza y el contenido decepciona
la novela. No sólo Ramos (El oro y la oscuridad,
minuto a minuto.
Yo he publicado varias brinda un abanico diciembre de 2004), a quien su
historias wandéy en España y en de posibilidades téc- director ha lanzado como el Gay
Australia: “un día de fiesta en nicas, sino la opor- Talese criollo.
Barcelona con 20 euros”, “una tunidad de aprender Dar a luz, de eso se trata la
jornada latina en Barcelona” y “un algo nuevo narran- literatura; pero antes hay que darle
día en el gran premio de fórmula do una historia. forma al ternerito violeta, de ojos
uno de Australia”; pero siempre azules, que se sentará en nuestro
existe la posibilidad de explorar regazo, con las piernas cruzadas,
algo más profundo. a contarnos la historia que nunca hemos oído.
Y en ocasiones hay editores dispuestos a Vieja o nueva, foránea o propia, la literatura sigue
emprender el viaje. A hacer las preguntas y las al servicio de periodistas y editores que deseen
palpar el pulso que les ofrecen los nuevos viejos
sugerencias necesarias que permitan descubrir la
tiempos. Hace falta no tener miedo, pues se puede
realidad que el periodista palpa en el oscuro, con la
salir muy untado de mierda en el intento.
mano metida hasta el hombro, intentando con todas
sus fuerzas tocar el útero donde
La reseña. Literatura y Perio-
crece el embrión de su idea.
La mayor parte dismo. Una tradición de rela-
La mayor parte del trabajo de
del trabajo de un edi- ciones promiscuas
un editor es indetectable, dice
Shapiro, porque no se hace en la tor es indetectable,
El libro Literatura y
página escrita, sino antes. Dar a dice Shapiro, porque
Periodismo. Una tradición de
luz una idea ambiciosa es una no se hace en la pá- relaciones promiscuas de Albert
tarea que ningún escritor tendría gina escrita, sino Chillon es un libro que puede
porque enfrentar solo. antes. Dar a luz una satisfacer cabalmente a personas
Muchos periodistas admitirían, idea ambiciosa es con gusto tanto por la teoría como
no sin refunfuñar, cuanto les una tarea que nin- por el ensayo más divulgativo. Y
gustaría tener un editor con quien gún escritor tendría puede, también, decepcionar a
hablar sobre cómo destilar una aquellos que tengan unos gustos
porque enfrentar
idea o pregunta, cuál es el mejor más limitados o definidos.
solo.
camino para responder esa De entrada, los que abominan
pregunta (reportería) y cuál es la la teoría pueden saltarse, con la
mejor manera de contar la historia. cara tapada, no sea que les dé un salpullido, la
En Colombia, en los últimos años, han primera y la última parte. Si les interesa el periodismo
aparecido revistas y editores dispuestos a y la literatura de forma más general gozarán con las
ensuciarse un poco; incluso una revista literaria partes centrales. Para los que están familiarizados
como el malpensante se ha ganado dos premios con el new journalism, principalmente estudiantes
Simón Bolívar consecutivos, en 2004 y 2005, y periodistas, el plato central les dará lo que Tom
publicando crónicas y reportajes. El texto ganador Wolfe les quedó debiendo. Obtendrán una buena
del 2004, 300 días en Afganistán, de Natalia idea de lo que fue y significó no sólo el “nuevo
Aguirre, fue publicado por Anagrama en 2006. periodismo” norteamericano, sino el europeo en
La revista Diners de Germán Santamaría, un general y el español en particular, y también un poco
declarado admirador del periodismo del latinoamericano.
norteamericano, también se ha ganado varios (El autor reconoce sus carencias con respecto
premios Simón Bolívar, el último en 2005 por una al periodismo de América Latina; pero esto quizás

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sirva de aliento para que se escriba el libro sobre filosófica y científica en torno al origen y desarrollo
nuevo periodismo latinoamericano que no se ha del lenguaje (por tanto de la condición humana).
escrito todavía). Chillon utiliza “la conciencia lingüística” para alzar
A quienes les gusta y creen fundamental la su crítica a la pretensión de objetividad del
formación teórica y metodológica tienen en sus periodismo moderno así como para explicar la
manos una lectura que les alimentará largamente. promiscuidad intersticial entre periodismo y
Incluso si se está en desacuerdo con el planteamiento literatura, realidad y ficción.
central, que se estructura en torno al “giro lingüístico”, Aunque por momentos se torna obsesivo en su
es un libro riguroso y metodológicamente fecundo. ataque a la objetividad, la conciencia lingüística le
El libro está dividido en cuatro partes: las permite al autor devolverle al lenguaje su poder
relaciones entre literatura y periodismo, a la luz de creador. El observador es, por tanto,
la consciencia lingüística; la tradición; los nuevos empalabrador de su experiencia.
periodismos y un apéndice metodológico.
El autor comienza con una necesidad personal La tradición
de cuestionar la forma tradicional de ejercer el
periodismo, que se acentuó en él cuando ejercía el La segunda parte está dedicada al análisis
periodismo profesional, y concluye proponiendo una histórico. Abarca desde el “nacimiento coetáneo del
disciplina nueva para el estudio de las relaciones periodismo y la novela moderna” en el siglo XVIII
entre periodismo y literatura, el “Comparatismo hasta la “mayoría de edad del reportaje moderno”
Periodismo Literario (CPL)”. en el siglo XX.
Según la propuesta de Chillon, esta nueva Chillon comienza por Daniel Defoe, quien
disciplina debe acoger en su seno un estudio publicó en 1722 el primer reportaje novelado
histórico y de relaciones; de temas, argumentos y conocido: Diario del año de la peste y llama la
motivos; de las modalidades de estilo y atención sobre otro ejemplo clásico del reportaje
composición y de los géneros y formatos. En su novelado publicado en 1842: Historia de la
libro, por supuesto, el profesor combina columna infame, escrito por Alessandro Mazoni,
diligentemente todas estas formas de estudio. fundador de la novela italiana moderna. Ambos
En el prólogo, Manuel Vásquez Montalbán son ejemplos significativos de un fenómeno
afirma que se trata de un libro “rompedor, cultural: “el nacimiento coetáneo del periodismo
honestamente ambicioso, cuya lectura me lleva a la y de la novela moderna”.
conclusión de que Chillon no ha hecho otra cosa, A continuación, explora la “era de la novela
nada más y nada menos, que abrir el apetito para realista” y la “enorme irradiación del género
una historia de la literariedad postcanónica”. Es decir, novelístico en la escena cultural actual”. La novela
por las transformaciones de la literatura y el realista de ficción, la prosa literaria testimonial, la
periodismo, ficción y realidad, en la era de lo que narrativa científica y la escritura periodística; son
George Steiner llamó “postficción”. facetas distintas pero conexas que expresan, “la
nueva sensibilidad realista característica de la
Las relaciones entre literatura y periodismo, a época moderna”. Es decir, una hasta entonces inédita
la luz de la consciencia lingüística “hambre de realidad”.
En esta parte, Chillon hace un repaso de las
En la primera parte del libro, Chillon sienta las contribuciones de estas narrativas facticias al
que él considera, deben ser las bases teóricas para periodismo literario, desde la literatura del yo:
el estudio de las relaciones entre literatura y autobiografías, memorias, confesiones y dietarios;
periodismo “a la luz de la consciencia lingüística”. pasando por el género epistolar, la crónica y el
Una tradición “relegada” que considera que relato de viajes; la biografía, la semblanza y el
pensamiento y lenguaje, conocimiento y retrato; el cuadro y el artículo de costumbres; el
expresión, son esencialmente una y la misma cosa; ensayo y el documentalismo cinematográfico y el
en oposición a la tradición dominante (formalista y teatro documental.
estructuralista), que concibe el lenguaje como un Antes de celebrar “la mayoría de edad del
instrumento que permite expresar el pensamiento reportaje moderno”, se adentra en el “tránsito a la
previa y autónomamente formado en la mente. sociedad de comunicación de masas” que definiría
Una distinción aparentemente simple que, sin completamente las características fundamentales de
embargo, encierra varios siglos de discusión lo que conocemos como reportaje.

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El período comprendido entre 1880 y 1930 – En el primer capítulo de esta parte, explora lo
con ritmos diferentes en cada país, dice Chillon- que el crítico francés George Steiner denominara
vio la aparición y la consolidación de nuevos como “era de la postficción”. “Lo que debe
medios como el cine, el cartelismo o la radio y el considerarse nuevo –dice Chillon-, no es la presencia
surgimiento de la entonces bisoña prensa de de la postficción en la cultura contemporánea, sino
masas (prensa amarilla y prensa seria, el peso que esta presencia ha adquirido y, por
magazines y revistas especializadas). Así mismo, encima de todo, el hecho de que ha desdibujado
se da la maduración de los géneros periodísticos los límites aparentes, que tradicionalmente venían
nacidos o perfilados durante los siglos XVIII y separando categorías estéticas y epistemológicas de
XIX –noticia, entrevista, crónica, reportaje, ficción y no ficción”.
artículo de fondo, editorial, crítica, columna, Para George Steiner, citado por Chillon, la
comentario- ; la adaptación de la escritura desaparición de las fronteras que tradicionalmente
periodística a las exigencias de claridad, han separado ficción y no ficción ha tenido
exactitud, brevedad y amenidad; la incorporación importantes consecuencias en dos campos
de fotografías; el nacimiento del periodismo concretos: en la novela, algunas de cuyas
interpretativo y los gabinetes de prensa y, como modalidades se han transformado notoriamente por
telón de fondo, «la formulación de la doctrina de influencia de la sensibilidad documental
la objetividad informativa, contemporánea, y en el
resumida en un célebre adagio: periodismo escrito, que
‘Los hechos son sagrados, las Chillon utiliza paralelamente ha experimentado
opiniones son libres’». “la conciencia lin- una serie de cambios causados,
Durante las primeras décadas güística” para al- en buena medida, por la influencia
del siglo XX, el género que hoy zar su crítica a la directa de la narrativa fabuladora.
denominamos reportaje, llegó a la pretensión de obje- A continuación, pondera los
mayoría de edad. “Se trataba de tividad del perio- efectos que esta tendencia ha
un género periodístico complejo dismo moderno así tenido en el periodismo,
que, gracias a su versatilidad como para expli- especialmente en el reportaje.
temática, compositiva y estilística, Habla así de la “eclosión del
car la promiscui-
fue ocupando en la cultura reportaje novelado”.
periodística de la época un lugar dad intersticial en- Durante el siglo XX, dice el
análogo al que la veterana novela tre periodismo y autor, “ha ido adquiriendo
ostentaba en la cultura literaria”. literatura, reali- fisonomía propia una modalidad
En esta atmósfera se acentuó la dad y ficción. de escritura híbrida, el reportaje
aleación entre periodismo novelado, caracterizada por la
informativo y narrativa de ficción, simbiosis entre la vocación
iniciada durante los dos siglos anteriores en la testimonial y los procedimientos documentales
evolución de la novela realista hacia el naturalismo. propios del reportaje periodístico, por un lado, y
En este apartado se describe el trabajo de las convenciones de representación inherentes a la
pioneros del periodismo literario estadounidense novela realista de ficción, por otro”.
del siglo XX como Theodore Dreiser, Jack Hacia la década de los cincuenta en Estados
London, Upton Sinclair, John Reed, Ernest Unidos empezó a insinuarse un fuerte contraste
Hemingway y John Dos Passos y algunos no entre dos formas opuestas de concebir un
norteamericanos como el catalán Josep Pla, el ruso reportaje literario.
Ilya Ehrenburg y el inglés George Orwell. Por un lado estaba la actitud de John Hersey –
Hiroshima, 1946-, Lillian Ross –Picture, 1952- o
Los nuevos periodismos Truman Capote –In Cold Blood, 1965- que
limitaban o evitaban cualquier manifestación autorial
La tercera parte del libro es la más voluminosa y en el relato, “con el propósito de conferirle una
está dedica a los nuevos periodismos. En ella, apariencia de objetividad y de verosimilitud
Chillon describe, analiza y explica la anatomía y claramente deudora de los principios y los métodos
fisiología de varios textos significativos de los nuevos de la novela realista y naturalista”.
periodismos norteamericanos, europeos, Por otro lado, estaba la actitud al estilo James
latinoamericanos y españoles. Agee, que reivindicaba la intervención subjetiva de

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los autores, “convencidos de que la objetividad y del nuevo periodismo norteamericano y la


los medios que permiten alcanzarla son un ardid literatura moderna.
cognoscitivo íntimamente relacionado con el En el capítulo 11 se ocupa de los nuevos
discurso periodístico hegemónico, de raíz positivista periodismos europeos, analizando trabajos de
y funcionalista”. Ryszard Kapuscinski, Günter Wallraff, Alberto
La elección de una u otra Cavallari, Oriana Fallaci y James
actitud tiene importantes Fox. En el capítulo siguiente, se
consecuencias no sólo para la ocupa brevemente de los nuevos
El autor nos lleva
composición y estilo del periodismos latinoamericanos,
periodismo literario, sino
de la mano mientras analizando textos de Gabriel
implicaciones éticas y cognitivas. desentraña la pro- García Márquez, Miguel Barnet
Antes de adentrarse de lleno m i s c u i d a d y Tomás Eloy Martínez.
en el new journalism intersticial del nue- Capítulo aparte merece también
norteamericano, Chillon dedica vo periodismo nor- el nuevo periodismo español
quince páginas a analizar una de teamericano y la li- como es de esperarse, la lista de
las simbiosis más perfectas entre teratura moderna. nuevos periodistas españoles
novela y reportaje que se hayan considerada y analizada por
escrito: A sangre fría de Truman Chillon es extensa y prolija, entre
Capote. ellos están: Manuel Vásquez
En los capítulos siguientes, el El comparatismo Montalbán, Francisco Umbral,
autor analiza diferentes ejemplos periodístico-litera- Manuel Vicent, Maruja Torres y
de nuevos periodismos literarios rio (CPL) “viene Rosa Montero.
de diferentes procedencias. Con
delimitado por el
respecto al nuevo periodismo Un apéndice metodológico
norteamericano, encontramos una conjunto de rela-
treintena de ejemplos de textos ciones y conexio- Finalmente, en la cuarta y
analizados, que sirven para ilustrar nes, diacrónicas y última parte, Chillon considera el
los variados temas, actitudes, sincrónicas, entre estudio de las relaciones entre
estilos y técnicas utilizadas por los la cultura periodís- periodismo y literatura por
nuevos periodistas. tica y la cultura medio del “comparatismo
Así, por ejemplo, encontramos literaria” periodístico-literario”. En esta
la actitud radical por contar una parte, el autor propone la
historia en primera persona de fundación de esta nueva
Hunter S. Thompson en Hell’s Angels. A Strange disciplina y define su objeto y sus métodos.
and Terrible Saga, 1966 o de Michael Herr en El objeto de estudio del comparatismo
Dispatches, 1977. Joe McGinniss en The Selling periodístico-literario (CPL) “viene delimitado por
of the President, 1968 y John Gregory Dunne en el conjunto de relaciones y conexiones,
The Studio, 1969, son dos buenos ejemplos del diacrónicas y sincrónicas, entre la cultura
uso de escenas para contar una historia y Gay Talese periodística y la cultura literaria” y, partiendo de
en Joe Louis: The King as a Middle-Aged Man, las modalidades de la literatura comparada, debe
es un claro ejemplo del uso del diálogo con maestría. dividirse en: CPL historiológico, tematológico,
De esta forma, el autor nos lleva de la mano morfológico y genológico. Cada uno de los cuales
mientras desentraña la promiscuidad intersticial es explicado en detalle.
f

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