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CONTENIDO

INTRODUCCIÓN ______________________________________________________ 3
CAPÍTULO I. Revisión de la literatura _____________________________________ 6
1.1 Migración Interna en México ______________________________________________ 7
1.1.1 Concentración urbana _________________________________________________________ 9
1.1.2 Desconcentración urbana _____________________________________________________ 10
1.1.3 Migración y distancia ________________________________________________________ 13
1.2 Decisiones del lugar de residencia _________________________________________ 14
1.2.1 Proceso de decisión _________________________________________________________ 16
CAPÍTULO II. Análisis descriptivo _______________________________________ 18
2.1 Datos _________________________________________________________________ 19
2.2 Intensidad de las migraciones internas _____________________________________ 25
2.3 Características de la población ____________________________________________ 29
2.3.1 Migración y condición laboral _________________________________________________ 30
2.3.2 Migración género y edad _____________________________________________________ 30
2.3.3 Migración y nivel educativo ___________________________________________________ 33
2.4 Otras variables _________________________________________________________ 37
CAPÍTULO III. Modelos econométricos ___________________________________ 38
3.1 Aplicación del modelo logit al fenómeno migratorio __________________________ 38
3.2 Aplicación del modelo logit multinomial ____________________________________ 40
3.3 Aplicación del modelo de regresión lineal ___________________________________ 41
CAPÍTULO IV. Resultados ______________________________________________ 45
4.1 Análisis sobre las características de las personas _____________________________ 45
4.2 Análisis de los flujos migratorios __________________________________________ 48
4.2.1 Primera etapa: los flujos migratorios ____________________________________________ 48
4.2.2 Segunda etapa: variables de atracción ___________________________________________ 57
CAPÍTULO V. Predicciones _____________________________________________ 60
CAPÍTULO VI. Conclusiones ____________________________________________ 67
Bibliografía___________________________________________________________ 70
Anexos ______________________________________________________________ 72
Anexo 1 __________________________________________________________________ 72
Anexo 2 __________________________________________________________________ 73
Anexo 3 __________________________________________________________________ 76
2

Anexo 4 __________________________________________________________________ 78
Apéndices ____________________________________________________________ 79
Apéndice 1. Modelo logit ____________________________________________________ 79
Apéndice 2. Modelo logit multinomial _________________________________________ 82
Apéndice 3. Modelo de regresión lineal ________________________________________ 85
Apéndice 4. Cadenas de Markov _____________________________________________ 88
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INTRODUCCIÓN

A lo largo del tiempo, hasta finales de los años setenta, en México, se observa una
tendencia concentradora de la población en un número reducido de núcleos urbanos1.
Esta concentración se caracteriza por darse de un modo desigual en las diferentes
regiones de la República: las personas se aglomeraron en algunos puntos del país,
provocando que algunas áreas geográficas crecieran de manera exorbitante de tamaño; en
cambio, otras regiones se redujeron considerablemente, convirtiéndose en localidades
más pobres, esta situación ha generado que no exista igualdad de oportunidades en todas
las entidades del país. En los últimos treinta y cinco años, México empieza a
experimentar un proceso desconcentrador de sus grandes urbes, este hecho ocasiona el
crecimiento de ciudades con menos de un millón de habitantes: las llamadas ciudades
intermedias2.

Esta tesis tiene como objetivo mostrar que ante la congestión sufrida en algunos puntos
del país, los individuos reaccionan, desplazándose a aquellas regiones que presentan las
características necesarias para que puedan desarrollarse de una mejor forma. Estos
movimientos descongestionan las grandes urbes, provocando que otras de menor
dimensión aumenten de tamaño, pues para que unas ciudades puedan crecer, otras deben
reducirse. Asimismo, con el estudio de las nuevas tendencias migratorias, puede
observarse que las diferentes áreas urbanas muestran síntomas de especialización; como
consecuencia, las personas, de acuerdo con las características que presentan, toman la
decisión de desplazarse hacia una región en específico.

1
De acuerdo al Consejo Nacional de Población (CONAPO) se considera como población rural aquella con
un número inferior a 15,000 habitantes; considera a una población como urbana aquella que cuente con una
población superior a 15,000 habitantes.
2
La UNESCO considera a una ciudad como intermedia a aquellas que presentan una población entre 100
mil y 1 millón de habitantes.
4

México, al igual que otros países de América Latina, en ciertos periodos de su pasado,
presenta una larga etapa de economía cerrada. Esto provoca que la industria se ubique en
aquellas regiones donde se concentren trabajadores, pues en esos lugares pueden
encontrar mano de obra barata que con el tiempo se vuelve especializada, tal como
sucede en el Estado de México o en el Distrito Federal. Asimismo, el comercio y las
empresas deciden ubicarse en zonas con abundante población, pues es un indicador de la
existencia de posibles consumidores. Al mismo tiempo, las personas necesitan trabajar
para consumir bienes y servicios por ello buscan dirigirse a aquellos puntos en donde
éstos se sitúan. Además ante la poca competencia que el sistema económico permite,
dadas las restricciones a la entrada de mercancías, lo más rentable es ubicarse en áreas
pobladas y de fácil acceso, por lo que al ser éste un periodo largo, el país presenta
algunas ciudades de enormes dimensiones en su territorio.

El problema que una excesiva aglomeración de personas trae consigo es que no se están
ofreciendo las características necesarias que propician la atracción, tanto de personas
como de la industria, en todas las regiones del país. Este congestionamiento de la gente
provoca que la riqueza en el país también se ubique en pocas entidades, continuando el
proceso concentrador. Un gran número de individuos decidirá vivir en estados donde
puede encontrar trabajo, servicios públicos, bienes de consumo privado, por citar
algunos; esto hace imposible que otros puntos del país se desarrollen. Sin embargo, ya
que el producto marginal del trabajo es decreciente, un estado o entidad podría llegar a un
punto de congestión en un momento determinado, al grado que un individuo más no
generará riqueza sino que representará un costo, provocando que en estas grandes
ciudades, la calidad de vida se reduzca y que el mercado laboral esté más competido.

En la actualidad, se observa que los gobiernos intentan ofrecer las condiciones necesarias
para atraer factores de producción: capital y mano de obra, fomentándose de esta manera
un mecanismo de competencia. Los estados compiten entre sí y se diferencian de otras
entidades, con el objetivo de volverse atractivos y poder captar estos factores; la
importancia de ofrecer las condiciones necesarias para atraer a la industria radica en que
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una concentración industrial también atrae personas. Estos individuos al igual que las
empresas pagan impuestos, tanto federales como locales, los que a su vez se convierten
en ingresos para los gobiernos.

El presente estudio analiza un proceso general en la toma de decisiones sobre la elección


del lugar de residencia de los mexicanos. Para el análisis de este proceso, en el Capítulo I,
se realiza una revisión de las tendencias migratorias en el país, y se discuten ideas que
diversos autores le dan al fenómeno migratorio. En el Capítulo II, se presenta un análisis
descriptivo de la base de datos empleada. Para explicar este proceso de una forma
detallada, es necesario utilizar modelos econométricos, cuya aplicación se plasma en el
Capítulo III. Los resultados del estudio econométrico se presentan en el Capítulo IV, el
cual sirve de precedente para hacer proyecciones en el Capítulo V, que muestra cómo
podría distribuirse la población en las diferentes regiones del territorio mexicano. Las
conclusiones de la presente tesis se muestran en el Capítulo VI.
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CAPÍTULO I. Revisión de la literatura

En México, a partir de los años setenta, gracias al Tratado de Libre Comercio para el caso
de los estados del norte, así como del impulso industrial en el centro y norte, y del sector
servicios, en estados como Querétaro o los de la Península de Yucatán, se percibe un
cambio en la localización de la industria y el comercio, que se extiende a más puntos de
la República. Este fenómeno ocasiona que corrientes migratorias, como las de salida del
Distrito Federal, que en un pasado fueron de poca intensidad, tomen fuerza; además,
surgen cambios en las entidades de llegada y de destino, aumentando el tamaño de
ciudades pequeñas y reduciéndose en antiguas ciudades receptoras. La dirección que por
décadas estaban tomando los flujos hacia unas cuantas ciudades y zonas metropolitanas
ha cambiado, es decir ciudades intermedias se han vuelto atractivas, tomando importancia
como nuevos destinos, tanto de migrantes procedentes de zonas rurales, así como de
procedentes de otras regiones con mayor índice urbano. En consecuencia se observa que
el número de migrantes no ha variado, pero sí ha variado el número de ciudades
receptoras y emisoras.

Los temas de concentración y desconcentración de individuos dependen en gran medida


de los movimientos migratorios. Para que se dé una desconcentración territorial, es
necesario que existan causas como un aumento de la tasa de mortalidad o una reducción
en la tasa de natalidad; o bien, factores que ocasionen la desaparición de la población,
como plagas o desastres naturales. Sin embargo, ya que los motivos citados son
ocasionales, la migración por medio de los inmigrantes es el principal factor de
concentración y de desconcentración por los emigrantes.

Los movimientos de personas se definen, dependiendo del estudio que se pretenda


realizar, ya sea, que estos se consideren de acuerdo con el lugar de nacimiento de los
individuos o bien del lugar de residencia en un periodo anterior al analizado. Asimismo,
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debido a las facilidades existentes, hoy en día, como redes carreteras o la diversidad de
transportes, es relativamente fácil cambiar de lugar de residencia; por esto, una misma
persona puede realizar varios desplazamientos en un corto tiempo.

El fenómeno migratorio se presenta en un intervalo de tiempo y un área geográfica


específica; así que para estudiarlo, es necesario precisar una fecha y dos unidades
geográficas, dependiendo lo que se pretenda analizar (migración internacional, entre
estados o entre municipios) representando una de las zonas el lugar de procedencia de los
individuos y la otra el destino. Por lo tanto se considerará movimiento migratorio al
movimiento de personas que cruzan los límites entre dos áreas geográficas.

Con respecto al tiempo, para el estudio de los movimientos migratorios, se debe indicar
una unidad o un periodo, pues un individuo puede tomar la decisión de desplazarse en el
momento que lo considere más oportuno, por lo que si se pretende observar el efecto de
un fenómeno, se podría considerar el tiempo en que éste se lleva a cabo. En México, la
mejor representación sobre el momento migratorio por el tamaño que abarca y el
cuestionario que emplea es la considerada en el Censo Nacional de Población y Vivienda.
En éste se pregunta, además del lugar de nacimiento de las personas censadas, el estado y
el municipio de residencia cinco años antes de la fecha de levantamiento, ofreciendo
datos de movimientos de personas cada cinco años.

1.1 Migración Interna en México

En el tiempo comprendido entre 1995 y el año 2000, el Consejo Nacional de Población


(CONAPO) estima que más de un 6% de la población mexicana cambió de lugar de
residencia; resultando que 4.1 millones realizaron un cambio de entidad federativa,
mientras que 2.7 millones lo hicieron de municipio dentro del mismo estado. El hecho de
que la migración estatal sea mayor que la municipal refleja que los individuos están
buscando un cambio en las características de la región, por lo que se desplazan en mayor
cantidad a distancias relativamente largas.
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La búsqueda de mejores opciones en las diferentes entidades de la República ha


ocasionado que las corrientes migratorias cambiaran en los últimos 35 años. Así lugares
como Guanajuato, Nayarit, Querétaro, Tabasco, Tlaxcala o Yucatán dejan de ser estados
expulsores de personas para convertirse en receptores; el fenómeno contrario sucede en
entidades como el Distrito Federal, Sinaloa y Veracruz; en otros como el estado de
México, Jalisco o Nuevo León, a pesar de ser grandes receptores, están perdiendo fuerza,
puesto que la capacidad de atracción que ejercen las grandes ciudades del país, alrededor
de los años setenta, se está debilitando. Se afirma que ciudades de menor tamaño están
consolidándose como nuevos destinos de las tendencias migratorias.

Para explicar el proceso de concentración y desconcentración urbana, Berry (1980)


propone un modelo de cuatro etapas y seis tipos de flujos migratorios, A; B; C; D; E y F
representados en la siguiente figura.

Figura 1.1 Modelo de Berry

En la fase inicial, los flujos migratorios predominantes son los de tipo C y F. Estos
movimientos muestran que ante la existencia de una ciudad que representa cierto poder
en una región, los migrantes se dirigirán a ella, ya sea desde ciudades o municipios
conurbanos o bien, desde otros estados más lejanos. La segunda etapa está caracterizada
por los movimientos de tipo A, C y E, que presentan movimientos de urbanización y
suburbanización, en los que los individuos empiezan a considerar las áreas suburbanas
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como zonas de destino, sin embargo, el crecimiento de las ciudades centrales es


persistente todavía. La tercera es una secuencia de la segunda etapa en la que los
movimientos hacia las áreas centrales se debilita. Esta etapa presenta una tendencia hacia
la suburbanización; en ella se encuentran movimientos de tipo A y E, ocasionando que
las ciudades centrales estén creciendo hacia la región suburbana. En la etapa final del
modelo, los flujos con mayor intensidad son los de tipo B y D; representan la salida y
descongestión de las áreas centrales y suburbanas. Los movimientos se realizan hacia el
resto del país, haciendo que con el paso del tiempo, se dé una desconcentración urbana,
que toma como dirección otras ciudades de menor tamaño o menos urbanizadas.

1.1.1 Concentración urbana

México es un país polarizado donde aproximadamente la mitad de la población vive en


condiciones de pobreza. Por esto, encontrar trabajo, así como mejores oportunidades de
empleo son las principales causas que motivan el desplazamiento de la gente de una
localidad a otra.

En la historia migratoria mexicana, las principales corrientes de personas se dan desde


núcleos rurales hacia localidades urbanas, debido a las pocas oportunidades en las zonas
rurales que contrastan con la situación en las urbanas, donde el periodo de desarrollo
estabilizador (1940-1970) favorece la concentración de las actividades económicas en un
número reducido de estados. Además, hay mayores oportunidades laborales en las
regiones urbanas, y se ofrece una mayor variedad y abundancia de servicios de consumo,
tanto públicos como privados. Ante la concentración vivida en ciertos núcleos en México,
los gobiernos locales pretenden volverse polos de atracción, con el objetivo de captar
capital humano. Por un lado, lo hacen, proponiendo situaciones que favorezcan el
asentamiento de industria, lo que a su vez atrae trabajadores y familias; por otro lado,
brindan una mejor provisión de servicios, al igual que una empresa que trata de acaparar
clientes.
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Al respecto, Harris y Todaro (1970) proponen un modelo de dos sectores, en el que se


estudia la migración rural-urbana. Explican la interacción entre los dos tipos de
comunidades, y por qué, a pesar de que en las áreas urbanas existe desempleo, hay
personas que migran hacia ellas. La migración procede en respuesta a las diferencias
rurales-urbanas en los salarios esperados. También, ellos proponen que la migración es
el resultado de un desajuste en el diferencial de salarios entre estas dos poblaciones, pues
un elevado salario mínimo establecido por el gobierno provoca una continuada existencia
de migración rural-urbana. La migración cesará cuando el diferencial del salario esperado
sea cero. Además, considerando que en las zonas rurales, el gasto en obra pública es
reducido, puede suponerse que la provisión de servicios públicos y las posibilidades de
consumo de bienes privados también lo son, provocando que para los individuos que
residen en áreas urbanas, el desplazarse a entidades predominantemente rurales no sea
atractivo.

Lo anterior significa que, mediante el fenómeno migratorio, la población rural tiende a


abandonar el campo para dirigirse a las grandes urbes, o a ciudades de menor dimensión;
sin embargo, qué sucede con los habitantes de las grandes ciudades: éstos en los últimos
treinta años, marcan una tendencia al desplazamiento hacia otras zonas, cuya
característica común es que, a pesar de ser zonas con población rural, no dejan de ser
poblaciones predominantemente urbanas.

1.1.2 Desconcentración urbana

Cuando una región, después de haber recibido fuertes corrientes migratorias y de haber
acumulado residentes, se convierte en una expulsora de personas, se considera que está
en proceso de desconcentración. Al respecto Tuirán (2000), aplica el modelo de Berry,
descrito anteriormente, en el Distrito Federal, Guadalajara, Monterrey, Puebla, Toluca y
Torreón. El autor encuentra un cambio en los movimientos migratorios en estos núcleos
urbanos en el periodo comprendido entre 1992-1997, resultando que para la Ciudad de
México y Guadalajara, la mayor intensidad se da en los movimientos de salida del tipo D
y E, lo que muestra la aproximación de la etapa final del modelo de Berry; para las
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ciudades de Puebla, Torreón y Toluca los movimientos de mayor intensidad recaen en los
de tipo C y D, situándose en una etapa intermedia. En cambio, Monterrey sigue siendo un
foco de atracción, que tiene movimientos del tipo A y E. Lo que deja entrever que, al
menos en un determinad tiempo, estas ciudades podrían presentar síntomas de
congestión, y que la aparición de polos alternativos provoca que los individuos decidan
salir de la región.

Estos nuevos polos de atracción pueden aparecer gracias al seguimiento de políticas


económicas, como la apertura comercial o programas de desarrollo. Por ello dependiendo
de estas políticas y de las características regionales, podrían favorecerse ciertos sectores,
tales como la industria, el comercio o el turismo, por lo que tenderían a especializarse en
alguna actividad económica. La frontera norte del país se muestra como un foco de
destino de las corrientes migratorias, Chiquiar (2004) explica que en el inicio de la
apertura comercial no había una reducción en la brecha salarial entre los trabajadores
calificados y los no calificados; sin embargo, a partir de 1994, año en que se firma el
Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), el diferencial de salarios se
reduce en el norte, debido a que la ubicación de estos estados favoreció la inversión
extranjera, convirtiéndose en un sitio estratégico para la instalación de la industria
maquiladora, pues, en estos lugares, los costos de transporte de mercancías son menores
que en otras regiones del país, y ofrecen abundancia de mano de obra no calificada,
mientras que en entidades del resto del país, conforme se alejan de la línea fronteriza, esta
brecha ha tendido a mantenerse.

El diferencial de salarios explica en gran medida la dirección y la intensidad de las


corrientes migratorias. Pero también existe otro grupo de población que cuando ha
resuelto sus problemas laborales, busca algo más en el momento de decidir dónde quiere
vivir; su búsqueda se basa en obtener un mejor nivel de vida, tanto para ellos como para
sus familias. Al respecto, Tiebout (1956) afirma, sin tomar en cuenta el ingreso de las
familias, que la movilidad de personas entre regiones de un mismo país les permite
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revelar sus preferencias por los bienes públicos, desplazándose a aquella localidad, cuya
oferta de impuestos-servicios públicos, se adapte mejor a sus preferencias.

El gobierno espera que sus patrones de gasto en bienes y servicios se adapten a las
necesidades o gustos de los individuos. El consumidor de los servicios se caracteriza por
tener un perfil de preferencias dadas sobre bienes públicos, así como sobre las
posibilidades de consumo de éstos, por lo que los gobiernos estatales intentan ajustar sus
niveles de gasto de acuerdo con el patrón de esas preferencias, permitiendo que los
individuos elijan la alternativa que les represente un mayor nivel de utilidad. Para que
esto sea posible, debe cumplirse que exista perfecta movilidad entre jurisdicciones; para
efecto de la migración interna en México, este supuesto no es un problema, pues existe
libre tránsito entre jurisdicciones. Los consumidores no se enfrentan con barreras como el
idioma, tradiciones o gran diferencia en las costumbres, por lo que los costos que
enfrentan son los de transportarse e iniciar una nueva vida en el lugar indicado de
acuerdo con sus gustos. Otro punto importante es que los consumidores conocen los
patrones de gasto de los estados, que a su vez implica la necesidad de que los individuos
estén dispuestos a investigar las características de las entidades, Tiebout (1956) no
considera restricciones ocasionadas por el empleo, situación que provoca problemas, pues
como se ha mencionado, una persona primero piensa en como mantenerse, aunque
sacrifique con esto parte de la calidad de vida que podría tener en otra región. Además,
supone ausencia de externalidades entre jurisdicciones.

Las personas revelan sus preferencias en palabras de Tiebout “votando con los pies”; en
otras palabras, migrando. Los individuos son racionales, en cuanto a que tienen
preferencias transitivas y completas, pueden hacer un ordenamiento individual de los
servicios públicos que prefieren consumir, así como la cantidad de consumo de estos
servicios. De acuerdo con estas características, los individuos deciden dónde quieren
vivir. Lo planteado por Tiebout (1956) podría ser una realidad en un determinado grupo
de la población: aquella que no está buscando un trabajo y que desea cambiar de lugar de
residencia, o bien, aquella que tiene posibilidades de encontrar un trabajo similar en
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cualquier región a la que se desplace; sin embargo, además de servicios públicos, también
existen otras características que podrían hacer atractiva a una región: niveles de seguridad
o, características intrínsecas, por ejemplo el clima, si es ciudad costera, o por la ausencia
de fenómenos naturales, tal es el caso de las corrientes originadas en el Distrito Federal
hacia Querétaro, a raíz del temblor de 1985.

1.1.3 Migración y distancia

La distancia es un factor preponderante en las decisiones migratorias, pues implica un


costo, tal como muestra Yankow (2003) mediante un estudio, en el que observa a los que
migraron qué tanto se desplazaron. En este estudio, encuentra al igual que Dahlberg y
Fredriksson (2001) que los cambios en distancias cortas no implican cambios en
mercados de trabajo, mientras que aquellos que se desplazan distancias largas sí están
cambiando de mercado de trabajo. Estos últimos consideran a los migrantes a partir del
momento que terminan de estudiar y se incorporan al mercado laboral. Toman en cuenta
variables individuales como la raza, si es dueño o no de su hogar, el estado civil, si viven
en una población rural o en una urbana, su experiencia laboral o si tienen estudios
profesionales. Además, consideran características de los estados, como la provisión de
servicios y la recaudación fiscal en cada región. Asimismo toman el número de migrantes
en una localidad, el desempleo de la región y el valor del metro cuadrado en las zonas,
pues las personas que deciden comprar una vivienda buscan características diferentes que
los que pagan una renta.

Nenchiva y Strauss, Dahlberg y Fredriksson entre otros autores han estudiado la


migración y la provisión de servicios públicos. Tanto Nechyva-Strauss (1997) como
Dahlberg-Fredriksson (2001) han detectado una relación positiva entre la provisión de
servicios públicos y la cantidad de inmigrantes en una región, los primeros estudiaron el
stock de propietarios de hogares que residen en 6 distritos escolares de New Jersey.
Dahlberg y Fredriksson (2001) encontraron una relación positiva entre bienes públicos
locales y las elecciones de residencia de las personas que decidieron cambiar de
residencia en distancias cortas. Afirman que las características de los bienes públicos
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locales son menos importantes para las personas que se desplazan grandes distancias, en
comparación con aquellos que se mueven en distancias cortas, para el caso de Suecia.
Esto podría ser posible porque las personas que se desplazan en distancias cortas no están
cambiando de mercado laboral, por lo que para ellas, el empleo puede que no sea una
característica fundamental en la decisión de cambiar de lugar de residencia; en cambio,
las personas que se desplazan grandes distancias podría ser que busquen nuevas
oportunidades.

El punto fundamental del estudio de la migración con relación a la distancia radica en que
la distancia es un costo que los individuos deben asumir en el momento de desplazarse;
un individuo que se mueve una gran cantidad de kilómetros asume que vivirá lejos de su
familia y del estilo de vida al que está acostumbrado; asimismo, una gran distancia
recorrida implica un mayor grado de cambio en costumbres e incluso de horarios. Todo
esto representa un costo adicional al de transportarse para los individuos; así que si una
persona decide cambiar de residencia a puntos distantes es porque en éstos existen
factores que desean y no pueden disfrutar en sus entidades de origen. En México, vale la
pena observar el repunte que han tenido, en los últimos 20 años, las entidades situadas en
el Sur, donde se marca un incipiente desarrollo industrial y la fuerza del turismo. En el
Norte del país, gracias a la industria relacionada con el comercio internacional, a pesar de
ser las zonas más alejadas del centro, atraen un gran número de personas,
descongestionándose los estados centrales.

1.2 Decisiones del lugar de residencia

Hasta el momento ya se ha explicado que para que se dé una desconcentración territorial


es necesario que existan personas dispuestas a salir de una localidad, y puesto que ya se
han planteado los factores que favorecen que las personas se muevan, así como qué
provoca concentraciones y desconcentraciones de grandes zonas urbanas, en esta sección
se analizará el proceso de decisión de las personas sobre el lugar donde desean vivir.
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En México, un individuo puede considerar como entidad de residencia treinta y un


diferentes alternativas, además de su estado actual, tomando en cuenta que el mayor costo
consiste en tomar la decisión de desplazarse, decantarse por un lugar u otro no presenta
un costo adicional de gran magnitud. Con respecto a este planteamiento Borjas (1999)
investiga si la elección de localización realizada por los emigrantes mexicanos cuando
llegan a los Estados Unidos está influida por la dispersión interestatal de los beneficios de
asistencia pública. En su estudio encontró que estados, como California, dadas sus
características, funcionan como imanes, atrayendo inmigrantes; la dispersión de estos
beneficios afectan la elección de la ubicación de los inmigrantes en los Estados Unidos.
Los llamados efectos magnéticos son la respuesta del comportamiento maximizador de
beneficios por parte de los inmigrantes.

La intuición que existe en el planteamiento de Borjas (1999) radica en que para las
personas que son nativas de los Estados Unidos, y viven ahí, les resulta más difícil
cambiar de estado de residencia; sin embargo, los migrantes mexicanos que llegan, como
ya han decidido asumir el costo de emigrar, se van a decantar por el estado que más les
convenga, eligiendo, los menos favorecidos, lugares en donde existan programas sociales
que los beneficien. En el caso de la migración interna, las personas ya decidieron que
saldrán de su entidad de residencia, por lo que estudiarán las ventajas de cada estado y los
costos que asumirán, terminando por elegir la entidad correcta de acuerdo con sus perfiles
individuales.

Ante todo, un individuo primero se preocupa por poder mantenerse, renunciando con esta
decisión a un cierto grado de calidad de vida; en otras palabras, se considera más valioso
tener qué comer antes que la comodidad de la persona, por lo que es posible que familias
de bajos ingresos sean más sensibles a la aparición de nuevos polos de atracción. Por lo
anterior, la decisión de cambiar de residencia, en la mayoría de los casos, va acompañada
de las oportunidades, tanto de encontrar un empleo, como de mejores oportunidades
laborales; una vez resuelto este problema, los individuos tratan de encontrar aquellas
localidades que les ofrezcan una vida un poco más cómoda.
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1.2.1 Proceso de decisión

El planteamiento que Tiebout (1956) presenta podría ser llevado a la realidad cuando los
desplazamientos no impliquen un cambio de mercado laboral; sin embargo, su estudio se
puede considerar cuando se toma, además de los bienes públicos proveídos en cada
región, más factores regionales, pensando que cada persona que decide emigrar se
desplazará a la entidad que, de acuerdo con sus características individuales, mejor se
adecue. Si una persona decide cambiar de lugar de residencia, el destino debe cumplir
con ciertos factores, a los que el individuo en cuestión le da aprecio; sería deseable
englobar en una variable los bienes que un individuo puede consumir, el goce que pueden
ejercer las personas de bienes públicos, el costo que éstas deben asumir al decidir
emigrar, y por último, cada estado presenta unas características propias que podrían
considerarse atractivas. Asimismo, los migrantes consideran la probabilidad de conseguir
el tipo de empleo deseado en la zona de destino. A continuación se muestra cómo podría
plantearse un modelo de probabilidades de decisión sobre el lugar de destino que toman
los individuos, mediante una variable englobe un grupo de factores.

Existen dos tipos de bienes que una persona puede consumir: por un lado, están los
bienes públicos proveídos por el estado; éstos se financian con los impuestos que pagan
los ciudadanos de una región, impuestos que un individuo descuenta de sus ingresos. Por
otro lado, una vez descontados los impuestos, cada individuo tendrá un presupuesto para
destinar al consumo de bienes privados; sin embargo, para que estos dos tipos de bienes
puedan consumirse es necesario que existan en un determinado lugar. Además, hay otro
tipo de bienes que nadie provee, pero que están intrínsecos en ciertas zonas, tal es el caso
de condiciones que se dan en ciertos lugares. Estos atributos agregan valor a una región,
ya que no es lo mismo vivir en una ciudad segura que en una insegura, estar en un lugar
agradable, que el acceso a los bienes públicos sea posible, o bien, vivir en una zona libre
de contaminación.

Si se considera lo presentado por Dahlberg y Fredriksson (2001), cada individuo tiene


una función de utilidad que debe maximizar antes de elegir hacia donde desplazarse, de
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tal forma que la función de utilidad depende de las características intrínsecas de una
región en específico. Éstas pueden englobar atributos, por ejemplo: el clima, las
costumbres, así como el tipo de personas que viven en la región. Además, un individuo le
dará valor a la provisión de servicios públicos ofertados en un estado y el consumo que
pueda ejercer sobre éstos; al considerar este tipo de bienes, también se debe tomar en
cuenta la capacidad de consumo de bienes privados en cada región. La utilidad, también,
se ve afectada por el precio de vivir en una zona en específico. El costo puede
representarse en varias formas: podría plantearse como el costo de vivir lejos de la
familia, de adaptación, o bien la recaudación fiscal por persona que se realiza en la
entidad. Aunque no sería un buen indicador, pues lugares como Nuevo León reciben un
gran flujo, a pesar de ser un estado con una elevada recaudación fiscal. Por último, un
migrante aprecia la facilidad de encontrar un trabajo, así como que este se adecue a sus
características; por ello, es fundamental considerar el desempleo en la región de destino;
de tal forma que una persona que decida cambiar su lugar de residencia elige aquella
localidad donde se cumpla que la utilidad sea la máxima, dependiendo de las
características presentadas en cada región.

Tanto los atributos de cada Entidad Federativa, la provisión de bienes públicos, el costo
por residir en una zona determinada, así como el acceso a una oferta de bienes de
consumo privado pueden ser representados de muchas formas, por lo que en los capítulos
posteriores, se agrupan estos aspectos en ciertas variables explicativas, que permitan ver
el comportamiento de los individuos.
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CAPÍTULO II. Análisis descriptivo

En México, son varias las encuestas que estudian los fenómenos demográficos; entre
ellas aparece la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica (ENADID) o el Censo
Nacional de Población y Vivienda. En la elaboración de ésta tesis, se toman los datos
correspondientes al Censo del año 2000, ya que éste muestra un cuestionario ampliado
con características individuales de los habitantes de la República Mexicana; además, la
encuesta abarca la totalidad de los residentes en el país, por lo que permite tomar varios
tamaños de muestra.

Para el estudio de los movimientos migratorios, el Censo emplea preguntas como la


entidad y municipio de nacimiento, de residencia anterior o lugar de residencia cinco
años antes de la fecha en que se realiza la encuesta. En esta tesis, se considera que la
mejor representación de las tendencias concentradoras actuales es aquella que toma la
migración, de acuerdo con el lugar de residencia en una fecha fija. Como desventajas,
López (2002) afirma que esta forma de medir los flujos migratorios no es capaz de
observar la realidad en su totalidad. Debido a las facilidades de desplazamiento en el país,
un mismo individuo puede efectuar más de un cambio de residencia en el periodo de
estudio; asimismo, en el momento que se levanta la encuesta, las personas que están vivas
son las únicas que se toman en cuenta. Otro punto que muestra López (2002) es que
cuando se utiliza una fecha en específico, existe población que no ha nacido en la fecha
marcada como de residencia anterior; sin embargo, esta persona migró con la familia.
Esta definición representa la ventaja de que las respuestas pueden medir el monto
aproximado de los movimientos migratorios entre dos fechas determinadas. El tiempo
dependerá del número de años que se analice, ya sea por lugar de nacimiento o de
residencia anterior. Además, analizando un periodo corto puede observarse cómo ciertos
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cambios económicos o programas efectuados por los gobiernos en una localidad, zona o
país afectan el desplazamiento de personas.

2.1 Datos

La información que se emplea es de dos tipos: por un lado, se analizan qué características
provocan que una persona decida cambiar su lugar de residencia, y para ello se toman del
Censo, datos individuales como la edad, el género y el nivel educativo. Por otro lado, se
emplea información sobre las características estatales, ofrecidas por el Sistema Nacional
de Información Municipal (SNIM), como desempleo o densidad de población; esto con el
objetivo de observar qué factores pueden ser el motivo de la expulsión o atracción de
personas.

El Instituto de Estadística Geografía e Informática (INEGI) pone a disposición de todos


los usuarios la información del Censo del 2000. Esta institución ofrece una muestra del
10% de la población total censada. Sobre la muestra censal, se considera una décima
parte, por lo que la representación es del 1% de los individuos censados3. De este
porcentaje, se selecciona a las personas que en el año 2000, tienen una edad que oscila
entre los 23 y los 70 años, pues éstas, en 1995 tenían entre 17 y 65 años. La importancia
de tomar este rango de edad radica en que se busca que los individuos tengan, en su
mayoría, poder de decisión, que traten de encontrar la entidad y la zona que mejor se
adapte de acuerdo con sus características individuales. De esta manera quizá un joven de
17 años, con una educación no superior a la de secundaria, puede tomar un mayor
número de decisiones que un individuo de 22 años que se encuentre estudiando. Además,
al tomar una muestra con una edad tan amplia permite realizar diferentes divisiones y
cortes para ver el comportamiento que presentan según su longevidad.

3
La muestra tomada solo incluye a individuos censados en el año 2000 y que en 1995 residían en territorio
mexicano.
20

Para observar los diferentes tipos de personas, el cuestionario ampliado incluye


preguntas4, tales como edad, sexo, estado civil, número de hijos, nivel educativo, tamaño
de localidad en la que viven, condición laboral, estado y municipio de residencia anterior;
en caso de haber cambiado de estado de residencia, se le pregunta el motivo. Gracias a
estas preguntas, es posible dividir a la población por características, así como saber si
migró y en qué dirección lo hizo.

Dependiendo de las características individuales, cada persona evaluará el proyecto de


emigrar, tomando la decisión que le proporcione un mayor rendimiento. En el siguiente
cuadro, se presenta la composición de la población que se considera en la muestra
tomada.

Cuadro 2.1 Características de la muestra


Censo del año 2000 Total
Población total 426730
Edad promedio 39,05
Hombres 47,9%
Mujeres 52%
% de alfabetos 89%
Hasta preescolar 10,9%
Hasta secundaria 64,9%
Hasta técnica 13,6%
Hasta postgrado 10,4%

Migrantes estatales 4,4%

Menos de 2500 habitantes. 36,2%


De 2500 a 14999 habitantes 16,8%
De 15000 a 500,000
habitantes 26,9%
De 500,000 a más habitantes 19,9%

La muestra analizada consta de 426730 personas, de las cuales el 47.9% es población


masculina. En cuanto a la educación, el 89% son personas que saben leer y escribir,
asimismo, predominan las personas con un grado de escolaridad que llega hasta
secundaria con un 65%, seguida de personas que presentan una escolaridad de

4
El Censo presenta preguntas sobre las personas y las características de las viviendas. Los resultados de las
preguntas, que se refieren a las personas, están clasificadas en 81 categorías.
21

preparatoria o carrera técnica. La muestra tomada se distribuye en más de un 36% en


localidades cuya población es inferior a los 2500 habitantes, seguidas con un 47% de
personas que viven en zonas urbanas de más de 15000 habitantes.

México es un país que consta de 32 entidades federativas en un territorio de cerca de dos


millones de kilómetros cuadrados. Por la amplitud del territorio y el número de estados se
divide al país en nueve zonas, las cuales no muestran ninguna característica en particular
más que la división geográfica; en cada una de las regiones, se presenta un número
semejante de individuos5, así como también se busca que sean entidades que comparten
frontera, de tal forma que no haya ningún otro sesgo más que la ubicación geográfica.
Una virtud, al presentar esta división zonal, se da, pues se pretende disminuir el efecto
sobre la migración, causado por la cercanía entre dos estados. Como se muestra en
posteriores apartados, la migración depende negativamente de la distancia entre dos
localidades, por lo que hacer una división zonal provoca que se consideren a personas
que se desplazan distancias grandes. De esta forma el país queda dividido de la siguiente
manera

5
En la división zonal, se pretende que cada una de las zonas presente una población de alrededor de diez
millones de personas.
22

Ilustración 2.1 División zonal

• Noroeste.- Baja California, Baja California Sur, Sonora, Chihuahua, Sinaloa y


Durango.
• Noreste.- Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas y San Luis Potosí.
• Centro-norte.- Nayarit, Jalisco, Aguascalientes, Zacatecas y Colima.
• Centro.- Querétaro, Guanajuato, Hidalgo y Michoacán.
• Capital.- Distrito Federal y Morelos.
• México.- Estado de México.
• Centro-sur.- Guerrero, Puebla y Tlaxcala.
• Sur.- Oaxaca y Veracruz.
• Sureste.- Campeche, Chiapas, Quintana Roo, Tabasco y Yucatán.
23

Los individuos toman decisiones con base en sus características y los factores de
atracción ejercidos por el resto de las zonas. Una característica adicional es la región en la
que una persona está viviendo, pues al suponerse que cada una se especializa en ciertos
sectores de actividad económica, tendrán un mayor o un menor grado de expulsión. De
esta manera, el cuadro 2.2 presentado a continuación muestra cómo se compone la
población de cada una de las regiones; asimismo, presenta características propias de
éstas, como el desempleo o la densidad, que son estimadas, calculando el promedio de los
estados que comprenden cada zona.

Cuadro 2.2 Características zonales


Centro Centro
Noroeste Noreste -norte Centro Capital México -sur Sur Sureste
Población
Total 46291 46611 45592 51409 46853 50681 43844 55529 39920
Edad
Promedio 39,1 39,3 39,2 39,1 39,1 37,7 39,3 40,1 38,3
Hombres 49,7% 49,6% 50,8% 41,5% 51% 42,8% 60,7% 44% 51,8%
Mujeres 50,3% 50,4% 49,2% 58,5% 49% 57,2% 39,3% 56% 48,2%
% de alfabetos 92,5% 93,2% 92,9% 86,5% 96,3% 93,5% 82,7% 79,5% 82,7%
Hasta
Preescolar 6,4% 7,1% 8,2% 14,6% 4% 7% 15.9% 18.7% 15,9%
Hasta
Secundaria 66,7% 64,7% 69,6% 67,6% 50,0% 64,4% 66,6% 68,4% 66,3%
Hasta
Técnica 16,0% 15,8% 12,2% 10,3% 24,0% 17,4% 9,6% 7,3% 10,4%
Hasta
Postgrado 10,9% 12,3% 10% 7,5% 21,8% 11,3% 7,8% 5,7% 7,3%

Menos
de 2500 habts. 35,3% 31,7% 32,6% 42,2% 5,4% 20,4% 46,3% 62,9% 47,2%
De 2500
a 14999 12,6% 10,8% 18,6% 20,3% 5,4% 18,4% 25,1% 18,7% 21,9%
De 15000
a 500,000 24,8% 34,3% 25,3% 24,8% 42,0% 32,8% 15,1% 18,4% 25,5%
De 500,000
a más 27,3% 23,3% 23,5% 12,7% 47,2% 28,4% 13,5% 0% 5,4%

Densidad 20 36 81 112 3027 613 145 66 40


Desempleo 1,0% 1,1% 1,2% 1,2% 1,7% 1,6% 1,2% 1,1% 1,1%
24

En general, el país presenta características semejantes entre las zonas ubicadas en toda la
región norte, entre las que se encuentran en el centro y entre las del sur; sin embargo,
entre ellas también existen diferencias que las hacen atractivas, en mayor o menor grado,
para los individuos.

En este contexto, la muestra de las zonas de todo el norte del país presenta una mayoría
de población que vive en localidades urbanas, excepto por la zona que abarca a los
estados de la región centro-norte, cuya representación rural es de un 51% de la población.
También, la región se caracteriza por presentar los mayores índices de alfabetización y un
porcentaje de personas con escolaridad universitaria elevado, entre un 9.95% en el norte-
centro hasta un 12.34% en el noreste. En cuanto al desempleo, las zonas del norte
presentan las menores tasas promedio, dado que la región del noroeste con una tasa del
1.04% es la menor del país. Por el área que abarcan los estados ubicados en estas
regiones, la densidad de población es la menor de la República, pues oscila desde 20
personas por kilómetro cuadrado en el noroeste, hasta 81 en el centro-norte.

La región del centro del país comprende a la zona del centro, la de la capital y el Estado
de México. En general, éstas presentan los mayores índices de educación. Sobresale la
región capital con un 46%, el doble de la media nacional de personas con estudios por
encima del de preparatoria. Por el contrario, la zona que abarca los estados de Querétaro,
Guanajuato, Hidalgo y Michoacán muestra un 17% de la población con estos estudios,
mientras que en el Estado de México es de un 28%. Asimismo, la región muestra una
elevada representación de población que vive en áreas urbanas, desde un 37%, en la zona
centro, a un 89%, en la capital. En cuanto a las características zonales, destacan por tener
tanto las mayores tasas de desempleo, hasta de un 1.7%, como las mayores densidades de
población, 3027 personas por kilómetro cuadrado, en la capital, y, de 613 en el Estado de
México.

La región que comprende la totalidad del sur de la República, las zonas centro-sur, sur y
sureste presenta los mayores porcentajes de población rural, en especial, la zona que
abarca a Veracruz y Oaxaca, pues casi un 63% de la muestra vive en localidades de
25

menos de 2500 personas; además, presenta los menores índices de educación, pues la
zona centro-sur tiene apenas un 7.8% de personas con educación superior; también
muestra la menor tasa de alfabetismo con un máximo del 83% de individuos que saben
leer y escribir, en el centro-sur y en el sureste.

2.2 Intensidad de las migraciones internas

Para analizar los movimientos migratorios y observar qué dirección toman, es necesario
conocer la Entidad Federativa de origen y el destino de los migrantes. Mediante el
cálculo de intensidades migratorias, es posible observar las preferencias de los habitantes
de los diferentes estados sobre la elección de destino. La intensidad de migración se
calcula como el número de personas que salen de la entidad i hacia el estado j entre el
número de habitantes de i; si se multiplica este cociente por mil, puede hablarse de
cuantas personas de cada mil toma un determinado flujo. Las intensidades muestran la
preferencia de los habitantes de ciertas entidades en la elección del nuevo destino; puede
observarse, en el cuadro 2.3, que en orden de intensidad, el estado que, en promedio,
recibe a individuos de diferentes regiones, con una mayor intensidad, es el Estado de
México; este recibe el mayor flujo migratorio por parte del Distrito Federal, pues casi 53
de cada 1000 personas que en 1995 vivían en el Distrito Federal decidieron desplazarse al
Estado de México. Si se descuenta este flujo, el Estado de México ocuparía la cuarta
posición, sus otros grandes flujos son procedentes de sus estados fronterizos o
relativamente cercanos, por ejemplo: Tlaxcala, Puebla o Morelos, así como entidades con
altos índices de marginación, tales como Oaxaca y Guerrero.

Baja California es la segunda entidad a la que llegan personas con gran fuerza, que a
excepción de los estados de Michoacán y Guerrero (quizá, pues de estas entidades se
origina un gran número de emigrantes a los Estados Unidos) todos son procedentes de
estados aledaños; en cuanto al Distrito Federal, las ocho entidades de las que recibe
individuos, con mayor intensidad, son estados cercanos, excepto por Oaxaca; sin
embargo, el Distrito Federal se destaca como el estado con la mayor tasa de expulsión del
país.
26

Por otro lado, un estado como Quintana Roo, además de estados cercanos, también recibe
una fuerte corriente migratoria procedente del Distrito Federal, Guerrero, Morelos o
Veracruz; Chihuahua, al igual que Quintana Roo, se caracteriza por estar en uno de los
extremos del país; sin embargo, a éste llegan, con gran intensidad, personas de estados
como Veracruz, Oaxaca, Chiapas; podría pensarse que estos dos últimos se dirigen a
Chihuahua por su cercanía con los Estados Unidos; sin embargo, no lo hacen con tanta
intensidad a los estados de Coahuila, Nuevo León, Sonora o Tamaulipas.

La migración entre el Estado de México, Distrito Federal, Nuevo León y Jalisco, no se


encuentra entre las ocho migraciones más intensas, pues estos presentan características
similares; por ello, podría suponerse que el hecho de tener condiciones semejantes no los
hace tan atractivos como migrar hacia otras zonas donde exista mayor diferenciación con
sus entidades de origen.

Las entidades que reciben un gran número de personas de regiones lejanas son Baja
California Sur, Campeche, Chihuahua, México, Morelos, Oaxaca, Veracruz y Yucatán.
Como muestra el cuadro 2.3, los flujos con mayor intensidad6 se dan entre estados
fronterizos o muy cercanos, excepto el caso de las corrientes Guerrero-Sinaloa o Nayarit-
Baja California. El hecho de que una persona decida desplazarse a una localidad alejada
indica la existencia de algún factor que provoca que un individuo asuma el costo de
realizar un desplazamiento largo.

6
Para ver la tabla completa consultar el Anexo 2.
27

Cuadro 2.3 Flujos de Mayor Intensidad


Origen Destino Tasa*1000
Distrito Federal México 52,8
Baja
Sinaloa California 19,8
Quintana
Yucatán Roo 19,3
Durango Chihuahua 19,3
Quintana Roo Yucatán 18,7
Chihuahua Coahuila 15,1
Chihuahua Durango 15,1
Distrito
México Federal 14,9
Nayarit Jalisco 14,4
Baja
Nayarit California 13,8
Quintana
Campeche Roo 11,3
Veracruz Tamaulipas 10,9
Sinaloa Sonora 10,8
Baja
Sonora California 10,4
Baja California Baja
Sur California 10,3
Quintana
Tabasco Roo 10.3
Chihuahua Sonora 10,2
Campeche Yucatán 9,6
San Luis Potosí Nuevo León 9,4
San Luis Potosí Tamaulipas 9.2
Guerrero Sinaloa 9,1
Coahuila Chihuahua 8,1

Por otro lado, las corrientes migratorias de menor intensidad, representadas en el cuadro
2.4, se dan entre estados que se encuentran muy distantes entre sí, por lo que la distancia
es un factor determinante para elegir el lugar de destino. En el cuadro, están marcados, en
forma más obscura, aquellos flujos migratorios de poca intensidad que se dan entre
estados relativamente cercanos, coincidiendo todos ellos en que proceden de entidades
con elevados índices de marginación; por lo tanto, si no existe una entidad que resulte
atractiva en las proximidades, las personas que deciden migrar preferirán desplazarse
distancias grandes.
28

Cuadro 2.4 Flujos Migratorios de Menor Intensidad


Origen Destino Tasa*1000 Origen Destino Tasa*1000
Tabasco Zacatecas 0,059 Tlaxcala Colima 0,043
Baja California
Querétaro Campeche 0,058 Yucatán Sur 0,042
Baja California
Colima Sur 0,058 Nuevo León Tlaxcala 0,042
Colima Puebla 0,057 Colima Chiapas 0,042
Tlaxcala Nayarit 0,054 Nayarit Tlaxcala 0,041
Coahuila Campeche 0,054 Yucatán Tlaxcala 0,041
San Luis
Jalisco Tlaxcala 0,054 Potosí Campeche 0,039
San Luis
Colima Quintana Roo 0,053 Colima Potosí 0,038
San Luis
Potosí Yucatán 0,052 Durango Tlaxcala 0,037
Colima Zacatecas 0,052 Nayarit Campeche 0,036
Colima Morelos 0,052 Yucatán Durango 0,036
Guanajuato Tlaxcala 0,052 Guanajuato Campeche 0,035
Coahuila Tlaxcala 0,051 Zacatecas Tabasco 0,034
Guanajuato Tabasco 0,051 Yucatán Zacatecas 0,033
Tabasco Nayarit 0,051 Colima Durango 0,032
Aguascalientes Tabasco 0,051 Yucatán Colima 0,032
Tabasco Durango 0,051 Durango Yucatán 0,032
Zacatecas Chiapas 0,051 Sonora Campeche 0,023
Zacatecas Quintana Roo 0,05 Colima Yucatán 0.021
Campeche Aguascalientes 0,048 Colima Tlaxcala 0.018
Jalisco Campeche 0,046 Yucatán Nayarit 0.018
Yucatán Aguascalientes 0,046 Aguascalientes Campeche 0.017
Zacatecas Tlaxcala 0,046 Colima Tabasco 0.015
Baja
California Campeche 0,044 Colima Campeche 0.015

Lo anterior muestra la necesidad de hacer una división zonal en el estudio de los


movimientos migratorios internos, pues el intercambio de personas entre estados
colindantes es elevado, mientras que la intensidad de los flujos migratorios se reduce,
conforme aumenta la distancia entre dos entidades; de esta manera puede intuirse que
cuando el intercambio de personas entre dos localidades alejadas entre sí es de un tamaño
considerable, se debe a la existencia de ciertas características que logran atraer gente de
lugares distanciados.

El diseño del país por zonas, con un número parecido de habitantes, permite disminuir el
llamado efecto gravitacional, el cual propone que la atracción entre dos cuerpos se
29

relaciona positivamente con la masa, en otras palabras con la población, que presentan de
tal forma que un cuerpo grande atrae a uno pequeño, así como, se relaciona
negativamente con la distancia que los separa.

2.3 Características de la población

La edad, el nivel educativo, el número de hijos, el sexo, el estado civil son características
que influyen tanto en la decisión de desplazarse como en la elección del destino. Por ello,
dependiendo de cuáles presenten, los individuos van a estudiar las canastas de ventajas
que pueden disfrutar en cada región, como puede ser el nivel de desarrollo, el desempleo,
la seguridad, la calidad y el goce de servicios públicos, así como los costos asociados a
los desplazamientos.

Para personas con bajos niveles de estudio, posiblemente, les resulte más difícil cambiar
de localidad, una vez que ya tienen un trabajo, pues el traslado les representa inseguridad;
la gente sin empleo buscaría localidades con mayores oportunidades laborales; las
personas con elevados niveles de educación tenderán a investigar sobre las características
de cada región, sabiendo que pueden integrarse a casi cualquier mercado laboral; aquellos
individuos de la tercera edad y que dispongan de los recursos necesarios tratarán de
dirigirse a los lugares que les ofrezcan tranquilidad, ya sea por las características del
estado o bien para reunirse con sus familiares más cercanos.

A pesar de que no está claro saber qué consideran las personas antes de decidir dónde
vivir, sí es evidente que cada persona presenta un perfil de preferencias, el cual está
influido por sus características individuales; además, los individuos se enfrentan con
costos al desplazarse, por lo que intentan elegir la mejor opción, sujetos a la molestia que
implica cambiar de lugar de residencia. Si se parte de esto están tratando de alcanzar la
mayor curva de utilidad posible.
30

2.3.1 Migración y condición laboral

Como ya se ha explicado, la migración depende muy cercanamente de la condición


laboral de los individuos. Esto es, primero, piensan en poder mantenerse; después, en
mejorar su calidad de vida. A pesar que de que un individuo que se encuentra trabajando
en el sector formal podría migrar hacia un lugar en el que se ofrezcan mejores
oportunidades laborales, para este tipo de personas, los incentivos por desplazarse son
menores que para aquellas que no tienen un trabajo formal.

En ciudades con gran concentración urbana, existe una mayor demanda de trabajo que en
localidades rurales; sin embargo, cuando se presenta una gran aglomeración de personas,
se llega a un punto en el que la cantidad de individuos que ofrecen sus servicios es mayor
que la cantidad demandada de trabajadores. Esta situación provoca, manteniéndose los
salarios constantes, un desequilibrio en el mercado laboral; este desequilibrio conlleva a
que residentes de entidades congestionadas decidan buscar fortuna en otras áreas,
llevando a que esta brecha se reduzca en su entidad de origen, así como, la intensidad del
flujo de salida.

Ya que el empleo forma parte esencial en la decisión de cambiar de entidad de residencia,


en las siguientes secciones, se presentan cuadros de factores que influyen en los
desplazamientos, comparándolos con las personas que están buscando trabajo o intentan
mejorar su condición laboral.

2.3.2 Migración género y edad

El sexo y la edad son atributos intrínsecos en las personas, por lo que según la sociedad
en la que un individuo vive, pueden afectar en forma diferente. En México, donde, por lo
general, el hombre, que aún desempeña el papel de jefe de familia, tiende a ser más móvil
que la mujer. La edad, por su parte, es una característica influida por el miedo al fracaso;
una persona joven tendrá menor aversión al riesgo que un individuo de edad avanzada;
esta característica, aunada a que las personas que empiezan su edad laboral están
dispuestas a trabajar en casi cualquier zona de la República; por ello su costo es menor
31

que el de una persona mayor, pues dispone de más tiempo para hacer rentable su
decisión.

En el siguiente cuadro, puede observarse que la migración femenina, a edades tempranas,


es superior a la masculina. Esto podría obedecer a que las mujeres se casan en promedio a
una edad inferior a la de los varones, desplazándose, por lo general, a las zonas donde
viven sus cónyuges.

Cuadro 2.5 Migración por Edades y Sexo


Tasa*100 Tasa*100 Total Tasa
Edades Hombres Mujeres Migrantes Pob.Tot. Total*100
17 a 20 4,5 4,6 3009 66527 4,5
21 a 25 4,7 4,8 3506 73947 4,7
26 a 30 4,5 4,1 2621 61306 4,3
31 a 35 3,6 3,1 1932 57949 3,3
36 a 40 3,2 2,4 1188 43177 2,8
41 a 45 2,3 1,9 766 36858 2,1
46 a 50 2,0 1,8 527 27509 1,9
51 a 55 1,6 1,6 405 25191 1,6
56 a 60 1,6 1,4 284 18691 1,5
61 a 65 1,0 0,8 138 15575 0,9

Enfocando a la población por grandes grupos de edad, se observa que entre los 17 y los
30 años es cuando la propensión a migrar es mayor, y es que para cada grupo, de cada
100 personas, más de 4 deciden cambiar de zona de residencia; dentro de este grupo, se
destacan los individuos que integran el intervalo 21-25, pues en éste, aproximadamente,
de 100 habitantes, cinco se mueven hacia otras regiones.

En el Censo de Población y Vivienda del año 2000, a las personas que, en 1995 vivían en
una entidad diferente a la que residían en el 2000, se les preguntó el motivo por el que
decidieron desplazarse; las respuestas incluidas consideran si migró por motivos
laborales, debido a que se trasladó para reunirse con la familia, cambió su lugar de
trabajo, fue a estudiar, se casó o se unió, por motivos de salud, por inseguridad o
violencia y por otras causas.
32

En el siguiente cuadro, se muestra la migración de personas que se desplazaron por


motivos laborales, ya sea que migraron porque fueron a buscar trabajo, o bien por que
cambiaron su lugar de trabajo. Analizándolo, se observa que los grupos de edad más
representativos se presentan en el rango de edades que va de 26 a 40 años. Esto indica
que, en éstos, el trabajo es el factor más importante de movimiento.

Cuadro 2.6 Migración por motivos laborales


Migrantes por
Motivos
Edades laborales Tot.Migrantes Tasa*100
17-20 919 3009 30,5
21-25 1073 3506 30,5
26-30 819 2621 31,2
31-35 592 1932 30,6
36-40 389 1188 32,7
41-45 234 766 30,5
46-50 124 527 23,5
51-55 90 405 22,2
56-60 44 284 15,5
61-65 28 138 14,7

Las personas que deciden mudarse por motivos laborales deben hacer una valuación
privada de su proyecto. Goss y Paul (1986) muestran que los individuos toman en cuenta
los costos y los beneficios de moverse, decidiendo desplazarse si el valor presente de
hacerlo es mayor que si toman la decisión de no migrar. Consideran la edad como un
atributo relevante al determinar el valor presente neto; es decir, a mayor edad, se
incrementan los costos, mientras que el tiempo para recuperar los beneficios es menor.
Aquellos que son mayores tienen menos años para amortizar los costos de haber migrado.

Cabrera (1970) explica que las tendencias migratorias en México han tendido a
posponerse; estudia la selectividad de los migrantes de acuerdo con su edad y sexo; en su
estudio, hace una revisión de la migración interna en México durante el periodo de 1930-
1960, en la que encuentra que, durante el periodo comprendido entre 1930-1940, el
mayor número de migrantes masculinos perteneció al grupo de 10 a 14 años, resultando
un 16.6% del total; en el siguiente decenio, el máximo volumen migratorio ocurrió en el
grupo de 15-19 años, con un 18.6%; en el periodo 1950-1960, el grupo que mayor peso
33

tuvo en la migración interna perteneció al grupo 20-24 años de edad. El hecho puede
estar relacionado, por un lado, con la extensión del sistema educativo a nivel nacional,
que cuando menos en el nivel primario, da lugar a que los niños y jóvenes esperen la
terminación de su ciclo de enseñanza para migrar; por otro lado, un país en proceso de
industrialización requiere de una mano de obra, además de mejor calificada, con edad
mínima suficiente que garantice la realización de las labores que se encomienden.

Para el caso de las mujeres migrantes, no se presenta la situación anterior, pues acusan el
mayor volumen las de 15-19 años de edad, con ligera tendencia de aumento de 19,5%, en
el primer decenio, a 21,7%, en el último. Sin embargo, se observa que en el grupo de
edad que le sigue, 20-24 años, hay un incremento significativo en el volumen de las
mujeres migrantes, que pasan de 14,9%, en el primer decenio, a 19,2%, en el último.

2.3.3 Migración y nivel educativo

La educación es una variable substancial en las decisiones de desplazarse. Cabe


mencionar que una persona con un alto grado de escolaridad podría encontrar trabajo en
casi cualquier mercado laboral, consiguiendo un nivel de ingreso superior en todos ellos a
una persona con un bajo nivel educativo; sin embargo, entre estados, también existe
diferencial de salarios y de oportunidades que afectan la decisión sobre dónde dirigirse.
Por otro lado, una persona que decide estudiar es probable que trabaje, mientras que una
persona sin estudios, la probabilidad de que trabaje es variable. En nuestro país como
puede observarse en el cuadro 2.7, las personas que saben leer y escribir tienen una
mayor propensión a desplazarse entre las zonas en que se divide el país.
Aproximadamente, 4 de cada 100 personas alfabetas se traslada de zona de residencia,
mientras que los individuos considerados analfabetas tienen la propensión más baja a
cambiar de región, 1 de cada 100.
34

Cuadro 2.7 Migración y Nivel de Escolaridad


Migrantes Población
>17 años >17años Tasa*100
Migración de personas alfabetas 13837 380083 3,6
Migración de personas
analfabetas 598 46647 1,3
Con Primaria 657 46709 1,4
Con Secundaria 7972 277295 2,9
Con Preparatoria o Bachiller 3076 58098 5,3
Profesional o más 2730 44628 6,1

Como muestran los estudios realizados por Borjas, Bronars y Trejo (1992) o Dahlberg y
Fredrikson (2001), una persona, con alto grado de educación, tiene mayor acceso a la
información, por lo que tomará decisiones después de haber realizado un análisis previo
sobre la entidad a la que más le conviene dirigirse. Además, un individuo altamente
instruido tiene menor probabilidad de fracaso dondequiera que vaya. En México, la
mayor propensión a migrar la presenta el grupo de personas que ha estudiado un grado
superior al de licenciatura, pues 6 de cada 100 personas, con educación universitaria o
más, cambió de zona de residencia entre 1995-2000.

Cuando se analizan a las personas que se desplazaron zonalmente y la representación que


tienen los que se desplazaron por causas de empleo, se observa que el 32% de las
personas analfabetas que cambian de zona de residencia lo hacen por motivos laborales,
mientras que la de los alfabetos es del 30%. Además, puede observarse que para las
personas que deciden migrar, y lo hacen por trabajo, se da una mayor representación en
los grupos con bajos estudios. Conforme aumenta la educación, se reduce la tasa, hasta
llegar al grupo de personas con mayor grado de educación en la que un 35% migra por
esta razón.
35

Cuadro 2.8 Migración por Motivos Laborales y Nivel de Escolaridad


Migrantes
por motivos Migrantes
laborales >17 años Tasa*100
Migración de personas alfabetas 4121 13837 29,8
Migración de personas
analfabetas 191 598 31,9
Con Primaria 206 657 31,3
Con Secundaria 2301 7972 28,9
Con Preparatoria o Bachiller 837 3076 27,2
Profesional o más 968 2730 35,4

Esta variable es de relevancia, pues diversos autores, como Goss y Paul (1986), Borjas,
Bronars y Trejo (1992) entre otros, en sus estudios observan que las personas con mayor
educación están más preparadas, por lo tanto pueden notar las características que existen
a su alrededor. Al respecto sobre migración y salarios, Borjas, Bronars y Trejo (1992)
mencionan que las regiones que pagan altos rendimientos a la mano de obra calificada
atraen a trabajadores calificados, por lo que los trabajadores más educados presentan una
mayor disposición a migrar. Estos autores concluyen que las personas calificadas se
desplazarán a aquellas regiones en las que haya una mayor dispersión en el ingreso, pues
en ese contexto donde esperan mayores rendimientos, mientras, que la mano de obra no
calificada migrará a aquellas zonas donde la dispersión del ingreso sea menor.

En la elaboración de este estudio, se presentan cuatro tipos diferentes de personas, con el


fin de observar cómo cambian las preferencias de los individuos de cada región de
acuerdo con sus características. Estos se clasifican de la siguiente manera.

• Jóvenes con bajo nivel de escolaridad.- Estos son individuos cuya edad oscila, en
el año 1995, entre los 17 y los 40 años; además, la educación de estas personas no
supera la secundaria. Los individuos que cumplen con las características de estas
zonas podrían ser muy propensos a desplazarse, pues como no cuentan con un
elevado nivel educativo pueden arriesgarse y probar suerte en aquellos lugares
donde se necesita mano de obra con poca instrucción; esto indica que son
36

individuos que se desplazarán, como aventureros, a aquellas zonas que empiezan


a presentar auge económico.

• Mayores con bajo nivel de escolaridad.- Son personas con una educación no
superior a la de secundaria y cuya edad oscila desde los 25 hasta los 65 años en
1995. En este grupo de individuos, podría esperarse que, por su edad, la retención
sea más elevada que la de los individuos jóvenes con baja escolaridad. Se supone
que la gran mayoría de este tipo comparte su vida con una pareja y que tiene
descendencia por quien preocuparse, por lo que su disposición a abandonar la
entidad en la que reside para ir a buscar nuevos horizontes es menor. Por la edad y
la educación que presentan, puede considerarse que ya han tomado un buen
número de las decisiones importantes en su vida, como contraer matrimonio, tener
hijos y el trabajo que desempeñarán; por ello, el riesgo que estarán dispuestos a
tomar es reducido.

• Mayores con alto nivel de escolaridad.- En estos se comprende a individuos que


oscilan entre los 25 y los 65 años de edad y cuya educación alcanza el grado de
licenciado o superior. Al incluir personas entre estas edades permite observar el
comportamiento de individuos, que podrían estar empezando a decidir por sí
mismos hasta aquellos que ya han tomado un buen número de las decisiones
importantes de su vida. Cuando las personas tienen una educación elevada puede
intuirse que la propensión por desplazarse será elevada para este grupo en
aquellas entidades, cuya demanda de trabajo se decante por personal no
calificado, mientras que la propensión a emigrar de entidades que demandan
individuos calificados mostrará una propensión mayor a mantenerse si los
comparamos con las personas del tipo anterior. También, puede pensarse que
individuos con estas características pueden encontrar trabajo en cualquier lugar:
entre ellos, hay gente dispuesta a sacrificar parte de su salario con el objetivo de
tener una mejor calidad de vida.
37

• Personas al final de su etapa laboral.- Gente con edad entre los 45 y los 65 años.
Estos individuos, cuya edad laboral ha madurado o que están en la parte final de
ella, tenderán a permanecer en la región o, en caso de decidir desplazarse,
podrían hacerlo a aquellas entidades que ofrecen una vida tranquila.

2.4 Otras variables

Además, existe un grupo de variables que vale la pena mencionar; sin embargo,
incluirlas podría representar confusión para el tema de análisis del presente documento.
Estas variables podrían ser el salario y el salario esperado, pues como muestran Harris y
Todaro (1970), el diferencial de salarios entre zonas es un fuerte atractor de personas.
Esta atracción cesará cuando el diferencial de salarios sea cero; también, el estado civil y
el número de hijos es una variable que puede afectar la decisión de migrar, dado que una
persona casada podría decidir no emigrar, ya que plantea una restricción adicional: está
sujeta a su familia (si su mujer o marido trabaja, la educación de sus hijos, etc); sin
embargo, para una persona casada, le será más fácil el desplazamiento porque lo hará
acompañada.

La experiencia laboral es otro factor relevante que puede considerarse en la decisión de


cambiar de lugar de residencia. Esta variable afecta positivamente la migración, pues una
persona calificada tiene la oportunidad de trabajar en cualquier mercado laboral. Las
características específicas se definen como aquellas que incrementan el producto
marginal del trabajador, en las que existe se encuentra una relación positiva entre las
habilidades acumuladas de las personas y la movilidad geográfica, Yankow (2003),
puesto que los altamente calificados encuentran una demanda por sus servicios en otros
mercados laborales.

El estudio de los datos presentados es de gran ayuda para seleccionar los diferentes tipos
de muestra con el fin de efectuar el análisis de desconcentración de las grandes áreas
urbanas.
38

CAPÍTULO III. Modelos econométricos

Para la elaboración de un estudio econométrico, los datos se pueden representar tanto en


forma cuantitativa como cualitativa. En el caso de los estudios de migración, suelen
utilizarse modelos cuyas variables de respuesta se muestran en forma de categorías.

La realización del estudio econométrico en esta tesis consta de dos partes: la primera se
encarga, mediante un modelo tipo logit, de encontrar las características de los individuos
que propician que se dé un cambio zonal de residencia. La segunda parte consta de dos
etapas: en la primera, se obtienen probabilidades mediante la modelización del tipo logit
multinomial; en la segunda, se utiliza un modelo de regresión lineal, con el que se
explican las probabilidades que se obtuvieron en la primera.

3.1 Aplicación del modelo logit al fenómeno migratorio

Como se explica al inicio de este capítulo, en la primera parte se realiza un estudio sobre
las características de las personas, por medio del modelo logit7, y cómo influyen en la
decisión de cambiar de lugar de residencia. Se considera que la variable dependiente
toma el valor de uno si el individuo que se estudia vivía, en 1995, en una zona diferente a
la del 2000; toma el valor de cero, en caso de que no se haya producido un cambio zonal
durante este periodo.

Como variables independientes se incluyen dos tipos: por un lado, las variables que
indican qué tipo de entidades son las preferidas, de tal forma se observa si en el año 2000,
el individuo radica en una ciudad grande (VCG), de más de 500 mil habitantes; si vive en
una ciudad intermedia (VCI) entre 15000 y 500 mil habitantes; o si reside en una
localidad rural (VLR) con una población menor a 15 mil habitantes. Estas variables se

7
Consultar explicación de los modelos logit y el cálculo de probabilidades en el Apéndice 1.
39

presentan en forma de dummy, utilizando (VLR) como grupo base, con la que se
comparan las probabilidades obtenidas.

Por otro lado, se incluyen las variables referentes a la persona, como el sexo, que toma el
valor de cero cuando es hombre y uno cuando es mujer. De esta manera, si el valor de la
beta presenta un signo negativo implica que cuando la variable que indica el género del
individuo es igual a uno, entonces el valor del logit disminuye, reduciéndose la
probabilidad de que la variable dependiente tome el valor de uno, o sea de haber
cambiado de zona de residencia.

Asimismo, se consideran las variables de educación, como el alfabetismo, representada


por un cero si el individuo sabe leer y escribir, así como por un uno, si el individuo no
sabe. Por otra parte, se incluyen cuatro variables binarias que son iguales a uno,
dependiendo a qué caso pertenezcan: si asistió a la escuela hasta preescolar; hasta
secundaria; hasta preparatoria, carrera técnica o normal, y por último, hasta licenciatura o
postgrado.

Por último, entre las variables independientes, referentes a las características


individuales, se incluye la edad del individuo, que toma el valor real, así como la edad al
cuadrado, la cual indicará si existe un máximo o un mínimo.

Cuando se considera que la migración zonal es de entorno al 4%, en realidad, un


individuo que decide cambiar de lugar de residencia es semejante a una persona que no lo
hace; por ello la interpretación, más que emplear probabilidades, pues serían muy
pequeñas, se basa en el efecto, positivo o negativo, que representa cada parámetro
estimado.

Cada coeficiente representa una pendiente parcial y mide el cambio en el logit P/(1-P)
correspondiente a una unidad regresada dada. Un signo positivo provoca un aumento en
el promedio logit cuando la variable independiente aumenta, así como una reducción
cuando ésta disminuye, manteniendo las demás variables constantes, mientras que un
signo negativo provoca una relación inversa. En términos de probabilidades, se toma el
40

antilogaritmo del coeficiente del parámetro, obteniendo cuantas veces es mayor o menor
la probabilidad.

3.2 Aplicación del modelo logit multinomial

En esta segunda parte del análisis econométrico, la aplicación del modelo logit
multinomial8 engloba la primera etapa, en la que se calculan las probabilidades de
desplazamiento entre las diferentes zonas en que se divide la República.

Este tipo de modelos permite utilizar una variable dependiente cualitativa con más de dos
alternativas. La regresada tomará el valor de cero cuando un individuo viva en la zona
noroeste en el año 2000; de uno cuando resida en el noreste; dos cuando sea en el centro-
norte; tres para la región del centro; cuatro para la capital; cinco cuando se trate del
Estado de México; seis en la sur; siete en la centro-sur y ocho en la sureste.

Así pues, se corren cinco diferentes regresiones, una por cada tipo de personas descritas
en el Capítulo II y una adicional para el caso de la población en general, para cada una de
las nueve zonas; por ello, que se toma la muestra de personas que en 1995 residen en una
zona A, y se calculan las probabilidades de que estos individuos en el 2000 vivan en cada
una del resto de las regiones, o bien, que se hayan quedado en A. Así, por tanto, se
efectúan nueve regresiones, obteniendo una matriz de probabilidades de nueve por nueve
para cada uno de los cuatro diferentes tipos de individuos y otra para el caso general.

Como variables independientes se contemplan las características de los individuos, tales


como el sexo, la edad, y si tiene hijos menores de 15 años en 1995. Las regresoras
incluidas corresponden a las características individuales que representan mayor confianza
para el encuestador.

Al igual que lo efectuado en el modelo logit simple, la edad se presenta como una
variable cuantitativa que muestra la edad de cada individuo; también, el sexo vuelve a
tomar el valor de cero cuando se trata de un varón y de uno cuando es una mujer. En

8
Consultar Apéndice 2.
41

cuanto a la variable referente a los hijos, se asigna el valor de uno cuando el individuo
tiene hijos menores de 15 años en 1995, y cero en caso contrario.

3.3 Aplicación del modelo de regresión lineal

En esta segunda etapa, se estudia el porqué de las probabilidades estimadas en la primera


etapa por medio del modelo de regresión lineal9. Para esto, de la primera etapa, se toman
los resultados obtenidos, para que posteriormente se utilicen como variable dependiente.
Como variables independientes, se consideran aquellas que pueden representar un
impedimento o un incentivo para que un individuo se decida por una región en particular.
Las variables explicativas se presentan en forma de diferencias, de tal forma que se
calcula el promedio de cada variable en cada una de las zonas, y una vez obtenido el
promedio, se sustrae del promedio de la región de destino el de la zona de origen. A
continuación, se explican de las variables que se toman como regresoras.

Distancia

La importancia de esta variable radica en que cuando un individuo cambia de lugar de


residencia le implica un costo; por un lado, a mayor distancia, el costo del
desplazamiento es mayor en términos monetarios; por otro, estar alejado de la familia, la
adaptación a las nuevas costumbres y los nuevos estilos de vida ocasionan un costo
adicional. Por ello, los desplazamientos entre lugares extremos deben ser menores que los
desplazamientos entre zonas cercanas, ya que el costo es mayor; sin embargo, si esta
situación no se cumple no implica un resultado erróneo, sino que explica la existencia de
ciertos factores adicionales, por los cuales se vuelve atractivo asumir el costo de
desplazarse.

9
Consultar Apéndice 3.
42

Densidad

Esta variable indica qué tanto se puede disfrutar de una región en específico, pues a pesar
de que no es oportuno hablar de un óptimo de población, el número de personas que
viven en una zona por kilómetro cuadrado podría afectar los movimientos migratorios
desde varios aspectos.

En cuanto al empleo, una gran concentración de personas en un mismo lugar provoca que
las tasas de desempleo se eleven. Este factor ocasiona que una gran cantidad de personas
considere otros puntos del país para buscar ganarse la vida. Además, una elevada
densidad de población en una zona afecta el precio de los bienes, tanto de consumo como
de vivienda, esto a su vez genera un desincentivo a la inmigración.

Desde el punto de vista de las políticas públicas, la existencia de concentración en una


región provoca que se dé un factor de poder para atraer servicios públicos a la zona; sin
embargo, desde el punto de vista de que un bien público es aquel que no presenta
excluibilidad ni rivalidad en su consumo, una elevada concentración en una zona
representa que sea mas difícil consumir un mismo bien por los individuos que deseen
hacerlo al mismo tiempo, provocando una elevada rivalidad en su consumo. Por otro
lado, en una región con muy poca concentración de individuos, no existen suficientes
incentivos para que se dé una buena provisión de estos bienes, situación que también
desmotiva la emigración a estas zonas.

En el análisis de regresión, se considera la densidad promedio de cada una de las zonas,


utilizando las diferencias zonales para explicar la probabilidad de un determinado flujo.
43

Población urbana

México es un país que, a lo largo de los años, ha pasado de tener una población
predominantemente rural a tener una gran población urbana. Las precarias condiciones de
vida en el campo han ocasionado que los residentes en áreas rurales se desplacen hacia
zonas urbanas; sin embargo, el surgimiento y crecimiento de las ciudades intermedias ha
sido otro factor que ha favorecido la urbanización del país. Estas ciudades están
compuestas por individuos provenientes de otras ciudades de mayor tamaño, así como de
personas que dejaron áreas rurales para desplazarse a ellas. Esto podría implicar que los
habitantes de regiones rurales busquen mayor urbanización y que los residentes de
localidades muy urbanizadas, posiblemente buscarían vivir en otras zonas urbanas, pero
en menor grado.

La variable de población urbana se define como una diferencia entre el porcentaje de


población urbana en la zona de destino, menos el mismo porcentaje en la región de
origen; de tal forma que la población de destino podría tener un mayor o menor
porcentaje de población urbana que en el origen, por lo que se observa cómo afecta esta
diferencia a la atracción o expulsión de personas.

Desempleo

La inclusión de esta variable se considera relevante, puesto que un individuo primero


buscará un ingreso para poder mantenerse. Dependiendo del tipo de individuo del que se
trate, y la probabilidad de que éste encuentre un empleo en cualquier región a la que se
desplace, esta variable puede tener mayor o menor importancia, de tal forma que podría
suponerse que los individuos que tengan un bajo nivel educativo rechazarán las zonas con
un alto desempleo. Por otro lado, para los individuos con alta instrucción, aunque la
existencia de un gran número de personas desempleadas sea elevada, éste puede que les
afecte en un menor grado. En el análisis de regresión, la variable referente al desempleo
se percibe como la diferencia en el promedio de desempleo entre zonas.
44

Así, la ecuación a regresar presenta la diferencia de las características descritas como


variables explicativas, y como variable explicada la probabilidad de cada uno de los
desplazamientos posibles, obtenidos en la primera etapa, donde se interpreta cómo se
afecta la probabilidad por las diferencias zonales, interesando el signo de los parámetros.
Esta regresión se realiza cinco veces: una para cada tipo de personas descritas y una para
el caso de la población en general.

Para el cálculo de los coeficientes de cada uno de los modelos presentados se emplea el
paquete estadístico STATA 8.0.
45

CAPÍTULO IV. Resultados

Una vez analizados los datos y especificados los modelos econométricos, se muestran los
resultados obtenidos. Se presentan, en primer lugar, los resultados del modelo logit que
representan la primera parte del estudio. En segundo lugar, se presentan los resultados de
la segunda parte del análisis, la cual está dividida en dos etapas: la primera corresponde al
cálculo de las probabilidades de elección de un determinado flujo mediante una
estimación logit multinomial; la segunda, con un modelo de regresión lineal, se explica
las probabilidades obtenidas de la primera etapa.

4.1 Análisis sobre las características de las personas

Para esta primera parte del estudio, en el cuadro 4.1, se muestran los resultados10 de la
regresión tipo logit presentada en el Capítulo III, donde se observan algunas
características individuales sin importar la zona de residencia.

Cuadro 4.1. Estimación logit


Número de observaciones
426730 Wald chi 2 (9) 5377,53
2
Prob> chi 0,00
2
Pseudo R 0,04
Migró Coeficiente Error Est. Z Intervalo de confianza al 95%

VCI 0,64 0,01 32,98 0,60 0,68


VCG 0,58 0,02 27,01 0,54 0,62
Sexo -0,06 0,01 -4,13 -0,09 -0,03
Edad -0,02 0,00 -5 -0,03 -0,01
2 0,00 0,00
Edad /1000 -0,08 0,00 -1,54
Alfabetismo -0,41 0,05 -7,34 -0,52 -0,30
Preescolar -0,24 0,05 -4,16 -0,35 -0,13
Secundaria -0,28 0,02 -13,61 -0,32 -0,24
Postgrado 0,16 0,02 6,57 0,11 0,21
Constante -2,28 0,08 -26,35 -2,46 -2,11

10
Los resultados obtenidos en la estimación del tipo logit se calculan utilizando el comando robust, para
asegurar la condición de homocedasticidad, alterando los valores de Z así como los intervalos de confianza.
46

En primer lugar, cabe mencionar que el valor de la R 2 es baja. Esto se debe a que este
factor considera el número de predicciones correctas entre el número total de
observaciones. Como en México, la migración interna zonal tan solo alcanza un 4% un
individuo decidido a migrar no es tan diferente a uno que no lo hace, por lo tanto, que la
bondad de ajuste no sea elevada no está representando nada. Por otro lado, todos los
coeficientes individuales, excepto la edad al cuadrado, resultan significativos.

En el análisis de las variables del tamaño de la localidad en la que vive un individuo, en


el año 2000, se toma como base la población que vive en regiones de menos de 15 mil
habitantes (VLR), y queda representada cuando las variables referentes al tamaño de la
localidad, (VCI) y (VCG), toman el valor de cero. Se observa que vivir en una localidad
completamente rural reduce la probabilidad de haber realizado un cambio de zona en
1995, en comparación con los que habitan localidades de más de 15 mil habitantes. El
hecho de que la probabilidad de haber migrado, dado que en el 2000 se reside en una
localidad rural, sea menor indica que los flujos migratorios no se están dirigiendo a este
tipo de zonas en el periodo comprendido entre 1995 y el 2000.

En cuanto a las personas que radican en las localidades urbanas, se observa que vivir en
una zona de menos de medio millón de habitantes (VCI) propicia, manteniendo el resto
de las variables constantes, un aumento en el promedio logit estimado en un .64 más que
los individuos del grupo base, mientras que para los individuos que residen en zonas
plenamente urbanas (VCG), el logit aumenta en .58 más que las personas que habitan las
áreas rurales. Esto muestra que, en comparación con el resto de los individuos, una
persona que en el año 2000 vive en una localidad intermedia, es más probable que haya
migrado en 1995 para dirigirse a una región de este tamaño, mientras que una persona
que en el 2000 radica en un lugar rural es muy poco probable que en 1995 haya tomado la
decisión de desplazarse hacia él. Esto evidencia que es raro que una persona emigre de
una gran ciudad al campo.
47

Para observar la diferencia entre probabilidades, se toma el antilogaritmo de los


coeficientes, de tal forma que e .64 = 1.8964 indica que la probabilidad de que una persona
que en el año 2000, vive en una ciudad intermedia y que haya migrado entre 1995 y 2000
es 1.89 veces mayor que una persona de una localidad rural en el año del censo, y que un
individuo que ocupa, en el 2000, una ciudad grande la probabilidad de que haya migrado
es 1.78 veces mayor.

Cuando se analiza la dependencia del sexo en la decisión de cambiar de zona de


residencia, se observa que la probabilidad de migración de las mujeres es menor que la de
los hombres, para el caso zonal mexicano, pues el valor de la probabilidad es 1.06 veces
menor en el caso de ser mujer.

El análisis de la edad podría tornarse ambiguo, dado que cuando la edad aumenta, la
probabilidad de emigrar disminuye, como muestra el análisis de regresión; sin embargo,
existen individuos que, por su grado de educación, retrasan la edad del desplazamiento si
es que deciden hacerlo. El cuadro de regresión muestra que, en promedio por cada año
adicional, el valor del logaritmo decrece en .0226 unidades; en otras palabras, la
probabilidad disminuye 1.02 veces; asimismo, la variable “edad al cuadrado” fue incluida
para encontrar un máximo por medio de un cambio de signo, aunque se observa que no
hubo tal cambio; sin embargo, esto no significa que no exista un máximo pues es un
número tan cercano a cero que en cualquier momento podría tomar un valor positivo.

Por último, se consideran aquellas variables que representan el grado de educación del
individuo. En primer lugar, es conveniente analizar si el individuo sabe leer y escribir. El
cuadro de regresión muestra que el logit de cambiar de zona de residencia para una
persona analfabeta se reduce en un .41, al compararlo con un individuo alfabeto. Esto es
una probabilidad 1.57 veces menor, tal vez, pues obedece a la inseguridad de estas
personas al encontrarse en un lugar extraño. En cuanto al nivel educativo, se considera
como grupo base al conjunto de personas que poseen los grados de preparatoria, normal o
carrera técnica; comparando al resto de los grupos con éste, se observa que a mayor grado
de escolaridad, la probabilidad de migrar es mayor, pues para las personas con estudios
48

de licenciatura o postgrado se incrementa la probabilidad, al aumentar el valor logit en un


.16, en comparación con las que tienen un grado de educación de nivel preparatoria y los
individuos con una escolaridad que llega al grado de secundaria es un .28 menor y un .24,
también menor, para los de educación preescolar.

De esta forma la probabilidad de haber migrado para un hombre de 32 años, con una
educación superior a la de licenciatura y que en el 2000 vivía en una ciudad intermedia,
es de un 10%, mientras que para una individuo con las mismas características, pero que
en el 2000 vive en una ciudad grande es de un 9.4%. Esto muestra que la probabilidad de
haber migrado en 1995 puesto que en el 2000 se vive en una ciudad intermedia es mayor.

Una vez analizadas las características que propician que un individuo decida cambiar de
zona de residencia, se presenta el estudio de los flujos migratorios, y qué zonas son las
que tienen menor probabilidad de expulsar individuos.

4.2 Análisis de los flujos migratorios

En esta sección, se analizan los flujos migratorios para saber qué zonas tienen una mayor
retención de personas, así como para conocer las preferencias migratorias de los
individuos que deciden desplazarse. A continuación, se presenta un estudio en dos etapas:
en la primera, se obtienen las probabilidades de que un individuo decida dirigirse a
cualquiera de las zonas presentadas, o bien, la probabilidad de mantenerse en su zona de
residencia; este estudio se realiza para un caso general, así como para los cuatro
diferentes grupos de individuos, presentados en el Capítulo III. Al conocer las
probabilidades de desplazamiento de cada uno de los grupos, en una segunda etapa se
emplean estas probabilidades, junto con las variables de características zonales, con el
objetivo de conocer los motivos que explican esta variación.

4.2.1 Primera etapa: los flujos migratorios

En esta primera etapa, se presentan, por medio del modelo de respuesta cualitativa logit
multinomial, las probabilidades de que un individuo que, en 1995 vivía en cada una de las
49

nueve zonas presentadas, se desplace a cualquiera de las zonas restantes, o bien decida
seguir residiendo en la región. Para efectuar el cálculo de estas probabilidades, se corren
nueve regresiones11, presentadas en el capítulo anterior, una por cada zona de origen,
cuya variable dependiente será la zona en la que residían en el año 2000, representadas
con categorías que oscilan desde el cero hasta el ocho, dependiendo de la zona; como
regresoras se consideran el sexo, la edad, la edad al cuadrado y si, en 1995, tienen hijos
menores de quince años, pues estas variables son las que ofrecen mayor confiabilidad
para el encuestador del censo. En los modelos tipo logit multinomial, la interpretación no
depende de los coeficientes de la regresión, sino de los efectos marginales.

Una vez obtenidos los efectos marginales, se calcula la probabilidad de que se realicen
cualquiera de los 72 desplazamientos posibles, así como de las 9 opciones que
representan no migrar. A continuación, se incluyen cuatro gráficos de acuerdo con las
características que se están analizando; al obtener una matriz de nueve por nueve, la
diagonal principal representa la probabilidad de no migrar.

11
Para ver los cuadros completos de las probabilidades consultar Anexo 3.
50

4.1 Gráficas de retención por las características individuales y por zonas

Gráfica 4.1a. Retención de las personas jóvenes con baja escolaridad

100
98,62 98,63
97,95 98,19 97,79
98 96,78 96,34
Porcentaje de Retención

96
94,32
94
92
90
88,03
88
86
84
82
Noroeste Noreste Centro- Centro- Capital Edo. Centro- Sur Sureste
norte norte México sur

Gráfica 4.1b. Retención de las personas mayores con baja escolaridad

100 99,11 99,14 99,21


98,98 98,72 98,45 98,23
98
Porcentaje de Retención

95,93
96

94

92 91,69

90

88

86
Noroeste Noreste Centro- Centro- Capital Edo. Centro- Sur Sureste
norte norte México sur
51

Gráfica 4.1c. Retención de las personas mayores con alta escolaridad

98
97,1 97,23
97 96,56 96,42 96,65
Porcentaje de Retención

95,96
96
95
94,22
94
93 92,85
92,09
92
91
90
89
Noroeste Noreste Centro- Centro- Capital Edo. Centro- Sur Sureste
norte norte México sur

Gráfica 4.1d. Retención de las personas al final de su etapa laboral

100 99,42
99,16 99,33 99,34
98,94 98,98 98,79
99
Porcentaje de Retención

98
97 96,77

96
95 94,59
94
93
92
Noroeste Noreste Centro- Centro- Capital Edo. Centro- Sur Sureste
norte norte México sur

Al estudiar la retención de cada región, en las que el país ha sido desglosado, puede
notarse que, como el análisis del modelo logit indica, la menor propensión a desplazarse
se observa en los individuos de mayor edad, correspondientes a las personas que se
encuentran al final de su etapa laboral, mientras que, en general, la mayor disposición por
desplazarse se da en el grupo de personas mayores con alta escolaridad y de los jóvenes
con bajos niveles de estudio.
52

Como muestran las gráficas, la probabilidad de no migrar es muy elevada para casi todos
los individuos de la República, independientemente del lugar en el que residían en 1995;
sin embargo, una característica común, en todos los diagramas, es que para cada uno de
los grupos de individuos, las zonas que comprenden, el Distrito Federal y el Estado de
México presentan la menor probabilidad de mantenerse en sus respectivas regiones,
resultando estas entidades las de mayor densidad del país, independientemente del grupo
de individuos del que se esté hablando. Esta situación lleva a pensar que se está dando un
fenómeno descongestionador, suposición que se resuelve al analizar de dónde están
partiendo y hacia dónde se están dirigiendo los flujos migratorios.

El comportamiento de las gráficas es muy parecido. Presentan, en la mayoría de los


casos, la mayor retención en la región Sureste, seguida siempre por la zona que abarca la
parte Centro-norte del país, así como por la Centro. A estas tres regiones presentadas, les
siguen, prácticamente sin diferencias, las regiones noroeste y noreste, que abarcan todo el
norte del país.

A pesar de que la tendencia es muy parecida en todos los tipos de población, para las
personas más educadas, la retención en las diferentes zonas es muy semejante a la de las
personas más jóvenes y de menor nivel de educación, siendo que se está considerando un
rango de edad mayor; asimismo, la retención que ejerce el Distrito Federal y el Estado de
México, siguiendo la tendencia del resto de los grupos es la menor, con una diferencia
considerable. Este fenómeno sucede aun si se tomara la zona de la capital y la del Estado
de México como una sola región, puesto que la retención quedaría representada para esta
nueva zona, con un 95,7% para la población más joven y de menor escolaridad; un 96,8%
para los mayores con bajo nivel educativo; para las personas que se encuentran al final de
su etapa laboral sería de un 97,4%; el único cambio se daría en el grupo de población con
mayor preparación académica, dado que incluyendo una zona que abarcaría, en conjunto,
el Distrito Federal y el Estado de México presentaría una retención del 96,05%, la cual
estaría por encima de las regiones centro y sur.
53

Los individuos jóvenes de baja escolaridad es otro punto interesante para el análisis. En
el del Distrito Federal, con una retención del 88%, es en donde se presenta la mayor
diferencia con el resto de las zonas. Esta diferencia se mantiene relativamente constante
para el Estado de México. Este resultado lleva a pensar que la mano de obra no calificada
no ha encontrando en la capital del país ni en su zona conurbada las características que
busca.

Del mismo modo que se obtienen las probabilidades de permanecer en cualquiera de las
zonas, se calculan las probabilidades de cada uno de los desplazamientos para los tipos de
personas analizados. Una vez calculada la probabilidad de vivir en una de las nueve
zonas y migrar hacia cualquiera de las otras, se calcula la probabilidad condicional, de tal
forma que se pueda observar el gusto de cada uno de los tipos de personas por el resto de
las regiones del país. A continuación, se presenta un cuadro en el que se observa la
probabilidad condicional por tipo y zona, de dirigirse al resto de las regiones.

Cuadro 4.2. Los flujos migratorios por zonas


Jóvenes baja esc. Destino
Centro- Edo. Centro-
Noroeste Noreste norte Centro Capital México sur Sur Sureste
Noroeste 0% 18% 31% 13% 3% 7% 11% 13% 4%
Noreste 28% 0% 19% 13% 6% 9% 1% 22% 3%
Centro-norte 37% 17% 0% 21% 5% 10% 2% 5% 3%
Origen Centro 18% 9% 22% 0% 11% 25% 8% 5% 1%
Capital 3% 2% 3% 12% 0% 55% 12% 11% 2%
Edo. México 2% 3% 3% 22% 38% 0% 14% 15% 3%
Centro-sur 15% 2% 7% 9% 28% 23% 0% 13% 3%
Sur 17% 26% 3% 4% 15% 14% 11% 0% 9%
Sureste 12% 8% 35% 3% 4% 12% 6% 20% 0%
Mayores baja esc. Destino
Centro- Edo. Centro-
Noroeste Noreste norte Centro Capital México sur Sur Sureste
Noroeste 0% 19% 37% 13% 6% 5% 8% 12% 1%
Noreste 30% 0% 22% 6% 5% 8% 4% 22% 3%
Centro-norte 43% 11% 0% 25% 2% 7% 5% 4% 1%
Origen Centro 15% 13% 23% 0% 13% 20% 7% 7% 3%
Capital 3% 2% 3% 14% 0% 57% 10% 9% 1%
Edo. México 1% 2% 4% 26% 34% 0% 15% 15% 2%
Centro-sur 8% 3% 38% 5% 17% 14% 0% 12% 3%
Sur 12% 26% 2% 5% 11% 14% 16% 0% 16%
Sureste 11% 12% 4% 2% 7% 16% 14% 34% 0%
54

Mayores alta esc. Destino


Centro- Edo. Centro-
Noroeste Noreste norte Centro Capital México sur Sur Sureste
Noroeste 0% 32% 21% 11% 24% 4% 2% 0% 6%
Noreste 23% 0% 9% 21% 22% 10% 3% 4% 9%
Centro-norte 24% 18% 0% 16% 24% 12% 5% 0% 0%
Origen Centro 11% 9% 13% 0% 36% 17% 6% 7% 0%
Capital 4% 5% 6% 15% 0% 49% 7% 7% 7%
Edo. México 5% 6% 7% 15% 51% 0% 6% 5% 6%
Centro-sur 10% 7% 6% 3% 31% 13% 0% 16% 13%
Sur 9% 23% 4% 3% 18% 14% 16% 0% 13%
Sureste 4% 10% 9% 14% 35% 5% 5% 19% 0%
Fin etapa laboral Destino
Centro- Edo. Centro-
Noroeste Noreste norte Centro Capital México sur Sur Sureste
Noroeste 0% 23% 29% 13% 19% 5% 5% 7% 0%
Noreste 30% 0% 22% 14% 3% 6% 5% 18% 1%
Centro-norte 37% 12% 0% 26% 13% 7% 5% 0% 0%
Origen Centro 12% 12% 22% 0% 22% 19% 3% 8% 3%
Capital 2% 4% 4% 18% 0% 50% 11% 8% 3%
Edo. México 1% 3% 4% 26% 32% 0% 13% 17% 4%
Centro-sur 15% 3% 0% 12% 32% 20% 0% 10% 8%
Sur 13% 15% 1% 7% 10% 19% 19% 0% 16%
Sureste 6% 17% 10% 0% 16% 10% 8% 34% 0%

Una persona ha decidido cambiar de zona de residencia, ahora ¿a cuál se va? El cuadro
4.2 muestra cómo están representadas las preferencias zonales, de acuerdo a las
características con los individuos y de su región de procedencia. Como puede observarse,
en primer lugar, cabe resaltar que siempre se preferirá desplazarse hacia aquellas regiones
más cercanas, antes que a las alejadas, por lo que podría afirmarse que las zonas del
centro del país son las más preferidas; sin embargo, esto no siempre sucede. La tendencia
migratoria entre el Distrito Federal y el Estado de México es un segundo punto relevante.
Esta tendencia se presenta con mayor fuerza de la primera ciudad hacia la segunda para
todo tipo de personas, excepto para los que poseen mayor nivel académico.

Además, puede observarse cómo para las entidades que se encuentran en toda la parte
norte del país, los estados de la zona noroeste son los más atractivos. Como se va
acercando a la parte central del país, la región que incluye los estados de Querétaro,
Michoacán, Guanajuato e Hidalgo se consolida como un nuevo punto de llegada, seguida
55

por el Estado de México. Para llegar completamente al sur del país donde los estados de
la zona sur así como el Distrito Federal se vuelven entidades atractivas.

Asimismo, en general, los flujos de menor intensidad se dan entre las regiones más
distantes del país, además de los que tienen relación con la zona sureste. Sin embargo, no
se puede generalizar esto, ya que las tendencias cambian de acuerdo con el tipo de
individuo que se pretenda analizar. Por ejemplo, si consideramos que el Distrito Federal y
el Estado de México representaron un fuerte punto de atracción para todo tipo de
individuos, en la actualidad, se ha dado un cambio, de tal forma que un cierto tipo de
personas las que se desplazan hacia estas entidades, así como un cierto tipo de personas
son las que emigran de estas entidades. Para el caso de los individuos de menor nivel
educativo, se ha detectado que la Zona Metropolitana del Valle de México (ZMVM) no
es una región atractiva, al menos para los migrantes de la parte norte y del sureste del
país, para el resto de los desplazados, que no se encuentran cercanos a la ZMVM, aunque
no es la región menos agradable, tampoco está entre sus principales destinos, excepto por
la zona que abarca los estados de Tlaxcala, Puebla y Oaxaca.

Si se analizan los individuos con mayor educación, los principales núcleos migratorios se
dan hacia la capital de la República y la zona que abarca los estados de Nuevo León,
Coahuila, Tamaulipas, y San Luis Potosí, lugares donde se concentra el mayor número
de universidades, así como los de mayor desarrollo económico.

Para el caso de las personas de mayor edad, el Distrito Federal se contempla como una
entidad atractiva; sin embargo, al contrario de lo que había sucedido en los casos
anteriores, para los emigrantes de la zona centro la ZMVM no presenta su primera
opción, decantándose por la región centro-norte, en la que se encuentran los estados de
Jalisco, Aguascalientes, Colima, Zacatecas y Nayarit.

En conclusión, que aquellas personas que tienen menor nivel educativo se inclinan por
dirigirse a las zonas del norte; conforme aumenta la edad, se desplazan a regiones
cercanas, y por último, los individuos con mayor educación se decantan por el Distrito
56

Federal. Si se considera que mientras la edad sea mayor, menor es la propensión a


emigrar, y que si se tiene mayor educación, la tasa de natalidad disminuye, puede
afirmarse que el Distrito Federal está en peligro de convertirse en una región, cuya
pirámide poblacional se encuentre completamente invertida, mientras que los estados del
norte están especializados, a tal grado que el noreste se ocupa de recibir la fuerza de
trabajo no capacitada, en tanto que la región del noroeste se encarga de la más capacitada
que migra al norte..

Este análisis de migración ayuda a la creación de políticas públicas, pues como la


población se está distribuyendo en el país, el saber hacia dónde se dirige cada tipo de
individuo ayuda a los gobiernos estatales a enfocar sus esfuerzos para atraer la mano de
obra que requieran, ya que conocerán a sus competidores.

En general, puede afirmarse, de acuerdo con la siguiente gráfica, que el Distrito Federal y
el Estado de México muestran la menor retención del país, mientras que la mayor es la
zona del sureste con un 98.7%, a pesar de no recibir un gran flujo migratorio, seguida por
las zonas del noreste y centro-norte que incluyen los estados de Nuevo León y Jalisco,
respectivamente.

Gráfica 4.2. Retención general

100
98,59 98,5 98,74
98,31 98,12
98 97,61 97,4
Porcentaje de Retención

96
94,29
94

92 91,21
90

88

86
Noroeste Noreste Centro- Centro- Capital Edo. Centro- Sur Sureste
norte norte México sur
57

4.2.2 Segunda etapa: variables de atracción

En el siguiente cuadro, se presentan los resultados de las cinco regresiones del tipo
regresión lineal12. Su interpretación consta únicamente del signo y la intensidad de los
coeficientes, pues interpretar el valor nos lleva a cometer errores, ya que existe la
posibilidad de que se sobrepase el rango de valores, entre cero y uno, de la variable
dependiente13. Para evitar este problema, es necesario utilizar una transformación de la
variable explicada.

Cuadro 4.3. Estimación de la etapa dos según el tipo de individuo


Jóvenes Mayores Mayores
baja baja alta Fin de etapa
F(6,74)=24.97 escolaridad escolaridad escolaridad laboral General
Densidad/1000 -12,78 -12,95 -12,38 -12,99 -12,79
Valor t -4,51 -4,55 -4,38 -4,56 -4,50
2
Densidad / (1*E-
08) 4,31 4,4 4,31 4,45 4,36
Valor t 5,82 5,85 5,87 5,88 5,84
Distancia/10000 -2,52 -2,55 -2,49 -2,56 -2,53
Valor t -6,57 -6,58 -6,58 -6,58 -6,57
Urbana/10 3,51 3,57 3,54 3,6 3,54
Valor t 2,22 2,23 2,27 2,24 2,23
Desempleo -42,69 -43,78 -43,18 -44,49 -43,46
Valor t -3,59 -3,66 -3,71 -3,72 -3,66
Control
14
Origen/1000 -0,3 -0,31 -0,29 -0,31 -0,3
Valor t -7,59 -7,68 -7,65 -7,75 -7,65
Constante 0,68 0,69 0,68 0,70 0,69
Valor t 8,55 8,58 8,60 8,60 8,57
2
R 0,66 0,67 0,66 0,67 0,66
2
R - ajustada 0,64 0,64 0,64 0,64 0,64

12
Con el fin de asegurar la condición de homocedasticidad, en los resultados obtenidos de las cinco
regresiones se utiliza el comando robust, el cual altera el valor de los estadísticos t y el rango de los
intervalos de confianza.
13
Consultar Anexo 4 para ver las regresiones utilizando momios p/(1-p) como variable dependiente.
14
Como variable de control se emplea a la muestra considerada en cada región de origen, sin estimar
diferencias.
58

Como muestra el cuadro 4.3, la densidad para cada tipo de individuo refleja una relación
negativa, de tal forma que a mayor diferencia a favor de la entidad de destino, la
probabilidad tenderá a reducirse: este factor les afecta en menor grado a los individuos de
mayor nivel educativo; para las personas con un bajo nivel de escolaridad, la probabilidad
se reduce un poco más, debido a la competencia en el mercado laboral y a las
probabilidades de encontrar empleo, cambiándose a una zona de gran concentración de
gente. A las personas que se encuentran al final de su etapa laboral, es a quienes más les
afecta, esta situación obedece a la dificultad para conseguir un empleo, pero también, tal
y como afirma Tiebout (1956), por ser personas de edad avanzada podrían estar
buscando una mejor calidad de vida, así que llegar a una zona con una gran concentración
implica que podrían disfrutar menos de los atributos del destino. Si se elevan las
diferencias entre densidades al cuadrado, se observa que existe un mínimo de densidad, al
menos para este periodo, el cual se encuentra más bajo para las personas de mayor edad
y para las mayores de baja escolaridad.

La distancia puede interpretarse como un costo de desplazamiento. Como muestra el


cuadro 4.3, para todos los tipos de individuos, presenta una relación negativa, de tal
forma que a mayor distancia, menor será el flujo; y son las personas más jóvenes y las de
mayor nivel educativo, las que podrían estar dispuestos a asumir un mayor riesgo, a
quienes menos les importa esta variable. Por otro lado, al observar a las personas de
mayor edad, les resulta más costoso el desplazamiento.

Las diferencias en el porcentaje de población urbana en las zonas resulta una variable de
atracción: cuanto más grande es la diferencia, mayor es la probabilidad de ser atraídos, en
especial, para los individuos al final de su ciclo laboral; lo anterior podría deberse a las
posibilidades de consumo, tanto de bienes públicos, como de bienes privados que se
pueden consumir en estas regiones, mientras que para aquellos que les resulta menos
importante es para los individuos más jóvenes que están empezando a tomar sus
decisiones.
59

Se observa que el desempleo afecta negativamente a todos los individuos, perjudicando


en mayor grado a las personas mayores con baja instrucción, así como a las que están al
final de su etapa laboral. Esto indica que estos grupos son los más sensibles y que son los
que están dispuestos a enfrentar menos riesgos, en cuanto al empleo.

La variable utilizada como control representa la población tomada como muestra en la


zona de origen. La existencia de un signo negativo en esta variable indica que a mayor
cantidad de individuos con las mismas características en una entidad, la probabilidad de
salir de ella es menor.

Después del análisis de regresión, los resultados podrían mostrarse mediante el


procedimiento empleado en el modelo de Berry, presentado en el Capítulo I. El modelo
de Berry explica los procesos de concentración y desconcentración desde un punto de
vista de ciudad; sin embargo, la última fase de este modelo, también, podría adaptarse al
análisis zonal de la migración, pues hasta los años setenta, la zona que abarca al Distrito
Federal, principalmente, y la del estado de México fueron regiones atractoras de grandes
flujos migratorios de todo el país; en la actualidad, vemos que esta tendencia se ha
revertido, convirtiendo estas regiones en las de mayor expulsión del país. Lo que Estas
megaciudades representaron para México, en general, equivale a lo que un gran núcleo
urbano representa para una zona de menor dimensión. Esta situación lleva a que otras
regiones del país en la actualidad estén siendo focos de atracción como es el caso de
Nuevo León, Jalisco, Baja California o Quintana Roo, es más puede decirse que tal vez
haya una etapa intermedia en el modelo de Berry, en el que una entidad antes de volverse
gran atractora de corrientes migratorias, se encuentre en una situación en la que poca
gente está dispuesta a salir de ella, y de momento, que también es reducido el número de
personas que quieren dirigirse a ella, como presenta la zona del sureste mexicano.
60

CAPÍTULO V. Predicciones

Las tendencias migratorias del país se están modificando, como consecuencia de la


redistribución de la industria, de la competencia en el mercado laboral, así como cambios
en el nivel de la calidad de vida regional; estos factores provocan que cada región se
vuelva atractiva, en mayor o menor grado, dependiendo de las características de cada
individuo. Entidades que, mientras se mantuvo la economía cerrada, fueron los
principales puntos de atracción, una vez abierto el comercio e intensificado después del
Tratado de Libre Comercio, se convirtieron en localidades expulsoras. Esto obedece al
crecimiento generado en otros puntos del país. Cada zona se especializa, volviéndose
atractiva para determinados grupos de personas, de tal forma que cuando una entidad
demande trabajadores de cierto tipo, sabrán cómo dirigir sus políticas para atraer este
factor de producción.

Con el objetivo de mostrar qué podría suceder en un futuro, se utiliza el proceso de


cadenas de Markov15, en el que mediante el uso de una matriz de transición T de n*n, que
incluye las probabilidades de cada uno de los posibles escenarios, es posible hacer
predicciones a varios años de distancia. Así, en los siguientes cuadros, con la finalidad de
observar qué pasaría si la tendencia se mantiene y considerando que la tasa de
crecimiento de la población es constante, se muestran las proyecciones estimadas hasta el
año 2050. El siguiente cuadro presenta proyecciones para el caso de las personas más
jóvenes y de menor nivel educativo.

15
Para observar el procedimiento de cadenas de Markov consultar el Apéndice 4.
61

Cuadro 5.1. Proyecciones para jóvenes con bajo nivel de escolaridad


Población
Región 1995 2000 2005 2020 2050 Cambio
Noroeste 16607 16855 17097 17790 19047 15%
Noreste 16593 16840 17083 17784 19074 15%
Centro-norte 18206 18377 18546 19040 19974 10%
Centro 20980 21230 21468 22116 23172 10%
Capital 13212 12440 11765 10199 8386 -37%
Edo. de
México 19708 19933 20096 20297 19965 1%
Centro-sur 17610 17583 17547 17401 16998 -3%
Sur 22432 22232 22032 21441 20331 -9%
Sureste 16489 16451 16411 16288 16024 -3%

Considerando el caso de las personas de menor edad de la muestra y con menor nivel
educativo, se observa que a partir de las zonas que comprenden desde el Distrito Federal
hacia todas las regiones al sur pierden este tipo de población, destacando ésta pérdida en
la capital del país con un 37% de población menor en el 2050 que la presentada en 1995.
Así mismo las mayores ganancias se observan en toda la longitud de la frontera norte,
ganando un 15%, tanto en el noroeste como en la noreste. Esto indica que, manteniéndose
todo lo demás constante, la mano de obra joven y con poca preparación se ve afectada
por el Tratado de Libre Comercio; además, los individuos con estas características no
sienten atracción por los estados del sur del país, donde se ubica una gran proporción de
población rural, al menos en los años estudiados.

En el cuadro 5.2, se muestra cuál es la tendencia para las personas que se encuentran en
el rango que abarca desde los 25 hasta los 65 años, con un bajo nivel educativo.
62

Cuadro 5.2. Proyecciones para mayores con bajo nivel de escolaridad


Población
Región 1995 2000 2005 2020 2050 Cambio
Noroeste 19487 19591 19694 19998 20590 6%
Noreste 18966 19067 19166 19456 20003 5%
Centro-norte 19785 20029 20272 20991 22394 13%
Centro 20798 21057 21305 21989 23125 11%
Capital 16342 15447 14629 12577 9794 -40%
Edo. de
México 20002 20190 20330 20509 20154 1%
Centro-sur 17653 17775 17888 18185 18618 5%
Sur 23452 23463 23469 23461 23348 0%
Sureste 15720 15730 15739 15762 15794 0%

En este cuadro, se observa que la merma de este tipo de población en el Distrito Federal
es todavía mayor que la de individuos de menor edad, pues pierde un 40% de personas
con estas características; sin embargo, el resto del país acumula población de este tipo,
donde se registran las mayores ganancias en la región que ocupan los estados de Jalisco y
Aguascalientes, con un 13% más que en 1995, y que la zona donde se ubica a Querétaro,
elevando su población en un 11%. Esto presenta indicios de que a mayor edad se tiende a
ser más conservador, por lo que, a pesar que dejarían en gran proporción la zona capital
se dirigirían a estados, que como Jalisco, presentan una gran competencia para la capital
del país en cuanto a la representatividad que suponían para el país.

En el cuadro 5.3, se muestran las proyecciones para las personas de mayor nivel de
escolaridad.

Cuadro 5.3. Proyecciones para mayores con alto nivel de escolaridad


Población
Región 1995 2000 2005 2020 2050 Cambio
Noroeste 3094 3109 3124 3166 3242 5%
Noreste 3502 3536 3569 3661 3816 9%
Centro-norte 2805 2809 2813 2824 2842 1%
Centro 2243 2325 2402 2606 2917 30%
Capital 6757 6494 6257 5678 4936 -27%
Edo. de
México 3163 3264 3349 3523 3642 15%
Centro-sur 1854 1871 1887 1926 1977 7%
Sur 1835 1809 1785 1716 1600 -13%
Sureste 1626 1661 1693 1778 1907 17%
63

En estas personas, se observa que el Distrito Federal, aunque tiene la mayor pérdida, la
gente con estas características es la que más se tarda en salir de la región. La zona que
comprende la parte central del país presentaría la mayor ganancia en el 2050, en
comparación con 1995, adquiriendo un 30% de población con estas características.
Además se observa que la zona sureste obtiene un 17% de individuos con alta
escolaridad. A pesar de que la propensión de efectuar desplazamientos zonales de estas
personas es similar al de las más jóvenes, se percibe que se dirigen hacia las entidades de
mayor desarrollo, para el caso de la capital la salida se vuelve lenta.

Presentando a las personas de mayor edad, el siguiente cuadro muestra cambios.

Cuadro 5.4. Proyecciones para personas al final de su etapa laboral


Población
Región 1995 2000 2005 2020 2050 Cambio
Noroeste 13087 13128 13168 13287 13515 3%
Noreste 13418 13471 13523 13673 13951 4%
Centro-norte 12991 13048 13104 13269 13583 5%
Centro 14289 14447 14599 15028 15770 10%
Capital 13618 13146 12702 11515 9681 -29%
Edo. de
México 12096 12186 12262 12408 12433 3%
Centro-sur 12570 12639 12705 12887 13181 5%
Sur 17248 17232 17215 17158 17022 -1%
Sureste 10253 10280 10306 10380 10510 3%

Entre estos cambios, se encuentra el incremento del 10% que se da en la región centro, en
que quizá, al ser este tipo de individuos los que podrían presentar mayor preocupación
por la calidad de vida en su lugar de residencia; esta ganancia puede provenir en su
mayoría del Distrito Federal, pues después del terremoto sufrido en 1985, el flujo Distrito
Federal-Querétaro se vio incrementado.

Una vez contempladas las proyecciones hasta el año 2050, puede verse, en el cuadro 5.5,
qué representación tendrá cada una de las zonas en el nivel nacional.
64

Cuadro 5.5. Representación por zonas


1995 2050
Alta Fin Alta Fin
Baja escolaridad Baja escolaridad
Región General escolaridad etapa General escolaridad etapa
Jóvenes Mayores Mayores laboral Jóvenes Mayores Mayores laboral
Noroeste 11% 10% 11% 12% 11% 12% 12% 12% 12% 11%
Noreste 11% 10% 11% 13% 11% 12% 12% 12% 14% 12%
Centro-
norte 11% 11% 11% 10% 11% 11% 12% 13% 11% 11%
Centro 12% 13% 12% 8% 12% 13% 14% 13% 11% 13%
Capital 12% 8% 9% 25% 11% 8% 5% 6% 18% 8%
Edo. de
México 12% 12% 12% 12% 10% 12% 12% 12% 14% 10%
Centro-
sur 10% 11% 10% 7% 11% 10% 10% 11% 7% 11%
Sur 13% 14% 14% 7% 14% 12% 12% 13% 6% 14%
Sureste 9% 10% 9% 6% 9% 10% 10% 9% 7% 9%

Considerando que se trata de agrupar estados en zonas, de tal forma que en conjunto
cada región tenga un número similar de individuos, se advierten los cambios en la
representación a nivel nacional de cada región. De esta manera, el Distrito Federal y el
estado de Morelos después de presentar un 12% de la población total en 1995, en el 2050
tendrían un 8%, mientras que los estados del norte, en promedio, se beneficiarían con un
1% de representatividad nacional. Asimismo, se observa que el Distrito Federal, el
Estado de México y la región noreste mostrarían en el 2050, la mayor concentración de
población con elevado nivel educativo, recortándose la distancia entre ellas.

Para finalizar con las predicciones, a manera de comparación se analiza, qué


representación tiene cada tipo de personas en cada una de las zonas en 1995, para después
compararlo con la composición zonal que podría ocurrir en el 2050.

Si se observa la representación de cada grupo de individuos en 1995 pude advertirse que


la población joven tiene la menor representatividad en la capital del país, mientras que el
centro con un 36% y el sureste con un 37% son las regiones que poseen mayor
proporción de jóvenes. Para el caso de las personas, cuya edad está entre los 25 y 65
años, con menor escolaridad, tienen una mayor peso en los estados del noroeste y de la
65

región centro-norte y la menor con un 33% en la región que comprende el Distrito


Federal y Morelos, mientras que los de mayor educación, así como el grupo que está en la
parte final de su etapa laboral representan un mayor peso en la capital del país resultando
las zonas que comprenden a toda la parte sur donde este es el menor.

Cuadro 5.6. Composición de la población por zonas 1995-2050


1995 2050
Alta Fin Alta Fin
Baja escolaridad Baja escolaridad
Región escolaridad etapa escolaridad etapa
Jóvenes Mayores Mayores laboral Jóvenes Mayores Mayores laboral
Noroeste 32% 37% 6% 25% 34% 37% 6% 24%
Noreste 32% 36% 7% 26% 33% 35% 7% 25%
Centro-
norte 34% 37% 5% 24% 34% 38% 5% 23%
Centro 36% 36% 4% 25% 36% 36% 4% 24%
Capital 26% 33% 14% 27% 26% 30% 15% 29%
Edo. de
México 36% 36% 6% 22% 36% 36% 6% 22%
Centro-
sur 35% 36% 4% 25% 34% 37% 4% 26%
Sur 35% 36% 3% 27% 33% 37% 3% 27%
Sureste 37% 36% 4% 23% 36% 36% 4% 24%

Comparando el cuadro de 1995 con el del 2050, en el Distrito Federal, la población de


individuos entre 25 y 65 años con bajo nivel educativo perdería una representatividad en
la zona de un 3%, mientras que obtendría un 1% la proporción de personas con mayor
nivel de instrucción y un 2% las que están por concluir su etapa laboral; a la larga en la
capital, además de haber un número reducido de personas, estará compuesta por una
población adulta o vieja y con un grado elevado de educación. Por otro lado, en la zona
del noroeste, ganarían jóvenes de baja instrucción, perdiendo representatividad el grupo
de individuos que están al final de su etapa laboral. Por último, en todas las zonas
ubicadas en el sur de la República, se observa que adquirirían representatividad de los
individuos de mayor edad en detrimento de la población más joven.

En las proyecciones mostradas, no se está considerando la tasa de crecimiento de la


población; sin embargo, puede intuirse que en aquellas regiones donde hay mayores
concentraciones de individuos con altos niveles de educación, así como el grupo de
mayor edad, la tasa de natalidad será la menor, provocando que se conviertan en
66

localidades viejas, y como es el caso del Distrito Federal podría darse una descongestión.
En las entidades donde tienen gran representatividad los individuos más jóvenes, así
como los de menor instrucción, las tasas de natalidad podrían ser las mayores poblando
estas zonas, como es el caso de la frontera norte, cuyas densidades por kilómetro
cuadrado son las menores del país.

Una vez analizados los datos presentados en este capítulo, se advierte que en realidad
existe una especialización regional en le país, que ésta se percibe por las personas que
tomaron previamente la decisión de desplazarse.
67

CAPÍTULO VI. Conclusiones

Los cambios que ha experimentado México, durante y después del periodo de desarrollo
estabilizador, han provocado que los individuos se preocupen por realizar un estudio de
las diferentes regiones del país, tratando de dirigirse a las zonas en las que puedan
desenvolverse de la mejor forma posible. Sin embargo, en la época comprendida desde
1940 hasta 1970, las personas, independientemente de sus características individuales, se
desplazaban a la capital del país. A partir de que la economía mexicana se abrió al
comercio internacional, las diferentes regiones se fueron especializando, provocando que
los migrantes tomaran otras opciones como entidades de destino, fenómeno que inicia el
proceso descongestionador del Distrito Federal.

Puede observarse cómo las personas responden a los incentivos que ofrece cada estado,
cumpliéndose, como muestra Tiebout (1956), que las personas “votan con los pies”. Los
individuos se desplazan a aquellas regiones, en donde encuentran la canasta de
características que más se asemeja a su perfil de preferencias, o bien, que mejor se adapte
a sus cualidades.

Las regiones que abarcan el norte del país, por su vinculación con los Estados Unidos, se
especializan en el sector industrial, enfocadas a la comercialización internacional; la parte
centro del país se ve contagiada, en los estados de Hidalgo, Guanajuato y Querétaro, por
el fenómeno provocado por el TLCAN, enfocándose en la maquila. Por otro lado, la
capital del país y el Estado de México, además de la Península de Yucatán se caracterizan
por su fuerza en el sector servicios; las dos primeras se dedican principalmente al
comercio, servicios profesionales y al gobierno, y la última, al comercio y al turismo. Los
estados de la costa del Golfo de México se especializan en el primer sector, así como en
la industria petrolera, mientras que la costa del sur del Pacífico se mantiene el sector
primario como el de mayor relevancia.
68

Las zonas que comprenden los principales estados de la República, el Estado de México,
Jalisco, Nuevo León y el Distrito Federal, en menor grado, continúan siendo entidades
atractivas para las personas del resto del país; sin embargo, el tipo de personas que toma
en cuenta estos estados como regiones atractivas corresponde a un cierto grupo de la
población, que posee un elevado grado de educación. Asimismo, la sociedad con un nivel
educativo que no supera la educación secundaria percibe la parte norte del país como un
foco de oportunidades. Por último, en los estados del norte, se está perdiendo
representatividad de las personas de edad avanzada, que les falta poco para terminar su
ciclo laboral, mientras que en el resto de la República, este grupo se mantienen igual o
aumentan, como se observa en el sureste del país, ya sea que lo hagan porque para ellas el
costo del desplazamiento es mayor, son emigraciones de retorno, o bien, buscan una vida
tranquila.

Es interesante el caso de la zona que abarca el Distrito Federal, pues pierde población de
todo tipo de gente; sin embargo, esto sucede en menor medida en la población con mayor
grado de educación que opta por emigrar al Estado de México. Si se considera a estas dos
entidades como una sola región, únicamente en el caso de los individuos más educados,
se observa que la retención que ejercen se incrementa, dejando de ser la menor del país.
También, se percibe un incremento en todos los tipos de personas en la parte norte y en la
zona que abarca el estado de Querétaro; por otro lado, al inicio de la tesis, se menciona el
cambio que sufrió el estado de Aguascalientes, ubicado en la zona centro-norte, que
incrementa su representatividad nacional en los individuos de edad madura con estudios
hasta de secundaria.

El estudio de las tendencias migratorias y sus proyecciones puede ser de gran utilidad
para la iniciativa privada, pues conocerán dónde se concentra cada tipo de mercado, así
como el tipo de empleados que necesitan. Por otra parte, los gobiernos estatales sabrán
cómo funcionan sus políticas y cómo dirigirlas, dependiendo de sus propósitos.
Asimismo, podrán utilizar las ventajas estatales que la población percibe, de tal forma
69

que tendrán conocimiento de los estados con los que están compitiendo, dependiendo del
tipo de capital que pretendan atraer.

En suma, en la presente tesis, se concluye que las diferentes regiones en las que el país ha
sido dividido presentan síntomas de especialización, que han permitido cambiar los flujos
migratorios. Sin embargo, este estudio ejemplifica el caso de que las probabilidades se
mantengan, no considera la tasa de crecimiento natural de la población, ni toma en cuenta
que entre el periodo 1995-2050, conforme se descongestionen ciertas regiones, puede ser
que éstas nuevamente se conviertan en zonas atractoras. A pesar de esto, puede realizarse
este mismo trabajo cada año censal, con el objetivo de comparar las tendencias y ver si
éstas se intensifican o si regresan a un estado original.
70

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72

Anexos

Anexo 1

El presente anexo muestra las tasas medias de migración, para cada entidad federativa,
desde 1955 hasta 1995, donde se observa la evolución de los saldos netos migratorios
para cada estado.

Tasas16 anuales de migración neta por entidad federativa 1955-1995


1955- 1960- 1965- 1970- 1975- 1980- 1985- 1990-
Entidad Federativa
1960 1965 1970 1975 1980 1985 1990 1995
Aguascalientes -1,4 -0,4 -0,6 0,2 0,3 0,9 1,0 0,9
Baja California 2,8 2,0 2,2 1,1 0,5 1,9 3,0 1,9
Baja California Sur -0,1 0,5 1,2 1,6 1,5 1,5 1,5 0,6
Campeche -0,3 0,2 0,4 0,4 0,5 0,4 0,5 0,3
Coahuila -0,5 -0,5 -0,5 0,0 0,1 -0,1 -0,1 -0,1
Colima 0,5 0,4 0,4 0,1 0,2 0,4 0,7 0,7
Chiapas 0,0 -0,2 -0,3 -0,2 -0,1 -0,2 -0,2 -0,4
Chihuahua 0,5 0,1 -0,1 0,1 0,2 0,6 0,8 0,5
Distrito Federal 1,7 0,7 0,4 -1,0 -1,3 -1,2 -2,1 -1,8
Durango -0,9 -0,8 -1,0 -0,6 -0,3 -0,6 -0,8 -0,4
Guanajuato -1,0 -0,6 -0,8 -0,5 -0,2 -0,2 0,0 0,0
Guerrero -0,5 -0,5 -0,8 -0,7 -0,9 -0,9 -0,7 -0,5
Hidalgo -0,9 -0,8 -1,0 -0,5 -0,4 -0,4 -0,3 -0,3
Jalisco -0,5 -0,1 0,2 0,1 0,2 0,3 0,2 0,1
México .14 1,5 2,9 2,6 2,3 1,5 1,4 1,4
Michoacán -0,9 -0,9 -1,4 -0,7 -0,5 -0,4 -0,2 -0,1
Morelos 0,8 0,6 0,8 0,3 0,3 0,7 1,1 0,7
Nayarit 0,0 -0,2 -0,2 -0,5 -0,5 -0,4 -0,1 0,1
Nuevo León 0,8 0,8 1,1 0,7 0,7 0,6 0,4 0,3
Oaxaca -0,6 -0,6 -0,9 -0,8 -0,8 -0,7 -0,5 -0,6
Puebla -0,5 -0,5 -0,6 -0,4 -0,3 -0,2 -0,1 -0,2
Querétaro -0,9 -0,5 -0,6 0,0 0,2 0,7 1,0 0,6
Quintana Roo 2,3 2,5 3,5 5,0 3,8 3,9 4,2 2,1
San Luís Potosí -0,7 -0,8 -1,1 -0,7 -0,5 -0,3 -0,2 -0,1
Sinaloa -0,3 0,1 0,5 0,1 -0,2 -0,3 -0,3 -0,4
Sonora 0,6 0,2 0,1 0,1 0,2 0,2 0,3 0,2
Tabasco -0,4 -0,1 -0,1 -0,1 -0,1 -0,1 -0,1 0,1
Tamaulipas 0,8 0,3 0,2 0,2 0,2 0,3 0,4 0,2
Tlaxcala -0,9 -0,7 -0,9 -0,9 0,0 0,2 0,4 0,0
Veracruz 0,1 0,0 -0,1 -0,1 -0,1 -0,2 -0,3 -0,5
Yucatán -0,6 -0,4 -0,6 -0,6 -0,3 -0,2 -0,2 0,0
Zacatecas -1,3 -1,4 -2,2 -2,2 -1,0 -0,9 -0,7 -0,3

Fuente. CONAPO “La situación demográfica de México 1996” pp.39

16
El cuadro fue realizado con tasas medias anuales de migración para los ocho quinquenios, basándose en
el estado de residencia en los cinco años previos al censo o al conteo de población.
73

Anexo 2

El siguiente cuadro muestra las intensidades más altas y las más bajas entre diferentes
estados del país.

Tabla de flujos Inmigrantes en cada estado entre población de origen por 1000

Origen Destino Tasa Origen Destino Tasa Origen Destino Tasa


Distrito
Querétaro Aguascalientes 0,4 Aguascalientes Coahuila 0,7 Veracruz Federal 4,7
San Luis Distrito
Durango Aguascalientes 0,5 Potosí Coahuila 1,1 Chihuahua Federal 5,2
Distrito
Guanajuato Aguascalientes 0,5 Veracruz Coahuila 1,4 Tlaxcala Federal 5,6
San Luis Distrito
Potosí Aguascalientes 0,8 Tamaulipas Coahuila 1,6 Morelos Federal 6,5
Distrito Distrito
Federal Aguascalientes 1,1 Zacatecas Coahuila 3,4 Puebla Federal 6,5
Distrito
Jalisco Aguascalientes 1,2 Nuevo León Coahuila 3,5 Oaxaca Federal 6,9
Distrito
Chihuahua Aguascalientes 1,7 Durango Coahuila 6,9 Hidalgo Federal 7,8
Distrito
Zacatecas Aguascalientes 4,6 Chihuahua Coahuila 15,1 México Federal 14,9
PROM 1,3 PROM 4,2 PROM 7,3
Distrito
Durango Baja California 3,5 Federal Colima 0,3 Aguascalientes Durango 0,4
Guerrero Baja California 3,7 Chihuahua Colima 0,4 Nayarit Durango 0,5
Baja Baja
Michoacán Baja California 3,7 California Sur Colima 0,4 California Durango 0,8
Baja
Chihuahua Baja California 4,6 California Colima 0,5 Sinaloa Durango 1,0
Baja
California Baja
Sur Baja California 10,4 Nayarit Colima 0,6 California Sur Durango 1,1
Sonora Baja California 10,4 Guerrero Colima 0,8 Zacatecas Durango 1,7
Nayarit Baja California 13,8 Michoacán Colima 1,3 Coahuila Durango 5,4
Sinaloa Baja California 19,8 Jalisco Colima 2,0 Chihuahua Durango 15,1
PROM 8,7 PROM 0,8 PROM 3,3
Quintana Baja California Baja
Roo Sur 0,6 Puebla Chiapas 0,5 California Guanajuato 1,1
Baja
Oaxaca CaliforniaSur 0,7 Chihuahua Chiapas 0,6 Jalisco Guanajuato 1,5
Baja California Distrito
Chihuahua Sur 0,9 Federal Chiapas 0,8 México Guanajuato 1,6
Baja California
Sonora Sur 0,9 Veracruz Chiapas 1,0 Aguascalientes Guanajuato 1,7
74

Baja California
Nayarit Sur 0,9 Oaxaca Chiapas 1,4 Chihuahua Guanajuato 2,4
Baja Baja California
California Sur 1,6 Campeche Chiapas 1,5 Michoacán Guanajuato 2,4
Baja California Distrito
Guerrero Sur 2,6 Quintana Roo Chiapas 1,6 Federal Guanajuato 2,5
Baja California
Sinaloa Sur 2,9 Tabasco Chiapas 4,4 Querétaro Guanajuato 4,2
PROM 1,4 PROM 1,5 PROM 2,2
San Luis Baja
Potosí Campeche 0,0 Chiapas Chihuahua 1,2 California Guerrero 0,6
Tamaulipas Campeche 0,4 Oaxaca Chihuahua 1,5 México Guerrero 0,8
Veracruz Campeche 1,0 Sonora Chihuahua 1,9 Quintana Roo Guerrero 1,0
Chiapas Campeche 1,2 Sinaloa Chihuahua 2,3 Oaxaca Guerrero 1,1
Yucatán Campeche 1,9 Veracruz Chihuahua 4,9 Michoacán Guerrero 1,2
Distrito
Chihuahua Campeche 2,0 Zacatecas Chihuahua 5,3 Federal Guerrero 1,4
Quintana Baja
Roo Campeche 4,2 Coahuila Chihuahua 8,1 California Sur Guerrero 1,9
Tabasco Campeche 5,4 Durango Chihuahua 19,3 Morelos Guerrero 4,6
PROM 2,0 PROM 5,6 PROM 1,6

Origen Destino Tasa Origen Destino Tasa Origen Destino Tasa


Tamaulipas Hidalgo 0,4 Veracruz Morelos 0,6 Tabasco Puebla 1,3
San Luis Potosí Hidalgo 0,7 Tlaxcala Morelos 0,6 Hidalgo Puebla 1,5
Puebla Hidalgo 1,2 Quintana Roo Morelos 0,6 Chihuahua Puebla 1,8
Tlaxcala Hidalgo 1,4 Chihuahua Morelos 0,8 México Puebla 2,1
Querétaro Hidalgo 1,4 Puebla Morelos 1,2 Oaxaca Puebla 2,9
Distrito
Chihuahua Hidalgo 1,5 México Morelos 1,4 Federal Puebla 3,5
Distrito
México Hidalgo 2,6 Federal Morelos 3,0 Veracruz Puebla 4,4
Distrito Federal Hidalgo 3,1 Guerrero Morelos 6,1 Tlaxcala Puebla 8,3
PROM 1,5 PROM 1,8 PROM 3,2
Sinaloa Jalisco 3,5 Zacatecas Nayarit 0,5 Morelos Querétaro 0,7
Baja California Jalisco 3,7 Sonora Nayarit 0,7 Michoacán Querétaro 0,8
San Luis
Chihuahua Jalisco 4,3 Guerrero Nayarit 0,7 Potosí Querétaro 1,0
Aguascalientes Jalisco 4,3 Chihuahua Nayarit 0,8 Chihuahua Querétaro 1,4
Baja
Michoacán Jalisco 4,6 California Sur Nayarit 1,1 México Querétaro 1,5
Baja California Baja
Sur Jalisco 4,7 California Nayarit 1,6 Hidalgo Querétaro 1,9
Zacatecas Jalisco 5,5 Sinaloa Nayarit 1,6 Guanajuato Querétaro 2,2
Distrito
Nayarit Jalisco 14,4 Jalisco Nayarit 2,1 Federal Querétaro 2,8
PROM 5,6 PROM 1,1 PROM 1,5
75

Nuevo Quintana
Chihuahua México 4,4 Hidalgo León 1,3 Morelos Roo 0,8
Nuevo Quintana
Guerrero México 5,0 Durango León 1,7 Guerrero Roo 1,4
Nuevo Distrito Quintana
Tlaxcala México 6,1 Veracruz León 2,7 Federal Roo 1,5
Nuevo Quintana
Morelos México 6,2 Zacatecas León 3,0 Veracruz Roo 3,0
Nuevo Quintana
Veracruz México 6,3 Chihuahua León 5,7 Chiapas Roo 3,7
Nuevo Quintana
Puebla México 7,6 Coahuila León 6,5 Tabasco Roo 10,3
Nuevo Quintana
Oaxaca México 8,1 Tamaulipas León 8,8 Campeche Roo 11,3
San Luis Nuevo Quintana
Distrito Federal México 52,8 Potosí León 9,4 Yucatán Roo 19,3
PROM 12,1 PROM 4,9 PROM 6,4
San Luis
Querétaro Michoacán 1,0 Puebla Oaxaca 1,0 México Potosí 0,5
Baja San Luis
Nayarit Michoacán 1,1 California Oaxaca 1,0 Coahuila Potosí 0,6
San Luis
Chihuahua Michoacán 1,2 Guerrero Oaxaca 1,1 Hidalgo Potosí 0,7
Distrito San Luis
Baja California Michoacán 1,5 México Oaxaca 1,2 Federal Potosí 0,9
Baja San Luis
México Michoacán 1,5 California Sur Oaxaca 1,3 Chihuahua Potosí 1,4
San Luis
Guanajuato Michoacán 1,8 Chiapas Oaxaca 2,0 Zacatecas Potosí 1,8
Distrito San Luis
Jalisco Michoacán 2,0 Federal Oaxaca 2,0 Nuevo León Potosí 1,9
San Luis
Guerrero Michoacán 4,2 Veracruz Oaxaca 2,5 Tamaulipas Potosí 2,8
PROM 1,8 PROM 1,5 PROM 1,3
76

Anexo 3

En este anexo se muestran las probabilidades de que se efectúe cada uno de los posibles
flujos para los diferentes tipos de población. Estas probabilidades fueron obtenidas a
partir de las regresiones del modelo logit multinomial, donde al obtener los efectos
marginales se observan las probabilidades estimadas.

Probabilidades de los flujos migratorios

General Zona de destino


Centro- Edo. Centro-
Noroeste Noreste norte Centro Capital México Sur sur Sureste
Noroeste 98,3% 0,4% 0,5% 0,2% 0,2% 0,1% 0,2% 0,1% 0,1%
Noreste 0,4% 98,6% 0,2% 0,2% 0,1% 0,1% 0,2% 0,0% 0,1%
Centro-
norte 0,5% 0,2% 98,5% 0,3% 0,2% 0,1% 0,0% 0,1% 0,0%
Zona 0,3% 0,2% 0,4% 98,1% 0,3% 0,4% 0,1% 0,1% 0,1%
Centro
de
Capital 0,2% 0,3% 0,3% 1,2% 91,2% 4,8% 0,7% 0,8% 0,3%
origen
Edo.
México 0,1% 0,2% 0,2% 1,1% 2,1% 94,3% 0,6% 0,6% 0,2%
Sur 0,4% 0,6% 0,1% 0,1% 0,3% 0,4% 97,4% 0,4% 0,4%
Centro-
sur 0,3% 0,1% 0,1% 0,2% 0,7% 0,4% 0,3% 97,6% 0,1%
Sureste 0,2% 0,2% 0,1% 0,1% 0,2% 0,2% 0,3% 0,1% 98,7%
Jóv. Zona de destino
baja
Centro- Edo. Centro-
Noroeste Noreste norte Centro Capital México Sur sur Sureste
Noroeste 98,0% 0,4% 0,6% 0,3% 0,1% 0,1% 0,3% 0,2% 0,1%
Noreste 0,4% 98,6% 0,3% 0,2% 0,1% 0,1% 0,3% 0,0% 0,0%
Centro-
norte 0,7% 0,3% 98,2% 0,4% 0,1% 0,2% 0,1% 0,0% 0,1%
Zona
de Centro 0,4% 0,2% 0,5% 98,0% 0,2% 0,5% 0,1% 0,2% 0,0%
origen Capital 0,3% 0,2% 0,3% 1,5% 88,0% 6,6% 1,4% 1,5% 0,2%
Edo.
México 0,1% 0,2% 0,2% 1,3% 2,2% 94,3% 0,8% 0,8% 0,2%
Sur 0,6% 1,0% 0,1% 0,1% 0,5% 0,5% 96,3% 0,4% 0,3%
Centro-
sur 0,5% 0,1% 0,2% 0,3% 0,9% 0,8% 0,4% 96,8% 0,1%
Sureste 0,2% 0,2% 0,7% 0,1% 0,1% 0,2% 0,4% 0,1% 98,6%
77

May.
Zona de destino
baja
Centro- Edo. Centro-
Noroeste Noreste norte Centro Capital México Sur sur Sureste
Noroeste 99,0% 0,2% 0,4% 0,1% 0,1% 0,0% 0,1% 0,1% 0,0%
Noreste 0,3% 99,1% 0,2% 0,1% 0,0% 0,1% 0,2% 0,0% 0,0%
Centro-
norte 0,4% 0,1% 99,1% 0,2% 0,0% 0,1% 0,0% 0,1% 0,0%
Zona
de Centro 0,2% 0,2% 0,3% 98,7% 0,2% 0,3% 0,1% 0,1% 0,0%
origen Capital 0,2% 0,2% 0,2% 1,2% 91,7% 4,8% 0,8% 0,9% 0,1%
Edo.
México 0,0% 0,1% 0,2% 1,1% 1,4% 95,9% 0,6% 0,6% 0,1%
Sur 0,2% 0,5% 0,0% 0,1% 0,2% 0,2% 98,2% 0,3% 0,3%
Centro-
sur 0,2% 0,1% 0,9% 0,1% 0,4% 0,3% 0,3% 98,5% 0,1%
Sureste 0,1% 0,1% 0,0% 0,0% 0,1% 0,1% 0,3% 0,1% 99,2%
May. Zona de destino
alta esc.
Centro- Edo. Centro-
Noroeste Noreste norte Centro Capital México Sur sur Sureste
Noroeste 97,1% 0,9% 0,6% 0,3% 0,7% 0,1% 0,0% 0,1% 0,2%
Noreste 0,6% 97,2% 0,2% 0,6% 0,6% 0,3% 0,1% 0,1% 0,3%
Centro-
0,8% 0,6% 96,6% 0,6% 0,8% 0,4% 0,0% 0,2% 0,0%
Zona norte
Centro 0,4% 0,4% 0,5% 96,0% 1,5% 0,7% 0,3% 0,3% 0,0%
de
origen Capital 0,3% 0,4% 0,5% 1,2% 92,1% 3,9% 0,6% 0,5% 0,6%
Edo.
México 0,3% 0,4% 0,5% 1,1% 3,6% 92,9% 0,3% 0,4% 0,4%
Sur 0,5% 1,3% 0,2% 0,2% 1,0% 0,8% 94,2% 0,9% 0,8%
Centro-
sur 0,4% 0,3% 0,2% 0,1% 1,1% 0,5% 0,6% 96,4% 0,5%
Sureste 0,1% 0,3% 0,3% 0,5% 1,2% 0,2% 0,6% 0,2% 96,7%
Fin
etapa Zona de destino
lab.
Centro- Edo. Centro-
Noroeste Noreste norte Centro Capital México Sur sur Sureste
Noroeste 99,2% 0,2% 0,2% 0,1% 0,2% 0,0% 0,1% 0,0% 0,0%
Noreste 0,2% 99,3% 0,1% 0,1% 0,0% 0,0% 0,1% 0,0% 0,0%
Centro- 0,2% 0,1% 99,3% 0,2% 0,1% 0,0% 0,0% 0,0% 0,0%
Zona norte
Centro 0,1% 0,1% 0,2% 98,9% 0,2% 0,2% 0,1% 0,0% 0,0%
de Capital 0,1% 0,2% 0,2% 0,9% 94,6% 2,7% 0,4% 0,6% 0,2%
origen
Edo.
México 0,0% 0,1% 0,1% 0,8% 1,0% 96,8% 0,5% 0,4% 0,1%
Sur 0,2% 0,2% 0,0% 0,1% 0,1% 0,2% 98,8% 0,2% 0,2%
Centro-
sur 0,2% 0,0% 0,0% 0,1% 0,3% 0,2% 0,1% 99,0% 0,1%
Sureste 0,0% 0,1% 0,1% 0,0% 0,1% 0,1% 0,2% 0,1% 99,4%
78

Anexo 4

El cuadro representa la regresión lineal de la segunda etapa, donde en lugar de utilizar,


como variable dependiente, la probabilidad de cada flujo se consideran momios, pues de
la otra forma puede que la probabilidad no se encuentre en el intervalo [0,1].

Regresiones de la etapa dos con momios


Jóvenes Mayores Mayores
baja alta alta Fin de etapa
educación educación educación laboral General
Densidad/1000 -5,51 -10,04 -3,19 -13,45 -6,33
Valor t -2,97 -3,01 -3,5 -3,04 -3,13
2
Densidad /(1*E-06) 1,89 4,45 1,1 4,62 2,18
Valor t 3,31 3,35 3,9 3,38 3,49
Distancia/100 -1,08 -1,97 -0,63 -2,63 -1,24
Valor t -5,42 -5,49 -6,4 1,55 -5,71
Urbana 15,43 28,09 8,95 37,66 17,73
Valor t 1,52 1,53 1,79 1,55 1,6
Desempleo*100 -19,05 -34,68 -11,04 -46,49 -21,89
Valor t -2,47 -2,5 -2,92 -2,53 -2,61
Control/10 -0,13 -0,24 -0,08 -0,32 -0,15
Valor t -6,56 -6,64 -7,73 -6,71 -6,91
Constante 29,59 53,85 17,15 72,19 33,99
Valor t 9,66 9,78 11,4 9,88 10,18
2
R 0,52 0,52 0,60 0,53 0,54
2
R -ajustada 0,48 0,48 0,56 0,49 0,50
79

Apéndices

Apéndice 1. Modelo logit

Este modelo se considera, como un modelo de respuesta cualitativa de forma dicotómica,


en el que la variable dependiente toma valores de uno o de cero, indicando la pertenencia
o la no pertenencia a un grupo o evento; por ejemplo: compra el producto o no lo compra,
pertenece a un cierto grupo de edad o no. Con este tipo de modelos se trata de obtener
una probabilidad de ocurrencia, representada en la siguiente ecuación17

(A1.1) Pi = E (Y = 1 | Xi ) = β 1 + β 2 X i ,

donde X es una variable independiente, que puede tomar tanto valores binarios como
cuantitativos; el que la variable dependiente tome el valor de uno indica, que el individuo
en cuestión, pertenece al evento estudiado. El valor de la probabilidad Pi puede
representarse de la siguiente manera:

1
Pi =
1+e−(β1+β2X2 )
(A1.2) ;

reescribiendo

1 ez
(A1.3) Pi = = ,
1 + e − zi 1 + e z

donde Z i = β 1 + β 2 X i .

Esta ecuación se conoce con el nombre de función de distribución logística. Se puede


observar, que, independientemente del valor que tome la Z, la probabilidad siempre se
encontrará en el intervalo [0,1].

17
Gujarati, D. “Econometría” Mc. Graw Hill. Cuarta Edición (2004).
80

Sin embargo, la ecuación A1.3 no es lineal en los parámetros, por lo que el no podría
usarse la técnica de mínimos cuadrados ordinarios (MCO); para esto se realiza una
linearización.

Ya que Pi es la probabilidad de que la variable dependiente sea uno, entonces (1-Pi)


es la de que sea cero representada como:

1
(A1.4) 1 − Pi = ,
1 + e zi

reescribiendo

Pi 1 + e zi
(A1.5) = = e zi .
1 − Pi 1 + e zi

Considerando como razón de probabilidades a Pi/(1-Pi) a favor de que Y=1 comparado


con Y=0.

Tomando el logaritmo se obtiene:

 P 
(A1.6) Li = ln i  = Z i ,
 1 − Pi 

donde Z i = β 1 + β 2 X i .

El logaritmo, además de ser lineal en las variables, lo es en los parámetros. A L se le


conoce como logit, el cual presenta las siguientes características:

1. Aunque el valor L puede variar en todo el intervalo [− ∞, ∞] , las


probabilidades siempre estarán en el rango [0,1].

2. Aunque L es lineal en X, las probabilidades en sí mismas no lo son.

3. El modelo puede utilizarse para más de una regresora.


81

4. Si el logit tiene un valor positivo, significa que cuando el valor de las


regresoras se incrementa, aumentan las posibilidades de que la regresada sea
igual a uno.

5. La interpretación del modelo es β 2 , la pendiente mide el cambio en L


ocasionando por un cambio unitario en X; es decir, dice cómo cambia el
logaritmo de las probabilidades de que Y=1 a medida que la X cambia en una
unidad. El intercepto es el valor del logaritmo de las probabilidades, a favor
de que Y=1 si la regresada es cero, sin embargo podría no tener significado
alguno.

6. Para obtener la probabilidad, es necesario obtener el valor de los estimadores


y sustituirlos en la ecuación A1.2.
82

Apéndice 2. Modelo logit multinomial

En los modelos bivariados el interés reside en construir un modelo, para una variable de
respuesta del tipo pertenece o no pertenece a una categoría. Pero estudios con variables
de respuesta con más de dos categorías son frecuentes, además, estos pueden ser
ordinales o no ordinales.

Como ejemplos de las primeras, puede considerarse si un individuo pertenece a un grupo


de edad en específico. O bien, como ejemplo de la forma no ordinal, pueden
representarse las preferencias por un partido político, elección del lugar de compra de un
producto, la zona en la que un individuo prefiere vivir, entre otros.

Para estudiar fenómenos como estos, se extiende el modelo bivariado logit, a fin de que
tomen en cuenta las múltiples categorías jerarquizadas. Las técnicas de los modelos logit
multinomiales pueden utilizarse para estudiar esas categorías nominales.

El modelo logit multinomial18 es un modelo de utilidad aleatoria, en el que se considera


un número de individuos n que deben elegir entre j, mayor que dos, alternativas
planteadas para decidir el destino de la región a la que va a desplazarse.

Asumiendo que los individuos se comportan en forma racional19, la alternativa que


decidan elegir será la que maximice su utilidad. De tal forma, que si prefiere dirigirse a la
región i antes que a la región j, es por que para el individuo “n” la utilidad obtenida por
desplazarse a i, es mayor que de dirigirse a la región j.

18
Explicación del modelo logit multinomial, con base en Greene “Análisis Econométrico” tomada de
Gentile, Natacha y Rodríguez Elsa. “El Consumo de Alimentos Orgánicos: Aplicación de un modelo logit
multinomial en la elección del canal de compra” Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la
Universidad Nacional de Mar del Plata.
19
Los individuos se consideran racionales en tanto que puedan comparar dos alternativas, y sus elecciones
sean conformes a la propiedad de transitividad.
83

Así que la utilidad del individuo puede expresarse como

(A2.1) Unj = Vnj + Enj ,

donde Vnj es la especificación de la parte determinística de la utilidad, ésta incluye

atributos medibles de las categorías o de los individuos. El término de error ε nj

representa la parte estocástica de la utilidad, en ella se incluyen los errores de medida,


que son los atributos no observados y las variaciones no percibidas en las preferencias.

Estas fuentes de variación requieren que el modelo construido trate a cada término de
error como aleatorio, por lo tanto las verdaderas utilidades no son conocidas, en
consecuencia se consideran aleatorias, de ahí la denominación de “modelo de
maximización de la utilidad aleatoria”.

El modelo logit multinomial es un modelo de probabilidades, se define la función Pnj ,


como la posibilidad de que un individuo n con características propias como la edad, la
educación, el sexo, etc. elija la alternativa j; mientras que β j = ( β 1 , β 2 , β 3 ,...β kj ) es el

conjunto de parámetros que representan el impacto de cambios en las variables


independientes sobre las probabilidades. El modelo de probabilidad multinomial resulta:

(A2.2) Pnj = Pr(Yn = j ) para toda j=0,…,J .

En el modelo logit multinomial la función de probabilidad puede ser escrita como sigue,
considerando que la utilidad está representada como los parámetros del modelo de
regresión:

(A2.3) e Bj´ Xn
Pnj = Pj ( B j ´ X n ) = Pr(Yn = i ) = J

∑ (e
j =0
Bj ´ Xn
)
84

por lo que la probabilidad de escoger una opción en particular, está dada por la
exponencial de la utilidad de una de las opciones comparada con las demás.

Este modelo presenta una indeterminación, que se resuelve normalizando el modelo


fijando arbitrariamente B´1, por lo tanto las probabilidades para las opciones son:

e ( βj´ Xn )
(A2.4) Pr(Yn = i ) = j=J
, para j=1,…,J ;
1 + ∑ (e βj´ Xn
)
j =1

1
Pr(Yn = 0) = j=J
,
1 + ∑ (e βj´ Xn
)
j =1

J
donde debe cumplirse que ∑P
j =0
j =1 .

Al fijar arbitrariamente a β1 = 0 , se encontrará la categoría base y condiciona las


interpretaciones de los coeficientes. La diferenciación de las expresiones anteriores,
permite obtener los efectos marginales de las distintas variables utilizadas, estas solo son
útiles para el análisis de variables independientes continuas, en caso de utilizar variables
dependientes dicotómicas, los efectos marginales no son de utilidad.

Los parámetros del modelo son estimados mediante el maximum likelihood. Éste
procedimiento selecciona a aquellos estimadores que maximizan la probabilidad de una
muestra observada.
85

Apéndice 3. Modelo de regresión lineal

Los modelos de regresión lineal20 se interesan en estimar o predecir el valor promedio de


una variable, llamada dependiente, sobre los valores fijos de las variables independientes.

Dada una variable dependiente Y y variables independientes X el modelo de regresión


establece una relación entre ambas variables a través de la ecuación:

(A3.1) Y = f (X ) + ε ,

con

(A3.2) F ( X ) = E (Y | X ) ,

donde ε es un término de error, que representa los factores que influyen sobre Y además
de la X.

El término ε puede interpretarse como un error de predicción

ε = error de predicción= Y-f(x) .

Dada una variable endógena Y y una variable exógena X el modelo de regresión lineal
establece una relación entre ambas variables a través de la ecuación:

(A3.3) Y = f (X ) + ε ,

con

(A3.4) F ( X ) = E (Y | X ) = β1 + β 2 X ,

función lineal, de forma más detallada

(A3.5) Y = β1 + β 2 X + ε ,

20
Información obtenida de Gujarati, D. (2004) “Econometría” Mc. Graw Hill. Cuarta edición.
86

donde Y es la variable dependiente, explicada o de respuesta, y X es la variable


independiente, exógena, explicativa de control o regresora. Los parámetros β1 y β 2 son
estimados por el método de mínimos cuadrados ordinarios (MCO).

El término ε es el error o perturbación inobservable. Representa los factores que


influyen en Y además de X, el componente aleatorio de Y que no viene explicado por
β1 + β 2 X

A modo de ejemplo, si se tiene interés por conocer el nivel de salario Y, y se utiliza como
variable independiente X, los años de estudio, el término de error puede ser grande, pues
hay más variables que afectan el ingreso de las personas, además, de los años de
educación, tales como la experiencia laboral o la habilidad de cada individuo.

Con el fin de obtener los verdaderos valores de los coeficientes y la confiabilidad de los
errores obtenidos es necesario cumplir con ciertos supuestos, esto con el fin de que las
estimaciones sean confiables. Así que el método MCO debe cumplir con:

1. El modelo de regresión debe ser lineal en los parámetros.

2. Los valores tomados por la regresora X son considerados fijos en muestreo


repetido. Con el fin de que el análisis de regresión condicional esté
condicionado a los valores dados del regresor.

3. El valor medio del término de error debe ser igual a cero.


E (ui | Xi = 0) .

4. Homocedasticidad, dado el valor de X, la varianza de ui es la misma para


todas las observaciones. La variación alrededor de la recta de regresión es la
misma para los valores de X.
87

5. No existe autocorrelación entre las perturbaciones. En caso de que existiera


autocorrelación, implicaría que el valor de Y también depende del error de otra
observación.

6. No debe existir correlación entre el término de error y las variables


explicativas. Si esto sucede no sería posible aislar el efecto de una variable, se
interpretaría con el error.

7. EL número de observaciones debe ser mayor al número de parámetros. Si esto


no sucede será imposible la estimación de los parámetros.

8. La varianza de las variables independientes debe ser un número positivo y


finito, para evitar problemas de indeterminación, cuando se pretende calcular
el valor de los parámetros.

9. El modelo de regresión debe estar correctamente especificado.

10. No debe haber multicolinealidad perfecta.


88

Apéndice 4. Cadenas de Markov

Con el objetivo de mostrar que es lo que puede pasar en un futuro, se utiliza el proceso de
cadenas de Markov21, para poder realizar proyecciones, donde se utiliza una matriz de
transición T de n*n, en la que se presentan probabilidades de cada uno de los posibles
estados

 P11 , P12 ,...., P1n 


 P , P ,...., P 
 21 22 2n 

(A4.1) T = ........................ ,

 
........................
 Pn1 , Pn 2 ,...., p nn 
 

donde, cada Pij representa la probabilidad de residir en 1995 en la zona i y vivir en la

región j en el año 2000.

Una vez obtenida la matriz de transición, ésta se utiliza para que a partir de un estado
inicial x 0 , se calcule el estado buscado mediante

 P1k 
 k
 P2 
(A4.2) x = .....  ,
k
 
..... 
 k
 Pn 

donde x k es la población en el periodo k, de tal forma que para calcular la población en


el periodo (k+1) se emplea la siguiente ecuación

(A4.3) x ( k +1) = Tx k .

21
Información obtenida de Kolman, B.(1999) “Álgebra Lineal con Aplicaciones y Matlab”.
89

Puesto que las probabilidades calculadas representan a la posibilidad de desplazamiento


en el periodo 1995-2000, cada incremento en k de una unidad proporciona la población
después de cinco años. Así si k=0 representa la población inicial, en 1995; k=1 la
población en el 2000; k=2 la del 2005 y así sucesivamente.

x1 = Tx 0
(A4.4) x 2 = Tx 1 = T (Tx 0 ) = (T 2 )( x 0 ) ,
x = Tx = T ((T )( x )) = (T ) x
3 2 2 0 3 0

en general

(A4.5) x n = (T n )( x 0 ) .

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