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EL TESORO DEL MINERO

I.- Mi día comienza de madrugada, con mi pala y mi pico comienzo mi labor. Lo primero
que encontre fue la paciencia y ahora forma parte de mi tesoro
Lc.21:19 Con vuestra paciencia ganaréis vuestras almas.

II.- Después de escarbar, en poco tiempo, encontré un cofre, posiblemente alguien lo


había enterrado con mucho amor.
1Co.16:14 Todas vuestras cosas sean hechas con amor.

III.- Comencé a trabajar con un gozo el cual no podía explicar.


Sal.16:11 Me mostrarás la senda de la vida; En tu presencia hay plenitud de gozo;
Delicias a tu diestra para siempre.

IV.- Este era el comienzo de una paz interna que me rodeaba por dentro y por fuera. Esta
joya ordeno mis pensamientos.
Sal.122:7 Sea la paz dentro de tus muros, Y el descanso dentro de tus palacios.

V.- Escuchaba una voz audible que me estremecía con temor. Incline mi rostro y le pedí a
Dios, la piedra que encontré era de fe.
Lc.18:42 Jesús le dijo: Recíbela, tu fe te ha salvado.

VI.- La fe que cargaba en mi carreta aunque era poca, me dio la esperanza de seguir con
mi labor.
1Jn.3:3 Y todo aquel que tiene esta esperanza en él, se purifica a sí mismo, así como
él es puro.

VII.- Cumpliendo cada día mi labor sentía un cambio en mi vida, era Dios tomando el
control cada momento, sentía los días mas largos y para mi era mas que un orgullo
meditar en la pureza de su Santidad, las cosas ocultas reveladas por Dios eran mi sustento
“el Pan de vida” aqui puedes encontrar muchas bienaventuranzas.
Dt.29:29 Las cosas secretas pertenecen a Jehová nuestro Dios; mas las reveladas son
para nosotros y para nuestros hijos para siempre, para que cumplamos todas las
palabras de esta ley.

VIII. Esta era una experiencia nueva, un día de trabajo más. Deseaba compartir mi
testimonio pero entre mas profundo escarbaba, mas separado del mundo me sentía.
Encontré que Dios era, es y será mi Amigo Fiel y Verdadero.
Stg.2:23 Y se cumplió la Escritura que dice: Abraham creyó a Dios, y le fue contado
por justicia, y fue llamado amigo de Dios.

IX. Clame a la inteligencia y me escucho, infundo en mi temor a Jehová y no tuve miedo


del mal.
Pr.2:3 Si clamares a la inteligencia, Y a la prudencia dieres tu voz; Pr.2:4 Si como a
la plata la buscares, Y la escudriñares como a tesoros,
X. El conocimiento se aprecia cuando se reconoce de donde proviene y más cuando se
comparte cada día con los de más.
Pr.2:5 Entonces entenderás el temor de Jehová, Y hallarás el conocimiento de Dios.

XI. La piedra de la enseñanza es una de las más valiosas que encontré. Pero si no hay
quien escuche en esta sprofundidad es piedra desechada
Pr.8:10 Recibid mi enseñanza, y no plata; Y ciencia antes que el oro escogido.

XII. Mi labor me debilito un poco de tanta fuerza. Y caí enfermo en poco tiempo, Dios
quiso que orara por mis huesos y dije sáname y fui restablecido
Sal.6:2 Ten misericordia de mí, oh Jehová, porque estoy enfermo; Sáname, oh
Jehová, porque mis huesos se estremecen.

XIII. Nunca había visto una Roca tan perfecta. Este era el final de un día más de trabajo,
y el comienzo de una nueva relación con Dios mismo.
Dt.32:4 El es la Roca, cuya obra es perfecta, Porque todos sus caminos son rectitud;
Dios de verdad, y sin ninguna iniquidad en él; Es justo y recto.

XIV. Sentí recibir el deseo de mi corazón al salir a superficie después de tanto tiempo.
Sal.21:2 Le has concedido el deseo de su corazón, Y no le negaste la petición de sus
labios. Selah

XV. Necesitaba salir, regresando encuentro la piedra de la facultad, diciéndome tú lo


puedes todo en Cristo.
Ec.5:19 Asimismo, a todo hombre a quien Dios da riquezas y bienes, y le da también
facultad para que coma de ellas, y tome su parte, y goce de su trabajo, esto es don de
Dios.

XVI. Al encontrar esta piedra de la ignorancia Dios me mostraba que no deje de ignorar a
los que se pierden en estas profundidades que escarban ocultamente.
Hch.17:30 Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora
manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan;

XVII. Esta es la piedra de la batalla y sin ella no podría luchar contra todos los
pensamiento de maldad.
1Ti.6:12 Pelea la buena batalla de la fe, echa mano de la vida eterna, a la cual
asimismo fuiste llamado, habiendo hecho la buena profesión delante de muchos
testigos.

XVIII. A esta hora fui instruido para conocer la verdad y para hacer decisiones en mi
vida social, familiar y oculta.
Lc.1:4 para que conozcas bien la verdad de las cosas en las cuales has sido instruido.

X1X. Esta es la piedra de la vigilia de la cual aprendí rendirle culto al Dios Todopoderoso
a todo tiempo y fuera de tiempo. En las buenas y en las malas.
Lc.12:37 Bienaventurados aquellos siervos a los cuales su señor, cuando venga, halle
velando; de cierto os digo que se ceñirá, y hará que se sienten a la mesa, y vendrá a
servirles. Lc.12:38 Y aunque venga a la segunda vigilia, y aunque venga a la tercera
vigilia, si los hallare así, bienaventurados son aquellos siervos.

XX. Esta piedra estaba tan caliente que tuve que dejarla atrás. Se que era Dios mismo
diciéndome se, caliente o frió. Pero no tibio.
Ap.3:15 Yo conozco tus obras, que ni eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueses frío o
caliente!

XXI. Toda mi vida habia aprendido la conformidad, pero esta piedra me dio la
renovacion de mi entendimiento.
Ro.12:2 No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación
de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios,
agradable y perfecta.

XXII. Buscando decesperadamente sentia encontrar consolacion a mi vida, y la encontre.


Ro.15:5 Pero el Dios de la paciencia y de la consolación os dé entre vosotros un
mismo sentir según Cristo Jesús,

XXIII. Despues de haber encontrado la consolacion a mi vida pude santificad a Dios


libremente.
1P.3:15 sino santificad a Dios el Señor en vuestros corazones, y estad siempre
preparados para presentar defensa con mansedumbre y reverencia ante todo el que
os demande razón de la esperanza que hay en vosotros;

XXIV. De la misma manera al haber santificado a Dios, Cristo me dijo, Yo habite y


habito aun en los corazones en aquellos que tienen fe.
Ef.3:17 para que habite Cristo por la fe en vuestros corazones, a fin de que,
arraigados y cimentados en amor,

XXV. Esta no era solo una piedra era aquel simbolo marcando mi vida con el sello, yo fui
sellado con el don Divino, del Espiritu Santo.
2Co.1:22 el cual también nos ha sellado, y nos ha dado las arras del Espíritu en
nuestros corazones.

XXVI. Ahora entendia mi vida por el cual Dios me llamo, para un solo proposito,llevar
su Palabra con un corazon limpio y una fe no fingida.
1Ti.1:5 Pues el propósito de este mandamiento es el amor nacido de corazón limpio,
y de buena conciencia, y de fe no fingida,

XXVII. Esta piedra me dio la autoridad y el poder para no callar con mi boca.
Diciendome confiesa para salvacion.
Ro.10:10 Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa
para salvación.
XXVIII. Salia agua de esta piedra cuando mas sed de Dios tenia, Dios me mostro que
conociendo mi interior puedo deleitarme con gozo paz y amor.
Is.48:21 No tuvieron sed cuando los llevó por los desiertos; les hizo brotar agua de la
piedra; abrió la peña, y corrieron las aguas.

XXIX. hijo mío, por cuanto no seguistes el camino de los impíos, viendo tu aflicción te
concedo el Derecho para que puedas seguir luchando con fortaleza.
Job.36:6 No otorgará vida al impío, Pero a los afligidos dará su derecho.

XXX. la mayoría de las piedras cuando uno las encuentra tiene que sacarle brillo, pero
esta piedra apareció Brillante ante mis ojos dándome a conocer que la ofrenda que traía a
Jehová, Dios la aceptaba por un corazón transformado.
Is.18:7 En aquel tiempo será traída ofrenda a Jehová de los ejércitos, del pueblo de
elevada estatura y tez brillante, del pueblo temible desde su principio y después,
gente fuerte y conquistadora, cuya tierra es surcada por ríos, al lugar del nombre de
Jehová de los ejércitos, al monte de Sion.

XXXI. esta piedra era sumamente fuerte para romper, y Dios la usa diciéndome, cuando
las cosas que Dios dice, no se perciben es porque el corazón todavía está Endurecido.
Mr.8:17 Y entendiéndolo Jesús, les dijo: ¿Qué discutís, porque no tenéis pan? ¿No
entendéis ni comprendéis? ¿Aún tenéis endurecido vuestro corazón?

XXXII. aquí me encontré con un trabajador igual que yo, el rompiendo por un lado, y yo
por el otro. Ambos encontramos una piedra, tomando la decisión de trabajar juntos, le
pedimos a Dios que íbamos a hacerlo si lo Permite.
He.6:3 Y esto haremos, si Dios en verdad lo permite.

XXXIII. trabajando juntos hasta encontrar la próxima piedra, tuve la experiencia de


doctrinale la fe que había recibido por medio del Espíritu Santo que me administraba
diciéndome, Persiste, persiste.
1Ti.4:16 Ten cuidado de ti mismo y de la doctrina; persiste en ello, pues haciendo
esto, te salvarás a ti mismo y a los que te oyeren.

XXXIV. Nos separamos excavando cada quien por su lado y cuando encontré otra piedra,
era la confirmación de aquella administración hablando a mi vida con estas palabras.
Reprende con autoridad.
Tit.2:15 Esto habla, y exhorta y reprende con toda autoridad. Nadie te menosprecie.

XXXV. pronto me encontré donde la tierra no era tan sólida, como en otros
lugares.Ddonde la vista me fallaba, pero aún así, pude encontrar algo. La piedra de
Tristeza, la puse en mi mano incline mi rostro y orando a Dios, porque sentía que mis
ojos se consumían.
Sal.31:9 Ten misericordia de mí, oh Jehová, porque estoy en angustia; Se han
consumido de tristeza mis ojos, mi alma también y mi cuerpo.
XXXVI. En mi soledad he experimentado la voz de Dios y sus ilustraciones con visión
dándome a conocer que todo lo que nos rodea tiene su propósito en nuestra vida. Aquí
Dios me mostró la piedra de la Humildad. Que cuanto más honra aiga entre los hombres,
más humildad se manifestara.
Pr.15:33 El temor de Jehová es enseñanza de sabiduría; Y a la honra precede la
humildad.

XXXVII. Escarbando y escarbando segui a encontrar una piedra más grande que todas
que me atrajo, al analizarla era el mismo Dios hablandome, diciéndome esta es la piedra
del fundamento la cual nadie puede cambiar, representando a nuestro señor Jesucristo.
1Co.3:11 Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual
es Jesucristo.

XXXVIII. esta piedra que sale del fondo de las profundidades de la tierra adorno mi
corazon como si fuece el mismo lugar santisimo.
1R.6:19 Y adornó el lugar santísimo por dentro en medio de la casa, para poner allí
el arca del pacto de Jehová.

XXXIX. De repente me encontre con dos varones mientras escarbaba y les mostre mi
hospitalidad como buen ser humano, pero desaparecieron, dejandome saber que no eran
como yo pensaba.
He.13:2 No os olvidéis de la hospitalidad, porque por ella algunos, sin saberlo,
hospedaron ángeles.

XL. Cuando mas sucio me encontraba me encontré una piedra que podía reflejar mi
vestimenta y darme el derecho de poder usarla para lavar no solamente mi ropa, sino todo
mi ser.
Ap.22:14 Bienaventurados los que lavan sus ropas, para tener derecho al árbol de la
vida, y para entrar por las puertas en la ciudad.

XLI. De momento me sentí angustiado por la misma soledad, pero orando a Dios me
confortada conociendo mi clamor al sentir su oído inclinado a mi.
Sal.18:6 En mi angustia invoqué a Jehová, Y clamé a mi Dios. El oyó mi voz desde su
templo, Y mi clamor llegó delante de él, a sus oídos.

XLII. Después de encontrar tantas piedras administrando a mi vida no sabía por dónde
comenzar y aquí justamente encontré la piedra de servicio donde me capacitó para poder
llevar las buenas nuevas del evangelio.
Ro.12:6 De manera que, teniendo diferentes dones, según la gracia que nos es dada,
si el de profecía, úsese conforme a la medida de la fe; Ro.12:7 o si de servicio, en
servir; o el que enseña, en la enseñanza; Ro.12:8 el que exhorta, en la exhortación;
el que reparte, con liberalidad; el que preside, con solicitud; el que hace
misericordia, con alegría.

XLIII. Poniendome a pensar en mi servidumbre hacia los demás encontré la piedra de la


piedad donde Dios confirmaba sus dones en vida para administrarlos.
1Ti.6:6 Pero gran ganancia es la piedad acompañada de contentamiento;

XLIV. No sabía la profundidad que había alcanzado pero llegué a escarbar donde el
resplandor de la misma presencia de Dios se manifestaba entre carbones ardientes.
2S.22:13 Por el resplandor de su presencia se encendieron carbones ardientes.

XLV. Al encontrar esta piedra me ayudó aclarar los pensamientos de la dispensación del
ministerio escondido desde los signos tendidos, la predestinación.
Ef.3:9 y de aclarar a todos cuál sea la dispensación del misterio escondido desde los
siglos en Dios, que creó todas las cosas; (Col.1:26,27)

XLVI. Esta piedra era tan brillante era una que me inculcaba temor hacia Dios, y pude
elevarla en el nombre de Jehová, para que pueblos y gente fuerte y conquistadora pueda
ser sometida a el aún estando bajo tierra y probablemente bajo ríos.
Is.18:7 En aquel tiempo será traída ofrenda a Jehová de los ejércitos, del pueblo de
elevada estatura y tez brillante, del pueblo temible desde su principio y después,
gente fuerte y conquistadora, cuya tierra es surcada por ríos, al lugar del nombre de
Jehová de los ejércitos, al monte de Sion.

XLVII. Esta piedra la línea a encontrar en la tierra prometida que fluye leche y miel, aquí
fue donde pude tener la primera celebración aún estando solas con Dios.
Ex.13:5 Y cuando Jehová te hubiere metido en la tierra del cananeo, del heteo, del
amorreo, del heveo y del jebuseo, la cual juró a tus padres que te daría, tierra que
destila leche y miel, harás esta celebración en este mes.

XLVIII. Cuando el desaliento llegó a mi vida pude encontrar esta piedra que me dio a
conocer que la fuerza y la dureza de nuestro corazón podría desacreditarnos ante su
presencia.
Job.41:22 En su cerviz está la fuerza, Y delante de él se esparce el desaliento.

IL. No es fácil enfrentar los problemas de este mundo, pero una tierra será consumida
gloriosamente con su poder es aquí que hay que enfrentar todo obstáculo, para tener
victoria. Esta piedra tenia dibujada la tierra en si misma.
Dn.11:16 Y el que vendrá contra él hará su voluntad, y no habrá quien se le pueda
enfrentar; y estará en la tierra gloriosa, la cual será consumida en su poder.

L. Esta piedra estaba asentada sobre otra más grande que la hacía iluminar, la facultad
que ella daba a conocer era de juzgar, el cual es el privilegio de vivir eternamente con
Cristo sentado a la diestra del Padre.
Ap.20:4 Y vi tronos, y se sentaron sobre ellos los que recibieron facultad de juzgar; y
vi las almas de los decapitados por causa del testimonio de Jesús y por la palabra de
Dios, los que no habían adorado a la bestia ni a su imagen, y que no recibieron la
marca en sus frentes ni en sus manos; y vivieron y reinaron con Cristo mil años.
LI. Al encontrar esta piedra me di cuenta que había recibido un golpe de mi parte, pude
recibir solamente un pedacito de ella, el cual era parte de mi galardón del fruto de mi
trabajo.
2Jn.1:8 Mirad por vosotros mismos, para que no perdáis el fruto de vuestro trabajo,
sino que recibáis galardón completo.

LII. Esta piedra me daba la autoridad de deseo recurrir la voz de su alabanza por
reconocerle en todos mis caminos y prosiguiendo al blanco de la soberana vocación.
Sal.66:8 Bendecid, pueblos, a nuestro Dios, Y haced oir la voz de su alabanza.

LIII. Cuando mas hambriento estaba pude encontrar esta piedra tan importante que me
ayudó a confíar en Dios, ya que estaba en densas profundidades, pude recibir la invitada
llamada para los alimentos de ángeles enviados por Dios para sobrevivir, aún estando
aislado.
2R.4:8 Aconteció también que un día pasaba Eliseo por Sunem; y había allí una
mujer importante, que le invitaba insistentemente a que comiese; y cuando él
pasaba por allí, venía a la casa de ella a comer.

LIV. Comienzo nuevamente mi labor, con mi pala y mi pico buscando tesoro escondido y
difícil de hallar. Después de haber perdido la cuenta cuántas piedras he podido encontrar,
me di cuenta que al seleccionar cada una de ellas fue una experiencia. Queriendo
atesorarlas todas veía que hay necesidad para compartirlas con otros. Esta piedra me dio a
entender que de Jehová es la decisión, entre aquellas de las cuales he de compartir y con
las que me debo de quedar.
Pr.16:33 La suerte se echa en el regazo; Mas de Jehová es la decisión de ella.

LV. Al seguir escarbando llegué a otro lugar, donde había una variedad de piedras
preciosas para escoger, muchas de ellas van a parar en el comercio pero éstas que estoy
encontrando me hace pensar que todo debe ser dedicado a Jehová, porque es la única
manera que se pueden consagrar sin perder su valor.
Lv.27:28 Pero no se venderá ni se rescatará ninguna cosa consagrada, que alguno
hubiere dedicado a Jehová; de todo lo que tuviere, de hombres y animales, y de las
tierras de su posesión, todo lo consagrado será cosa santísima para Jehová.

LVI. Cuando llegué aquí encontré una y piedra que sin darme cuenta se me cayó del
bolsillo y fue a dar a un pozo profundo lleno de lodo. No obstante me doy cuenta de su
valor y comienzo la obra de rescate acortando me que exponía mi vida como Cristo lo
hizo por mi .
1Ti.2:6 el cual se dio a sí mismo en rescate por todos, de lo cual se dio testimonio a su
debido tiempo.

LVII. Entre las piedras varían sus tamaños y colores. Esta piedra era rojiza al encontrarla,
fue la alegría de mi vida porque ese color me hizo pensar en la sangre de nuestro Señor
Jesucristo al reconciliar al mundo por medio de su sangre y su amor.
Col.1:20 y por medio de él reconciliar consigo todas las cosas, así las que están en la
tierra como las que están en los cielos, haciendo la paz mediante la sangre de su
cruz.

LVIII. Lo más difícil de olvidar son las malas experiencias. Siempre he sabido que el
único que olvida sin recordar es Dios mismo. Esta piedra no tenía que ser pulida para
notar su trasparencia. Dando me cuenta que su perdón es un don irrevocable. Para
llenarnos de paz y sentirnos contentos por su grande y misericordia.
Mi.7:18 ¿Qué Dios como tú, que perdona la maldad, y olvida el pecado del
remanente de su heredad? No retuvo para siempre su enojo, porque se deleita en
misericordia.

LIX. La sabiduría humana siempre a tomado un papel de discussion, cuando uno


encuentra en estas profundidades, no piensa a quien se le perdió. Sólo se sabe que es un
tesoro escondido. Muchas opiniones nos hacen contender buscándole otra dimensión de
la que tiene. La piedra en su naturaleza es tal y como Dios la ha creado. Ésta es una
maravilla.
Ro.14:1 Recibid al débil en la fe, pero no para contender sobre opiniones.

LX. Muchas veces en lo que es difícil es creer, que lo que hemos encontrado
prácticamente no nos lo merecemos. El esfuerzo que se realiza para encontrar algo
profundo se podría estar venciendo hasta el mismo reto personal. Decir yo puedo cuando
no puedes es vencer al mundo. Manifestar que Jesús es el hijo de Dios es vencer al
mundo. La piedra rechazada que desecharon los edificadores.
1Jn.5:5 Quién es el que vence al mundo, sino el que cree que Jesús es el Hijo de
Dios?

LXI. al encontrar esta piedra pude darme cuenta de el discernimiento que Dios ha
depositado en mi vida porque a pesar que parecía ser una piedra del mucho valor por su
apariencia comparando la con las demás todo era falso.
Éxodo 20:16

LXII. Una vez más sometiéndome a las profundidades de la tierra con mi pico y mi pala
buscando los tesoros escondidos bajo la tierra nunca pensé encontrar las columnas de la
tierra brillando como la plata. Esto me hizo pensar que la firmeza de la vida de una
persona viviendo en santidad es de mucho honor servirle a un Dios vivo.
1S.2:8 El levanta del polvo al pobre, Y del muladar exalta al menesteroso, Para
hacerle sentarse con príncipes y heredar un sitio de honor. Porque de Jehová son las
columnas de la tierra, Y él afirmó sobre ellas el mundo.

LXIII. Las cosas verdaderas muchas veces aparentan ser falsas, encontrar una piedra de
sumo valor no es tan fácil, a pesar de todas las cosas han sido creadas con la voz de
Jehová no debemos dejar de pensar que si les dijo que fuesen, fue publicado para que
sean toda una realidad.
Is.48:3 Lo que pasó, ya antes lo dije, y de mi boca salió; lo publiqué, lo hice pronto, y
fue realidad.
LXIV. Al llegar a este lugar hubo un momento de confusión al no entender que esta
piedra no era para estudiar la naturalmente. Hay cosas que le pertenecen a lo natural y
hay cosas que le pertenecen a lo espiritual. Esta piedra tenía mucho que decir y una de
ellas era saber discernir entre el bien y el mal.
1Co.2:14 Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios,
porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir
espiritualmente.

LXV. Escarbando y escarbando pude lograr entrar a un lugar tan espacioso que me
brindaba las riquezas del mundo escondido. Estas piedras me ayudaron a sentir me libre
de tomar cualquier rincón para poder darle gracias a Dios por mostrar el agrado que él
tiene para conmigo en trabajar en su obra.
Sal.18:19 Me sacó a lugar espacioso; Me libró, porque se agradó de mí.

LXVI. La sabiduría sobre humana que Dios da, es la recompensa por haber buscado el
temor de Dios sobre todas las cosas, esta piedra era una nueva esperanza de la cual nunca
será cortada de mi vida.
Pr.24:14 Así será a tu alma el conocimiento de la sabiduría; Si la hallares tendrás
recompensa, Y al fin tu esperanza no será cortada.

LXVII. Al encontrar esta piedra pude darme cuenta de el discernimiento que Dios ha
depositado en mi vida porque a pesar que parecía ser una piedra del mucho valor por su
apariencia comparando la con las demás todo era falso.
Ex.20:16 No hablarás contra tu prójimo falso testimonio.

LXVIII. Esta piedra tenía una inscripción en cada lado, rara difícil de interpretar,
teniendo en sí ocho lados, pareciera como un rompecabezas de letras todas confusas y al
revés "A.R.T.A,L.O.D.I" al componer las componía la palabra "IDOLATRA" era Dios
hablándome de tal forma para cuidarme de mis amistades.
1Co.5:11 Más bien os escribí que no os juntéis con ninguno que, llamándose
hermano, fuere fornicario, o avaro, o idólatra, o maldiciente, o borracho, o ladrón;
con el tal ni aun comáis.

LXIX. Esta piedra me hizo reflexionar las veces que me he negado a seguir a Dios
porque todo aquel que abandona no tiene temor de Dios. La ayuda que uno recibe cuando
uno está pasando por la prueba recibe los ánimos de sus compañeros. Asimismo Dios me
mostró que en este lugar aún estando solo me consuela su Omnipotencia.
Job.6:14 El atribulado es consolado por su compañero; Aun aquel que abandona el
temor del Omnipotente.

LXX. Esta piedra fue hallada cuando recibí la noticia del fallecimiento de unos de mis
seres queridos. Era una piedra que estaba partida en dos un pedazo más grande que el
otro. El pequeño pedazo me dio a entender que era el que nace sin saber de dónde ha
salido, parecía haberse consumido al estar separada de la piedra misma.
Nm.12:12 No quede ella ahora como el que nace muerto, que al salir del vientre de
su madre, tiene ya medio consumida su carne.

LXXI. Muchas cosas eran difíciles para mi entender las, pero esta piedra dijera cómo
saborear un fruto desconocido. Al encontrar la me doy cuenta que no todo se sabe, pero si
se puede llegar a conocer. Estaba recibiendo sabiduría del bien y el mal.
Gn.3:5 sino que sabe Dios que el día que comáis de él, serán abiertos vuestros ojos, y
seréis como Dios, sabiendo el bien y el mal.

LXXII. El pasado mucho tiempo escarbando en las profundidades de la tierra como un


buen obrero, y a medida que voy encontrando piedras preciosas, Dios viene hablando a
mi vida. Al llegar a este lugar, encontré una piedra que me hizo retroceder la memoria,
diciendo yo me acuerdo hoy de mis faltas. Las veces que le he fallado a Dios, a mi
familia, a mis amigos y a la misión de llamado celestial.
Gn.41:9 Entonces el jefe de los coperos habló a Faraón, diciendo: Me acuerdo hoy
de mis faltas.

LXXIII. Antes de seguir escarbando, en mi mente voy meditando, ¿que es lo que


encontraré, cómo será? Buscaré hasta encontrarlo. Poniendo todos los esfuerzos, los
logro. Al encontrar esta piedra en esta pieza no tenía otro deseo más lindo de llegar a la
casa de Dios y dar gracias por mi vida, y así contemplar su hermosura por sus favores.
Sal.27:4 Una cosa he demandado a Jehová, ésta buscaré; Que esté yo en la casa de
Jehová todos los días de mi vida, Para contemplar la hermosura de Jehová, y para
inquirir en su templo.

LXXIV. En el fondo de esta tierra y muchas piedras por conquistar. Y cada uno de ellas
tiene su valor y su dimensión. Estas piedras hablan confirmando el consejo de Dios. Por
tanto conociendo la compasión de cómo Dios aplica su justicia, clamaré todos los días de
mi vida por su clemencia hacia mi alma, así me cueste la vida.
Is.63:9 En toda angustia de ellos él fue angustiado, y el ángel de su faz los salvó; en
su amor y en su clemencia los redimió, y los trajo, y los levantó todos los días de la
antigüedad.

LXXV. Encontrar esta piedra para mí fue recibir una lección de la vida. La multitud de
pecados y maldad ensucian la imagen del hombre. Mientras que esta piedra que he
encontrado por más sucia y llena de lodo que se encuentre aguardado su integridad en la
actualidad de su pureza. Ruego a Dios que me transforme cada día para estar delante de
él, todos los días de la eternidad.
Sal.41:12 En cuanto a mí, en mi integridad me has sustentado, Y me has hecho estar
delante de ti para siempre.

LXXVI. Enviare lluvia del cielo son latente es, por medio del dedo de Dios. Hacerlas
llegar hasta este lugar de profundidad es la responsabilidad de la tierra. Esta piedra
preciosa me mostró que Dios está por enviar mi vida a conquistar las naciones por medio
de su evangelio y su divina gracia de poder.
Dt.28:12 Te abrirá Jehová su buen tesoro, el cielo, para enviar la lluvia a tu tierra en
su tiempo, y para bendecir toda obra de tus manos. Y prestarás a muchas naciones,
y tú no pedirás prestado.

LXXVII. Esta piedra era un carbón encendido. Tuve la experiencia de tocar esta piedra
sin quemarme con el fuego que tenía. Las flamas que salían se penetraban a mi corazón,
dándome a conocer la clase de ministro que Dios estaba haciendo conmigo. Los
mensajeros son llevados por el viento de un lado a otro. El fuego espiritual no hay viento
ni agua que pueda apagarlo porque es la unción del Espíritu Santo.
Sal.104:4 El que hace a los vientos sus mensajeros, Y a las flamas de fuego sus
ministros.

LXXVIII. Hasta hoy ninguna piedra que encontrado a sido igual que otra. Pero si, las
piedras que encuentro que son como tablas me recuerdan siempre de guardar su palabra.
La única manera que se puede guardar la palabra en el corazón es recitar una y ponerla
por obra. Guardar la palabra es obedecer en todo momento los mandamientos de Dios.
Sal.119:101 De todo mal camino contuve mis pies, Para guardar tu palabra.

LXXIX. Del corazón habla la boca nuevamente volviendo mi labor escarbando


profundidad no sabiendo que encontraría, pero me disponía a encontrar una piedra que
pudiera reflejar mi rostro en ella. Declaraba y declaraba aquí hay abundancia y el
momento menos estado encontré una piedra de plata de formada. Dándole golpe y golpe
la pude pulir que parecía que había sacado de ella un escudo de plata. Era el mismo Dios
diciéndome yo el todopoderoso seré tu defensa.
Job.22:25 El Todopoderoso será tu defensa, Y tendrás plata en abundancia.

LXXX. Haciendo un camino de la nada para llegar a otro extremo, iba con la seguridad
confiando de encontrar lo escondido. Esta piedra demostró que el acceso de nuestra fe es
la seguridad misma de llegar hacia la presencia de Dios.
Ef.3:12 en quien tenemos seguridad y acceso con confianza por medio de la fe en él;

LXXXI. La mayoría de mis labores han sido trabajos que los he tenido que hacer
personalmente. Pero aquí nos encontramos con varios amigos trabajadores haciendo la
misma obra no encontré nada pero fue más que una bendición, porque ellos me
proveyeron una piedra preciosa entre todos para que formará parte de mi tesoro. Sus
palabras alentadoras fueron acepta, y yo dije amén.
Jer.42:2 y dijeron al profeta Jeremías: Acepta ahora nuestro ruego delante de ti, y
ruega por nosotros a Jehová tu Dios por todo este resto (pues de muchos hemos
quedado unos pocos, como nos ven tus ojos),

LXXXII. Dejando mis compañeros, fue lo más triste aquel día porque mi labor era seguir
escarbando a profundidad. Conocer que la vida no es fácil le pedía a Dios con ruegos y
llantos una simple oración "acércate a mi alma" porque conocía que donde estaba
escarbando había llegado a territorio de enemigos.
Sal.69:18 Acércate a mi alma, redímela; Líbrame a causa de mis enemigos.
LXXXIII. Esta piedra era tan grande que era imposible cargarla. Pero sirvió para algo
porque pude usar la de almohada para mi cabeza para poder descansar y escuchar lo que
Dios aconseja aún en las noches enseñándole a mi conciencia.
Sal.16:7 Bendeciré a Jehová que me aconseja; Aun en las noches me enseña mi
conciencia.

LXXXIV. He pasado mucho tiempo escarbando en las profundidades de la tierra como


un buen obrero, y a medida que voy encontrando piedras preciosas, Dios viene hablando
a mi vida. Al llegar a este lugar, encontré una piedra que me hizo retroceder la memoria,
diciendo “yo me acuerdo hoy de mis faltas”. Las veces que le he fallado a Dios, a mi
familia, a mis amigos y a la misión del llamado celestial.
Gn.41:9 Entonces el jefe de los coperos habló a Faraón, diciendo: Me acuerdo hoy
de mis faltas.

LXXXV. Antes de seguir escarbando, en mi mente voy meditando, ¿que es lo que


encontraré, cómo será? Buscaré hasta encontrarlo. Poniendo todos los esfuerzos. Lo
logro. Al encontrar esta piedra en esta pieza no tenía otro deseo más lindo de llegar a la
casa de Dios y dar gracias por mi vida, y así contemplar su hermosura por sus favores.
Sal.27:4 Una cosa he demandado a Jehová, ésta buscaré; Que esté yo en la casa de
Jehová todos los días de mi vida, Para contemplar la hermosura de Jehová, y para
inquirir en su templo.

LXXXVI. En el fondo de esta tierra hay muchas piedras por conquistar. Y cada uno de
ellas tiene su valor y su dimensión. Estas piedras hablan confirmando el consejo de Dios.
Por tanto, conociendo la compasión de cómo Dios aplica su justicia, clamaré todos los
días de mi vida por su clemencia para mi alma, así me cueste la vida.
Is.63:9 En toda angustia de ellos él fue angustiado, y el ángel de su faz los salvó; en
su amor y en su clemencia los redimió, y los trajo, y los levantó todos los días de la
antigüedad.

LXXXVII. Encontrar esta piedra para mí, fue recibir una lección de la vida. La multitud
de pecados y maldad ensucian la imagen del hombre. Mientras que esta piedra que he
encontrado por más sucia y llena de lodo que se encuentre aguardado su integridad de su
pureza. Ruego a Dios que me transforme cada día para estar delante de él, todos los días
de la eternidad integramente.
Sal.41:12 En cuanto a mí, en mi integridad me has sustentado, Y me has hecho estar
delante de ti para siempre.

LXXXVIII. Enviare lluvia del cielo son latente es, por medio del dedo de Dios. Hacerlas
llegar hasta este lugar de profundidad es la responsabilidad de la tierra. Esta piedra
preciosa me mostró que Dios está por enviar mi vida a conquistar las naciones por medio
de su evangelio y su divina gracia de poder.
Dt.28:12 Te abrirá Jehová su buen tesoro, el cielo, para enviar la lluvia a tu tierra en
su tiempo, y para bendecir toda obra de tus manos. Y prestarás a muchas naciones,
y tú no pedirás prestado.
IXC. Esta piedra era un carbón encendido. Tuve la experiencia de tocar esta piedra sin
quemarme con el fuego que tenía. Las flamas que salían se penetraban a mi corazón,
dándome a conocer la clase de ministro que Dios estaba haciendo conmigo. Los
mensajeros son llevados por el viento de un lado a otro. El fuego espiritual no hay viento
ni agua que pueda apagarlo porque es la unción del Espíritu Santo.
Sal.104:4 El que hace a los vientos sus mensajeros, Y a las flamas de fuego sus
ministros.

XC. Hasta hoy ninguna piedra que he encontrado a sido igual que otra. Pero si, las
piedras que encuentro, que son como tablas me recuerdan siempre de guardar su palabra.
La única manera que se puede guardar la palabra en el corazón es, meditar cada una, y
ponerla por obra. Guardar la palabra es obedecer en todo momento los mandamientos de
Dios.
Sal.119:101 De todo mal camino contuve mis pies, Para guardar tu palabra.

XCI. Nuevamente comienzo mi labor desde temprano en la mañana buscando cada


piedra con aquel amor ferviente que me llena de todo gozo. Por tanto esta piedra me
mostró aquel amor ferviente es aquel que nunca falla que convence y se compromete.
1P.4:8 Y ante todo, tened entre vosotros ferviente amor; porque el amor cubrirá
multitud de pecados.

XCII. Muchas de las piedras que vengo encontrando han sido de exhortación, en esta
profundidad encuentro la piedra que me hace pensar en la generosidad para con los
demás y así preparar el camino hacia los demás.
2Co.9:5 Por tanto, tuve por necesario exhortar a los hermanos que fuesen primero a
vosotros y preparasen primero vuestra generosidad antes prometida, para que esté
lista como de generosidad, y no como de exigencia nuestra.

XCIII. Siempre estaba pendiente en que las piedras me transmitan el mensaje para mi,
pero esta piedra me da reconocimiento de recompensa de que siempre me he propuesto
ayudar al desamparado al pobre y menesteroso.
Sal.10:14 Tú lo has visto; porque miras el trabajo y la vejación, para dar la
recompensa con tu mano; A ti se acoge el desvalido; Tú eres el amparo del huérfano.

XCIV. Encontrar piedras es un arduo trabajo y cosa de suerte, con mi pico y mi pala
escarbe poco poco, lo que notaba verse como un muro con un resplandor de bronce esto
me decía que Dios me guardaba rodeado de murallas fortificadas porque él es el Castillo
Jer.15:20 Y te pondré en este pueblo por muro fortificado de bronce, y pelearán
contra ti, pero no te vencerán; porque yo estoy contigo para guardarte y para
defenderte, dice Jehová.

XCV. Al llegar este lugar no fue una tarea tan fácil, pero encontré los medios porque
sabía que había algo escondido y tenía que hallarlo, al encontrar esta piedra de gran valor
me doy cuenta que soy un solo pobre. Aquí es donde me pongo a pensar que ambos
hemos sido creados. La riqueza y la pobreza se encontraron.
Pr.22:2 El rico y el pobre se encuentran; A ambos los hizo Jehová.
XCVI. Lo primero que uno hace cuando encuentra una piedra se pone a observar si hay
alguien que lo está viendo pero esta vez tuve una visión y me maravilló porque oi una
voz acercándose diciéndome no tengas miedo, te lo mereces.
Hch.7:31 Entonces Moisés, mirando, se maravilló de la visión; y acercándose para
observar, vino a él la voz del Señor:

XCVII. La mayoría de los días que trabajo comienzo muy temprano y término muy
tarde. Esta piedra me hace reflexionar que así como se busca temprano un tesoro
escondido también se puede encontrar a Dios, no importando el tiempo ni la ahora.
Pr.8:17 Yo amo a los que me aman, Y me hallan los que temprano me buscan.

XCVIII. Todo lo que uno encuentra viene a ser propio, hay cosas que uno las encuentra y
tienen dueño, pero lo que uno encuentra, realmente no tiene nombre, pero lo que se halla
y tienen dueño se tiene que regresar asi como se recibe. Dios no le da nada a nadie sino
fuere del cielo.
Jn.3:27 Respondió Juan y dijo: No puede el hombre recibir nada, si no le fuere dado
del cielo.

XCIX. Las piedras que se encuentran para exhortación son para la vida cotidiana.
Aquellas piedras que se encuentran y llevan un tipo de promesa son para nuestro futuro.
Esta piedra me decía pronto vendré a vosotros.
Jn.14:18 No os dejaré huérfanos; vendré a vosotros.

C. Muchas de las piedras se rompen y se desmenuzan, pero esta piedra era


indestructible, era como si Dios, le había dado capacidad, desde antes de la creación del
mundo, para que tuviera una vida completa.
He.7:16 no constituido conforme a la ley del mandamiento acerca de la
descendencia, sino según el poder de una vida indestructible.

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