Artículo publicado en papel por la “Revista Patología de la rodilla”
número 7, Junio de 1999
ARTROPLASTIA DE RODILLA: NUESTRA EXPERIENCIA
Cursos de instrucción SEROD
Autor: A. Maestro y E. Guerado
Servicio de COT, Hospital de Cabueñes, Gijón - Universidad de OVIEDO.
Servicio de COT, Hospital Costa del Sol. Marbella MALAGA
RESUMEN
La artroplastia de rodilla ha experimentado un notorio
incremento en sus indicaciones en los últimos años.
La indicación absoluta son aquellos pacientes mayores
de 65-70 años con marcado dolor y bajas demandas
funcionales en los que el tratamiento conservador ha
fracasado. Son contraindicaciones absolutas la infección
activa, la insuficiencia del aparato extensor y la
artrodesis homolateral asintomática. Son
contraindicaciones relativas la artropatia neuropática,
la osteomielitis previa, la historia de problemas
vasculares previos a la
cirugía y los requerimientos mecánicos anómalos. La
artroplastia unicompartimental esta indicada en aquellos
casos de artrosis unicompartimental sin importantes
signos patelares y con estabilidad ligamentosa.
En el presente trabajo se muestran los principios
técnicos de la artroplastia total de rodilla. Detalles
importantes son la colocación o preparación del
paciente, la exposición quiúrgica, la alineación de los
componentes, el balance de partes blandas y las
características de los elementos: corte, cementación
y colocación. El tratamiento postoperatorio es también
muy importante desde el punto de vista del control del
sangrado y de la hemostasia hasta el cierre y posterior
rehabilitación. Problemas especiales son la corrección
de las deformidades en varo, valgo y flexo. Las
complicaciones, en ocasiones serias, exigen una
rigurosa profilaxis, especialmente los protocolos de
infección y anticoagulación.
Palabras clave
Artroplastia, rodilla, técnica.
ABSTRACT
The knee arthroplasty has shown an important increase
of the indications on the last years. The absolute
indications are patients older than 65-70 years with
important pain and lower functional requirements where
the conservative treatment has failed. As absolute
contraindications are the active sepsis, the extensor
mecanism lack and the asymptomatic homolateral
arthrodesis. Are relatif contraindications the neuropathic
arthropathy, previous osteomyelitis, the history of
vascular problems before de surgery and anomaly
mechanical requirements. The unicompartimental
arthroplasty is made on cases with unicompartimental
arthritis without important patelar signs and with
ligament stability.
On these paper is shown the technical principles of
the total knee arthroplasty. Fundamental details are
the patient position or preparation, the surgical
exposure, the alignment of the components, the soft
tissue balance and the elements characteristics: cut,
cementation and aplication. Postoperative treatment
is also important from a point of view of the hemostasis
and bleeding control till the close and posterior
rehabilitation. Special problems are the correction of
varus, valgus and flexus deformities. The complications,
sometimes serious, demand rigorous prophylaxis,
specially the infection and anticoagulation protocols.
Key words
Arthroplasty, knee.
INDICACIONES Y CONTRAINDICACIONES
El aumento de la expectativa de vida media propiciado
por el desarrollo tecnológico ha hecho que la demanda
de artroplastias de la rodilla haya sufrido un notorio
incremento, con el objetivo de que desaparezca el dolor
y se recupere la función. Existen dos tipos de artroplastia
de rodilla: la artroplastia unicompartimental (AU) y la
artroplastia total (ATR) bi o tricompartimental, con
indicaciones y contraindicaciones diferentes en cada
caso.
Artroplastia tricompartimental
El candidato ideal lo representa un paciente mayor de
65 años, con escasas demandas funcionales, dolor
grave e invalidante para las actividades diarias,
limitación funcional acompañada de inestabilidad y
deformidad articular progresiva tras fracaso del
tratamiento conservador médico?farmacológico (AINEs
y/o los soportes ortóticos simples) y en el que no hay
lugar para otras indicaciones quirúrgicas. Gonartrosis
primaria, artritis reumatoide, artropatías inflamatorias,
gonartrosis postraumática y patología tumoral
constituyen la etiología de estas alteraciones, siendo
la infección activa, la insuficiencia del aparato extensor
y la artrodesis unilateral bien tolerada contraindicaciones
absolutas. La artropatía neuropática, la osteomielitis
previa, la alteración vascular y las solicitaciones
articulares anómalas de tipo funcional son
contraindicaciones relativas.
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Artroplastia unicompartimental
Representa el paso intermedio entre la osteotomía
valguizante de tibia y la artroplastia total. Su indicación
se sitúa en el dolor y degeneración localizados en un
único compartimento, ausencia de síntomas patelares
significativos y estabilidad ligamentosa. Sus objetivos
persiguen corregir el eje de la extremidad resecando
las superficies articulares anómalas y, lo que resulta
más difícil, restablecer el eje de rotación entre implante
femoral y superficie de deslizamiento tibial.
Contraindicaciones son la degeneración cartilaginosa
y/o ligamentosa en más de un compartimento, artrosis
fémoro-patelar, lesión aguda o crónica (degenerativa)
de al menos un ligamento cruzado, deformidades
angulares en varo o valgo mayores de 20 grados y
flexos de rodilla mayores de 15 grados. En la actualidad,
la gonartrosis por hipercorrección tras osteotomía
valguizante es una contraindicación muy controvertida.
La indicación de la AU viene determinada por lo difícil
de encontrar el caso clínico ideal: paciente joven, lesión
aislada, buen estado de dos compartimentos, estabilidad
de ambos ligamentos cruzados y deformidades
articulares no muy pronunciadas.
PRINCIPIOS TÉCNICOS DE IMPLANTACIÓN
1. Preparación
Extremidad contralateral en flexión?abducción?rotación
externa, alejada del campo, permitiendo al equipo
quirúrgico acercarse más al paciente. Para esta posición
es muy útil utilizar mesas de tablero intercambiable
sobre columna fija que permitan retirar la parte de
tablero que no ocupa la extremidad contralateral. Un
pequeño saco en la nalga homolateral rota ligeramente
la pelvis y deja la rótula al cénit. La isquemia es
indispensable para una técnica adecuada de
cementación; sin embargo, puede provocar efectos
deletéreos. Algunos trabajos llegan a asegurar que se
producen alteraciones celulares irreversibles a los 40
minutos, con 90 minutos de tiempo máximo aceptado.
La protección del equipo quirúrgico con batas y botas
impermeables, dobles guantes y ¡gafas! es esencial en
esta artroplastia. Además de los flujos de líquidos
(sangre y sueros de lavados) durante los cortes óseos,
se desprenden multitud de partículas que alcanzan al
equipo quirúrgico.
2. Exposición adecuada
Las incisiones cutáneas deberán preservar la
vascularización cutánea, evitando amplios
despegamientos subcutáneos. El borde lateral de la
incisión es siempre más hipóxico que el medial. El
abordaje de las superficies óseas, presenta hoy en día
diferentes posibilidades, que básicamente son defendidas
por las distintas escuelas quirúrgicas: la clásica
artrotomía anteromedial dejando un colgajo de cápsula
medial perirrotuliana, la artrotomía recta prerrotuliana
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con despegamiento capsular de la rótula y los abordajes
más recientes donde se mejora la estabilidad patelar,
se disminuye el tiempo de recuperación funcional del
cuádriceps y el dolor postoperatorio, como son el
subvastus, bajo el vasto interno, y el midvastus, con
apertura del mismo en el sentido de sus fibras. Los
casos de gran dificultad de exposición o rigidez requieren
la reclinación distal del cuádriceps de Coombs?Adams
o su propio recorte. En general se deben utilizar aquellos
abordajes habituales para el cirujano, dejando los más
agresivos para las ocasiones más complejas.
3. Disección
Cuidado con lesiones ligamentosas: extirpar los
meniscos a través del muro, no por fuera, sobre todo
el menisco interno que conforma una misma estructura
con el ligamento lateral interno. Cuidado con el LCP:
en los modelos donde se preserva, hacerle una caja
ósea antes de cortar los platillos. De este modo se
observa el paso de la sierra antes de penetrar su
inserción ósea en la tibia. Cuidado con la lesión del
tendón poplíteo, ya que existe el riesgo de subluxación
fémoro-tibial por inestabilidad rotatoria. Su posible
indicación de resección por una deformidad rotatoria
externa debe llevar aparejada la posibilidad de tener
que insertar una artroplastia semiconstreñida en su
diseño total o, al menos, en los platillos. Cuidado con
la excesiva retirada de osteofitos pericondíleos. La
mayoría de las artroplastias pueden presentar diferencias
significativas de tamaño entre los componentes
correlativos. Por ejemplo, un tamaño de componente
femoral puede resultar pequeño y, sin embargo, el
siguiente puede ser grande. En los casos donde los
osteofitos pericondíleos sean muy grandes se puede
aprovechar para que el implante apoye parcialmente
en los osteofitos estables y de este modo conseguir
un implante "a medida"; sin embargo, los osteofitos
deben ser duros y estables, ya que es negativo el hecho
de que puedan debilitarse, desprenderse y
consecuentemente aflojar el implante.
4. Alineación
Al igual que la artropatía degenerativa se desarrolla
con mayor incidencia ante desalineación del miembro,
el mayor número de fracasos y su precocidad está en
relación directa con la desalineación de los
componentes. En el plano A?P el corte femoral debe
hacerse entre 5 y 7 grados de valgo y el tibial en 0
grados (eje de la extremidad). El componente femoral
debe tener 3?7 grados de rotación externa en relación
al eje biepicondíleo y perpendicular a su eje diafisario,
mientras que el tibial no deberá rotarse, pero sí
reproducirá la inclinación posterior normal de 4?7
grados, muy importante, sobre todo, en los implantes
que respetan el ligamento cruzado posterior. Existen
guías intra o extramedulares, debiendo tener una serie
de precauciones con cada tipo, como son: la localización
lo más precisa posible del punto de entrada del canal
endomedular, el lavado del mismo previo a la introducción
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de la guía para evitar microembolismos grasos y recordar
(cuando se usan guías extramedulares) que el eje de
carga de la tibia no es en el punto medio del eje
bimaleolar del tobillo, sino en el tercio medio de este
eje, que a su vez presenta 25 grados de rotación externa.
En las guías extramedulares hay que tener especial
cuidado cuando los pacientes son muy obesos, ya que
pueden ocultar con facilidad el trayecto real del hueso.
Según la literatura, las guías intra o extramedulares no
muestran diferencias en la alineación. Los implantes
rotulianos pueden colocarse mediante resección de la
superficie articular de la rótula o mediante simple. En
cualquier caso se debe dejar un mínimo de 12 mm de
grosor de hueso. Sabiendo que las posibilidades de
error por exceso o defecto de colocación del componente
femoral o tibial son: varo/valgo, flexión/extensión,
distal/proximal, medial/lateral y rotación
interna/externa, es decir 6 posibilidades de error para
cada componente, las posibilidades de mala colocación
de uno u otro componente son 36 y, sumadas ambas,
72. Si además se realiza una artroplastia
tricompartimental con implante rotuliano se añadirán
otras 9, lo que totaliza 81 posibilidades de error. Errores
frecuentes son el tamaño y la alineación. Medición de
la talla: cuidado con el giro de la plantilla en
flexum?recurvatum; cuando se coloca una plantilla de
patines para la medición del tamaño del componente
femoral, dependiendo del giro inadvertido en
flexum?recurvatum puede cometerse un error de hasta
un tamaño. Medición del valgo fisiológico: cuidado con
el apoyo de la plantilla en osteofitos: varo?valgo erróneo.
Al apoyar una plantilla sobre los cóndilos para introducir
una guía intramedular y realizar los cortes condíleos si
se apoya en osteofito se puede cortar poco hueso y
habrá un déficit de extensión que obligue a volver a
cortar más hueso.
5. Balance de partes blandas
De ello dependerá la movilidad y estabilidad del implante.
Las correcciones angulares en varo o valgo exigen
métodos de equilibrado de partes blandas diferentes,
con el principio básico de liberar la parte contracturada
o retensar la laxa. Al realizar el equilibrado de partes
blandas existe un claro conflicto con dos estructuras:
los ligamentos colaterales y el cruzado posterior.
Básicamente el principio del equilibrado se inicia por
los cortes óseos. La resección femoral distal influirá
en el equilibrado en extensión, la posterior de cóndilos
en flexión y la tibial proximal en flexión y extensión.
En la actualidad se vuelve a la utilización de tensores.
Corte femoral: Equilibrar e igualar espacios en flexión
y extensión, cuidando la alineación rotacional femoral
referida a la línea que une ambos epicóndilos. Corte
tibial: Se debe preservar la tibia proximal lo más posible
con polietilenos lo menos espesos posible, sabiendo
que 8 mm es el mínimo grosor para mantener la
transmisión de fuerzas a través del implante sin producir
el fracaso del mismo. Esto es independiente de la
afectación que produce la mayor o menor constricción.
Mantenimiento de la altura de la interlínea articular:
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esta influirá en la tensión de los ligamentos y en la
cinemática fémoro-patelar. Importante es conocer las
dimensiones del implante a utilizar y reconocer las
referencias de la interlínea (1 cm sobre la cabeza del
peroné y 1,5 cm bajo el polo distal de la rótula).
Sorprendentemente, no hay diferencias entre realizar
los cortes con plantillas de ranura o sin ella.
6. Sierra
La hoja de sierra es importante: un metal de mala
calidad soltará partículas y se desafilará, los dientes
divergentes cortan mejor, pero deben mantenerse en
el mismo plano de la lámina, la hoja debe tener una
longitud y anchura para realizar el corte de una sola
vez en una dirección para el platillo medial y otra para
el lateral. Es deseable una hoja gruesa, ya que las finas
se moldean ante las zonas de hueso muy escleroso y
crean un corte desigual.
7. Cementación
Controvertida si se hacen perforaciones en el hueso
subcondral en las zonas muy esclerosas. Tiene la ventaja
teórica de que el cemento se ancla mejor, pero otros
autores sostienen que se debilita el hueso,
microfracturándose y laminando el cemento. Siempre
verificar la precisión de los cortes con componentes
de prueba, ya que los definitivos se manchan de sangre
con la consiguiente dificultad del cemento para
adherirse. La preparación del hueso también ofrece
varias posibilidades, siendo la irrigación pulsátil la mejor
para eliminar detritus y restos sanguíneos. Algunos
autores argumentan que al penetrar tanto el cemento
las cargas se transmiten directamente sobre el hueso
esponjoso en profundidad y se provoca osteopenia en
las capas más superficiales de hueso (stress shielding).
También es controvertido si el cemento debe ser de
alta o baja densidad.
8. Colocación de componentes
Cuidado, sobre todo en la artritis reumatoide, con la
falsa vía. La colocación del componente femoral también
debe ser muy cuidadosa si se ha realizado una muesca
supracondílea (riesgo de fractura). En los componentes
cementados la extensión de la rodilla durante el fraguado
del cemento es una maniobra que permite que los
componentes queden bien ajustados, pero puede
provocar que el femoral quede en recurvatum. La retirada
de detritus óseos y de cemento es fundamental para
evitar que se usure el polietileno, se fagociten las
partículas y se aflojen los componentes.
9. Hemostasia y control de sangrado
Si bien el manguito de isquemia con presión controlada
permite trabajar con más comodidad, minimizar la
pérdida hemática y cementar, siempre se debe liberar
para realizar una hemostasia cuidadosa. La transfusión
en las artroplastias cementadas es excepcional.
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10. Cierre
Se debe verificar el cierre de la piel en flexión de rodilla.
Para ello es muy útil pintar líneas transversales antes
de la incisión, que tras el cierre deben coincidir. Cuando
se han retensado los ligamentos colaterales es necesario
inmovilizar con vendaje enyesado o férulas prefabricadas
con o sin flejes durante un plazo de tres o cuatro
semanas, sin que existan problemas de movilidad por
este hecho.
CORRECCIÓN DE LAS DEFORMIDADES EN VARO
Es fundamental y difícil el equilibrado ligamentoso
correcto, con series donde el 40 por ciento de los casos
tienen algún desequilibrio ligamentoso y mayor
probabilidad de fracaso. Tanto la excesiva laxitud como
la tensión provocan efectos deletéreos de inestabilidad
o rigidez. Los casos leves de varo se corrigen
simplemente con los cortes óseos, siendo necesario
en los casos más graves el tratamiento de partes
blandas, según la siguiente corrección secuencial:
1. Exposición de tibia medial, resección del ligamento
cruzado anterior,
subluxación de metáfisis tibial, cajón anterior y rotación
externa.
2. Disección subperióstica de la inserción distal del LLI
con una pastilla perióstica para favorecer el cierre.
3. Liberación capsular posteromedial en progresiva
rotación externa de la pierna.
4. Liberación subperióstica de la pata de ganso con
una pastilla perióstica.
5. Desinserción del tendón reflejo del semimembranoso
como paso previo a la resección del cruzado posterior
y consiguiente utilización de un implante con mayor
constricción y estabilización posterior.
CORRECCIÓN DE LAS DEFORMIDADES EN VALGO
A excepción de la artritis reumatoide, el valgo es mucho
menos frecuente que el varo, asociándose también un
componentes de flexo. Los casos secundarios a secuelas
postraumáticas se suelen asociar a calidad ósea irregular
con distribución poco homogénea de las solicitaciones
mecánicas. Tras la corrección de los valgos mayores
de 12, así como del alargamiento del ligamento lateral
externo, aumenta la probabilidad de parálisis del ciático
poplíteo externo. Con la corrección del valgo el ligamento
lateral interno puede quedar laxo, debiendo retensarse
o, lo que es mejor, desinsertarse con una cascarilla
ósea que se reinserta más distalmente. La corrección
del flexo concomitante necesita de capsulotomía y
resección adecuada de fémur y tibia.
CORRECCIÓN DE LAS DEFORMIDADES EN FLEXO
El flexo también se combina con otras desalineaciones,
debiendo corregirse secuencialmente:
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1. Resección de superficies óseas y osteofitos
posteriores, evitando el hipoespaciado en extensión.
2. Liberación de la cápsula posterior y, secuencialmente,
del LCP proximal, distalmente o mediante incisiones
de descarga en el espesor del mismo.
3. Aumentar el corte femoral distal, que si bien facilita
el logro de la extensión completa, produce elevación
de la interlinea articular.
4. Si persiste la contractura, resección del LCP con la
consiguiente necesidad de implantes constreñidos.
5. Sección de descarga de la cápsula posterior.
6. Alargamiento de los gemelos, que exigirá implantes
con mayor constricción.
COMPLICACIONES DE LAS ARTROPLASTIAS DE RODILLA
1. Complicaciones biológicas
-Infección. Depende, entre otros factores, de la patología
concomitante, la profilaxis antibiótica, la técnica
quirúrgica y la estancia hospitalaria. Un protocolo
adecuado puede ser 2 g de cefazolina sódica antes de
la intervención o 600 mg de Clindamicina ante alergia
a betalactámicos con asociación de 500 mg de
Metronidazol en pacientes diabéticos
insulinodependientes.
-Tromboembolismo. Muy raro aunque frecuente de forma
subclínica, dependiendo también de muchos factores,
básicamente de patologías concomitantes,
inmovilización postoperatoria y ausencia de profilaxis
tromboembólica. La HBPM unidosis durante 1 mes es
muy efectiva, cómoda y con pocas complicaciones.
-Hemorragia. Con cirugía mediante isquemia, técnica
cuidadosa, hemodilución y criterios de transfusión
basados en alteraciones hemodinámicas más que en
cifras de hemoglobina, la transfusión autóloga u
homóloga debe ser actualmente excepcional.
-Lesión nerviosa. Lo más frecuente es la lesión del CPE
en las deformidades en valgo, siendo rara la del CPI?tibial
posterior por traumatismo directo.
-Lesión arterial. Especial atención a las arterias
geniculadas al liberar la retinácula patelar. Siempre
revisar tras la liberación de la isquemia y hacer
hemostasia en extensión y flexión.
-Embolismo graso. Muy raro aunque frecuente
subclínicamente.
-Distrofia simpáticorrefleja. Rara, teniendo especial
incidencia en determinados biotipos físicos y, sobre
todo, psíquicos. La movilización precoz es esencial.
2. Complicaciones técnicas
-Desalineación patelar. Se debe comprobar el
deslizamiento patelotroclear antes de cerrar los planos.
-Fracaso de los componentes. Debido a mala técnica
o indicación.
-Fracaso del aparato extensor. Cuidado en las
reintervenciones o tras osteotomía de realineación; en
estos casos, prácticamente siempre hay que realizar
alguno de los gestos técnicos antes referidos.
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-Metalosis. Muy rara, suele deberse a mala colocación -Anquilosis. Atrofia muscular.
de los componentes o desgaste del polietileno. -Artropatía neuropática. Mala calidad ósea y mal
-Aflojamiento. Inevitable pasado unos años, se debe resultado.
realizar un seguimiento anual; revisión inmediata ante
pérdida ósea, incluso indolora.
-Inestabilidad. Corrección quirúrgica inmediata. Tener
preparados componentes constreñidos y
semiconstreñidos.
Pérdida ósea. Injertos óseos mejor que cuñas metálicas
y mejor injerto autólogo que homólogo. Se pueden
colocar en un tiempo el injerto y en otro secundario la
artroplastia. O bien ambos gestos quirúrgicos en un
tiempo. En pérdidas óseas extensas preferible colocar
injerto extrarticularmente y, meses después, la
artroplastia.
-Fractura. Cuidado con las muescas supracondíleas.
Aconsejar llevar siempre un bastón para minimizar el
riesgo de caídas.
-Rigidez. Movilización bajo anestesia precozmente (antes
de un mes), después inefectiva.

3. Complicaciones específicas al implante

-Implantes unicompartimentales. No se posee

actualmente gran experiencia. Las complicaciones se
manejan pasando a artroplastia completa.
-Implantes semiconstreñidos. Mayor solicitación interfaz
implante?hueso o cemento?hueso y, por tanto, mayor
riesgo de aflojamiento, aunque pueden solucionar
grandes problemas de inestabilidad.
-Implantes constreñidos. Mayor riesgo de aflojamiento
por solicitación en interfaz con el hueso, así como
mayor riesgo de infección (aunque en las estadísticas
existe el sesgo de selección de colocarse mucho en
revisiones).

4. Complicaciones asociadas a patología concomitante

-Hemofilia. Indicación discutible por riegos elevados.

Vigilar la aparición de anticuerpos. Algunos autores
preconizan la artrodesis, pero en casos bilaterales es
imprescindible la artroplastia.
-Parkinson. Indicación discutible por diversos riesgos,
sobre todo caídas; contraindicación relativa en casos
muy evolucionados.
-Enfermedad de Paget. Hueso de calidad diferente;
cuidado con desalineaciones diafisarias.
-Osteonecrosis. Hueso con mala calidad parcelar.
-Artritis reumatoide. Hueso con mala calidad; mayor
riesgo de infección; peor resultado funcional si hay
afectación de extremidades superiores o generalizada
intensa.
-Psoriasis. No se conocen bien sus resultados.
-Patelectomía previa. Problema para aparato extensor.
-Obesidad. Mayor riesgo potencial (tromboembolismo,
aflojamiento, etc.).
-Diabetes mellitus. Mayor riesgo de infección; cuidado
con cicatrización.
-Osteotomía tibial previa. Mayor complejidad técnica,
cuidado con aparato extensor. Valorar 2 tiempos:
retirada de material y tiempo después artroplastia.
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BIBLIOGRAFÍA

Textos generales sobre artroplastias de rodilla

1. Callaghan, J. J.; Jennis, D. A.; Paprosky, W. D., y Rosenberg, A. G., Hip and Knee Reconstruction, Orthopaedic Knowledge
Update, American Academy of Orthopaedics Surgeons, Rosemont, 1995. Consiste en un volumen sobre una puesta
al día de la artroplastia de cadera y rodilla. Constituye un libro no muy voluminoso y ameno sobre estos temas.
Trae bibliografía comentada. Quizás adolece de transmitir fríamente lo que dice la literatura sin matizaciones y
opiniones del autor.

2. Insall, J. N., Surgery of the Knee, New York, Churchill Livingnstone, 1995. Es un libro clásico. Discute de forma
magistral los diversos aspectos de la patología de la rodilla. En este volumen el autor sí matiza la literatura con
su experiencia.

3. Krackow, K. A., The Technique of Total Knee Arthroplasty, St. Louis, The Mosby Company, 1990.Es un volumen que
incide fundamentalmente en los aspectos técnicos prácticos más que en los teóricos de las artroplastias de rodilla,
con opiniones y matizaciones del autor. Es un libro muy práctico.

Anatomía, Biomecánica y Diseño

4. Andriacchi, T.; Stanwyck, T., y Galante, J., “Knee biomechanics and total knee replacement”, en J Arthroplasty, 1, 1986,
pp. 211-217.Artículo clásico sobre biomecánica de la rodilla en general y de la artroplastia de rodilla. Mucho de
sus conceptos se consideran básicos en la actualidad.

5. Mikosz, R. P., y Andrianchi, T. P., “Anatomy and Biomechanics of the Knee, en J. J. Callaghan, D. A. Jennis, W. D. Paprosky
y A. G. Rosenberg, Hip and Knee Reconstruction, Orthopaedic Knowledge Update, American Academy of Orthopaedics
Surgeons. Rosemont, 1995, pp. 227-239.Consiste en una revisión general de la biomecánica de la rodilla en relación
a la artroplastia de rodilla con bibliografía comentada.

6. Munuera, L., “Principios básicos del diseño de las artroplastia totales de rodilla”, en Rev Ortop Traum, 36, 1992, pp.
77-81.Artículo general y básico sobre los principios generales en el diseño de las artroplastias de rodilla.

7. Ordóñez Parra, J. M., y Gómez Barrena, E., “Comportamiento del polietileno en la artroplastia total de rodilla”, en Rev
Ortop Traum, 37, 1993, pp. 110-115.Consiste en una revisión con aportaciones de la amplia experiencia de los
autores sobre la acción de la biomecánica de la rodilla sobre el polietileno y sus complicaciones.

8. Shoji, H.; Solomonow, M.; Yoshino, S.; D’Ambrosia, R., y Dabezies, E., “Influential factors for range of motion in total
knee arthroplasty”, en Orthopaedics, 13, 1990, pp. 643-649.En este artículo los autores analizan la influencia de los
cortes óseos sobre las partes blandas, base de la movilidad-estabilidad-rigidez.

Artroplastia unicompartimental

9. Chesnut, W. J., “Preoperative diagnostic protocol to predict candidates for unicompartimental Arthroplasty”, en Clin
Orthop, 273, 1991, pp. 146-150. Artículo muy interesante sobre precisión de las indicaciones de las artroplastias
unicompartimentales.

10. Jackson, M.; Saralngi, P. P., y Newman, J. H., “Revision total Knee arthroplasty: Comparison of outcome following
primary proximal tibial osteotomy or unicompartimental arthroplasty”, en J Arthroplasty, 9, 1994, pp. 539-542.Se estudian
los problemas que se presentan ante la colocación de una artroplastia total de rodilla según hayan recibido
anteriormente osteotmía tibial o artroplastia unicompartimental.

Complicaciones

11. Blasier, R.B., y Matthews, L. S., “Complications of Prosthetic Knee Arthroplasty”, en C. H. Epps, Complications in
Orthopaedics Surgery, JB Lippincott Company, 1994, pp. 1.057?1.086.Artículo exhaustivo con indicaciones del autor
sobre complicaciones en las artroplastias de rodilla. Forma parte de un libro muy interesante sobre complicaciones
en cirugía ortopédica en general.

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