Invocación

Michael A. Galascio Sánchez

Primogénito del comienzo,

alfarero supremo del Universo,
que has dado forma a todos los dioses.
¡Padre de todos los creadores!

¡Te invoco! Aunque no sea digno de tu audiencia,

Pero Tú, has inaugurado toda la existencia,
has moldeado la tierra y configurado el cielo,
eres la llama viva, detrás del velo.

Energía en constante efusión,

antorcha eterna en toda consciencia.
¡Protégeme en mi humana prisión!
Reduce a mis enemigos, hasta su esencia.

Revélame la puerta y el camino.

¡Que no me cruce con energías viles!
¡Dame el ímpetu del héroe y el Sabio!
¡Aléjame de almas ciegas y estériles!

Deseo ser partícipe de tu divinidad,

habitar en tu exultante paraíso,
ser purificado de mi maldad,
¡Haré!, lo que sea preciso.

Un ángel me reveló tu nombre.

¡Verbo prohibido al Hombre!
¡Es la llave hacia el corazón!
¡Mi único lugar de salvación!

Núcleo de lo indecible e increado,

más allá del espacio, tiempo e imaginación,
origen de consciencia infinita, ilimitada percepción,
de donde escapó el hálito de todo lo creado.