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PROPUESTA DE ARTICULO:

Nuevas fuentes competitivas en la Economía


del Conocimiento: “Clusters”

José Quesada Vázquez


Nuevas fuentes competitivas en la Economía del Conocimiento:

“Clústers”

Resumen:
Paradójicamente, en una economía cada vez más globalizada, están cobrando mayor
importancia la proximidad local y clusterización espacial de la actividad económica. La mayoría
de enfoques sobre la aglomeración y localización, asumen que es precisamente en los cluster,
donde se crea el conocimiento, ya que éste, se genera y se transmite más fácilmente por
proximidad y cara a cara. Debido a que el conocimiento es el principal factor productivo, las
empresas integradas en un cluster, tendrán mejores resultados que aquellas que operan de
forma aislada. Sin embargo y a pesar del voluminoso cuerpo teórico que ha generado la
comunidad científica sobre este fenómeno , debemos reconocer que sus causas y efectos
permanecen, cuando menos, difíciles de aprehender. Esta falta de evidencia empírica, no ha
impedido que en la mayoría de países europeos, guiados por ciertos enfoques que en este
artículo se analizarán, se hayan volcado en poner en marcha políticas y programas de clusters,
con el objetivo principal de fomentar la creación de conocimiento e innovación a través de la
cooperacion intra-empresas.
Debido a la importancia que para el interés público pueden tener estas políticas y a la gran
dependencia de factores relacionales, se propone la necesidad de un enfoque multidisciplinar y
realista, además del desarrollo de métodos estadísticos más robustos, antes de proseguir con el
desarrollo teórico de la clusterización de la actividad económica.

Abstract: A paradox has been the emergence of the importance of local proximity and geographic
clusters precisely at a time when globalization seems to dominate economic activity. A central
body of work has been the assumption that clusters create or generate knowledge and that since
knowledge is the basis of firm competitiveness clustered firms and industries will outperform
others. Since knowledge is generated and transmitted more efficiently via local proximity,
economic activity based on new knowledge has a high propensity to cluster within a geographic
region. But despite the fact The literature on clusters and cluster building, has been rapidly
growing both in academic and policy-making circles, we have to acknowledge that its causes and
effects remain elusive.
However, All European countries are currently active in developing and implementing cluster
policies or programs, either at the national or the regional level, to the degree that this is the
case, there are reasons to be cautious against some of the policy initiatives which, with
theoretical inspiration from some of the literature discussed here, are exclusively geared at
promoting the establishment of local networking and inter-firm collaboration. The available
empirical evidence shows that there are many studies out there right now. However, the bad
news is that there is still very little evidence of the actual effects of clustering and moreover the
evidence that does exist does not seem to show what we want them to show. We consider the
research field is in need of a multidisciplinary approach as well as a more (rigorous) empirical
‘testing’, in order to proceed further at the conceptual/theoretical level.

INTRODUCCION

Paradójicamente, en una economía cada vez más globalizada, la competitividad de los países
depende de un sistema territorial eficiente de regiones y ciudades, donde los factores y las
especificidades locales son elementos fundamentales. A nivel territorial, la competitividad
significa accesibilidad, que garantiza la disponibilidad de recursos productivos(trabajo,
información, capital y conocimiento) y atracción, que es la capacidad de un área de atraer
actividades productivas a su territorio, ofreciendo un buen clima de negocios, y una buena
dotación de servicios e infraestructuras eficientes.
Es por esto, que a lo largo de los últimos años, el desarrollo espacial se ha introducido de
manera rotunda en la agenda de los policy makers. Sin duda el enfoque espacial que ha tenido
más influencia, sobre todo en círculos políticos, ha sido la teoría de clúster de Michael Porter.
Efectivamente, desde que en 1990 Porter publicara su famoso libro “La Ventaja Competitiva de
las Naciones”, el análisis y las políticas de clúster se han expandido vertiginosamente. Según
Porter (1998a): “Un clúster es un grupo de empresas interconectadas y de instituciones
asociadas, ligadas por actividades e intereses comunes y complementarios, geográficamente
próximas” (pp. 199). El “clustering”, continua Porter, acelera la innovación y guía a la generación
de ventajas competitivas dentro de las regiones.
El enfoque de cluster, a la Porter, se ha convertido no solo en referencia, sino sobre todo en
herramienta de política publica para los responsables de las instancias locales y regionales (UK,
España), para un número creciente de gobiernos nacionales (Francia, UK, Alemania, Portugal,
Nueva Zelanda) y para la mayoría de los organismos internacionales de carácter económico
(Comisión Europea, OCDE, Banco Mundial, UNIDO, UNCTAD, OIT).

Sin embargo y sorprendentemente, la idea de la localización de la industria especializada y las


potenciales ventajas que ello puede conllevar, no es nada nueva, como el mismo Porter admite.
Alfred Marsahll dedica un capitulo en su obra “The Principles of Economics” (1890), sobre la
concentración de industrias especializadas en determinadas localidades. La caracterización de
estas concentraciones se basaba en la existencia de economías externas a través de la
disponibilidad de mano de obra cualificada, la especialización de diferentes empresas en
diferentes fases del proceso de producción y un crecimiento del comercio intrafirmas. En
“Industry and Trade” (1919), Marshall agrega algunas especificaciones que enriquecen el
concepto de distrito industrial. En particular, introduce el concepto de “atmósfera industrial”, que
junto a la existencia de “mutua confianza y conocimiento”, ya mencionada en The principles of
Economics, facilita la generación de las competencias que necesita la industria, promueve
innovación y difusión entre las pequeñas y medianas empresas del distrito industrial.
Años después, en 1979, Giacomo Becattini, retomo el discurso de Marshall en su obra “Del
sector industrial al distrito industrial. Algunas consideraciones acerca de la unidad de
investigación de la economía industrial”, dando lugar a una vasta literatura sobre distritos
industriales.
Igualmente y desde hace mas de dos décadas, la Geografía Económica,la Economía Regional,
la Economía Industrial y la Economía Evolutiva, entre otras disciplinas, han dedicado también
mucho esfuerzo a estudiar las economías de aglomeración y el desarrollo regional y a identificar
las instituciones económico-sociales involucradas, si bien su influencia ha sido mucho menor.
¿Cual es el motivo del éxito de la teoría de Porter? , ¿A que se debe la poca influencia en la
agenda de policymakers del resto de enfoques?

Fruto de todo este cuerpo teórico, generado por los distintos enfoques, nos encontramos con
términos que aparentemente designan una realidad “similar” como: “Cluster”, “Distrito Industrial
Marshaliano”, “Nuevos espacios industriales”, “Nuevos complejos industriales de producción”,
“Nodos neo Marsahalianos”, “Sistemas regionales de Innovacion”, “Milieu innovador”, “Learning
Regions”, “Sistemas productivos Locales”, “Milieux”, “Filières”, “Microcluster o Redes de
Empresas”.

¿A que se debe esta confusión? ¿Designan todos ellos una misma realidad?

El objetivo del presente trabajo es realizar una revisión de las aportaciones de los distintos
enfoques a la literatura de “clusters”. A pesar de que bajo este término se oculten a menudo
realidades no sólo diferentes, sino incluso contradictorias, me centraré en resaltar aquellos
aspectos comunes, ya que el distinto significado que se atribuye al término cluster por las
distintas corrientes y autores, tiene que ver con las diferentes opciones que en ellos se
encuentran en relación a su marco espacial, a las organizaciones e instituciones que los
constituyen, y a los tipos de relaciones y flujos entre empresas (de productos o conocimiento).
Es decir, el núcleo común de todos estos análisis es la importancia atribuida a las interrelaciones
de los actores y a la proximidad geográfica, y la consideración de que de ellas se derivan
ventajas económicas (Almquist 1998; Bergman y Feser 1999a). Igualmente se pondrán de
manifiesto los efectos negativos que el cluster puede provocar: comportamiento predatorio,
sobre especialización de la zona, competencia por trabajadores cualificados, efecto lock-in,
saturación.

Desde el punto de vista de la metodología, se revisaran las principales técnicas utilizadas en la


detección de clusters para mostrar la necesidad de desarrollar metodologías, generalmente
aceptadas, que a nivel cuantitativo vayan mas allá de los coeficientes de localización y la
utilización de la cifra de empleo como dato fundamental y que balanceen el predominio de
metodologías cualitativas (estudios de casos, entrevistas en profundidad, observaciones y
encuestas), para poder servir como instrumento de guía y apoyo eficaz a las políticas publicas.

Finalmente, y debido a la importancia que tiene para el interés publico y el protagonismo que
cobran los factores relacionales en la competitividad, defiendo en este trabajo la necesidad de
un enfoque multidisciplinar sobre el cluster, donde deben entrar en escena , también, otras
disciplinas como la sociología, psicología social, microeconomía y “management”.

1- Economía del conocimiento y aglomeración: ¿clusters?

El desarrollo es, de hecho y por definición, endógeno. Depende fundamentalmente de una


organización concentrada del territorio, en la que se encuentra incorporado un sistema socio-
económico y cultural cuyos componentes determinan el éxito de la economía local (Capello,
2007). En este desarrollo endógeno, el factor productivo más importante es el conocimiento (y
los procesos de aprendizaje de los que aquél deriva).
El concepto de «learning by doing» fue introducido por Arrow (1962), y supuso como novedad el
considerar al progreso tecnológico como un factor endógeno. Se presenta al nivel de tecnología
como un factor de producción. Cada empresa se beneficia de la actividad inversora de las otras
empresas de la misma forma que de la suya propia. Por ello, cada empresa, que se supone
funciona con rendimientos a escala constantes si duplica la utilización de los factores de
producción trabajo y capital, para un nivel de tecnología dado, doblará su volumen de output. Sin
embargo, el hecho de elevar el stock de capital a través de la inversión, hace que, por otra parte,
se incremente el nivel de tecnología existente. Por lo tanto, para la economía en su conjunto,
funciona la ley de los rendimientos crecientes. En esta línea, la obra de Romer supuso una
variación en los modelos de “learning by doing”. El rasgo esencial del análisis de Romer es que
el conocimiento muestra una productividad marginal creciente gracias a las externalidades que
genera. Romer demostró que los tres elementos clave de su modelo: externalidades,
rendimientos crecientes en la producción del output y rendimientos decrecientes en la producción
de nueva tecnología, eran compatibles con el equilibrio competitivo.
A partir de estos análisis se ha desarrollado un vasto cuerpo de literatura económica, que aún
divergente en varios aspectos, se centra en el conocimiento y su localización, y que representa
una ruptura con el modelo de análisis neoclásico:

1- La función producción en la escuela neoclásica es el resultado de la efectiva


combinación de los factores tierra, capital y trabajo( Romer, 1992) mientras que ahora, aún
considerando la importancia de los otros factores productivos, el conocimiento se constituye en
el factor productivo más importante.

2- Mientras que el modelo neoclásico toma al progreso tecnológico como exógenamente


determinado, estos nuevos enfoques consideran al progreso tecnológico como un factor de
producción que queda determinado dentro del propio sistema.
3- En el modelo neoclásico la estandarización de productos y economías de escala reducen la
importancia del “locus” y por ende de la especificidades regionales y locales. Pero la creación y
efecto “spillover” del conocimiento tácito es un fenómeno “local”.

1.1 Conocimiento

¿Que es el conocimiento? Es la aplicación a la actividad económica de 4 tipologías de saber:


saber-que, saber-porque, saber-quien y saber-como.
Atendiendo a la facilidad de transmisión del conocimiento podemos clasificarlo en:
Conocimiento observable (aquel que se puede expresar en un lenguaje formal y sistemático,
de manera que su proceso, transmisión y almacenaje se realiza con facilidad) Seria el saber-que
y saber-por que. y Conocimiento tácito (asociado al factor trabajo y que cuenta con elementos
técnicos y cognoscitivos, del tipo experiencia práctica, habilidades y calificaciones difíciles de
detallar).Seria el saber-quien y saber-como (Torrent i Sellens, 2002).El conocimiento tácito
presenta la dificultad que no resulta tan móvil como el resto de factores productivos , sino que se
caracteriza por una adherencia (stickiness) al territorio, por estar insertado o arraigado
localmente (embeddedness), y por dar lugar a capacidades localizadas (localised capabilities)
distribuidas muy desigualmente (Maskell y Malmberg, 1997). Estas características ponen de
manifiesto que la creación y efecto “spillover” del conocimiento tácito es un fenómeno “local”.

En una economía basada en el conocimiento, la capacidad de innovar de las empresas es más


importante que la relación costes-efectividad. La innovación se define de manera amplia como la
capacidad de producir nuevos y mejores métodos de organizar la producción, marketing de
nuevos y mejores productos. Esto no significa que los costes no sean importantes. Simplemente
que la presión competitiva a la que se ven sometidas las empresas ,debido a la globalización de
los mercados, hace mucho más difícil la competencia sólo en costes y más recomendable una
estrategia de diferenciación, basada en la innovación de productos y procesos.
La innovación se produce generalmente como resultado de la interacción entre varios actores.
No es un proceso lineal. Esta visión se fundamenta en un punto de vista schumpeteriano , donde
la innovación es nuevas combinaciones de conocimientos, ideas y artefactos(Schumpeter,
1934 ). La mayor parte de las innovaciones se basan en la resolución de problemas. Estas
interacciones se producen, muchas veces, en la cadena de valor de las empresas. Así es
frecuente encontrar empresas que recurren a sus proveedores, clientes incluso competidores
para resolver un problema concreto. De ahí se deriva que el proceso industrial de innovación es
un sistema de redes de actores que operan en una sector industrial relacionado, y aquí es donde
entra la geografía.
Hay una serie de razones por las que este proceso interactivo de aprendizaje esta muy
relacionado con el espacio. La proximidad espacial aumenta la posibilidad e intensificación de las
interacciones cara a cara, que son imprescindibles para el intercambio de conocimiento tácito.
Es decir, la proximidad espacial aumenta el proceso interactivo de aprendizaje e innovación. El
contexto espacial fue introducido por primera vez en la función de producción del conocimiento
por Jaffe(1998), su estudio quería demostrar que el éxito de Silicon Valley estaba relacionado
con la proximidad de (Stanford, UCLA, Berkeley) y utilizó como unidad de medida el numero de
patentes registradas en la zona. En esta línea están los trabajos de Von Hipple (1994), que
demuestra que este tipo de conocimiento(sticky knowledge), se transmite mucho mejor cara a
cara y a través del contacto frecuente.

1.2 - Localización

De esta manera, el espacio ya no es un simple contenedor, sino un recurso económico, un


factor de producción independiente. Se le concibe como generador de ventajas estáticas y
dinámicas para las empresas, y como un factor determinante de la competitividad de un sistema
local de producción. El espacio pasa a ser un “espacio cognitivo”, un espacio donde la capacidad
de gestionar información para identificar y resolver problemas, o más precisamente en el ámbito
económico, la capacidad de transformar la información y las invenciones en innovación y
aumentos de productividad, depende también de la interacción local cooperativa o de mercado.
Debido a que el conocimiento tiende a acumularse, el nuevo conocimiento no se difundirá de
manera amplia entre empresas y regiones. Se requiere capacidad de absorción e instituciones
que pongan a trabajar juntos a todos los agentes involucrados. El espacio se convierte en una
fuente de rendimientos crecientes y de externalidades positivas en forma de economías de
aglomeración y localización.

Fundamentos de las economías de aglomeración:

1- Una gran proporción de la producción industrial se concentra en un numero limitado de


regiones industriales.

2- Las industrias tienden a co-localizarse y a formar clusters.

3- Este fenómeno tiende a ser persistente en el tiempo. Una vez se establece, el proceso de
aglomeración es acumulativo.

Se suele establecer una distinción entre dos tipos de economías de aglomeración:

1-Economías de urbanización: Esta relacionada con todas las empresas e industrias en una
localización particular. Este tipo de aglomeración representa las economías externas que se
producen en la zona y se transfieren a las empresas como resultado del ahorre en costes
generados por las operaciones a gran escala de la aglomeración como un todo. Estas son las
fuerzas principales en la emergencia de los cinturones industriales, grandes conurbaciones y
regiones metropolitanas.

2- Economías de localización: se refiere a las interacciones entre empresas que operan en


actividades similares o relacionadas y que motivan la aparición de un cluster de empresas
interrelacionadas(Hollywood,tercera Italia). Estos clusters se basan en la creación de
conocimiento y la competitividad se mantienen por las capacidades y habilidades relacionadas
con la localización del conocimiento.

Fruto de todo este cuerpo teórico, centrado en las externalidades que se derivan de la co-
localización y la importancia del conocimiento como factor productivo mas importante, nos
encontramos con términos que aparentemente designan una realidad “similar” como: “Cluster”,
“Distrito Industrial Marshaliano”, “Nuevos espacios industriales”, “Nuevos complejos industriales
de producción”, “Nodos neo Marsahalianos”, “Sistemas regionales de Innovacion”, “Milieu
innovador”, “Learning Regions”, “Sistemas productivos Locales”, “Milieux”, “Filières”,
“Microcluster o Redes de Empresas”.

¿A que se debe esta confusión?, ¿Designan todos ellos una misma realidad?

Debido a lo reciente de su popularización y a su rápida expansión a múltiples campos, los


análisis de clusters utilizan con frecuencia una terminología ambigua o contradictoria; recurren
para explicar la existencia de clusters a factores diferentes; emplean en los estudios empíricos
técnicas y métodos diferentes.
2- Clusters

En este artículo adoptaremos el termino “cluster” como concepto paraguas para aglutinar al resto
de términos( “Distrito Industrial Marshaliano”, “Nuevos espacios industriales”, “Nuevos complejos
industriales de producción”, “Nodos neo Marsahalianos”, “Sistemas regionales de Innovacion”,
“Milieu innovador”, “Learning Regions”, “Sistemas productivos Locales”, “Milieux”, “Filières”,
“Microcluster o Redes de Empresas”) y facilitar su comprensión.
Los cluster son “redes de producción de empresas fuertemente interdependientes (incluyendo
proveedores especializados), ligadas unas a otras en una cadena de producción que añade
valor” OCDE (1999).
Un criterio importante a la hora de analizar los clusters se refiere a su génesis, ya que nos
permitirá posteriormente identificar y evaluar las políticas publicas aplicadas.
De esta manera, en función de su génesis, distinguimos dos tipos: el cluster natural, que
se origina como resultado de la evolución histórica de una o más industrias en una región
geográfica delimitada. Según Krugman (1992: 69) en el origen de los clusters encontramos
frecuentemente un accidente: “El desarrollo de los acontecimientos suele ser el siguiente: un
accidente conduce a la instalación de una empresa en un lugar determinado y, a continuación,
acontece un proceso acumulativo”. Algunos estudios recientes de la evolución industrial han
hecho especial hincapié en la suerte, pero esta debe considerarse en su contexto ya que
aquello que parece suerte puede ser igualmente resultado de circunstancias locales
preexistentes. Como ejemplos de clusters naturales podemos encontrar el cluster del textil y
tejido en Baden-Wurttemberg (Staber, 2001), el cluster de empresas de software en Seúl, Corea
del Sur , la construcción de barcos en Holanda , etc.
El segundo tipo en función de su origen seria el cluster forzado, que podemos definirlo como
una aglomeración geográfica de empresas promovida por la política industrial de un Estado o
instancia competente (regiones, municipios,etc). Esta está siendo una de las herramientas de
políticas públicas más utilizadas en el contexto del desarrollo espacial. Un ejemplo de cluster
forzado son la red de parques y polígonos tecnológicos que están proliferando en la mayoría de
estados europeos.
Lo que es común a todos los enfoques y es verdaderamente importante en los clusters es la
importancia de las interrelaciones de los actores que lo constituyen (Almquist 1998: 14 y 29).
Para analizar las aportaciones de las distintas escuelas distinguiremos el tipo de relación que
se produce entre los actores, ya que debido al continuo solapamiento de los distintos enfoques,
es el único criterio que nos permite establecer una cierta distancia y reducir las variables de
clasificación a dos:

1- La relación entre las entidades que componen el cluster puede estar basada en un vínculo
comercial o transaccional(trade linkage), es decir en un intercambio de productos y servicios.

2- relaciones basadas en un vínculo de tecnología/conocimiento/innovación (knowledge or


innovation linkage), es decir en vínculos inmateriales.

2.1 Vínculo transaccional:

Se centra en una mayor eficiencia en las transacciones de bienes y servicios intra-empresas


establecidas en el cluster. Las economías de aglomeración se manifiestan cuando esas
interacciones bajan los costes y/ o aumentan los ingresos. En otras palabras, mejora el
desempeño de la empresa reduciendo costes de transacción tanto de activos tangibles como de
intangibles. Para Este enfoque la clave de la aglomeración es que minimiza la distancia entre
partners, así como aumenta la rapidez en las comunicaciones que tienen lugar entre clientes y
proveedores. Las empresas adoptan estrategias de desintegración vertical como respuesta a los
cambios del mercado. El aumento de la externalización de la producción se produjo para
fomentar las aglomeraciones, ya que la proximidad espacial asegura la minimización de los
costes de transacción, sobre todo si las transacciones son frecuentes. Para Scott (1988) la
formación de estos sistemas industriales sera mas intensa mientras las interacciones sean a
pequeña escala, inestables e impredecibles, por lo tanto sujetas a altos costes unitarios.
Este enfoque intenta explicar el fenómeno espacial de clusterizacion espacial de empresas
relacionadas identificando y analizando aquellas ventajas permanentes que pueden
proporcionar a las empresas del cluster el hecho de operar en un espacio cercano, frente a
aquellas que operan de manera aislada. Tres mecanismos han sido tradicionalmente
identificados como determinantes en estas relaciones:

1- Reducción de costes de infraestructura y otro recursos colectivos compartidos.

2- La aglomeración es determinante en el desarrollo de un mercado laboral donde encontrar las


habilidades necesarias para la industria.

3- Las empresas del cluster reducen los costes de transacción(entre ellas) y transporte al estar
situadas muy cerca.

Este enfoque se debe principalmente a la escuela californiana de Geografía Económica(Scott,


1988; Storper, 1995), a la Economía Organizacional: (costes de transacción, teoría de la
empresa y economía basada en los recursos): Williamson, Penrose, Barney que converge con
otra vía que proviene del mainstream y las nuevas teorías del crecimiento económico y del
comercio internacional: (Krugman, Romer, Lucas, Helpman, Porter, Enright, Audretsch, Fujita,
Feldman,Saxenian, Venables),que busca explicar la aglomeración de la actividad a nivel
nacional o regional en una era de transporte mejorado y tecnologías de la información y
comunicaciones. Este enfoque se ha centrado en aquellas externalidades que se pueden
modelizar matemáticamente, como las teorías market-size que se derivan de la proximidad de
clientes y proveedores. Así, por ejemplo, Krugman (1992) considera que el principal factor que
impulsa los procesos de concentración espacial lo constituye el desarrollo de mano de obra,
proveedores, infraestructuras e instituciones especializadas en tales espacios. Para Krugman,
los spillovers tecnológicos constituyen un factor secundario.
En uno de los margenes de esta corriente y, como he dicho antes muy solapado, se encuentra
el trabajo de Saxenian sobre la relación entre desarrollo regional e innovación. Saxenian
contrasta la distinta “suerte” de Silicon Valley y el distrito Route 128 de Massachusetts
Su originalidad se basa en dos aspectos:
1- Un estudio comparativo como metodología, basado en la selección de dos regiones dentro de
la misma nación con un mix similar de sectores productivos y productos, lo que le permite
controlar esos factores y aislar los efectos de las culturas regionales e institucionales.

2- El estudio tiene también una dimensión longitudinal al incluir entrevistas repetitivas con
empresarios y ejecutivos de las empresas mas representativas durante mas de una década. Esto
permite describir como las dos regiones se han adaptado y respondido al cambio del entorno.
La autora explica que el contraste entre el dinamismo continuo de Silicon Valley y el relativo
estancamiento de Route 128 se debe a que Silicon Valley se ha basado en un modelo que
promueve la flexibilidad y la cooperación en red mientras que Route 128 se ha basado en la
integración vertical y la estandarización de producto. Una limitación del modelo de Saxenian
proviene de no considerar la relación entre las escalas de regulación entre los niveles regionales
y nacionales, particularmente sobre los efectos de las políticas nacionales para apuntalar el
crecimiento a nivel regional (Markusen, 1999).

Sin embargo y a nivel general las principales criticas hacia estos enfoques proviene de su
carácter estático. Este enfoque concentrado en la eficiencia y en la intensidad de las
transacciones es cuando menos paradójico ya que la evidencia empírica muestras que esos
lazos son débiles cuando no inexistentes, lo que no debería extrañarnos en un entorno
globalizado y de competencia muy intensiva.
El principal problema es encontrar un modelo explicativo sobre la aglomeración que no
concluya en un razonamiento circular. Los modelos de aglomeración hasta ahora han corrido
siempre ese riesgo: la existencia de aglomeraciones es explicada por economías de
aglomeración ( Krugman 1995).

2.2 Vínculo de tecnología/conocimiento/innovación:

El sistema industrial no está constituido sólo por las transacciones entre-firmas sino también por
el intercambio de conocimiento tácito y explicito a través de mecanismos tanto formales como
informales. El punto común de estos enfoques es que sustentan el crecimiento en activos
intangibles, como conocimiento tácito e instituciones mas que en ventajas estáticas en costes.
Esa translación desde las ventajas basadas en costes de transacción hacia enfoques espaciales
basados en learning regions, e innovative milieux se manifiesta en la importancia otorgada a
factores extra económicos como fuentes de ventaja competitiva en el marco de una economía
basada en el conocimiento.
Casi todos estos enfoques comparten la importancia de los flujos de información localizados y
en el efecto “spill-over (derrame) de la tecnología para explicar el surgimiento y mantenimiento
de cluster de empresas relacionadas.
Hay varios mecanismos a través de los cuales el conocimiento se derrama de una empresa a
otra y que contribuye a aumentar el repositorio regional de conocimiento.

1- Spin-off es un mecanismo efectivo mediante el cual el conocimiento se puede transferir entre


firmas mediante los empresarios. La nueva empresa creada explota el conocimiento que ha
adquirido en la empresa anterior.

2- Además de los empresarios, los nuevos empleados también aportan conocimiento cuando
cambian de empresa, lo que contribuye a la difusión de conocimiento (la movilidad de
científicos, ingenieros, directivos,etc).

3- El tercer mecanismo de transmisión son las redes. El conocimiento también circula a través de
redes, como las alianzas tecnológicas, la investigación cooperativa, comunidades
epistemológicas. La proximidad social se considera como un generador de la formación de
redes.

Las externalidades derivadas de la aglomeración no son un fenómeno nuevo, Alfred Marsahll


dedicó un capitulo en su obra, “The Principles of Economics” (1890), a la concentración de
industrias especializadas en determinadas localidades. La caracterización de estas
concentraciones se basaba en la existencia de economías externas a través de la disponibilidad
de mano de obra cualificada, la especialización de diferentes empresas en diferentes fases del
proceso de producción y un crecimiento del comercio intrafirmas. En “Industry and Trade” (1919),
Marshall agrega algunas especificaciones que enriquecen el concepto de distrito industrial.
En particular, introduce el concepto de “atmósfera industrial”, que junto a la existencia de “mutua
confianza y conocimiento”, ya mencionada en The principles of Economics, facilita la generación
de las competencias que necesita la industria, y promueve la innovación y difusión entre las
pequeñas y medianas empresas del distrito industrial. Años después, en 1979, Giacomo
Becattini, retomo el discurso de Marshall en su obra “Del sector industrial al distrito industrial.
Algunas consideraciones acerca de la unidad de investigación de la economía industrial”, dando
lugar a una vasta literatura sobre distritos industriales. Posteriormente algunos investigadores ha
ido mas allá de los distritos industriales, enfatizando la importancia de la dinámica del
aprendizaje colectivo como soporte de la innovación y el crecimiento del “local milieux”
En este contexto destacamos las aportaciones del GREMI y de la Economía evolutiva y de la
Innovación.
El trabajo del GREMI ha jugado un papel muy importante en la comprensión del desarrollo
regional. El trabajo de estos (Aydalot , Camagni, Maillat, Capello,etc).
Camagni (1991) rechaza la asunciones básicas del mainstream, enfatizando en su lugar que las
empresas, para poder utilizar información imperfecta tienden a desarrollar nuevas funciones y
rutinas relacionadas con la búsqueda, análisis, transformación, selección y control de esa
información. En este entorno el “local milieux”, cluster, funciona como un operador situado entre
el mercado y las organizaciones que reduce la incertidumbre mediante el apoyo y mantenimiento
de la interdependencia de las empresas locales.
Las características principales de los llamados “milieux” son:

1- Existencia de diferentes actores (empresas, instituciones) que son relativamente autónomos


en el proceso de toma de decisiones y formulación de estrategias.

2- La interacción entre esos actores contiene elementos de cooperación y rivalidad.

3- El milieux se caracteriza por un set especifico de elementos materiales ( empresas e


infraestructuras), inmateriales (know-how, conocimiento) e institucionales (instituciones, entorno
normativo).

4- Mayor énfasis en el aprendizaje colectivo como verdadero estimulador de la aglomeración.


El concepto de aprendizaje colectivo debe diferenciarse del simple aprendizaje que se produce
en una cooperación bilateral , se refiere al proceso acumulativo de aprendizaje colectivo que
tiene lugar entre una comunidad de empresas en una localidad.(Capello, 1999).

5-El local milieu ofrece un entorno para la evolución de un lenguaje común, vínculos sociales,
normas, valores e instituciones, en definitiva de capital social (Putnam,1993).

6- A medida que el “milieu” evoluciona puede atraer a gente nueva, tecnología y empresas de
fuera, que refuerzan el proceso acumulativo de conocimiento.

El enfoque del GREMI esta apuntalado por una concepción distinta de la innovación derivada de
la Economía evolutiva y de la innovación (enfoque de los sistemas nacionales, regionales y
sectoriales de innovación y “”learning regions): Lundvall, Edquist, Freeman, Malmberg, Maskell,
Solvell, Asheim,etc. El concepto de cluster ha venido como anillo al dedo a la noción de sistema
de innovación regional. Al conjunto de instituciones creadas alrededor de un cluster se le
denomina sistema regional de innovación (OECD, 1999). El cluster se propone como un
elemento central indiscutible de un sistema regional de innovación, en el cual se encuentra
incrustado dicho cluster. El concepto de sistema regional de innovación ha sido una derivación
del trabajo anterior de Lundvall sobre sistemas nacionales de innovación (Lundvall, 1992), y de
Cooke sobre sistemas regionales (Cooke, 2004). Mientras la teoría de la aglomeración ha
elegido la noción de acumulación de conocimiento para explicar la emergencia y continuidad de
los cluster de industrias relacionadas, la literatura de la innovación provee un enfoque
complementario del mismo proceso. En contextos caracterizados por una pluralidad de
agentes,como los clusters ,la evolución del conocimiento «no es el resultado de esfuerzos
individuales en I+D dentro de cada empresa, sino más bien la combinación de capacidades
complementarias y de procesos generales de aprendizaje interactivo, que implican muchos
«clientes» y «proveedores» junto a una bien definida filière o cadena de suministro (Cappellin,
2003b, p. 307).
La Economía de la innovación parte de un modelo de acumulación del conocimiento
schumpeteriano, defendiendo que la acumulación de conocimiento y la capacidad competitiva
sostenible se pueden entender como función de tres procesos interrelacionados:

1- La naturaleza localizada del proceso de innovación y el rol del “local milieux” en acelerar dicho
proceso. Este elemento se refiere a la naturaleza del proceso de innovación. La investigación
sobre el proceso de innovación ha identificado tres características interrelacionadas que son de
una importancia particular para entender la clusterizacion espacial de empresas relacionadas.
a) La necesidad de reducir la incertidumbre tecnológica y económica.
b) La necesidad de interacción continua entre las empresas.
c) La necesidad de contactos cara a cara para el intercambio y creación de conocimiento.

2- El proceso según el cual el conocimiento tiende a incrustarse al local milieu en lugar de


difundirse rápidamente. Esa misma naturaleza del proceso de innovación de incrustación en el
territorio no se ha alterado con el proceso de globalización y no se debería alterar debido a los
costes y tiempo asociados en el intercambio continuado de conocimiento e información.

3- Un proceso mediante el que el milieu atrae nueva gente, ideas, practicas, capital y patentes,
evitando así el efecto lock-in. Pero,sin olvidar que la aglomeración esta asociada con la
especialidad sectorial (Malmberg y Maskell, 1997).

De esta manera para el enfoque de la Economía de la innovación, la globalización se sostiene


con la emergencia de nuevas forma de aglomeración que se fundamentan en la creación de
conocimiento. Estas aglomeraciones son repositorios de conocimiento tácito en un entorno
donde se produce un continuo esfuerzo por codificar conocimiento. Ese conocimiento tácito se
encuentra incrustado en un set de relaciones sociales entre los distintos actores(empresas,
instituciones, comunidad), localizadas localmente en contraposición a nacional.
De la misma manera, las ventajas relacionales, permiten a ciertas localizaciones adaptarse mas
rápidamente a a los cambios.

Como resumen de los enfoques basados en vínculos inmateriales: el punto de partida


común es considerar que la competitividad a largo plazo de la empresa esta determinada por su
habilidad para innovar y comprometerse en procesos de aprendizaje continuo. Factores
culturales, institucionales,infraestructurales en el “milieu “afectan al entrono general en el que la
empresa se desarrolla. La proximidad espacial entre los actores favorece el efecto derrame del
conocimiento y las interacciones entre las empresas que son la base de la innovación y del
aprendizaje.
Sin embargo, estos enfoques no han estado tampoco exentos de criticas.
La critica principal hacia esta visión viene determinada por una preferencia general hacia
modelos abstractos en lugar de enfoques empíricos. De la misma manera otra debilidad es que
no especifica con precisión los mecanismos principales por los que proximidad y cooperación
generan innovación dentro del milieu. Estos enfoques enfatizan también la idea de redes
basadas en la confianza. La confianza actúa aquí como pegamento que mantiene unidos a todos
los actores en el proceso de aprendizaje colectivo. De nuevo esa confianza se produce y genera
por la proximidad. Sin embargo y de nuevo no se nos explica como las empresas participan en
esas redes colaborativas de confianza insertadas en un sistema capitalista que se fundamenta
en la propiedad de los medios de producción al mismo tiempo sufren una competencia feroz.
Este defecto estructural de esta teoría pone de relieve los problemas de hacer compatibles
colaboración y competencia feroz que puede guiar a las empresas a apropiarse de los activos de
la red en su propio provecho. Igualmente y en contraposición a estas teorías, cada vez hay mas
contribuciones que señalan la importancia como fuente de ventajas competitivas de las
conexiones externas en una economía global . El caso de las filiales es gráfico, ya que aumentan
su base de conocimiento mediante el acceso a las redes mas amplias de su corporate .

2.3- Enfoque cluster “a la Porter “

Sin duda el enfoque espacial que ha tenido más influencia, sobre todo en círculos políticos, ha
sido la teoría de clúster de Michael Porter. Desde que en 1990 Porter publicara su famoso libro
“La Ventaja Competitiva de las Naciones”, el análisis y las políticas de clúster se han expandido
vertiginosamente. Según Porter (1998a): «Un clúster es un grupo de empresas interconectadas y
de instituciones asociadas, ligadas por actividades e intereses comunes y complementarios,
geográficamente próximas » (p. 199). El “clustering”, continua Porter, acelera la innovación y
guía a la generación de ventajas competitivas dentro de las regiones. Este enfoque de cluster, a
la Porter, se ha convertido no sólo en referencia, sino sobre todo, en herramienta de política
publica para los responsables de las instancias locales y regionales (UK, España), para un
número creciente de gobiernos nacionales (Francia, UK, Alemania, Portugal, Nueva Zelanda) y
para la mayoría de los organismos internacionales de carácter económico (Comisión Europea,
OCDE, Banco Mundial, UNIDO, UNCTAD, OIT).
La teoría del cluster de Michael Porter, está basada en la teoría de la competitividad local, estatal
y nacional dentro del contexto de la economía global (Porter, 1990). Este modelo originalmente
se desarrolló en un intento de analizar la diferencias nacionales en competitividad industrial,
pero posteriormente ha sido usado para explicar la ventaja competitiva de clusters de empresas
relacionadas. De acuerdo con Porter, ser competitivo para las firmas es mejorar continuamente
la efectividad operacional en sus actividades mientras simultáneamente se siguen estrategias
diferentes basadas en la diferenciación, en lugar de seguir estrategias imitativas. Estas
asociaciones generan un tipo de ámbito competitivo donde las interacciones entre las empresas
micro, pequeñas y medianas, en conjunto con las grandes empresas facilitan la existencia de
una gran rivalidad y diversidad competitiva Su argumentación es que la existencia de los
clusters geográficos alientan ambos de esos requerimientos para la competitividad de la firma,
alentando la formación de activos relacionales. Porter (1990) sostiene que las características de
un cluster, el cual determina la habilidad de innovación de las empresas, depende de la
interacción de cuatro fuerzas relacionadas : dotación de factores productivos, demanda de las
empresas, estructura institucional del cluster, y la estrategia y rivalidad entre las empresas.
Porter (1998: 240-241) indica que la pauta de geografía económica más idónea para un país es
aquella que combina dispersión (ya que así se evitan la congestión, los bloqueos y la
inflexibilidad) y especialización geográfica (ya que así se favorece la productividad y su
crecimiento).

Sin embargo, el análisis cluster de Porter tiene dos limitaciones principales:

A) Un concepto tan elástico y vago no puede suministrar un modelo universal sobre como la
aglomeración se relaciona con el crecimiento local y regional . Se esta utilizando en tan diversos
contextos que su explicación de causalidad y determinación se presenta demasiado forzada.
(Martin y Sunley, 2001). La definición es lo suficientemente vaga como para abarcar
prácticamente cualquier agrupamiento de empresas . Igualmente, la escala geográfica del
análisis resulta demasiado vaga, en esta definición caben regiones de prácticamente cualquier
tamaño. ¿A qué se le llama interconectividad?, ¿Deberían incluirse como relaciones de
interconexión las transacciones de mercado ? Si así fuera, se estaría afirmando que todas
las regiones, ciudades y países son un gran cluster. Igualmente aunque es cierto que hay
algunos elementos de complementariedad y otros de competencia entre empresas, la definición
de Porter no los distingue. ¿En qué momento compiten las plantas localizadas en un cluster y
cuándo están en condiciones de colaborar? Y finalmente, la presencia de entidades externas
puede tener consecuencias positivas (como en el caso de un centro de investigación que
desarrolle materiales especializados para un cierto tipo de industria) o negativas (como en el
caso de institutos dedicados a otro tipo de actividades, que potencialmente pudieran ser
percibidas como más rentables que la actividad industrial desarrollada en el cluster en este
momento (Markusen, 1997).

B) Relacionado con lo anterior y sin duda mas importante por su implicación en políticas
publicas: la Geografía económica y la Economía regional, entre otras disciplinas, se dieron
cuenta hace tiempo que sólo porque haya una asociación entre algunas industrias de alto
crecimiento y varias formas de concentración geográfica, no significa que la concentración sea la
causa principal del éxito económico. En el mundo real, hasta la más simple aglomeración
genera externalidades, tales como contribuir en la localidad a la formación de mano de obra
especializada, aumentar la demanda de determinados servicios complementarios, etc., dando
lugar así a algún nivel o tipo de interacción. La evidencia empírica sobre los clusters esta en su
infancia y comete continuamente el error de saltar de asociaciones particulares a a asociaciones
de causalidad y aplicabilidad general.

Pero sin duda y lo que llama poderosamente la atención como este concepto, que ha suscitado
abundantes criticas desde la academia, haya calado tan profundamente en la agenda de los
políticos. La respuesta a esta paradoja puede deberse a que el concepto cluster se posicionado
como marca mas que como producto intelectual. De la misma manera que las empresas
distinguen sus productos de los de la competencia, el análisis cluster de Porter, se ha
diferenciado así de los conceptos similares producto de la Geografía económica, Economía
regional,etc. Pero también lo podemos ver desde otra perspectiva: en un clima de presión
competitiva constante, la vuelta hacia políticas neoliberales, ha expuesto a las regiones a esta
presión competitiva y ha creado la necesidad de nuevos conceptos y modelos que guíen a las
agencias regionales hacia la consecución de sus objetivos: ser mas competitivo y fomentar la
innovación. En este contexto,la gran influencia de la teoría de Porter se puede deber al énfasis
en términos tan seductivos, para los políticos, como competitividad, ventaja competitiva,
acelerador de innovación, que se relacionan con asociaciones e imágenes positivas (alta
productividad, conocimiento, descentralización empresarial, y economía socialmente progresiva
de lo local), lo que para los políticos es prácticamente irresistible.
También se podría deber a su formulación “heterodoxa”, realista, su approach “trespassing” que
lo hacen apto para “todos los públicos” y al marketing relacional empleado para promocionarla.
No podemos olvidar que Porter es estudiado en todas las escuelas de negocios del mundo
como referente en estrategia y competitividad. No es extraño pues, que en un contexto, como el
del cluster, donde interactúan, empresas, consultores, empleados de organismos e instituciones
“sin animo de lucro” (que son consultoras semi privadas) y administraciones públicas (que cada
vez mas se rigen de acuerdo a parámetros empresariales) la difusión de la teoría de Porter haya
calado profunda y rápidamente. Como resumen a todo lo anterior : El núcleo del concepto reside
mas en su imagen que en un set de ideas coherente y cuidadosamente definidas. Pero sin duda,
la influencia mayor que ha generado esta teoría en el resto de disciplinas que estudian el
fenómeno de la aglomeración, ha sido fomentar el consenso sobre la necesidad de un enfoque
multidisciplinar y la necesidad de adoptar modelos menos abstractos y más realistas que sirvan
como guía efectiva a los policy makers.

2.4 Efectos negativos del cluster

Frecuentemente se tiende a dejar de lado los aspectos negativos de la aglomeración geográfica.


Esto viene motivado principalmente por asumir a priori y sin realizar análisis rigurosos empíricos,
que la aglomeración es beneficiosa por la sola existencia de un conjunto de empresas
localizadas dentro de un área específica. Sin embargo, la aglomeración puede tener impactos
negativos para las empresas:

- La concentración geográfica parece fortalecer la conducta competitiva de tipo predatorio. Ésta


se refiere a la competencia intensa que existe entre empresas del mismo tipo o que atienden al
mismo mercado. Esto presenta un grave problema, particularmente para las empresas que están
comenzando (startups), en contraste con aquellos negocios que ya tienen un mercado
establecido y relaciones tanto con proveedores como con consumidores específicos. Esta
competencia se ve exacerbada en un entorno geográficamente restrictivo y puede tener efectos
más negativos cuando se trabajan productos o en el contexto de clientes en mercados con alta
elasticidad al precio. (Pacheco-Vega, 2004).

- Competencia por mano de obra cualificada(relacionada con el punto anterior): Cuando un


grupo de empresas se encuentra localizado geográficamente en una misma región, cabe la
posibilidad de que algunas traten de atraer personal cualificado para fortalecer su propio capital
humano, con el ofrecimiento de mayores sueldos, mejores condiciones de trabajo y vida, etc.
- Sobre-especialización, este es un elemento muy importante sobre todo en el proceso de
planificación del desarrollo regional integral de una economía. Si una región se especializa en un
solo tipo de industria, las probabilidades de que dicha industria colapse aumentan
cuando dicho sector industrial se enfrenta a condiciones adversas. Si la ciudad o región carece
de muchas alternativas, es posible que haya problemas para fomentar el desarrollo. El caso
clásico es la industria del acero en Inglaterra, que fue declinando con el tiempo hasta
desaparecer completamente. Esta misma industria desapareció de Pittsburgh, Pennsylvania,
también en el siglo XX (Markusen, 1988).

- La concentración de las empresas en una región específica puede dar lugar a saturación de
los mercados, e incluso deteriorar los procesos de innovación. Por ejemplo, si una región se
especializa en cerámica especifica, de (como el caso de Talavera (Toledo), puede ser que la
saturación del mercado origine comportamientos predaratorios en materia de precios.
La intensa competencia forzaría a las empresas que no puedan competir en precios a cerrar sus
puertas, lo que originaría una fallo de mercado al producirse oligopolios o monopolios. También
esta sobre-saturación puede llevar a que los procesos innovadores de desarrollo de producto no
tengan éxito, ya que las empresas estarán más enfocadas en tratar de competir con base en el
precio en lugar de buscar diferenciarse por la calidad del producto.

- Efecto lock-in: entendido como la incapacidad de cambiar de una trayectoria de desarrollo a


otra precisamente por las bases institucionales de la región y que reflejan el dominio pasado de
empresas y sectores ahora en declive. Las organizaciones locales pueden estar orientadas de
manera muy intensa hacia viejas practicas y rutinas que les pueden impedir cambiar la base de
conocimiento tan necesaria para competir en una economía globalizada. El ejemplo típico de las
antiguas regiones industrializadas de Inglaterra. (Boschma and Lambooy, 1999b).

Sin embargo y mas preocupante aún que la poca atención prestada a los efectos negativos, es la
falta de evidencia empírica sobre los efectos positivos de los cluster, que se debe a la falta de
una metodología rigurosa y generalmente aceptada para detectar y medir los supuestos efectos
del cluster.

2.5 Metodologías de detección e identificación de clusters

En el análisis de clusters las técnicas utilizadas en los estudios empíricos,son muy variadas
siendo frecuente la combinación de varias de ellas con objeto de explotar sus ventajas
específicas. y en análisis de casos. Dada la complejidad de los patrones de interacción y el
énfasis de la literatura de los cluster en variables “soft” no medibles (tales como confianza,
cooperación,inserción social, etc.) no resulta siempre fácil establecer una clara demarcación
entre las aglomeraciones y los clusters. El gran problema con estos elementos “suaves” es que
las metodologías de investigación apropiadas para poder capturar sus efectos todavía no están
realmente bien definidas ni desarrolladas. Así, como ejemplo, cuando se habla de la confianza
en los negocios ¿cómo poder detectar cuando existen relaciones de confianza entre empresas?
No es sencillo de medir. Debido a esto, la gran mayoría de análisis cluster se han basado como
técnica de análisis en el método del caso, que como decíamos antes, es la asunción a priori de
la existencia en un territorio determinado de uno o varios clusters que constituyen precisamente
el objeto del estudio. Es decir, se suele asumir la presencia del cluster que se analiza sin
contrastar previamente de forma rigurosa su existencia.
Estas circunstancias las que han motivado recientemente la necesidad de establecer una
metodología que permita identificar sistemática, robusta y objetivamente clusters industriales y
conocer su ubicación precisa en el territorio. Estas iniciativas se denominan mapeado de cluster.
Aun así, estos métodos están aun en pleno desarrollo y no hay un consenso sobre su utilización.
Siguiendo el Informe elaborado por el Grupo de Investigación Análisis Cuantitativo Regional de
la Universidad de Barcelona, para la Dirección General de Política de la Pequeña y Mediana
Empresa (2007),podemos clasificarlos en:
a) Métodos basados en el uso de herramientas analítico-estadísticas
Entre ellas sobresalen las basadas en el análisis input-output, en la teoría de gráficos y en
análisis estadísticos de correspondencia. La clave de estos métodos reside en la medición del
grado de aglomeración económica existente en cada una de las áreas geográficas consideradas.
El instrumento cuantitativo más frecuente es el coeficiente de localización (CL), que aproxima el
grado de ventaja competitiva de un sector en cada área geográfica respecto
a la del conjunto de la economía analizada. Dadas las limitaciones que conlleva el uso aislado
del CL, suele ser habitual acompañarlo de medidas complementarias. Así, en ocasiones se
utiliza la matriz de crecimiento-participación, que está configurada, además de por el CL, por:

- una medida del tamaño absoluto del sector en la región, habitualmente aproximado por el
empleo sectorial.

- una medida del crecimiento del sector en la región, aproximada a través del crecimiento del
empleo sectorial.

Tanto en el caso de la utilización del CL de forma aislada, como combinado a través de la matriz
de crecimiento-participación, esta aproximación está sujeta a las críticas de ser sensible a la
clasificación sectorial utilizada, que además suele venir dada de forma exógena y rígida, y de no
utilizar información acerca de la interdependencia entre sectores, que constituye precisamente
un elemento esencial en la propia definición de cluster.
En todo caso, y aún combinando información del grado de concentración y de interrelación
sectorial, debe tenerse en cuenta que:

- este tipo de método no tiene en cuenta el ciclo vital de un cluster, es decir si éste se
encuentra en gestación, en plena efervescencia o en declive. Esta circunstancia puede
condicionar el proceso de detección de algunos clusters de especial relevancia.

- el método tiene validez limitada al no incorporar información de factores intangibles


como, por ejemplo, relaciones basadas en la confianza, la presencia de capital social,
de dinámica organizativa, etc.

b) Métodos basados en el estudio de caso de clusters


Es utilizado por analistas que rechazan el supuesto de que los clusters sólo pueden ser
identificados y cuantificados mediante la aplicación de técnicas estadísticas. El argumento básico
que utilizan es que el crecimiento y la dinámica innovadora de un cluster únicamente pueden ser
capturadas de forma correcta a través de la aplicación de técnicas cualitativas, por ejemplo
mediante el recurso a entrevistas en profundidad con agentes representativos de los clusters. El
estudio de Saxenian (1994) acerca de Sillicon Valley y Route 128 es sin duda de los mas
representativo. Curiosamente este que ha sido el método mas utilizado hasta el momento es en
el que hay consenso sobre su debilidad, ya que se suele asumir la presencia del cluster que se
analiza sin contrastar previamente de forma rigurosa su existencia.

c) Métodos centrados en el análisis de políticas públicas


Suelen corresponder a análisis efectuados por autoridades competentes en el desarrollo local
y/o regional, e incorporan elementos tanto de a) como de b).

2.6 Método de Porter

Curiosamente, Michael Porter y su su equipo de colaboradores en el Institute for Strategy and


Competitiveness en la Harvard Business School, propusieron un método basado en la
utilización de instrumentos cuantitativos para derivar la composición de economías regionales y
locales, y los límites geográficos de los clusters de sectores interrelacionados. Dicho método
pretende capturar los elementos básicos en la definición de cluster industrial del propio Porter
(¿producto relacionado?), sirviéndose para ello de algunas medidas utilizadas con anterioridad
para valorar el grado de concentración espacial de la actividad y la intensidad de las relaciones
entre distintos sectores productivos. Al determinar el conjunto de sectores que se encuentran
relacionados en uno o varios clusters concentrados geográficamente el método de Porter da
lugar a un “cluster mapping” para el conjunto de la economía en que se esté interesado.
Ventajas de la utilización de un método à la Porter:

- Sencillez de su aplicación, entendiendo como tal la facilidad en los cálculos a realizar


(que se limitan a CL, porcentajes de empleo y correlaciones del empleo regional entre sectores)
y la interpretación de estos y de los otros instrumentos a utilizar (como por ejemplo la
información contenida en las tablas input-output). De esta forma, una vez se dispone de la
información estadística de base, el tratamiento cuantitativo a realizar es simple, estando su
volumen relacionado con el grado de detalle sectorial con el que se trabaje.

- Baja necesidad de información estadística, dado que para su aplicación únicamente se


precisa de información acerca del volumen de empleo en los sectores definidos previamente y
para el conjunto de regiones o localidades que se vayan a tomar como unidades geográficas.

- Asimismo, la difusión y reconocimiento de esta metodología entre, como mínimo,


parte de la comunidad académica y de los responsables de las políticas industriales y
de desarrollo, junto a su aplicación en diversos proyectos de “cluster mapping” realizados para
diversas economías, facilita, en principio, la comparabilidad de los resultados obtenidos y la
aceptación de los mismos.

Entre los inconvenientes destacan:

- Escasa robustez de los resultados que se obtienen a través de la aplicación de esta


aproximación. El origen del problema de robustez se encuentra en la utilización de información
agregada, tanto en lo referido a la vertiente sectorial como a la territorial. Así, los clusters
detectados y la cuantía de su intensidad variarán necesariamente dependiendo del detalle
sectorial utilizado, sin que a priori se pueda determinar si número e intensidad dependen directa
o inversamente del nivel de desagregación sectorial adoptados.

- La determinación de los puntos de corte, necesaria para la clasificación de los sectores, es la


misma para todos los sectores considerados. Esta circunstancia sólo sería razonable si todos
ellos compartiesen la misma distribución espacial, lo que difícilmente se dará en la realidad.

- En el cálculo de las correlaciones de localización cobra especial relevancia la definición de las


unidades geográficas o regiones. Esta circunstancia provocará que el coeficiente de
correlación presente valores elevados entre muchos de los sectores, sin que ello sea debido a la
presencia de relaciones inter-sectoriales.

- Otra crítica obvia que se puede realizar a esta aproximación es la de basarse en exceso
en criterios ad hoc. Todas las fases del procedimiento están caracterizadas por apoyarse en
elementos subjetivos y difícilmente generalizables. De esta forma, en cada estudio se deben fijar
atendiendo a la información contenida en los propios datos que se están utilizando y en el
conocimiento de la economía analizada por parte del investigador o equipo de investigadores.

En definitiva, el principal reto al que tienen que hacer frente los diversos enfoques sobre la
literatura del análisis de cluster , es la identificación de indicadores relevantes para detectar e
identificar la existencia, intensidad y medir la externalidades que se producen. A pesar que
existen algunas convenciones para medir e interpretar las muchas variables que son relevantes
para el análisis cluster (inversión en I+D, innovación, recursos humanos, patentes, balanza
tecnológica de pagos), estos son insuficientes para medir el efecto del cluster porque:

- Fallan en capturar las características básicas de los clusters que son esenciales para entender
el desempeño de un cluster: cadena de suministro, integración hacia delante con el mercado,
alianzas, compartir conocimiento, capital social, fuentes locales de conocimiento tácito, ya que
no aparecen en ninguno de sus indicadores.

- Muchos cluster tienen componente intersectoriales. En este contexto es muy complicado


obtener datos estadísticos, los agregados que se pueden obtener en ciertos sectores no nos
valen en este análisis.

- La mayoría de los datos están agregados a nivel regional o nacional. Con estos datos es difícil
identificar la actividad que tiene lugar a nivel local o cluster

A partir de esta clasificación general de las aproximaciones utilizadas en la literatura para el


análisis de los clusters industriales podemos concluir que cualquier estudio tendente a su
detección y cuantificación debería basarse en la aplicación de instrumentos cuantitativos, que
vayan mas allá de los coeficientes de co-localización y la cifra de empleo del sector. Igualmente
debería también explicitar claramente qué aspectos concretos de la definición de cluster
industrial adoptada se están recogiendo con los instrumentos utilizados, si estos se incorporan
de forma parcial o total, y si se hace de forma directa o mediante algún tipo de aproximación. Ello
permitirá valorar en su justa medida el mapa obtenido.

A tenor de todo lo visto anteriormente, se nos presenta inmediatamente una pregunta: Tenemos
un fenómeno: la clusterizacion de empresas relacionadas, cuya definición es vaga y caótica
(Markusen, 1995), su enfoque en variables difíciles de medir y la metodología desarrollada no
nos proporciona evidencia empírica robusta ni de su identificación ni de las externalidades
positivas que genera, y sin embargo, se encuentra incluida de forma inconfundible en las
agendas de todos los policy makers. ¿ A qué se debe esto?

3- Políticas de Cluster

Un clima de presión competitiva constante y la vuelta hacia políticas neoliberales, que han
expuesto a las regiones a esta presión competitiva, han creado la necesidad de nuevos
conceptos y modelos que guíen a gobiernos y agencias regionales hacia la consecución de sus
objetivos: ser mas competitivo y fomentar la innovación, a través de clusters de empresas.
A principios de los 90, la Unión Europea admitía sus debilidades en competitividad industrial,
principalmente frente a Estados Unidos y Japón. Para paliar esta debilidades,a nivel de política
regional, empezó a orientarse al desarrollo local de nuevas industrias y a la estimulación de la
innovación, ya que hasta el momento se había enfocado en reducir las disparidades regionales y
aumentar la cohesión. Estas políticas conocidas como Estrategias Regionales de
Innovación,centradas en la Economía del conocimiento, fueron puestas en marcha a finales de
los 90, a través de programas y actividades de innovación, transferencia de tecnología,
cooperación entre empresas e instituciones educativas y de investigación. Todas estas iniciativas
se vieron recogidas en el año 2000 , en la llamada “Estrategia de Lisboa”, cuya finalidad ultima
era la puesta en marcha de una serie de políticas publicas destinadas a convertir a la UE , en el
año 2010, en la Economía basada en el conocimiento más competitiva del mundo. En todas
estos procesos, el cluster ,se presentaba como figura central, ya que contenía todos los
ingredientes necesarios recogidos en dicha estrategia.
Los resultados de la “Estrategia de Lisboa”, diez años después son evidentes, seguimos
perdiendo competitividad, no solo frente a USA o Japón, sino frente a países emergentes, y no
sólo en productos de bajo valor añadido sino también en productos intensivos en tecnología.
Todo ello ha hecho que se planteen nuevos fundamentos y, ligado a ellos, nuevas
respuestas de la política pública.
En la práctica, el enfoque de la política de clusters difiere de unos países a otros. En algunos es
de abajo para arriba (bottom-up), y se centra en la eliminación de las imperfecciones del
mercado para facilitar iniciativas basadas en los mercados, sin que se fijen prioridades
nacionales (es el caso de Estados Unidos y Holanda). En otros es más de arriba para abajo (top-
down), donde el gobierno (consultando a la industria y a las agencias de investigación) fija
prioridades nacionales, formula una visión-desafío para el futuro, y selecciona los actores que
tomarán parte en los grupos de diálogo con base en el cluster, quienes posteriormente operan
sin grandes interferencias gubernamentales (como es el caso de algunos países nórdicos).
(OCDE,1999).
Generalmente se ha considerado que la intervención publica a través de políticas de innovación
es necesaria y positiva cuando se producen fallos de mercado. Uno de estos fallos de mercado
se considera por el carácter de bien semi-publico del conocimiento. Debido al problema de no
apropiabilidad, el gobierno actúa para paliar la situación de infra-inversión en nuevo
conocimiento a través de políticas de subsidios a la investigación y desarrollo. De la misma
manera y debido a los rendimientos crecientes del conocimiento, la inversión publica en I+D+I,
transferencia de tecnología y educación mejorará y aumentará el crecimiento económico. Todo lo
anterior puede ser especialmente relevante para regiones atrasadas y para el colectivo de
pymes que no tienen recursos para inversión en I+D+I. Sin embargo, este enfoque en los fallos
de mercado se basa en una concepción lineal de la innovación, según la cual la intervención
publica en las áreas de I+D+I conducirá automáticamente a la región a a innovar. Hay un gran
convencimiento en Europa de que la intervención publica conducirá al aumento de la innovación
en la mayor parte de las regiones europeas, cuando en realidad las políticas basadas en I+D+I,
ayudan solo a una pocas, que son las que ya están especializadas precisamente en I+D+I
(Simmie, 2003). Además, la mayor parte del nuevo conocimiento generado en Europa, no se
explota económicamente en Europa, sino que se filtra a países como USA. Esto quiere decir que
la política de I+D+I en Europa esta subsidiando la explotación económica de ese nuevo
conocimiento en otras partes. Dicho de otra manera, el modelo de innovación lineal basado en
fallos de mercado da malos resultados. Este tipo de aproximaciones no tienen en cuenta la
importancia de la capacidad de absorción y el papel de las instituciones en el proceso de difusión
del conocimiento.
Por su parte, el enfoque cluster de la economía evolutiva de la innovación, considera que la
base sobre la que se debe justificar la intervención pública y las imperfecciones que se deben
corregir a través de las políticas publicas, no deben ser los fallos de mercado, sino los fallos
sistémicos. Es mas, consideran que estas imperfecciones de mercado: asimetría de la
información, monopolios y efectos derrame son parte fundamental de las dotaciones de la región
y son además generadores de crecimiento regional. Debido a que las asimetrías limitan las
transferencia de tecnología, constituye un incentivo para la inversión en la creación de
conocimiento. La razón principal para para intervenir son los fallos del sistema. Hay tres
principales fallos sistémicos que pueden reducir la capacidad de innovación de las regiones:

1- La falta de actores relevantes como institutos de investigación, capital riesgo, Instituciones


educativas, proveedores relevantes. Esta situación, institucionalmente débil, es mas común en
regiones periféricas donde no hay una demanda importante (Camagni, 1995).

2- La falta de relaciones entre las organizaciones y actores que son parte del sistema de
innovación. Estas relaciones no son evidente y hay que construirlas. La colaboración
interorganizacional es clave y no siempre se produce, lo que impide la difusión del conocimiento
y el aprendizaje entre empresas.

3 Efecto lock-in: Las organizaciones locales pueden estar orientadas de manera muy intensa
hacia viejas prácticas y rutinas que les pueden impedir cambiar la base de conocimiento tan
necesaria para competir en una economía globalizada. Un ejemplo ejemplo serían las antiguas
regiones industrializadas de Inglaterra (Boschma, 1999b). De la misma manera, las instituciones
desarrollan también lazos tan fuertes que limitan el acceso a nuevas fuentes de información,
perfil de trabajadores que impiden también realizar los cambios necesarios. Las mismas
instituciones oficiales pueden ser parte y causa de este efecto: los agentes públicos , a trabes de
la implementación de estas políticas pueden trasladar su endogamia a estas redes, fomentando
el efecto lock-in. (Boschma y Lambooy, 1999b).

En este nuevo enfoque, la política de clusters, que sustituye a las tradicionales políticas
sectoriales, se convierte en la “piedra angular de la política industrial en muchos países. Sin
embargo, las intervenciones publicas destinadas a corregir fallos sistémicos presentan también
problemas. Hay una marcada tendencia en este tipo de políticas de seleccionar “ a priori”
sectores y regiones como objetivos principales de estas actuaciones a nivel nacional. Los policy
maker están inclinados a intervenir en sectores como la biotecnología, nanotecnología, etc,
porque se piensa que son los creadores de empleo del futuro. De la misma manera, ciertas
regiones son consideradas como puntos de innovación porque se les considera generadores de
crecimiento económico nacional. Esto nos presenta una serie de problemas:

1-Este tipo de políticas de “escoger ganadores” subestiman el hecho que es imposible predecir
cual serán las regiones o sectores innovadores en el futuro, ya que los cambios en el entorno
son constantes y podemos cometer el error de escoger de manera errónea. No hay suficiente
evidencia de como se mueven las regiones hacia nuevas direcciones o de como escogen un
sendero de crecimiento u otro ( Martin y Sunley, 2006). Las nuevas industrias son a menudo el
resultado de movimientos espontáneos mas que el resultado de intervenciones planificadas. Si
bien hay que decir que no hay que subestimar el papel de ciertas instituciones, como es el caso
del departamento de defensa en Silicon Valley, que a menudo son obviadas y son uno de los
motivos fundamentales del crecimiento de esta región.

2- El concentrase en ciertos sectores, como es el caso de la biotecnología, puede hacer que la


mayor parte de las regiones intenten concentrarse en el mismo sector, perdiendo variedad, tan
necesaria para la innovación y para adaptarse. Pero además, esta claro que no todas las
regiones tendrán éxito, ya que solo clusterizarán en ciertas regiones con una dotación de
factores adecuada, lo que conllevara un despilfarro tremendo de recursos públicos. Una
excepción debe ser la inversión en tecnología de propósito general, como la banda ancha, que
sirve de estimulo para el desarrollo general de todos los sectores.
La solución pasa por una política basada en variedad relativa, ya que el objetivo es ampliar y
diversificar. No hay que discriminar el uso de las políticas por regiones, todas las regiones son
susceptibles de beneficiarse de ellas.

3-”One size fits all”: Todas las regiones no tienen el mismo potencial de innovación ya que las
regiones tienen un mix distinto en la dotación de factores. Debido a esta diversidad regional no
seria apropiado poner el mismo traje a todas las regiones, como el enfoque neoliberal sugiere.
Se necesita un traje a medida, un enfoque diferenciado en función de su dotación y
potencialidad. Tampoco se puede construir un sistema de innovación regional de la nada. Las
opciones de los resultados de estas política van a estar determinados en gran parte por la
historia regional que se basa en el conocimiento regional y sus instituciones, y que deben usarse
como punto de partida. La política del mismo traje para todos no funciona en una economía
altamente fragmentada. Copiar las mejores practicas, identificadas en los análisis benchmarking,
suele no dar buenos resultados. De esta manera políticas regionales basadas en imitar factores
de éxito como los de Silicon Valley, han fracasado. Las best practice son muy difíciles de adptar
a cualquier entorno. Además estas políticas se centran en los factores de éxito pero no nos dicen
como esa región ha conseguido esa dotación de factores, ni como poder obtener mas potencial,
ni como contribuye la política publica en el éxito de esa región.

4- Es importante considerar también la dimensión temporal y el dinamismo de los elementos que


soportan o apoyan al cluster a la hora de realizar intervenciones publicas. La realidad es que la
acumulación del conocimiento no es continua. Existe una discontinuidad en la forma en que se
absorbe, acumula y utiliza el conocimiento. Por consiguiente, la dimensión temporal es clave
en el diseño de políticas públicas para el desarrollo regional. Lo que funciona para un cluster
maduro puede no funcionar para un cluster en ciernes. La afirmación opuesta también es
posible, dependiendo del momento en que el cluster se encuentre (en etapa embrionaria, de
maduración o en decadencia),algunos elementos resultan más importantes que otros. En etapas
más tempranas, el apoyo gubernamental y de instituciones de soporte resulta crítico.

En suma, el diseño de políticas públicas que se sustentan en nuevos estilos de desarrollo


basados en las potencialidades de lo local (bottom-up)se deben complementar con las políticas
públicas nacionales (top-down). En general, en la literatura que trata sobre la política de clusters
se consideran preferibles las políticas gubernamentales de inducción indirecta que las de
intervención directa, salvo que los fallos del mercado o del sistema sean evidentes y existan
razones para pensar que la intervención del gobierno puede mejorar la situación (como, por
ejemplo, sucede con la financiación de la investigación básica) y en todo caso sin que las
intervenciones supongan medidas encubiertas para políticas de subsidios y protección ante la
competencia. Se propugna favorecer la cooperación e interacción, pero sin menoscabo del clima
competitivo. El gobierno puede actuar como catalizador e intermediario, así como coordinador o
incluso autoridad en los clusters, ayudando a superar los bloqueos y desequilibrios
organizacionales e institucionales y conflictos que impiden el buen funcionamiento del cluster,
pero que no puede crear o impulsar clusters de la nada o donde no haya condiciones previas.

CONCLUSION

Si bien el proceso de globalización plantea nuevos retos a los diferentes territorios, regiones y
localidades, simultáneamente crea un escenario de nuevas oportunidades, las cuales obligan a
incorporar una capacidad endógena de aprendizaje e innovación. Esta capacidad de promover el
aprendizaje y la innovación desde los diferentes territorios o regiones es un factor crucial para la
creación de ventajas competitivas dinámicas. Hay razones para creer que estas estructuras que
fortalecen los procesos interactivos de aprendizaje e interacción de un territorio concreto son
mas importantes que otras características basadas en eficiencia, para determinar el crecimiento
económico y la prosperidad del territorio. (Florida, 2002). Sin embargo y dada la complejidad de
los patrones de interacción y el énfasis en variables “soft”, no medibles, (tales como confianza,
cooperación,inserción social, etc.) no resulta siempre fácil establecer una clara demarcación
entre las aglomeraciones y los clusters. De la misma manera, los cluster están integrados
espacialmente en otras entidades locales regionales y nacionales que determinan también su
desarrollo y adaptación en entornos cambiantes. Estos enfoques, para ser efectivos a la hora de
guiar a los policy makers, deben sobrepasar unas serias limitaciones que ellos mismos se ha
impuesto:

1- Dan por supuesto la existencia de la unidad cluster como objeto de análisis sin considerar su
evolución histórica y como esos territorios han sido históricamente institucionalizados como
espacios políticos-económicos de acción e intervención.

2- Al centrarse en las capacidades endógenas de desarrollo, se ha descuidado la influencia de


los efectos macroeconómicos y las redes externas.

3- Necesidad de reducir la tendencia a suministrar instantáneas (método del caso) de las


regiones con éxito y centrar la cuestión hacia la adaptación y renovación de las regiones y
como pueden estas mantener el crecimiento ante un entorno en continuo cambio que pueden
amenazar las bases de ese crecimiento.

Por otra parte, la teoría cluster de Michael Porter si bien, ha generado controversias en
diferentes enfoques de la literatura económica, ha sido acogida de manera masiva en la agenda
de los policy makers. El enfoque de Porter, lejos de tener influencia en círculos académicos
como modelo holístico de desarrollo regional, está teniendo un efecto colateral importante:
fomentar el consenso en círculos académicos sobre la necesidad de un enfoque multidisciplinar,
que huya de modelos abstractos y se centre de forma realista en servir de guía a los policy
makers, hacia una comprensión del mundo real orientada de una manera más local. Que esto
suceda es un problema de voluntad, de encontrar un “modelo” convincente que incluya los
elementos micro territoriales, micro comportamentales e intangibles del proceso de desarrollo
local y los una a los determinantes macroeconómicos. Esta fertilización cruzada entre la teoría
de localización, la teoría del desarrollo y la teoría del crecimiento macroeconómico, también
requiere las aportaciones de la sociología cuantitativa,que abarca el paradigma del
individualismo metodológico, la psicología social, microeconomía y el “management ,“que
también tiene mucho que decir sobre las distintas estrategias de competencia de las empresas,
su organización en red y las implicaciones que tiene para la cadena de valor la empresa
extendida.

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