El secuestro eterno del poder popular por parte de las ONGs:

Los distintos encuentros internacionales sobre promoción de la salud

han destacado especialmente el refuerzo de la acción comunitaria. de esta

forma, la palabra comunidad aparece con frecuencia en los documentos de las

conferencias. en la carta de ottawa, producto final de la primera conferencia

internacional sobre promoción de la salud, se preconiza la capacitación de la

comunidad para una participación en el control de este proceso la ayuda

recíproca, donde cada uno cuida de sí mismo y de los otros es uno de los

temas centrales de la propuesta de intensificar la autoasistencia y el apoyo

social para desarrollar sistemas flexibles de refuerzo de la participación popular

en la dirección de los asuntos de salud.

Propuestas de trabajo para que los sectores de la sociedad civil

preocupados por la salud llaman a que se organicen y demanden más

inversiones de los gobiernos para eludir la crisis (Valla, 1994). Aunque tal

propuesta se juzgue correcta y prioritaria, lo que se observa en casi toda

América Latina es una cierta perplejidad en cuanto a los resultados obtenidos.

El rígido control fiscal ejercido por los gobiernos centrales y,

consecuentemente, a través de los estados y municipios, como también el

fuerte monitoreo que el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial

ejercen sobre las cuentas nacionales, generan un ambiente tal de penuria y

control que los gobernantes presentan estos límites para justificar el

desatendimiento de las reivindicaciones de los sectores populares organizados

de la sociedad civil.
 Sin duda, los comités de salud representan un espacio importante de

participación popular en el sistema de salud, pues son un espacio formal y legal

para que los representantes de los sectores organizados de la sociedad civil

deliberen sobre los rumbos de la salud en su municipio. Hay, entre tanto, una

experiencia ya acumulada en los Consejos Comunales, lo que indica los

estrechos límites para conseguir que las medidas aprobadas se lleven a la

práctica.

La importancia que las ONGs han asumido como lugar privilegiado del

sector de salud ha resultado en una especie de “acorralamiento” del

movimiento popular en un espacio que muchas veces es burocrático y de poca

representatividad. Tales hechos ciertamente no justifican que el trabajo

desarrollado por las ONGs se disminuya, pero se debe cuestionar por qué no

se piensa en otras alternativas de organización.

Las ONGs a diferencia de los consejos se adjudican y erigen como la voluntad

popular en si, los lucros están fuera de sus objetivos y sobre todas las cosas se

mantienen asépticos y alejados del poder del aparato estatal.

Mediadores de clase media, que no son la voluntad popular, la filtran y hablan

por ella, se lucran claro que se lucran, los capitales son vitales para estos

reproductores del sistema. La búsqueda de recursos es su principal función,

luego en lo operativo de sus proyectos de intervención en comunidades

contratan charlistas y tercerizan sus funciones propias estos recursos

provienen de fuentes privadas y por supuesto sus objetivos están plegados a

los de estos capitales decidan.

En este punto, es interesante evaluar de donde proviene en verdad el dinero

que ellos donan, con tanta magnanimidad, en su mayoría estas empresas

colman sus comercios relacionados al consumo masivo, con programas que

llevan la siguiente metodología, en las cajas registradoras de farmacias y auto

mercados al terminar de realizar su pago, el personal cajero esgrime la frase

celebre “done su vuelto a la fundación tal o cual”. Esta forma de financiación

termina expropiando recurso del bolsillo de consumidores de de los estratos

mas bajos de la sociedad y dejando libre los bolsillos de estas compañías para

engordar sus bienes.

Existen organizaciones que han visto inconveniente la obtención de dinero de

manos privadas y se han ligado a procesos financistas del Estado que tanto

desprecian, las más simplistas del Estado Nacional, otras de Estados foráneos

y los más voraces del Estado Global.

Por ejemplo de ello la Iglesia católica española recibe del Estado para su

mantenimiento millones de euros anuales, el Gobierno paga los salarios de los

sacerdotes castrenses y penitenciarios, los gastos más importantes dedicados

al culto; ha eximido a la Iglesia de los principales impuestos hasta hacerla vivir

en un auténtico paraíso fiscal. Pero además, ha posibilitado otra vía de

financiación al dejar que muchas congregaciones. Fundaciones e institutos se

transformen en ONG, hasta recibir al año la mitad de esos millones de euros

en “solidaridad” y “ayuda al desarrollo”

 la prevención en salud es uno de sus mas preciados trofeos, ajustar,

denunciar, charlar sobre enfermedad es una golosina facil de tragar, proceso y

proyectos de prevención con efectividad limitada, siempre se verán como

altruistas o desinteresados y efectivos pero hay ejemplos claros de su

ineficacia y poca sostenibilidad en el tiempo uno de ellos reconoce el hecho de

que la información no es suficiente para cambiar un comportamiento

sabidamente perjudicial. Por ejemplo, en una reciente Investigación Nacional

sobre Demografía y Salud, realizada en 1996 en Brasil, cerca del 80% de los

16,461 entrevistados sobre su comportamiento sexual declaró saber que el uso

del condón puede prevenir el SIDA, pero sólo 4% de las mujeres y 14% de los

hombres declararon usar el preservativo en sus relaciones sexuales.

El foco de atención de los programas de comunicación de salud es

trazar estrategias comunitarias para facilitar los cambios normativos en las

conductas garantizando por ende la sustentabilidad con el tiempo. Los

programas comunitarios efectivos se diseñan utilizando el conocimiento del

lugar. Se pueden formular estrategias efectivas de cambio de conducta sobre la

base de este conocimiento, que se pueden aplicar a hogares y comunidades

diferentes. En términos generales, los cambios de conducta se producen

solamente por medio de programas educativos comunitarios a largo plazo bien

establecidos.

Estos procesos también se ven inmersos en el capital social del

colectivo, supuestamente crean valores con sus intervenciones, pero como

estas organizaciones pueden enseñar lo que no practican en su cotidianidad.

Conversan sobre solidaridad pero son sectarios en la aceptación de sus

miembros, hablan mal del poder pero lo anhelan para ejercerlo en beneficio por
supuesto de sus financistas, potencias internacionales, embajadas y del capital

privado de grandes trasnacionales.

En Venezuela la acción injerencista de estas organizaciones han sido

denunciadas por parte del Estado Nacional en múltiples oportunidades, debido

a las fuentes de financiamiento así como las actividades realizadas por las

mismas en aspectos políticos de la vida pública.