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Edwards
Grupo Cardiovascular
Edwards Critical-Care Division
Edwards
Monitorización
hemodinámica invasiva:
principios fisiológicos y
aplicaciones clínicas
APLICACIONES CLINICAS...........................................................................................................
Evaluación del rendimiento cardíaco........................................................................................
Significación de las mediciones hemodinámicas.....................................................................
Mediciones directas ....................................................................................................................
Parámetros derivados..................................................................................................................
MONITORIZACION INTRAARTERIAL......................................................................................
Componentes del pulso arterial.................................................................................................
Ondas arteriales en el diagnóstico diferencial.........................................................................
RESUMEN..........................................................................................................................................
BIBLIOGRAFIA ................................................................................................................................
APENDICE I.......................................................................................................................................
Parámetros hemodinámicos........................................................................................................
i
Durante los últimos 25 años, la práctica de la medicina intensiva ha cambiado INTRODUCCION
mucho, debido en parte a la formación de unidades especializadas de atención al
paciente, a los avances tecnológicos y a un mejor conocimiento de la fisiología
por parte de los profesionales sanitarios.
Uno de los primeros avances tecnológicos que ayudó a impulsar este progreso
fue el desarrollo, en el decenio de 1960, del catéter de Swan-Ganz. A principio
del decenio de 1970, la adición de un termistor al catéter permitió la evaluación
rápida del gasto cardíaco. Al mismo tiempo se desarrollaron sistemas de
monitorización más sofisticados. En consecuencia, se pudieron llevar a cabo
evaluaciones hemodinámicas más completas y con relativa facilidad a la cabecera
del paciente.
1
ANATOMIA Corazón derecho y corazón izquierdo
FUNCIONAL
En esta sección se revisan la anatomía funcional cardíaca y la fisiología aplicada.
Estos conceptos constituyen la base de la monitorización hemodinámica.
El corazón izquierdo es una unidad similar que recibe sangre oxigenada del
sistema pulmonar. Está considerado como un sistema de alta presión, ya que el
ventrículo izquierdo necesita generar una mayor presión para bombear la sangre
a través de la válvula aórtica, hacia la aorta y luego hasta la circulación sistémica.
Por tanto, el sistema circulatorio está constituido por dos circuitos dispuestos en
serie : la circulación pulmonar, que es un sistema de baja presión con baja
resistencia al flujo sanguíneo, y la circulación sistémica, que es un sistema de alta
presión con alta resistencia al flujo sanguíneo.
2
Circulación sistémica
Estructura anatómica,
Localización y abreviaturas
Figura 1
3
CICLO
CARDIACO El ciclo cardíaco está constituido por la actividad estrechamente sincronizada de
aurículas y ventrículos. La secuencia es prácticamente la misma para los lados
derecho e izquierdo del corazón. En términos generales, las dos fases básicas son
la sístole y la diástole. Sin embargo, al examinar los ciclos con más detalle, se
observa que ambas poseen diferentes subfases. El objetivo de esta sección es
comentar las fases importantes del ciclo cardíaco.
El primer tipo de ciclo cardíaco que debe ocurrir es el ciclo cardíaco eléctrico. La
fase inicial es la despolarización, que comienza en el nodo sinusal y se extiende
como una onda de corriente eléctrica por las aurículas. Esta corriente se
transmite después por los ventrículos. Después de la onda de despolarización, las
fibras musculares se contraen, lo que produce la sístole.
Figura 2
4
Como ya se ha mencionado, los términos sístole y diástole se suelen utilizar en
relación con la actividad ventricular, ya que son los ventrículos los responsables
de realizar la función de bomba. Es importante recordar que, mientras los
ventrículos están en sístole, las aurículas están en diástole y viceversa. Esto
resultará más claro al considerar las diversas fases del ciclo cardíaco.
Sístole
La primera fase de la sístole se denomina fase isovolumétrica o isométrica, y se
muestra en el registro de presión. Esta fase tiene lugar después de la onda QRS
causada por la despolarización ventricular en el ECG. En ese momento están
cerradas todas las válvulas del corazón. La onda de despolarización ventricular
produce un acortamiento de las fibras musculares, lo que ocasiona un aumento de
la presión en los ventrículos. Una vez que esta presión supera a la existente en la
arteria pulmonar (para el ventrículo derecho) y en la aorta (para el ventrículo
izquierdo), se abren las válvulas aórtica y pulmonar. Es durante la fase
isovolumétrica cuando se consume la mayor parte del oxígeno suministrado al
miocardio.
Durante esta fase las aurículas están en diástole. Existe un aumento del volumen
de sangre auricular procedente de los flujos de entrada pulmonar y venoso. Este
aumento de volumen ocasiona una elevación de la presión. Esta elevación
resultante de la presión se registra como una onda “v” en el registro de la onda
auricular.
5
Diástole
La transición entre sístole y diástole es el resultado de la continuidad de los
cambios de presión entre el corazón y los grandes vasos. Al igual que la sístole, la
diástole está precedida por un acontecimiento eléctrico, conocido como
repolarización. Después de la repolarización comienzan a relajarse las fibras
musculares.
6
Ciclo cardíaco mecánico
Figura 3
Figura 3a Figura 3b
• Sigue al QRS del ECG • Tiene lugar durante el segmento • Tiene lugar durante la onda T
• Todas las válvulas están ST • Las aurículas están en diástole
cerradas • Eyección del 80% al 85% del • Produce la onda “v” en el
• Se consume la mayor parte del volumen sanguíneo registro auricular
oxígeno
1ª fase 2ª fase
7
FISIOLOGIA 3ª fase
Figura 3e
La capacidad del corazón para actuar como bomba está estrechamente regulada,
a fin de asegurar un aporte adecuado que cubra las necesidades metabólicas de
los tejidos. En ciertas condiciones fisiológicas, que pueden oscilar desde la
enfermedad hasta el ejercicio, el corazón normal tiene capacidad de
compensación para cubrir las demandas que se le plantean.
En esta sección se comentará cada uno de los determinantes, así como sus
acciones reguladoras y sus mecanismos compensadores.
Gasto cardíaco
El gasto cardíaco (en litros/minuto) se define como la cantidad de sangre
impulsada desde el ventrículo (principalmente el ventrículo izquierdo) en un
minuto. Es el término que se utiliza para designar la eficacia de la bomba y la
función ventricular del corazón - el rendimiento cardíaco.
Donde :
8
Figura 4
9
DETERMINANTES Frecuencia cardíaca
DEL GASTO
La mayoría de los corazones sanos toleran modificaciones de la frecuencia
CARDIACO cardíaca desde 40 hasta 170 latidos por minuto. Cuanto más comprometida está
la función cardíaca, más estrecho se hace este margen.
Volumen sistólico
El volumen sistólico (VS) es la cantidad de sangre impulsada fuera del ventrículo
izquierdo cada vez que éste se contrae. Es la diferencia entre el volumen
telediastólico (VTD), o cantidad de sangre presente en el ventrículo izquierdo al
final de la diástole, y el volumen telesistólico (VTS), o cantidad de sangre
presente en el ventrículo izquierdo al final de la sístole. El volumen sistólico
normal es de 60 a 100 ml/latido.
VS = VTD - VTS
VS
FE = x 100
VTD
El volumen sistólico, como componente del gasto cardíaco, está influido por los
otros tres determinantes de la función cardíaca : precarga, poscarga y
contractilidad, todos ellos interrelacionados. En muchos casos, cuando altera uno,
también lo hace el otro, y así sucesivamente.
10
Ley de Frank-Starling
La relación entre el volumen sistólico y el rendimiento cardíaco fue descrita a
finales del decenio de 1890 y principios del de 1900 por los Dres. Frank y Starling.
Curva de Frank-Starling
Figura 5
11
Precarga
La precarga se refiere al grado de estiramiento de la fibra miocárdica al final de
la diástole. También es la cantidad de volumen presente en el ventrículo en esta
fase. En realidad, es muy difícil medir la longitud de la fibra o el volumen a la
cabecera del paciente. Desde el punto de vista clínico, se ha considerado que la
medida de la presión necesaria para llenar los ventrículos (PLLVI) era una
medida aceptable del volumen telediastólico ventricular izquierdo (VTDVI) o de
la longitud de la fibra.
Curvas de complianza
A : Complianza normal
B : Complianza disminuida
C : Complianza aumentada
Figura 6
12
Poscarga
Este término se refiere a la resistencia, impedancia o presión que el ventrículo
debe superar para impulsar su volumen sanguíneo. La poscarga está determinada
por una serie de factores : volumen y masa de la sangre impulsada, tamaño del
ventrículo y espesor de su pared, e impedancia de la red vascular. En el contexto
clínico, la medida más sensible de la poscarga es la resistencia vascular sistémica
(RVS) para el ventrículo izquierdo y la resistencia vascular pulmonar (RVP) para
el ventrículo derecho. En realidad, la resistencia del sistema vascular se deriva de
las mediciones del gasto cardíaco (GC) y de la presión arterial media (PAM).
Las fórmulas para calcular la poscarga se basan en la diferencia de gradiente
entre el principio (flujo de entrada) del circuito y el término (flujo de salida) del
mismo.
(PAM - PAD) x 80
RVS =
GC
Valor normal :
800 - 1200 dinas/s/cm-5
Donde :
(PMAP - PEAP)
RVP = x 80
GC
Donde :
13
Figura 7
Figura 8
Contractilidad
El inotropismo es la propiedad de acortamiento inherente a las fibras musculares
miocárdicas sin modificación de la longitud de la fibra o de la precarga. Existen
múltiples factores que influyen en el estado contráctil del miocardio.
14
Al igual que los efectos de los cambios de la poscarga sobre la función
ventricular, los cambios de la contractilidad también se pueden representar por
una curva. Es importante señalar que los cambios de la contractilidad provocan
desplazamientos de las curvas, pero no de su forma básica subyacente.
A : Contractilidad normal
B : Contractilidad aumentada
C : Contractilidad disminuida
A : Contractilidad normal
B : Contractilidad aumentada
C : Contractilidad disminuida
Figura 9
Resumen
Dado que la función ventricular se puede representar como una familia de curvas,
las características del rendimiento cardíaco se pueden desplazar de una curva a
otra, dependiendo del equilibrio de los cuatro determinantes principales de la
función cardíaca. Al evaluar el estado hemodinámico del paciente es preciso
tener en cuenta las interrelaciones entre frecuencia cardíaca, precarga, poscarga
y estado contráctil del miocardio.
15
El consumo miocárdico de oxígeno es la cantidad de oxígeno utilizada por el
CONSUMO corazón para realizar su función. La carga de trabajo del corazón es costosa,
MIOCARDICO incluso en los períodos de reposo. Normalmente, el miocardio consume alrededor
DE OXIGENO del 65%-80% del oxígeno que recibe. En el momento actual no es posible medir
directamente el consumo miocárdico de oxígeno.
La perfusión del ventrículo izquierdo por las arterias coronarias tiene lugar sobre
todo durante la diástole. El aumento de la tensión de la pared ventricular durante
la sístole aumenta la resistencia hasta tal punto que es muy escasa la cantidad de
sangre que fluye al endocardio. El ventrículo derecho posee menos masa
muscular y, por tanto, menos tensión en la pared durante la sístole, de modo que,
debido a la menor resistencia, el flujo sanguíneo que llega al ventrículo derecho
por la arteria coronaria derecha durante la sístole es mayor. Para que ambas
arterias coronarias sean perfundidas se precisa una presión diastólica adecuada
en la raíz aórtica.
Figura 10
16
En la parte correspondiente a la demanda del consumo miocárdico de oxígeno se
encuentran todos los determinantes del rendimiento cardíaco. La manipulación del
BASE FISIOLO-
gasto cardíaco no se realiza sin coste para el corazón. GICA DE LA
MONITORIZA-
En muchas enfermedades resulta difícil aumentar el aporte, mientras que los
factores de la demanda pueden estar muy aumentados. Siempre que se produce CION DE LA
un aumento de la demanda es preciso tener en cuenta el riesgo de que aumente el PRESION EN
consumo miocárdico de oxígeno, ya que el miocardio carece relativamente de ARTERIA
reserva de oxígeno.
PULMONAR
A través de la monitorización hemodinámica es posible realizar diversas
intervenciones terapéuticas para modificar factores de la demanda como la
precarga, la poscarga, la contractilidad y la frecuencia cardíaca. Estas
intervenciones y sus efectos se tratarán en una sección posterior.
Figura 11
A finales del decenio de 1960 y principios del decenio de 1970, los Dres. H.J.C.
Swan y William Ganz desarrollaron un catéter flotante con un balón en su
extremo. Su función era la medición continua de ciertas presiones intracardíacas
a la cabecera del paciente. Antes, para realizar una evaluación más completa de
la función cardíaca era necesario trasladar al paciente al laboratorio de
cateterismo y sólo se podían obtener valores intermitentes.
Desde el diseño inicial del catéter se han introducido numerosos avances para
obtener datos hemodinámicos adicionales, como las presiones de aurícula
derecha. Posteriormente se añadió un termistor para realizar determinaciones del
gasto cardíaco.
17
Las cuatro figuras siguientes muestran la justificación del catéter de Swan-
Ganz. En ellas se representa la colocación adecuada del extremo del catéter
después de la inserción y, a menos que se indique lo contrario, las presiones
registradas en la luz distal.
Nota: Para una descripción más detallada de la inserción del catéter, consúltese
el prospecto del producto, “Procedimiento para la inserción de los catéteres de
Swan-Ganz”, de Edwards Critical-Care División.
18
Ventrículos en sístole
Figura 12
En la figura 12, el balón está desinflado y los ventrículos están en sístole. Durante
esta fase del ciclo cardíaco, las válvulas mitral y tricúspide están cerradas,
mientras que las válvulas pulmonar y aórtica están abiertas. La mayor presión
generada por el ventrículo derecho durante la contracción se transmite al extremo
del catéter situado en la arteria pulmonar. El catéter registra la presión sistólica
en arteria pulmonar (PSAP), reflejo de la presión sistólica en el ventrículo
derecho (PSVD), que en este momento constituyen una cámara común con
volumen y presión comunes.
19
Ventrículos en diástole
Figura 13
En la figura 13, durante la diástole, las válvulas mitral y tricúspide están abiertas.
Los ventrículos se están llenando de sangre procedente de sus respectivas
aurículas. En este momento, las válvulas pulmonar y aórtica están cerradas.
20
Como se muestra en la figura 14, el balón ahora está inflado. Al inflar el balón, el
catéter flota corriente adelante hasta alojarse en una rama más pequeña de la
arteria pulmonar. Una vez alojado el balón, se considera que el catéter está
“enclavado”. Es en esta posición de enclavamiento cuando las presiones
diastólicas del lado derecho y de la AP están efectivamente ocluidas.
Figura 14
Dado que no existen válvulas entre la válvula pulmonar y la mitral, y que el lecho
capilar pulmonar es un sistema distensible, ahora existe un canal vascular sin
restricciones que, desde el extremo del catéter situado en la arteria pulmonar,
pasa por el lecho vascular pulmonar, la vena pulmonar, la aurícula izquierda, la
válvula mitral abierta y llega hasta el ventrículo izquierdo. La luz distal está
monitorizando ahora más estrechamente la presión de llenado ventricular
izquierdo o presión telediastólica del ventrículo izquierdo.
21
La importancia de esta presión radica en que normalmente es muy aproximada a
la presión existente en el ventrículo izquierdo al final de la diástole, por lo que
permite medir la precarga ventricular.
Figura 15
22
En las secciones previas se ha comentado la base fisiológica de la monitorización TECNICAS
hemodinámica. En esta sección se describirán las técnicas de inserción, las ondas DE INSERCION
características observadas durante la misma y las ventajas de la monitorización
continua de la arteria pulmonar. DEL
CATETER DE
Antes de la inserción del catéter de Swan-Ganz se preparará el sistema de
monitorización de presión para su utilización de acuerdo con las pautas y
SWAN-GANZ
procedimientos de la institución.
Los puntos habituales de inserción por vía percutánea son las venas yugular
interna, subclavia y femoral. Para la técnica de venotomía se pueden utilizar la
fosa antecubital derecha o izquierda. El abordaje por vena subclavia puede dar
lugar a la formación de bucles en el catéter debido a las variaciones anatómicas y
a la angulación del introductor. La formación de bucles puede dar lugar a ondas
amortiguadas. En ocasiones es necesario volver a colocar en posición el catéter.
Distancia hasta
Localización la unión vena cava/AD (cm)
Yugular interna 15 a 20
Vena cava superior 10 a 15
Vena femoral 30
Fosa antecubital derecha 40
Fosa antecubital izquierda 50
El avance del catéter hasta la arteria pulmonar debe ser rápido, ya que la
manipulación prolongada puede ocasionar la pérdida de rigidez del catéter.
En segundo lugar, las cámaras del lado derecho del corazón muestran presiones y
formas de onda características. La arteria pulmonar también posee presiones y
ondas características. Mediante la visualización en un monitor de las diversas
ondas y presiones se puede determinar la situación del catéter.
23
Una vez que el extremo del catéter ha alcanzado la unión de la vena cava
superior o inferior con la aurícula derecha, se infla el balón con aire o con CO2
hasta alcanzar el volumen completo indicado en el cuerpo del catéter (7 a 7,5 F;
1,5 cc). Esta posición está indicada por la presencia de oscilaciones respiratorias
en la pantalla del monitor. La primera cámara que se alcanza es la aurícula
derecha. Las presiones son normalmente bajas y producirán dos pequeñas ondas
positivas.
Figura 16
Figura 17
24
Cuando el catéter flota dentro de la arteria pulmonar (no en posición de
enclavamiento), de nuevo se pueden observar ondas características.
Dado que las presiones diastólicas son más altas en la arteria pulmonar que en el
ventrículo derecho, durante la inserción se prestará atención especial a las
mismas. Las presiones sistólicas del ventrículo derecho y de la arteria pulmonar
son casi iguales, por lo que, si se monitorizan durante la inserción puede ser difícil
distinguir entre una y otra localización del extremo del catéter pulmonar. Sin
embargo, si se observan las presiones diastólicas, se notará una elevación de la
misma una vez alcanzada la arteria pulmonar.
Figura 18
25
Ahora se hace avanzar aún más el catéter, con el balón todavía inflado, hasta que
finalmente se enclava en una rama central de la arteria pulmonar. En este punto
se ocluyen las presiones del corazón derecho y las influencias pulmonares. El
extremo del catéter está “mirando” a las presiones del corazón izquierdo. La
onda reflejada será la de la aurícula izquierda. Las presiones registradas serán
ligeramente más altas que las de la aurícula derecha (6 mmHg a 12 mmHg). La
onda tendrá dos pequeñas eminencias redondeadas que corresponden a la sístole
y a la díastole de la aurícula izquierda.
Figura 19
Figura 20
26
Tabla 1.
Presiones hemodinámicas típicas
Localización Valores normales en mmHg
Aurícula derecha
Auricular derecha (PAD) -1 a +7
Media (PMAD) 4
Ventrículo derecho
Sistólica (PSVD) 15 a 25
Diastólica (PDVD) 0a8
Arteria pulmonar
Sistólica (PSAP) 15 a 25
Diastólica (PDAP) 8 a 15
Media (PMAP) 10 a 20
Enclavamiento (PEAP) 6 a 12
27
Edwards Critical-Care.La monitorización continua de la presión de la arteria
pulmonar es importante por varias razones. En primer lugar, el tratamiento
dependerá de los valores obtenidos en los registros continuos de arteria pulmonar
y en los intermitentes de enclavamiento. En segundo lugar, los cambios en la
posición del catéter suponen riesgos potenciales para el paciente.
Posición correcta en la AP
Figura 21
Figura 22
28
Esta migración se debe principalmente al ablandamiento del catéter una vez
calentado a la temperatura corporal. Durante la inserción puede quedar
demasiado catéter en el ventrículo derecho. Este exceso, una vez ablandado lo
suficiente, puede hacer que el catéter se desplace aún más.
Una técnica que ayuda a prevenir esta causa de migración consiste en disminuir
el grado de formación de bucles en el ventrículo derecho mediante la retirada del
catéter 1 a 2 cm una vez obtenido el enclavamiento adecuado. Luego se volverá a
realizar el enclavamiento para comprobar la correcta posición del extremo del
catéter con un volumen de inflado completo o casi completo.
Figura 23
Si esto ocurre, se inflará el balón para proteger al ventrículo derecho y evitar que
se irrite. Dado que se trata de un catéter dirigido por flujo, el simple inflado del
balón puede hacer que vuelva a flotar de nuevo hasta llegar a la arteria pulmonar.
En ocasiones, el cambio de posición del paciente puede conseguir la colocación
adecuada del catéter.
29
Siempre que se retire el catéter desde la arteria pulmonar hasta el ventrículo
derecho, y desde éste hasta la aurícula derecha, se desinflará el balón para
reducir al mínimo el traumatismo valvular.
Tan importantes como la colocación adecuada del extremo del catéter son las
técnicas de inflado correcto del balón. El inflado excesivo puede provocar
sobredistensión de la arteria pulmonar, con el consiguiente peligro de rotura del
vaso.
Técnicas de enclavamiento
Figura 24
Figura 25
30
Si el trazado de enclavamiento aparece con un volumen menor de inflado (por lo
general, menos de 1,5 cc), es posible que el catéter haya emigrado a una
localización más distal. Entonces es necesario retirar el extremo del catéter hasta
situarlo en una arteria pulmonar central.
DURANTE LA INSERCION :
Inflar el balón hasta el volumen completo de inflado. Esto produce un
almohadillado del extremo, que ayuda a disminuir la irritación durante la
inserción. También ayuda a colocar el extremo del catéter en su
localización correcta en una arteria pulmonar central.
Figura 26
ENCLAVAMIENTOS SUBSIGUIENTES :
Para obtener trazados de enclavamiento adecuado deben ser necesarios
volúmenes de inflado completos o casi completos. Si el trazado de
enclavamiento se obtiene con un volumen de inflado inferior a 1,25 a 1,5 cc
de aire, es preciso volver a colocar el catéter.
Figura 27
31
GUIAS RESUMEN 1. Mantener el extremo del catéter en situación central en una rama principal de
la arteria pulmonar.
PARA LA
UTILIZACION • Durante la inserción, inflar el balón hasta el volumen completo
recomendado (1,5 cc) y hacer avanzar el catéter hasta la posición de
SEGURA DE LOS enclavamiento en la arteria pulmonar. Desinflar el balón.
CATETERES DE • Para disminuir o eliminar el exceso de longitud o los bucles en la aurícula o
ARTERIA el ventrículo izquierdos, retirar lentamente el catéter entre 1 cm y 2 cm.
PULMONAR CON • No hacer avanzar el extremo del catéter demasiado periféricamente. Lo
BALON EN SU ideal es que esté localizado cerca del hilio pulmonar. Es preciso recordar
EXTREMO que el extremo emigra hacia la periferia de los pulmones durante el inflado
del balón. Por tanto, es importante que presente una localización central
antes del inflado.
• Mantener siempre el extremo del balón en una posición en la que sea
necesario un volumen de inflado completo o casi completo (1,0 cc a 1,5 cc)
para conseguir un trazado de “enclavamiento”.
2. Prever la migración espontánea del extremo del catéter hacia la periferia del
lecho pulmonar :
• Reducir cualquier exceso de longitud o bucle en la aurícula o el ventrículo
derechos en el momento de la inserción, a fin de evitar la posterior
migración periférica (véase nº 1).
• Monitorizar continuamente la presión en el extremo distal para asegurarse
de que el catéter no se ha enclavado inadvertidamente con el balón
desinflado (lo que puede producir infarto pulmonar).
• Comprobar diariamente la posición del catéter mediante una radiografía de
tórax, a fin de detectar una posible localización periférica. Si se ha
producido la migración, retirar el catéter hasta una posición central en
arteria pulmonar, evitando cuidadosamente la contaminación del punto de
inserción.
• Durante la circulación extracorpórea (ref. 18) se produce la migración
espontánea del extremo del catéter hacia la periferia de los pulmones. Se
valorará la retirada parcial del catéter (3 cm a 5 cm) inmediatamente antes
de iniciar la técnica, ya que dicha retirada puede ayudar a reducir el grado
de migración distal y evitar el enclavamiento permanente del catéter en el
período posterior a la circulación extracorpórea (ref. 18). Una vez
terminado el procedimiento, puede ser necesario volver a colocar el
catéter. Comprobar el trazado distal de arteria pulmonar antes de inflar el
balón.
32
catéter esté enclavado con el balón desinflado. Comprobar la posición del
catéter.
33
• Cuando se vuelve a inflar el balón para registrar la presión de
enclavamiento, añadir el medio de inflado (CO2 o aire) lentamente, bajo
monitorización continua de la onda de presión de la arteria pulmonar.
Suspender inmediatamente el inflado cuando se observe que el registro
de arteria pulmonar cambia al trazado de enclavamiento. Retirar la jeringa
para permitir el desinflado rápido del balón y volver a conectar la jeringa a
la luz del balón. Nunca se debe utilizar aire para inflar el balón en aquellos
casos en que pueda pasar a la circulación arterial (véase Método de
inserción).
• Nunca inflar excesivamente el balón por encima del volumen máximo
señalado en el cuerpo del catéter (1,5 cc). Utilizar la jeringa de volumen
limitado que acompaña al catéter.
• No utilizar líquidos para inflar el balón ; pueden ser irrecuperables e
impedir el desinflado del balón.
• Mantener la jeringa conectada a la luz del balón para impedir la inyección
accidental de líquidos en el interior del mismo.
34
Las posibilidades del catéter de Swan-Ganz comentadas hasta ahora son : DETERMINA-
monitorización de la presión de la arteria pulmonar, capacidad de monitorizar las
presiones de la aurícula derecha y obtención de registros de enclavamiento de la CIONES DEL
arteria pulmonar. Otra posibilidad añadida es la obtención de mediciones del gasto GASTO
cardíaco por el método de termodilución. Mediante la inclusión del gasto cardíaco
se puede obtener una evaluación más completa del rendimiento cardíaco.
CARDIACO
Método de Fick
El “patrón oro” para la determinación del gasto cardíaco se basa en los principios
desarrollados por Adolph Fick en el decenio de 1870. El concepto de este autor
propone que la captación o liberación de una sustancia por un órgano es el
producto del flujo sanguíneo a través de dicho órgano por la diferencia entre los
valores arterial y venoso de la misma sustancia.
35
Aunque el método de Fick ha sido descrito como el “patrón oro”, esta técnica
presenta numerosos inconvenientes. El paciente debe mantener un estado
fisiológico estable en el momento de su realización. Casi todos los pacientes en
los que es necesario realizar mediciones del gasto cardíaco se encuentran en
estado crítico, a menudo definido como “situación inestable”. Otros
inconvenientes relacionados con la técnica son la necesidad de toma simultánea
de muestras de aire espirado y de sangre, el contenido controlado de oxígeno
inspirado y la toma de muestras de sangre arterial.
El método de Fick es uno de los más exactos en los pacientes con gasto cardíaco
especialmente bajo. Pero, debido a sus requisitos técnicos, es uno de los menos
prácticos a nivel clínico.
Figura 28
36
Mediante la toma de muestras continuas de sangre se puede obtener una gráfica
de tiempo-concentración, conocida como curva de dilución del indicador. Una vez
representada dicha gráfica, el gasto cardíaco se puede calcular utilizando la
ecuación de Stewart-Hamilton :
I x 60 1
GC = x
Cm x t k
Donde :
Este método de medición del gasto cardíaco es más exacto en las situaciones de
gasto cardíaco alto. Para realizar adecuadamente esta técnica se precisa un
equipamiento complejo y, por tanto, resulta poco práctico en la clínica.
Método de termodilución
A principios del decenio de 1950, Fegler describió por primera vez la medición del
gasto cardíaco por el método de termodilución, pero hubo que esperar hasta el
decenio de 1970 para que los Dres. Swan y Ganz demostrar la fiabilidad y
reproductibilidad de este método utilizando un catéter especial de arteria pulmonar
con sensor de temperatura. Desde entonces, el método de termodilución para la
medición del gasto cardíaco se utiliza de forma estándar en la práctica clínica.
37
Cuando el gasto cardíaco es bajo se necesita más tiempo para que la temperatura
recupere su valor basal, por lo que el área bajo la curva es mayor. Cuando el
gasto cardíaco es alto, el inyectado frío es transportado con mayor rapidez a
través del corazón, y la temperatura se recupera antes. Ello hace que el área bajo
la curva sea menor.
Figura 29
Figura 30
Figura 31
38
Para calcular el gasto cardíaco se utiliza una ecuación de Stewart-Hamilton
modificada, considerando el cambio de temperatura como indicador ; las
modificaciones consisten en la medición de la temperatura del indicador y de la
temperatura de la sangre del paciente, junto con la densidad de la solución
inyectada.
Donde :
GC = gasto cardíaco
V = Volumen del inyectado (ml)
A = área de la curva de termodilución en m2 dividida
entre la velocidad del papel (mm/s)
K = constante de calibración en mm/ºC
TS, TI = temperatura de la sangre (S) y del inyectado (I)
DS, DI = densidad de la sangre y del inyectado
CS, CI = calor específico de la sangre y del inyectado
(BI x CI)
= 1,08 cuando se utiliza dextrosa al 50 %
(DS x CS)
60 = 60 seg./min
CT = factor de corrección para el calentamiento del
inyectado
39
Existen dos sistemas principales de aporte del inyectado. Uno es un sistema
abierto que utiliza jeringas previamente cargadas, ya sea con solución helada o a
temperatura ambiente. El otro es un sistema cerrado, ya sea para solución helada
o a temperatura ambiente, que se mantiene en un asa cerrada para reducir las
entradas múltiples en un sistema estéril. El usuario puede consultar las
referencias sobre la utilización del sistema de inyección cerrado en comparación
con el abierto.
Figura 32
Las ventajas de esta técnica sobre los otros métodos antes mencionados son su
fiabilidad y su facilidad de realización a la cabecera del paciente. Asimismo, la
posibilidad de realizar determinaciones seriadas del gasto cardíaco, cada minuto
aproximadamente, sin necesidad de tomar muestras de sangre.
40
El catéter de termodilución Swan-Ganz constituye una poderosa herramienta de
evaluación y tratamiento en el paciente crítico. La utilización del catéter no
APLICACIONES
constituye en sí misma una intervención. Por el contrario, se trata de una ayuda CLINICAS
diagnóstica que, si se utiliza adecuadamente y se interpretan correctamente los
datos obtenidos, permite realizar las intervenciones terapéuticas adecuadas.
Antes se pensaba que la función del corazón izquierdo se podía evaluar mediante
la determinación de la presión venosa central (PVC). En aquellos momentos, el
único medio de monitorización existente era el catéter de PVC. Desde la
utilización del catéter de arteria pulmonar, este concepto de la PVC como medio
de monitorizar la presión del corazón izquierdo ha sido descartado.
41
Mediciones directas
La evaluación hemodinámica del paciente puede incluir tanto parámetros
invasivos como no invasivos. A partir de las mediciones directas se pueden
calcular parámetros derivados para lograr una evaluación más completa del
rendimiento cardíaco.
• Frecuencia cardíaca
42
• Gasto cardíaco
Parámetros derivados
A partir de las mediciones directas obtenidas se pueden calcular parámetros
derivados para realizar una evaluación más completa del rendimiento cardíaco, y
normalizar los valores obtenidos según el tamaño corporal.
PAS + (PAD x 2)
PAM =
3
Donde :
• Índice cardíaco
Los límites normales del gasto cardíaco son amplios, desde 4 l/min. hasta 8
l/min. Dado que este valor sirve para evaluar la función del ventrículo, su
normalización según el tamaño corporal ofrecerá una información más
precisa. Para hacer un índice del valor hemodinámico, se calcula la superficie
corporal (SC) del paciente a partir de un nomograma en el que figuran el peso
y la talla. Cualquier valor a normalizar se dividirá entre la SC.
GC
IC =
SC
IC normal = 2,5 a 4,0 l/min./m2
Donde :
GC = Gasto cardíaco
SC = Superficie corporal
IC = Índice cardíaco
43
• Volumen sistólico
GC
VS = x 1000 ml / L
FC
VS IC
IVS = o
SC FC
• Resistencia vascular
44
• Resistencia vascular pulmonar
(PMAP - PEAP) x 80
RVP =
GC
• Trabajo sistólico
Donde :
Donde :
Donde :
45
En la actualidad se diseñan numerosos sistemas nuevos de monitorización
destinados a proporcionar al médico toda la gama de parámetros derivados. Los
parámetros directos fundamentales, que sirven de base para la mayor parte de los
parámetros calculados, son el gasto cardíaco, la tensión arterial media y las
presiones de arteria pulmonar. La incorporación de estos valores a la base de
datos junto con la evaluación clínica del paciente puede ayudar a ajustar con
exactitud la respuesta fisiológica a las intervenciones terapéuticas, así como al
diagnóstico diferencial.
UTILIZACION Los parámetros hemodinámicos no sólo ayudan a evaluar el estado de la función
DEL CATETER ventricular, sino que también proporcionan importante información para ayudar al
DE SWAN- diagnóstico diferencial en aquellos casos en que la presentación clínica es muy
parecida. La utilización de los valores obtenidos puede ayudar también a
GANZ PARA EL “subclasificar” el estado del paciente para dirigir la terapéutica y emitir
DIAGNOSTICO pronósticos.
DIFERENCIAL
Situaciones de gasto bajo
Durante las situaciones de gasto bajo, muchos pacientes presentan presión
arterial baja, valores bajos del gasto cardíaco y signos de mala perfusió n tisular.
La monitorización hemodinámica permite identificar con exactitud el proceso. Si
el paciente está hipovolémico, la PA y el GC serán bajos. Además de estos
valores inferiores a lo normal, la PEAP será baja. El paciente con un posible
shock cardiogénico también tendrá una PA baja y un GC bajo, pero la PEAP será
alta. El infarto de ventrículo derecho es otro proceso con PA y GC bajos. Dado
que la disfunción se sitúa en el lado derecho, las elevaciones de las presiones de
llenado del VD se registrarán como presiones elevadas en la AD. Si no existe
afectación del ventrículo izquierdo, la PEAP será normal o incluso baja.
Subgrupos hemodinámicos en el
infarto agudo de miocardio
(Clasificación de Forrester)*
46
El infarto agudo de miocardio puede producir cuatro subgrupos hemodinámicos
diferentes. James Forrester (ref. 13) estudió la relación entre índice cardíaco,
como medición de la hipoperfusión periférica, y presión de enclavamiento de
arteria pulmonar como medio para evaluar la congestión pulmonar. Mediante la
obtención de estos valores y la colocación del paciente en el subgrupo adecuado,
se pueden fijar con más exactitud los objetivos terapéuticos. Los subgrupos
también se pueden utilizar para hacer valoraciones pronósticas.
Figura 33
47
Insuficiencia mitral aguda : después de nitroprusiato
Figura 34
CIV
Figura 35
48
Los parámetros hemodinámicos permiten diferenciar entre disfunciones de origen
cardíaco y pulmonar. Procesos como la hipertensión pulmonar, con independencia
de su causa, mostrarán elevaciones de la PSAP y de la PDAP. Dado que el
catéter enclavado permite evaluar con mayor exactitud la función del ventrículo
izquierdo, las cifras de enclavamiento serán normales si no existe una enfermedad
ventricular concurrente.
Taponamiento cardíaco
Figura 36
Pericarditis constrictiva
49
Figura 37
50
La monitorización hemodinámica invasiva también se ha utilizado con éxito en la
evaluación preoperatoria de los pacientes de alto riesgo. Con la obtención de
diversos parámetros se puede optimizar la función ventricular antes de la
intervención quirúrgica. Del Guercio (ref. 11) ha desarrollado un sistema de
estadificación preoperatoria basado en la monitorización hemodinámica invasiva.
En consecuencia, los pacientes incluidos en el grupo de afectación moderada o
intensa mostraron mejores tasas de supervivencia después del ajuste fisiológico
fino que los pacientes sin afectación moderada o intensa.
Porcentaje de
Evaluación N % Tratamiento supervivencia
1. Normal 20 13,5 Cirugía según lo planeado 100 %
2. Alteración Monitorización
leve intraoperatoria avanzada
3. Moderada 94 63,5 Ajuste fisiológico fino y 91,5 %
monitorización
intraoperatoria
4. Alteración Intervención quirúrgica
100 %
grave restringida (n = 7)
Cirugía cancelada
34 23 *
(n = 19)
Cirugía según lo planeado
0%
(n = 8)
* Cirugía cancelada ; no incluida en el porcentaje de supervivencia.
51
LIMITACIONES
DE LA
MONITORIZACION
Volumen telediastólico frente a presión telediastólica
HEMODINAMICA
ventricular izquierda
En el apartado de fisiología cardíaca aplicada se comentó que, debido en parte a
la complianza ventricular, la relación entre presión y volumen adopta la forma de
una curva. Cuando disminuye la complianza del ventrículo y éste se hace, por
tanto, más rígido, la misma cantidad de volumen genera una presión más alta.
Cuando la complianza del ventrículo es mayor ocurre lo contrario. Cuando el
ventrículo se hace menos rígido, es capaz de contener más volumen con menos
presión. La identificación de las condiciones que modifican la complianza dará
más validez a los resultados obtenidos.
Existen situaciones en las que los registros de enclavamiento son menores que la
PTDVI real. En procesos en los que la PTDVI está muy elevada, como ocurre
cuando la complianza está muy disminuida, con presiones superiores a 25 mmHg,
la PTDVI registrada será menor. Ello se debe en parte al aumento de la
complianza del lecho vascular pulmonar, que refleja inadecuadamente las
presiones elevadas. La regurgitación aórtica también puede producir un aumento
de la PTDVI debido al flujo retrógrado. En las primeras fases, esta presión
retrógrada no se refleja en su totalidad en la aurícula izquierda y, por último, en el
enclavamiento.
52
Situaciones en las que la PEAP es
mayor que la PTDVI
• Estenosis mitral
• Mixoma de aurícula izquierda
• Embolia pulmonar
• Regurgitación mitral
• Aumento de la RVP
• Hipertensión pulmonar
• "Cor pulmonale"
• Embolia pulmonar
• Síndrome de Eisenmenger
53
Las variaciones respiratorias, la aplicación de PEEP y la zona pulmonar de
localización del catéter puede dar lugar asimismo a valores inexactos.
54
En la zona 1, la presión alveolar es mayor que la presión arterial pulmonar y que
la presión venosa pulmonar. En consecuencia, no existe flujo sanguíneo
procedente del lecho capilar pulmonar colapsado. Dado que el catéter de Swan-
Ganz está dirigido por el flujo, lo más probable es que no se sitúe en esta
localización.
55
Ciertas influencias mecánicas o técnicas pueden afectar también a la exactitud de
los valores obtenidos. La colocación inadecuada del transductor, sistemas de
presión infraóptimos, junto con interferencias eléctricas, pueden alterar el
registro. Como ya se ha mencionado, el inflado excesivo del balón puede dar
lugar también a valores erróneos. En muchas circunstancias, la optimización del
sistema de presión y el manejo adecuado del sistema electrónico eliminarán estas
dificultades
Complicaciones
Aunque no existen contraindicaciones absolutas para la utilización del catéter de
Swan-Ganz, los catéteres permanentes conllevan ciertos riesgos y complicaciones
generales. Casi todas se pueden eliminar o reducir si se está familiarizado con las
técnicas de inserción, con el mantenimiento del catéter y con la historia del
paciente.
56
Otro medio de evaluar el estado hemodinámico del paciente consiste en la MONITORIZA-
monitorización directa de la presión intraarterial. La utilización de un catéter
intraarterial, un sistema de monitorización de presión y un transductor permite la
CION INTRA-
observación continua de la presión arterial sistémica del paciente. Muchos ARTERIAL
amplificadores de monitorización son capaces de calcular la presión arterial
media a partir de la onda arterial, cifra utilizada habitualmente para el cálculo de
los parámetros hemodinámicos derivados.
El contorno del pulso arterial cambia durante su trayecto desde la raíz aórtica
hasta la periferia. Estos cambios se deben en parte a la diferencia en cuanto a
características elásticas de los diferentes puntos arteriales y, también, a la pérdida
de parte de la energía cinética. Al hacerse la onda más distal, el latido se hace
más brusco, con una mayor presión sistólica y una menor presión diastólica.
Incluso con estos cambios, la presión arterial media sigue siendo la misma.
57
Componentes del pulso arterial
Al igual que las ondas intracardíacas, las ondas arteriales son consecuencia de
una función mecánica. Las ondas arteriales se producen después de la activación
eléctrica del corazón. Cuando se evalúan las ondas arteriales junto con las ondas
eléctricas, se observará primero la actividad eléctrica seguida por la actividad
mecánica.
Figura 39
• Escotadura dícrota
58
• Presión diastólica
Este valor está relacionado con el nivel de retroceso del vaso o con el grado de
vasoconstricción en el sistema arterial. Existe también una relación entre la
presión diastólica y el tiempo diastólico durante el ciclo cardíaco. Durante la
diástole debe haber un tiempo grande para que la sangre del sistema arterial
drene hacia las pequeñas ramas arteriolares. Cuando la frecuencia cardíaca es
más rápida y, por tanto, el tiempo diastólico es más corto, queda menos tiempo
para el drenaje hacia las ramas más distales. El resultado es una presión
diastólica más alta. Esta disminución de la presión durante la diástole recibe el
nombre de rama descendente.
• Escotadura anácrota
Onda arterial
Figura 40
59
Presión arterial media
Este valor refleja la presión media en el sistema arterial durante un ciclo cardíaco
completo de sístole y diástole. La sístole requiere una tercera parte del tiempo del
ciclo cardíaco, mientras que la diástole necesita dos tercios. Esta relación
cronológica se refleja en la ecuación para calcular la PAM.
S + (D x 2)
PAM = o D + PP
3
Donde :
PAM = Presión arterial media
S = Presión arterial sistólica
D = Presión arterial diastólica
ONDAS PP = Presión del pulso
ARTERIALES EN La monitorización continua de la presión arterial no sólo proporciona información
EL relativa a dicha presión, sino que también permite evaluar el estado
DIAGNOSTICO cardiovascular mediante la observación de las características de la onda. Ciertas
situaciones clínicas pueden no resultar aparentes por la simple observación de los
DIFERENCIAL registros de arteria pulmonar. La observación de la onda arterial añade otra
dimensión a la evaluación del paciente.
La estenosis aórtica produce una onda de pulso pequeña, con un pico sistólico
retrasado. Esta menor presión sistólica es el resultado del enlentecimiento de la
eyección ventricular a través de la válvula aórtica estenótica. La escotadura
dícrota a menudo no está bien definida, debido al cierre anormal de las hojas de la
válvula durante el comienzo de la diástole. Dado que la presión sistólica es menor,
estos pacientes muestran una presión del pulso estrecha.
Estenosis aórtica
Figura 41
60
La insuficiencia aórtica también se conoce como regurgitación aórtica. Esta
situación se identifica clásicamente como una presión del pulso ancha. Durante la
diástole, el ventrículo izquierdo recibe más flujo sanguíneo retrógrado debido a la
incompetencia de la válvula. Este aumento del volumen sanguíneo se refleja en
una presión sistólica pico más alta durante la siguiente sístole.
Insuficiencia aórtica
Figura 42
Las alteraciones del ritmo cardíaco también afectan al carácter de los registros
arteriales. La fibrilación auricular, con su clásica irregularidad, produce ondas
arteriales de amplitudes variables. Durante los episodios de complejos
ventriculares prematuros, el acortamiento del tiempo de llenado diastólico también
se observa como una disminución consiguiente de la amplitud sistólica.
Fibrilación auricular
Figura 43
61
El pulso alternante es una anormalidad consistente en la aparición de alteraciones
regulares de la amplitud de las presiones sistólicas pico durante un ritmo sinusal
normal. Este proceso puede ser consecuencia de alteraciones del calcio o de las
fibras musculares del miocardio. El pulso alternante es un signo visual importante
en los pacientes con insuficiencia ventricular izquierda grave. Clínicamente, las
variaciones de la amplitud pueden ser difíciles de palpar en una arteria periférica.
Pulso alternante
Figura 44
62
Entre los procesos más frecuentes se encuentran las inspiraciones excesivas, ya
sea por causas relacionadas con el paciente, por causas fisiopatológicas y por
enfermedades pericárdicas. El mecanismo de producción difiere según la
etiología subyacente. Un mecanismo habitual es la alteración del retorno venoso
al corazón derecho y los cambios en las presiones intratorácicas o
intrapericárdicas.
Pulso paradójico
Figura 45
63
RESUMEN La medicina y la tecnología han avanzado mucho en los últimos decenios. Al
tiempo que aumenta la sofisticación de la tecnología lo hacen los requisitos que
debe cumplir el médico intensivista.
64
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APENDICE 1
Parámetros hemodinámicos
VS
FE = 0,67
VDE
68
Edwards Critical-Care Division
Edwards