10 “Reglas Clave del

Juego”
en el mundo
corporativo

Olman Martínez,
Universidad de las
Ventas.
El tener éxito en una organización depende de una serie de factores, unos de orden técnico y de conocimiento, otros
de orden humano y de relaciones. Y aunque la mayoría de ellos resultan obvios para quien intenta sobresalir en la
organización, es conveniente refrescarlos periódicamente y comprenderlos.
El proceso de triunfar dentro de una empresa tiene sus reglas. Son reglas generalmente no escritas, sino
“comprendidas” por la mayoría. Lamentablemente, algunas personas no están plenamente conscientes de que esas
reglas existen, y entonces no pueden aplicarlas. O tal vez están jugando con otras reglas.

Es importante comprender “en qué juego estamos”, “qué juego estamos jugando”. Si es –como la mayoría—ese
apasionante juego de surgir dentro de la empresa, entonces conozcamos hasta donde nos sea posible las reglas del
juego y apliquémoslas sistemáticamente en nuestro diario quehacer.

Vamos a compartir 10 reglas “universales” para tener éxito en las organizaciones. Analice usted cuáles de ellas ya
está cumpliendo, y decídase a “afinar” aquellas que tal vez aún no conocía. Vale indicar antes que las que siguen no
son todas las “reglas” que existen. Sin embargo, son algunas de las más importantes.
1. Conozca la cultura de la organización.

A veces los jóvenes profesionales ingresan a la empresa con mucha energía y decididos a aportar y a “cambiar las
cosas” desde el primer día, pero terminan, lamentablemente, chocando contra un muro. Al ingresar se proyectan
como una amenaza para muchos de los que ya integran la organización, y ello puede llevarlos a no contar con el
apoyo de los ejecutivos y compañeros de más trayectoria. Es importante conocer bien el terreno en donde estamos
parados, antes de intentar comenzar la carrera.

2. Móntese un plan y sígalo.

Un plan requiere que usted se ponga una meta clara, precisa, concreta, y que luego desarrolle una serie de acciones
que lo acercarán a lograr esa meta. Si usted desea progresar, necesita montarse un plan. Si no, estaría dejando que
sean las circunstancias, y no su decisión, la que guíe su desarrollo. El tener un plan es parte de las reglas del juego
para triunfar.
3. Ayude a su jefe a triunfar.

Este punto es fundamental. Muchas personas pasan su vida laboral luchando contra el poder establecido de sus
jefes, y al final dicen que “no tuvieron suerte”. Pelar con el jefe es una de las tácticas más perdedoras del mundo
corporativo. Su jefe inmediato tiene aspiraciones igual que usted; él desea ser reconocido y apreciado por sus
colaboradores pero también por sus superiores. En la medida en que usted le ayude a lograr sus propios (sanos)
objetivos personales, muy seguramente él le ayudará a usted.

4. No es lo mucho que trabaje, sino cuánto aporta.

Hoy las organizaciones no premian necesariamente a quien parece estar sobrecargado de trabajo, ni a quien se lleva
proyectos para trabajarlos el fin de semana en la casa. Hoy se reconoce a la gente por cuánto están aportando al
éxito y a los objetivos de la organización. Cuando usted es un trabajador “contribuyente”, el reconocimiento le llega
casi automáticamente. Recuérdelo: no es trabajar más, sino trabajar más inteligentemente.
5. Involúcrese con los objetivos globales de la organización.

Eso usted lo logra estando enterado y aprovechando el caudal de información que existe, No esté contento s
sólo con conocer sobre su sucursal, agencia u oficina, o sobre el producto que tiene asignado. Intente conocer y
manejar lo mejor posible “el gran cuadro”. Lea el plan comercial, devore las noticias que le llegan por medios
impresos, recoja brochures de otras áreas y léalos. Entre más se involucre usted con el macropanorama, más
posibilidades tendrá de trascender el puesto que tiene actualmente.

6. Monte su “círculo de relaciones”.

Esta es una regla no escrita pero permanentemente presente en todas las organizaciones. Tan importante es lo que
usted conoce, como a quién conoce. Las personas solitarias o poco “gregarias” generalmente no tienen tanta
oportunidad de crecer. Es importante identificar a ejecutivos de otras áreas con quien usted pueda mantener una
amistosa relación y un contacto profesional. La técnica del “automercadeo en red”, como se le llama a montar su
“círculo de relaciones”, le asegurará a usted que en un momento oportuno, tendrá el apoyo y la confianza de muchas
personas.

7. Dése un “ascenso horizontal”.

¿Cómo es eso de un “ascenso horizontal”? Muy sencillo. Intente asumir más responsabilidades. Cuando se le presente
la oportunidad de poder resolver un problema que va más allá de su “descripción de funciones”, tómela. Ofrézcase
ante su jefe para liderar un proyecto; proponga soluciones a problemas que tal vez no son directamente de su ámbito
y ofrézcase como voluntario para implementar las acciones. Eso es darse un ascenso horizontal. Y ese, bien
manejado, puede llevarlo a otro nivel.

8. Hágase visible.

Si usted es un buen trabajador, con mucho conocimiento y una buena actitud, pero nadie lo conoce, tiene menos
posibilidades de escalar en la pirámide organizacional. Debe tomar acciones para hacerse visible, necesita darse a
conocer. Esa es una regla inquebrantable en el juego corporativo. Pocas veces se piensa en un total desconocido
porque, justamente, nadie lo recuerda. Hable en las reuniones, proponga proyectos por escrito, escriba una
colaboración en un medio impreso, y sus posibilidades de ser más visible crecerán.

9. Hágase experto en su campo.

Aunque los puestos superiores terminan generalmente siendo asignados a los generalistas –no a los especialistas—sí
es un hecho que usted, para poder surgir, necesita ser todo un experto en lo que hace. Una de las reglas es que usted
debe estar aportando con propiedad y entusiasmo a su puesto actual, para tener real posibilidad de que se le asignen
nuevas responsabilidades. Intente conocer todo lo que pueda y ser el mejor en lo que hace.

10. Búsquese un mentor.

Puede ser un compañero de más trayectoria en la empresa, un jefe (no necesariamente el suyo) u otra persona que
conozca más que usted de la cultura, sistemas e historia. Un mentor es alguien que puede guiarlo a usted, darle
consejos. Es una persona a quien usted puede recurrir con confianza, como amigo, cuando necesite tomar alguna
decisión importante sobre su carrera. Un buen mentor le puede ayudar a poner siempre las cosas en perspectiva.
Aplique a partir de hoy estas “reglas universales del juego” en el mundo corporativo. Entusiásmese por usted y
contribuya cada día con el éxito de su empresa, y comience a ver cómo el marcador del partido se va inclinando en su
favor.