Вы находитесь на странице: 1из 10

Lo ecológico y natural en productos

fitosanitarios
Lic. Edgardo Poderoso

Consideraciones Generales
Una concepción sobre la Ecología
El término Ökologie fue introducido en 1869 por Ernst Haeckel en su
trabajo “Morfología General del Organismo”; está compuesto por las
palabras griegas oikos (casa, vivienda, hogar) y logos (estudio o
tratado), por ello Ecología significa "el estudio de los hogares" y del
mejor modo de gestión de éstos. En un principio, Haeckel entendía por
ecología a la ciencia que estudia las relaciones de los seres vivos con
su ambiente, pero más tarde amplió esta definición al estudio de las
características del medio, que también incluye el transporte de materia
y energía y su transformación por las comunidades biológicas.
A partir de lo descripto sintetizamos que un ecosistema es el conjunto de comunidades (conjunto de
especies) faunísticas y florísticas afines entre sí, o correlacionadas por sus características estructurales
y funcionales y sometidas a la influencia similar de los factores bióticos y abióticos.
Si bien es teóricamente correcto suponer que todo ecosistema “tiene” un estado de balance natural, no
debe confundirse con que, en tanto tal, es estático e inmutable. Un estudio más profundo nos llevará,
necesariamente, a tomar conceptos de la Teoría General de los Sistemas y de Entropía en los Sistemas
Abiertos e Irreversibles. Adentrarnos en estas cuestiones excede el propósito de este trabajo.
Reduciremos este tema tan complejo como apasionante, a un concepto que entendemos pertinente y
suficientemente abarcativo: La vida se presenta estrechamente ligada al estado de no-equilibrio del
sistema que la exhibe. La muerte representa el grado máximo de equilibrio del sistema que alguna vez
permaneció en un campo biótico.
Mirado con mayor sencillez, digamos que el equilibrio ecológico se define como la estabilidad de un
ecosistema, o para mejor decir, la formación de éste. La estabilidad de un ecosistema se da como
resultado de las interrelaciones existentes entre el Ecosistema Biótico (Conjunto de seres vivos) y el
Ecosistema Abiótico (Medio físico).
La introducción de nuevos elementos, ya sea abióticos o bióticos, puede tener efectos disruptivos. Así,
este equilibrio puede ser alterado por acciones que se cometen en perjuicio del ambiente (y de las
cuales el gran uso de herbicidas es uno sobre los que se observa más lenta concientización, por la
importancia de los efectos que produce) aunque también otros fenómenos naturales como la sequía, los
huracanes, etc. causan varios problemas en el ecosistema tales como la extinción de especies,
destrucción del mismo, con notorias consecuencias en otros órdenes y aspectos de la vida social como
son las caídas en la economía.
En algunos casos puede llevar al colapso y a la muerte de muchas especies dentro del ecosistema. Sin
embargo en ocasiones éstos tienen la capacidad de recuperarse. La diferencia entre un colapso y una
lenta recuperación depende de dos factores: La toxicidad del elemento introducido y la capacidad
de recuperación del ecosistema original.
Ahora bien, empleando los conceptos anteriores y focalizando nuestra atención sobre los productos
fitosanitarios, surge como inevitable la siguiente pregunta: ¿es posible que exista algún producto
fitosanitario que satisfaga el criterio de no alterar la estabilidad del ecosistema, de forma tal que
podamos reconocerlo como ecológico?

-1-
Para responder esta pregunta nos valdremos de otra premisa: la definición de una cualidad está
siempre asociada al correspondiente criterio de su medición. Una breve reflexión al respecto nos
permitirá establecer las cualidades de un fitosanitario ecológico y cuáles los parámetros e indicadores
que las verifican. La siguiente descripción es la más generalizada y aceptada en la actualidad, aplicable
(en forma canónica) a todo tipo de producto:
Dícese de los productos que son fabricados teniendo en cuenta las normas de calidad y que no
generen, antes, durante o después de su elaboración y aplicación, residuos peligrosos que
pongan en peligro el ambiente, no utilicen recursos naturales no renovables y sean fácilmente
biodegradables.
Observemos cuáles son los parámetros que habilitan la regulación y caracterización final de los
fitosanitarios que podremos llamar ecológicos:
Calidad en su fabricación: Existe sinnúmero de estándares de calidad que establecen diversos
requisitos y niveles de satisfacción para determinar la calidad de elaboración de casi todos los
productos; los farmacéuticos, veterinarios, alimentarios son los más exigentes. Estas normas, con
algunas variantes, son de uso universal.
Determinación de residuos peligrosos: Análogamente a lo expresado respecto a la calidad, se han
protocolizado innumerables métodos de ensayo de laboratorio y “de campo” para determinar el nivel de
peligrosidad de los productos y sus efectos sobre organismos vivos. Con relación a la temática de
nuestro interés, en nuestro país la SENASA es la autoridad de aplicación, pero existen también otros
organismos de referencia mundial como la E.P.A. (Environmental Protection Agency – Agencia de
Protección del Medio Ambiente) que se ocupan intensamente de estudiar este tipo de productos.
Recursos naturales no-renovables: Más adelante volveremos sobre este factor al referirnos a los
“productos naturales”. Se asume por otra parte, que el lector está medianamente familiarizado con este
concepto e intuitivamente puede reconocer que se trata de aquellos elementos que se extraen de la
naturaleza en forma intensiva al punto crítico de su agotamiento (recordar los conceptos iniciales de
este trabajo) y provocando la alteración de ecosistemas hasta su destrucción y que, por el tiempo que
demora su formación (p.ej: petróleo) se los considera no-renovables.
Rápidamente biodegradables: Refiere al tiempo que la naturaleza demora en degradar los residuos. Así
por ejemplo, una botella de plástico puede tardar hasta 200 años, un filtro de cigarrillo hasta 100 años,
el cartón hasta 10 años.
Sirve agregar, y a modo de recomendación, el valor de pensar estas nociones y conceptos en forma
integral y sistemática. ¿Qué se quiere decir con esto? Analicemos un caso: por ejemplo, la botella de
plástico; El petróleo del que tiene origen tarda millones de años en formarse, pero esperar hasta 200
años para que la naturaleza degrade lo que se fabricó en segundos resulta una relación poco
interesante a las expectativas de vida del ser humano, especialmente si computa el tiempo que usará la
botella. Pero hay algo más, su descomposición natural no es sólo cuestión de tiempo; invisible pero real
se produce un intercambio y transformación de materia y energía que termina siendo nocivo para el
ecosistema, sea por contaminación de acuíferos y/o de suelos o, muy particularmente, la destrucción de
rizosfera (ambiente que interactúa benéficamente con las especies vegetales autóctonas) y la emisión
de gases tales como metano. Esta es también una forma de interactuar dentro de un ecosistema, y
alterarlo.
Ahora bien, ¿los fitosanitarios también causan estos efectos?
La mejor respuesta a esta pregunta emerge de la premisa
según la cual siempre se asocia algún criterio de medición a
cualquier cualidad que definamos. A partir de ella podemos
afirmar que siempre encontraremos un quantum de efectos
indeseados en cualquier producto fitosanitario. Pero medir los
efectos también está sujeto por la práctica de optimizar
resultados, y con la excepción de las pruebas científicas, es
generalmente aceptado que los objetivos económicos toleren
las imperfecciones del daño menor.
-2-
Hay implícita en estas consideraciones una variable propia del contexto, la acumulación de
conocimiento. Este trae inevitablemente mejoras en el desarrollo, aún cuando se lo lleva al campo de la
investigación aplicada donde también se encuentra orientado por el citado criterio de optimización de
resultados y la búsqueda de lucro.
Cerramos esta reseña de conceptos con una observación que creemos importante con relación a lo
señalado en el párrafo anterior:
La investigación y desarrollo de fitosanitarios tiene mayor relevancia y afectación para uso en cultivos
extensivos e intensivos. La razones son obvias desde el punto de vista económico, y no obstante existir
algunas excepciones, podemos afirmar que en general, en los cultivos llamados “menores”, acotados a
una especie y, primordialmente, en el paisajismo, la jardinería (en todas sus dimensiones) y en
particular la urbana o doméstica, se emplean los mismos productos que en la agricultura. Así, podemos
ver en los exhibidores de viveros de atención al público, forrajeras e incluso en ferreterías y
supermercados presentaciones conteniendo los mismos principios activos.

Algunos fitosanitarios: Los plaguicidas


Reflexionemos acerca de los riesgos implícitos en la manipulación de estos
productos. ¿Cómo afectan al medio ambiente según los conceptos que
enunciamos sobre ecología?
El primer aspecto a considerar está relacionado con el ambiente en que son
aplicados. Por su diseño y desarrollo, visto que en agricultura se trabaja a cielo
abierto (cultivos extensivos), grandes superficies con escasa presencia humana.
Pero la ampliación de la frontera agrícola ha llegado al borde de los centros urbanos. Y aquí el primer
llamado de atención: en varias jurisdicciones se aplican normas oficiales bastante severas que prohíben
la aplicación (por cualquier medio) de plaguicidas a distancias menores a los 2000 metros de
asentamientos urbanos.
Los fabricantes deben cumplir procedimientos muy estrictos en la elaboración, envasado, transporte y
almacenamiento de los mismos. Además, informar al usuario sobre las características del producto en
un protocolo de seguridad. Su prescripción y venta debe ser intervenida por profesionales (Ing.
Agrónomos; Médicos Veterinarios)
¿Por qué? Por su toxicidad y potencial peligro para la salud humana cuando se lo usa y manipula
sin las debidas prevenciones. Pero hay algo más, que aumenta la necesidad de precauciones y
mayor reserva sobre la conveniencia de su utilización. El poder residual y espectro de cobertura de los
principios activos debe ser el suficiente para satisfacer la ecuación de “costo de indiferencia” o función
de utilidad. Este es un criterio muy importante que incide fuertemente en el proceso decisorio en la
producción agrícola extensiva y su cadena de valor, pero tiene resultados colaterales perjudiciales para
el habitat. Se resumen en: algunas sustancias conservan poder tóxico entre 10 y 120 días posteriores a
la aplicación. Esta se realiza por aspersiones y/o fumigaciones terrestres o aéreas y, en ningún caso
(siempre habrá deriva por efecto del viento) la totalidad del producto cae sobre las plantas y aún así sus
escurridos se depositan en los sustratos y suelo, penetra el mismo y afecta la rizosfera. Por ejemplo, los
herbicidas empleados para eliminar y/o impedir que especies vegetales sin interés económico compitan
con un cultivo. La deriva por vientos arrastra producto a especies forestales u otros plantíos provocando
daños a veces irrecuperables. Otra consecuencia es la absorción y percolado hacia las napas de agua
subterránea y su progresiva e irreversible contaminación.
Un detalle a agregar; a mayor amplitud del espectro de uso (cantidad
de plagas que combate) el producto es menos selectivo y, en
consecuencia, violenta el equilibrio ecológico facilitando la formación
de nuevos estados de naturaleza no siempre benéficos.
A medida que se reducen los espacios, menores serán las cantidades
de producto empleado pero esto no altera la proporción de las
diluciones a preparar y por ende, caben las mismas precauciones
ante la acción de los principios activos. Si en la actividad agrícola no
-3-
se pueden aplicar a cierta distancia de los centros urbanos, parece contradictorio que los mismos
principios activos se empleen en la jardinería doméstica, invernáculos y, peor aún, en los pequeños
espacios de balcones con macetas en plena ciudad.

Sobre los principios activos:


En el Anexo de este trabajo hacemos una breve referencia de algunos principios activos muy comunes.
Para mayor información se sugiere recurrir a literatura especializada.1

La búsqueda de un nuevo concepto

Visto lo expresado precedentemente, surge la inquietud de resolver, en la medida de lo posible, los


efectos negativos de los fitosanitarios en uso. Muchas son las variables a considerar y por lo tanto se
entendió necesario establecer una base firme sobre la cual trabajar y que tuviese una clara identidad
conceptual. El desafío no era menor que la relevancia de los resultados buscados. El diseño de los
productos tuvo como principal requisito una de las definiciones ya expuestas, a saber:

1
También se recomienda visitar el siguiente sitio: http://www.foroambientalcba.org.ar/index.php?
view=article&catid=3:newsflash&id=41:informe-sobre-la-necesidad-de-controlar-los-residuos-de-plaguicidas-en-frutas-y-verduras-
&format=phocapdf&option=com_content&Itemid=50
-4-
Deberán satisfacer normas de calidad y que no generen, antes, durante o después de su elaboración y
aplicación, residuos peligrosos que pongan en peligro el ambiente, no utilicen recursos naturales no
renovables y sean fácilmente biodegradables.
Además deberán:
Estar acotados por la selectividad, es decir, no se buscará con ellos otro resultado que combatir las
especies dañinas y sólo en el entorno inmediato del vegetal atacado. Esta pauta se establece en
respeto al que hemos denominado equilibrio ecológico y a los fines de no producir alteraciones
irreversibles en el macrosistema biótico.
A su vez, ser eficazmente aplicables al espectro de plagas más comunes y de presencia habitual en la
mayor variedad de especies vegetales.
Reducir la capacidad de la plaga a desarrollar resistencia, tolerancia y adaptación genética por el uso
continuado. Este criterio se considera muy importante por cuanto la mayoría de los fitosanitarios de
síntesis actuales actúan por absorción y colapsado del sistema nervioso del insecto. En este
sentido se consideró, como regla general válida a los fitosanitarios preexistentes:
Que sólo cuando la dosis ingerida por un insecto es la suficiente para producir la muerte se anula su
capacidad de adaptación (y transmitirla) ante este tipo de productos.2
Que la situación mencionada en el punto anterior no ocurre en la práctica, en gran parte por; las
limitaciones de los equipos de aspersión/fumigación para regular la uniformidad tanto en el tamaño
de la gota como en la proporción de principio activo que contiene la misma y el alcance de la
aplicación sobre la población a tratar; errores en la mezcla previa; las condiciones abióticas al
momento de la aplicación (viento, humedad, temperatura, presión atmosférica) etc.
No producir secundarismos de efecto permanente sobre otros seres vivos, en particular humanos,
mascotas y otras especies vitales. Esta pauta se asocia a que se pretende evitar los riesgos
propios de la habitualmente escasa o deficiente instrumentación de precauciones en su
manipulación y aplicación (ropa adecuada de protección; máscaras protectoras; envases de
seguridad; recintos especialmente acondicionados para manipulación y almacenamiento)
Ser productos de alternativa, con aptitud para su empleo en cultivos orgánicos y el MIP (Manejo
Integrado de Plagas)
1. A diferencia de los fitosanitarios de síntesis, tener una tecnología de elaboración que no desvirtúe el
origen natural. La razón fundamental de este criterio es que en la síntesis se logra emular las
mejores propiedades de algunos compuestos aislados que conforman un componente original de la
naturaleza, pero clausurando la sinergia de la totalidad de éstos en su forma primaria. Así, por
ejemplo, los llamados metabolitos secundarios del piretro (sustancia extraída de algunas plantas de
crisantemos) han dado lugar a la piretrinas, pero los fitosanitarios actuales son productos de síntesis
(Cipermetrina, Deltametrina, etc) conocidos como piretroides que imitan a muy pocas de las
sustancias constitutivas del compuesto original, que alcanza en algunos casos 150 o más
sustancias diferentes.
2. Ser lo suficientemente inocuos para su uso en espacios reducidos o de alta concentración urbana.
De esta forma, ser especialmente recomendables para el uso doméstico, en cultivos bajo cubierta
y/o delicados.
3. Producirse con materias primas ampliamente disponibles cuya reproducción esté asegurada en la
naturaleza.
4. Ser elaborados dentro de una estructura de costos que permitan su inserción en el mercado a
precios competitivos.

Corresponde reconocer características que pueden, según el caso, considerarse desventajas de todo
producto concebido bajo los criterios expuestos, entre las que destacamos:

2
Esta es la principal razón por la que los especialistas recomiendan la alternancia, utilizando diferentes principios activos,
aunque esta es un una razón opinable, teniendo como prospectiva la “adaptación múltiple”

-5-
Escaso poder residual: Es obvio si se tiene en cuenta que se ha priorizado evitar efectos
colaterales permanentes al ser humano, no afectar el medio ambiente y
permitir su rápida biodegradación.
Espectro reducido: Es cierto, pero alcanza a las plagas más comunes. Se compensa por tener
un modo de acción diferente. Mientras que los fitosanitarios de síntesis
actúan vía absorción, el mecanismo de acción elegido es de carácter
físico-mecánico y externo para reducir las posibilidades de adaptación y
mutagénesis, siendo igualmente eficaces sobre larvas y pupas.
Industrialización lenta: Su elaboración exige esperar el desarrollo de elementos naturales tales
como los vegetales hasta el momento en que su metabolismo concentra
mayor cantidad de las sustancias seleccionadas. Además, su proporción
en peso es muy baja. La única defensa a esta observación es la
permanente reproducción de esas especies vegetales.

Como bien podrá deducirse, no es por la consecución de investigaciones de avanzada y/o por
aplicación de refinada tecnología sino más bien por la integralidad conceptual y sistemático estudio del
contexto y objetivos en que focalizamos la acción, lo que da origen a lo que denominamos:

Fitosanitarios de “Ultima generación”


Hacer una descripción completa de los productos que se han desarrollado bajo esta concepción
demanda mucha exposición técnica y excede el espacio asignado a este capítulo. Por lo tanto, sólo nos
referiremos a algunos de los principios activos y como agregado, lo concerniente a un compuesto de
aminoácidos específicos.
Muchos de los pesticidas e intermediarios son altamente tóxicos y debido a su actividad biológica, es
necesario evitar la contaminación de otros procesos y del medio ambiente. Deben controlarse
continuamente los métodos de lavado de los gases, de los procesos de descontaminación y del manejo
de los desperdicios gaseosos, líquidos y sólidos. Esto requiere de dispositivos de detección, equipos
automáticos y reactores para la descontaminación de subproductos.
Para la descontaminación se utilizan métodos de oxidación, hidrólisis y reacciones nucleofílicas.
La experiencia ha demostrado que el 20-25% de los costos totales de capital se invierten en equipos de
protección para humanos y medio ambiental. Esta proporción de la inversión total va en aumento lo que
ha hecho que se descarten algunos proyectos por incosteabilidad.3
Las sales potásicas de ácidos grasos vegetales
Los ácidos grasos son los componentes orgánicos (pequeñas moléculas que se unen para formar
largas cadenas) de los lípidos que proporcionan energía al cuerpo y permiten el desarrollo de tejidos.
Poseen una o más enlaces dobles en su cadena según sean mono o poli insaturados respectivamente.
Son generalmente líquidos a temperatura ambiente. Las dobles ligaduras que se presentan en un ácido
graso insaturado natural son siempre del tipo cis. Es por esto que las moléculas de estos ácidos grasos
presentan codos, con cambios de dirección en los lugares dónde aparece un doble enlace. Cuando
existe más de un enlace doble, estos están siempre separados por al menos tres carbonos. Las dobles
ligaduras nunca son adyacentes ni conjugadas. Algunos ejemplos de estos ácidos son: Linolenico;
Linoleico; Araquidónico; Oleico; Erúcico; Palmitoléico
Vulgarmente llamados jabones potásicos sus propiedades repelentes e insecticidas han sido
largamente verificadas. Actualmente estos compuestos están categorizados como exentos de riesgos y
sin “tiempo de espera” post aplicación, tanto por la E.P.A. como el Consejo de Agricultura de la
Comunidad Europea.
En el caso de nuestro desarrollo, se ha previsto la obtención mediante la reacción de ácido oleico de
alta pureza con hidróxido de potasio mediante un proceso que lo diferencia sustancialmente de la

3
Se recomienda la lectura del Boletín Phitonat – “Sobre Insecticidas”, en el sitio http://www.phitonat.com/descargas
-6-
conocida elaboración de jabones. La técnica ha permitido una muy buena concentración de la sal
resultante.
Las propiedades insecticidas de estas sales se caracterizan por su modo de acción. Penetran el cuerpo
de los insectos, cubriendo y destruyendo la membrana de las células quitinosas del exoesqueleto, lo
cual provoca la pérdida del contenido celular, la deshidratación y la muerte de los organismos. Estas
sales son relativamente específicas contra insectos de cuerpos blandos. No necesita de su absorción
para producir el efecto de repelencia o muerte del mismo, desactivando así las posibilidades de
tolerancia adaptación. No persisten en el ambiente, su vida media es menor de 1 día. En el suelo son
degradados por acción de los microorganismos.
Una ventaja adicional de este producto es su alto contenido de potasio que, como se sabe, es uno de
los 3 macronutrientes de las plantas. Al ser pulverizado sobre las mismas para combatir una plaga
produce efectos de fertilización foliar complementaria.
Se obtiene mayor eficacia al combinar estas sales con los:
Metabolitos secundarios - Aceites Esenciales - Los terpenos
El limoneno o d-limoneno es la última adición al grupo de los insecticidas botánicos. Se extrae de las
cáscaras de cítricos, es efectivo contra todas las plagas externas de las mascotas, incluyendo pulgas,
piojos, ácaros y garrapatas y es virtualmente no tóxico para los animales de sangre caliente. En el
aceite de los cítricos hay varias substancias insecticidas, pero la más importante es el limoneno, el cual
constituye como 98% del peso de los aceites de la cáscara. Su modo de acción es similar al del piretro.
Afecta los nervios sensoriales del sistema nervioso periférico, pero no es un inhibidor de la
colinesterasa.
La muy particular metodología aplicada en nuestro caso para su obtención, pone énfasis en la variedad
de cítricos seleccionados, el momento de recolección de frutos y su localización en cada planta por
haberse comprobado una significativa diferencia en el volumen y concentración de los compuestos
terpénicos del aceite esencial. También, la técnica de destilación tiene una protocolización distinta a la
usual.
Los L-alfa-aminoácidos
Todos los organismos vivos requieren proteínas para su crecimiento y desarrollo celular. Estas son
combinaciones de aminoácidos. Existen más de 250 tipo conocidos de ellos. Pero las plantas en
general, reconocen y pueden metabolizar sólo 20 aminoácidos. Son los denominados L-alfa-
aminoácidos. El concepto que surge de las pautas que hemos considerado para diseñar nuestros
productos de “Ultima Generación” consiste en pensar que: suministrarle a la planta tales compuestos
(en especial en los momentos post germinación y etapas de enraizamiento y crecimientos iniciales) es
brindarle una “aceleración natural” a dichos procesos y, eventualmente una carga de bioestimulante
preventivo ante la presencia de enfermedades y/o condiciones de estrés biótico o abiótico. Algunos de
estos aminoácidos son quelantes naturales, una propiedad que permite el total aprovechamiento de
nutrientes que se adicionen en la formulación cuando son aplicados al sustrato soporte. Tal es, por
ejemplo, el caso del hierro (Fe) un importante elemento ante casos de clorosis. Al ingresar por vía
xilemática los efectos suelen ser casi inmediatos o visibles en pocas horas.4

ANEXO
PRINCIPALES FITOSANITARIOS DE USO COMUN EN AGRICULTURA Y VETERINARIA

Principio Activo Resumen descriptivo


Piretrinas Son compuestos naturales con propiedades de insecticidas que se encuentran en el
extracto de piretro de ciertas flores de crisantemos. Se usan en insecticidas para uso
doméstico y en productos para controlar insectos en animales domésticos o en el
ganado.

4
Ver en http://www.phitonat.com/descargas Boletin phitonat_presentando phito-s3®

-7-
Los piretroides son sustancias químicas manufacturadas de estructura muy parecida
a las piretrinas, aunque son generalmente más tóxicos para los insectos y también
para los mamíferos, y permanecen por más tiempo en el ambiente que las piretrinas.
Los más conocidos son:
Tipo I: Piretrina, Aletrina, Tetrametrina, Kadetrina, Resmetrina, Fenotrina y
Permetrina. (Detalle no exhaustivo)
Tipo II: Cipermetrina, Fenpropantrin, Deltametrina, Cyfenotrin, Fenvarelate y
Fluvalinate. (Detalle no exhaustivo)
Las piretrinas y los piretroides se adhieren firmemente al suelo y eventualmente son
degradados por microorganismos en el suelo y el agua; generalmente no se mueven
del suelo al agua subterránea.
Las piretrinas y los piretroides generalmente entran al cuerpo cuando la gente come
alimentos contaminados con estas sustancias químicas. También cuando se respira
aire que contiene estos compuestos o cuando entran en contacto con la piel.
Exposición a estas sustancias puede ocurrir por el uso de productos que los
contienen, por ejemplo insecticidas para uso doméstico, aerosoles y champús para
animales domésticos, tratamientos para piojos que se aplican directamente en la
cabeza, y repelentes para mosquitos que pueden aplicarse sobre la ropa.
Las piretrinas y los piretroides interfieren con el funcionamiento normal de los nervios
y el cerebro. La exposición breve a niveles muy altos de estos compuestos en el aire,
los alimentos o el agua puede causar mareo, dolor de cabeza, náusea, espasmos
musculares, falta de energía, alteraciones de la conciencia, convulsiones y pérdida
del conocimiento. Los cambios de estado mental pueden durar varios días luego de
que la exposición a altos niveles ha terminado. No hay evidencia de que las piretrinas
o los piretroides afectan la capacidad de reproducción en seres humanos, pero
algunos estudios en animales han demostrado una reducción de la fertilidad en
machos y hembras.
La EPA ha recomendado límites diarios de exposición oral para 10 piretroides que
varían desde 0.005 a 0.05 miligramos por kilogramo de peso corporal al día (0.005-
0.05 mg/kg/día). También ha establecido tolerancias para residuos de piretrinas y de
varios piretroides en una variedad de alimentos que varían desde 0.01 a 75 partes por
millón (0.01-75 ppm).
Malation, Malathion, Mecaptotion, Mercaptothion.
El malatión es un insecticida que no ocurre naturalmente. El malatión puro es un
líquido incoloro, y el malatión de calidad técnica, que contiene >90% de malatión e
impurezas en un solvente, es un líquido pardo-amarillento que huele a ajo. El malatión
se usa para matar insectos en cosechas agrícolas y en jardines, para tratar piojos en
la cabeza de seres humanos y para tratar pulgas en animales domésticos. El malatión
se usa también para matar mosquitos y la mosca de la fruta en extensas áreas al aire
libre.
El malatión interfiere con el funcionamiento normal de los nervios y del cerebro. La
exposición a niveles muy altos de malatión en el aire, el agua o los alimentos por un
período breve puede causar dificultad para respirar, opresión del pecho, vómitos,
Malathion calambres, diarrea, visión borrosa, sudor excesivo, mareo, pérdida del conocimiento y
la muerte. Si las personas que están expuestas a grandes cantidades de malatión
reciben tratamiento apropiado de inmediato, puede que no ocurran efectos adversos a
largo plazo. Cuando la exposición es a niveles de malatión más bajos que los que
afectan la función de los nervios, parecen ocurrir pocos o ningún problema de la
salud. No hay prueba definitiva de que el malatión cause cáncer en seres humanos,
aunque algunos estudios han encontrado un aumento de la tasa de ciertos cánceres
en gente que está expuesta frecuentemente a pesticidas, como por ejemplo
agricultores y aplicadores profesionales. Los estudios en animales no han
suministrado evidencia conclusiva de carcinogenicidad. La Agencia Internacional para
la Investigación del Cáncer (IARC) ha determinado que el malatión no puede
clasificarse en cuanto a carcinogenicidad en seres humanos.
Dimetoato Los organofosforados son sustancias orgánicas de síntesis, es decir, fabricadas por el
-8-
hombre, no existen en forma natural. Están conformadas por un átomo de fósforo
unido a 4 átomos de oxígeno o en algunas sustancias a 3 de oxígeno y uno de azufre.
Una de las uniones fósforo-oxígeno es bastante débil y el fósforo liberado de este
“grupo libre” se asocia a la acetilcolinesterasa. La acetilcolinesterasa se encarga de
degradar la acetilcolina (ACh). Al no destruirse la ACh se produce una hiperactividad
nerviosa que finaliza con la muerte del individuo. Sus características principales son
su alta toxicidad, su baja estabilidad química y su nula acumulación en los tejidos,
característica ésta que lo posiciona en ventaja con respecto a los organoclorados de
baja degradabilidad y gran bioacumulación .
En farmacología, un inhibidor de la acetilcolinesterasa, inhibidor de la colinesterasa o
anticolinesterasa es un compuesto químico que inhibe a la enzima colinesterasa
impidiendo que se destruya la acetilcolina liberada, produciendo como consecuencia
un aumento en la concentración y en la duración de los efectos del neurotransmisor.
Por la baja estabilidad del compuesto puro, denominado oxon, en la aplicación
comercial, se agrega un atomo de azufre . Estos organofosforados se denominan
tiones. Esta composición hace que los organofosforados penetren las membranas
biológicas más rápido aumentando su potencial toxico.
En el ambiente, estos tiones se transforman en oxones por acción del oxigeno y la luz
solar y en el organismo por acción de las enzimas hepáticas.
Las características fundamentales de los organofosforados son:
Son liposolubles, por lo cual penetran fácil y rápido en los organismos animales.
Son poco volátiles por poseer baja presión de vapor.
La degradación se produce por hidrólisis en medio alcalino.
Se absorben por vía cutánea, respiratoria o digestiva, cualquier solución de
continuidad en la piel (herida) favorece la penetración por esa vía.
La vida media de los organosforados y sus metabolitos en el organismo es de
aproximadamente 48 horas. La eliminación es principalmente por orina y, en menor
medida heces y respiración.
Su acción se basa en la inhibición irreversible de la enzima acetilcolinesterasa. Esto
hace que la acetilcolina se acumule en los receptores colinérgicos produciendo una
estimulación excesiva de estos receptores en los sistemas nerviosos central y
periférico. Dependiendo de la actividad de los organofosforados, sus efectos pueden
clasificarse en:
MUSCARINICOS
Ojos: dificultad en la acomodación, congestión conjuntival, miosis, visión borrosa.
Membranas mucosas: hiperemia, rinorrea.
Pulmones–bronquios: Broncorrea, cianosis, disnea, dolor torácico, bronco
constricción.
Aparato digestivo: dolor colico, diarrea, incontinencia fecal, nauseas, vómitos,
sialorrea.
Corazón: bradicardia.
Vejiga: incontinencia.
Piel: diaforesis.
NICOTINICOS
Sinapsis ganglionares: Cefalea, hipertensión arterial, mareos, palidez.
Musculo esquelético: calambres, debilidad generalizada, incluyendo músculos
respiratorios, mialgias, parálisis fláccida.
EFECTOS SOBRE EL SISTEMA NERVIOSO CENTRAL
Ansiedad. Ataxia. Coma. Convulsiones. Depresión de centros respiratorio y
circulatorio. Perturbación mental.
A causa de sus efectos rápidamente tóxicos estos productos fueron prohibido o
severamente restringidos en su uso rural. Sin embargo, su uso se mantiene, como
insecticida, en las pequeñas explotaciones (huertas comerciales o familiares).
Generalmente el productor o la persona que los usa tiene escaso o nulo conocimiento
sobre su peligrosidad.
Glifosato El glifosato, N-(fosfonometil) glicina, es un herbicida de amplio espectro, no selectivo,
-9-
utilizado para eliminar malezas indeseables (pastos anuales y perennes, hierbas de
hoja ancha y especies leñosas) en ambientes agrícolas, forestales y paisajísticos. El
uso de herbicidas había evolucionado hacia sustancias cada vez más selectivas a fin
de evitar los daños que éstos producen al conjunto de la biota. Sin embargo, debido al
progresivo encarecimiento de su investigación y desarrollo, se retornó al consumo
masivo de este herbicida no selectivo creado en la década de 1960.
Todo producto pesticida contiene, además del ingrediente "activo", otras sustancias
cuya función es facilitar su manejo o aumentar su eficacia. En general, estos
ingredientes, engañosamente denominados "inertes", no son especificados en las
etiquetas del producto. En el caso de los herbicidas con glifosato, se han identificado
muchos ingredientes "inertes". Para ayudar al glifosato a penetrar los tejidos de la
planta, la mayoría de sus fórmulas comerciales incluye una sustancia química
surfactante. Por lo tanto, las características toxicológicas de los productos de
mercado son diferentes a las del glifosato solo. La formulación herbicida más utilizada
(Round-Up) contiene el surfactante polioxietileno-amina (POEA), ácidos orgánicos de
glifosato relacionados, isopropilamina y agua.
Las fórmulas conteniendo glifosato producen mayor toxicidad aguda que el glifosato
solo. La cantidad de Round-Up (glifosato + POEA) requerida para ocasionar la muerte
de ratas es tres veces menor que la de gifosato puro. En cuanto a las formas de
exposición, la toxicidad de ambas presentaciones (glifosato puro, fórmulas
compuestas) es mayor en casos de exposición dérmica e inhalatoria (exposición
ocupacional) que en casos de ingestión.
En humanos, los síntomas de envenenamiento incluyen irritaciones dérmicas y
oculares, náuseas y mareos, edema pulmonar, descenso de la presión sanguínea,
reacciones alérgicas, dolor abdominal, pérdida masiva de líquido gastrointestinal,
vómito, pérdida de conciencia, destrucción de glóbulos rojos, electrocardiogramas
anormales y daño o falla renal
Fipronil

- 10 -

Вам также может понравиться