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MORA CLAROS
como resultado la actividad económica, o si pronto se
terminara el paro.
E ítem mas, cuando olvidaran los politicones sus
Huelva, 29 de Abril 2.011 – nº 112+1 – Año V campañas de blá-blá-blá y ¡obras virtuales!, esas que
Distribución directa: 855 ejemplares cualquiera con un buen programa de diseño es capaz
de pintarle al político de turno en un ordenador, y
empezaran a contarnos sus planes de actuación, que
Fanzine digital costumbrista, político, festivo, cultural, serán muchos, aunque por experiencia sabemos que
pergeñado quincenalmente por escritores aficionados, resultaran de nuevo falsos y solo para estos días de
independientes -o casi- y con buen humor.
Editor: Faustino Martin-Navarro Perez
campaña electoral. Usar y tirar.
(Mientras el cuerpo le aguante) Y ni unos ni otros nada dicen de lo que interesa al
Portada: La Redacción españolito de a pie, sino que echan mano a las
e-mail:famaper@lagazetademoraclaros.com cortinas de humo, y continúan hablando y hablando
del etarra que una justicia dudosa dejo escapar, de
la guerra contra Gadafi, donde empiezan a no saber
cómo acabarla, y a desprestigiarse sin educación unos
El Kiquiriquí: Mas de lo mismo - por Famaper a otros, sin que ninguno tenga agallas de contarnos lo
En defensa del toro: que de verdad sucede, cuanto suma el pufo que
tenemos encima, o cuanto nos costara el agujero de
El torero ante las corridas del ciclo sevillano – por Juan
las pobres Cajas de Ahorro, destruidas en manos de
Belmonte en la Revista feria de Sevilla de Enrique Vila en políticos torpes, aprovechados, vanidosos, partidistas
1.946 y trincones. O más difícil aún, si alguno sería capaz
Toros en Sevilla 2.011: Recuerdo a Juan Pedro Domecq – de cambiar la Ley electoral, madre del cordero de
por Faustino Martin-Navarro Perez gran numero de los problemas que nos acaecieron y
El Hola-Hola en los toros – La redaccion los que vendrán, o si van a acabar con el despilfarro
El Einstein que todos llevamos dentro – José Mª Contreras de este país, donde cualquier poder esta duplicado,
Espuny triplicado, cuando no quintuplicado.
Y también nos gustaría saber si algún gran partido
Patas de Gallo -– por Eduardo Catalan Perez de Lis
sería capaz de devolverle al Estado la enseñanza en
El humor en la Gazeta – por los Lectores los colegios de una historia común a todos, y coger de
El Trance del dia cuarto – por Jose Maria Peman 1.946 nuevo en sus manos, la Sanidad, los rios, puertos, y
Benditos ateos – Tomas Cuesta en ABC aeropuertos, y la Justicia, por ser estas cosas las que
La misma piedra – Jose Antonio Gomez Marin en el Mundo vertebran a los países y los hacen grandes cuando son
Acércate a los libros: – Fray Antonio de Guevara con planificadas y se administran bien.
comentario de Ramon Martin Vila Habrá que votar y votaremos pronto, mas como de
costumbre siempre será contra alguien y nunca a
Hondura y humedad del fandanguillo – por Pedro Alonso
favor del mejor, porque este país se ha convertido en
Morgado Tallefer en ABC una inmensa carajera difícil de llevar a buen puerto,
Romance viejo de feria – por Rafael Laffon por tanto carajote como anda suelto. Por Famaper
La eterna violencia entre sexos – La Redacción (28/4/11)
Webs con gancho – por los Lectores
Las fotos parlanchinas de Famaper
Hay un toro que nunca es del todo malo: el quinto. tacto del aire espeso de polvo y primavera y
Una copa que nunca hace daño: la tercera. al deslumbramiento de las ochenta mil
Una hora en que se canta la mejor seguiriya: bombillas. No hay ya sentidos: sino una total
las tres de la mañana... Hay también un día en sensación única, neutral, que coja todo el
que la Feria está madura: el cuarto. cuerpo en el abrazo felino y agotador de la
Todo esto proviene de que las cosas hondas, Feria. Creíamos que la Feria era aquello tan
prof undamente viejas y paganas, necesitan, colorista y animado que nos rodeaba estos
como el vino, la colaboración del Tiempo. El días. Pero la Feria estaba debajo, desnuda,
éxtasis místico es fácil y suave, porque es don esperando. La hemos taladrado sus percales
gratuito de Dios. Santa Teresa encontraba a y sus guirnaldas, con un inmenso berbiquí de
Dios entre los pucheros de la cocina: y barrien- vueltas y revueltas, y la hemos hallado, en el
do o zurciendo podía entrar en éxtasis. Pero fondo: sola, única, armoniosa.
«el trance» humano, el de la Pitonisa, ha de
ser lento, provocado por el mareo de una con- «El trance» del día cuarto es solo para los
tinuidad, por el martilleo de una obsesión... pacientes: para los que esperaron, con valentía,
Otros canten el detalle analítico y pintoresco la hora suma. Heroicos contra el sueño, tena -
de la Feria; la pincelada de color; el arabesco. ces frente a la copa, han recibido, al fin, su ga-
Yo canto «el trance» f erial del día cuarto, lardón. La Feria les numera entre sus elegidos.
cuando ya, a fuerza de giros y vueltas, la Ba- Se hace inmensa para cada uno solo. Se
cante ha caído traspuesta; cuando los pitos, desciñe sus trapos para darles su verdad
redobles y campanas, acompasados por la antigua. Todo ese tiempo se necesitaba para
explosión períodica del cañoncito de medir la trasmutar en unidad tanta variedad
fuerza, se han fundido en un bloque de sonido, abigarrada, y hacer un diálogo íntimo del
tan estridente e igual, que adquiere calidades estruendo ruidoso. Entonces, el fiel, el devoto, el
de silencio. La voz del que invita a entrar en que llegó saltando trincheras de insomnio y
la barraca, tiene ya una voladura de polvo desmayo, a la: hora suprema, se siente solo,
municipal; los caballos, mareados de girar con una tristeza excitante, en la poblada
incesantemente, sueñan un paraíso de jacas baraúnda. Pero, de pronto, su soledad
lustrosas y prados de alfalfa verde; los advierte la presencia cierta. Y hay un diálogo
radiadores de los automóviles descorchan, leve.
recalentados ya, sus botellas de champan; el — ¿Eres, al fin, la Feria?
cansancio adquiere hormigueo de actividad — Sí; aquí estoy; para tí solo.
infinita y el insomnio calidades de aguda — ¿Volverás cada año?
vigilia. Entonces, la copla perfecta. Entonces — No tengo que «volver». Estoy siempre en
esa luz nunca vista en unos ojos negros y Sevilla. Estoy dormida, como un alma
cándidos. anciana. Me despiertan y acudo.
Todo ese tiempo, ese mareo de vueltas e ¿Volverás tú a llamarme cada año?
insistencia, se ha necesitado para fundir la — Sí; volveré siempre.
Feria: para vencer lo «pintoresco» Y el beso tiene sabor de tierra y de clavel.
desparramado, por lo «hondo» duro y unido. La
Feria está ya batida como una salsa difícil; «a
punto» como una almíbar beata. Antes fue un
disperso noviciado de detalles y colores. Se veía
aquella caseta, aquella muchacha, aquel
puestecillo, aquel coche de mulas, Luego será
el cansancio y la inconsciencia. No se verá nada.
En el centro; «el trance» del día cuarto: cuando la
Feria es una mujer, y tiene una vida única,
total, compacta, caliente. Hay una unidad y
una armonía que repentinamente se n os
dan en el alma. Hasta los sentidos parece
que deponen sus fronteras y se hacen sus
mutuas prestaciones. Se pasa, sin crepúsculo,
del olor del aceite al sonido del tambor y al