INFORME

LEY SOBRE ABANDONO DE

FAMILIA Y PAGO DE PENSIONES
ALIMENTICIAS

MARZO DE 2006

Hedy Matthei Fornet 1

Asesora Legal Senador Novoa
INDICE
1.- ¿Cómo obtener una pensión de alimentos? ............... 3
a.- Transacción sobre pensiones alimenticias: ........... 3
b.- La mediación: ....................................... 3
c.- Juicio de Alimentos: ................................ 3
i.- La demanda: ........................................ 3
ii.- Procedimiento: .................................... 4
iii.- Tribunal competente: ............................. 4
2.- Monto de las pensiones de alimentos: .................. 4
3.- Reajuste de la pensión de alimentos: .................. 5
4.- Aumento, rebaja o cese de una pensión de alimentos: ... 5
5.- Solicitud subsidiaria de pensión de alimentos a los
abuelos: .................................................. 5
6.- Alimentos provisorios: ................................ 5
7.- ¿Qué hacer cuando no se conoce el domicilio del
alimentante? .............................................. 6
8.- Obligación del demandado de constituir garantías: ..... 6
9.- Retención del monto de la pensión por parte del
empleador: ................................................ 6
10.- Requerimiento de pago y mandamiento de ejecución y
embargo: .................................................. 7
11.- Sanciones por el no pago de la pensión alimenticia: .. 8
12.- Responsabilidad de terceros: ......................... 9
Conclusión: ............................................... 9

PENSIÓN DE ALIMENTOS

La Ley sobre Abandono de Familia y Pago de Pensiones

Alimenticias regula de la siguiente forma en qué consiste,
cómo se paga y cómo se sanciona el no pago de las pensiones
alimenticias. Este informe tiene por objeto facilitar el

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conocimiento de estas normas, revisando las siguientes
materias:
1.- ¿Cómo obtener una pensión de alimentos?

La persona que requiere alimentos (el alimentario) tiene

diferentes alternativas para obtenerlos de quién está
obligado por ley a otorgárselos (el alimentante). Éstas son:

a.- La transacción sobre pensiones alimenticias;

b.- La mediación; y
c.- El juicio de alimentos.
a.- Transacción sobre pensiones alimenticias:

Las partes pueden, de mutuo acuerdo, fijar el monto de la

pensión de alimentos que una de ellas debe pagar a la otra.
En este caso, la transacción debe firmarse ante un ministro
de fe, que puede ser el juez, un notario o el abogado jefe
de la Corporación de Asistencia Judicial que corresponda.

El ministro de fe tiene por función asegurar que las

personas que aparecen firmando en el documento escrito son,
efectivamente, las que firmaron. Esto es importante en caso
que, con posterioridad, sea necesario demandar al
alimentante por incumplimiento de la obligación que
contrajo.
b.- La mediación:

La mediación es un sistema a través del cual una persona,

imparcial y sin poder de decisión, hace a las partes una
serie de proposiciones para ayudarlas a llegar a acuerdos.
El mediador puede ser propuesto por ambas partes o por el
juez.
c.- Juicio de Alimentos:

i.- La demanda:

Los juicios de alimentos se inician por demanda ante los

juzgados o tribunales de familia.

El alimentario puede interponer la demanda personalmente o

bien, a través de un abogado. En caso que presente la
demanda en forma personal, sin embargo, el juez puede
obligarlo a requerir el patrocinio de un abogado, cuando
considera que queda en una situación desventajosa en
relación a su contraparte. El abogado puede ser de la
Corporación de Asistencia Judicial cuando el alimentario no
tiene los medios para pagar uno.

La demanda debe contener las siguientes menciones:

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 - Nombre completo del alimentario y del alimentante; y
- Exposición clara de las peticiones que se peticiones y
de los hechos en que se funda.

Se debe, además, adjuntar a la demanda todos los documentos

que tenga relación con la demanda, como por ejemplo, el
certificado de nacimiento.
ii.- Procedimiento:

El juicio de alimentos se tramita según las normas del

procedimiento establecido en la Ley sobre Pensiones de
Alimentos y, en subsidio, en la Ley que Crea los Juzgados de
Familia.
iii.- Tribunal competente:

La demanda se presenta ante el juez de familia del domicilio

del que debe otorgar alimentos (alimentante) o del que tiene
derecho a recibir los alimentos (alimentario), a elección de
este último.

Tratándose de juicios de alimentos que se deban a menores,

al cónyuge del alimentante cuando éste los solicita
conjuntamente con sus hijos menores, o a parientes mayores y
menores de edad que los reclamaren conjuntamente, el juez
competente es el juez de letras de menores del domicilio del
alimentante o del alimentario a elección de este último. Si
el menor alcanza la mayoría de edad durante la tramitación
del juicio, sigue siendo competente el tribunal de menores.

También es competente el juez de menores, cuando la demanda

la interpone la madre del hijo que está por nacer.

Por su parte, es competente para conocer de las demandas de

aumento, rebaja o cese de la pensión alimenticia, el mismo
juez que decretó la pensión.

Finalmente, en caso que el alimentante no pague la pensión

de alimentos decretada por el juez, se debe iniciar un
juicio ejecutivo para cobrarla, el que se inicia por demanda
interpuesta ante el mismo tribunal que decretó la pensión o
el tribunal del nuevo domicilio del alimentario.
2.- Monto de las pensiones de alimentos:

La ley establece que cuando un menor solicita alimentos de

su padre o madre, la ley presume que el alimentante tiene
los medios para otorgarlos. Si el alimentante justifica ante
el tribunal que no tiene los medios para pagar el monto
mínimo, el juez puede rebajarlo prudencialmente.

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Según la ley, el monto mínimo de la pensión alimenticia no
puede ser inferior al 40% del “ingreso mínimo”. Si se trata
de dos o más menores, dicho monto no puede ser inferior al
30% por cada uno de ellos.

En todo caso, la pensión de alimentos no puede ser superior

al 50% de las “rentas del alimentante”.

Las asignaciones por “carga de familia” no son consideradas

para calcular la pensión y corresponden, en todo caso, a la
persona que causa la asignación.

Los montos pagados por el alimentante con ocasión de la

educación, salud, vivienda, alimentación, vestuario,
recreación u otras necesidades del alimentario se pueden
imputar al pago de la pensión.
3.- Reajuste de la pensión de alimentos:

Cuando la pensión alimenticia no se fija en un porcentaje de

los ingresos del alimentante ni en otros valores
reajustables, ésta se debe reajustar semestralmente de
acuerdo al alza del IPC. En este caso, el secretario del
tribunal debe reliquidar la pensión alimenticia cuando el
alimentario lo solicite.
4.- Aumento, rebaja o cese de una pensión de alimentos:

Puede suceder que el alimentante aumente o disminuya sus

ingresos, o bien, que mejore o empeore la situación del
alimentario. Por ello, la ley permite que cualquiera de las
partes recurra al mismo juez que decretó la pensión de
alimentos, para que revise los antecedentes nuevos que
existen y, de acuerdo a ellos, aumente, rebaje o haga cesar
la pensión de alimentos.
5.- Solicitud subsidiaria de pensión de alimentos a los
abuelos:

Cuando el padre no paga los alimentos debidos, o éstos no

son suficientes para solventar las necesidades del hijo, el
alimentario puede demandar a los abuelos por una y otra
línea, conjuntamente, para que paguen o ayuden a pagar la
pensión de alimentos.
6.- Alimentos provisorios:

El juez puede obligar al demandado a entregar alimentos

provisorios a sus hijos menores mientras se tramita el
juicio de alimentos. Para ello es necesario que el
demandante acredite el título que lo habilita para pedir
alimentos y no exista una manifiesta incapacidad para que el
demandado los provea.

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Para estos efectos, el demandante debe solicitar alimentos
provisorios dentro de los 10 días siguientes a la
notificación de la demanda, exponiendo en ese momento al
juez las razones por las cuales cree que corresponde que
decrete alimentos provisorios y acompañando los títulos o
antecedentes en que se funda.
7.- ¿Qué hacer cuando no se conoce el domicilio del
alimentante?

Si la persona que solicita una pensión de alimentos no

conoce el domicilio del demandado, o bien, este último no se
encuentra en dicho domicilio, puede interponer su demanda
omitiendo la indicación del domicilio del demandado, En este
caso, el juez debe adoptar todas las medidas necesarias para
determinar, en el más breve plazo posible, el domicilio
actual del demandado.

8.- Obligación del demandado de constituir garantías:

Si el juez estima, por motivos fundados, que hay altas

probabilidades de que el alimentante no cumpla con su
obligación alimenticia por ausentarse del país, puede
exigirle que constituya una garantía, sea ésta una hipoteca,
prenda u otra caución.

Mientras no lo haga, el juez puede decretar su arraigo.

9.- Retención del monto de la pensión por parte del
empleador:

Cuando el alimentante es un trabajador dependiente, el juez

puede obligar a su empleador o a la persona encargada de
pagarle el sueldo, que retenga parte del sueldo de forma de
entregar directamente al alimentario el valor de la pensión
alimenticia fijada por el juez.

El alimentante puede solicitar al juez, por una sola vez,

que establezca una modalidad distinta de pago. Si el juez
accede a su petición, la nueva modalidad de pago queda
sujeta a su íntegro y oportuno cumplimiento. En caso de
incumplimiento, el juez, de oficio, y sin perjuicio de las
sanciones y apremios que sean pertinentes, debe ordenar que,
en lo sucesivo, la pensión de alimentos sea nuevamente
retenida por el empleador.

En los casos de transacciones o avenimientos firmados ante

el juez, el juez debe ordenar este tipo de pago de la
pensión de alimentos, salvo que las partes soliciten una
modalidad de pago diferente. El juez debe, en todo caso,
decretar esta modalidad de pago sin más trámite si el
alimentante no cumple con su obligación de pagar la pensión
en algún momento.

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Si la persona natural o jurídica que debe hacer la retención
desobedece la orden judicial, incurre en multa, a beneficio
fiscal, equivalente al doble de la cantidad mandada retener,
lo que no obsta para que se despache en su contra o en
contra del alimentante el mandamiento de ejecución que
corresponda.

La resolución que impone el pago de la multa tiene mérito

ejecutivo, es decir, sirve de título para iniciar un juicio
ejecutivo para obtener su pago.

En caso que termine la relación laboral, el empleador debe

dar cuenta de ello al tribunal con el objeto de liberarse de
su obligación de retener y entregar la suma de la pensión al
alimentario. Si no da este aviso, el tribunal debe
determinar su responsabilidad y, en caso que corresponda,
aplicarle la multa señalada.
Por su parte, en caso que, al poner término a la relación
laboral, sea procedente el pago de la indemnización
sustitutiva del aviso previo a que se refiere el Código del
Trabajo, el empleador también debe retener de esta
indemnización el monto correspondiente a la pensión
alimenticia y entregarla al alimentario.

En caso que el empleador deba pagar la indemnización por

años de servicio, también debe retener del total de dicha
indemnización el porcentaje que corresponda al monto de la
pensión de alimentos en el ingreso mensual del trabajador,
con el objeto de realizar el pago al alimentario.

El alimentante puede, en todo caso, imputar el monto

retenido y pagado a las pensiones futuras que se devenguen.

10.- Requerimiento de pago y mandamiento de ejecución y

embargo:

Cuando el alimentante no paga la pensión alimenticia, el

alimentario debe demandarlo para iniciar en su contra un
juicio ejecutivo que lo obliga a pagar.

Para estos efectos, el juez debe requerirlo de pago, lo que

se hace a través de una notificación y, en caso que aún así
no la pague, despachar un mandamiento, en virtud del cual se
le embargan y rematan sus bienes. La idea es pagar la
pensión alimenticia adeudada con el producto del remate.

El alimentante sólo puede oponerse al requerimiento de pago

demostrando, mediante un título escrito, que ya pagó.

Si no demuestra que pagó, el juez despacha de inmediato el

mandamiento de ejecución y embargo.

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Cabe destacar que, tratándose del cobro de pensiones
alimenticias, el primer mandamiento sirve para ejecutar al
alimentante por las pensiones alimenticias que después
tampoco pague. El alimentante sólo puede, en cada caso,
oponer la excepción de pago, si tiene título escrito que lo
demuestre.
11.- Sanciones por el no pago de la pensión alimenticia:

Si el alimentante no paga los alimentos decretados por el

juez a favor del cónyuge, de los padres, de los hijos o del
adoptado, el tribunal debe imponer al deudor, como medida de
apremio, el arresto nocturno entre las 22.00 horas de cada
día hasta las 6 horas del día siguiente, hasta por 15 días.
El juez puede repetir esta medida hasta obtener el íntegro
pago de la obligación.
Si el alimentante infringe el arresto nocturno o persiste en
el incumplimiento de la obligación alimenticia después de
dos períodos de arresto nocturno, el juez puede apremiarlo
con arresto hasta por 15 días. En caso de que procedan
nuevos apremios, puede ampliar el arresto hasta por 30 días.

Si el alimentante no es encontrado en el domicilio que

consta en el expediente cuando es enviado a detener, el juez
debe adoptar todas las medidas necesarias para hacer
efectivo el apremio.

En este último caso, el juez debe, además, dictar orden de

arraigo en su contra, la que se mantiene hasta que pague lo
adeudado.

Las órdenes de apremio y de arraigo deben contener el monto

de la cuota debida de forma que el alimentante pueda pagarla
directamente ante la unidad policial que les dé
cumplimiento, debiendo entregar un comprobante de pago al
deudor.

Por otra parte, las pensiones alimenticias atrasadas

devengan intereses corrientes entre el día de vencimiento de
la cuota y el de su pago efectivo.

El juez puede suspender estas sanciones si el alimentante

justifica ante él que carece de los medios necesarios para
pagar la pensión o en caso de enfermedad, invalidez,
embarazo u otra circunstancia extraordinaria.

Las sanciones, sin embargo, sí se aplican al que, estando

obligado a prestar alimentos, ponga término a su relación
laboral voluntariamente o de mutuo acuerdo con el empleador
y sin causa justificada y no cuenta con rentas suficientes
para cumplir con su obligación alimenticia.

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Por último, si se decretan dos apremios en contra del
alimentante, el juez puede decretar la separación de bienes
de los cónyuges, entre otras medidas.
12.- Responsabilidad de terceros:

Son solidariamente responsables del pago de la obligación

alimenticia el que vive en concubinato con el padre, madre o
cónyuge alimentante, y los que, sin derecho para ello,
dificultan o imposibilitan el fiel y oportuno cumplimiento
de dicha obligación.
Conclusión:

Si bien las normas legales descritas debieran lograr el pago

oportuno de las pensiones alimenticias, ya que establecen
incentivos correctos para ello, se observa que ello no
siempre se logra en la práctica, fundamentalmente, debido a
que los tribunales de familia no están operando como
debieran.

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