Вы находитесь на странице: 1из 7

Panorama del teatro actual en Tijuana, Baja California

Fernando López Mateos

El quehacer teatral en Baja California, un estado todavía joven frente a los demás del
territorio nacional mexicano, registra actividad desde hace décadas. Se hace teatro desde que
los poblados que constituyen las actuales ciudades se van haciendo grandes y forman parte de
lo que todavía no constituía un estado dentro de nuestra división política, cuya cabeza de
gobierno se mudaba de un lugar a otro. Gran parte de ese teatro fue de importación y tuvo
orígenes diversos. Pero el teatro que emana de una población que además de importar o
repetir modelos de actividad teatral, empieza a generar productos con una estética propia de
los residentes de la zona, tiene menos tiempo de vida. Es ese teatro que se inserta en la franja
de lo fronterizo y, por definición, en lo que se llamaría el teatro regional, en contraposición a lo
que se conoce como el teatro de la capital, estrictamente del Distrito Federal.
La separación centro-periferia, el teatro de la metrópoli y el teatro regional, marcan la
principal frontera que ha señalado al teatro de nuestro país en su historia moderna. Al respecto,
el caso de Baja California no se diferencia tanto de lo que sucede en otros confines norteños de
la república. Sin embargo, su lejanía del Distrito Federal y su cercanía con Estados Unidos, ha
permitido influencias que la distinguirán del resto del país en los tiempos cercanos.
El caso particular de Tijuana, que es hoy una ciudad boyante y con una población
mayoritaria formada por población migrante y multicultural, se puede afirmar que esas
influencias vienen de todas partes. Dichas influencias se asientan o van dejando huella en los
creadores teatrales, independientemente de sus fuentes de inspiración o formación artística.
A pesar de que siempre se le identifique con la famosa leyenda negra de ciudad de
perversión y vicio –de la cual parece imposible despegarse las costras- Tijuana se ha
convertido en una ciudad de múltiples caras. Más allá de esa imagen estereotipada y negativa
que pulula siempre entre quienes no la conocen, están las otras imágenes de todos aquellos
que hacemos algo por ella día con día, dentro de los márgenes que su vastedad como ciudad
alberga y propicia.
Las caras de lo diverso que es esta ciudad se reflejan en gran parte del arte que en ella
se crea. En lo que concierne a su teatro, éste ha tenido grandes momentos en su relativamente
corta historia, y apunta para continuar un auge de creación que, como en todos lados, nace,
crece, se desarrolla y cambia por periodos de ascenso y descenso. De acuerdo a como el

1
curso de los tiempos permite la supervivencia de grupos e individuos, las tareas del teatro que
implican dar a luz nuevos textos, nuevos montajes y generar nuevos públicos, la última fase del
ciclo de vida del teatro, la de morir, parece no querer ubicarse ni tener cabida en esta ciudad.
El teatro en Tijuana reporta una serie de realizadores amplia e importante en el espectro
regional. La diversidad de temas, de tópicos, de formas de montaje y de estilos ha sido extensa
y, afortunadamente, también suficientemente plural. Son individuos y grupos los que dan
sustento a que el teatro se mantenga vivo, con una marcada proliferación de exponentes de
orígenes distintos, que dan esa idea múltiple de visiones de vida para el teatro.
Los grupos que en la actualidad sostienen el espectro de creadores teatrales en la
ciudad son los siguientes:

Compañía teatral Andrés Soler


Es una de las más antiguas instituciones arraigadas en la ciudad, la cual se desprende
de la Asociación Nacional de Actores (ANDA) Tijuana, de donde egresan estudiantes de
actuación después de un periodo de estudio de tres años. Sus montajes siempre incluyen
alumnos que están por egresar de sus filas o de alumnos ya egresados que se preparan para
trabajar de manera independiente. El principal responsable de esta asociación es y ha sido el
actor y director Jorge Andrés Fernández.
Montajes que han sido presentados por esta compañía incluyen muchas, entre las que
destacan La casa de Bernarda Alba, Historia del zoológico, El médico a palos, Este es el juego,
Severa Vigilancia, El lazarillo de Tormes, Pedro y el capitán, El avaro entre muchos otros. La
ANDA ha sido semillero de actores, de entre los cuales muchos se inclinan al mundo del cine y
otros más al del teatro. Algunos de ellos han continuado con otros diplomados o se han
mudado de la ciudad y regresado. Muchos de ellos combinan ambas disciplinas con doblaje,
comerciales y otras actividades dentro del mismo medio en afán de supervivencia y ajuste a un
siempre deseado modus vivendi como actor.

Taller Universitario de Teatro de la UABC


Este es otro de los grupos pertenecientes a instituciones que se ha nutrido de las
iniciativas de sus directores en turno. Estuvo a cargo de Jorge Andrés Fernández durante un
tiempo, y fue seguido por Saúl Paredes en otro momento. Le siguió otra iniciativa surgida al
interior de la universidad con la Compañía de Teatro Clásico a cargo de Víctor Bazán de
Savigny. Durante esa época, los dos grupos que aportaban montajes clásicos o
contemporáneos dieron fuerza al teatro en la ciudad.

2
De ahí continuó el taller con el mote de Teatro Universidad bajo la dirección de Ignacio
Flores de la Lama, de quien se recuerdan montajes como Nosferatu Gómez, Marca en el Agua
y En esta esquina. Más tarde estuvo en manos de quien esto escribe, dejando en su momento
un montaje de sketch cómico como el de Coque Pus y Charly Chamoy en el aparejo de la libre
tranza, además de la obra Nosotros los pollos, y las Obras cortas de Tennesse Williams.
Tiempo después, el Taller quedó a cargo de su director actual Daniel Serrano, mismo
que se apoya de los cursos de iniciación que otro profesor sostiene, y que en este caso se trata
de la actriz Claudia Villa. En los últimos años se ha logrado un intercambio de actividades entre
Serrano y Villa que ha ayudado a echar a andar los proyectos. De ellos se recuerdan montajes
de obras como El animador, Ámsterdam Boulevard, A ver, un aplauso, Zapatos rojos de mi
corazón, Silencio Blanco y Vaselina. El taller sigue trabajando actualmente, con el reciente
estreno de la obra Anela.

Compañía del Sótano Con formato

La compañía del Sótano es quizá uno de los grupos que mayor fuerza tiene en la
ciudad, debido a que además del tiempo que lleva ya formado como grupo (10 años), ha tenido
en repertorio diversas obras que han llegado a cumplir temporadas completas como pocos
grupos han podido hacerlo en la ciudad. La compañía se va formando con gente que ha
trabajado en los cursos de dos años que mantiene desde entonces su director Hebert Axel
González en la Casa de la Cultura. Mucho del éxito de permanencia que la compañía tiene se
debe a que además es el grupo que soporta un espacio alternativo que es usado como teatro
en el Sótano de la Casa de la Cultura de Tijuana, que en realidad opera como el único espacio
en la ciudad cuyo uso, además del de espacio para clases, es usado exclusivamente para la
disciplina teatral.
Los montajes que ha trabajado incluyen Siempre dije que no, 5 y 10 (Bulevar) y En
altamar. Varios de los trabajos que la compañía ha emprendido son adaptaciones a clásicos
realizadas por Luis Humberto Crosthwaite, tales como Pluto, el Dios de la riqueza,
Fuenteovejuna mató al director, Sueño de una noche de verano o Ramón y Cornelio. Varios de
sus montajes han durado más de un año en temporada, y algunos alcanzado las 100
representaciones, como es el caso de ¿Qué paso con Schauchenager? La constancia del
grupo ha permitido que obras como Rebelión o La campesinela se repongan luego de un
tiempo, dándole una fuerte consistencia y presencia en el ámbito teatral de la ciudad. Miembros
de la compañía se han movido y trabajado con otros grupos, además de seguirse formando con
cursos y diplomados diversos.

3
La tropa de Dédalo Con formato

Es otro de los grupos sólidos de la ciudad que incluye un repertorio de obras que se han
sostenido a lo largo de los años de manera independiente. Bajo la dirección de quien esto
escribe, el grupo se inició en 1997 con el montaje de Vieja el último, con el cual se ha logrado
llegar a las 100 representaciones por más de 6 años. De igual manera, logró varias temporadas
de La bruja Galáctica, espectáculo que llegara a cumplir las 50 representaciones.
La tropa ha trabajado obras tanto infantiles como para adolescentes sin distinción de
calidades. Además, ha integrado obras que son de acceso a otro tipo de públicos maduros
como es el caso de Daniel en Julio. Durante un tiempo combinó esfuerzos con otro grupo cuyo
nombre es Cronotopio, fundado con estudiantes de la Escuela de Humanidades de la UABC,
con el cual surgieron los montajes de La señora y sus amibas y Aristofánica, el obsceno y
divertido llamado a la paz. Al deshacerse el grupo, algunos integrantes se adhieren a la Tropa
de Dédalo, continuando su trabajo y agregando al repertorio del grupo la obra El círculo de
amigos, la cual sigue activa dando funciones, al igual que Aristofánica y Vieja el último. El grupo
sigue nutriéndose con nuevos valores a partir de talleres teatrales de iniciación y continuidad,
además de integrar actores independientes y de otros grupos para formar parte de sus elencos.

Grupo Ojo Con formato

Formado por actores egresados de la ANDA y que posteriormente tomaran el


Diplomado de Teatro del Centro de Artes Escénicas del Noroeste (CAEN), entre otros cursos
de formación, este grupo es constante en la búsqueda de continuidad y permanencia en el
escenario teatral de Tijuana. Muchos de sus elementos han sido parte del mismo diplomado, o
han trabajado con otros grupos como el de la ANDA o la Compañía del Sótano. Dirigido por
Jesús Quintero, han montado obras como Los guardianes del agua, Arlequín, servidor de dos
patrones, y Commedia all’improviso, entre otras.
Además de participar en otros montajes como elenco o como la parte creativa como
vestuario y diseño de impresos entre otras cosas, sus miembros han echado a andar un
espacio alternativo en una de las zonas atractivas de la ciudad bajo el nombre de Las Tablas.
Junto a ese esfuerzo, debe reconocerse su tesón en la conformación de modelos de promoción
como la cartelera mensual de teatro de la ciudad que alcanzó a difundir y ayudar a sembrar
público hace algunos años.

4
La divina fauna
Un grupo sui géneris que aglutina esfuerzos bajo la tutela de Edward Coward. Su
trabajo novel desde un principio dejó una pista de ingenio y frescura muy característicos de su
director y algunas actrices que con él se formaron. Una muestra de ello son los montajes de
Sirenas del Corazón y Volver a decir Star. El grupo ha estado marcado por una particular
intermitencia en el tiempo, pues su trabajo ha sido visto por lapsos de tiempo que en apariencia
no son constantes, pero que dan muestra de irrupciones cargadas de trabajo acumulado de sus
participantes, quienes combinan trabajos de cine experimental con otras actividades. De esta
manera, el grupo se hace fuerte frente a públicos más amplios con los trabajos que le han dado
un lugar destacado, tales como Guía Nocturna y La historia de China. Su trabajo continuado de
búsqueda y creación personal se deposita en otro trabajo con buena acogida de público que es
Pedro y Lola. Varios de sus miembros han seguido la búsqueda después de cursar el
Diplomado de Teatro del CAEN y continuar desarrollándose con Coward en sus talleres de
formación actoral, de tal manera que ahora se encuentran en ciudades como México y
Guadalajara.

Mujeres en ritual Con formato

Este es un grupo formado a partir de un espectáculo que le da el mismo nombre:


Mujeres en ritual. El trabajo mencionado define muchas de las características del grupo,
comandado por su directora Dora Arreola, quien se ha abocado a trabajar la danza teatro y el
trabajo ritual sobre el escenario desde que dirigiera el Taller de Artes Escénicas de la UABC en
Ensenada, y del cual emanara el espectáculo El baile de los montañeses.
El trabajo de Arreola hace énfasis en la exploración y manejo del cuerpo, fusionando
actrices y bailarinas para adecuar textos y propuesta personal con base en ellas. Por ello, ha
participado en festivales y encuentros de danza contemporánea. Varias de las mujeres que en
grupo han participado ya tenían una trayectoria de formación en la ANDA o en le Centro de
Artes Escénicas del Noroeste. A partir de esas fusiones, Arreola logra, entre otros, un
interesante trabajo titulado Perfecto Luna.

La madeja Con formato

Un grupo de fundación más reciente, pero que parece decidido a quedarse en la escena
teatral tijuanense, es La madeja. Formado con actores egresados de las filas de la Compañía
del Sótano y del Diplomado de Teatro del CAEN, se encamina a desarrollar historias basadas
en textos propios y de otros autores. La dirección del trabajo corre a cargo de Juan José Luna,

5
quien además actúa en la obra Mades Medus, obra que sigue presentándose en distintos foros
de la ciudad intermitentemente. Es autor del texto de la obra Matilda y recientemente ha puesto
en escena la obra Nuc.

Tiempos Furiosos Con formato

Otro de los grupos de creación más jóvenes, pero que incluyen en sus elencos actores
egresados del Diplomado de Teatro del CAEN y de otros talleres diversos es éste, cuyo nombre
parece referirse a un montaje capitalino que estuviera en Tijuana años atrás. Tiempos furiosos
es un grupo de actores que iniciaron actividad aparte con el montaje de Leyenda negra, escrito
y dirigido por Liliana Cota. Un nuevo montaje reciente es el titulado Amores grandes, muy
grandes, que incluye un texto propio de Cota y otro prestado para integrar el espectáculo.

Grupo Cachivache
Un grupo más de creación reciente es el formado por estudiantes universitarios que,
bajo la batuta de Edmundo Flores, se ha abocado a la creación de espectáculos de títeres para
niños. De ente ellos, ya registran el montaje de Don Tiburcio el tiburón y El unicornio de
Garritín.

Otros grupos
Existen varios grupos que han dado su aportación al teatro en la región, pero
actualmente no reportan actividad. De ellos podemos citar el Taller Libre de Arte A.C. que es
comandado por Vianka Santana, del cual recordamos Tenochtitlán 3038, Sueños de Gavroche
y La casa de Bernarda Alba, entre otros montajes. El Grupo de Teatro Aristófanes, a cargo de
Rafael Pérez Barrón, nos a ofrecido desde Las tres heridas hasta La orgía, El raite, y La otra
tarea. El Grupo Teafron, dirigido por Javier Montaño, que ha puesto predominantemente obras
musicales y su exitosa Rockomanía.
Otros grupos que han dejado su contribución en el quehacer teatral de Tijuana son
Comunicarte, a cargo de Agustín Rodríguez y Eduardo Guridi, con montajes como No tengo
no pago, Elíxir de amor y El niño de la estrella bajo la dirección de Luis Torner, mismo que
dirigió la mayor parte de trabajos del grupo de las Jóvenes Damas Católicas, con montajes
como el de La sirenita, El mago de Oz, La bella y la bestia y La casa de bernarda Alba, y
quienes ahora preparan trabajo desde otra perspectiva bajo el nombre de Grupo Camafeo.
Uno de los grupos que no continuó actividad es el de Actores Unidos, el cual se
desintegró al fallecer su director Enrique Nolasco. Sin embargo, se le recuerdan trabajos

6
importantes como El llano en llamas, La virgen loca y El médico a palos. Un grupo más que fue
bastión para el impulso del teatro independiente, pero que ya no trabaja en la escena
tijuanense es el de Los desarraigados, dirigido por Saúl García Pacheco.

Los directores y los escritores


Algunos directores que forman elencos temporales y que siguen trabajando
esporádicamente de esa forma son Domingo Natterie, Raquel Presa, Giancarlo Ruiz, Francisco
Morán y Rodolfo Álvarez. Este último, junto con la actriz Laura Durán, han aportado además
otro espacio para el gremio teatral conocido como La alborada, donde de pueden apreciar
trabajos teatrales de estructura pequeña, convirtiéndose en una opción ante la falta de
espacios teatrales en la ciudad.
Hoy día hay muchos jóvenes noveles que participan con diversos directores. Un
personaje que tiene un lugar particular en la historia del teatro contemporáneo de Tijuana es
Carlos Niebla, actor que lleva desde acá y para el país, más de 1500 representaciones de su
memorable monólogo La reina de su casa, basado en textos de Darío Fo y Franca Rame.
Muchos de los teatreros han combinado su trabajo con la creación individual de autores
locales y de otros lugares. De entre los individuos que han aportado sus textos a la región se
tiene a Virginia Hernández, Hugo Salcedo, Pedro López, Gerardo Navarro, Ángel Norzagaray,
Bárbara Colio, Luis Humberto Crosthwaite, Elba Cortez, Antonio Maldonado, entre otros más.
Ellos han escrito para el papel trabajos que han sido montados por ellos mismos o por otros
teatreros, dependiendo de su dinámica propia.
Los teatreros tijuanenses tienen una fuerte orientación a definir sus trabajos desde el
texto de otros, pero ajustando su propia dramaturgia, a fin de sellar sus visiones con su estilo
particular de hacer el teatro en la frontera, el teatro en la región. Los directores han sido el
soporte para que la dramaturgia dé pasos firmes, pues muchas de las puestas en escena son
de creación propia. Esto hace que el arte escénico se apunte como uno de los que ha dado
muestras de fuerza y consistencia dentro de la escena nacional.
Ahora que tendremos la celebración de la XXV Muestra Nacional de Teatro en Tijuana,
ésta servirá para refrendar los logros que todos sus artistas hemos perfilado en pro de una
cultura teatral digna de la ciudad. Acá se verá a una Tijuana que renueva constantemente sus
bríos para seguir haciendo camino al andar; un camino para las futuras generaciones de
jóvenes que hoy, ya empiezan a demandar trabajos teatrales con una fuerza mayor que la
mostrada en el pasado reciente. Enhorabuena.
Tijuana, Baja California, 27 de agosto de 2004

Вам также может понравиться