Nilthon Maldonado Navarrete 1

EL DILUVIO, LAS CATASTROFES NATURALES Y LA RESILIENCIA

APORTES HACIA UNA PASTORAL BIBLICA DE LA CRISIS

Las catástrofes naturales son un terror en nuestro mundo, nadie quisiera experimentar un
terremoto, un huracán, ciclón o inundación, pero estas suelen producirse cuando uno menos se lo
espera. En el Perú los temblores, terremotos y las inundaciones son muy comunes, cada cierto
tiempo se sufre de inundaciones, especialmente en la sierra central y el norte del Perú, (pese a ser
un país de poca agua). Los conocidos huaycos (que son avalanchas de barro y piedras acumuladas
en las cumbres de los cerros por lluvias) caen arrasan con todo a su paso, destruyendo sembríos,
casas, pistas, matando animales, personas y causando graves daños y pérdidas incalculables. Uno
de los fenómenos que causa destrucción y terror cada tres y seis años es la corriente del Niño. Este
fenómeno consiste en un cambio en los patrones de movimiento de las corrientes marinas, es un
flujo irregular de agua cálida que proveniente del norte del Ecuador y se extiende hacia las costas
del norte peruano donde se encuentra con la Corriente de Humboldt, este encuentro se caracteriza
por tener altas temperaturas, baja salinidad y por ser pobre en nutrientes. Lo que ocasiona el
aumento de lluvias y la destrucción de las casas y los sembríos de los agricultores de la costa norte
del Perú. 1

Uno de los eventos de dimensiones catastróficas que relata la Biblia es el diluvio. El

diluvio por su dimensionalidad y espectacularidad se ha prestado a una cantidad de
interpretaciones y cada una de ellas muy variada en contenido e imaginación. Relatos similares al
diluvio, que señalan un evento catastrófico de dimensiones mundiales, han sido expresadas en
diversas culturas y cada una con características propias. En la mayoría de los casos estos han sido
asociados a muerte y desgracia, porque eso han causado más que otra cosa, sería muy difícil
interpretarlo de otra manera. Sin embargo el relato que nos narra el texto bíblico sobre el diluvio
puede plantearnos una lectura esperanzadora y hasta liberadora, del solo hecho de hacernos
recordar un castigo divino por la maldad humana. De ahí que tenemos que señalar que el relato del

1
Datos tomados de http://www.naylamp.dhn.mil.pe/nino/mainFrame.htm
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diluvio tiene elementos vivificantes para un mundo que día a día, se va destruyendo en una
vorágine con consecuencias naturales fatalmente producida por el hombre.

Ante todo esto una pregunta valida que uno tendría que hacerse es ¿cómo el relato del
diluvio puede llevar esperanza y paz a los damnificados por las catástrofes naturales? ¿Qué
elementos consoladores podemos encontrar en el relato del diluvio para una pastoral de la
consolación y de esperanza? Y como estos elementos se pueden aplicar a nuestra realidad
latinoamericana.

EL DILUVIO: MUERTE Y RESURRECCION

Según el relato del Génesis, Noé fue el único varón hallado justo de toda su generación, los
demás, estaban sumidos en el pecado y por su culpa la tierra "se hallaba llena de violencia". Noé
fue hijo de Lamec, y este fue hijo de Matusalen, conocido por ser el más longevo de los seres
humanos (969 años); el cual es hijo a su vez de Enoc. Noé fue padre, de Sem, Cam y Jafet.

Entonces Jehovah lamentó haber hecho al hombre en la tierra, y le dolió en su corazón. Y

dijo Jehovah: “Arrasaré de la faz de la tierra los seres que he creado, desde el hombre hasta
el ganado, los reptiles y las aves del cielo; porque lamento haberlos hecho.” (Gen 6:6-7)

Dios le dijo a Noé que iba arrojar un diluvio sobre la tierra y le mando construir un arca,
para que meta en ella a su familia y una pareja de animales de cada especie. Noé pasó 120 años
predicándoles el arrepentimiento a sus contemporáneos, pero no le hicieron caso. Mientras Noé y
su familia construían el Arca, los vecinos y habitantes se burlaban de él. El diluvio comenzó el
año 600 de la vida de Noé, y tuvo una duración de cuarenta días con sus noches respectivas,
durante los cuales toda la tierra llegó a estar bajo las aguas, destruyendo todo rastro de vida
humana y animal, exceptuando a los animales que, junto a Noé y su familia, subieron al arca. En el
año 601 de la vida de Noé la tierra se secó, y Noé y su familia esperaron un mes más, hasta que el
Señor les ordenó salir.

En la biblia el diluvio se presenta como una gran inundación, un gran cataclismo que
cubrió de aguas todo el mundo, pero pese a su espectacularidad y su impacto destructivo, su
estructura narrativa nos indica la presencia de Dios de la siguiente manera:
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Introducción: Genealogía de Noé - la rectitud de Noé

A Decisión divina de destruir (6.11-13)

B Dios manda la construcción del arca (6.14-22)
C Entrada al arca (7.1-9)
D Comienza el diluvio (7.10-16)
E Las aguas suben 150 días (7.17-24)
Y se acordó Dios de Noé (8.1)
E´ Las aguas bajan 150 días (8.1b-5)
D´ La tierra se seca (8. 6-14)
C´ Salida del arca (8.15-19)
B´ Noé construye un altar (8.20)
A´ Decisión divina de nunca volver a destruir (8.21-22)
Pacto y conclusión (9.1-18)

El esquema quiasmico nos resalta los mensajes paralelos de juicio y gracia, Noé y su
familia viene a ser salvados por la gracia de Dios. El agua viene a ser como un sacramento, pues,
se presenta como gracia en si misma por que da salvación, salva a la humanidad y como medio de
gracia por que provee bendición.

Por otro lado las aguas del diluvio y su poder arrasador vienen a significar el final del
politeísmo y de todo lo que ello implicaba. Así el diluvio se vuelve un instrumento restaurador del
monoteísmo y exterminador del politeísmo. Función a la que estaba llamado a hacer el pueblo, el
rey, el profeta, el sacerdote y en última instancia Dios mismo. Esta función paralela del diluvio
viene a ser como “el ángel que acampa al rededor de los que los temen”. Visto así, una catástrofe
puede tener funciones protectoras y restauradoras.

La concepción hebrea del diluvio2 plantea una visión similar, señala que al juntarse los dos
océanos el superior (cielos) y el inferior (mares) la creación regresa al caos primitivo, al origen de
la creación y se convierte así en una especie de recreación, pues el cosmos entero se ve envuelto
2
Gerhard Von Rad, El libro de Génesis, Sígueme, Salamanca,1972, 151-156.
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en este evento. Así el diluvio es visto como una recreación más que un cataclismo de muerte.
Después del diluvio la tierra encaja casi exactamente con la doctrina de la resurrección. El
cataclismo juega un papel determinante pues pasa a ser un elemento vivificador. El diluvio
adquiere características soteriológicas pues se sobrepone a la muerte dando vida y aun mas
importante puede hacer resucitar a la tierra, el agua se convierte en el elemento vivificador, que le
devuelve la vida a la tierra, después de la gran inundación.

“Pero, tanto en el nivel cosmológico como en el nivel antropológico, la inmersión en las

aguas no equivale a una extinción definitiva, sino únicamente a una reintegración pasajera
en lo indistinto, a la que sucede una nueva creación, una nueva vida, o un hombre nuevo,
según que nos encontremos frente a un momento cósmico, biológico o soteriológico. Desde
el punto de vista de la escritura, el diluvio es comparable al bautismo y la libación funeraria
o el entusiasmo ninfoléptico a las lustraciones de los recién nacidos o a los baños rituales
primaverales que proporcionan la salud y la fertilidad.”3

Por otro lado el diluvio muestra su importancia escatológica perceptible retrospectivamente

desde el enfoque de la preservación, Pedro la relaciona con el agua del bautismo, como agua del
juicio (1pedro 3.20) aquí el diluvio le dice al hombre que su actual estado y comportamiento ya no
guarda relación con el mundo glorioso de la creación.4

EL DILUVIO: UN PARADIGMA DE ESPERANZA

La historia de una destrucción cósmica por medio de un diluvio es común a casi todas las
culturas del mundo.5 En casi todos los relatos de diluvios se presenta la idea de la reabsorción de la
humanidad, la institución de una nueva época y el aparecer de una nueva humanidad. Así la
concepción cíclica de la historia viene a cerrarla y abrirla el diluvio: “una época es abolida por la
catástrofe y una nueva era comienza, dominada por hombres nuevos”. 6 Igualmente esta concepción
cíclica se presenta en los mitos acerca de la luna, pues la luna es por excelencia el símbolo del
devenir de la muerte y la resurrección. Así la luna se encuentra en estrecha conexión con las
inundaciones y el diluvio que aniquilan a la vieja humanidad y preparan la aparición de una
humanidad nueva.
3
Mircea Eliade, "Las aguas y el simbolismo acuático", en Tratado de Historia de las religiones, México, Biblioteca
Era, 1972, 178-200
4
Op.cit.
5
Esteban Voth, Comentario Bíblico Hispanoamericano, Génesis primera parte, Caribe, Miami, 1992. 169-235.
6
Mircea Eliade, ibid.
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“Las aguas preceden a toda creación y la reabsorben periódicamente a fin de refundirla en

ellas, de purificarla, enriqueciéndola al mismo tiempo con nuevas latencias,
regenerándola. La humanidad desaparece periódicamente en el diluvio o en la inundación
a causa de sus pecados. Nunca perece definitivamente sino que reaparece bajo una nueva
forma, volviendo a tomar el mismo destino, esperando el retorno de la misma catástrofe
que la reabsorberá en las aguas. No sé si se puede hablar de una concepción pesimista de
la vida. Es más bien una visión resignada por la intuición misma del conjunto agua-luna-
devenir. El mito del diluvio, con todas sus implicaciones, revela cómo la vida puede ser
valorizada por otra conciencia humana; "vista" desde el nivel neptuniano, la vida
humana aparece como una cosa frágil que hay que reabsorber periódicamente, porque el
destino de todas las formas es disolverse a fin de poder reaparecer. Si las formas no
fuesen regeneradas por su reabsorción en las aguas, se deteriorarían sus posibilidades
creadoras. Las maldades acabarían por desfigurar a la humanidad; vaciada de los
gérmenes y de las fuerzas creadoras, la humanidad se resquebrajaría decrépita y estéril.
En lugar de la regresión lenta en formas subhumanas, el diluvio trae la reabsorción
instantánea en las aguas, en las cuales los pecados son purificados y de las cuales nacerá
la nueva humanidad, regenerada”.7

Ciertamente podemos decir que el diluvio como tal con tiene elementos liberadores, pues
como relato nos antepone a una situación insufrible que el hombre tendrá que hacerle frente. Nos
invita a reflexionar en la vida como don de Dios, a valorarla y tomarla en cuenta en todos nuestros
actos, aun en aquellos que parecen caóticos. El diluvio más que un hecho que trae muerte y
desolación trae la oportunidad de empezar de nuevo, no es el fin, es el comienzo, el reiniciar pero
esta vez con la experiencia y la advertencia de que la vida es muy frágil y se la puede perder.

EL DILUVIO EN EL PLANO ÉTICO AMBIENTALÍSTA

¿Desde qué punto de vista, podemos hacer del diluvio un paradigma para la ética cristiana
y un hecho fundante para la pastoral de la consolación en casos de catástrofes y desastres
naturales? Creo que desde el plano ético ambientalista una interpretación del diluvio puede
enfocarse como paradigma y tendría las siguientes características:

a) Aunque pareciera contradictorio el relato del diluvio tiene una función concientizadora y
en este caso también proteccionista, porque aparta a la naturaleza de un final irremediable,
preservando la biodiversidad y la belleza geográfica. También es conservacionista por que

7
Ibid.
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en el hecho de presentar una naturaleza sufriente espera que el hombre reaccione

conservando la biodiversidad y los recursos naturales. También es restauradora por qué no
extermina quitándole la vida a la naturaleza sino que repara el daño causado por el hombre.
b) Se orienta hacia el futuro y las generaciones venideras, por que como relato tiene la
función pedagógica y ética de advertir a la humanidad a fin de que pueda orientarse y
proyectarse hacia un futuro esperanzador.
c) Privilegia las necesidades de los damnificados, pues va en contra de las fuerzas y
estructuras que dominan la naturaleza y la dañan, presenta un juicio ante la presunción del
hombre de creerse dueño de la naturaleza y expresamente le dice que no puede controlarla
más si conservarla pues le pertenece a Dios.
d) Da el papel protagonista al hombre. Pues es el hombre culpable del diluvio, y por tal debe
luchar por un orden diferente, contra los sistemas y estructuras socioeconómicas, políticas
y aun culturales, que detenten contra la naturaleza a fin de que no se destruya.
e) Es preocupatoria, por que invita a crear políticas precautorias, incluso sin demostración
empírica.
f) El diluvio como tal exige modelos alternativos de sistemas de producción y distribución,
para esto invita a que se requerirá la colaboración de varias disciplinas del saber humano,
multidisciplinario.

Si bien no podemos evitar las catástrofes naturales, debido a la complejidad de su origen,

desde una participación ciudadana podemos encontrar maneras de cómo evitar los mayores daños
posibles. Para este cometido básicamente debemos tener en cuenta algunos elementos:.

PAUTAS PARA EL CUIDADO PASTORAL EN TIEMPOS DE CRISIS

1. Tres momentos de la praxis pastoral

Para una metodología de la praxis pastoral más asertiva en los tratamientos de personas que
han sufrido una situación caótica como las inundaciones se debe seguir tres momentos:
a) La observación pastoral. Este observar tiene sus niveles, el primer nivel es una observación
espontánea o experiencia común, un segundo nivel es la observación guiada y corresponde a la
experiencia estructurada (uso de técnicas e instrumentos de análisis) y el tercer nivel, se sitúa
en la observación crítica que corresponde a la experiencia finalizada (valores, normas y
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acciones). La observación pastoral nos plantea seis preguntas para empezar, ¿quien, qué,
dónde, cuándo, cómo y porqué y esta a su vez se divide en tres: la observación del enclave de
la experiencia (quien, donde y cuando), la experiencia concreta (qué y cómo) y la evaluación
(por qué).
b) La interpretación pastoral. Consiste en un diagnóstico de la experiencia observada, aqui el
punto de partida es la experiencia y no la teología, por eso la acción pastoral observada y
analizada es punto de partida y de llegada de un modo de pensar hermenéutico teológico-
pastoral.
c) Planificación pastoral. el plan pastoral incluye:
(i) El análisis de la realidad.
(ii) La fijación de unos objetivos.
(iii) La coordinación de los agentes pastorales según un plan de trabajo.
(iv) La realización del proyecto (v) y la revisión de la acción.

A su vez la planificación incluye analizar socio-religiosamente la realidad social, fijar los

objetivos de la acción pastoral, coordinador el papel de los agentes pastorales, encarnar la acción
pastoral en la realidad humana y evaluar la acción pastoral.

Existen diversas maneras de cómo llevar un asesoramiento frente a la crisis, especialmente

a las causadas por inundaciones, entre ellas podemos señalar dos: el informal y el formal, para lo
que corresponde a un pastor lo más indicado es el informal pues el hecho de recibir
ocasionalmente y sin previa cita ciertos casos lo predispone para este tipo de tratamiento. Pero es
informal no porque carezca de seriedad sino por el ambiente, actitud, estructura, secuencia etc. y
es asesoramiento cuando a lo menos reúne dos requisitos (a) cierto grado de toma de conciencia
del problema de parte del miembro de la iglesia (b) y el deseo de ayudar, en cuanto a ese
problema, de parte del pastor.

2. Pautas para un asesoramiento pastoral en tiempos de crisis

Una pregunta importante es cómo se puede hacer un asesoramiento en la iglesia, con las
personas que han sufrido una situación de crisis, provocada por una inundación. Aquí algunas
pautas:
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a) Mantener una lista de cuidado especial, confidencial y actualizado que incluyan los nombres
de personas que ellos saben y sospechan, que se hallan en necesidad especial de cuidado
pastoral.
b) Tener una sensibilidad ante las señales de aflicción, nos da ventaja para detectar oportunidades
potenciales de asesoramiento.
c) Emplear juiciosamente “llaves de apertura” preguntas o afirmaciones destinadas a interrumpir
la conversación superficial y proveer una apertura para que la gente discuta sus verdaderos
sentimientos y problemas si así lo escogen.
d) Escuchar y responder a los sentimientos, durante los encuentros pastorales ayuda a llevar la
conversación al nivel de las necesidades reales de la persona.
e) Si se trata de un asesoramiento breve de la crisis esta debe incluir una diversidad de metas y
todas ellas deben estar enfocadas para proveer un ambiente de confianza entre el pastor y el
aconsejado en Crisis.

3. Proceso del asesoramiento informal o formal.

Todo tratamiento tiene su proceso, sin embargo es importante la forma como uno desea
ayudar a que este proceso se desarrolle. Por ello aquí algunas pautas para tratar situaciones post
traumáticas, útiles no solo para los casos de inundaciones sino para todo tipo de crisis. Existen
básicamente dos formas de hacer un asesoramiento pastoral, puede ser el informal o el formal,
aquí algunos elementos a tomar en cuenta para un asesoramiento pastoral:

a) Escuchar atentamente y reflejar los sentimientos con solicitud.

b) Emplear cuidadosamente las preguntas para focalizar rápidamente las áreas de conflicto.
c) Ayudar a las personas a examinar el problema en su totalidad.
d) Proveer información útil.
e) Concentrarse en los conflictos, problemas más importantes de la persona con la mira a
clarificar las alternativas viables.
f) Ayudar a la persona a decidir sobre el próximo paso, y darlo.
g) Proveer orientación practica cuando sea necesaria.
h) Dar a la persona apoyo emocional e inspiración.

4. Técnicas para una pastoral de crisis

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También existen técnicas muy útiles a las cuales uno puede recurrir o en todo caso
derivarla a un especialista. Entre las técnicas empleadas para tratamientos en crisis se toman en
cuenta las siguientes: El análisis transaccional y el asesoramiento en casos de crisis, con el sistema
Berne, que trata de ayudar al adulto a recuperar el control. Luego el modelo ABCD de
capacitación, que consiste en llevar esperanza. Estos tienen como fin:

a) Establecer una relación de confianza y cuidado solícito.

b) Reducir el problema a sus partes primordiales
c) Desafiar al individuo a emprender una acción constructiva con respecto a alguna parte del
problema
d) Desarrollar un plan de acción y crecimiento continuo. Esta entre otras herramientas son las
más indicadas para el tratamiento de personas en situación de crisis.

5. La resiliencia, una herramienta de la pastoral

Las estrategias de intervención comunitaria varían en función de las distintas realidades
sociales y étnicas hoy podemos considerar a la resiliencia como una herramienta , de genuino
cuño latinoamericano, que puede ser utilizada sin temor en la lucha contra la pobreza y la
iniquidad. Se puede decir sin incurrir en una exageración, que cada comunidad latinoamericana ha
debido enfrentar desastres y catástrofes que pusieron a prueba su resiliencia, en un sentido
colectivo. La única forma de explicar que después de un desastre natural, al día siguiente se
empiece una reconstrucción colectiva esta en las relaciones grupales y en aspectos culturales y
valóricos de cada sociedad. Los pilares fundamentales de la resiliencia colectiva son:

a) Auto estima colectiva: se entiende esa actitud y sentimiento de orgullo por el lugar en que se
vive, esta satisfacción por la pertenencia implica reconocer que uno es parte de una sociedad y
que comparte los valores que la inspiran.
b) Identidad cultural: se reconoce esa persistencia del ser social en su unidad y “mismidad” a
través de cambios y circunstancias diversas, la persistencia de sociedades capaces de preservar
su identidad cultural representan una esperanza para la humanidad.
c) Humor social: el humor en general es otra de las variables de la resiliencia que ha merecido
mayor estudio y reflexión, especialmente en lo que concierne al desarrollo individual. Es la
capacidad de expresar en palabras, gestos o actitudes corporales los elementos cómicos,
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incongruentes o hilarantes de una situación dada, logrando un efecto tranquilizador y

placentero. En este sentido el humor es una estrategia de ajuste que ayuda a una aceptación
madura de la desgracia común y facilita cierta distancia con el problema, favoreciendo la toma
de decisiones para resolverlo. Entre esto esta el humor intelectual, el humor de la ruptura del
narcisismo, el de las caídas y los resbalones, y finalmente esta el humor iconoclasta
d) Honestidad estatal: implica la existencia de una conciencia grupal que condena la
deshonestidad de los funcionarios y valoriza el honesto ejercicio de la función pública. En
términos de capacidad de recuperación tras un desastre, constituye en nuestro medio un
elemento fundamental.
e) Como antípodas de estos pilares se han podido señalar algunas características que reducen la
resiliencia de lo cual debemos estar advertidos y evitar a toda costa:

(i) El malinchismo: se opone a los valores de la identidad cultural y de la

autoestima colectiva.
(ii) El fatalismo: es la oposición a todo en forma de actitud pasiva y determinismo.
(iii) El autoritarismo: las dictaduras y el centralismo anulan el poder de invocación
(iv) La corrupción: la corrupción deja todo bajo el desgano de hacer algo por la
sociedad.

CONCLUSIONES
El diluvio corresponde, en nivel humano a la liberación de la opresión establecida en
contra de la naturaleza, a la vida y la recreación paradigmática de un nuevo modelo para una ética
ambiental, pues reúne en su presentación una cantidad de elementos que instan al hombre a
reaccionar y preservar lo que tiene temporalmente, pero que no le pertenece, pues es de Dios. El
diluvio es la manifestación por excelencia del gran poder de Dios sobre la naturaleza y lo que es
capaz de hacer con ella y con el hombre, más que una advertencia, es la consecuencia que nadie
quisiera experimentar, por ello todo contacto con el agua nos debe recordar que existe siempre la
posibilidad de la reintegración en las aguas y que la creación al igual que la humanidad siempre se
pueden restaurar.