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Esto puede ser causa de la falta de autoridad en todos los escenarios donde
los muchachos se mueven. Ahora es normal escuchar nosotros como
docentes, las quejas de los padres donde dicen que el hijo se salió de las
manos. La falta de presencia de la autoridad materna y/o paterna dentro del
hogar, no crea limites a los chicos, dándoles a entender que pueden hacer lo
que deseen.
Poro por que pasan estas cosas, tal vez será la situación económica de las
familias que conllevan a que padre y madre tengan que trabajar ambos,
dejando en manos de desconocidos a sus hijos o en manos de la televisión, y
con el desconocimiento de las actividades y compañías diarias de los jóvenes.
Por causas monetarias la familia colombiana se ha venido desintegrado, y
convirtiéndose en relaciones temporales y de control difícil. Ya que en muchos
casos los jóvenes no viven con sus padres, sino con uno de ellos o con
familiares, en donde el crea un estado de inestabilidad sentimental, siendo el
causante de algunas actitudes negativas.
Pero no siempre es esta la situación, en otras ocasiones son los padres los
causantes de las actitudes antisociales de sus hijos, ya que les excusan todas
sus actividades, y no reciben reclamos de nadie porque tienen cierto estatus
Elaborado por: ING. JORGE ALEXANDER RAMÍREZ RODRÍGUEZ
laboral, político o económico. Estos padres son los que llevan a que se
presenten altercados entre vecinos, compañeros y terceros, ya que siempre los
disculpan pero nunca los reprenden, y eso cuando los disculpan, por que en
otros casos los ofendidos salen agredidos verbal y físicamente, por el o los
jóvenes y sus padres o tutores.
Poro esto no es por las normas del colegio, estas normas son impuestas
gubernamentalmente, en donde les importa es solo sustentar un informe de
cubrimiento educativo y no de formación integral, ya que con las nuevas leyes
como la LEY DE INFANCIA Y ADOLESCENCIA, en donde los jóvenes están
por encima de ley, les dan todas las herramientas a los delincuentes para que
usen a los jóvenes y niños para sus actividades delictivas, si no a que los
mismos muchachos se comporten de forma incorrecta ante la sociedad sin que
tengan lo obligación de responder por sus actos.
Si nosotros como docentes podemos hacer esto con los muchachos y podemos
educarlos como si de verdad fueran nuestros hijos, solo necesitaríamos la
colaboración de los padres, enseñando y compartiendo con sus hijos la
verdadera vida de familia, en donde todos cumplen una función y todos
dependen de todos. Formado un eje, en donde todos son indispensables y el
se siente parte de algo propio y sin igual.