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actuación del sujeto desde la perspectiva de un espectador ideal en la posición del autor,
no en base a un juicio ex-post que cuente con todos los datos que cabe tener en
consideración después del hecho.
Tratamiento del Error:
1.- Solución tradicional.-
Error Directo (de prohibición): el sujeto ignora que su conducta está prohibida por la
ley.
Error Indirecto, incluye:
a) Existencia de una causa de justificación.
b) Límites de la causa de justificación.
c) Presupuesto objetivo de la causa de justificación.
2.- Teoría de los elementos negativos del tipo.- (Mir Puig).
El error en las causas de justificación es error de tipo, no de prohibición, ya que
las causas de justificación forman parte del tipo negativo. Hay un error sobre un
elemento del tipo.
Si es invencible = Impunidad.
Si es vencible = Imprudente.
La opinión del espectador objetivo nos sirve para dilucidar que clase de error se ha
producido (vencible o invencible).
Si al observador objetivo le parece que la situación observada se correspondía con
el presupuesto de causa de justificación, entonces el error era invencible. Si tal
coincidencia no existe, porque el observador objetivo hubiera pensado que dicho
presupuesto no concurría, en realidad habría error vencible (Imprudencia).
Y finalmente, si el espectador aprecia que el error carece de base, deberá sufrir
íntegramente el delito cometido.
Justificación incompleta:
Si falta algún requisito que exige el Código Penal, tanto objetivos como
subjetivos, se le da el tratamiento de eximente incompleta.
Artículo 21 CP: Son circunstancias atenuantes.-
1º Las causas expresadas en el capítulo anterior cuando no concurriesen todos los
requisitos necesarios para eximir de responsabilidad en sus respectivos casos. (Eximente
incompleta).
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Artículo 68 CP: “En los casos previstos en la circunstancia primera del artículo 21,
los jueces o tribunales impondrán la pena inferior en uno o dos grados a la señalada por
la ley, atendidos el número y la entidad de los requisitos que falten o concurran, y las
circunstancias personales de su autor, sin perjuicio de la aplicación del artículo 66 del
presente código”.
Rebajar en un grado es obligatorio, en dos es potestativo.
En caso de desproporción de medios, se acude a la eximente incompleta,
modalidad atenuante.
LEGÍTIMA DEFENSA.-
Artículo 20.4 CP: “el que obre en defensa de la persona o derechos propios o
ajenos, siempre que concurran los requisitos siguientes:
1.- Agresión ilegítima.- en caso de defensa de los bienes se reputará agresión
ilegítima el ataque a los mismos que constituya delito o falta y los ponga en grave
peligro de deterioro o pérdida inminentes. En caso de defensa de la morada o sus
dependencias, se reputará agresión ilegítima la entrada indebida en aquélla.
2.- Necesidad racional del medio empleado para impedirla o repelerla.
3.- Falta de provocación suficiente por parte del defensor.”
La naturaleza de la legítima defensa como causa de justificación queda fuera de
duda.
La legítima defensa cumple un papel preventivo general al darle un mensaje al
hipotético agresor, diciéndole que de persistir en su idea, va a tener a alguien que se va a
poder defender legítimamente. La legítima defensa sirve para intimidar, y de este modo
procura la tutela de bienes jurídicos.
Requisitos.-
1.- Agresión ilegítima: sin ella no hay legítima defensa.
La agresión incluye a los ataques físicos como a los ataques a bienes inmateriales
(honor).
Se sigue exigiendo que la agresión sea un acto de fuerza.
Esta agresión debe poner en peligro algún bien jurídico.
Para que exista una agresión no es necesario que se llegue a la consumación de
una lesión. Basta el intento idóneo de tal lesión.
Una parte de la doctrina exige que la agresión sea dolosa, es decir, dirigida a
agredir al defensor. Otros aceptan la imprudente.
Noelia María Barrameda García Página 5
Agresión ilegítima equivale a agresión antijurídica, ello significa que no basta que
sea típica, pero también que no es preciso que sea personalmente imputable a su autor.
Siendo el dolo o la imprudencia elementos que condicionan el injusto en nuestro
esquema finalista, la agresión ilegítima deberá ser dolosa o imprudente. No cabrá
legítima defensa frente a una agresión en caso fortuito, pues tal agresión no será
antijurídica.
La agresión debe ser real y actual. La agresión debe ser actual, es decir, que la
agresión suponga un peligro próximo y que dicho peligro no haya desaparecido al
convertirse en lesión consumada y agotada. Este es un requisito puente entre la agresión
y la defensa.
El requisito de actualidad de la agresión distingue la defensa de la venganza.
La riña mutuamente aceptada no da lugar a legítima defensa. Ya que existe una
situación de provocación mutua.
2.- Defensa necesaria: aquí hay que tener en cuenta los bienes jurídicos que pueden ser
defendidos:
Bienes en sentido patrimonial, la vida, la integridad física, la libertad, el honor.
También los bienes jurídicos de terceros.
Sin embargo, no cabe legítima defensa para defender bienes jurídicos
supraindividuales, pues de su defensa ya se encarga el Estado.
El Código Penal exige que concurran dos requisitos.-
1) Necesidad de defenderse.
2) Necesidad del medio defensivo concretamente empleado.
Si falta la necesidad de defenderse, faltará un elemento fundamental de la
eximente y no se podrá apreciar legítima defensa.
Pero si hay una defensa excesiva o desproporcionada podrá apreciarse la eximente
incompleta.
Debe haber proporcionalidad del medio empleado para repeler la agresión, para
que haya justificación plena.
3.- Elemento subjetivo: la legítima defensa requiere el elemento subjetivo de
justificación, consistente en el conocer y querer los presupuestos objetivos de la
situación. El sujeto debe saber que se defiende de una agresión ilegítima.
Al legislador no le basta conque la persona defienda bienes jurídicos, sino que
exige que el móvil de su acción resida precisamente en esa protección.
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LA OBEDIENCIA DEBIDA:
El cumplimiento de una orden de contenido lícito no plantea ningún problema.
Pero existen supuestos en los que, si se dan determinados requisitos, se deben cumplir
ciertas órdenes a pesar de su carácter antijurídico. En estos casos, si se actúa típicamente
en cumplimiento del deber de obediencia, el hecho estará justificado.
Con esta interpretación no se hace más que tener en cuenta el principio de
subordinación y jerarquía que inspira la actuación administrativa y la realidad de la
obligatoriedad del cumplimiento de determinadas órdenes, a pesar de su contenido
antijurídico. El deber de obedecer órdenes antijurídicas tiene unos límites, pero el que
actúa dentro de estos límites lo hace justificadamente.
Para que una orden sea vinculante y pueda dar lugar al cumplimiento de un deber
y, por tanto, la obediencia puede estar amparada en la causa de justificación del
apartado 7º del artículo 20 del CP, en el que tienen que darse los siguientes
presupuestos:
1) Relación jerárquica: esta relación sólo puede darse en el ámbito del
Derecho Público y del Derecho Militar, que se basan precisamente en la
idea de subordinación y el sometimiento del inferior al superior. De ahí
se deduce que no cabe apreciar esta eximente, aunque sí otras en los
ámbitos familiar y laboral.
2) Competencia abstracta del que da la orden para dictarla dentro de sus
facultades. Por ejemplo: Un notario no puede dictar una orden de
detención.
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